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Fenomeno Del Niño PDF

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El Fenmeno El Nio y el Clima en el Per*

Ronald Woodman Pollitt


Instituto Geofsico del Per

Prefacio. El contenido del presente artculo est basado en una conferencia presentada en El
Congreso por invitacin de la Dra. Martha Hildebrant, una de varias correspondientes al
"Ciclo de Conferencias de la Primera Legislatura Ordinaria, 1997". Han transcurrido varios
meses desde la presentacin de la conferencia hasta la composicin y publicacin de sta en
forma escrita. La situacin tambin ha cambiado, de una situacin de expectativa y
pronsticos a una de realidad vivida. Acabamos de experimentar nuevamente uno de los
Nios ms dainos de la historia peruana desde que Pizarro desembarc en nuestras playas
en 1528. Tenemos que cambiar pus, pronsticos por realidad, sin por ello dejar de incluir
una discusin sobre los primeros, dada su importancia en un programa de prevencin. Creo
necesario la aclaracin porque lo aqu escrito, principalmente el ltimo captulo, no
conforma en su totalidad a lo expresado verbalmente en la conferencia mencionada.
El tema de mi charla es sobre el Fenmeno del Nio. Dadas las circunstancias, seguramente
estarn ansiosos de escuchar sobre El io que nos est afectando en stos momentos, as
como una comparacin de ste relativa a lo ocurrido durante El Nio del ao 1983.
Cubriremos estos temas, pero, antes de entrar en el tema de El Nio y sus particularidades,
quisiera hacer unas consideraciones previas, como un repaso de ciertos conceptos de carcter
geogrfico, los que hay que discutir por dos razones: una, porque son importantes para
entender El Nio, y dos, porque hay ciertos conceptos que traemos de la escuela (por lo
menos en mi caso y estoy seguro que en muchos de ustedes, an inclusive los jvenes) que
estn equivocados. Incluyo a los jvenes en sta apreciacin porque he tenido la experiencia
de escuchar por radio y televisin a especialistas recin formados que siguen repitiendo
alguna de las cosas que aprendieron recientemente en la escuela sobre El Nio y que no son
correctas.
Analizaremos primero por qu normalmente no llueve en la costa del Per. Vale la pregunta,
despus hay que recordar que el Per es un pas tropical, la latitud de Lima son 12 Sur,
comparable o menor que muchos lugares de Centroamrica y El Caribe, y sin embargo, no
llueve Por qu no llueve? La respuesta correcta es, como veremos despus, porque el mar
que baa nuestras costas es fro. Hay que preguntarse luego Por qu es fro? El Nio est
relacionado con las respuestas a estas dos preguntas.
Posteriormente, entraremos a definir el trmino "El Nio" como se le conoce en trminos
modernos, para luego discutir El Nio de 1997, su desarrollo hasta la fecha y su estado
actual. Es necesario poner este ltimo en contexto con respecto a lo ocurrido histricamente,
incluyendo El Nio del ao 82-83, por lo que discutiremos tambin lo sucedido en el pasado
y lo que sucedi en esa ocasin, 1982-83.

Publicado por el Congreso de la Repblica en "El Per en los Albores del Siglo XXI/2; Ciclo de
Conferencias 1997-1998", Ediciones del Congreso del Per, Lima-Per, 201-242, 1998

Hablaremos luego sobre el estado de la ciencia actual, en lo que a pronstico se refiere; esto
es sobre cuan capaz es la comunidad cientfica internacional y sobre qu somos capaces de
hacer nosotros, los peruanos, sobre el particular. Lo ltimo incluye el tipo de pronsticos que
podemos hacer con respecto a los posibles daos y desastres que El Nio puede causar.
Discutiremos la capacidad de pronstico, primero a nivel global y luego a nivel local. Nos
extenderemos un poco sobre dos puntos especficos a los que yo personalmente he dedicado
ms tiempo y esfuerzo. Desde ya les puedo avanzar que stos esfuerzos no son suficientes.
Debemos hacer mucho ms que lo que yo les voy a mostrar.
Tal vez, sea un buen momento para desligar responsabilidades institucionales. Soy Presidente
Ejecutivo del Instituto Geofsico del Per, pero estoy hablando como persona, como
cientfico del Instituto Geofsico del Per. Cuestiones cientficas como sta son muy
sensibles, tienen repercusiones sociales y hay bastante de subjetividad y especulacin. A lo
mucho podemos hablar de probabilidades, lo que hay que tener muy en cuenta. No se le
puede pedir a una institucin que se pronuncie oficialmente sobre qu va a pasar en el futuro.
Lo ms que podemos hacer es consultar a nivel personal a cada cientfico para que se
pronuncie sobre lo que l cree que va a suceder, por supuesto con la exigencia que d sus
argumentos y el sustento de sus pronsticos. Estos ltimos deben ser acompaados de un
pronunciamiento sobre el nivel de certidumbre de lo pronosticado.
Por qu no llueve en la costa peruana?
Primero, veamos las condiciones necesarias para que exista una lluvia tropical, una lluvia
fuerte, un aguacero, un proceso de conveccin de penetracin profunda, "deep convection" le
llaman en ingls. Hablamos de lluvias con truenos y relmpagos, pus es ste tipo de lluvias
el que nos amenaza. No estamos hablando de lloviznas cuando hablamos de las lluvias que
amenazan al norte del Per.
Cuando aqu hablemos de lluvias, estaremos refirindonos a lluvias de 60 a 150 mm por da,
las que pueden ocurrir en slo unas cuantas horas. Lluvias de este nivel significa que si
dejramos un vaso o una bandeja vaca en el techo de nuestras casas al final del da (o de las
horas de lluvia) los tendramos llenos de agua a un nivel de los 60 o 150 mm. Imagnense
stos niveles sobre toda una gran extensin superficial y podemos imaginar lo que sto
significa en trminos de caudales sobre las calles de las ciudades, o los ros y quebradas que
recolectan todo este gran volumen.
Para que llueva fuerte se necesita que la atmsfera sea inestable, Qu significa sto? Una
atmsfera es inestable cuando una parcela de aire a nivel de superficie, que se ha calentado
un poco ms que sus vecinas, empieza a ascender y no deja de hacerlo hasta alcanzar alturas
sobre los 10-15 kms de altura. Al ascender los aires se expanden y enfran. El enfriamiento
produce la condensacin de la humedad y la formacin de una nube tipo "cumulu-nimbus" y
eventualmente la lluvia, siguiendo un proceso que explicaremos a continuacin.
El ascenso se debe a que aires calientes son ms livianos que los fros, y as como una
burbuja de aire flota en el agua, una burbuja (debemos imaginar una burbuja de uno o varios
kilmetros de dimetro) que es ms caliente que el aire que lo rodea, flota tambin en ellos.
Pero, la pregunta clave que diferencia una atmsfera inestable de una estable es hasta qu
altura seguir flotando? Hay que recordar que la atmsfera que rodea a la parcela es tambin
ms fra a mayores alturas. La inestabilidad o estabilidad depende de quien se enfra ms
rpido, la parcela? o el aire que lo rodea, y hasta que altura. Si al ascender encuentra que el
aire que lo rodea es ms fro, la parcela seguir siendo ms liviana y seguir ascendiendo. Si
sto sucede en todo el recorrido hasta llegar a 10 o ms kilmetros de altura decimos que

tenemos una atmsfera inestable. Estoy seguro que muchos de Uds. han tenido la suerte de
observar nubes cumulu-nimbus al volar por El Caribe o en la cuenca amaznica. Al asomarse
por la ventanilla del avin, las deben haber visto, algunas veces por encima de la altura del
vuelo. Los aviones vuelan ms o menos a unos 10 kilmetros de altura. Las nubes cumulunimbus en latitudes ecuatoriales, pueden llegar hasta los 18-20 kilmetros de altura. En la
Figura 1 mostramos esquemticamente una de stas nubes y el esquema de un avin para
dramatizar su altura.

FIGURA 1

Cuando se dan estas condiciones, en el proceso de ascendencia, el aire, se expande y enfra.


Al enfriarse al nivel de la temperatura de roco, la humedad, que siempre est presente en
mayor o menor grado en forma de vapor de agua, se condensa y forma pequesimas gotas de
agua. Estas son responsables de la apariencia opaca y blancuzca de las nubes; pero stas
todava no precipitan ni producen lluvia. Finalmente, estos mismos aires llegan , a alturas
donde la temperatura es del orden de los 10 a 15 C. A estas alturas, la humedad restante
se condensa en pequeos ncleos de hielo, los que le "roban" la humedad a las todava

