Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

El Periodismo de Investigación

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 151

1

Pgina

EL PERIODISMO DE
INVESTIGACIN
ROBERTO PAREDES

2
Pgina

PRESENTACIN

El trabajo est dirigido sobre todo a profesionales de la prensa y


estudiantes de la carrera de Periodismo. Fue elemento motivador
para su elaboracin la falta de materiales completos sobre la
materia en lengua espaola.
El curso desarrollado en las unidades que componen el libro se
adecuan enteramente a los programas vigentes en el Paraguay y
en otras latitudes, agregando consideraciones y opiniones sobre
temas que vienen siendo debatidos entre acadmicos, profesionales y observadores de la prensa.
Su empleo es fcil:
- Cada Unidad es un desarrollo completo, puntual,
- Se tiene una sntesis de cada Unidad, a modo de ayuda memoria, y
- Se agrega unas Indicaciones para la lectura, de modo a que
el lector pueda recurrir a textos complementarios.
El periodismo de investigacin est en una fase ascendente,
pero hay un proceso de construccin terica aun abierto, que
permite a todos realizar aportes en los diferentes mbitos, ya
sean generales o puntuales.
Un elemento didctico, que recoja y sistematice lo avanzado, coloque las cuestiones en discusin con cierta claridad y aporte algunas consideraciones y reflexiones sobre los diversos temas era
una necesidad. La presente obra apuesta a cubrir ese vaco.
El Autor

3
Pgina

INDICE
UNIDAD I - El periodismo de Investigacin. 4
UNIDAD II - Relevancia del periodismo de investigacin.
16
UNIDAD III - El proceso de investigacin. 30
UNIDAD IV - La unidad de investigacin. 38
UNIDAD V - Las fuentes. 45
UNIDAD VI - Tcnicas de investigacin periodstica. 55
UNIDAD VII - Rigor y tica en las investigaciones. 68
UNIDAD VIII - El periodista investigador. 78
UNIDAD IX - Seguridad del periodista investigador. 94
UNIDAD X - Base
instrumental. 102

documental,

archivos

apoyo

UNIDAD XI - La publicacin de la investigacin. 108


UNIDAD XII - El seguimiento. 117
UNIDAD XIII - El signo ideolgico del periodismo de
investigacin. 123
BIBLIOGRAFA BSICA. 135

4
Pgina

UNIDAD I
EL PERIODISMO DE INVESTIGACIN
1. El periodismo interpretativo. 2. El periodismo de investigacin.
3. Despejando dudas sobre una polmica abierta. 4. Diferencia
con otros tipos de periodismo. 5. El periodismo de investigacin
y otras investigaciones. 6. Races histricas remotas. 7. Races
histricas recientes.
1. El periodismo interpretativo
A comienzos de siglo XX el periodismo de opinin, predominante
hasta ese entonces, cedi espacio para el desarrollo del periodismo informativo, el que bsicamente planteaba responder a
las preguntas qu?, quin?, cmo?, cundo?, dnde?.
Se buscaba, en lo fundamental, ofrecer a la opinin pblica la
informacin veraz, fiel e imparcial sobre los sucesos que se
daban en las ms diversas esferas en el momento, dejando la
libertad al lector para interpretar las diferentes situaciones o
para asumir posturas con respecto a las mismas. No eran
funciones del periodismo -se coincida- interpretar ni opinar
sobre los sucesos.
A esta modalidad se le dot de una tcnica de redaccin que
rpidamente gan universalidad: la de la pirmide invertida, que
bsicamente consisti en resumir sumariamente la noticia en el
primer prrafo o lead, para despus ir desarrollando la informacin conforme un esquema simple: se transitaba desde lo ms
importante hacia lo menos importante.
Hechos histricos trascendentales como la Primera Guerra
Mundial, la Revolucin Rusa, el surgimiento del fascismo, la crisis

Pgina

del 30 y la Segunda Guerra Mundial, sin embargo, dejaron al


periodismo informativo con insuficiencias manifiestas para responder a las exigencias de los lectores, que sobre todo pasaron a
querer saber por qu sucedan las cosas.
Y al encuentro de la necesidad de responder al por qu? surgi
el periodismo interpretativo, con diversas modalidades, pero
todas apuntando a satisfacer la sentida necesidad de saber por
qu se daban los hechos, en qu contexto, y qu perspectivas de
evolucin tenan.
El reportaje cubri satisfactoriamente tales requerimientos, siendo la expresin ms acabada del periodismo interpretativo en un
comienzo. Pero despus surgieron otras modalidades, con
caractersticas ms especficas, que fueron respondiendo a
necesidades y requerimientos tambin ms especficos, como el
periodismo de precisin y el periodismo de investigacin.
Los canales siguieron siendo los mismos: los diversos medios de
comunicacin, pero los tipos de periodismo que se fueron practicando fueron ganando su particular perfil.
A modo de definiciones que diferencian los diversos tipos de periodismo, el siguiente glosario es ms que suficiente:
Periodismo informativo: consiste en la prctica de comunicar objetivamente sobre lo que sucede o va a suceder en las diversas
esferas de la vida social (Noticias, hechos o procesos nuevos).
Periodismo interpretativo: consiste en la actividad orientada a
explicar de manera objetiva por qu suceden las cosas, el
contexto en que se dan y las perspectivas de evolucin que
presentan (Reportajes, sobre todo, sobre hechos o procesos
recientes o lejanos).
Periodismo de opinin: consiste en comunicar reflexiones subjetivas acerca de un hecho o un proceso que se est dando o
que se dio (Editoriales, comentarios, crticas, puntos de vista
subjetivos sobre hechos o procesos recientes o lejanos).
La materia que especficamente se abordar en este curso es el
periodismo de investigacin -una suerte de modalidad del periodismo informativo-, prctica que ha ganado mucha fuerza en

2. El Periodismo de Investigacin

Pgina

las ltimas dcadas, y que por su trascendencia, repercusiones y


alcances, ha otorgado a la prensa funciones ntidamente nuevas.

El periodismo de investigacin es una de las modalidades del


periodismo interpretativo, que tiene tres elementos que lo definen con claridad y lo diferencian de cualquier otra modalidad
periodstica:
1. Es un trabajo realizado por un periodista, que
2. Trata sobre un tema de inters social, y que
3. Busca revelar algo que alguna persona o grupo trata de
ocultar
Es un trabajo realizado por un periodista: la iniciativa autnoma del periodista se inicia con la eleccin del tema o asunto a
ser investigado y termina con la publicacin del resultado, pasando por la realizacin de todo lo relacionado con el proceso de
investigacin. Lo fundamental, en ste punto, es entender que el
trabajo debe ser realizado por el periodista, no por un tercero.
Pero tambin hay que entender que a diferencia de lo que ocurre
con los trabajos publicados por periodistas que desempean la
funcin de comunicadores de noticias, en el informe del periodismo investigativo hay mucha elaboracin propia del periodista;
nivel de elaboracin que no caracteriza a los informes cotidianos
de los que cubren los hechos del da a da, por una parte, y que
exigen del periodista un nivel de entrenamiento y de preparacin
ms completo, por otra parte.
Trata sobre un tema de inters social: el asunto a ser investigado debe ser de inters real para la sociedad, debiendo
evitarse la investigacin de casos o temas que sean
objetivamente irrelevantes. Esto tiene que ver, en realidad, con
el sentido de oportunidad que el periodista de investigacin
debe tener, pues existen temas que en determinadas
circunstancias pueden ser relevantes y en otras resultar
intrascendentes.
Pero tambin implica -a diferencia de lo que se practica en el
Investigacin, pues el Periodismo Informativo, por su misma

Pgina

razn de ser informa sobre hechos que pueden o no ser de


inters social, pero sobre los que se debe comunicar porque
sucedieron, por un lado, y en cuanto a que el trabajo debe ser
realizado por el periodista y no por terceros se debe tener en
cuenta que en un informe de investigacin periodstica hay
mucha elaboracin, mientras que en las crnicas y otros gneros
el peso de la elaboracin propia del periodista es marcadamente
menor.
De todos modos, el tercer elemento es el que marca radicalmente la diferencia, pues el objeto del periodismo de investigacin es un hecho o proceso que deliberadamente se mantiene
oculto de la opinin pblica, y no hace falta extenderse en
argumentos para comprender que el grueso de las informaciones
periodsticas trata sobre hechos o procesos que no se pretenden
ocultar.
4. Diferencia del periodismo de investigacin de otros tipos de
periodismo
Se practican, bsicamente, tres tipos de periodismo: el informativo, el de opinin y el interpretativo.
La actividad conocida como periodismo informativo consiste en
el proceso que encierra la captacin, la elaboracin y la divulgacin de las noticias, o sea de los hechos que suceden o estn
sucediendo en el momento. Hay medios de comunicacin que
son ms veloces para la transmisin de ciertas noticias, como las
emisoras radiales y los canales de televisin, que son capaces de
transmitir al vivo una infinidad de noticias, como un partido de
ftbol, el discurso de un poltico, un enfrentamiento entre manifestantes y policas, la realizacin de un allanamiento, la actuacin de un artista,...
La prensa, sin embargo, pierde en velocidad para los otros medios, pero los aventaja con la utilizacin de otros elementos
compensatorios. Compensa a travs de una informacin ms
completa, por ejemplo, contextualizando la noticia y refiriendo
sus antecedentes inmediatos. Otra ventaja aporta el hecho de su
carcter permanente, que permite ser fcilmente archivado y
consultado cuantas veces sea necesario. Una distraccin
pasajera, por ejemplo, puede hacer que uno pierda parte de la
informacin transmitida por la radio o la televisin, pero la

Pgina

lectura de una nota periodstica se puede repetir hasta


inmediatamente, cuando por algn motivo no se capt
claramente el contenido de la informacin.
La actividad consistente en la emisin de juicios de valor sobre
sucesos o procesos a travs de los medios de comunicacin es el
periodismo de opinin. Puede tratar sobre diversos temas: un
partido de ftbol, un suceso o proceso poltico, econmico, social, judicial, policial, cultural,...
A diferencia de los periodismos informativo e interpretativo, el
de opinin resalta por la subjetividad de su contenido. De ah
que el oyente, televidente o lector puede coincidir parcial o totalmente, o disentir parcial o totalmente con las opiniones emitidas
por los periodistas. Emisor y receptor, en este caso, pudieron haber visto lo mismo: un partido de ftbol o el enfrentamiento
entre manifestantes y la fuerza pblica, y tener opiniones parcial
o enteramente coincidentes, o parcial o totalmente divergentes.
De todos modos, el periodismo de opinin tiene la finalidad
terica de aportar orientaciones para entender mejor un suceso
o proceso, pero por lo general expresa lisa y llanamente el punto
de vista del medio concreto que vehiculiza la opinin sobre el
asunto en cuestin.
Valoraciones objetivas-imparciales y fidedignas-, vehiculizadas a
travs de informes periodsticos ms completos, que refieren
antecedentes, detalles desconocidos de sucesos y procesos, y
dan pistas sobre posibles evoluciones de los mismos, configuran
lo que se ha dado en llamar periodismo interpretativo.
El periodismo interpretativo sale al encuentro de la manifiesta
necesidad de los receptores de tener un panorama ms
completo sobre un suceso o proceso, o aun de acceder al
conocimiento de hechos que le eran enteramente desconocidos.
Su prctica se realiza a travs de diversas modalidades, que
responden a diversas necesidades, y van desde el reportaje
hasta el periodismo de investigacin, pasando por el periodismo
en profundidad y el periodismo de precisin.
Cada tipo de periodismo, finalmente, requiere de tcnicas diferentes, tanto para la captacin de la informacin, como para la
elaboracin y la divulgacin. De manera general:

Pgina

el periodismo informativo muestra o comunica sobre lo que


pasa,
el periodismo interpretativo muestra lo que se sabe acerca
de lo que pasa, y
el periodismo de opinin expresa lo que se cree
-subjetivamente - acerca de lo que pasa, cuyo pre-conocimiento
se asume. Para completar la vigencia de otros tipos de
periodismo hay que referir que se practican, tambin, pero con
alcances ms limitados:
el periodismo sensacionalista, que apuesta a impactar a
segmentos de la opinin pblica, explotando en casos concretos
la morbosidad,
el periodismo alternativo, que apuesta a vehiculizar
informaciones sobre problemticas que no son tratadas por la
gran prensa, por lo menos de manera central, y
el periodismo vindicativo, que equivale a algo as como un
periodismo militante, consistente en la promocin de determinados ideales, como ser los peridicos ambientalistas o feministas.
El Periodismo de Investigacin es una modalidad del Periodismo
Interpretativo, con particularidades que las diferencian de otras
modalidades del mismo tipo de periodismo, como ser el
reportaje o el periodismo de precisin.
5. Periodismo de investigacin y otras investigaciones
La actividad investigativa en periodismo utiliza mtodos y elementos propios de otras investigaciones, pero se diferencian radicalmente de ellas en cuanto a su finalidad, que consiste esencialmente en revelar informaciones que se mantienen ocultas.
Las investigaciones policiales apuestan a esclarecer casos criminales, valindose para tal finalidad de tcnicas muy particulares, creadas para el efecto. Por ejemplo, la prueba de la parafina
puede demostrar que una persona dispar, o un cabello de
muestra puede ayudar a identificar a una persona que particip
de un hecho delictivo, o de acuerdo con la ubicacin del cuerpo
de la vctima y las perforaciones, es posible determinar con alta

Pgina

10

precisin la trayectoria de un proyectil. Los policas


investigadores, en sntesis, son entrenados para aclarar casos
criminales; los periodistas de investigacin no.
Resulta irresponsable y temerario, de hecho, que los periodistas
se inmiscuyan en investigaciones policiales con la intencin de
esclarecer casos criminales, pues carecen de las tcnicas y del
entrenamiento adecuado para hacerlo; como igualmente resultara peligroso que investigadores policiales se metiesen a realizar
investigaciones periodsticas.
Hay casos, sin embargo, en que periodistas de investigacin
penetran en el terreno de la investigacin policial, resultando sus
trabajos y conclusiones en mayores confusiones que en aportes
positivos, tanto al nivel de la investigacin del caso, propiamente, como en el mbito de la opinin pblica.
La investigacin judicial -realizada de acuerdo a normas estrictas- dirige el trabajo de los investigadores policiales y judiciales para el esclarecimiento de ilcitos varios, ya sean penales o
econmicos. El periodismo de investigacin puede hasta llegar a
proveer informaciones claves para el inicio de una investigacin
judicial, pero no puede substituirla, porque ni est preparada
para ello, ni tiene la autoridad para hacerlo.
La investigacin sociolgica -realizada de acuerdo a tcnicas
especiales- se ocupa de estudiar comportamientos y problemticas sociales, generales o sectoriales, tratando de explicar
determinados cuadros o conductas. Para hacerlo, el socilogo
est dotado de una preparacin especial, tanto desde el punto
de vista terico como tcnico. Pero adems de estas
particularidades, la diferencia con el periodismo de investigacin
sobre todo radica en que el objeto del ltimo es tornar pblico
informaciones que se ocultan.
Por dar un ejemplo: tanto un periodista investigador como un
socilogo pueden coincidir en la investigacin de un tema: la criminalidad, pero los abordajes y enfoques sern diferentes. El periodista investigador revelar detalles y aspectos desconocidos
sobre el tema; el socilogo buscar explicar las razones del fenmeno.

Pgina

11

La investigacin econmica es an ms diferente, pues el economista podr buscar y encontrar explicaciones para problemas
macro o micro-econmicos desde una perspectiva totalmente diferente del periodista investigador. Un mismo tema, por ejemplo,
podr dar lugar a trabajos e informes enteramente diferentes:
Deuda externa. Mientras el economista buscar explicar por qu
se recurre al crdito externo para costear determinadas obras, el
periodista investigador podr revelar cmo se usaron en realidad
tales recursos, o cunto se pago en comisiones a los intermediarios del pago de la deuda.
La investigacin cientfica es radicalmente diferente, pues el
cientfico, cualquiera sea su especialidad, est dotado de conocimientos, tcnicas y equipos que le permiten desarrollar su especial trabajo. Obviamente que el periodista investigador puede revelar, por ejemplo, que el empleo de tal o cual descubrimiento
no
result
tan
positivo
como
se
anunciaba,
pero
categricamente no est preparado ni equipado para realizar
investigaciones cientficas.
Estas precisiones resultan importantes realizar, pues no es raro
que periodistas de investigacin intenten incursionar en otros tipos de investigaciones, desdibujando severamente la finalidad,
el carcter y el alcance de tan importante actividad periodstica.
Se pretende explicar dichas incursiones con el argumento de que
sobre todo en los pases pocos desarrollados las investigaciones
policiales y judiciales resultan insatisfactorias, pero dicho argumento no justifica el hecho grave de contaminar la actividad
periodstica con acciones para cuya realizacin los periodistas no
estn debidamente preparados ni equipados. Es ms: las experiencias concretas, salvo rarsimas excepciones, suelen terminar
en ni resolver los casos, ni en ofrecer mayor claridad a la opinin
pblica sobre los mismos.
6. Races histricas remotas
Como antecedentes remotos del periodismo de investigacin se
tienen los trabajos realizados en los Estados Unidos, entre finales
del siglo XIX y comienzos del siglo XX, que se publicaban por
medio de libros o en revistas, y que apuntaban a sacar a luz hechos que se mantenan fuera del conocimiento de la opinin pblica.

Pgina

12

En el mbito estructural, el perodo histrico en que se desarroll


tena como rasgo dominante el acelerado proceso de constitucin de los grandes monopolios -empresas gigantescas que
se tornaban hegemnicas en sus respectivos ramos de
actividad-, que ms adelante vendran a constituirse en los
elementos dominantes de las economas de los pases
capitalistas industrializados.
Dicho proceso conllev situaciones violentas, pues se arruinaron
muchas empresas pequeas y medianas. Y como ocurre con
todo proceso de transformacin, estuvo rodeado de conflictos de
intereses; conflictos que sobretodo se dieron entre quienes
representaban la realidad emergente y quienes hacan parte de
la que estaba siendo literalmente eliminada.
Los liberales ortodoxos, con el abierto apoyo de los empresarios
pequeos y medianos, ensayaron una fuerte resistencia,
dictndose leyes anti-monoplicas, pero las mismas rpidamente
se convirtieron en letra muerta pues el proceso de concentracin
del capital result tan arrasador que termin arrojando al
capitalismo de libre competencia al basurero de la historia.
Paralelamente, en el mbito gubernamental Estados Unidos
atravesaba por un momento muy crtico, de mucha corrupcin.
Los hechos escandalosos se sucedan con frecuencia, sacudiendo
con fuerza a la opinin pblica.
Ambos procesos se apoyaron para favorecer el desarrollo de un
nuevo tipo de periodismo, que fuese ms all de la noticia,
que se mostrase capaz de revelar sin maquillajes los desmanes
del poder y las nuevas inequidades sociales.
Petra Secanella resume en dos brillantes prrafos lo que fue la
experiencia. ... los muckrakers: la banda de escritores que, a
principios de este siglo (El XX), expusieron pblicamente la corrupcin del Gobierno, de las grandes empresas y la compararon
con las mseras condiciones de vida de la poblacin. Era el gran
momento del populismo poltico norteamericano. El New York
Times tuvo a Boss Tweed como reportero ms representativo de
esta lnea. Joseph Pulitzer, en el New York World, inici la cruzada
contra los polticos corruptos. Jacob Riis descubri escndalos del
mercado inmobiliario de la ciudad de Nueva York.

Pgina

13

La edad de oro de los muckrakers fue de 1902 a 1912, y su


trabajo se public sobre todo en revistas y libros. La poca fue
de gran auge econmico, de notable expansin imperial de los
intereses norteamericanos. Se corresponde con los mandatos de
Th. Rossevelt y Taft. Son aos de tusa intenssima corriente
inmigratoria, de luchas sindicales enconadas, de lacerante
corrupcin. Lincoln Steffens revel la corrupcin en las grandes
ciudades. Ida Tarbell descubri las entretelas y manipulaciones
del siglo: John D. Rockefeller y la creacin del imperio de la
Standard Oil...
El presidente Theodore Rossevelt -de amplia ascendencia sobre
la opinin pblica norteamericana- cuestion dicha forma de
periodismo, llamando de muckrakers (cavadores que sacan la
suciedad a flor de tierra) a los que la practicaban.
En parte por el descrdito promovido desde arriba, y en parte
por una desviacin sensacionalista que perme tal tipo de periodismo, la experiencia fue perdiendo popularidad y fuerza, llegando prcticamente a desaparecer.
7. Races histricas recientes
El declinio de la prctica se expres en una ausencia que sobre
todo fue marcada entre 1920 y 1950; luego volvi a reaparecer.
En los aos 70 se destac Nicholas Cage, entre otros,
investigador del The New York Times, quien entre otras cosas
public acerca de la donacin de dinero para la campaa de
Richard Nixon por parte de la corporacin ITT.
Otro investigador, Saymour Hersh sac a luz uno de los casos
ms chocantes, que consisti en la publicacin acerca de la
muerte de civiles en la guerra de Vietnam, partiendo de la
investigacin sobre la matanza de May-Lai.
El nuevo periodismo de investigacin, sin embargo, encontr
apenas en el caso Watergate el impulso necesario para
implantarse de manera firme y dar pie a una amplia expansin.
Sobre un hecho policial aparentemente irrelevante inform toda
la prensa estadoumidense en julio de 1972: cinco personas
haban tratado de ingresar a un local del Partido Demcrata,

Pgina

14

encontrndose en poder de los mismos algunos instrumentos


altamente sofisticados, como ver micro-grabadoras.
Dos periodistas del Washington Post, Carl Bernstein y Bob
Woodward, posiblemente con alguna pista acerca del alcance de
la operacin, hicieron un trabajo especial sobre el tema, que se
prolong durante un ao. El trabajo apuntaba a demostrar que
algo de profundamente ilegal se movi desde arriba, con la
intencin de espiar al Partido Demcrata, por entonces fuera de
la administracin gubernamental.
El tema fue exclusivamente seguido por el Washington Post, sin
que los dems medios le diesen importancia. Sin embargo,
cuando uno de los detenidos, James McCord, ex agente de la CIA,
se dispuso a hablar y termin confirmando la veracidad de lo que
se vena publicando a travs del referido diario, la noticia sacudi a todos los medios y a la opinin pblica, con lo que se abri
un rpido proceso que concluy con la renuncia del presidente
Richard Nixon.
El caso Watergate -desde el punto de vista poltico- provoc la
cada del presidente de la primera potencia mundial.
Y desde el punto de vista estrictamente periodstico, result
determinante para implantar el periodismo de investigacin,
como un instrumento de nuevo tipo, capaz de promover cambios
trascendentales.
Pero como no todo lo que brilla es oro, se hicieron investigaciones sobre la investigacin de Bernstein y Woodward para demostrar que tal fuente no exista, o que tal informacin haba
sido entregada de tal modo y no obtenida de otro modo,
desmitificando el trabajo de los periodistas que surgieron como
verdaderos hroes despus de la explosin del caso Watergate.
Pero por ms que fuera cierto que la investigacin no se haya
ajustado enteramente a la versin dada por Carl Bernstein y Bob
Woodward, lo cierto es que 1) el trabajo de ambos periodistas
constituy objetivamente el punto de partida de la prctica de
un periodismo de nuevo tipo, 2) lo que se expres de manera
inequvoca a travs de la adhesin de miles de jvenes
periodistas a dicha prctica, 3) lo que, finalmente, termin
favoreciendo la implantacin del nuevo periodismo.

Pgina

15

Un poco antes de que saliera a luz el caso Watergate, el diario


estadounidense The New York Times haba publicado los Documentos del Pentgono sobre la guerra de Vietnam, lo que haba sacudido fuertemente a la opinin pblica internacional. No
obstante, por lo del desenlace -la renuncia de Nixon-, el caso
Watergate se introdujo a la historia del periodismo como punto
de partida ms reciente de la prctica investigativa.
SNTESIS
1. El periodismo interpretativo: El periodismo de opinin preeminente hasta finales del siglo XIX, cede ante el desarrollo del
periodismo informativo, a comienzos del siglo XX. Hechos y procesos relevantes, como la Primera Guerra Mundial, la Revolucin
Rusa y la Crisis del 30, tornan ms exigente a la opinin pblica,
que adems de saber quiere entender por qu suceden las
cosas; surge el periodismo interpretativo.
2. El periodismo de investigacin: El periodismo de investigacin
es una de las modalidades del periodismo interpretativo, que
tiene tres elementos que lo definen con claridad y lo diferencian
de cualquier otra modalidad periodstica:
a. Es un trabajo realizado por un periodista, que
b. Trata sobre un tema de inters social, y que
c. Busca revelar algo que alguna persona o grupo trata de ocultar.
3. Despejando dudas sobre una polmica: Gabriel Garca
Mrquez introdujo un elemento polmico en el marco del debate
sobre el periodismo de investigacin, al decir que todo buen periodismo es investigativo. Su postura no resiste el menor anlisis,
pues existe periodismo informativo y periodismo de opinin, que
no requieren de investigacin alguna para su buen ejercicio.
4. Diferencia con otros tipos de periodismo: El periodismo
informativo muestra o comunica sobre lo que pasa; el periodismo interpretativo muestra lo que se sabe acerca de lo que pasa;
y el periodismo de opinin expresa lo que se cree
-subjetivamente - acerca de lo que pasa, cuyo pre-conocimiento
se asume. Otras prcticas periodsticas son el sensacionalismo,

Pgina

16

el periodismo alternativo y el periodismo militante. Cada cual


tiene un perfil bien definido.
5. El periodismo de investigacin y otras investigaciones: El
objetivo especfico del periodismo de investigacin es revelar informaciones que se mantenan ocultas, elemento que lo
distingue y diferencia de otras investigaciones, como las
policiales, judiciales, sociolgicas, econmicas o cientficas. El
periodista no est dotado del entrenamiento adecuado ni del
instrumental apropiado para incursionar en otros tipos de
investigaciones.
6. Races histricas remotas: Surgi entre finales del siglo XIX y
comienzos del 20, en un marco histrico peculiar, cuyos rasgos
distintivos fueron el surgimiento de los monopolios como factores dominantes del desarrollo en lo econmico y la corrupcin
gubernamental desenfrenada en lo poltico. El sensacionalismo y
el desgaste hicieron que la prctica perdiese fuerza.
7. Races histricas recientes: Despus de una prolongada ausencia, 1920/ 1950, la prctica fue retomada. En los aos 70 se
realizaron varias revelaciones sobre la guerra de Vietnam. Pero
fue el caso Watergate, que termin con la cada de Richard Nixon
del poder, el que se constituy en el firme punto de partida del
periodismo de investigacin contemporneo.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
QUESADA, MONSERRAT. La investigacin periodstica. Editorial Ariel, Espaa, 1987. Captulos 3 y 4; pginas 31 al 49.
REYES, GERARDO. Periodismo de Investigacin. Trillas, Mxico, 1996. Captulo 1; pginas 11 al 44.
RIO REYNAGA, JULIO DEL. Periodismo interpretativo: el reportaje. Trillas, Mxico, 1994. Captulo 1, pginas 9 al 19.
SECANELLA, PETRA M. Periodismo de investigacin. Editorial
Tecnos, Espaa, 1986. Captulo 4; pginas 33 al 38.

17
Pgina

UNIDAD II
RELEVANCIA DEL PERIODISMO DE INVESTIGACIN
1. Distorsiones funcionales e investigaciones. 2. Lmites
ampliados. 3. Cerco a la corrupcin. 4. Delitos contemporneos
5. Desarrollo democrtico. 6. Desarrollo social. 7. Consciencia
social crtica y participacin.
1. Distorsiones funcionales e investigaciones

Pgina

18

El periodismo de investigacin ha resultado de mltiple importancia para el control de las distorsiones funcionales, por lo
que se ha constituido en una prctica insoslayable sobre todo en
los pases que soportan pesadas distorsiones, las que para ser
minimizadas o eliminadas, precisan ser desnudadas.
No hay esfera de la vida social que no pueda ser investigada
periodsticamente: desde los manejos administrativos gubernamentales hasta las prcticas privadas fraudulentas, pasando por
un inmenso abanico de procedimientos y comportamientos pblicos y privados, generales o puntuales.
Es importante precisar, sin embargo, los alcances del periodismo
de investigacin, de modo que no se magnifique ni se minimice
su prctica: contribuye de manera decisiva para el conocimiento
por parte de la opinin pblica de sucesos y procesos que
ocurren, que le afectan pero que ignoran, en el peor de los
casos, o los conoce de manera muy superficial, en el mejor.
Mientras el periodismo informativo comunica sobre lo que pasa,
el periodismo de opinin expresa juicios de valor sobre lo que
pasa y el periodismo interpretativo explica por qu pasa lo que
pasa, el periodismo de investigacin revela hechos que se
mantenan ocultos. Ni ms ni menos. No es funcin del mismo
castigar a nadie, o perseguir y punir; esas facultades estn
otorgadas a las autoridades debidamente constituidas
(contralores, defensores populares, fiscales y jueces).
El periodismo de investigacin puede dar pie para que las autoridades procedan, de dos maneras:
1) ofreciendo evidencias sobre actuaciones realizadas al margen
de las disposiciones legales, o
2) favoreciendo reacciones de la opinin pblica en un sentido
crtico, lo que puede constituirse en presin social, pero lo hagan
o no, no depende de su prctica.
En un intento por caracterizar el papel de contralor no autorizado sobre las actuaciones y los procedimientos pblicos y privados, se torn comn entre los profesionales de la prensa
hablar del perro guardin. Pero en todos los pases, desde los
ms industrializados hasta los menos desarrollados, funcionan

Pgina

19

instancias fiscalizadoras diversas, con la expresa finalidad, en


teora, de hacer de perros guardianes (Contraloras,
Defensoras, Entes Reguladores, Fiscalas,...), de donde se
concluye que el periodismo de investigacin tiene por finalidad
esencial tornar pblico hechos, procesos o aspectos de los
mismos, que se ocultan deliberadamente.
Pero donde los perros guardianes son ms perros que guardianes, como ser los pases con bajos o dbiles niveles de
institucionalizacin, el periodismo de investigacin cubre parcialmente un sensible vaco al dejar al descubierto ciertas infracciones; pero que se tome medidas a partir de ello ya est fuera de
su alcance.
2. Lmites ampliados
Desde una perspectiva ms amplia, el periodismo de investigacin no se limita a revelar hechos que se mantenan o se mantienen ocultos; ni se limita a atacar distorsiones, si bien eso es lo
que ms comnmente realiza.
El periodismo de investigacin puede ir mucho ms all del
desenmascaramiento de las disfunciones del sistema, apostando
a revelar inclusive las propias bases del sistema; sus tendencias
fundamentales y las leyes por la que se rige su desarrollo y su
reproduccin.
Despus de pasar la euforia provocada por los xitos pasajeros
en el marco del combate a las distorsiones funcionales, de hecho, se ha abierto un rico y fructfero proceso de debate sobre el
periodismo de investigacin, en cuyo marco son crecientes los
aportes tericos y tcnicos, que apuntan a ampliar los lmites
muy estrechos a que durante dcadas se someti a la prctica.
De dicho proceso de construccin terica, que implica redefiniciones y re-conceptualizaciones, participan activamente decenas de acadmicos, profesionales y observadores, de donde se
puede vaticinar que en poco tiempo nuevos enfoques servirn
de nuevo marco para el desarrollo de las investigaciones.
Hasta ahora, se consensu que no solamente hechos actuales o
recientes deben ser investigados, sino procesos y sucesos

Pgina

20

histricos, mal o poco conocidos, terreno concreto en el que se


han dado numerosos aportes de alto valor intelectual.
Si describiramos breve y parcialmente los bolsones en que
pueden hurgar los investigadores, podramos enumerar:
hechos y procesos actuales que representan disfunciones
del sistema,
sucesos y procesos recientes mal conocidos por la opinin
pblica,
procesos actuales menos superficiales, que son inherentes
al sistema, y
sucesos y proceses histricos, superficiales o de fondo, que
han sido mal trabajados por historiadores, cuando no
directamente obviados.
Esta perspectiva ampliada ofrece una inmensa cantera para los
investigadores, y ofrece la ventaja adicional de no permitir que
al periodismo de investigacin se le ponga una suerte de camisa
de fuerza, que le impida romper con los lmites de superficialidad
y coyunturalidad que determinados sectores de prensa
promueven.
3. Cerco a la corrupcin
La corrupcin se ha constituido en el pan nuestro de cada da, al
Este y al Oeste, al Norte y al Sur del planeta. Las diversas sociedades se han tomado ms vulnerables a la generalizacin de su
prctica, fenmeno que, entre otras cosas, puede atribuirse al
hecho cierto de que vivimos en la era del pragmatismo, cuyo
rasgo esencial es la puesta en vigencia de normas que reflejan
pluralidad de intereses contrapuestos, que los afectados se
ingenian por burlar.
La corrupcin est tan extendida que los organismos financieros
internacionales consideran que el combate a la misma es una
prioridad, destinando crecientes recursos a programas y campaas anti-corrupcin.
Pero no cualquiera es corrupto; solamente lo es el que quiere y
el que puede. Un juez es el que puede vender una sentencia; no

Pgina

21

inspector de alguna reparticin pblica es el que puede pedir


coimas; una alta autoridad administrativa es el que puede
participar en un negociado; un empresario es el que puede
evadir sus obligaciones fiscales,... El poder ser, entonces, resulta
determinante.
Las prcticas corruptas son variadas y cada vez se apela ms a
mecanismos sofisticados para evadir los controles, pero pese a
que se busque no dejar huellas hay siempre una punta de ovillo
que conduce al desentraamiento de las infracciones.
Los delitos de corrupcin, por lo general, estn debidamente
tipificados y penalizados en las leyes.
Anteriormente se defina la corrupcin como la que estaba representada por diversas figuras delictivas, entre las que cabe sealar, de modo orientador, la prostitucin de menores de
edad,...; la promocin o facilitacin con nimo de lucro, o para
satisfacer deseos ajenos, de la corrupcin o prostitucin de
mayores de edad mediante engao, abuso de autoridad, etc.
(Manuel Ossorio).
Desde una perspectiva ms amplia, sin embargo, se debe entender por corrupcin todo hecho delictivo que pervierte, vicia o
daa en cualquier esfera de la vida social. De hecho, sta es la
concepcin contempornea, que expresa de manera clara sobre
todo los delitos relacionados con la esfera econmica, mbito en
el que ms irregularidades se producen.
Hay delitos que daan severamente al conjunto de la sociedad,
como ser:
la utilizacin fraudulenta de un crdito internacional, del
que se benefician ms los administradores y gestores que la
sociedad, apuntada originalmente como supuesta beneficiaria,
el empleo fraudulento de las recaudaciones fiscales, hecho
que beneficia irregularmente a los funcionarios pblicos de alto
nivel, cuya responsabilidad es la de custodiar celosamente el uso
de dichos recursos,
la aceptacin de a veces millonarias comisiones por
concesiones de obras pblicas, que alcanza a pocos funcionarios
y pagan todos los ciudadanos,

Pgina

22

la evasin del pago de impuestos, que beneficia


focalizadamente a los que dejan de realizar los pagos y a los que
reciben propinas para hacer la vista gorda ante los hechos de
evasin,
el incumplimiento de las obligaciones sociales, que
funciona como la anterior,
la sobrefacturacin de las obras, que beneficia a los
concesionarios y a sus cmplices en el sector pblico,...
Los hechos de corrupcin son abundantes y se valen de los ms
ingeniosos mecanismos para eludir los sistemas formales de
control. Como ocurren, sin embargo, pende sobre los mismos de
manera permanente la posibilidad de ser descubiertos, de donde
precisamente el periodismo de investigacin ha venido a constituirse en una suerte de pesadilla permanente para los
involucrados en los hechos de corrupcin, pues saben que hay
periodistas que viven al acecho, tratando de encontrar pistas
que los lleven a desenmascararlos.
El Periodismo de Investigacin, cuya fuerza actual se apoya en el
hecho cierto de la multiplicacin de los casos de corrupcin,
apuesta, entonces, a cercarla.
Los periodistas investigadores carecen de facultades para perseguir y punir, pero disponen de una poderosa arma: la masiva
divulgacin de hechos punibles, con lo que como ya se apunt
contribuye doblemente a crear consciencia pblica (1) y a
ofrecer insumos a la Justicia para que pueda proceder (2).
4. Delitos contemporneos
Cada poca tiene sus delitos dominantes. Por dar un ejemplo
que clarifique esta afirmacin: cuando en los Estados Unidos rigi la Ley seca, para controlar el consumo de bebidas alcohlicas, la mafia gan inmensas cantidades de dinero produciendo
las bebidas, contrabandendolas y comercializndolas en el
mercado negro.
La prctica delictiva estuvo acompaada de mucha violencia,
que dej saldos irreparables en vidas humanas, en ambos
bandos en lucha.

