Manual de Derecho Procesal Iv - Mario Casarino V PDF
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transmitida en manera alguna ni por ningn medio, ya sea elctrico, qumico, mecnico, ptico, de grabacin
o de fotocopia, sin permiso previo del editor.
MARIO CASARINO VITERBO
EDITORIALJURDICA DE CHILE
Ahumada 131, 4 piso. Santiago
Registro de Propiedad Intelectual
Inscripcin N 160.771, ao 2007
Santiago - Chile
Se termin de reimprimir esta sexta edicin
de 1.000 ejemplares en el mes de febrero de 2008
IMPRESORES: Productora Grfica Andros Ltda.
IMPRESO EN CHILE / PRlNTED IN CHILE
ISBN de la obra completa 978-956-10-1607-1
ISBN de este tomo 978-956-10-1759-7
MARIO CASARIN VITERBO
Ex Profesor Titular de Derecho Procesal en la Universidad de Chile
Profesor Emrito de la Universidad de Valparaso
MANUAL DE
DERECHO PROCESAL
DERECHO PROCESAL CIVIL
TOMO N
Sexta edicin actualizada por el Departamento
de Derecho Procesal de la Facultad de Derecho
de la Universidad de Chile, bajo la direccin del Director
del Departamento don Cristin Maturana Miquel
y revisada por su autor, seor Mario Casarino Viterbo.
312ZY
EDITORIAL
IURIDICA
DE CHILE
www.editorialjuridica.cl.
ACTUALIZACIN
La Editorial Jurdica de Chile encarg
al Departamento de Derecho Procesal de
la Facultad de Derecho de la Universidad
de Chile, que procediera a la actualizacin
del texto de la presente obra con todas las
modificaciones legales respectivas.
La delicada labor de actualizacin fue
realizada por el docente de la Universi-
dad de Chile seor Rodrigo Ziga Ca-
rrasco, bajo la direccin del Director del
Departamento de Derecho Procesal se-
7
or Cristin Maturana Miquel, y revisa-
da por el autor, seor Mario Casarino
Viterbo.
Es de destacar que en el trabajo de
actualizacin se procur mantener siem-
pre el texto primitivo del autor, sealn-
dose, en cada caso, las frases, oraciones o
prrafos que hubo que modificar debido
a los cambios legislativos.
EDITORIALJURDICA DE CHILE
EDITORI,\L URIDICA DECHILE
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SEGUNDA PARTE
LOS PROCESOS DECLARATIVOS YEJECUTIVOS
COMUNES O LOS PROCEDIMIENTOS CONTENCIOSOS
DE APLICACIN GENERAL
7
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lDITORIAL JURIDICA LlFCHIlF m
INTRODUCCIN
A. Juicio, proceso y procedimiento.
Recordemos que la nocin del juicio es
sinnima de contienda o controversia ac-
tual que se produce entre dos o ms per-
sonas sobre un derecho y que se somete
al fallo de un tribunal; y que el instru-
mento jurdico llamado a componer o so-
lucionar el juicio es, precisamente, el
proceso, el cual se caracteriza por estar
constituido por una serie de actos que se
inician con la interposicin de la deman-
da y terminan con el pronunciamiento
de la sentencia.
Ahora bien, estos actos se desarrollan
en forma sucesiva, combinada y lgica,
cuyo conjunto constituye el procedimiento
judicial. Es por eso que este ltimo se
define como la forma racional y metdi-
ca en que han de actuar los tribunales
para administrar justicia, y los particula-
res para solicitarla y obtenerla.
B. Clasificacin de los procedimien-
tos judiciales. Doctrinariamente los pro-
cedimientos judiciales admiten diversas
clasificaciones, segn sean los puntos de
vista que se adopten para formularlas.
As:
a) Segn la naturaleza del derecho
controvertido, se clasifican en civiles y pe-
nales. Procedimiento civil es aquel en que
el derecho controvertido es de naturale-
za civil; y, en cambio, procedimiento penal
es aquel en que el derecho controvertido
es de naturaleza penal. Por consiguiente,
el procedimiento civil est caracterizado,
fundamentalmente, porque en l predo-
mina la iniciativa de parte; y el procedi-
miento penal, porque en l sobresalen
las actuaciones de oficio.
11
b) Segn su objeto o finalidad, los
procedimientos se clasifican en de cono-
cimiento, de ejecucin y de conservacin.
Los de conocimiento, llamados tambin in-
distintamente declarativos o de cognicin,
tienden a obtener la condena del deman-
dado, la mera declaracin de un dere-
cho, o un efecto constitutivo mediante la
dictacin de la sentencia respectiva. Los
de ejecucin persiguen el cumplimiento
forzado de una obligacin, que consta en
una sentencia previa dictada dentro de
un procedimiento de cognicin, o en otro
ttulo al cual la ley tambin le atribuye
mrito ejecutivo. Los conservatorios o pre-
cautorios tienden a asegurar el resultado
de una accin ejercitada en un procedi-
miento de conocimiento o ejecutivo an-
terior o coetneo.
c) Segn su forma o tramitacin, se
clasifican en ordinarios, especiales y su-
marios. Procedimientos ordinarios son aque-
llos que, en su tramitacin, se ajustan a
las normas generales del proceso. Proce-
dimientos especiales son aquellos que, en
su tramitacin, se ajustan a las normas
especiales del proceso. Y procedimientos
sumarios son aquellos cuya tramitacin
est fundada exclusivamente en razones
de rapidez o celeridad. Los procedimien-
tos ordinarios y sumarios, a su vez, se
agrupan en procedimientos comunes o
de aplicacin general, o sea, rigen en la
generalidad de los casos; y como contra-
puestos a los procedimientos de aplica-
cin especial, o sea, a los casos especfi-
camente sealados en la ley.
d) Segn su contenido, se clasifican
en singulares y universales. Procedimientos
singulares son aquellos en que tienen in-
[lJiTLlIUAI /URIDICA mCHllE m
Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
miento extraordinario es aquel al cual se
ajustan todos los dems juicios. La clasifi-
cacin fundamental de los procedimien-
tos es, pues, esencialmente formalista, y
la adopcin de las dems clasificaciones,
de importancia prctica indiscutida, ha
sido la obra incesante de la doctrina y la
jurisprudencia.
No obstante, si tratramos de desen-
traar las caractersticas generales del pro-
cedimiento judicial chileno, tanto del
ordinario cuanto del extraordinario, po-
dramos afirmar que es escrito y de doble
grado: escrito, por cuanto en sus actua-
ciones predomina la escritura; y de doble
grado, porque las resoluciones que se van
pronunciando, a travs de su desarrollo,
son, por regla general, susceptibles de ape-
lacin, esto es, de ser revisadas por un
tribunal superior a peticin de parte agra-
viada.
~ f DI !(1;(I>\ JURIOICA [)I CHJlf
13
sos; desconoce la clasificacin de los mis-
mos, segn su objeto o finalidad, puesto
que hay procedimientos de cognicin con-
templados, tanto en el libro n cuanto en
el libro In del Cdigo del ramo, y a pe-
sar de haber ubicado el cumplimiento de
las sentencias en el primero de dichos
libros, y los procedimientos ejecutivos en
el segundo de los antes nombrados, pres-
cinde de la clasificacin de los procedi-
mientos en escritos y verbales, no obstante
asignarle esta ltima caracterstica a los
procedimientos de mnima cuanta y al
sumario; y en cuanto a los procedimien-
tos comunes o de aplicacin general, los
distribuye arbitrariamente entremezclados
con los de aplicacin especial.
En resumen, para el derecho proce-
sal civil positivo chileno, el procedimien-
to ordinario es sinnimo del juicio
ordinario de mayor cuanta, y el procedi-
en sus actuaciones; de obligar a los ma-
gistrados que en ellos deben intervenir a .
imponerse personalmente del asunto so-
bre el cual van, en definitiva, a senten-
ciar; de producir un mayor contacto entre
el juez y las partes, y entre estas y los
testigos, todo dentro de un ambiente de
espontaneidad; y, en fin, de ser ms eco-
nmicos.
Sin embargo, presentan la desventaja
de ser ms superficial y precipitada la re-
solucin de los jueces; de prestarse a even-
tuales sorpresas, errores u omisiones; de
influir, aun de buena fe, decididamente
en la conciencia del magistrado, cuando
se despliega una hbil y eficaz oratoria
por parte del abogado defensor; y, por
ltimo, de adolecer, por su propia natu-
raleza y desarrollo tcnico, de una mayor
vaguedad.
Por todas estas razones es que la doc-
trina y la mayora de las legislaciones se
inclinan a adoptar el procedimiento es-
crito en los procesos civiles, y el procedi-
miento oral lo reservan exclusivamente
para los procesos penales.
C. Clasificacin de los procedimien-
to judiciales segn la ley procesal civil
chilena. Despus de expresar el artculo 10
del Cdigo de Procedimiento Civil que sus
disposiciones rigen el procedimiento de
las contiendas civiles entre partes y de los
actos de jurisdiccin no contenciosa, cuyo
conocimiento corresponda a los Tribuna-
les de Justicia; agrega el artculo 2 de
ese mismo cuerpo de leyes, que "el pro-
cedimiento es ordinario o extraordinario.
Es ordinario el que se somete a la trami-
tacin comn ordenada por la ley, y ex-
traordinario el que se rige por las
disposiciones especiales que para deter-
minados casos ella establece".
En consecuencia, nuestra ley proce-
sal civil clasifica los procedimientos, se-
gn su forma o tramitacin, en ordinarios
y extraordinarios, siendo ordinario el que
se somete a la tramitacin comn orde-
nada por la ley, y extraordinario el que
se rige por disposiciones especiales esta-
blecidas por ella para determinados ca-
12
ters una o ms personas determinadas
sobre derechos tambin determinados.
Procedimientos universales son aquellos en
que la materia sobre la cual versan es una
universalidad, como el patrimonio de una
persona viva, o la herencia de un difun-
to. ~ m p l o s tpicos de procedimientos
universales son los de quiebra y los de
particin de bienes.
e) Segn la cuanta, pueden ser de
mayor cuanta, de menor cuanta y de
mnima cuanta. Procedimientos de maypr
cuanta son aquellos en que el monto d
la cosa litigiosa excede de quinientas Uni-
dades Tributarias Mensuales (500 UTM)
o ella no es susceptible de determinada
apreciacin pecuniaria. Procedimientos de
menor cuanta son aquellos en que el mon-
to de la cosa litigiosa es superior a diez
Unidades Tributarias Mensuales (10
UTM) pero no excede a quinientas Uni-
dades Tributarias Mensuales (500 UTM).
Procedimientos de mnima cuanta son aque-
llos en que la cosa litigiosa no excede de
diez Unidades Tributarias Mensuales (10
UTM).*
f) Segn su ritualidad, se clasifican
en verbales y escritos. Procedimientos verba-
les son aquellos en cuya tramitacin pre-
dominan las actuaciones de palabra o de
viva voz. Procedimientos escritos son aque-
llos en cuya tramitacin predominan las
actuaciones literales o por escrito. En el
hecho, no existen procedimientos exclu-
sivamente verbales o escritos, por cuanto
en los primeros hay determinadas actua-
ciones escritas, y en los segundos, tambin
se cumplen determinadas actuaciones ver-
bales. Por consiguiente, la preponderan-
cia en las actuaciones es lo que, a la
postre, vienen a caracterizar el procedi-
miento en verbal o escrito.
Los procedimientos orales tienen la
ventaja de proporcionarle una mayor ra-
pidez al proceso; de asegurar, en toda su
amplitud, el principio de la publicidad
* Modificado, como aparece en el texto, por
la Ley N 19.594, publicada en el Diario Oficial el
1de diciembre de 1998.
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Captulo Primero
GENERALIDADES
323. Caractersticas e importancia del
juicio ordinario de mayor cuanta. Se en-
cuentra reglamentado en el libro II del
Cdigo de Procedimiento Civil, esto es,
en los artculos 253 al 433 del referido
cuerpo de leyes. Sus caractersticas ms
sobresalientes son:
a) Se aplica a los negocios judiciales
contenciosos cuya cuanta exceda de qui-
nientas unidades tributarias mensuales*
y a los que versen sobre materias no sus-
ceptibles de determinada apreciacin pe-
cuniaria, siempre que la ley no establezca
un procedimiento especial para tales ca-
sos. En consecuencia, de acuerdo a las
normas procesales orgnicas, el juicio or-
dinario de mayor cuanta es un procedi-
miento privativo o exclusivo de los jueces
de letras.
b) Es conocido en primera instancia
por los tribunales llamados a intervenir
en l, de suerte que las sentencias que
aqullos pronuncien son siempre suscep-
tibles del recurso de apelacin; siendo,
por consiguiente, un procedimiento tpi-
co de doble grado o instancia.
c) Se trata de un procedimiento fun-
damentalmente escrito; o sea, todas sus ac-
tuaciones constan en el proceso por
medio de la escritura, las cuales se ajus-
tan a las formalidades que la ley estable-
ce para cada una de ellas en particular,
segn su naturaleza. Por excepcin, el jui-
cio ordinario de mayor cuanta est cons-
tituido por algunas actuaciones orales, a
* Modificado, como aparece en el texto, por
la Ley N" 19.594, publicada en el Diario Oficial el
10 de diciembre de 1998.
17
saber, en primera instancia, las declara-
ciones testimoniales, la confesin judicial,
la aceptacin del cargo de perito, la peti-
cin al tribunal a fin de que cite a las
partes para or sentencia, la interposicin
del recurso de apelacin en el acto de la
notificacin, etc.; y, en segunda, la vista
de la causa, comprendindose en ella la
relacin y los alegatos de los abogados.
d) Es un procedimiento declarativo en
sentido lato, o de cognicin, ya que por
medio de l no se persigue el cumpli-
miento forzado o compulsivo de una obli-
gacin, sino la declaracin o el reconoci-
miento de un derecho desconocido o
menoscabado. En el hecho, mediante sus
sentencias, se persigue la condena del de-
mandado a una determinada prestacin,
la mera declaracin de un derecho con-
trovertido o la produccin de efectos ju-
rdicos constitutivos.
e) Consiste en un procedimiento comn
o de aplicacin general, sin otras limita-
ciones que la cuanta o la existencia de
procedimientos especiales en razn de la
naturaleza de la accin. En otros trmi-
nos, el juicio ordinario de mayor cuanta
es la forma normal de tramitacin de los
juicios; y la excepcin, los juicios o pro-
cedimientos especiales, cuya tramitacin,
a la inversa, es distinta de la primeramente
nombrada y bastante variada. De ah que
el artculo 3 del Cdigo de Procedimien-
to Civil disponga que "se aplicar el pro-
cedimiento ordinario en todas las gestio-
nes, trmites y actuaciones que no estn
sometidos a una regla especial diversa,
cualquiera que sea su naturaleza". Cada
vez, pues, que estemos en presencia de
una accin judicial, cuya cuanta exceda
UlIIORIAL jURlDlCA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
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de quinientas unidades tributarias men-
suales* o sea de cuanta indeterminada,
y en razn de su naturaleza no tenga
sealada en la ley una tramitacin espe-
cial, debemos saber de antemano que
tendr que ser ventilada en conformi-
dad a las reglas del juicio ordinario de
mayor cuanta.
f) Por ltimo, es un procedimiento suple-
torio en relacin a los mismos procedimien-
tos extraordinarios o especiales, a virtud
de lo que prescribe el artculo 3 del CsS-
digo de Procedimiento Civil antes tranS-
crito. Esto significa que el legislador, al
estructurar los procedimientos extraordi-
narios, no consigna en forma exhaustiva
todas las actuaciones que los constituyen;
de suerte que, en presencia de cualquier
vaco, se recurre indefectiblemente a las
normas respectivas del juicio ordinario de
mayor cuanta. Ejemplo, nada dice la ley,
dentro de los juicios especiales, acerca de
las medidas precautorias o de los medios
probatorios: en su silencio, se aplican las
normas contenidas sobre estas materias en
el juicio ordinario de mayor cuanta.
En resumen, las caractersticas de ser
un procedimiento comn o de aplicacin
general, y de ser supletorio de los proce-
dimientos especiales, por s solas, demues-
tran la importancia innegable que el juicio
ordinario de mayor cuanta reviste den-
tro de los procedimientos judiciales chi-
lenos.
324. Esquema del juicio ordinario de
mayor cuanta. Este juicio se inicia me-
diante demanda del actor, de la cual el
tribunal confiere traslado al demandado
por un trmino de quince das. La de-
manda y su correspondiente traslado se
notifican por el estado diario al actor, y
personalmente, al demandado. Este lti-
mo puede defenderse o no. Si no se de-
fiende, a peticin del actor, se dar por
evacuado el trmite de contestacin de
* Modificado, como aparece en el texto, por
la Ley N" 19.594, publicada en el Diario Oficial el
10 de diciembre de 1998.
EDIlORIAL JURIDICA DI CHIU 18
demanda, en su rebelda. Si se defiende,
podr hacerlo oponiendo excepciones di-
latorias, destinadas a corregir vicios Q.e
procedimientos; o bien, excepciones pe-
rentorias o defensas, destinadas a ener-
var la accin deducida. Las primeras se
esgrimen en forma previa, y son tramita-
das y resueltas como incidentes; las se-
gundas, en cambio, se hacen valer dentro
del escrito llamado de contestacin de de-
manda. Contestada la demanda, o en su
rebelda, se confiere traslado al actor para
replicar y de este ltimo escrito se con-
fiere tambin traslado al demandado para
duplicar, siendo el plazo para ambos tras-
lados de seis das.
A esta altura del juicio, el juez debe
examinar personalmente el procso y es-
tudiar si las partes, en los escritos funda-
mentales, se han contradicho en hechos
substanciales y pertinentes. En caso afir-
mativo, recibir la causa a prueba por el
trmino legal y ~ r los hechos contro-
vertidos, a cuyo tenor deber rendirse la
prueba. Esta resolucin se notifica por
cdula. El trmino probatorio ordinario
es de veinte das, dentro del cual deben
producirse la prueba testimonial y las de-
ms pruebas, sin perjuicio de que estas
ltimas puedan tambin rendirse en las
otras oportunidades sealadas por la ley.
Vencido el trmino probatorio, las partes
tienen un plazo comn de diez das para
formular las observaciones que el examen
de las pruebas le sugiera; y vencido tam-
bin este ltimo trmino, de oficio o a
peticin de parte, el tribunal citar para
or sentencia, se hayan o no formulado las
referidas observaciones.
A contar de la notificacin de esta
ltima resolucin, el tribunal tiene un pla-
zo de sesenta das para dictar sentencia
definitiva; la cual, una vez notificada a las
partes, ser susceptible de los recursos le-
gales que procedan, a saber, el de apela-
cin y el de casacin en la forma.
Lo anterior es el esquema del desa-
rrollo normal de un juicio ordinario de
mayor cuanta. Sin embargo, a veces, en
la prctica, puede complicarse. As, eljui-
cio puede haberse iniciado mediante una
medida prejudicial, circunstancia que no li-
bera al demandante de la obligacin de
presentar despus escrito de demanda.
El demandado, por su parte, puede no
quedar satisfecho con contestar solamen-
te la demanda y deducir tambin recon-
vencin en contra del demandante. En este
caso, hay un trmite ms, o sea, se con-
fiere al demandante traslado para dupli-
car en la reconvencin. El trmino
probatorio normalmente ordinario, pue-
de a veces revestir el carcter de extraordi-
nario o de especial, con lo cual en el hecho
se alarga. Por fin, pueden suscitarse cues-
tiones accesorias que requieren especial
pronunciamiento del tribunal, o sea, in-
cidentes, los cuales sabemos que se trami-
tarn en la misma pieza de autos o en
cuaderno separado, segn si revisten o
no el carcter de previo y especial pro-
nunciamiento.
325. Perodos o fases del juicio ordi-
nario de mayor cuanta. El esquema es-
19
bozado nos permite apreciar que el jui-
cio ordinario de mayor cuanta, en su
tramitacin, atraviesa o consta de tres pe-
rodos o fases: el de discusin, el de prue-
ba y el de sentencia.
El perodo de discusin est constituido
por la presentacin de cuatro escritos fun-
damentales; a saber: la demanda, la con-
testacin, la rplica y la dplica.
El perodo de prueba es aquel que me-
dia entre la dictacin de la resolucin
que recibe la causa a prueba y la notifica-
cin de la resolucin que cita a las partes
para or sentencia.
El perodo de sentencia, en fin, es el que
transcurre entre esta ltima actuacin y
la dictacin y notificacin de la sentencia
definitiva.
En consecuencia, el esquema y los pe-
rodos anteriores corresponden exclusi-
vamente a la primera instancia del juicio
ordinario de mayor cuanta; y sus actua-
ciones sern el objeto del estudio que pa-
samos a efectuar a continuacin.
EDITORIAL rURlDICA DE CHILE
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Captulo Segundo
LA DEMANDA
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326. Concepto. Dispone el artculo
253 del Cdigo de Procedimiento Civil
que "todo juicio ordinario comenzar por
demanda del actor, sin perjuicio de lo
dispuesto en el Ttulo IV de este Libro".
En consecuencia, el juicio ordinario
de mayor cuanta tiene dos formas o ma-
neras de ser iniciado; a saber, por deman-
da del actor, o bien, por medidas prejudiciales
promovidas, ya por el futuro demandan-
te, ya por el futuro demandado.
Recordemos que las medidas prejudi-
ciales son los medios que franquea la ley
a los futuros litigantes para preparar su
entrada al juicio; que pueden ser promo-
vidas, tanto por el futuro demandante,
cuanto por el futuro demandado; que res-
pecto a su finalidad, estas medidas estn
destinadas a preparar la demanda, a pro-
curarse de antemano ciertos medios de
prueba que pueden desaparecer, o a ase-
gurar el resultado de la accin que se va
a deducir; y que, desde el punto de vista
de su tramitacin, las medidas prejudi-
ciales constituyen incidentes especiales
dentro del pleito.
La iniciacin del juicio, pues, median-
te una medida prejudicial, no libera en
manera alguna al actor de la obligacin
de presentar demanda; la novedad pro-
cesal, en este caso, radica exclusivamente
en que el juicio se ha iniciado mediante
medida prejudicial, y que esta, cronol-
gicamente, precede a la demanda.
Ahora bien, la ley no define la deman-
da; pero es evidente que este trmino se
reserva para designar el acto inicial de la
relacin procesal, o sea, la primera pre-
sentacin que hace el actor y que resume
sus pretensiones. Se la define como aquel
21
acto procesal del actor mediante el cual
ejercita una accin tendiente a la decla-
racin, en sentido amplio, por parte del
tribunal, de un derecho que le ha sido
desconocido o menoscabado. La deman-
da es, entonces, la forma o manera de
ejercitar la accin en juicio; y esta, la de
reclamar judicialmente un derecho con-
trovertido.
327. Forma y contenido de la deman-
da. Desde el momento en que la deman-
da, como acto inicial del juicio, es un
verdadero escrito, debe ajustarse a deter-
minadas formalidades en su otorgamien-
to y presentacin, para que as produzca
los efectos legales deseados por el actor.
Estas formalidades son dobles; a saber,
las generales de todo escrito y las especia-
les propias del escrito de demanda.
Las formalidades generales de todo escrito
y aplicables, por consiguiente, al escrito
de demanda, en sntesis, son: la deman-
da deber presentarse en papel proceso;*
por conducto del Secretario respectivo y
encabezada con una suma que indique
su contenido (art. 30 CPC);** yacompa-
*Actualmente, y con la entrada en vigencia del
Decreto Ley N 3.475 de 29 de agosto de 1980, pu-
blicado en el Diario Oficial de 4 de septiembre del
mismo ao, qued sin efecto la obligacin de usar
papel sellado en los juicios y gestionesjudiciales, toda
vez que el artculo 32 de dicho Decreto Ley derog
el Decreto Ley N 619 de 1974, que la consagraba.
Actualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
** Ver Auto Acordado de la C. de Apelaciones
de Stgo., de 19 de diciembre de 1988, publicado en
el 0.0. de 21 de enero de 1989 y acuerdo de la C.
de Apelaciones de Valpo., publicado en el 0.0. de
7 de diciembre de 1995.
EDITORIAL JURlDICA DECHILE
m
Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
7
m
ada, en papel simple, de tantas copias
cuantas sean las partes a quienes haya de
ser notificada (art. 31, inc. 1, CPC); y,
por ltimo, en atencin a que la deman-
da es la primera presentacin que hace
el actor, deber contener la constitucin
de un procurador o mandatario judicial
habilitado y la designacin de abogado
patrocinante, tambin habilitado, salvo las
excepciones legales (arts. 1 Y 2 Ley
N 18.120 de 30 de abril de 1982, publi-
cada en el Diario Oficial de 18 de mayo
del mismo ao). .
En cambio, las formalidades especiales del
escrito de demanda las seala el artculo 254
del Cdigo de Procedimiento Civil, al pres-
cribir que la demanda debe contener:
10. La designacin del tribunal ante quien
se entabla.
Este requisito se cumple a continua-
cin de la suma, expresndose solamen-
te lajerarqua del tribunal y, todava, ello
mediante abreviaturas. Ejemplos: se pon-
dr SJ.L., tratndose de jueces letrados;
LC., tratndose de una Corte de Apela-
ciones; y Excma. Corte, tratndose de la
Corte Suprema.
2. El nombre, domicilio y profesin u oficio
del demandante y de las personas que lo repre-
senten, y la naturaleza de la representacin.
Debe, en consecuencia, individualizar-
se en forma precisa al actor, y si compa-
rece por medio de representante, en igual
forma a este ltimo; expresndose, ade-
ms, en este caso, la naturaleza de la re-
presentacin, en otros trminos, si es legal
o convencional.
La individualizacin del actor y de su
representante se entiende cumplida me-
diante la indicacin de tres elementos, a
saber: nombre, domicilio y profesin u
oficio. Otras legislaciones son ms estric-
tas y exigen tambin que se expresen la
nacionalidad y el estado civil del actor.
Por nombre se entiende tanto el propio
individual o de pila, como el de familia o
apellidos paterno y materno; el domici-
lio que es la residencia, acompaada, real
o presuntivamente, del nimo de perma-
necer en ella; y la profesin u oficio que
es la actividad preferente del actor.
EDITORIAL IURIDICA DE CHILE 22
Esta exigencia legal de la perfecta ifr'l
dividualizacin del actor y de su repre-
sentante, en el escrito de demanda, per-
mite que el demandado sepa, a ciencia
cierta, con quin ha de litigar, y las ex-
cepciones o defensas que puede oponer-
les; permite, adems, saber quines son
partes y a quines debern notificarse las
resoluciones que se expidan; y permite;
por ltimo, saber a quines afectar, con
la autoridad de la cosa juzgada, la sen-
tencia llamada a resolver el pleito.
3. El nombre, domicilio y profesin u ofi-
cio del demandado.
La individualizacin del demandado
es indispensable, al igual que la del ac-
tor, para saber contra quin se dirige la
demanda y a quin debe notificarse; para
determinar su capacidad y la competen-
cia del tribunal en razn de territorio; y,
en fin, para apreciar los efectos de la cosa
juzgada.
Nada dice la ley en cuanto a la indivi-
dualizacin del representante del deman-
dado, a diferencia del nmero anterior;
pero estimamos que, en caso de que el
demandado sea incapaz o tenga un re-
presentante convencional, la individuali-
zacin del respectivo representante se
hace tambin indispensable.
4. La exposicin clara de los hechos y
fundamentos de derecho en que se apoya.
Este requisito dice relacin con la
substancia o mdula del juicio mismo. Las
pretensiones del actor se basan en deter-
minados hechos, a los cuales les aplica
determinados preceptos legales; de ma-
nera que su exposicin, fuera de la clari-
dad necesaria, debe contener los hechos
en que se apoya la demanda, como igual-
mente sus respectivos fundamentos de
derecho.
La exposicin clara de los hechos en
que se apoya la demanda permite califi-
car de antemano, y con facilidad, la ac-
cin deducida y, por consiguiente,
determinar la competencia del tribunal;
sirve tambin para saber, con posteriori-
dad, qu hechos han sido reconocidos y
cules, en cambio, han sido controverti-
dos, lo que influir, decididamente, en la
recepClon de la causa a prueba; y, por
ltimo, facilita tambin al tribunal el es-
tablecimiento de los hechos en la senten-
cia definitiva, mediante la ponderacin o
examen de las pruebas pertinentes que
se hayan rendido.
La exposicin clara de los funda-
mentos de derecho en que se apoya la
demanda, en cambio, tiene por objeto
facilitar la calificacin jurdica de la re-
lacin de derecho substancial o mate-
rial controvertida. Esta exigencia se
cumple expresando nicamente el ac-
tor las razones de orden jurdico que, a
su juicio, justifican la declaracin del
derecho substancial reclamado. No ne-
cesita individualizar la accin por su
nombre tcnico ni indicar los precep-
tos legales aplicables; pues esta labor la
efectuar el tribunal al momento de pro-
nunciar sentencia, aunque para la re-
gularidad y marcha del proceso es
conveniente hacerlo.
5. La enunciacin precisa y clara, con-
signada en la conclusin de las peticiones que
se sometan al fallo del tribunal.
Es la parte petitoria de la demanda.
Debe expresarse con la suficiente clari-
dad y precisin, y dentro del escrito de
demanda tiene una ubicacin determi-
nada, esto es, en la parte final del mis-
mo. Estas peticiones del actor, unidas a
las que plantea el demandado en su es-
crito de contestacin, constituyen la cues-
tin controvertida del pleito y, en
consecuencia, determinan su propia
competencia. La sentencia definitiva,
pues, deber pronunciarse sobre las pe-
ticiones de las partes, y nicamente so-
bre ellas, a menos que se trate de un
caso en que el tribunal pueda actuar de
oficio, so pena de que en la dictacin
de la sentencia se incurra en vicios de
forma que autoricen anularla por me-
dio de los recursos procesales correspon-
dientes. En el orden de importancia, esta
exigencia legal reviste el mximo de in-
ters, puesto que el actor, al formular
sus peticiones al tribunal, concreta pe-
rentoriamente sus pretensiones ante este
ltimo y frente al demandado.
23
328. De los documentos acompaa-
dos a la demanda. Dispone el artculo
255 del Cdigo de Procedimiento Civil
que "Los documentos acompaados a la
demanda debern impugnarse dentro del
trmino de emplazamiento, cualquiera sea
su naturaleza".
El precepto legal antes transcrito sus-
tituy el primitivo articulado (art. 1 N 44
de la Ley 18.705, de 24 de marzo de 1988)
que daba margen para que tanto la doc-
trina como lajurisprudencia clasificaran los
documentos o instrumentos de que pue-
de valerse el demandante en: documen-
tos en que funda su derecho y documentos
que slo lojustifican, clasificacin que hoy
carece de trascendencia, puesto que to-
dos los documentos pueden ser acompa-
ados por las partes dentro de una misma
oportunidad legal. No existe la obligacin
del demandante ni del demandado de
acompaar documentos fundantes de la
demanda, reconvencin o excepcin y la
contraparte carece del derecho de forzar-
lo a ello. El artculo 348, inciso primero,
establece que "Los instrumentos podrn
presentarse en cualquier estado del juicio hasta
el vencimiento del trmino probatorio en
primera instancia y hasta la vista de la cau-
sa en segunda instancia". *
329. Resolucin que recae en el es-
crito de demanda. Una vez presentada la
demanda por el actor al tribunal que es-
tima competente en razn de las reglas
de competencia absoluta y relativa que
ya conocemos, ste la examina desde un
punto de vista formal, o sea, a la luz de
las exigencias contenidas en el artculo
254 del Cdigo de Procedimiento Civil.
En caso que este examen permita al
juez apreciar que la demanda no contie-
ne las indicaciones ordenadas en los tres
primeros nmeros del artculo antes cita-
do, puede de oficio no darle curso (art. 256
CPC).
* Inciso primero del arto 348, sustituido por lo
sealado por el arto 1, N 48, de la Ley N 18.705,
de 24 de mayo de 1988. Actualizado Depto. D. Pro-
cesal U. de Chile.
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C.
Por el contrario, si el juez no hace
este examen, o bien ste resulta satisfac-
torio, admitir la demanda a tramitacin
y conferir traslado de ella al demandado
para que la conteste (art. 257 CPC).
Se trata, en consecuencia, de un de-
creto, providencia o provedo ya que es
una resolucin destinada solamente a dar
curso progresivo a los autos. Admitir a
tramitacin la demanda, implica consta-
tar su correccin formal en sus requisitos
mnimos; y conferir traslado de ella,.es
fijar un plazo al demandado para qu 'la
conteste, bajo apercibimiento de prose-
guir en su rebelda.
330. El emplazamiento del demanda-
do. En su oportunidad manifestamos, que
toda accin se propone mediante una de-
manda, la cual, presentada ante tribunal
competente, debe ser tramitada conforme
a reglas de procedimiento preestablecidas,
segn la naturaleza de la accin ejercita-
da; agregamos, adems, que cualquiera que
fuere el procedimiento a seguir, la deman-
da y la resolucin que la admite a tramita-
cin, deben ser legalmente notificadas al
demandado, quien tiene un plazo para
comparecer a defenderse; y que la notifi-
cacin de la demanda hecha en forma le-
gal al demandado y el transcurso del plazo
que ste tiene para contestarla, reciben el
nombre tcnico de emplazamiento.
En consecuencia, el emplazamiento
consta de dos elementos: 1. Notificacin
del demandado hecha en forma legal; y
2. Transcurso del plazo que la ley fija al
demandado para que comparezca a de-
fenderse. Esto nos lleva, naturalmente, a
analizar en qu forma se produce el em-
plazamiento del demandado dentro del
juicio ordinario de mayor cuanta.