pequeas gotitas de agua y crecen , a costa de ellas, en forma de pequeos copos de nieve.
Los copos de nieve eventualmente crecen lo suficiente y precipitan.. Al precipitar colicionan
con otras partculas de agua, las que se congelan al contacto, y otros copos de nieve
hacindose cada vez ms grandes y pesados. Eventualmente caen a niveles con temperaturas
mayores que los 0 grados centgrados y se convierten de nieve a agua, ya en forma similar a
las gotas de agua que llegan a la superficie. El proceso de cada contina, ahora en forma ms
rpida. En el camino, las gotas que ya podemos llamar de lluvia barren las mismas gotitas de
aguas que acaban de condensar, se engruesan y eventualmente llega una lluvia tropical al
suelo. Cuanto ms profundo es ste proceso de conveccin ms fuerte es la lluvia. Notar en la
Figura que estamos indicando una temperatura a nivel de superficie de 28 C. Esta
temperatura es crtica, si es que se da sobre la superficie del mar y costas cercanas, lo que
mencionaremos frecuentemente despus.
En el caso de la costa del Per, tenemos normalmente una condicin que no permite el
crecimiento de ste tipo de nubes, decimos que existe una "inversin de temperatura" y que la
atmsfera es "estable". La inversin de temperatura se ilustra en la Figura 2 con la existencia
de dos temperaturas a alturas contguas, siendo ms alta la de mayor altura, contrario al
comportamiento normal: menores temperaturas a mayor altura. Esta inversin ocurre a lo
largo de la costa peruana a una altura de aproximadamente 700-1000 metros sobre el nivel
del mar. El salto en las temperaturas en la capa de inversioninversin puede llegar a 15 C,
por encima de las diferencias normales. Raros son los lugares en el mundo que muestran una
inversin tan pronunciada. Esta inversin impide que una parcela de aire que nace en la
superficie llegue ms arriba de la altura de la temperatura de inversin. Cuando este aire, que
est ascendiendo, quiere ascender un poco ms no lo puede hacer puspues encuentra que los
aires circundantes son mucho ms livianos por ser bastante ms calientes. Decimos entonces
que tenemos una atmsfera estable. Por debajo de los 1000 metros, desde muy cerca de la
superficie, los aires estn saturados de humedad. Le basta ascender unas pocas centenas de
metros para tomar la temperatura de roco y condensar, formando una nubosidad que termina
bruscamente a la altura de la inversin. La brusquedad de la transicin se puede observar muy
claramente al descender en avin a Lima; es el conocido "colchn de nubes". Esta superficie
es la altura mxima a la que pueden ascender los aires hmedos. El tamao de las gotitas de
agua que se forman, producto de la condensacin, son tan pequeas que no precipitan (si lo
hacen producen la llamada gara) y es por eso que no llueve en Lima. Puede haber lloviznas,
hay gara y neblina, pero no "llueve" en el sentido cabal de la palabra. En la costa norte, los
aires son ms secos, no existen garas ni lloviznas de invierno, y con frecuencia no se forma
el "colchn de nubes", pero la inversin de temperatura existe aunque no haya nubosidad que
la ponga en evidencia. Esta inversin de temperatura deja de existir slo en condiciones de El
Nio, como veremos ms adelante.
A qu se debe la inversin? Se debe a la temperatura baja del mar. Los aires por encima de
los mil metros son tropicales, como los de cualquier pas tropical; no estn enterados de que
por debajo hay un mar ms fro que lo normal. Pero, los aires que estn en contacto con el
mar toman su temperatura, y no slamente stos sino que, por turbulencia, los aires ms bajos
se mezclan con todos los aires que estn en los primeros mil metros y comunican, se puede
decir, la frialdad de la superficie del mar hasta los mil metros de altura. All se encuentran
con los aires tropicales y no pueden ascender ms. Tampoco pueden mezclarse con ellos. No
hay manera de que la temperatura del mar comunique su temperatura a los aires tropicales
por encima de esta altura y se forma la inversin.
Los aires por encima de los 1000 metros no difieren mucho de otros aires tropicales
normales, por lo menos en temperatura (son tal vez ms secos, por un proceso de subduccin

que no tenemos el espacio para elaborar). La gran diferencia, responsable de la estabilidad del
aire y la inversin, est en las temperaturas ms bajas en los niveles inferiores. Estas
temperaturas se deben al hecho de estar en contacto con la superficie de un mar mucho ms
fro que las temperaturas que le corresponderan a una latitud tropical. En invierno frente a
Lima, por ejemplo, las temperaturas del mar son del orden de los 15 C, esto es 13 C ms
bajo que los 28 C tpicos de una latitud tropical. Para tener un perfil de temperatura como el
que se muestra en la Figura 1 y llueva tropicalmente en Lima necesitaramos que el mar se
caliente unos 13 C sobre lo normal. Esta es una condicin que nunca se ha dado y
probablemente nunca se de. Este requerimiento se va debilitando conforme va uno hacia el
norte, nos acercamos al verano y la temperatura en condicin normal es cada vez ms
caliente. Esta condicin se cumple bajo condiciones de El Nio, como veremos ms adelante;
la atmsfera se tropicaliza y llueve como en cualquier pas tropical.
Por qu el mar es fro frente a las costas del Per?
Muy bien, hay esta inversin de temperatura que impide la lluvia. La inversin se debe a su
vez a que el mar es fro. Pero por qu el mar es fro frente a las costas del Per? Si fueran
ustedes alumnos de colegio, levantaran la mano y diran "por la Corriente de Humboldt,
seor profesor". Parcialmente cierto. La Corriente de Humboldt es importante pero juega un
rol secundario en el enfriamiento de las aguas. Ms importante que la Corriente de Humboldt
es el proceso de afloramiento. Por lo que nos ensearon en el colegio, tenemos la impresin
de que las aguas son fras por la Corriente de Humboldt, que las aguas vienen desde la
Antrtida o a lo largo de todo Chile, que son aguas fras que vienen como un ro a lo largo de
la costa del Per y que enfran nuestros mares. Esto no es correcto. Existe la corriente pero el
agua es fra no porque venga del sur sino porque viene de las profundidades del mar sin
exponerse, en esta forma, a un calentamiento prolongado de los rayos del sol.
El mar, tiene dos capas muy definidas, una parte superior, que se calienta con el sol y luego,
por la turbulencia y la actividad de las olas y procesos fsicos de mezclado, se mezclan y
producen un engrosamiento que va desde los 20 hasta los 150 metros, segn la regin del
mundo. Por debajo de esta capa hay un mar profundo con una temperatura mucho menor y
bastante constante en todo el Pacfico. Esta segunda regin tiene una temperatura de 15
grados aproximadamente en su parte superior y progresivamente menor conforme avanzamos
en profundidad. A una cierta profundidad, hay un cambio brusco de regmenes de
temperatura. Podemos hablar de las aguas que son calentadas por el sol y las que no. La
superficie que separa estas dos aguas a diferentes temperaturas recibe el nombre de
termoclina.

El dibujo esquemtico mostrado en la Figura 3a muestra la costa peruana, los Andes y el


viento alisio que sopla a lo largo de la costa casi paralela a los Andes. El viento sopla con esa
misma velocidad cerca a la superficie del mar y es capaz de arrastrar el mar consigo y forma,
hasta cierto punto, lo que conocemos como la Corriente de Humboldt. Una componente de
sta va de sur a norte, pero como consecuencia de la rotacin de la Tierra, hay una fuerza, que
se denomina de Coriolies, que hace que las aguas de la superficie se alejen en una direccin
perpendicular al viento. Esta fuerza es parecida a la que sufre un trompo cuando est girando.
Les habr llamado tal vez la atencin, que cuando inclinan Uds. un trompo ste en lugar de
caer, simplemente se pone a precesar en una direccin perpendicular a la fuerza de la
gravedad. Un proceso fsico similar ocurre en la Tierra por su rotacin; las aguas son
empujadas en la misma direccin del viento, pero las aguas, en lugar de responder en esa
direccin, tienen una componente que va de la costa hacia mar adentro. Esta componente es
responsable del afloramiento; pues si las aguas que estn cerca de la costa son retiradas,
aunque sea lentamente hacia mar adentro, la costa no puede quedar seca. Las aguas retiradas
son reemplazadas por aguas mas profundas y fras. Esto es lo que se llama afloramiento, y es
responsable que frente a las costas del Per hayan aguas mucho ms fras que las que le
corresponden a su latitud. Dicho sea de paso, el hecho de que stas aguas fras vengan de las
profundidades es la razn por la cual el Per tiene su gran riqueza pesquera, porque son aguas
tambin muy ricas en nutrientes.

Muy bien, esas son las condiciones normales frente al Per. Hemos discutido que a lo largo
de la costa del Per las aguas son ms fras que la que le corresponden a su latitud. Veamos
que ocurre en el resto del Pacfico. Normalmente si no hubieran vientos en la zona del
Pacfico ecuatorial, sta sera clida en toda su extensin, por recibir los rayos del sol con
mayor incidencia. Esperaramos cierta homogeneidad desde el extremo Este al Oeste. Pero lo
que verdaderamente ocurre en condiciones normales se ilustra esquemticamente en el
cuadro superior de la Figura 4 (Figura 4a). En ste se muestra la costa de Amrica a un
extremo y Australia e Indonesia al otro, el ecuador es la lnea que est pintada al centro. Los
vientos alisios que corren paralelos a la costa del Per, hacen una curva ms o menos a la
altura de Punta Aguja hacia las Islas Galpagos donde luego toman un sentido que va de este
a oeste en el resto del Pacifico ecuatorial. Podemos apreciar de la Figura que las temperaturas
superficiales del mar son bastante ms clidas en el extremo Oeste que en el Este. Para
ilustrar la diferencia, las aguas mas clidas se han pintado de rojo mientras que las ms fras
de todo azulado. Cuanto ms oscuro el rojo ms caliente y cuanto ms azul ms fro.
Podemos apreciar pus que la distribucin de temperaturas no es homognea. Encontramos
mayores temperaturas en el extremo occidental del Pacfico y menores en el oriental, frente a

