Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Baño

inmersión total o parcial del cuerpo en un líquido

La práctica del baño es una de las costumbres del mundo. Hay muchas variantes posibles. En cuanto al objetivo final, hay baños rituales, higiénicos, terapéuticos, deportivos, baños de placer. Los hombres y mujeres pueden bañarse en un río, en el mar, en una piscina o una bañera. Lo pueden hacer vestidas o desnudas, de forma total o parcial, en solitario o en compañía.

Mujer bañando

El repaso de algunos detalles del baño, relacionándolos con la vida diaria de la gente, puede resultar interesante. Algunos mamíferos completamente terrestres pueden bañarse tanto para refrescarse como para calentarse.

Baños públicos

editar

En ciertos lugares y desde muy antiguo, la gente solía bañarse en un edificio público (con ciertas restricciones), utilizado exclusivamente para esa finalidad, haciendo uso normalmente de aguas termales o también calentadas artificialmente, definido en castellano con el nombre en plural de "Baños" (p.ej.): Roma,[1]​ Japón,[2]​ España[3]​ Turquía, Rusia.[4]

Historia antigua

editar
 
Mujeres duchándose. Copia pintada en un recipiente griego.[5]

Culturas antiguas

editar

El primer caso a considerar es el de los Grandes baños de Mohenjo-Daro. No está muy claro si la gran balsa conservada era una piscina ritual, un baño público o un simple depósito de agua.

Algunos de los antiguos habitantes de la India practicaban baños rituales, basados en la higiene personal, tres veces al día. Esta costumbre está documentada por escrito en las llamadas grihya sutras. Todavía hay seguidores de este ritual en los tiempos actuales. (Ver Veda).[6][7]

En la Grecia clásica había pequeñas bañeras, recipientes para lavar las manos y barcos para lavar los pies. Los hallazgos arqueológicos más antiguos relacionados con los baños son del palacio de Cnossos (Creta, segundo milenio aC) y las bañeras de alabastro de Akrotiri (Santorini). Hay referencias de baños y duchas de acceso público en algunas dependencias de los gimnasios. El helenismo del latín gymnasium (γυμνάσιο) significa "desnudo".[8][9]

En la antigua Roma, además de los baños privados de las casas ricas, había baños públicos: las termas. Algunas de las termas eran monumentales. Por ejemplo, las Termas de Caracalla. Aprovechando las fuentes de aguas termales, los romanos construyeron baños por todas partes de los territorios de su imperio.

Japón medieval

editar
 
Distribución en planta de unos baños públicos japoneses (sentido).

La primera noticia de unos baños públicos en Japón data del 1266.[2]​ El primer centro de estilo moderno destinado al baño (sentō en japonés) fue establecido en Edo (la actual Tokio) en 1591.[2]​ Los primeros baños de vapor eran del tipo iwaburo (岩風呂 "balsas de rocas") o kamaburo (釜風呂 "baños de horno"). Los nombres indicaban el aprovechamiento de cavidades o cuevas naturales o la construcción de refugios con piedras. Dentro de cada recinto, algunas rocas calentaban con leña y se derramaba agua encima, produciendo vapor.[10][11]

América precolombina

editar
 
Casa para sudar azteca (temazcal). Dibujo del Codex Magliabechiano.

El baño era conocido y practicado por muchos pueblos precolombinos de América. El cronista español del siglo XVI Bernal Díaz del Castillo explicaba que el emperador azteca Moctezuma se bañaba cada día por la tarde.[12][13]​ Bernal explica que, incluso encarcelado por los españoles, disponía de sus mujeres y sus baños.

... Era el gran Montezuma de edad de hasta cuarenta años y de buena estatura e bien proporcionado e cenceño, e pocas carnes, y la color ni muy moreno, sino propia color e matiz de indio, y traía los cabellos no muy largos, sino cuanto le ... e bien puestas e ralas, y el rostro algo largo y alegre, e los ojos de buena manera, e mostraba en su persona en el mirar, por un cabo amor e cuando era menester gravedad; era muy polido e limpio, bañábase cada día una vez a la tarde...
Bernal Díaz del Castillo. Historia verdadera de la conquista de la Nueva España.[14]

El cronista Tomás López Medel explicaba la costumbre de los baños entre los indios, tan natural en ellos como la comida.[15][16][17]

... el baño y el uso de lavarse es tan cotidiano a los indios, así a los de tierra fría como caliente, como el comer; y esto en fuentes y ríos y en otras aguas que se les ofrece, sin artificio alguno y sin otro regalo más de en el agua pura como la hallan...
Tomás López Medel. Tratado de los tres elementos, aire, agua y tierra.[18]

Algunas tribus de nativos americanos practicaban los baños de vapor en unas cabañas llamadas "cabañas de sudar" o "casas de sudar" (temazcal / temazcales en americanismo castellano).[20][21][22]

Época medieval en Europa

editar

En contra de la creencia popular, basada en libros de ficción y películas, la práctica de baños higiénicos en la Edad Media era bastante habitual. Por lo menos entre las clases acomodadas. Castillos y monasterios disponían de instalaciones permanentes destinadas a los baños corporales. Prácticamente en todas las ciudades había baños públicos a precios moderados. En París había 26 baños a finales de los siglo XIII. En las ciudades de Tortosa y Lérida, en poder de musulmanes, había baños públicos. También los había en Perpiñán, Gerona y Barcelona. En la ciudad condal existían tanto los baños Viejos (1142) como los baños Nuevos (1162).[3]

Aspectos religiosos

editar

Desde el punto de vista cristiano, el bautismo con agua lustral o agua bendita (y en algunos ritos, por inmersión) era un baño ritual que lavaba o lustraba (purificaba) los pecados cometidos anteriormente, y / o simbolizaba con la salida de la inmersión total la muerte y la resurrección o renacimiento a una nueva y pura forma de vida. Era costumbre lavarse al menos una vez al año, el último día, en honor a San Silvestre, como purificación para empezar el año siguiente. Muchos aspectos de la religión cristiana estaban relacionantes con el uso metafórico del verbo lavar: lavar los pecados. En cuanto a los baños higiénicos, la Iglesia estaba a favor; sólo estaba en contra de la desnudez y de la posible promiscuidad en los baños públicos.[23]​ Las religiones judía y musulmana eran partidarias de las abluciones rituales y de los baños de limpieza corporal.

