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El Sanctum Celestial

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Liber 777-Sanctum Celestial (Orden Rosacruz AMORC)

Todos los hombres buscan la felicidad, pero muchos no saben cmo encontrarla. Esto sucede porque la mayor parte de ellos se imaginan que est en el bienestar material.

Por el contrario, una minora est convencida de que una vida exclusivamente orientada hacia la espiritualidad es lo que la hace posible. De hecho ni una ni otra de estas dos maneras de concebir la existencia es la ideal, ya que la felicidad reside en un estado de equilibrio perfecto entre nuestros deseos materiales y nuestras aspiraciones espirituales.

Por ello, la mejor va que puede conducir a este estado es la del misticismo que, por definicin, es el estudio y la aplicacin del lazo armnico que une al hombre con el Dios al que es capaz de sentir y comprender. Para el hombre de carne y hueso, la nica forma de vivir plenamente este lazo es mantenerse en armona consigo mismo, con los dems y con el entorno natural.

La armona con uno mismo

La armona que debemos mantener en relacin con nosotros mismos concierne a nuestro cuerpo, nuestra

mente y nuestras emociones. Es evidente que si violamos continuamente las leyes naturales que obran en nuestro cuerpo, no podemos mantenernos con buena salud. Debemos por tanto esforzarnos siempre en tratar a nuestro organismo con el mayor respeto y no comprometer por negligencia la armona a la que tiene derecho. Una nutricin mal equilibrada o excesiva, una falta de reposo, una insuficiencia de ejercicio, son algunos de los elementos fsicos que perturban el equilibrio de nuestro cuerpo. El mismo principio se aplica a nuestra mente. El hecho de vivir en el plano terrestre, nos obliga a utilizar facultades objetivas y subjetivas. La razn es una de las ms importantes de ellas, ya que a partir de nuestros juicios, condicionamos nuestra vida cotidiana.

Cuanto ms la aplicamos a reflexiones sanas y tiles, ms hacemos de ella lo que debe ser, es decir un instrumento destinado a expresar lo mejor de nosotros mismos. Si la sometemos a examinar cosas banales e impuras, rompemos el lazo armnico que debe unirla a los impulsos de nuestra alma. Es importante por ello reflexionar siempre sobre temas dignos de consideracin para un mstico. Leer obras interesantes, ver pelculas enriquecedoras, meditar sobre los grandes problemas de la existencia, son tipos de actividad que permiten mantener la armona en nuestra mente. En el dominio de las emociones hay que recordar que los sentimientos basados en la clera, el orgullo, los celos, la maldad, etc., trastornan considerablemente nuestro bienestar emocional y por consiguiente, nuestro equilibrio fsico. Sin llegar a los extremos que acabamos de mencionar, los sentimientos de temor, ansiedad o angustia, son igualmente nefastos para la armona general que debe prevalecer sobre todos los planos de nuestro ser.

Debemos por lo tanto hacer todo lo posible para vibrar al ritmo de emociones puras y constructivas, ya que no se puede conocer la Paz Profunda mientras seamos prisioneros de reacciones emocionales discordantes.

La armona con los dems

En la introduccin a este libreto, nos hemos referido a la armona que es necesario mantener entre nosotros mismos y los dems. Es imposible evolucionar e incluso vivir, sin establecer contactos frecuentes con nuestros semejantes. El hombre como ser viviente no es tan autnomo como puede creerse. La vida comunitaria es una necesidad para l, ya que ningn individuo, por muy independiente que sea, puede vivir feliz y desarrollarse plenamente sin satisfacer su necesidad innata de comunicacin. Su instinto gregario es el que ha empujado al hombre a vivir en sociedad, ya hacer de esta sociedad la garanta de su bienestar familiar. Y ya que nos necesitamos los unos a los otros, es importante que nuestras relaciones con los dems no estn nunca basadas en principios de fuerza o dominacin. Dicho de otra forma, debemos hacer todo lo posible para preservar la armona en nuestra familia y vivir en buenas relaciones con todos aquellos a quienes debemos tratar, ya sea en el plano familiar o profesional, o en el cuadro ms genrico de la colectividad humana. No hay nada ms penoso, en nuestro interior, que vivir continuamente en un ambiente conflictivo. Toda situacin de discordia entre uno mismo y los dems debe ser evitada, ya que lleva en ella misma el germen de todas las guerras que asolan al mundo. La armona debe ser la regla de oro de la vida familiar y social. Esto no quiere decir que todos los individuos deban pensar, hablar y comportarse de igual manera, ya que la uniformidad es enemiga de la evolucin. Esto significa simplemente que debemos vivir juntos en un respeto mutuo, con el deseo de poner nuestras diferencias de opinin y de comportamiento al servicio de los dems.