las costas de Sudamrica. Esto se debe a la persistencia de los vientos alisios. Ya hemos visto
como stos hacen aflorar aguas fras frente a las costas peruanas, las que a su vez son
arrastradas por la corriente de Humboldt y llevadas ms all de las Islas Galpagos. Las aguas
superficiales en el ecuador oriental, si bien son tambin calentadas por el sol, son a su vez
arrastradas por los vientos alisios, los que en estas latitudes soplan de este a oeste, y llevados
al extremo occidental a las cercanas de Australia e Indonesia. Podemos decir que las aguas
calientes, producidas por el calentamiento solar frente a Amrica ecuatorial, son exportadas al
otro extremo del ocano, donde se acumulan. Esta acumulacin produce un engrosamiento de
la capa caliente por encima de la termoclina en este extremo a expensas de un adelgazamiento
frente a las costas de Per y Ecuador. La profundidad de la termoclina se ilustra con la
superficie azul mostrada en el corte, la cual demarca la separacin de las aguas calientes
superficiales con las fras a profundidad. El menor peso de las aguas calientes superficiales
hace tambin que exista una diferencia en el nivel del mar de unos cuantos decmetros entre
los dos extremos, sostenidos por los vientos alisios. El nivel sube en el extremo occidental y
baja frente a las costas de Sudamrica.
Las aguas calientes acumuladas en el extremo occidental del Pacfico juegan un papel
importante durante la ocurrencia del fenmeno de El Nio. La existencia casi permanente de
aguas por encima de los 28 C, incluyendo reas extensas con temperaturas de 29 C y hasta
de 30 C hace que esta zona sea altamente inestable como la descrita en la Figura 1. La
regin pintada de rojo oscuro es la regin que ms llueve en el mundo, lo que se ilustra en la
Figura 4a como una gran actividad convectiva. Veamos a continuacin que ocurre en
condiciones de El Nio.
Qu ocurre en el Ocano Pacfico durante El Nio?
Las condiciones durante un No-Nio que hemos descrito no son completamente estables ni
rgidos. Existen fluctuaciones. La temperatura de hoy da no es exactamente la misma
temperatura que la de maana. Llueve hoy da, no llueve maana. La temperatura del mar
tiene un cierto valor un mes, y uno diferente el mes siguiente. En general hay fluctuaciones
de un cierto nivel con todos los parmetros que defienden tanto el mar como la atmsfera.
Llega un momento que por alguna razn estas fluctuaciones hacen que las aguas sean ms
calientes en una zona que no est en el extremo occidental, como por ejemplo, un poco ms
hacia el centro del Pacfico. Eso hace que llueva en una zona un poco ms hacia el mismo
centro; lo que a su vez, cambia el sistema de presiones (ms bajas donde llueve) y hace que
los vientos alisios amainen o que lleguen a soplar an en direcciones contrarias a las
normales. Al cesar los alisios que mantenan la acumulacin de aguas en el Pacifico
occidental, los desniveles mencionados, tanto de la superficie como de la termoclina, tratan
de lograr su posicin de equilibrio y las aguas calientes se desplazan hacia el este en forma de
una onda (denominada de Kelvin). Esto hace que las aguas ms calientes y profundas se
desplacen ms hacia al centro, lo que a su vez produce ms lluvia en la zona central,
formndose un circulo vicioso que acenta la situacin.
El resultado final de todo este proceso - lo que ocurre durante El Nio - es que esta actividad
convectiva que estaba en el extremo oriental del Pacfico se desplaza hacia el centro del
Pacfico. El desplazamiento de la seccin ms profunda de aguas calientes, en forma de onda,
contina por inercia ms all del Pacfico central e incide sobre la costa de Sudamrica. Aqu
se produce un engrosamiento de la termoclina el que se propaga hacia el sur y el norte
invadiendo con aguas calientes las costas del Per (ver Figura 4b).
Sbitamente la costa del Per, que tena una termoclina relativamente poco profunda y aguas

fras aflorando a la superficie frente a la costa, ahora en lugar de tener esas aguas tiene una
capa de agua caliente, bastante gruesa, que fcilmente se mantiene en stas condiciones pus
su grosor y baja densidad impide el afloramiento de las aguas profundas y fras. El
afloramiento sigue, pues los vientos alisios siguen soplando, como en las condiciones
anteriores (los vientos en esta poca del Nio, son hasta un poco ms altos que en
condiciones normales), pero en lugar de aguas fras afloran aguas tambin calientes (ver
Figura 3b). Durante un Nio intenso la profundidad de la termoclina frente a las costas del
Per sobrepasa los 200 metros y la temperatura superficial del mar sube varios grados por
encima de lo normal. En la costa norte del Per la superficie del mar alcanza temperaturas
por encima de los 28 C, la inversin de temperatura se rompe, la atmsfera se desestabiliza y
ocurren lluvias tropicales.

Debemos mencionar tambin que la aguas superficiales, ahora calidas y de origen tropical,
son muy pobres en nutrientes. .Estas no producen la misma cantidad de fitoplancton, base de
toda una cadena alimenticia, que las aguas de afloramiento. La anchoveta y otras especies
marinas que dependen de ste y de la cadena alimenticia que producen, emigran o mueren por
inanicin. Esto, ayudados por la sobrepesca, lo experimentamos dramticamente con El Nio
de 1972. La poblacionpoblacin de anchoveta se redujo a un 10% de la normal, y le tom
cerca de 10 aos en recuperarse.
El cuadro que se muestra en la siguiente ayuda visual (Figura 5) ya no es una concepcin
artstica; muestra la realidad de las temperaturas de la superficie del mar en todo el Pacifico
ecuatorial. Su fecha: 19 de noviembre. Es maravilloso que hoy en da uno pueda sentarse
frente a la computadora de su casa conectarse a Internet y enterarse de qu le est pasando a
las temperaturas del mar en el Pacfico a lo largo de toda su extensin con slo unos das de
retraso. Y esto no se limita a lo que est sucediendo en la superficie. Si ustedes quieren y
tienen inters pueden hacer cortes y saber qu profundidad tienen las aguas calientes en
Indonesia y qu profundidad tienen cerca del Per.
La Figura (5) muestra dos recuadros. El recuadro superior (5a) muestra las temperaturas
superficiales del mar en todo el Pacifico ecuatorial. Los diferentes colores representan
diferentes temperaturas. Los rojos indican las ms calientes y los azules las ms fras. La
correspondencia exacta de la temperatura se lee en la escala en la parte inferior del recuadro.
Las temperaturas a lo largo de la costa del Per, en esta poca, estn entre los 21 y 25 grados.

Estas temperaturas, a menos de que Uds. tengan gran familiaridad con su comportamiento
normal, no nos dicen cuan anormales son. Esto se muestra en el recuadro inferior en trminos
de lo que se conoce como "Anomalas de la Temperatura Superficial del Mar". Estas
muestran la diferencia que hay entre la temperatura del mar del momento con la temperatura
que normalmente existe en esa poca del ao en ese lugar.
Podemos considerar las anomalas en la misma forma que consideramos las lineas de fiebre
en una persona. Cuando hablamos de fiebre decimos que una persona tiene 39 grados o
decimos que tiene 2 lneas de fiebre. Las anomalas son las lneas de fiebre que tiene el mar
en los diferentes lugares, en este caso para esta fecha especfica del 19 de noviembre. Pero a
diferencia de un ser humano que siempre tiene 37 C como temperatura normal, la
temperatura normal de la superficie del mar vara con el lugar y la estacin del ao.
Podemos observar en la Figura 5b una gran mancha granate oscuro, indicando anomalas en
la temperatura de +5C frente a las costas de Ecuador y norte del Per. Esto es indicativo de
un Nio intenso. Cuando no hay Nio, cuando las condiciones son normales todo el Pacfico
debera estar pintado de blanco. Podemos apreciar la intensidad del fenmeno que estamos
experimentando considerando que basta la existencia de temperaturas de slo 2 grados de
anomala para definir la presencia del Fenmeno El Nio, aunque dbil.

Es interesante notar tambin la extensin de la superficie con temperaturas anormalamente


altas. Estas se extienden desde las costas de Sudamrica hasta la lnea de la fecha a 180
Oeste, sto es tienen una extensin de cerca de 100 de longitud que corresponden a cerca de
11,000 km. la cuarta parte del permetro terrestre. El Nio ya dej pues de ser algo que
slamentesolamente los sechuranos y paiteos conocan. Hoy en da se le considera tal como
en realidad es, como un fenmeno global. Si bien no tenemos una figura similar para el ao
1983 sta extensin e intensidad es comparable a lo ocurrido en ese ao. Pero todava no
llueve. La razn es que no basta una anomala fuerte, lo importante es la temperatura absoluta
y como se puede apreciar en el recuadro superior sta no llega todava a los 28C. A
diferencia de las personas, la temperatura normal del mar, sobre las que se aade las
anomalas (fiebre) no es constante, depende del lugar y la estacin del ao. Si bien el estado
actual de El Nio es el de un El Nio intenso, tenemos la suerte de que se ha adelantado y los
5C de anomala en Noviembre no producen todava temperaturas de 28 grados o mayores
como lo podra hacer en verano, cuando la temperatura normal es ms alta. Hemos includo

en la y en la 6Figura dos cuadros adicionales que si bien no estaban disponibles durante mi


exposicin ilustran muy binbien lo que ocurre con la temperatura superficial del mar durante
un Nio intenso como el ocurrido en 1997-98. Las temperaturas han sido obtenidas por
medio de satlites y son una cortesa del Naval Oceanographic Office del Naval
Meteorological and Oceanographic Command (NAVO/NMOC-USA). Las temperaturas en la
Figura 6b corresponde a la poca pico de mxima incursin de aguas superficiales calientes
correspondiente al promedio de los ltimos siete das anteriores a Febrero 1998. La figura 6a
corresponde a una epocapoca ms reciente y corresponde a una situacin casi normal. En
sta ltima se ilustra muy binbien el proceso de afloramiento responsable de las aguas fras
(verdes y celestes) cercanas a la lnea de costa. La historia semana a semana, con imgenes
similares, correspondientes a El Nio 1997-1998 pueden ser vistas en nuestra pgina web
(http:/www.igp.gob.pe). Veamos ahora este Nio en el contexto de experiencias pasadas.