La notificacin de la demanda al de-
mandado, por ser la primera notificacin
que se practica dentro del juicio, deber
hacrsele personalmente (art. 40 CPC). Al
actor, en cambio, se le notifica por el es-
tado diario (art. 40 CPC).
El plazo que tiene el demandado para
comparecer a defenderse varia segn sea
el lugar en que haya sido notificado. As:
EDITORIAL JURI DICA DE CHILE 24
a) Es de quince das, si el demandado
es notificado en el lugar donde funciona t
el tribunal (art. 258, inc. O, CPC). Ejem-
plo: se interpone la demanda en uno de
los juzgados de letras* de Valparaso y el
demandado es notificado tambin en la
ciudad de Valparaso.
b) Se aumentar este trmino con tres
das ms, o sea, es de dieciocho das, si el,
demandado se encuentra en el mismo te-
rritorio jurisdiccional, pero fuera de los
lmites de la comuna que sirva de asiento
al tribunal (art. 258, inc. 2, CPC). Ejem-
plo: se interpone la demanda en uno de
los juzgados de letras* de Valparaso y el
demandado es notificado en la ciudad de
Via del Mar; y
c) Es de dieciocho das, y a ms el au-
mento que corresponda al lugar en que se
encuentra el demandado, si ste es noti-
ficado en un territorio** diverso o fuera
del territorio de la Repblica (art. 259,
inc. O, CPC). Ejemplo: se interpone la
demanda en uno de los juzgados de le-
tras* de Valparaso y se notifica al de-
mandado en Valdivia. El plazo ser de
veintiocho das, suponiendo que el au-
mento que corresponda entre Valparaso
y Valdivia, sealado en la tabla respecti-
va, sea de diez das.
Ahora bien, este aumento ser deter-
minado en conformidad a una tabla que
cada cinco aos formar la Corte Supre-
ma con tal objeto, tomando en conside-
racin las distancias y las facilidades o
dificultades que existan para las comuni-
caciones, y se formar en el mes de no-
viembre del ao que preceda al del
vencimiento de los cinco aos indicados,
para que se ponga en vigor en toda la
Repblica desde ello de marzo siguien-
te; se publicar en el Diario Oficial, y se
* Artculo reemplazado por el que aparece en
el texto por el N 3 del art. quinto de la Ley
N 18.776, de fecha 18 de enero de 1989. Actuali-
zado Depto. D. Procesal U. de Chile.
** Inciso modificado, como aparece en el tex-
to, con el N 4 del art. quinto de la Ley N 18.776,
de 18 de enero de 1989. Actualizado Depto. D. Pro-
cesal U. de Chile.
fijar a lo menos dos meses antes de su
vigencia, en los oficios de todos los secre-
tarios de Cortes yJuzgados de Letras (art.
259, inc. 2, CPC).
Puede suceder que los demandados sean
varios, esto es, dos o ms. En tal caso, sea
que obren separada o conjuntamente, el
trmino para contestar la demanda corre-
r para todos a la vez, y se contar hasta
que expire el ltimo trmino parcial que
corresponda a los notificados (art. 260 inc.
2 CPC). Ejemplo: el juicio se ha iniciado
en Valparaso en contra de dos demanda-
dos, y stos han sido notificados tambin
en Valparaso; pero en fechas diferentes,
pongamos por caso, el da 2 del mes en
curso al demandado A, y el da 5 de igual
mes al demandado B. Tanto para el pri-
mer demandado como para el segundo,
el plazo para contestar la demanda, sea
que obren conjunta o separadamente, ven-
ce el da 20 de dicho mes.
Tambin puede suceder que proce-
da, de acuerdo al artculo 18 CPC, la plu-
ralidad de demandantes. En esos casos
los plazos antes sealados sern aumen-
tados en un da por cada tres demandan-
tes sobre diez que existan en el proceso,
no pudiendo exceder de treinta das di-
cho plazo adicional (art. 260 inc. 2
CPC).*
Todo lo anterior nos permite sealar
las caracteristicas generales que presenta
el plazo que tiene el demandado para
contestar la demanda en juicio ordinario
de mayor cuanta:
a) Es un plazo de das y, por consi-
guiente, se entiende suspendido durante
los feriados (art. 66 CPC);
b) Es un plazo legal y, por consiguien-
te, a diferencia de los plazos judiciales,
no puede ser prorrogado (art. 67 CPC);
c) Es un plazo variable, puesto que,
como hemos visto anteriormente, difiere
en su duracin, segn sea el lugar en que
es notificado el demandado;
d) Es un plazo fatal por cuanto el solo
hecho de su vencimiento implica extin-
* Norma introducida por el artculo 2 de la
Ley N 19.743 de 8 de agosto de 2001.
25
cin del derecho de contestar la deman-
da,* (artculo 64),** (artculo 78 CPC).
e) Si fueren varios los demandados,
es individual para su iniciacin, y comn
para su extincin o vencimiento (art. 260
CPC).
No olvidemos tampoco que el empla-
zamiento del demandado reviste excep-
cional importancia dentro del proceso,
puesto que da nacimiento a la relacin
procesal, esto es, al conjunto de vnculos
jurdicos entre las partes y el tribunal y
entre las partes entre s y que, por tal
razn, la ley lo ha elevado a la categora
de trmite o diligencia esencial (art. 795,
N O, CPC). Por ello su omisin autoriza
interponer en contra de la sentencia de-
finitiva pronunciada en condiciones tan
irregulares recurso de casacin en la for-
ma, tendiente a anularla y a reponer el
proceso al estado de cumplirse con el em-
plazamiento del demandado (art. 768,
N 9, CPC).
Se entiende que ha habido omisin del
emplazamiento del demandado cuando no
se le ha notificado la demanda; cuando,
habindosele notificado, tal notificacin ha
sido practicada en forma ilegal; o bien,
cuando, habindose notificado legalmen-
te la demanda, se ha dado por evacuado
el trmite de contestacin a la demanda
por parte del demandado, sin estar an
vencido el trmino que la ley le ha conce-
dido para cumplir con tal trmite.
331. Modificacin de la demanda.
Puede que el demandante, despus de
presentada la demanda al tribunal, desee
introducir algunas modificaciones. Est
facultado por la ley para adoptar actitud
semejante? Para contestar esta interrogan-
te, a nuestro juicio, es preciso colocarse
en diversas situaciones:
* Artculo 64 CPC sustituido por el que apare-
ce en el texto, por el artculo 1 N 4, de la Ley
N" 18.882, de 20 de diciembre de 1989.
** Artculo 78 epe sustituido, por el que apa-
rece en el texto, por el artculo 1 N 9, de la Ley
N 18.705, de 24 de mayo de 1988.
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a) Antes de notificada la demanda al reo,
podr el actor retirarla sin trmite algu-
no, y se considerar como no presentada
(art. 148, parte P, CPC). Retirada, pues,
materialmente la demanda, har con ella
el demandante lo que le plazca y podr,
incluso, presentar una nueva, enteramen-
te diversa de la anterior;
b) Una vez notificada la demanda a cual-
quiera de los demandados y antes de la contes-
tacin, podr el demandante hacer en ella
las ampliaciones o rectificaciones que s t ~
me convenientes (art. 261, inc. 1, CPC).
Obsrvese que no se trata de simple retiro
de la demanda como en el caso anterior,
sino de modificaciones que ser necesario
presentar por escrito y pedir se tenga como
complemento o modificacin de la deman-
da primitiva. Es talla importancia de estas
modificaciones que para los efectos de su
notificacin se considerarn como una de-
manda nueva, y slo desde la fecha en
que esta diligencia se practique correr el
trmino para contestar la demanda primi-
tiva (art. 261, inc. 2, CPC);
c) Contestada que sea la demanda, en el
escrito de rplica podr el actor ampliar,
adicionar, o modificar las acciones que
haya formulado en la demanda, pero sin
que pueda alterar las que sean objeto prin-
cipal del pleito (art. 312 CPC); y
d) Despus de notificada la demanda, po-
dr el demandante, en cualquier estado
del juicio, desistirse de ella ante el tribu-
nal que conozca del asunto, y esta peti-
cin se someter a los trmites establecidos
para los incidentes (art. 148, parte 2
a
,
CPC). Esta ltima actitud del demandan-
te, de excepcional importancia, tiene el
efecto de extinguir las acciones que se hi-
cieron valer en la demanda, y mal podra
deducirlas nuevamente, aun cuando fue-
ran ampliadas o rectificadas.
332. Actitudes del demandado una vez
notificado de la demanda. Notificado que
sea legalmente el demandado del escrito
de demanda, puede adoptar, a nuestro
juicio, tres actitudes diferentes: aceptar lisa y
llanamente la demanda, o no contrade-
cir en forma substancial y pertinente los
fDlTORlo\L JURIDICA DE CHILE 26
hechos que le sirven de fundamento; no
hacer nada, esto es, asumiendo una acti-
tud de completa pasividad e indiferen-
cia; y, por ltimo, que ser el caso de ms
ordinaria ocurrencia, defenderse.
Ahora bien, cada una de estas diver-
sas actitudes del demandado frente a la
demanda que se ha interpuesto en su con-
tra, tiene una decisiva influencia en el
curso posterior que debe seguir el juicio.
En efecto:
a) Si el demandado acepta llanamente las
peticiones del demandante o si en sus escritos
no contradice en materia sustancial y perti-
nente los hechos sobre que versa el juicio, el
tribunal mandar citar a las partes para
or sentencia definitiva, una vez evacua-
do el traslado de la rplica (art. 313, inc.
P, CPC).
Aceptar la demanda implica recono-
cer la exactitud de los hechos y de los
fundamentos de derecho en que se apo-
ya. Dada la excepcional gravedad que este
acto procesal tiene para el demandado,
la ley exige que si la aceptacin de la
demanda se efecta por medio de man-
datario ste debe estar premunido de fa-
cultad especial (art. 7, inc. 2, CPC).
Puede tambin que el demandado re-
conozca los hechos y desconozca, en cam-
bio, los fundamentos de derecho en que
se apoya la demanda. Se trata de una si-
tuacin, como se ve, diversa de la ante-
rior en que hay pleno acatamiento del
demandado frente a los hechos y al dere-
cho invocados por el demandante. En el
fondo, en este segundo caso, el deman-
dado reconoce los hechos, pero les niega
las consecuencias jurdicas que les asigna
el actor.
Sin embargo, en ambos casos, sea que
estemos en presencia de un allanamiento
total de la demanda, o de la falta de con-
tradiccin en materia substancial y perti-
nente en cuanto a los hechos, la suerte
que sigue la tramitacin del juicio es la
misma, o sea, el tribunal mandar citar a
las partes para or sentencia definitiva una
vez evacuado el traslado de la rplica.
En otros trminos, contestada que sea
la demanda, se dar traslado al deman-
dante para que replique; evacuada la r-
plica o en rebelda del demandante, se
dar, en seguida, traslado al demandado
para que duplique; y, una vez evacuada
la dplica o en rebelda del demandado,
el tribunal citar a las partes para or sen-
tencia. En consecuencia, en estos casos
se prescinde, entera y solamente, de los
trmites de la prueba;
b) Si el demandado no contesta la de-
manda en el plazo que la ley le ha sealado
para estos efectos -quince das, o dieciocho
das, o dieciocho das ms el aumento- y
el demandante desea que los autos sigan
su curso progresivo, simplemente evacua
su trmite de rplica.
Se trata de un trmino fatal, como
tuvimos oportunidad de sealar.
Este silencio del demandado produ-
ce en doctrina la llamada contestacin
ficta de la demanda, la cual, en el hecho,
se traduce en su negacin; por cuanto en
derecho procesal quien calla nada reco-
noce ni otorga, a menos que exista una
disposicin legal expresa que consagre
una sancin semejante.
Declarada la rebelda de la contesta-
cin a la demanda de oficio o a peticin
de parte, el tribunal proveer traslado al
demandante para replicar; evacuada la
rplica se dar, en seguida, traslado al
demandado para duplicar; y luego, eva-
cuada la dplica el tribunal examinar
los autos para ver si debe recibir o no la
causa a prueba, y esta seguir as su curso
normal.
La rebelda de la contestacin a la
demanda, lo mismo que las dems rebel-
das en la primera instancia, no tienen
otro alcance que dar por evacuado ficti-
ciamente el trmite de que se trata, a oh-
27
jeto de que los autos puedan continuar
en su curso progresivo, siendo esta situa-
cin neutra, ya que declarada o no la re-
belda, igual se sigue el curso progresivo
de los autos bastando evacuar la parte
diligente el trmite que le corresponde,
pudiendo por consiguiente la parte re-
belde hacerse presente en cualquier mo-
mento posterior, siempre y cuando,
naturalmente, respete todo lo obrado; a
menos que estuviramos en presencia de
un caso de fuerza mayor, o de falta real
de notificacin, que da origen a la nuli-
dad procesal y que estudiaremos en mo-
mento oportuno.
El efecto de la rebelda en la segunda ins-
tancia. Aqu su trascendencia es mayor,
pues al litigante rebelde no se le toma
ms en consideracin; y si, posteriormen-
te, desea comparecer, tendr que hacer-
lo por medio de procurador del nmero
o de abogado habilitado.
c) Si el demandado se defiende, ser ne-
cesario ver previamente en qu forma lo
hace, para saber la tramitacin que se-
guir el juicio. Se comprende que esta
ltima actitud del demandado es en la
prctica, la de ms ordinaria ocurrencia.
La defensa del demandado se mani-
festar por oponer a la demanda excep-
ciones dilatorias, como previas a la
contestacin, o, simplemente, contestn-
dola. En la contestacin a la demanda, el
demandado opondr excepciones peren-
torias, alegaciones o defensas, e incluso
todava puede reconvenir.
A continuacin estudiaremos, en de-
talle, cada una de estas actitudes defensi-
vas del demandado, por su especial
importancia y trascendencia en la mar-
cha del pleito.
lDlTORiilL /URI DleA DE CHILE
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Captulo Tercero
LAS EXCEPCIONES DILATORIAS
SUMARIO: 1. Generalidades; II. Anlisis particular de las excepciones dilatorias;
III. Procedimiento; IV. Excepciones mixtas o anmalas.
1. Generalidades
333. Concepto. El trmino excepcin
tiene un doble significado: uno, sinni-
mo de toda defensa que opone el de-
mandado a las peticiones del actor para
enervarlas; y otro, equivalente tambin a
la defensa del primero de los nombra-
dos, pero fundada en la defectuosa ma-
nera de haberse ejercitado la accin. La
primera clase de defensa que puede es-
grimir el demandado mira al fondo de la
accin deducida; recibe el nombre tcni-
co de excepcin perentoria; y se halla, por
consiguiente, contemplada en las leyes de
fondo o sustantivas. La segunda clase de
defensa de que puede valerse el deman-
dado mira a la forma del procedimiento;
se llama excepcin dilatoria; y, en conse-
cuencia, su reglamentacin la encontra-
mos en las leyes procesales.
Para nuestro derecho positivo, son ex-
cepciones dilatorias aquellas que tienen por
objeto corregir vicios de procedimiento
sin afectar al fondo de la accin deduci-
da (art. 303, N 6, CPC).
Su misin es, pues, precisa y determi-
nada, y del ms alto significado: corregir
defectos de procedimiento, procurar que
la relacin procesal se forme vlidamen-
te, o sea, exenta de todo vicio que ms
tarde pudiera servir para anularla. Como
se comprende, el demandado al formu-
lar una excepcin dilatoria se abstendr
de contestar la demanda, no entrar al
fondo de la causa y, en consecuencia, de-
ber oponerla en forma previa a la cues-
tin principal, la que quedar intertanto
suspendida. En el hecho, las excepciones
dilatorias para que puedan cumplir ade-
29
cuadamente su finalidad correctiva del
procedimiento, retardan la entrada aljui-
cio; y de ah que, en la prctica, a veces
son utilizadas como medio de obtener su
consecuencia y no el objetivo antes sea-
lado.
334. Cules son? El artculo 303 del
Cdigo de Procedimiento Civil contesta
nuestra pregunta y, al efecto, prescribe:
"Slo son admisibles como excepciones
dilatorias: la. La incompetencia del tri-
bunal ante quien se haya presentado la
demanda; 2
a
. La falta de capacidad del
demandante, o de personera o represen-
tacin legal del que comparece en su
nombre; 3
a
. La litispendencia; 4
a
. La inep-
titud del libelo por razn de falta de al-
gn requisito legal en el modo de
proponer la demanda; sa. El beneficio
de excusin; y 6
a
En general, las que se
refieran a la correccin del procedimien-
to sin afectar al fondo de la accin dedu-
cida".
En consecuencia, nuestra ley recono-
ce dos grupos de excepciones dilatorias: el
primero, constituido por las cinco prime-
ras excepciones dilatorias taxativamente
enumeradas; y el segundo, por aquellas que,
participando de las caractersticas seala-
das en el nmero sexto, pueden ser en-
casilladas en dicho nmero.
Es por ello que se afirma con funda-
mento que la enumeracin de las excep-
ciones dilatorias, contenida en el artculo
303 ya transcrito, no es taxativa.
Empero la clasificacin de las excep-
ciones dilatorias en los dos grupos antes
sealados no tiene importancia alguna,
pues todas ellas estn sometidas a una
EDITORII\L JURI DleA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo Manual de Derecho Procesal
n. Anlisis particular de
las excepciones dilatorias
misma reglamentacin. Solamente que las
del primer grupo presentan la ventaja de
que, estando contempladas expresamen-
te en la ley, con el carcter de dilatorias,
no darn margen a dificultades, en la
prctica, al esgrimirlas como tales; en cam-
bio, las pertenecientes al segundo grupo,
al ser opuestas, podrn originar una cues-
tin previa destinada a constatar si tie-
nen las caractersticas sealadas en el
nmero 6 del artculo 303 del Cdigo
de Procedimiento Civil y, por consiguien-"
te, si son o no legalmente excepciones"
dilatorias.
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lfll10RIAL JURIOICA DI CHilE
diverso pero sobre la misma materia. Esta
definicin de la litispendencia demues-
tra que sus requisitos o elementos consti-
tutivos son tres; a saber: existencia de un
juicio anterior; seguido entre las mismas
partes; y siempre que verse sobre la mis-
ma materia.
Ahora bien, el juicio anterior podr
estar radicado ante el mismo tribunal que
est conociendo del nuevo juicio en que
se plantear la correspondiente excepcin
de litispendencia, o bien, ante tribunal
diverso; y se entiende que existe tal jui-
cio, desde el momento en que el deman-
dado ha sido notificado de la demanda,
pues desde ese instante ha nacido la rela-
cin procesal.
Debe estarse siguiendo el anterior
pleito entre las mismas partes, o sea, debe
existir identidad legal entre las partes del
primer pleito y del segundo, no impor-
tando el papel procesal que ellas desem-
pean en uno y otro pleito. Se podr as
ser demandante en el primer juicio y de-
mandado en el segundo o viceversa.
Por ltimo, ambos juicios deben ver-
sar sobre la misma materia, esto es, tanto
la cosa pedida cuanto la causa de pedir,
hechas valer en un pleito, deben ser idn-
ticas a las reclamadas en el otro pleito.
El fundamento de esta excepcin dila-
toria es obvio: evitar que las partes liti-
gantes pretendan subsanar los posibles
errores cometidos en un juicio, renovan-
do este mismo juicio mediante una nue-
va demanda. Por tal razn acogida la
excepcin dilatoria de litispendencia, pro-
duce el ifecto de paralizar el nuevo pleito,
intertanto se falle el primero por senten-
cia ejecutoriada; a objeto de que la parte
favorecida con la excepcin de cosa juz-
gada, que pueda emanar de esta senten-
cia, la oponga como excepcin perentoria
en el segundo pleito, que estaba paraliza-
do, y cuya tramitacin ha debido reini-
ciarse a virtud de la terminacin del
primero.
338. Ineptitud del libelo. Est consa-
grada en los siguientes trminos: "Slo
31
Ejemplo de falta de capacidad del ac-
tor: deduce demanda una persona de 18
aos de edad; ejemplo de falta de perso-
nera del que comparece a nombre del
actor: deduce la demanda a nombre de
este ltimo un mandatario o apoderado
que no tiene facultades judiciales; yejem-
plo de falta de representacin legal del
que comparece a nombre del actor: de-
duce la demanda a nombre de este lti-
mo, que es persona demente sujeta a
interdiccin, un individuo que se dice cu-
rador sin serlo en realidad.
y si el demandado es persona incapaz
o se ha notificado la demanda a persona
que no es su mandatario o representante
legal, qu actitud podra asumir?
En verdad que no puede oponer la
excepcin dilatoria que estamos comen-
tando, porque ella se refiere exclusiva-
mente al actor; pero pensamos que no
habra inconveniente legal para corregir
este procedimiento vicioso, mediante la
excepcin 6
a
del artculo 303 del Cdigo
de Procedimiento Civil, fundada en la in-
capacidad del demandado o en la falta
de personera o representacin legal de
la persona que se pretende que compa-
rezca en su nombre, segn el caso.
Naturalmente que esta excepcin di-
latoria la deducir el demandado a su
propio nombre o a travs de su represen-
tante legal, segn sea el fundamento en
que se la apoye.
Tampoco divisamos inconveniente al-
guno para que el seudomandatario o el
seudorrepresentante legal se apersone al
juicio y solicite, por va incidental, la de-
claracin de ineficacia de la notificacin
de la demanda que se le ha practicado,
por habrsele atribuido una personera
o representacin que, en realidad, no
tiene.
337. Litispendencia. Se halla estable-
cida en la siguiente forma: "Slo son ad-
misibles como excepciones dilatorias: ...
3
a
La litispendencia... " (art. 303, N 3,
CPC).
Se dice que hay litispendencia cuando
entre las mismas partes existe otro juicio
cambio, en el segundo caso, la falta
reclamo de la incompetencia relativa del"
tribunal, en la oportunidad legal debida,
produce la prrroga tcita de la compe-
tencia (art. 187 COT).
Tambin es del caso llamar la atencin
acerca de que la excepcin dilatoria de
incompetencia del tribunal ante quien se
haya presentado la demanda, no cabe con-
fundirla con la excepcin de falta de juris-
diccin del mismo, pues esta ltima no
tiende a corregir vicios de procedimiento,
sino que afecta al fondo de la accin de-
ducida; en otros trminos, esta ltima ex-
cepcin tiende a enervar la accin deducida
y, por consiguiente, es perentoria y debe
ser opuesta al contestarse la demanda.
336. Incapacidad, falta de personera
o de representacin legal. Esta excepcin
dilatoria se encuentra establecida en los
siguientes trminos: "Slo son admisibles
como excepciones dilatorias: ... 2
a
. La fal-
ta de capacidad del demandante, o de
personera o representacin legal del que
comparece en su nombre... " (art. 303,
N 2, CPC).
La lectura de este precepto demues-
tra, a la simple vista, que l contempla
tres situaciones diversas: falta de capacidad
del demandante; falta de personera del
que comparece en su nombre; y falta de
representacin legal del que comparece
en su nombre. La capacidad del actor, al
igual que la personera o representacin
legal del que comparece en su nombre,
es requisito indispensable para accionar
vlidamente, o sea, para que la relacin
procesal nazca exenta de todo vicio y la
sentencia que se pronuncie produzca los
efectos que le son propios entre las par-
tes litigantes.
El problema de determinar si el de-
mandante es o no capaz, si el mandata-
rio del actor tiene o no facultad de actuar
en su nombre, y si el representante legal
del mismo es en verdad tal representan-
te, debe ser resuelto a la luz de las dispo-
siciones legales de fondo o substantivas
por cuanto el Cdigo de Procedimiento
Civil no contiene normas al respecto.
30
335. Incompetencia del tribunal. Se
halla establecida en los siguientes trmi-
nos: "Slo son admisibles como excep-
ciones dilatorias: 1a. La incompetencia del
tribunal ante quien se haya presentado
la demanda... " (art. 303, N 1, CPC).
Recordemos que la incompetencia del
tribunal puede ser de dos clases: absoluta
y relativa; y que las cuestiones de compe-
tencia pueden promoverse por declinato-
ria y por inhibitoria.
Desde el momento en que la ley no
distingue, creemos que la excepcin dila-
toria de incompetencia del tribunal ante
quien se haya presentado la demanda po-
dr fundarse, ya en la incompetencia abso-
luta, ya en la incompetencia relativa del
mismo; y que si la cuestin de competen-
cia se promueve por va declinatoria, o por
va inhibitoria, en ambos casos presentar
el carcter de excepcin dilatoria.
Tiene importancia distinguir segn si
la excepcin dilatoria de incompetencia
del tribunal ante quien se haya presenta-
do la demanda se funda en la incompe-
tencia absoluta o relativa del mismo, pues,
en el primer caso, si no se formula la
correspondiente excepcin dilatoria en
la oportunidad legal debida, siempre pue-
de formularse en el curso del juicio como
incidente de nulidad de todo lo obrado
(arts. 10 COT y 84, inc. 2, CPC); y, en
FDITORIAl lURIOICA DE eHI Ll
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m
mi conocimiento, y antes de hacer cual-
quiera gestin principal en el pleito. En
cambio, la demanda ha sido interpuesta
por un incapaz, y en vez de oponer la
excepcin dilatoria pertinente en el plazo
para contestar la demanda, me limito a
defenderme sobre el fondo y, estando el
proceso en estado de prueba, formulo la
correspondiente incidencia sobre falta de
capacidad del demandante. Esta excepcin
dilatoria, aparentemente extempornea,
deber ser acogida en definitiva, pues se
funda en un vicio que anula el proceso
(arts. 84 y 85 CPC); Y
b) Las excepciones dilatorias de in-
competencia del tribunal y de litispen-
dencia "podrn oponerse en segunda
instancia en forma de incidente" (art. 305,
inc. 2, CPC).
3A 2-"21
341. Tramitacin, fallo y recursos. Las
excepciones dilatorias se tramitarn como
incidentes (art. 307, inc. l, CPC).
Se trata, por consiguiente, de una
cuestin accesoria que requiere especial
pronunciamiento del tribunal; y se pro-
mueve y falla la excepcin dilatoria den-
tro de la misma pieza de auto, porque
sin su previa resolucin no se puede se-
guir sustanciando la causa principal
(art. 87, inc. 1, CPC).
Es, adems, un incidente ordinario,
de suerte que su tramitacin, recordan-
do las enseanzas anteriores, es la siguien-
te: opuesta la excepcin dilatoria, se
confiere traslado por tres das al actor, y
haya o no respuesta de ste dentro de
dicho plazo, el tribunal resuelve el inci-
dente, a menos que existan puntos sus-
tanciales, pertinentes y controvertidos, en
cuyo caso lo recibir a prueba por un
trmino de ocho das y, vencido que sea,
dictar el correspondiente fallo sobre el
incidente. No obstante, el tribunal podr
resolver de plano, esto es, sin necesidad
de tramitarlas ni de recibirlas a prueba,
aquellas excepciones dilatorias cuyo fallo
se pueda fundar en hechos que consten
del proceso, o sean de pblica notorie-
*Modificacin introducida por el artculo 10--L dad, lo que el tribunal consignar en su
de la Ley N 18.882 de 20 de diciembre de (art. 89 CPC).
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"i EDITORIAL jURIDICA DE CHla
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BIBLIOTECA J
Se trata como se ve, del trmino para
contestar la demanda, el cual, para los
efectos de oponer las excepciones dilato-
rias, reviste el carcter de fatal, por ser
un plazo establecido para las partes en el
Cdigo de Procedimiento Civil (art. 64
CPC).*
La regla general anterior presenta dos
excepciones:
a) Si las excepciones no se han opues-
to todas en un mismo escrito y dentro
del trmino de emplazamiento ya indica-
do, "se podrn oponer en el progreso del
juicio slo por va de alegacin o defen-
sa, y se estar a lo dispuesto en los artcu-
los 85 y 86" (art. 305, inc. 2, CPC).
Qu significado o alcance tiene este
precepto? En otros trminos dispone que
si las excepciones dilatorias no han sido
opuestas como tales en la forma y opor-
tunidad que la ley seala, pueden formu-
larse con el mismo carcter de dilatorias
al contestar la demanda o en el curso
posterior del juicio, incluso, estando las
partes citadas para or sentencia. Sin em-
bargo, habr que estarse a lo prevenido
en los artculos 85 y 86, o sea, que, en
principio, estas dilatorias informales y ex-
temporneas tendrn que ser rechazadas,
a menos que se funden en un vicio que
anule el proceso, o en una circunstancia
esencial para la ritualidad o la marcha
del mismo.
Ejemplo: la demanda no se ajusta a
los requisitos de forma sealados en el ar-
tculo 254 del Cdigo de Procedimiento
Civil, y en vez de oponer la excepcin di-
latoria de ineptitud del libelo dentro del
plazo para contestarla, me limito a eva-
cuar este trmite, defendindome sobre
el fondo de la accin deducida, y luego, al
presentar el escrito de dplica, hago no-
tar el defecto de forma de que adolece la
demanda. Esta excepcin dilatoria deber
rechazarse, en definitiva, porque deb opo-
nerla tan pronto el hecho en que se fun-
da, esto es, la ineptitud del libelo, lleg a
111. Procedimiento
340. Manera y oportunidad de opo-
ner excepciones dilatorias. La manera de
hacer valer las excepciones dilatorias es
oponindolas todas en un mismo escrito (art.
305, inc. l, parte P, CPC). Ejemplo: el
tribunal ante quien se present la deman-
da es incompetente, el mandatario del
demandante carece de suficiente perso-
nera, y la demanda no contiene la expo-
sicin clara de los hechos en que se funda.
Tengo, por consiguiente, tres excepcio-
nes dilatorias que hacer valer en contra
del demandante y las tres debo oponer-
las en un solo y mismo escrito.
La razn de esta disposicin es lgica
y manifiesta. Si as no fuere, el demanda-
do, de mala fe, para alargar eljuicio, ira
formulando las excepciones dilatorias,
que son previas al fondo del mismo, una
en pos de las otras, con la consiguiente
prdida de tiempo.
En cuanto a la oportunidad para opo-
ner las excepciones dilatorias, ello debe
hacerse "dentro del trmino de emplaza-
miento por los artculos 258 a 260"
(art. 305, inc. P, parte 2\ CPC).
en los bienes del deudor principal, y en
las hipotecas o prendas prestadas por ste'
para la seguridad de la misma deuda (art.
2357 CC).
Como se comprende, esta excepcin
dilatoria se har valer por el fiador en
pleito que le siga el acreedor, y su finali-
dad u objetivo es paralizarlo, intertanto
el acreedor no agote los medios judicia-
les en contra del deudor principal, y en
las hipotecas o prendas que ste hu-
biere prestado para caucionar la deuda
misma.
Si con estas nuevas acciones interpues-
tas por el acreedor, no obtiene el pago
de su crdito, no habr ms camino que
reiniciar el juicio que haba seguido pri-
mitivamente en contra del fiador, el cual
se hallaba paralizado, a virtud del benefi-
cio de excusin hecho valer en forma de
excepcin dilatoria.
32
EDITORIAL jURIDICA [)[ CH1U
339. Beneficio de excusin. Est in-
dicado como excepcin dilatoria en la
siguiente forma: "Slo son admisibles
como excepciones dilatorias... 5
a
El be-
neficio de excusin... " (art. 303, N 5,
CPC).
Se entiende por beneficio de excusin el
derecho de que goza el fiador que ha
sido demandado para exigir que antes de
proceder contra l se persiga la deuda
son admisibles como excepciones dilato-
rias: ... 4
a
. La ineptitud del libelo por ra-
zn de falta de algn requisito legal en el
modo de proponer la demanda... " (art.
303, N 4, CPC).
Libelo es sinnimo de demanda y, des-
de el momento en que esta excepcin
dilatoria se funda en la falta de requisitos
legales de aqulla, es del caso relacionar
este precepto con el artculo 254 del C-
digo de Procedimiento Civil, ya estudia-
do, que establece los requisitos de forma '.
especficos que debe contener el escrito
de demanda.
Por consiguiente, el libelo es inepto cuan-
do le falta alguno de los requisitos de
forma especficos sealados por la ley
como obligatorios del escrito de deman-
da. La jurisprudencia, precisando el con-
cepto anterior, agrega que el libelo es
inepto cuando la falta de algn requisito
legal lo hace vago, ininteligible o suscep-
tible de ser aplicado a diversos casos o
situaciones.
Recordemos que si al escrito de de-
manda le falta alguno de los tres prime-
ros requisitos sealados en el artculo 254,
el juez puede de oficio no darle curso,
expresando el defecto de que adolece
(art. 256 CPC). La excepcin dilatoria de
ineptitud del libelo entrar en juego,
pues, cuando a la demanda le falta cual-
quiera de los requisitos sealados en el
artculo 254 del Cdigo de Procedimien-
to Civil; o bien, cualquiera de los tres pri-
meros sealados en tal precepto, y el juez
no haga uso de su facultad de oficio de
no admitir a tramitacin la demanda, ex-
presando el defecto de que adolece para
que pueda ser subsanado.
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
L
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Al dictar sentencia, el tribunal debe-
r tener buen cuidado de fallar a la vez
todas las excepciones que se le hubieren
propuesto conjuntamente; pero si entre
ellas figura la de incompetencia, y el tri-
bunalla acepta, se abstendr naturalmen-
te de pronunciarse sobre las dems, pues,
segn su propia opinin, carece de facul-
tad para conocer sobre ellas (art. 306,
parte 1a, CPC).
Sin embargo, este mismo precepto
agrega: "Lo cual se entiende sin peIjui-
cio de lo dispuesto por el artculo 208".