La armona con la naturaleza

Examinemos ahora la armona que debemos mantener entre nosotros mismos y nuestro entorno natural. Este punto es tan evidente que no debera necesitar ningn comentario. Desgraciadamente, basta mirar a nuestro alrededor para darnos cuenta de hasta qu punto el hombre, por pereza, por negligencia o por inters, no

titubea en alterar el equilibrio ecolgico de su propio entorno. La naturaleza tiene sin embargo sus derechos y el hombre, ante ella, no tiene ms que deberes. Mientras no comprenda esta ley, continuar destruyendo o comprometiendo su propio entorno, hasta el da en que individual y colectivamente sufra las consecuencias de sus actos, si es que no ha empezado ya a sufrirlas. Es por esto, por lo que cada ser humano debe tomar consciencia de que no se puede alterar impunemente el orden natural al que debemos toda la vida. Este orden natural prevaleca mucho antes de que el hombre apareciera sobre la Tierra, y no hay ninguna duda de que prevalecer despus de su desaparicin, a menos, por supuesto, que nuestro planeta sea destruido en un definitivo apocalipsis. El misticismo, una vez ms, es el camino real que debe permitir a los hombres reconciliarse con la Naturaleza. Sin esta reconciliacin, la humanidad est avocada a la autodestruccin, pues tengamos o no consciencia de ello, todo atentado infringido a su entorno natural, la priva de una parte de si misma.

Para resumir lo esencial de esta introduccin al "Liber 777", diremos que la felicidad es la medida de la armona que el hombre es capaz de manifestar ante si mismo, los dems y su entorno. Mientras ms consciencia tenga de lo que esta armona representa para el bienestar personal, mayor ser el deseo y la necesidad de mantenerla a su alrededor y en su entorno natural. Por ello, la experiencia prueba que todo individuo que realiza esta toma de consciencia, comprende que no existen varias clases de armonas, sino una sola y nica Armona Csmica que se manifiesta en diferentes planos y en diversos aspectos.

EL SANCTUM CELESTIAL

La definicin del Sanctum Celestial Una de las metas de la filosofa Rosacruz es la de dar a cada ser humano los medios para vivir la Armona Csmica, en los planos fsico, mental, emocional y espiritual. Las enseanzas msticas que los rosacruces reciben en el marco de su afiliacin contribuyen a ello ampliamente. Pero para permitirles obtener una armonizacin total con las fuerzas universales ms positivas, la Orden Rosacruz, como consecuencia de su naturaleza tradicional e inicitica integra en su EGREGOR un conjunto de energa csmica, del cual se puede uno beneficiar cuando se conoce el medio de establecer contacto con l.

Este campo de energa que no est limitado ni en el tiempo ni en el espacio, constituye lo que la tradicin Rosacruz designa bajo el nombre de "Sanctum Celestial".

Para los rosacruces, el Sanctum Celestial representa el plano de consciencia ms elevado al que pueden llegar armonizndose interiormente con el Csmico. Desde el punto de vista de las vibraciones, este plano de consciencia es la expresin virtual de lo que la Rosacruz, en tanto que ideal filosfico y mstico, pone de ms puro al servicio del hombre. Por esta razn podemos considerar que el Sanctum Celestial es el dominio de la purificacin, de la regeneracin, de la revelacin y de la iluminacin. y esto es as porque todo contacto que se establece con l pone al alma humana en resonancia con la Gran Alma Universal y con todo el potencial de fuerza y sabidura contenida en ella. Para los miembros de la Orden Rosacruz, constituye una pirmide de ideales y de virtudes, y es la cima simblica de esta pirmide donde se sitan los Maestros Csmicos que velan sobre la tradicin Rosacruz. Por este motiva, es por lo que la mayor parte de las experiencias msticas que efectan los rosacruces a lo largo de sus estudios privados, se sitan en el nivel del Sanctum Celestial.

La visualizacin del Sanctum Celestial

El Sanctum Celestial, como acabamos de sealar, no es un lugar propiamente dicho. Sin embargo, es bien sabido lo difcil que es para la mente humana concebir en lo abstracto un campo de energa csmica.

Por ello el doctor H. Spencer Lewis, imperator de AMORC de 1915 a 1939, elabor una tcnica que permite fundirse conscientemente en ese campo de energa. Esta tcnica, como el mismo frater Lewis dijo, no es fruto de sus propios pensamientos, sino que le fue revelada csmicamente durante un contacto que estableci el mismo con este plano de alta espiritualidad al que llam "Sanctum Celestial". La experiencia mstica que vivi entonces, fue tan profunda, tan inspiradora, que hizo todo lo posible para renovarla siguiendo las revelaciones que haba recibido durante esta sublime comunin csmica.

Finalmente consider un deber el hacerla accesible a todos, traducindola a una forma lo ms simple posible. Sus esfuerzos han sido recompensados pues nos ha legado la herencia del mtodo a seguir para tener acceso al Sanctum Celestial.

Antes de utilizar este mtodo, es necesario que ustedes conciban su propia visualizacin del Sanctum Celestial, ya que es imposible ser consciente de algo que se es incapaz de definir. En esto, cada uno puede elegir su propia manera de imaginar este lugar simblico. Algunos rosacruces lo ven bajo la forma de una catedral, otros con el aspecto de una mezquita, de una sinagoga o de cualquier otro edificio consagrado a una religin particular; hay otros que prefieren concebirlo bajo el aspecto de un paisaje inspirador. Sin embargo la mayor parte de ellos lo visualizan bajo la forma de un templo de la Rosacruz. De hecho, hay tantas maneras de imaginar el Sanctum Celestial, como de individuos que manifiestan el deseo de encontrarse en l. Lo importante, es que la visualizacin de este alto lugar csmico haga nacer en ustedes las emociones ms bellas ante el encuentro con el Divino.