El Nio 1997 en el contexto de fenmenos El Nio anteriores.

No hay mejor lugar para hacer comparaciones de temperatura del mar con tiempos pasados
que la temperatura del puerto de Chicama. Chicama, tiene registros contnuos de
temperaturas del mar desde hace cerca de 75 aos. En la Figura 7 se muestran slo, por
claridad, aquellos correspondientes a Nios importantes, aquellos que durante algn mes
hayan sobrepasado los 3.5C de anomala, o 2.5C en invierno. Se grafica el promedio
mensual de la anomala de la temperatura mes a mes. Notar que los grficos se inician en
octubre de un ao hasta setiembre del ao siguiente. En esta forma se muestra en forma
contnua y central la poca ms interesante del ao que es el verano. Un ao normal se
muestra con valores cercanos al cero. La mayora de los otros aos que no se muestran aqu
se mantienen dentro de un rango de ms o menos 1 a 1.5C. De los mostrados, aquellos que
sobrepasan los 4C podemos calificarlos como Nios intensos, y como medianos los que
sobrepasan los 3C.

Si ignoramos por el momento lo ocurrido en 1997 (y 1998) y 1998. Nota: hemos aprovechado
aqu la fecha de la publicacin de esta conferencia para complementar el grfico con
mediciones ms recientes que no existan a la fecha de presentacin) marcados con cuadrados
grandes rojos y amarillos, sobresalen en forma muy conspcua las temperaturas que tuvo el
mar en Chicama el ao 82-83 (en azul). Mientras las temperaturas de los Nios fuertes, como
los correspondientes a los aos 72, 87, el 92 y muchos otros --- que tal vez ustedes conocen -- llegan a duras penas a los 4, a veces 5C, en abril de 1983 en Chicama la temperatura del
mar excedi los 10C por encima de lo normal, varias veces la anomala en temperatura
experimentada en muchos de los aos que el El Nio se hizo presente, incluyendo los que
consideramos como El Nio fuertes.
Otra temperatura que se destaca es la correspondiente al ao 1925, ao que hasta la
ocurrencia de El Nio de 1983 rompa todos los records de lluvias en los recuerdos de
nuestros mayores en la zona norte del pas. Est todava en mis propios recuerdos de juventud
en Piura la conversacin de mis padres y amigos en los primeros meses de verano: "Llover
o no llover?". Y cuando se iniciaban las lluvias y stas se ponan fuertes, el tema variaba
"Llover como en 1925? Porque en el ao 25 " En estos meses el tema es muy similar,
con la diferencia que el 25 ha sido reemplazado por el 83. Podemos apreciar en el grfico que
efectivamente el ao 1925 fue un ao excepcional, pero slamente por un mes, abril, donde
las temperaturas alcanzaron los 8C sobre lo normal. Abril fue efectivamente el mes ms
lluvioso.
La Figura 7 muestra tambin lo extraordinario que son las temperaturas experimentadas estos
ltimos meses de 1997. Este ao se present en sus inicios como un ao ms fro que lo
normal. De un ao que se presentaba fro, sbitamente subi la temperatura y lleg a niveles
rcord. Cuando ustedes escuchen que ste es tal vez el Nio ms grande de la historia se debe
a que efectivamente en los meses pasados de julio, agosto, las anomalas de la temperatura
del mar en la costa del Per fueron mucho mayores a cualquier otro ao anterior, incluyendo
el 83. Muestra tambin temperaturas ms altas que las experimentadas durante El Nio de
1972-73, famoso por la desaparicin casi completa de la anchoveta frente a las costas del
Per. Nunca en la historia mostrada en los registros de Chicama se han experimentado
anomalas de 6 C en los meses de Julio y Agosto de 1997. Estas son superiores a las
temperaturas rcord ostentadas para esta poca por los aos 1983 y 1972. Es dos veces ms
alta en Agosto que la anomala experimentada en el famoso Nio de 1972-73 que tanto
estrago caus a la pesca en el Per. Felizmente son anomalas rcord fuera de la poca de
lluvias, con temperaturas absolutas todava lejos de producir lluvias en la zona norte del pas,
pero que estn produciendo ya consecuencias en la pesca, la industria textil y en la
produccin agrcola de productos que requieren temperaturas bajas en invierno, un invierno
que ha brillado por su ausencia. Tal como explicamos anteriormente, la temperatura
ambiental de la costa, por debajo de la inversin, esta controlada por la temperatura del mar
frente a sta, por lo que a estas temperaturas rcord del mar en invierno y primavera le
corresponden igualmente temperaturas rcord en el ambiente.
Si bien la anomala en la temperatura del mar en Chicama durante 1983 es impresionante, al
Nio de 1983 lo recordamos ms por el gran nivel de precipitacin que trajo en la zona Norte
del Per. Son las precipitaciones en el norte lo que ms nos preocupa, por lo que es
importante discutir los niveles alcanzados ese ao en un contexto histrico.
Si Chicama es el lugar apropiado para el estudio histrico de las manifestaciones marinas del
Fenmeno de El Nio, Piura lo es para el estudio de las precipitaciones, con la ventaja que
observaciones histricas de las lluvias se remontan a la poca de su fundacin. Hay que

recordar que Piura fue la primera ciudad fundada por los espaoles al sur de Panam, en
1532, y que la denominacin de El Nio (por el Nio Dios) viene de la observacin de los
pescadores sechuranos y paiteos quienes bautizaron la corriente de aguas calientes
provenientes del norte en pocas de Navidad con el mismo nombre. Pereo es importante
resaltar que las dos expresiones "Corriente de El Nio" y "Fenmeno de El Nio" no son
sinnimas. La primera es ms local y la mas antigua; se refiere a la corriente que observaron
los sechuranos. La segunda es relativamente moderna y se reserva para denominar el
fenmeno global que involucra todo el Ocano Pacifico ecuatorial que explicamos
anteriormente.
La ocurrencia de grandes lluvias han sido registradas en la tradicin piurana desde su
fundacin y recopiladas por Vctor Eguiguren [1] en 1894. Eguiguren es una fuente
importante para lo ocurrido en el siglo XIX ya que recopila en forma semicuantitativa las
lluvias de ese siglo hasta el famoso Nio de 1891. El suscrito hizo una recopilacin histrica
[2] poco despus de las lluvias de 1983, las que fueron complementadas con datos ms
recientes y nuevas fuentes por Mabres y Woodman [3] en 1992. Como consecuencia de los
estudios mencionados se llega a la conclusin que nunca en la historia de la ciudad hubieron
lluvias tan intensas como las de 1983. Esta aseveracin se hace ms valedera para los ltimos
dos siglos, durante los cuales slo el ao 1925 seguido por 1891 (el ms intenso del siglo
pasado [1]) compiten para ganarse el calificativo de fenmenos El Nio extraordinarios. An
as, se estima que las precipitaciones acumuladas anuales en 1925 no llegaron ni a la mitad de
las habidas en 1983 [2].
La ocurrencia tan reciente de las lluvias de 1983 y la gran cobertura que stas tuvieron en la
prensa y televisin, tanto a nivel nacional e internacional, hace que se confundan las
manifestaciones de un fenmeno El Nio normal con las de un Nio "extraordinario". Tengo
la impresin que muchos peruanos confunden hoy en da el Fenmeno de El Nio con lo
ocurrido en 1983. Fenmenos El Nio ocurren con un lapso de recurrencia de unos 4 a 7
aos. Cuando ocurre El Nio el clima del norte se tropicaliza y llueve, pero no
necesariamente al nivel desastroso de 1983. El grfico de la Figura 8 muestra, en milmetros
anuales, las lluvias acumuladas en la ciudad de Piura desde 1932. Se ha escogido una escala
mxima de 400 mm para poder mostrar en forma visible la precipitacin de slo unos cuantos
milmimetros alcanzada en muchos de los aos secos, pero sta resulta insuficiente para
mostrar las lluvias acumuladas en 1983 las cuales llegaron a 2387 mm !. Para poderlas
representar en la misma escala necesitaramos un grfico tan alto que llegara a la altura de la
cpula del Congreso. El grfico incluye varios aos calificados como El Nio, todos aquellos
con precipitaciones acumuladas por encima de los 135 mm, algunos de ellos muy lluviosos,
como el ao 41, el 87 y el 92, pero como se puede apreciar lejos de llegar al nivel de 1983. El
promedio de las precipitaciones en la ciudad de Piura, incluyendo aos El Nio, es de slo 50
mm anuales, por lo que las lluvias de 1983 fueron aproximadamente cincuenta veces ms
intensas que el promedio. Dudo exista un lugar en el mundo en el que se haya presentado una
precipitacin que difiera tanto del comportamiento normal.