En otras palabras, si se apela de esta reso-
lucin, el tribunal de alzada puede revo-
carla y negar lugar a la excepcin dilatoria
de incompetencia, en cuyo caso tiene que
pasar a pronunciarse sobre las dems ex-
cepciones dilatorias sin necesidad de nue-
vo pronunciamiento de parte del tribunal
inferior, o sea, prcticamente las resuelve
en nica instancia.
Por ltimo, la resolucin que falla el
incidente de excepcin dilatoria ser auto
o sentencia interlocutoria, segn el caso,
lo cual tendra importancia para el efecto
de los recursos; pero la ley resuelve dere-
chamente el problema de la procedencia
del recurso de apelacin, al prescribir que
"la resolucin que deseche este inciden-
te ser apelable slo en el efecto devolu-
tivo", con lo cual, a contrario sensu, la
que lo acoja ser apelable en ambos efec-
tos (art. 307, ine. 2, CPC).
342. Curso posterior del juicio. De-
sechadas las excepciones dilatorias o sub-
sanadas por el demandante los defectos
de que adolezca la demanda, tendr diez
das el demandado para contestarla, cual-
quiera que sea el lugar en donde le haya
sido notificada (art. 308 CPC).
La ley se pone as en los dos casos
que pueden presentarse con el fallo de
las excepciones dilatorias. Si se deniegan,
quiere decir que el procedimiento estaba
correcto y debe seguir adelante en su tra-
mitacin; a la inversa, si se aceptan, quiere
decir que el procedimiento era defectuo-
so y debe ser subsanado para que pueda
continuarse vlidamente.
EDITORIAL JURIDICA DECHILE 34
Este nuevo plazo que tiene el deman-
dado para contestar la demanda es siem-"
pre fatal, o sea, si no evacua e! trmite en
el plazo sealado sigue el curso progresivo
de los autos con el litigante o parte diligen-
te y no sufre variacin alguna, a diferencia,
de! primitivo, cualquiera que sea el lugar
en que haya sido notificada la demanda.
y desde cundo se cuenta? Si la excer
cin ha sido rechazada, desde la notifica-
cin de la resolucin que as lo ha resuelto;
puesto que, en e! evento de ser apelada,
como lo hemos ya visto, dicha apelacin se
concede en el solo efecto devolutivo. Por
el contrario, si la excepcin dilatoria es aco-
gida, el demandante tendr que subsanar
los defectos en que dicha resolucin se fun-
da; y, desde este momento, comenzar a
correr el plazo de diez das que tiene e!
demandado para contestar la demanda. En
la prctica, en este ltimo caso, para evitar
toda duda al respecto, el demandante pide
al tribunal que se declare que ha subsana-
do el vicio o defecto de que se trata, y a
contar de la notificacin de la resolucin
que as lo declare, comenzar a correr el
ya citado plazo de diez das.
Con todo, la frase "o subsanados por
e! demandante los defectos de que ado-
lezca la demanda", que se contiene en el
precepto legal que comentamos, carece
de la claridad necesaria para su adecua-
da interpretacin. La interrogante que
ella plantea es determinar cundo o en
qu casos los defectos de que adolezca la
demanda podrn ser legalmente subsa-
nados por el actor.
Pensamos que ello acontecer siem-
pre y cuando el mencionado defecto no
llegue a afectar la validez de la relacin
procesal. En otros trminos, si la deman-
da -pongamos por caso- es inepta en la
forma, evidentemente que, al ser acogida
la correspondiente excepcin dilatoria, el
demandante podr subsanar el defecto
que contiene, indicando o completando
las menciones omitidas.
En cambio, si la excepcin dilatoria aco-
gida lo ha sido por incompetencia del tri-
bunal ante e! cual se present la demanda,
o por falta de capacidad del demandante,
o de personera o representacin legal del
que comparece en su nombre, la relacin
procesal ha nacido viciada; pues estas cir-
cunstancias miran a sus condiciones esen-
ciales de validez y, por consiguiente, slo
cabe ordenar el archivo de los autos.
Todo esfuerzo del actor tendiente a
que la misma demanda se radique o pase
ante el tribunal competente; o que se siga
el juicio ahora con su representante legal,
en caso que aqul fuera incapaz, o con su
verdadero representante legal o mandata-
rio con poder suficiente, previa ratifica-
cin de lo obrado, no implica, por cierto,
subsanar defectos de forma de la deman-
da, sino que ello mira ms bien a la vali-
dez de la relacin procesal y, por ende,
escapa a la norma contenida en el artcu-
lo 308 del Cdigo de Procedimiento Civil.
Slo una nueva demanda interpues-
ta ante tribunal competente por el ver-
dadero representante legal del actor o
por su mandatario premunido de poder
suficiente, puede rectificar el procedi-
miento primitivo y viciado utilizado por
el demandante incapaz o por su seudo-
rrepresentante legal o mandatario.
IV. Excepciones mixtas o anmalas
343. Su rgimen legal. Las contempla
el artculo 304 del Cdigo de Procedi-
miento Civil, al disponer: "Podrn tam-
bin oponerse y tramitarse del mismo
modo que las dilatorias la excepcin de
cosa juzgada y la de transaccin; pero, si
son de lato conocimiento, se mandar
contestar la demanda, y se reservarn para
fallarlas en la sentencia definitiva". *
* Artculo sustituido, por el que aparece en el
texto, por el N 1 del an. 5 de la Ley N 18.680,
de 11 de enero de 1988. Actualizado Depto. D. Pro-
cesal U. de Chile.
35
Se trata, en consecuencia, de dos ex-
cepciones de carcter perentorio, pues mi-
ran al fondo de la accin deducida y no
a la correccin del procedimiento, las
cuales, por su importancia, pueden opo-
nerse y tramitarse como dilatorias. De
ah tambin su nombre de mixtas o an-
malas.
Esta disposicin se funda, evidente-
mente, en razones de economa proce-
sal, ya que carece de objeto entrar al
fondo del juicio, cuando de antemano se
sabe que la demanda ser desestimada,
en caso de que el demandado, al contes-
tarla, oponga cualquiera de estas dos ex-
cepciones perentorias. Es preferible, pues,
darle al demandado la oportunidad de
hacerlas valer en forma previa sin los es-
fuerzos que significa contestar sobre el
fondo.
Ahora bien, una vez opuestas y trami-
tadas estas excepciones perentorias como
si fueran dilatorias, esto es, en un mismo
escrito, dentro del trmino de emplaza-
miento, y confiriendo traslado por tres
das al actor, el tribunal puede adoptar
dos actitudes:
a) Fallarlas de inmediato, sin peIjui-
cio de haber abierto un trmino proba-
torio dentro del incidente, si cree que es
necesario recibirlo a prueba; o
b) Mandar contestar la demanda, re-
servndolas para ser falladas en la sen-
tencia definitiva.
y cundo adoptar una u otra acti-
tud? Segn si, a su juicio, estas excep-
ciones son o no de lato conocimiento;
y ser de lato conocimiento implica que
la cuestin suscitada, por su compleji-
dad, requiere de las garantas de la con-
troversia y de las pruebas propias del
procedimiento ordinario, y no del bre-
ve y sumario, como lo es el procedi-
miento incidental.
WITORL\1. IURIOICA DE CHIU
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Captulo Cuarto
LA CONTESTACIN, LA RPLICAYLA DPLICA,
YLA RECONVENCIN
SUMARIO: 1. La contestacin de la demanda; II. La rplica y la dplica;
III. La reconvencin.
1. La contestacin de la demanda
344. Concepto. As como el escrito
de demanda resume las pretensiones del
actor y es un acto procesal que inicia el
juicio, el escrito de contestacin de la de-
manda resume las pretensiones del de-
mandado, y es, por regla general, su
primer acto procesal dentro de aquel.
Se define la contestacin de la demanda
diciendo que es el escrito en que el de-
mandado da respuesta al libelo interpues-
to en su contra por el actor, o bien, el escrito
en que el demandado opone las excepcio-
nes o defensas que hace valer en contra
del demandante destinadas a eneIVar o des-
truir las acciones que este ha deducido.
El objetivo fundamental, pues, del es-
crito de contestacin de la demanda es
dar oportunidad al demandado para que
se defienda de la demanda que ha esgri-
mido en su contra el actor, oponiendo
excepciones perentorias, o sea, aquellas
que miran al fondo de la accin deduci-
da y sin que se refieran para nada a la
correccin del procedimiento.
Estas excepciones perentorias, a diferen-
cia de las dilatorias ya tratadas, no estn
enumeradas ni menos sealadas en el C-
digo de Procedimiento Civil. Son tantas
cuantas pueda imaginar el demandado,
desde el momento en que as como de
todo derecho nace una accin para re-
clamarlo judicialmente, tambin frente a
toda accin hay una excepcin o defensa
destinada a enervarla. En general, son ex-
cepciones perentorias los diversos modos
de extinguir las obligaciones, y siempre
se encuentran contempladas en los cdi-
gos o leyes de fondo o sustantivas.
37
Pero el escrito de contestacin de la
demanda tambin puede servirle al de-
mandado para otros dos objetivos ms, aun-
que de carcter secundario o accidental,
a saber, aceptar llanamente las peticiones
del demandante y deducir reconvencin
en contra del actor. El primero de estos
objetivos secundarios lo analizamos al es-
tudiar las diversas actitudes que puede
asumir el demandado una vez notificado
de la demanda, y el segundo lo estudia-
remos ms adelante, por su importancia
prctica innegable.
345. Clases de contestacin de la de-
manda. La contestacin de la demanda
admite diversas clasificaciones, segn sean
los puntos de vista desde los cuales se las
formule.
As:
a) Segn si se ha evacuado o no, la
contestacin de la demanda puede ser
expresa o ficta. Es expresa cuando el de-
mandado presenta efectivamente el escri-
to respectivo, evacuando el trmite de que
se trata. Es ficta cuando el demandado
no presenta este escrito en el trmino
legal-fatal y el demandante o de oficio el
tribunal le acusa rebelda del trmite en
referencia a fin de obtener el progreso
del juicio. Esta clasificacin tiene impor-
tancia para los efectos de la recepcin de
la causa a prueba, pues la contestacin
de la demanda ficta implica negacin to-
tal y absoluta de los hechos contenidos
en la demanda;
b) Segn si el demandado tiene o no
que hacer valer una accin en contra del
demandante, la contestacin de la deman-
da puede ser pura o simple y con recon-
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
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vencin. La contestacin de la demanda
es pura o simple cuando est destinada a
cumplir su objetivo fundamental, o sea,
permitir al demandado oponer excepcio-
nes perentorias a la accin deducida en
su contra. La contestacin de la deman-
da es con reconvencin cuando el deman-
dado no slo se limita a oponer excep-
ciones perentorias, sino que, adems, por
su parte, deduce una nueva demanda en
contra del actor. Esta clasificacin tiene
importancia para los efectos de la trami-
tacin posterior que sigue el juicio, pues
la reconvencin se sustancia junto con la
demanda principal y da origen a un tr-
mite ms, cual es la dplica en la recon-
vencin, y
c) Por ltimo, segn la actitud que
adopte el demandado frente al objetivo
del escrito de contestacin de la deman-
da, sta puede clasificarse en contestacin
de la demanda destinada a aceptar llana-
mente las peticiones del demandante y
en contestacin de la demanda destinada
a defenderse, oponiendo las correspondien-
tes excepciones perentorias. Esta clasifi-
cacin tiene importancia para los efectos
de la recepcin de la causa a prueba, pues,
en el primer caso, no ser necesario cum-
plir con este trmite.
346. Forma y contenido de la contes-
tacin de la demanda. Desde el momen-
to en que la contestacin de la demanda,
lo mismo que esta ltima, es un verdade-
ro escrito, se halla sujeta a un doble gru-
po de formalidades legales: las generales
a todo escrito y las especiales del escrito
de contestacin de la demanda.
Las formalidades generales de todo escri-
to y, por consiguiente, aplicables al escrito
de contestacin de la demanda, en snte-
sis, son: la contestacin de la demanda
deber presentarse en papel proceso;* por
* Actualmente, y con la entrada en vigencia del
Decreto Ley N 3.475 de 29 de agosto de 1980, pu-
blicado en el Diario Oficial de 4 de septiembre de
1980, qued sin efecto la obligacin de usar papel
sellado en los juicios y gestiones judiciales, toda vez
que el artculo 32 de dicho Decreto Ley derog el
lDlTORIM JURlDlCA OECHIIF
conducto del secretario respectivo, enca-
bezada con una suma que indique su con-
tenido (art. 30 CPC); y acompaada, en
papel simple, de tantas copias cuantas sean
las partes a quienes haya de ser notificada
(art. 31, inc. 10, CPC); y, por ltimo, en
atencin a que la contestacin de la de-
manda es, por regla general, la primera
presentacin que hace el demandado, de-
ber contener la constitucin de un pro-
curador o mandatario judicial habilitado
, -y la designacin de abogado patrocinan-
te, tambin habilitado, salvo las excepcio-
nes legales (arts. JO y 2
0
Ley 18.120 de 30
de abril de 1982, publicada en el Diario
Oficial de 18 de mayo del mismo ao).
En cambio, las formalidades especiales
del escrito de contestacin de la deman-
da las seala el artculo 309 del Cdigo
de Procedimiento Civil, al prescribir que
l debe contener:
1o. La designacin del tribunal ante quien
se presente:
Este requisito se cumple a continua-
cin de la suma, expresando solamente
la jerarqua del tribunal y, todava, ello
mediante abreviaturas. Ejemplos: se pon-
dr SJ.L., tratndose de jueces letrados;
J.c., tratndose de Cortes de Apelacio-
nes; y Excma. Corte, si queremos referir-
nos a la Corte Suprema.
2
0
El nombre, domicilio y profesin u ofi-
cio del demandado.
Debe contener, en consecuencia, una
perfecta individualizacin del demanda-
do, lo que tendr suma importancia para
los efectos de saber quines son las par-
tes litigantes, dnde debe notificrseles y
a quines va a afectar la sentencia que,
en definitiva, se dicte.
Nada expresa la ley en cuanto a la indi-
vidualizacin del representante convencio-
nal o legal del demandado; pero estimamos
que tambin es indispensable sealarlas
para mantener el debate judicial dentro de
la lealtad y seguridad debidas.
30. Las excepciones que se oponen a la
demanda y la exposicin clara de los hechos y
fundamentos de derecho en que se apoyan.
Decreto Ley N 619 de 1974, que la consagraba.
Actualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
38
Debemos hacer, en estos momentos,
comentarios similares a los que efectua-
mos al analizar el requisito formal equi-
valente que debe contener el escrito de
demanda.
Este requisito dice relacin con la
sustancia o mdula del juicio mismo. Al
igual que las pretensiones del actor, las
del demandado se fundan en determi-
nados hechos, a los cuales les aplica las
disposiciones legales que cree pertinen-
tes; de tal manera que lo menos que pue-
de exigir el legislador respecto de los
hechos y fundamentos de derecho en
que se apoya el escrito de contestacin
de la demanda, es que se expongan con
la suficiente claridad.
Ahora bien, la defensa del demanda-
do se concreta a las excepciones que ten-
ga que oponer a la demanda contraria;
de suerte que tambin lo menos que debe
contener el escrito de contestacin de la
demanda son dichas excepciones. Es ob-
vio que se trata de las excepciones peren-
torias, o sea, de aquellas que miran al
fondo del juicio y no a la correccin del
procedimiento.
En atencin a que nuestro Cdigo de
Procedimiento Civil utiliza indistintamen-
te los trminos "excepcin", "alegacin"
o "defensa", estimamos que el escrito de
contestacin de la demanda tambin de-
ber contener a estas ltimas, pues ellas
deben entenderse involucradas en la ex-
presin "excepciones" que emplea el pre-
cepto legal que estamos analizando.
Sin embargo, en doctrina, los trmi-
nos "excepcin", "alegacin" o "defensa"
son distintos.
En efecto, la excepcin reconoce la
existencia del derecho reclamado, y slo
pretende que ha caducado, por un he-
cho independiente de su existencia y
constitucin; sostiene, por consiguiente,
la falta de accin, fundndose en situa-
ciones de hecho que el juez ignora has-
ta esos momentos, o sea, ataca la vida
misma del derecho reclamado; y, en l-
timo trmino, el peso de la prueba de la
excepcin recaer solamente sobre el
demandado.
39
La alegacin o defensa, en cambio, es
la total negacin del derecho reclamado,
desconocindolo en su nacimiento mis-
mo y fundado en los requisitos de dere-
cho invocados por el actor y que el juez
debe conocer; de modo que, contestan-
do al demandado, mediante una alega-
cin o defensa, nada tendr que probar.
.EJemplo de una excepcin: se deman-
da el pago de una determinada suma de
dinero, yel demandado contesta que nada
debe, porque la pag. Ejemplo de una
alegacin o defensa: se demanda el pago
de una determinada suma de dinero, y el
demandado contesta que nada debe, por-
que jams el actor le ha entregado suma
alguna de dinero.
4
0
La enunciacin precisa y clara, con-
signada en la conclusin, de las peticiones que
se sometan al fallo del tribunal.
Es la parte petitoria del escrito de con-
testacin de la demanda, que tiene una
ubicacin determinada, o sea, a la con-
clusin, al final del escrito. Esta enuncia-
cin de las peticiones que se someten al
fallo del tribunal debe ser precisa y clara,
en forma que no pueda prestarse a equ-
vocos, desde el momento en que dichas
peticiones, junto con las que habr for-
mulado en idntica forma el actor, cons-
tituyen la cuestin controvertida del
juicio, o sea, la materia u objeto especial
y directo del fallo.
347. De los documentos en que se
funda la contestacin. El demandado pue-
de o no acompaar en esta oportunidad
documentos o instrumentos. Si se acom-
paan, sern con citacin o con conoci-
miento, sin peIjuicio de lo indicado por
el artculo 348 inciso primero del CPC
que "los instrumentos pueden presentar-
se en cualquier estado del juicio hasta el
vencimiento del trmino probatorio en
primera instancia y hasta la vista de la
causa en segunda instancia". *
* Inciso sustituido, por el que aparece en el
texto, por el art. 1, N 48, de la Ley N 18.705, de
24 de mayo de 1988. Actualizado Depto. D. Proce-
sal U. de Chile.
z
Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
ElJllltlAL TURIDICA Ot lHIU
del Cdigo de Procedimiento Civil; pero,
en todo caso, a diferencia de los escritos
de demanda y contestacin, no necesitan
contener mencin especial alguna.
No se trata de trmites esenciales, esto
es, por cuya omisin pudiera invalidarse
el proceso, ya que las partes son dueas
de evacuarlos o no; y si no lo hacen en el
trmino legal-fatal a peticin de la con-
traparte o de oficio, el tribunal proveer
lo que convenga para la prosecucin del
juicio, sin necesidad de certificado pre-
vio (art. 64 CPC). Ejemplo: vencido el
trmino para contestar la demanda, el
demandado replica sin necesidad de acu-
sar rebelda. El tribunal tiene por contes-
tada la demanda en rebelda y por
evacuado el trmite de rplica, dando tras-
lado para duplicar al demandado. El de-
mandado duplica [uer'a de plazo. El
tribunal, no ha lugar por extemporneo,
autos, para recibir la causa a prueba o
citar a las partes a or sentencia.
348. Plazo para presentar la contesta-
cin de la demanda y resolucin que en
ella debe recaer. En su oportunidad mani-
festamos que el plazo para contestar la de-
manda vara segn sea el lugar en que haya
sido notificado el demandado; esto es, quin-
ce das si es notificado en la comuna don-
de funciona el tribunal, dieciocho das si el
demandado se encuentra en el mismo te-
rritorio jurisdiccional pero fuera de los l-
mites de la comuna que sirve de asiento al
tribunal, y dieciocho das, ms el aumento
que corresponde al lugar en que se en-
cuentre. Este aumento ser determinado
en conformidad a una tabla que cada cin-
co aos formar la Corte Suprema con tal
objeto, tomando en consideracin las dis-
tancias y las facilidades o dificultades que
existan para las comunicaciones (arts. 258*
y 259 inciso primero CPC) .**
En seguida expresamos, al estudiar las
excepciones dilatorias, que una vez que
sean desechadas o subsanados por el de-
mandante los defectos de que adolezca
la demanda, el demandado tendr diez
das para contestarla, cualquiera que sea
el lugar en donde le haya sido notificada
(art. 308 CPC).
Por consiguiente, y en resumen, el pla-
zo para contestar la demanda vara de
acuerdo a la actitud asumida por el de-
mandado; si se limita a contestar la deman-
da, el plazo ser de quince, dieciocho o
dieciocho das ms el aumento de la tabla
del emplazamiento, segn el lugar en que
haya sido notificado; y si, a la inversa, den-
tro de este mismo plazo opone previamente
excepciones dilatorias, el trmino para con-
testar la demanda ser de diez das, una
vez desechadas o subsanados por el actor
los defectos de que adoleca aqulla.
En cuanto a la resolucin que debe re-
caer en el escrito de contestacin de la
* Artculo reemplazado, por el que aparece en
el texto, por el N 3 del art. 5 de la Ley N 18.776,
de 18 de enero de 1989.
** Inciso modificado, como aparece en el tex-
to, por el N 4 del arto 5 de la Ley N 18.776, de
18 de enero de 1989. Actualizado Depto. D. Proce-
sal U. de Chile.
mEDITORIAL jURIDICA m CHILE 40
demanda, no puede ser otra que traslado
al actor por el trmino de seis das (art.
311, parte P, CPC). Este plazo es fatal, y
est destinado a que dentro de l el de-
mandante evacue el trmite de rpli-
ca, al cual nos referiremos ms adelante
(art. 64 CPC) .*
349. Oportunidad para oponer excep-
ciones perentorias. Las excepciones peren-
_torias deben oponerse en la contestacin
de la demanda, puesto que, como lo he-
mos oportunamente sealado, este es el
objetivo fundamental de dicho escrito.
Sin embargo, el legislador permite
que determinadas excepciones perento-
rias, en razn de su especial naturaleza
jurdica, puedan oponerse antes de con-
testar la demanda, y aun durante todo el
curso del juicio.
Son excepciones perentorias que pue-
den oponerse antes de contestar la de-
manda aquellas que pueden deducirse y
tramitarse como las dilatorias, y son las
siguientes: cosa juzgada y la de transac-
cin; pero si son de lato conocimiento,
se mandar contestar la demanda, y se
reservarn para fallarlas en la sentencia
definitiva (art. 304 CPC).** En cambio,
son excepciones perentorias que pueden
oponerse con posterioridad a la presenta-
cin del escrito de contestacin de la de-
manda, y en cualquier estado de la causa,
las siguientes: prescripcin, cosa juzgada,
transaccin y pago efectivo de la deuda,
cuando sta se funde en un antecedente
escrito (art. 310, ine. l, CPC).
Ahora bien, para que estas ltimas ex-
cepciones perentorias sean admitidas a tra-
mitacin, se requiere: a) que se aleguen por
escrito, y b) antes de la citacin para senten-
cia en primera instancia, o de la vista de la
causa en la segunda (art. 310, inc. r, CPC).
* Artculo modificado, como aparece en el tex-
to, por el artculo 1 N 4, de la Ley N 18.882, de
20 de diciembre de 1989.
** Artculo sustituido, por el que aparece en
el texto, por el N 1 del art. 5 de la Ley N 18.680,
de 11 de enero de 1988. Actualizado Depto. D. Pro-
cesalU. de Chile.
La tramitacin que sufran ser diversa
segn sea la Oportunidad en que se ha-
gan valer. As, si se formulan en primera
instancia antes de recibida la causa a prue-
ba, quiere decir que se tramitarn como
incidentes y la prueba se rendir junta-
mente con la de la causa principal; y si se
formulan en primera instancia, pero des-
pus de recibida la causa a prueba, tam-
bin se tramitarn como incidentes, que
pueden recibirse a prueba, si el tribunal
lo estima necesario. En ambos casos el
fallo se reservar para definitiva. Si, en
cambio, se deducen en la segunda instan-
cia, tambin se tramitarn como inciden-
tes, que pueden recibirse a prueba si el
tribunal lo estima necesario, y su fallo tam-
bin se dejar para definitiva, pero con
la particularidad de que es pronunciado
en nica instancia por el tribunal de al-
zada (art. 310, incs. 2 y 3, CPC).
n. La rplica y la dplica
350. Concepto. En el juicio ordinario
de mayor cuanta, el perodo de discusin
no queda agotado con la presentacin de
los escritos de demanda y de contestacin
que, respectivamente, han evacuado de-
mandante y demandado. Existe, con pos-
terioridad, una nueva intervencin de
ambas partes litigantes, que recibe el nom-
bre de escritos de rplica y dplica.
Se define la rplica diciendo que es el
escrito en que el demandante, junto con
tratar de destruir las excepciones, alega-
ciones o defensas hechas valer por el de-
mandado, reafirma la posicin de sus
acciones; y la dplica, a la inversa, dicien-
do que es el escrito en que el demanda-
do, junto con reafirmar, una vez ms, la
posicin de sus excepciones, alegaciones
o defensas, trata de destruir las acciones
deducidas por el actor.
Su forma, en consecuencia, es escrita,
pues as se deduce del principio o carac-
terstica dominante dentro de la clase de
los juicios ordinarios de mayor cuanta, y
de la expresin "en los escritos de rpli-
ca y dplica" que emplea el artculo 312
41
351. Ampliacin, adicin o modifica-
cin de las acciones y excepciones. A pe-
sar de lo dicho, el legislador reconoce a
las partes un derecho que pueden hacer
valer en los escritos de rplica y dplica,
cuya importancia no podemos descono-
cer. Se halla consagrado en los siguientes
trminos: "En los escritos de rplica y d-
plica podrn las panes ampliar, adicio-
nar o modificar las acciones y excepciones
que hayan formulado en la demanda y
contestacin, pero sin que puedan alte-
rar las que sean objeto principal del plei-
to" (art. 312 CPC).
El tenor literal de la disposicin legal
antes citada permite afirmar que consa-
gra una facultad en favor de las partes, y
que si dicha facultad se ejerce, est sujeta
a una doble limitacin, a saber: la actividad
de parte debe consistir nicamente en
pretender ampliar, adicionar o modificar
las acciones o las excepciones, segn el
caso, y esta actividad no puede afectar a
las acciones o a las excepciones que sean
oqjeto principal del pleito.
En consecuencia, la aplicacin de este
precepto requiere, adems, que en los es-
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
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critos de demanda o de contestacin se
contengan acciones o excepciones prin-
cipales y otras que no revistan este carc-
ter, pudiendo ampliarse, adicionarse o
modificarse nicamente estas ltimas.
y qu entendemos por acciones o
excepciones que no sean objeto princi-
pal del pleito? A nuestrojuicio, son aque-
llas que se han formulado con el carcter
de subsidiarias a una principal, por ser
incompatibles con sta, o bien, como con-
secuenciales de una principal. Ejemplo:
en una demanda se hace valer la accin
de cumplimiento de un contrato y, en
subsidio, la de resolucin del mismo. No
habra inconveniente para que el actor
en su escrito de rplica ampliara, adicio-
nara o modificara la accin de resolucin.
En otra demanda se hace valer la accin
de cobro de un mutuo y, consecuencial-
mente, la accin de cobro de intereses.
No habra inconveniente para que el ac-
tor en su escrito de rplica ampliara, adi-
cionara o modificara la accin de cobro
de intereses.
352. Tramitacin. El artculo 311 del
Cdigo de Procedimiento Civil reza: "De
la contestacin se comunicar traslado al
actor por el trmino de seis das, y de la
rplica al demandado por igual trmino".
En otras palabras, presentado el es-
crito de contestacin de la demanda, o
en rebelda del demandado, se confiere
traslado por seis das al demandante para
que presente su escrito de rplica; y pre-
sentando el escrito de rplica por el ac-
tor, o en su rebelda, el demandado
presentar su escrito de dplica.
Estos plazos son independientes, o sea,
se concede un trmino de seis das a cada
litigante para que presenten por su parte
sus respectivos escritos; y son fatales, esto
es, el derecho para presentar el escrito
de rplica o de dplica, segn el caso, se
extingue por el solo hecho del vencimien-
to del respectivo plazo.
Una vez evacuado el trmite de d-
plica por el demandado, o vencido el tr-
mino para evacuarlo, el proceso queda
en condiciones de ser estudiado por el
EDlraRIAL JURlDICA O[ eHILL
juez, a fin de resolver si debe recibirlo a
prueba o, por el contrario, citar a las pr-
tes para or sentencia; pero, antes de pa-
sar a esta nueva etapa, debemos estudiar
una variante que puede presentar en- su
tramitacin el juicio ordinario de mayor
cuanta, y que es la reconvencin.
111. La reconvencin
353. Concepto. Dijimos que el deman-
dado, una vez notificado de la demanda,
puede adoptar diversas actitudes, entre
otras, defenderse; y que esta defensa pue-
de consistir en oponer excepciones dila-
torias, contestar oponiendo excepciones
perentorias y defensas e, incluso, recon-
venir.
Esta ltima situacin se presenta cuan-
do el demandado tiene, a su vez, una o
ms acciones que hacer valer en contra
del demandante, de suerte que el deman-
dante primitivo se transforma en deman-
dado, y el demandado pasa a asumir
tambin el papel de actor. Se trata, en
consecuencia, de una contrademanda del
demandado frente al demandante, y que
la deduce utilizando el procedimiento ju-
dicial que se haba originado por iniciati-
va de este ltimo.
Se define la reconvencin diciendo que
es la accin deducida por el demandado
en contra del actor, al contestar la de-
manda, en el juicio que ste ha provoca-
do; y su fundamento no es otro que la
economa procesal, pues as como la ley
permite que el demandante deduzca en
su demanda diversas acciones sin co-
nexin entre s, salvo si fueren incompa-
tibles, para evitar la multiplicidad de
juicios, tambin permite que el deman-
dado haga valer las acciones que tenga
en contra del actor, a fin de reunir las
diversas litis en un solo proceso.
Sin embargo, es necesario dejar en cla-
ro que las dos acciones -la que se ejercita
en la demanda primitiva y la que se ejerci-
ta en la demanda reconvencional- no re-
quieren tener relacin o conexinjurdica
alguna. Para nuestra legislacin procesal,
42
a diferencia de algunas extranjeras, la ac-
cin principal y la reconvencional pueden
ser perfectamente independientes y ajena
la una de la otra, emanando cada una de
ellas de sus diversos y respectivos ttulos.
La institucin de la reconvencin pre-
senta ventajas para la sociedad, los liti-
gantes y los propios tribunales de justicia.
Para la sociedad, porque disminuye el n-
mero de litigios, evita que se dupliquen
los procedimientos y previene contra su
multiplicidad; para los litigantes, porque
reduce los gastos en que deben incurrir y
les disminuye las molestias e incomodi-
dades que todo pleito origina; y, en fin,
para los propios tribunales, porque les
economiza tiempo, facilita la tramitacin
de los procesos y permite que diversos
juicios puedan fallarse y terminarse por
medio de un solojuzgador.
354. Sujetos de la reconvencin. La
reconvencin es una facultad que la ley
confiere a todo demandado enjuicio (art.
314 CPC). Se trata de una facultad y no
de un deber, pues su titular, o sea el de-
mandado, si quiere deduce reconvencin,
y si no lo desea, le quedan a salvo sus
derechos para hacerlos valer en proceso
separado.
El demandado, si es plenamente ca-
paz, deducir la reconvencin personal-
mente, y si es incapaz, lo har en su
nombre el correspondiente representante
legal. El mandatario judicial del deman-
dado puede tambin deducir reconvencin
en su nombre sin necesidad de facultad
especial, puesto que el poder para litigar
autoriza al procurador para tomar parte
en el juicio del mismo modo que podra
hacerlo el mandante (art. 7 CPC).
La reconvencin, a su vez, debe ser
dirigida en contra de la persona que des-
empee el papel de demandante en el jui-
cio primitivo, quien pasa a ser parte
demandada frente a la reconvencin (art.
314 CPC); y podr serle notificada y con-
testada por su mandatario judicial, aun
cuando no tenga facultad especial, por la
misma razn dada anteriormente. El de-
mandante reconvenido, por su parte, a
43
pesar de ser demandado en la reconven-
cin, no podra reconvenir, pues enton-
ces el juicio se alargara sin visos de poder
regularizarlo.
355. Condiciones de procedencia de
la reconvencin. Son dos las condiciones
o los requisitos para que la reconvencin
sea legalmente admitida:
a) Que el tribunal ante el cual se re-
conviene tenga competencia para conocer
de la reconvencin estimada como de-
manda, o cuando sea admisible la pr-
rroga de jurisdiccin, a pesar de que por
su cuanta la reconvencin deba ventilar-
se ante un juez inferior (art. 315, inc. l,
CPC); y
b) Que tanto la accin principal cuan-
to la accin reconvencional, en razn de
sus respectivas naturalezas, estn someti-
das a un mismo procedimiento, esto es, al
del juicio ordinario de mayor cuanta.
La competencia del tribunal que est
conociendo de la demanda principal debe
ser absoluta y relativa. Otro tanto debe acon-
tecer con la reconvencin, estimada para
estos efectos como una verdadera e inde-
pendiente demanda. En otras palabras, la
competencia del tribunal para conocer de
la reconvencin debe fundarse en los fac-
tores fuero, materia, cuanta y territorio.
Por lo que respecta al factor cuanta,
existe una pequea modificacin, pues
hemos visto que la ley ampla la compe-
tencia del tribunal que est conociendo
de la demanda principal para conocer de
la reconvencin, aun cuando por su valor
debiera ventilarse ante un juez inferior.
En cuanto al factor territorio, tambin debe
ser determinante de la competencia del
tribunal que est conociendo de la deman-
da principal, a fin de saber si puede cono-
cer de la accin reconvencional. Si no lo
es, puede llegar a serlo, siempre que con-
curran los requisitos necesarios para que
opere la prrroga de competencia, a sa-
ber, asunto contencioso civil, voluntad ex-
presa o tcita de las partes litigantes y
ambos tribunales ordinarios.
