LA COMPLICADA RELACIN DE JEREZ CON ANTONIO MAIRENA Estela Zatania Entr en Jerez con mi borrachera en Santiago puse bandera

en el Arenal la puse tambin con un letrero Viva Jerez [Antonio Mairena por bulera] Si la imagen y obra de Antonio Mairena han perdido algo de su anterior brillo en las dcadas desde su desaparicin, es probablemente en Jerez donde al maestro le re sultara ms doloroso este desamor artstico. De hecho, al hablar de Mairena y Jerez, tengo la sensacin de estar escribiendo una apologa, cuando la enorme figura de es te cantaor est muy por encima de requerir la reivindicacin de nadie. En la historia del cante, siempre ha habido parejas antagonistas: Torre y Chacn. ..Marchena y ValderramaCamarn y Pansequito... En este sentido, la pareja que ms li mpiamente divide la aficin es la de Antonio Mairena y Manolo Caracol, ambos nacid os en el 1909, por lo que estamos en plena celebracin de sus centenarios. En mi experiencia, muy difcilmente una misma persona admite ambos cantaores como impres cindibles. Me consta que es una moda divisoria lamentable que crece con el paso de los aos, y que antiguamente haba relaciones ms armoniosas, menos localistas que en la actualidad. Antonio Mairena, la dignidad en el cante, el respeto, el rechazo de todo tremend ismo ficticio y la veneracin incondicional por los mayores como norte absoluto. Cante majestuoso que alcanza la meta jonda sin estridencias ni histrionismo. Ca racol, poseedor de un eco envidiable, de un poder comunicativo y una natural cap acidad para entregar su cante enjundioso, inspirado y personalsimo. No se entien de la historia del cante del siglo veinte sin cualquiera de los dos. Pero parec e haber una barrera invisible pasando Lebrija en direccin sur, antes de llegar a Jerez. Una vez cruzada esa frontera, se encuentra uno en territorio caracolero, a pesar del origen sevillano de Manuel Ortega Jurez. En 1972 Antonio Mairena present su disco Antonio Mairena y el cante de Jerez, gra bacin que tena previsto dos ttulos antes de quedar en el definitivo, Brindis con Je rez, y Homenaje a Jerez, que aunque fueran descartados, dan fe de la intencin del trabajo. No obstante, en la ciudad del comps, del ange, de los tabancos, gaanas y patios de vecinos, se le otorga la permanente bofetada sin manos de decir que f ue un gran estudioso, o se habla de su magnfica labor, y siempre va implcita o expresa la posdata: no pellizcaba, entre flamencos, la falta ms grave que puede tener un c antaor. Acerca de eso, habra que preguntrselo al venerable cantaor jerezano, Manu el Moneo Lara. En una ciudad obsesivamente caracolera, Manuel es el abanderado del cante de Antonio Mairena; no es papeleta fcil. Hace pocos das, en una larga c onversacin en la terraza del cntrico Gallo Azul de Jerez, Manuel Moneo tuvo mucho que decir al respecto: Es que Antonio era un enamorao de Jerez, vena a las bodas de aqu y to los gitanos lo cos con l, tol mundo quera estar al lado de Antonio. Se juntaba mucho con Manuel M orao, y Morao me habl a m de Mairena gloria. Me dijo mira Manuel, escucha una sigui riya tocndole Melchor de Marchena a Antonio Mairena, y es una sinfona, no se puede cuadrar la msica y el cante ms completo. Te digo la verdad, yo en Jerez tengo pro blemas, a cuenta de Mairena. A m me gustan los cantaores de Jerez, pero yo cuand o me levanto por la maana y escucho a Antonio cantar una ton, ya empiezo a llorar, mis hijos me dicen qu te pasa op?, que me ha puesto Antonio, mira cmo me ha puesto!

