Claves para Un Matrimonio Feliz - Gabriela Casavantes
Claves para Un Matrimonio Feliz - Gabriela Casavantes
Claves para Un Matrimonio Feliz - Gabriela Casavantes
INDICE
1.- LOS 4 IDIOMAS DEL AMOR 2.- HASTA QUE ALGO NOS SEPARE... 3.- 10 REGLAS PARA UN MATRIMONIO EXITOSO 5. -VIDA EN PAREJA 4.- CRISIS EN EL MATRIMONIO 6.- HACEMOS LAS PACES? 7.- EL DIFCIL ARTE DE NEGOCIAR 8.- CMO TE ENAMORASTE? 9.- INFIELES: POR QU? 10.- APRENDER A PERDONAR 11.- 7 CLAVES PARA UN MATRIMONIO FELIZ 12.- LA COMUNICACIN EN LA PAREJA Y EN LA FAMILIA 13.- LOS AJUSTES INICIALES Y ALGUNOS PROBLEMAS COMUNES 14.- DEJANDO PADRE Y MADRE ("DNDE EST MI MAM
disfraces; al ir de compras son capaces del derroche ms irracional; en su manera de expresarse gesticulan todo el tiempo; en la oficina su fuerte son las relaciones pblicas; en el romance estn enamorados del amor. Sus ventajas como pareja: son juguetones, divertidos, optimistas, alivianados y efusivos. Las desventajas: son olvidadizos, distrados, no acaban lo que comienzan, son evasivos y a veces exagerados. Para mejorar tu comunicacin con un Social, s clida, personal y paciente, aydale a aterrizar, muestra aprecio por su idealismo y su optimismo, comparte su entusiasmo, pdele que apunte lo importante y que no divulgue tus secretos. Para mejorar tu comunicacin con los dems, si eres una Social, habla menos y escucha ms, s lo ms clara posible, observa la comunicacin no verbal, evita exagerar y cuida no hacer monlogos. 3. Los Pacientes No saben decir no, son inexpresivos, evitan la confrontacin, para ellos un poco de cario es suficiente para ser felices. Los mueve la aprobacin, servir a los dems y la gentileza. Su necesidad bsica es la paz. Su idioma en el amor es dmelo. En su tiempo libre lo que ms desean es estar en familia. Al caminar van siempre con calma; en una reunin su presencia es sutil y discreta; en un seminario siempre tienen ganas de aprenderlo todo bien; de nios son cariosos y tiernos; en su vestimenta son discretos y conservadores; al ir de compras se les dificulta elegir; en su manera de expresarse son calmados y gentiles; para relajarse necesitan estar con su familia; en la oficina nunca se enojan; en el amor son muy dependientes de su pareja. Sus ventajas como pareja: son pacientes, fciles de llevar y buenos para escuchar. Las desventajas: son inseguros, desmotivados y muchas veces aburridos. Para mejorar tu comunicacin con un Paciente, mantn la tranquilidad, usa un tono amable, s sensible a sus emociones, dale tiempo para decidir, dale seguridad, usa empata y atencin. Para mejorar tu comunicacin con los dems, si eres una Paciente, expresa tus emociones y valora tus comentarios, s segura y aprende a decir no, y no tomes las cosas demasiado personales. 4. Los Analticos Son dedicados, detallistas, confiables y no delegan. Los mueve su propio espacio, la estabilidad, los retos mentales, el reconocimiento y la aprobacin. Su necesidad bsica es el orden. Su idioma en el amor son los detalles. En su tiempo libre lo que ms desean es la privacidad. Al caminar van directo a su destino; en una reunin observan mucho a los dems; en un seminario ponen atencin al currculum del ponente; de nios son muy observadores y ordenados; en su vestimenta son sobrios y elegantes; en su manera de expresarse son reservados y no hablan demasiado; para relajarse les gusta estar solos, leyendo o escuchando msica; en la oficina no entablan juegos de poder; en el amor lo ms importante para ellos es sentirse apreciados. Sus ventajas como pareja: son comprometidos y leales, considerados, profundos y espirituales. Las desventajas: son irreales en sus expectativas, perfeccionistas, aprehensivos, tercos y hasta pesimistas. Para mejorar tu comunicacin con un Analtico, s clara y concreta, s ordenada y usa las palabras correctas, si no ests de acuerdo prubaselo, respeta su silencio y dale tiempo para pensar, tmalo en cuenta. Para mejorar tu comunicacin con los dems, siendo una Analtica, habla las cosas al momento, no evites el punto y abre tu caparazn, s menos literal y escucha con inters.
Conoce su personalidad y la tuya, se entendern sin obstculos, podrn disminuir sus problemas y su relacin dejar de ser desastrosa. COMBINACIONES DE PERSONALIDADES En su libro Los 4 idiomas del amor, Jenny Nacif afirma que los Dominantes y los Analticos son de carcter fuerte, y los Pacientes y los Sociales son de carcter ligero. Si dos personas de carcter fuerte se unen, tienen una relacin ms intensa pero ms difcil. Si dos personas de carcter ligero estn juntas, en su relacin es ms fcil adaptarse. Si se involucra una persona de carcter fuerte con una de carcter ligero, este ltimo es quien aporta ms armona y el equilibrio en la pareja. RELACIONES ENTRE PERFILES IGUALES Si t y tu pareja tienen la misma personalidad, las ventajas son que es ms fcil conocerse mutuamente, tienen pocas sorpresas desagradables, y los dos saben cmo motivarse y qu es lo que les molesta. Las desventajas son que ambos tienen las mismas debilidades. Estas relaciones son maravillosas o desastrosas, pero si trabajan sus aspectos positivos y negativos, pueden disminuir los problemas y tener una relacin muy sana. Dominante con Dominante: Una relacin de intenso placer, ambicin y disgustos. Son fuertes y pasionales, independientes y autosuficientes, energticos y ansiosos, arriesgados y ambiciosos, poco romnticos y egostas, agresivos y prepotentes, ambos siempre quieren tener la razn, el dinero es su prioridad. En resumen, mucha dinamita con mucho futuro. Social con Social: Una relacin de romance, diversin y sorpresas. Son el enamorados y alegres, optimistas y bromistas, anfitriones y animadores, juguetones e inmaduros, desordenados y olvidadizos, para ellos el dinero es un instrumento para el goce. En resumen, alegra y entusiasmo por la vida. Paciente con Paciente: Una relacin de tranquilidad, estabilidad y armona. Son pacficos y tranquilos, conformistas y flexibles, pareja y familia, posesivos e inseguros, inhibidos e introvertidos, para ellos el dinero es un elemento secundario. En resumen, mucha armona y demasiada tranquilidad. Analtico con considerados ecunimes y dinero jams exitoso. Analtico: Una relacin de seriedad, prudencia y responsabilidad. Son y serenos, respetuosos e independientes, organizados y detallistas, estables, solitarios y aislados, realistas y pesimistas, para ellos el ser problema. En resumen, un proyecto de vida que sin duda ser
RELACIONES ENTRE PERFILES DISTINTOS La mayora de las parejas son de personalidades opuestas, se atraen porque buscan en el otro lo que no tienen. Las desventajas son que tienen intereses diferentes y el proceso de conocerse mutuamente tarda mucho tiempo. Pero si ambos se empean por entenderse y construir una relacin slida, no encontrarn tantos obstculos. 5
Dominante con Analtico: Una relacin de prctica, lgica y terquedad. Son el lder y el estratega, el independiente y el solitario, el atrevido y el precavido, el rebelde y el conservador, el que nunca se equivoca y el que siempre tiene razn, el egosta y el considerado, para ellos el dinero es su futuro y su seguridad. En resumen, la fuerza de un impulso con direccin definida. Dominante con Paciente: Una relacin de ambicin y modestia. Son el lder y el dcil, el independiente y el dependiente, el agresivo y el pasivo, el ambicioso y el adaptable, para ellos el dinero es manejado con toda libertad. En resumen, mucha sabidura y pasin para ejercerla. Dominante con Social: Una relacin de idealismo y practicidad. Son el protector y el protegido, el controlador y el espritu libre, el independiente y el enamorado, el grave y el despreocupado, para ellos el dinero es un patrimonio o puro placer. En resumen, grandes alas para grandes proyectos. Analtico con Paciente: Una relacin de sensibilidad y sinceridad. Son el tranquilo y el pacfico, el comprometido y el que lo ignora, el gua y el seguidor, el independiente y el dependiente, el estable y el adaptable, el ahorrador y el derrochador. En resumen, una dulzura permanente y estable. Analtico con Social: Una relacin de diversin y responsabilidad. Son el sobrio y el entusiasta, uno est en la tierra y el otro en la luna, el y el perspicaz, el imperturbable y el emocional, el reservado y el popular, el distante y el carioso, el ahorrativo y el malgastador. En resumen, un gran complemento. Social con Paciente: Una relacin de sencillez y despreocupacin. Son el romntico y el carioso, el conformista y el resignado, el activo y el pasivo, el platicador y el reservado, el gastador compulsivo y el no ahorrativo. En resumen, la emocin en el amor sereno. MANTENGAN EL AMOR Si tu pareja es Dominante, dale su lugar, variedad, pasin, independencia y aguante. Si tu pareja es Social, dale romance, demostraciones fsicas, paciencia, actividades juntos y socializa con l. Si tu pareja es Paciente, dale ternura, cario, estabilidad, seguridad, reafirmacin, cercana y no lo presiones. Si tu pareja es Analtica, dale espacio, privacidad, reconocimiento, seguridad, mantenlo informado y prubale todo con hechos.
Como seala el psiclogo Luis Riesgo Mnguez, en los aos 60 en Estados Unidos se recomendaba el divorcio como panacea para matrimonios mal avenidos. Treinta aos despus, el psiclogo Paul Pearson dice que ha llegado la hora de sustituir el lema su matrimonio se ha roto, busque una nueva pareja por otro ms sano: su matrimonio se ha roto, arrglelo. Constantemente las parejas me solicitan consejo para sacar adelante su casi hundida relacin matrimonial. Cierto es que los problemas maritales no son exclusivos de este nuevo siglo o de fines del pasado; sin embargo, es paradjico que las relaciones de pareja se encuentren sumamente frgiles a pesar de la gran cantidad de libros, cursos e incluso plticas prematrimoniales que la mayora de las iglesias exigen a los aspirantes a casarse. Esta problemtica no es exclusiva de alguna generacin determinada, puesto que el deterioro matrimonial se da en parejas con ms de cincuenta aos de edad como en matrimonios formados por jovencitos de veintitantos. Aunque cada relacin debe atenderse con base en sus caractersticas especficas, a continuacin enlisto una serie de ideas generales y prcticas que le permitirn fortalecer su relacin conyugal, as como enfrentar y vencer algunos de los problemas ms comunes que las parejas enfrentan. 1. Reconozcan que el amor es una decisin.
Muchas parejas se separan porque han credo que el amor es un sentimiento y por lo mismo creen que al no sentir bonito hacia su pareja han perdido el amor, cuando lo nico que ha menguado es el sentimiento, no el amor. Al casarnos firmamos un contrato civil ante testigos; le parece romntico? Por supuesto que no, ya que el amor no es slo emociones, aunque por supuesto que las contiene, pero el amor es ante todo, una decisin. En ese contrato legal nos comprometemos a permanecer unidos en los malos y buenos tiempos porque todos sabemos que en la temporada de las vacas flacas las emociones huyen. Nadie experimenta sensaciones agradables cuando hay diferencias de opinin o cuando falta dinero, trabajo o salud; sin embargo, es all cuando el compromiso del amor participa para sostener firme la relacin y hacer uso de la voluntad para encontrar soluciones y permanecer unidos. El amor es incluso la decisin de mantener viva la emocin; es decir, las parejas deben continuar su actitud de juego y diversin a pesar de ya no ser novios; deben programar tiempos mensuales para convivir como pareja y tener tiempos divertidos que les ayuden a mantener vivas las emociones. Hace cuanto que no sale a solas con su pareja para pasar un buen rato y conversar de algo que no sean las responsabilidades del matrimonio? Hgalo por lo menos una vez al mes. 2. Vean los problemas como algo externo. 7
-T tienes la culpa!, Mira quin lo dice, el burro hablando de orejas. Le suena familiar? Mientras los miembros de la pareja vean que el problema es su cnyuge estn destinados a continuar con esa situacin por el tiempo que permanezcan juntos. Si el problema es el otro y ste no cambia, entonces la solucin parece ser cambiarlo por otro, suena lgico no? El punto crtico en esta situacin es que la parte ofendida se est viendo como ajena a la relacin matrimonial, es decir se ve como una vctima y por lo mismo identificar que el problema es su victimario, el cual a la vez es su cnyuge. Qu hacer? Ven como problema al problema en s y no a la persona que lo ejecuta; es decir, t y yo tenemos un problema el cul es que no controlas tu consumo de alcohol; o nuestro matrimonio tiene un problema y bsicamente es que experimentas celos muy fuertes y que en mi trabajo desarrollo una vida social constante. Si observamos, aqu el problema se trata como algo que arremete contra la pareja, independientemente de que sea primordialmente uno de ellos quien lo representa; pero al verlo as la pareja se lucha contra el problema que l o ella padece y que est daando la relacin. Aqu a quien debo aniquilar es al problema, no a mi pareja. Por simplista que parezca este cambio de percepcin genera ms posibilidad de resolver la situacin, ya que hace de la pareja un equipo aliado. 3. Capactense y pidan ayuda. A muchos parece avergonzarles pedir consejo o ayuda para salvar su relacin matrimonial. Los humanos somos extraos, no nos apena solicitar ayuda para reparar el automvil o la computadora, pero rehusamos pedir apoyo para fortalecer o salvar nuestro matrimonio, lo cual, obviamente, es mucho ms importante que cualquier bien que poseamos. A las parejas les recomiendo leer buenos libros sobre relacin matrimonial, asistir a conferencias y seminarios que ofrecen instituciones sociales, educativas y religiosas y pedir ayuda a consejeros y terapeutas profesionales. Nuestra nica capacitacin para convivir como pareja es lo que cada uno aprendi inconcientemente en su familia, lo cual no siempre es el modelo ideal de relacin conyugal. 4. Sean sinceros al conversar. He encontrado que algunas personas, con tal de mantener la paz o de evitar un conflicto, ocultan a su pareja la verdadera opinin que tienen respecto a cierta cuestin. S, muchos temen a los desacuerdos y en aras de mantener la armona renuncian a expresar sus ideas o defender sus deseos o puntos de vista. Esta actitud es una bomba de tiempo silenciosa. Quien no se atreve a expresar lo que cree y quiere con el fin de no generar una discusin, est destinado o destinada a convertirse en esclavo de alguien que desconoce que es su amo o ama. Adems, toda persona tiene un lmite y tarde o temprano se cansa de vivir en una relacin en la que siempre pierde, o para ser ms exactos, en la que ha decidido perder. Cuando llega a ese lmite su agotamiento, rencor y coraje es tal que slo ve como alternativa terminar la relacin. La solucin descansa en ser valiente y defender y expresar sus deseos y opiniones a pesar de que exista la posibilidad de producir una discusin. Hablar las diferencias es la nica alternativa que poseemos para entender al otro y llegar a nuevas soluciones o a un acuerdo. En palabras populares podemos afirmar, mas vale una colorada que mil descoloridas. 8
5. Oren en pareja. Una gran prdida de muchas parejas es la ausencia de oracin. Tristemente la mayora de los matrimonios creyentes se limitan a cumplir los ritos religiosos de su comunidad de fe y se olvidan del tremendo poder, emocional y espiritual, que contiene la oracin en pareja. Al decir orar me refiero a platicar con Dios, exponerle con palabras sencillas y ordinarias nuestras necesidades y deseos, as como agradecerle por los favores recibidos y los logros alcanzados. Si usted y su cnyuge se toman cinco minutos diarios para, unidos, poner su familia, trabajo, adversidades y cualquier proyecto en manos de Dios, no slo pone en movimiento los ejrcitos celestiales, tambin acerca ms el corazn de su cnyuge al suyo. No se concentre en hacer largos y mecnicos rezos, ore con su corazn y permita que Dios y su pareja conozcan lo que hay en l.