Los Lagos y Lagunas de Sechura


No podemos hablar de los Nios excepcionales sin hacer mencin de los grandes lagos y
lagunas que se forman en el desierto de Sechura con su ocurrencia. Esto es un ejemplo de una
consecuencia muy dramtica del alto nivel de las precipitaciones pero felizmente sin producir
daos por su existencia. Estos ms bien le dan una ocupacin alternativa a los pescadores de
Sechura, Morrope y Lambayeque que se ven afectados con la carencia de las especies
acostumbradas en el mar, pero compensados con la aparicin en los lagos de lisa, langostino
y camarn. Estos tambin constituyen un potencial para actividades de turismo internacional
como el windsurf, sky acutico, remo y otras actividades nuticas que se podra explotar.
En la Figura 9 se muestra una fotografa satelital tomada el 29 de mayo de 1998 y su
interpretacin. La imagen muestra la unin de varios lagos y lagunas que generalmente se
forman en aos de fuertes lluvias, esta vez, al igual que el ao 1983, dndole continuidad
desde el extremo sur del lago de las Salinas de Morrope hasta las lagunas de Ramn y
Napique en el extremo sur del Bajo Piura, con una extensin total de cerca de 200 km en la
direcciondireccin NS y de 25 km en la transversal, convirtindolo en el segundo lago en
Sudamrica despus del Titicaca. Los lagos se unen con el permanente estuario de Virrila, el
cual se convierte en un ro, nico desaguadero que impide que tomen mayor nivel.
Es interesante mencionar tambin, el lago que se forma en el seno de la Gran Depresin (-34
metros bajo el nivel del mar), de singular belleza, con la Gran Duna en el centro de este gran
espejo de agua. Este se forma slamente con las lluvias locales y algunas quebradas del cerro
Illescas, ya que se encuentra desconectado de las aguas que provienen de la vertiente
occidental de los Andes.

FIGURA 9
Desafortunadamente, con excepcin de las lagunas de Ramn y Napique la duracin de los
lagos es de uno a dos aos, la que se podra extender con diques de arena en los dos brazos
entrantes al estuario de Virrila y cerrando la quebrada de Namuc, que une el lago de las
Salinas de Morrope y Reventazn con el lago de las Salinas de Sechura, Sapayal y el Chocol.
Aun as, eventualmente secaran, puspues la evaporacin es muy rpida, cerca de 1 cm por
da (comunicacin personal Ing. Absaln Aguilar, Mina de Fosfatos) en das ventosos de
verano.
Hay algo muy importante que debemos tener en cuenta: La naturaleza generalmente recurre
en hacer algo excepcional en forma muy infrecuente. Desde el punto de vista probabilstico,
sin conocer mucho de la fsica de El Nio, para que vuelva a ocurrir un ao como en el 83
deberamos puspues esperar nuevamente los aproximadamente 450 aos o ms de
recurrencia; no es una regla, pero es una manera de apreciar en s las probabilidades de que
vuelva a ocurrir cuando se desconoce el resto de los elementos. Por otro lado, nuestro
conocimiento sobre los procesos fsicos responsables del fenmeno de El Nio han mejorado
muchsimo en los ltimos aos y estamos en posicin de predecir su comportamiento con
bastante exactitud, sobre todo para pronsticos de slo unos cuantos meses de anticipacin.
Esto nos trae al tema sobre pronsticos de la ocurrencia e intensidad de fenmenos El Nio y
de su posible impacto a nivel nacional.
Pronsticos de El Nio
Hoy en da tenemos la suerte no slamentesolamente de contar con la informacin de lo que
ocurre con las temperaturas del mar y otras variables meteorolgicas al momento y en todo el
globo terrestre, sino tambin con los resultados de los esfuerzos de pronstico que se hacen
en los grandes laboratorios de investigacin del mundo entero. Toda esta informacin esta a
nuestra disposicin a slo das despus de su evaluacin. Esta es una informacin valiossima
para la toma de decisiones de cualquier programa de prevencin y es consecuencia de los
grandes esfuerzos destinados a la comprensin de El Nio llevado a cabo en los ltimos aos

y al maravilloso desarrollo de la Internet.


Desde hace unos aos, despus del ao 72, cuando desaparece la anchoveta y produce
impactos econmicos de consecuencias graves en los mercados de las protenas baratas, se
despierta un gran inters en los pases desarrollados por estudiar El Nio. Aunque todava no
se conoca el carcter tan global de ste, era claro que sus impactos econmicos lo eran. A
partir de ese entonces universidades, investigadores e instituciones de investigacin empiezan
hacer estudios sobre el fenmeno. A nivel nacional, IMARPE, DHN (Marina) y el IGP
tambin inician o incrementan sus esfuerzos por comprenderlo.
El inters por El Nio se intensifica despus del ao 1983. La intensidad del fenmeno
alcanzada durante ese ao pone por primera vez en evidencia la naturaleza global de ste. No
slamentesolamente hubo grandes lluvias en el norte del Per, sino que hubo sequa en
Australia, ciclones en el Pacfico frente a las costas de los Estados Unidos produciendo dao,
una disminucin de los huracanes en El Caribe y muchos otros cambios climticos muy
conspcuos en una serie de otros lugares del mundo. Como consecuencia de todos esos
estudios, de la era espacial, de las posibilidades de observar al mar desde los satlites, de las
boyas automticas y de otros desarrollos tecnolgicos hay hoy en da una cantidad inmensa
de informacin sobre el estado del mar y de los vientos en todo momento; lo que permite, por
medio de modelos matemticos y el conocimiento de los procesos fsicos involucrados,
predecir lo que va a pasar en el futuro. Un modelo matemtico es una especie de bola de
cristal computarizada, pero que en lugar de magia hace uso de la informacin que se le
proporciona sobre el presente estado del ocano y la atmsfera y de las leyes fsicas que los
rigen para predecir el futuro.
Los mismos argumentos que yo les daba cualitativamente hace un momento, de por qu el
agua es fra frente a las costas del Per, de por qu aguas ms calientes se acumulan al otro
lado, todo esto y mucho ms se puede calcular cuantitativamente con un modelo matemtico.
Existen varios modelos desarrollados por diferentes centros de investigacin. Uno de los
mejores, con el mayor xito en el pronstico de El Nio es el desarrollado por el NCEPNOAA (siglas del nombre en ingls de el National Enviromental Prediction Center de la
National Oceanografic and Atmospheric Agency de los EE.UU. de Amrica). Este modelo
hace uso de supercomputadoras y acopla dos modelos de gran complejidad que anteriormente
se usaban por separado para pronosticar el comportamiento de la atmsfera y de los ocanos
a nivel global. Se le conoce tambin como el modelo de ocano-atmsfera acoplado.
Nosotros nos limitaremos a discutir la metodologa y resultados de slo este modelo.
La NOAA es una agencia de investigacin y servicios similar a la NASA. Mientras la
segunda se encarga de asuntos espaciales, la NOAA lo hace para asuntos oceanogrficos y
atmosfricos. Es la misma agencia que publica los mapas de la temperatura superficial del
Pacfico ecuatorial que hemos visto anteriormente.
El producto principal que sale de este modelo es la temperatura del mar en el futuro. De estas
las ms importantes son las temperaturas superficiales, pues son las que definen, hasta cierto
punto, todo el resto de fenmenos, incluyendo los meteorolgicos (sin ignorar los efectos que
tienen stos sobre lo anterior).
Estas predicciones estn disponibles, para quien le interese, en Internet. Cualquiera de
ustedes que tengan acceso a una computadora, pueden visitar la pgina web de NCEP-NOAA
y obtener un diagrama como el que se muestra en la Figura 10. El pronstico ha sido
evacuado hace slo una semana, el 19 de noviembre. En este se muestra los pronsticos para
los 3, 6 y 9 meses posteriores a la fecha, en este caso agrupados en promedios de 3 meses a la

vez. Esto lo hacemos para ahorrar espacio, puspues es posible conseguir pronsticos
similares mes a mes.

Se muestran dos series en la Figura 10. Los de la izquierda muestran la temperatura absoluta
y en los de la derecha las desviaciones (anomalas) con respecto a lo normal. La Figura
muestra un detalle que fcilmente puede llevar a una interpretacin errnea: aparentemente, a
juzgar por las anomalas, El Nio se habr debilitado en los meses de febrero-abril.
Efectivamente esto puede suceder pero no significa que las lluvias sean menores. Si
analizamos las temperaturas absolutas en el cuadro derecho correspondiente notamos que
stas son mayores que las anteriores. La razn est en que la temperatura normal es ms alta
para esos meses, la que --- an con una anomala menor--- hace que la suma sea mayor.
Como fuera que las lluvias dependen del nivel de la temperatura absoluta y no de la anomala
debemos esperar mayores lluvias en ese trimestre que en el anterior.

