Todo lo que puede ser imaginado es real.
PABLO PICASSO
a humanidad ha imaginado tantos mundos posibles como cabezas pensantes ha habido; testimonios de estos mundos han quedado plasmados en la literatura, ya académica, ya artística, y han acompañado, históricamente, a los científicos que los traducen al código de la realidad. Pensemos, por ejemplo,) antes de que Neil Armstrong, Michael Collins y Buzz Aldrin alunizaran el Apolo 11. El pintor español del cubismo no se equivoca: todo lo que puede ser imaginado es real. Así han llegado los metaversos, las inteligencias artificiales, las criptomonedas y todo lo que alguna vez identificamos con el porvenir. El presente es, al final, el futuro imaginado; mejor dicho—volviendo a la afirmación inicial—, los presentes son los futuros imaginados. Me explico.