La identidad de procedimientos entre
la demanda principal y la reconvencin
EDITORIAL JURJDICA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo
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SUMARIO: 1. Generalidades; lI. Recepcin de la causa a prueba;
IlI. Del trmino probatorio.
Captulo Quinto
LA PRUEBA EN GENERAL
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EDITORIAL /URIDICA DE CHILE
caz", "el demandado no rindi prueba
sobre su excepcin", ete.
La prueba judicial es de una trascen-
dencia enorme, puesto que nada sacamos
con pretender el reconocimiento de un
derecho si no estamos en condiciones de
acreditar la existencia del hecho que le
sirve de fundamento. De ah la importan-
cia de las normas que regulan la prueba
en juicio, las que sern objeto especial
de nuestro estudio.
358. Naturaleza de las normas legales
sobre la prueba. Se discute en doctrina
acerca de si las normas legales que regu-
lan la prueba pertenecen al campo del
derecho civil o al del derecho procesal
civil. Un examen de ellas nos lleva al con-
vencimiento que presentan un carcter
mixto. Es evidente que las normas lega-
les que determinan los medios de prue-
ba, su admisibilidad y su eficacia o valor
probatorio pertenecen al derecho subs-
tantivo o material; en cambio, las que re-
glamentan la forma o manera de rendir
las pruebas son de naturaleza esencial-
mente procesal.
En nuestro derecho positivo dos cuer-
pos legales se preocupan de la prueba; a
saber, el Cdigo Civil y el Cdigo de Pro-
cedimiento Civil. El primero de ellos le
dedica el Ttulo XXI del Libro IV, o sea,
los artculos 1698 y siguientes, bajo el ru-
bro "De la Prueba de las Obligaciones"; y
el segundo, en cambio, la trata especial-
mente en los Ttulos IX, X Y XI, del
Libro n, o sea, en los artculos 318 y si-
guientes, bajo diferentes rubros.
Sin embargo, no existe una lnea
muy marcada entre ambos cuerpos le-
45
l. Generalidades
357. Concepto. En sentido general y
lgico, probar es demostrar la verdad de
una proposicin; pero, en el lenguaje ju-
rdico, que es el que nos interesa en es-
tos momentos, la palabra prueba tiene una
significacin ms restringida: es la demos-
tracin, por los medios que la ley estable-
ce, de la verdad de un hecho que ha sido
controvertido y que es fundamento del
derecho que se pretende.
Este ltimo concepto corresponde al
de la prueba judicial, que es la nica que
pueden recibir los tribunales; y se tradu-
ce, en la prctica, en una labor de con-
frontacin de parte del juez de la verdad
de las aseveraciones de los litigantes en
relacin con los medios de prueba sumi-
nistrados para acreditarla. Es por eso que
tambin se define la prueba como un me-
dio de controlar las proposiciones que
los litigantes formulan enjuicio.
Sin embargo, el trmino prueba, siem-
pre dentro del concepto jurdico, tiene
otras acepciones. As, designa la tarea de la
produccin de los elementos de convic-
cin, mediante los cuales las partes pre-
tenden establecer la verdad de las alega-
ciones, o sea, la carga o el peso de la
prueba; ejemplo, cuando se dice que el
peso de la prueba recae sobre el actor.
Otras veces, denomina a los elementos mis-
mos de la conviccin que se pretende pro-
duciren el juez; como cuando se dice la
prueba testimonial, la prueba instrumen-
tal, ete. Tambin se emplea para sealar
los resultados alcanzados y, por consi-
guiente, no es extrao or las expresio-
nes "la prueba del demandante es inefi-
a) Puede fallarse antes la demanda
principal o la reconvencin segn el ~ s o
si se presenta el fenmeno procesal de la
separacin o divisin del juicio, cuando
se produce el evento contemplado en. el
artculo 172 (art. 316, ine. JO, parte final,
CPC); y
b) No se concede en la reconvencin
aumento extraordinario de trmino para
rendir prueba fuera del territorio de la Re-
pblica cuando no deba concederse en la
cuestin principal (art. 316, ine. 3, CPC).
Acogida una excepcin dilatoria, el
demandante reconvencional deber sub-
sanar los defectos de que adolezca la re-
convencin dentro de los diez das si-
guientes a la fecha de notificacin de la
resolucin que haya acogido la excepcin;
si as no lo hiciere, se tendr por no pre-
sentada la reconvencin, para todos los
efectos legales, por el solo ministerio de
la ley (art. 317, ine. 2, CPC). *
En resumen, si se deduce reconvencin
por el demandado al contestar la deman-
da, el juicio experimenta la tramitacin que
pasa a sealarse. El tribunal confiere trasla-
do al demandante para que en el plazo de
seis das replique en la demanda principal
y conteste la reconvencin. Evacuados es-
tos trmites o en su silencio, el tribunal
confiere traslado al demandado para que
tambin en el plazo de seis das duplique
en la demanda principal y replique en la
reconvencin. Evacuados dichos trmites o
en su silencio, el tribunal dar traslado por
seis das al demandante para que duplique
en la reconvencin (art. 316, inc. 2, CPC).
Evacuado este ltimo trmite, o en silencio
del demandante, el tribunal examinar los
autos y recibir la causa a prueba o citar a
las partes para or sentencia, segn lo que
en derecho corresponda. Si es acogida una
excepcin dilatoria, el actor reconvencio-
nal deber subsanarla en diez das so pena
de tenerse por no presentada la reconven-
cin de ipso iure.
* Artculo 317, inciso 2, agregado por el arto 1,
N 46 de la Ley N 18.705, de 24 de mayo de 1988.
Actualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
44
es un requisito obvio, desde el momento
en que ambas deben tramitarse y fallarse
conjuntamente (art. 316, ine. JO, CPC).
Sin embargo, no divisamos inconveniente
para que pueda reconvenirse, aun cuan-
do esta accin, en principio, deba venti-
larse de acuerdo a un procedimiento
especial, siempre y cuando el demandado
renuncie a este procedimiento y acepte
que su accin reconvencional se sustan-
cie y falle en conformidad a los trmites
del procedimiento ordinario. ,
356. Tramitacin. Desde luego, en
cuanto a su oportunidad, la reconvencin
debe hacerla valer el demandado en el
escrito de contestacin de la demanda
(art. 314, parte P, CPC). Aun cuando el
plazo para contestar todava no hubiere
vencido, el solo hecho que el demanda-
do presente su escrito de contestacin de
la demanda extingue su derecho para po-
der reconvenir posteriormente. No exis-
ten frmulas al respecto, de suerte que la
reconvencin podr contenerse en el es-
crito de contestacin de la demanda como
peticin principal o accesoria. En la prc-
tica se emplea este ltimo medio.
Si la reconvencin es una nueva de-
manda deducida por el demandado en con-
tra del actor, es lgico que se ajuste a los
requisitos formales que debe contener toda
demanda y que se hallan sealados, como
ya hemos visto, en el artculo 254 del Cdi-
go de Procedimiento Civil; que puedan
acompaarse junto con ella los documen-
tos en que se funde y que pueda ser am-
pliada o rectificada por su titular antes de
ser contestada (art. 314, parte la, CPC).
La reconvencin se notifica por el es-
tado diario, puesto que no hay disposi-
cin especial sobre el particular; y contra
ella hay lugar a las excepciones dilatorias
enumeradas en el artculo 303, las cuales
se propondrn dentro del trmino de seis
das y en la forma expresada en el artcu-
lo 305 (art. 317 CPC).
Por ltimo, la reconvencin se subs-
tancia y falla conjuntamente con la de-
manda principal (art. 316, ine. 10, parte 1a,
CPC); salvo dos excepciones:
FDITOfUAL JURIDICA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
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gales, pues hay materias de derecho
substantivo o material que figuran en
el Cdigo de Procedimiento Civil y vi-
ceversa; pero, en todo caso, estimamos
que nuestra legislacin ha abordado co-
rrectamente esta materia de la ubica-
cin de las normas legales sobre la
prueba de por s delicada.
359. Elementos de la prueba. La teo-
ra general de la prueba considera que
son elementos de ella: el objeto sobre el
cual debe recaer; los sujetos o las perso-
nas que deben proporcionarla; los me-
dios de que se vale el sujeto para probar;
y, por ltimo, su eficacia, esto es, lo que
la prueba vale en definitiva.
a) El objeto de la prueba equivale a la
materia sobre la cual ella debe recaer.
Desde el momento en que en todo juicio
la controversia recae sobre una regla ju-
rdica, un hecho material y un acto jurdi-
co, es necesario analizar, pues, sobre cul
de estas materias debe versar la prueba.
La controversia sobre una regla jurdi-
ca no necesita de prueba, pues las cues-
tiones de derecho no requieren de
demostracin material, sino intelectual,
a base de razonamientos o argumenta-
ciones. La ley se presume conocida de
todos y, con mayor razn, de parte del
juez ante quien se la hace valer.
Por excepcin, la prueba del derecho
es indispensable, cuando se invoca enjui-
cio el derecho extranjero, o bien, la cos-
tumbre. En el primer caso, la prueba se
suministra mediante un informe pericial
(art. 411, N 2, CPC); y en el segundo,
acreditando los hechos constitutivos de
la costumbre, y si esta es comercial, al
tenor de lo que prescribe el artculo 5
del Cdigo del ramo.
Los hechos materiales y los actos jurdi-
cos, en cambio, requieren de prueba, si
es que deseamos ver prosperar el dere-
cho cuya declaracin pretendemos en
base a tales hechos o actos. Ejemplos de
hechos materiales: la construccin de un
edificio, el traslado de una mercadera,
la destruccin de un objeto, etc. Ejem-
plos de actos jurdicos: la celebracin de
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un contrato, el otorgamiento de un testa-
mento, etc. '
Los hechos materiales y los actos ju-
rdicos se acreditan en juicio por todos
los medios de prueba que la ley contem-
pla, a menos que exija para determinac
dos actos jurdicos a la vez determinadas
pruebas; como ser, en relacin a su cuan-
ta, excluye la prueba testimonial, y tra-
tndose de actos solemnes, la nica
prueba eficaz es, demostrando el cum-
plimiento de la respectiva formalidad,
por ejemplo, el otorgamiento de una es-
critura pblica.
Dentro de la prueba de los hechos
materiales, presenta inters la que recae
sobre proposiciones negativas y hechos
notorios. En principio, una proposicin de
carcter negativo no necesita de prueba por
la imposibilidad material que existe para
suministrar una prueba semejante. Ejem-
plo: debe usted cien pesos aJuan? Nada
le debo. Pero si dicha proposicin nega-
tiva puede resolverse en una afirmativa,
es evidente que no habr dificultad en
exigir y rendir la prueba necesaria para
acreditarla. Ejemplo: el demandado sos-
tiene que no tiene domicilio en Valpara-
so. Nada le impide que rinda prueba,
acreditando domicilio en otra ciudad de
la Repblica.
En cuanto a los hechos notorios, que
son aquellos que tienen una existencia
pblica, general y evidente, se ha enten-
dido en doctrina que tampoco requieren
de prueba. Ante nuestro derecho, el pro-
blema no aparece tan simple, pues el re-
levo de prueba en esta clase de hechos
slo aparece consagrado respecto de las
cuestiones accesorias o incidentales que
pueden suscitarse en los pleitos; de lo que
cabe colegir que en la cuestin principal
la prueba de los hechos notorios debe
ajustarse a las reglas generales (art. 89
CPC).
b) El segundo elemento de la prueba
dice relacin con los sujetos, o sea, con
las personas a quienes incumbe propor-
cionarla. Se traduce en la interrogante
clsica quin debe probar? a quin in-
cumbe el peso de la prueba?
El artculo 1698 del Cdigo Civil res-
ponde a esta interrogante en los siguien-
tes trminos: "Incumbe probar las obliga-
ciones o su extincin, al que alega aqullas
o sta"; y, a pesar de que este precepto
legal est ubicado entre las obligaciones,
o sea, entre los derechos personales, dada
su trascendencia, se estima que es de apli-
cacin general a toda clase de derechos.
En consecuencia, todo aquel que en-
tabla una accin judicial deber probar-
la, y todo aquel que pretende excepcio-
narse de dicha accin, deber probar la
correspondiente excepcin.
Sin embargo, hoy da, en doctrina, se
sostiene que el peso de la prueba est ms
bien condicionado a la naturaleza de las
proposiciones o afirmaciones que hacen
las partes que al papel de demandante o
demandado que desempean en la causa
y, por consiguiente, que incumbe probar
a aquel que, en el curso del juicio, avance
una proposicin contraria al estado nor-
mal de las cosas, o que tienda a modificar
o destruir una situacin adquirida.
c) Por ltimo, son tambin elemen-
tos de la prueba los medios de que se
valen los sujetos para demostrar la ver-
dad de sus afirmaciones y el valor que,
en definitiva, tengan tales medios, esto
es, su eficacia probatoria. Los medios pro-
batorios, por su importancia, los estu-
diaremos a continuacin, y por separado;
y su eficacia, al tratar de cada medio pro-
batorio en particular.
360. Los medios de prueba. Se entien-
de por medio de prueba el instrumento, la
cosa o la circunstancia en los cuales el juez
encuentra los motivos de su conviccin fren-
te a las proposiciones de las partes.
Dentro de nuestro derecho positivo,
la ley se ha encargado de enumerar, en
forma taxativa, los medios probatorios con
el objeto de evitar que esta importante
materia quede entregada al arbitrio del
juzgador.
Sobre el particular, el artculo 1698,
inciso 2, del Cdigo Civil dispone: "Las
pruebas consisten en instrumentos pbli-
cos o privados, testigos, presunciones, con-
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fesin de parte, juramento deferido* e
inspeccin personal del juez".
El artculo 341 del Cdigo de Proce-
dimiento Civil, por su parte, prescribe:
"Los medios de prueba de que puede ha-
cerse uso enjuicio son: Instrumentos; Tes-
tigos; Confesin de parte; Inspeccin
personal del tribunal; Informes de peri-
tos; y Presunciones".
Como puede observarse, este ltimo
Cdigo suprimi el juramento deferido,
agreg el informe de peritos y alter un
tanto el orden en que figuran los medios
de prueba en el Cdigo Civil; pero sin
que ello tenga importancia alguna en cuan-
to a su admisibilidad y fuerza probatoria,
pues se trata de simples enumeraciones y
no de sealar un orden de preferencia.
En todo caso, se estima que estas enu-
meraciones son taxativas, o sea, que no
existen otros medios probatorios para de-
mostrar la verdad o falsedad de un he-
cho en juicio que los antes sealados.
Sin embargo, hay otros medios pro-
batorios dispersos en la ley (ejemplos: los
certificados expedidos en el proceso por
un ministro de fe a virtud de orden de
tribunal competente) (art. 427, inc. 1,
CPC) ;** la sentencia judiCial respecto de
* El juramento deferido fue suprimido en vir-
tud de los artculos 4 y 5 de la Ley N 7.760, de 5
de febrero de 1944.
** Ley N 19.799, de 12 de abril de 2002, so-
bre documentos electrnicos, firma electrnica y
servicios de certificacin de dicha firma, establece
que los documentos electrnicos podrn presentar-
se en juicio y, en el evento de que se hagan valer
como medio de prueba, habr de seguirse las re-
glas siguientes:
1. Los sealados en el artculo anterior, harn
plena prueba de acuerdo con las reglas generales, y
2. Los que posean la calidad de instrumento
privado tendrn el mismo valor probatorio seala-
do en el nmero anterior, en cuanto hayan sido sus-
critos mediante firma electrnica avanzada. En caso
contrario, tendrn el valor probatorio que corres-
ponda, de acuerdo a las reglas generales.
Los sealados en el artculo anterior (se refie-
re a los documentos electrnicos que tengan la ca-
lidad de instrumento pblico, que debern
suscribirse mediante firma electrnica avanzada)
harn plena prueba de acuerdo con las reglas ge-
nerales, y que los que posean la calidad de instru-
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los hechos declarados como verdaderos
en otro juicio entre las mismas partes
(art. 427, inc. 2, CPC); y los libros de los
comerciantes cuyo valor probatorio lo re-
gula el Cdigo del ramo; o bien, que el
progreso de las ciencias ha hecho apare-
cer posteriormente (ejemplos: la fotogra-
fa, la radiografa, la cinta magnetofni-
ca, etc.) , a los cuales la jurisprudencia ha
debido reconocerles eficacia legal, enca-
sillndolos, eso s, dentro de los medios
probatorios clsicos o ya existentes.
361. Clasificacin de los medios proba-
torios. Los medios probatorios que hemos
enumerado admiten diversas clasificaciones.
As, se dice que hay medios probatorios
preconstituidos y circunstanciales; directos
e indirectos; y que hacen plena prueba y
que hacen semiplena prueba.
a) Medios probatorios preconstituidos son
aquellos que las partes crean al momen-
to de la celebracin de un negocio jur-
dico con el objeto de proporcionarse, de
antemano, un elemento de conviccin
para el eventual caso de una contienda
judicial posterior. Ejemplo: una escritura
pblica, un instrumento privado, etc.
Medios probatorios circunstanciales son
aquellos mediante los cuales se puede re-
construir un hecho, despus de produci-
do. Ejemplo: la declaracin testimonial,
la confesin de la parte, el informe de
peritos, etc.
b) Medios probatorios directos son aque-
llos que permiten al juez formarse su con-
viccin por la observacin personal y
directa del hecho cuestionado. Ejemplo:
la inspeccin personal del tribunal.
Medios probatorios indirectos, a la inver-
sa, son aquellos que permiten formar la
conviccin del juez sobre el hecho cues-
tionado a travs de la percepcin o cono-
cimiento de terceros. Ejemplo: la prueba
testimonial, la prueba pericial, etc.
mento privado tendrn el mismo valor probatorio
sealado anteriormente, en cuanto hayan sido sus-
critos mediante firma electrnica avanzada. En caso
contrario, tendrn el valor probatorio que corres-
ponda, de acuerdo a las reglas generales.
EDITORIAL JURlDICA DE CHILE
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c) Medios probatorios que hacen plena
prueba son aquellos que por s solos acr'eL
ditan la efectividad del hecho cuestiona-
do; esto es, sin necesidad de ir unidos o
condicionados a otras circunstancias.
Ejemplo: la confesin que recae sobre he-
chos personales del confesante.
Medios probatorios que hacen semiplena
prueba son aquellos que por s solos no
bastan para dar por establecido un he-
cho y que requieren de la concurrencia
de otro medio probatorio para que as la
prueba sea completada. Ejemplo: el in-
forme pericial.
362. Sistemas probatorios. En doctri-
na, se distinguen diversos mtodos acerca
de la valorizacin de la prueba, o sea,
diversos sistemas para apreciar la eficacia
probatoria de los medios de prueba.
La principal clasificacin de los siste-
mas probatorios es el de la prueba legal y
el de la prueba libre o moral. El segundo
sistema se caracteriza porque el legisla-
dor no ~ los medios probatorios, las par-
tes acreditarn los hechos en la forma
que mejor les acomode y el juez en su
sentencia, por consiguiente, no est ata-
do a regla alguna en cuanto a la valoriza-
cin o ponderacin de la prueba.
El primer sistema, contrario al ante-
rior, se caracteriza porque el legislador
enumera taxativamente los medios pro-
batorios que las partes pueden utilizar en
juicio y seala, al mismo tiempo, al juez
la eficacia probatoria que cada medio pro-
batorio posee en particular.
Un sistema intermedio entre los an-
teriores, el cual se ha abierto camino en
la doctrina y en la legislacin, es el de la
sana crtica, que se caracteriza porque en-
trega siempre al legislador la funcin de
enumerar los medios probatorios; pero,
en cambio, faculta al juez para valorar
tales medios probatorios de acuerdo a la
lgica, al buen sentido y a las normas de
la experiencia. Se trata de colocar el tema
de la prueba dentro de un concepto in-
telectual y de restarle todo carcter de
funcin mecnica para llegar, a la postre,
a un mejor descubrimiento de la verdad.
363. Apreciacin comparativa de los
medios de prueba. Hemos dicho que el
legislador se limita a enumerar los me-
dios de prueba de que podemos valernos
en juicio, sin sealar orden de preferen-
cia entre ellos; y luego, que atribuye a
cada medio probatorio en particular la
eficacia o valor que en su entender me-
recen.
Pero puede suceder que el juez, al
tener que valorar en la sentencia el mri-
to probatorio o eficacia de las diversas
pruebas rendidas por las partes, se en-
cuentre con dos o ms pruebas sobre un
mismo hecho, de carcter contradictorio
entre s. Cmo resuelve el conflicto? A
cul de ellas le atribuye mayor eficacia
probatoria?
La solucin la encuentra en las reglas
sobre apreciacin comparativa de los me-
dios probatorios, las cuales pueden for-
mularse en la siguiente forma:
a) En primer lugar, habr que estarse
a lo que establezcan sobre el particular
las disposiciones legales especiales. En efecto,
es frecuente encontrarse con preceptos
que disponen que talo cual acto jurdico
deber probarse en talo cual forma; de
manera que, a virtud del principio de que
la regla especial prevalece sobre la gene-
ral, no habr duda que, en este caso, ser
necesario atenerse a la regla probatoria
especial ya sealada. Ejemplo: el contra-
to de compraventa de bienes races se
forma y prueba por escritura pblica. Si
en unjuicio se rinden pruebas instrumen-
tales (escritura pblica) y testimonial o
pericial contradictorias para acreditar el
contenido del contrato, habr que estar-
se exclusivamente a lo que rece la escri-
tura pblica;
b) En segundo trmino, las presun-
ciones de derecho priman sobre cualquier
otro medio probatorio. Son aquellas que
no admiten prueba en contrario, a dife-
rencia de las legales yjudiciales, que per-
miten ser destruidas, probando lo con-
trario del hecho presumido. Es evidente
que se trata de la ms fuerte de las prue-
bas. Ejemplo: artculos 8 y 76 del Cdi-
go Civil;
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c) En tercer trmino, entre dos o ms
pruebas contradictorias, y a falta de ley
que resuelva el conflicto, los tribunales
preferirn la que crean ms conforme con la
verdad (art. 428 CPC). Se deja as amplio
margen al criterio racional del juez en la
eleccin de la prueba que estime ser de
mayor eficacia; y
d) Por ltimo, si la contradiccin
existe entre una escritura pblica y la
declaracin testimonial en orden a la fal-
ta de validez de la primera de las nom-
bradas, entra en juego la siguiente regla
legal: "Para que pueda invalidarse con
prueba testimonial una escritura pbli-
ca, se requiere la concurrencia de cinco
testigos que renan las condiciones ex-
presadas en la regla segunda del artcu-
lo 384, que acrediten que la parte que
se dice haber asistido personalmente al
otorgamiento, o el escribano, o alguno
de los testigos instrumentales, ha falleci-
do con anterioridad o ha permanecido
fuera del lugar en el da del otorgamien-
to y en los sesenta das subsiguientes.
Esta prueba, sin embargo, queda su-
jeta a la calificacin del tribunal, quien
la apreciar segn las reglas de la sana
crtica.
La disposicin de este artculo slo se
aplicar cuando se trate de impugnar la
autenticidad de la escritura misma, pero
no las declaraciones consignadas en una
escritura pblica autntica" (art. 429 CPC).
364. Reglas reguladoras de la prueba.
Dentro de las numerosas y variadas dispo-
siciones legales de orden substantivo y pro-
cesal, que regulan el instituto de la prueba,
hay algunas de excepcional importancia,
las cuales reciben el nombre de reglas o
leyes reguladoras de la prueba.
Se definen diciendo que son aquellas
que tienen como misin fundamental
enumerar los medios probatorios, deter-
minar su eficacia o mrito probatorio par-
ticular y resolver sobre cul de ellos debe
primar en caso de ser contradictorios.
En principio, sabemos que los hechos
que se dan por establecidos en la sen-
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tencia escapan al control de la casacin
en el fondo, pues es un recurso de mero
derecho. Sin embargo, si los hechos se
han establecido con infraccin a estas
reglas reguladoras de la prueba, proce-
de el recurso de casacin en el fondo,
pues, en tal caso, hay infraccin de ley
con influencia substancial en lo disposi-
tivo de la sentencia.
Esta infraccin de ley, cuya naturale-
za substantiva o procesal no hace al caso,
puede haberse producido, * al dar por es-
tablecidos los hechos del pleito por un
medio probatorio no contemplado expre-
samente por ellegislador;** o atribuyn-
doles a los medios probatorios un valor o
eficacia diverso al que le seala la ley;***
o dndole preferencia a un medio pro-
batorio sobre otro, en circunstancias que,
de acuerdo a aqulla, tiene mayor valor
este ltimo sobre el primero.
Ejemplos: se da por establecida la ce-
lebracin de un contrato de compraven-
ta sobre bienes races por medio de la
declaracin de dos testigos, en circuns-
tancias de que, de acuerdo a la ley, esta
clase de contratos se celebran y prueban
mediante escritura pblica; se da por esta-
blecido un hecho con la declaracin de
dos testigos singulares y que no expresan
la razn de sus dichos; se da por estable-
cido un hecho por medio de la declara-
cin de dos testigos contestes, sin tacha,
legalmente examinados y que dan razn
de sus dichos, en circunstancias de que
esta prueba est en contradiccin con una
inspeccin personal del tribunal, etc.
En todas estas situaciones, al acoger-
se el recurso de casacin en el fondo,
por infraccin a las leyes reguladoras de
la prueba, el tribunal supremo tiene que
dar por establecidos nuevos hechos, ha-
* Modificado, como aparece en el texto, por
el artculo 3 N 1 de la Ley N 19.904, de 3 de oc-
tubre de 2003.
** Modificado, como aparece en le texto, por
el artculo l de la Ley N 19.450, de 18 de marzo
de 1996.
*** Modificado, como aparece en el texto, por
el artculo 2 de la Ley N 19.806 de 31 de mayo
de 2002.
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ciendo adecuada aplicacin de estas le-
yes, con lo cual tendr que variar forz<Y-
samente la conclusin o parte resolutiva,
que deber contener la nueva sentencia
o de reemplazo.
11. Recepcin de la causa a prueba
365. Diversas actitudes del tribunal.
El artculo 318 del Cdigo de Procedi-
miento Civil dispone: "Concluidos los tr-
mites que deben preceder a la prueba, ya
se proceda con la contestacin expresa
del demandado o en su rebelda, el tri-
bunal examinar por s mismo los autos
y si estima que hay o puede haber con-
troversia sobre algn hecho substancial y
pertinente en el juicio, recibir la causa
a prueba y ~ r en la misma resolucin
los hechos substanciales controvertidos
sobre los cuales deber recaer.
Slo podrn farse como puntos de
pruebas los hechos substanciales contro-
vertidos en los escritos anteriores a la re-
solucin que ordena recibirla".
Por su parte, el artculo 313 del mis-
mo Cdigo ya haba prescrito: "Si el de-
mandado acepta llanamente las peticiones
del demandante, o si en sus escritos no
contradice en materia substancial y perti-
nente los hechos sobre que versa el jui-
cio, el tribunal mandar citar a las partes
para or sentencia definitiva, una vez eva-
cuado el traslado de la rplica.
Igual citacin se dispondr cuando las
partes pidan que se falle el pleito sin ms
trmite".
En consecuencia, concluidos los tr-
mites que deben preceder a la prueba,
esto es, una vez evacuados los escritos de
contestacin de la demanda, de rplica y
de dplica y de los correspondientes a la
reconvencin, en caso de que sta se hu-
biere deducido, sea que todos estos trmi-
tes se hayan evacuado realmente, sea que
se hayan evacuado en rebelda de la parte
respectiva, el tribunal debe abandonar la
actitud pasiva que haba observado hasta
esos momentos en la tramitacin misma
del juicio y proceder a hacer un examen
personal de los autos, el cual le permitir
llegar, indefectiblemente, a dos conclusio-
nes: a) citar a las partes para or senten-
cia; o b) recibir la causa a prueba.
y cundo adoptar una u otra acti-
tud?
Debe citar a las partes para or sentencia,
cuando:
a) El demandado acepta llanamente
las peticiones del demandante; o
b) El demandado en sus escritos no
contradice en materia substancial y perti-
nente los hechos sobre que versa el jui-
cio; o
c) Las partes piden que se falle el plei-
to sin ms trmite.
A la inversa, debe recibir la causa a prue-
ba cuando estima que hayo puede haber
controversia sobre algn hecho substan-
cial y pertinente en el juicio. En otras
palabras, el juez recibe la causa a prueba
cuando la controversia recae sobre hechos;
si sta versa sobre el derecho no es nece-
saria la recepcin de la causa a prueba,
porque el derecho, tal como lo expresa-
mos en su oportunidad, se invoca, pero
no se prueba.
Sin embargo, no basta que existan o
puedan existir hechos controvertidos en
la causa para que sea necesario recibirla
a prueba; es preciso, adems, que estos
hechos revistan el carcter de substancia-
les y pertinentes, o sea, que tengan conexin
con el asunto en debate dentro del plei-
to, y que de su existencia o inexistencia
dependa el derecho o la consecuencia
jurdica que se reclama.
Ejemplo de hecho controvertido in-
substancial: demando la suma de un mi-
lln de pesos, a ttulo de mutuo, fundado
en escritura pblica, y discutimos, en cam-
bio, acerca del nombre del notario que
intervino en el otorgamiento de dicha es-
critura.
Ejemplo de hecho controvertido im-
pertinente: demando la suma de un mi-
lln de pesos, a ttulo de mutuo, y
discutimos, en cambio, si fui o no esta
primavera a Buenos Aires.
Todava ms, la controversia ha debi-
do suscitarse en los escritos anteriores a la
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dictacin de la resolucin que ordena re-
cibir la causa a prueba; pues, si con pos-
terioridad a ella, ocurre algn hecho
substancial relacionado con el juicio, y
que necesita de prueba, tiene lugar en
cambio el fenmeno procesal llamado de
la ampliacin de la prueba.
366. La resolucin que recibe la cau-
sa a prueba. Debe ser pronunciada por
el tribunal despus de haber examinado
por s mismo los autos y de haber llegado
a la conclusin de que hay o puede ha-
ber controversia sobre algn hecho subs-
tancial y pertinente en eljuicio.
Esta resolucin debe contener dos re-
quisitos o menciones esenciales; a saber, la
orden de recibir el juicio a prueba y la
facin o determinacin de los hechos
substanciales, pertinentes y controvertidos
sobre los cuales deber aqulla recaer
(art. 318, inc. 10, CPC).
En la prctica se acostumbra agregar-
le dos menciones de carcter accidental, y que
son: la expresin de que la causa se reci-
be a prueba por el trmino legal y el se-
alamiento de audiencias destinadas a
recibir la prueba testimonial que pueden
ofrecer las partes. Como se comprende,
estas dos ltimas menciones no son exi-
gidas por la ley y, en consecuencia, su
omisin carece de toda trascendencia.
Ejemplo de redaccin de una resolu-
cin que reciba la causa a prueba:
"Valparaso, siete de septiembre de mil
novecientos noventa y seis. Vistos: se reci-
be la causa a prueba por el trmino legal
de veinte das y se fan como hechos subs-
tanciales y pertinentes sobre los cuales
deber recaer:
... La prueba testimonial se recibir
los cuatro ltimos das del probatorio, a
las 15 horas, y si fuere sbado al da si-
guiente hbil. Firman el Juez y el Secre-
tario".
Aun cuando la resolucin indicada
comnmente se la conoce con el nom-
bre de auto de prueba, est muy lejos de
tener esta calificacin jurdica. En efec-
to, segn jurisprudencia reiterada de
nuestros tribunales, la resolucin que re-
mlTORIAL JURIOICA DE CHILE m
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cibe la causa a prueba es una sentencia
interlocutoria de segundo grado o clase,
pues es de aquellas que resuelven sobre
un trmite que debe servir de base al pro-
nunciamiento de una sentencia definiti-
va o interlocutoria (art. 158 CPe).
No hay tampoco que olvidar que esta
resolucin, para que produzca los efec-
tos legales que le son propios, debe ser
notificada a las partes por cdula (art. 48
CPC).
367. Recursos con motivo de la re-
cepcin de la causa a prueba. El juez es
soberano al apreciar si debe o no recibir
la causa a prueba y, en caso afirmativo, al
sealar los hechos substanciales y perti-
nentes sobre los cuales aqulla debe re-
caer. Sin embargo, en el cumplimiento
de esta delicada labor, puede cometer
errores que peIjudiquen a las partes liti-
gantes y, por consiguiente, la ley ha debi-
do poner a disposicin de ellas los
recursos procesales necesarios para obte-
ner su enmienda.
En efecto, el juez puede errar al or-
denar que se reciba la causa a prueba, en
razn de que la resolucin que as lo man-
da no contenga todos los hechos sustan-
ciales y pertinentes controvertidos, o los
contenga mal expresados, o los contenga
en exceso. Puede tambin errar al negar-
se a recibir la causa a prueba en circuns-
tancias de que tal trmite era legalmente
necesario; y, a la inversa, puede errar al
ordenar recibir la causa a prueba, en cir-
cunstancias de que ese trmite era legal-
mente innecesario. Por consiguiente, los
recursos a deducir sern diferentes, se-
gn sean tambin diversos los casos antes
planteados:
a) La resolucin que recibe la causa a
prueba y [zja los hechos substanciales y perti-
nentes controvertidos es susceptible de dos
clases de recursos; a saber, reposicin y
apelacin.
Estos recursos, por expresa disposicin
de la ley, pueden perseguir una triple fi-
nalidad; o sea, permiten pedir a la parte
agraviada con la resolucin que ha reci-
bido la causa a prueba, que el tribunal
EDITORIAL /URIDICA DECHILE 52
modifique los hechos controvertidos
dos, elimine alguno o algunos de ellos"b
bien, agregue otros.