Los pronsticos evacuados por NCEP-NOAA nos dan valores de las temperaturas frente a
nuestras costas, pero no nos dicen nada respecto a las precipitaciones, que son las que ms
interesan. Este es un trabajo que nos corresponde a nosotros, los peruanos, hacer. Felizmente
existe una relacin estrecha entre la temperatura del mar frente a nuestras costas y las
precipitaciones, la que nos permite pasar de una a la otra. Esta va ms all de ser una relacin
cualitativa como la descrita al inicio de sta exposicin. La Figura 11 nos muestra esta
relacin para un lugar especifico: la ciudad de Piura. En el diagrama hemos gratificado la
precipitacin acumulada mensual en Piura correspondiente a la temperatura del mar en un
lugar frente a su costa. En ste se ha dibujado un punto para cada mes a partir de 1982. Hay
aproximadamente 180 puntos en total. Cada punto muestra la temperatura y la precipitacin
experimentadas en cada mes. Podemos apreciar que stos se agrupan a lo largo de una curva
que podemos interpretar como la ley numrica que relaciona a una con la otra. La primera
conclusin que resulta de la observacin del grfico es que, salvo una pocas excepciones con
precipitaciones de 30 mm mensuales o menos, en la ciudad de Piura no llueve si la
temperatura del mar en el punto escogido es 27 C o menos. El mayor nmero de puntos caen
en este rgimen y es la razn por la que decimos que el clima normal de Piura corresponde al
de un desierto. La situacin cambia drsticamente cuando esta misma temperatura llega a
28C. A este nivel podemos decir que el clima se tropicaliza y llueve en abundancia. Cuando
la temperatura llega a 29C como lo hizo en 1983, los niveles de precipitacin llegan a
niveles cercanos a los 800 mm mensuales, los que resultan desastrosos en una ciudad como
Piura que no est preparada para ello. La informacin pasada, puesta en forma de esta
relacin emprica, nos permite estimar las precipitaciones futuras si se predice la temperatura
superficial del mar.

La Figura 12 muestra las temperaturas experimentadas hasta el presente y las predichas por el
modelo numrico de NCEP-NOAA para el mismo punto frente a las costas de Paita usados
en la Figura 10. El punto est a unos 400 kms frente a Paita y corresponde al punto ms
cercano para el que hay pronsticos confiables del modelo. El punto no est tan cerca como
hubiera sido deseable, pero el modelo matemtico encuentra dificultades de pronosticar
temperaturas ms cercanas a la costa. Esto se debe a la estructura relativamente fina que se
produce en las temperaturas cerca de la costa como resultado del afloramiento. Felizmente,
durante un Nio, no hay afloramiento de aguas fras y la distancia no parece ser un problema,
como lo muestra la buena correlacin que se ilustra en la Figura 11.
En la misma Figura 12 hemos graficado las temperaturas correspondientes medidas en 1983.
Como se podr apreciar, las temperaturas predichas por NCEP-NOAA no llegan a los niveles
(desastrosos) experimentados en 1983. Las predicciones de NOAA y la curva emprica
mostrada en la Figura 10 nos permiten hacer un pronstico de las lluvias en la ciudad de
Piura. De acuerdo a la curva emprica a las temperaturas predichas le correspondern
precipitaciones tpicas de un Nio fuerte pero sin llegar a los niveles excepcionales de 1983.
El pronstico no debe tomarse como una adivinacin. El modelo de NCEP no es exacto y la
Figura 11 muestra tambientambin una dispersin de los niveles de precipitacin por encima
y debajo de la curva emprica que mejor se le aproxima (ver discusin sobre los pronsticos y
valores reales experimentados en la ltima seccin).
Podemos y deberamos hacer un diagrama similar al de la Figura 11 para otros lugares de la
Repblica. Este esfuerzo est en nuestros planes pero por ahora nos hemos limitado a Piura,
con la idea que las intensidades relativas de las precipitaciones en otros lugares de la costa
sern proporcionales a lo que ocurra en Piura segn las propias experiencias de estos otros
lugares en aos anteriores. Por ejemplo, basados en experiencias pasadas es de esperar que
las lluvias se intensifiquen rpidamente hacia el Norte (Tumbes) y las montaas aledaas al
desierto costeo. Estas deben ser menores hacia el sur.
El umbral de 27 y 28C en la temperatura superficial del mar para la ocurrencia de lluvias
mencionado anteriormente vale slo para lugares con niveles cercanos al nivel del mar. Ante

la ocurrencia de un Nio, llueve entre los 1000 y 3000 m de altura de la vertiente occidental
de los Andes, en la zona norte y central del pas, con temperaturas superficiales del mar uno o
dos grados centgrados menos de los que se requiere a nivel del mar. Esta es la regin con
mayor riesgo de huaycos, los que junto con las inundaciones del norte son las zonas que ms
preocupan por la amenaza de perdidas de vida, propiedad e infraestructura valiosa.
Con excepcin de Puno, no existe una relacin estadstica clara entre El Nio y la
precipitacin en la zona central y vertiente oriental de los Andes, por lo que las predicciones
de la temperatura del mar frente a nuestras costas no nos permiten hacer un pronstico sobre
las precipitaciones en esta zona. Esto es explicable en trminos fsicos, ya que stas regiones
del pas no tienen una comunicacin directa con las variaciones de la temperatura de la costa.
Los aires y humedad a las que estn expuestos provienen de la cuenca atlntica de Amrica.
Si hay algn efecto, se debe a lo que se conoce como "teleconexin" entre los disturbios
atmosfricos en el centro del Pacfico ecuatorial y el clima en diferentes partes del globo. En
el caso de Puno, por ejemplo, se not una correlacin negativa (sequa) con El Nio de 1983,
pero la relacin no es muy clara con eventos de menor intensidad.
Es fcil saltar a conclusiones errneas cuando ocurren fenmenos meteorolgicos
concurrentes con El Nio. Hay la tendencia a echarle la culpa a El Nio por todas las
variaciones climticas que ocurren, sin tener en cuenta que stas pueden ocurrir
independientemente de ste. No se puede generalizar con lo ocurrido en un slo ao, menos
an con lo ocurrido en una sla ocasin. Se sabe que El Nio modifica dramticamente el
clima de la zona aledaa al mar al hacer desaparecer la inversin de temperatura. Pero, fuera
de esta regin de influencia, el efecto en otros lugares no es tan conspicua ni dramtica.
Al FenomenoFenmeno El Nio se le denomina tambin ENSO, por las siglas en ingls de El
Nio - Southern Oscillation (Oscilacin del Sur). Mientras El Nio se refiere a la parte
oceonogrficaoceanogrfica, la Oscilacin del Sur se refiere a un fenmeno meteorolgico
global del que slo recientemente se ha descubierto su relacin con el anterior. Se trata de
una oscilacin de las presiones atmosfricas entre dos lugares del Pacfico caracterizada por
las mediciones hechas en Darwing (Australia) y Tahiti. Las teleconexiones estn ms
relacionadas al segundo fenmeno que al primero.
Hoy en da se sabe que El Nio (ENSO) tambin modifica el clima en otras partes del globo a
travs de la "teleconexin". Las razones fsicas para lo segundo no son tan obvias, pero estn
relacionadas ms con los disturbios atmosfricos globales (sistema global de presiones)
producidos por el cambio en la posicin e intensidad de la gran actividad convectiva en el
centro y poniente del Pacfico ecuatorial (ver Figura 4) que con las temperaturas del mar
frente a las costas de Amrica. Tienen ms relacin con el "SO" de ENSO que con el "EN".
En algunos lugares produce lluvias y en otras sequas, pero para llegar a conclusiones
cientficas vlidas que nos permitan predecir en que sentido va a variar el clima (si lo hace)
necesitamos un estudio estadstico que tenga en cuenta toda la historia pasada del clima en
estos lugares y de como fue afectada por Nios anteriores. En la sierra y montaa del Per
estos estudios se han hecho slo para la regin de Puno [Pablo Lagos, del IGP, comunicacin
personal]. El efecto predecible en otras partes estudiadas de Amrica occidental se muestra en
el mapa de la Figura 13. Este mapa es producto de las conclusiones de una reunin
internacional de expertos convocada en Lima en Octubre de 1997. La terna de nmeros que
se muestran en cada regin coloreada corresponde a las probabilidades, en porcentaje, de que
las lluvias sean menores, iguales o mayores a lo normal. Es claro que en muchas regiones los
pronsticos no son muy contundentes. Las zonas que no han sido coloreadas muestran las
regiones que se han mostrado indiferentes al Nio en el pasado, esto es son regiones con

probabilidades de 33, 33 y 33% para que ocurran cada uno de los tres regmenes de lluvias
mencionados, respectivamente.

FIGURA 13
Eventos fros de ENSO (La Nia)
Hemos descrito lo que ocurre durante El Nio y sus condiciones normales. Sucede que las
temperaturas en el Pacfico ecuatorial hacen a veces, generalmente despus de un Nio,
excursiones a valores 1 a 2 C por debajo de lo normal. El fenmeno es puspues lo opuesto
de lo que ocurre durante El Nio y se produce como un "rebote" de la misma onda Kelvin
que nos trae las aguas calientes durante El Nio. Este se le conoce como un evento fro de
ENSO y ms recientemente como "La Nia". El nombre es nuevo para un fenmeno ya
existente pero que para nosotros pasaba desapercibido como tal. En el lenguaje del norte del
pas se le conoce como un ao seco. El nombre ha sido lanzado obviamente por alguien con
poco conocimiento del idioma, ignorando el origen popular peruano y cristiano de El Nio,
en la bsqueda de un antnimo que signifique lo opuesto (el "anticristo" hubiera sido
igualmente tonto pero ms apropiado). El fenmeno felizmente no acarrea ninguna amenaza.
Beneficia a la pesca y se manifiesta como un ao seco en el norte con una disminucin de los
caudales de los riosros de la costa norte y central del pas. Se predice un evento de esta
naturaleza para fines de 1998 y comienzos de 1999.

