Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Informe Psicopedagógico

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 12

Obtención de resultados de la evolución Psicopedagógica

Informe psicopedagógico
Un informe psicopedagógico es un documento escrito que refleja la situación educativa del
alumno. Es la información obtenida en el proceso de evaluación y que orienta la propuesta
curricular y la ayuda que necesita el estudiante durante su periodo escolar.

¿Cuál es su objetivo?
El informe psicopedagógico tiene como propósito:

 Determinar las potencialidades , así como las debilidades de cada alumno para
formular las estrategias de implementación

 Concretar las necesidades educativas del alumno

 Orientar la intervención psicopedagógica del alumno

Para que esto se lleve a cabo debe realizarse un proceso de recogida, análisis y
valoración de la información del alumno en cuanto a los elementos que intervienen en
su proceso de aprendizaje.

¿Qué vamos a determinar?


 Las necesidades educativas especificas que presenta el alumno

 La fundamentación y concreción de las decisiones a tomar respecto a la propuesta


curricular y el tipo de ayuda que el alumno necesitará para progresar

 Orientación del proceso educativo del alumno, con el fin de facilitar la tarea del
profesorado y el personal de apoyo que trabaja diariamente con él.

La elaboración del informe psicopedagógico se realiza en conjunto con el maestro


buscando el análisis particular y compartido de la situación del alumno.

¿Cuáles son sus características?

El informe psicopedagógico:

 Es de carácter técnico ya que sirve de base a las decisiones que puedan tomarse para
el ajuste de la ayuda psicopedagógica a las necesidades del alumno.

 Es de carácter administrativo ya que es un documento oficial el cual puede ser


utilizado para asuntos sociales o de trabajo. Es confidencial y debe estar
debidamente firmado y sellado por el profesional o profesionales que participan en
su redaccion.

Pá gina 1
 La información recabada es pertinente, rigurosa y contrastada: el manejo de la
información es estrictamente confidencial y se recaban solo los datos que se estimen
necesarios y apropiados.

 Los datos y conclusiones deben ser contrastados, informando los motivos y


objetivos de tal evaluación; los procedimientos y técnicas utilizados para obtener la
información, así como el grado de validez de los resultados a juicio de los
profesionales

 En el informe psicopedagógico se hace mención de la temporalidad del informe, es


decir, que se afirma que es de carácter actual, sujeto a variaciones, a medida que el
estudiante es integrado en las adecuaciones curriculares. Por consiguiente se
establecen plazos para su actualización.

 Otra característica del informe psicopedagógico es comunica los resultados de la


evaluación psicopedagógica. Por lo tanto es descriptivo y comprensible para los
destinatarios. Sin embargo pueden existir distintas versiones del mismo informe
según sean sus destinatarios y el objetivo del mismo.

 El informe psicopedagógico es un documento archivable ya que es un testimonio de


la evaluación psicopedagógica realizada que sirve como referencia o antecedente
para futuras intervenciones psicopedagógicas.

Qué elementos debe tener un informe psicopedagógico?


Los elementos más comunes utilizados son:

 Ficha de datos del alumno

 Justificación del informe

 Informes sobre el nivel de competencia curricular

 Descripción de los estilos de aprendizaje

 Datos relativos al contexto socio familiar

 Identificación de las necesidades educativas y conclusiones

Los elementos del informe psicopedagógico van a depender de la función del


mismo, así como del modelo que sea utilizado por la institución donde se realiza el
informe.

Pá gina 2
Algunos errores cometidos durante la elaboración de un informe
psicopedagógico
 Poco inteligible para los destinatarios debido a su vocabulario

 Utilización exagerada de datos numéricos, los cuales pueden conducir a la


etiquetación del sujeto

 Las recomendaciones son imprecisas y/o difíciles de llevar a la práctica

 No indica la metodología necesaria para desarrollar la intervención aconsejada

Recomendaciones

 Realizar una información oral del informe, si las personas a las que van dirigidas así
lo precisen

 Indicar los datos de forma cualitativa y cuantitativa (sin excesos)

 Reducir el uso de tecnicismos; enfocar la evaluación no solo en las debilidades sino


en las fortalezas del alumno

 Identificar los instrumentos de evaluación utilizados

  Utilizar frases cortas, puntos y verbos en presente. No utilizar abreviaturas

 Evitar la ambigüedad, ser asertivo y preciso

 No etiquetar al alumno

 Que sea funcional y operativo, señalando con detalle el plan de acción y aporte.