Documentos sobre los baños cristianos

editar
  • 195 d. C. Tertuliano, en su obra Apologeticus, informaba de las costumbres en cuanto a los baños.[24][25][26]
  • 200 d. C. Clemente de Alejandría.[27][28]
  • 600 d. C. El papa Gregorio Magno no aprobaba bañarse en domingo.[29]​ En una de las historias que escribió, hablaba de un sacerdote que iba a bañarse en las termas de Civitaveccia, considerando el hecho como una costumbre habitual.[30]
  • 800. Según Einhard, a Carlomagno le gustaban los baños termales. Era un buen nadador y solía ir a menudo.[31]
... Delectabatur etiam vaporibus aquarum naturaliter calentium, frequenti natatu corpus exercens, cuius adeo peritus fuit, ut nullus ei iuste valeat anteferri...
Einhard. VITA KAROLI MAGNI.
  • ¿siglo X? En la obra Secreta secretorum (traducido al castellano como Poridat de poridades) hay un capítulo destinado a los baños. Una transcripción libre de la versión catalana (Libro de la sabiduría) es la siguiente:
VII capítol. Dels banys. Lo bany és una de les maravelles d’aquest món, car és edificat segons los quatres temps de l’any; car lo bany fred és comparat a l’hivern, lo tebi a la primavera, lo calt a l’estiu, lo sec a la tardor. De gran saviesa és fer quatre estatges en lo bany. Així que lo primer sia fred, lo segon tebi, lo terç sec e lo quart calt. E quan algú voldrà entrar en lo bany deu un poc estar en lo primer estatge un poc e aprés entrar en lo segon e estar un altre poc, aprés entrar en lo terç e estar un altre poc, e aprés entrar al quart. E aquesta ordre deu tenir a l’eixir que ha tenguda a l’entrar, per ço que no es mudi de sobte de fred a calor, ni de fredor a calor. E sia edificat lo bany en lloc ventós i hagi fornal gran i aigua dolça. E quan l’hom és banyat deu-se suaument eixugar amb un drap de lli una volta i amb un altre (drap) net i eixut una altra volta, e amb un altre altra volta. E aprés vesteixi’s ses vestidures netes e belles. I quan ho hagi fet begui xarop rosat…
Secret dels secrets.[32]
... Hay allí baños de aguas termales que surgen de dentro de la tierra, y están a orilla del mar; hay como unos veinte baños, y cualquier persona aquejada de alguna enfermedad, va y se sumerge, saliendo curada y reconfortada. Todos los enfermos de Lombardía van allí durante la temporada estival...
Benjamín de Tudela. .

Baños públicos

editar

Simplificando mucho, es posible afirmar la existencia, en época medieval, de baños públicos siguiendo una tradición ininterrumpida desde la dominación romana. Las invasiones musulmanas del sur de Europa modificaron muy poco la red de baños previamente existente. Esto no quiere decir que no hubo reparaciones, modificaciones o nuevas construcciones de baños, ni que los nuevos baños islámicos no tuvieran diferencias sobre los antiguos baños romanos. En Europa central, sin invasiones islámicas, los baños públicos fueron reconstruidos y adaptados.

Los baños públicos eran un fenómeno urbano. Había, casi, en todas las ciudades importantes y en muchos centros de peregrinación. Su propiedad y explotación podían ser municipales, de alguna alta autoridad, de una persona particular o de una sociedad.

Muchos "calls judíos" disponían de baños exclusivos.[34]​ Lo mismo ocurría con algunas alhóndigas.[35][36]

Una descripción genérica es prácticamente imposible. Cada baño presentaba características propias. Algunos rasgos generales son los siguientes.

  • Arquitectura. Un baño público implica un edificio o un conjunto de edificios.
    • Algunos documentos medievales indican una distribución en tres cuartos: de agua fría, de agua caliente y estuvo o baño de vapor. Los baños de vapor no eran universales, pero sí relativamente frecuentes.
  • Sistema de baños. Había una (o varias) bañera grande de madera usada de forma comunitaria. Tapando la bañera había una especie de tienda o mariposa que mantenía el calor y limitaba las corrientes de aire. En muchos casos había agua caliente, calentada con leña y servida con cubos.[37][38]
    • Los usuarios se bañaban desnudos y, en los primeros tiempos, sin separación sexos. Este aspecto fue muy controvertido y, finalmente, provocó la desaparición de los baños públicos hacia finales del siglo XVI. En épocas intermedias hubo separación de sexos (en baños separados o en horarios separados).
    • Solía haber personal auxiliar que podía ayudar en la limpieza (frotar la espalda, llevar toallas, ayudar a entrar y salir de la bañera. . . ).