Anlisis post-facto a los pronsticos y a lo ocurrido en 1998: Su impacto a los


programas de prevencin.
Las lneas de este captulo se estn escribiendo meses despus de la presentacin que hiciera
yo sobre este tema en el Congreso. He credo conveniente al escribirlo de hacer un anlisis de
lo ocurrido, incluyendo lo sucedido con los pronsticos, en lugar de documentar las
especulaciones que se hicieron en esa ocasin, hoy en da ya extemporneas. Sin embargo
cabe mencionar, como se puede apreciar en uno de los prrafos anteriores que acompaa a la
Figura 12, que a Noviembre de 1997 (y los tres meses posteriores) tanto la ciencia
internacional como el suscrito estuvieron ms optimistas sobre lo que podra ocurrir que lo
que nos depar la naturaleza. Es importante analizar lo ocurrido con los pronsticos con la
esperanza de aprender de la experiencia vivida y mejorar nuestra capacidad de pronstico y
prevencin en el futuro.
Analicemos primero la importancia de mejorar nuestra capacidad de pronstico en todos y
cualquier programa de prevencin que se disee para mitigar los daos que nos puede
acarrear el Fenmeno de El Nio y en el planeamiento de un desarrollo sostenido que no est
expuesto a la destruccin de los avances logrados por fenmenos naturales. Hoy en da el
concepto de "Prevencin" va mucho ms all de la definicin que podamos encontrar en el
diccionario. Existe toda una metodologa a seguir y que conlleva a una toma de decisiones
basadas en la ciencia y consideraciones costo-beneficio.
Una parte importante en un programa de prevencin se refiere a la "evaluacin de los
riesgos". El concepto de "Riesgo" est tomado del lenguaje de las compaas de seguros. En
nuestro caso est relacionado con el "dao" que podamos sufrir por la probable ocurrencia de
un evento (desastre). El riesgo resulta del producto de dos factores: "amenaza" y
"vulnerabilidad". La amenaza se mide por la probabilidad de que ocurra un evento
potencialmente desastroso. Se evala asignando diferentes probabilidades para diferentes
escenarios o intensidades del evento. La vulnerabilidad es el dao potencial (en vidas,
bienestar y dinero) resultante de cada uno de los posibles escenarios del evento. En un
programa de prevencin, el objetivo es el de mitigar los daos, esto es reducir la
vulnerabilidad por medio del planeamiento tanto en el comportamiento social como en la
construccin de obras. La toma de decisiones tiene que balancear el costo de la inversin con
los beneficios obtenidos en la reduccin del dao en un contexto de largo plazo. De ah la
importancia de una evaluacin acertada de los riesgos involucrados.
Una mala evaluacin de los riesgos nos puede llevar a una inversin exagerada y costosa que
no est justificada por la magnitud del riesgo, o a grandes prdidas que pudieron haber sido
evitadas con una inversin de mucho menor costo.
De los dos factores mencionados, no hay nada que podamos hacer para reducir las amenazas;
stas las decide la naturaleza. Lo que s podemos reducir es nuestra vulnerabilidad, la que
resulta de nuestra existencia y obra. Pero, las decisiones que tomemos para ello sern tan
buenas como nuestra capacidad de evaluacin de las primeras. La evaluacin de la
vulnerabilidad de la infraestructura existente o futura, material o social, le corresponde a
ingenieros, economistas y socilogos. La evaluacin de la amenaza que nos presenta El Nio
(o cualquier otro desastre natural) est ntimamente relacionada con nuestra capacidad de
pronstico y le corresponde a la ciencia; de all la razn de mi presencia, como representante
del Instituto Geofsico del Per, en el Congreso. Parte de esta ciencia nos puede llegar de
afuera. Pero no podemos esperar a que los cientficos extranjeros se interesen por todos los
detalles que significa un Nio en el Per. Eso lo tenemos que hacer nosotros.

La amenaza que nos presenta El Nio la podemos evaluar bajo tres escalas de anticipacin:
de ms de uno a decenas de aos, de semanas a aproximadamente un ao, y de horas a varios
das.
En relacin a pronsticos con ms de un ao de duracinantelacin, la ciencia de hoy en da
no nos permite predecir el posible comportamiento del clima (El Nio) con tanta
anticipacin. La evaluacin del riesgo y la amenaza se tiene que basar simplemente en la
estadstica de las diferentes intensidades de El Nio ocurridas en aos anteriores, bajo la
premisa que lo ocurrido en el pasado puede volver a suceder con una recurrencia similar.
Una conclusin que podemos sacar de la experiencia vivida recientemente en 1998, es que
los parmetros de diseo para la construccin de cualquier infraestructura no pueden ser los
mismos que los usados en aos anteriores. Cualquier infraestructura que construyamos o
reconstruyamos hoy en da no puede ser vulnerable a la ocurrencia de un El Nio como el de
1982-83 o el de 1997-98. Si bien en el pasado, an despus de la ocurrencia de El Nio de
1983, podamos justificar econmicamente parmetros de diseo deducidos de mximos de
precipitaciones y caudales ocurridos con recurrencias de 25 a 50 aos, sin contemplar niveles
excepcionales como los experimentados en 1983; la ocurrencia de precipitaciones similares
slo 15 aos despus, nos obliga a usar las cifras registradas en estas dos ocasiones como
nuevos parmetros de diseo. Esto cambiar significativamente el costo de cualquier
estructura que se construya o reconstruya hoy en da (pero que resultara resultar menor si lo
evaluamos a largo plazo).

En este sentido, es interesante discutir y comparar las precipitaciones ocurridas en la ciudad


de Piura en stos dos perodos: los veranos de 1983 y de 1998. Estas se muestran en la Figura
14 en forma de milmetros acumulados por mes, para los meses de diciembre (del ao
precedente) a julio. Se puede apreciar que en ambos las precipitaciones llegaron a casi los
800 milmetros mensuales. Para apreciar la gravedad de estos niveles hay que tener en cuenta
que el promedio normal es de slo unos 10 a 15 mm mensuales y que 100 a 150 mm se
considera ya un mes muy lluvioso, capaz de cubrir al desierto de vegetacin y de producir

grandes avenidas en los ros. Si consideramos el acumulado anual, el ao 1983 sigue siendo
el ms lluvioso. El total de 1998 lleg a los 1800 mm versus 2340 mm en 1983 (las cifras
varan en algo segn el lugar donde se ubica el pluvimetro que se usa). La mayor diferencia
entre los dos aos est en la duracin del fenmeno. La prolongacin de las lluvias a los
meses de mayo y junio en 1983 siguen siendo excepcionales. Por otro lado, el caudal del ro
Piura rompi todos los recordsrcords conocidos con 4300 metros cbicos por segundo
versus 3500 en 1983. El principal efecto de sta diferencia fue la destruccin de dos de sus
puentes que haban, no obstante haber soportado las mximas avenidas de 1983.
En todo caso las diferencias entre los dos aos mencionados no cambian significativamente
los parmetros de diseo que se deben usar en el futuro para obras de ingeniera.
Otro parmetro de importancia para el diseo de el drenaje adecuado de una ciudad, es la
precipitacin mxima en un da. Tal como se muestra en la Figura 15, en ambos
periodosperodos se tuvieron lluvias que llegaron en Piura a los 170 mm por da (los niveles
varan ligeramente segn el lugar donde se encuentre el pluvimetro), suficiente para rebasar
la capacidad de drenaje de la ciudad. El sistema de drenaje, an despus de las obras de
prevencin hechas en 1997, no se dio abasto para este nivel de precipitacin, con
consecuencias desastrosas en muchos predios de la ciudad.

Lo dicho con respecto a Piura tiene su equivalente en todas las otras ciudades del norte del
pas. Nos hemos referido a Piura, a manera de ejemplo ilustrativo, por ser la que mantiene un
mejor registro histrico.
Al hablar de la evaluacin de amenazas en las segunda escala, con anticipacin de hasta un

ao, estamos influenciados por la capacidad de pronstico que nos ofrece la ciencia hoy en
da con respecto a la ocurrencia y desarrollo del fenmeno de El Nio y que hemos
introducido en las pginas anteriores. Pronsticos con ste plazo nos permite la toma de
decisiones no slo para la mitigacin de posibles daos sino tambin para la obtencin de
beneficios. Hay que recordar que no todos los Nios son desastrosos. Podemos mencionar a
manera de ejemplo la decisin de sembrar algodn o arroz con la debida anticipacin, o la
compra de ganado para aprovechar de los pastizales que se forman con las lluvias o la
adecuacin de los instrumentos de pesca a otras especies. La limpieza de cauces y
alcantarillas es un ejemplo de como reducir los daos. Podemos tomar muchos otros ejemplos
de las decisiones que se tomaron a mediados y fines de 1997 en previsin de lo que podra
suceder en la poca de lluvias.
Es interesante, por lo tanto, evaluar retrospectivamente la capacidad de pronstico en sta
segunda escala de tiempo. Hemos visto en las pginas anteriores que el pronstico de las
lluvias se puede separar en dos etapas: el pronstico de las temperaturas superficiales del mar
frente a nuestras costas y el pronstico de las lluvias que stas acarrean conocido el nivel de
temperatura. Para lo primero, dependemos de los pronsticos de los grandes centros de
investigacin como NCEP-NOAA, para lo segundo se ha hecho slo un ejercicio, para la
ciudad de Piura, y que ahora estamos en situacin de evaluar y discutir.