Pgina

23

Contemporneamente los delitos predominantes que mueven


mayor masa de recursos son de lejos el narcotrfico, el lavado
de dinero, el contrabando en gran escala, las falsificaciones, los
negociados, las quiebras fraudulentas y el enriquecimiento
ilcito.
Se entiende por narcotrfico la comercializacin de drogas, cuya
produccin y venta estn expresamente prohibidas por las leyes.
Salvo contadas excepciones -como el caso concreto de Holanda
la inmensa mayora de los pases del planeta prohben,
persiguen y castigan los delitos de produccin y venta de
drogas.
El narcotrfico es uno de los delitos contemporneos de mayor
extensin, que presenta como peculiaridad resaltante el hecho
de estar cercado de violencia extrema en toda la cadena del
proceso, que arranca con la produccin de las drogas, pasa por
la comercializacin en grandes cantidades y culmina con la
venta al consumidor final. Y hay violencia en toda la cadena, que
salpica con saa a fiscales, jueces, periodistas y polticos que se
atrincheran en la lnea de enfrente.
Lavado de dinero se ha dado en llamar al proceso de blanqueamiento del dinero obtenido a travs de ilcitos, como ser
narcotrfico o contrabando. Identificar cmo operan las
empresas financieras metidas en el negocio, qu inversiones se
realizan para blanquear el dinero sucio y quines son los
responsables o involucrados, implica trabajos finos y delicados
de acompaamiento sistemtico, actualmente favorecido por los
bancos internacionales de datos cuyo empleo ha sido
ampliamente favorecido por el imponente desarrollo informtico
de los ltimos tiempos.
El contrabando (Evasin de controles aduaneros) en grande
escala mueve inmensas sumas de dinero. Para tener una idea de
ello basta referir que Ciudad del Este, ubicada en la Triple Frontera, entre Paraguay, Brasil y Argentina, mova a mediados de
los aos 90 alrededor de 15 mil millones de dlares por ao en el
comercio, siendo que la inmensa mayora de los productos haban sido introducidos a Ciudad del Este, Paraguay, de contrabando, y haban salido del mismo para los mercados finales del
Brasil y de la Argentina tambin de contrabando.

Pgina

24

El comercio en Ciudad del Este involucraba desde electrnicos


hasta armamentos de alta potencia, pasando por juguetes e
informtica. Los abastecedores provenan de diversas regiones
del mundo, sobre todo pases asiticos, y los compradores eran
de todos los niveles: desde quienes compraban para su propio
consueno hasta quienes compraban en gran escala, pasando por
pequeos y medianos revendedores.
Sobre todo en el terreno financiero se dieron quiebras fraudulentas de entidades que constituyeron movidas de expropiacin
para decenas y centenas de miles de ahorristas en varios pases.
Estas movidas financieras llegaron a sacudir economas nacionales e internacionales, pese a que los que se beneficiaron de
ellas fueron apenas algunos pocos empresarios, con la abierta
complicidad de las autoridades bancarias de los pases que
experimentaron quiebras financieras de gran envergadura.
De todos modos, el enriquecimiento ilcito de los altos funcionarios pblicos constituye en la mayora de los pases de escaso
desarrollo el delito econmico ms generalizado. De la noche a
la maana, funcionarios que pasaron a ocupar cargos claves en
la administracin pblica se convirtieron en potentados, ya sea
participando de enormes negociados o desviando recursos
provenientes de contribuciones o crditos internacionales.
A grandes rasgos, ese conjunto de delitos constituye una suerte
de cantera inagotable para la investigacin periodstica. En ese
campo se han hecho numerosas investigaciones periodsticas de
alto impacto, tanto sobre cuestiones de inters internacional
como sobre grandes casos locales.
Poco o nada han servido para reducir la corrupcin a niveles
razonables, pero han sido fundamentales para dejar al
descubierto su existencia y los mecanismos empleados para su
realizacin.
5. Desarrollo democrtico
El desplazamiento de las dictaduras militares de Amrica Latina
introdujo nuevas reglas en el juego poltico y, en consecuencia,
nuevas prcticas y nuevas contradicciones.

Pgina

25

Las barbaridades perpetradas por las dictaduras en todas las


esferas haban sido denunciadas limitadamente en su momento,
a travs de varios canales, como la prensa militante y las
diversas expresiones artsticas. Pero fue su desplazamiento lo
que abri la posibilidad concreta de la amplia divulgacin de las
prcticas inherentes a dichos regmenes, tanto en el campo
poltico como en el econmico.
Detenciones arbitrarias, torturas, desapariciones y asesinatos
de opositores y luchadores sociales; robos escandalosos y grandes negociados; mecanismos de represin poltica y social, fueron sacados a la luz pblica por los medios masivos de comunicacin, mostrando la dimensin exacta del carcter
marcadamente brutal de dichos sistemas polticos de
dominacin. As, hasta en los que vivan de las propagandas
engaosas de los regmenes duros, se cre una conciencia
adversa, crtica, favorable al desarrollo democrtico.
Los cambios polticos de los aos 80 del siglo XX se dieron bajo
el alero de la llamada poltica de los Derechos Humanos, que
se impuls desde el Norte altamente industrializado, proceso en
el que los gobiernos de los Estados Unidos jugaron un papel de
primer orden. Inslito: dcadas atrs haban desempeado un
papel inverso, el de promover la instalacin de las represivas
dictaduras militares.
Los nuevos vientos instalaron reglas nuevas: libertades pblicas,
de prensa, de expresin, de organizacin, de manifestacin;
reasignacin de roles, sobre todo para las Fuerzas Armadas, que
deban distanciarse del poder poltico, y de los partidos, que deban ser los protagonistas centrales del nuevo tiempo;
institucionalizacin, de los tres poderes del Estado, de los organismos de fiscalizacin y control, de la vida interna de los diversos actores polticos; respeto a los plazos electorales...
Los cambios fueron drsticos y generalizados, y se produjeron
aceleradamente, lo que signific una ruptura traumtica con el
pasado reciente, pues en el proceso de trnsito de un rgimen
cerrado y represivo a otro abierto y tolerante no hubo
gradualidad ni planificacin, lo que provoc distorsiones de todo
tipo.

Pgina

26

El proceso de rpida democratizacin se mostr altamente precario y vulnerable, por lo que emergieron nuevas
contradicciones, que se sumaron a las irresueltas, de derivaron a
su vez, problemticas aun ms complejas y agravadas.
Lo que se pudo y se puede captar en la superficie es claro y
resulta irrebatible, pues se apoya en slidos datos:
- En el campo poltico se instal el problema de la
ingobernabilidad, causa y consecuencia a la vez de la fragilidad
institucional. Los nuevos actores demostraron disponer de
escasa legitimidad; la corrupcin se torn desenfrenada. Desde la perspectiva econmica se ha experimentado desrdenes que terminaron consolidando el ensanchamiento de la
brecha entre los pases pobres y los pases ricos. Se consolid el
atraso bajo la presin determinante de una suerte de crculo
vicioso: no se pudo progresar a causa de la pobreza y haba
mayor pobreza porque no se progresaba.
En la esfera social se dio un violento proceso de exclusin,
a cuya consecuencia creci la violencia a niveles inditos, se
increment la prostitucin infanto-juvenil, se ampli el consumo
de drogas, aument la mendicidad,...
En el terreno cultural hubo un franco retroceso, que se
expres de manera pattica en una produccin ms
empobrecida, con la emergencia de fenmenos artificialmente
producidos, cuya actividad no solamente ni siquiera se aproxima
a los ms discretos resultados alcanzados con anterioridad, sino
que se levanta como una amenaza frente a todo lo que se ha
acumulado hasta el presente.
La panacea de la modernizacin del Tercer Mundo result ser
un gran fiasco, ni fin de la historia ni nuevos paradigmas, dcadas perdidas.
La causa de fondo resulta relativamente fcil identificar: se promovieron cambios -pensados afuera- como los ms adecuados,
postergndose la solucin de las contradicciones estructurales.
En rigor, Amrica Latina como toda la periferia del mundo capitalista ha sido violentamente privada de pensar sus problemas y
ensayar sus soluciones; en el Norte se piensa y se decide.

Pgina

27

La crisis de la deuda externa provoc lo que dio en llamarse


la dcada perdida, en los aos 80, pues la presin del Norte
sobre sus deudores del Sur fue tan tremenda, traducindose en
la aplicacin - sugerencia de los organismos supuestamente
multilaterales, tipo Fondo Monetario Internacional, FMI, y Banco
Mundial, BM- de polticas restrictivas del crecimiento. La receta
fue simple e invariable: alcanzar resultados superavitarios en el
comercio internacional, de modo que se pueda cumplir con los
acreedores. El resultado estaba cantado: los pases deudores
dejaron de crecer.
Y a esto se sigui la aplicacin de polticas neoliberales
(desregulacin, privatizacin y flexibilizacin laboral), en cuyo
marco los pases pobres fueron literalmente expropiados de sus
ms importantes riquezas acumuladas, que pasaron a engrosar
los inmensos bienes que ya manejaban los poderosos monopolios del Norte.
Se estructur un discurso que sedujo rpidamente a los sectores
sociales y polticos dominantes, y se propal a los cuatro vientos
las nuevas verdades, sobre todo a travs de los medios de
comunicacin de masas:?
El intervencionismo estatal era el padre de todos los males,
de la pobreza y del atraso, por tanto
la liberalizacin era la receta que deba aplicarse para
lograr que las sociedades progresen a ritmo acelerado.
-

El intervencionismo estatal era equivalente a lo viejo, y

el liberalismo, por tanto, era sinnimo de modernidad.

Frmulas como Estado mnimo y libre mercado, que


en realidad constituan verdaderas piezas museolgicas del
pensamiento social desde finales del siglo XIX, fueron
presentadas, despus de ser desempolvadas, como las ms
modernas banderas de la nueva panacea.
La confluencia de los dos procesos de fondo, socio-econmico y
socio-poltico, causaron distorsiones en todos los ordenes, ante
las que las instancias de control se mostraron impotentes, primero, y terminaron siendo cooptadas por los controlados, despus.

Pgina

28

Y esta situacin bsica fue, precisamente, lo que otorg al periodismo de investigacin el vigor imponente que ha ganado en
todas las latitudes. Su importancia fue tal que se lo consider
una suerte de perro guardin de la democracia.
A decir de muchos analistas, antes que motivo de orgullo, este
hecho es ms bien preocupante, pues pone al descubierto la
total ineficacia de los rganos institucionales de control. Su
vigor, entonces, surge de la debilidad del sistema; debilidad que
emerge, a su vez, de la falta de respuestas adecuadas a los
problemas que se plantearon y plantean en estas sociedades.
Ahora bien, ms concretamente y en definitiva, en qu medida
contribuye el periodismo de investigacin al desarrollo democrtico?. La respuesta es simple: en la medida en que el periodismo de investigacin desnuda y ofrece detalles sobre las
distorsiones del sistema, las mismas pueden ser minimizadas, es
decir, su contribucin es clave.
Violencia policial y prctica de torturas; prebendarismo y trfico
de influencias, favoritismos y casos de nepotismo; arbitrariedades y abuso de poder,... La cantera para el Periodismo de Investigacin es prcticamente inagotable, pero adems de golpes
sistemticos que dan a distorsiones puntuales, la modalidad periodstica se ha mostrado esencial para promover cambios aun
ms relevantes. Y as se puede comprobar analizando el papel
que desempe en la destitucin de ciertos gobernantes, como
Collor de Mello en el Brasil, Carlos Andrs Prez en Venezuela y
Alberto Fujimori en el Per.
6. Periodismo de Investigacin y desarrollo social
Como consecuencia directa del deterioro econmico que se
apunt ms arriba, los problemas sociales se han multiplicado y
se han agudizado, configurando una inmensa cantera que se trata de mostrar en todas sus facetas a travs de trabajos de
investigacin periodstica.
Desde una perspectiva estructural, la problemtica ms dramtica es la creciente exclusin, que se expresa concretamente
en el incremento persistente del desempleo y en el aumento
vertical del subempleo.

Pgina

29

La acelerada automatizacin de los procesos productivos y la


aplicacin de polticas econmicas restrictivas arrojaron y arrojan
a miles de trabajadores al desempleo abierto, derivando de ello
directamente el crecimiento vertical del subempleo. La falta de
trabajo estable para muchos pobladores tiene una gran variedad
de derivaciones graves, estando en la base de problemas
puntuales tales como migracin, violencia urbana, alcoholismo,
violencia domstica, prostitucin,...
Casi invariablemente los medios de comunicacin de masas
esquivan el examen y la descripcin de los problemas de fondo,
lo que obedece al hecho de que sobre todo los grandes medios
de comunicacin son de propiedad de sectores sociales que se
benefician del actual estado de cosas.
No obstante, se abordan con cierta prolijidad y abundancia de
detalles algunos problemas puntuales; los que estn en la superficie, a la vista de la opinin pblica.
As, por ejemplo, se han hecho importantes trabajos sobre los
flujos migratorios: los que se producen hacia fuera y los que se
dan hacia dentro; los que son permanentes y los que resultan
transitorios o estn en trnsito. Se sealan las causas, por lo
general econmicas, y se ofrecen amplios detalles sobre el
origen de los migrantes, el nivel de instruccin de los mismos,
las actividades a que se dedican...
Pero han sido los temas que ms se prestan para que se les
condimente con una alta dosis de sensacionalismo los que han
sido estudiados con mayor amplitud y frecuencia.
Son los casos, por ejemplo, del uso extendido de drogas entre los
jvenes, o el del crecimiento alarmante de la prostitucin
infanto-juvenil, o el de la superpoblacin de las crceles, o el del
aumento sensible de menores trabajando en las calles, o la
expansin del SIDA entre los heterosexuales,...
Conocer mejor estas realidades lleva necesariamente a despertar en la opinin pblica cierta sensibilidad, pero al ocultrseles
las causas ltimas de los desrdenes sociales, dicha sensibilidad
apenas puede expresarse en actitudes favorables al
asistencialismo y al paternalismo, lo que termina favoreciendo la
reproduccin permanente y ampliada de los problemas.

Pgina

30

De hecho es en el terreno social donde el Periodismo de Investigacin evidencia sus limitaciones ms pronunciadas, pues los
propietarios de los medios de comunicacin, los editores y los
anunciantes de los medios, imponen una fuerte censura que no
permite que se llegue a la opinin pblica con pistas claras
acerca de las verdaderas causas de los problemas.
Refiere Juan Jorge Faundes Merino, director de la Escuela de
Periodismo de la Universidad de Chile, que en 1983 escribi un
poema Tic-Tac, a propsito de un informe de UNICEF sobre la
muerte de dos nios por segundo a causa del hambre; y agrega:
Quince aos despus (2002),..., siempre segn la UNICEF siguen muriendo de hambre y pobreza un nio cada dos segundos, 43.200 al da y 15.768.000 al ao. Un pas de nios muere
de hambre en un ao!. En estos quince aos, desde que escrib
el poema y la tierra progres tanto, han muerto 236 millones
520 mil nios de hambre. Todo un continente!.
!Muy poderosa ha de ser la ideologa dominante para que los
periodistas sigamos pensando que hay asuntos ms importantes
de los que informar!... Sin comentarios anexos.
7. Consciencia social crtica y participacin
El periodismo de investigacin se ha mostrado sumamente eficaz para lograr que la opinin pblica acceda al conocimiento de
distorsiones polticas y de problemticas econmicas y sociales,
que anteriormente haban sido tratadas de manera insuficiente o
haban sido directamente ocultadas.
Y en la medida en que ha logrado arrimar al pblico elementos
que permiten conocer mejor los problemas, sus alcances y sus
manifestaciones, ha contribuido a generar una consciencia social
crtica y a sentar las bases para una mayor participacin de la
sociedad en la bsqueda de soluciones a los problemas.
Pero al estar prisionero de los lmites impuestos en cuanto a la
revelacin de las causas de fondo de los problemas (la esencia),
queda en la apariencia. No es desde luego funcin fundamental
del periodismo revelar dichas causas, pero lo grave es que a
sabiendas se encarga de ocultarlas, con lo que se termina aportando verdades a medias a una ya confundida opinin pblica.

Pgina

31

De ah que no pasen de frases de efecto -sin pie en la realidades


o de que el periodismo de investigacin es una contribucin
clave para el perfeccionamiento del sistema democrtico, que
ayuda de manera decisiva para frenar la corrupcin, que estimula la ms amplia participacin ciudadana.
En rigor, hace aportes, pero limitados, lo cual es preciso resaltar
para no exagerar ni minimizar su importancia, destacando, a su
vez, que liberado de los lmites que le son impuestos, el periodismo de investigacin puede constituirse en una modalidad periodstica de importancia clave para entender la realidad pasada
y presente; y de hecho hay investigadores que trabajaron esa
perspectiva.
SNTESIS
1. Distorsiones funcionales e investigaciones: El periodismo de
investigacin ha resultado efectivo para el combate a las
distorsiones funcionales del sistema, lo cual ha dejado en
evidencia pattica la debilidad de los sistemas institucionales de
control. La prctica cubre un vaco al dejar al descubierto las
irregularidades, pero no es responsable de que se tomen
medidas correctivas a partir de ello.
2. Lmites ampliados: Una perspectiva ampliada del periodismo
de
investigacin
conduce
a
re-definiciones
y
reconceptualizaciones de las que participan decenas de acadmicos, profesionales y observadores. Los bolsones de investigacin
son ms amplios: cuestiones presentes e histricas; superficiales
y de fondo.
3. Cerco a la corrupcin: En la era del pragmatismo, la
corrupcin de ha tomado el pan nuestro de cada da, en todas
las latitudes. El periodismo de investigacin apuesta a cercarla.
Carece de atribuciones para perseguir y punir, pero se ha
mostrado eficaz en el desentraamiento de los hechos y la
identificacin de los responsables.
4. Delitos contemporneos: Los delitos del presente son diversos: narcotrfico, lavado de dinero, falsificaciones, contrabando, evasin impositiva, enriquecimiento ilcito de altos funcionarios. Hay una amplia cantera para investigar y se han hecho tra-

Pgina

32

bajos importantes, pero de poco o nada han servido para reducir


la corrupcin a niveles razonables.
5.Desarrollo democrtico: Los cambios promovidos bajo el alero
de la poltica de Derechos Humanos condujeron a la
redemocratizacin forzada; proceso acelerado, sin Norte y sin
brjula, que aadi problemas a los anteriormente existentes.
Los asuntos para investigar se multiplicaron, de donde la
prctica puede realizar aportes claves al desnudar y ofrecer
detalles sobre las distorsiones.
6. Desarrollo social: Las complicaciones econmicas crecientes
agudizaron y ampliaron los problemas sociales. En cuanto al
estudio de los elementos superficiales no hay trabas, pero las
causas de fondo no pueden ser divulgadas porque rige una
fuerte censura en los grandes medios de comunicacin, cuyos
propietarios estn entre los que se benefician del estado de
cosas actual.
7. Consciencia social crtica y participacin: Conocer lleva a
criticar y a poder participar, pero por los lmites impuestos a la
prctica han reducido los aportes, de donde frases de efecto tipo
es una contribucin clave para el perfeccionamiento del
sistema democrtico, no tienen pie en la realidad.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
REYES, GERARDO. Periodismo de Investigacin. Trillas,
Mxico, 1996. Captulo 1; pginas 11 al 44.
SECANELLA, PETRA M. Periodismo de Investigacin. Editorial
Tecnos, Espaa, 1986. Captulo 3; pginas 25 al 32.
KLEIN, DAR0. El papel del periodismo de investigacin en la
sociedad democrtica (I y II). Sala de Prensa, Web para
profesionales de la comunicacin iberoamericanos.
FAUNDES MERINO, JUAN JORGE. El Periodismo de Investigacin y la antropofagia global. Sala de Prensa, Web para
profesionales de la comunicacin iberoamericanos.

33
Pgina

UNIDAD III
EL PROCESO DE INVESTIGACIN
1. La determinacin de los hechos investigables. 2. Los pasos del
proceso de investigacin. 3. Interferencias externas en el
proceso. 4. Interferencias internas en el proceso. 5. De lo simple
a lo complejo.
1. La determinacin de los hechos investigables
Determinar los hechos investigables es relativamente simple,
pues las distorsiones abundan en todas las esferas y siempre
hay quien ofrece las primeras pistas. Es frecuente, tambin, que
fuentes confidenciales o pblicamente responsables establezcan
contactos con los equipos de investigacin de los medios, para
facilitar informaciones y documentos acerca de determinadas
irregularidades.
El hecho o proceso a ser investigado puede surgir de la observacin del periodista investigador, del comentario de algn colega, de un conocido o de un extrao, de la existencia de
versiones divergentes sobre determinados sucesos, o puede ser
el resultado del examen de una lluvia de ideas, en cuyo marco
pudieron haber surgido temas interesantes.

Pgina

34

Varios aspectos, sin embargo, es esencial tener en cuenta en el


momento de la determinacin de los hechos investigables, como
ser la relevancia social del tema (1), la viabilidad de la investigacin (2), la oportunidad de su realizacin (3) y el impacto real
que puede llegar a tener su publicacin (4).
Un asunto es socialmente relevante en la medida en que afecta
directa o indirectamente a segmentos importantes de la
sociedad cuando no al todo. Una cuestin puntual, como la
sobrefacturacin del recapado de una avenida X, por ejemplo, no
interesa solamente a quienes se ven afectados directamente por
la obra, pues revela la realizacin de prcticas que afectan a
todos los contribuyentes, por un lado, y afecta la imagen de una
figura pblica, cuya carrera se puede ver severamente afectada,
por otro.
Hay que tener en cuenta, no obstante, el valor que la opinin
pblica otorga a determinados hechos. As, procedimientos considerados normales por la gente, por anormales que sean, tendrn menor impacto que aquellas que colisionan frontalmente
con sus concepciones.
La viabilidad de la investigacin debe ser previamente determinada, con realismo. Ser posible acoplar todas las
informaciones relevantes?, habrn fuentes suficientes?, se
podr disponer de soportes documentales?, son, entre otras,
incgnitas que deben ser adecuadamente despejadas antes
siquiera de proponer el tema.
Puede darse casos en que haya asuntos de amplio inters social
y de alto impacto, pero cuya realizacin resulte difcil o imposible
de realizar por diversos motivos, como ser el elevado costo. Ante
tales situaciones lo ms aconsejable es encarpetar el proyecto
-por si en el futuro se den condiciones ms propicias- e impulsar
otro.
La oportunidad de la realizacin de la investigacin es fcil
determinar. Se debe hacerla en el momento en que se dan las
mejores condiciones para su rpido desarrollo y conclusin.
Disponibilidad de documentos, apertura de las fuentes, entre
otros, son factores que deben aprovecharse en el momento que
se dan, sin dejarlos pasar.

Pgina

35

Momentos desfavorables, que presentan obstculos y prometen


dificultades, deben ser tenidos en cuenta, ya sea para abortar
una investigacin, o para dejarlo latente en espera de una mejor
oportunidad.
Para tener una idea del impacto que tendrn los resultados de
una investigacin es preciso tener firmemente los pies sobre la
tierra. La cuestin est en no exagerar ni minimizar el impacto.
Pero adems de tener predeterminada una idea del impacto que
tendr la publicacin, hay que buscar el momento ms oportuno
para proceder a la divulgacin.
2. Los pasos del proceso de investigacin
El proceso de investigacin consta de siete pasos fundamentales, que deben seguirse de manera ordenada para garantizar su
realizacin gil y eficaz:
Primer paso: La seleccin del hecho a investigarse
Del conjunto de temas propuestos se debe optar por el que
rena las mejores condiciones: que sea un asunto de
comprobado inters social; que su realizacin sea perfectamente
viable, previndose que aunque haya obstculos, los mismos
sern superados; que estn dadas condiciones favorables para
su realizacin, internas y externas; y que haya indicios
suficientes sobre que su publicacin tendr no alto impacto
sobre la sociedad.
Segundo paso: El establecimiento de las hiptesis
Definido el tema a ser investigado se debe pasar a establecer la
o las hiptesis, es decir, lo que se espera encontrar para revelar.
Tiene que haber indicios sobre los mismos, de lo contrario las
mismas
no
serian
sino
sospechas
infundadas,
que
eventualmente (Lo menos probable) pueden llegar a
confirmarse.
Obviamente que la existencia de indicios no garantiza en un cien
por cien que las hiptesis se confirmarn, pero las posibilidades
son mayores, por una parte, y el punto de partida tiene base
slida, por otra.
Tercer paso: La elaboracin del Plan de Investigacin

Pgina

36

Por lo general est comprobado que los periodistas han desarrollado una fuerte resistencia a la planificacin. Sin embargo,
para la prctica del periodismo de investigacin la planificacin
es esencial. Todo debe estar previsto: partiendo del objetivo (Lo
que se pretende demostrar) hasta el costo de la investigacin
(Presupuesto), pasando por la pormenorizada explicacin acerca
de las tcnicas a ser empleadas y los recursos que se utilizarn,
as como referencias concretas sobre el tiempo que llevar
realizar el trabajo.
Cuarto paso: La ejecucin del trabajo
La puesta en marcha del trabajo implica fases que deben ser
respetadas:
acopio y sistematizacin de todo lo que se ha publicado
sobre el tema (Trabajo de gabinete),
-

establecimiento preciso de los vacos informativos, y

trabajo de campo.

Durante la ejecucin del trabajo hay que garantizar el ms amplio conocimiento sobre la cuestin investigada y evitar repetir
trabajos que ya han sido realizados con anterioridad.
Quinto paso: Evaluacin definitiva
Cubiertos los vacos informativos y acopiados todas las informaciones relevantes sobre el asunto investigado, se estar ante
una encrucijada: continuar el trabajo hasta concluirlo o abortar la
investigacin.
Si como resultado del trabajo se confirman o tienden seriamente
a confirmarse las hiptesis, se prosigue el trabajo hasta su
conclusin, pero si las hiptesis no se confirman y todo indica
que se est ante hechos regulares, que no presentan inters
especial, se debe proceder a abortar la investigacin,
disponiendo todo para iniciar otra, sobre otro asunto.
Sexto paso: Validacin de las informaciones
Concluido el trabajo -y antes de proceder a la publicacin- se
debe proceder a la validacin de las informaciones obtenidas.

Pgina

37

Hay peridicos estadounidenses (The Washington Post, por


ejemplo) que exigen la triple validacin a travs de fuentes
independientes. A falta de normas precisas sobre ello, resulta
importante validar las informaciones aunque sea a travs de una
fuente independiente, sobre todo cuando lo que se ir a publicar
compromete severamente a alguna persona o grupo.
Tambin se recomienda que en esta fase de realice la llamada
entrevista clave, es decir, proceder a entrevistar sobre los hechos investigados al involucrado o a los involucrados, dndole(s)
la oportunidad de exponer su versin.
Sptimo paso: Publicacin
El ltimo paso fundamental del proceso es la publicacin, cuya
realizacin deber hacerse en la forma en que se garantice
mayor impacto.
Los resultados pueden publicarse totalmente de una sola vez, o
puede convertirse en una serie de notas. En cualquiera de los
casos, lo importante es tener en cuenta que la publicacin no
significa el final del trabajo, pues al generar reacciones, que
deben ser acompaadas, pueden surgir nuevos elementos, que
amplen o profundicen la investigacin.
3. Interferencias externas en el proceso
Hay que precisar de entrada que determinados sectores son
verdaderos intocables en cuanto a investigacin periodstica, sobre todo la que se desarrolla a travs de los grandes medios de
comunicacin de masas. Se trata, por lo general, de los grandes
anunciantes: corporaciones y empresas monoplicas, que compran impunidad a travs de generosos anuncios en los medios
de comunicacin.
Casos concretos? (1) Telefona celular: hay fallas tcnicas en los
aparatos y sobrefacturaciones, entre otras irregularidades. (2)
Expendidoras de combustibles: hay fallas en la calidad de los
combustibles y suele haber diferencias entre la cantidad nominal
y real cargada, entre otras irregularidades... (3) Tabacaleras, (4)
Automotores, (5) Bancos y Financieras, (6) Fbricas de bebidas...
Tambin resultan intocables, en casos concretos, las empresas
que hacen parte del grupo econmico del medio de comunica-

Pgina

38

cin concreto que est desarrollando el trabajo, as como los


amigos y allegados del propietario del medio concreto. En estos
casos las interferencias suelen ser inmediatas y contundentes.
Por lo general, y con fuerte estmulo desde el exterior, se investiga con frecuencia y amplitud el funcionamiento del sector
pblico, mbito en el que se da una amplia gama de prcticas y
procedimientos irregulares y delictivos.
Vnculos econmicos y amistosos entre los altos funcionarios
pblicos y los empresarios de los medios, sin embargo, pueden
no solamente interferir en ciertos procesos de investigacin, sino
abortarlos directamente.
El Periodismo de Investigacin se realiza en un medio cargado de
adversidades, por lo que los investigadores deben moverse con
cuidado, ya que un error les puede costar hasta sus puestos de
trabajo.
Las investigaciones se realizan sin obstculos cuando los investigados son adversarios econmicos o polticos de los propietarios de los medios. En esos casos todo se facilita, desde los recursos para la investigacin hasta la apertura de los medios para
la publicacin de las afirmaciones ms temerarias. Y las consecuencias importan poco, aunque se tenga que llevar a litigio judicial algunos casos y pagar cuantiosas sumas en concepto de resarcimiento por daos y perjuicios.
La imposibilidad de realizar investigaciones en determinados
sectores o acerca de ciertas actividades, han llevado a no pocos
investigadores a abandonar las empresas periodsticas y a trabajar con total autonoma. Las desventajas son mayores que las
ventajas, en dichos casos, pues si bien el investigador queda
libre de examinar los casos que le resulten importantes, sin que
sea censurado, queda tambin por entero al descubierto, sin el
respaldo econmico y legal que solamente una empresa
periodstica importante le puede proporcionar.
4. Interferencias internas en el proceso
Si bien en teora el equipo investigador debe operar con absoluta
independencia de los editores, solamente subordinado al director
del medio de comunicacin, en la prctica eso no ocurre, y

Pgina

39

muchas veces hasta por la propia decisin del director, quien termina otorgando a los editores autoridad sobre los investigadores.
Cuando el director del medio delega en los editores la responsabilidad de determinar las investigaciones que sern realizadas,
hay ms problemas que cuando el director respalda con firmeza
el trabajo de los investigadores.
Al incrementarse los agentes que intervienen para la realizacin
de cualquier investigacin los problemas se multiplican, tornndose a veces hasta paralizantes las interferencias de los
diversos agentes.
De todos modos, y al margen de la cantidad de agentes que
intervienen, las interferencias suelen extenderse hasta en la distribucin de espacios para la publicacin de los trabajos de
investigacin: no se les da espacios centrales o destacados, con
lo que sus posibilidades de impacto se reducen drsticamente.
5. De lo simple a lo complejo
Se han presentando muchas quejas de profesionales del rea en
cuanto a que los medios han limitado sus polticas de soporte a
la prctica, generalmente porque las investigaciones resultaban
costosas y llevaban mucho tiempo para ofrecer resultados satisfactorios.
Los propietarios de los medios, por lo general, se muestran
ansiosos por la obtencin de resultados rpidos, actitud que muchas veces responde a su desconocimiento acerca de lo que es
el periodismo de investigacin, por una parte, y que refleja una
prctica tradicional empresarial, por otra.
La Unidades deben ser cautas para implantarse, procediendo a
realizar trabajos simples, en un comienzo, que por lo general dan
rpidos resultados e insumen poco tiempo de trabajo, para luego
penetrar en el terreno ms espinoso, que necesariamente lleva
ms tiempo desentraar y atrasa la entrega de resultados.
Una poltica como la sugerida tiene doble utilidad:
-por una parte, satisface la ansiedad de los propietarios de los
medios, sin cuyo apoyo no ser posible que las Unidades funcionen, y

Pgina

40

- por otra parte, entrenarn a sus integrantes, de modo que para


cuando entren a tratar cuestiones ms complejas, estn mejor
preparados.
El lema es simple: de lo simple a lo complejo, de lo pequeo a lo
grande. Ese trayecto es el ms seguro para lograr que las Unidades se implanten y sean beneficiarias del respaldo material y
legal de los medios.
SNTESIS
1. La determinacin de los hechos investigables: Los aspectos
esenciales que deben ser tenidos en cuenta en el marco de la
determinacin de los hechos investigables son varios: (1) la relevancia social del tema; (2) la viabilidad de la investigacin; (3) la
oportunidad de su realizacin; y (4) el impacto real que puede
llegar a tener su publicacin.
2. Los pasos del proceso de investigacin: Los pasos del proceso
de investigacin son siete: (1) La seleccin del hecho a
investigarse; (2) El establecimiento de las hiptesis; (3) La elaboracin del Plan de Investigacin; (4) La ejecucin del trabajo; (5)
La evaluacin definitiva; (6) La validacin de las informaciones; y
(7) La publicacin.
3. Interferencias externas en el proceso: Hay sectores que son
verdaderos intocables, como el caso de los grandes anunciantes,
as como el de los del grupo del propietario del medio en cuestin. El periodismo de investigacin se realiza en un medio cargado de adversidades, por lo que los investigadores deben moverse con cuidado, pues un error les puede costar hasta sus
puestos de trabajo.
4. Interferencias internas en el proceso: En teora la Unidad
investigativa debe operar con autonoma de los editores, pero
cuando los editores disponen la subordinacin de los investigadores a los editores, los problemas se multiplican: hay ms
obstculos y se empobrece el trabajo de la Unidad.
5. De lo simple a lo complejo: La implantacin de la Unidad en un
medio suele chocar con la dificultad representada por la
ansiedad del propietario que exige resultados rpidos en poco
tiempo. La frmula es transitar de lo simple a lo complejo, de lo

INDICACIONES PARA LA LECTURA

Pgina

41

pequeo a lo grande. Se satisface la ansiedad del propietario,


por una parte, y se entrena mejor a los integrantes de la Unidad,
por otra.

