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Poesía: Te Olvidaré Cada Día

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TE OLVIDARÉ

CADA DÍA

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 1


como rosa de los vientos,
sus múltiples reflejos hacen palpitar
la luz perdida en la memoria.

TE OLVIDARÉ CADA DÍA Y el círculo se cierra;


desde lo perplejo y diverso
el olvido crea un anillo de universo;
Te olvidaré antes del sueño. dentro está lo que he ganado
Al amanecer, mi empeño y lo precioso de lo que he perdido:
volverá a ser recordarte, tu voz, tus manos, tus besos.
en todo lo que es amarte.
Hallarte en el pensamiento, Desde hoy una promesa
de nuevo en el sentimiento. de lo que nunca ha sido:
Todo sea jovial suceso, te olvidaré cada día.
canto primordial del beso:
fuente y senda de poesía.
Te olvidaré cada día. 2
Mi tristeza mira los colores
alegres y dispersos en el atardecer.
1 Perdido en la complejidad absurda
Cuando todo se ha ido de una soledad no querida
sólo queda lo que nunca ha sido: se vuelve a escapar la belleza del día.
el vacío, la duda, y el olvido.
Agitación de nada En este laberinto de las horas
es son que lo ocupa todo. todas están llenas de vacilantes
Preguntas que no responden instantes,

son flor de inquietud. donde lo real es cubierto

Recuerdos que laceran por nubes de dudas e imaginación.

son estigmas de un tiempo


que maravilló al corazón: He querido levantar mi palabra,
mas algún diamante sombrío ha robado

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 2


la esencial luz de mi último pensamiento. las solitarias estrellas de la noche.

Y, mientras sondeo el arrebol celeste,


ahí está, tras un color púrpura, el 4
símbolo I
de la palabra que sacraliza los días. Escucha mis palabras silentes;
Tú la llevas en los ojos, oiré tus voces calladas.
yo...en algún lugar del corazón. ¡Al amor sus ecos!

Palabra creada para la vida. El silencio será verso,


Sólo dos manos unidas o se erguirá como espada
pueden escribir su verdadero nombre. entre tu y yo...
...entre tu y yo
siempre habrá dos combates:
3 dos, silencios contra silencios.
Calló en mi boca abierta
la palabra que te busca; Uno, supera a las sombras,
calló el único canto confronta corazones incrédulos.
del ave que alegra las auroras. En el otro,
bendecido por el silencio,
En el traslúcido cristal de los ojos se enfrentan dos miradas
queda grabado el silencio; que, callando, hablan
es mapa misterioso de una imagen: de las promesas de su cielo...
la del día que muere
abandonado, tembloroso y frío.

II
En esta tarde llueve; Con un silencio de aire...
es igual a la de ayer. con un silencio de primavera...
Sólo el hombre tiene sueños con un silencio final del canto...
para crear laberintos de amor con un silencio que une universos...
donde juegan, entre susurros, repite mi silencio su obsesión:

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 3


“te quiero, te quiero...” 6
Dime tu último pensamiento;
Y su eco se pierde ese que rastrea, ese que desea.
en este susurro de silencios. Dime que te gusta estar al sol
porque te busca y te acaricia.
Dime que te gusta el rojo de la rosa
5 porque así es la pasión del deseo.
Hoy podría oír tu voz: Dime con un susurro,
se me antoja lejana, o con silencio de amante,
remota, como luna ausente que están abiertas las puertas,
dando su luz a una esperanza. que el jardín está florido,
que el corazón es una rosa,
Duelen los ojos de mirar que la luna busca al sol.
lo que el corazón ve Dime que el amor
como dolor ajeno y cercano. quiere beber el aire de la noche
para dormir, plácidamente,
El futuro es hilo de sentimientos soñando con el aroma de la rosa.
enmarañados por el temor del olvido
quebrando el eco de los sueños.
Y el ovillo crece, lentamente, 7
postergando vivir la mañana. Digo amor y pronuncio tu nombre.
Digo te quiero y el corazón canta
Hoy podría oír tu silencio palabras de luz, ecos de plata,
en la voz de una caricia, sentimientos que la voz descubre.
y sentir de nuevo, muy dentro,
la fragancia esperanzadora Viento de cariño, aire sincero
de la flor que ama, recogiendo besos enlazados
desde el amanecer, entre labios ardientes, que unidos
a la lejana luna ausente de hoy. dicen que me quieres y te quiero.

La pasión diluye todo temor.