Ambos recursos tienen, adems, re-
glas particularsimas que los hacen dife-
renciarse de las normas generales que
regulan los recursos de reposicin y ape-
lacin (art. 319 CPe).
En efecto, esta es una reposicin espe-
cial, porque: 1 procede en contra de una
sentencia interlocutoria, como es la reso-
lucin que recibe la causa a prueba, en
circunstancias de que slo los autos y de-
cretos son susceptibles de esta clase de re-
cursos (art. 181 CPe); 2 el plazo para
interponerla es dentro de tercero da, en
circunstancias de que la reposicin sin nue-
vos antecedentes tiene un plazo de cinco
das para poder ser deducida (art. 181
CPC); y 3 el tribunal puede resolverla de
plano, o bien, darle tramitacin de inci-
dente, en circunstancias de que la reposi-
cin debe ser siempre resuelta de plano,
por lo menos, cuando no se invocan nue-
vos antecedentes (art. 181, inc. 2, CPC).
La apelacin, a su vez, tambin tiene
reglas especiales, porque: 1slo puede in-
terponerse en el carcter de subsidiaria
de la reposicin pedida con fundamentos
de hecho y de derecho y se formulen peti-
ciones concretas y para el caso de que sta
no sea acogida; 2 debe ser interpuesta
dentro de tercero da, en circunstancias
de que el plazo general para apelar es de
cinco das (art. 189 CPe); y 3 se concede
slo en el efecto devolutivo, siendo la re-
gla general que la apelacin se conceda
en ambos efectos (art. 195 CPe).
Ahora bien, qu puede ocurrir a vir-
tud de la interposicin de estos recursos?
A nuestrojuicio, dos situaciones diversas.
Primera situacin: el tribunal accede a
la reposicin solicitada, o sea, acepta mo-
dificar los hechos controvertidos
eliminar alguno o algunos de ellos, o bien,
agregar otros. En tal caso, como se com-
prende, no necesita pronunciarse, ade-
ms, sobre la apelacin subsidiaria por
innecesario. Pero la otra parte litigante,
que estaba conforme con la primitiva re-
solucin que recibi la causa a prueba,
puede apelar de la resolucin que viene
a modificarla, o sea, de la que acogi la
reposicin contraria, apelacin que de-
ber serle concedida slo en el efecto de-
volutivo (art. 326, inc. 1, parte final,
CPC). Como se ve, los recursos de apela-
cin que pueden deducir las partes liti-
gantes, en contra de la resolucin que
recibe la causa a prueba o que la modifi-
ca, no suspenden la tramitacin del jui-
cio, por cuanto, en ambos casos, son
concedidos slo en el efecto devolutivo.
Segunda situacin: el tribunal a qua no
accede a la reposicin solicitada, o sea,
no acepta modificar los hechos contro-
vertidos, eliminar algunos o agregar otros.
En tal caso, deber pronunciarse sobre la
apelacin subsidiaria, la que conceder
slo en el efecto devolutivo. El tribunal
"ad quem", por su parte, podr confir-
mar o revocar la resolucin apelada. Si
confirma, no hay inconveniente alguno,
ya que una vez devueltas las compulsas,
se agregarn a los autos, y stos seguirn
su marcha normal, pero, a la inversa, si
revoca, se presenta el inconveniente que
el trmino probatorio puede estar venci-
do, en circunstancias de que se necesita
rendir prueba al tenor de los hechos con-
trovertidos por el tribunal supe-
rior. La solucin, en este caso, est en la
concesin de un trmino especial de prue-
ba por el nmero de das que pru-
dencialmente el tribunal a qua, y que no
podr exceder de ocho (art. 339, inc. 4,
CPC).
b) La resolucin en que explcita o impl-
citamente se niegue el trmite de recepcin de
la causa a prueba es apelable (art. 326,
inc. P, parte 1a, CPe).
Explcitamente se niega lugar a este
trmite cuando el tribunal provee dere-
chamente una solicitud en que se pide se
d lugar a la recepcin de la causa a prue-
ba con un "no ha lugar"; e implcitamen-
te, cuando en igual situacin, se provee
"ctase a las partes or sentencia".
La regla anterior tiene una excepcin,
o sea, no es apelable la resolucin que
niega lugar al trmite de recepcin de la
causa a prueba cuando las mismas partes
53
han pedido que se falle el pleito sin ms
trmite (art. 326, inc. l, parte P, CPe).
Esta apelacin, a falta de regla espe-
cial, debe ser concedida en ambos efec-
tos (art. 195 CPe).
c) Por ltimo, la resolucin que recibe la
causa a prueba y fija los hechos substanciales
y pertinentes controvertidos, en circunstancias
de que este trmite era legalmente improceden-
te, es susceptible de algn recurso?
Ntese que este caso es diverso del
planteado anteriormente en la letra a).
Aqu el agravio consiste en haber recibi-
do a prueba la causa sin que ello hubiera
sido necesario y el o los recursos debie-
ran tender a dejar sin efecto esta resolu-
cin y a que se decrete, en cambio, la
citacin de las partes para or sentencia.
A nuestro entender, esta resolucin no
es susceptible de reposicin, por tratarse
de una sentencia interlocutoria (art. 181
CPe); y tampoco de apelacin, por tratar-
se de una resolucin que dispone la prc-
tica de diligencias probatorias (art. 326,
inc. 2, parte P, CPe).
368. Ampliacin de la prueba. Alu-
den a esta institucin los artculos 321 y
322 del Cdigo de Procedimiento Civil.
Tienen lugar en dos casos determina-
dos; a saber: cuando dentro del trmino
probatorio ocurre algn hecho substan-
cialmente relacionado con el asunto que
se ventila; o bien, cuando se trata de he-
chos verificados y no alegados antes de
recibirse la causa a prueba y el que los
aduce jura que slo entonces han llega-
do a su conocimiento (art. 321 CPe).
Se pretende as ampliar los hechos
substanciales y pertinentes controvertidos,
sealados en la resolucin que recibe la
causa a prueba como objeto de ella, con
nuevos hechos, no importando que las
partes ya hubieren preparado la prueba
testimonial mediante la presentacin de
la minuta de puntos de prueba y la lista
de testigos (art. 321, inc. 1, parte la,
CPe).
La peticin de ampliacin de la prue-
ba se tramita en conformidad a las reglas
generales de los incidentes, pero en ramo
mITaRIA! /URIDICA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
separado y sin suspender el trmino pro-
batorio (art. 322, inc. 2, CPC).
Sin embargo, la otra parte, al respon-
der el traslado recado en la solicitud de
ampliacin, puede tambin alegar hechos
que renan las condiciones antes seala-
das, o que tengan relacin con los que
en dicha solicitud se mencionan (art. 322,
inc. 1, CPC).
En todo caso, este derecho de las par-
tes litigantes para solicitar ampliacin de la
prueba se entiende con las limitaciones esta-
blecidas en el artculo 86 (art. 322, inc. 3, '.
CPC). En otras palabras, todos los inciden-
tes de ampliacin de la prueba cuyas cau-
sas existan simultneamente, debern
promoverse a la vez; pues, en caso contra-
rio, sern rechazados de oficio por el tribu-
nal, salvo que se trate de hechos esenciales
para la ritualidad o marcha del juicio.
La resolucin que da lugar a la am-
pliacin de la prueba sobre hechos nue-
vos alegados durante el trmino probatorio
es inapelable (art. 326, inc. 2, parte final,
CPC).
369. Prctica de diligencias probato-
rias. Toda diligencia probatoria debe prac-
ticarse previo decreto del tribunal que
conoce de la causa, notificado a las partes
(art. 324 CPC).
Esta disposicin revela el carcter
esencialmente contradictorio que presen-
ta el juicio, tanto en su periodo o fase de
discusin cuanto en su periodo de prue-
ba, puesto que cada medio probatorio su-
ministrado por una parte se halla sujeto
al control de la otra.
En los tribunales colegiados podrn prac-
ticarse las diligencias probatorias ante uno
solo de sus miembros comisionado al efec-
to (art. 325 CPC).
Se trata de una facultad y no de una
obligacin. Tiende a facilitar el funciona-
miento de los tribunales colegiados. Esta
misin recae, normalmente, en el minis-
tro de semana, y si nada dispone sobre el
particular el decreto respectivo, de acuer-
do a las reglas generales, tendr que in-
tervenir en la prctica de la diligencia
probatoria todo el tribunal.
371. Caractersticas del trmino proba-
torio. Es, desde luego, un trmino legal, por
cuanto la propia ley se encarga de sealar
su duracin; pero tambin puede ser judi-
cial, ya que el juez est facultado para sea-
lar trminos especiales de prueba; e incluso,
puede ser convencional, pues, por acuerdo
unnime de las partes, se puede reducir su
duracin (art. 328, inc. 2, CPC).
En segundo lugar, es un trmino co-
mn, o sea, comienza a correr desde la
ltima notificacin a las partes (art. 327
CPC). y cul es esta ltima notificacin?
No puede ser otra que la sealada en el
artculo 320, si se desea darle a este pre-
cepto una aplicacin armnica en relacin
370. Concepto. Una vez notificada la
resolucin que recibe la causa a prueba,
el juicio pasa a la segunda etapa o fase,
llamada periodo de prueba, y, dentro de
l, sobresale el llamado trmino probatorio.
Ahora bien, se entiende por trmino
probatorio aquel espacio de tiempo se-
alado en el juicio ordinario de mayor
cuanta y que est destinado a que las
partes suministren las pruebas al tenor
de los hechos substanciales y pertinentes
controvertidos, y, en especial, la prueba
testimonial.
Hay juicios en que el trmino proba-
torio es ms restringido. Tal acontece en
el juicio ejecutivo y en el juicio ordinario
de menor cuanta. En otros juicios, por
ejemplo, en la generalidad de los espe-
ciales, el trmino probatorio se reduce a
una audiencia o comparendo, el cual est
tambin destinado a escuchar la contes-
tacin del demandado.
En doctrina, el trmino probatorio se
utiliza para que dentro de l las partes
rindan todas las pruebas que crean nece-
sario allegar para el mejor xito de sus
derechos; pero, en nuestra legislacin, el
trmino probatorio es nicamente fatal
para la recepcin de la prueba testimo-
nial. Los dems medios probatorios pue-
den rendirse en las oportunidades en que
para cada uno de ellos sealaremos.
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374. El trmino probatorio extraordi-
nario. Se define como aquel plazo destina-
do a rendir prueba en otro territorio
jurisdiccional diverso al que se sigue el jui-
cio o fuera del territorio de la Repblica.
La definicin anterior permitir apreciar
que el trmino probatorio extraordinario
es de dos clases; a saber: destinado a rendir
prueba en otro territorio jurisdiccional y a
rendir prueba fuera de la Repblica. Tiene
importancia esta clasificacin del trmino
extraordinario de prueba, pues difieren en
cuanto a los requisitos de procedencia, a la
caucin que debe otorgarse y a la tramita-
cin que debe sufrir la solicitud respectiva.
El trmino extraordinario de prueba
est constituido por el trmino ordinario
de prueba, el cual sabemos que es de vein-
te das, ampliado con un nmero de das
igual al que concede el artculo 259 para
aumentar el trmino de emplazamiento
(art. 329 CPC); y este aumento extraordi-
nario comienza a correr una vez que se ha
extinguido el trmino ordinario, sin inte-
rrupcin, y slo durar para cada locali-
dad el nmero de das fijado en la tabla
respectiva (art. 333 CPC).
Es obvio que, una vez vencido el tr-
mino probatorio ordinario, slo podr
rendirse prueba en aquellos lugares para
los cuales se haya otorgado aumento ex-
traordinario del trmino (art. 335 CPC).
Ahora bien, cmo se pide la concesin
del trmino extraordinario de prueba? El au-
mento extraordinario para rendir prue-
ba deber solicitarse antes de vencido el
trmino ordinario, determinando el lu-
gar en que dicha prueba debe rendirse
(art. 332 CPC).
Pero no basta pedir el aumento ex-
traordinario de prueba en la oportunidad
legal antes indicada; es preciso, adems,
que concurran ciertos y determinados re- :::
lDlTORIAI IURIDICA DE CHILE m
la Repblica y fuera de e l ~ (art. 334 Cpe).
Claro es que, en la practlca, este trmino
ordinario es insuficiente para rendir prue-
bas en otro territorio jurisdiccional o fue-
ra de la Repblica en que se sigue el juicio,
y de all la existencia de los trminos de
prueba extraordinario y especiales.
55
con el artculo 327, o sea, la de la resolu-
cin que recibe la causa a prueba en caso
de que no haya sido objeto de recursos, o
bien, en caso de que lo hubiere sido, la de
la resolucin que se pronuncia sobre la
ltima solicitud de reposicin.
En tercer lugar, es un trmino fatal
(artculos 64, inc. 10, 328, inc. JO, 329,
340, inc. JO, CPC).
Por ltimo, es un trmino que no se
suspende en caso alguno; salvo que todas
las partes lo pidan (art. 339, inc. 1, par-
te P, CPC).
372. Clases de trminos probatorios.
Nuestra ley procesal civil reconoce tres cla-
ses de trminos probatorios:
10. El trmino probatorio ordinario
(art. 328 CPC);
2
0
El trmino probatorio extraordi-
nario (arts. 329 al 338 CPC.); y
30. El trmino probatorio especial
(arts. 339 y 340 CPC).
A continuacin, estudiaremos cada
uno de estos trminos probatorios en par-
ticular.
373. El trmino probatorio ordinario.
Constituye la regla general y su duracin,
por expresa disposicin de la ley, es de
veinte das, a menos que, por acuerdo
unnime de las partes, se reduzca este
plazo (art. 328 CPC).
Este plazo, por ser de das y estar se-
alado en el Cdigo de Procedimiento
Civil, se suspende durante los feriados (art.
66 CPC); se comienza a contar desde la
ltima notificacin por cdula de la reso-
lucin que recibi la causa a prueba, o
desde la notificacin por el estado de la
resolucin que se pronuncia sobre la l-
tima solicitud de reposicin de la resolu-
cin anterior (art. 320, inc. 10, CPC); y se
extingue al vigsimo da hbil (arts. 328,
inc. JO, 340, inc. JO, CPC).
Normalmente est destinado a rendir
prueba dentro del territorio jurisdiccional
del tribunal en que se sigue el juicio
(art. 328, inc. 10, CPC); pero tambin se
puede durante el transcurso de este tr-
mino rendir prueba en cualquier parte de
(',
'1
III. Del trmino probatorio
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EDITORIAl rURIOICA DE CHilE
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
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quisitos, los cuales difieren segn si el tr-
mino extraordinario sea para rendir prue-
ba en otro territorio jurisdiccional.
a) En efecto, el aumento extraordi-
nario para rendir prueba dentro de la
Repblica se conceder siempre que se so-
licite, salvo que haya justo motivo para
creer que se pide maliciosamente con el
solo propsito de demorar el curso del
juicio (art. 330 CPC).
En cambio, el aumento extraordina-
rio para rendir prueba fuera de la Rep-
blica se conceder siempre que concurran
las circunstancias siguientes:
1a. Que del tenor de la demanda, de
la contestacin o de otra pieza del expe-
diente aparezca que los hechos a que se
refieren las diligencias probatorias solici-
tadas han acaecido en el pas en que de-
ben practicarse dichas diligencias, o que
all existe los medios probatorios que se
pretenden obtener;
2
a
. Que se determine la clase y condi-
cin de los instrumentos de que el solici-
tante piensa valerse y el lugar en que se
encuentran; y
3
a
Que, tratndose de prueba de tes-
tigos, se exprese su nombre y residencia
o sejustifique algn antecedente que haga
presumible la conveniencia de obtener
sus declaraciones (art. 331 CPC).
Todava ms, siempre que se solicite
aumento extraordinario para rendir prue-
ba fuera de la Repblica, exigir el tribu-
nal para dar curso a la solicitud que se
deposite en arcas fiscales una cantidad cuyo
monto no podr en menos de me-
dio sueldo vital ni en ms de dos sueldos
vitales* (art. 338, inc. 1, CPC).
* Modificado, como aparece en el texto, por el
artculo 2, letra 11), del Decreto Ley N 1.417, de 9
de abril de 1976, publicado en el Diario Oficial de
29 del mismo mes, y por el artculo 2, letra d), del
Decreto Ley N" 3.503, de 31 de octubre de 1980, pu-
blicado en el Diario Oficial de 18 de noviembre si-
guiente. Ver el Decreto Supremo de Justicia N 51,
de 17 de enero de 1982, publicado en el Diario Ofi-
cial de 13 de febrero siguiente, que fa la tabla de
conversin de sueldos vitales a ingresos mnimos en
cumplimiento a lo dispuesto por el artculo 8 de la
Ley N" 18.018, de 14 de agosto de 1981. Actualiza-
do Depto. D. Procesal U. de Chile.
EDITORIAL JURIDICA DI CHILE 56
b) El tribunal, en presencia de
peticin de aumento extraordinario de
trmino para rendir prueba, tendr que
distinguir segn si el aumento es para
rendir prueba en otro territorio jurisdic-
cional o fuera de la Repblica. En el pri-
mer caso otorgar el aumento con previa
citacin y, en el segundo, con audiencia de
la parte contraria (art. 336, inc. P, CPC).
En otras palabras, esto significa que,
concedido aumento extraordinario de tr-
,/ .mino para rendir prueba en otro territorio
. 'jurisdiccional, no puede rendirse legalmen-
te la prueba mientras no venza el plazo de
citacin; y que la parte contraria, dentro
de este trmino, puede oponerse, lo cual
originar, naturalmente, un incidente (art.
69, inc. P, CPC). La concesin de aumen-
to extraordinario de trmino para rendir
prueba fuera de la Repblica, en cambio,
no se concede desde luego sino que es pre-
ciso or previamente a la parte contraria, a
la cual se le conferir traslado por tres das
de esta peticin, y con lo que sta exponga
o en su rebelda el tribunal resolver el
incidente respectivo;
c) Estos incidentes a que d origen la
concesin de aumento extraordinario de
trmino para rendir prueba, sea fuera del
territorio jurisdiccional del tribunal, sea
fuera de la Repblica, se tramitarn en
pieza separada, esto es, fuera de los autos
principales, y no suspendern el trmino
probatorio; pero, con todo, no se conta-
rn en el aumento extraordinario los das
transcurridos mientras dure el incidente so-
bre concesin del mismo (art. 336, incs. 2
y 3, CPC);
d) Por ltimo, la parte que haya ob-
tenido aumento extraordinario del tr-
mino para rendir prueba en otro territo-
rio jurisdiccional y no la rinda, o slo
rinda una impertinente, ser obligada a
pagar a la otra parte los gastos que esta
haya hecho para presenciar las diligen-
cias pedidas, sea personalmente, sea por
medio de mandatario. Esta condenacin
se impondr en la sentencia definitiva y
podr el tribunal exonerar de ella a la
parte que acredite no haberla rendido
por motivos justificados (art. 337 CPC).
En cambio, la parte que haya obteni-
do aumento extraordinario del trmino
para rendir prueba fuera de la Repblica
y no la rinda, o slo rinda una imperti-
nente, fuera de incurrir en la misma san-
cin anterior, y en las condiciones ya
sealadas, perder adems la consignacin
que hizo en arcas fiscales para que pu-
diere drsele curso a su solicitud, si resul-
ta establecida en el proceso alguna de las
circunstancias siguientes:
P. Que no se ha hecho diligencia al-
guna para rendir la prueba pedida;
2
a
Que los testigos sealados, en el
caso del artculo 331, no tenan conoci-
miento de los hechos, ni se han hallado
en situacin de conocerlos; y
Y. Que los testigos o documentos no
han existido nunca en el pas en que se
ha pedido que se practiquen las diligen-
cias probatorias (art. 338, inc. 2, CPC).
375. El trmino probatorio especial.
Esta ltima clase de trmino probatorio
tiene como fuente u origen una resolu-
cin judicial y es, adems, supletorio de
los anteriores.
Su fundamento radica en el hecho de
que el trmino probatorio ordinario no se
suspende en caso alguno, salvo que todas
las partes lo pidan (art. 339, inc. 1, parte
1a, CPC), ni siquiera con motivo del inci-
dente de ampliacin de la prueba (art. 322,
inc. 2, CPC) y del incidente de aumento
extraordinario (art. 336, inc. 2, CPC); de-
biendo, por lo dems, todos los incidentes
que se formulen durante dicho trmino o
que se relacionen con la prueba tramitarse
en cuaderno separado (art. 339, inc. 1,
parte final, CPC). Mientras tanto puede ocu-
rrir algn accidente o entorpecimiento que
impida rendir la prueba, por razones ;;ye-
nas a la parte, y no es justo, por consiguien-
te, dejarla sin oportunidad legal de rendirla.
Este inconveniente se salva mediante la pe-
ticin y concesin de un trmino probato-
rio especial.
El trmino especial de prueba, ahora
bien, se concede en los siguientes casos:
a. Si durante el trmino probatorio
ocurren entorpecimientos que imposibi-
57
liten la recepcin de la prueba, sea abso-
lutamente, sea respecto de algn lugar
determinado, podr otorgarse por el tri-
bunal un nuevo trmino especial por el
nmero de das que haya durado el en-
torpecimiento y para rendir prueba slo
en el lugar a que dicho entorpecimiento
se refiera (art. 339, inc. 2, CPC).
de entorpecimiento absolu-
to: la recusacin del juez.
Ejemplo de entorpecimiento relativo:
un terremoto o un temporal que impida
las comunicaciones con un lugar deter-
minado.
Para poder tener derecho a solicitar
este trmino especial de prueba es nece-
sario que la parte reclame del obstculo
que impide la prueba en el momento de
presentarse o dentro de los tres das si-
guientes (art. 339, inc. 3, CPC);
b. Deber concederse un trmino es-
pecial de prueba por el nmero de das
que fue prudencialmente el tribunal, y que
no podr exceder de ocho, cuando tenga
que rendirse nueva prueba, de acuerdo
con la resolucin que dicte el tribunal de alza-
da acogiendo la apelacin subsidiaria a que
se reJiere el artculo 319 (art. 339, inciso
final, CPC).
Sin embargo, a diferencia del caso an-
terior, para hacer uso de este derecho no
se requiere de reclamacin previa; y, en
todo caso, la prueba ya producida, y que
no est afectada por la resolucin del tri-
bunal de alzada, tendr pleno valor (art.
339, inciso final, CPC).
c. Si la prueba testimonial se ha co-
menzado a rendir en tiempo hbil y no
se concluye en l por impedimento cuya
remocin no haya dependido de la parte intere-
sada, podrn practicarse dentro de un bre-
ve trmino que el tribunal sealar, por
una sola vez, para este objeto (art. 340,
inc. 2, CPC). Ejemplo: se rinde prueba
testimonial el ltimo da del probatorio y
slo alcanzan a declarar cuatro testigos
de los seis presentados por vencimiento
de la hora de audiencia.
Para poder tener derecho a solicitar
este trmino especial, tambin es previo
LDITORIAL JURJDICA DE CHILE
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o
juicio y en cualquier trmite, diligencia o
actuacin. La persona a cuyo nombre apa-
rece otorgado el instrumento, podr ser
la parte misma o un tercero, y la parte en
contra de la cual se hace valer podr ha-
berlo escrito y firmado, o no;
b) Cuando igual declaracin se ha hecho
en un instrumento pblico o en otro juicio
diverso (art. 346, N 2, CPC).
Es otra forma de reconocimiento ex-
preso, pero extrajudicial. El reconoci-
miento puede haberse efectuado por la
persona a cuyo nombre aparece otorga-
do el instrumento privado o la parte con-
tra quien se hace valer, y puede haberse
efectuado, ya en un instrumento pbli-
co, ya en un juicio diverso;
c) Cuando, puestos en conocimiento de la
parte contraria, no se alega su Jalsedad oJai-
ta de integridad dentro de los seis das siguientes
a su presentacin, debiendo el tribunal, para
este efecto, apercibir a aquella parte con el re-
conocimiento tcito del instrumento si nada
expone dentro de dicho plazo (art. 346, N 3,
CPC).
Aqu estamos en presencia de un re-
conocimiento tcito, a diferencia de los
anteriores. La jurisprudencia entiende
que, en este caso, el instrumento privado
debe emanar exclusivamente de la parte
en contra de la cual se hace valer, y que
no importa si se encuentra firmado o no,
bastando que lo haya escrito. Se exclu-
yen, por consiguiente, del reconocimien-
to tcito que estamos analizando, los
instrumentos privados emanados de ter-
ceras personas ajenas aljuicio.
La Jalsedad del instrumento privado
puede consistir, ya en la falsificacin de
la firma, ya en la falsificacin de su con-
tenido; en cambio, la Jaita de integridad
implica que el documento no se ha pre-
sentado completo, esto es, en la forma
como materialmente se otorg. Son dos
captulos de impugnacin del instrumen-
to privado, pues, enteramente diversos.
Para que entre en juego este recono-
cimiento tcito es indispensable que el
tribunal aperciba a la parte contra la cual
se hace valer el documento con esta ver-
dadera sancin, a fin de que, en caso de :::
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE m 69
111. Los instrumentos privados
387. Concepto. Instrumento privado
es todo escrito que da constancia de un
hecho y que ha sido otorgado sin forma-
lidad o solemnidad alguna.
Lo importante en esta clase de ins-
trumentos es que dejen testimonio de un
hecho. La ley no sujeta a los instrumen-
tos privados a formalidad alguna; pueden
o no estar firmados por las partes; y pue-
den, incluso, hasta omitir el lugar y la
fecha en que han sido otorgados. Es tam-
bin indiferente que emanen de las pro-
pias partes litigantes o de terceros, y el
medio que ha servido para su confeccin,
esto es, manuscritos, mecanografiados,
impresos, etc.
Ejemplo: una carta, un recibo de di-
nero, un recorte de diario, etc.
interlocutoria, que declarar si el referi-
do instrumento tiene o no el mrito pro-
batorio que pretende la parte que lo ha
presentado.
388. Reconocimiento de los instru-
mentos privados. A diferencia de los ins-
trumentos pblicos, los privados, por el
hecho de ser tales, no llevan en s nin-
gn sello de autenticidad. No demues-
tran primae facie si en realidad han sido
otorgados por las personas a quienes se
les atribuyen, ni tampoco tienen fecha
cierta de otorgamiento.
Para obviar estos inconvenientes el le-
gislador acepta que un instrumento pri-
vado se le tenga por autntico, siempre
que haya sido reconocido, y le asigna fe-
cha cierta en los casos en que l mismo
taxativamente enumera.
y cundo los instrumentos privados
se tienen por reconocidos?
a) Cuando as lo ha declarado en el jui-
cio la persona a cuyo nombre aparece otorgado
el instrumento o la parte contra quien se hace
valer (art. 346, N 10, CPC).
Se trata, como se ve, de un reconoci-
miento expreso. Puede producirse este
reconocimiento en cualquier estado del
yan hecho los interesados (art. 1700 CC)
y que, por consiguiente, los declarantes
no pueden posteriormente pretender im-
pugnar el instrumento en cuanto a la ver-
dad de esas declaraciones.
Una segunda teora, que cuenta con
algunos fallos del tribunal supremo, ar-
gumenta, en cambio, que tal prueba es
admisible, pues la ley no prohbe que una
prueba plena, como es la emanada de un
instrumento pblico, pueda ser destrui-
da por otra plena prueba, como sera la
'que fluye de una confesin judicial.
386. Formas de impugnar los instru-
mentos pblicos. Todo instrumento p-
blico lleva en s el sello de su autenticidad
y, por consiguiente, la parte que se sirve
de l en juicio se limitar a acompaarlo
como medio probatorio de la manera y
en la oportunidad que ya conocemos.
Ser, en cambio, la contraparte la llama-
da a impugnarlo, sosteniendo su nulidad,
o su falta de autenticidad, o su falsedad
en las declaraciones, para restarle as todo
mrito o valor probatorio.
Ahora bien, esta manera de impug-
nar un instrumento pblico enjuicio pue-
de revestir dos formas: por va principal y
por va incidental.
a) Se impugna un instrumento pbli-
co por va principal cuando el objeto del
pleito versa sobre la validez o nulidad del
dicho instrumento, sobre la autenticidad
o falsedad del mismo, o sobre la verdad
o inexactitud de las declaraciones que en
l se contienen. El juicio podr ser de
naturaleza civil o penal, y estas peticio-
nes se formularn como accin o como
excepcin, y ser la sentencia definitiva
la llamada a resolver tales cuestiones; y
b) Por el contrario, se impugna un
instrumento pblico por va incidental
cuando, acompaado en parte de prue-
ba dentro de un juicio, la contraparte en
el trmino de citacin le resta mrito pro-
batorio, fundada en alguno de los cap-
tulos de impugnacin ya sealados. En
consecuencia, se habr suscitado un inci-
dente dentro del pleito, el cual ser falla-
do en un auto o en una sentencia
rizado por las personas y de la manera
que en l se expresan; pero, en cambio,
las partes han faltado a la verdad en lo
que se respecta a las declaraciones que
en ese instrumento se consignan. Ejem-
plo: en una escritura pblica Juan decla-
ra haber recibido de Pedro la suma de
mil pesos a ttulo de mutuo, y ese hecho,
en verdad, no es efectivo.
Cabe, ahora, preguntarse: puede im-
pugnarse un instrumento pblico por fal-
ta de verdad de las declaraciones en l
contenidas?
Respecto de los terceros, la interro-
gante no presenta dificultad y su respues-
ta debe ser afirmativa. Todava ms, estos
terceros podrn valerse de todos los me-
dios probatorios que la ley franquea para
acreditar la inexactitud o falta de verdad
de un hecho, incluso de la prueba testi-
monial.
Diversa, en cambio, es la posicin de
las partes que han intervenido en el otor-
gamiento del instrumento pblico, en el
cual han estampado determinadas decla-
raciones, las que, posteriormente, preten-
den destruir como inexactas, insinceras,
faltas de verdad.
En materia comercial encontramos un
esbozo de este derecho que tendran las
partes para impugnar la verdad de las de-
claraciones contenidas en un instrumen-
to pblico al permitir a los juzgados de
comercio, atendidas las circunstancias de
la causa, que reciban prueba testimonial,
aun cuando altere o adicione el conteni-
do de una escritura pblica (art. 129 C.
Com.).
En materia penal tampoco se ve el in-
conveniente legal para que esta impug-
nacin sea admitida, desde el momento
en que se trata de una simulacin, y para
acreditarla el tribunal y las partes podrn
valerse de cualquier medio probatorio,
pues no hay limitacin legal al respecto.
El problema se complica en materia ci-
vil, y la doctrina yjurisprudencia naciona-
les se hallan divididas sobre el particular.
Una teora sostiene que el instrumen-
to pblico hace plena fe en cuanto a la
verdad de las declaraciones que en l ha-
EDITORIAL JURIDICA DE CHIlE 68
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tratndose de testigos afectos a causales
de inhabilidad relativa (art. 375 CPC).
Ahora bien, estas inhabilidades para
testificar en juicio han sido establecidas
por la ley procesal civil, ora en razn de
falta de capacidad del testigo para percibir
los hechos sobre los que depone (ejem-
plo: arto 357, Nos P al 50, CPC), ora en
razn de la falta de probidad del testigo
(ejemplo: arto 357, Nos 6
0
al 9
0
, CPC), ora
en razn de la falta de imparcialidad del
testigo en atencin a la existencia de es-
peciales vnculos entre l y la parte cuya
declaracin pretende (ejemplo: arto 358
CPC).
El modo de reclamar de las causales
de inhabilidad que pueden afectar a los
testigos es mediante la formulacin de la
tacha respectiva; materia que, por su im-
portancia, trataremos ms adelante, y por
separado.
A continuacin, en cambio, nos pre-
ocuparemos de examinar las causas de
inhabilidad de los testigos, tanto absolu-
tas, cuanto relativas.
399. Inhabilidades absolutas. Son aque-
llas que impiden que una persona que se
encuentra en determinadas circunstancias
o condiciones pueda declarar en cualquier
juicio; se fundan en la falta de capacidad
del testigo para percibir los hechos sobre
los que depone o en su falta de probidad;
y las enumera taxativamente el artculo 357
del Cdigo de Procedimiento Civil, en la
siguiente forma:
P. Los menores de catorce aos. Podrn,
sin embargo, aceptarse sus declaraciones sin
previo juramento y estimarse como base para
una presuncin judicial, cuando tengan dis-
cernimiento suficiente.
La habilidad del testigo en razn de
edad, pues, habr que juzgarla en rela-
cin a la que tenga al momento de decla-
rar, y no a la poca en que percibi los
hechos sobre los que depone. El discer-
nimiento suficiente lo califica el tribunal
sin mayores trmites, y en caso afirmati-
vo, ordenar que se tome declaracin al
testigo, pero eximindolo de la formali-
dad previa del juramento.
EDITORIAL IURIOICA DE CHILE 76
2. Los que se hallen en interdiccin por
causa de demencia.
Se trata aqu de persona privada de
razn por locura o demencia, la cual ha
sido declarada mediante sentencia judi-
cial de interdiccin, sea definitiva o pro-
visoria. La prueba es, por consiguiente,
sumamente sencilla.
3. Los que al tiempo de declarar, o al de
verificarse los hechos sobre que declaran, se
hallen privados de la razn, por ebriedad u
otra causa.
/. Ejemplos de "otra causa" sera el caso
del testigo que estuviere bajo los efectos
de un narctico; o bien, en estado de
locura o demencia, pero sin que hubiere
sido declarado en interdiccin judicial por
tal motivo.