RODRIGUEZ, PEPE. Periodismo de investigacin: tcnicas y


estrategias. Paids, Espaa, 1994. Captulo 2 y 3; pginas
43 al 64.
REYES, GERARDO. Periodismo de Investigacin. Trillas, Mxico, 1996. Captulo 2; pginas 45 al 72.
QUESADA, MONSERRAT La investigacin periodstica. Ariel,
Espaa, 1987. Captulo 8; pginas 77 al 86.
PABLOS, JOSE MANUEL DE. Periodismo de investigacin: las
cinco fases P. Sala de Prensa, Web para profesionales de la
comunicacin iberoamericanos.

42
Pgina

UNIDAD IV
LA UNIDAD DE INVESTIGACIN
1. El plantel investigador. 2. El espacio de trabajo. 3. El tiempo
de trabajo. 4. Presiones del propietario del medio. 5. Tensiones
con los editores.
1. El plantel investigador
Se ha coincidido en denominar al equipo investigador Unidad
Periodstica de Investigacin, que nada ms designa sino al
plantel estable que en un determinado medio se dedica de
manera sistemtica a la realizacin del trabajo especfico de
investigacin.
A diferencia de los dems periodistas, los investigadores estn
sometidos a un rgimen diferente de trabajo, pues disponen sobre todo de tiempos distintos, en todas las fases que van desde
la planificacin hasta la publicacin, pasando por los perodos de
ejecucin y de elaboracin de sus informes.
Una regla de oro es que lo ms aconsejable es que la Unidad
Investigativa desarrolle su trabajo en directa relacin con el director del medio, es decir, sin estar subordinada a los editores.
Debido a esto, precisamente, es que se ha buscado una denominacin diferente para el equipo: Unidad en vez de Seccin o
Departamento.
La relacin directa Unidad Investigativa-Direccin del medio es
por lo siguiente: como lo que se investiga trata sobre asuntos
generalmente delicados, muchas veces conflictivos, el que debe

Pgina

43

tomar la determinacin de realizarlo es el director, sin que haya


la menor interferencia -ni el conocimiento siquiera- de cualquier
otra instancia.
La aplicacin rigurosa de la regla descripta asegura la debida
discrecin acerca de los asuntos investigados y da mayor
seguridad y respaldo a los investigadores.
La extensin innecesaria del crculo de personas que acceden al
conocimiento de los temas que irn a ser investigados es negativa desde dos puntos de vista:
compromete el xito del trabajo, al abrir la posibilidad para
que sean alertados quienes sern investigados, por un lado, y
expone a los investigadores a riesgos extemporneos, por
otro.
La Unidad Periodstica de Investigacin debera estar compuesta
de por no ms de tres personas. No obstante, existen experiencias, sobre todo en televisin, de una composicin ms numerosa, lo que se explica por la necesidad de hacer entregas
indefectiblemente con cierta periodicidad, como ser semanal o
quincenal. En estos casos se constituyen equipos investigadores
ms amplios para poder satisfacer los requerimientos del medio.
En cuanto a la experiencia existe abierta una polmica fuerte,
pues mientras unos sostienen que los integrantes del equipo deberan ser experimentados periodistas, otros han desarrollado
exitosos trabajos de investigacin periodstica con estudiantes
que estn cursando los ltimos aos de la carrera, es decir, sin
experiencia profesional.
La cuestin es polmica, pues encierra diversas facetas, como
ser, por ejemplo, el apelar a los estudiantes para abaratar los
costos de los trabajos. Desde esta perspectiva, la cuestin exige
un claro posicionamiento, pues al cubrir con mano de obra
gratuita o ms barata la elaboracin de ciertos productos se
contribuye objetivamente a la precarizacin de la actividad; de
modo ms claro: los trabajos deberan ser realizados por
profesionales, no por estudiantes.
Desde otra perspectiva, que apunta a dotar a los estudiantes de
experiencias prcticas que les resulten tiles en su futura vida

Pgina

44

profesional, no cabe dudas sobre que el ofrecer a los mismos espacios de participacin es altamente positivo. Sin embargo, corresponde aclarar dos cuestiones con respecto al asunto:
por una parte, los estudiantes necesitan ser coordinados
por una persona de amplia experiencia profesional, y
por otra, los trabajos a ser ejecutados deben ser simples,
pues los estudiantes no tienen ni la experiencia ni la madurez
necesaria para realizar trabajos complejos y que encierran
riesgos.
Una frmula transaccional que tal vez pudiera resolver el conflicto de manera satisfactoria sera la de incorporar a los
estudiantes en ciertas fases de la cadena del proceso total, como
ser en el acopio de informaciones. De ese modo se estara
reservando el trabajo en sus fases principales a los
profesionales, y simultneamente se estara abriendo las puertas
para que los estudiantes ganen experiencia.
2. El espacio de trabajo
Para garantizar el desarrollo exitoso de los trabajos y elevar el
nivel de seguridad de los periodistas investigadores, lo ideal es
que la Unidad funcione en un espacio totalmente independiente
de la Sala de Redaccin. Pero esto resulta costoso, pues un local
separado, con lneas telefnicas autnomas, entre otras cosas,
constituye un peso con el que los medios no quieren cargar.
Por razones de relacin costo/beneficio, los medios de comunicacin hacen que los periodistas investigadores compartan espacios con los dems redactores, otorgndoles, en el mejor de
los casos, algunas salas con relativa autonoma
Para el eficaz desarrollo de sus actividades, la Unidad Periodstica de Investigacin necesita de una infraestructura peculiar
exclusiva:
-

Biblioteca
Archivadores
Internet
Lnea de telfono

Pgina

45

Los dems redactores no deberan compartir mobiliarios con los


periodistas investigadores y menos aun tener acceso a los materiales que utilizan, como ser documentos, agendas y
cuadernos de anotaciones.
No obstante, lo ideal dista mucho de lo que ocurre en la realidad
por lo que las condiciones en las que trabajan los periodistas
investigadores son definitivamente precarias, en la inmensa mayora de los casos.
3. El tiempo de trabajo
La duracin de los trabajos de investigacin periodstica vara
sensiblemente, dependiendo de diversas circunstancias.
De modo general, la Unidad Investigadora debe estimar de
manera realista el tiempo que le llevar concluir un trabajo, previendo en dicha estimacin posibles obstculos, inconvenientes
varios e interferencias posibles que pueden provocar atrasos. No
obstante, es comn que la puesta en prctica de una investigacin concreta escape en muchos aspectos a lo planificado,
debido a imprevistos que a la hora de planificar no pudieron ser
contemplados, a veces ni imaginados.
As, si el criterio para la estimacin del tiempo de trabajo es la
complejidad, se puede tener como regla general que los casos
simples insumirn tiempos ms cortos, y a la inversa.
Sin embargo, por simple y puntual que fuese un caso investigado, pueden presentarse dificultades que causen atrasos; como
tambin es perfectamente posible que casos complejos y
globales encuentren condiciones muy propicias para un rpido
desarrollo y conclusin.
Una cuestin cierta, en cualquier caso, es asumir que el trabajo
de investigacin periodstica insume mayor tiempo que el de elaboracin cotidiana de noticias, por regla. Y es importante comprender, tambin, que hay ocasiones en que el tiempo utilizado
puede ser largo.
La duracin del tiempo destinado al trabajo para obtener resultados suele ser precisamente uno de los inconvenientes con
que tropiezan las Unidades Investigativas para su funcionamiento. Son raros los directores de los medios que se muestran capa-

Pgina

46

ces de esperar un tiempo razonable para ver resultados; es ms,


hay presin por resultados inmediatos.
Esto lleva a aconsejar que la implantacin de una Unidad de
Investigacin se realice siguiendo dos pasos concretos:
1) Centrarse en casos simples, al inicio, de modo que se
obtengan resultados rpidos, y
2) Mezclar temas simples con temas complejos, en una segunda
fase, de modo que siempre hayan resultados constatables.
El funcionamiento pasajero de muchas Unidades Investigativas
se explica, precisamente, por el hecho de no considerar que si
bien es cierto que trabajos complejos bien realizados exigen
mucho tiempo de dedicacin, existe la necesidad de aplacar
ansiedades tambin legtimas.
4. Presiones del propietario del medio
La Unidad Periodstica de Investigacin mantiene con el propietario del medio una relacin muy peculiar: por una parte,
como el director-propietario es el que decide qu proyecto de
investigacin ser ejecutado, hay una relacin directa y
constante entre ambas partes; por otra, por el poder que tiene el
propietario
-cspide
de
una
estructura
rigurosamente
jerarquizada-, est en posicin privilegiada para presionar a la
Unidad de Investigacin y as lo hace con frecuencia.
Los propietarios de los medios presionan por resultados rpidos,
en general, por lo que es frecuente que se tomen excesivamente
exigentes con los integrantes de la Unidad de Investigacin. La
tensin que a veces es alta, debido a atrasos en la entrega de
trabajos, lleva al propietario a emplear todo su poder para forzar
la publicacin de cualquier asiento que est siendo investigado,
lo cual termina conspirando contra la calidad de las investigaciones.
Para salvar ese inconveniente -como ya se apunt ms atrs la
Unidad de Investigacin debe disear una poltica que le permita
la entrega de resultados, lo que se logra llevando paralelamente
a las investigaciones ms complejas, algunas simples y de
rpida conclusin.

Pgina

47

Otro aspecto que la Unidad de Investigacin debe tener bien


mapeado es el conjunto de zonas que no puede explorar, so-riesgo de exponerse a sanciones que pueden llegar a ser extremas,
como el despido. Anunciantes del medio, parientes y amigos del
propietario son verdaderos intocables.
Sobre este asunto puntual la Unidad debe manejarse con realismo; de todos modos, al margen de dichos lmites hay una amplia cantera para trabajar.
Lo que los integrantes de la Unidad de Investigacin deben tener
siempre presente es que con respecto al propietario se mueven
en una suerte de campo minado; donde menos se espera surgen
conflictos. As, cuando la publicacin de un trabajo puede
acarrear problemas judiciales, es importante advertir tempranamente al propietario, de modo que decida asumir el riesgo o
echarse atrs.
Los riesgos son perfectamente previsibles y un trabajo responsable debe sealarlos con claridad, de modo que no creen situaciones desagradables. Por otro lado, cuando el propietario decide
asumir los riesgos, la Unidad se sentir fuertemente respaldada.
Una ltima cuestin en la que los propietarios se muestran muy
duros tiene relacin con los costos de las investigaciones, por lo
que es aconsejable que hasta que la Unidad Investigativa est
slidamente implantada, se impulsen proyectos baratos y hasta
moderadamente costosos, de modo que de cara a los resultados,
los propietarios se convenzan de la necesidad de invertir en los
trabajos.
5. Tensiones con los editores
Otro foco de tensiones se instala frecuentemente entre los editores y la Unidad Investigativa. Por el poder que los editores tienen
en el manejo general del medio, ocupan una posicin
privilegiada que pueden utilizar para hostilizar a la Unidad
Investigativa.
Un ejemplo concreto: concluida la investigacin, la Unidad solicita un espacio privilegiado para su publicacin. El editor
presenta inconvenientes para conceder dichos espacios. Pero
como la Unidad Investigativa tiene materiales que pueden tener

Pgina

48

alto impacto social, presiona -va Direccin- para que se le


conceda el espacio solicitado, lo cual finalmente se consigue
pero al costo cierto de un desgaste en su relacin con el editor.
Los roces entre editores e investigadores suelen extenderse a
todo el cuerpo de redaccin, mbito en el que los redactores de
noticias diarias frecuentemente desarrollan el prejuicio de que
los investigadores tienen condiciones laborales y salariales
privilegiadas. Esto se da, obviamente, por la falta de
comprensin acerca del trabajo de la Unidad Investigativa, que
como ya se apunt maneja tiempos diferentes para ofrecer
resultados, lo cual solamente pocos entienden.
Diferencias entre la Unidad de Investigacin y las dems
secciones
1. El plantel investigador: La Unidad Periodstica de Investigacin
es el plantel estable de un medio, cuya actividad es la
realizacin sistemtica de investigaciones. La regla de oro
bajo la cual trabaja es la relacin directa con la Direccin, sin
que el plantel est subordinado a los editores, lo cual entorpece
y acarrea riesgos.
2. El espacio de trabajo: Lo ideal es que la Unidad disponga de
un espacio fsico independiente de la Sala de Redaccin, con
lnea telefnica autnoma. No obstante, la realidad dista mucho
de lo ideal, de donde a veces lo mximo que obtiene la Unidad
es un cuarto independiente dentro de la Redaccin.
3. El tiempo de trabajo: La duracin de los trabajos de
investigacin periodstica vara sensiblemente. Hay trabajos
simples que llevan tiempo, y trabajos complejos que arrojan
rpidos resultados. Lo ideal consiste en mechar trabajos simples
con complejos, de modo que se calmen las ansiedades y presiones con resultados, paralelamente a la realizacin de trabajos
ms amplios y profundos.
4. Presiones del propietario del medio: Resultados rpidos y
escasez de recursos para invertir en la Unidad, son los componentes fuertes del discurso del propietario del medio con respecto a las investigaciones. La Unidad se mueve como en un
campo minado, debiendo prestar permanente atencin para

Pgina

49

evitar situaciones desagradables y causar hasta medidas drsticas, como el despido.


5. Tensiones con los editores: Pocos editores comprenden que la
Unidad investigativa precisa espacios apropiados y mayores
tiempos para que sus actividades ofrezcan resultados. Ese es el
origen de una tensin permanente, que a veces se extiende a
todo el cuerpo de redactores, que desarrollan el prejuicio de que
los investigadores son una suerte de privilegiados.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
REYES, GERARDO. Periodismo de Investigacin. Trillas,
Mxico, 1996. Captulo 2; pginas 45 al 72.
CRUCIANELLI,
SANDRA.
Fracaso
de
las
unidades
investigativas?. Sala de Prensa, Web para profesionales de
la
comunicacin
iberoamericanos.
CANTANERO, MARIO ALFREDO. Periodismo de Investigacin
en El Salvador: amarrado por las presiones y los temores.
Sala de Prensa, Web para profesionales de la comunicacin
iberoamericanos.

50
Pgina

CAPITULO V
LAS FUENTES

1. Definicin y clasificacin. 2. Fuentes confidenciales. 3. Fuentes


documentales. 4. Fuentes permanentes y eventuales. 5. Anlisis
de las fuentes. 6. La relacin con las fuentes.
1. Definicin y clasificacin
Se define como fuente a la persona, cosa o suceso de donde
emana informacin. La fuente puede ser un hecho, como puede
ser una persona, como puede ser un documento o un libro. La
declaracin jurada de un funcionario pblico, por ejemplo, puede
ser una fuente, como tambin puede serlo un balance; no hay
razn consistente para considerar con exclusividad a la persona
como fuente.
Las fuentes de clasifican, en general, de la siguiente manera:
personales,
escritas, o
factuales.
Las fuentes personales constituyen aquellas personas poseedoras de informacin, dispuestas a referirlas. As, una persona
que sabe mucho pero que no est dispuesta a hablar no es
fuente.
Las fuentes escritas consisten en registros grficos diversos, a
los que se puede acceder, y que revelan informacin valiosa. Las
fuentes factuales son los hechos en s, pero no todos los hechos
son fuentes, por ms que todos los hechos informen sobre algo;
solamente lo son los hechos relevantes desde el punto de vista
informativo.
Las fuentes vuelven a sub-clasificarse:
Las fuentes personales, por ejemplo, tienen dos sub-clasificaciones, de acuerdo con ciertos criterios.

Pgina

51

Conforme al criterio de pertenencia a una entidad privada o


pblica, las mismas pueden clasificarse en oficiales, oficiosas o
independientes.
Son oficiales las fuentes que ofrecen informaciones en nombre y
representacin de la entidad en cuestin.
Son oficiosas las fuentes que siendo de la entidad ofrecen informaciones sobre la misma sin tener representacin, o mejor,
sin aparecer como tal.
Son independientes las fuentes que ofrecen informacin sobre
entidades a las que no pertenecen.
De acuerdo con el criterio de referibilidad, las fuentes se clasifican en referibles y confidenciales.
Referibles son las que se pueden mencionar. Confidenciales son
las que permanecen en el anonimato.
Las fuentes escritas se sub-clasifican en bibliogrficas, publicaciones, documentos, testimonios y bancos informticos de datos.
Las bibliogrficas son los libros.
Las publicaciones pueden ser de las ms variadas: desde diarios
y otras publicaciones peridicas hasta memorias anuales de
entidades pblicas o privadas, pasando por publicaciones de
asociaciones, gremios, cooperativas, particulares,...
Los documentos constituyen registros contables o informes oficiales, de entidades pblicas o privadas.
Los testimonios pueden ser agendas personales, diarios personales, correspondencias,...
Los bancos informticos de datos constituyen registros
sistematizados, actualmente accesibles a cualquier persona a
travs de Internet.
Las fuentes factuales pueden ser espontneas o provocadas,
segn haya o no existido intervencin intencional en la ocurrencia de un hecho.

52

2. Fuentes confidenciales

Pgina

La fuente confidencial es bsicamente la que no se puede mencionar. Para el periodismo de investigacin es esencial disponer
de fuentes confidenciales, pues por lo general ofrecen una
importante masa de informacin valiosa.
El hecho de no poder mencionar a la fuente tiene un problema,
pues la informacin que proviene de una fuente no referida puede ser puesta en duda. Puede tener escasa o nula credibilidad,
dependiendo de cmo se la utilice. Inversamente, una fuente
referible resulta ms creble.
Con respecto a la masa de informaciones ocurre exactamente lo
contrario: una fuente confidencial ofrece por lo general mucha
informacin, mientras que una fuente referible ofrece poca informacin. La cuestin es simple, pues cuando se asegura a la
fuente el anonimato, la misma est dispuesta a decir ms cosas,
lo que se da de manera inversa en la fuente que se ir a
mencionar, sobre todo cuando se trata de asuntos delicados.
Para la Unidad investigativa es fundamental contar con fuentes
confidenciales, las que pueden ser episdicas o permanentes. De
las episdicas uno precisa cuando est tratando sobre una cuestin puntual y la persona solamente puede aportar para el esclarecimiento de ese caso. Fuentes confidenciales permanentes son
personas que ocupan una posicin que les permite manejar mucha informacin, en una entidad pblica o privada, y a quien se
recurre con cierta frecuencia.
Trabajar con fuentes confidenciales requiere de un proceso a
veces prolongado.
En el marco del tratamiento que el periodista debe dar a toda
fuente, es esencial tratar de saber qu motiva a la fuente a
cooperar; la motivacin puede ser desde idealista hasta
mezquina
En el caso de una fuente episdica, el tratamiento que se sugiere
contempla dos pasos fundamentales:
(1) Validar todas las informaciones proporcionadas con por lo
menos dos fuentes independientes, y

Pgina

53

(2) Evaluar el grado de confiabilidad de la fuente con personas


independientes de la misma.
El tratamiento que se aconseja dar a las fuentes permanentes
incluye ambos pasos, pero para que se constituyan en fuentes
permanentes hay que realizar en todos los primeros casos la
validacin con fuentes independientes. Si parte claramente
mayoritaria de lo que las fuentes informan se ajustan a los
hechos, es altamente probable que se est ante fuentes
confidenciales de alta confiabilidad e inestimable utilidad; si
solamente se ajusta a los hechos parte de lo que informan, se
tratar de fuentes confidenciales de relativa utilidad; si poco o
nada se ajustan las informaciones a los hechos se est sin
fuentes.
En el marco del proceso de obtencin de fuentes confidenciales,
resulta esencial que los investigadores sepan ganar la confianza
plena de las mismas, lo que por lo general se consigue por la va
de un manejo rigurosamente reservado del origen de las
informaciones.
Si no se respeta la discrecin en cuanto al origen de las
informaciones, no solamente se perdern las fuentes afectadas,
sino que se cerrar la posibilidad de obtener otras fuentes de
informacin. Es una obligacin profesional de primer orden
preservar a las fuentes.
3. Fuentes documentales
Las fuentes documentales resultan de primersima importancia
en toda la actividad periodstica, y ms aun en el periodismo de
investigacin, pues por lo general se saca a luz hechos o procesos que se pretenden ocultar, y un slido apoyo documental al
trabajo realizado, constituye un respaldo muchas veces irrefutable.
No cabe la menor duda sobre que tiene un peso diferente de
mostrar la evasin fiscal que viene perpetrando una empresa X
contra el fisco, con y sin documento probatorio. La falta de documento no significa que el ilcito no se est realizando, pero la
prueba documental es contundente.

Pgina

54

La Unidad Investigativa debe poner especial empeo en obtener


respaldos documentales, para lo cual debe trazar todo un plan
para lograrlos.
Una lnea de procedimientos puede ser el que sigue:
(1) Si se tiene elementos suficientes sobre manejos irregulares
en una reparticin pblica X, se debe proceder a determinar cuales seran los elementos documentales necesarios para respaldar
lo que se ir a revelar.
(2) Determinada la gama de documentos que puedan resultar
tiles, se debe proceder a identificar dnde se encuentran y
quines tienen acceso a los mismos.
(3) Identificada las personas que tienen acceso a los documentos
se debe estudiarlas, y se debe buscar la manera de lograr que
las mismas los proporcionen.
Obtener documentos no es fcil, pero tampoco es imposible. La
Unidad Investigativa debe ser creativa y gil en la bsqueda de
los mismos. Hay varias maneras de hacerlo y a veces pasa simplemente por persuadir a las personas ciertas para conseguirlos.
Hay documentos de alto valor, por ejemplo, que pasan por las
manos de personas que no estn involucradas en los hechos a
ser revelados. Para conseguirlos basta con que el investigador
sea capaz de ganar la confianza de dichas personas.
Las oportunidades son mltiples y van desde personas molestas
con alguien o con algo, que estn dispuestas a ceder documentos, hasta personas que por ideales rechazan ciertas
prcticas y estn predispuestas a colaborar, pasando por
personas ajenas a los hechos, a los que solamente falta
persuadirlas para cooperar.
Una advertencia clave: el trabajo no termina con la obtencin de
los documentos.
En primer lugar, hay que cerciorarse de la autenticidad de los
mismos. Este cuidado sobre todo hay que tener con respecto a
los documentos que se obtienen con mucha facilidad; pueden
ser falsos y su uso puede resultar tremendamente negativo para
la investigacin.

Pgina

55

Confirmada la autenticidad hay que recurrir a tcnicos para su


mejor comprensin, sobre todo cuando se trata de elementos
contables con los que el investigador no est bien familiarizado.
No es difcil leer un balance, por dar un ejemplo, pero no est de
ms apelar a un especialista, de modo que se tenga una
confirmacin ms firme sobre el asunto.
4. Fuentes permanentes y eventuales
Por lo general los periodistas trabajan con fuentes eventuales,
debido a la diversidad de asuntos de que se ocupan. Las fuentes
eventuales, sin embargo, pueden ser necesarias en otras oportunidades, por lo que es recomendable dejar un buen precedente
con las mismas.
La investigacin puntual sobre sistema penitenciario, por ejemplo, puede poner en contacto a los investigadores con fuentes
del Ministerio de Justicia o de la Direccin de Institutos Penales.
Si en el marco del trabajo los investigadores dejaron una buena
imagen ante sus colaboradores eventuales, deja sentada la base
que le puede posibilitar eventualmente volver a apelar a ellas
para otros casos.
Pero lo ms importante para una Unidad Investigativa es disponer de una buena cantidad de fuentes permanentes, considerndolas de ese modo si se apela a ellas con cierta
sistematicidad.
Hay lugares claves donde se necesita tener fuentes permanentes, como ser el caso de los organismos contralores, por ejemplo,
que suelen manejar informaciones relevantes sobre asuntos que
con cierta frecuencia se investigan. As, por dar un ejemplo, teniendo fuentes permanentes en organismos contralores se
puede acceder a denuncias de malversaciones, de desvos, de
enriquecimiento ilcito, de trfico de influencia, de nepotismo,...,
una cantidad importante de informaciones, que pueden dar pie a
una investigacin o contribuir a otra que se est realizando.
De ah que la Unidad Investigativa debera tener un registro de
las fuentes de que dispone de manera permanente. Pero dicho
registro debe ser bien manejado, con claves para la designacin
de las instituciones y de las fuentes. Esto es obligatorio sobre

Pgina

56

todo cuando se trata de fuentes confidenciales, cuyas


identidades necesitan ser preservadas ante cualquier riesgo.
Por algn accidente o descuido, dicho registro puede caer en
manos ajenas a la Unidad investigativa, de donde si hay manejos
discretos y adecuados del registro el hecho no genera situacin
peligrosa alguna. Y a la inversa si los manejos fueron
displicentes.
Dicha red de fuentes permanentes necesita ser contactada con
cierta periodicidad; pueden surgir asuntos importantes. Cuando
la fuente ir a proporcionar informaciones y documentaciones es
importante montar un esquema de proteccin a la fuente,
independientemente de que la misma sea confidencial o no.
Cuestiones elementales: encuentros discretos, lejos de miradas
curiosas, con pocas o ninguna evidencia acerca de lo que se est
haciendo.
Con las fuentes permanentes, de hecho, se pueden establecer
sistemas de contacto que mimeticen la relacin. Nada de
ostentacin le favorecer a la parte investigadora ni a la fuente.
5. Anlisis de las fuentes
Tanto las fuentes personales como documentales deben ser sometidas a un riguroso anlisis por la Unidad Investigativa, de
modo que las que se empleen en los trabajos finales sean
fuentes firmes.
En el caso de las fuentes documentales -como ya se apunt- es
esencial establecer la autenticidad. Esta tarea no es simple,
sobre todo en el presente, en que existen mecanismos
tecnolgicos avanzados para falsificar documentos. A travs de
un scanner, por ejemplo, se puede reproducir con alta
fidelidad la firma de cualquier funcionario pblico o privado. De
ah que al estar ante un documento que revela anormalidades,
sean graves o no, lo correcto es recurrir a todos los mecanismos
de verificacin de autenticidad, antes de utilizarlo. Y en casos
muy delicados, inclusive hay que recurrir a peritos, de modo que
los pasos que se den con el documento resulten incuestionables.

Pgina

57

En los casos de fuentes personales, el anlisis es ms complejo,


pero resulta fundamental establecer con alto nivel de precisin
qu motiva a la fuente a cooperar.
La motivacin de la fuente puede ser la ms vil, como tambin
puede ser la ms noble.
Hay casos en que las fuentes personales cooperan movidas por
intenciones muy mezquinas, como ser el estar en la lnea de
sucesin y querer provocar la cada del titular del cargo
ambicionado, que presuntamente comete irregularidades.
En casos de este tipo la Unidad investigativa tiene que tener
mucho cuidado con las informaciones que se le proporcionan, las
que pueden ser reales o falsas, o que an siendo reales pueden
estar sobredimensionadas.
El que quiere subir es una buena fuente, sin lugar a dudas, pero
las informaciones que ofrece deben ser cuidadosamente validadas, pues se puede estar ante alguien que quiere subir a
como de lugar, lo cual lo torna fuente potencialmente
tendenciosa.
Otra motivacin puede ser el disgusto, que independientemente
de donde provenga -sancin, maltrato,... - predispone al afectado a dar a conocer lo malo que conoce sobre el otro, superior o
colega. Las informaciones provenientes de una persona enojada
frecuentemente son exageradas. El enojado es una buena
fuente, pero habr que confirmar la veracidad de sus denuncias
con otras fuentes.
Motivaciones menos ruines tambin pueden llevar a una fuente
a cooperar. Las ms frecuentes son la charlatanera y el
vedettismo. Pero pese a que los mviles no son mezquinos, las
informaciones igualmente pueden estar contaminadas, exageradas o minimizadas, o mismo inventadas. De ah que al estar ante
fuentes de los tipos descriptos, habr que confirmar de igual
modo la veracidad de las informaciones proporcionadas.
La motivacin de la fuente puede ser la ms noble: sintiendo
repugnancia ante prcticas que lesionan severamente sus valores, la fuente se dispone a colaborar. Estas son las ms raras,
pero son las mejores. Por lo general ni sobredimensionan ni

Pgina

58

minimizan; no hay intencin de perjudicar. Pero no solamente


son las ms fiables, sino que son las que mejor predisposicin
tienen para obtener soportes documentales y ofrecer todos los
detalles que se necesitan para montar los rompecabezas.
De todos modos, este es el lugar exacto para ubicar una regla de
oro en la prctica periodstica investigativa: Nunca, en ningn
caso, hay que creer ciegamente en la fuente.
Retomando el hilo central, el anlisis de las motivaciones de las
fuentes es esencial, pues permitir a la Unidad Investigativa
poner la dosis de credibilidad o de duda necesaria en cada caso.
Y esto aportar, obviamente, mayor imparcialidad y ms objetividad a su trabajo.
6. La relacin con las fuentes
La relacin con la fuente presenta normalmente complicaciones
diversas, pues al final de cuentas se trata de alguien que coopera con un trabajo puntual, o con varios trabajos. De ah que
resulte difcil guardar la distancia necesaria, pero hay que tener
bien presente que para el profesional la fuente es fuente, nada
ms.
No obstante, la realidad muestra cotidianamente que los periodistas se involucran con sus fuentes fuera de los marcos
estrictamente profesionales. A veces desarrollan relaciones
amistosas, pasajeras o permanentes, y hay casos en que
desarrollan relaciones amorosas, pasajeras o permanentes.
El asunto es complejo, pues al tratarse de vnculos entre seres
humanos se abre la posibilidad terica de que la relacin originariamente profesional derive en otro tipo de relacin. Y el hecho
de que el vnculo implique confesiones de asuntos importantes
favorece mucho tales transformaciones.
Los peligros que derivan de ello son mltiples, pues entre la
amistad o el apasionamiento y la complicidad hay un trecho extremadamente corto; apenas basta un paso.
Al transformarse la relacin de profesional en cmplice, el investigador pierde objetividad e imparcialidad y corre el serio
riesgo de convertirse en un instrumento de la que en el pasado
hiera apenas una fuente. As, si la motivacin de la fuente era

Pgina

59

lograr algo, su ahora cmplice la ayudar a llegar, a como de


lugar.
De producirse un involucramiento personal que exceda los marcos profesionales, es importante informar sobre el caso a todos
los integrantes de la Unidad investigativa, de modo que se pueda evaluar los alcances del hecho. Ocultar la eventual relacin
constituye un peligro grave, pues se puede estar confiando ciegamente en el trabajo de alguien que ya procede como cmplice
y no como profesional.
Hay medidas preventivas que pueden minimizar los riesgos sealados, algunas de aplicacin temprana. As, por ejemplo,
personas enamoradizas o propensas a establecer relaciones
amistosas con las personas que entran en contacto, no deben
ser integradas a la Unidad investigativa; ms tarde o ms
temprano traern problemas.
Hay medidas, tambin, que se pueden adoptar en el curso del
trabajo. Por lo general, la Unidad Investigativa tiene una idea del
perfil que tiene la fuente: sexo, edad, tendencias,... Para entrar
en contacto con ella hay que elegir a la persona adecuada, que
es aquella que tendr mayor control de la situacin.
Por dar un ejemplo: si la fuente es un hombre, un rasgo hipottico puede ser que se suelte ms con mujeres que con
hombres, o a la inversa. Lo recomendable es favorecer el mejor
abordaje de la fuente, con la persona ms indicada. Se corre
riesgos? Si. Y en caso de accidentes? No resta sino
administrarlas.
SNTESIS
1. Definicin y clasificacin: Fuente es toda persona, cosa o
suceso de donde emana informacin. Se clasifican en
personales, escritas y factuales, las que a su vez vuelven a
clasificarse. Las personales se sub-clasifican en oficiales,
oficiosas o independientes, de acuerdo al criterio de pertenencia;
y en referibles o confidenciales, de acuerdo al criterio de
referibilidad. Las escritas se sub-clasifican en bibliogrficas,
publicaciones,
documentales,
testimoniales
y
bancos
informticos de datos.