La elevacin hacia el Sanctum Celestial

Cada vez que deseen elevarse hacia el Sanctum Celestial, es decir hacia el plano de consciencia ms alto al que pueda llegar para recibir los favores del Csmico, procedan de la manera siguiente:

- Lvese 1as manos como signo de purificacin corporal, y squelas bien. Beba a continuacin un vaso de agua para simbolizar su deseo de estar lo ms puro posible en su interior. Cuanta mayor humildad expresen

sus actos y sus pensamientos de respeto hacia el Csmico, mayores sern las condiciones ideales que rena para una armonizacin consciente con el Sanctum Celestial.

- Hecho esto, sintese en un lugar tranquilo, la espalda erguida y los pies bien posados en el suelo, ligeramente separados uno del otro. Ponga sus manos sobre las rodillas, cierre los ojos y recite mentalmente la invocacin siguiente:

"Que la sublime esencia csmica penetre mi ser y me purifique de toda impureza de pensamiento y de cuerpo, para permitirme entrar en el Sanctum Celestial y comulgar en l con toda pureza y en perfecta dignidad. Que as sea!"

Esta invocacin, como pueden comprobar, no tiene ninguna relacin religiosa o sectaria. Su meta es simplemente expresar al Csmico su deseo de entrar conscientemente en el Sanctum Celestial, para comulgar con la sabidura que ste simboliza en el plano mstico. Adems, sita su comunin bajo la proteccin del EGREGOR de la Rosacruz, de manera que ninguna influencia negativa pueda ejercerse sobre usted mientras se encuentre en este estado interior.

- Despus de haber recitado esta invocacin, efecte algunas respiraciones profundas para que pueda relajarse bien. Para ello aspire y expire profundamente por la nariz de una manera regular e ininterrumpida.

- Cuando se encuentre completamente relajado, vuelva a la respiracin normal y comience a imaginar que se eleva mentalmente hacia su Sanctum Celestial. Dicho de otra forma, visualice que se est elevando por encima de la habitacin en la que se encuentra, de su casa, de su ciudad, de su pas, hasta el momento, en que alejndose ms y ms de la Tierra, no la divise ms que como una esfera dando vueltas lentamente en el espacio.

- Vuelva ahora su mirada hacia el Csmico infinita y contine su ascensin espiritual, hasta percibir el Sanctum Celestial tal como usted ha decidido visualizarlo. En este momento es cuando debe imaginarlo bajo la forma de una catedral, de una mezquita, de una sinagoga, de un templo, de un paisaje, etc. El solo hecho de verlo de esta manera, dirigido hacia el cosmos y baado en luz astral, debe proporcionarle una alegra interior indescriptible.

- Si ha elegido visualizar su Sanctum Celestial baja la forma de un edificio, imagnese ahora que est penetrando en su interior y que va a sentarse al lugar que ha escogido.

All, perfectamente relajado, contemple mentalmente las maravillas que se ofrecen ante usted: las vidrieras, las esculturas, las pinturas, las estatuas, las columnas, y de manera general, todos los elementos que constituyen la decoracin que suele encontrarse en un lugar consagrado a la oracin y a la meditacin. A esta belleza visual, puede aadirle la impresin muy neta de escuchar una msica particularmente inspiradora.

Tambin puede imaginar que un olor a incienso impregna el lugar en el que se encuentra mentalmente. En una palabra, la visualizacin del Sanctum Celestial debe conducirle a perder completamente la consciencia del mundo terrenal y a habitar en el plano del alma.

Todos sus pensamientos y emociones deben estar impregnados de una gran serenidad y de un bienestar que ninguna satisfaccin fsica sera capaz de proporcionar.

- Si prefiere visualizar su Sanctum bajo la forma de un paisaje, en el ltimo momento de la ascensin, debe fundirse totalmente con l, como si existiera realmente. Dicho de otra forma, es necesario que imagine que se encuentra en un bosque, al lado de un ro o de un lago, en medio de una pradera, y en general, dentro del encuadre natural que ha elegido para su visualizacin. Una vez all, es importante que su consciencia incluya colores, perfumes, ruidos, etc. . . Por ejemplo, puede imaginar el azul del cielo, el olor de las flores, el canto de los pjaros, el soplo del viento, etc. Lo que importa, como hemos explicado anteriormente, es que pierda la consciencia objetiva de su cuerpo fsico y de su entorno terrestre, ya que esto es la condicin necesaria para recibir del Csmico el influjo de sus vibraciones ms sutiles.

- Cuando se encuentre en su Sanctum Celestial, djese impregnar totalmente por el ambiente sagrado, inspirador y reconfortante a la vez que all reina. Impregnados cuerpo y alma en este ambiente, ha llegado el momento de expresar al Dios de nuestro corazn las razones que le han conducido a retirarse a este lugar de alta espiritualidad.