40. Los que carezcan del sentido necesario
para percibir los hechos declarados al tiempo
de verificarse stos.
Sera el caso de un ciego que preten-
diera que vio cuando una persona atro-
pell en su automvil a otra; o de un
sordo que pretendiera declarar que oy
cuando una persona manifest a otra tal
o cual cosa, etc.
5. Los sordomudos que no puedan darse
entender claramente.
Con anterioridad a la Ley N 19.904
de 3 de octubre de 2003, la inhabilidad
era ms amplia, y se extenda a todo aquel
que no fuera capaz de darse a entender
por escrito, lo que dejaba en estado de
inhabilidad incluso a aquellos sordomu-
dos que se expresaran en lenguaje de se-
as. Desde la ley antes referida se restringe
la inhabilidad slo para aquellos que sien-
do sordomudos no puedan darse a enten-
der claramente. *
6. Los que en el mismo juicio hayan sido
cohechados, o hayan cohechado o intentado
cohechar a otros, aun cuando no se les haya
procesado criminalmente.
7. Los vagos sin ocupacin u oficio conocido.
Fuera que estas personas infringen
con su modo de vida la ley penal, ellegis-
* Modificado, como aparece en el texto, por
el artculo 3, N 1 de la Ley N 19.904, de 3 de oc-
tubre de 2003.
lador procesal civil supone que no se en-
cuentran en condiciones adecuadas de
valorizar la conducta de sus semejantes y
que se hallan expuestas a toda clase de
influencias o presiones destinadas a que
tergiversen la verdad de los hechos.
8. Los que en concepto del tribunal sean
indignos de fe por haber sido condenados por
delito.
Esta causal es esencialmente pruden-
cial y queda entregada al sano criterio
del juez. Ejemplo: un condenado por es-
tafa ser indigno de fe; y uno por lesio-
nes, en cambio, puede ser digno de
crdito.
9. Los que hagan profesin de testificar
enjuicio.
A estos individuos se les llama jure-
ros, y poco importa para considerarlos
inhbiles, que esta indigna actividad la
ejerzan por paga u otra clase de remune-
racin, o bien, por ninguna.
400. Inhabilidades relativas. Son aque-
llas en que el impedimento para declarar
que afecta a una persona slo dice rela-
cin con determinados juicios; se fundan
en la falta de imparcialidad del testigo por
las especiales circunstancias o vnculos que
lo unen a la parte que lo presenta como
tal; y las enumera, tambin taxativamente,
el artculo 358 del Cdigo de Procedimien-
to Civil, en la siguiente forma:
1. El cnyuge y los parientes legtimos
hasta el cuarto grado de consanguinidad y
segundo de afinidad de la parte que los pre-
senta como testigos. *
Se trata de vnculos familiares tan es-
trechos que, evidentemente, hacen perder
al testigo la imparcialidad necesaria para
declarar; y de all que el legislador presu-
ma que faltarn a la verdad, con tal de no
perjudicar a la parte que los presenta.
2. Los ascendientes, descendientes y her-
manos ilegtimos, cuando haya reconocimien-
to del parentesco que produzca efectos civiles
respecto de la parte que solicite su declaracin. *
*- La Ley N 19.585 de 26 de octubre de 1998
reemplaz el rgimen de filiacin por el de filiacin
matrimonial y extramatrimonial.
77
Tanto el nmero 1 como el 2 del
artculo 358, aun cuando mantienen su
texto original, deben ser interpretados a
la luz del nuevo rgimen de filiacin que
distingue nicamente entre filiacin ma-
trimonial y extramatrimonial, y que no
distingue en el tratamiento legal que de-
ben recibir los parientes.
3. Los pupilos por sus guardadores y vi-
ceversa.
Se considera que los vnculos existen-
tes entre el guardador y su pupilo son
tan estrechos como los vnculos de orden
familiar.
4. Los criados domsticos o dependientes
de la parte que los presente.
Se entender por dependiente para
los efectos de este artculo, el que preste
habitualmente servicios retribuidos al que
lo haya presentado por testigo, aunque
no viva en su casa.
La legislacin del trabajo llama aho-
ra a los criados domsticos, trabajadores
de casa particular, * y a los dependientes,
trabajadores. **
5. Los trabajadores y labradores depen-
dientes de la persona que exige su testimonio.
Tambin la legislacin del trabajo lla-
ma obreros a los trabajadores; y los labra-
dores son los obreros agrcolas.
6. Los que a juicio del tribunal carezcan
de la imparcialidad necesaria para declarar
por tener en el pleito inters directo o indirecto.
Esta causal de inhabilidad, esencial-
mente relativa, queda entregada al sano
criterio del tribunal.
7. Los que tengan ntima amistad con la
persona que los presenta o enemistad respecto
de la persona contra quien declaren. La amis-
tad o enemistad debern ser manifestadas por
* Modificacin introducida por el artculo 127
del Decreto Ley N 2.200, de l de mayo de 1978,
publicado en el Diario Oficial de 15 de junio del
mismo ao. Actualizado Depto. D. Procesal U. de
Chile.
** Modificacin introducida por el Decreto
Ley N 2.200, de 10 de mayo de 1978, publicado en
el Diario Oficial de 15 de junio del mismo ao. Ac-
tualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
EDITORIAL /URIOICA DE CHILF
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I Manual de Derecho Procesal
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hechos graves que el tribunal calificar segn
las circunstancias.
Esta tacha tendr, pues, que fundarse
circunstanciadamente, a objeto de colo-
car al tribunal en condiciones legales ade-
cuadas parajuzgarla.
Por ltimo, las inhabilidades relati-
vas antes mencionadas no podrn hacerse
valer cuando la parte a cuyo favor se ha-
llan establecidas, presente como testigos
a las mismas personas a quienes podran
aplicarse dichas tachas (art. 358, inc. fi-
nal, CPC). Estamos en presencia de una
verdadera compensacin de tachas.
Ejemplo: el demandante presenta como
testigo a un ntimo amigo, en circuns-
tancia de que esta persona tambin es
ntima amiga del demandado; no podra
este ltimo tachar al testigo presentado
por el primero.
401. Obligaciones que pesan sobre los
testigos. Toda persona, cualquiera que sea
su estado o profesin, est obligada a de-
clarar y a concurrir a la audiencia, que el
tribunal seale con este objeto (art. 359,
inc. 1, CPC).
A su vez, el falso testimonio en causa
civil ser castigado con presidio menor en
su grado medio y multa de once a veinte
Unidades Tributarias Mensuales y si el va-
lor de la demanda no excediere de cua-
tro, las penas sern presidio menor en su
grado mnimo y multa de seis a diez Uni-
dades Tributarias Mensuales (art. 209 C.
Penal).*
En consecuencia, de conformidad a
los preceptos legales antes indicados y al
orden lgico de los conceptos, sobre los
testigos pesa una triple obligacin; a sa-
ber: de concurrir a declarar, de declarar
y de decir la verdad.
Estas obligaciones constituyen verda-
deras cargas o deberes cvicos y han sido
* Modificado, como aparece en el texto, por
el artculo 1 de la Ley N 19.450, de 18 de marzo
de 1996.
FDITORIAL IURIOICA DE CHILE 78
establecidas por razones de conveniencia
pblica y comn.
A continuacin examinaremos cada
una de estas obligaciones en particular:
a) La obligacin de concurrir a declarar
implica para el testigo el deber de asistir
en persona a la audiencia que el tribunal
seale con este objeto. Esta asistencia po-
dr efectuarse, ya por el conocimiento ex-
traoficial que tenga el testigo de que ha
sido presentado como tal, ya por conoci-
minto oficial, esto es, mediante citacin
legalmente practicada. Ms adelante vere-
mos en qu consiste esta citacin, la for-
ma de practicarla y las sanciones en que
puede incurrir el testigo en el caso que la
desobedezca.
La parte litigante que presenta a un
testigo, y que exige su comparecencia a
declarar, ha de tener buen cuidado de
que esta declaracin sea til; pues, cuan-
do se exija la comparecencia de un testi-
go, a sabiendas de que es intil su decla-
racin, podr imponer el tribunal a la
parte que la haya exigido una multa de
un dcimo a medio sueldo vital (art. 359,
inc. 2, CPC).
Sin embargo, hay personas que no
estn obligadas a concurrir a la audiencia
que el tribunal seale para que presten
declaracin, no obstante que sobre ellas
siempre pesan las obligaciones de de-
clarar y de decir la verdad. Estas perso-
nas son:
1. El Presidente de la Repblica, los
Ministros de Estado, los Senadores y Di-
putados, los Subsecretarios; los Inten-
dentes Regionales, los Gobernadores y
los Alcaldes, dentro del territorio de su
jurisdiccin; los jefes superiores de Ser-
vicios, los miembros de la Corte Supre-
ma o de alguna Corte de Apelaciones,
los Fiscales de estos Tribunales, los Jue-
ces Letrados, los Oficiales Generales en
servicio activo o en retiro, los Oficiales
Superiores y los Oficiales Jefes; el Arzo-
bispo y los Obispos, los Vicarios Gene-
rales, los Provisores, los Vicarios y
Provicarios Capitulares; y los Prrocos,
dentro del territorio de la Parroquia a
su cargo;
2. Derogado;*
3. Los religiosos, incluso los novicios;
4. Las mujeres, siempre que por su
estado o posicin no puedan concurrir
sin grave molestia; y
5. Los que por enfermedad u otro
impedimento, calificado por el tribunal,
se hallen en la imposibilidad de hacerlo
(art. 361 CPC).**
Ahora bien, cmo prestan declara-
cin estas personas, puesto que sobre
ellas siempre pesan las obligaciones de
declarar y decir la verdad? Para este
efecto, dentro del tercer da hbil si-
guiente a su notificacin, las personas
mencionadas propondrn al tribunal el
lugar y la fecha, comprendida dentro
del trmino probatorio, de realizacin
de la audiencia respectiva. El juez los
fijar sin ms trmite si le interesado
as no lo hiciere ni comunicare su re-
nuncia al derecho que el confiere el
artculo 361. Con todo, los miembros y
fiscales judiciales de las Cortes y los jue-
ces letrados que ejerzan sus funciones
en el asiento de stas, no declararn
sin previo permiso de la Corte Supre-
ma, tratndose de algn miembro fis-
cal de este tribunal, o de la respectiva
Corte de Apelaciones en los dems ca-
sos. Este permiso se conceder siempre
que no parezca que slo se trata de es-
tablecer, respecto del juez o fiscal pre-
* Modificado, como aparece en el texto, por
el artculo 2 de la Ley N 19.806, de 31 de mayo
de 2002.
** Sustituido, como aparece en el texto, por
el artculo nico del Decreto Ley N 3.434, de 17
de junio de 1980, publicado en el Diario Oficial de
1 del mes siguiente.
El artculo 2 del Decreto Ley N 3.631, de 20
de febrero de 1981, publicado en el Diario Oficial
de 28 del mismo mes, dispone: "Declrase, interpre-
tando el artculo 361 del Cdigo de Procedimien-
to Civil, modificado por el Decreto Ley N 3.434,
de 1980, que en las expresiones 'Jefes Superiores
de Servicios, empleados en dicho precepto, estn
comprendidos los Rectores de Universidades"'. Ac-
tualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
79
sentado como testigo, una causa de re-
cusacin.*
b) La obligacin de declarar implica el
deber que pesa sobre todo testigo de res-
ponder a las preguntas que se le hagan
en la audiencia de prueba respectiva y
previa observancia de las formalidades le-
gales. Si el testigo ignora el hecho acerca
del cual se le interroga, bastar con que
exprese esta circunstancia, y se entende-
r que ha cumplido con la obligacin an-
tes sealada.
Sin embargo, hay personas que no es-
tn obligadas a declarar, no obstante que
sobre ellas pesa la obligacin de concu-
rrir a la audiencia de prueba respectiva.
Estas personas son:
P. Los eclesisticos, abogados, escri-
banos, procuradores, mdicos y matronas,
sobre hechos que se les hayan comunica-
do confidencialmente con ocasin de su
estado, profesin u oficio (art. 360, N 1,
CPC).
Este precepto contempla el llamado
"secreto profesional". Su infraccin, fue-
ra de las sanciones de orden religioso,
tico o gremial que pueden recaer sobre
el infractor, tambin lo hace incurrir en
responsabilidad penal. En efecto, los que
ejerciendo alguna de las profesiones que
requieren ttulo, revelen los secretos que
por razn de ella se les hubieren confia-
do, incurrirn en las penas de reclusin
menor en sus grados mnimo a medio y
multa de seis a diez unidades tributarias
mensuales** (art. 247, CP).
* Modificado, como aparece en el texto, por
el artculo 2 de la Ley N 19.806, de 31 de mayo
de 2002.
** El artculo 29 de la Ley N 17.374, de 10 de
diciembre de 1970, que aprueba la Ley Orgnica
del Instituto Nacional de Estadsticas, dice: "El Ins-
tituto Nacional de Estadsticas, los organismos fis-
cales, semifiscales y Empresas del Estado, y cada uno
de sus respectivos funcionarios, no podrn divulgar
los hechos que se refieren a personas o entidades
determinadas de que hayan tomado conocimiento
en el desempeo de sus actividades.
El estricto mantenimiento de estas reservas
constituye el 'Secreto Estadstico'. Su infraccin por
lDlTORIAI IURIOICA DE CHILE
7
Mario Casarino Viterbo
I
Manual de Derecho Procesal
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2. Las personas expresadas en los n-
meros 10, 2 Y3 del artculo 358, o sea,
el cnyuge y los parientes legtimos hasta
el cuarto grado de consanguinidad y se-
gundo de afinidad con la parte que los
presente como testigos; los ascendientes,
descendientes y hermanos ilegtimos,
cuando haya reconocimiento del paren-
tesco que produzca efectos civiles respec-
to de la parte que solicita su declaracin;
y los pupilos por sus guardadores y vice-
versa (art. 360, N 2, CPC).*
La razn de ser de este precepto es
evitar a dichas personas la incmoda si-
tuacin moral en que pueden hallarse al
declarar bajo juramento y verse, por tan-
to, en la necesidad de decir la verdad,
perjudicando as los intereses de sus pro-
pios familiares.
3. Los que son interrogados acerca
de hechos que afecten al honor del testi-
go o de las personas mencionadas en el
nmero anterior, o que importen un de-
lito de que pueda ser criminalmente res-
ponsable el declarante o cualquiera de
las personas referidas.
Ahora bien, cul es la sancin en que
incurre una persona cuando comparece
a la audiencia, pero sin justa causa se
niega a declarar? Esta sancin puede ser
doble: civil y penal. La sancin civil con-
siste en que podr ser mantenida en
arresto hasta que preste su declaracin
cualquier persona sujeta a esta obligacin, har in-
currir en el delito previsto y penado por el artCu-
lo 247, del Cdigo Penal, debiendo en todo caso
aplicarse pena corporal". Actualizado Depto. D.
Procesal U. de Chile.
* La Ley N 19.585, de 26 de octubre de 1998,
reemplaz el rgimen de filiacin por el de filiacin
matrimonial y extramatrimonial, y que, por tanto,
los nmeros 1 Y2 del artculo 358, aun cuando
mantienen su texto original, deben ser intelpreta-
dos a la luz del nuevo rgimen de filiacin que dis-
tingue nicamente entre filiacin matrimonial y
extramatrimonial, y que no distingue en el trata-
miento legal que deben recibir los parientes.
EDITORIAL jURIDICA DE CHILE 80
y ser aplicada pOr el juez civil que est
conociendo del respectivo juicio en que
debi prestarse la declaracin; y la san-
cin penal es pena de multa de una a
cuatro unidades tributarias mensuales,
esto es, incurrir el testigo infractor en
una falta, cuya pena le ser aplicada por
el juez en lo penal, previa la sustancia-
cin del proceso respectivo (art. 494,
N 12, CP).
Existen personas que no estn obli-
gadas a declarar ni a concurrir a la au-
dienciajudicial. Es el caso de los chilenos
o extranjeros que gocen en el pas de
inmunidad diplomtica, en conformidad
a los tratados vigentes sobre la materia.
En estos casos dichas personas declara-
rn por informe, si consintieran en ello
voluntariamente. Para tal efecto se les di-
rigir un oficio respetuoso, por medio del
Ministerio respectivo. *
c) La tercera obligacin que pesa sobre
los testigos es la de decir la verdad. No se
halla consagrada en un texto legal expre-
so dentro de la ley procesal civil, pero es
elemental, y ella se deduce del principio
de la buena fe que debe imperar en toda
actuacin judicial. Su infraccin implica
cometer el delito de falso testimonio en
causa civil previsto y sancionado, como ya
lo habamos indicado en el artculo 209
del Cdigo Penal.
402. Derecho de los testigos. Como
una compensacin a las obligaciones an-
tes sealadas que pesan sobre los testi-
gos, la ley les reconoce el derecho para
reclamar de la persona que los presenta
a declarar el abono de los gastos que les
imponga su comparecencia.
En caso de desacuerdo, estos gastos
sern regulados por el tribunal sin forma
de juicio y sin ulterior recurso, y se en-
tender renunciado el derecho para re-
clamar el abono de estos gastos si no se
ejerce en el plazo de veinte das, conta-
* Modificado, como aparece en el texto, por
el artculo 2, N 1 de la Ley N 19.806, de 31 de
mayo de 2002.
dos desde la fecha en que se prest la
declaracin (art. 381 CPC).
III. Forma de producir la prueba
testimonial
403. Presentacin de minuta de pun-
tos de prueba y nmina de los testigos.
La parte litigante que desee rendir prue-
ba testimonial en juicio, dentro de los
cinco das siguientes a la ltima notifi-
cacin de la resolucin que recibi la
causa a prueba, cuando no se haya pe-
dido reposicin de dicha resolucin, y
en el caso contrario, dentro de los cin-
co das siguientes a la notificacin por
el estado de la resolucin que se pro-
nuncie sobre la ltima solicitud de re-
posicin, deber:
a) Presentar una minuta de los puntos
sobre que piense rendir prueba de testi-
gos, enumerados y especificados con cla-
ridad y precisin; y
b) Acompaar tambin una nmina
de los testigos de que piensa valerse, con
expresin del nombre y apellido, domici-
lio y profesin u oficio, debiendo conte-
ner la indicacin del domicilio los datos
necesarios, a juicio del juzgado, para es-
tablecer la identificacin del testigo (art.
320 CPC).
El cumplimiento de esas dos obliga-
ciones est destinado a preparar la prueba
testimonial, permitiendo al contendor
constatar si concurren o no las inhabili-
dades que pudiera hacer valer y formular
las tachas que le sean aplicables.
La minuta de puntos de prueba consis-
te en un conjunto de preguntas, debida-
mente enumeradas y especificadas, las
cuales deben redactarse en forma tal que
constituyan un desarrollo de los hechos
substanciales y pertinentes controverti-
dos sealados por el tribunal. Su finali-
dad es la de facilitar el examen posterior
de los testigos, a cuyo tenor deben ser
interrogados.
Se ha resuelto por nuestros tribuna-
les que la omisin de la presentacin de
la minuta de puntos de prueba implica la
81
renuncia de la parte litigante a una facili-
dad que le otorga la ley, establecida en
su propio beneficio, y que, por consi-
guiente, en tal caso, sus testigos pueden
ser interrogados al tenor de los hechos
substanciales y pertinentes controvertidos
sealados por el tribunal en la resolucin
que recibi a prueba la causa.
La nmina de testigos, en cambio, como
su nombre lo indica, es una lista que con-
tiene el nombre y apellido, el domicilio y
la profesin u oficio de las personas cuya
deposicin se desea. La ley no limita el
nmero de testigos que puede contener
esta nmina, siendo conveniente hacer
figurar en ella el mayor nmero posible,
por las inhabilidades que pueden afectar
a los testigos, o por cualquiera otra razn
de fuerza mayor, que impida su declara-
cin posterior.
Si no se presenta la nmina de testi-
gos, la sancin no puede ser otra que la
de vernos privados del derecho a rendir
prueba testimonial, pues slo se exami-
narn los testigos que figuren en dicha
nmina (art. 372, inc. 2, CPC).
Podr, con todo, el tribunal admitir
otros testigos en casos muy calificados, y
jurando la parte que no tuvo conocimien-
to de ellos al tiempo de formar la nmi-
na aludida (art. 372, inc. 2, parte final
CPC).
Estas dos obligaciones deben cumplir-
se dentro de un mismo trmino de cinco
das, que es de carcter fatal por ser un
trmino establecido para las partes en el
Cdigo de Procedimiento Civil.
La manera de computarlo depende-
r de la circunstancia de si la resolucin
que recibe la causa a prueba es o no ob-
jeto de recursos de reposicin: en el pri-
mer caso, el plazo se cuenta desde la
notificacin por el estado de la resolu-
cin que se pronuncie sobre la ltima
solicitud de reposicin; y en el segundo,
desde la ltima notificacin por cdula
de la resolucin que recibi la causa a
prueba.
404. Tribunal ante el cual se rinde la
prueba testimonial. En principio, la prue-
eDITORIAL jURIDlCA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo
~
I
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I Manual de Derecho Procesal
~
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ba testimonial se rinde ante el mismo tri-
bunal que conoce del pleito; pero si han
de declarar testigos que residan fuera del
territorio jurisdiccional en que se sigue
el juicio, se practicar su examen por el
tribunal que corresponda, a quien se re-
mitir copia de los puntos de prueba fija-
dos* (art. 371, inc. l, CPe).
Por consiguiente, la residencia del tes-
tigo viene a determinar el tribunal llama-
do a intervenir en la prctica de este
medio probatorio. Si el testigo reside fue-
ra del territorio jurisdiccional** en que
se sigue el juicio, no hay ms camino que
valerse de la jurisdiccin delegada, esto es,
el tribunal de la residencia del testigo in-
tervendr en la respectiva diligencia por
encargo o delegacin del que est cono-
ciendo del juicio.
La comunicacin que ser necesa-
rio enviar al tribunal de la residencia
del testigo, deber contener los puntos
de prueba fijados por el tribunal; como
igualmente la personera de los encar-
gados de representar a las partes en esta
diligencia de prueba (art. 371 CPC). En
la prctica, dicha comunicacin o ex-
horto contiene, adems, la minuta de
puntos de prueba, y la lista de testigos
presentada por las partes y las corres-
pondientes notificaciones de la resolu-
cin que recibi la causa a prueba, todo
ello para su mejor cumplimiento.
405. Fijacin de audiencias de prue-
ba. En su oportunidad manifestamos que
el trmino de prueba estaba destinado
particularmente a la recepcin de la prue-
ba testimonial; pero, como ste tiene una
duracin ordinaria de veinte das, ser
necesario que el tribunal designe dentro
de este plazo qu das estarn destinados
a la recepcin de la prueba testimonial
ofrecida.
A este respecto, el tribunal, atendido
el nmero de testigos y el de los puntos
* Inciso modificado, como aparece en el tex-
to, por el N 7 del artculo quinto de la Ley
N" 18.776, de 18 de enero de 1989.
** Actualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
HJITORIAL JURIOlCA Df CHILE 82
de prueba, sealar una o ms audiencias
para el examen de los que se encuentren
en el departamento* (art. 369, inc. 1,
CPe). Estas audiencias se sealan f ~ n d o
el da y la hora correspondiente, y dicha
labor la podr cumplir el tribunal, ya en
la misma resolucin que recibe la causa a
prueba, ya en una resolucin posterior, a
solicitud de parte interesada.
En cuanto al tribunal exhortado, o
sea, en caso de residir los testigos en un
teqitorio jurisdiccional diferente a aqul
er(que se sigue el juicio, sealar estas
audiencias de prueba al ordenar el cum-
plimiento de dicho exhorto, o bien a
solicitud posterior del encargado respec-
tivo.
Cualquiera que sea el tribunal de que
se trate, lo cierto es que al sealar las
audiencias de prueba deber procurar, en
cuanto sea posible, que todos los testigos
de cada parte sean examinados en la mis-
ma audiencia. De ah que, en la prctica,
generalmente se fija una o ms audien-
cias para el demandante, y una o ms
para el demandado.
406. Citacin de los testigos. Una vez
f ~ d s las correspondientes audiencias de
prueba, ser necesario ponerlas en cono-
cimiento de los testigos para que cum-
plan con sus obligaciones, en especial,
con la de comparecer a declarar. Este co-
nocimiento puede drseles a los testigos,
ora extraoficialmente, ora en forma judi-
cial. La manera de poner en conocimien-
to de un testigo el sealamiento de la
respectiva audiencia de prueba, a objeto
de que concurra a ella a prestar la co-
rrespondiente declaracin, es mediante
su citacin.
Citar, por consiguiente, a un testigo,
es poner en su conocimiento que ha sido
presentado en juicio en tal carcter y el
sealamiento de la audiencia de prueba
a la cual debe concurrir a declarar. Esta
* Hoy habr que entender la palabra "depar-
tamento" como sinnima de "territoriojurisdiccio-
nal" del tribunal que conoce del juicio.
citacin la practica el ministro de fe, o
sea, el receptor, previa peticin de parte
interesada y resolucin del tribunal que
as lo ordene (art. 380, inc. 1, parte a,
CPe).
Esta citacin reviste la forma de una
notificacin personal o por cdula, por tra-
tarse de terceros extraos al juicio; y debe
contener la indicacin del juicio en que
debe prestarse y la declaracin y el da y
la hora de la comparecencia (arts. 56 y
380, inc. 10, CPe).
Ahora bien, el testigo que legalmen-
te citado no comparezca podr ser compe-
lido por medio de la fuerza ante el
tribunal que haya expedido la citacin,
a menos que compruebe que ha estado
en imposibilidad de concurrir (art. 380,
inc. 2, c.PC.); todo lo cual se entiende
sin perjuicio de la responsabilidad pe-
nal que pueda afectar al testigo rebelde
(art. 380, inc. 4, CPe). Se trata de una
falta, sancionada, al igual que el caso
del testigo que se niega a prestar decla-
racin sin justa causa, en el artculo 494,
N 12, del Cdigo Penal, Ttulo 1 "De
las Faltas".
407. Examen de los testigos. Las re-
glas que sealaremos a continuacin, acer-
ca del examen de los testigos, se aplican
tanto a los que declaran ante el mismo
tribunal que est conociendo del juicio,
o en el lugar que hayan propuesto de
acuerdo a lo sealado en el artculo 361
del CPC.
Estas reglas se pueden sintetizar en la
forma siguiente:
a) Antes de examinar a cada testigo
se le har prestar juramento al tenor de
la frmula siguiente: "Juris por Dios
decir verdad acerca de lo que se os va a
preguntar?". El interrogado responder:
"S juro", conforme a lo dispuesto en el
artculo 62 (art. 363 CPC).
El juramento es una formalidad esen-
cial de la prueba testimonial, de suerte
que su omisin est sancionada con la
nulidad de la diligencia misma. En la prc-
tica, los jueces toman el juramento a los
testigos en conjunto.
83
b) Los testigos de cada parte sern
examinados separada y sucesivamente, prin-
cipiando por los del demandante, sin que
puedan unos presenciar las declaraciones
de los otros.
El tribunal adoptar las medidas con-
ducentes para evitar que los testigos que
vayan declarando puedan comunicarse
con los que no hayan prestado declara-
cin (art. 364 CPe).
En la prctica, la manera de evitar
esta comunicacin es dejando a los testi-
gos que ya han declarado dentro de la
sala respectiva en que se est prestando
declaracin.
c) Los testigos sern interrogados per-
sonalmente por el juez, y si el tribunal es
colegiado, por uno de sus ministros a pre-
sencia de las partes y de sus abogados, si
concurren al acto.
Las preguntas versarn sobre los da-
tos necesarios para establecer si existen
causas que inhabiliten al testigo para de-
clarar y sobre los puntos de prueba que
se hayan f ~ d o Podr tambin el tribu-
nal exigir que los testigos rectifiquen, es-
clarezcan o precisen las aseveraciones
hechas (art. 365 CPe).
d) Cada parte tendr derecho para
dirigir, por conducto del juez, las interro-
gaciones que estime conducentes, con el
objeto de establecer las causales de inha-
bilidad legal que puedan oponerse a los
testigos y de que stos rectifiquen, escla-
rezcan o precisen los hechos sobre los
cuales se invoca su testimonio.
En caso de desacuerdo entre las par-
tes sobre la conducencia de las pregun-
tas, resolver el tribunal y su fallo ser
apelable slo en lo devolutivo (art. 366
CPe).
e) Los testigos deben responder de una
manera clara y precisa a las preguntas
que se les hagan, expresando la causa por
qu afirman los hechos aseverados, y no
se les permitir llevar escrita su declara-
cin (art. 367 CPe).
f) La declaracin constituye un solo
acto que no puede interrumpirse sino por
causas graves y urgentes, y procurar tam-
bin el tribunal, en cuanto sea posible,
fDITORIAI JURlDlCA DF CHILE
m
Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
m
que todos los testigos de cada parte sean
examinados en la misma audiencia (arts.
368 y 369, inc. 2, CPC).
g) Sern admitidos a declarar sola-
mente hasta seis testigos, por cada parte,
sobre cada uno de los hechos que deban
acreditarse (art. 372, inc. 1, CPC).
Este precepto ofrece la duda acerca
de si se refiere a los hechos sealados
por el tribunal o a los que sealan las
partes en sus minutas de puntos de
prueba respectiva. Nos inclinamos por
esa ltima opinin, pues, en caso con-
trario, lo habra dicho expresamente el
legislador.
h) Si algn testigo no entiende o no
habla castellano, ser examinado por me-
dio de intrprete (art. 382 CPC).
408. Acta de la prueba testimonial.
Una vez que presta declaracin el testi-
go, su deposicin se consigna por escri-
to, o sea, en un acta que deja constancia
fehaciente de la diligencia que se han
llevado a cabo.
Al consignarse las declaraciones por
escrito, deben conservarse en cuanto sea
posible las expresiones de que se haya vali-
do el testigo, reducidas al menor nme-
ro de palabras.
Despus de ledas por el receptor en
alta voz y ratificadas por el testigo, sern
firmadas por eljuez, el declarante, si sabe,
y las partes, si tambin saben y se hallan
presentes, autorizndolas un receptor, que
servir tambin como actuario en las in-
cidencias que ocurran durante la audien-
cia de prueba (art. 370 CPC).
Esta disposicin hace aplicacin de
la regla general consignada en el artcu-
lo 61 del Cdigo de Procedimiento Civil,
en cuanto exige que de toda actuacin
deber dejarse testimonio escrito en el pro-
ceso con las formalidades que all mismo
se sealan; y revela, al mismo tiempo, que
el actuario en la prueba testimonial, a
diferencia de las dems actuaciones en
que interviene el secretario, es el receptor,
de suerte que su autorizacin o firma es
tambin esencial para la validez de la res-
pectiva diligencia.
fOlTORJAI jURIDICA DE CHI] l 84
409. Recapitulacin. En resumen, la
forma de producir la prueba testimonial
en juicio es un tanto compleja e implica
el cumplimiento de diversas formalidades
anteriores a la declaracin, en el momen-
to de prestar la declaracin misma y pos-
teriores a ella.
Las formalidades anteriores a la decla-
racin testimonial son: presentacin de
minuta de puntos de prueba y de nmi-
na o lista de testigos, fBacin de las au-
d,iencias de prueba, citacin o medidas
d apremio en contra de los testigos, y
prestacin deljuramento.
En cambio, las formalidades a obser-
var en el momento mismo de prestar la de-
claracin son las que hemos sealado
anteriormente en cuanto a quin interro-
ga a los testigos, al tenor de qu, etc.; y las
posteriores a la declaracin se reducen a con-
signar por escrito las deposiciones.
IV. Las tachas
410. Concepto. Tachas son los medios
o la forma de hacer efectivas las inhabili-
dades establecidas por la ley procesal y
que conducen, al ser aceptadas, a desesti-
mar las declaraciones de los testigos en
juicio.
Recordemos que estas inhabilidades
se hallan establecidas en los artculos 357 y
358 del Cdigo de Procedimiento Civil; y
que se clasifican en absolutas y relativas,
segn si impiden declarar en cualquier
juicio o en uno determinado.
Las tachas, como se comprende, se
oponen respecto del testigo que se encuen-
tra afecto a alguna causal de inhabilidad
legal para declarar en juicio, y por la par-
te en contra de la cual va a prestar decla-
racin.
411. Oportunidad para oponer tachas.
Solamente podrn oponerse tachas a los
testigos antes de que presten su declaracin.
En el caso del inciso final del artculo
anterior, podrn tambin oponerse den-
tro de los tres das subsiguientes al examen
de los testigos (art. 373, inc. P, CPC).
En consecuencia, la ley hace un dis-
tingo respecto de la oportunidad para
oponer tachas, segn si se trata de aque-
llos testigos que figuran en la nmina
que debe presentarse en la oportunidad
sealada en el artculo 320; o de aque-
llos testigos que puede admitir el tribu-
nal, en casos muy calificados, y jurando
la parte que no tuvo conocimiento de
ellos al momento de formar la nmina
antes indicada.
Respecto de los primeros, la tacha se
formula antes que presten su declaracin,
o sea, en el lapso comprendido entre la
presentacin de la nmina o lista de tes-
tigos y el juramento del testigo, pues esta
ltima actuacin no constituye su decla-
racin sino una formalidad previa a ella.
En la prctica, la tacha se formula res-
pecto de estos testigos, verbalmente, en
la correspondiente audiencia de prueba,
despus de prestado el juramento de ri-
gor y antes de iniciarse el examen o inte-
rrogatorio del testigo.
En cuanto a los segundos, por la pre-
mura con que son presentados por la par-
te respectiva, se pueden tachar al igual
que los anteriores, o sea, antes que pres-
ten su declaracin; pero, adems, la ley
seala un plazo de gracia o extraordina-
rio, esto es, dentro de los tres das subsi-
guientes al examen de estos testigos.