Baños públicos en poblaciones pequeñas

editar
  • 1273. En una estancia en Alcira, el rey Jaime I concedió la explotación de unos baños públicos en Murviedro a Jucef Abinxaprut: "... cum caldaria te aliis apparamentis ipsorum balneorum. . . "[39]

Los Baños Nuevos de Barcelona

editar
 
Placa indicadora en la calle de los Baños Nuevos (Barcelona).

Los establecimientos de baños públicos medievales presentan particularidades diversas, en función de l`época concreta y de la ubicación geográfica. El caso de los Baños Nuevos de Barcelona permite recordar algunos detalles concretos.

  • 1169. Ramón Berenguer otorgó licencia para construir unos baños a su alfaquí judío Abraham Bonastruc. La propiedad, los gastos de explotación y los beneficios irían a cargo del rey (2/3) y de Abraham (1/3).[40]
    • El edificio se construyó en lo que había sido un huerto rico en agua. Agua que se extraía con una noria. Huerto y edificio suponían una inversión importante. Es de suponer que sólo unas instalaciones muy frecuentadas podrían dar beneficios.
  • 1199. Pedro el Católico donó a Guillem Durfort los dos tercios de los Baños Nuevos que poseía. Como Guillem había comprado anteriormente el otro tercio de la propiedad, pasó a ser el único propietario.[41]
  • 1199 a 1262. Durante este período fueron propiedad de la familia Durfort.
  • 1262. Fueron comprados por 300 sueldos por Pere Burgués.
  • 1429-30. Propiedad de Joan Junyent, mercader de Barcelona.

Declive y desaparición de los baños públicos en Europa

editar

Desde finales del siglo XVI hasta el siglo XVIII los baños públicos prácticamente dejaron de existir. Por lo menos, como práctica habitual de muchos sectores sociales. Sólo se mantuvieron los balnearios más importantes.

Historia moderna

editar

A finales del siglo XVII algunos médicos estudiaron y divulgaron los beneficios de los baños y su uso con fines terapéuticos. El principio que defendían era bastante claro: los baños adecuadamente practicados mejoraban la salud.

Tratados publicados

editar

Baños públicos "modernos"

editar

De acuerdo con el cambio de mentalidad de la sociedad, en algunas ciudades se ofrecieron servicios de baños.

  • 1765. Paris. Baños públicos en el río Sena sobre dos gabarras.[45][46]
  • 1827. Taüll-Vall de Boí. Poblet de 90 habitantes con baños de agua fría y caliente.[47]
  • 1829. Liverpool. Primer baño público moderno en Europa.
  • 1830. Baños en Birmingham
  • 1842. Primera casa de baños con agua tibia, en Liverpool.[48]
  • 1845. Barcelona. Primeros baños "rusos" de vapor.[49]
  • 1854. Barcelona.[50]

Desde la Segunda Guerra Mundial hasta la actualidad

editar

La proliferación de los baños privados, con cuartos de baño en todas las casas y, generalmente, equipadas con agua corriente fría y caliente, ha convertido en innecesarios los baños públicos de alquiler. Los numerosos establecimiento que aún funcionan están orientados a servicios de lujo y tratamientos estéticos o medicinales.

Las instalaciones compartidas son frecuentes en fábricas de todo tipo. En el caso de clubes deportivos, se han convertido en imprescindibles y obligatorias.

Balnearios

editar

A diferencia de los baños públicos destinados a la higiene del cuerpo, los baños medicinales han estado en funcionamiento de manera más o menos continua desde la época romana hasta los días actuales.

El tratamiento preventivo y el cuidado de enfermedades mediante las aguas ( Hidroterapia ) se practicaba y se practica en los balnearios .

Historia de los balnearios

editar

Resumir una historia de más de dos mil años es muy difícil. Sí es posible ofrecer algunos detalles puntuales, en orden cronológico, y algunas muestras documentales. (Atención: los años que acompañan la cronología siguiente son, en algunos casos, aproximados).[51]

  • 420 a. C. Hipócrates, llamado el padre de la medicina, fue un defensor de los baños medicinales.[52]
  • 70 d. C. Construcción de los baños romanos de Bath.[53]
  • 75 d. C. Baden Baden, Aquae Aureliae.[54]
  • 200 d. C. Galeno escribió sus opiniones sobre los baños curativos.[55]
  • 1580-81. Michel de Montaigne visitó algunos balnearios en Italia y escribió sobre sus experiencias. También se bañó y tomó las aguas de Baden-Baden. Hay que recordar que sufría de piedras en el riñón.[56][57][58]

Natación

editar
 
Cueva de los nadadores. Uadi Sura (Wadi Sora) Egipto.

La natación, entre los humanos, se basa en el desplazamiento autopropulsado de una persona en un medio acuático por placer, necesidad, deporte, ejercicio o supervivencia. En superficie puede ser practicada durante períodos de tiempo muy largos, con entrenamiento adecuado. En inmersión y apnea los tiempos son mucho más cortos. La práctica de la natación exige mojarse. Dicho de otro modo: la natación es una modalidad de baño.

Historia de la natación

editar
Luego midió mil más: era un río que no pude pasar, porque las aguas habían crecido. Era una corriente de agua para pasarla nadando, un río que no se podía atravesar a pie.
Ezequiel 47:5.
(En una galera)...deu hom haver homens qui sapien retenir l’alende (alé, respiració) desus l’aigua una bona estona; e detràs lo vaixell salten en la mar ab una bona barrina e faça hi molts forats desus en lo freu qui és entre la proa i la sentina, car aquí es pot menys conèixer lo forat com totstemps aquest freu sia ple de roba ...
Francesc Eiximenis.Lo Crestià
  • En la novela en valenciano Tirant lo Blanc / Tirante el Blanco de Joanot Martorell existe una descripción realista y detallada de una operación militar para destruir una nave enemiga mediante una cuerda delgada, otra cuerda gruesa ("gúmena"), un nadador experto y osado, un cabestrante y otros. El relato indica de forma clara que una cuerda tiene dos cabezas.[63]
  • 1810. Lord Byron atravesó los Dardanelos nadando, evocando el mito de Hero y Leandro.[64][65][66]
  • 1844. Primera mención del crol, exhibido por dos nativos americanos de la tribu Anishinaabe: Flying Gull y Tobacco.[67]
  • 1871. Natación en público en Barcelona.[68]
  • 1907. Fundación del Club Natación Barcelona.