Si se trata de un problema de salud, evquelo mentalmente, como si usted formara parte de la inteligencia csmica ms pura que pueda concebir. Haga lo mismo s su presencia en el Sanctum se debe a un problema familiar, social, profesional o de otro tipo. Si su meta es simplemente rezar o meditar sobre un tema filosfico, hgalo en este encuadre armonioso y proceda tal como lo sienta.

- Despus de haber evocado mentalmente la razn que le ha conducido a elevarse hacia el Sanctum Celestial, no piense ms en ella, permaneciendo siempre en el estado armonioso que le caracteriza, pngase en un estado de total receptividad. Si lo consigue, es en ese momento cuando usted recibir el influjo csmico que le consolar, le curar, le inspirar, le traer la respuesta que busca, etc. . .

Esto no quiere decir que usted tendr consciencia inmediata de haber recibido este influjo, ya que ste se sita en un plano psquico que no se puede percibir objetivamente. Sin embargo, cuando pasen las horas o los das, podr medir gradualmente el impacto que esta comunin csmica ha tenido sobre usted y su entorno. En fin, podemos afirmar que este contacto espiritual se traduce siempre en efectos benficos. Esto se debe, a que a pesar de las apariencias, es imposible fracasar en la experiencia del Sanctum Celestial. Incluso aunque usted tenga la impresin de no haber tenido xito al elevarse hasta el plano de consciencia que l simboliza, sepa que se equivoca, ya que no es posible el fracaso al nivel del alma.

- Al trmino de este perodo de receptividad, vuelva progresivamente al plano objetivo. En otros trminos, vase mentalmente abandonando el Sanctum Celestial, y rehaga con la imaginacin el trayecto inverso al que sigui para elevarse hacia l. De vuelta a la consciencia objetiva, abra los ojos y diga la siguiente invocacin: "Que el Csmico santifique mi contacto con el Sanctum Celestial! Que as sea!"

Los perodos de elevacin hacia el Sanctum Celestial

En la definicin del Sanctum Celestial, hemos precisado que no era un lugar, sino un campo de energa csmica, un nivel de alta espiritualidad, un plano de consciencia muy elevado que transciende totalmente los lmites del tiempo y el espacio. Esto significa que es posible elevarse hacia l en cualquier momento del da y sin importar el lugar.

En tras palabras, no hay una hora precisa que respetar para trasladarse al Sanctum Celestial. En el momento en que uno siente el deseo o la necesidad, si no hay nada que se oponga desde el punto de vista humano, sus puertas se mantienen abiertas de par en par en todo momento del da y de la noche. En este mismo orden de ideas, tampoco es necesario encontrarse en una iglesia, mezquita, sinagoga o cualquier otro templo terrestre para efectuar esta experiencia. Para este fin, la nica condicin a cumplir es la de estar solo y disponer de un lugar de calma y tranquilidad. Podemos incluso aadir que es posible efectuarlo por la noche al acostarse antes de dormirse. De hecho, es lo que hacen la mayor parte de los rosacruces, pues la prctica les ha probado, que a una comunin de este tipo le sigue un mejor descanso, y, a veces, sueos particularmente msticos.

Es evidente que no deben acudir a su Sanctum Celestial nicamente cuando deben afrontar cualquier problema, tanto si se refiere a su salud o a otras dificultades ms materiales. Cada vez que sepan que otra persona necesita su ayuda, deben acudir a l en consciencia para pedir al Csmico que le conceda su sostn y su inspiracin. Si lo hacen en una actitud de perfecta sinceridad, se darn cuenta de hasta que punto es eficaz esta forma de ayudar a los dems. En otro orden de ideas, pueden tambin efectuar esta experiencia slo por el placer interior que produce.

Dicho de otra forma, es posible elevarse hacia el Sanctum Celestial sin ninguna razn concreta. En este caso el csmico nos concede las gracias que considere mejor dispensarnos. En realidad, siempre tenemos al menos una razn para querer alcanzar este estada de consciencia particular: Rogar por la felicidad de los dems y por la paz de la tierra.

Anteriormente, hemos explicado que cada uno posee su propio Sanctum Celestial, pues la concepcin que de l tenemos vara de unos individuos a otros. Sin embargo, de manera absoluta, es importante entender que el plano espiritual en el que est situado, es el mismo para todos los que en l se encuentren en un momento determinado. Esto quiere decir que la manera de alcanzar el Sanctum Celestial es individual, pero que todos los que a l llegan se encuentran en realidad en el mismo campo de energa csmica.

Por consiguiente, tengamos o no consciencia de ello, no estamos nunca solos en el Sanctum Celestial. En efecto, entre todos los rosacruces del mundo, hay siempre alguien que, a cualquier hora del da o de la noche, se elevan hacia las alturas para orar, meditar, recogerse a solicitar la ayuda del csmico. Por esto es por lo que numerosos encuentros tienen lugar al nivel del Sanctum Celestial. De hecho, es este lugar simblico el que la mayor parte de los rosacruces utilizan para comunicarse con los Maestros Csmicos u otros miembros del rosacrucismo.

Qu el Csmico gue para siempre sus pasos por el camino de la Paz Profunda y que el Sanctum Celestial sea para usted el medio ideal para encontrar este camino!