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 4


No hay soledad en el aliento, Mas el recuerdo siempre es
y el silencio dice lo que siento. firme esperanza
Pronuncio tu nombre: digo, amor. abriendo los ojos al amor.
8
Sol. Luna. Tú y yo. Amarte no es un sueño.
Sin límites Aquí, ahora.
de tiempos Plenitud
se buscan. de vida 10
Por siempre sin sombras. Eres, Amor, como la luz:
bendecirá Encuentro. despliegas mis amaneceres
el amor Pasión y me desvelas en los atardeceres,
sus luces. Amantes. para mostrar al corazón
misteriosos símbolos de pasión.

9 Como la luz eres esperanza


Amarte no ha sido un sueño. proyectada más allá
de las sombras que trae el día;
Mi ensueño está en recordarte. cuando faltas(se que estás)
Una evocación profunda y jovial se hace difuso el camino.
que desgrana, en la memoria, Eres, Amor, como la luz:
las horas de las estrellas, plenitud y sentido;
llegando a traspasar los límites tienes sombras escondidas,
del cuerpo y la conciencia. secretos, de parábolas perdidas,
que sólo amándote encuentro
Amarte no ha sido un sueño. en la pasión de cada día.

Imaginarte despierto es soñar;


quisiera que el día 11
no habría abierto mis ojos: Han pasado los días;
no es lo mismo sólo los ha festejado el futuro.
vivir que recordar. Ante nosotros sucedieron las horas

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 5


nacidas de un reloj de olvido. te entregaré, como un adiós,
este pequeño corazón
Nuestro tiempo, amor, nuestro tiempo que en el olvido sin recuerdo
es un péndulo intemporal nunca dejará de quererte.
lleno de arena de soledades.
Nuestro amor es tiempo
renaciendo en la intimidad, 13
más allá de las hojas del día, Vuelo de palomas azules
de los límites y del espacio. encuentro en tu mirada;
vuelan y se posan en mis manos
No será el tiempo abiertas como claro de luna.
con su paso efímero,
no serán sus aguas impetuosas, Una, con su celeste ala,
arrastrando todo lo que nace, toca la flor de mis labios
donde naufraguen los sueños se abren buscando al sol
que en el día y en la noche del alegre jardín de tu boca.
crea nuestro atemporal amor.
Van mis brazos errantes
Démosle al tiempo sus horas; en pos de tu cuerpo silente,
démosle a nuestro tiempo quieren ser enredadera
el esplendor maravillado de su amor. tomando tu vientre de manzana,
y tender un puente áureo
sobre tus senos aureolados de pasión
12 para alcanzar el abril de tu boca.
Nuestras manos, nuestras miradas:
hora de la última palabra. Vuelo de palomas azules
Silencio: irisando de ensueño los besos
olvida tus promesas; de nuestros labios enamorados.
no recuerdes las que yo te hice.
Sólo te pido, por amor,
que poses tus ojos en mi;

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 6


14 acogedora y unificadora.
Posdata nocturna:
Hemos desvelado la serenidad Tras esos ojos
hospedada en la noche. vive el deseo (estás)
Acompañados por su luz iluminando lo que nadie ve,
hemos susurrado palabras lo que el espacio,
de la boca al corazón: universo o microcosmos,
siempre nuevas y tan ligeras no puede contener,
como un ensueño de nubes. lo que sólo el amor
Las oigo en tu corazón puede encontrar.
haciendo eco en el mío,
y vuelo, con sus alas suaves,
por la esplendente nocturnidad 16
de nuestro encuentro. Un recuerdo se refleja
Redescubramos la serenidad sobre un agua de ilusión;
invocada por esta noche. parece luna plateada:
vida de otro corazón.
Arroyo de único cauce
15 recorriendo las orillas,
¿Qué poder decir?, puras, níveas de tu cuerpo.
¿qué poder pensar?
Al cerrar mis ojos, Rojas algas de pasión
tú, mi amor, mi amante, crecen en su fondo excelso;
me aguardas mi recuerdo las recoge
en la oscuridad de su mar. para hilar una guirnalda
resplandeciente de amor.
Tras esos ojos estoy,
te deseo besar,
sellar el paso de la estrella 17
que trata de huir de ese cielo, Escribo tu nombre
de esa penumbra amante sobre la arena dorada

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 7


para que el mar esmeralda
se enamore de nuestro cielo, 19
y el aire se espese Hay un mundo de mil jardines
con sinfonía de colores con alguna flor de raíz amarga.
Hay un mar,
Escribo mi nombre siempre de puertas abiertas,
con la espuma del mar: donde se esconden
en la ola seremos amantes, olas de acritud impetuosa.
como de la tierra son
el viento y la mar. Hay un corazón
que todo lo ama,
llama a las puertas,
18 abre las flores,
Todas las flores y su amor proclama:
son jardín en mis manos: que el dolor amargo
elige, amor, sólo es principio
el color que les damos. de una gran esperanza.