Soy un enamorao de Antonio, gustndome Caracol! Caracol tiene cuatro cosas, pero de bo de reconocer que Caracol para m, entra ms en la copla. Antonio luch por el cante de los gitanos, l viva y mora por el cante, l viva las bodas. Antonio, como se entr ega en el disco de Mis recuerdos, no se puede entregar ningn cantaor ms. Un cantaor completo, medido, vocalizando bien, doliendo, llevando el cante, dnde vamos a apr ender eso? (M. Moneo) Juan de la Plata, director de la Ctedra de Flamencologa de Jerez, me informa que f ue en Jerez donde a Antonio Mairena se le hizo la primera entrevista documentada de su carrera artstica, realizada precisamente por l mismo en el ao 1954, y public ada en el diario Voluntad de Gijn, donde era corresponsal. Tras ganar en Crdoba l a Llave de Oro del Cante, Antonio Mairena recibi el primer homenaje nacional de s u vida, organizado por la Ctedra de Flamencologa y celebrado en el Teatro Villamar ta con la intervencin de primeras figuras como Juan Talega o La Perla, y los poet as Ricardo Molina, Antonio Murciano, Manuel Ros Ruiz y Ams Rodrguez Rey. En esa oc asin le fue entregada una placa de oro con las palabras Rey del Cante. En 1959, fue nombrado Director Honorario vitalicio de la Ctedra de Flamencologa, y poco despus particip en el festival que la misma institucin dedic a Manuel Torre co n motivo de la colocacin de una placa conmemorativa en la casa donde naci el clebre cantaor al que tanto admiraba Antonio Mairena. En 1964, fue otorgado el premio nacional de investigacin por su libro Mundo y formas del cante flamenco escrito en colaboracin con el poeta y flamenclogo cordobs, Ricardo Molina. En otras muchas ocasiones, segn Juan de la Plata, Antonio Mairena, vendra a Jerez a cantar como primera figura en los distintos festivales organizados por la Ctedr a, as como en casi todas las primeras ediciones de la Fiesta de la Buleria. Pero el reconocimiento institucional en Jerez, fue ms generoso que el popular, un hecho que Manuel Moneo no acaba de asimilar:

Lo que quera Mairena a Jerez, y lo malamente que habla la gente de l. La aficin que tengo a Antonio, esto viene de mi abuelo Pacote, de los Lara. Siempre mi pare m e deca canta bien Terremoto, canta bien Agujeta, pero como canta Antonio por sigui riya, por sole, por martinete, por tonno hay punto de comparacin!. Y de ah me vino la aficin, porque yo soy muy de Manuel Torre, Manuel es mi dolo, y Mojama, entonces d e aquellos pac, pues me gusta Antonio ms que ninguno. (M. Moneo) Hubo una vez el cante jerezano, un acervo y una tradicin, cantaores grandes, pequ eos y medianos, una forma de cantar que prcticamente define el cante flamenco. Ll eg Antonio Mairena y dio cuerpo y coherencia a los cantes, los engrandeci sin rest arles esencia. El que ms sabe del flamenco slo sabe un diez por ciento, palabras fa mosas del maestro. Antonio Mairena fue usufructuario del flamenco, no pretenda p oseerlo, sino hacer buen uso de sus formas, pisando con cuidado y dejndolas intac tas, sin atentar contra su integridad, procurando crear dentro del esquema exist ente. Salvaguard formas y cantes que los mismos jerezanos prcticamente haban aband onado. Dicen los Soler en Los cantes de Antonio Mairena que una amplia nmina de c antaores de la zona [de Jerez] ha echado en el olvido los cantes del Marrurro, L oco Mateo, Manuel Molina y Paco la Luz. Mairena los rescata con el mayor cario y sabidura, y los pone en bandeja para sucesivas generaciones. En una entrevista telefnica realizada el 21 de septiembre, 2009, el veterano cant aor Jos Salazar, gran conocedor de la obra de Antonio Mairena, destaca precisamen te esto: Mairena grab cantes de Jerez, que si no los graba l, nadie iba a conocerlos. El ma yor catedrtico del cante flamenco de toda la historia. Cogi muchas cosas de Jerez cuando nadie estaba haciendo caso, y nunca ha dicho esto es mo. Era nuestro dolo en aquellos aos, realz la fama de Torre, lo ha puesto como el mejor de todos los tiem pos, hizo por el flamenco ms que ninguno. Espaa entera se acuerda de Antonio Maire