Ahora bien, si la parte en cuyo favor
se han establecido las tachas, no las opo-
ne en las oportunidades legales antes se-
aladas, se entiende que se ha extinguido
su derecho, y, en consecuencia, que las
declaraciones de los testigos afectos a in-
habilidad deben valorizarse lo mismo que
si se tratare de testigos sin tachas.
412. Forma o manera de hacer valer
las tachas. Slo se admitirn las tachas
que se funden en alguna de las inhabili-
dades mencionadas en los artculos 357 y
358, Ycon tal que se expresen con la cla-
ridad y especificacin necesarias para que
puedan ser fcilmente comprendidas (art.
373, inc. 2, CPC).
Por consiguiente, para que una ta-
cha sea admitida a tramitacin requiere
85
fundarse en causa legal y ser expresada
con la claridad y especificacin necesa-
rias para que puedan fcilmente ser com-
prendidas.
Lo primero, desde el momento en que
la institucin de las tachas es de excep-
cin y slo puede existir en los casos en
que la ley expresamente la consagra; y
lo segundo, a fin de que no exista la me-
nor duda acerca de los fundamentos de
hecho en que la tacha se basa, y colocar
as tambin a la contraria en condicio-
nes adecuadas para rebatirla y al tribu-
nal para fallarla.
Si al formularse la tacha el oponente
no cumple con los dos requisitos legales
ya sealados, el tribunal podr negarse a
admitirla a tramitacin y desecharla des-
de luego. As se desprende, por lo de-
ms, del contexto de la frase: "Slo se
admitirn las tachas... ".
413. Efectos de la oposicin de las
tachas. Una vez opuesta la tacha, la parte
que presenta al testigo tachado tiene dos
caminos o actitudes que asumir: pedir que
se omita su declaracin y que se reem-
place por la de otro testigo hbil de los
que figuran en la nmina respectiva (art.
374 CPC); o bien, dejar que el testigo
declare, pues la tacha opuesta no obsta a
su examen (art. 375, inc. P, parte P,
CPC).
La primera actitud est condicionada a
la circunstancia de que se disponga de
otros testigos hbiles y que figuren en la
nmina respectiva. De all que en su con-
feccin se aconseja hacer figurar el ma-
yor nmero posible de testigos, para
precaverse de las eventuales tachas.
La parte que presenta al testigo que
ha sido tachado dejar que siempre preste
declaracin, cuando tenga la certeza de
que la tacha es imaginaria o que ella no
podr probarse en la oportunidad legal
debida. Sin embargo, no hay que olvidar
que los tribunales podrn repeler a los
testigos que notoriamente aparezcan com-
prendidos en alguna causal de inhabili-
dad absoluta, lo que deber hacer el
EDITORIAL JURIDICA DE CHilE
z
2
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Mario Casarino Viterbo
,...
I
Manual de Derecho Procesal
/'
J
m
dichas por las declaraciones testimonia-
les de la otra parte. Qu hacer en este
caso? A cul de ellas asignarles mejor
mrito probatorio? El legislador formula
tambin al respecto diversas reglas:
a) Primera regla: Cuando las declara-
ciones de los testigos de una parte sean
contradictorias con las de los testigos de
la otra, tendrn por cierto lo que decla-
ren aquellos que, aun siendo en menor
nmero, parezca que dicen la verdad por
estar mejor instruidos de los hechos, o
por ser de mejor fama, ms imparciales y
verdicos, o por hallarse ms conformes
en sus declaraciones con otras pruebas
del proceso (art. 384, N 3, CPC).
Esta regla hace aplicacin del conoci-
do principio o aforismo que dice que los
testigos se pesan y no se cuentan. Se tra-
ta de declaraciones testimoniales contra-
dictorias en las que el tribunal debe tener
por cierto lo que expresen aquellas que
se encuentren aun en menor nmero por-
que parece que dicen la verdad en razn
de tres factores, a saber: por estar mejor
instruidos de los hechos, por ser de me-
jor fama, imparcialidad y veracidad, o por
hallarse ms conformes sus declaraciones
con las dems pruebas del proceso.
La apreciacin de estos ltimos facto-
res queda, por consiguiente, entregada
al criterio del tribunal; pero, una vez cons-
tatados, la regla de la calidad de los testi-
gos sobre su nmero se impone con
caracteres obligatorios a aqul.
b) Segunda regla: Cuando los testigos
de una y otra parte renan iguales condi-
ciones de ciencia, de imparcialidad y de
veracidad, tendrn por cierto lo que de-
clare el mayor nmero (art. 384, N 4,
CPC).
Aqu tambin el tribunal aprecia pru-
dencialmente el grado de ciencia, impar-
cialidad y veracidad de los testigos, pero,
una vez constatado que todos los testigos
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE 88
presentan iguales condiciones, la fuerza
del nmero tambin se impone con ca-
racteres de obligatoriedad.
c) Tercera regla: Cuando los testigos de
una y otra parte sean iguales en circuns-
tancias y en nmero, de tal modo que la
sana razn no pueda inclinarse a dar ms
crdito a los unos que a los otros, ten-
drn igualmente por no probado el he-
cho (art. 384, N 5, CPC).
Se podr hacer un smil con las fuer-
zasJsicas que, siendo de potencia equi-
vainte, terminan por neutralizarse.
d) Cuarta regla: Cuando sean contra-
dictorias las declaraciones de los testigos
de una misma parte, las que favorezcan a
la parte contraria se considerarn presen-
tadas por sta, aprecindose el mrito pro-
batorio de todas ellas en conformidad a las
reglas precedentes (art. 384, N 6, CPC).
Estas declaraciones, por las condicio-
nes en que fueron prestadas, deben esti-
marse como si fueren de testigos de la
contraparte; y, en seguida, se aplican las
reglas de la calidad, del nmero y de la
neutralizacin antes sealadas, segn el
caso.
419. Testimonio de los menores de
catorce aos. Recordemos, por ltimo,
que no son hbiles para declarar como
testigos, los menores de catorce aos; pero
que podrn aceptarse sus declaraciones
sin previo juramento y estimarse como
base para una presuncin judicial, cuando
tengan discernimiento suficiente (art. 357,
N 1, CPC).
En consecuencia, el mrito probato-
rio de una declaracin testimonial seme-
jante queda entregado al criterio del
tribunal desde un doble punto de vista:
en cuanto al grado de discernimiento que
se supone en el testigo y en cuanto a si
dicha declaracin cabe o no considerarla
como base para una presuncin judicial.
-.-
(
I
1. Generalidades
420. Concepto. La prueba confesio-
nal es la que se produce a virtud de con-
fesin de parte. Se entiende por tal aquel
medio probatorio consistente en el re-
conocimiento que una persona hace de
la verdad de un hecho, susceptible de
producir consecuencias jurdicas en su
contra.
Se trata de un medio probatorio cir-
cunstancial, lo mismo que la prueba de
testigos, pues generalmente se produce
en juicio y una vez que ste se ha origina-
do; y difiere de la prueba de testigos, en
que mientras sta emana de un tercero,
llamado testigo, la prueba confesional sur-
ge de las propias partes litigantes.
Su importancia es manifiesta, ya que
constituye el medio de prueba por exce-
lencia; y su estudio desborda el campo del
derecho procesal, pues tambin es culti-
vado por los autores de derecho civil y
en materias de tanta trascendencia, como
ser la capacidad para confesar y la divisi-
bilidad o indivisibilidad de la confesin.
421. Sus caractersticas. Las caracte-
rsticas ms sobresalientes que presenta
la confesin de parte son:
a) Es un medio probatorio del que
pueden valerse las partes en juicio, o sea,
un elemento destinado a formar en el
juez la conviccin acerca de los hechos
que se controvierten; pero, excepcional-
mente, tambin reviste el carcter de me-
dida prejudicial destinada a preparar la
entrada al juicio (arts. 273, N 1, 284 Y
288 CPC) y de gestin preparatoria del
juicio ejecutivo tendiente a procurar un
89
ttulo con dicha fuerza (arts. 434, N 5, Y
435 CPC).
b) Es un medio probatorio de que se
valen las partes de propia iniciativa, tanto
demandante como demandado; el prime-
ro, con el objeto de acreditar los funda-
mentos de su accin, y el segundo, a fin
de probar los fundamentos de su excep-
cin; pero tambin puede provocar este
medio probatorio el juez, exigiendo con-
fesin judicial de cualquiera de las partes
sobre hechos que considere de influen-
cia en la cuestin y que no resulten pro-
bados, o sea, de oficio y como medida
para mejor resolver (art. 159, N 2, CPC).
c) Es un reconocimiento o declaracin
de voluntad, el cual, jurdicamente, revis-
te el carcter de unilateral, pues, por cier-
to, no necesita de la aceptacin de la parte
contraria; y que en cuanto a su forma,
puede ser expreso o tcito, segn las con-
diciones en que se ha efectuado.
d) Se produce, generalmente, en juicio.
De all que, si bien el artculo 341 enu-
mera entre los medios de prueba de que
puede hacerse uso en juicio la confe-
sin de parte, ms adelante, reglamen-
tando la manera de obtenerla en los
artculos 385 y siguientes, la llama "con-
fesin en juicio". Excepcionalmente, la
confesin de parte puede prestarse fue-
ra de juicio, o sea, en forma extrajudi-
cial, cuyo valor probatorio tambin
considera la ley; y
e) Es, por ltimo, un reconocimiento
o declaracin de voluntad que produce
consecuencias jurdicas en contra del con-
fesante, porque este medio probatorio ja-
ms lo favorece a l sino a la parte que
pidi o se vale de la confesin; indivisible,
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
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m
Mario Casarino Viterbo
".-
Manual de Derecho Procesal
~
porque la confesin, por regla general,
no puede dividirse en perjuicio del con-
fesante; e irrevocable, porque la confesin,
tambin por regla general, una vez pres-
tada, es inamovible.
422. Requisitos de validez de la con-
fesin. En nuestra opinin, los requisitos
de validez de la confesin, o sea, los ele-
mentos necesarios para que este medio
probatorio produzca los efectos legales
que le son propios, son los siguientes: a)
que verse sobre hechos pertenecientes al
juicio mismo; b) que el confesante tenga
capacidad suficiente para obligarse; c) que
no exista disposicin legal que prohba
este medio probatorio o le asigne un efec-
to diverso al deseado; y d) que la volun-
tad del confesante est exenta de todo
vicio.
A continuacin analizaremos cada
uno de estos requisitos, en el mismo or-
den ya indicado.
a) Que verse sobre hechos pertenecientes al
juicio mismo: as reza textualmente el ar-
tculo 385, al sealar la obligacin que
pesa sobre todo litigante de declarar, bajo
juramento, contestada que sea la deman-
da, sobre hechos pertenecientes al mis-
mojuicio.
Desde el momento en que la confe-
sin de parte es un medio probatorio, debe
versar, naturalmente, sobre hechos; pues
el derecho sabemos que, por regla gene-
ral, no requiere de prueba. Estos hechos
deben pertenecer aljuicio mismo; de suer-
te que bien podemos decir que deben co-
rresponder a los hechos sustanciales y
pertinentes que dentro de l han sido de-
batidos, y, todava ms, deben ser contro-
vertidos, pues si as no fueren carecera
de todo objeto esta clase de prueba.
Los hechos objeto de la confesin, en
principio, deben ser personales del con-
fesante; pero nuestro derecho permite
que la confesin recaiga tambin sobre
hechos no personales. En todo caso, estos
hechos deben serle peIjudiciales al con-
fesante, y aqu radica precisamente la ra-
zn o fundamento psicolgico de la
confesin, puesto que el hombre, por su
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE 90
propia naturaleza, trata de hacer que des-
aparezcan los hechos que le son desfavo-
rables.
b) Que el confesante tenga capacidad su-
ficiente para obligarse: este requisito de va-
lidez de la confesin es del ms alto
inters y ha sido bastante discutido. Ge-
neralmente se confunde al tratar de este
requisito, la capacidad para obligarse por
medio de la confesin con la obligacin
de prestarla. Si el litigante a quien se le
exige confesin es plenamente capaz, no
hy problema, puesto que todo litigante
est obligado a prestar confesin, y sta
tendr el mrito probatorio que la ley le
asigna, o sea, el de plena prueba. La difi-
cultad se presenta cuando lLconfesin
debe prestarse a travs o por i n t ~ m i o
de representante legal o convencional.
Puede excusarse el representante legal
o el mandatario de prestar confesin, so
pretexto de que este acto excede de los
lmites de su representacin?
La doctrina se ha uniformado en el
sentido de que toda persona que compa-
rezca en juicio, a su propio nombre o
como representante legal de otra, est
obligada a prestar confesin; pero que
este medio de prueba surtir efecto, siem-
pre y cuando el hecho confesado no se
traduzca en la prueba de obligaciones que
no han podido ser vlidamente contra-
das por el respectivo representante legal
o mandatario, sea porque exceden de la
rbita de la representacin, sea porque
requieren del cumplimiento previo de
determinadas formalidades legales, como
ser una autorizacin judicial.
Ejemplo: en un juicio que se sigue en
contra de una Municipalidad se exige con-
fesin judicial del respectivo Tesorero Co-
munal para que reconozca cmo es
efectivo que dicha corporacin adeuda
determinada suma de dinero. El Tesore-
ro Comunal no podra excusarse de la
obligacin de prestar confesin, porque
es el representante legal de la entidad
demandada; pero esa confesin, aun
cuando fuere asertiva, carecera de valor
legal, puesto que las Municipalidades so-
lamente se obligan en la forma que su
ley orgnica determina, y entre ellas no
figura, por cierto, la confesin de dicho
funcionario.
c) Que no exista disposicin legal que pro-
hba este medio probatorio o le asigne un efecto
diverso al deseado: la confesin de parte,
por regla general, es admisible para pro-
bar toda clase de hechos, salvo los casos
legalmente exceptuados. As se despren-
de de lo que prescribe el artculo 1713
del Cdigo Civil, al sealar el mrito pro-
batorio de la confesin que alguno hicie-
re en juicio, exceptuando los casos que
las leyes indiquen, y de la frase con que
se encabeza el artculo 385 del Cdigo
de Procedimiento Civil: "Fuera de los ca-
sos expresamente previstos por la ley, todo
litigante est obligado a declarar bajo ju-
ramento... ".
Estos casos de inadmisibilidad de la
confesin estn contemplados en las le-
yes, a veces por va de prohibicin, y a
veces asignndole un efecto diverso de
aquel que, en conformidad a las reglas
generales, le corresponde.
Ejemplos de prohibiciones: arts. 157,
188, inc. 3, 1701, 1713, 1739, inc. 2,
2485, etc., del Cdigo Civil.
Ejemplos de efectos diversos a los de-
seados: arts. 1132 y 1133 del Cdigo Ci-
vil, 398 del Cdigo de Procedimiento
Civil, etc.
d) Que la voluntad del confesante est
exenta de todo vicio: significa que el litigan-
te, al prestar confesin, debe hacerlo li-
bre de toda coaccin fsica, con pleno
conocimiento de los hechos, y sin maqui-
naciones de la parte contraria destinadas
a arrancar una confesin en forma frau-
dulenta.
En sntesis, la voluntad del confesan-
te podr estar viciada por fuerza, error o
dolo. El error est contemplado expresa-
mente en la ley procesal civil, al permitir-
le al confesante que retracte su confesin,
fundado en error de hecho yjustificando
esta circunstancia (art. 402, inc. 2, CPC);
yen cuanto a la fuerza y el dolo, los acep-
tamos entre los vicios de la voluntad del
confesante, siempre que se configuren
dentro de la teora general de aqulla
91
como requisito generador de los actos
procesales.
423. Clasificacin de la confesin. Es
el medio probatorio que admite mayor
nmero de clasificaciones, pues son muy
variados los puntos de vista desde los cua-
les pueden stas efectuarse.
As:
a) Segn el lugar en que se presta, la
confesin se clasifica en judicial y extra-
judicial. Confesin judicial es aquella que
se presta dentro del juicio en el cual se la
invoca. Confesin extrajudicial, en cambio,
es aquella que se presta enjuicio diverso,
o bien, fuera de juicio.
b) Segn su origen, la confesin se cla-
sifica en espontnea y provocada. Confe-
sin espontnea o voluntaria, como tambin
se le llama, es aquella que se presta sin
requerimiento de juez ni de peticin con-
traria. Confesin provocada, en cambio,es
aquella que se presta, previo requerimien-
to de juez, a peticin de parte interesa-
da, y dentro del mecanismo llamado
absolucin de posiciones.
c) Segn el modo de manifestarse, la
confesin se clasifica en expresa y tcita.
Confesin expresa es aquella que presta el
confesante en trminos categricos y for-
males, de suerte que no haya duda en or-
den a su voluntad e intencin. Confesin
tcita, en cambio, llamada tambin "ficto
confessio", es aquella que tiene lugar, en
los casos expresamente sealados en la
ley, a ttulo de sancin para el litigante
rebelde a prestar confesin expresa.
d) Segn la forma de prestarse, la con-
fesin se clasifica en verbal y escrita. Con-
fesin verbal es aquella que se hace de viva
voz y en presencia de testigos. Confesin
escrita, en cambio, es aquella que consta
de un documento, sea pblico o privado.
e) Segn su contenido, la confesin se
clasifica en simple, calificada y compleja.
Confesin simple, llamada tambin pura o
pura y simple, es aquella en que se reco-
noce el hecho discutido sin agregarle ni
modificarle cosa alguna. Confesin califi-
cada es aquella en que el confesante, fue-
ra de confesar el hecho discutido, le
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
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bin ser su propia obra, labor que cum-
plir en la sentencia misma.
Ahora bien, los antecedentes o cir-
cunstancias conocidas debern ser proba-
dos en el juicio por las partes litigantes,
valindose de los medios probatorios le-
galmente conducentes, salvo tratndose
de presunciones, pues es inaceptable la
prueba de presunciones por presunciones;
y el mtodo lgico seguido por el juez para
inferir los hechos desconocidos de los an-
tecedentes o circunstancias conocidas, po-
dr ser ya el deductivo, ya el inductivo,
porque las expresiones del legislador so-
bre el particular han sido empleadas en
sentido comn u ordinario, antes que fi-
losfico.
La naturaleza "sui generis" que pre-
sentan las presunciones judiciales como
medio probatorio impide que tengan un
verdadero procedimiento o serie de tr-
mites destinados a realizarlas o una opor-
tunidad legal para producirlas. La verdad
es que la parte litigante interesada en ellas
se limita a probar los antecedentes o cir-
cunstancias conocidas que le sirven de
base, de acuerdo a las normas legales ge-
nerales que informan la prueba; y, en se-
guida, se encarga de hacerlas valer o
alegarlas, siendo el juez, en definitiva,
quien en su sentencia las acepta o las re-
chaza como tales.
467. Su admisibilidad. Hemos dicho
que la parte litigante interesada prueba
los hechos o circunstancias conocidos, de
donde el juez va a inferir el hecho desco-
nocido y controvertido.
Se habr as probado este hecho des-
conocido y controvertido mediante la
prueba circunstancial e indirecta de las
presunciones; pero cabe preguntar qu
clase de hechos pueden probarse me-
diante presunciones judiciales? Esto nos
lleva al problema de la admisibilidad de
las presunciones judiciales como medio
de prueba.
En principio, las presunciones judi-
ciales sirven para probar toda clase de he-
chos, sean jurdicos o materiales; salvo
tratndose de actos o contratos solemnes,
119
en los cuales la solemnidad exigida por
el legislador es el otorgamiento de un
instrumento pblico, pues ste no puede
ser suplido por ninguna otra prueba (art.
1701, inc. 1, CC).
Y si se trata de probar una obliga-
cin que ha debido constar por escrito, o
sea, un acto o contrato que contenga la
entrega o promesa de una cosa que valga
ms de dos unidades tributarias? *
La jurisprudencia de nuestros tribu-
nales ha estimado que las presunciones
judiciales son medios de prueba legales y
adecuados para acreditar tales actos o con-
tratos; porque el legislador prohbe en
este caso solamente la prueba testimonial
(arts. 1708 y 1709 CC), la cual no cabe
confundir con aqullas.
Sin embargo, si las presunciones ju-
diciales han sido construidas sobre base,
antecedentes o circunstancias, las cuales,
a su vez, aparecen acreditadas, exclusiva-
mente, mediante prueba testimonial, esta
misma jurisprudencia les ha restado m-
rito probatorio a dichas presunciones,
cuando la obligacin ha debido constar
por escrito, como una manera de evitar
la burla del principio sobre limitacin de
la prueba testimonial.
468. Requisitos de las presunciones
judiciales. El artculo 1712, inciso 2, del
Cdigo Civil prescribe que las presuncio-
nes que deduce el juez debern ser gra-
ves, precisas y concordantes; disposicin
a la que alude el artculo 426, inciso 1,
del Cdigo de Procedimiento Civil, al se-
alar que "las presunciones como medios
probatorios se regirn por las disposicio-
nes del artculo 1712 del Cdigo Civil".
Pero el inciso 2 del artculo 426 del
ramo ya citado agrega: "Una sola presun-
cin puede constituir plena prueba cuan-
do, a juicio del tribunal, tenga caracteres
de gravedad y precisin suficientes para
formar su convencimiento".
* Modificado, como aparece en el texto, por
el artculo 6 del Decreto Ley N 1.123, publicado
en el Diario Oficial de 4 de agosto de 1975. Actua-
lizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
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Captulo Duodcimo
TRMITES POSTERIORES A LA PRUEBA
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Captulo Primero
GENERALIDADES
476. Dermiciones. Se han formulado
diversas definiciones de los recursos pro-
cesales.
Unos dicen que son los medios que
establece la ley para obtener la modifica-
cin, revocacin o invalidacin de una
resolucin judicial.
Otros expresan que son los medios
que la ley concede a la parte que se cree
perjudicada por una resolucin judicial
para obtener que sea modificada o deja-
da sin efecto.
y hay quienes sostienen que son los
medios que concede la ley al que se cree
perjudicado por una resolucin judicial
para obtener del mismo juez que la dict
o de otro de grado superior, la repara-
cin del error o de la injusticia cometida.
Todas estas definiciones tienen la vir-
tud de expresar, cul ms, cul menos,
los diversos elementos de que se compo-
nen o que se observan en los recursos.
En efecto, en todo recurso procesal
encontramos: una resolucin judicial, que
ser el objeto del recurso mismo; un tri-
bunal que pronunci la resolucin que
se trata de impugnar; un tribunal llama-
do a conocer del respectivo recurso, que
podr ser el mismo anterior u otro dife-
rente; una parte litigante que se siente agra-
viada con la resolucin judicial y que, por
consiguiente, la impugna por medio del
recurso; y, en fin, una nueva resolucin ju-
dicial, que tiene como misin enmendar
o invalidar la primitiva resolucin, segn
sea el recurso deducido.
Los recursos procesales son estudia-
dos por la doctrina procesal moderna den-
tro de la teora general de los medios de
impugnacin; y a algunos se les denomina
129
remedios, por la labor profilctica o de sa-
neamiento que les corresponde dentro
del proceso.
En nuestro derecho positivo esta ins-
titucin procesal conserva la denomina-
cin clsica de recursos.
477. Fundamentos de los recursos.
Segn unos, a pesar de las medidas
adoptadas por el legislador para que las
resoluciones judiciales sean el fiel refle-
jo de la justicia, siempre existe la posibi-
lidad de que ellas contengan injusticias,
involuntarias o intencionadas, pues el
hombre es por naturaleza falible, y las
resoluciones judiciales son producto de
l mismo.
Agregan que la existencia de disposi-
ciones contenidas en diversos cuerpos de
leyes, que no siempre guardan perfecta
armona o de disposiciones contenidas en
una misma ley pero contradictorias, difi-
cultan, la mayora de las veces, la genui-
na y correcta aplicacin de las leyes.
Con el objeto, pues, de evitar todos
estos inconvenientes, se dice que las le-
gislaciones han credo necesario estable-
cer los llamados, genricamente, recursos
procesales.
Para otros, los recursos procesales en-
tran en juego cada vez que el juez, cono-
ciendo de un determinado proceso, se
desva de los medios o caminos seala-
dos por el legislador para el correcto ejer-
cicio de la jurisdiccin; o bien, se aparta
de los fines proyectados por aqul, ha-
ciendo una errada o injusta aplicacin
de las leyes de fondo. En el primer caso
la resolucin judicial se ataca desde un
punto de vista formal, y el recurso tiende
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Mario Casarino Viterbo
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Manual de Derecho Procesal
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En efecto, son recursos ordinarios, o de
derecho comn, como tambin se les lla-
ma, aquellos que la ley admite por regla
general y en contra de toda clase de reso-
luciones judiciales; y son recursos extraordi-
narios aquellos que la ley admite de manera
excepcional y en contra de determinadas
resoluciones judiciales, por causales que
ella misma tambin establece.
Ejemplos de recursos ordinarios: re-
posicin, aclaracin, agregacin o rectifi-
cacin, apelacin, etc.
Ejemplos de recursos extraordinarios:
casacin, revisin, amparo, etc.
Se diferencian, pues, fundamentalmente,
los recursos ordinarios de los extraordina-
rios -prescindiendo de los elementos inte-
grantes de las respectivas definiciones-, en
la circunstancia que en los primeros el juez
llamado a conocer del respectivo recurso
tiene las mismas amplias atribuciones que
tena el que conoci de la resolucin re-
currida, pudiendo enmendarla, en la me-
jor forma que le parezca, siempre que sea
en conformidad a derecho; en cambio, en
los ltimos la competencia del juez llama-
do a conocer del respectivo recurso se ha-
lla limitada al conocimiento de la causal
que la ley seala en forma taxativa y que
ha servido de fundamento al recurso, li-
mitndose, en la mayora de los casos, a
invalidar o anular la resolucin recurrida.
Otra clasificacin de los recursos es
por va de retractacin y por va de reforma,
atendiendo al tribunal llamado a conocer
del respectivo recurso; esto es, segn sea
el mismo que dict la resolucin recurri-
da u otro diferente de jerarqua superior.
Ejemplo de recursos por va de re-
tractacin: reposicin.
Ejemplo de recursos por va de refor-
ma: apelacin.
481. Tramitacin de los recursos. To-
dos los recursos, en general, tienden a
enmendar errores o a corregir injusticias
en que pueden incurrir los jueces al dic-
tar resoluciones; pero, al mismo tiempo,
cada uno de ellos tiene un objetivo espe-
cfico diverso que los diferencia de los
dems.
131
479. Caractersticas principales de los
recursos. Un somero anlisis de la ante-
rior enumeracin de los recursos proce-
sales que nuestra legislacin consagra, nos
permite sealar que ellos presentan las
siguientes caracteristicas generales:
a) Por regla general, se interponen ante
el mismo tribunal que dict la resolucin
recurrida; por excepcin, se entablan ante
el tribunal que va a conocer de ellos; caso
de los recursos de inconstitucionalidad,
de queja, de hecho, de amparo y de pro-
teccin;
b) Por regla general, se interponen para
que conozca de ellos el tribunal inmedia-
tamente superior en grado jerrquico de
aquel que dict la resolucin recurrida;
por excepcin, el conocimiento y fallo de
los recursos corresponde al mismo tribu-
nal que dict la resolucin recurrida; caso
de los recursos de reposicin, y de acla-
racin, agregacin o rectificacin;
c) Por regla general, se interponen en
contra de resoluciones que no tienen el
carcter de firmes o ejecutoriadas, a fin
de invalidarlas o anularlas; por excepcin,
el recurso de revisin se entabla para
invalidar una sentencia firme o ejecuto-
riada; y
d) Por regla general, se interponen den-
tro de un trmino fatal, cuyo vencimien-
to extingue el derecho a deducirlo, por
el solo ministerio de la ley; por excepcin,
hay recursos que, por su propia naturale-
za, no tienen plazo, como los recursos de
inconstitucionalidad y de amparo.
Cdigo Orgnico de Tribunales, y 665 del
Cdigo de Procedimiento Civil; pero no
hay tal, pues en ninguno de los casos an-
tes sealados se impugna una resolucin
judicial. En efecto, en el primer caso se
ataca una medidajudicial de carcter eco-
nmico y en el segundo una mera pro-
posicin de regulacin de honorarios.
480. Clasificacin de los recursos. La
clasificacin ms general y comnmente
admitida es la que divide los recursos en
ordinarios y extraordinarios, atendiendo
a la generalidad o no de su procedencia.
c) El de reposicin o reconsideracin,
que tiene por objeto conseguir del mis-
mo juez que dict una resolucin judi-
cial que la modifique o la deje sin efecto
(art. 181 CPC);
d) El de aclaracin, agregacin o rectifi-
cacin, que tiene por objeto aclarar los
puntos oscuros o dudosos, salvar las omi-
siones o rectificar los errores de copia,
de referencia o de clculos numricos que
aparezcan de manifiesto en la misma sen-
ten<;:ia (art. 182 CPC);
"e) El de apelacin, que tiene por obje-
to obtener del tribunal superior respecti-
vo que enmiende, con arreglo a derecho,
la resolucin del inferior (art. 186 CPC);
f) El de hecho, que tiene por objeto
corregir los agravios que un tribunal pue-
da inferir a las partes al pronunciarse so-
bre la solicitud en que se interpone un
recurso de apelacin (arts. 196 y 203
CPC);
g) El de casacin, que es de dos cla-
ses, de forma y de fondo; y que tiene por
objeto obtener la invalidacin o anula-
cin de una sentencia en los casos expre-
samente sealados por la ley (art. 765
CPC);
h) El de revisin, que tiene por objeto
obtener la invalidacin de una sentencia
firme por parte de la Corte Suprema en
los casos expresamente sealados por la
ley (art. 810 CPe);
i) El de amparo, que tiene por objeto
poner trmino a las detenciones o prisio-
nes arbitrarias (arts. 21 CPR y 306 c.P.P.);
y
j) El de proteccin, que tiene por obje-
to obtener la adopcin de inmediato de
las providencias que se juzguen necesa-
rias para restablecer el imperio del dere-
cho y asegurar la debida proteccin del
recurrente, cuando ste, por causa de ac-
tos u omisiones arbitrarias o ilegales, su-
fra privacin, perturbacin o amenaza en
el legtimo ejercicio de determinados de-
rechos o garantas constitucionales (art. 20
CPR).
Se ha credo tambin por algunos ver
otro recurso procesal, llamado de recla-
macin, en los artculos 551, inciso 4, del
130
478. Cules son los recursos proce-
sales? En nuestro derecho positivo los re-
cursos procesales son numerosos, estn
reglados en diversos cuerpos legales y su
denominacin depende del objetivo que
mediante ellos se persigue.
En efecto, ellos son:
a) El de inaplicabilidad o inconstitu-
cionalidad, que tiene por objeto conse-
guir del Tribunal Constitucional* la
declaracin de que un determinado pre-
cepto legal es inconstitucional y que, por
consiguiente, no debe ser aplicado por
el tribunal que est conociendo de un
asunto judicial y en el cual dicho precep-
to fue invocado (art. 93, N 6 CPR).**
b) El de queja, que tiene por objeto
reprimir las faltas o abusos que cometan
los jueces en el ejercicio de sus funciones;
y, en especial, dejar sin efecto o modificar
las resoluciones judiciales motivadas por
faltas o abusos aun susceptibles de ser co-
rregidos por otros medios (art. 536 COT);
a obtener como sancin la nulidad; en el
segundo, la resolucin judicial es correc-
ta en la forma, pero se ataca el fondo,
por errnea o injusta, y se persigue, como
sancin, la enmienda.
En resumen, los recursos procesales tien-
den a evitar que las resoluciones judiciales
adquieran el carcter de firmes o inmuta-
bles, mientras exista la posibilidad de sub-
sanar cualquier error o injusticia que
puedan contener, por haberse desviado el
juez de los medios y de los fines previstos
por el legislador, al confiar el ejercicio de
lajurisdiccin a los rganos judiciales.
* Con la entrada en vigencia de la Ley
N 20.050, reforma constitucional que introduce
diversas modificaciones a la Constitucin Poltica de
la Repblica, se reformula este recurso pasando su
conocimiento al Tribunal Constitucional. Segn la
norma transitoria decimosexta, las reformas intro-
ducidas al Captulo VIII "Tribunal Constitucional",
entrarn en vigor seis meses despus de la publica-
cin de esta reforma, lo que ocurri con fecha 22
de septiembre de 2005.
** Modificado, como aparece en el texto, por
el artculo 1, N 42 de la Ley N" 20.050, de 26 de
agosto de 2005.
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Mario Casarino Viterbo
Captulo Segundo
EL RECURSO DE APELACION
SUMARIO: 1. Generalidades; 11. Interposicin del recurso de apelacin;
111. Efectos del recurso de apelacin; IV. Tramitacin del recurso
de apelacin; V. De la adhesin a la apelacin; VI. Pruebas, incidentes
y notificaciones en la alzada; VII. Extincin del recurso de apelacin.
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De ah que los recursos no se ha-
llen sometidos a idnticas reglas de tra-
mitacin en las respectivas legislaciones
procesales; ni que sea posible hacer un
estudio sistemtico de conjunto de la
tramitacin o del procedimiento a se-
guir dentro de ellos hasta llegar a su
fallo.
Debemos, por tanto, y forzosamente,
estudiar cada uno de los recursos en par-
ticular.
De acuerdo al programa, a conti-
nuacin trataremos de los recursos de
apelacin, de hecho, de casacin en la for-
ma, de casacin en el fondo, de revisin y
EDITORIAL JURIDICA DE CHilE 132
de inaplicabilidad o inconstitucionali-
dad.