Imgenes tomadas de:

http://vigilantcitizen.com/wp-content/uploads/2009/05/15b-300.jpg http://www.amorc.org.au/admin200/imagelibrary/LIBER777.JPG

EL SANCTUM CELESTIAL Magister Rosae Crucis AMORC INTRODUCCION

Todos los hombres buscan la felicidad, pero muchos no saben cmo encontrarla. Esto sucede porque la mayor parte de ellos se imaginan que est en el bienestar material. Por el contrario, una minora est convencida de que una vida exclusivamente orientada hacia la espiritualidad es lo que la hace posible. De hecho ni una ni otra de estas dos maneras de concebir la existencia es la ideal, ya que la felicidad reside en un estado de equilibrio perfecto entre nuestros deseos materiales y nuestras aspiraciones espirituales. Por ello, la mejor va que puede conducir a este estado es la del misticismo que, por definicin, es el estudio y la aplicacin del lazo armnico que une al hombre con el Dios al que es capaz de sentir y comprender. Para el hombre de carne y hueso, la nica forma de vivir plenamente este lazo es mantenerse en armona consigo mismo, con los dems y con el entorno natural. La armona con uno mismo

La armona que debemos mantener en relacin con nosotros mismos concierne a nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestras emociones. Es evidente que si violamos continuamente las leyes naturales que obran en nuestro cuerpo, no podemos mantenernos con buena salud. Debemos por tanto esforzarnos siempre en tratar a nuestro organismo con el mayor respeto y no comprometer por negligencia la armona a la que tiene derecho. Una nutricin mal equilibrada o excesiva, una falta de reposo, una insuficiencia de ejercicio, son algunos de los elementos fsicos que perturban el equilibrio de nuestro cuerpo. El mismo principio se aplica a nuestra mente. El hecho de vivir en el plano terrestre, nos obliga a utilizar facultades objetivas y subjetivas. La razn es una de las ms importantes de ellas, ya que a partir de nuestros juicios, condicionamos nuestra vida cotidiana. Cuanto ms la aplicamos a reflexiones sanas y tiles, ms hacemos de ella lo que debe ser, es decir un instrumento destinado a expresar lo mejor de nosotros mismos. Si la sometemos a examinar cosas banales e impuras, rompemos el lazo armnico que debe unirla a los impulsos de nuestra alma. Es importante por ello reflexionar siempre sobre temas dignos de consideracin para un mstico. Leer obras interesantes, ver pelculas enriquecedoras, meditar sobre los grandes problemas de la existencia, son tipos de actividad que permiten mantener la armona en nuestra mente. En el dominio de las emociones hay que recordar que los sentimientos basados en la clera, el orgullo, los celos, la maldad, etc., trastornan considerablemente nuestro bienestar emocional y por consiguiente, nuestro equilibrio fsico. Sin llegar a los extremos que acabamos de mencionar, los sentimientos de temor, ansiedad o angustia, son igualmente nefastos para la armona general que debe prevalecer sobre todos los planos de nuestro ser. Debemos por lo tanto hacer todo lo posible para vibrar al ritmo de emociones puras y constructivas, ya que no se puede conocer la Paz Profunda mientras seamos prisioneros de reacciones emocionales discordantes. La armona con los dems En la introduccin a este libreto, nos hemos referido a la armona que es necesario mantener entre nosotros mismos y los dems. Es imposible evolucionar e incluso vivir, sin establecer contactos frecuentes con

nuestros semejantes. El hombre como ser viviente no es tan autnomo como puede creerse. La vida comunitaria es una necesidad para l, ya que ningn individuo, por muy independiente que sea, puede vivir feliz y desarrollarse plenamente sin satisfacer su necesidad innata de comunicacin. Su instinto gregario es el que ha empujado al hombre a vivir en sociedad, ya hacer de esta sociedad la garanta de su bienestar familiar. Y ya que nos necesitamos los unos a los otros, es importante que nuestras relaciones con los dems no estn nunca basadas en principios de fuerza o dominacin. Dicho de otra forma, debemos hacer todo lo posible para preservar la armona en nuestra familia y vivir en buenas relaciones con todos aquellos a quienes debemos tratar, ya sea en el plano familiar o profesional, o en el cuadro ms genrico de la colectividad humana. No hay nada ms penoso, en nuestro interior, que vivir continuamente en un ambiente conflictivo. Toda situacin de discordia entre uno mismo y los dems debe ser evitada, ya que lleva en ella misma el germen de todas las guerras que asolan al mundo. La armona debe ser la regla de oro de la vida familiar y social. Esto no quiere decir que todos los individuos deban pensar, hablar y comportarse de igual manera, ya que la uniformidad es enemiga de la evolucin. Esto significa simplemente que debemos vivir juntos en un respeto mutuo, con el deseo de poner nuestras diferencias de opinin y de comportamiento al servicio de los dems. La armona con la naturaleza Examinemos ahora la armona que debemos mantener entre nosotros mismos y nuestro entorno natural. Este punto es tan evidente que no debera necesitar ningn comentario. Desgraciadamente, basta mirar a nuestro alrededor para darnos cuenta de hasta qu punto el hombre, por pereza, por negligencia o por inters, no titubea en alterar el equilibrio ecolgico de su propio entorno. La naturaleza tiene sin embargo sus derechos y el hombre, ante ella, no tiene ms que deberes. Mientras no comprenda esta ley, continuar destruyendo o comprometiendo su propio entorno, hasta el da en que individual y colectivamente sufra las consecuencias de sus actos, si es que no ha empezado ya a sufrirlas. Es por esto, por lo que cada ser humano debe tomar consciencia de que no se puede alterar impunemente el orden natural al que debemos toda la

