Confessio Fraternitatis
Confessio Fraternitatis
Confessio Fraternitatis
Los rumores y revelaciones sobre nuestra hermandad o confraternidad que ha llegado a muchos odos y cuyo origen se encuentra en la precedente publicacin de la Fama, no deben ser tenidos ni considerados por nadie como irreflexivos o inventados completamente; menos an como un fruto que brote de nuestro antojo !ctualmente, el mundo est" a punto de alcan#ar su estado de reposo antes de caminar con premura hacia un nuevo amanecer una ve# acabado su perodo y su ciclo $ehov", nuestro %e&or, es quien invierte el curso de natura 'l es quien revela actualmente a los que no prestan atencin a ello o que ni siquiera piensan en aquello cuya bsqueda costaba antes gran trabajo y una labor infatigable 'l es quien lo ofrece graciosamente a los que manifiestan el deseo de ello, a la ve# que tambi(n obliga a los refractarios )esea que los hombres piadosos se vean aliviados de las fatigas de esta vida humana y libre de las tempestades provocadas por la inconstancia de la fortuna* que los malvados aumenten y acumulen su malignidad y los castigos que ella merece +,mo podramos nosotros ser sospechosos de hereja, de manejos y de complots culpables contra la autoridad civil, cuando condenamos los sacrilegios de los que es objeto -uestro %e&or $esucristo y de los que son culpables tanto .riente como .ccidente /entendamos 0ahoma y el 1apa2 y cuando presentamos y dedicamos nuestras oraciones, nuestros misterios y nuestros tesoros, al jefe supremo del imperio romano3 -os ha parecido sin embargo bueno y oportuno, por respeto hacia los hombres de ciencia, completar nuestro resumen formulando en t(rminos mejores los pasajes demasiado insondables y oscuros de la Fama, y tambi(n colmando las lagunas que determinadas intenciones justificaban ,on ello esperamos ganar la estima de los hombres de ciencia y acrecentar la adhesin y su consentimiento al proyecto que acariciamos
viendo que vuestro canto atrae a vosotros no las rocas sino slo perlas y piedras preciosas, embelesa no a las bestias feroces sino a los espritus, pone en movimiento y hace vibrar no al infernal 1lutn sino a los poderosos, a los prncipes de este mundo3 9.h hombres: ;ien diferente es el designio de )ios que decidi aumentar y acrecentar el nmero de miembros de nuestra fraternidad -oticia que acogimos con una alegra parecida a la que experimentamos cuando, en el pasado, fuimos recipiendarios de tesoros que no habamos ni merecido, ni esperado, ni exigido en absoluto 1arecida a la que sentimos cuando pensamos ponernos a la obra con una constancia que no quebrantar"n ni siquiera la compasin y la conmiseracin por nuestros propios hijos, de los que est"n dotados ciertos miembros de nuestra fraternidad 5s que sabemos que estos bienes inesperados no son legado de herencia alguna ni debidos a ninguna primaca del que los adquiere
escritos son los promotores no mediocres de la prxima reforma, no deseamos en absoluto atribuirnos el honor exclusivo de una obra supuestamente remitida y confiada a nuestra sola iniciativa 0"s bien testimoniamos y profesamos pblicamente en nombre de ,risto, nuestro %e&or, que gritar"n las piedras antes de que vengan a faltar los ejecutores y agentes de este designio presente de )ios
%anta ;iblia resumen y quintaesencia del mundo entero, objetivo y t(rmino de todos sus estudios; los que saben utili#arla no content"ndose con tenerla siempre en los labios sino aplicando y consagrando cuidadosamente a ella su inteligencia, adecuada al conjunto de periodos y edades de este mundo 1ues no entra en nuestras costumbres prostituir ni vulgari#ar la %anta 5scritura segn el uso habitual de las miradas de int(rpretes* ved cmo la fuer#an a reproducir su propio parecer, o bien calumniarla utili#ando la odiosa comparacin banal que sirve tanto a los telogos como a los filsofos, a los m(dicos y a los matem"ticos ,ontra ellos, testimoniamos y profesamos en pblico que desde los comien#os de este mundo no ha existido un libro superior, mejor, tan maravilloso y salutfero como la %anta ;iblia ;ienaventurado su poseedor, m"s bienaventurado an su lector asiduo, el colmo de la felicidad para el que ha consumado su estudio 6uien sabe comprenderla no puede estar m"s cerca de )ios ni ser m"s parecido a 'l
bien del hombre los me#cla al buen grano con la esperan#a de menguar el cr(dito de la verdad La verdad es neta, simple y desnuda; la mentira por el contrario es fastuosa, imponente, majestuosa, rodeada con la rara aureola que prestan la sabidura divina y la sabidura humana 9Fombres sutiles: 5vitad y huid de estas obras; volv(os hacia nosotros que no queremos en absoluto vuestro dinero y que, por el contrario, os ofrecemos graciosamente nuestros grandes tesoros -osotros no corremos tras vuestros bienes inventando tinturas de charlat"n, deseamos haceros participar de los nuestros -o os hablamos por adagios, queremos iniciaros en una interpretacin, en una explicacin, en una ciencia de los secretos que sea clara, simple, absolutamente comprensible -o buscamos vuestra acogida, vuestra hospitalidad, os invitamos a nuestras casas que son m"s que hoteles y palacios del rey %abed que no actuamos segn nuestro capricho; quien nos incita y nos exhorta a ello es el espritu divino, y as lo ha dispuesto nuestro padre bienamado en el testamento inviolable que nos ha dejado, oblig"ndonos a ello las condiciones y las intenciones del siglo