Vestidos de competición

editar

Los trajes usados en competiciones de natación han evolucionado a lo largo del tiempo. Un cambio importante fue el uso de fibras textiles sintéticas. Un cambio radical, relativamente reciente, fue la adopción de trajes de baños con más superficie, más flotabilidad y más rugosos (imitando la piel de tiburón). Las normas actuales limitan las dimensiones y la flotabilidad de los trajes de baño. Un cierto grado de rugosidad, estudiada específicamente, mejora las prestaciones de los trajes de baño autorizados.[69]

Baños de mar

editar

Bañarse y nadar en el mar son actividades muy antiguas, practicadas por muchos pueblos costeros. Los baños de mar terapéuticos fueron recuperados hacia finales del siglo XVI y, de forma importante en Europa, en todo el siglo XIX.

Los primeros trajes de baño tapaban el cuerpo casi por completo. La carrera para la reducción de la superficie de tela fue lenta, hasta llegar a los resultados actuales.

Baños en el Mar Muerto

editar
 
La elevada salinidad del agua aumenta la flotabilidad de los bañistas

La salinidad de las aguas del Mar Muerto hace que su densidad sea sensiblemente más alta que la del agua dulce. El bañista experimenta una flotabilidad muy grande y una sensación peculiar. La misma acción irritante de la sal sobre los ojos y la posibilidad de tragar algún trago, impidan la práctica de los baños convencionales.[70]

Agua "flotante"

editar

Hay un agua artificial, patentada, de gran densidad y no salada. Su uso ha sido promocionado para piscinas infantiles. El objetivo principal es el de impedir ahogamientos o, al menos, dificultarlos en gran medida.[71]

Baños de barro

editar

Los baños de barro, parciales o por toda la superficie del cuerpo, están documentados en algunos balnearios desde épocas muy antiguas.[72][73][74][75][76]

Baños con otras materias

editar

Probablemente inspirados en los tradicionales baños de barro, hay tratamientos similares que utilizan otras materias. Un ejemplo típico son los baños de chocolate.[77]​ A efectos prácticos las cataplasmas y las máscaras faciales con materias más o menos exóticas, son mucho más populares que los baños totales.

Baños y líquidos exóticos

editar
 
Joven voluntariamente enterrado en la arena.

Aunque el barro y las materias del presente apartado son pastas o similares, hay que recordar que el exotismo puede atribuirse a algunos líquidos.

  • Bañarse con leche de burras era practicado por algunas damas famosas: Cleopatra, Agripina, Popea ,. . .[78]
  • Hay leyendas urbanas que hablan de bañarse en champán (o cava) o, incluso, en colonia o perfume.[79][80]

Baños de arena

editar

Una imagen relativamente frecuente en las playas es la de un niño o una persona adulta enterrada hasta el cuello por diversión. Lo cierto es que esta práctica de ser parcialmente enterrado en arena es un tratamiento terapéutico muy antiguo que se ofrece en algunos balnearios. La temperatura de la arena puede ser beneficiosa, aliviando el dolor o acelerando la curación de algunas lesiones o enfermedades: reumatismo,. . .[81][82]

 
Planta de las termas de Pompeya.

Dentro de las termas romanas había el edificio específicamente destinado a los baños. Se dividía en seis estancias típicas:

  • spoliatorium
  • frigidarium
  • tepidarium
  • sudatio, laconicum[1]
  • balneum
  • onctuarium[83]

Alrededor de estos espacios principales había otros de accesorios:

  • ' apodyterium o apodyterion, el vestuario, donde se podía guardar sus pertenencias en una especie de "taquillas" llamadas stabilitores.
  • La palestra o gimnasio para el exericici físico. Éste, a diferencia del griego, se llevaba a cabo siguiendo el modelo de la preparación física militar. Los principales ejercicios que se realizaban eran los siguientes: cursus (carrera), Hasta (lanzamiento de jabalina), LUCTA (lucha, la actualmente llamada lucha grecorromana ), discus (lanzamiento de disco), pila (ejercicios con bolsas llenas de piedra a la manera de "pelotas") y saltus (salto de altura o de longitud), entre otros.
  • La natatio (piscina al aire libre para practicar la natación).

Algunas de las termas de Roma eran monumentales: Términos de Agripa, Términos de Caracalla, Termas de Diocleciano, Términos de Nerón, Termas de Tito, Termas de Trajano .

Los llamados baños turcos pueden ser de dimensiones variables (desde muy pequeñas hasta muy grandes) y con estancias distribuidas de forma diferente. En general constan de un vestuario, de una sala tibia, una sala caliente, una piscina y una sala de enfriamiento. El usuario entra vestido y se desnuda en el vestuario. Con una toalla pasa a la sala tibia y permanece allí unos minutos. Una vez ambientado, pasa a la sala caliente, donde se pone a sudar profusamente. Al cabo de un tiempo pasa a sumerge en la piscina de agua fría. El tratamiento finaliza con un lavado y un masaje. Y un período de reposo en una sala de enfriamiento.