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8.- Hacer de la prudencia y la bsqueda de la verdad, la herramienta de la discusin. 9.- Hacer empata con la posicin de tu pareja (ponte en sus zapatos). 10.- No desacredites a tu pareja, al momento de expresar su posicin y sentimientos. 11.- Mantn el respeto en la pltica como regla No.1 12.- Se positivo o encuentra el lado positivo del reclamo de tu cnyuge. 13.- Comentar las cosas negativas y resaltar los aspectos positivos o rescatables de la conversacin. 14.- Un problema no debe ser causal de dejarse de hablar. 15.- No involucrar a los hijos innecesariamente como parte del problema o solucin del mismo. 16.- La ropa sucia se lava en casa. 17.- Estar conscientes de que han decidido hacer crisis y que esta los va a hacer crecer y va a perfeccionar el cdigo familiar. 18.- Los problemas deben de ser tratados en privado y en un lugar tranquilo y neutro. 19.- No dejar terminar el da, sin que se haya hablado del asunto, el tiempo enfra y magnifica el problema. 20.- El primero que percibe el problema, la falla, o la falta al cdigo familiar establecido, tiene la responsabilidad en primer grado de tomar la iniciativa para aclarar la situacin. 21.- Enfocar la crisis como un alto en el camino que los preparar para poder manejar conflictos ms complejos. 22.- Los acuerdos a que se lleguen, deben ser comunicados positivamente a los hijos o a las personas que la pareja involucro. 23.- La familia entera debe tener muy claro, que no solamente se puede hacer crisis sino que es responsabilidad de cada uno, aportar su punto de vista sobre algo que no este funcionando. 24.- Hacerle saber a cada miembro que son parte importante del equilibrio anmico de la familia. 25.- Finalmente aclarar que estn a disgusto, por una serie de circunstancias, y que su dolor se debe al cario y amor que le tienen a su pareja y a su familia.
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Oscar Mario, me despido de ti y del Auditorio de Cpula Empresarial, coment para Ustedes: Nahum de la Vega Morell, profesor del rea de Factor Humano del Instituto Panamericano de Alta Direccin de Empresa IPADE.
5. -VIDA EN PAREJA
Una Frgil Unin que se Debe Cimentar Da a Da Cada uno de nosotros somos un mundo y trasladamos nuestras peculiaridades al mbito de la relacin de pareja: a unos les gusta mandar pero otros tienen un perfil ms sumiso o conformista, unos prefieren decidir y otros que decidan por ellos, a unos les encanta dar y darse al otro mientras que otros parecen haber nacido slo para recibir de los dems, unos necesitan ms cario y a otros les abruman las emociones a flor de piel... Vamos, que la pareja es un ente peculiar, una institucin no por tradicional menos imprevisible, y formada por dos miembros a su vez distintos. Es fcil convenir en que no hay una frmula que garantiza el xito de la vida en pareja. Cada unin se rige por unas reglas, normalmente no explicitadas por sus miembros pero que sirven para mantener viva (en el mejor de los casos, armnica) la relacin mientras dura. Lo que sigue son sencillas propuestas generales para fomentar la armona en la vida de pareja, partiendo siempre de dos puntos de partida: la igualdad de derechos de sus miembros y la promocin de una dinmica activa, equilibrada, participativa y sincera en el desarrollo de la relacin a lo largo del tiempo. Efigenio Amezua, experto sexlogo y terico de la vida en pareja, define a sta como una relacin de comunicacin que debe organizarse sobre las bases de sentirse con..., comunicarse con... y compartirse con... Expliquemos estos conceptos. Sentir la presencia de la otra persona en ese camino que ambos han decidido compartir, percibir su compaa, su apoyo y su incondicionalidad, lo que no exime a cada uno de la responsabilidad de andar la parte del camino que le corresponde. Comunicarse desde el gesto y la palabra, con una verbalidad abierta y positiva, de quien cree y confa en su interlocutor y con un cuerpo que se expresa desde la receptividad, la amistad y la caricia. Compartirse no significa slo intercambiar cosas, favores o deberes. Compartirse es darse, mostrarse involucrado, ofrecer abiertamente la vulnerabilidad de cada uno en la seguridad de ser entendido, aceptado y querido. Una rutina de equilibrio y consenso La bsqueda de la armona de la pareja nos mueve a muchos a intentar identificar todo aquello que conviene evitar y tambin lo que debemos hacer cuando surgen los desencuentros. Comencemos por crear una rutina en la que queden desterrados los silencios con significados negativos, los enfados soterrados y los rencores acumulados. En su lugar, hablemos. Pongamos un dilogo constante y la negociacin: el consenso y los acuerdos. Ante la discrepancia de opiniones, la alternancia en las decisiones es una buena opcin: hoy eliges t la pelcula a ver en el cine, maana decido yo a qu restaurante vamos. O cada uno va por su lado, por qu no. 13
Lo importante es mantener el buen ambiente y evitar los agravios o las desconsideraciones. No temamos los desencuentros ni las crisis, intentemos utilizarlos para fortalecer la relacin. Unas buenas habilidades de comunicacin nos sacarn de muchos atolladeros. Puestos a desterrar hbitos perniciosos, empecemos con la culpabilizacin. Abandonemos esa caza de brujas de quin ha sido el culpable, y pasemos a considerar global y lcidamente qu parte de responsabilidad nos corresponde a cada uno en los hechos. Y a la ms mnima duda, preguntemos. Ceder el paso a los sobreentendidos, los silencios acusatorios y las suposiciones genera posos de desconfianza y distanciamiento que envenenan la relacin y resultan difciles de disipar. Una pregunta, un comentario a tiempo, frena ansiedades y malestares y permite que fluya la comunicacin. Otra cosa es cuando surgen problemas de gran calado (discrepancias profundas en temas esenciales, relaciones sentimentales con personas fuera de la pareja, incompatibilidad de caracteres o costumbres, aburrimiento o cansancio en la pareja...), que requieren medidas a veces drsticas que no son objeto de esta reflexin. De todos modos, estas propuestas son tambin tiles para encarar situaciones excepcionales o graves que deterioran gravemente la relacin. Vivir en pareja no debera significar una actitud de dar sin lmites y no esperar nada a cambio. Eso es una falacia y genera desequilibrios que, antes o despus, terminan pasando factura. En la pareja, al igual que en toda relacin, hay que dar y recibir. Hoy yo, maana t. Vasos comunicantes que se ladean en un sentido u otro y cuyo fin es mantener la estabilidad. Las desigualdades pueden dar lugar a situaciones de dominio que a largo plazo generan insatisfaccin al menos en una de las dos partes. Hemos de conocer al otro Conviene que nuestra pareja sepa qu nos gusta, qu y cmo lo queremos. Hemos de mantener informada a nuestra pareja del momento que vivimos, porque no siempre sentimos, ni queremos, ni vivimos lo mismo: nuestra vida es una sucesin de etapas, y cada una de ellas tiene sus peculiaridades propias. Somos, afortunadamente muy distintos, pero tambin compartimos cosas. A todos nos gusta que nos respeten, que nos quieran, que cuenten con nuestra opinin, que nos valoren como personas en toda nuestra dimensin: como trabajadores, como hijos, como padres, como amantes, como amigos, como interlocutores. El cuerpo es un gran comunicador y hemos de dejarle expresarse. Si queremos mantener un dilogo fluido con nuestra pareja, las relaciones corporales (no exclusivamente las sexuales, sino tambin las caricias, los besos, los abrazos) han de ser cotidianas y satisfactorias para ambos. Adaptmoslas a cada momento, circunstancia y etapa de nuestra vida. Que formen parte de sta porque ayudan a garantizar que la calidez, la ilusin y la bsqueda del disfrute forman parte de nuestro cdigo. "Se hace camino al andar" deca la cancin. La pareja se hace cuando cada da sentimos que vamos juntos en el mismo camino, comunicndonos desde el cuerpo y la palabra y compartindonos de forma incondicional. Establezcamos nuestro propio cdigo propio, basado en la comunicacin, la confianza, el respeto, la ternura y el placer. VIDA EN PAREJA: LO QUE NO CONVIENE HACER: Esperar a que mi pareja adivine lo que quiero y necesito, a que se adelante a mis deseos antes de formulrselos, a que renuncie a su vida personal y me coloque en el centro de su existencia, a que sea la procuradora de mi felicidad. 14
Responsabilizarle de mis frustraciones, de que lo que obtengo de mi vida de pareja no se corresponde con mis expectativas, de los cambios que he tenido que introducir en mi vida. Competir por quin es ms o menos, mejor o peor, quin le debe ms o menos al otro, quin es esto, aquello o lo otro, quin es el que ms pone para mantener viva la pareja. Ser infiel al proyecto en comn, pero no entendido exclusivamente como las relaciones sentimentales y/o sexuales con otra persona sino en su totalidad. Para no perjudicar a nuestra vida en pareja hemos de mantenernos leales al compromiso adquirido, trabajar da a da para reavivar ese proyecto comn, intentar que esa ilusin inicial, ese amor, crezca; o, al menos, se mantenga y la vida resulte gratificante para ambos. Acumular, sin sacarlos a la luz y sin comentarlos de forma relajada, desaires, desacuerdos, enfados, reproches, faltas de respeto y desilusiones. Dudar de la otra persona. Las fisuras por falta de confianza suponen el inicio del resquebrajamiento de la pareja. Es difcil, y muy duro, amar a alguien de quien se duda. Permitir o propiciar los silencios ante situaciones que pueden provocar un desencuentro o bronca. Positivicemos: una circunstancia crtica puede ayudar a aclararnos, a adoptar compromisos y acuerdos. El silencio es el vaco y en ste (aunque en principio pueda resultar apacible y llevadero) no hay nada. Renunciar a formular nuestras quejas, necesidades y querencias de una forma clara, concisa y directa. Hemos de mostrar una clara intencin de negociar cambios concretos y de acordar en firme con plazos determinados, todas las cosas que planteamos. La irona, el sarcasmo, la crtica destructiva, el grito, el insulto, la ridiculizacin, la descalificacin o el desdn al dirigirnos a la otra persona. Las formas cuentan, y mucho. La familiaridad no debe convertirse en ordinariez, falta de respeto o grosera. Hemos de procurar que las discusiones tengan un cierto protocolo, unos lmites que no conviene sobrepasar. Todo puede decirse con un mnimo de correccin y respeto al otro. Lo corts no quita lo valiente. -Culpabilizar al otro de todo cuanto no ha salido como esperbamos. Relegar las relaciones sexuales a un plano secundario. Son imprescindibles para el mantenimiento del compartir, de la confidencialidad y la ilusin en la relacin de pareja. La carencia de estas relaciones corporales abonan el desnimo y la apata en la comunicacin de la pareja. La rutina y la inercia que la acompaa nos puede llevar a un callejn sin salida. Gestionar mal las cosas prcticas. Una vida en comn tiene muchos aspectos tangibles, prcticos y cotidianos sobre los que hay que llegar a acuerdos. Hemos de hacer frente a tareas domsticas, gastos y otros cometidos familiares. Habr que hablarlo y ver cmo vamos a organizar los gastos, la distribucin de las tareas domsticas, la crianza de los hijos o, incluso, las vacaciones. Lo mejor es una negociacin continua que se adapta a cada etapa de la relacin. Creer que slo existo en cuanto que miembro de la pareja. La relacin es cosa de dos, pero de dos que suman. Por tanto, empieza por uno mismo y es por ello que me cuido fsica y anmicamente, me mimo y hago de mi vida una vida rica en situaciones, experiencias nuevas y sensaciones; en esa medida, aporto riqueza a esa relacin. Cada uno tiene su propia vida y la pareja es la expresin de dos vidas que se unen para sumar, para aportar la una a la otra. 15
Su libro, Hacemos las paces?, se hace eco de los enfrentamientos ms habituales en nuestra vida cotidiana: la disputa en pareja, con la familia, en el trabajo, con los nios, todas se generan porque entran en confrontacin dos realidades emocional y cognitivamente distintas. Es muy acertado el dicho del refranero popular: Dos no discuten si uno no quiere; segn la psicloga. En ocasiones se entabla una disputa bajo la creencia de que es el otro el que provoca esa actitud defensiva, y se responsabiliza al contrario de las emociones negativas que sentimos, cuando no hay nada ms lejos de la realidad. Frases como: te grito porque tu me gritas a mi demuestran a la perfeccin este hecho. Respuestas insuficientes En la pareja, los conflictos se plantean en diferentes aspectos de la convivencia: por la adopcin de roles entre ambos; el establecimiento de reglas; la falta de comunicacin; por una dependencia excesiva o bien por querer llevar un control exhaustivo sobre el otro; la desconfianza; la infidelidad o la falta de respeto son otras de las causas que llevan a que los problemas de pareja puedan terminar en ruptura. 16
En la primera etapa de enamoramiento todo nuestro organismo contribuye a crear un estado de excitacin provocado por un encadenamiento de procesos qumicos. Sin embargo, lo que antes era pasin se torna sosiego, comodidad y cario una vez que esa fase ha terminado. Segn Laura Garca, la primera semilla del conflicto en una pareja se debe a que existen grandes diferencias en el plano emocional entre hombres y mujeres. Aunque no somos conscientes de ello y esto provoca que la respuesta que ambos esperan del otro no parecida a la que ellos mismos daran. Cada uno responde como sabe porque ha recibido unas pautas de aprendizaje diferentes por su sexo, y no como espera el otro; y as se generan las frustraciones. La premisa fundamental para que una pareja funcione es el respeto mutuo. Es imposible que nos guste todo lo que hace nuestra pareja. Pero slo si somos capaces de respetarla de forma incondicional, seremos capaces de amarla, porque le dejaremos su espacio para ser libre, aunque no nos guste todo lo que haga, sienta, diga o piense. La experiencia le ha demostrado a travs de las visitas que recibe en su consulta que existen modelos de pareja de todo tipo. Hay parejas que se lo cuentan todo, otras que no se cuentan nada. Unas comparten amigos y actividades y otras que deciden llevar por separado su vida social. Hay parejas que viven, trabajan y salen juntas. Y otras que prefieren dejar muy delimitados cada uno de los campos en los que se desarrollan como personas. Dentro de cada pareja, cada uno de los miembros delimita su espacio y se establecen los patrones de funcionamiento. Mala Comunicacin Una mala comunicacin es la causa de muchas de las desavenencias conyugales. El dilogo se vicia porque no se utiliza bien la referencia de cmo, cundo, dnde y qu se hace durante el proceso comunicativo. El lugar y el momento elegidos son fundamentales para que alguien nos preste la atencin que requerimos. Hay situaciones especialmente inoportunas que es mejor dejar pasar o corremos el riesgo de no obtener el inters que perseguimos. A travs del intercambio de expresiones subyace, a veces, el deseo de ejercer control sobre el comportamiento de la pareja imprimiendo al lenguaje un carcter de obligatoriedad, con el objetivo de provocar un sentimiento del culpa en el otro. La desconfianza es uno de los puntos angulares en el fracaso de una relacin. Para que una relacin se mantenga estable y sana, no es necesario mantener una confianza ciega en el otro. Cuando se hace esto, le estamos otorgando un tremendo poder sobre nuestros sentimientos, para luego responsabilizarlo de nuestro malestar por su comportamiento. Es una actitud poco realista, ya que ni siquiera uno mismo es capaz de aventurar lo que va a hacer en determinada situacin, cmo podemos pretender que el otro s lo haga, comenta Laura Garca. El culmen de la desconfianza son los celos. Las personas celosas tienden a comparase con los dems, y tras la compasin se sienten an ms inseguros y amenazados. No es necesario experimentar celos para demostrar a alguien que se le quiere. Tener una adecuada autoestima hace que uno se sienta menos celoso aun cuando haya indicios o una infidelidad real, se percibe que ese comportamiento de la pareja no tiene que ver con uno mismo, dice la psicloga. En cada uno de los supuestos que expone Laura Garca en su libro, el dilogo es la base sobre la que se solventa cualquier tipo de discrepancia, y cmo sugerencias para conseguir una vida feliz en pareja sugiere algunas pautas a tener en cuenta. 17
1. Preserve su individualidad. Le permitir seguir desarrollndose como persona y conservar cierto misterio a los ojos de su pareja. 2. Trate de comprender la postura del otro. No generalice de manera injustificada y tenga en cuenta que el otro tambin tiene su parte de razn. 3. Cuide la comunicacin con su pareja, le conviene saber qu piensa y cmo se encuentra. Procure escuchar y no precipitarse en la calificacin de lo que hace o dice. 4. Aclare las discrepancias. Si no le gusta cmo se comporta su pareja dgaselo con claridad. 5. Acerque posiciones. Compruebe que las metas que persigue en su vida y ms concretamente en su relacin van en la misma direccin para ambos. 6. Tenga confianza en su pareja. Junto con el respeto es el pilar bsico de las relaciones de pareja. 7. Respete al otro. Permtale ser como desee y no intente cambiarlo. S consecuente con lo que ha elegido, pues ya saba con quin decidi compartir su vida. 8. Evite la dependencia emocional. Nadie ha venido al mundo para complacer slo a su pareja. Es una situacin que a la larga perjudica a ambos. 9. Comunquele al otro sus preferencias sexuales. Cada sexo posee un erotismo propio cuyas necesidades conviene conocer para satisfacerlo. 10. Negocie con su pareja de las reglas en las que se va a basar su relacin. Hable de sus asuntos con franqueza.