vida. Este orden natural prevaleca mucho antes de que el hombre apareciera sobre la Tierra, y no hay ninguna duda de que prevalecer despus de su desaparicin, a menos, por supuesto, que nuestro planeta sea destruido en un definitivo apocalipsis. El misticismo, una vez ms, es el camino real que debe permitir a los hombres reconciliarse con la Naturaleza. Sin esta reconciliacin, la humanidad est avocada a la autodestruccin, pues tengamos o no consciencia de ello, todo atentado infringido a su entorno natural, la priva de una parte de si misma. Para resumir lo esencial de esta introduccin al "Liber 777", diremos que la felicidad es la medida de la armona que el hombre es capaz de manifestar ante si mismo, los dems y su entorno. Mientras ms consciencia tenga de lo que esta armona representa para el bienestar personal, mayor ser el deseo y la necesidad de mantenerla a su alrededor y en su entorno natural. Por ello, la experiencia prueba que todo individuo que realiza esta toma de consciencia, comprende que no existen varias clases de armonas, sino una sola y nica Armona Csmica que se manifiesta en diferentes planos y en diversos aspectos. EL SANCTUM CELESTIAL La definicin del Sanctum Celestial Una de las metas de la filosofa Rosacruz es la de dar a cada ser humano los medios para vivir la Armona Csmica, en los planos fsico, mental, emocional y espiritual. Las enseanzas msticas que los rosacruces reciben en el marco de su afiliacin contribuyen a ello ampliamente. Pero para permitirles obtener una armonizacin total con las fuerzas universales ms positivas, la Orden Rosacruz, como consecuencia de su naturaleza tradicional e inicitica integra en su EGREGOR un conjunto de energa csmica, del cual se puede uno beneficiar cuando se conoce el medio de establecer contacto con l. Este campo de energa que no est limitado ni en el tiempo ni en el espacio, constituye lo que la tradicin Rosacruz designa bajo el nombre de "Sanctum Celestial". Para los rosacruces, el Sanctum Celestial representa el plano de consciencia ms elevado al que pueden llegar armonizndose interiormente con el Csmico. Desde el punto de vista de las

vibraciones, este plano de consciencia es la expresin virtual de lo que la Rosacruz, en tanto que ideal filosfico y mstico, pone de ms puro al servicio del hombre. Por esta razn podemos considerar que el Sanctum Celestial es el dominio de la purificacin, de la regeneracin, de la revelacin y de la iluminacin. y esto es as porque todo contacto que se establece con l pone al alma humana en resonancia con la Gran Alma Universal y con todo el potencial de fuerza y sabidura contenida en ella. Para los miembros de la Orden Rosacruz, constituye una pirmide de ideales y de virtudes, y es la cima simblica de esta pirmide donde se sitan los Maestros Csmicos que velan sobre la tradicin Rosacruz. Por este motiva, es por lo que la mayor parte de las experiencias msticas que efectan los rosacruces a lo largo de sus estudios privados, se sitan en el nivel del Sanctum Celestial. La visualizacin del Sanctum Celestial El Sanctum Celestial, como acabamos de sealar, no es un lugar propiamente dicho. Sin embargo, es bien sabido lo difcil que es para la mente humana concebir en lo abstracto un campo de energa csmica. Por ello el doctor H. Spencer Lewis, imperator de AMORC de 1915 a 1939, elabor una tcnica que permite fundirse conscientemente en ese campo de energa. Esta tcnica, como el mismo frater Lewis dijo, no es fruto de sus propios pensamientos, sino que le fue revelada csmicamente durante un contacto que estableci el mismo con este plano de alta espiritualidad al que llam "Sanctum Celestial". La experiencia mstica que vivi entonces, fue tan profunda, tan inspiradora, que hizo todo lo posible para renovarla siguiendo las revelaciones que haba recibido durante esta sublime comunin csmica. Finalmente consider un deber el hacerla accesible a todos, traducindola a una forma lo ms simple posible. Sus esfuerzos han sido recompensados pues nos ha legado la herencia del mtodo a seguir para tener acceso al Sanctum Celestial. Antes de utilizar este mtodo, es necesario que ustedes conciban su propia visualizacin del Sanctum Celestial, ya que es imposible ser consciente de algo que se es incapaz de definir. En esto, cada uno puede