Pgina

60

2. Fuentes confidenciales: Son, bsicamente, las que no pueden


ser mencionadas. Pueden ser eventuales o permanentes, segn
cooperen con una nica investigacin o resulten tiles para
varias. Al no ser referibles se puede poner en duda la veracidad
de sus aportes; pero la gran ventaja es que al contar con la
garanta de permanecer en el anonimato ofrecen una masa
importante de informaciones.
3. Fuentes documentales: Un slido respaldo documental a una
investigacin concreta constituye un slido respaldo, a veces
contundente. Hay pasos a seguir para obtener documentos: ubicarlas, saber quienes tienen acceso y hacer lo necesario para
obtenerlas. El trabajo no termina en la obtencin, pues habr
que establecer la autenticidad de los mismos.
4. Fuentes permanentes y eventuales: Es frecuente trabajar con
fuentes eventuales, por la diversidad de casos que se investigan,
pero resulta esencial para la Unidad investigativa disponer de
una red de fuentes permanentes. Tanto en los casos eventuales
o permanentes, hay que montar esquemas de proteccin a las
fuentes.
5. Anlisis de las fuentes: Tanto las fuentes personales como
documentales deben ser analizadas. En el caso de los documentos, sobre todo la autenticidad; en el caso de las personales
tratar de determinar los mviles que lo llevan a cooperar, que
pueden ser ruines como muy nobles. El anlisis terminar
aportando mayor imparcialidad y objetividad al trabajo.
6. La relacin con las fuentes: La relacin con las fuentes suele
presentar complicaciones inesperadas, pues una relacin meramente profesional puede transformarse en personal, amistosa o
hasta amorosa. Hay que contactar con las fuentes con las personas ms adecuadas. Se corre riesgos? S. Y en casos de
accidentes no resta sino administrar el problema.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
RIVADENEIRA PRADA, RAUL. Periodismo: la teora general de
los sistemas y la ciencia de la comunicacin. Trillas, Mxico,
1990. Captulo 5. Pginas 67 al 100.

Pgina

61

RODRIGUEZ, PEPE. Periodismo de investigacin: tcnicas y


estrategias. Paids, Espaa, 1994. Captulo 4; pginas 65 al
102.
SECANELLA, PETRA M. Periodismo de investigacin. Tecnos,
Espaa, 1986. Captulos 13, 14 y 15; pginas 89 al 108.
QUESADA, MONSERRAT La investigacin periodstica. Ariel,
Espaa, 1987. Captulos 9 y 10; pginas 87 al 112.

CAPITULO VI
TCNICAS DE INVESTIGACIN PERIODSTICA
1. Estrategia y tcnica 2. Uso de confidentes 3. Infiltracin propia
4. Infiltracin de terceros 5. Involucramiento en los hechos
investigados 6. Provocar contacto con los factores investigados
7. Mover el avispero 8. Suplantacin de personalidad 9. Nuevas
tcnicas e ingeniosidad
1. Estrategia y tcnica
Antes de abordar el tema de las tcnicas de investigacin periodstica es importante precisar la diferencia existente entre los
vocablos tcnica y estrategia, que frecuentemente se confunden
en los escritos de gran parte de los tericos y profesionales que
escriben sobre el tema, ya sea en general o para evaluar
experiencias puntuales.
Estrategia y tcnica (o tctica) son dos trminos estrechamente
vinculados, teniendo la estrategia la connotacin de objetivo y la
tcnica la manera de alcanzar tal objetivo.
En realidad, corresponde a la estrategia establecer el objetivo
final y los objetivos intermedios, de corto y de mediano plazos; y
la tcnica consiste en los mecanismos concretos que se emplean
para alcanzar los objetivos intermedios y el final. Y as -al igual
que en las ciencias militares- habra que emplear tambin ambos
trminos en el periodismo de investigacin.
De hecho, una investigacin periodstica concreta, en su fase de
planificacin, encierra ambos elementos: objetivos y procedimientos.

Pgina

62

Ahora bien, al margen de los aportes puntuales que sobre el


tema concreto de las tcnicas han realizado diversos escritores,
profesionales, no cabe la menor duda sobre que el trabajo
brillante de Pepe Rodrguez ha realizado una sistematizacin
bastante completa sobre las tcnicas que se utilizan con mayor
frecuencia y que resultan altamente efectivos.
Hay que aclarar, sin embargo, que como existe un proceso de
construccin terica sobre la prctica conocida como Periodismo
de Investigacin, los aportes se siguen y se seguirn dando,
pues la variedad de experiencias es grande y algunos
investigadores son muy ingeniosos en la bsqueda de
informaciones. Es decir, sobre tcnicas -como sobre los dems
aspectos- aun no est dicha la ltima palabra.
2. Uso de confidentes
El empleo de fuentes confidenciales debe ser una constante en
el periodismo de investigacin. Para garantizar el desarrollo exitoso de su trabajo, la Unidad Investigativa debe disponer de una
red de confidentes, la que debe ir montando con paciencia, pero
de manera permanente.
Los confidentes pueden ser permanentes o episdicos, los cuales
requieren de tratos diferenciados. Los confidentes episdicos son
los que pueden ayudar a la solucin de una investigacin
puntual, concreta, proporcionando informaciones valiosas sobre
el caso en cuestin. Los confidentes permanentes son personas
especiales, que manejan una variedad
importante de
informaciones en reas grandes o en varias, por lo que se apela
a ellos con frecuencia, pues siempre tienen algo que aportar.
Aunque parezca un contrasentido, disponer de fuentes confidenciales episdicas resulta ms complicado que contar con
fuentes confidenciales permanentes.
Por una parte, cuando la Unidad Investigativa est trabajando un
caso nuevo -uso de recursos en la red pblica de Relaciones
Internacionales, por ejemplo- necesita de informaciones que pocas personas manejan con consistencia, por lo general
desconocidas para la Unidad, y a las que hay que acceder por
alguna va para ver la posibilidad de obtener informaciones
valiosas.

Pgina

63

La Unidad puede recurrir a periodistas rutinarios del rea, para


tener algunas pistas, o contactar con funcionarios retirados del
servicio diplomtico, o establecer un puente con investigadores
de otros pases, pero la informacin recogida casi invariablemente ser insuficiente.
De todos modos, hay pasos que necesariamente habr que seguir para maximizar las posibilidades de obtencin de confidentes episdicos:
Primer paso: Elaborar un listado de posibles confidentes. Para
ello los contactos anteriormente referidos pueden contribuir. Se
debe tratar de personas que disponen de informaciones valiosas.
Segundo paso: Trazar un perfil de cada uno de los integrantes de
la nmina de posibles confidentes. Dicho perfil debe ser el ms
completo posible, con nfasis en aspectos de la personalidad,
como ser introvertido o extrovertido; persona abierta o
cerrada.
Tercer paso: Disear un plan de aproximacin, para lo cual puede
resultar clave que se d a travs de alguna persona de su
entorno laboral o familiar. Puede darse el caso de que lo ms
conveniente sea una aproximacin sin intermediacin alguna.
Producida la aproximacin a una potencial fuente confidencial se
instala el problema ms complicado, pues el objetivo es lograr la
cooperacin de la misma, sin advertir en ningn momento de lo
que se est trabajando. Si la fuente no coopera pero no se
entera de la cuestin de fondo, no hay problemas, pero si no
coopera y percibe lo que se est buscando, puede significar el
total fracaso del trabajo.
En caso de lograr la cooperacin, aplicar todas las normas
descriptas sobre relacionamiento con las fuentes. Si la fuente solamente pudo haber cooperado en ese proceso puntual, cortar el
vnculo inmediatamente despus, por seguridad tanto de la
fuente como de la Unidad Investigativa.
Las fuentes permanentes tienen un tratamiento diferente. Por lo
general se trata de personas que manejan masas importantes de
informaciones valiosas de un rea o varias, como ser econmicas o polticas, o ambas a la vez.

Pgina

64

Cooperan por diversos motivos: idealismo, disgusto o aun diversin. Aunque parezca mentira, hay personas que tienen la
mana de acopiar informaciones sobre personajes importantes,
o negocios, o gestiones, y que estn dispuestas a transmitir lo
que saben hasta con lujo de detalles toda vez que se preserve su
identidad.
Se trata de las mejores fuentes, sin lugar a dudas, pero tambin
son las que plantean problemas de relacionamiento ms delicados, en el sentido de que por ser fuentes permanentes
resulta difcil limitar la relacin al campo estrictamente
profesional.
De todos modos, con ellos se aplican las normas generales de
relacionamiento con las fuentes, por una parte, y por ms que
sean altamente fiables, todas sus informaciones tienen que ser
confirmadas por otras fuentes, por otra.
Una Unidad Investigativa que carece de una buena red de confidentes tropezar permanentemente con dificultades en el marco de sus actividades. Montarla lleva tiempo y trabajo, pero montada se facilita el trabajo y se obtiene mejores y mayores
resultados.
Es la tcnica utilizada con mayor frecuencia, pero tambin es
una de las ms efectivas.
3. Infiltracin propia
La tcnica de infiltracin propia consiste bsicamente en que
uno de los integrantes de la Unidad Investigativa se infiltre en el
seno mismo del grupo, organizacin o institucin que est siendo
sometido a investigacin.
Para hacerlo con eficacia se necesita de un entrenamiento previo, as como del conocimiento ms exacto posible de los riesgos
que se corre. Tcnica compleja, sobre todo por los riesgos, se la
ha empleado y emplea en diversas latitudes hasta con
frecuencia.
Algunos ejemplos comunes ilustran sobradamente sobre los
riesgos reales que se debe asumir:

Pgina

65

- Crceles: Se ha infiltrado e infiltra centros penitenciarios para


conocer por dentro su funcionamiento, o para detectar posibles
irregularidades en el campo, o para ambas cosas. Se corren riesgos diversos: desde violencia fsica hasta violencia sexual.
- Manicomios: Se realiza con la finalidad de precisar cmo son
tratados los enfermos mentales, o para detectar posibles
irregularidades, o para ambas cosas. Se corren riesgos diversos:
desde violencia fsica hasta violencia sexual, pasando por
medicaciones que pueden influir fuertemente sobre la
concentracin y el comportamiento.
- Logias: Se las infiltra para conocer por dentro cmo funcionan y
para detectar eventuales irregularidades. Se corre el riesgo de
ser cooptado.
- Sectas religiosas: Con igual finalidad que el caso de las logias y
con idntico riesgo.
Es posible infiltrar una amplia variedad de organizaciones, grupos o instituciones, lo cual ofrece la ventaja incuestionable de
conocer por dentro cmo funcionan, qu irregularidades son frecuentes, qu prcticas son comunes,..., pero en todos los casos
hay riesgos ciertos, algunos de los cuales pueden ser muy peligrosos.
Clubes deportivos, gremios empresariales o de trabajadores,
grupos polticos clandestinos, movimientos gays, sectas
satnicas, reparticiones policiales o militares,... El abanico es
amplio, pero as como presenta ventajas privilegiadas ver in
situ cmo operan, hay que tener consciencia de los riesgos que
se corren.
La mejor manera de realizar la infiltracin exige el entrenamiento previo de la persona que ser infiltrada.
El entrenamiento debe contemplar el conocimiento a fondo de
todo lo relativo a lo que se ir a infiltrar y la comprensin
ms exacta posible de los riesgos que se ir a correr. La
improvisacin es peligrosa doblemente, pues al detectarse la
infiltracin por el infiltrado, los riesgos se multiplican y se
agrandan.

Pgina

66

Lo que ofrece el entrenamiento como ventaja es una suerte de


preparacin del infiltrado para administrar situaciones conflictivas, cotidianas o eventuales.
Por otra parte, la infiltracin requiere planificacin: - manera en
que se concretar,
- tiempo que durar (el necesario; ni ms, ni menos),
-mecanismos de registro de las informaciones,
-manera de abandonar la instancia infiltrada, y
- mecanismos de emergencia para eventualidades imprevistas.
Es obvio que la planificacin no debe ser tan rgida al extremo
de aplicarlo de manera matemtica cuando se aconseja
modificar algo. Por ejemplo, situaciones favorables pueden
aconsejar la permanencia en el lugar; grupo u organizacin por
ms tiempo. La flexibilidad, entonces, es recomendable, pero
entre improvisar y planificar no cabe dudas sobre que nada hay
que infiltrar sin planificacin.
4. Infiltracin de terceros
La tcnica de la infiltracin de terceros consiste en que una
tercera persona -que no integra la Unidad investigativa- es infiltrada en un grupo, institucin u organizacin para obtener informaciones valiosas desde dentro.
Se la utiliza en casos especiales, en que resulte imposible la
infiltracin de uno de los integrantes de la Unidad investigativa.
Un ejemplo simple sirve para ilustrar sobre la tcnica y sobre las
complejidades que encierra.
Debido a informaciones relativamente firmes se sabe que en un
Hogar de Ancianos X se practican irregularidades, las que para
ser comprobadas requieren de una observacin directa. Por razones de edad de los investigadores, se recurre a una persona de
edad avanzada que est dispuesta a cooperar; se la prepara y se
la infiltra en el medio que se quiere observar.
Colocada de esa manera la tcnica se presenta como muy simple y fcil de realizar. No obstante, tiene sus complejidades que

para

garantizar

el

Pgina

67

deben ser adecuadamente resueltas


desarrollo exitoso de la investigacin:

- Perfil de la tercera persona: Debe ser la persona adecuada para


la infiltracin y la apropiada para la finalidad; doble cualidad
muchas veces no muy fcil de encontrar. En nuestro ejemplo
concreto, por ejemplo, necesitamos una persona de edad
avanzada (1), con el desarrollo intelectual suficiente para acopiar
y transmitir las informaciones que se precisan (2). Una docente
jubilada, por ejemplo, puede reunir ambas cualidades, pero ah
se suman otras que se requieren: alto nivel de credibilidad;
buena capacidad de retencin,... El perfil de la tercera persona
no debe ser similar al del periodista investigador, pero debe ser
el ms completo de acuerdo con los requerimientos del trabajo.
- Preparacin de la tercera persona: Contactada y persuadida de
colaborar, la persona a ser infiltrada necesita ser entrenada. La
tercera persona debe saber con precisin qu es lo que se
quiere en cuanto a informaciones; cmo proceder para acopiar
las mismas; cmo transmitirlas. Debe saber, tambin, cmo
debe actuar para evitar que alguien advierta el trabajo que est
realizando Y si hay riesgos, debe estar debidamente informada
sobre los mismos y dispuesta a asumirlas. Siguiendo el ejemplo:
una de las irregularidades que se maneja sobre el Hogar de
Ancianos es que las internas suelen ser examinadas por un
mdico cuya morbosidad consiste en tocar sus genitales. La
tercera persona debe estar con pleno conocimiento de que
puede ser sometida a dicho examen.
El problema ms complejo que presenta la tcnica de infiltrar
terceras personas, sin embargo, reside en el hecho de que para
ser breve la Unidad investigativa est observando el terreno a
travs de terceros ojos, lo cual expone a la Unidad a ser
informada deficientemente, ya sea por exageraciones o
minimizaciones, o hasta por invenciones.
La tcnica es aplicable a distintas situaciones, como ser infiltracin
de
orfelinatos,
internados
de
estudiantes,
correccionales,...
En cuanto a lo dems, se debe proceder como en el caso de la
infiltracin propia: alto nivel de planificacin, que se manejar

Pgina

68

con flexibilidad. En el caso de la infiltracin de terceros, la improvisacin es un paso en direccin al fracaso; as de simple.
5. Involucramiento en los hechos investigados
Cuando el periodista investigador participa del hecho investigado como protagonista se est ante lo que se conoce como
involucramiento con los hechos investigados. El empleo de la
tcnica exige mucha habilidad y experiencia, pues el investigador ir a acompaar de cerca todo el proceso que est siendo
examinado, debiendo ajustarse a todos los procedimientos
correspondientes al mismo.
Un caso que tuvo mucha repercusin -y que ejemplifica claramente como funciona la tcnica- fue el realizado por un
periodista paraguayo, que particip de todos los pasos de
compra y traslado de un vehculo robado, desde el Brasil hasta el
Paraguay.
Planificada la investigacin, el periodista se traslad hasta la ciudad de San Pablo, Brasil, donde contact con personas que se
dedicaban al robo de coches. Cerr el trato para la compra de un
vehculo y su posterior traslado a la capital del Paraguay,
Asuncin.
Despus de robado el vehculo, nico hecho del cual no particip
el periodista, acompa a los traficantes en el vehculo robado
desde San Pablo hasta Asuncin. Durante el largo viaje, de ms
de 1.200 kilmetros, pudo constatar en directo los arreglos
realizados por los traficantes para sortear los puestos de control,
tanto en el Brasil como en el Paraguay.
Ya en Asuncin, el investigador public una serie de notas describiendo con detalles todos los procedimientos utilizados, dejando al descubierto la vulnerabilidad de los sistemas de control
vigentes en ambos pases.
El diario ABC Color, del cual era funcionario el investigador,
coste todo el trabajo y present el vehculo ante la opinin pblica. A travs de la representacin diplomtica en el pas se
pudo localizar fcilmente al propietario original del automvil, a
quien en un acto formal se devolvi el mencionado vehculo.

Pgina

69

Los riesgos a que se expuso el investigador fueron diversos,


pues tena que tener un riguroso control sobre sus reacciones, de
modo a no despertar sospechas entre los traficantes. Los
mismos podan reaccionar de manera imprevisible.
Los costos del trabajo fueron elevados: costeamiento del viaje
(1), compra del vehculo (2), gastos de traslados (3). No
obstante, la finalidad del trabajo se cumpli plenamente: mostr
la facilidad con que se realizaban las operaciones de robo de
vehculos e introduccin de los mismos al Paraguay; puso en
evidencia la complicidad de los funcionarios encargados de la
represin a ese tipo de ilcitos y dej al desnudo la fragilidad de
todo el sistema de control.
Si se tiene en cuenta que Paraguay ha sido uno de los principales mercados tradicionales de vehculos robados en el Brasil, se
puede apreciar la importancia de la realizacin del mencionado
trabajo.
La tcnica puede emplearse en diversos procesos, como ser
propinas en trmites judiciales, administrativos o policiales, o
ante fiscalizadores. Se puede obviamente utilizar en cadenas de
contrabando de diversas mercaderas, compra de armamentos,
etc.
Lo que se debe tener en cuenta al apelarse a la misma, sin embargo, es que siempre resulta costosa, pues lo que se invierte en
los trmites de los que se participa ya no se recupera.
La utilidad social y poltica, no obstante, puede ser inmensa, y el
medio que costea el trabajo adems de ganar mayor circulacin
puede ganar mayor simpata y credibilidad.
Para utilizar la tcnica con posibilidades de xito es fundamental
que el investigador tenga las cualidades que el trabajo exige,
pues adems de experiencia se requiere tener el perfil apropiado
para no despertar dudas en las personas cuyas operaciones se
investiga, o sea, tiene que ser capaz de proyectar la imagen convincente de que se est en el tema.
6. Provocar contacto con los factores investigados

Pgina

70

Una tcnica bastante fcil de emplear y que resulta altamente


efectivo es la de provocar contacto directo con los factores
investigados.
Suponiendo que se tenga denuncias sobre que pide propinas
para perdonar una infraccin de trnsito, la Unidad investigativa
puede montar un operativo, provocando el contacto directo con
los investigados a travs de la deliberada violacin de una ordenanza municipal.
Al producirse el contacto con el agente de trnsito, en el ejemplo
en cuestin, el o los investigadores propone al mismo llegar a
un arreglo, el cual se concreta tras la entrega de la propina a
cambio del perdn de la multa.
Para que el resultado sea ms efectivo, la Unidad investigativa
deber emplear instrumentos de registro sofisticados: cmara
oculta y micrograbadora, de modo que se tenga pruebas
contundentes de que el ilcito se dio.
La operacin tiene que ser completa, o sea, no debe ser interrumpida con el simple pedido de propina o algo similar. El ilcito
se perfecciona con su realizacin, de donde lo que corresponde
hacer es registrar ntegramente el proceso y luego divulgarlo.
Este contacto directo con los factores investigados se puede
realizar con relativa facilidad en muchas circunstancias:
- se puede registrar el momento en que un juez pide propina
para vender una sentencia, o
- que un funcionario judicial acepta una tasa especial para
agilizar un trmite, o
- que un parlamentario acepta el compromiso de votar contra
una determinada ley a cambio de una suma X de dinero.
Las situaciones en que se pueden utilizar la tcnica son diversas;
basta con que se capte un rumor ms o menos firme sobre que
determinadas prcticas se estn realizando, o que se contacte
con personas que estn negociando sentencias o leyes. Es
ms: esto se puede hacer hasta con respaldo judicial.

Pgina

71

Lo que exige de la Unidad de especial es el apoyo instrumental


adecuado, de manera que todo el proceso pueda ser registrado
con la mayor fidelidad posible. No requiere entrenamiento especial, basta con una mnima planificacin.
7. Mover el avispero
La tcnica de mover el avispero consiste bsicamente en soltar un rumor creble en un determinado medio con la deliberada
finalidad de observar las reacciones que provoca dicho hecho.
Para realizarlo hay que disponer de la cooperacin de determinadas fuentes, que estn en posicin de observar las reacciones causadas por el rumor.
Por ejemplo, si existen versiones sobre venta irregular de medicamentos en un hospital pblico, se puede hacer circular el rumor de que habr una intervencin y el posible despido de algunos funcionarios. Si se tiene pistas sobre los posibles
involucrados habr que observar sobre todo la reaccin de los
mismos. En rigor, lo aconsejable es tener un informe completo
sobre todas las reacciones que se produjeron despus de la
circulacin del rumor.
Qu medidas se tomaron, a iniciativa de quin, qu cambios de
dieron en el funcionamiento del rea, cmo reaccionaron los
responsables
principales,
intermedios
y
presuntos
involucrados,... Toda informacin sobre el caso ser de utilidad
para establecer hiptesis de trabajo y determinar pasos a seguir
para ahondar la investigacin.
8. Suplantacin de personalidad
La tcnica conocida como suplantacin de personalidad se
utiliza hasta con cierta frecuencia, pero resulta extremadamente
riesgosa. Consiste esencialmente en hacerse pasar por lo que no
se es para introducirse en alguna institucin, organizacin o grupo.
Ante el hipottico caso de querer entrevistar a algn imputado
en un ilcito que est hospitalizado, por ejemplo, cuando una
investigadora se hace pasar por enfermera para ingresar al
cuarto de internacin y tomar contacto directo con el imputado,
se est ante el empleo de dicha tcnica.

Pgina

72

O cuando uno se hace pasar por tcnico en informtica y se


introduce en la sala del director de una institucin para revisar
sus archivos. O en cualquier otro caso de suplantacin de personalidad.
La tcnica es en el mejor de los casos osada, pues en realidad
para algunos constituye un hecho punible, pues en prcticamente todos los pases existen leyes que penalizan la usurpacin de
ttulos.
Analizando a fondo la tcnica en s, sin embargo, es posible
demostrar que no hay usurpacin de ttulo, pues ello se da en
casos de ejercicio irregular de una determinada profesin, cuando que en la tcnica apenas de utiliza la suplantacin de
personalidad para acceder a determinadas informaciones o
personas, no para ejercer funciones para las cuales no se est
habilitado legalmente.
Es decir, si uno se hace pasar por mdico para hablar con un
paciente sometido a custodia, por ejemplo, no est ejerciendo la
medicina de manera irregular, sino utilizando una artimaa para
ingresar al cuarto del paciente y comunicarse con l.
Hay que advertir que el empleo de dicha tcnica solamente
puede ser empleado con xito por investigadores muy hbiles y
experimentados. La suplantacin de personalidad debe
prever todos los aspectos: desde la vestimenta adecuada hasta
el comportamiento estereotipado de la personalidad suplantada,
lo cual no es simple. Exige alto nivel de planificacin y plena
consciencia de los riesgos que se corren.
9. Nuevas tcnicas e ingeniosidad
El empleo adecuado de las tcnicas apuntadas puede llevar a
buenos resultados, pero como el periodismo de investigacin
est en plena fase de desarrollo, es posible que surjan nuevas
tcnicas gracias a la ingeniosidad de los periodistas que se
dedican al rea.
Con ms recursos y mayor apoyo de los medios es posible incorporar y sistematizar nuevas tcnicas, aunque sean
clonadas de otras formas de investigacin, como el caso de
las investigaciones policiales. Se puede, por ejemplo, realizar

Pgina

73

vigilancia permanente sobre personas sospechosas, si se


dispone de ms medios y mejor entrenamiento; o se puede
desarrollar tcnicas ms sofisticadas de control sobre las
comunicaciones de determinadas instituciones que estn bajo
sospecha, por ejemplo, con los avances impresionantes que se
han dado en los campos de la informtica y de las
telecomunicaciones.
En definitiva, lo que ya se ha construido sirve, pero es posible
seguir avanzando.
SNTESIS
1. Estrategia y tcnica: Hay que distinguir claramente la diferencia entre estrategia y tcnica, siendo que el primer vocablo
tiene la connotacin de objetivo y el segundo de manera para
alcanzar dicho objetivo. En la fase de planificacin, el periodismo
de investigacin incorpora ambos elementos.
2. Uso de confidentes: El empleo de confidentes debe ser una
constante en la prctica investigativa. Hay pasos para convertir
a una potencial fuente confidencial en confidente; los que
seguidos dan resultados ptimos. Montar una red de confidentes
es esencial para la Unidad; montarla no es fcil; montada, ofrece
resultados de alto valor.
3. Infiltracin propia: Consiste en que uno de los integrantes de
la Unidad se infiltre en el seno mismo del grupo, organizacin o
institucin que se est investigando. Su prctica es frecuente,
pero requiere de buen entrenamiento y de una buena planificacin.
4. Infiltracin de terceros: Consiste en infiltrar a travs de terceras personas. Se utiliza en casos especiales, en que resulte imposible que uno de los integrantes de la Unidad se infiltre, como
Hogar de Ancianos. Entrenamiento, buena planificacin y consciencia de los riesgos.
5. Involucramiento en los hechos investigados: Consiste en la
participacin directa del investigador en parte importante sino
en toda la cadena de los hechos que se investigan. Exige mucha
experiencia, auto-control y planificacin adecuada.

Pgina

74

6. Provocar contacto con los factores investigados: Tcnica bastante fcil de emplear y altamente efectiva. Se requiere de un
apoyo instrumental apropiado, para garantizar la contundencia
de los resultados. No exige mucha planificacin ni entrenamiento
especial.
7. Mover el avispero: Consiste bsicamente en soltar un rumor
creble en un determinado medio y observar cmo reaccionan los
diversos actores; desde los responsables principales hasta los
presuntos interesados, pasando por los responsables intermedios.
8. Suplantacin de personalidad: Tcnica muy riesgosa, que
consiste en hacerse pasar por lo que no se es para hacer
contactos o revisar algo. Se precisa de mucho entrenamiento y
de apoyo instrumental apropiado, adems de capacidad para
asumir riesgos.
9. Nuevas tcnicas e ingeniosidad: El periodismo de
investigacin est en plena fase de expansin, por lo que se van
incorporando nuevas tcnicas. Algunas pueden ser clonadas,
como las policiales, pero exigen capacitacin y recursos.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
RODRIGUEZ, PEPE. Periodismo de investigacin: tcnicas y
estrategias. Paids, Espaa, 1994. Captulo 7; pginas 133
al 176.
SECANELLA, PETRA M.Periodismo de investigacin. Tecnos,
Espaa, 1986. Captulo 12; pginas 83 al 88.
QUESADA, MONSERRAT.La investigacin periodstica. Ariel,
Espaa, 1987. Captulo 7; pginas 63 al 75.
REYES, LEONARDA. Estrategias de investigacin. Sala de
Prensa, Web para profesionales de la comunicacin
iberoamericanos.
GORRITI, GUSTAVO.Verdades tcticas y estratgicas. Sala de
Prensa, Web para profesionales de la comunicacin iberoamericanos.

75
Pgina

CAPITULO VII
RIGOR Y TICA EN LAS INVESTIGACIONES
1. La tica profesional en la era del pragmatismo. 2. La prctica
ajustada a las reglas. 3. Otras prcticas contaminadas. 4. Rigor
informativo.
1.La tica profesional en la era del pragmatismo
Entendiendo por tica profesional el respeto sin reservas al conjunto de normas que rigen la prctica de un buen periodismo, se
est ante un tema delicado, que precisa ser analizado en sus diversos aspectos.

Pgina

76

En primer lugar hay que ponerse de acuerdo sobre lo que se


entiende por buen periodismo. Desde la perspectiva del Periodismo Informativo ofrecer a la opinin pblica informaciones
completas, veraces e imparciales es buen periodismo. En el
terreno del Periodismo de Opinin, entregar al lector reflexiones
responsables y esclarecedoras sobre sucesos y procesos
complejos es buen periodismo. En el campo especfico del
Periodismo Interpretativo realizar reportajes que ofrezcan
elementos contextualizadores o investigaciones que saquen a
luz hechos o procesos mal conocidos, poco conocidos o
desconocidos es buen periodismo.
Desde el punto de vista estrictamente acadmico, y desde hace
ms de un siglo, lo anteriormente sealado parece tener
generalizada aceptacin, pero en la prctica cotidiana dichos
valores o principios no pasan de ser tericos, en la medida en
que son subaltemizados por principios y valores ms
prcticos, ms exitosos y ms realistas, que sealan que
hacer buen periodismo es vender a cualquier precio, apelando a
cualquier recurso; doble moral, pattica realidad del presente.
En cuanto a esta cuestin puntual, en la prctica periodstica
contempornea (En rigor en todas las pocas) se asiste a un
total divorcio entre bagaje acadmico y valores y principios que
rigen. Esto se explica, en ltima instancia, porque la propia
definicin acadmica de medios de comunicacin no se ajusta a
lo que son en realidad.
Los medios de comunicacin son esencialmente (no exclusivamente) medios de manipulacin de la opinin pblica, groseros o disfrazados. Las informaciones reflejan intereses de
sectores sociales dominantes, puntos de vista de sectores
dominantes, con maquillajes de objetividad e imparcialidad a
veces hasta bien logrados.
Dos ejemplos actuales de cmo se empean los medios de comunicacin por manipular a la opinin pblica:
Primer caso: El 11 de setiembre del 2001.
Hecho: Atentado contra las Torres Gemelas.
Presentacin ante la opinin pblica: Brbaro acto terrorista.

77

Reaccin generalizada: Repudio al atentado.


Pgina

No cabe la menor duda sobre que el atentado contra las Torres


Gemelas fue perpetrado por terroristas y result ser un brbaro
hecho digno de provocar repulsa, pero nada se dijo a travs de
los medios de comunicacin sobre las causas de fondo del terrorismo, que no se erradicar a balazos -como pretenden hacer
creer los responsables del gobierno de los Estados Unidos- sino
por medio de soluciones satisfactorias a las situaciones
altamente conflictivas, que oprimen e inviabilizan a pueblos
enteros.
La lucha anti-terrorista ha sido empleada como pretexto para
justificar el aumento vertical del gasto militar (1), el
fortalecimiento de organismos de espionaje como la Central de
Inteligencia Americana, CIA (2), y la adopcin de medidas
restrictivas de los derechos de las personas, sobre todo de
nacionalidad rabe (3).
As, paralelamente a lo que se adopta de acuerdo a lo que sostienen las autoridades gubernamentales de los pases centrales
y sus expertos anti-terroristas, desde una perspectiva
represiva; otros analistas y expertos, que trabajan sobre el tema
en el marco del respeto a la libertad y a los derechos de las
personas, coinciden en resaltar que no habr avances en el
campo mientras persistan la desigualdad y la pobreza como
fenmenos generalizados.
Segundo caso: La Guerra de Irak.
Suceso: Decisin unilateral de Estados Unidos y sus principales
aliados (Inglaterra y Espaa), de atacar a Irak.
Presentacin ante la opinin pblica: Ataque punitivo al gobierno
de Sadam Husseim, por supuesta posesin y posibilidades de
empleo de armas de destruccin masiva. Naciones Unidas haba
enviado expertos para buscar dichas armas y no las haban
encontrado.
Reaccin generalizada: Opinin pblica mundial divida, con una
parte significativa expresndose a favor de la paz, es decir,
contra el ataque a Irak.