Abandona a tiempo la discusin. Saber emprender correctamente la retirada no es un signo de debilidad sino de fortaleza. Visualiza alternativas y sugirelas. Siempre utiliza un modo amable: qu pasara si...?, me gustara que... permiten abrir el dilogo y el intercambio de opiniones. Acepta el NO. El hecho de hacer un reclamo no significa que ser atendido inmediatamente. Sin embargo, eso no debe ser una excusa para dejar de plantear lo que uno necesita. Poder comunicar lo que uno desea es un paso vital para aprender a negociar. Escucha sin interrumpir. De este modo permitirs al otro expresarse y tambin podrs exigir el mismo trato hacia l. No amenaces ni desacredites a tu interlocutor. No olvides que su objetivo no es destruir al otro, sino ejercer un derecho legtimo. Y no olvides tampoco que las acusaciones cierran las puertas. Evita el chantaje. La extorsin afectiva es la estrategia de los dbiles. Establece cules son tus derechos y ejrcelos. No des nada por sentado. Descarta pensamientos tales como: l debera saber que...; ya s lo que va a responder...; yo crea que.... Conversa sobre un tema puntual. Evita irte por las ramas, ya que esto ayuda a generar discusiones y dispersar la atencin. No quieras tener siempre la razn. No hay nada ms desagradable que tener a una persona testaruda enfrente de uno. No pases facturas. No contabilices cada cosa buena que haces por el otro con el fin de obtener algo a cambio. Recuerda que negociar no significa acumular poder, vencer o aprovecharse del otro. El objetivo es intercambiar opiniones y hacer pactos que redunden en beneficio de todos y de esta manera fortalecer el vnculo que une a las personas.
este tipo de enamoramiento es la fuerza con que florece y la autosugestin que es capaz de producir en los amantes que consideran haber conocido al hombre o mujer de sus sueos. De cualquier manera, es importante vivir con entrega este tipo de pasin porque esa vivencia aportar a la pareja una certeza profunda de su afinidad. Los inconvenientes y los problemas pueden venir del total desconocimiento de la vida y entorno del que proviene la pareja, Por ello lo ms aconsejable es tratar de vivir la relacin con pasin pero tratando de abrir los ojos lo ms posible. Habr que hacer un esfuerzo cuanto antes para saber con ms profundidad sobre la personalidad, los gustos, los valores y las manas del otro. Lo de ustedes quizs fue a ritmo lento. Comenzaron a conocerse con cautela hasta que lo que al comienzo fue una chispita de afecto se fue transformando en una verdadera hoguera de mutuos sentimientos. Lo ms positivo de esta forma de enamoramiento es que poco a poco se va teniendo la certeza de querer estar junto al otro, y es un tipo de ternura que llega como una lluvia suave pero que cala hondo. Este tipo de amor va echando races pero tiene el inconveniente que se va compaginando tan bien con las rutinas habituales de la pareja que por momentos puede vestirse de aburrimiento. Lo ms recomendable es recordar a menudo todo lo que aporta la relacin, valorarla, y mimarla como algo slido pero exquisito que merece toda nuestra atencin y cuidados.
Antes de enamorados eran amigos? Se conocen desde siempre, o casi hasta que un da comprendieron que en sus miradas haba un fuego turbador, eran confidentes, compaeros de aventuras, amigos fieles. Luego, todo tom otro rumbo y ahora son pareja. La principal ventaja es que su amor ya cuenta con un peldao muy valioso en toda relacin sentimental y que es el de la amistad. La confianza y el cario que eso aporta es muy positivo, pero ahora se trata de cultivar otros matices entraables de complicidad en la intimidad, de sorpresa, y de romanticismo. El reto est en fomentar esa nueva forma de atraccin que surgi entre ustedes, al calor de la amistad. El peligro se instala en la posibilidad de no querer soltar totalmente ese deseo por miedo a complicar una relacin que aportaba tanta comodidad. Empezaron llevndose como el perro y el gato? Quizs adems de un encuentro amoroso lo que hubo entre ustedes en un comienzo fue una verdadera confrontacin de personalidades. Creyeron que eran incompatibles porque discutan por todo pero se sentan incapaces de cortar la relacin hasta que se percataron de que en medio de la guerra de puntos de vista, iba creciendo un jardn de ternura florecido de pasin. Este tipo de relacin implica haber batallado con los propios impulsos y haber tenido que someterlos a la fuerza de los sentimientos. Eso quiere decir que ya se ha tenido que trabajar sobre los dilemas de la convivencia y si se ha conseguido seguir adelante significa haber superado pruebas de comunicacin y tolerancia. Pero la debilidad de la relacin 20
residir en la posibilidad de nuevas confrontaciones que necesitarn nuevas dosis de paciencia y comprensin. Sin embargo, la fuerza que les une capaz de estar por encima de esos conflictos ser una columna slida en la que apoyarse en los momentos de crisis.
de su matrimonio, les parece satisfactorio. Las infieles, sin embargo, echan pestes de su unin oficial. La infidelidad es en si un sentimiento relacionado con la posesin. Los hombres se sienten ms traicionados si sus mujeres se van a la cama con otros. Ellas, sin embargo consideran peor que sus maridos se enamoren de otras. La infidelidad hiere tanto porque acaba con el sentimiento de seguridad y confianza que se encuentra en una pareja. Todo lo que creas conocer de tu pareja empieza a esfumarse y empiezas a ser recelosa y a desconfiar de cualquier argumento que l esgrime. Segn la doctora Glass, para que exista infidelidad se deben dar tres condiciones: secreto, intimidad emocional y qumica sexual. De acuerdo con este argumento quien simplemente tiene un devaneo no se puede considerar un traidor. Pero lo malo es que se ha producido una traicin y que no se va a solucionar tan rpidamente el restablecimiento de la confianza. Ser o no ms engao, pero el dao est ah. Las diferencias existen incluso en las razones por las que se engaa dependiendo si se es hombre o mujer. En el hombre, un affaire halaga la vanidad e introduce un plus de emocin en la vida conyugal del infiel. Muchos hombres unidos a mujeres muy competentes tienen devaneos con otras mucho ms sencillas: as se sienten ms fuertes y necesitados argumenta la Dra. Glass. Cuando una mujer no es feliz se lo hace saber a su pareja. l puede que lo interprete como una crtica. Si entonces conoce a una mujer que le dice lo maravilloso que es, entonces se volcar en ella. Cuando las mujeres se cansan de engaos, empieza a pasar de su compaero y empieza a estar emocionalmente preparada para interesarse por otro. La pareja lo empieza a comprender cuando ella se muestra cada vez ms reacia al sexo. Pero quizs ya es demasiado tarde. En definitiva, para las mujeres un affaire suele ser el resultado de una larga relacin insatisfactoria. Aunque no todas las parejas con problemas de comunicacin tienen una aventura, para las mujeres la principal justificacin de una infidelidad es el amor, y la ltima el sexo. Justamente lo contrario que para ellos.
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Al hablar de autntico perdn, el terreno es mucho ms profundo que el de un pisotn accidental, es una herida en el corazn humano causada por la libre actuacin de otro. Todos sufrimos injusticias, humillaciones y rechazos; algunos deben soportar torturas, no slo en la crcel, sino en el trabajo o, incluso, en la propia familia; El nico dolor que destruye ms que el hierro dicen los rabes es la injusticia que procede de nuestros familiares. Frente a esas heridas es posible reaccionar de formas diferentes golpear a quienes nos han golpeado, hablar mal de quienes lo han hecho con nosotros, pero es una pena gastar las energas en enfados, recelos, rencores o desesperacin y, tal vez, es ms triste an cuando una persona se endurece para no sufrir ms. Slo en el perdn brota nueva vida porque es renunciar a la venganza y querer, a pesar de todo, lo mejor para el otro. La tradicin cristiana ofrece varios testimonios de esta actitud, como el caso del monje trapense muerto en Argelia con otros religiosos que haban permanecido en su monasterio, en 1994. En una carta que dej para su familia agradeca a todos los que haba conocido e inclua a sus asesinos: Y tambin a ti, amigo de ltima hora, que no habrs sabido lo que hiciste. S, tambin por ti digo ese gracias y ese adis cara a cara contigo [2] . Quiz pensemos que son situaciones lmite, reservadas para algunos hroes; ideales bellos, ms admirables que imitables. Pero, puede una madre perdonar al asesino de su hijo? Perdonaramos, por lo menos, a quien nos ha dejado por completo en ridculo ante los dems, a quien nos ha engaado o difamado? QU SIGNIFICA PERDONAR? Cuando digo a alguien te perdono, no olvido simplemente la injusticia, sino que rechazo la venganza y los rencores, y me dispongo a ver al agresor como una persona digna de compasin. Consideremos estos elementos con detenimiento.
1. Reaccionar ante un mal real y objetivo Si me amputan un brazo infectado sentir dolor y tristeza, incluso furia contra el cirujano. Pero no habr nada que perdonar porque era necesario para salvarme. Es claro que el perdn slo tiene sentido si alguien ha recibido un dao objetivo de otro. Por otro lado, perdonar no consiste en no querer ver el dao, colorearlo o disimularlo. Algunos pasan de largo las injurias porque intentan eludir cualquier conflicto; buscan la paz a cualquier precio y pretenden vivir siempre en un ambiente armonioso. Parece que todo les da igual. No importa si no les dicen la verdad; no importa si los utilizan como meros objetos para conseguir unos fines egostas; no importan tampoco el fraude ni el adulterio. Tal actitud es peligrosa porque puede llevar a una completa ceguera ante los valores. La indignacin e incluso la ira son reacciones normales y hasta necesarias en ciertos casos. Quien perdona, no cierra los ojos ante el mal; no niega que existe objetivamente una injusticia. Si lo negara, no tendra nada que perdonar [3] . 23
Si uno acostumbra a callarlo todo, tal vez goce por un tiempo de una aparente paz; pero al final pagar un precio muy alto, pues renuncia a la libertad de ser l mismo. Esconde y sepulta sus frustraciones en lo ms profundo de su corazn, detrs de una muralla gruesa, que levanta para protegerse. Y ni siquiera se da cuenta de su falta de autenticidad. Es normal que una injusticia duela y hiera, pero para sanarla es necesario verla. Si no, huimos sin cesar de la propia intimidad (es decir, de nosotros mismos); y el dolor nos carcome lenta e irremediablemente. Aunque nos maten dicen, no pueden hacernos ningn dao [4] . Han logrado un frreo dominio de s mismos, se sienten superiores a los dems y mantienen interiormente una distancia tan grande hacia ellos que nadie puede tocar su corazn. Como nada les afecta, no reprochan nada a sus opresores. Qu le importa a la luna que un perro le ladre? El problema es que no hay relacin interpersonal; para no sufrir se renuncia al amor. Quien ama, siempre se hace pequeo y vulnerable. Cuando a alguien nunca le duele la actuacin de otro, el perdn es superfluo. Falta la ofensa y falta el ofendido. Es imposible huir del sufrimiento. Todo dolor negado retorna por la puerta trasera, permanece largo tiempo como un trauma y puede causar heridas perdurables o, a veces, convertir a alguien normal en una persona agria, obsesiva, medrosa, nerviosa o insensible. Al final, muchos se dan cuenta de que tal vez habra sido mejor enfrentar directa y conscientemente la experiencia del dolor: hacerlo es la clave para conseguir la paz interior. 2. Actuar con libertad y sensatez Perdonar es la nica reaccin que no re-acta simplemente segn el conocido principio ojo por ojo, diente por diente. El odio provoca la violencia y ella justifica el odio. Al perdonar, corto ese crculo vicioso, libero al otro, que ya no est sujeto al proceso iniciado y, en primer lugar, me libero yo. Estoy dispuesto a desatarme de los enfados y rencores, no re-acciono de inmediato, sino que pongo un nuevo comienzo, tambin en m. Superar las ofensas es muy importante para la propia vida. Max Scheler afirma que una persona resentida se intoxica a s misma; el otro le ha herido y ah se recluye, se instala y encapsula. Queda atrapada en el pasado. Da pbulo a su rencor con repeticiones del mismo acontecimiento. El resentimiento hace que las heridas se infecten en nuestro interior y ejerzan su influjo, creando una especie de malestar e insatisfaccin generales. En consecuencia, uno no est a gusto, ni en su propia piel ni en ningn lugar. Los recuerdos amargos encienden de nuevo la clera y llevan a depresiones. Al respecto, es muy ilustrativo el refrn chino que dice: El que busca venganza debe cavar dos fosas. En su libro Mi primera amiga blanca, una periodista negra describe cmo la opresin que su pueblo haba sufrido en Estados Unidos le llev en su juventud a odiar a los blancos, porque han linchado y mentido, nos han cogido prisioneros, envenenado y eliminado [5] . Despus de algn tiempo reconoci que su odio, por muy comprensible que fuera, estaba destruyendo su identidad y dignidad. Le cegaba, por ejemplo, ante los gestos de amistad que una chica blanca le mostraba en el colegio. Poco a poco descubri que en vez de esperar el perdn de los blancos deba pedir perdn por su propio odio y por su incapacidad de mirarlos como personas, no como opresores. Encontr al enemigo en su interior, formado de prejuicios y rencores que le impedan ser feliz. Las heridas no curadas pueden reducir enormemente nuestra libertad y originar reacciones desproporcionadas y 24