 Que sean personales, dirigidos específicamente al alumno, pero integral,


considerando a la persona como un conjunto.

TÉCNICAS CONDUCTISTAS UTILIZADAS EN EL TRATAMIENTO


PSICOPEDAGÓGICO

  La terapia conductual intenta modificar los patrones de conducta desadaptados mediante la


aplicación de los principios del aprendizaje, al manipular las recompensas y castigos
ambientales. Las principales características de la terapia conductual son:

 . centrarse en la conducta observable.

. La cuidadosa evaluación de la conducta a modificar.

. El control y evaluación de los efectos del programa en la alteración de la conducta.

Pá gina 3
. El interés por los cambios conductuales socialmente significativos.

 La modificación de la conducta se lleva a cabo mediante :

-          Técnicas derivadas del condicionamiento clásico.

-          Técnicas del condicionamiento operante.

     En el condicionamiento clásico los estímulos provocan respuestas automáticas, mientras que
en el condicionamiento operante las conductas se controlan mediante la alteración de las
consecuencias que les siguen.

 -          a) Las técnicas del condicionamiento clásico son:

                     La asociación de estímulos y la conducta refleja.

La desensibilización sistemática.

La imaginación emotiva.

 La asociación de estímulos y la conducta refleja.

     Es la técnica básica del condicionamiento clásico, a partir de la cual se han elaborado las
restantes. Si un estímulo que provoca una conducta, lo asociamos con otro estímulo cualquiera,
cuando se produzca éste, también se seguirá aquella conducta o una muy parecida. Si un
estímulo provoca alegría, y le asociamos con un segundo estímulo, como puede ser el sonido de
un timbre, cuando éste suene, aun sin haberse producido el primer estímulo, se responderá con
alegría. Para que se produzca la asociación de los estímulos debe practicarse el aprendizaje
durante cierto espacio de tiempo. La conducta aprendida de forma refleja puede extinguirse si
no se aplica el estímulo inicial junto al nuevo, renovando así el condicionamiento.

La desensibilización sistemática.

     Si un estímulo que provoca ansiedad lo apareamos con una conducta que sea incompatible
con la ansiedad, ésta disminuirá hasta llegar a desaparecer cuando aparezca aquél. Esta técnica,
en la que se aplican los principios del condicionamiento clásico, se usa en la mayor parte de los
casos en que se aprecia temor, ansiedad o preocupación ante algo. Generalmente, la conducta
incompatible con la ansiedad, y que se utiliza con mayor frecuencia. es la relajación muscular,
pero puede ser empleada también la relajación mental o cognoscitiva. El proceso de la
desensibilización sistemática implica :

  . Detección de la clase de temor o angustia, e intensidad que provoca.

Pá gina 4
 . Jerarquización de las categorías de temor.

 . Entrenamiento en la relajación profunda.

. Asociación sucesiva de las diferentes categorías de temor con la relajación, hasta que deje de
provocar angustia o ansiedad.

 La imaginación emotiva.

 Es una modalidad de la desensibilización sistemática en la que se sustituye el estímulo


incompatible con la ansiedad, por otro agradable.

     Consiste en asociar a un estímulo que provoca ansiedad, otro estímulo de naturaleza
agradable e imaginado por el alumno, el cual es incompatible con la ansiedad. Al asociar ambos
estímulos, cuando aparece el que produce ansiedad, automáticamente se presenta el imaginario
agradable, reduciéndose la ansiedad hasta desaparecer. Si un alumno tiene temor de acudir a la
escuela y le resulta agradable un determinado personaje, podemos asociar la imaginación de
este personaje con el pensamiento de ir a la escuela hasta que desaparezca el temor. La
imaginación emotiva es una técnica muy apropiada en ambientes escolares por su gran
sencillez. Para su aplicación deberá seguirse la siguiente secuencia :

 . Determinar los estímulos que producen temor o ansiedad.

. Conocer el personaje más admirado y agradable al alumno.

. Hacer que el alumno imagine, con los ojos cerrados, a dicho personaje y establezca una
relación con él.

. Introducir paulatina y sucesivamente los estímulos que provocan temor o ansiedad,


asociándolos con dicho personaje, de forma que no se produzca ansiedad.