Pgina

78

Durante el perodo inmediatamente anterior al conflicto hubo


una avalancha a travs de los medios de comunicacin controlados por los Estados Unidos para demostrar que Sadam Husseim
era un monstruo; el resultado de la campaa fue de alto
impacto, con lo que consiguieron que parte significativa de la
opinin pblica internacional se confundiese, en algunos casos, y
no se dispusiese a movilizarse para frenar la barbaridad que
significaba el ataque, en otros.
Los resultados del ataque implicaron un alto costo en vidas
humanas y destruccin de bienes materiales. Los resultados definitivos significaron un retroceso: actualmente, Irak est convertido en una nueva colonia, con ocupacin militar extranjera y administracin tambin extranjera; hecho consumado sobre la
base de actos violatorios a todos los principios del Derecho
Internacional, como ser los de la autodeterminacin y de la
no intervencin en los asuntos internos de cada pas, para
citar apenas dos.
Muchos pensaban que el fin de la Guerra Fra, tras el derrumbe
del bloque socialista europeo (1988 en adelante), se traducira
en un desarme creciente, pero la realidad fue otra. De acuerdo
con el Instituto Internacional de Investigacin de la Paz, de
Suecia, los gastos militares se han incrementado en ms de
14% y apenas en el ao 2002 el gasto militar fue de nada menos
que cerca de 794 mil millones de dlares, equivalente al 2,5% de
todo el producto mundial. El planeta est sentado sobre un polvorn, con capacidad para destruirlo 7 veces o ms. Con dos
agravantes:
- la existencia de una potencia imperial hegemnica, Estados
Unidos, que est dispuesta a pasar por encima de lo que piensen
los dems pases para perpetrar sus intenciones ms oscuras,
como tener una administracin directa de una zona que
representa nada menos que el 40% de las reservas mundiales de
petrleo, y
- el desenfrenado proceso de militarizacin (Y atencin, nada se
arma por armarse, sino para atacar o para defenderse; as de
sencillo), entre los que se destacan los Estados Unidos, cuyos
gastos militares representan sobre el total nada menos que el
43%.

Pgina

79

El juego internacional, en definitiva, es un juego de intereses en


pugna, y como las grandes agencias y cadenas de informacin
estn en manos de las naciones ms poderosas, desde ellas se
trata de legitimar actuaciones que atentan contra todo y
cualquier avance. Eso es categrico, cuantificable y
empricamente demostrable.
Los juegos nacionales tambin son intereses en pugna, y como
los grandes medios de comunicacin son de corporaciones o empresarios poderosos, se promueven desde los mismos los intereses de ellos, sin importar que los mismos estn o no en concordancia con los de las sociedades, o de las mayoras de las
sociedades.
Al no incorporar los elementos referidos en el proceso de construccin
terica, el desarrollo acadmico se disocia
peligrosamente de la realidad, avanzando definiciones que
contienen vicios madres que los tornan intiles para comprender
el funcionamiento real de los procesos de comunicacin.
De ah que en el terreno de la tica, en general, y de la tica
profesional, en particular, se da el divorcio entre principios y
prctica rutinaria; entre valores ideales y valores reales. Y as
como hasta hace poco era frecuente hablar del socialismo real
para designar el modelo socio-econmico y socio-poltico
efectivamente vigente en el Este de Europa, que en nada se
compadeca con el bagaje doctrinario conocido como socialismo
cientfico, as tambin se puede hablar del Periodismo real,
que se practica de espaldas al desarrollo acadmico.
De todo esto resulta que es sumamente difcil abordar el tema
de la tica en el periodismo, en general, y en el Periodismo de
Investigacin, en particular. Conscientes de ese problema, sin
embargo, es importante avanzar en el proceso de construccin
terica, pues en la era del vale todo se trata de subaltemizar
cotidianamente valores bsicos a prcticas cada vez ms
perversas.
2. La prctica ajustada a las reglas
Un buen periodismo se puede llevar adelante respetando las
normas sin reservas, siendo absolutamente falso eso de que no
importan los medios para con tal de llegar al fin.

Pgina

80

En rigor, apelar a cualquier medio para obtener informacin no


es sino la expresin pattica de la falta absoluta de capacidad de
los periodistas para conseguir las informaciones a travs de
procedimientos que se ajustan a las reglas del buen desempeo
profesional.
Un ejemplo: si alguien ofrece vender una masa de informaciones, necesariamente ofrece detalles sobre lo que quiere vender,
lo que para un buen investigador se traduce en pistas
concretas, que al seguirlas correctamente conducir al mismo
resultado, sin necesidad de precarizar el acceso a la informacin.
La va rpida para la obtencin de informaciones -generalizada
en la era del pragmatismo- no es definitivamente la ms adecuada, pues no cabe dudas sobre que empobrece el trabajo
profesional, que para su buen desempeo ha desarrollado y
viene desarrollando tcnicas que ofrecen resultados similares.
Categricamente, no se combate la corrupcin empleando actos
de corrupcin; no se ayuda a la sociedad apelando a actos
menores de corrupcin para desnudar actos mayores. Hablando
de manera clara y simple, dichas prcticas envilecen la
profesin, cuyo buen ejercicio se viene dotando de tcnicas de
creciente nivel de eficacia.
En un caso concreto (hipottico) se puede ofrecer a los investigadores X documentos probatorios de la existencia de evasin
fiscal por parte de A y B empresas. Lo primero que se tiene es
que A y B evaden el pago de impuestos y que hay documentos
probatorios; se registra el hecho.
Inmediatamente se procede a solicitar informaciones al fisco, por
las vas correspondientes, amparado en el derecho de acceso
libre a la informacin. Obtenida la informacin solicitada -declaraciones de rentas, por ejemplo- se cruza la misma con los
balances de las empresas A y B. Posiblemente ah salte con
claridad la perpetracin del ilcito.
Si la institucin de niega a suministrar la informacin solicitada,
se apela a las autoridades correspondientes para lograrlo, judiciales y administrativas, y s aun as se niegan a entregar la informacin, se tiene el camino abierto para denunciar el ocultamiento de informaciones para encubrir ilcitos.

Pgina

81

Si se quiere apelar a los dichos tradicionales para justificar procedimientos, antes que el vale todo es seguro que todos los
caminos conducen a Roma, o lo que es lo mismo: utilizando
adecuadamente las tcnicas de investigacin se logra poner al
desnudo cualquier irregularidad, preservando de paso las buenas
normas de obtencin de informaciones.
3. Otras prcticas contaminadas
La compra de informaciones no es la nica prctica periodstica
que colisiona con las normas del buen desempeo profesional
del periodismo; se trata de una de las ms pervertidas, sin lugar
a dudas, pero no es la nica.
Hay inversin de valores en otras prcticas cotidianas, que confunde habilidad con picarda; ingeniosidad con falta de escrpulos. El sentirse hbil e ingenioso, cuando en realidad no se pasa
de pcaro e inescrupuloso, es un esquema de auto-proteccin
psicolgica, que le impide ver al perverso su perversin; se trata
de una patologa semi-esquizofrnica que le posibilita al
afectado mantener la auto-estima.
Hay factores que influyen fuertemente para impulsar la perversin:
Los intereses de las empresas periodsticas: Los empresarios de
la prensa -al igual que cualquier otro empresario- tienen intereses econmicos y polticos muy bien definidos, los que se promueven y defienden a travs de sus respectivos medios. Pero
tambin tienen conflictos, tanto econmicos como polticos, por
lo que utilizan sus medios respectivos para atacar a sus
adversarios eventuales o permanentes.
Esto se hace en el periodismo cotidiano, utilizando las coberturas
diarias, pero con ms fuerza y destaque a travs del periodismo
de investigacin.
Los propietarios de los medios, amigos, parientes y aliados promueven a travs de los medios afines verdaderas campaas de
demolicin de los adversarios polticos y econmicos, marco en
el que utilizan a sus periodistas investigadores de la peor manera, pues se les obliga a exagerar las distorsiones, prcticas

Pgina

82

ilcitas o simples irregularidades de los adversarios, as como a


minimizar los de su propio bando.
Frecuentemente, los periodistas asumen una extraa actitud de
identidad de sus intereses con los de sus patrones, fenmeno
que se da en dos actos:
primero, el periodista se subordina disciplinadamente a las
orientaciones impartidas por los editores o por los propios propietarios, y
despus, asume los intereses del propietario del medio en
que trabaja como si fuesen propios.
Defiende las opiniones y los enfoques del medio en que trabaja,
no porque sean correctos, verdaderos, sino como una suerte de
estrategia de proteccin de su auto-estima, lo que resulta insano
en muchos casos.
Hay investigadores que son plenamente conscientes de que al
realizar sus trabajos estn cumpliendo rdenes expresas, cuyo
desacato podra significar la prdida de sus puestos de trabajo;
sta actitud es ms sana -desde el punto de vista mental- que la
otra, en la que los investigadores asumen intereses ajenos como
propios.
Todo parece indicar que sobre el investigador pesa una suerte de
ley de acero al que debe s o s subordinarse, pero ese razonamiento es solamente relativamente correcto, pues la Unidad
investigativa puede pactar con los propietarios de los medios reglas diferentes para realizar sus trabajos, al tiempo de contar
con una rica agenda de temas importantes para ser
investigados.
En ese sentido, los gremios de periodistas pueden desempear
un papel relevante, sentando reglas claras de funcionamiento
del trabajo, y ejerciendo presin permanente sobre los propietarios de los medios para que se respete la integridad mental e
intelectual de los periodistas.
Recepcin sistemtica de informacin de terceros: Hay Unidades
de Investigacin que se prestan de manera sistemtica a los
intereses de determinados grupos polticos y econmicos, que se

Pgina

83

dedican a acopiar informaciones sobre sus adversarios y a


suministrarlas a las Unidades Investigativas para su divulgacin.
El proceso funciona de la siguiente manera: Algunos grupos
econmicos y polticos fuertes, que disponen de abundantes recursos, montan verdaderos esquemas de espionaje sobre sus adversarios: infiltran personas, graban conversaciones telefnicas,
compran documentos comprometedores,... (1).
En posesin de informaciones importantes, que podran afectar
severamente la imagen de sus eventuales o permanentes adversarios, ponen las informaciones que les interesa divulgar en
manos de Unidades investigativas abiertas para su divulgacin
(2).
Prestigio rpido y barato en manos -un escndalo o una denuncia relevante- la Unidad divulga la informacin (3).
Para decir lo menos, la prctica mencionada rie con las normas
bsicas de realizacin de un buen periodismo, y definitivamente
no es periodismo de investigacin; es apenas un canal abierto, a
travs del cual un grupo arroja mierda contra otro y viceversa.
Lo grave es que hay veces en que entre los auspiciantes centrales de este tipo de programas se encuentran corporaciones o
instituciones que practican irregularidades en cantidades industriales, que obviamente no son investigadas.
4. Rigor informativo
Por rigor informativo se entiende simplemente que lo que se divulga se ajuste estrictamente a los hechos. En la cadena
comunicacional -emisor, mensaje, canal, receptor- corresponde
sobre todo al mensaje, o ms concretamente al contenido del
mensaje.
La tinta no debe ser cargada ni ser tenue; los hechos no deben
ser sobredimensionados ni minimizados; el rigor exige que no
haya en el mensaje ni exageracin ni subestimacin.
Es frecuente que estudiosos y analistas observen que la objetividad es imposible; que en todo trabajo realizado por sujetos hay
irremediablemente carga subjetiva, de cualquier signo. Es posible que ello sea de esa manera, pero no es menos cierto que se
puede dar de parte de los sujetos responsables de la elaboracin

Pgina

84

de un informe el mayor empeo por presentar los hechos del


modo ms imparcial posible.
Hay reglas bsicas de imparcialidad que contribuyen a ganar
objetividad en el trabajo y en la elaboracin del informe final.
La primera es, sin lugar a dudas, que no se debe apostar a favorecer ni a perjudicar a nadie que est siendo investigado. La
nica intencionalidad aceptable en el terreno de la investigacin
periodstica es la obstinacin por esclarecer el hecho, ya sea
para confirmar hiptesis negativas o para descartarlas temporal
o definitivamente. Esto es fcil de decir pero difcil de aplicar,
por el simple hecho de que normalmente en uno despierta de
manera espontnea simpata o antipata -nunca indiferenciacualquier acto o proceso que est bajo sospecha. De ah deviene
el riesgo cierto de exagerar o minimizar lo que finalmente se
encuentra.
La segunda es designar a la persona menos afectada por los
hechos investigados para revisar el informe final. Ocurre que es
frecuente que las personas que acompaan ms cercanamente
una investigacin sean afectadas por los descubrimientos, que
pueden causar repulsa, asombro o admiracin, y aunque se
hagan responsables de la elaboracin del borrador del informe
final, por el hecho de ser quienes mejor manejan el tema, se
debe tener en cuenta que no habr equilibrio pleno en el trabajo
salvo raras excepciones-, por lo que dicho borrador deber ser
crticamente revisado por quienes no estuvieron directamente
involucrados con los hechos investigados.
En dicha revisin crtica es aconsejable que se ponga en duda,
todo: desde las conclusiones parciales hasta las conclusiones finales, pasando por los hechos ms relevantes del conjunto del
suceso o proceso investigado.
La versin revisada puede ser parcial o totalmente renovada, si
se constatan distorsiones en su elaboracin, pero tambin puede
ser
parcial
o
totalmente
confirmada,
si
queda
irrefutablemente demostrado que lo dicho se ajusta
estrictamente a los hechos. Hacerlo no busca sino asegurar que
las conclusiones no estn contaminadas por actitudes favorables
o desfavorables que pudieran surgir en el proceso de
investigacin.

Pgina

85

Eximiendo el trabajo de intencionalidad y sometiendo los resultados a un anlisis crtico completo se garantiza que el informe final a ser divulgado reflejar con mayor grado de imparcialidad los hechos examinados, y sealar con un dedo ms firme al
responsable o a los responsables de prcticas que resultan
lesivas para parte de la sociedad o para el conjunto.
Puede ser que un trabajo termine derrumbando un mito, o termine contribuyendo a desmontar una peligrosa red delictiva, o
termine con la adopcin de medidas que pongan punto final a
prcticas lesivas para la ciudadana, pero al margen de lo que
venga a ocurrir finalmente, es fundamental que al inicio del proceso no haya intencin de demoler o preservar a la persona, grupo, organizacin o institucin objeto de investigacin. La
intencionalidad puede arruinar todo el trabajo, pues quien ingresa al trabajo de campo cargado de prejuicios tiene problemas de
visin, y ve de ms o de menos.
El rigor se construye; no acompaa al investigador espontneamente. Slo que hay que tener cuidado en no caer en el vicio de
distorsionar todo de manera permanente. Los mdicos, por lo
general, se asombran sobremanera cuando por primera vez
extirpan un tumor; pero en las experiencias posteriores van
controlando sus reacciones hasta que prcticamente se
acostumbran a ver y trabajar sobre problemas complicados. Los
fumadores, por lo general, comienzan experimentando el placer
de fumar, que muy al principio les resulta repulsivo, pero luego
se vuelven adictos.
Por hacer una suerte de paralelismo con respecto a los ejemplos
anteriores, hay que sealar que el investigador debe construir
una personalidad que se aproxime al que desarrollan los mdicos
ante problemas complicados y hasta repulsivos, y evitar caer en
la construccin de la personalidad caracterstica de los
fumadores, que de experiencia curiosa pasan a ser adictos de
prcticas nada saludables.
SNTESIS
1. La tica profesional en la era del pragmatismo: En cuanto al
delicado tema de la tica periodstica -que no es otra cosa que el
respeto sin reservas a las normas que rigen la prctica del buen
periodismo- se constata un divorcio entre el bagaje acadmico y

Pgina

86

la prctica cotidiana. Hay errores madres que llevan a ello, como


la propia definicin de medios de comunicacin, que nada ms
son que esencialmente (No exclusivamente) medios de manipulacin de la opinin pblica.
2. La prctica ajustada a las reglas: No es cierto que no importan los medios con tal de llegar al fin. Comprar informacin
no solamente no se ajusta a las normas de buen desempeo profesional, sino que muestran una pattica incapacidad para utilizar de manera eficiente los recursos y tcnicas con los que se
obtienen resultados similares, sin envilecer la profesin.
3. Otras prcticas contaminadas: El envilecimiento no solamente
se da por la va de la compra de informaciones. Tambin se da
cuando el investigador asume los intereses mezquinos de los
propietarios de los medios de comunicacin como si fuesen sus
propios intereses; y tambin cuando se prestan rastreramente a
vehiculizar informaciones ofrecidas por grupos poderosos contra
otros grupos adversarios, o personas.
4. Rigor informativo: Hay rigor cuando lo que se divulga se ajusta
estrictamente a los hechos. Existen medidas prcticas que
contribuyen a garantizar mayor imparcialidad y mayor objetividad en el manejo de las informaciones. El rigor no acompaa a
uno desde el nacimiento; se construye a travs de prcticas
saludables.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
QUESADA, MONSERRAT. La investigacin periodstica. Ariel,
Espaa, 1987. Captulo 12; pginas 141 al 150.
SECANELLA, PETRA M. Periodismo de investigacin. Tecnos,
Espaa, 1986. Captulo 5; pginas 39 al 44.
FAUNDES, JUAN JORGE. tica y contexto del periodismo de
investigacin. Sala de Prensa, Web para profesionales de la
comunicacin iberoamericanos.
ALBA, GERARDO ALBARRAN DE. Diferencias en el periodismo
de investigacin en EU y Latinoamrica. Sala de Prensa,
Web
para
profesionales
de
la
comunicacin
iberoamericanos.

87
Pgina

CAPITULO VIII

EL PERIODISTA INVESTIGADOR
1. El proceso de formacin del investigador. 2. Capacidad de
planificacin. 3. Capacidad de observacin. 4. Capacidad de
retencin. 5. Capacidad de anlisis. 6. Capacidad de asumir
riesgos. 7. Hbito de lectura. 8. Compromiso cvico mnimo. 9.
Conocimientos generales. 10. Conocimientos legales avanzados.
11. Discrecin.
1. El proceso de formacin del investigador
El periodista investigador va incorporando durante su prctica
cualidades que lo toman muy diferente de los periodistas que se
dedican al acopio y la divulgacin de noticias diarias; no es
mejor ni superior, es diferente.
Antes de dedicarse a la investigacin, lo ms probable es que
haya experimentado otras prcticas periodsticas, ya sea de la
esfera informativa, interpretativa o de opinin, ya sea militante;
o aun periodismo sensacionalista.
La iniciacin en el Periodismo de Investigacin pudo haberse
dado por iniciativa propia o de terceros, pudo haber nacido espontneamente o pudo haber sido inducido por alguna lectura, o
por una conversacin, o mismo por una suerte de pre-experiencia.
Independientemente de cmo lleg y de la experiencia anterior
que tiene, lo cierto es que el periodista investigador tiene que
tener la mejor disposicin para incorporar una serie de
elementos a su actividad profesional; elementos que lo irn
dotando de mejor perfil para el buen desempeo de sus trabajos.
La diversidad en cuanto a experiencia profesional y vivencial,
formacin intelectual y temperamento hace que haya
investigadores que absorban de manera ms rpida o ms lenta
dichos elementos, pero el desarrollo de dichas cualidades
resultar esencial en la prctica investigativa y se reflejar en la

que

Dichas cualidades bsicas son:

ir

88

trabajos

produciendo

la

Unidad

Pgina

calidad de los
Investigativa.

- Capacidad de planificacin,
- Capacidad de observacin,
- Capacidad de retencin,
- Capacidad de anlisis,
- Capacidad de asumir riesgos,
- Hbito de lectura,
- Compromiso cvico mnimo,
- Conocimientos generales,
- Conocimientos legales avanzados.
Algunas cualidades ya puede presentar desde el comienzo el
investigador; otras deben ser desarrolladas, en procesos que
pueden resultar largos o cortos. Es posible que algunas
cualidades sean muy desarrolladas en algunos miembros de la
Unidad y poco o nada desarrolladas en otros, por lo que puede
darse una suerte de complementacin compensatoria, pero el
investigador debe tener consciencia de que para su desarrollo
integral es fundamental que apueste a incorporar a su bagaje
todas las cualidades enumeradas.
2. Capacidad de planificacin
Planificar consiste esencialmente en establecer de manera clara
y expresa metas y objetivos, as como los mecanismos a ser
empleados para alcanzar dichas metas y objetivos. La planificacin puede ser mnima -hecha a grandes rasgos- o
pormenorizada, previendo todos los aspectos de manera
meticulosa. El resultado del trabajo mostrar de manera
inequvoca cul fue mejor, la mnima o la pormenorizada, pues
en la ltima se reducen al mnimo las improvisaciones e
imprevistos y eso mostrar su peso real.

Pgina

89

Una buena planificacin aporta muchas ventajas: se gana tiempo, agilidad; se reducen los costos; se obtienen resultados rpidos; posibilita, en sntesis, realizar un trabajo de alta calidad.
Al establecer pasos a seguir se elimina lo superfluo y se prioriza
lo esencial; se sabe de antemano con qu dificultades uno se va
a enfrentar y se tiene idea de cmo se ir a resolverlas.
Cualquier actividad superflua -entrevistas a determinadas
personas, o visita a determinados lugares, por dar ejemplos
prcticos- puede significar prdida de tiempo y mayores costos,
por tanto, adems de atrasos para alcanzar resultados. De ah
que la planificacin resulte esencial.
Ahora bien, la capacidad de planificacin no nace
espontneamente en el investigador o en la Unidad
Investigativa, sino que se desarrolla. Y el desarrollo de dicha
capacidad
es
esencialmente
prctico,
pues
lo
que
eventualmente se puede aprender sobre la planificacin en el
campo acadmico resulta til pero no suficiente.
La Unidad o el investigador pueden manejarse con conocimientos generales sobre planificacin; el resto lo har la experiencia,
como en cualquier otra actividad profesional.
El desarrollo de esta cualidad, sin embargo, tropieza con prcticas y creencias generalizadas entre los periodistas, que tienden
a relativizar su importancia. Ocurre que el periodismo se realiza
frecuentemente sobre hechos y procesos nuevos, por lo que se
ha desarrollado en la prctica una suerte de prejuicio acerca de
que planificar es superfluo, innecesario, poco til. Esto no es
accidental, pues es comn que los periodistas vayan al campo
de trabajo con ciertas orientaciones claras de los editores, pero
es frecuente que retornen con informaciones nuevas, ms
importantes que las que fueron a buscar, que no haban sido
previamente sealadas. Esa es la cuna del prejuicio.
Pero al hacer periodismo de investigacin, la Unidad y sus integrantes deben esforzarse por superar dichos prejuicios, pues la
actividad exige que se opere bajo planes claramente preestablecidos. El periodismo de investigacin es una modalidad no mejor
ni superior a las otras, pero diferente, y ese rasgo diferenciador
es lo que hace que para su buen ejercicio sea esencial
desarrollar la capacidad de planificacin.

90

3. Capacidad de observacin

Pgina

Hay personas ms observadoras que otras, lo que les permite


captar ms detalles de un lugar, actividad, situacin o momento.
Y en el otro extremo hay personas que han desarrollado una
suerte de coraza que les permite alcanzar un alto nivel de
indiferencia con respecto al entorno inmediato en que se
encuentran.
Un ejercicio prctico que se suele realizar para mejorar la capacidad de observacin de los investigadores es ubicarse en un
lugar cualquiera: mnibus, restaurante o esquina, y luego relatar
todo lo observado, por escrito.
De llevarse adelante una experiencia como la descripta, la Unidad se encontrar con sorpresas, pues los diversos informes acusarn niveles distintos de importancia que los investigadores darn a los diversos detalles. Si la experiencia se realiza con tres
personas, se podr tener eventualmente tres resultados diferentes:
una, que destacar en su relato todo el aspecto fsico del
lugar, con detalles hasta puntillosos sobre los objetos propios del
entorno, como ser anuncios publicitarios o calidad de las ropas
que vestan las personas,
otra, que destacar sobre todo lo relativo a la actitud de
las personas, con lujo de detalles: estado de nimo, si es parte
permanente o pasajera del entorno, nivel social,..., obviando o
minimizando detalles sobre el aspecto fsico, y
otra, finalmente, que podr ofrecer detalles llamativos
sobre lo observado, como actitudes extraas, presuntas irregularidades o por lo menos actividades llamativas.
En cada uno de los tres relatos faltaron dos elementos, o mejor,
cada relato enfatiz tres elementos diferentes. Un anlisis crtico
de las observaciones llevar necesariamente a identificar con
claridad las deficiencias de cada una de las realizadas. Y la
identificacin de las deficiencias, a su vez, dotar al observador
de mayor capacidad, pues sabr que detalles incorporar en sus
observaciones.

Pgina

91

Una segunda experiencia, posterior al anlisis crtico de las realizadas, arrojar resultados diferentes: por lo general, las tres observaciones contendrn mayor variedad de elementos y detalles,
al margen de lo enfatizado. Pero un anlisis crtico de la segunda
observacin puede llevar a detectar otras deficiencias, como ser
nivel de exageracin o minimizacin, riqueza o pobreza de detalles en aspectos relevantes que fueron observados.
Lo definitivo y lo concreto es que el periodismo de investigacin
exige que para su buena realizacin haya una desarrollada
capacidad de observacin. Y hemos visto muy rpidamente, con
ejemplos simples, que dicha capacidad puede ser perfectamente
desarrollada y en poco tiempo, sobre todo cuando los ejercicios
se realizan con cierta planificacin.
Una observacin adicional: la capacidad de observacin desarrollada permite a los investigadores presentar sus informes finales de manera mucho ms atractiva, pues mecha los aspectos
centrales del suceso o proceso investigado, con detalles (o
episodios) llamativos de entornos o de personas, que hacen ms
agradable el informe y facilitan la comprensin.
4. Capacidad de retencin
La memoria es traicionera. Hay personas que tienen desarrollada
una impresionante capacidad de retencin, que tienen lo que
vulgarmente se dice una memoria de elefante, y en el extremo opuesto hay personas que son extremadamente olvidadizas.
Las oportunidades en que se deber recurrir a la memoria en el
marco de determinados trabajos son muchas, incontables. Es
frecuente, por ejemplo, que determinadas fuentes, inclusive permanentes, se opongan a ser grabadas o a que se escriba en su
presencia lo que estn relatando o informando. Para captar toda
o gran parte de la informacin proporcionada, es fundamental
tener una capacidad de retencin desarrollada.
Un caso hipottico: se est entrevistando a un imputado sobre
irregularidades detectadas en una institucin. El entrevistado no
permite grabar ni tomar notas, por motivos que pueden ser
diversos. De hecho la simple incomodidad del entrevistado al ser
grabado puede empobrecer la entrevista, por lo que es

Pgina

92

recomendable ni siquiera llevar apuntes en el momento;


capacidad de retencin.
Pero por ms de elefante que fuera la memoria del investigador, hay que tener en cuenta que la memoria es muy
traicionera; hay ocasiones en que una persona fcilmente olvida
algo importante de lo que se le dijo, por lo que lo ms
recomendable es que de manera inmediata a la entrevista, el
investigador proceda a realizar un registro escrito o grabado de
todo lo conversado.
Hay ocasiones en que el entrevistado o la fuente proporciona
una masa de informaciones muy grande, difcil de guardar. Ante
dichas situaciones se aconseja abrir un parntesis con cualquier
pretexto, como ir al bao, por ejemplo, y realizar en un breve
tiempo un breve registro de los aspectos ms relevantes que se
abordaron hasta ese momento.
Otra forma de registrar con alto nivel de recuperacin de informaciones proporcionadas es que un investigador que no particip de la entrevista, someta al entrevistador a una entrevista
sobre la entrevista. Es fcil de hacer, entretenida y suele arrojar
resultados sorprendentes en cuanto a recuperacin de informaciones.
Hay entrenamientos simples de realizar, a solas o con la ayuda
de otra persona, para desarrollar la capacidad de retencin.
Un ejercicio puede consistir en lo sealado anteriormente: entrevista sobre la entrevista. La prctica obliga al investigador a
esforzarse por reconstruir todo lo que la fuente o el entrevistado
dijo durante el encuentro.
Otro ejercicio que se puede realizar, a solas, es hacer el esfuerzo
de reconstruccin integral del encuentro. Esta actividad es ms
tediosa, pero tambin es altamente efectiva. La repeticin de los
ejercicios, en definitiva, contribuye de manera efectiva al desarrollo de la capacidad de retencin, elemento esencial para el
buen desempeo de la actividad.
Reiteracin final: No confiar en la memoria, es traicionera.
5. Capacidad de anlisis

Pgina

93

En el periodismo de investigacin, la Unidad o el investigador se


encuentra ante una masa de informaciones generalmente grande, que refiere hechos diversos-algunos aparentemente
inconexos que requieren de un doble trabajo:
ubicar cada pieza en su lugar, como si se tratase de un
rompecabezas, y
analizar las conexiones que los hechos tienen entre s, para
discriminar los puntuales de los centrales.
Para establecer todo con claridad es fundamental que el investigador o la Unidad tenga suficiente capacidad de anlisis; cualidad que es posible de desarrollar en el transcurso de la prctica.
De modo general es importante apuntar que apariencia y realidad son diferentes, pues el conocimiento de lo aparente,
conocimiento simple y primario, al que comnmente se accede a
travs de los sentidos, suele guardar hasta una gran distancia de
lo esencial de algo, que solamente se determina tras un anlisis
cientfico.
Un ejemplo: a juzgar por la apariencia, una noche estrellada
presenta la ilusin de que simultneamente uno est viendo las
estrellas; sin embargo, lo que la vista recibe no es sino la luz
emitida muchsimo tiempo atrs por los astros. La ciencia ha
aclarado que la luz viaja a X velocidad, y que dependiendo de la
distancia de algunas estrellas, a veces tardan hasta aos en
llegar a la tierra. O sea: la apariencia y la esencia son distintas
en este caso concreto.
As tambin, en el marco de las investigaciones periodsticas, la
Unidad o el investigador no puede quedarse con la apariencia,
debiendo realizar los anlisis correspondientes para captar la
esencia de los hechos y del proceso en su conjunto.
Una hiptesis ayuda a comprender cmo se debe proceder:
Caso investigado: Corrupcin en una previsional.
Hiptesis central: Se utiliza discrecionalmente los recursos de la
entidad.

Primer procedimiento:

Pgina

94

Desarrollado el trabajo se accede al (1) conocimiento de hechos


de corrupcin variada, algunos centrales y otros especficos o
secundarios; y a (2) una abundante documentacin probatoria.

- Hechos: Establecer la veracidad de su ocurrencia.


- Documentos: Establecer la autenticidad de los mismos.
Segundo procedimiento:
- Hechos: Ordenar los hechos, discriminando los centrales de los
secundarios.
- Documentos: Determinar la fuerza probatoria de los mismos,
de qu hechos y a qu recursos se apela para maquillarlos.
Tercer procedimiento:
- Hechos: Montar el rompecabezas, reconstruyendo con la mayor
fidelidad posible el proceso real con que se perpetran los ilcitos.
- Documentos: Seleccionar los de mayor fuerza probatoria, y
desarrollar las explicaciones tcnicas sobre las artimaas
empleadas para maquillarlos.
A esta altura es posible que el resultado final sea totalmente
diferente que el que se tena con el acopio inicial, pues se estar
en conocimiento pleno de cmo opera el ilcito, y ser posible inclusive volver sobre hechos puntuales, aparentemente
inconexos, que s tenan que ver con todo el engranaje.
La capacidad de anlisis se puede desarrollar de manera permanente, toda vez que desde la primera experiencia se adopte
un esquema de anlisis-que puede ser simple, pero perfectiblecomo gua madre. Su empleo mostrar sus fortalezas y
debilidades, lo que permitir emplear esquemas ms completos
en experiencias posteriores.
Al margen de las experiencias propias, pueden contribuir mucho
para el desarrollo de dicha capacidad el conocimiento ms
acabado posible sobre experiencias de otros investigadores, no
solamente las realizadas por las estrellas de la profesin, sino

6. Capacidad de asumir riesgos

Pgina

95

por Unidades poco conocidas o investigadores annimos, que


trabajaron temas relevantes, puntuales o generales.

La actividad investigativa conlleva riesgos de todo tipo, que van


desde la prdida de trabajo hasta la de la propia vida, pasando
por una amplia variedad de riesgos intermedios, como ser asaltos o agresiones fsicas.
Ocurre que al revelar hechos ocultos, los involucrados reaccionan mal por dos motivos centrales: por el punto final que se
pone a la actividad irregular que le estaba otorgando generosos
beneficios (1) y por la posibilidad real de punicin o castigo, que
puede ir desde la prdida del puesto hasta de la libertad, o
ambas cosas (2).
La reaccin del involucrado puede ser extrema, intermedia o
suave; raras veces es de indiferencia, aunque hay casos en que
s lo es. Se entiende por reaccin extrema aquella en la que el
involucrado es incapaz de controlar sus actos. Dicha prdida de
control puede ser pasajera o permanente; de todos modos, se
trata de una reaccin sumamente peligrosa, que puede hasta
llevar a derivaciones trgicas.
Reaccin intermedia es aquella que tambin se traduce en represalias o en intentos de represalias, que pueden consistir en
medidas que no atenten directamente contra el investigador o la
Unidad, pero s sobre los bienes de stos, como ser el robo de
vehculos, asaltos a residencias,...
Reaccin suave se considera aquella que no pasa de las amenazas de cualquier calibre, pero que muy difcilmente se traduzcan en hechos de represalias. Es lo ms frecuente.
El investigador o la Unidad deben estar plenamente consciente
de la existencia de riesgos; debe medir los riesgos, sin
sobredimensionarlos ni minimizarlos; y, sobre todo, debe ser capaz de medir hasta que tipo de riesgos est dispuesto a correr
en el marco de la realizacin de sus trabajos.
La capacidad de asumir riesgos tambin puede ser desarrollada
en el seno de la Unidad o por el investigador. Sobre este aspecto

7. Hbito de lectura

Pgina

96

particular de los riesgos se volver a tratar ms adelante, en el


captulo dedicado a la seguridad del periodista investigador.