violentas que nos sorprenden a nosotros mismos. Una persona herida hiere a las dems. Y, muchas veces, oculta su corazn tras una coraza, en apariencia dura, inaccesible e intratable. En realidad, no es as. Slo necesita defenderse. Parece slida, pero es insegura; est atormentada por malas experiencias. Ordenar el propio interior es un paso para hacer posible el perdn, pero es muy difcil y, en ocasiones, no conseguimos darlo. Quiz renunciemos a la venganza, no al dolor. As, es claro cmo el perdn, aunque est estrechamente unido a vivencias afectivas, no es un sentimiento. Es un acto de la voluntad que no se reduce a nuestro estado psquico. Se puede perdonar llorando. 3. Recordar el pasado para bien Es ley natural que el tiempo cura algunas llagas. No las cierra de verdad, pero las hace olvidar. Algunos hablan de la caducidad de nuestras emociones [6] . Llegar un momento en que una persona no pueda llorar ms ni sentirse ya herida. Pero esto no es seal de que haya perdonado a su agresor, sino de que tiene ciertas ganas de vivir. Un determinado estado psquico por intenso que sea no suele volverse permanente. A este estado sigue un lento proceso de desprendimiento, pues la vida contina. No podemos quedarnos siempre ah, como pegados al pasado, perpetuando en nosotros el dao sufrido. As slo bloqueamos el ritmo de la naturaleza. La capacidad de desatarse y olvidar, por tanto, es importante para el ser humano, pero no tiene nada que ver con la actitud de perdonar, que no consiste slo en borrn y cuenta nueva. Exige recuperar la verdad de la ofensa y de la justicia, que muchas veces pretende camuflarse. El dao debe reconocerse y, en lo posible, repararse. Hace falta purificar la memoria para que sea maestra de vida. Si vivo en paz con mi pasado aprender mucho de los acontecimientos que he vivido. 4. Renunciar a la venganza Como el perdn expresa nuestra libertad, tambin es posible negarlo al otro. El judo Simon Wiesenthal cuenta sus experiencias en los campos de concentracin. Un da, una enfermera se acerc y le pidi seguirle. Le llev a una habitacin donde agonizaba un joven oficial de las SS, quien le cont su vida: habl de su familia y de cmo lleg a colaborar con Hitler. Le pesaba sobre todo un crimen en el que haba participado: los soldados a su mando haban quemado a 300 judos encerrados en una casa. S que es horrible dijo el oficial, durante las largas noches, mientras espero mi muerte, siento la gran urgencia de hablar con un judo sobre esto y pedirle perdn de todo corazn. Wiesenthal concluye: De pronto comprend y, sin decir una sola palabra, sal de la habitacin [7] . Perdonar significa renunciar a la venganza y al odio. 5. Mirar al agresor en su dignidad personal El perdn comienza cuando, gracias a una fuerza nueva, una persona rechaza todo tipo de venganza. No habla de los dems desde sus experiencias dolorosas, evita juzgarlos y desvalorizarlos, y est dispuesta a escucharles con el corazn abierto. El secreto consiste en no identificar al agresor con su obra. Todo ser humano es ms grande que su culpa. Albert Camus da un ejemplo elocuente en una carta pblica a los nazis sobre los crmenes cometidos en Francia: Y a pesar de ustedes, 25
les seguir llamando hombres Nos esforzamos en respetar en ustedes lo que ustedes no respetaban en los dems [8] . El perdn del que hablamos aqu no consiste en saldar un castigo, sino que es, ante todo, una actitud interior. Significa vivir en paz con los recuerdos y no perder el aprecio a ninguna persona. Se puede considerar tambin a un difunto en su dignidad personal. Nadie est totalmente corrompido; en cada uno brilla una luz. Al perdonar a alguien le decimos: No, t no eres as. S quien eres! En realidad eres mucho mejor. Queremos todo el bien posible para el otro, su pleno desarrollo, su dicha profunda, y nos esforzamos por quererlo desde el fondo del corazn, con gran sinceridad. ALLANAR EL CAMINO PARA EL PERDN Ahora, analicemos algunas actitudes que nos disponen a realizar este acto liberador para nosotros y para los dems. 1. Amor: entregarse hasta el extremo Perdonar es amar intensamente. El verbo latn per-donare lo expresa con claridad: el prefijo per intensifica al verbo donare. Es dar, entregarse, hasta el extremo. El poeta Werner Bergengruen ha dicho que el amor se prueba en la fidelidad y se completa en el perdn. Sin embargo, cuando nos han ofendido gravemente el amor apenas es posible. Primero hay que separarnos de algn modo del agresor, aunque sea slo en el interior. Mientras el cuchillo est ah, la herida nunca cerrar. Hace falta tomar distancia del otro; slo entonces veremos su rostro. Un cierto desprendimiento es condicin previa para perdonar de todo corazn y amar al otro. Una persona slo vive y se desarrolla sanamente cuando es aceptada tal como es, cuando alguien la quiere de verdad y le dice: Es bueno que existas [9] . Estar vivo no es suficiente, hace falta la confirmacin en el ser para sentirse a gusto, posibilitar cierta estimacin propia y relacionarse con otros en amistad. Por eso se ha dicho que el amor contina y perfecciona la obra de la creacin [10] . Si no perdono al otro, de alguna manera le quito el espacio para vivir y desarrollarse; le mato, en sentido espiritual: con palabras injustas y duras, con pensamientos malos o, incluso, negando el perdn. Si, en cambio, concedemos el perdn, ayudamos al otro a volver a la propia identidad, a vivir con una nueva libertad y con una felicidad ms honda. 2. Comprensin: todos somos dbiles Es preciso entender que cada uno necesita ms amor del que merece; que cada uno es ms vulnerable de lo que aparenta; que todos somos dbiles y podemos cansarnos. Perdonar es estar convencido de que en cada uno, detrs de todo el mal, hay un ser humano vulnerable y capaz de cambiar; creer en la transformacin y evolucin de los dems. Si alguien no perdona, tal vez tome a los dems muy en serio, exige demasiado de ellos. Pero, tomar a un hombre perfectamente en serio significa destruirle [11] advierte el filsofo Robert Spaemann. Todos somos dbiles y fallamos con frecuencia. Y, muchas veces, no somos conscientes de las consecuencias de nuestros actos: no sabemos lo que hacemos. Tenemos que creer en las capacidades del otro y drselo a entender. A veces impresiona ver cunto puede transformarse una persona si se le da confianza; cmo cambia si se le trata segn la idea perfeccionada que se tiene de ella. Hay 26
muchos que saben animar a los otros a ser mejores. Les comunican la seguridad de que hay mucho bueno y bello dentro de ellos, a pesar de todos sus errores y cadas. Actan segn lo que dice la sabidura popular: Si quieres que el otro sea bueno, trtale como si ya lo fuese. 3. Generosidad: justicia y misericordia Perdonar exige un corazn misericordioso y generoso. Hay situaciones muy complejas en las que la mera justicia es imposible. Si se ha robado, se devuelve; si se ha roto, se arregla o sustituye. Pero, si alguien pierde un rgano, un familiar o un buen amigo? Es imposible restituirlo con la justicia. Precisamente ah, donde el castigo nunca cubre la prdida, es donde tiene espacio el perdn. El perdn no anula el derecho, pero lo excede infinitamente. A veces, no hay soluciones en el mundo exterior. Pero, al menos, se puede mitigar el dao interior, con cario, aliento y consuelo. Convenceos afirma san Josemara Escriv que nicamente con la justicia no resolveris nunca los grandes problemas de la humanidad () La caridad ha de ir dentro y al lado, porque lo dulcifica todo [12] . Y santo Toms resume: La justicia sin la misericordia es crueldad [13] . El perdn trata de vencer el mal por la abundancia del bien [14]. Es por naturaleza incondicional, ya que es un don gratuito del amor, un don siempre inmerecido. Esto significa que quien perdona no exige nada a su agresor, ni siquiera que le duela el dao. Mucho antes que l, busca la reconciliacin: quien ama ya ha perdonado. El arrepentimiento del otro no es una condicin necesaria para perdonar, aunque s es conveniente. En efecto, es mucho ms fcil perdonar cuando el otro lo pide, pero a veces hace falta comprender que en quienes obran mal hay bloqueos que les impiden admitir su culpa. Hay un modo impuro de perdonar, cuando se hace con clculos, especulaciones y metas: Te perdono para que te des cuenta de la barbaridad que has hecho; te perdono para que mejores. Quiz sean fines educativos loables, pero en este caso no se trata del perdn verdadero que se concede sin ninguna condicin, al igual que el amor autntico: Te perdono porque te quiero a pesar de todo. 4. Humildad: cambiar la silla Hace falta prudencia y delicadeza para saber perdonar. En ocasiones, no conviene hacerlo enseguida, cuando el otro an est agitado. Si fuera de inmediato, parecera una venganza sublime para humillar. En efecto, la oferta de la reconciliacin tal vez tenga carcter de una acusacin, ocultar una actitud farisaica: quiero demostrar que tengo razn y que soy generoso. Lo que impide entonces llegar a la paz no es la obstinacin del otro, sino mi propia arrogancia. Por otro lado, perdonar siempre es un riesgo, pues no asegura su recepcin y puede molestar al agresor en cualquier momento. Cuando uno perdona, se abandona al otro, a su poder, se expone a lo que imprevisiblemente puede hacer y se le da libertad de ofender y herir (de nuevo) [15] . Aqu se ve que hace falta humildad para buscar la reconciliacin. Despus de un tiempo es bueno conversar con el otro para explicarse, dar el propio punto de vista, y escuchar con atencin sus argumentos. Es importante escuchar hasta el final y esforzarse por captar tambin las palabras que no dice. De vez en vez es necesario cambiar la silla, al menos mentalmente, y tratar de ver el mundo desde la perspectiva del otro. El perdn es un acto de fuerza interior, pero no de voluntad de poder, no busca dominar ni humillar. Para que sea verdadero y puro, la vctima debe evitar hasta la menor seal de una superioridad moral que, en principio, no existe; al menos 27
no somos nosotros quienes debemos juzgar lo que se esconde en el corazn de los otros. Hay que evitar acusar al agresor; quien demuestra la propia irreprochabilidad, no perdona realmente. Enfurecerse por culpa de otro conduce con facilidad a la represin de la culpa de uno mismo. Todos hacemos dao a los dems, aunque no nos demos cuenta; por eso necesitamos perdonar, para deshacer los nudos del pasado y comenzar de nuevo. Reconocer las propias flaquezas y fallos que, a lo mejor, han llevado al otro a agraviarnos. 5. Abrirse a la gracia de Dios: seas de identidad Es innegable que el perdn llega a veces al lmite de nuestras fuerzas. Es posible perdonar si el opresor no se arrepiente en absoluto e incluso insulta a su vctima y cree haber obrado correctamente? Quiz no, al menos si contamos slo con nuestra propia capacidad. Pero un cristiano nunca est solo. Siempre es Dios quien ama primero y es l quien perdona primero, quien nos da fuerzas para cumplir con este mandamiento que es, probablemente, el ms difcil de todos: amar a los enemigos, perdonarlos. Pero, en el fondo, no se trata tanto de una exigencia moral como Dios te ha perdonado a ti, t debes perdonar a los prjimos cuanto de un imperativo existencial: si comprendes realmente lo que te ha ocurrido a ti, no puedes por menos que perdonar al otro. Si no lo haces, no sabes lo que Dios te ha dado. El perdn forma parte de la identidad de los cristianos que, por eso, han sabido transformar las tragedias en victorias. Debemos encontrar el sentido de las ofensas e injusticias en la propia vida. Ninguna experiencia que adquirimos es en vano; al contrario, siempre podemos aprender algo que nos ayude a comprender mejor el mundo, a los dems y a nosotros mismos. UN BUEN BAO, DORMIR Y HABLAR CON UN AMIGO Aunque se ha dicho que perdonar es un acto liberador que exige cierta fuerza interior, no parece adecuado dictar comportamientos a las vctimas. Es comprensible que a una madre le cueste mucho perdonar al asesino de su hijo. Hay que dar todo el tiempo que sea necesario para llegar al perdn. Si alguien le acusara de rencorosa o vengativa, engrandecera su herida. Santo Toms de Aquino aconseja a quienes sufren por un dao que no se rompan la cabeza con argumentos, ni lean, ni escriban. Antes que nada, dice, deben tomar un bao, dormir y hablar con un amigo [16] . Generalmente, al principio nos cuesta aceptar un gran dolor. Necesitamos tranquilizarnos; seguir el ritmo de nuestra naturaleza suele ayudar mucho. Slo una persona de alma muy pequea se escandalizara de ello. Perdonar quiz sea una labor interior autntica y dura, pero con la ayuda de buenos amigos y, sobre todo, con la ayuda de la gracia divina, es posible realizarla. Con mi Dios, salto los muros, canta el salmista. Podemos referirlo tambin a los muros que estn en nuestro corazn. Si conseguimos crear una cultura del perdn, construiremos juntos un mundo habitable, con ms vitalidad y fecundidad; proyectaremos juntos un futuro realmente nuevo. Para terminar, vale recordar unas sabias palabras: Quieres ser feliz un momento? Vngate. Quieres ser feliz siempre? Perdona. [1] Cfr. Santo Toms de Aquino, Summa theologiae II-II, q. 68, a. 4 ad 1. 28
[2] Ch. de Cherg. Testament spirituel (1994), en B. Chenu. Linvincible esprance. Pars, 1997. p. 221. [3] Se ha destacado que la justicia, junto con la verdad, son los presupuestos del perdn. Cfr. Juan Pablo II, Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz Ofrece el perdn, recibe la paz, 1 de enero de 1997. [4] Se suele atribuir esta frase al filsofo estoico Epicteto, que era un esclavo. Cfr. Epicteto. Handbchlein der Moral. Edicin de H. Schmidt. Stuttgart, 1984. p. 31. [5] P. Raybon. My First White Friend. New York, 1996. p.4s. [6] A. Kolnai. Forgiveness en B. Williams; D. Wiggins (eds.). Ethics, Value and Reality. Selected Papers of Aurel Kolnai. Indianapolis, 1978. p.95. [7] Cfr. S. Wiesenthal. The Sunflower. On the Possibilities and Limits of Forgiveness. New York, 1998. Sin embargo, la cuestin del perdn se presenta abierta para este autor. Cfr. Los lmites del perdn. Barcelona, 1998. [8] Albert Camus. Carta a un amigo alemn. Barcelona, 1995. p. 58. [9] Joseph Pieper. ber die Liebe. Mnchen, 1972. p. 38s. [10] Cfr. Ibid. p. 47. [11] Robert Spaemann. Felicidad y benevolencia. Madrid, 1991. p. 273. [12] Josemara Escriv de Balaguer. Amigos de Dios, n. 172. [13] Toms de Aquino. In Math. 5, 2. [14] Cfr. Romanos. 12, 21. [15] A. Cencini. Vivir en paz. Bilbao, 1997. p. 96. [16] Cfr. Toms de Aquino. Summa theologiae. I-II, q. 22.