na para cantar por sole y por siguiriya. (Jos Salazar). Manuel Torre y Joaqun de la Paula fueron las referencias ms importantes para Anton io Mairena. En el libro Las confesiones de Antonio Mairena (p.70-73), el maestr o desmiente la idea que tenan algunos de que Manuel era cortito e irregular. Man ifest haberlo escuchado siempre de una forma magistral, y lo consider enciclopdico. Cuando yo he reconstruido y grabado algunos de estos cantes, en an casi desconocidos, incluso en el mismo Jerez, me he basado en los cantaba Manuel, como ha ocurrido con el cante por seguiriya rna, to de Manuel Torre, Manuel cantaba ese cante y otros, como rrurro, aunque dndoles su sello inconfundible. una poca en que er la forma en que de Joaqun la Che el de Diego el Ma

Los sonidos de Manuel Torre, adems del calificativo que Garca Lorca les daba de rajo s negros, pude experimentar que eran elctricos []. Creo que el caso de Manuel Torre es muy fcil que no se d ms dentro del cante gitano andaluz. (A. Mairena) [Candil, nm . 23, Semblanza de Manuel Torre, artfice de una era del cante]. Nuevamente, Manuel Moneo: Yo siempre he seguido la lnea de Manuel, que me quita el sento a m, porque yo soy de Torre y de Mairena, de los dos, pero claro, a Torre no lo he conoco, cuando yo l o escucho, yo tiemblo, porque pa m to lo que haga Manuel, to est bueno, parece que es toy escuchando ese taranto, con esa voz como una trompeta. Y Antonio ha cogido e se camino. Lo que pasa es que hay algunos aficionaos muy malos en Jerez, me par ece a m que no les gusta el cante, porque de Antonio hay que aprender, hay que es cuchar a Antonio, y adems, canta una gama de sole que no tiene nadie, yo no compre ndo a esta gente. (M. Moneo) Volvemos a Lus y Ramn Soler, autoridades en la materia: [] Antonio Mairena bebe en las fuentes jerezanas para entregar, reelaborados por sus maneras cantaoras, alg unos estilos que muy pocos conocan. Pese a que una parte importante de la aficin de Jerez escatim elogios a Antonio Cruz, basta con escuchar a los cantaores jerez anos para ver la influencia que el maestro de los Alcores tiene en ellos. (Los ca ntes de Antonio Mairena, p. 501) Tambin Moneo ha notado esta curiosa contradiccin, cantaores que cantan por Mairena , pero le niegan el sitio que le corresponde: Veo a la gente muchas veces, y pienso, el tonto del fulano ese, dice que no le gu sta Antonio, y luego va y hace los cantes suyos de l!, qu mala forma. Yo canto e i ntento, lo que es el cante de una familia, pero a veces me viene Antonio, y me a cuerdo de l. Tuve muchas vivencias con l, pero Antonio no lleg a escucharme a m pro fesional, yo era joven. Yo le escuch a l en Mairena del Alcor, me dijo de dnde era yo, que cant muy bien, pero las vivencias que tuve, fue ms que nada de estar con l en el Volapi [bar de Jerez], fiestas muchas, y Antonio en una fiesta era pa embor racharse perdo con l, no veas cmo cantaba por buleras, como los ngeles, lo dice Manue l Moneo, Antonio meta mano a cantar por bulera, y no le tiene envidia a nadie, y cmo bailaba Antonio!, se acordaba mucho de Mojama porque eso lo aprendi directamente de l. (M. Moneo) Es obvio que a Manuel Moneo le duele la falta de comprensin en su propia tierra, pero sus ojos brillan cuando habla de Antonio Mairena. Es hermoso ver la integr idad de este cantaor inspirado y realizado, fiel a su lnea, sin que le importe la opinin pblica:

Me dicen muchos, Manuel, qu bien cantas, hijo, pero a veces te pareces a Mairena. Y digo pero vamos, acaso eso es malo, que yo me parezca a Antonio?!si es el ms grande d los grandesquitando a aquel que he mentao [Manuel Torre], no ha cantao nadie com o l.