     Conforme vaya tolerando esta asociación, se va avanzando en la presentación de los


estímulos hasta llegar al que le produce mayor temor o ansiedad, y lograr que ésta desaparezca.

   b) Las técnicas del condicionamiento operante son:

 El refuerzo positivo.

El refuerzo negativo.

El castigo.

La extinción.

El autocontrol.

Pá gina 5
La retroalimentación.

El refuerzo positivo.

Se emplea para incrementar 1a frecuencia de una respuesta mediante un refuerzo consistente en


proporcionar un estímulo grato al alumno. Cuando el alumno realiza la acción deseada se le
refuerza con alguno de estos medios, según lo que a él más le agrade :

 . Elogiar su conducta, mediante expresiones como «muy bien», «estupendo», y otras parecidas
que demuestren aprobación de la misma.

. Dulces, caramelos o alimentos preferidos.

. Gestos de aprobación de sus actos, como sonrisas, asentimiento de cabeza, demostración de


alegría o satisfacción por su acción.

. Premios diversos, como objetos, regalos, fichas (canjeables después por otros objetos).

. Cosas agradables, como oír música, ver un programa de televisión, asistir a una reunión, etc.

. Reconocimiento de su acción por otras personas.

El refuerzo de la conducta debe proporcionarse lo más inmediatamente posible, al menos al


principio del tratamiento. La entrega del reforzador puede aplicarse todas las veces que el
alumno obre correctamente (refuerzo continuo) o solamente algunas (refuerzo intermitente).
Las distintas modalidades que presenta el refuerzo positivo son:

 . Programa de razón fija.

 . Programa de razón variable.

 . Programa de intervalo fijo.

 . Programa de intervalo variable.

. Programa de razón fija. Cada cierto número de veces que el alumno realice la respuesta
deseada se le concede un refuerzo. Al comienzo de un programa se le deberá reforzar todas las
veces que la conducta se produzca. Conforme se avanza en el programa, podrá ir aumentándose
de forma paulatina dicha razón fija. Es una modalidad eficaz, por la que se suelen comenzar la
mayor parte de los programas, aunque después se cambie de modalidad. El alumno se habitúa a
la proporción establecida, siendo sus realizaciones intermedias (en el supuesto de razones fijas
amplias) más imperfectas, y mejores las finales del ciclo. Cuando se suprime el refuerzo, suele
extinguirse la conducta con más facilidad que con las otras modalidades.

Pá gina 6
. Programa de razón variable. En este caso se varía la proporción de respuestas correctas por
cada refuerzo, de manera que el alumno no sepa cuándo va a recibirlo. Al principio la
oscilación de la razón debe ser pequeña y aumentarse poco a poco. Es un procedimiento muy
eficaz para lograr la modificación de la conducta, ya que todas las respuestas del alumno se
realizan con la expectativa del posible premio, al desconocer el momento en que se producirá.
Incluso cuando se suprime el refuerzo, resulta difícil la extinción de la respuesta.

 . Programa de intervalo fijo. Siempre que el alumno obre correctamente, es decir, realice la
conducta deseada durante un espacio de tiempo fijo, se le proporciona el refuerzo. Esta
circunstancia es independiente del número de veces que lo haga. Su eficacia es discreta, ya que
puede habituarse, con una sola acción, a esperar el refuerzo en el tiempo que, por repetición,
llega a conocer. Al suprimir el refuerzo se produce la extinción con rapidez.

. Programa de intervalo variable. En esta modalidad se aplica el refuerzo al alumno en


intervalos de tiempo variables siempre que, durante los mismos, responda con la conducta
deseada. Es un procedimiento más eficaz que el anterior para la modificación de la conducta, ya
que el alumno desconoce cuándo se va a producir el refuerzo, y ello le obliga a obrar
correctamente de modo permanente. Cuando se suprime el refuerzo, la extinción se produce con
lentitud.

 El refuerzo negativo

Esta técnica consiste en incrementar la frecuencia de una acción deseable eliminando algo que
resulta molesto al alumno, siempre que obre correctamente. Como medios para llevar a cabo el
refuerzo negativo se encuentran, entre otros, quitar o suprimir al alumno :

. Objetos o cosas que le resulten desagradables, como figuras, animales, ambiente, etc.

. Ruidos molestos, como timbrazos, pitidos, etc.

. Olores desagradables.

. Dolores físicos o circunstancias molestas, que imposibilitan su libertad, como aquellas que le
obligan a permanecer en determinada postura o lugar.