El amor, es un verdadero blsamo para el alma, en este tiempo de presiones, desilusiones y chascos. El objetivo del matrimonio debe ser la fusin de caracteres, que lleguen a ser uno y que se ayuden mutuamente. La mujer se sentir protegida por su esposo y l se sentir ayudado por su esposa, especialmente en la enfermedad y en los problemas. Pero lamentablemente no siempre es as, pues millones de parejas se ven frustradas en su anhelo de felicidad, y los ms afectados suelen ser los hijos. En los EE.UU. se producen cerca de 6500 divorcios por da, esto es ms de un milln cien mil por ao. De las mujeres entre 30 y 40 aos de edad se divorcian 6 de cada 10, por lo menos una vez. El 25% de los menores de 18 aos, carecen de padre o madre y se calcula que esto aumentar al 50% el prximo ao. Se indica que de las parejas que se casen este ao, ms de la mitad terminarn en el divorcio; y que ms del 60% de los nios que nazcan pasarn parte de su vida en un hogar dividido. En Francia, uno de cada dos matrimonios termina en el divorcio. En Canad, ms del 40% de las parejas unidas en primeras nupcias, se separan. En la Unin Sovitica, ms del 70% de los divorcios se producen en los primeros 10 aos de matrimonio. frica, Asia y Latinoamrica, tambin sufren un creciente deterioro de la unidad familiar. Qu perspectivas tan alarmantes para este mundo! Debemos hacer algo! Dios no desea eso, pues cuando cre al hombre estableci el matrimonio con el sagrado propsito de ayudarse mutuamente, de amarse, de criar hijos en un ambiente estable y sano y de permanecer unidos "hasta que la muerte los separe" (Mateo 19:6) SIETE CAUSAS DE INFELICIDAD Existen ms de siete, pero, consideremos las siguientes: 1 - Percepcin errnea del matrimonio. Las novelas y pelculas que tratan temas sentimentales, son responsables de lanzar a los jvenes a un mundo irreal. Al casarse, esas personas esperan inconscientemente de su cnyuge algo que la vida real no les puede regalar y quedan desilusionados. 2 - Desviacin de los principios sanos. El adulterio, el alcoholismo y la pereza son responsables de muchos fracasos. 3 - La incompatibilidad de caracteres. Cuando existe un genio violento, espritu egosta, un corazn fro, celos, rencores, etc., se producen a menudo roces que pueden producir un distanciamiento paulatino, si no se busca la solucin que Dios nos ofrece para estos casos. 4 - La falta de dilogo y cosas en comn. Hay poco tiempo del uno para el otro. Se entra en la rutina conyugal y hay poco dilogo. La TV. y actualmente el chat o Internet roba a muchas familias el tiempo que debieran dedicarse uno al otro. 5 - Problemas econmicos. La incomprensin en los planes y deseos mutuos, la falta de confianza en el manejo de la economa del hogar y el distanciamiento prolongado por trabajar en lugares 30
lejanos, suelen ser causantes de problemas, como tambin cuando se contraen deudas difciles de pagar. 6 - Interferencia de terceros. "El que se casa, casa quiere". Es mejor que los recin casados vivan independiente. 7 - Cuando el amor se enfri. Puede haber insatisfaccin emocional o sexual. Cuando una de las partes amenaza con el divorcio por alguna crisis pasajera, pueden producirse heridas profundas y una pared entre ambos. Dios desea ayudar a cada familia a ser feliz. Si en tu hogar hay problemas, si existen tensiones y est amenazada la unidad familiar, no pienses en el divorcio, sino en buscar soluciones, considerando los consejos que expondremos. Una seora fue a entrevistar a un mdico amigo. - Me quiero divorciar de mi marido -fue la queja de la angustiada mujer. - Por qu? Pregunt el mdico. - Porque tiene otra. - Si Ud. se divorcia le hace un favor, pues eso es lo que l quiere. - Qu puedo hacer? - Enamrelo primero y luego se divorcia, aconsej el mdico. - Cmo lo puedo hacer? - Hgale tres elogios por da. Viste bien? Tiene buena presencia? Es cumplidor? Dgaselo La mujer se propuso hacerlo. Al cabo de algunos meses encontr a su mdico amigo, quien inmediatamente le pregunt por su esposo. - Lo logr! Est profundamente enamorado de m. - Entonces, ahora djelo. - No, ahora no, porque yo tambin estoy enamorada de l. LA LEY FUNDAMENTAL DE LA FELICIDAD Solemos or las quejas: "Mi esposo no me hace feliz", "Mi seora debera ser distinta". No pienses slo en recibir, sino tambin en dar, pues "HACER FELIZ AL PRJIMO, ES HACERSE FELIZ A S MISMO". El apstol Pablo dice: "Ms bienaventurado es dar, que recibir" (Hechos 20:35). Puedes proponerte hacer feliz a su cnyuge. Busca el momento apropiado para conversar y traten de identificar las cosas que no les gustan de s mismos. Ambos debieran colocarse blancos, tratando de aplicar las siete claves. No pienses en tu felicidad, sino en la del otro. No trates de cambiar a tu pareja, proponte cambiar t mismo, y... Vers los resultados! 7 SECRETOS PARA UN HOGAR FELIZ Los investigadores Nick Stinett y John De Fraim estudiaron 3.000 familias estables y felices de diversas nacionalidades para establecer los puntos que tenan en comn. Llegaron a la conclusin que haban seis leyes que caracterizan a las familias slidas. Las consideraremos con una sptima an ms importante. 1- Compromiso con los dems 31
a- Los hogares felices, valoran la familia como unidad, por encima de las necesidades y deseos individuales. b- Aunque cada cual tenga sus metas, debe estar dispuesto a eliminar aquellas que puedan amenazar su existencia como pareja. c- Trtese de comprender los deseos, sueos y sentimientos del otro. d- Ayudarse mutuamente a desarrollar el carcter. Antes de crear a la mujer, Dios dijo: "No es bueno que el hombre est solo; le har ayuda idnea para l" (Gnesis 2:18). e- Al esposo: Considera que la opinin de la mujer es tan valiosa como la del hombre. El apstol Pedro escribe: "Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente" (1 Pedro 3:7). Haz que ella crezca en la autoestima y en gratitud, y evitar resentimientos. La intuicin de la mujer suele ser ms exacta que la lgica del varn. Deja que exprese sus sentimientos. f- Considera las decisiones de tu esposa en las cosas de la vida diaria. S sensible en esto, pues no en todo necesitas hacer tu propia voluntad. g- Fomntese un ambiente alegre, y hagan del hogar un nido atrayente. No necesita ser grande ni lujoso, aunque sea una sola habitacin, debe respirarse en l un clima de amor. h- Dmosle ayuda prctica, especialmente si la mujer trabaja. LOS 10 MANDAMIENTOS PARA LA MUJER 1. Evita cuidadosamente la primera querella. 2. No olvides que te casaste con un HOMBRE y no con un "dios", que sus imperfecciones no te sorprendan. 3. No lo atormentes continuamente pidindole dinero. Arrglate ms bien con la suma de cada semana. 4. Si tu marido tiene CORAZN, tiene seguramente un estmago; trata de hacerte querer cocinando platos apetitosos que a l le agraden. 5. De tiempo en tiempo, pero no muy a menudo, djale que tenga razn, eso le causa placer y no te costar nada. 6. En los peridicos, lee otra cosa que los informes de nacimiento, casamientos y defunciones; ponte al corriente de lo que pasa en el extranjero, le ser agradable el poder hablar de poltica en casa, en vez de hacerlo en el club. 7. S siempre correcta con tu esposo en la discusin. Acurdate cmo lo tratabas cuando eran novios. No lo mires nunca de arriba abajo. 8. Djalo a veces ser ms instruido que t, esto mantendr el sentimiento de su dignidad y te dar la oportunidad de no ser del todo infalible, si cedes una vez. 9. Respeta la familia de tu marido y sobre todo honra a su madre; l la quiere de mucho antes que a ti. 10. No te presentes desaliada delante de tu esposo. No descuides tus funciones femeninas.
2- Aprecio 32
Las familias felices se aprecian mutuamente, se aman. Cmo se puede alimentar ese amor? a- Dando y recibiendo pequeas expresiones de cario, se pueden alegrar a nuestros seres queridos. b- Veamos los puntos positivos y las virtudes de nuestro cnyuge, y no solamente las flaquezas. En lugar de crticas, destquense las buenas cualidades recprocamente, estimularn el amor y la superacin. c- Un esposo cambi su forma de pensar, frente a su esposa, cuando sta tuvo que ausentarse por tres das, dejndolo al cuidado de los nios. He aqu el recuerdo de esa aventura: Abrir la puerta a los chiquillos que venan de la calle: 63 veces. Reirles para que se callasen o estuviesen quietos: 22 veces. Intervenir para arreglar disputas: 8 veces. Perder los estribos: 12 veces. Atar cordones de los zapatos: 15 veces. Manchas en los pantalones: 3 veces. Comer mal: los tres das, etc.
Nunca he deseado volver a ver a mi esposa, tanto como ahora! d- Evitemos las palabras speras y ofensivas. Cuando ambos eran novios se hablaban dulcemente. A medida que convivimos, debemos buscar de fusionar nuestra personalidad y mejorar nuestras relaciones. e- El consejo de Dios es: "Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el seor. Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seis speros con ellas Colosenses 3:18-19. Mantn puros tus pensamientos y no permitas que la expresin de tu rostro comunique enojo, desprecio o deseos de venganza. Hay diversos grados de silencio que pueden ser ms destructivos que las palabras. 3- Comunicacin a- Un investigador calcul, que las parejas tienen un promedio de 17 minutos de conversacin por semana. La semana tiene 10.080 minutos! b- La televisin roba a menudo a la familia un precioso tiempo que podra utilizarse para conversar. Y qu tremenda prdida! c- La comunicacin es fundamental para la comprensin y para alimentar el amor. Las experiencias vividas en el trabajo, las diarias vivencias con los hijos, nuestras alegras y preocupaciones, nuestras ideas o desilusiones vividas fuera del hogar, pueden ser temas de conversacin. d- Cuando notemos que alguien del hogar no se comunica, veamos por qu. Hablemos y resolvamos la dificultad. Quizs la esposa se sienta acomplejada o frustrada por algo, o piensa que no sabe expresarse con la facilidad con la que lo hace el esposo. Tratemos siempre de comprender lo que piensa el otro, compenetrndonos en l. No pretendamos atemorizar, dominar, culpar, controlar ni ganarle al otro. No se griten mutuamente. e- Al hogar debe llenrselo de risas, amor, entusiasmo y sana alegra. 4- Pasar tiempo juntos 33
a- Se les pregunt a 1.500 escolares: Qu crees que hace ms feliz a una familia? La respuesta ms frecuente fue: "Hacer cosas juntos". b- Busquemos tiempo para hacer cosas juntos. Asociemos a nuestros hijos en nuestra actividad y recreacin. Compartan los problemas y la felicidad. c- Aunque cada uno es bombardeado por actividades que nos absorben, debemos planificar de tal modo nuestro tiempo, que podamos dedicarnos a la familia, o terminaremos dispersos. 5- Unidos en la adversidad a- La familia slida, se une para hacer frente a los desafos de una crisis, pues hay un compromiso mutuo. Es necesario desarrollar esa capacidad de hacer frente a la adversidad. Pero cmo? Dios desea tendernos sus manos de amor en medio de la tormenta ms violenta. En las Sagradas Escrituras nos comunica sus promesas y qu hermosas son! Conzcalas investigando los temas de las "Guas de Investigacin Bblica". b- Si hay problemas, no busquemos culpables sino soluciones. No cuesta nada decir: "lo lamento" o "te perdono". La pareja no debe acostarse nunca enojada. Apliquemos el consejo divino: "No se ponga el sol sobre vuestro enojo" Efesios 4:26. 6- Estructura moral a- Se ha comprobado que esto es un denominador comn en las familias estables. En el cultivo de las virtudes cristianas hay bendicin. b- La estructura moral incluye: Integridad, honradez, lealtad, responsabilidad, virtud moral y los principios de la utilidad y del amor. Los principios de los 10 mandamientos debieran estar en cada corazn, pues traen bendicin. Las Escrituras Sagradas dicen: "Quin diera que tuviesen tal corazn, que me temiesen y guardasen todos los das todos mis mandamientos, para que a ellos y a sus hijos les fuese bien para siempre" Deuteronomio 4:29. 7- Dios en el hogar a- En una encuesta realizada en diversos pases por "Mensajes de Amistad", se ha comprobado que la mayora de las personas creen que la fe religiosa es una ayuda para el hogar. Pero cun lamentable es comprobar, que el materialismo est desplazando las cosas del espritu y destruyendo la fe. b- El dilogo sobre cosas profundas, une a la pareja maravillosamente. Dios desea bendecir a quienes lo buscan y le aman. Solamente l puede cambiar nuestro carcter, darnos fortaleza en las horas difciles y guardar a nuestros hijos de los grandes peligros que enfrentan. c- No descuides tu vida devocional y espiritual. Haz de las Sagradas Escrituras la gua para tu vida y tu hogar. Ella nos aconseja, nos orienta, ilumina la senda de nuestra vida y nos llena de esperanza. A travs de sus 2300 profecas, nos revela el pasado, presente y futuro con exactitud matemtica. Estdiala y recibirs grandes beneficios. Si has fracasado en tu vida conyugal, busca a Dios, pues nadie mejor que l para cambiar el rumbo de nuestra vida. Si eres feliz dale gracias y cuida esa dicha. Pero haz tu parte, practicando los principios del amor. 34
"El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor nunca deja de ser" "Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor" 1 Corintios 13:4-8 pp., 13.