Adems, Antonio es el noventa por ciento los cantes de mi tierra. Lo mismo te hace la siguiriya de Marrurro, te hace la del Loco Mateo, te hace la de Frijones, el cante ese que dice Al moro yo me voy, para no verte ms, porque son dobles las gra ndes duquelas, que me haces pasar. Aqu haba una venta que deca la gente El Moro del p adre de Manuela del Volapi, pero yo no s si l lo dice por eso, porque l hace la mili en Marruecos, y de ah puede venir, porque se le ve que pasaba fatigas all, pero c uando l dice Al moro me voy, se acuerda de Frijones. En el cante de Mis Recuerdos ta mbin se acuerda de Frijones, la solea apol, cuando l canta eso de Charamusco. Eso fue que estuvieron en una fiesta, y Antonio deca qu buenas voces de estos campesino s que hay en Jerez, se emborracharon, y despus cant eso de Charamusco, Charamusco, e ra por la madrug, yo me part la camisa escuchndote cantar. Es que Antonio era un aficionado. Antonio escuchaba a un hombre cantar, y si est aba en Madrid, adnde cantaba bien? a Rota a Agujetas? po entonces lo vena a buscar. Todo lo que tocaba, lo engrandeca, es lo que veo en l, uno lo haca as cortito, pero l lo engrandeca cantando gitano, doliendo. (M. Moneo) Otra ancdota sale de Jos Merc. El ms joven de la generacin de los cantaores vivenci ales a menudo recuerda el miedo que les daba a l y a Camarn cuando ambos eran unos chiquillos, cantar en una venta despus de haberlo hecho Mairena, impresionados p or su actuacin. [A. Castellano] Manuel Agujetas es otro seguidor de Antonio Mairena, y ha grabado cantes suyos. En el libro Los cantes de Antonio Mairena, (p.497), leemos la siguiente cita te xtual de Agujetas con la habitual franqueza que le caracteriza: Mairena, Juan Talega, Manuel Torre y la Nia de los Peines s eran figuras, los dems, artistas seoritos cantando para seoritos. (M. Agujetas) Del mismo libro (p.499) sabemos que Agujetas aparece en un episodio de Rito y ge ografa del cante interpretando tres estilos y letras de siguiriyas de Juan Junque ra y del Marrurro en el mismo orden que Mairena los grab en 1974. Habla Moneo: Agujetas el viejo me deca a m que como Antonio, haba cantao muy poca gente. Es que aqu, la gente es muy caracolera, y no hay comparacin, cada uno su camino no? a m me gusta Caracol, pero lo que me extraa y lo que digo es porqu no gusta aqu Antonio Mai rena? S aqu lo que ha gustado siempre ha sido los Rubichi, y los Moneo y mi gente de los Lara, y Mairena siempre ha sido el monstruo para nosotros. La gente est l oca con el cante de Terremoto, que me parece muy bien, que era genial, pero vamo s, yo pa m, Antonio era distinto a todos porque hay cantaores que cantan una pince lata, pero que Antonio era una gama, era solea, siguiriya, martinete, ton, taranto , todo, y mucho cante de Jerez. El cante de Paco la Luz lo ha hecho muy poca ge nte como l, a m me ha quitao el sento. (M. Moneo) Antonio Mairena conoci a la Moreno, jerezana de nacimiento, pero ms ligada al ambi ente de los reservados y colmaos de la sevillana Alameda de Hrcules en los mejore s aos flamencos de dicho entorno, cuando Mairena alternaba con Pastora, el Pinto o el Gloria. Antonio se juntaba con la Moreno, l y su hermano Manolo Mairena, en el Charco de l a Pava de Sevilla, una venta que haba, y conoci al Gloria, a la Pompisi conoci a Manu el Torre! Le dijeron a Manuel un da que fuera a Mairena del Alcor, que el nico qu e quedaba era el Nio de Rafael [Antonio Mairena]. Antonio cant con l en un teatro, y despus de escuchar a Manuel, ya dijo detrs de este hombre no voy a cantar, ni can t ms nadie. Mairena fue un rbol muy grande, meta mano a todola solea de Cdiz, como no la ha hecho