Apéndice 3: Baños rusos

editar

Los baños rusos tradicionales se describían como baños de vapor a alta temperatura. Los usuarios, tras una estancia prolongada y de una sudoración abundante, se bañaban en agua fría.[4][84]

Apéndice 4: Baño

editar

Además del agua y el vapor de agua (y, en casos muy especiales, de algunos líquidos particulares), las diferentes variantes de baño han sido acompañadas a lo largo del tiempo de varios complementos.

El jabón fue mencionado por Plinio y Galeno.[85]​ Plinio atribuía los su descubrimiento a los galos que la usaban para lavarse el pelo.[86]

A lo largo del tiempo diferentes jabones han sido utilizados para lavarse: duros, muelles, perfumados ,. . . Desde la Segunda Guerra Mundial ha habido un incremento notable en los jabones líquidos o geles de baño.

Documentos sobre el jabón

editar
  • 1250. Niñez de Pedro el Grande.[87]
  • 1385. Algunos de los jabones conocidos en Cataluña.[88]
  • 1399. Jabón de losa (sabor duro, en pastilla).[89]
  • 1548. Exportación de jabones catalanes.[90]
  • 1622. Libro que habla de las harinas de habas y lupinos como detergentes antiguos para lavarse.[91]

Aceites, cremas y pomadas

editar

Añadidas al agua del baño o (indirectamente) al vapor de agua de los baños, las hierbas aromáticas o medicinales han están profusamente utilizadas a lo largo del tiempo. Hay mucha documentación específica sobre el tema.[92][93]​ Lo mismo puede afirmarse de otras sustancias aromáticas como el almizcle. el ámbar ,. . .

Además de otros usos relacionados con los baños, las toallas permiten secar las partes del cuerpo mojadas por el agua. Un beneficio adicional es la fricción moderada que ejerce su aplicación sobre la piel, en la acción de secarse.

  • Las toallas antiguas eran a menudo de lino.[94]​ Las toallas modernas normales son de tejido de rizo (tejido de toalla).[95]​ Las toallas deportivas, aún más modernas, se basan en una especie de gamuza artificial.[96]

Zapatillas de baño

editar
 
Sandalias de baño en un mosaico.
 
La gran piscina de Bursa. Aceite de Jean-Léon Gérôme. Ver las sandalias-plataforma.

Las sandalias de baño son conocidas desde tiempos remotos. En algunos baños de la Roma clásica se usaban como indicador de este tipo de establecimientos. Hay sandalias con una sola especialmente gruesa que alejan el pie del suelo mojado o encharcado. Algunos dibujos de baños antiguos muestran los bañistas con una especie de sandalias con soportes muy elevados, probablemente por el mismo motivo que el del caso anterior.

Las esponjas naturales y artificiales son complementos de baño bien conocidos. Una función similar hacen los guantes o las manoplas de crin.

La pumita o piedra pómez se ha usado desde tiempos antiguos para fregar y eliminar los callos de la piel. Especialmente en los pies y los codos.

Peines, cepillos

editar

Los peines permiten peinar el cabello, habitualmente desordenados y muelles después de baños o duchas. Los cepillos pueden usarse para peinar o para frotar el cuerpo.

Los hay de dos tipos: los que sirven de protección de los cabellos en baños y duchas y los usados en competiciones de natación.

Aletas para manos y pies, gafas, contrapesos

editar

Algunas variantes de natación pueden hacer uso de los complementos indicados. Las aletas de pies (una por cada pie o una aleta única) son un auxiliar bastante conocido. Los guantes-aleta de natación son menos frecuentes. Las gafas protegen los ojos y permiten una mejor visión bajo el agua. Los contrapesos son indicados para la natación bajo el agua.

Instrumentos de medida

editar

Termómetros, GPS s, relojes indicadores de constantes vitales, ...