La mayora de los periodistas soportan la mala costumbre de


querer escribir pero no leer; no la generalidad, pero s la
mayora. Esto en parte se explica por el hecho de trabajar mucho
con las palabras y tener que destinar parte importante del
tiempo a la lectura de documentos, informes, gacetillas,...
La lectura sistemtica, sin embargo, contribuye a enriquecer la
formacin de los periodistas en varios aspectos claves, que
tienen que ver con su trabajo. Ayuda a enriquecer el vocabulario,
a estar actualizados sobre diversos aspectos de la realidad, a
comprender mejor hechos histricos, a consolidar, en fin, una
formacin intelectual que tiene comienzo pero que solamente
debera terminar juntamente con la incapacidad biolgica del
periodista de seguir leyendo.
Hay que leer de todo: revistas y otras publicaciones; novelas,
cuentos y poesas; estudios histricos y contemporneos; materiales sobre avances cientficos, mdicos, tecnolgicos, econmicos,...; producciones recreativas,... Lo ideal es que el periodista
desarrolle una suerte de formacin enciclopedista, lo que se traducir necesariamente en una elevacin persistente de la
calidad de su trabajo. Es obvio que resulta imposible leer todo lo
que se produce, que es inmenso, pero una buena lectura tendr
sus compensaciones.
Para la Unidad o el investigador resulta esencial acompaar de
manera sistemtica todo lo que se produce en el campo concreto
de la investigacin periodstica, as como los debates acadmicos y puntuales que se dan entre los docentes y profesionales
del rea. Hay publicaciones escritas en varias lenguas, libros y
espacios en Internet, cantera inagotable de valiosas contribuciones para el periodismo de investigacin, tanto en el aspecto
terico como prctico.
Para crear el hbito de la lectura hay un camino sencillo: leer publicaciones agradables, que pueden ser recreativas, por ejemplo,
pero que terminan creando la constructiva costumbre de leer.

Pgina

97

Pero en este terreno concreto, lo ms efectivo y positivo es


evitar la lectura catica, desordenada, pues si bien ofrece
retazos de conocimiento, no da la consistencia que s otorga una
lectura planificada.
Una buena lectura planificada para un investigador o Unidad
puede ser:
- Lectura acadmica, para actualizarse en cuanto a los avances,
- Lectura de investigaciones realizadas, para saber qu experiencias se hicieron y qu resultados se lograron,
- Lectura jurdica dirigida, sobre cuestiones administrativas y
penales sobre todo, para ver qu establecen las leyes sobre
manejos administrativos normales o irregulares, delitos y penas,
Sobre cuestiones econmicas o tcnicas, como ser estadsticas,
es inclusive clave que el medio invierta en los integrantes de la
Unidad o el investigador, pues cursos cortos le dotarn de
tcnicas que crecientemente se vienen aplicando al campo del
periodismo de investigacin.
Un programa de lectura puede parecer muy amplio cuando es
variado, pero lo que el investigador o Unidad debe comprender
es que lo que se aconseja no es una lectura abundante, sino una
lectura ordenada, que destine un tiempo aunque sea breve, pero
de manera sistemtica.
8. Compromiso cvico mnimo
Una cualidad que caracteriza a los buenos investigadores es el
tener una elevada consciencia cvica. Pero como mnimo, los
miembros de la Unidad deberan tener un compromiso cvico
mnimo, que les permita desarrollar sus trabajos en el marco de
ciertas reglas y que les estimule a desnudar irregularidades o a
destruir mitos. Cuando existe dicho compromiso el investigador
es ntegro, responsable y constructivo.
No hay que confundir compromiso cvico con compromiso poltico/ideolgico; son cosas totalmente diferentes. Si restringiramos el compromiso cvico al reivindicar y respetar valores y principios de conducta ciudadana, de comportamiento lcito y legtimo de las autoridades, de desempeo regular de actividades pri-

Pgina

98

vadas, se marca la diferencia necesaria, lo cual no impide que el


investigador tenga posturas ideolgicas y polticas bien definidas, pero cuyo canal de expresin no es el periodismo de investigacin y s otras actividades militantes.
Es peligroso, sin embargo, que la Unidad comporte la participacin de personas sin compromiso cvico, lo que algunos suelen
maquillar con la supuesta independencia del periodista desde el
punto de vista poltico e ideolgico. Dicha independencia debe
darse en el marco del trabajo, pero no en el contexto de la
existencia del periodista como persona.
Cuando la Unidad da participacin a personas sin compromiso
cvico -sin tica, sin principios- se expone a riesgos que pueden
conspirar severamente contra el trabajo y contra el prestigio del
medio, pues las personas sin compromiso son personas sin control alguno, sin barrera moral, capaces de utilizar sus posiciones
para servir hasta a los intereses ms oscuros, con tal de ganar
posiciones y ganar dinero.
S la prctica irregular de las diversas actividades privadas no
provoca repulsa; s el uso discrecional de los bienes pblicos por
parte de las autoridades no causa rechazo;..., con el cuento de la
independencia, de la posicin de observador imparcial, en realidad se est ante una persona para la que apenas basta dar un
paso para convertirse en un verdadero mercenario, que puede
hacer vista gorda ante los ilcitos, que puede desentenderse de
las irregularidades que ocurren a su alrededor.
Las personas que ocupen puestos en Unidades investigativas
deben ser ntegras -pues estarn en la vidriera y, por tanto,
sern pasibles de ataques-; deben ser equilibradas, para no
mezclar intereses grupales con intereses laborales; deben ser
responsables en el ejercicio de una actividad que exige el ms
elevado rigor posible.
9. Conocimientos generales
Los conocimientos del investigador o de la Unidad deben ser los
ms amplios posibles, en todos los campos. Personas carentes
de formacin bsica, de conocimientos generales relativamente
amplios poco o nada pueden aportar para el desarrollo de buenas investigaciones.

Pgina

99

Si la persona rene algunas cualidades bsicas es posible formarla, pero en ese terreno debe demostrar predisposicin y aplicacin, de manera que en poco tiempo pueda estar realizando
aportes sustantivos a la Unidad.
Conocimientos amplios no equivalen a conocimientos profundos,
pero por ejemplo, es importante que un investigador tenga
aunque sea una vaga idea de lo que es un balance contable, de
manera que al acceder a uno pueda leerlo con cierto nivel de
comprensin; es importante que pueda analizar los informes
estadsticos de una reparticin policial o de un Ministerio de
Economa o de Finanzas; es importante que tenga una idea clara
de los procedimientos normales que deben realizar los fiscales
en el marco de la investigacin de un delito,...
No hay necesidad de ser expertos en todo; ante casos muy complejos, ya sean del orden contable, o estadstico, o penalprocesal, se requerir la asistencia de tcnicos especializados,
de manera que se tenga precisin en cuanto a lo que se tiene en
manos. Pero lo que no es admisible es recurrir a asesoramientos
cuando se dispone de materiales de fcil comprensin.
En la lnea de los conocimientos generales, por ejemplo, hay que
comprender cuales son las funciones de las autoridades de los
tres poderes, de los gobernadores e intendentes, de las autoridades policiales y judiciales, de las autoridades municipales; de
las reglas bsicas para el desarrollo de actividades econmicas
privadas, de la jornada laboral, del salario mnimo, de los beneficios sociales; de las funciones de las representaciones diplomticas locales en el exterior y extranjeras en el pas;...
Cuanto ms y mejor se conozca, mejor. Lo que no es admisible
es tener que recurrir invariablemente a terceros para
comprender cualquier cosa. S no se entiende, s es exigencia y
no recomendacin consultar, pero cuando uno carece de los
conocimientos ms elementales ni las explicaciones ms
didcticas irn a funcionar. Es fundamental tener una formacin
bsica relativamente bien desarrollada.
10. Conocimientos legales avanzados.
En cuanto a determinados aspectos de la legislacin vigente en
un pas, la Unidad necesita estar suficientemente familiarizada

Pgina

100

con algunos, con los que estar trabajando casi de manera permanente.
En el orden nacional, lo ms importante es la Constitucin Nacional, que constituye la Ley Fundamental, marco madre dentro
de cuyos lmites se construye el restante ordenamiento jurdico.
Adems de las garantas, deberes y derechos de las personas, la
Constitucin establece claramente las competencias de los
diversos poderes, sus atribuciones, as como los elementos que
inhabilitan para el ejercicio de la funcin pblica.
Todas las leyes que tienen relacin con la administracin pblica
deben estar a mano y no deben resultar incgnitas para los
investigadores, pues ellas establecen expresamente las reglas
de administracin, con lo que est permitido y lo que est
prohibido.
La legislacin penal debe ser comprendida por lo menos a grandes rasgos, pues en ellas se establecen qu actividades o
acciones configuran delitos y se establecen las penas
correspondientes, as como las reglas para la aplicacin de
medidas sustitutivas de la privacin de la libertad, actualmente
muy en boga, y que se emplea en el marco de por lo menos
decisiones judiciales discutibles.
Procesos contemporneos como descentralizacin y fortalecimiento de los poderes locales deben ser acompaados minuciosamente en el marco de la legislacin, pues hay una nueva
construccin
jurdica
que
reasigna
competencias
a
Gobernaciones e Intendencias que resultan fundamentales
comprender.
Hay que conocer bien tambin lo que las leyes establecen sobre
el funcionamiento de Organizaciones No Gubernamentales, pues
stas manejan crecientes recursos financieros, no tributan y no
hay mecanismos sociales de control sobre sus actuaciones.
11. Discrecin
La discrecin del investigador es una cualidad habilitante; la
falta de discrecin inhabilita al periodista para la funcin. As de
simple.

Pgina

101

Se exige absoluta discrecin en todas las fases de la


investigacin desde el comienzo hasta el final, e inclusive en la
fase posterior a la publicacin del informe final.
Fase 1: En la fase de decisin de la realizacin de la investigacin resulta fundamental la discrecin, pues de no mantenerla se
puede alertar tempranamente a quienes sern investigados y
eso puede llevar a que se aborte la iniciativa.
Al alertarse sobre la investigacin los presuntos implicados
pueden tomar una serie de medidas defensivas, como ser
ocultar los elementos probatorios, sustituir documentos,
intimidar a los investigadores, montar esquemas de control
sobre probables fuentes e inclusive -dependiendo de la posicin
que ocupan- presionar al medio o someter a los investigadores a
hostigamientos tempranos.
Fase 2: Durante el desarrollo de la investigacin se debe mantener una rigurosa discrecin, de modo que el trabajo pueda
avanzar sin tropiezos importantes.
Hay que tener un especial cuidado con las fuentes que estn
cooperando, cuyas identidades no pueden ser conocidas por nadie que est fuera del trabajo, por seguridad de las mismas as
como de la misma Unidad.
Fase 3: Publicado el informe final de investigacin, se debe mantener en absoluta reserva quin o quines llevaron la investigacin adelante, a no ser que el o los responsables decidan asumir
pblicamente la paternidad sobre el trabajo, lo cual es perfectamente legtimo y en muchos casos hasta recomendable. Ocurre
que a veces el anonimato deja al investigador o a la Unidad en la
indefensin, pues adems del director del medio sabe de su existencia los editores, con lo cual no se garantiza la discrecin.
Pero si la delicadeza del asunto o la posibilidad cierta de vincular
a los responsables de la investigacin con ciertas fuentes exige
que se mantenga la discrecin, ella debe ser mantenida.
El investigador est expuesto a riesgos, a veces severos, a veces
controlarlos, como ya se apunt ms arriba, de donde surge
como una cualidad inhabilitante la falta de discrecin en el
manejo del proceso. Un error en ese campo, adems de exponer

SNTESIS

Pgina

102

al investigador, expone a las fuentes a riesgos y crea situaciones


desagradables que rpidamente se extienden a todo el medio.

1. El proceso de formacin del investigador: El periodista investigador incorpora durante su prctica cualidades que lo tornan muy diferente de los dems periodistas; no mejor, diferente.
Algunas cualidades ya puede presentar al principio; otras ir desarrollando, en procesos que pueden ser rpidos o lentos.
2. Capacidad de planificacin: Planificar consiste en establecer
metas y objetivos, as como los mecanismos a ser empleados
para alcanzar los objetivos. Un buen nivel de planificacin se reflejar en resultados de alta calidad; la falta de planificacin provocar prdidas y retrasos.
3. Capacidad de observacin: Hay personas ms observadoras
que otras, que les permite captar mayores detalles. Dicha capacidad puede ser desarrollada a travs de ejercicios de
observacin y anlisis crticos de los resultados alcanzados.
4. Capacidad de retencin: Hay personas con alta capacidad de
retencin y personas olvidadizas. Hay ejercicios que ayudan a
desarrollarla, pero lo que se debe tener presente siempre es que
la memoria es traicionera; no se puede confiar a ciegas en ella.
5. Capacidad de anlisis: Hechos aparentemente inconexos
pueden resultar claves despus de un anlisis cientfico del caso.
La Unidad debe manejar esquemas de anlisis, que pueden ser
simples al principio, pero perfectibles. La apariencia no es igual a
la esencia.
6. Capacidad de asumir riesgos: La actividad investigativa conlleva riesgos de varios niveles: altos, medios y suaves. Saber
medir los riesgos ayuda, pero lo fundamental es desarrollar la
capacidad de asumirlos; es la manera de controlarlos.
7. Hbito de lectura: A la gran mayora de los periodistas le
gusta escribir pero no leer. La sana costumbre de leer enriquece
personal y profesionalmente, y termina expresndose necesariamente en una progresiva elevacin de la calidad de los trabajos.

Pgina

103

8. Compromiso cvico mnimo: Como mnimo el investigador


debe tener un compromiso cvico que le impulse a rechazar prcticas torcidas y procedimientos ilegales. La falta de compromiso
mnimo hace que para el investigador apenas falte un paso para
que se vuelva un mercenario.
9. Conocimientos generales: No hay necesidad de ser expertos
en todo, pero s hay necesidad de cultivarse permanentemente,
sobre todo en reas especficas que tienen que ver con la
investigacin. Una lectura ordenada y sistemtica, sin que sea
abundante, dar resultados.
10. Conocimientos legales avanzados: El investigador necesita
estar familiarizado con algunas cuestiones legales claves,
partiendo de la Constitucin hasta aspectos penales, pasando
por las cuestiones de orden administrativas con que se trabaja
con frecuencia.
11. Discrecin: La discrecin es una cualidad habilitante; la
indiscrecin es inhabilitante. Se debe guardar rigurosa discrecin
en todas las fases de la investigacin, por seguridad propia y la
de las fuentes, as como el desenlace exitoso del trabajo.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
RODRIGUEZ, PEPE. Periodismo de investigacin: tcnicas y
estrategias. Paids, Espaa, 1994. Captulo 1; pginas 21 al
31.
QUESADA, MONSERRAT. La investigacin periodstica. Ariel,
Espaa, 1987. Captulo 2; pginas 23 al 29.
REYES, GERARDO. Periodismo de Investigacin. Trillas,
Mxico, 1996. Capitulo 2; pginas 45 al 72.

104
Pgina

CAPITULO IX
SEGURIDAD DEL PERIODISTA INVESTIGADOR
1. Riesgos y medidas de seguridad. 2. Extremos de cuidado. 3.
Mecanismos externos de seguridad. 4. Medidas personales de
seguridad. 5. Otros riesgos.
1. Riesgos y medidas de seguridad
En el capitulo anterior, cuando se trat sobre Capacidad de
asumir riesgos de dej claramente sentado que la prctica del
periodismo investigativo conlleva riesgos de todo tipo, desde extremos, que pueden tener desenlaces trgicos, hasta suaves,
que pueden no pasar de hostigamientos y amenazas de
represalias que nunca sern tomadas.

Pgina

105

Lo que se saca en limpio, de entrada, es que hay riesgos reales.


Por tanto, el investigador debe disponer de una serie de medidas
de seguridad, personales y externas a l, las que deben ser
aplicadas con puntillosidad de manera a reducir los riesgos a
inconvenientes pasajeros.
La Unidad o el investigador deben comprender a fondo que en
todo el proceso de investigacin hay tres momentos en que la
exposicin al riesgo es mayor, a saber:
(1) Cuando se inicia la investigacin,
(2) Cuando se accede a informaciones claves, y
(3) Cuando se publica la investigacin.
Cuando se inicia la investigacin los presuntos involucrados del
grupo, institucin u organizacin que se investigar pueden
reaccionar con mucha fuerza, pues la investigacin a realizarse
representa para ellos la amenaza cierta de que sus operaciones
pueden ser puestas al descubierto.
Hostigamientos, medidas intimidatorias o lesiones directas a los
bienes o las personas de la Unidad se pueden producir en esta
fase. De ah es que se requera la absoluta discrecin en esta
fase como un elemento de proteccin. De todos modos -y
aunque est plenamente garantizada la discrecin sobre el
asunto- este es uno de los momentos en que se precisa poner en
prctica medidas especiales de seguridad.
El momento en que se accede a informaciones claves en el
marco de una investigacin que viene siendo realizada es sumamente peligroso, pues de enterarse los involucrados, podrn reaccionar hasta descontroladamente, pues experimentarn la
sensacin de estar perdidos.
En esta fase, ya no se trata de una amenaza de sacar a luz ciertos hechos, sino se est ante evidencias que pondrn al
descubierto las operaciones irregulares o ilcitas. La reaccin de
los involucrados puede ser extrema. Y ante tal riesgo hay que
extremar las medidas de seguridad, por lo menos hasta que la
furia pase y la Unidad pueda reducir las medidas a las normales.

Pgina

106

El tercer momento de alto riesgo es el de la publicacin. Ah no


se est ni ante amenazas ni ante evidencias, sino que se
enfrenta a los involucrados con la opinin pblica y
eventualmente con la justicia. Hay que extremar las medidas de
seguridad, por el tiempo conveniente, y reducirlas ms adelante,
cuando las reacciones puedan ser controladas.
Pero al margen de los momentos de alto riesgo, que requieren de
medidas especiales o extremas, estn los momentos normales,
que en realidad son normales, pues el que se dedica al periodismo de investigacin debe tener como rutina la adopcin de
medidas de seguridad.
2. Extremos de cuidado
En cuanto a las medidas de seguridad hay que cuidarse de no
caer en dos extremos, ambos peligrosos:
(1) Desarrollar una suerte de paranoia, y
(2) Subestimar las posibles reacciones de los involucrados.
El excesivo miedo a los riesgos puede llevar a desarrollar una
suerte de paranoia, entendida sta como una sicosis
caracterizada por alucinaciones, desconfianza, inquietud,..., con
elaboracin de uno o ms complejos delirantes (Kapelusz).
La paranoia es una enfermedad, una alteracin psicolgica, para
cuya superacin se necesita de una asistencia profesional. El
investigador est expuesto a enfermarse, sobre todo cuando se
lo somete a hostigamientos fuertes y sistemticos, acompaados
de otras medidas intimidatorias, como ser el robo de su vehculo,
el asalto a su domicilio o el ametrallamiento del mismo, por citar
algunos ejemplos de reacciones que se dieron en muchos casos.
Cuando las reacciones afectan al investigador es por una de dos:
- no tena capacidad desarrollada para asumir riesgos, o
- no se tomaron las medidas de seguridad correspondientes para
garantizar que el investigador prosiga realizando sus actividades
dentro de un marco de relativa normalidad.

Pgina

107

Cuando uno investiga, debe tratar de conocer a fondo al


involucrado; trazar un perfil del mismo y prever qu tipo de reacciones puede tener. Hay casos en que las fuentes informan sobre como acostumbra reaccionar el involucrado ante tropiezos,
amenazas o adversidades; informaciones valiosas para trazar un
perfil y precaverse. Como ya se advirti, la improvisacin es madre de errores y de riesgos posibles de controlar; hay que erradicar o reducir al mnimo la improvisacin.
Si no fue capaz el investigador de asumir los riesgos o si hubo
fallas en el esquema de seguridad por imprevisiones, lo cierto y
lo concreto es que se puede estar ante un cuadro que requiera el
tratamiento profesional del investigador. Es un camino con una
sola salida: el tratamiento.
La subestimacin de las reacciones del involucrado, el otro extremo, es hija de la improvisacin; es expresin de un
profesionalismo poco desarrollado, o construido de manera deformada.
No se debe jugar con fuego, puede quemar. Ese dicho, producto
de la cultura popular, es tan cierto como pattico. Y en el caso
en cuestin, de la prctica del periodismo de investigacin, los
procedimientos correctos son estimar con la mayor precisin posible los riesgos que conlleva el desarrollo de un trabajo,
asumirlas responsablemente, y tomar con serenidad las medidas
de seguridad correspondientes.
3. Mecanismos externos de seguridad
Hay mecanismos de seguridad que deben funcionar
rutinariamente con respecto a los integrantes de la Unidad
investigativa de cualquier medio, a ser aplicados por los dems
funcionarios del medio y por los propios colegas.
Coordenadas para localizar al investigador: Todas las informaciones que permitan localizar al investigador no deben ser suministradas a nadie, en ninguna circunstancia: nmeros telefnicos, direcciones, lugares que frecuenta, horario de trabajo, vehculo o cualquier otra informacin til.
La recepcionista del medio, por ejemplo, si la Unidad funciona
dentro del mismo local, no debe siquiera tener datos para lo-

Pgina

108

calizar al investigador. En caso de recibir llamadas urgentes, que


pueden eventualmente ser de familiares o amigos, la
recepcionista debe proceder a tomar los datos sobre cmo
puede el investigador contactar con quien llam y comunicar
sobre ello a la asistente del director o al editor responsable para
que ellos se encarguen del asunto.
La asistente del director del medio o el editor responsable es
probable que cuente con los mecanismos ms rpidos y seguros
para entrar en contacto con el investigador y transmitirle el
recado urgente.
Esto debe funcionar as porque es la mnima seguridad que se
puede ofrecer al investigador desde el medio de comunicacin.
Recepcin de paquetes: Cuando se confa en una Unidad
investigativa es probable que lleguen correspondencias o paquetes conteniendo evidencias documentales. Los envos pueden
realizarse por correo o ser entregados en el medio, con
identificacin o con falsa identificacin, o aun de manera
annima; a travs de un nio o adolescente contratado para
hacer la entrega o de una persona que no se quiera identificar.
En estos casos, la recepcionista debe recibir el envo e informar
inmediatamente sobre el mismo empleando el mismo esquema
anterior. No es recomendable que el investigador recepcione el
envo, salvo que se trate de una operacin previamente
acordada con alguna fuente o interesada.
Pero al margen de las medidas rutinarias descriptas, puede ser
necesario que el medio se encargue de gestionar medidas de
proteccin especial al investigador, en momentos delicados, que
pueden ser de vigilancia policial sobre su domicilio o de dotacin
de guardaespaldas.
Medidas extremas de seguridad pueden ser traslado de domicilio, cambio de ciudad o hasta envo del investigador al exterior.
De todas estas medidas se debe hacer responsable el medio, o
sea, son medidas de seguridad externas al periodista, que lo
afectan, pero de las cuales son responsables terceras personas.
4. Medidas personales de seguridad

Pgina

109

En cuanto a las medidas personales de seguridad hay que distinguir dos tipos:
(1) Medidas de seguridad en tiempos normales, y
(2) Medidas de seguridad en tiempos de alto riesgo.
En tiempos normales las medidas de seguridad no deben ser
exageradas ni subestimadas; deben ser tomadas de manera rutinaria, tornndolas habituales.
La primera medida debe consistir en no tener rutina, o que la
rutina consista en no tener rutina, que es lo mismo. Ocurre que
al hacer todo siempre de la misma manera se facilita la accin
de quienes directamente o a travs de terceros estn buscando
tomar represalias:
- llegar a la misma hora en el medio,
- comprar del mismo lugar cigarrillos,
- comer en el mismo restaurante y a la misma hora, y
- estacionar siempre en el mismo lugar.
Estas son, entre otras decenas de actividades cotidianas,
comportamientos que se puede tener sin problemas cuando no
se est expuesto a riesgos. Con la inseguridad creciente, de
hecho no se recomienda que nadie proceda de esa manera, pero
en el caso del investigador, la existencia de riesgos latentes
obliga a no proceder de esa manera.
La segunda medida es tener como rutina el observar siempre el
entorno, tanto del domicilio como del lugar de trabajo, por si
haya anormalidades visibles. Un coche extrao estacionado en
las cercanas del domicilio puede significar varias cosas: puede
tratarse de la visita a un vecino, o de una medida intimidatoria, o
de intenciones menos santas. La presencia de un extrao, dem.
El domicilio del investigador debe tener un ritmo especial:
- no recibir a extraos, bajo ningn argumento, y

Pgina

110

- no dar pistas a un desconocido sobre el paradero del investigador.


En realidad, estas medidas son adoptadas por casi todas las personas, debidas a la inseguridad creciente, pero en el caso del
investigador debe funcionar como una regla de oro.
Al investigado, en sntesis, hay que darle el tratamiento de adversario, y del adversario es importante precaverse, para evitar
sorpresas o sinsabores.
En tiempos de alto riesgo las medidas de seguridad deben ser
extremadas, y pueden consistir por ejemplo en el cambio de
domicilio, que puede ser pasajero o permanente, o aun en la
salida del pas, que puede ser pasajera o permanente. Los
riesgos deben ser evaluados con mucho realismo, de manera
que no haya aparatosidad innecesaria en la adopcin de las
medidas de seguridad.
Las medidas deben ajustarse a la realidad, no excederse en ellas
ni quedar cortas al tomarlas; esta es la garanta de una vida
saludable, equilibrada y productiva, dentro de lo que esta calidad
es posible haciendo periodismo de investigacin.
5. Otros riesgos
No es necesario que el investigador tenga una vida de santo,
pero debe cuidar su imagen, que tratar de ser severamente daada por el grupo, institucin u organizacin que se est investigando, o por los involucrados.
Se puede dar, por ejemplo, que luego de investigar las operaciones irregulares de una telefnica celular X, sta reaccione sosteniendo abiertamente o por abajo que el trabajo fue pagado por
otra empresa de la competencia.
Las campaas que ponen en tela de juicio la integridad del
investigador suelen tener amplia difusin si se consigue meterlas
con habilidad en la usina de rumores, mecanismo
comunicacional informal de amplio alcance e influencia, que
puede hacer literalmente trizas en corto tiempo del prestigio
personal de un profesional. Esto suele ser efectivo, porque en la
era del pragmatismo sobre todo se cree con facilidad lo malo
que se dice de alguien y se pone en duda lo inverso.

Pgina

111

Si es responsable de la investigacin una mujer, lo ms probable


es que la usina de rumores juegue con aspectos de su vida
personal muy ntimos.
Los cuidados a ser tomados para reducir campaas de ese tipo
al mnimo de expresin, convirtindolas en rumores de escasa
difusin y baja credibilidad, se deben adoptar en tres frentes:
(1) Con las fuentes,
(2) Con los investigados, y
(3) Con los grupos de intereses.
Aunque no llegue a ser amorosa ni amistosa la relacin con la
fuente, al ser muy estrecha se presta a dar pie a rumores de
todo tipo, en el mejor de los casos a la versin que sostiene que
la fuente utiliza a la Unidad.
El manejo profesional de las relaciones aconseja mantener la
relacin en lmites discretos: suficientemente cercana para
lograr la cooperacin de la fuente y suficientemente distante
para no dar pie a la circulacin de rumores perversos. Hay casos,
por ejemplo, en que los hobbys de fuente e investigador
coinciden, como ser jugar ftbol; hacerlo una vez, no est mal,
pero hacerlo de manera sistemtica es dar pie para convertirse
en blanco perfecto del adversario.
Con los investigados, cualquiera sea el grado de simpata que se
inspiren mutuamente, lo recomendable es mantener la debida
distancia, y en circunstancia alguna aceptar regalos o
invitaciones; puede echar por tierra el prestigio del investigador.
Con los grupos de intereses hay que mantener una relacin estrictamente profesional, sin aceptar en circunstancia alguna,
invitaciones o regalos, pues eso desmeritar el trabajo de la
Unidad. A veces hay propuestas tentadoras, como ser la
invitacin a trabajar en una institucin, con elevada
remuneracin. La decisin ltima ser del investigador,
ciertamente, pero en el momento de decidir debe tener en
cuenta que al aceptar arroja sobre su propio trabajo de
investigacin una sombra de dudas, que puede ser imborrable;
el desprestigio lo puede acompaar por siempre.

SNTESIS

Pgina

112

Para concluir, el investigador est en la vidriera, sujeta por tanto


a todo tipo de ataques; posicin delicada que le obliga a actuar
con mucho profesionalismo para mantener la integridad de su
imagen pblica.

1. Riesgos y medidas de seguridad: Hay tres momentos en que


la exposicin a riesgos es mayor: (1) Cuando se inicia la investigacin; (2) Cuando se accede a informaciones claves; y (3)
Cuando se publica la investigacin. En esos momentos se pueden dar reacciones muy fuertes de los investigados, por lo que
se recomienda medidas especiales de seguridad.
2. Extremos de cuidado: Hay que cuidarse de no caer en dos
extremos: (1) Desarrollar una suerte de paranoia, y (2) Subestimar las posibles reacciones de los involucrados. La paranoia es
una alteracin psicolgica cuya superacin por lo general implica
asistencia profesional. La subestimacin es temeraria; muestra
falta de profesionalismo e hija de la improvisacin.
3. Mecanismos externos de seguridad: Consisten en medidas que
deben ser tomadas por terceras personas para otorgar mayor
seguridad a la Unidad. No dar coordenadas para localizar al investigador y tener un esquema de recepcin de paquetes, son
algunas de ellas. En casos especiales puede consistir en
gestionar vigilancia policial o dotar al investigador de
guardaespaldas.
4. Medidas personales de seguridad: En cuanto a las medidas
personales lo primero que hay que distinguir es que hay medidas
de seguridad para tiempos normales y otras para tiempos de
alto riesgo. No tener rutina es fundamental, ya que hacer las
mismas cosas siempre del mismo modo facilita el trabajo de
quienes directamente o a travs de terceros quieren daar.
Otros riesgos: El investigado puede desatar una campaa
orientada a desprestigiar a la Unidad, apelando a rumores infundados o basados en hechos reales. Hay que tomar cuidados
especiales en tres frentes: (1) Con las fuentes; (2) Con los
investigados; y (3) Con los grupos de intereses. Nunca aceptar
regalos ni invitaciones. El desprestigio puede llegar a ser tal, que
podr acompaar al investigador por el resto de su vida.

113

INDICACIONES PARA LA LECTURA

Pgina

RODRIGUEZ, PEPE. Periodismo de investigacin: tcnicas y


estrategias. Paids, Espaa, 1994. Captulo 8; pginas 177
al 192.
GEREDA, SILVIA. Riesgos del periodista al investigar
corrupcin de dictaduras militares. Sala de Prensa, Web para
profesionales de la comunicacin iberoamericanos.
SMEETS, MARYLENE. El periodismo en la etapa de posguerra
en Guatemala y El Salvador. Sala de Prensa, Web para profesionales de la comunicacin iberoamericanos.

CAPITULO X
BASE DOCUMENTAL, ARCHIVOS Y APOYO INSTRUMENTAL
1. La biblioteca de la Unidad. 2. La red de Internet. 3. Apoyo
instrumental y logstico.
1. La biblioteca de la Unidad
La biblioteca de la Unidad debe estar muy bien equipada y muy
bien organizada, de manera que se pueda obtener rpidamente
lo que se necesita. No es necesario tenerla desde un principio,
pero s resulta fundamental ir alimentndola, de modo que se
gane autonoma y rapidez a la hora de precisar de materiales de
consulta.
Hay que tener separados los materiales de inters general de los
materiales de reas claves, que debern contener los materiales
de utilizacin ms frecuente. Las reas claves son:
Materiales acadmicos: Todos los trabajos sobre periodismo de
investigacin, libros y publicaciones peridicas, que contienen
los avances que se van produciendo en la materia, adems de
recomendaciones generales y puntuales sobre cmo manejar determinadas situaciones.

Pgina

114

Materiales profesionales: Lo ms que se pueda tener de investigaciones periodsticas realizadas localmente o en otras latitudes. Adems de poder constatar los procedimientos empleados
en las investigaciones, la Unidad puede inspirarse en los temas
abordados y es frecuente inclusive encontrar conexiones locales
con hechos que envuelven a otros pases. Libros, folletos, revistas, semanarios y diarios.
Materiales legales: El ms amplio acopio posible, pero con nfasis en la legislacin administrativa, nacional y local, y en la legislacin penal. Es importante tener versiones comentadas de
ciertas leyes, como ser la Constitucin, el Cdigo Penal y toda la
legislacin administrativa; los comentarios ilustran sobre los
alcances de las disposiciones legales y lo que tcnicamente se
llama el espritu de las leyes, que no es ms que la intencin.
Memorias y mensajes: Normalmente los Ministerios, las entidades descentralizadas, la Polica Nacional y las empresas pblicas
divulgan anualmente unas memorias de sus respectivas
gestiones, que suelen incluir informaciones interesantes sobre
todo contables. Las Gobernaciones e Intendencias tambin
suelen divulgar memorias similares. El Poder Ejecutivo, por su
parte, presenta ante el Congreso un mensaje anual, conteniendo
un balance de su gestin. Dichos materiales son documentos
fundamentales, pues representan la versin oficial sobre los
resultados de las gestiones realizadas por las autoridades en el
ejercicio de sus funciones.
Presupuestos: Lo que ingresa y lo que se gasta, y sobre todo en
qu se gasta, est estampado en los Presupuestos; el del pas, a
nivel de administracin central; y locales, a nivel de las administraciones gubernamentales y municipales. Adems de los presupuestos, se debe contar con algunos trabajos crticos, que
resultan fundamentales para tener en claro qu gastos son
superfluos, o innecesarios, o abultados, y qu cuestionamientos
existen sobre los mecanismos de recaudacin.
La fuente bibliogrfica necesaria es mucho ms amplia, incluyendo investigaciones realizadas en otros campos, como por
ejemplo la sociologa o la criminologa; publicaciones de gremios
empresariales, profesionales o de trabajadores,...