elegir su propia manera de imaginar este lugar simblico. Algunos rosacruces lo ven bajo la forma de una catedral, otros con el aspecto de una mezquita, de una sinagoga o de cualquier otro edificio consagrado a una religin particular; hay otros que prefieren concebirlo bajo el aspecto de un paisaje inspirador. Sin embargo la mayor parte de ellos lo visualizan bajo la forma de un templo de la Rosacruz. De hecho, hay tantas maneras de imaginar el Sanctum Celestial, como de individuos que manifiestan el deseo de encontrarse en l. Lo importante, es que la visualizacin de este alto lugar csmico haga nacer en ustedes las emociones ms bellas ante el encuentro con el Divino. La elevacin hacia el Sanctum Celestial Cada vez que deseen elevarse hacia el Sanctum Celestial, es decir hacia el plano de consciencia ms alto al que pueda llegar para recibir los favores del Csmico, procedan de la manera siguiente: - Lvese 1as manos como signo de purificacin corporal, y squelas bien. Beba a continuacin un vaso de agua para simbolizar su deseo de estar lo ms puro posible en su interior. Cuanta mayor humildad expresen sus actos y sus pensamientos de respeto hacia el Csmico, mayores sern las condiciones ideales que rena para una armonizacin consciente con el Sanctum Celestial. - Hecho esto, sintese en un lugar tranquilo, la espalda erguida y los pies bien posados en el suelo, ligeramente separados uno del otro. Ponga sus manos sobre las rodillas, cierre los ojos y recite mentalmente la invocacin siguiente: "Que la sublime esencia csmica penetre mi ser y me purifique de toda impureza de pensamiento y de cuerpo, para permitirme entrar en el Sanctum Celestial y comulgar en l con toda pureza y en perfecta dignidad. Que as sea!" Esta invocacin, como pueden comprobar, no tiene ninguna relacin religiosa o sectaria. Su meta es simplemente expresar al Csmico su deseo de entrar conscientemente en el Sanctum Celestial, para comulgar con la sabidura que ste simboliza en el plano mstico. Adems, sita su

comunin bajo la proteccin del EGREGOR de la Rosacruz, de manera que ninguna influencia negativa pueda ejercerse sobre usted mientras se encuentre en este estado interior. - Despus de haber recitado esta invocacin, efecte algunas respiraciones profundas para que pueda relajarse bien. Para ello aspire y expire profundamente por la nariz de una manera regular e ininterrumpida. - Cuando se encuentre completamente relajado, vuelva a la respiracin normal y comience a imaginar que se eleva mentalmente hacia su Sanctum Celestial. Dicho de otra forma, visualice que se est elevando por encima de la habitacin en la que se encuentra, de su casa, de su ciudad, de su pas, hasta el momento, en que alejndose ms y ms de la Tierra, no la divise ms que como una esfera dando vueltas lentamente en el espacio. - Vuelva ahora su mirada hacia el Csmico infinita y contine su ascensin espiritual, hasta percibir el Sanctum Celestial tal como usted ha decidido visualizarlo. En este momento es cuando debe imaginarlo bajo la forma de una catedral, de una mezquita, de una sinagoga, de un templo, de un paisaje, etc. El solo hecho de verlo de esta manera, dirigido hacia el cosmos y baado en luz astral, debe proporcionarle una alegra interior indescriptible. - Si ha elegido visualizar su Sanctum Celestial baja la forma de un edificio, imagnese ahora que est penetrando en su interior y que va a sentarse al lugar que ha escogido. All, perfectamente relajado, contemple mentalmente las maravillas que se ofrecen ante usted: las vidrieras, las esculturas, las pinturas, las estatuas, las columnas, y de manera general, todos los elementos que constituyen la decoracin que suele encontrarse en un lugar consagrado a la oracin y a la meditacin. A esta belleza visual, puede aadirle la impresin muy neta de escuchar una msica particularmente inspiradora. Tambin puede imaginar que un olor a incienso impregna el lugar en el que se encuentra mentalmente. En una palabra, la visualizacin del Sanctum Celestial debe conducirle a perder completamente la consciencia del mundo terrenal y a habitar en el plano

del alma. Todos sus pensamientos y emociones deben estar impregnados de una gran serenidad y de un bienestar que ninguna satisfaccin fsica sera capaz de proporcionar. - Si prefiere visualizar su Sanctum bajo la forma de un paisaje, en el ltimo momento de la ascensin, debe fundirse totalmente con l, como si existiera realmente. Dicho de otra forma, es necesario que imagine que se encuentra en un bosque, al lado de un ro o de un lago, en medio de una pradera, y en general, dentro del encuadre natural que ha elegido para su visualizacin. Una vez all, es importante que su consciencia incluya colores, perfumes, ruidos, etc. . . Por ejemplo, puede imaginar el azul del cielo, el olor de las flores, el canto de los pjaros, el soplo del viento, etc. Lo que importa, como hemos explicado anteriormente, es que pierda la consciencia objetiva de su cuerpo fsico y de su entorno terrestre, ya que esto es la condicin necesaria para recibir del Csmico el influjo de sus vibraciones ms sutiles. - Cuando se encuentre en su Sanctum Celestial, djese impregnar totalmente por el ambiente sagrado, inspirador y reconfortante a la vez que all reina. Impregnados cuerpo y alma en este ambiente, ha llegado el momento de expresar al Dios de nuestro corazn las razones que le han conducido a retirarse a este lugar de alta espiritualidad. Si se trata de un problema de salud, evquelo mentalmente, como si usted formara parte de la inteligencia csmica ms pura que pueda concebir. Haga lo mismo s su presencia en el Sanctum se debe a un problema familiar, social, profesional o de otro tipo. Si su meta es simplemente rezar o meditar sobre un tema filosfico, hgalo en este encuadre armonioso y proceda tal como lo sienta. - Despus de haber evocado mentalmente la razn que le ha conducido a elevarse hacia el Sanctum Celestial, no piense ms en ella, permaneciendo siempre en el estado armonioso que le caracteriza, pngase en un estado de total receptividad. Si lo consigue, es en ese momento cuando usted recibir el influjo csmico que le consolar, le curar, le inspirar, le traer la respuesta que busca, etc. . .