Referencias

editar
  1. a b Georges Guillet (1676). Lacédémone ancienne et nouvelle, où l'on voit les moeurs et les coûtumes des Grecs modernes, des Mahométans et des Juifs du pays,.... J. Ribou. p. 454–. 
  2. a b c Elizabeth Ishiyama (1 agost 2009). Sento - The Japanese Public Bath. Lulu.com. p. 6–. ISBN 978-0-615-26365-6. 
  3. a b Arnau de Vilanova (1996). Arnaldi de Villanova opera medica omnia: regimen sanitatis ad regem aragonum. X.1. Edicions Universitat Barcelona. p. 169–. ISBN 978-84-7935-338-4. 
  4. a b William Tooke (1800). View of the Russian empire during the reign of Catharine the Second, and to the close of the eighteenth century. Printed by A. Strahan, for T. N. Longman and O. Rees. p. 11–. 
  5. Theodor Panofka (1843). Bilder antiken lebens Hrsg. von Theodor Panofka. G. Reimer. 
  6. Abraham Eraly (2011). The First Spring: The Golden Age of India. Penguin Books India. p. 391–. ISBN 978-0-670-08478-4. 
  7. Donald F. Lach; Edwin J. Van Kley (21 de octubre de 1998). Asia in the Making of Europe, Volume III: A Century of Advance. Book 2, South Asia. University of Chicago Press. p. 780–. ISBN 978-0-226-46697-2. 
  8. Andreas N. Angelakis; Joan B. Rose (14 setembre 2014). Evolution of Sanitation and Wastewater Technologies through the Centuries. IWA Publishing. p. 102–. ISBN 978-1-78040-484-4. 
  9. Gregory S Aldrete; Alicia Aldrete (21 juny 2012). The Long Shadow of Antiquity: What Have the Greeks and Romans Done for Us?. A&C Black. p. 108–. ISBN 978-1-4411-8981-3. 
  10. Scott Clark (1994). Japan, a view from the bath. University of Hawaii Press. ISBN 978-0-8248-1615-5. 
  11. Robert Neff (20 desembre 2011). Japan's Hidden Hot Springs. Tuttle Publishing. p. 30–. ISBN 978-1-4629-0293-4. 
  12. Historia verdadera de la conquista de la Nueva Espana. Benito Cano. 1796. p. 91–. 
  13. Hernán Cortés; Diego de Godoy, Gonzalo Fernández de Oviedo y Valdés, Alvar Núñez Cabeza de Vaca, Bernal Díaz del Castillo, Francisco de Xerez, Pedro de Cieza de León, Agustin de Zárate; Pedro de Alvarado (1853). Historiadores primitivos de Indias. M. Rivadeneyra. p. 86–. 
  14. SERÉS GUILLÉN Guillermo (14 de marzo de 2016). HISTORIA VERDADERA DE LA CONQUISTA DE LA NUEVA ESPAÑA. Editorial UNED. p. 426–. ISBN 978-84-362-7069-3. 
  15. Tomás López Medel; F. Maseda; Carlos Baciero (1990). Colonización de América: informes y testimonios, 1549-1572. Editorial CSIC - CSIC Press. p. 310–. ISBN 978-84-00-07020-5. 
  16. José Antonio Fernández de Rota y Monter (2005). Nacionalismo, cultura y tradición. Anthropos Editorial. p. 86–. ISBN 978-84-7658-727-0. 
  17. Joaquín García Icazbalceta (1858). Coleccion de documentos para la historia de México. Tomo primero publicada por Joaquin García Icazbalceta. Librería de J.M. Andrade. p. 22–. 
  18. Tomás López Medel (1990). De los tres elementos: tratado sobre la naturaleza y el hombre del Nuevo Mundo. Alianza. 
  19. Pedro de Ona (1605). Arauco domado. Juan de la Cuesta. 
  20. Juan Vicente Güémez Pacheco de Padilla Horcasitas y Aguayo Revillagigedo (conde de) (1831). Instruccion reservada que el conde de Revilla Gigedo, dio a su succesor en el mando, marqués de Branciforte, sobre el gobierno de este continente en el tiempo que fue su virey .... Imprenta, a cargo del C.A. Guiol. p. 59–. 
  21. Juan de Torquemada (1723). Primera parte de los veinte i un libros rituales i monarchia Indiana: con el origen y guerras de los indios ocidentales, de sus poblaçiones, descubrimiento .... en la oficina y a costa de Nicolás Rodriguez Franco. p. 142–. 
  22. Viaje á América. D. Mariano de Cabrerizo. 1844. p. 155–. 
  23. Robin M. Jensen (juny 2012). Baptismal Imagery in Early Christianity: Ritual, Visual, and Theological Dimensions. Baker Books. p. 44–. ISBN 978-0-8010-4832-6. 
  24. Quintus Septimius Florens Tertullianus (1613). Apologeticum. 
  25. Tertullian (14 juny 2012). Q. Septimi Florentis Tertulliani Apologeticus. Cambridge University Press. p. 123–. ISBN 978-1-108-03974-1. 
  26. Tertullien (1828). Q. Septimii Florentis Tertulliani Apologeticus adversus gentes, Cum lectionum varietate edidit Jos. Ign. Ritter. Büschler. p. 120–. 
  27. Clement of Alexandria (23 març 2016). Delphi Complete Works of Clement of Alexandria (Illustrated). Delphi Classics. p. 355–. ISBN 978-1-78656-369-9. 
  28. John Ferguson (1974). Clement of Alexandria. Ardent Media. p. 96–. ISBN 978-0-8057-2231-4. 
  29. Daniel Cawdrey; Herbert Palmer (1645). Sabbatum Redivivum: Or, the Christian Sabbath Vindicated, in a Full Discourse Concerning the Sabbath and the Lords Day. R. White. p. 1–. 
  30. Gregorius (Papa, I.) (1689). Dialogus de S. Gregoire le grand, Pape. p. 472–. 
  31. Einhard (1845). Einhardi Vita Karoli Magni. Hahn. 
  32. Manuscrit dels Secret dels secrets.
  33. Gallica. Petrus de Ebolo. De balneis puteolanus.