2. La red de Internet

Pgina

115

Para simplificar y concluir sobre el valor de cualquier escrito


basta referir que hubo casos en que investigaciones tuvieron
como punto de partida anuncios publicitarios llamativos.

El Internet se ha constituido en un elemento sumamente til


para el desarrollo de las investigaciones. Inmediatamente se
puede identificar dos reas de utilidad inmediata: acadmica y
profesional.
Desde la perspectiva acadmica se han abierto espacios que
permiten acompaar las discusiones contemporneas sobre la
materia, entre acadmicos y profesionales del rea, con aportes
sustantivos para el esclarecimiento de conceptos bsicos y
fundamentales.
Todo est en discusin y permanente revisin, de donde hasta el
presente se contina debatiendo sobre si existe o no periodismo
de investigacin, encontrndose las posturas ms divergentes,
con argumentos muchas veces ingeniosos, lo que contribuye a
enriquecer un debate inconcluso.
Hay aportes sobre cuestiones ms puntuales:
- Los pasos del proceso de investigacin,
- Las tcnicas de investigacin,
- Las condiciones ideales para el funcionamiento de una Unidad
investigativa, y hasta
- El signo ideolgico del Periodismo de Investigacin.
Uno encuentra en dichos espacios aportes de Centros de Investigaciones y de Estudios, de catedrticos, de profesionales
famosos, de profesionales no tan conocidos, pero cuyos aportes
en ocasiones resultan hasta ms valiosos,..., una gama amplia,
en fin, que contribuye a tener ideas ms claras sobre lo que es la
prctica y sus fundamentos tericos.
Desde la perspectiva profesional hay aportes sustantivos de todo
tipo:

116

- Experiencias puntuales de Unidades investigativas,

- Bancos de Datos.

Pgina

- Investigaciones que fueron realizadas,

Las experiencias puntuales son diversas, incorporando polmicas


discusiones sobre el tema de la experiencia profesional anterior,
por ejemplo, pues se ha recurrido a estudiantes en muchos
casos, aunque hay que sealar que dicha prctica no deja de ser
cuestionable, sobre todo cuando se lo hace con la expresa
finalidad de reducir los costos de las investigaciones. Es
materialmente posible de realizar, sin lugar a dudas, pero
conspira contra el profesionalismo y amenaza seriamente la
calidad de los trabajos.
Los que llevaron adelante experiencias de ese tipo buscan justificarlas con el argumento de que de no reducirse los costos
iran a cerrarse las Unidades. Es preferible que se cierren,
definitivamente, antes que sacrificar puestos de trabajo de
profesionales, pues experiencias de ese tipo terminan
conspirando hasta contra los intereses de los estudiantes, que al
llegar a ser profesionales sern sustituidos por otros estudiantes,
o con suerte incorporados a los medios en el marco de leyes tipo
la del primer empleo, que le ofrecer perspectivas inmediatas
precarias, tanto laborales como salariales.
Las investigaciones que fueron realizadas llegan de diversas
formas, a veces resumidas, a veces completas y a veces
inclusive con referencias puntillosas sobre las tcnicas que se
emplearon para su realizacin. Representan aportes de
incuestionable utilidad.
Ensean, inspiran y hay ocasiones inclusive en que pueden ser
clonadas, lo cual no implica lesin alguna a los derechos de los
autores originales, cuya intencin deliberada pudo haber sido
esa.
Los Bancos de Datos crecen y son cada vez ms completos.
Constituyen una fuente inagotable de trabajos interesantes, y
uno puede encontrase con conexiones que ni siquiera imaginaba
de grupos, corporaciones, instituciones u organizaciones locales,
con los/las de otras latitudes.

Pgina

117

Hay informaciones estadsticas oficiales, por ejemplo, que pueden ser de suma utilidad. Hace poco, revisando un Balance Comercial del Paraguay a un periodista se le ocurri cruzar los datos con los del Brasil. Sorpresa: los guarismos diferan
sustancialmente, punto de partida de una investigacin.
Uno puede -adems de conocer- entrar en contacto con otros
investigadores para pedir ayudas puntuales o plantear trabajos
conjuntos. La rapidez de la nueva tecnologa en el campo de las
comunicaciones es tan grande, que ha convertido en obsoletas
otras formas de comunicacin de empleo aun cercano, como ser
el intercambio de correspondencias.
3. Apoyo instrumental y logstico
La tecnologa contempornea ofrece una variedad de instrumentos que pueden ser empleados en la prctica del Periodismo
de Investigacin con posibilidades de mejorar sustancialmente
los trabajos y los resultados.
Los micro-instrumentos, por ejemplo, son de suma utilidad, y la
Unidad debe disponer de ellos para su empleo cotidiano. Hay
micro-grabadoras, que permiten registrar conversaciones importantes sin que el entrevistado se percate. Ms sofisticado resulta
la grabacin a distancia, que permite a travs de aparatos
direccionados grabar conversaciones que se dan hasta a 100
metros de distancia, existiendo paredes de por medio inclusive.
El empleo oculto de cualquier sistema de grabacin, sin embargo, hay que utilizarlo con mucha responsabilidad, sin
emplearla por ejemplo para violentar normas legales expresas
como el derecho a la intimidad.
Pero suponiendo que una fuente se niega a ser grabada y uno
emplea algn mecanismo como los citados, si la cinta es destruida despus de su desgrabacin se estar respetando en lo
fundamental el acuerdo, pues la grabacin apenas tendra la
utilidad de recuperar todas las informaciones aportadas por la
fuente. Ahora, la divulgacin pblica de la grabacin-habindose
acordado no grabar- es en el mejor de los casos una accin
irresponsable y deplorable, cuando no algo que viole alguna
disposicin legal. Conductas de ese tipo rien con todo principio
tico; hay que honrar los compromisos asumidos, o no asumirlos.

Pgina

118

Hay micro-cmaras fotogrficas que permiten registrar con absoluta fidelidad, documentos que anteriormente uno apenas
poda mirar o mismo leer. La tcnica es simple. Y hay microfilmadoras que permiten registrar procesos enteros, como ser
momentos en que se dan propinas o en que se comercializan
drogas, sin que los involucrados se percaten.
Lo que sobre todo es posible hacer con los micro-instrumentos
es portarlos sin que nadie se percate de los mismos. Resultan sumamente tiles.
En otro orden de cosas, hay elementos de apoyo al trabajo que
resultan esenciales, como ser:
-vehculo normal, es decir no solamente que no lleve el logotipo
del medio, sino que ni siquiera se asemeje. Para ocasiones especiales, como ser concurrir a un club cerrado lujoso, se puede alquilar un vehculo acorde con la necesidad, y
- vestuario adecuado, que le permita al investigador ganar la
apariencia que no despierte sospecha alguna en el medio en que
ir a moverse. Visitar un pub lujoso, donde presuntamente se
realizan operaciones irregulares, o contactar directamente con
personas que se manejan en actividades marginales, exigen
vestimentas adecuadas muy distintas.
El soporte instrumental y el apoyo logstico resultan decisivos en
ocasiones para obtener resultados de alta calidad.
SNTESIS
1. La biblioteca de la Unidad: La biblioteca de la Unidad debe
estar bien equipada. Es fundamental que disponga de materiales
acadmicos, profesionales, legales, memorias y mensajes de autoridades o entidades. Hay que mantener separados los materiales de inters general de los que se emplean cotidianamente en
el marco del trabajo.
2. La red de Internet: El Internet se ha constituido en un elemento clave del trabajo. Hay en Internet desde espacios de consulta hasta mecanismos que tornan casi simultnea las comunicaciones, pasando por fuentes escritas de alto valor acadmico.

Pgina

119

Su influencia para el mejoramiento de los resultados ha sido contundente.


3. Apoyo instrumental y logstico: La tecnologa contempornea
ofrece una variedad creciente de sofisticados instrumentos que
pueden ser empleados en la prctica de la profesin: micrograbadoras, micro-cmaras y micro-filmadoras, por ejemplo. En
otro orden, hay elementos de apoyo indispensables, como vehculo sin logotipo identificatorio y vestimenta apropiada para diversas situaciones.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
RODRIGUEZ, PEPE. Periodismo de investigacin: tcnicas y
estrategias. Paids, Espaa, 1994. Captulo 9; pginas 193
al 210.
FUENTES, ALMA DELIA. La va socioinformtica de descubrir
noticias. Sala de Prensa, Web para profesionales de la comunicacin iberoamericanos.
ARMENDARES, PEDRO E. La investigacin periodstica
computarizada en Amrica Latina. Sala de Prensa, Web para
profesionales de la comunicacin iberoamericanos.

120
Pgina

CAPITULO XI

LA PUBLICACIN DE LA INVESTIGACIN
1. El proceso. 2. Formas posibles de presentacin. 3. Reglas de
redaccin. 4. Ultimas tensiones con los editores.
1. El proceso
La publicacin de los resultados de la investigacin se debe
realizar muy responsablemente, por lo que se sugiere respetar
los pasos de un proceso, que ofrece garantas de mayor
consistencia. Esto sobre todo es importante cuando lo que ir a
publicarse contiene denuncias muy delicadas y afectan o pueden
afectar la honorabilidad de ciertas personas.
Un esquema a ser empleado puede contemplar los siguientes
pasos:
(1) Elaboracin del esquema preliminar,
(2) Elaboracin del borrador,
(3) Discusin crtica del borrador del informe,
(4) Elaboracin del esquema definitivo, y
(5) Elaboracin del informe final.
El primer paso consiste en elaborar un esquema preliminar de
elaboracin, que contemple fundamentalmente las conclusiones
centrales y las conclusiones complementarias, as como los hechos fundamentales a ser desarrollados. El esquema preliminar
debe ser elaborado en el seno de la Unidad, si bien la redaccin
del borrador deber estar a cargo exclusivo del investigador que
acompa de manera ms cercana el proceso.
La elaboracin del borrador, segundo paso, deber ajustarse a
las lneas generales determinadas en el esquema preliminar. Ob-

Pgina

121

viamente que de su elaboracin ser responsable el que ms familiarizado estuviere con el tema.
Terminado el borrador se pasar a someter el caso a un examen
crtico, tercer paso; fase clave del proceso de elaboracin, pues
en el marco del anlisis, del que sobre todo sern responsables
centrales los que no estuvieron directamente involucrados en la
investigacin, se deber poner en duda desde las conclusiones
centrales hasta las complementarias, as como se debern hacer
todas las observaciones pertinentes en cuanto a los aspectos
formales.
Ocurre que el que particip directamente de la investigacin
pudo haber desarrollado prejuicios con respecto al caso, que fcilmente pueden llevarlo a exagerar hechos o caracterizaciones,
o a minimizarlos. De ah que las terceras personas de la Unidad
estarn en mejor posicin para someter el asunto a crticas de
fondo. La idea central, con este procedimiento, es la bsqueda
de la mayor calidad en el informe final.
Concluido el anlisis crtico, se pasar a elaborar el esquema
definitivo del informe, que contemplar todos los elementos centrales y accesorios que deber contener el informe final, as
como las sugerencias en cuanto a los aspectos formales.
El paso final es elaborar el informe de acuerdo con el esquema
final y adecuado a las sugerencias de forma.
Se busca con ello que fondo y forma alcancen el mayor nivel de
calidad posible, de manera que su publicacin tenga el impacto
deseado, resulte de clara comprensin y contribuya para que la
opinin pblica se interiorice sobre un asunto que anteriormente
le resultaba poco conocido, mal conocido o directamente desconocido.
2. Formas posibles de presentacin
Dependiendo del medio en que se publicar, el informe final
puede variar en cuanto a su presentacin. En este trabajo se tomar el caso ms importante que es el de su divulgacin por escrito, que gana frente a cualquier otro medio -salvo Internet- en
el sentido de que es permanente. No obstante, salvando las

Pgina

122

diferencias, las modalidades adoptadas para la divulgacin son


aplicables a todos los medios.
En diarios, semanarios o revistas, la publicacin del informe se
puede realizar bsicamente bajo dos modalidades:
(1) En una nica entrega, o
(2) En forma serial, es decir, mediante varias notas.
La modalidad ms adecuada depende del tema, por una parte,
de la cantidad de hechos acopiados, por otra parte, y de la
poltica de publicacin que tendr mayor impacto, finalmente.
De modo general se tiene que cuestiones puntuales se publican
ntegramente en una nica entrega y cuestiones grandes y
complejas en serie de notas, pero hay situaciones en que lo ms
recomendable es publicar todo en una nica entrega, aunque
posteriormente se siga alimentando el tema con ms detalles.
Inclusive -y sobre todo, a veces- cuando se trata de asuntos de
gran envergadura.
Ocurre que detrs de los casos grandes se mueven intereses
poderosos, que pueden influir negativamente en el sentido de interrumpir abruptamente la publicacin de una serie. Las presiones pueden ser muy fuertes o mismo se puede plantear arreglos
para ello, no con la Unidad, sino con el propietario del medio. Y
como la estructura de los medios es vertical, tanto o ms que la
de las Fuerzas Armadas, la ltima palabra la da el Comandante
en Jefe.
La ventaja de la nica entrega, en casos como el ejemplificado,
es que sin dejar de ser posible la interrupcin del trabajo, lo
esencial ya qued publicado.
Casos grandes, sin embargo, es recomendable publicar en serie
de notas, o en entregas sucesivas, que es lo mismo, por muchas
razones:
- porque se tratan generalmente de prcticas enraizadas, difciles de cortar, lo que da pie a una suerte de guerra de
desgaste,

Pgina

123

- porque generalmente involucran a personajes importantes,


verdaderos intocables para la justicia, a no ser que la presin
pblica alcance niveles significativos,
- porque al tomarse un tema novedoso, que logra acaparar la
atencin de la ciudadana, o por lo menos captar el inters de
parte importante de la misma, la circulacin y el prestigio del
medio se incrementan, y
- porque permite a la Unidad realizar el mejor despliegue informativo, mechando la divulgacin de su informe central con
notas que reflejen las reacciones que la publicacin est
generando.
Los casos puntuales deben ser publicados en una nica entrega,
pues no renen los mritos suficientes para que se les otorgue
ms espacio que lo necesario para su divulgacin. La entrega
nica, no obstante, suele traer cola, pues por ser nica tiene
niveles irritantes de contundencia, que provoca reacciones
inesperadas, tanto de signo negativo como positivo.
Al divulgarse un asunto puntual con contundencia, los
involucrados
reaccionan
muy
negativa
y
muy
descontroladamente, lo que incrementa el impacto de la publicacin. Por otra parte, publicaciones de este tipo suelen llevar a la
apertura de nuevas fuentes, que anteriormente no se disponan
a cooperar solamente porque no tenan credibilidad en la
posibilidad de la publicacin de casos similares.
Diversos motivos, como ser:
- excesiva verticalidad de los medios,
- falta de respaldo suficiente a su actividad,
- espacios insuficientes para un buen despliegue de materiales, y
- presiones internas de directores y editores, entre otras llevaron
a muchos periodistas investigadores a independizarse de los
medios y a trabajar por cuenta propia. Realizan investigaciones
menores y puntuales para vender a los medios, las que son
publicadas en series o en una nica entrega, y preparan investigaciones grandes, que a veces lleva aos concluir, para

Pgina

124

divulgarlas en forma de libros, que pueden ser vendidos a


editoras comerciales, o publicados por cuenta de los autores.
Las investigaciones de mayor impacto, ms completas y ms
contundentes, de hecho se han publicado de esa forma. Se trata
de contribuciones fabulosas para comprender cmo se producen
ciertos procesos. Trfico de narcticos, lavado de dinero sucio,
robos oficiales, han sido, entre otros, temas abordados con altsimo nivel de calidad en libros que han ganado merecidamente
amplia difusin.
3. Reglas de redaccin
En el Periodismo Informativo se aconseja esencialmente responder a las preguntas qu, quin, cmo, cundo y dnde, recomendndose el empleo de la llamada pirmide invertida (De lo
ms importante a lo menos importante) para la redaccin de los
materiales a ser publicados.
En la elaboracin del informe final de investigacin tambin hay
reglas sugeridas para la redaccin, llegndose a un consenso
sobre que el esquema ms recomendable es el que contempla
tres elementos:
(1) Tesis,
(2) Cuerpo, y
(3) Conclusin.
La propuesta consiste en encabezar la nota con una tesis, cuyo
contenido debe ser una aseveracin contundente, que resuma
en un prrafo la totalidad del tema. Un ejemplo ayuda a
comprender cmo aplicarla en la prctica.
Suponiendo que se investig sobre la venta de autos robados en
el pas, bajo la mirada complaciente de las autoridades, y que el
ilcito involucra a conocidos personajes de la sociedad, la tesis
debe reflejar todo eso de manera categrica:
Solamente en el 2002 fueron comercializados en el pas ms de
30.000 coches robados, en un ilcito que se realiza sobornando a
los responsables del control y el combate, tanto policiales como

Pgina

125

aduaneros, y que involucran de manera clara a los empresarios


X y Z.
No debe necesariamente ser un prrafo corto, pero s tiene que
ser representativo de lo que se encontr al investigar el caso. El
ejemplo apenas busca ilustrar sobre cmo podra presentarse un
caso hipottico, no es una gua para la redaccin. La tesis debe
ser clara, concisa y directa.
En el cuerpo se desarrolla el tema tratado, de manera ordenada
y clara, abundando en detalles solamente en casos necesarios, y
apoyando firmemente en datos y soportes documentales lo que
se va describiendo.
Siguiendo con el ejemplo:
Cuerpo, prrafo 1: Datos concretos sobre la venta de vehculos,
origen de los mismos, precios que se cobran y estimaciones
ciertas de lo que el negocio significa en dinero.
Cuerpo, prrafo 2: Ms datos concretos sobre la venta de vehculos, cantidad de denuncias de robo registradas en los pases
de origen, formas en que usualmente se introducen al pas.
Cuerpo, prrafo 3: Detalles sobre cmo se evaden los puestos de
control en los pases de origen; detalles de cmo se evaden los
controles aduaneros; detalles de cmo se burlan los controles
policiales locales,...
Tampoco es una gua lo anteriormente sealado, sino apenas un
ejemplo de cmo puede presentarse la informacin en el cuerpo
del informe de investigacin.
Lo que el investigador debe ser capaz de captar en el momento
de la redaccin es qu detalles interesarn a los lectores y qu
detalles no. El tendr en el momento de redactar una infinidad
de detalles, pero dar al lector lo que quiere, pues esa es la
forma correcta de actuar para despertar su inters por el
material publicado. Detalles curiosos y llamativos, por ejemplo,
s o s deben ser incorporados, pues por ms que no aporten
evidencias favorecen la lectura del material.

Pgina

126

La conclusin repite las aseveraciones de la tesis, pero gana


contundencia porque se apoya firmemente en el cuerpo, en que
se detallan los hechos que conducen a la conclusin.
La frmula descripta puede aplicarse tanto a publicaciones en
entregas nicas como en series de notas. Cuando se hace la
entrega a travs de una serie, se aborda en cada nota
cuestiones parciales, pero las mismas pueden tener los tres
componentes: tesis, cuerpo y conclusin.
Obviamente que algunos investigadores pueden desarrollar
formas alternativas de presentacin, de igual peso o mayor, pero
a falta de frmula a la que ceirse rige la descripta.
4. Ultimas tensiones con los editores
La relacin entre la Unidad investigativa y los editores se ha
caracterizado en general como cargada de tensiones; las que tienen su origen en varios hechos reales o imaginarios.
Hay celos justificados del editor, por ejemplo, por el hecho de
que los investigadores trabajan directamente con el director. Doble celo, para colmo, pues por una parte l siente en momentos
que la Unidad capta mayor inters del director, siendo l la persona que representa la referencia principal para el director en el
medio, y por otra parte, los periodistas investigadores no se encuentran subordinados a l.
Los editores, por lo general, en otro orden de cosas, estn acostumbrados a ver resultados rpidos, pues dirigen un medio que
irremediablemente debe estar repleto de informaciones en el
momento del cierre. Los investigadores producen resultados en
tiempos distintos; no estn sujetos a los horarios de cierre. Eso
lleva a suponer al editor, en sentimiento compartido con el resto
de la redaccin, que los investigadores trabajan poco; suposicin
absolutamente fantasiosa, que encuentra su origen muchas
veces en la falta de conocimiento de los detalles del trabajo de
investigacin.
De hecho nadie tiene mayor inters que la Unidad por presentar
resultados, pero ello no depende de la simple voluntad sino de la
conclusin de los trabajos, que se realizan con tiempos muy

Pgina

127

diferentes a los empleados por los encargados de redactar noticias diarias, como ya se apunt oportunamente.
Otro elemento que suele crear indisposicin en los editores es
que ellos son los hroes annimos de un producto que gana la
calle cotidianamente, sin que la opinin pblica ni siquiera sepa
de su existencia. La fama de los investigadores, sin embargo,
crece en proporcin geomtrica, alcanzando rpidamente el
reconocimiento pblico, la simpata y hasta la admiracin, sobre
todo cuando son capaces de ofrecer trabajos de alta calidad. Ms
celos.
De ah que en el momento inmediatamente anterior a la publicacin se suelen producir las ltimas tensiones entre la Unidad y
los editores. Como los editores distribuyen las pginas, a veces
retacean espacios a la Unidad, u ofrecen espacios perdidos -no
destacados- en el peridico, lo que ms bien le hara perder fuerza al trabajo. No se llega a un acuerdo, en principio, instalndose
un foco de tensin que necesita de una respuesta satisfactoria.
En casos as, la Unidad no debe subordinarse a los caprichos de
los editores, pues dichos caprichos son productos de prejuicios y
no de razones consistentes de carcter profesional. Si el
resultado de la investigacin fuese irrelevante, en realidad se estara invirtiendo en vano en la Unidad, pero si es objetivamente
relevante, los editores tienen que entrar en razn, por cualquier
va, y otorgar, en consecuencia, espacios destacados para su publicacin.
Tienen que entrar en razn, por cualquier va,... no es una
expresin de efecto, sino una realidad. Sin embargo, la va ms
adecuada contempla dos pasos previos.
Primeramente se debe tratar de persuadir a los editores sobre la
importancia de que el material a ser publicado ocupe un espacio
razonable y en una posicin destacada.
Si no se llega a un acuerdo, se debe insistir sobre la cuestin,
promoviendo un debate profesional con los editores.
Solamente si hay negativa terca hay que apelar al Comandante
en Jefe, quien con delicadeza o sin ella ser suficientemente
capaz de persuadir a los editores; no obstante, se insiste en que

SNTESIS

Pgina

128

hay que agotar previamente las negociaciones directas con los


editores.

1. El proceso: La publicacin responsable respeta los pasos de un


proceso que otorga garanta de alta calidad de presentacin: (1)
Elaboracin del esquema preliminar; (2) Elaboracin del borrador; (3) Discusin crtica del borrador del informe; (4) Elaboracin del esquema definitivo; y (5) Elaboracin del informe final.
La fase 3 es clave para determinar los ajustes de fondo y de
forma a ser introducidos.
2. Formas posibles de presentacin: En prensa escrita se puede
publicar el informe bajo dos modalidades: (1) En una entrega
nica, y (2) En forma serial, es decir, mediante varias notas. Hay
veces en que aunque el caso fuese grande -y aun mismo por eso
se recomienda publicar todo en una nota nica, aunque posteriormente se entreguen nuevos detalles. Esto apuesta a que
factores de presin interrumpan eventualmente la publicacin.
3. Reglas de redaccin: Hay consenso para que la elaboracin
del informe final conste de tres partes: (1) Tesis; (2) Cuerpo; y (3)
Conclusin. La tesis debe reflejar la totalidad del trabajo. El cuerpo debe desarrollar ordenadamente los elementos que componen el suceso o proceso tratado. La conclusin es una repeticin
de la tesis, pero sobre la base del slido sustento del cuerpo.
4. ltimas tensiones con los editores: El momento de la publicacin suele presentar las ltimas tensiones entre la Unidad y
los editores. Se procede a tratar de persuadir a los editores; se
discute, despus, desde una perspectiva profesional; y, ante la
negativa, finalmente se apela al Director del medio para que persuada al editor. Se insiste: hay que agotar las negociaciones
entre colegas antes de apelar al Director.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
QUESADA, MONSERRAT. La investigacin periodstica. Ariel,
Espaa, 1987. Captulo 13; pginas 151 al 173.
RODRIGUEZ, PEPE. Periodismo de Investigacin: tcnicas y
estrategias. Paids, Espaa, 1994. Captulo 11; pginas 234
al 246.

Pgina

129

REYES, GERARDO. Periodismo de Investigacin. Trillas, Mxico, 1996. Captulo 7; pginas 191 al 220.
MARTINEZ ALBERTOS, JOSE LUIS-SANTAMARIASUAREZ,
LUISA. Manual de Estilo. Centro Tcnico de la Sociedad
Interamericana de Prensa, Estados Unidos, 1993. Captulo 2;
2.6; pginas 152 al 163.

CAPITULO XII

130

EL SEGUIMIENTO

Pgina

1. Acompaamiento del caso. 2. Ampliacin de la investigacin.


3. El impacto sobre la opinin pblica. 4. Ms credibilidad, mayor
circulacin.
1. Acompaamiento del caso
El trabajo investigativo no concluye con la simple publicacin de
los resultados. Se debe acompaar el caso hasta que se agote
desde el punto de vista informativo, lo cual puede significar mucho tiempo. Los casos concretos pueden ser varios, pero se escogen dos, que son los ms frecuentes.
En primer lugar, se puede estar ante el caso de la publicacin de
un caso grande en una nica entrega. La reaccin de los
involucrados ser fuerte, y podr consistir en desmentidos, pedidos de rplicas o amenazas de demandas judiciales, sino apertura de juicios.
En casos como el mencionado la Unidad dispone aun de un
arsenal de informaciones, que deben ser divulgadas muy cuidadosamente. Como se trat de una entrega nica, es frecuente
que los involucrados caigan en el engao de creer que la Unidad
apenas dispone de los elementos que se lanzaron en la
publicacin. Responden entonces, sobre la base de una creencia
errnea, de manera hasta altanera, desafiando a la Unidad, sin
percatarse de que ella est pertrechada para un enfrentamiento
de larga duracin.
La Unidad debe estudiar atentamente la reaccin de los
involucrados, y aportar nuevos elementos en el marco del
debate abierto. Se debe tener el cuidado de no abrir
tempranamente nuevos frentes, pues si los involucrados replican
determinados aspectos, la Unidad dispondr de evidencias y
documentos probatorios con los que puede llevar rpidamente a
los involucrados a una situacin de dejarlos sin respuesta.
Cuidadosamente, tambin, porque la opinin pblica que est
acompaando el caso debe ser enteramente persuadida de la
veracidad de los hechos sacados a luz, lo que debe quedar fuera
de dudas.

Pgina

131

Pero distintamente de lo que ocurre en una disputa de boxeo, el


investigador no debe dejar de atacar al adversario cuando ste
tira la toalla; es importante asestarle un golpe final, de modo
que el trabajo de la Unidad quede slidamente parado.
El segundo caso es cuando se est ante una publicacin en serie
de notas. La reaccin de los involucrados puede eventualmente
ser muy fuerte, debido al poder que tienen, por lo que se puede
dar la abrupta interrupcin, como ya se apunt ms arriba.
Si existe la decisin de proseguir, sin embargo, se abren dos
frentes:
- la continuidad de la serie, de acuerdo a lo planificado, y
- el acompaamiento de las reacciones.
Dependiendo de la reaccin de los involucrados y el inters del
pblico que est acompaando el caso, hay ocasiones en que es
recomendable alterar el orden de las notas a ser publicadas
(Flexibilidad en la planificacin), de modo que las que se divulguen guarden la mayor conexin o proximidad con lo que se est
paralelamente debatiendo.
El debate no concluye con el simple abandono de la disputa por
parte del adversario; hay que asestar el golpe definitivo; y
prosigue la publicacin, lo que puede dar lugar a nuevas reacciones y a nuevos debates.
2. Ampliacin de la investigacin
La publicacin de los resultados de una investigacin trae amenazas y ofrece oportunidades. Generalmente, durante el proceso
de acopio de informaciones, varias personas candidatas a
fuentes se resisten a cooperar, por varias razones, que van
desde el miedo hasta la escasa o nula credibilidad en que el
trabajo se publique.
De ah que la publicacin de la investigacin ofrezca muchas
oportunidades favorables, en el sentido de que es frecuente que
aparezcan nuevas fuentes, que ofrecen nuevos enfoques, nuevos
detalles y nuevas evidencias sobre el caso que est siendo tratado, o mismo que ofrezcan elementos suficientes para un cambio

Pgina

132

drstico del enfoque con que se est publicando o se ha publicado el material.


Para la Unidad se abren nuevas posibilidades, que bsicamente
son de:
- ampliacin de la investigacin a nuevas reas, o de
- fortalecimiento del trabajo que se est trabajando, o de
- ambas cosas a la vez.
El primer caso es el ms rico, pues las fuentes que se aproximan
por iniciativa propia, ofrecen pistas nuevas que permiten
cambiar el enfoque de la investigacin, en el sentido de
extenderlas en direccin a reas que no se estaban tocando ni
se pensaba tocar.
Si la Unidad es lo suficientemente rpida y gil, se empear por
sacar el mximo provecho de la oportunidad, procediendo
inmediatamente a ampliar la investigacin y a incorporar los
nuevos elementos que se le ha arrimado. La Unidad debe estar
preparada para absorber ese tipo de reacciones, muy comn
despus de la publicacin de resultados que sacan a luz casos
complejos y grandes.
El segundo caso es altamente positivo, pues se fortalece el trabajo cuando a travs de la cooperacin de nuevas fuentes se
acceden a nuevas evidencias y a nuevos testimonios que
confirman plenamente lo que la Unidad viene publicando.
Esto otorga a la Unidad mayor seguridad, pues adems de disponer de mayores elementos para enriquecer el trabajo, dispone
de mejores pertrechos para eventuales debates que pueden desencadenarse a partir de la investigacin.
El tercer caso es el ideal para la Unidad: nuevas pistas y nuevas
evidencias; nuevos elementos y nuevos testimonios! Eso permite
hacer ambas cosas a la vez: ampliar la investigacin a reas
anteriormente no tocadas y fortalecer el trabajo en todos los aspectos. Y aunque parezca mentira, lo ms frecuente es que este
caso es el que se d luego de la aparicin de nuevas fuentes.
3. El impacto sobre la opinin pblica

Pgina

133

El impacto que tiene la publicacin de la investigacin sobre la


opinin pblica es perfectamente medible. El mismo puede ser
alto, medio o bajo.
Es de alto impacto cuando el tema acapara el inters de la opinin pblica, y se expresa no solamente en la mayor circulacin
del medio, sino en el hecho de que el caso se convierta en tema
de comentarios cotidianos. Se suele presentar en tres casos:
cuando el asunto es de inters general; cuando el caso es de
gran envergadura; y cuando se trata de un escndalo.
Es de medio impacto cuando adems de aumentar la circulacin
del medio, el tema se convierte en motivo de comentarios
eventuales, ya sean callejeros, ya sean de otros medios. Se
presenta a veces en casos muy grandes, pero que tratan sobre
asuntos que muchos consideran que son muy complicados,
como ser negociados en el marco de pagos de la deuda externa,
o temas energticos, de telecomunicaciones, de pagos de
impuestos... Por ms que la Unidad se empee por traducir en el
lenguaje ms sencillo y accesible el tratamiento del asunto, el
tema en s ahuyenta a algunos lectores.
Es de bajo impacto cuando la publicacin de la investigacin no
se traduce en aumento de la circulacin del medio ni en comentarios siquiera eventuales sobre el tema, ya sean callejeros
o de otros medios. La opinin pblica reacciona con fuerte dosis
de indiferencia en varias situaciones:
- cuando considera que lo que est siendo tratado es normal,
- cuando el tema no le afecta directamente, o
- cuando el caso le resulta irrelevante.
Si las situaciones que provocan actitudes indiferentes son una de
las dos inicialmente referidas, no hay problema alguno, pero si la
situacin de indiferencia se basa en el hecho de considerar
irrelevante el asunto, hay que admitir que hubo un error de
evaluacin al presentar mismo el proyecto de investigacin.
Hay casos, no obstante, en que lo que un medio busca no es que
determinadas investigaciones tengan impacto sobre el conjunto
de la opinin pblica. Se trata de las investigaciones dirigidas, en
las que se busca sobre todo impactar en determinados grupos,

Pgina

134

que pueden ser profesionales o no. Una investigacin sobre un


club clase A puede buscar solamente impactar sobre los
socios de la entidad; una investigacin sobre el funcionamiento
de los juzgados puede apuntar a llamar la atencin solamente de
las autoridades del Poder judicial,... Si el objetivo se logra, al
margen de que no sea comentado, ni que incida sobre la circulacin del medio, la publicacin habr resultado exitosa.
4. Ms credibilidad, mayor circulacin
La publicacin de una buena investigacin lleva casi necesariamente a un incremento de la circulacin, lo cual es una
ventaja, pero puede ser pasajera. Ahora, la publicacin
sistemtica de investigaciones buenas en un mismo medio de
comunicacin otorga ventajas importantes y duraderas:
(1) Aumento de credibilidad,
(2) Mayor circulacin permanente, y
(3) Fortalecimiento de la Unidad investigativa.
El capital principal de un medio de comunicacin es el elevado
nivel de credibilidad que puede llegar a alcanzar, lo que se
deber esencialmente a un buen trabajo periodstico. Un medio
de comunicacin que invierte seriamente en lograr un buen producto, apuesta seriamente en todo su personal, periodstico,
tcnico, administrativo y logstico, sin escatimar recursos en
cuanto a capacitacin e infraestructura.
Un buen producto no es resultado del azar, y las ventajas que se
pueden lograr a travs de campaas publicitarias y alianzas
estratgicas con el sector gubernamental o con publicitarias,
pueden ser efmeras.
La implantacin del medio viene de manos con la calidad del
producto, cuanto ms elevada mejor; y el crecimiento sostenido
de la circulacin de un medio viene de manos del aumento de la
credibilidad en el medio, esfera en la que el periodismo de investigacin viene jugando un papel crecientemente importante.
Hay alianzas estratgicas que astutos empresarios de medios
realizan con sectores gubernamentales o publicitarios, con lo
que disponen de recursos holgados y a veces garantizan una

Pgina

135

circulacin relativamente amplia. El medio cuenta con rentables


anuncios y tiene una venta forzada. El xito es pasajero. Cuando
el producto es malo, la circulacin -va colocacin forzada- puede
ser elevada, pero su influencia real en la formacin de opinin
pblica puede ser escasa, cercana a la nulidad inclusive. Cuando
el producto no satisface, las propias empresas presionan a las
publicitarias que administran sus paquetes para sacar sus anuncios de determinado medio.
La mejor garanta de amplia circulacin e incidencia real en la
formacin de opinin pblica es la alta credibilidad.
Mayor credibilidad lleva ms tarde o ms temprano a una mayor
circulacin y, por lo tanto, a mayor rentabilidad. Ms circulacin
equivale a ms ventas, y ms ventas se traducen casi inevitablemente en mayor cantidad de anunciantes.
Pero no hay que dormir sobre los laureles; la apuesta en mejorar la calidad del producto debe ser permanente; la apuesta en
aumentar la credibilidad del medio debe ser sistemtica; y mejorar la calidad del producto y aumentar la credibilidad del medio,
pasa, entre otras cosas, por invertir en serio en el personal. Esa
es la manera eficiente de manejar un medio y as lo testimonian
los que han alcanzado un alto desarrollo, como referentes
nacionales y hasta internacionales.
El fortalecimiento de la Unidad investigativa se da en el marco
de la gestin eficiente de un medio, cuyo director es plenamente
consciente del importante rol que desempea la Unidad en el aumento de la credibilidad, y se dispone, por tanto, a favorecer su
fortalecimiento, lo que se traduce en facilitar los recursos
necesarios para el buen funcionamiento, mejorar la atencin a
los integrantes y remunerarlos adecuadamente.
SNTESIS
1. Acompaamiento del caso: La investigacin no concluye con
la publicacin de los resultados. Se debe acompaar el caso
hasta que se agote desde el punto de vista informativo. Por lo
general, despus de la publicacin se abre un debate, marco en
el que la Unidad no debe conformarse con que el adversario tire
la toalla; debe asestarle un golpe final, de modo que la Unidad
quede bien parada.