El refuerzo negativo debe ser también lo más inmediato posible a la conducta deseada. Su
aplicación puede ser de manera continua o intermitente. La primera es más eficaz que esta
última, pues al suprimir el refuerzo, se suele producir la extinción con más rapidez.

El castigo.

Pá gina 7
Esta técnica consiste en eliminar algo grato, o bien en proporcionar algo que resulte molesto al
alumno, siempre que responda con una conducta distinta a la deseable, facilitando así la
extinción de la misma.

El castigo aplicado de forma intermitente es menos eficaz que cuando se hace de forma
continua, es decir, siempre que se produzca la respuesta inadecuada.

Los castigos deben aplicarse lo más inmediatamente posible tras la acción incorrecta.

Entre los castigos que más corrientemente pueden aplicarse, tanto en ambientes escolares como
en los familiares, se encuentran los siguientes :

. Suprimir o privar al alumno de:

§       Palabras cariñosas, elogios, dirigirle la palabra.

§       Comidas o platos que le agradan.

§       Sonrisas y gestos de aprobación.

§       Fichas o dinero, restando o deduciéndolo a lo ganado.

§       Cosas gratas, como algunos objetos, ver la televisión, etc.

§       Ambiente o personas gratas para él.

. Aplicar o proporcionar al alumno:

§       Ruidos molestos, como pitidos o música estridente.

§       Molestias físicas, como posturas incómodas, inmovilidad, etc.

§       Olores desagradables.

§       Trabajos molestos, monótonos.

§       Desaprobación de sus acciones con palabras duras.

Los castigos pueden aplicarse en muchas ocasiones, siendo necesario que el alumno lleve el
autocontrol de su conducta y se halle comprometido en un contrato serio y responsable.

 La extinción.

Pá gina 8
Otra manera de reducir la frecuencia de una conducta no deseable es ignorarla cuando se
produce. De esta manera, llega a producirse la extinción de la misma al no recibir ningún
refuerzo que la mantenga.

La extinción debe ser aplicada siempre que se produzca la conducta, no siendo susceptible de
hacerlo de manera intermitente, ya que, en este caso, se reforzaría la conducta y sería
contraproducente para el tratamiento.

Ignorar la conducta es una técnica muy fácil y de gran eficacia. En muchas ocasiones la familia,
al aplicar un castigo por una conducta indeseable, lo que hace es, a veces, reforzarla; mientras
que si la hubiera pasado por alto sin prestarle atención, el niño, al ver que no se le hace caso y
que aquella conducta no es útil para él, dejaría de realizarla, con lo que desaparecería por
extinción.

El autocontrol

Consiste en la aplicación de los medios terapéuticos por el propio alumno, de acuerdo con las
prescripciones convenidas con el profesor, llevando asimismo el control de sus resultados.

El autocontrol se ha demostrado en experiencias recientes como un medio sumamente eficaz


para la modificación de la conducta, presentando las siguientes ventajas :

            Proporciona confianza y responsabilidad al alumno, haciendo que se interese


profundamente por su tratamiento y resultados.

-          Permite la observación de aspectos y facetas ocultos a la observación externa y, aunque


puede perder objetividad en la evaluación de los resultados, sus posibilidades son ilimitadas en
cuanto a la amplitud del campo de aplicación.

-          La misma subjetividad del autocontrol hace que, en la mayor parte de los casos, el alumno
sea, incluso, más exigente en la evaluación de su tratamiento.

-          El alumno actúa de terapeuta sobre su problema, regulando en muchas ocasiones el


tratamiento y aplicándose los refuerzos o castigos que ha establecido previamente.

-          La observación de su conducta puede llevarla a cabo de forma permanente, por lo que sus
resultados son más estables y duraderos al crear hábitos que se prolongan tras el tratamiento.

 El autocontrol presenta una serie de modalidades que, en determinadas circunstancias, llegan a
constituir técnicas por sí mismas:

Pá gina 9
 . La autoobservación.

 . El autorref'uerzo y el autocastigo.

 . La autorregulación.

 . El autocontrol de estímulos.

 . La autoinhibición recíproca.

 . El autotratamiento.

 . La autoobservación.

Consiste en la observación de la conducta por el mismo alumno, el cual recibe los criterios a los
que debe ceñirse en todo momento para realizarla. Estos criterios deben ser muy concretos y
muy objetivos.