  34. Eloy Benito Ruano; Ricardo Izquierdo Benito (2003). Juderías y sinagogas de la Sefarad medieval: en memoria de José Luis Lacave Riaño. Univ de Castilla La Mancha. p. 44–. ISBN 978-84-8427-226-7. 
  35. conte Luigi Torelli (1859). Dell' avvenire del commercio europeo ed in modo speciale di quello degli stati italiani. Società editrice. p. 131–. 
  36. Storia civile commerciale e letteraria dei Genovesi dalle origine all'anno 1797. G. Grondona Q. Giuseppe. 1844. p. 558–. 
  37. C. M. Woolgar (2006). The Senses in Late Medieval England. Yale University Press. p. 135–. ISBN 0-300-11871-6. 
  38. Herbert Norris (1924). Medieval Costume and Fashion. Courier Corporation. p. 17–. ISBN 978-0-486-40486-8. 
  39. Joaquim Miret i Sans; Maria Teresa Ferrer i Mallol (2004). Itinerari de Jaume I "el Conqueridor". Institut d'Estudis Catalans. p. 483–. ISBN 978-84-7283-751-5. 
  40. Geografía general de Catalunya. Barcelona. Francesc Carreras Candi. Pàgina 275.
  41. Orti Gost, Pere (2000). El miedo al Mediterráneo: La caridad popular valenciana y la redención de cautivos bajo poder musulmán 1323-1539. Editorial CSIC - CSIC Press. p. 109–. ISBN 978-84-00-07902-4. 
  42. Bernardino Ramazzini; Luca Antonio Porzio (1703). Bern. Ramazzini... De morbis artificum diatriba: nec non eiusdem dissertatio logica ; Accedunt Lucae Antonii Portii In Hippocratis librum De veteri medicina paraphrasis. apud Guilielmum van de Water. 
  43. Thomas Guidott (1708). An Apology for the Bath: Being an Answer to a Late Enquiry in the Right Use and Abuses of the Baths in England, So Far as May Concern the Hot Waters of the Bath in the County of Somerset. With Some Reflections on Fresh Cold-bathing, Bathing in Sea-water, and Dipping in Baptism. In a Letter to a Friend. By Tho. Guidott, .... printed, and are to be sold by J. Morphew, and H. Hammond, in Bathe. p. 70–. 
  44. Philibert Patissier (1822). Traité des maladies des artisans...d'après Ramazzini. J.B. Baillière. 
  45. Eugène Briffault (2 febrer 2016). Paris dans l'eau. Collection XIX. p. 39–. ISBN 978-2-346-03404-8. 
  46. Descriptions des arts et métiers faites ou approuvées par M. M. de l'Académie Royale des Sciences de Paris. L'imprimerie de la Société Typographique. 1780. p. 45–. 
  47. Sebastian de Miñano (1827). Diccionario geographico-estudistico de España y Portugal. Pierart-Peralta. p. 401–. 
  48. Pedro Felipe Monlau (1856). Higiene industrial: Qué medidas higiénicas puede dictar el gobierno a favor de las clases obreras? : memoria para optar al premio ofrecido acerca de esta cuestión por la Academia de Medicina y Cirujía de Barcelona .... Imp. y Est. de M. Rivadeneyra. p. 23–. 
  49. Elvira Arquiola; José Martínez Pérez (1995). Ciencia en Expansión: Estudios Sobre la Difusión de Las Ideas Científicas y Médicas en España (Siglos XVIII-XX). Ed. Complutense. ISBN 978-84-7491-535-8. 
  50. Barcelona Antigua y Moderna. 1854. p. 414–. 
  51. Cronologia dels balnearis.
  52. Esti Dvorjetski (2007). Leisure, Pleasure and Healing: Spa Culture and Medicine in Ancient Eastern Mediterranean. BRILL. p. 84–. ISBN 90-04-15681-X. 
  53. Plinio Prioreschi (1996). A History of Medicine: Roman medicine. Horatius Press. p. 632–. ISBN 978-1-888456-03-5. 
  54. Marybetts Sinclair (1 novembre 2007). Modern Hydrotherapy for the Massage Therapist. Lippincott Williams & Wilkins. p. 11–. ISBN 978-0-7817-9209-7. 
  55. Galen (1856). Œuvres anatomiques, physiologiques et medicales de Galien. J.B. Baillière. p. 724–. 
  56. Michel de Montaigne; William Hazlitt (1845). The Works of Michael de Montaigne: Comprising His Essays, Letters, Journey Through Germany and Italy. With Notes from All the Commentators, Biographical and Bibliographical Notices, &c. &c. C. Templemon. p. 605–. 
  57. W. F. Bynum (20 juny 2013). Companion Encyclopedia of the History of Medicine. Routledge. p. 952–. ISBN 978-1-136-11036-8. 
  58. Michel de Montaigne (9 de octubre de 2016). Delphi Complete Works of Michel de Montaigne (Illustrated). Delphi Classics. p. 43–. ISBN 978-1-78656-060-5. 
  59. Alan Gregerman (1 setembre 2010). Surrounded by Geniuses: Unlocking the Brilliance in Yourself, Your Colleagues and Your Organization. Sourcebooks, Inc. p. 9–. ISBN 978-1-4022-5484-0. 
  60. Artemis P. Simopoulos (1 gener 2008). Nutrition and Fitness: Cultural, Genetic and Metabolic Aspects. Karger Medical and Scientific Publishers. p. 3–. ISBN 978-3-8055-8530-9. 
  61. Nicholas Orme (1983). Early British Swimming, 55 BC-AD 1719: With the First Swimming Treatise in English, 1595. University of Exeter Press. p. 27–. ISBN 978-0-85989-134-9. 
  62. Charles Moorman (13 gener 2015). Kings and Captains: Variations on a Heroic Theme. University Press of Kentucky. p. 66–. ISBN 978-0-8131-6377-2. 
  63. Tirant lo Blanc. capítol CVI.(en catalán)
  64. Baron George Gordon Byron Byron (1830). Oeuvres de Lord Byron. Furne. p. 410–. 