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La familia es una escuela personal y social. El nio aprende de jvenes y de adultos. De ah que sean tan interesantes y formativas las familias numerosas en las que todos aprenden de todos. "YO NO CAMBIARA A MIS 8 HERMANOS Y HERMANAS POR NADA DE ESTE MUNDO. DE MIS PADRES Y DE ELLOS HE APRENDIDO CASI TODO LO QUE SE ACERCA DEL HOMBRE EN SOCIEDAD". Esto lo afirma el filsofo ALEJANDRO LLANO, uno de los pensadores actuales con mayor proyeccin de futuro, como lo ha demostrado en las tesis apuntadas en su ltimo libro EL HUMANISMO CIVICO. Contiene ideas tan geniales, que, como acierte a divulgarlas, est llamado a convertirse en uno de los pensadores hispnicos ms importantes de los prximos aos. Yo pensaba que el genial filsofo casi todo se lo deba a las muchas horas de biblioteca..., y, como resulta que no es as y que, como el confiesa, ha sido, su familia la causante de casi todo el borbotn de su filosofa, y, que solo el otro poquito que falta lo ha puesto l con su esfuerzo, uno no puede por menos que exclamar la tan tpica frase "VIVA LA MADRE QUE TE PARI". Y eso por justicia y por representar en esa mujer, madre de 9 hijos. Los mritos de toda la familia de Los Llano, que tan bien le ense al filsofo Claro, que se poda pensar que tal reconocimiento a la familia queda muy poco "filosfico" y, desde luego, poco moderno. Y es que algunos se empean en hacernos creer que la familia es de derechas; naturalmente, la familia de un seor con una seora abiertos a la vida y hasta que la muerte los separe. Porque para estos mismos, todos los dems arrejuntamientos son "TIPOS ESPETABLES DE FAMILIAS" -le dicen siempre en plural-, tales como UNO CON UNO, O UNA CON UNA, O UNO CON SU PERRITA DE PELUCHE, O UNA CON SU OSO WINNI POOH, y as... hasta el infinito de posibilidades combinatorias. . Nadie est obligado a contraer matrimonio, pero una vez contrado, todos estn obligados a cumplir sus leyes. Quien contrae el matrimonio, NO CREA, NO INVENTA el matrimonio, del mismo modo que el nadador no inventa la naturaleza o las leyes del agua o de la gravedad. Por consiguiente, no es el matrimonio el que debe plegarse a su arbitrio, sino SU ARBITRIO AL MATRIMONIO. Lo que debe decidir si un matrimonio est muerto o no, es la esencia de la cosa, los datos de hecho y no los deseos de las partes litigantes. Antes de dar a conocer al autor de esta cita, quiero manifestar que dicho personaje y su doctrina me interesaron en un principio de mi vida universitaria aproximadamente en 1969, cuando muchos de mis compaeros eran marxistas, algunos hoy felizmente ya reconvertidos en engranajes de poder o de fama (Piqu, Bubianes, Llach...)... "PERO POR MS QUE DIGAN, A CADA UNO LO SUYO Y POR ESO LA FAMILIA NATURAL NO ES NI DE DERECHAS NI DE IZQUIERDAS... LO MISMO QUE EL DIVORCIO, QUE TAN POCO ES NI DE UN LADO NI DE OTRO Y NI SIQUIERA ES CENTROREFORMISTA, POR MS QUE ESTE VERTEDERO IDEOLGICO AGUANTE TODO LO QUE SE LE ECHE... LA FAMILIA ES SENCILLAMENTE HUMANA Y TODO LO QUE LE ATAQUE O COMBATA ES INHUMANO.... Perdn, que se me olvidaba: la cita es de CARLOS MARX. Public estas lneas en LA GACETA RENANA, el 19 de diciembre de 1832. Con esta idea que asumo totalmente y que quienes me conocen saben que comparto totalmente, mi defensa de la familia ha hecho que durante tantos aos de mi estancia en Mxico me haya dedicado muy en serio a defender a la familia, al matrimonio, a ayudar a la gente a comprender sus sentimientos y a intentar construir relaciones de amor autntico, algo s, sin duda de cmo estructurar una vida en pareja. Por eso quiero hablar de ello. Yo creo en el amor. Pero estoy convencido de que la mayora de las personas tienen problemas de amor consigo mismas y con los dems. Cuando ustedes se casan, se sienten felices, llenos de seguridad, de esperanza. De disponibilidad, no por 36
superficialidad, o porque no se dan cuenta de las dificultades que van a encontrar o de las respectivas y diversas personalidades; sino porque estn convencidos de que LA FUERZA DE SU AMOR, LO SUPERAR TODO. Y sin embargo, en buena parte de los casos no es as. Una profunda soledad separa hoy a la mayora de los cnyuges, incluso a aquellos que se quieren. Estas palabras quieren dar una esperanza a todos aquellos que creen en el matrimonio, pero no quiere que sea como un manual con reglas para hacer revivir simplemente una relacin de pareja. Este tipo de mtodos y recetas no obtiene ningn resultado; La gente necesita algo que le haga entender QUIEN ES Y COMPRENDER AL OTRO EN SU INTEGRIDAD. Al principio, en la fase de enamoramiento y despus, cuando en general, todo marcha bien, los cnyuges se intercambian sentimientos de ternura, delicadeza, pasin y erotismo. Pero cuando empiezan las dificultades (y todas las relaciones, sin exceptuar una SOLA, se encuentra tarde o temprano momentos difciles), se olvidan los momentos bellos, felices y serenos. Se olvidan de amarse. En estos casos, en general, se piensa en uno mismo, se ven slo las propias razones y los errores del otro la atmsfera conyugal se enrarece y se convierte en lugar de ulteriores enfrentamientos. A menudo, por otra parte, para reducir la tensin, llegan a conciliarse, pero slo superficialmente, procurando no tocar o no analizar los motivos que constituyen la causa desencadenante. Hay que tener valor y afrontar las cuestiones que siguen abiertas, sin resolver, tratando de profundizar de reencontrar juntos una solucin. Por desgracia, muchas parejas, tratan de olvidar el problema por miedo a empeorar la situacin o descubrir una verdad incmoda. No quieren ver al otro tal como es. Prefieren idealizarlo, mantener una imagen de la pareja que no les haga pensar, que no les ponga el crisis, en discusin. O bien, no quieren verse a s mismos tal como son. Yo estoy convencido, en cambio, de que hay que identificar, aceptar y resolver los problemas. En caso contrario, antes o despus, los problemas sin resolver reaparecern y, con el paso del tiempo, sern cada vez ms difciles de resolver. Por otro lado, las situaciones OBVIADAS, OCULTAS, LATENTES envenenan la relacin: De un modo u otro, falsean el matrimonio, lo vacan de sentido. Por eso, lo primero que hay que hacer es AUMENTAR LA CONSCIENCIA PERSONAL SI SE QUIERE VIVIR EN PAREJA TODA LA VIDA. Slo as con una tasa reducida de neurosis, se podrn comprender los problemas, se tendr la capacidad de aclararlos, se encontrar la fuerza para superarlos. No existen recetas preconfeccionadas para construir una relacin feliz. Cada caso es particular. Nadie puede ayudar a una persona si no quiere ser ayudada. EL MATRIMONIO ES UN PUNTO DE PARTIDA, NO DE LLEGADA. Una cosa es cierta en todo caso: LA FELICIDAD Y LA SERENIDAD CONYUGAL NUNCA VIENEN DADAS O REGALADAS, SINO CONSTRUIDAS. Quien cree qu el amor entre dos personas puede existir sin consciencia o responsabilidad individuales es un iluso. El amor no puede reducirse a un evento milagroso. Es una capacidad personal, una cuestin de trabajo PSQUICO Y ESPIRITUAL entre personas. El resto, la atraccin fsica, el encontrarse bien juntos, etc. Aunque importante, si no es desarrollado o inscrito en un proyecto de crecimiento no pertenece a esta dimensin. 37
Si los componentes no colaboran, comparten, comunican ni crecen juntos, a mi entender, no pueden considerarse casados. No nos hagamos ilusiones: EL MATRIMONIO, SI SE ABANDONA ASI MISMO SE MUERE. NO VIVE. La comunicacin constructiva. Creo que las psicologas femeninas y masculinas son muy diversas entre s y que esta profunda diferencia de vivir consigo mismo, con el otro Y con el mundo circundante es la verdadera razn de la inmensa mayora de los conflictos conyugales. . Vivir juntos, da tras da, con psicologas diversas, agudiza inevitablemente el SUFRIMIENTO, la INTOLERANCIA, la INCOMUNICABIUDAD, la INCOMPRENSIN entre los cnyuges. La primera cosa que no ha de olvidarse, es que el matrimonio conlleva siempre dificultades, crisis, conflictos, problemticas entre el uno y la otra. Comenzar a vivir juntos con la certeza de que se deber afrontar la comunicacin con una persona del otro sexo, con mentalidad, expectativas, esperanzas, sueos, deseos completamente diversos de los propios, es el modo ms inteligente para adentrarse en la vida matrimonial. . . No hay duda de que LA COMUNICACIN ES EL NICO MEDIO QUE DOS CNYUGES PUEDEN USAR PARA CREAR Y MANTENER ENTRE S PROXIMIDAD, COMPLICIDAD Y COMPRENSIN. Y para mantener en pie el matrimonio. Por comunicacin no entiende solamente la verbal, aunque en general sea predominante, sino tambin la de los gestos, de la mmica del rostro, de la postura del cuerpo, del comportamiento, de las actitudes, el tono de voz....Muchas veces se usan palabras dulces o formalmente irreprensibles, pero algo, -una seal, un matiz, una inflexin de voz, una mirada- nos delata Y hace comprender el verdadero mensaje, aquello que se experimenta en verdad. . La comunicacin entre personas de diferente sexo debe ser constructiva, dado que, a mi entender, las respectivas naturalezas conduciran a la INCOMUNICABILIDAD, A LA INCOMPRENSIN. Para ser CONSTRUCTIVA, la comunicacin conyugal: No No No No No No debe debe debe debe debe debe acusar exigir. burlarse. dominar. guardar rencor. ser pedante, repetitiva.
Debe estar abierta, disponible, dispuesta a cambiar de opinin; debe convertirse en lugar y medio para comprender mejor el universo del otro, tan diverso y lejano del propio. Por tanto, la comunicacin debe ser siempre NUEVA, nunca REPETITIVA o REDUNDANTE. No debe contener LAMENTACIONES o VICTIMISMOS, sino permitir al uno conocer la profunda intimidad del otro. Debe hacer asumir sus propias responsabilidades a quien ofrece soluciones y tambin al que no las ofrece sino ms bien las sufre pasivamente, salva siempre la disposicin a la crtica. No debe lanzar nunca acusaciones contra el otro, no ha de estar nunca a la defensiva, sino arriesgarnos a aparecer tal como somos, expuestos a ser CRITICADOS, CASTIGADOS, MOFADOS, ULTRAJADOS. Nunca ha de inducir a venganzas o castigos, sino TRANQUILIZAR, IMPULSAR A LA RECIPROCA ACEPTACIN Y AL CAMBIO, A LA TRANSFORMACIN en un camino de mutuo crecimiento psicolgico y espiritual. 38
No debe ser nunca DESLEAL o FALSA, sino VALEROSA y siempre ACTIVA, capaz de permitir una conciencia personal por parte de ambos cnyuges, Los peligros del silencio Poder comunicar al otro nuestras emociones, sentimientos, preocupaciones, miedos o problemas, forma parte integrante del matrimonio. ES ESENCIAL. En una relacin de amor se debe tener la posibilidad de decir al otro quin somos. No se debe tener miedo de descubrirse. En el matrimonio podis ser vosotros mismos sin ser rechazados por ello. Los cnyuges inseguros, con poca estima de s mismos, temerosos de ser rechazados, en general encuentran siempre coartadas, justificaciones para no hablar, para no comunicar lo que sienten. Ya que hemos visto que el creer que el otro os comprende sin que hablis, pertenece al reino de las ilusiones. El silencio, en general, NO ES BIEN VIVIDO EN EL MATRIMONIO. El hecho de que un cnyuge no hable o este constantemente en silencio, provoca en el otro un sentimiento de culpa. Puede ser vivido incluso como castigo. Muchas personas se desesperan porque el cnyuge responde, slo con monoslabos a su deseo de comunicacin, de coparticipacin de los problemas conyugales. El insistir en preguntar al otro que siente, qu le ocurre, no hace ms que darle a ste ltimo un gran poder, precisamente el de no responder. Un poder negativo de chantaje que, a la larga, acaba por frustrar gravemente al cnyuge que pretende desesperadamente hablar, COMUNICARSE. Al final cae sobre la relacin un alto grado de incomunicabilidad recproca que la asfixia. Muchas veces el silencio es una MSCARA: oculta la incapacidad de comunicarse, de admitir que uno se ha equivocado, esconde las debilidades, el miedo de la realidad matrimonial, la irresponsabilidad..., etc. En ciertos matrimonios se llega a tener miedo de decir "TE QUIERO" porque no se quiere or respondes CON UN SILENCIO ABSOLUTO. En cualquier caso conviene evitar el uso de palabras vacas o de frases sin sentido, dichas simplemente, por decir algo. No seis superficiales. He conocido a parejas que estaban convencidas de que se comunicaban pero hablaban slo de argumentos insignificantes o neutros dirigidos al mundo externo. QUERER TENER SIEMPRE LA RAZN, NO ES COMUNICARSE. TAMPOCO ES COMUNICARSE, DAR RDENES. Comunicarse significa; ACEPTACIN, PARIDAD DE DERECHOS Y DEBERES IGUALDAD COMPRENSIN, LEALTAD, VERDAD. Me gustara hablar ahora un poco de la NO COMUNICACIN, especialmente de los motivos psicolgicos y los prcticos, pero dada la longitud de esta pltica, prefiero pasar directamente a hablar de Condiciones para una buena comunicacin. Una comunicacin autntica, verdadera, slo puede brotar si los cnyuges recorren un camino de crecimiento psicolgico y espiritual. Difcilmente se comunicarn si no se aporta el matrimonio como cambio resignacin .o conversin de la propia vida. No existir comunicacin mientras uno se SIENTA VICTIMA. No habr comunicacin mientras SE QUIERA HACER SIEMPRE Y SOLO JUSTICIA. No habr comunicacin mientras se quiere cambiar AL CNYUGE SIN REPARAR EN UNO MISMO. .En las parejas casadas desde hace muchos aos es difcil reavivar el sentido de COMPLICIDAD. Estos cnyuges no se viven como cmplices y sus discursos se ocupan siempre DE LOS HIJOS O DE LOS NIETOS, NUNCA DE ELLOS MISMOS. En general, estos cnyuges se sienten a disgusto cuando se encuentran solos el uno con el otro mucho tiempo. Es como si no supieran hablar Pero se puede, pero es necesario que admitan consigo mismos que quieren empezar de nuevo. 39
En lugar de entregarse a su pesimismo a ultranza, al victimismo, al llanto, o a un glido mutismo, deben adecuarse a la realidad y aceptar o admitir su fracaso para poder afrontar con xito el prximo futuro. Por otra parte, es mejor hablar de CAUSAS o PROBLEMAS que de CULPAS. Los cnyuges que deciden asumir la responsabilidad del cambio, de la conversin, se admiran de descubrir diversos, nuevos y por fin, cmplices. El pasado debe servir slo para no repetir los mismos errores, despus HAY QUE ABANDONARLO. Si se tiene delante, puede paralizar toda actividad. Por consiguiente, se deben inventar cosas nuevas, nuevos intereses, viajar, participar en cursos y conferencias, visitar exposiciones, trabar nuevas amistades... de modo que se estimules viejos deseos, antiguos sueos abandonados o frustrados. Pero para hacer esto hay que renunciar a los resentimientos, rencores y venganzas. No digo que HAYA QUE OLVIDARLOS, sino DESPRENDERSE DE ELL05, ABANDONARLOS. Recordar litigios, conflictos y recprocas mezquindades favorece slo una ulterior tentativa de dominio, de querer imponerse al otro. En cambio ha de saberse renunciar IMPRORROGABLEMENTE!! Por otra parte, cuando se sale de una larga relacin de incomprensiones o malentendidos, ya no se tiene confianza en s mismos ni en el cnyuge. En estos casos aconsejo, ms bien, que hacer las acostumbradas promesas o buscar obsesivamente la causa de ciertos comportamientos, PASAR A LA ACCIN, ACTUAR, HACER ALGO. Los cnyuges lograrn acercarse de nuevo SLO SI CAMBIAN SUS RESPECTIVOS COMPORTAMIENTOS, NO SI CAMBIAN SLO LAS PALABRAS. Acciones y comportamientos positivos, leales, abiertos crearn un clima de autntica comunicacin. Los modos de vivir la complicidad son muchos y diversos para cada individuo. El verdadero amor por el cnyuge consiste EN NO OBLIGARLO A VIVIR LA COMPLICIDAD O LA COMUNICACIN INTERPERSONAL DESDE NUESTRO PUNTO DE VISTA, sino en aceptar y apreciar AQUELLO QUE LE GUSTA AL CNYUGE. El intercambio interpersonal no es un evento pasivo, sino fruto de un camino, de una serie de comunicaciones, de actividades. No se realiza si se espera que sea algn otro el que lo solicite. La buena comunicacin es ACCIN. Es una OPCIN. Es decidirse A DAR EL PRIMER PASO. Es acercarse al cnyuge y ENTRAR EN SU ESFERA DE INTERESES. La buena comunicacin NO ES. EGOSMO. No se hace para uno mismo, sino que tiene en cuenta al otro. Nos ayuda a sentirnos comprendidos, aceptados, importantes, tiles. Es pues necesario buscar lo QUE UNE, no lo QUE SEPARA. Hay que recordar cules fueron al principio, los elementos, las caractersticas del cnyuge que nos atrajeron, LOS LIBROS QUE SE LEAN JUNTOS, LAS PECULAS, LAS CONVERSACIONES, LOS INTERESES COMPARTIDOS ANTES DE NACER LOS HIJOS, y hacer que vuelvan a convertirse en un PUENTE DE COMUNICACIN INTERPERSONAL. . Obviamente, esto no sirve de casi nada si ambos no estn en un camino de CONSCIENCIA PSICOLGICA y ESPIRITUAL. Como y qu comunicarse No hay recetas en tal sentido. Aconsejo SER ESPONTNEOS, SER AUTNTICOS y DECIR LA VERDAD DE MODO SENCILLO, LIMPIO. "SIENTAN" su corazn mientras se comunican con el cnyuge. Creo que es ms que suficiente. Sean francos, no den vueltas en torno al problema, exprsense de modo honrado, humilde. TRATEN DE NO HABLAR CONDICIONADOS POR EL OTRO. DIGAN AQUELLO QUE PIENSAN, CUESTE LO QUE CUESTE. Y despus ESPEREN. El otro puede 40
responder o comunicarse de formas distintas de la palabra CON GESTOS, con LA MMICA FACIAL, CON LA POSTURA DEL CUERPO, CON UNA MIRADA, UNA SONRISA, UN ABRAZO... Acptenlo TODO con naturalidad. No se detengan a analizar escrupulosamente las reacciones del otro. ARRUINARN la COMUNICACIN!! Limtense a EXPRESARSE A SI MISMOS.