En esta modalidad el profesor concreta el plan de tratamiento, las técnicas a emplear y los
criterios para evaluar la observación de su tratamiento. El alumno, normalmente, será quien se
aplique el tratamiento, realice su propia observación y evalúe los resultados. En determinados
casos, la aplicación del tratamiento puede ser realizada por algún miembro de su familia u otra
persona, pero la observación y evaluación son obra exclusiva del propio alumno.

Es una modalidad idónea para ser empleada en medios escolares, ya que, en muchas ocasiones,
los problemas se presentan en momentos en los que el observador externo no está junto al
alumno y, en cambio, el propio alumno, al ser siempre el protagonista, puede observar
perfectamente su conducta.

  Autorrefuerzo.

  Constituye una modalidad del autocontrol en la cual el alumno, además de cumplir el plan de
tratamiento fijado por el profesor y de observar su propia ejecución, se aplica los refuerzos y
castigos que le hayan prescrito previamente. Es un medio terapéutico mucho más eficiente que
el anterior, ya que el alumno actúa con un mayor protagonismo.

. Autorregulación.

Pá gina 10
Permite al alumno fijar determinados aspectos de su tratamiento, como, por ejemplo, la razón
de los refuerzos o castigos. Puede aumentar o disminuir las tasas de los mismos o,  incrementar
el número de sesiones de ejercicios terapéuticos. Esta modalidad puede ser muy útil en los
casos de nerviosismo, irritabilidad, ansiedad, etc., en los que puede requerirse dicho incremento
de sesiones en determinados momentos, de acuerdo con el estado emocional del alumno.

. Autocontrol de estímulos.

Es una modalidad en la que el alumno determina los estímulos que pueden servirle para
modificar su conducta, y con arreglo a los mismos, se los aplica, observa y evalúa.

  . Autoinhibición recíproca.

  El alumno elige el medio más adecuado para contrarrestar la acción que quiere inhibir y luego
lo aplica cuando es previsible que se den las circunstancias que desea modificar. Esta
modalidad de autocontrol se utiliza en ciertos casos de ansiedad, dificultades en la relación
social, nerviosismo y, en general, cuando se presentan problemas de comportamiento que
puedan contrarrestarse mediante conductas que sean incompatibles. Se comentan y concretan
con el alumno aquellos aspectos que él considera que pueden aplicarse con más eficacia en
previsión de la conducta a inhibir. Cuando se presenta una circunstancia así, pone en práctica la
conducta incompatible, con lo que evita la otra conducta. Anota sus resultados y,
posteriormente, contabiliza sus éxitos y fracasos.

   . Autotratamiento.

  Es un paso más en la técnica del autocontrol. En ambientes escolares, esta modalidad puede
constituir sólo la parte final del tratamiento, o bien aplicarse desde el primer momento. En
ambos casos se pide al alumno que dé cuenta de sus decisiones, las cuales, en gran parte, serán
fruto de la evolución de sus resultados. El autotratamiento convendrá aplicarlo a alumnos con
buen autodominio, con buena capacidad de reflexión y que sean suficientemente objetivos, ya
que, en otro caso, nos expondremos a que no se lleve el proceso con la debida exigencia.

  La retroalimentación.

  Mediante esta técnica el alumno va conociendo los resultados que obtiene, los cuales pueden
influir en su futura actuación. El conocimiento de su propia evolución provoca en él la
autoestimulación y el deseo de corregir aquellos aspectos que puedan mejorarla. La
retroalimentación puede ser:

   . Interna o autorretroalimentación.

 . Externa.

Pá gina 11
En la retroalimentación interna el alumno se observa, y conoce la evolución de sus resultados
por sí mismo.

En la retroalimentación externa el alumno recibe una información ajena sobre sus resultados.
Esta modalidad puede ser:

  . Biorretroalimentación.

. Sociorretroalimentación.

  La primera consiste en el conocimiento objetivo de los resultados de su terapia por medio de


procedimientos físicos, químicos o eléctricos; de tal manera que dicha información pueda
influir en sus decisiones.

La sociorretroalimentación es una submodalidad en la que el alumno percibe los resultados de


su tratamiento a través del criterio y la actuación de las personas que se encuentran a su
alrededor. Además de percibir personalmente esos resultados, recibe una información
complementaria y objetiva que refuerza su actuación o, en caso necesario, influye para
modificarla.

Pá gina 12

También podría gustarte