  65. Robert Shenk (15 febrer 2017). America's Black Sea Fleet: The U.S. Navy Amidst War and Revolution, 1919 1923. Naval Institute Press. p. 126–. ISBN 978-1-61251-302-7. 
  66. George Gordon Byron Baron Byron; J. W. Lake (1850). The Works of Lord Byron: Including the Suppressed Poems : Also a Sketch of His Life. Lippincott, Grambo. p. 524–. 
  67. Greg Kehm (2007). Olympic Swimming and Diving. The Rosen Publishing Group. p. 6–. ISBN 978-1-4042-0970-1. 
  68. La Renaixensa: revista catalana. Administració y redacció. 1871. p. 218–. 
  69. The Proof Is In The Physics: Olympic ‘Sharkskin’ Swimsuits Outperform Shark Skin . JD ALLEN . JUN 28, 2016
  70. Cook's Tourists' Handbook for Palestine and Syria. T. Cook & Son. 1876. p. 224–. 
  71. AGUA FLOTANTE PARA PISCINAS(NO CONTIENE SAL).
  72. Manuel de Soria (1758). Thesoro de virtudes sepultado: carta de respuesta descriptiva, historial, de las thermales aguas, de los baños, que se nombran de Sazedon, con las reglas para su uso, util para beneficio del público. en la Imprenta de Joseph Rico. p. 37–. 
  73. Delle acque termali di Vinadio usate in bevanda, bagno, doccia, stufa, fango, muffe, ec. Commentario di Gioanni Antonio Marino ... Dedicato a s.s.r.m. Vittorio Amedeo 3. re di Sardegna. nella stamperia Mairesse. 1775. p. 116–. 
  74. Giacomo Foscarini (1846). I bagni e fanghi minerali-termali Euganei devono usarsi freddi o caldi. Crescini. p. 11–. 
  75. Vitali (Buonafede) (1746). Li Bagni di Caldiero esaminati dal dottor Buonafede Vitali .... appresso Simone Occhi. p. 85–. 
  76. Buonafede detto l'Anonimo Vitali (1746). Li bagni di Caldiero. Occhi. p. 86–. 
  77. Lauren Cox; Janice Cox (9 de marzo de 2011). EcoBeauty: Scrubs, Rubs, Masks, Rinses, and Bath Bombs for You and Your Friends. Potter/TenSpeed/Harmony. p. 66–. ISBN 978-1-60774-140-4. 
  78. The Living Age. 1869. p. 37–. 
  79. Mamrie Hart (26 maig 2015). You Deserve a Drink Deluxe: Boozy Misadventures and Tales of Debauchery. Penguin Publishing Group. p. 170–. ISBN 978-0-14-312893-9. 
  80. Handbook (1841). The hand-book of the toilette. By the author of 'Familiar hints on sea-bathing'.. p. 15–. 
  81. The Practitioner. John Brigg. 1872. p. 54–. 
  82. Lonely Planet (1 agost 2017). Lonely Planet Japan. Lonely Planet Publications. p. 1778–. ISBN 978-1-78701-012-3. 
  83. Diccionario universal de historia y de geografia: Contiene: 1. Historia propriamente dicha ... 2. Biografia universal ... 3. Mitologia ... 4. Geografia antigua y moderna .... Mellado. 1846. p. 306–. 
  84. Edward Kentish (1809). Essay on Warm and Vapour Baths, with Hints for a New Mode of Applying Heat and Cold, for the Cure of Disease, and the Preservation of Health, Illustrated by Cases. With an Appendix Containing Observations on Scrophula, and on Pulmonic Complaints, with Cases Treated by the Vapour Bath. 2nd Ed. Joseph Mawman. p. 31–. 
  85. Francis PEARS (1859). The Skin, Baths, Bathing, and Soap. By Francis Pears. [Really Written by G. J. Holyoake.]. The Author. p. 78–. 
  86. Histoire Naturelle de Pline. 1777. p. 706–. 
  87. Ferran Soldevila (1950). Pere el Gran: Primera Part, L’infant. Institut d'Estudis Catalans. p. 166–. ISBN 978-84-7283-303-6. 
  88. Miguel Gual Camarena; Raffell Druguer (1981). El primer manual hispánico de mercadería (siglo XIV). Editorial CSIC - CSIC Press. p. 105–. ISBN 978-84-00-04912-6. 
  89. Germà Colon (2003). De Ramon Llull al Diccionari de Fabra: acostament lingüístic als monuments de les lletres catalanes. L'Abadia de Montserrat. p. 277–. ISBN 978-84-8415-541-6. 
  90. Catalunya (1548). Constitucions fetes per lo serenissimo ... don Phelip ... loctine[n]t general dela Sacra Cesarea ... Real Majestat del Emperador ... don Carles ... enla sisena Cort de Cathalu[n]ya... En ... Sancta Maria ... de Monço. Enlo any M.D.xlvij. per Pere Mompezat. p. 52–. 
  91. Andrea Baccius (1622). De thermis Andreae Baccii Elpidiani, civis Romani ... Libri septem: opus locupletissimum, non solum medicis necessarium, verumetiam studiosis variarum rerum naturae perutile. In quo agitur de universa aquarum natura ... De terrestris ignis natura nova tractatio: de fontibus, fluminibus, lacubus: de balneis totius orbis, & de methodo medendi per balneas. ex typographia Jacobi Mascardi. p. 10–. 
  92. An English Herbal; or, a discovery of the physical vertues of all herbs in this kingdom, etc. A. C. 1690. p. 9–. 
  93. Nicholas Culpeper (1826). Culpeper's Complete Herbal, and English Physician. Gareth Powell Limited. p. 161–. ISBN 978-962-218-002-4. 
  94. Richard Stapleford (2013). Lorenzo De' Medici at Home: The Inventory of the Palazzo Medici in 1492. Penn State Press. p. 123–. ISBN 0-271-05641-X. 
  95. Bess Viemont Morrison; Margaret Blanche Hays; Ruth O'Brien (1936). Guides for Buying Sheets, Blankets, and Bath Towels. U.S. Department of Agriculture. p. 19–. 
  96. Popular Photography. abril de 1993. p. 53–. ISSN 1542-0337. 

Véase también

editar

Enlaces externos

editar