Esto no quiere decir que usted tendr consciencia inmediata de haber recibido este influjo, ya que ste se sita en un plano psquico que no se puede percibir objetivamente. Sin embargo, cuando pasen las horas o los das, podr medir gradualmente el impacto que esta comunin csmica ha tenido sobre usted y su entorno. En fin, podemos afirmar que este contacto espiritual se traduce siempre en efectos benficos. Esto se debe, a que a pesar de las apariencias, es imposible fracasar en la experiencia del Sanctum Celestial. Incluso aunque usted tenga la impresin de no haber tenido xito al elevarse hasta el plano de consciencia que l simboliza, sepa que se equivoca, ya que no es posible el fracaso al nivel del alma. - Al trmino de este perodo de receptividad, vuelva progresivamente al plano objetivo. En otros trminos, vase mentalmente abandonando el Sanctum Celestial, y rehaga con la imaginacin el trayecto inverso al que sigui para elevarse hacia l. De vuelta a la consciencia objetiva, abra los ojos y diga la siguiente invocacin: "Que el Csmico santifique mi contacto con el Sanctum Celestial! Que as sea!" Los perodos de elevacin hacia el Sanctum Celestial En la definicin del Sanctum Celestial, hemos precisado que no era un lugar, sino un campo de energa csmica, un nivel de alta espiritualidad, un plano de consciencia muy elevado que transciende totalmente los lmites del tiempo y el espacio. Esto significa que es posible elevarse hacia l en cualquier momento del da y sin importar el lugar. En tras palabras, no hay una hora precisa que respetar para trasladarse al Sanctum Celestial. En el momento en que uno siente el deseo o la necesidad, si no hay nada que se oponga desde el punto de vista humano, sus puertas se mantienen abiertas de par en par en todo momento del da y de la noche. En este mismo orden de ideas, tampoco es necesario encontrarse en una iglesia, mezquita, sinagoga o cualquier otro templo terrestre para efectuar esta experiencia. Para este fin, la nica condicin a cumplir es la de estar solo y disponer de un lugar de calma y tranquilidad. Podemos incluso aadir que es posible efectuarlo por la noche al acostarse antes de dormirse. De hecho, es lo que hacen la mayor parte de los rosacruces, pues la prctica les ha probado, que a una comunin de este tipo le sigue un mejor descanso, y, a veces,

sueos particularmente msticos. Es evidente que no deben acudir a su Sanctum Celestial nicamente cuando deben afrontar cualquier problema, tanto si se refiere a su salud o a otras dificultades ms materiales. Cada vez que sepan que otra persona necesita su ayuda, deben acudir a l en consciencia para pedir al Csmico que le conceda su sostn y su inspiracin. Si lo hacen en una actitud de perfecta sinceridad, se darn cuenta de hasta que punto es eficaz esta forma de ayudar a los dems. En otro orden de ideas, pueden tambin efectuar esta experiencia slo por el placer interior que produce. Dicho de otra forma, es posible elevarse hacia el Sanctum Celestial sin ninguna razn concreta. En este caso el csmico nos concede las gracias que considere mejor dispensarnos. En realidad, siempre tenemos al menos una razn para querer alcanzar este estada de consciencia particular: Rogar por la felicidad de los dems y por la paz de la tierra. Anteriormente, hemos explicado que cada uno posee su propio Sanctum Celestial, pues la concepcin que de l tenemos vara de unos individuos a otros. Sin embargo, de manera absoluta, es importante entender que el plano espiritual en el que est situado, es el mismo para todos los que en l se encuentren en un momento determinado. Esto quiere decir que la manera de alcanzar el Sanctum Celestial es individual, pero que todos los que a l llegan se encuentran en realidad en el mismo campo de energa csmica. Por consiguiente, tengamos o no consciencia de ello, no estamos nunca solos en el Sanctum Celestial. En efecto, entre todos los rosacruces del mundo, hay siempre alguien que, a cualquier hora del da o de la noche, se elevan hacia las alturas para orar, meditar, recogerse a solicitar la ayuda del csmico. Por esto es por lo que numerosos encuentros tienen lugar al nivel del Sanctum Celestial. De hecho, es este lugar simblico el que la mayor parte de los rosacruces utilizan para comunicarse con los Maestros Csmicos u otros miembros del rosacrucismo. Qu el Csmico gue para siempre sus pasos por el camino de la Paz

Profunda y que el Sanctum Celestial sea para usted el medio ideal para encontrar este camino!

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