Pgina

136

2. Ampliacin de la investigacin: La publicacin de un caso


cualquiera
ofrece
nuevas
oportunidades.
Generalmente
aparecen nuevas fuentes, que anteriormente se resistan a
cooperar, y proporcionan elementos que permiten dar ms
solidez al trabajo, o aun ampliar el trabajo, o ms aun: cambiar
el enfoque. Si hay mayores elementos y evidencias, se debe
proceder a cambiar hasta el enfoque cuando es necesario.
3. El impacto sobre la opinin pblica: El impacto sobre la opinin pblica puede ser alto, medio o bajo. Es alto cuando la publicacin acapara la atencin y se traduce claramente en un aumento de la circulacin del medio. Es de medio impacto cuando
genera comentarios eventuales y se expresa a veces en una ampliacin de la circulacin. Es de bajo impacto cuando la opinin
pblica reacciona con indiferencia, sin que se presente aumento
de la circulacin.
4. Ms credibilidad, mayor circulacin: La publicacin sistemtica
de resultados de investigacin periodstica se constituye en una
pieza clave para otorgar mayor credibilidad en el medio en
cuestin. La credibilidad -capital fundamental de cualquier
medio- puede, a su vez, garantizar una circulacin ampliada permanente, con lo que tambin se incrementan los anuncios publicitarios. Y ms ventas y ms anuncios hacen la actividad ms
rentable.
INDICACIONES PARA LA LECTURA
REYES, GERARDO. Periodismo de Investigacin. Trillas, Mxico, 1996. Captulo 8; pginas 221 al 234.
CAPITULO XIII
EL
SIGNO
IDEOLGICO
INVESTIGACIN

DEL

PERIODISMO

DE

1. La posicin de los apologistas. 2. La posicin de los


detractores. 3. La posicin neutral. 4. El periodismo y la hegemona social. 5. El periodismo comercial y el periodismo
militante. 6. Los lmites del periodismo de investigacin. 7. Los
nuevos desafos.

Pgina

137

Una discusin de fondo se ha abierto sobre el signo ideolgico


del Periodismo de Investigacin, aspecto sobre el cual es
importante tener algunas ideas claras. Varios estudiosos y
profesionales ya se han pronunciado y se vienen pronunciando
sobre la delicada cuestin, por lo que en el desarrollo del
presente captulo se dejarn sentadas las premisas bsicas que
contribuirn a acompaar el debate contemporneo con
mayores elementos de anlisis.
1. La posicin de los apologistas
El Periodismo de Investigacin, como modalidad peculiar de la
actividad comunicacional, tiene declarados apologistas, que tratan de presentarlo como una pieza fundamental para la correccin de todos los males que aquejan a las sociedades, tanto del
Primer Mundo como del Tercer Mundo.
Las sociedades con alto desarrollo y las que tienen menor desarrollo arrastran distintas distorsiones en sus funcionamientos,
pero que pueden ser corregidas, de acuerdo con los apologistas,
con la contribucin clave del periodismo de investigacin, del
perro guardin.
Esta postura parte de un presupuesto equivocado, pues toma
como un hecho que lo nico que hay que corregir en el sistema
constituyen las distorsiones, sin cuestionar las cuestiones de
fondo de las sociedades. Para ser ms claro y directo: el
capitalismo es la panacea; hay distorsiones en el sistema, pero
el sistema es inalterable.
Ejemplos:
(1) En las sociedades hay prcticas corruptas, las que deben ser
erradicadas. Muchas de ellas no se conocen o se conocen mal y
poco, de donde la investigacin aportar los elementos para
conocerlas a fondo, lo que a su vez posibilitar un combate ms
eficiente, tendiente a erradicarlas.
(2) En las sociedades hay prcticas atentatorias contra las reglas
establecidas, llevadas a cabo por grupos que operan al margen
de las leyes, pero cuyo poder econmico es tan grande que se
han convertido en una suerte de intocables. Sus operaciones
pueden ser puestas al desnudo a travs de investigaciones, lo

Pgina

138

que posibilitar crear opinin pblica y presin social favorables


a su combate frontal.
(3) En las sociedades hay abusos de los poderes pblicos, que se
manifiestan en una amplia variedad de prcticas, desde administrativas hasta ejecutivas, cuyos detalles pueden ser revelados
por investigaciones, con lo que se puede desde destituir a un
funcionario, presidente inclusive, hasta montar esquemas de
mayor control social sobre los poderes en cuestin.
(4) En las sociedades hay servicios pblicos prestados por sectores privados que resultan caros y malos. El periodismo de investigacin puede contribuir a conocer en detalles las razones
del mal funcionamiento y el elevado costo de los servicios,
posibilitando mejores servicios y precios ms razonables al
despertar la presin de la sociedad.
La gama de distorsiones funcionales es muy amplia, ciertamente, pero lo que no se dice es que las sociedades se caracterizan sobre todo por la divisin social en clases, de acuerdo con
las funciones que cada sector desempea en el proceso de
produccin y reproduccin de la sociedad, que representan
distorsiones esenciales del sistema.
Ms concretamente: el capitalismo puede existir con o sin las
distorsiones, o sea, no hace parte de su esencia la corrupcin, ni
el abuso de poder, ni las prcticas atentatorias contra reglas
establecidas, ni el carcter malo o caro de los servicios pblicos,
ni cualquier otra disfuncin. Puede existir, obviamente,
erradicando inclusive esas distorsiones.
Un aspecto esencial del capitalismo es la explotacin del trabajo
ajeno y el tratamiento de ello obvian los apologistas, queriendo
reducir a veces la explotacin al abuso -mxima concesin-, pero
asumiendo como normal que uno trabaje para que el otro
gane, o mejor, que los capitalistas amasen crecientes fortunas a
costa del trabajo subordinado de sus operarios o empleados.
Hay otros aspectos que caracterizan su esencia actual, como ser:
- la desenfrenada carrera armamentista y el militarismo, y

2. La posicin de los detractores

Pgina

139

- la despiadada destruccin del medioambiente, que son


enfocadas por la gran prensa apenas superficialmente, y son
justificadas a nombre de la modernizacin y del progreso.

No hay periodismo de investigacin; todo periodismo es de


investigacin, dicen algunos, y le hacen coro otros. O ms: el
buen periodismo tiene que ser de investigacin.
Esta postura pone en juego de manera poco responsable toda la
acumulacin terica y acadmica sobre el periodismo, por lo que
es inaceptable.
El periodismo es una prctica crecientemente importante para
las sociedades, cuyas funciones son amplias y cada vez ms
esenciales, como ser socializar el conocimiento de hechos
relevantes que se producen en cualquier esfera de la actividad
social, y que estn lejos de contemplar investigacin alguna.
El periodismo ayuda a tomar decisiones, al informar sobre las
condiciones generales y puntuales, que llevan a decidir. Nadie
toma decisiones a ciegas, y en tanto que de ms informaciones
uno disponga para decidir, mayores son sus posibilidades de tomar decisiones correctas. Esto es as para invertir en algo, para
salir a recrearse un final de semana, para ver determinada
pelcula o para ir al teatro.
El periodismo contribuye a tomar postura. De acuerdo con la
masa y la calidad de las informaciones de que dispone, apoya
una guerra, se opone a una invasin, o aun se manifiesta favorable a la actitud de un dirigente deportivo o desfavorable a un
operativo policial de control sobre los lugares de recreacin de
jvenes,...
Y en todo lo anteriormente descripto, en que la persona accede a
informaciones relevantes para su existencia, no hay investigacin ni tiene por qu haberla.
Ejemplos:
Un accidente areo es una noticia importante. Saber dnde ocurri, cuntas personas perdieron la vida o quedaron lesionadas,
por qu se dio el accidente, comprende un conjunto de informa-

Pgina

140

ciones importantes, que no implica investigacin alguna, pero


que no por ello deja de ser buen periodismo.
El resultado de un partido de ftbol, clsico o de algn torneo
importante, local o internacional, es una informacin importante
y es buen periodismo sin ser investigativo.
La apertura de una muestra de obras de arte es importante,
puede dar lugar a una buena crtica, favorable o desfavorable;
da pie a la prctica de buen periodismo, que no es investigativo.
La clsica divisin del periodismo completo en:
- Informativo,
- Interpretativo, y
- De opinin, es vlida y resulta importante mantenerlas dentro
de la esfera acadmica y dentro de la esfera prctica, pues su
vigencia aun promete extenderse por mucho tiempo. El
periodismo de investigacin es una modalidad del Periodismo
Interpretativo; y es positivo mantenerlo ah, salvo que se le
encuentre un lugar mejor dentro de la construccin acadmica
futura.
Como modalidad particular ha dado pie a una importante construccin terica, ciertamente, pero no hay mritos suficientes
para sacarlo de dentro de la esfera del Periodismo Interpretativo;
y ningn mrito para sostener que no existe, que todo
periodismo es investigativo, o que buen el buen periodismo es
necesariamente investigativo.
3. La posicin neutral
No puede haber periodismo capitalista ni socialista; el periodismo como cualquier otra ciencia social tiene su desarrollo
autnomo. Esto es falso de falsedad absoluta; en las ciencias
matemticas, o qumicas o mdicas los desarrollos son
autnomos, pero en el terreno social las llamadas ciencias no
son ciencias, propiamente, sino desarrollos tericos ricos o
pobres, que favorecen intereses concretos, disimiles cuando no
contradictorios y hasta antagnicos.

Pgina

141

El periodismo, como parte de las Ciencias Sociales, ha alcanzado


un importante nivel de construccin terica y tcnica, que se
emplea indistintamente en sistemas socio-econmicos y sociopolticos marcadamente diferentes.
Inclusive los enfoques a veces guardan tal similitud, por lo que
resulta difcil encontrar diferencias importantes.
Una nota periodstica elaborada en Cuba puede ser similar en lo
esencial a otra elaborada en los Estados Unidos, o en China
Popular, como ser un reportaje sobre los accidentes areos, pero
cuando estn en juego intereses fundamentales, los enfoques
divergen sustancialmente, como por ejemplo en un reportaje sobre el armamentismo, la depredacin ambiental o el tratamiento
de la deuda externa.
Hay diferencias tcnicas y de contenido marcadas, sin embargo,
que son coherentes con los sistemas socio-econmicos y sociopolticos en que se practican.
De modo general, se puede dejar sentado que desde la perspectiva estrictamente tcnica hay pronunciadas diferencias que
dependen del grado de desarrollo econmico. As, es indiscutible
que los pases del Primer Mundo disponen de tecnologas mucho
ms avanzadas que las vigentes en los pases del Tercer Mundo y
en los auto-proclamados socialistas, que se expresan en productos tcnicamente mejores, superiores.
Desde la perspectiva de los contenidos, hay que dejar claramente establecido que las publicaciones ms ricas se producen
en los pases que presentan situaciones ms consolidadas de vigencia de las libertades pblicas, incluida la libertad de expresin. Bajo regmenes polticos cerrados, sean estos capitalistas o
no, la libertad de expresin es tan reducida, que ello se traduce
en el empobrecimiento de la produccin intelectual, en general,
y de la produccin periodstica, en particular.
Bajo los regmenes polticos cerrados no es que falte creatividad
intelectual, sino que existen reglas rgidas, esquemas de censura
que a veces hasta estn finamente elaborados, que asfixian la
libre expresin, reducindolas a una pobre minimidad.

Pgina

142

Riqueza de produccin intelectual/periodstica y carcter cerrado


o abierto de los sistemas polticos, entonces, tienen estrecha
relacin; son factores nter-actuantes, nter-dependientes. De
donde se deduce la frmula en vigor: a mayor libertad mejor
produccin, ms rica y ms amplia; a menor libertad peor
produccin, ms empobrecida, ms restringida.
4. El periodismo y la hegemona social
El periodismo se viene constituyendo, tanto en las sociedades
del Primer Mundo como del Tercer Mundo, en un factor clave
para la construccin de la hegemona.
Estudios pretritos colocaban a la Iglesia como un factor central
en la reproduccin del sistema feudal, con relevante responsabilidad en la implantacin y reproduccin del capitalismo despus, en que la clase hegemnica era la burguesa.
La Iglesia, sin embargo, rpidamente pas a desempear un rol
ms discreto en la construccin de la hegemona, siendo substituida por la escuela, que se convirti en una instancia capaz de
jugar un doble papel fundamental para la reproduccin del capitalismo: transmitir la ideologa dominante, por una parte, y capacitar la mano de obra, por otra.
Estudios contemporneos, sin embargo, apuntan con contundente claridad que en ambos roles la escuela ha sido substituida
por los medios de comunicacin de masas. Hoy por hoy, los diversos medios de comunicacin-TV, radios, prensa, cine,
Internet son los elementos conductores de primer nivel de la
ideologa dominante, y tambin son los responsables de primer
orden en el proceso de capacitacin de la mano de obra.
La aseveracin es una constatacin firme, que se apoya en slidas estadsticas que demuestran de manera inequvoca el creciente papel desempeado por los medios de comunicacin
como los principales constructores de la hegemona social.
Dicho de otro modo, los medios de comunicacin juegan un
papel central en la reproduccin del capitalismo, desplazando
definitivamente del centro del escenario a la escuela de esa
posicin. Ms claridad aun: la escuela sigue desempeando su

Pgina

143

mismo papel, pero cada vez ms subordinada a los medios de


comunicacin.
Con rol central en la reproduccin del sistema, los medios han
ganado una presencia indita, el periodismo en general ha cobrado una importancia trascendental, y el periodismo de investigacin en particular se ha constituido en una pieza clave para el
combate a las distorsiones que acompaan al sistema.
Esta es la perspectiva correcta desde donde hay que observar el
papel que representa para la sociedad actual el periodismo de
investigacin. Se encuentra inserto dentro de un sector que desempea un papel central en el marco de las actividades realizadas para reproducir la sociedad, ocupando un espacio privilegiado, pues se le encomienda nada menos que cuidar del buen funcionamiento del sistema, atacando con fuerza y de manera permanente cualquier distorsin.
5. El periodismo comercial y el periodismo militante
Se suele distinguir el periodismo que se practica usualmente en
el mbito comercial -formalmente imparcial e independiente- del
periodismo militante, que se presenta abiertamente como
vocero del pensamiento de determinados grupos polticos o
doctrinarios.
En el mbito comercial, se presta un servicio informativo a la
ciudadana, presuntamente desde una posicin neutral desde el
punto de vista poltico y doctrinario; pero tal neutralidad no
existe sino en un grado nfimo, pues tanto las coberturas locales
como internacionales terminan siendo permeadas por los
intereses de grupos econmicos y polticos poderosos, que
imprimen una direccin claramente definida a su servicio
informativo en cuestiones puntuales consideradas claves. Dicho
de otro modo, sobre gran parte de la informacin que se
vehiculiza a travs de la prensa comercial hay mucho de
imparcialidad, pero se trata del aspecto informativo que no
involucra intereses de fondo; ahora, cuando estn en juego
intereses importantes, las informaciones son tendenciadas, a
veces sutilmente, a veces groseramente.
En los pases con sistemas polticos democrticos o en proceso
de democratizacin, es frecuente que los medios mejor maneja-

Pgina

144

dos apelen a la apertura de espacios para la divulgacin de


materiales u opiniones que estn totalmente enfrentados con su
lnea de trabajo fundamental. Esto se hace apenas para vender
la imagen de pluralidad, pero no representan posturas
pluralistas, en realidad, pues la divulgacin de posturas
disonantes con la lnea central de trabajo es espordica,
eventual, no sistemtica.
En la prensa latinoamericana, por ejemplo, fue comn apelar a
ese mecanismo engaoso en el marco del debate sobre las
privatizaciones. Los medios comerciales, por regla, favorecan las
privatizaciones -raras veces por conviccin, generalmente porque las campaas involucraban movimientos importantes de recursos financieros para costear las publicaciones-, pero se abran
tmidos espacios para los que se oponan a dichas polticas, con
la nica finalidad de maquillar a los medios de pluralistas ; capaces, por tanto, de reflejar la diversidad de posturas y opiniones sobre el relevante proceso.
El periodismo militante, por su parte, se practica en la medida en
que la viabilidad econmica permite a determinados grupos
hacerlo, sobre todo en los tiempos actuales, en que los niveles
de calidad exigen que se invierta sumas importantes de dinero
para que el medio se publique con posibilidades de buena
circulacin.
Si el medio militante es capaz de captar con gran tino la demanda informativa existente en el seno de la opinin pblica, es
posible que tenga amplia difusin. De hecho hay peridicos militantes implantados, que a veces hasta tienden a expandirse.
Pero si el medio restringe su contenido a la difusin de sus
peculiares puntos de vista, haciendo caso omiso de la demanda
de la opinin pblica, representar solamente gastos, con
circulacin restringida y poca o baja influencia sobre la opinin
pblica.
Pueden desarrollar investigaciones, obviamente, pero todo el
trabajo, as como sus conclusiones centrales y secundarias, estarn marcadas a sangre y fuego por la posicin doctrinaria del
medio, ya sea marxista, social-cristiana, liberal o nazi-fascista.
Hay medios de comunicacin alternativos, finalmente, que no
son comerciales pero tampoco militantes, que se publican con

Pgina

145

periodicidad
semanal,
quincenal,
mensual
o
ms
espaciadamente en el tiempo, pero que han permitido el
desarrollo de importantes trabajos de investigacin periodstica
marcadamente buenos, con respuestas bastante satisfactorias
de la opinin pblica.
A veces esos medios evolucionan en direccin a constituirse en
medios comerciales, por su alta circulacin, a veces se mantienen constantes en una lnea de independencia efectiva, debindose exclusivamente a sus pblicos. No es el periodismo del futuro, lgicamente, por la escasa fuerza de que disponen cuando
se lo compara con lo que se produce en la gran prensa
comercial, pero es una alternativa laboral interesante para
investigadores serios y
responsables,
que
encuentran
demasiadas limitaciones en los medios comerciales para
impulsar trabajos interesantes e importantes.
6. Los lmites del periodismo de investigacin
Los lmites del Periodismo de Investigacin son aun difusos, pues
dependiendo de los medios en que se desarrolla el trabajo
adquiere perfiles que lo definen como ms ricos o menos ricos,
como ms prisioneros de intereses sectoriales o ms
independientes.
En el caso de los medios comerciales, el Periodismo de Investigacin puede experimentar una de dos evoluciones:
(1) Ser enteramente vocero de los intereses del propietario o de
los propietarios, con lo cual su esencia consistir en ataques
hasta furibundos a los grupos polticos y econmicos enfrentados
con el medio en cuestin. Hay producciones puntuales que
pueden ser hasta ricas desde el punto de vista informativo, pero
tendr como techo el hecho cierto de no poder incursionar en la
investigacin de los sectores polticos y econmicos relacionados
directa o muy estrechamente con el medio.
(2) Ser parcialmente independiente, lo que se da en medios bien
manejados-que hasta el presente son los menos-, que llegaron a
apostar en la mayor credibilidad en los medios en cuestin como
negocios altamente rentables. No solamente habr buenas
investigaciones, sino que las Unidades dispondrn de un slido
apoyo en varias esferas, por una parte, y podrn incursionar

Pgina

146

hasta en campos vedados para otros, como ser las


irregularidades de corporaciones que son grandes anunciantes,
por otra. De todos modos, su techo ser el sistema como un
todo, que no podr ser cuestionado -a no ser que lo haga una
que otra vez- lo que representar una limitacin de peso.
En los medios militantes, el Periodismo de Investigacin estar
prisionero irremediablemente de los principios doctrinarios del
medio en cuestin, cualquiera sea el signo. Sus limitaciones
estarn muy bien marcadas; todos los trabajos debern a
apuntar a atacar a los adversarios y a dejar bien parado al grupo
doctrinario o poltico que publica el medio.
La lucha sin cuartel que los grupos militantes se declaran entre
s, a veces da pie a la publicacin de importantes informaciones
negativas sobre los adversarios, pero como se trata de trabajos
amarrados a principios doctrinarios expresos y a intereses muy
bien definidos, sus conclusiones debern ser puestas en duda,
por exageradas o por minimizadas.
El desarrollo de una prctica investigativa enteramente independiente se da en los medios alternativos, fenmeno
extremadamente saludable, que no pone barreras, pero que no
garantiza el ms alto impacto social, pues la circulacin de los
medios alternativos no se puede siquiera comparar con la de la
gran prensa comercial, ni en frecuencia, ni en cantidad, ni en
repercusin.
De todo lo expresado, no se puede deducir con absoluta precisin los lmites definitivos del periodismo de investigacin, que
encuentra techos bajos o altos en los medios comerciales, y
amplia posibilidad de desarrollo en los medios alternativos. Pero
como no se trata de una actividad de larga duracin, habr que
estar atentos a su evolucin en los diversos medios, de modo
que la experiencia de aos y hasta dcadas vaya trazando en la
prctica los lmites de su prctica.
La postura de dejar abierta una definicin es esencialmente correcta, pues el proceso de construccin terica prosigue, con
marchas y contramarchas, acompaado por experiencias muy
alentadoras como el introducido por la de los medios alternativos
y la publicacin de trabajos individuales o colectivos en forma de
libros editados independientemente.

147

7. Los nuevos desafos

Pgina

El periodismo de investigacin no est en crisis; muy por el


contrario, se encuentra en pleno proceso de construccin, con
aportes tericos cada vez ms precisos y con aportes tcnicos
surgidos sobre todo de una rica experiencia prctica, que est
siendo sistematizada con mayor propiedad.
Como toda prctica, ha experimentado avances y retrocesos, ha
tropezado con obstculos diversos, pero de modo general se
puede constatar que la tendencia ha sido ascendente,
progresiva. Los obstculos para su prctica han sido diversos:
- econmicos, porque hay medios que no decidieron apostar en
l como modalidad capaz de aportar rentabilidad,
- polticos, porque se lo ha sometido a fuertes presiones, siendo
causante directa de casi todas las leyes que traban el acceso a
la informacin,
- operativos, porque su peculiar funcionamiento ha instalado
relaciones de tensin con los directores y editores de los medios,
acostumbrados a los resultados rpidos,...
Sin embargo, los obstculos vienen siendo superados:
- los medios mejor manejados apuestan crecientemente a la
credibilidad como rentable, y en ese contexto el periodismo de
investigacin se ha mostrado capaz de aportaciones claves,
- desde la perspectiva poltica la opinin pblica se ha volcado a
defender su derecho a estar informado, poniendo a raya a quienes han tratado de promover retrocesos en ese campo
especfico, y
- operativamente, los directores y editores desarrollaron una
mayor comprensin sobre la peculiar prctica, tornndose ms
tolerantes y menos autoritarios con las Unidades investigativas.
Las amenazas, sin embargo, existen y son mltiples, pues hay
fuertes intereses en restringir su desarrollo.
La subordinacin de la experiencia a los intereses de grupos
especficos envilece la prctica, por lo que se impone esquivar

Pgina

148

ese tipo de responsabilidades, refugindose en la tica


elemental de la buena prctica profesional, y presionando a
travs de gremios locales e internacionales por frenar a los
grupos que se empean por domesticar a sus Unidades
respectivas, ponindolas a servir exclusivamente sus mezquinos
intereses polticos y econmicos.
Los lmites bajos empobrecen los resultados, de donde se impone ampliar los espacios, de manera que desde su prctica se
pueda aportar ms firmemente a la construccin terica y
tcnica a la prometedora modalidad.
Los lmites ms abiertos consisten en espacios que le permiten
desenvolverse con mayor libertad, pero siguen siendo lmites. La
pelea por mayor autonoma est planteada, y la frmula mayor
libertad equivale a mayor riqueza intelectual/periodstica debe
ser reivindicada y promovida sin reservas.
Amenazas ciertas requieren respuestas ciertas.
Pero no todo en el horizonte constituye amenazas; tambin hay
oportunidades, como ser la prctica independiente que se da en
el seno del periodismo alternativo, por una parte, y los esfuerzos
individuales y grupales de edicin independiente de libros, por
otra. Esta realidad promete abrir espacios para desarrollos tericos y tcnicos de amplia magnitud, por lo que dichas experiencias deben ser estimuladas y apoyadas, cuando no emuladas.
SNTESIS
1. La posicin de los apologistas: Trata de presentar al periodismo de investigacin como la pieza clave para la correccin de
todos los males que aquejan a las sociedades. El error de fondo
reside en el hecho de considerar que solamente hay que corregir
las distorsiones, obviando el abordaje de los problemas de fondo.
2. La posicin de los detractores: No hay periodismo de investigacin; el buen periodismo debe ser investigativo. Pone en
jaque, de manera poco responsable, toda la acumulacin terica
y tcnica del periodismo. Hay prcticas que no son investigativas
pero son buen periodismo, como los que se llevan a cabo en el
marco de las esferas informativas y de opinin.

Pgina

149

3. La posicin neutral: No puede haber periodismo capitalista ni


socialista; el periodismo tiene su desarrollo autnomo. Esto es
falso de falsedad absoluta; en las ciencias matemticas, o
qumicas o mdicas los desarrollos son autnomos, pero en el
terreno social las llamadas ciencias no son ciencias,
propiamente, sino desarrollos tericos ricos o pobres, que
favorecen
intereses
concretos,
disimiles
cuando
no
contradictorios y hasta antagnicos.
4. El periodismo y la hegemona social: El periodismo ha desplazado a la Iglesia en el terreno de la construccin de la
hegemona social, tanto en la transmisin de la ideologa
dominante como en la capacitacin de la mano de obra. Ocupa,
por tanto, una posicin privilegiada, y el periodismo de opinin
desempea en ese campo un rol crecientemente importante.
5. El periodismo comercial y el periodismo militante: La prensa
comercial es pretendidamente independiente, pero en el marco
del tratamiento de las cuestiones de fondo, que involucran intereses de gran envergadura, distorsionan las informaciones y
manipulan a la opinin pblica. El periodismo militante desarrolla
investigaciones a veces ricas contra sus adversarios, pero
arrastra el vicio de estar pre-contaminadas. El periodismo de
investigacin ha encontrado en los medios alternativos un
espacio para su libre desarrollo.
6. Los lmites del periodismo de investigacin: El periodismo de
investigacin tiene lmites difusos. La prensa comercial le presenta como alternativas techos altos o bajos, pero siempre
techos. El periodismo militante lo subordina a los principios
polticos y militantes del grupo en cuestin. Los medios
alternativos se presentan como muy aptos para su mejor
construccin terica y tcnica.
7. Los nuevos desafos: El periodismo de investigacin no est en
crisis; est en pleno proceso de construccin, la que se da con
movimientos de avances y retrocesos, pero dentro de una tendencia ascendente, progresiva.
INDICACIONES PARA LA LECTURA

Pgina

150

ESTEINOU MADRID, FRANCISCO JAVIER. Los medios de


comunicacin y la construccin de la hegemona. Trillas,
Mxico, 1992. Todos los captulos.
WAISBORD, SILVIO. 1) Por qu la democracia necesita del
periodismo de investigacin. 2) Periodismo de investigacin
y pensamientos nicos. Sala de Prensa, Web para
profesionales de la comunicacin iberoamericanos.
SORTINO, CARLOS A. 1) Descubrimientos y encubrimientos
del periodismo de investigacin. 2) La otra ratonera. Sala de
Prensa, Web para profesionales de la comunicacin
iberoamericanos.
FAUNDES, JUAN J. El periodismo de investigacin y la antropofagia global. Sala de Prensa, Web para profesionales de la
comunicacin iberoamericanos.
BIBLIOGRAFA BSICA
1. QUESADA, MONSERRAT. La investigacin periodstica. Ariel,
Espaa, 1987.
2. SECANELLA, PETRA M. Periodismo de investigacin. Tecnos,
Espaa, 1986.
3. RODRIGUEZ, PEPE. Periodismo de investigacin: tcnicas y
estrategias. Paids, Espaa, 1994.
4. REYES, GERARDO. Periodismo de Investigacin. Trillas, Mxico, 1996.
5. RIO REYNAGA, JULIO DEL. Periodismo interpretativo: el
reportaje. Trillas, Mxico, 1994.
6. RIVADENEIRAPRADA, RAUL. Periodismo: la teora general de
los sistemas y la ciencia de la comunicacin. Trillas, Mxico,
1990.
7. ESTEINOU MADRID, FRANCISCO JAVIER. Los medios de
comunicacin y la construccin de la hegemona. Trillas,
Mxico, 1992.
8. MARTINEZ ALBERTOS, JOSE LUIS-SANTAMARIA SUAREZ,
LUISA. Manual de estilo. Centro Tcnico de la Sociedad
Interamericana de Prensa, Estados Unidos, 1993.
9. VERA, ERNESTO. Periodismo tico y patria grande. Pablo de
la Torriente, Cuba, 1990.
10. CHASQUI - Revista Latinoamericana de comunicacin Los desafos del periodismo investigativo - N 67,
septiembre de 1999.

Pgina

151

11. HORADE CIERRE - La revista del Instituto de Prensa de la


Sociedad Interamericana de Prensa - Profesin: el precio de
ser periodista - 1997.
12. SALA DE PRENSA (Web para profesionales de la
comunicacin iberoamericanos) - Autores - Artculos:
13. FAUNDE, JUAN JORGE - tica y contexto del periodismo de
investigacin - El periodismo de investigacin y la
antropofagia global.
14. SIMON, JOEL -La pista del dinero.
15. GORRITI, GUSTAVO - Verdades tcticas y estratgicas.
PABLOS, JOSE MANUEL DE - Periodismo de investigacin: las
cinco fases P.
16. SMEETS, MARYLENE - El periodismo en la etapa de
posguerra en Guatemala y El Salvador.
17. CRUCIANELLI, SANDRA - Fracaso de las unidades
investigativas?
18. ALBA, GERARDO ALBARRN DE - El laboratorio de nuestro
futuro - Diferencias en el periodismo de investigacin en EU
y Latinoamrica.
19. ARMENDARES, PEDRO E. La investigacin periodstica
computarizada en Amrica Latina.
20. RUIZ CAMACHO, ANTONIO - Contar para cambiar: los
jvenes reporteros de investigacin.
21. WAISBORD, SILVIO - Periodismo de perro guardin en
Sudamrica - Por qu la democracia necesita del periodismo
de investigacin - Periodismo de investigacin y
pensamientos nicos.
22. KLEIN, DARO - El papel del periodismo de investigacin
en la sociedad democrtica (I y II).
23. GEREDA, SILVIA- Riesgos del periodista al investigar
corrupcin de dictaduras militares.
24. SORTINO, CARLOS - Descubrimientos y encubrimientos
del periodismo de investigacin - La otra ratonera.
25. REYES, LEONARDA - Estrategias de investigacin.

También podría gustarte