Hay miles de estrellas Hay amor que siempre ama.


posándose en mi pecho:
acércate, amor,
siente su inmenso clamor. 20
Esta tarde de luz,
Es el corazón una montaña plena dulzura de sur,
deseando tocar el cielo. camino junto al río,
Mi pensamiento, amor, donde encuentro el reflejo cautivo
es tierra en desvelo de mi soledad blanca.
esperando el frescor Recita el río tu nombre
de tus nubes de amor. y busco en él tus ojos:
silencia el agua susurros,
como si una oscura ola

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 8


asiera los suspiros de la mirada más vacías que nunca,
para llevarlos a un mar la carne forjada por el fuego
de nostalgia o de olvido. avivada por instantes cercanos.

Recorro las orillas Fragua rosa es tu vientre,


de este río de recuerdos copa encarnada llena de perfume
que un aire de luz trajo a mi. donde mis labios ardientes
Canta su silente rumor dejarán pétalos pasionales
ensueños de mi amor; para que tus besos los coloreen.
son semillas de lejanía
para que una sutil luciérnaga Y el eclipse alargará la noche
de pensamiento presienta, amor, antes que la luna ame al sol.
como un otoño fértil,
el impulso de tu cercanía.
22
...pero ahora no estás. Quería darte besos
para que mis labios
el agua de los tuyos recordara.
21
Antes que el sol ame a la luna Quería darte besos,
eclipsaré tus labios rosas y el sueño era agua
con el beso que todo lo nombra, escapando entre mis labios.
y con su luz guiaremos los sueños.
¡Oh, labios de pasión!
Traerá silencios amorosos ¿dónde encontraros?
que la piel espera descifrar
con una serenata de caricias. Que dulce momento,
amor,
Quedará en el aire sentirte tan cercana,
la luminosidad de álgidos deseos; beber el aire licuado
quedarán en nuestras manos, de nuestras sombras,

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 9


y enamorarnos de las palabras 24
pronunciadas en el corazón. Sólo por intuir el paisaje
de la alba desnudez de tu piel
Quería darte besos cerré los ojos a la luz del mediodía.
para que mis labios
el agua de los tuyos recordara. Encontré un fértil jardín
dando color a mis ensueños.
¡Oh, pasión de labios,
entregadme la fuente Solamente por ver
de vuestro dulce amor!. abrirse en mis manos
la flor blanca de tu vientre,
cerré los ojos al pensamiento azul.
23
Cuanto más me acerco Era una aureola de pasión
más te espero. coronando mis ensueños.
¿Recuerdas otros días?
Solamente por sentir
No hay misterio: nada delata el palpitar unísono
nuestra oculta pasión. de nuestros corazones,
Es un niño de sol, cerré los ojos a la canción del día.
luminoso y reposado,
esperando, con plácida ansiedad, Escuché un gratificante ”te quiero”
llenar su pecho de estrellas. colmando de luz mis ensueños.

Hilo a hilo se desovilla


esta espera sin horas: 25
cuanto más me acerco Recogí el color de tus ojos
más deprisa espero. para entregarlo a la tierra.
¿Recuerdas los días Y la tierra se hizo arcilla
que son como rosas en enero? para moldear mis sueños.