Cundo comunicarse SIEMPRE !!!. No hay un momento privilegiado para hacerlo. Puede suceder que durante una conversacin difcil, mientras se dicen cosas negativas, se siente dentro tambin algo positivo. Bien. NO LO GUABDEN EN SU INTERIOR!!, EXPRSENLO!!. NO hay mejor prueba de afecto o amor que una palabra dulce, una valoracin, una expresin de respeto, mientras se est discutiendo. Es la mejor prueba de que en la relacin existen todava posibilidades de recuperacin.. Si se comparte todo, los aspectos negativos se disipan cada vez ms y entre ambos cnyuges viven un gran sentido de complicidad, ya no tienen miedo de descubrirse mutuamente, se sienten por fin y verdaderamente libres. Hay tantas y tantas formas de comunicare!!! HAY OUE ESFORZARSE Y CONFIAR EN USTEDES MISMOS Y EN EL OTRO. Bien merece la pena!! A modo de ltimos consejos. Una de la de las formas de comunicacin que siempre es buena cuando los cnyuges no consiguen expresar sus sentimientos es exponerlos en una carta. Todo lo que se piensa del otro debe ser reflexionado y dicho despus, ADEMS DE COMPARTIDO. Cada vez estoy ms convencido de que sI en un matrimonio no se logran compartir DOLOR, SUFRIMIENTOS DUDAS, DECEPCIONES y PERPLEJIDADES..., tampoco se pueden compartir el amor la serenidad y la intimidad. A este propsito en un pacto de lealtad, desaconsejo usar tonos polmicos violencias o agresividad verbal o de comportamiento. Traten de decir TODO SIEMPRE pero con calma y paciencia. Su mensaje llegar mejor al otro y servir ms adecuadamente a tal fin. Es triste ver algunas parejas decirse la verdad usando tal agresividad y espritu polmico, que acaban litigando por sentirse heridos, no por el contenido de las palabras, sino por el tono usado. (Es decir, las cosas se tienen que decir con CLARIDAD, pero tambin con CARIDAD). No hay que jugar en el matrimonio, las palabras en una relacin de amor tienen su peso, pueden tanto EXALTAR y HERIR, como DESTRUIR. Procure nunca interrumpir al otro mientras est hablando o desahogndose. Esperen pacientemente su turno y despus con calma digan todo lo que piensan CUESTE LO QUE CUESTE. Si no entienden un concepto pidan que se lo repita. Sean humildes en la relacin; en caso contrario corren el peligro de crear un clima de PODER, COMPETICIN, de DESIGUALDAD y, por tanto de INCOMUNICABILIDAD Deben saber claramente que desean del cnyuge que es lo que el otro a su vez desea de ustedes; cuales son sus valores y cuales los de su pareja. No crean que aclarar todo esto reste poesa al matrimonio. Al contrario, les dar SEGURIDAD y SENTIDO DE ESTABILIDAD. Las zonas de sombras, los misterios, las desilusiones, las idealizaciones, la falta de realismo... djenlo para la fase del enamoramiento (por naturaleza fugaz y engaosa, aunque tambin til...) pero ahora? No olviden que estn CASADOS NO CAZADOS y no se trata de estar enamorados, sino de AMARSE en plenitud. 41
somos egocntricos. Pero en el matrimonio, eso tiene que cambiar. De repente, ya no soy yo, soy nosotros. Qu raro. Y qu difcil! Ayer, si me daba la gana, sala a jugar al bisbol o me recostaba a leer un libro. Ayer, si yo quera, cambiaba de trabajo o no me rasuraba. Ayer, segn mi antojo, compraba una Pnsil o me pasaba todo el da con mis amigos. Ayer, conforme a mis emociones, tocaba himnos en la grabadora o me iba solo al monte. Ayer. Pero, ya no soy yo, soy nosotros. Qu raro. Y qu difcil! Creo que ste es el ajuste principal. Si lo logramos, los dems ajustes sern tanto menos complicados. Mi mentalidad tiene que cambiar de lo que yo quiera a lo que ella quiera. La mentalidad de ella tiene que cambiar de lo que ella quiera a lo que yo quiera. Y juntos debemos considerar lo que nos es bueno y provechoso a ambos. La Biblia dice sin equivocacin que Dios toma a dos y los une en uno. Esto significa que ya no debo vivir para mi bien, sino para nuestro bien. Significa que mi vida y su desarrollo quedan inseparablemente enredados con la vida de mi esposa (se llama Rub). Nuestras vidas son para compartir entre nosotros. Debe existir entre nosotros un nivel de comunicacin que no existe en ninguna relacin que podamos tener con cualquier otra persona. Todo esto impacta en nuestras vidas en maneras tremendamente prcticas. Ya no juego al bisbol o al ajedrez con la frecuencia de antes. Ya no paso largas horas en compaa de mis amigos o de mis libros. Ya no salgo a pasearme solo con la frecuencia de antes. Porque no me gustan esas cosas ya? Claro que no! La cosa es que ahora tienen una importancia secundaria a mi relacin con Rub. An me entretengo con algn juego o con mis amigos o solito, pero menos que antes. Igualmente con Rub; ella me ha puesto a m y a nuestra relacin en una posicin semejante. Y qu de los libros y la grabadora? El mismo principio rige. Hay ocasiones cuando quiero leer pero Rub necesita alguien con quien platicar o alguien que le ayude tender la ropa. Entonces no leo; eso lo podr hacer en otra ocasin. De vez en cuando se me antoja escuchar msica en la grabadora. Pero qu har si Rub quiere escuchar un mensaje o quiere que vaya a comprar un kilo de harina o no ms quiere silencio en ese momento? Por amor a ella e inters en nosotros, no escuchar msica en esa ocasin. "Para dnde vas?" "Qu ests pensando?" "De dnde vienes?" "Por qu hiciste esto?" "Con quin platicaste?" "Qu hiciste hoy?" "Cundo vas a volver?" "Qu piensas hacer hoy?" " Qu te dijo fulano?" Me imagino que fueron preguntas como stas que impulsaron esta pregunta de un amigo mayor: Por qu son las esposas tan entremetidas en los negocios de sus esposos?" Francamente, las preguntas al principio de este prrafo no deben ser necesarias. Los cnyuges deben compartir sus vidas el uno con el otro. Nuestros planes, nuestros pensamientos, nuestras experiencias son para confiarse con nuestros cnyuges. Si Rub tiene que hacerme este tipo de preguntas o si yo tengo que hacrselas a ella, entonces hemos fallado en funcionar como nosotros. El individuo que opina que su esposa se entremete en sus negocios an no comprende que ya no es yo. Siendo que ahora son uno, ambos tienen derecho a todo lo del otro. Un ajuste de esta magnitud requiere tanto un cambio de punto de vista como un cambio de vida. No es fcil, pero s es posible. Te sugiero tres cosas que ayudan en esto grandemente: 1) 2) 3) el apoyo y la ayuda de Dios un noviazgo bien fundamentado el amor. 43
Cualquier matrimonio puede ser feliz, exitoso y lleno de nosotros. Aun el matrimonio pagano. Pero la abundancia matrimonial en todos sus aspectos es la bendicin exclusiva de aquellos cnyuges que conocen a Dios. Para transitar este ajuste de nosotros (y cualquier otro ajuste), busca el apoyo y la ayuda de Dios. El puede hacer los cambios fundamentales en el corazn para cambiarnos de yo a nosotros. El especializa en cambiar puntos de vista y propsitos de vida. Si t an no te has casado, entonces hay algo que puedes hacer antes de casarte. Dale a tu noviazgo un fundamento bueno y slido. El ajuste al nosotros matrimonial les es cosa natural a aquellos que han practicado el concepto de nosotros en el noviazgo. Muchas parejas limitan sus matrimonios aun antes de casarse. Eso suena raro, verdad? Sucede ms o menos de esta manera. Se enamoran en un sentido fsico. Su atraccin es fsica. Se conocen fsicamente nada ms. Se conocen poco o nada en el aspecto espiritual. Se casan. Pm! A las pocas semanas (o das, quizs) descubren que se casaron con un desconocido. Los ajustes les son difciles si no imposibles. El amor. Tal vez te parezca extrao que lo mencione en conexin a los ajustes. Sabes que muchos se casan sin conocer el amor? Es cierto! Cada uno est tan ocupado con yo que no puede preocuparse en la otra persona. Toda relacin entre ellos se basa en lo que pueden conseguir personalmente. Aun lo que hacen a favor del otro es con el propsito de conseguir algo para s mismos. El amor genuino se interesa solamente en el bien para el otro sin inters alguno en provecho o recompensa personal. Medita en estos pasajes bblicos que pintan un paisaje del amor genuino. "Las muchas aguas no podrn apagar el amor, ni lo ahogarn los ros" (Cantares 8.7). "Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos" (Juan 15.13). "El amor sea sin fingimiento" (Romanos 12.9). "El amor no hace mal al prjimo; as que el cumplimiento de la ley es el amor" (Romanos 13.10). "El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor nunca deja de ser" (1 Corintios 13.48). "Todas vuestras cosas sean hechas con amor" (1 Corintios 16.14). "...Servos por amor los unos a los otros" (Glatas 5.13). "Con toda humildad y mansedumbre, soportndoos con paciencia los unos a los otros en amor" (Efesios 4.2). "El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor" (1 Juan 4.8). El Sexo Despus de esos versculos sobre el amor verdadero y su nfasis acompaante en nosotros, cabe muy bien tratar en breve el ajuste sexual. Este ajuste no es ni natural ni ligero ni sencillo como la mayora imagina. La cultura mundial decadente nos ha colmado de informacin y observacin sexual, pero an as, este ajuste matrimonial es algo delicado que requiere bastante amor y nosotros. [Para encontrar ayuda ms detallada sobre esto, consulta con alguna librera evanglica o con Lmpara y Luz.] El amor y la resultante consideracin deben marcar nuestras relaciones sexuales con nuestros cnyuges. Cada cnyuge se dedicar a darle al otro el placer y la satisfaccin sexual que anhela y necesita. No se preocupar tanto por sus propias necesidades y sus propios anhelos. 44
El amor del esposo ha de mostrarse a travs de la paciencia. El fuego sexual de tu esposa es ms lento y prolongado que el tuyo. Aunque t puedes estar ardiendo en pocos minutos, ella ocupa ms tiempo. La inclinacin normal del marido es conseguir su propia satisfaccin sexual lo ms pronto posible. No quiere esperar hasta que su esposa est lista. Pero tu amor y paciencia te darn el control personal para esperar y ayudar a tu esposa llegar al mismo nivel de excitacin sexual. Usa palabras dulces y amorosas y caricias tiernas y sabias en este tiempo de espera y preparacin. El amor del marido tambin debe mostrarse a travs del respeto y la cortesa. Si ella est turbada por algn problema, intersate ms en ayudarle a ella encontrar la solucin o la paz que en satisfacer tus propios deseos sexuales del momento. Si ella est tremendamente agotada o levemente enferma, ni siquiera le insines tus necesidades sexuales; ocpate ms por su bienestar. Si ella no ms no tiene ganas sexuales, no te portes como un monstruo sexual que tiene que ser satisfecho o no estar de buen humor. O si ella por palabra o accin te expresa deseos sexuales, haz todo en tu poder por satisfacerla, aunque ests cansado o no tengas ganas o ests preocupado por algo. El amor de la esposa se mostrar en una manera compasiva y comprensiva. Recuerda que la pasin sexual de tu esposo se enciende fcil y rpidamente. Reconoce que en este mundo hay todo tipo de incitacin sexual que afectan al varn ms fuertemente que a la mujer. No le condenes por ello sino est gozosamente disponible para satisfacerle. Di con la esposa de Salomn, "Yo soy de mi amado, y conmigo tiene su contentamiento" (Cantares 7.10). Esto significa que habr bastantes ocasiones cuando participars en las relaciones sexuales sin tener necesidad personal. Pero lo hars por amor a tu esposo. Y hazlo de buena gana; no eres usada por tu marido... eres necesitada por l. Aunque no arda en ti la pasin sexual en esa ocasin, esfurzate por ser una amante activa, imaginativa y emocionante para l. En Cantares 7.12, la esposa invita a su esposo con unas palabras muy atractivas y romnticas: "Levantmonos de maana a las vias; veamos si brotan las vides, si estn en cierne, si han florecido los granados; all te dar mis amores." Los Gustos Ella prefiere tortillas de harina; l, de maz. A l le gustan los blanquillos estrellados; a ella le caen mejor revueltos. Ella es una de esas personas que les encanta salir a visitar; el es de aquellos que estn ms satisfechos quedndose en casa. El est acostumbrado a acostarse temprano; ella nunca se acostaba antes de las once. A ella le gusta el t; a l le encanta el caf. El quiere las relaciones sexuales con la lmpara prendida; ella quiere todo oscuro. Estas ilustraciones son pocas y sencillas pero te dan buena idea a lo que me refiero; t podrs aadir tus propios gustos que son diferentes u opuestos a los de tu cnyuge. Los dos acostumbraban dormir en el lado izquierdo de la cama. Ambos siempre se sentaban en una silla mecedora, pero ahora nada ms tienen una. El siempre llevaba una grabadora al trabajo y ella siempre tena una tocando mientras haca sus negocios en casa, pero no tienen dos grabadoras. En sus respectivas familias, ellos eran los nicos que se coman el hgado cuando coman pollo. Sin duda alguna, t y tu cnyuge han descubierto cosas de esta ndole: tienen gustos iguales pero slo uno puede gozar de ellos a la vez. Hay una manera fcil y muy comn para solucionar estos problemitas. Siendo que el esposo es el jefe del hogar, l insistir en tortillas de maz, huevos estrellados y caf...y a l le tocarn los hgados de pollo. El dir que no quiere visitas en casa y que se acostarn tempranito con l ocupando el lado izquierdo de la cama. Y por 45
supuesto que el sexo ocurrir con la luz prendida. La silla mecedora y la grabadora sern para su uso exclusivo. Quiero retarte a considerar otra solucin. Una solucin bblica. No es una solucin fcil, por lo tanto, tampoco es comn. Cmo te impactan los siguientes versculos? "...Amars a tu prjimo como a ti mismo" (Mateo 22:39). "Amaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a honra, prefirindoos los unos a los otros" (Romanos 12:10). "...Servos por amor los unos a los otros" (Glatas 5:13). "...Sed benignos unos con otros" (Efesios 4:2). "Nada hagis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los dems como superiores a l mismo" (Filipenses 2:3). "En esto hemos conocido el amor, en que l puso su vida por nosotros; tambin nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos" (1 Juan 3:16). Consideracin mutua. Preferencia al cnyuge. Sacrificio de los deseos personales. Esa es la solucin bblica. Esa es la solucin que traer paz, armona, satisfaccin y gozo a toda relacin matrimonial y familiar. En bastantes reas, simplemente podrn tomar turnos. En cuestiones sexuales, es importantsimo que el marido d preferencia a su esposa. Y en cuanto a qu lado de la cama cada uno usar...tal vez se tratar de quien renuncie sus deseos primero o de echar suertes. Ahora bien, una vez que estas cosas se solucionen en una manera general, entonces llega el tiempo para las sorpresas! Por ejemplo, el prximo hgado le toca a l. Cuando ella se levanta y le da la espalda para traer el t, l rpidamente pone el hgado en el plato de ella. Otro ejemplo? En la oscuridad del cuarto hay caricias y besos en cantidad cuando ella se escapa del abrazo de l y levantndose repentinamente, prende la lamparita. Lo que quiero decir es que, despus de establecer ciertos patrones de vida y comportamiento, todava existen oportunidades en abundancia de mostrar amor, estima y preferencia. Qu Dios inspire tu imaginacin y creatividad! Los Hbitos Cmo oprimes el tubo de pasta dental? Qu haces con la ropa sucia al terminar el da? Cuntas cucharas usas en cada alimento? Masticas la comida con la boca abierta o cerrada? Dnde pones la toalla despus de baarte? Cmo te suenas la nariz? Qu tan olvidadizo eres? Qu tan pronto contestas las preguntas que te hace tu cnyuge? Qu haces con las manos cuando platicas? Interrumpes al que est hablando? Cmo estornudas? Guardas las cosas cuando terminas de usarlas? Das siempre las gracias cuando es propio? Recuerdas decir "por favor"? A qu hora despiertas en la maana? Todos tenemos hbitos y costumbres que a nuestro parecer son muy normales. Y todos tenemos hbitos y costumbres de los cuales no estamos enterados, pues los hacemos de una manera automtica y subconsciente. Algunos hbitos son buenos, otros malos; la mayora son inofensivos en s. Entre todas estas cosas habrn algunos hbitos que podrn causar conflicto con el cnyuge: le caen mal o le parecen innecesarios o no puede comprender cmo podemos hacer tales cosas. Cmo reaccionamos a todo esto afecta nuestro gozo matrimonial. Un hbito desagradable pronto puede llegar a ser muy enfadoso. La situacin puede llegar al grado que ya no puedes aguantar estar en presencia de tu cnyuge. Es importante encontrar la solucin a este dilema lo ms pronto posible o empezars a reaccionar mal. Te presento dos pasos que tomar. En primer lugar, reconoce que no es tu negocio cambiar y mejorar a tu cnyuge. T eres responsable por ti mismo. Recuerda que t tambin tienes hbitos y costumbres que le puedan caer mal a tu cnyuge. As que, cuando observes algo en 46