El laboratorio NCEP de NOAA hizo pblico sus pronsticos sobre las temperaturas futuras
de la superficie del mar mes a mes desde antes de que se manifestara la ocurrencia del
presente Nio para los doce meses consiguientes a cada edicin. En la Figura 16 mostramos
los pronsticos de la temperatura de la superficie del mar para un punto en el Pacfico en
particular, el punto frente a Paita mencionado anteriormente. Cada color une los valores
pronosticados con la misma antelacin. Por ejemplo, los colores negro y amarillo muestran
los valores mes a mes predichos con 1 y 3 meses de antelacin, respectivamente. En el mismo
grfico mostramos con cuadrados rojos los verdaderos valores medidos para el mismo punto
en el mar. La similitud entre los valores predichos y la realidad nos muestran la bondad de las
predicciones con una precisin que se ha logrado slo en stos ltimos aos. Por otra parte, si

consideramos la sensibilidad de las precipitaciones en la costa del Per a variaciones de slo


un grado en la temperatura, errores cometidos en los pronsticos de esta magnitud tienen
consecuencias drsticas en el pronstico de las precipitaciones. La Figura 11 nos muestra esta
sensibilidad. Mientras que con un mar a 28C esperamos precipitaciones del orden de 150
mm, para 29C esperamos precipitaciones cercanas a los 800 mm por mes.
Felizmente para mejorar la bondad de los pronsticos en el futuro, no necesitamos un gran
salto en el desarrollo de la tecnologa del modelaje matemtico. Los modelos existentes son
ya capaces de una mejor precisin en otros lugares del Pacfico. La diferencia se debe a la
cantidad de instrumentos que hacen mediciones para alimentar el modelo. Mientras que de la
Isla Galpagos hacia el oeste hay un gran nmero de boyas ancladas midiendo las
temperaturas a diferentes profundidades, as como los vientos en superficie, para este lado del
Pacfico la instrumentacin es muy pobre. La razn es que el clima en el centro del Pacfico
es el que influencia el clima en los EE.UU. y es natural que ellos inviertan en lo que ms les
afecta e interesa. Si el Per quiere mejorar su capacidad de pronstico debe invertir en
mejorar la instrumentacin y el pronstico en las zonas que nos afectan. El Instituto
Geofsico del Per, la Universidad de Piura y la Direccin de Hidrografa y Navegacin de la
Marina han elaborado una propuesta al Banco Mundial para mejorar la instrumentacin en
nuestras costas, lo que junto a un mejor modelado regional debe mejorar sustancialmente la
calidad de los pronsticos frente a nuestras costas.
An si conociramos la temperatura del mar con gran precisin, sto no garantizara la
posibilidad de pronstico de las precipitaciones en forma exacta. La misma Figura 11 muestra
que para una misma temperatura es posible diferentes precipitaciones, aunque centradas
alrededor de un cierto nivel. Los puntos rojos mostrados en la Figura 11 muestran las
temperaturas y precipitaciones experimentadas en 1998. Es claro que stas han sido
sistemticamente ms elevadas que lo que se esperara de la experiencia de aos anteriores.
Aqu tambin podemos mejorar nuestra capacidad de pronstico. Recientemente hemos
encontrado una relacin emprica que mejora la precisin del pronstico. Esta hace uso de
cuatro temperaturas del mar, al frente, norte y sur del punto en cuestin (Piura, en el caso
desarrollado) y del mes que se quiere pronosticar. El mtodo hace uso de una herramienta
estadstica conocida como "regresin multivariable". El resultado de esta relacin emprica se
muestra en la Figura 17. En sta se muestra (en rojo) la prediccin de las precipitaciones en
Piura en funcin de las temperaturas del mar en cuatro puntos especficos (frente a
Guayaquil, Talara, Paita y Chicama) para un mes dado de acuerdo a la formula mencionada,
junto con la realidad medida en el mismo mes (en negro). La similitud entre las dos curvas
significa que una prediccin de las temperaturas del mar en los puntos mencionados nos
permitira predecir el nivel de las precipitaciones con errores del orden de 100 mm al mes, en
los casos de lluvias intensas (600 a 800mm), y de unos 30 mm en las lluvias leves (menores
de 100 mm al mes). Estos errores no tendran mayor consecuencia en la toma decisiones
basadas en los valores predichos. Aos secos, sin precipitaciones, se podran predecir con an
mayor precisin. Habra que extender lo hecho para Piura para las otras ciudades y regiones
del pas.

Hasta ahora hemos discutido pronsticos climticos, esto es las variaciones de variables
meteorologicasmeteorolgicas en escala de tiempos correspondientes a un ao, estacin o
mes. Nuestra capacidad de prediccin de lo que ocurrir en un ao o en un mes no nos dice
nada de las variaciones da a da del tiempo. El grfico de la Figura 15 nos muestra como en
un mes dado, con un clima ya definido, las lluvias varan da a da, mientras que durante
varios das el nivel puede ser de 0 mm, en un da posterior puede llegar a mas de 100 mm .
Variaciones a sta escala se les conoce como cambios en el "tiempo" a diferencia de las
variaciones en el promedio que se conoce como clima.
En los ltimos meses hemos dado un gran paso en nuestra capacidad de prediccin del
tiempo en esta escala de anticipacin. El Instituto Geofsico ha desarrollado la capacidad de
prediccin del tiempo implementando un modelo numrico moderno y sofisticado
desarrollado por el Nacional Center for Atmospheric Research (NCAR) de los EE.UU. de
Amrica conocido como el modelo MM5. El modelo permite predecir el tiempo en una
regin (departamento, pas o continente) con das de anticipacin. Una discusin del modelo
y los beneficios que nos trae va ms all del tema que nos concierne: El Nio. Estamos
seguros que no escapar al lector la importancia de esta capacidad en relacin a la mitigacin
de los daos y el mejor aprovechamiento de los beneficios que nos trae El Nio, y la
prediccin del tiempo en general. Lo que s no quisiramos dejar de mencionar es que sta
gran capacidad que nos trae la ciencia moderna no la podemos aprovechar al mximo de su
potencial, nuevamente por nuestra insuficiencia en alimentar al modelo adecuadamente con
los datos meteorolgicos del presente para una mejor prediccin del futuro. Nuestra
propuesta al Banco Mundial incluye el financiamiento para mejorar esta capacidad mediante
estaciones meteorolgicas automticas que enviaran sus datos por medio de satlites
cientficos de comunicacin. Los resultados de la prediccin del tiempo se estn publicando
ya, diariamente, por Internet en las pginas web del IGP (http://www.igp.gob.pe).
El modelo MM5 adquirido nos permitir tambin hacer investigaciones climticas simulando
anticipadamente las diferentes condiciones que se presentan durante la ocurrencia de un
Nio. No necesitamos esperar la ocurrencia de El Nio para aprender lo que sucede o podra
suceder, puspues estamos en la capacidad de simular en la computadora las condiciones que

interesen y observar el comportamiento en el modelo.


Para terminar quisiera resumir diciendo que la ciencia a nivel internacional ha avanzado
mucho en la comprensin de los procesos fsicos que dan lugar a las diferentes
manifestaciones del fenmeno El Nio. El avance permite predecir con bastante precisin el
comportamiento de las temperaturas del mar frente a nuestras costas. Estas a su vez, con
metodologa estadstica o simulacin digital nos permitir pronosticar el nivel de
precipitaciones en diferentes lugares de la costa para diferentes condiciones del fenmeno.
Las precipitaciones son muy sensibles a pequeas diferencias en la temperatura del mar
cuando stas se acercan a los 28-29, esto es a los niveles que corresponden a Nios de
intensidad extraordinaria. Esto requiere mejorar la calidad de los pronsticos mejorando y
modernizando la instrumentacin de los parmetros oceanogrficos y meteorolgicos del pas
y al uso de las mismas tcnicas de modelacin a una escala ms reducida ya sea a nivel
nacional o regional. Se requiere tambin un mayor esfuerzo en las actividades de
investigacin para mejorar nuestra capacidad de pronstico, elemento indispensable en
cualquiera de los programas de prevencin. Tanto la mejora de la instrumentacin y nuestra
capacidad humana es una actividad que nos toca a nosotros, los peruanos, ejecutar. Esto ser
posible slamente si se cuenta con el apoyo estructural, poltico y financiero del Estado.
Bibliografa
1. Eguiguren, V. "Las lluvias en Piura", Boletn de la Soc. Geogrfica de Lima, , Tomo
IV Nos. 7, 8 y 9, 1894.
2. Woodman, Ronald F., "Recurrencia del Fenmeno El Nio con Intensidad Comprable
a la del Nio 1982-1983", Ciencia Tecnologa y Agresin Ambiental: El Fenmeno El
Nio", CONCYTEC, Calle del Comercio 197, San Borja, pp.301-332, 1983.
3. Mabres, A.; Woodman, R. y Zeta, R., "Algunos Apuntes Histricos Adicionales sobre
la Cronologa de El Nio", Bull. Inst. Fr. Etudes Adnines, pp. 395-406, 1993.
Lectura complementaria
4. Glantz, M.H. (convenor), "A Systems Approach to ENSO: Atmospheric, Oceanic,
Societal, Environmental, and Policy Perspectives", Report of Colloquium held on July
1 in Boulder, Colorado. Boulder: Environmental and Societal Impacts Group,
National
Center
for
Atmospheric
Research,
1997.
Website:
http://www.dir.ucar.edu/esig/enso.
5. Glantz, M.H., "Curents of Change: El Nios Impact on Climate and Society,
Cambridge Press, 1996.
6.
Arntz, Wolf E., Fhrbach, E., "El Nio: Experimento Climtico de la
Naturaleza", Impresora y Encaudernadora Progreso S.A. de C.V. (IEPSA), Calzada de
San Lorenzo, 244, 09830 Mexico, D.F., 1996.

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