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 10


Recogí el palpitar de tus ojos Y apuramos, plácidamente,
para ofrecerlo al aire. la eterna ambrosía del universo:
Y el aire se hizo abrazo el amor...
para vivificar con dulzuras mi cuerpo. Sueño nostálgico
de una lágrima del cielo...
Recogí un reflejo de tus ojos Frágil misterio desvelado
para donarlo a la vida. cuando decimos: “Te quiero”.
Y la vida se abrió
como un abanico de perfumes
por donde camina la sombra
del destello de tus ojos: 27
Soy el mismo...
¡tu corazón, mi corazón, cuando te escribo,
unidos como lluvia de sol!. cuando te hablo.
El mismo que busca
la miel de tus sueños,
el mar risueño de tus labios
26 y el vuelo esperanzador de tus ojos.
En la noche, estrellas fugaces: El mismo que calla
Lágrimas de alegría celeste como cebolla silenciosa
regaladas a los amantes. con corazón diamantino.
El peregrino de tus besos
En la noche, palpitar de luminarias: esperando tu caricia
El amor es un sueño blanco para engalanarla
labrando sonrisas en los astros. con flores de ilusiones.
Cuando te digo “te quiero”
En el cielo (todo nuestro), soy el mismo
una zarabanda de silencios que el de la voz cantora
rima cadencias amorosas, de la palabra silenciosa.
que recogemos (ríe el corazón)
en copas áureas de pasión.

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 11


como una danza vibrante y sonora
28 que me acerca misteriosamente a ti.
Deja la noche hilos de recuerdos
en los arreboles de la aurora. Habrá un momento de horizonte alegre
Vuela un cisne para tomarlos en que se encontrarán nuestros caminos:
entre azules alas de ilusión. yo pondré en tus manos blancas
Y recorrerá, hasta el atardecer, el cáliz pasional de mi amor,
las sendas donde florecen tú lo llenarás con evocaciones
sutiles sedas de espejos. de caricias y besos compartidos.

Sobre una tela de azogues Y sentiremos que el tiempo es un canto


quiero ver tu rostro en calma, perfumando con su melodía de horas
tramada por alas cariñosas el indeleble destino que nos une.
con hilos tomados de la aurora. Abrigaremos el latir impetuoso,
del mismo corazón del tiempo,
Espejos de aire y de agua en el espacio áureo de los deseos
creando un cristalino lago creado por nuestros besos compartidos.
donde mis ojos, Y el tiempo se llenará de amor.
cisnes errantes de sentimiento,
se posen buscando
el sensitivo reflejo de tus sueños 30
(la noche los guarda en su pensamiento) Ríe mi corazón, ríe en el silencio
de esta tarde calma y orgullosa.
Hay nubes blancas con sueños amarillos:
29 margaritas celestes besando al cielo.
Siento el posar de las horas ¿Quién no saboreará sus dulzuras?
Son aguamiel de voz y de sombra
como un cortejo de recuerdos
llorando su alegría de atardecer
acompasando la memoria del corazón:
sobre la tierra vibrante de vida.
añoranza de ti cuando estás lejos.
Siento el pasar del tiempo,
Bebamos juntos tan dulce ofrenda
y su rumor de pasos lentos,

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 12


para despertar los besos adormecidos Y en el amor te encontré:
en brazos de nuestras silentes sombras. profunda y misteriosa,
Bebamos juntos nuestra miel, arco iris de un solo color,
que reclama, en su misteriosa ambrosía, fuente límpida de versos,
instantes de ensueño y labios de pasión. palpitante canción solitaria,
Ven a libar el inefable néctar ...
que embriaga a las estrellas Y en el amor te encontré.
y alegra las noches con amor.

32
31 Entre mis manos deseantes
Y en el mar quiero tomar tu cuerpo,
profundo y misterioso, sentir sus sendas de ensueños
te buscaba. donde acaba el caminar del tiempo,

Y en el cielo llegar hasta sus cimas de oro


amplio de luz y azul, y embriagarme en ellas de aromas de
miel:
te buscaba.
cuerpo de abeja de cielo futuro, piel
dulcificante como sonoro vergel,
Y en el río
de hontanar fresco y claro,
copa de besos me das en ella;
te buscaba.
yo apuro su luz, clara como estrella.
Deseo la profundidad de tal ánfora,
Y en la montaña
y recorrer el camino que guía a la aurora
de grata e inefable soledad,
entre las sábanas blancas que te
te buscaba.
abrazan.

En todo espacio te buscaba;


Voy a ti con las pasiones que te aman.
todo era puente
que, nombrándote, a ti me recordaba.

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 13


por las que transiten mis amores;
33 voy por sus recuerdos
La vida es un instante, como mariposa nostálgica:
y lo hacemos absurdo: no cogeré flores rojas, ni iré tras
palomas azules, ni tomaré agua de plata:

hoy es el mismo día de siempre:


Esperaré...esperaré,
los pájaros de rama en rama,
con la paciencia de las piedras,
el sol concediendo su cálido canto,
a que destelle
un niño jugando, otro riendo...
en la cumbre de tus senos
el resplandor que me guíe,
pero...
por la luz herida de los recuerdos,
sí, hoy no es el ayer:
al encuentro de mis amores.
hoy es la puerta del mañana:
si es de día te volveré a ver.