nadie, y la solea de Alcal, l la ha hecho mejor de tos los que han naco, mejor que Manolito Mara, mejor que Juan Talegapa m! Y pa cualquier aficionao que sepa. La sol ea de Triana la ha hecho distinto a tol mundo. Antonio vena a Jerez a las fiestas , a emborracharse, a lo mejor se juntaba con el padre de Morao, se mora con Morao el viejovino a escuchar a Terremoto, a la Bolola, una mujer con su cantecitos, s u rollito no? y all en casa de la Bolola cant Antonio por siguiriyas. (M. Moneo) Antonio Reina, estudioso, escritor y presidente de la Fundacin Antonio Mairena, t ambin alude a la visita a la Ta Bolola, una mujer todava recordada y venerada en Je rez, con una ancdota conocida por todo aficionado y que delata la profunda admira cin que senta Mairena por Jerez y sus cantes: Recuerdo que la ltima vez que fue a escuchar a alguien, fue a la Bolola, una gitan a vieja de Jerez, que interpretaba los cantes con cierto regusto. Cuando volvi, m e entreg la cinta que haba grabado y me dijo: Ah tienes la levadura de los cantes de Jerez. Fijarse en la frase, para poner de manifiesto la esencia de estos cantes jerezanos. (A. Reina) El mismo autor tambin nos regala la frase siguiente que sintetiza todo el proceso del que estamos hablando: Cuntos das y noches pas en Jerez de la Frontera, hasta aprender y guardar, como oro e n pao, los cantes de Manuel Molina, Juan Junquera, Juanelo, Paco la Luz, Jos de Pa ula....! Dejemos que Moneo tenga la ltima palabra en nuestra mesa redonda virtual:

Luego dicen que si canta puro, qu es puro?, un puro es pa fumar. Date cuenta, cuando iba con Juana la del Pipa, y la Chicharrona, esa famosa imagen con Antonio en m edio, mira con qu gente se juntaba. Yo he escuchao a Mojama, y pa m, Antonio cant ms gitano que Mojama, y mejor que nadie. Manuel [Torre] era Manuel. Ara, que Ant onio no se pareci a nadie ms. Y todo esto me duele, porque me critican en mi tier ra. Antonio cre escuela, con sus defectos como puede tener todo el mundo, pero l os que hay hoy, no han llegao a estar con nadie, cmo van a hablar mal de Antonio? ( M. Moneo) Sin duda alguna, algunos escritos y teoras de Antonio Mairena no han soportado el paso de los aos, pero su cante queda como la ms elocuente expresin de una herencia cultural por la que los aficionados estamos profunda y eternamente agradecidos.

Recursos consultados: Blas Vega, Jos y Ros Ruiz, Manuel. Diccionario enciclopdico ilustrado del flamenco. Madrid, 1988/1990. Castellano, A. Homenaje a los Clsicos. (Internet) Por-blogueras 2008/5/20 Cenizo Jimnez, Jos. Duende y poesa en el cante de Antonio Mairena. Sevilla, 2000. Lefranc, Pierre. El cante jondo. Sevilla, 2000 Mairena, Antonio y Garca Ulecia, Alberto. Las confesiones de Antonio Mairena. Sev illa, 1976. Molina, Ricardo y Mairena, Antonio. Mundo y formas del cante flamenco. (3 ed.) S evilla, 1979. Reina, Antonio. La obra flamenca de Antonio Mairena: cante de pasado o de futuro? http://flun.cica.es/flamenco_y_universidad/alborea/n009/salida04.html Ros Ruiz, Manuel. De cantes y cantaores de Jerez. Madrid, 1989. Soler Guevara, Luis y Soler Diaz, Ramn. Los cantes de Antonio Mairena. Sevilla, 2 004. Soler Guevara, Luis y Soler Daz, Ramn. Antonio Mairena en el Mundo de la Siguiriya y la Sole. Mlaga, 1992.

Grabacin: Antonio Mairena y el cante de Jerez. Ariola, 1972 Revista Candil. Escritos de Antonio Mairena. Nm. 23, sept-oct, 1982