l que no te guste, investgate a ti mismo para ver si acaso hay algo en ti que le pueda caer mal a l. Y esfurzate por cambiarte a ti mismo. Ah, no observaste nada cuando te investigaste? Bueno, pregntale a tu cnyuge, "Querida, acaso tengo algn hbito que te enfada? Dime, por favor, y tratar de cambiar." (No te enojes ni te sientas ni hagas excusas cuando te diga algo!) Si tomas esta ruta, posiblemente no tengas que tomar el segundo paso. Por qu? Porque es casi natural que despus que t le hagas esa pregunta, ella te haga la misma y entonces tendrs la oportunidad de comentarle sobre lo que te es tan molesto. Pero cudate por decir las cosas en una manera que no sea acusatoria. El segundo paso es muy delicado y ha de tomarse solamente si tu cnyuge no te pregunta si hay algo en l que te molesta. Pdele a Dios que les d una buena oportunidad de hablar francamente. Tambin pdele sabidura para decir las cosas mansamente con toda calma. Y entonces espera el momento oportuno para decirle, "Sabes algo, querido? Me fastidia tanto cuando dejas las toallas tiradas en un rincn. Yo s que tienes mucha prisa y que es mi negocio encargarme de tales cosas. Pero me sera de tanta ayuda si pudieras poner tu toalla en la espalda de esta silla. As se secar ms rpidamente y no se ensuciar y yo la podr encontrar ms fcilmente." Rehsa usar palabras como nunca y siempre. La moderacin traer mejores resultados que la exageracin. Tambin te hago recordar que este tipo de franqueza no es para cualquier momento. Si est cansado o de mal humor, no se lo digas. Si ya tienen un desacuerdo y hay tensin entre ustedes, no se lo digas. Si se acaba de quejar contigo sobre algo, no se lo digas. Si tienen visitas o si los nios estn presentes, no se lo digas. Mejor espera...hasta que estn solos...hasta que haya paz entre ustedes...hasta que estn de buen humor. Si estos dos pasos no solucionan el problema, entonces tienes que pedirle al Seor paciencia para vencer tu impaciencia. Aprende a soportar ese hbito con todo el amor que le tienes a tu cnyuge. Y deja de enfocar en eso pues no vale la pena irritarte por tales cosas. Con la ayuda del Seor, goza de la vida, y que los hbitos desagradables de tu cnyuge no te quiten la paz y el contentamiento. Se Acab la Conquista "Cuando todava estbamos noviando, Jos siempre quera tener su brazos alrededor de mis hombros o de mi cintura. Ya que nos casamos...no me abraza. En aquel entonces, platicbamos ms; ahora casi nada. Me gustaba ms nuestra relacin cuando ramos novios nada ms." Te suena conocido ese refrn? Es un problema comn y normal. El ttulo de esta seccin da la suma de la explicacin. Cuando ya no hay temor de perder al objeto de nuestro afecto, nuestra relacin con esa persona puede perder su lustre. Antes temas que te dejar tu novia, as que te esforzabas por comportarte en la mejor manera posible. Pero ahora que es tu esposa, tu buen comportamiento sali volando. Antes temas que tu novio perdiera su inters en ti a favor de otra seorita, as que siempre te presentabas en tu mejor aspecto. Pero ahora que es tu marido, esas cosas disminuyeron en importancia. Encuentra un equilibrio sano en esto. Tienes que reconocer que el noviazgo no es un tiempo de relaciones normales...cada individuo trata de mostrar solamente lo bueno que hay en s. Despus de la boda la vida se vuelve ms normal y rutinaria...y entonces es imposible seguir ocultando las cosas negativas. Tambin tienes que reconocer que el amor, el afecto y el romance del noviazgo slo marcan el principio y deben mejorarse despus de la boda y al avanzar los aos. Ernesto y Mireya noviaron un ao. En ese perodo, l le llevaba una rosa cada sbado. En una ocasin cuando ella le dej caer una maceta en el pie, Ernesto se ri y le dijo que no fue gran cosa. A Ernesto le encantaba salir a pasear con Mireya. Cuando Ernesto llegaba a visitarla, Mireya siempre le ofreca caf o agua fresca. No 47
haba favor que l le pidiese que ella no estuviera dispuesta a cumplirle. Y una vez cuando l por descuido le manch el vestido favorito, ella le dijo que olvidase el asunto. Ambos se esforzaban por agradar al otro. Ahora tienen dos aos de casados. Hace como 23 meses que Ernesto le llev la ltima rosa a Mireya. Y son raras las veces que caminan juntos, aun para asistir a los cultos. Ayer cuando ella accidentalmente le toc la mano con el sartn caliente, l explot con coraje y palabras abusivas y acusatorias. Cuando Ernesto llega del trabajo, Mireya no sale a recibirle. Ya no se le ocurre tenerle listo el caf. Si l le pide algn favor, ella reacciona acusndole de ser flojo y mandn. Y todava ella no le deja olvidarse que hace quince das l le quebr el florero favorito. Buscan agradarse el uno al otro slo cuando les conviene personalmente. QUE PASO? Se acab la conquista. Y no habr solucin? Claro que s. Es tiempo de volver a t y nosotros. Es tiempo de olvidar a yo. Es tiempo de reconocer que el amor, el romance y el respeto no es para el gozo exclusivo de los solteros. Es tiempo de comprender que el reto de retener el amor, la estima y la pasin del cnyuge requiere ms esfuerzo que la tarea de ganarse un cnyuge en primer lugar. Se requiere diligencia y bastante trabajo hacer arder una gran fogata, pero una vez que est ardiendo, ya se acab el trabajo? NO! Ahora se requiere mucho ms esfuerzo para mantener el fuego, si no, se apagar. Igualmente en el matrimonio. Ernesto y Mireya pueden dejar que su fogata se apague por completo. O pueden reconocer el peligro que enfrentan y empezar su noviazgo de vuelta y nunca dejar que se acabe. "Cmo puedo conquistar a mi cnyuge hoy?" Cada persona casada tiene que hacerse esa pregunta. Si enfrentas cada da con esa mentalidad, descubrirs bastantes oportunidades para ser de bendicin, nimo y alegra a aquel individuo con quien te casaste. Y tambin disfrutars de lo mismo para ti. Problemas Comunes La seccin anterior trata los ajustes que tpicamente son la tarea de cada pareja recin casada. Vimos como los ajustes mal o no hechos conducen a problemas serios. En esta seccin cambiamos el ttulo pero a la verdad, continuamos hablando de ajustes que cada individuo tiene que hacer si quiere realizar el xito en su matrimonio y en su vida personal.
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Dejar Pblico. El dejar el hogar de los padres debe ser un acto atestiguado por la comunidad y las autoridades. El hombre y la mujer pblicamente toman votos de fidelidad y lealtad. Prometen serse fieles el uno al otro durante toda su vida. La pareja se comprometen para una tarea de toda una vida y as inician y mantienen la nueva familia. Si uno o ambos fallan en obedecer el mandato de Dios de dejar padre y madre, descubrirn una gran fuente de problemas, desacuerdos, tristezas y desdichas. Tal vez esta amonestacin te llega demasiado tarde. Tus suegros controlan a tu marido porque ustedes dependen de ellos en una manera econmica. Hoy en la maana le dijiste a tu esposa que no limpia la casa tan bien como lo hace tu mam. Ayer le dijiste a tu esposo que l no es tan trabajador y considerado como tu pap. Tu esposo se pasa la hora de la siesta dormido en un catre en el patio de sus padres. Tu esposa corre a llorarle a su mam cuando t y ella tienen desacuerdos. Ayer tuviste un desacuerdo con tu suegra y tu esposo apoy a su mam. Te pasas la mayora de tus das en casa con tu mam y no ests en casa cuando llega tu marido del trabajo. Sin duda alguna, el descuido de t y tu cnyuge en estas reas les ha trado bastantes desacuerdos, tensin emocional e infelicidad. Ahora qu hacer? Reconozcan que no han obedecido fielmente el mandato de Dios de dejar padre y madre. Confiesen sus errores los unos a los otros, pidiendo perdn. Explquenles a sus padres que estarn esforzndose por hacer las cosas en una manera ms bblica. Pdanles su apoyo en esto. Dejen a sus padres en las maneras detalladas en esta seccin. Suegros Difciles Eres varn. Tu suegro te critica porque no le provees a tu esposa suficientes cosas materiales. Tu suegra te mira mal porque no le llevas a su hija para que la visite cada semana. Eres mujer. Tu suegra no aprueba de cmo cuidas tu casa. Tu suegro piensa que malgastas el dinero que tu esposo gana a duras penas. Platica (con calma y sin acusacin) con tu cnyuge sobre lo que te dicen sus padres. Averigua si tu cnyuge piensa igual que ellos. En lo que seas culpable en estas o semejantes cosas, reconoce tus fallas ante tu cnyuge y toma las medidas necesarias para cambiar. Tambin tienes otra tarea. Tus padres son suegros de tu cnyuge y eso quiere decir que t tendrs que intervenir con tus padres si le causan problemas. En una manera respetuosa, considerada y amorosa, aclrales a tus padres que tu hogar no es responsabilidad de ellos sino de ustedes. Agradceles por su inters en tu bienestar y felicidad pero mustrales que atacando a tu cnyuge te roba de esas cosas. Pdeles que por favor dejen de tomar la contra con tu cnyuge. Es posible que uno o ambos de tus padres tengan que pedirle perdn por la manera en que le han tratado. Si ellos se quejan contigo por la manera en que te trata tu cnyuge o cmo se comporta, pdeles que por favor no lo hagan. T conoces bien las fallas de tu cnyuge y no necesitas que otras personas hagan tu matrimonio peor con sus observaciones. Siempre debes estar listo con cosas positivas que comentar en cuanto a tu cnyuge. No caigas en la trampa de quejarte con tus padres acerca de tu cnyuge! 50
Si tomas estos pasos, les ayudars a tus padres comportarse como suegros comprensivos, sabios y simpticos. Por otro lado, si tus suegros te causan dificultades, platica con tu cnyuge en cuanto a ello. No te irrites ni le acuses. Simplemente abre tu corazn y pdele su ayuda en solucionar la situacin. En todo esto, mustrate un ejemplo ante la oposicin y falta de comprensin de tus suegros. Apyate en Cristo, en su Palabra y en la oracin. El libro de Proverbios contiene magnficos consejos en cuanto a la lengua, los labios y la boca: "La boca del justo producir sabidura" (10.31). "Los labios del justo saben hablar lo que agrada; mas la boca de los impos habla perversidades" (10.32). "...La lengua de los sabios es medicina" (12.18). "La blanda respuesta quita la ira; mas la palabra spera hace subir el furor" (15.1). "La lengua apacible es rbol de vida; mas la perversidad de ella es quebrantamiento de espritu" (15.4). "...De Jehov es la respuesta de la lengua" (16.1). "El que guarda su boca y su lengua, su alma guarda de angustias" (21.23). "...La lengua blanda quebranta los huesos" (25.15). Cristo nos instruye a devolver bien por mal y a orar por los que nos maltratan (Mateo 5.43-46; compara estos versculos con Mateo 5.39; Romanos 12.14,17-21; 1 Tesalonicenses 5.15; 1 Pedro 3.9; Proverbios 20.22).
Prioridades Diferentes Una prioridad es algo que resulta muy importante y que viene antes que otras cosas. Las prioridades dan direccin y sentido a nuestras vidas. Tal vez haya tantas prioridades como hay personas; el caso es que son muy diversas. He aqu solamente unas poquitas de las que existen hoy en da:
El dinero
La comida El avance social Dios La familia El cnyuge La poltica La religin La bebida Los amigos La salud El sexo La ambicin La novia El trabajo La iglesia La satisfaccin El novio La baraja El deporte
En el transcurso de la vida, cada individuo desarrolla sus propias prioridades. Cada persona vive su vida y formula sus decisiones de acuerdo con esas prioridades. Eso est bien y es normal. Pero puede causar problemas cuando dos personas con prioridades diferentes viven juntas...como sucede en la mayora de los matrimonios. Imagina el conflicto que se puede desarrollar entre cnyuges si l opina que un naranjo es ms importante que un rosal y ella piensa lo contrario. Qu rbol o mata pondrn en ese lugar junto a la casa? Y qu problemas enfrentarn si ella desea comprar una tina ms grande y l insiste en un guante de bisbol nuevo! Cmo gastarn el aguinaldo? 51
Cuando existe falta de madurez en uno o en ambos cnyuges, aun dificultades pequeas como stas resultan difciles de resolver correctamente. A la verdad, este tipo de conflicto no es gran cosa y fcil se soluciona. El naranjo es til pues produce algo comestible; el rosal agrada a los ojos y al olfato. Cada cnyuge considera estas cosas en una manera objetiva, aade una dosis grande de amor y determina agradar al otro. O por otro lado, pueden decidirse a plantar un naranjo y tambin un rosal. Ahora el problema de la tina y el guante. Que se sienten juntos a determinar cual cosa necesitan ms. Es posible que ni la tina ni el guante sea necesario; de seguro que la tina es ms til que el guante. Tal vez sera mejor ahorrar el aguinaldo. Lo que no deben hacer es rebajarse a atacar y menospreciar la persona, los intereses y las prioridades del otro. Pero qu debes hacer cuando tus prioridades no concuerdan con las de tu cnyuge en reas crticas de la vida? Qu debes hacer cuando tu cnyuge le da ms importancia a sus padres que a ti? Qu debes hacer cuando tu cnyuge le da ms importancia a su trabajo que a la iglesia? Qu debes hacer cuando tu cnyuge le da ms importancia a sus hijos que a la iglesia? Qu debes hacer cuando tu cnyuge le da ms importancia al juego de ftbol que a la lectura bblica? Qu debes hacer cuando tu cnyuge piensa que es ms importante diezmar que comprar una manguera nueva? Qu debes hacer cuando tu cnyuge piensa que es ms importante no tener zapatos nuevos que comprarlos a crdito? Sera bueno si ustedes dos tomaran tiempo para marcar sus prioridades en orden de importancia.
DIOS CONYUGE TRABAJO IGLESIA HIJOS PADRES VECINOS PARIENTES CARNE FRIJOLES SODAS CAF AGUA PAPAS VERDURAS DULCES ROPA AGUA POTABLE
DIEZMO DEPORTE ALIMENTO SEXO NECESIDADES MATERIALES NINGUNA DEUDA ALBERGUE ORACION Y LECTURA BIBLICA ROSAL NARANJO HORTALIZA CAMA SILLA MECEDORA JABON PRIVADO REGADERA ELECTRICIDAD ESTUFA
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