35
Te volveré a ver: misteriosa
Debajo de la piel, corcel puro,
como el silencio de la flor.
escondes tu último abandono.
Aunque en tus labios húmedos
Te volverá a ver: lejana
se posa el deseo de mis labios
como el secreto de la montaña.
la boca se cierra, como puerta férrica,
para no dejar escapar la canción
Te volverá a ver: blanca
que sonríe en tu pecho.
como la luz presente del mañana.

Debajo de tu piel hay una veleta


Y la vida nos entrega un instante,
perlada por lágrimas de amaneceres.
único, mientras nos abrazamos.
Oreada por un sueño de besos,
hacia una imagen vivida en el horizonte,
recuerda una crónica de silencios:
34
la narración apócrifa de una noche.
Entre los campos de tu cuerpo
no veo las veredas

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 14


Debajo de tu piel están mis ojos la oculta memoria del cariño.
cerrados Ven, ven,
conjurando la memoria secreta del la noche velará el amor
abrazo;
de nuestros abrazos”.
esa que convierte la mirada en aromas,
o la voz en fuego refrescante como
almíbar,
o en las manos levanta, solemnemente, 37

dulces arpegios de sentimientos. Necesito tu abrazo


para descifrar lo anónimo

Debajo de tu piel...espero: de mi insomne sombra.

juego con el rojo de la rosa Sean tus manos agua

y con la blancura del lirio. horadando la indiferencia

Espero... de la carne inexpresiva,

dibujando en el aire tu cuerpo sin velos, hasta llegar al misterio

para bautizarlo con caricias de besos. que impulsa ese deseo.


Sean tus manos alas,
vuelo de mariposa azul,

36 reflejando la luz temblorosa

Se oculta tu rostro de un paisaje humano.

en los brazos de la noche,


y tu cuerpo de luna Que dejen nuestras manos

en los relieves de las sábanas. de arrancar pétalos de margaritas,

Convertidos en máscaras porque ello es la demora

asaltan mis sueños, del desengaño de un sueño infantil.

y con alegría de carnaval Que dejen nuestras manos

incitan pasiones: de alimentarse de besos


confundidos entre sollozos.

“Ven, ven, Que llegue el día

recorramos los caminos en que las manos despierten

de esta noche de rostros impulsadas por el silencio

para que la piel reciba visionario de un futuro sin promesas.

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 15


Necesito tu abrazo.
No sé por qué...
no sé por qué, ni cómo.
38
I
Ayer, hoy, mañana, 39
deseándote en todo, Eres la noche
mi corazón vive: donde el amor culmina.
caja melancólica Eres el amanecer
en la que palpitan, donde el amor deslumbra.
nítidas, ardientes Eres el mediodía
notas pasionales donde el amor impulsa.
de un afable beso. Eres el atardecer
(No sé por qué... donde el amor estremece.
no sé por qué, ni cómo).
Eres la noche
II donde el sueño
Ayer en el paseo. desvela al amor.
Hoy en tu mirada.
Mañana en el aire
(tu) del pensamiento. 40
Ayer en tus manos, Quiero que sea un canto este romance.
hoy en tu boca, Romance del amor profundo;
mañana en el vértigo romance del amor íntimo,
(yo) de la memoria. romance del amor florido, entregado
como aroma de azahar fecundo.
Ayer... hoy... mañana...
siempre el eco deseante, Sea canto ignorante del lenguaje que
aleja.
murmullo, gozo, fuego,
Sea canto de la nostalgia interna,
despertando notas musicales
recordando
peregrinas de tu voz.

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 16


el grato sabor fiel de nuestros besos El beso, don de los labios,
y el rumor encantador del abrazo impulsó al deseo tan rápido
amante. que el amor se emocionó.
Canto del amor que deshoja risas
y fúlgidas lágrimas azules del cielo,
para vibrar, no sólo en los ojos como 42
lucero,
Con que claridad regresa la primavera.
en la intimidad alba del corazón que ama.
Ha permanecido oculta, perdurando,
Canto de amor soñando otros cantos:
tras tu pecho inquietante, amor.
Con que claridad regresa
romance que duerme en el destino,
para estallar en imágenes
romance de la voz amante que acaricia,
alborozadoras del paisaje que
romance de la palabra que nombra inventamos:
al misterio posesivo del amor, fertiliza los espacios indecisos.
romance del silencio de las estrellas:
amor lucero, amor íntimo. Escucha, amor, su invocador rumor
impulsando las semillas del corazón.
Escucha, amor, como germina la flor
41 de la memoria coloreada de ilusión:
Volvió tan rápido el deseo regresa un tiempo de esperanzas.
que el amor se emocionó.

Tras el deseo, el encuentro 43


arrebatador de olvidos. Vencida la tarde
recurro a tu presencia
El encuentro fue un abrazo imaginada:
tan breve como la vida. incertidumbre de tiempo.

El abrazo aquel que quiso A pesar de todo


desvelar la luz del beso. tu recuerdo no es confuso.
A pesar de todo

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 17


tu rostro se me presenta. persigo lo cercano
A pesar de todo, celando lo que queda
de la entreabierta lejanía, junto a mi, de ti.
todo es futuro perfecto.
A pesar de todo
recurro a tu presencia 46
sin hablar del mañana. Entraste como la luz
sin pedir permiso,
y anclaste tu presencia
44 en mis espacios íntimos.
El amor hace feliz, comprobado,
cuando el enamorado, todo dado, Desde entonces
vive todo instante a su amor asido, no puede callar mi mente
confundiéndose amada y amado. dando forma a la transparencia
de esa constante presencia,
¿Qué amor siendo invocado, así cantado, intensa, plena,
no es capaz de alegrarse en lo vivido, animándome a oírte
naciendo en dos seres que se han unido en lo que no oigo,
confundiéndose amada y amado?. a verte en lo que no veo,
y posar mis labios en el aire
conformado por tus límites.
45
Ausente del presente
codifico con mis sentidos 47
el aroma cósmico de tu rastro; Como luna blanca,
persigo con mi vista solitaria como luna llena.
la leyenda que dejó tus ropas, Así son tus ojos
atrapo, anhelante, con mis manos, cuando tu alma ríe,
tu calor difuminado en las sábanas. cuando tu alma canta.

Ausente del presente Como luna clara,

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 18


como media luna.
Así tu sonrisa, 49
siempre fruta llena, De tierra ocre es tu mirada,
siempre abierta y blanca. en faz de nívea ternura,
labios de luna rosada.

48 En tu pecho, nieve y brisa,


Me desazona el tiempo de espera; guirnaldas de floras rojas;
va dejando, por el aire, impreso dentro: el amor y la risa.
la hora de tu regreso,
que me atrapa como enredadera. Tu vientre, nube blanca y odre,
posada de mis caricias,
Desasosiego en el corazón canto de tus días de madre.
precipitado en el ebrio vuelo,
memoria siempre en celo, Como flor de tu blancura
entre el desencanto y la pasión. el firmamento sembrado,
celaje de tu cintura.
Es instante de invierno paciente,
perviven fragmentos sin espera: Es el campo de tu cuerpo
cercana primavera, donde planto mis canciones:
lento sueño, deseo de lo ausente. ¡siembra el amor en el tiempo!.

Por sendas sin rumbo van mis besos;


anclado quedo en nieblas de penas. 50
El paso de tantas lunas Cuando callo, lo que ya sabes,
no oscurece cielos luminosos, te digo: “te quiero”.

ni quiebra la canción silenciosa: Te quiero con la ventana abierta


soledad que a la noche suplanta: viendo pasar un vuelo de azucenas.
pensamiento que canta,
signos, lenguajes de espera ansiosa. Te quiero con ese baile silencioso

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 19


del reflejo en los cristales.

Te quiero con el rumor calidoscópico


del sol jugando entre las sombras
del árbol que abraza a la mañana.

Te quiero con la última nota,


arrancada a un violín de piedra,
nacida en el albor del agua.

Quiero callar lo que te digo,


y en el silencio rojo del corazón
florezca el amor como trigo.

51
Tengo estos ojos hechos a tus ojos,
y tu cintura reclama estas manos:
signos de la vida, miradas de espejos,
ondas que nos impulsan a abrazarnos.

Como las olas asaltan las playas,


dejando misterio (voz de violines),
arribo en esta alegría de vaivenes
con poesía de caricias: “te amo”. Callas.

Dame el silencio, es como si hablaras:


cariños, sueños, son voz de ternura.
Así, tu presencia es la que perdura
y son tus besos como si cantaras.

TE OLVIDARÉ CADA DÍA 20

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