El recurso de queja fue objeto de es-
tudio el ao anterior; y en cuanto a los
recursos de reposicin y de aclaracin, agre-
gacin o rectificacin fueron examinados
con motivo del principio del desasimien-
to del tribunal (N 552, tomo II, y Nos 197
y 198, tomo III).
Por ltimo, el recurso de amparo ser
estudiado junto con los juicios o procedi-
mientos penales al trmino del curso y el
de'proteccin que seguramente ser inclui-
do en los programas de la ctedra de De-
recho Constitucional.
r
l. Generalidades
482. Concepto. Etimolgicamente la
palabra apelacin deriva de la voz latina
"appellatio", que quiere decir citacin o
llamamiento y cuya raz es "appello", "ap-
pellare", habiendo conservado dicho ori-
gen en la mayora de los idiomas. As,
en francs se dice "appel"; en ingls, "ap-
peal"; en italiano, "appello"; en alemn,
"appellation"; en portugus, "apella<;:ao",
etc.
El artculo 186 del Cdigo de Proce-
dimiento Civil define el recurso de apela-
cin diciendo que tiene por objeto
obtener del tribunal superior respectivo
que enmiende, con arreglo a derecho, la
resolucin del inferior.
Una definicin ms comprensiva del
recurso de apelacin, o sea, no concreta-
da exclusivamente a su objeto, es la que
dice que es aquel recurso ordinario que
la ley concede al litigante que se siente
agraviado por una resolucin judicial,
para recurrir al tribunal superior inme-
diato, a fin de que la revoque o modifi-
que, dictando al efecto la que considere
ms justa, con pleno conocimiento de la
cuestin controvenida.
El recurso de apelacin se ha estable-
cido, por consiguiente, a favor de la parte
litigante que se considera perjudicada por
una resolucin judicial dictada por un tri-
bunal inferior, a fin de que el tribunal
superior, conociendo en toda su ampli-
tud de la cuestin debatida, esto es, de
las cuestiones de hecho y de derecho, dic-
te una nueva sentencia, enmendando los
perjuicios o agravios causados, sea por
equivocacin, ignorancia, negligencia o
133
malicia en la aplicacin de la ley al caso
en debate.
Segn nuestra legislacin procesal,
el objetivo preciso y determinado que
persigue este recurso es obtener la "en-
mienda" de la resolucin dictada por el
tribunal inferior, por parte del superior,
funcin que tendr que cumplirse con
sujecin a derecho. Pero la palabra en-
mienda, tal como qued establecido en
la historia fidedigna del establecimiento
de la ley, significa que el tribunal supe-
rior puede modificar, en todo o en parte,
la resolucin del inferior y, especialmen-
te, dictar una nueva sentencia, sin limi-
tarse nada ms que a corregir la sentencia
apelada.
Se ha discutido mucho entre los au-
tores acerca de las ventajas e inconvenien-
tes de la apelacin, problema que se
desplaza hacia la conveniencia o incon-
veniencia de establecer la jurisdiccin de
doble instancia. Para nosotros, en snte-
sis, el recurso de apelacin tiene funda-
mentos psicolgicos y tcnicos. Psicolgicos,
porque es de la naturaleza humana rebe-
larse, alzarse, en contra de una solucin
que se estima injusta, y tambin el hecho
de poner mayor cuidado en una labor
que, se sabe de antemano, ser revisada
por una autoridad jerrquicamente supe-
rior; y tcnicos, porque mediante la do-
ble instancia se consigue reparar los
errores o las injusticias que pueden co-
meter los jueces inferiores, logrndose, a
la postre, una mejor y ms eficiente ad-
ministracin de justicia.
Las fuentes legales de este recurso en
nuestra legislacin procesal civil estn
constituidas por el Ttulo XVIII del Libro I
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
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del Cdigo de Procedimiento Civil, o sea,
por los artculos 186 al 230 del referido
cuerpo de leyes.
483. Caractersticas de la apelacin.
Un somero examen del rgimen legal por
el cual se rige el recurso de apelacin,
permite sealar como sus caractersticas
ms sobresalientes las que siguen:
a) Es un recurso ordinario, o sea, por
regla general, procede en contra de toda
clase de resoluciones judiciales, salvo las
limitaciones propias de la naturaleza o
de la cuanta del negocio judicial en que
incide;
b) Es un recurso por va de reforma, o
sea, es conocido por el tribunal inmedia-
tamente superior en grado jerrquico de
aquel que pronunci la resolucin recu-
rrida;
c) Es un recurso que se interpone ante
el mismo tribunal que dict la resolucin
recurrida y para ante el inmediatamente
superior en gradojerrquico;
d) Es una segunda instancia, o sea, per-
mite al tribunal superior conocer de to-
das las cuestiones de hecho y de derecho
que se hayan ventilado en la primera ins-
tancia; salvo que el recurrente, de propia
iniciativa, restrinja las atribuciones del tri-
bunal superior, al fundar su recurso;
e) Es un recurso que, por el hecho
de ser ordinario, carece de causales taxati-
vamente enumeradas en la ley, teniendo
como fundamento o causal genrica el
agravio o perjuicio del litigante en virtud
de infracciones a la ley; y
f) Es un recurso subsidiario cuando va
unido a otros recursos; como ser, a los de
reposicin y de casacin en la forma, res-
pectivamente.
484. Personas que intervienen en la
apelacin. El litigante que interpone el
recurso de apelacin recibe el nombre
de apelante, y aquel frente al cual se apela
se le llama apelado, cualquiera que sea el
papel que ellos desempeen dentro del
proceso.
No deben, pues, confundirse los tr-
minos demandante y demandado con ape-
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE 134
lante y apelado. Los primeros dicen rela-
cin con el ejercicio de la accin en pri-
mera instancia; los segundos, en cambio,
con el ejercicio de la accin en segunda
instancia, puesto que toda apelacin, en
el fondo, implica ejercicio de una accin.
Naturalmente que, en el hecho, pue-
den coincidir ambos trminos en una mis-
ma persona o litigante; ejemplo: el deman-
dante, cuya demanda ha sido rechazada,
apela; en ese litigante se renen las calida-
des. de demandante y apelante. Pero hay
veces que estas calidades no son coinciden-
tes; ejemplo: el demandado, que ve acogi-
da la demanda interpuesta en su contra,
apela; en este litigante se renen las calida-
des de demandado y apelante, ete.
485. Resoluciones judiciales apelables.
Los artculos 187 y 188 del Cdigo de
Procedimiento Civil establecen los prin-
cipios fundamentales al respecto.
El primero expresa: "Son apelables
todas las sentencias definitivas y las inter-
locutorias de primera instancia, salvo en
los casos en que la ley deniegue expresa-
mente este recurso".
El segundo agrega: "Los autos y de-
cretos no son apelables cuando ordenan
trmites necesarios para la sustanciacin
regular del juicio; pero son apelables
cuando alteran dicha sustanciacin o re-
caen sobre trmites que no estn expre-
samente ordenados por la ley. Esta
apelacin slo podr interponerse con el
carcter de subsidiaria de la solicitud de
reposicin y para el caso que sta no sea
acogida".
En consecuencia, las resoluciones ju-
diciales susceptibles de apelacin son las
siguientes:
a) Las sentencias definitivas de primera
instancia. Sabemos que sentencia defini-
tiva es la que pone fin a la instancia, re-
solviendo la cuestin o asunto que ha sido
objeto del juicio (art. 158, ine. 2, CPC);
y de primera instancia, aquella que, pre-
cisamente, es susceptible de recurso de
apelacin (art. 187 CPC).
b) Las sentencias interlocutorias de prime-
ra instancia. Tambin sabemos que senten-
cia interlocutoria es la que falla un inci-
dente del juicio, estableciendo derechos
permanentes a favor de las partes, o re-
suelve sobre algn trmite que debe servir
de base al pronunciamiento de una sen-
tencia definitiva o interlocutoria (art. 158,
ine. 3, CPC); y de primera instancia, aque-
lla que, precisamente, es susceptible de re-
curso de apelacin (art. 187 CPC); y
c) Los autos y los decretos de primera ins-
tancia, siempre que alteren la sustanciacin
regular del juicio o recaigan sobre trmites que
no estn expresamente ordenados por la ley.
Recordemos que se llama auto la resolu-
cin que recae en un incidente no com-
prendido en el caso de las interlocutorias;
y que es decreto el que, sin fallar sobre
incidentes o trmites que sirvan de base
para el pronunciamiento de una senten-
cia, tiene slo por objeto determinar o
arreglar la sustanciacin del proceso
(art. 158, incs. 4 y 5, CPC).
Ejemplo de un decreto que altera la
sustanciacin regular del juicio: interpon-
go una demanda en juicio ordinario de
mayor cuanta, y el tribunal provee citan-
do a comparendo, en vez de conferir tras-
lado.
Ejemplo de un decreto que ordena
un trmite no establecido expresamente
en la ley: en un juicio ordinario de ma-
yor cuanta, evacuado el trmite de d-
plica, el tribunal confiere nuevo traslado
al demandante para que se haga cargo
de este ltimo escrito.
Ahora bien, la apelacin que se de-
duzca en contra de los autos y decretos,
en los casos en que ella es procedente,
presenta una particularidad muy especial.
Debe interponerse con el carcter de sub-
sidiaria de la solicitud de reposicin, y
para el caso que sta sea denegada. En
otros trminos, el legislador desea que si
el tribunal se ha equivocado, dictando un
auto o decreto que altera la sustancia-
cin regular del juicio o que ordena tr-
mites no establecidos expresamente por
la ley, sea l mismo quien subsane el error,
reponiendo la resolucin respectiva y evi-
tando as la concesin y tramitacin de
una apelacin inoficiosa.
135
486. Resoluciones judiciales inapela-
bles. A contrario sensu de lo expuesto en
el prrafo precedente, tenemos que no
son susceptibles de apelacin las siguien-
tes resoluciones judiciales:
a) Las sentencias definitivas, las sentencias
interlocutorias y los autos o decretos, aun cuan-
do alteren In sustanciacin regular del juicio u
ordenen trmites no establecidos expresamente en
la ley, todas ellas de nica instancia, en razn
de que la nica instancia priva a la senten-
cia que dicte el tribunal de ser objeto de
recurso de apelacin (art. 188 COT).
b) Las sentencias definitivas, las senten-
cias interlocutorias y los autos o decretos, todos
ellos de segunda instancia, o sea, los que
fallan el correspondiente recurso de ape-
lacin y en virtud de que no existe "ape-
lacin de apelacin";
c) Las sentencias interlocutorias, los au-
tos y los decretos pronunciados durante la se-
gunda instancia (art. 210 epC). Se trata
de resoluciones pronunciadas por el tri-
bunal de alzada, mientras pende un re-
curso de apelacin, las cuales, por expresa
disposicin de la ley, son pronunciadas
en nica instancia;
d) Los autos y decretos de primera instan-
cia cuando no alteran la sustanciacin regular
del juicio o recaen sobre trmites expresamente
ordenados por la ley (art. 188 epC) ; y
e) Las resoluciones judiciales que, por ex-
presa disposicin de la ley, no son apelables.
Aqu el legislador no entra a analizar la
naturaleza procesal de la resolucin y, por
razones de simple celeridad, priva a las
partes del derecho a alzarse en contra de
la resolucin respectiva. Ejemplos: artcu-
los 49, 60, 90, 107, 126, 159, 181, 188,
210, 326, 379, 381, 394, 432, 487, 574,
642,649,778,ete.
11. Interposicin del recurso
de apelacin
487. Quin puede apelar? La ley ha
sido minuciosa al determinar el objeto
del recurso de apelacin, las resoluciones
susceptibles de tal recurso, los efectos del
mismo, ete., pero nada ha expresado en
EDITORIAL IURIDICA DECHILE
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Mario Casarino Viterbo
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Manual de Derecho Procesal
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orden a quien puede apelar. Ante este
silencio slo cabe recurrir a los princi-
pios generales del derecho y a la opinin
de los autores.
Segn stos, para apelar se requieren
dos condiciones fundamentales: ser parte y,
adems, ser parte agraviada.
Ahora bien, sabemos que las partes en
juicio pueden ser directas e indirectas o
terceros. Son partes directas el deman-
dante y el demandado, y las partes indi-
rectas o terceros pueden ser coadyuvantes,
excluyentes e independientes.
En consecuencia, la calidad de deman-
dante o de demandado nos da derecho a
apelar, como igualmente la de tercero.
Respecto de estos ltimos, su derecho a
apelar est consagrado expresamente en
la ley (arts. 16, 22 y 23 CPC).
Todava ms, si son varios los deman-
dantes o varios los demandados, pueden
apelar todos ellos, e incluso pueden ha-
cerlo el o los demandantes y el o los de-
mandados, a la vez; de suerte que es
exacto afirmar que pueden interponerse
tantas apelaciones como partes haya o fi-
guren en el proceso.
El segundo requJsito para apelar es
ser parte agraviada. Este es un concepto
jurdico y significa que la resolucin con-
tra la cual pretendemos alzarnos nos ha
peIjudicado, en razn de haber negado,
en todo o en parte, lo que habamos soli-
citado. Ejemplos: la sentencia que da lu-
gar a la demanda agravia al demandado;
la sentencia que niega lugar a la deman-
da agravia al demandante, y la que acoge
la demanda en parte, peIjudica a deman-
dante y demandado, a la vez.
488. Ante quin y para ante quin se
apela? La apelacin es un recurso esen-
cialmente de inferior a superior en grado
jerrquico. Debe, por consiguiente, inter-
ponerse ante el mismo tribunal que dict la
resolucin contra la cual pretendemos al-
zarnos y para ante el tribunal inmediatamente
superior en gradojerrquico.
El juez que dict la resolucin recu-
rrida recibe el nombre de juez a quo y el
que va a conocer del respectivo recurso
EDITORIAL jURIDICA DE CHILE 136
de apelacin el de juez ad quemo Ejem-
plo: se dicta una sentencia definitiva de
primera instancia por un juez de letras y
se apela de ella ante este juez Uuez a
quo) y para ante la Corte de Apelaciones
respectiva Uuez ad quem).
Ahora bien, la interposicin del re-
curso de apelacin ante el mismo tribu-
nal que dict la resolucin recurrida se
funda en una evidente necesidad de or-
den procesal; porque si se entablara, en
cambio, ante el tribunal que va a cono-
cet- del recurso, el tribunal a qua podra
llevar adelante el procedimiento, o sea,
la ejecucin del fallo apelado, por no te-
ner noticias de su interposicin.
Tampoco este sistema infiere peIjui-
cio a la parte recurrente, en el sentido
de poder resistirse el tribunal a quo a
que su resolucin sea revisada por el tri-
bunal superior, negando lugar a la con-
cesin del recurso de apelacin; porque
tambin el legislador ha puesto otro re-
curso en manos de la parte que se siente
perjudicada por semejante resolucin, o
sea, el de hecho, que estudiaremos opor-
tunamente.
Por ltimo, el conocimiento del re-
curso de apelacin por parte del tribunal
inmediatamente superior en grado jerr-
quico, es una consecuencia legtima y na-
tural de la organizacin judicial, a base
de jerarqua o gradacin de inferior a
superior, la cual entrega la primera ins-
tancia de determinados negocios judicia-
les al tribunal inferior, y la segunda, al
tribunal inmediato y superior en grado
jerrquico.
489. Plazo para apelar. El artculo 189
del Cdigo de Procedimiento Civil sea-
la que "La apelacin deber interponer-
se en el trmino fatal de cinco das,
contados desde la notificacin de la par-
te que entabla el recurso, pero tratndo-
se de apelacin de sentencia definitiva se
aumentar el plazo a 10 das".
En doctrina el trmino para apelar no
debe ser ni muy largo ni muy corto; ni
muy largo, porque deja inciertos los de-
rechos reconocidos por la sentencia por
mucho tiempo; y ni muy corto, porque
un plazo breve impide a las partes anali-
zar la sentencia y estudiar si conviene re-
currir de apelacin o no.
El legislador nacional, en nuestra opi-
nin, emple una frmula acertada: cinco
das fatales, a contar desde la notificacin
de la parte que entabla el recurso (art.
189, inc. l, CPC), para toda resolucin
que no sea sentencia definitiva, pues tra-
tndose de sta, el plazo ser de 10 das
(art. 189, inc. 2, CPC). Sin peIjuicio de
esta regla general, hay plazos especiales
para interponer recurso de apelacin.
Ejemplos: los contemplados en los artcu-
los 319, 664 Y666 del Cdigo de Procedi-
miento Civil.
Ahora bien, el trmino para apelar
en nuestra legislacin positiva presenta
las siguientes caractersticas:
a) Se trata de un plazo fatal, pues si
dentro de este plazo no se deduce el re-
curso de apelacin, el derecho a ejerci-
tarlo se extingue al vencimiento del
mismo;
b) Es un plazo individual, o sea, se
comienza a contar desde la notificacin
de la resolucin recurrida a la parte que
interpone el correspondiente recurso de
apelacin (arts. 65 y 189 CPC);
c) Es un trmino de das; luego, se
entiende suspendido durante los feriados,
salvo que el tribunal, por motivos justifi-
cados, haya dispuesto expresamente lo
contrario (art. 66 CPC);
d) Es un trmino legal; en consecuen-
cia, no admite prrroga, porque solamen-
te los trminos sealados por el tribunal
gozan de esta franquicia y siempre que
concurran determinados requisitos lega-
les (art. 67 CPC); y
e) Es un plazo que no admite suspen-
sin, ni por la solicitud de reposicin a
que se refiere el artculo 181, ni por la
solicitud de aclaracin, agregacin o rec-
tificacin de la sentencia definitiva o in-
terlocutoria mencionada en el artculo
182 (art. 190 CPC).
490. Formas de apelar. El recurso de
apelacin se interpone por escrito, por ser
137
esta la forma general de nuestros proce-
dimientos, y por las exigencias estableci-
das en el art. 189, inc. 1, CPC.
Sin embargo, la apelacin verbal tam-
poco est excluida de nuestro derecho.
As, el art. 189, inc. 3, precepta que en
los procedimientos o actuaciones para los
cuales la ley establezca la oralidad, se po-
dr apelar en forma verbal siempre que
someramente se sealen los fundamen-
tos de hecho y de derecho del recurso y
se formulen peticiones concretas, de todo
lo cual deber dejarse constancia en el
acta respectiva. Por ejemplo, en el proce-
dimiento sumario (art. 682 CPC).
El escrito de apelacin deber conte-
ner los fundamentos de hecho y de dere-
cho en que se apoya y las peticiones
concretas que se formulan (art. 189, inc.
1, CPC); pero en aquellos casos en que
la apelacin se interponga con el carc-
ter de subsidiaria de la solicitud de repo-
sicin, no ser necesario fundamentarla
ni formular peticiones concretas, siempre
que el recurso de reposicin cumpla con
ambas exigencias (art. 189, inc. 3, CPC).
491. Resoluciones que pueden recaer,
una vez interpuesta la apelacin. Una vez
interpuesto el recurso de apelacin, el tri-
bunal "a quo" tendr que pronunciarse
sobre l, dictando una resolucin conce-
dindolo o denegndolo, o sea admitin-
dolo o no a tramitacin.
Dictar la primera resolucin siempre y
cuando la apelacin se haya deducido en
tiempo y en forma, esto es, dentro del
plazo sealado por la ley y debiendo ser
fundada, conteniendo peticiones concre-
tas (art. 189 CPC), y en contra de resolu-
ciones judiciales susceptibles de tal
recurso; en caso contrario dictar la se-
gunda resolucin, denegando el recurso.
Estas resoluciones deber dictarlas de
plano, o sea, con el solo mrito del escri-
to de apelacin, sin necesidad de or a la
parte contraria; y, como toda resolucin
judicial, para que produzcan efectos de-
bern ser notificadas en la forma dispues-
ta por la ley, en este caso concreto, por el
estado diario (arts. 38 y 50 CPC).
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
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La jurisprudencia ha declarado que
el recurso de apelacin es esencialmente
personal, a menos que se est en presen-
cia de un juicio en el cual se discuta acer-
ca de obligaciones solidarias o indivisibles.
494. Casos en que se concede apela-
cin slo en el efecto devolutivo. El artcu-
lo 194 del Cdigo de Procedimiento Civil
seala estos casos en la forma siguiente:
"Sin peIjuicio de las excepciones ex-
presamente establecidas en la ley, se con-
ceder apelacin slo en el efecto devo-
lutivo:
1. De las resoluciones dictadas con-
tra el demandado en los juicios ejecuti-
vos y sumarios;
2. De los autos, decretos y sentencias
interlocutorias;
3. De las resoluciones pronunciadas en
el incidente sobre ejecucin de una sen-
tencia firme, definitiva o interlocutoria;
4. De las resoluciones que ordenen
alzar medidas precautorias; y
5. De todas las dems resoluciones
que por disposicin de la ley slo admi-
tan apelacin en el efecto devolutivo".
Para que tenga aplicacin, pues, el
nmero 1 antes indicado, se necesita la
concurrencia copulativa de dos requisi-
tos: que la resolucin sea apelada por el
demandado y que se trate de juicios eje-
cutivos o sumarios. La jurisprudencia ha
entendido por estos ltimos no solamen-
te aquellos que se tramitan de acuerdo al
procedimiento sumario sealado en los
artculos 680 y siguientes, sino adems
aquellos que, por su estructura, presen-
tan el carcter de tales; por ejemplo, los
juicios posesorios, los juicios especiales del
contrato de arrendamiento, etc.
El nmero JO tiende a evitar la prolon-
gacin de los juicios y, a diferencia del
nmero JO, con el cual presenta gran ana-
loga, no hace distingo en cuanto a la
parte apelante, o sea, si es el ejecutante o
el ejecutado.
El nmero 4 fue agregado por la Ley
N 7.760, y mediante l se persigue evitar
situaciones de injusticias con aquellos de-
mandados en contra de los cuales se de-
EDITORIAL URIOICA DE CHILE 140
eretan medidas precautorias desde luego
y en seguida son alzadas, a virtud de an-
tecedentes o pruebas oportunamente
acompaadas. La resolucin que as lo or-
dena, al ser apelada por el demandante,
tendr que serlo slo en el efecto devolu-
tivo, o sea, se cumple y se alza la medida
decretada sin mayor estudio.
Por ltimo, hay varios casos en que,
por expresa disposicin de la ley, a los
cuales alude el nmero 5, la apelacin se
concede slo en el efecto devolutivo.
artculos 100, 307, 319, 366,
375, 414, 523, 550, 606, 614, 691, 873 Y
921 del Cdigo de Procedimiento Civil.
495. Carcter de la jurisdiccin del
tribunal inferior, concedida apelacin en
lo devolutivo. Dispone, al efecto, el ar-
tculo 192 del Cdigo de Procedimiento
Civil que "cuando la apelacin proceda
slo en el efecto devolutivo, seguir el
tribunal inferior conociendo de la causa
su terminacin, incluso la ejecucin
de la sentencia definitiva".
En otras palabras, concedida apela-
cin slo en el efecto devolutivo, en for-
ma automtica pasan a tener competen-
cia sobre un mismo negocio judicial dos
tribunales: uno, llamado tribunal a qua
que continuar conociendo de la causa
hasta su terminacin, incluso de la eje-
cucin de la sentencia definitiva; y otro,
llamado tribunal ad quem, que entrar
a conocer del respectivo recurso de ape-
lacin.
Desde un punto de vista material esto
sera imposible, ya que los autos son uno
solo, pero el legislador, para obviar este
inconveniente, ha establecido el sistema
de las compulsas o fotocopias, o sea, de
copias autorizadas de determinadas pie-
zas de los autos originales, de suerte que
al tribunal superior se remiten ya los au-
tos originales, ya las compulsas o fotoco-
pias, segn el caso, como lo veremos ms
adelante.
Ahora bien, esta facultad concedida
por la ley al tribunal inferior para conti-
nuar conociendo de la causa, incluso para
dictar sentencia definitiva y decretar su
ejecucin, presenta dos caractersticas: es
facultativa y es condicional.
Facultativa, en el sentido de que que-
da entregado a la voluntad de la parte
apelada instar o no por la prosecucin
del juicio, puesto que sabemos que los
tribunales slo actan a requerimiento de
parte interesada; y condicional, en el sen-
tido de que todo lo obrado ante el juez
inferior queda entregado a lo que, en
definitiva, resuelva el superior: si la re-
solucin es confirmada, lo obrado con
posterioridad adquirir el carcter de de-
finitivo, y, a la inversa, si dicha resolucin
es revocada, lo obrado con posterioridad
quedar sin efecto ni valor alguno.
Por consiguiente, y en resumen, la par-
te apelada instar para que se contine el
juicio adelante, slo y cuando tenga la cer-
teza de que su derecho, en funcin a la
resolucin apelada en lo devolutivo, es
claro y no exista posibilidad de revocato-
ria, pues lo contrario sera incurrir en
esfuerzos y gastos intiles.
Con la modificacin al artculo 192
del Cdigo de Procedimiento Civil por
la Ley N 18.705, de 24 de mayo de
1988, la que introdujo un inciso, el 3,
al citado artculo, ms la modificacin
del actual inciso 2 por la Ley N 18.882,
de diciembre de 1989, concedida la ape-
lacin en el solo efecto devolutivo el
tribunal de alzada a peticin del ape-
lante y mediante resolucin fundada,
podr dictar orden de no innovar, suspen-
der los efectos de la resolucin recurri-
da o paralizar su cumplimiento, segn
sea el caso. El tribunal podr restringir
estos efectos tambin por resolucin
fundada.
De conformidad al inciso 3 del artcu-
lo 192, las peticiones de orden de no in-
novar sern distribuidas por el Presidente
de la Corte, mediante sorteo, entre las
salas en que est dividida y se resolvern
en cuenta. Decretada una orden de no in-
novar, quedar radicado el conocimiento
de la apelacin respectiva en la sala que
la concedi y el recurso gozar de prefe-
rencia para figurar en tabla y en su vista y
fallo.
141
496. El efecto suspensivo. Hemos ex-
presado que el efecto suspensivo tiene la
virtud de paralizar la jurisdiccin del tri-
bunal inferior y que es solamente de la
naturaleza del recurso de apelacin.
Una razn de lgica fundamental de-
muestra la necesidad del efecto suspensi-
vo en la apelacin: si este recurso se
funda en los errores o injusticias come-
tidos en la resolucin impugnada, todo
aconseja suspender su ejecucin mien-
tras el tribunal superior no la revea por
va de alzada.
El inciso JO del artculo 191 del Cdi-
go de Procedimiento Civil reconoce ex-
presamente la virtud del efecto suspensivo
en la apelacin, al disponer: "Cuando la
apelacin comprenda los efectos suspen-
sivo y devolutivo a la vez, se suspender
la jurisdiccin del tribunal inferior para
seguir conociendo de la causa".
En consecuencia, todo cuanto se pre-
tenda actuar ante un juez inferior, des-
pus de concedida apelacin en ambos
efectos, ser nulo por carecer dicho juez
de competencia necesaria, ya que la ley
expresamente, como se ha visto, lo ha
privado de ella.
Sin embargo, esta prdida de compe-
tencia de parte del juez inferior no es
absoluta. La misma ley se encarga de con-
sagrar una excepcin, al disponer que di-
cho juez podr entender en todos los
asuntos en que, por su expresa disposi-
cin, conserve jurisdiccin, especialmen-
te en las gestiones a que d origen la
interposicin del recurso hasta que se ele-
ven los autos al tribunal superior, y en las
que se hagan para declarar desierta o pres-
crita la apelacin antes de la remisin
del expediente (art. 191, inc. 2, CPC).
A este precepto legal, por ser excep-
cional, habr que darle una interpreta-
cin restringida y, por consiguiente,
cualquiera otra gestin que no est con-
templada expresamente en su texto, ha-
br que considerarla como entre aquellas
que escapan a la competencia del juez
inferior.
y si los autos estn compuestos de di-
versos cuadernos, la apelacin, concedida
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Manual de Derecho Procesal
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V. De la adhesin a la apelacin
504. Concepto. Adherirse a la apelacin
es pedir la reforma de la sentencia apela-
da en la parte en que la estima gravosa el
apelado (art. 216, inc. 2, CPC).
Se trata, en consecuencia, de una nue-
va y verdadera apelacin interpuesta por
el apelado, que no dedujo apelacin en
tiempo y forma, y utilizando el recurso
deducido por su contrario.
La adhesin a la apelacin supone,
pues, que el fallo de primera instancia
agravia en parte al apelado, y que ste,
prima facie, se content con l; pero que,
posteriormente, al ver que su contrario
ha apelado, desea tambin que dicho fa-
llo sea enmendado en conformidad a de-
recho en aquella parte o partes en que lo
peIjudica.
Sus fines o propsitos, por consiguien-
te, son los mismos que los de todo recur-
so de apelacin, o sea, obtener del tribu-
nal superior la enmienda, en conformidad
a derecho, del fallo pronunciado por un
tribunal inferior.
Hay razones de justicia y de conve-
niencia que justifican la institucin de la
adhesin a la apelacin, llamada tambin
por algunas legislaciones extranjeras ape-
lacin incidental.
En efecto, no siempre que un litigan-
te deja de apelar de un fallo judicial signi-
fica que con su actitud est demostrando
que dicho fallo es justo, pues muchas ve-
ces ella tiende a evitar los gastos y las dila-
ciones propias de la segunda instancia;
pero si advierte que el contrario ha apela-
do, desaparecen las razones que l mismo
tena para no apelar y no habr motivo
alguno de justicia que demuestre que no
pueda seguir el mismo camino del adver-
sario, pidiendo tambin la reforma de la
sentencia en aquella parte que la estima
gravosa a sus intereses.
Se agrega que la adhesin a la apela-
cin es tambin conveniente para la pron-
ta marcha de los juicios. En efecto, dictada
una sentencia que puede ser desfavora-
ble para ambas partes litigantes, si no exis-
tiere la adhesin a la apelacin, ambas
EDITORIAL JURIOICA DE CHIU 146
partes apelaran de inmediato; en cam-
bio, mediante la adhesin a la apelacin
cada parte espera la actitud del otro liti-
gante. Si apela, podemos adherirnos a la
apelacin, y, si no lo hace, tambin nos
conformamos, con lo cual, a la postre,
gana la celeridad del procedimiento.
505. Requisitos de procedencia de la
adhesin a la apelacin. Dos requisitos, a
nuestro juicio, deben concurrir para que
pue<.ia tener lugar la adhesin a la apela-
cih: que la sentencia de primera cause
agravios al apelado, y que exista una ape-
lacin contraria pendiente.
Que la sentencia de primera instancia cau-
se agravios al apelado, significa que debe
peIjudicarle, aun cuando sea en peque-
a parte. Dicha sentencia, en consecuen-
cia, constar de diversas partes, favorables
unas al demandante y otras al demanda-
do. Este agravio o peIjuicio del apelado
viene a darle inters en la adhesin a la
apelacin, lo mismo que el agravio o per-
juicio del apelante le confiere inters en
su recurso de apelacin.
Que exista una apelacin contraria pen-
diente, se deduce de lo preceptuado en el
artculo 217, inc. 2, al decir: "No ser,
sin embargo, admisible desde el momen-
to en que el apelante haya presentado
escrito para desistirse de la apelacin".
y, para evitar toda duda al respecto,
el inciso 3 de ese mismo artculo expre-
sa: "En las solicitudes de adhesin y de-
sistimiento se anotar por el secretario
del tribunal la hora en que se entreguen".
Luego, la sola presentacin del escri-
to de desistimiento de la apelacin obsta
a que el apelado pueda legalmente adhe-
rirse a esa apelacin que ya est muerta,
sin necesidad siquiera de que dicho es-
crito haya sido provedo.
Con mayor razn impedirn la pro-
cedencia de la adhesin a la apelacin
los dems medios que ponen fin a la ape-
lacin, como son la desercin, la pres-
cripcin y el fallo de la apelacin.
Problema que ha preocupado, en
cambio, a la jurisprudencia es si la adhe-
sin a la apelacin es una apelacin acce-
soria O, por el contrario, tiene vida propia.
En otras palabra, se ha discutido ante los
tribunales la siguiente interrogante: qu
suerte corre la adhesin a la apelacin, una
vez interpuesta en tiempo y forma, en caso
de que esta ltima termine por desistimien-
to, desercin o prescripcin?
Nos inclinamos a pensar que la adhe-
sin a la apelacin tiene vida propia,
frente a las exigencias del inciso 2 del
artculo 217, y a las medidas de resguar-
do sealadas en el inciso 3 de ese mis-
mo artculo.
506. Oportunidad para adherirse a la
apelacin. La ley ofrece al apelado dos
oportunidades para adherirse a la apela-
cin contraria: en primera y en segunda
instancia.
a) La adhesin a la apelacin podr
efectuarse en primera instancia, antes de
elevarse los autos al superior, en solicitud
escrita (art. 217, inc. a, CPC).
En esta etapa del proceso, pues, la ad-
hesin a la apelacin tiene lugar cualquie-
ra que sea la naturaleza procesal de la
resolucin impugnada; lo nico que exige
la leyes que se plantee en solicitud escrita,
con lo cual descarta la forma verbal, a dife-
rencia de la apelacin propiamente dicha.
El escrito debe cumplir con los requisitos
establecidos para la apelacin en el art. 189
del CPC (vase tambin arto 217, inc. 1).
b) En segunda instancia la adhesin a
la apelacin podr efectuarse slo en el
plazo que disponen las partes para com-
parecer ante el tribunal de alzada por
medio de un escrito con las mismas for-
malidades exigidas en el art. 189 del CPC
(vase tambin arto 217, inc. 1).
En todo caso, en la segunda instancia,
lo mismo que lo hizo en la primera, el
legislador exige forma escrita para adherir-
se a la apelacin, con lo cual descarta, una
vez ms, la verbal admisible solamente en
la apelacin.
507. Tramitacin de la adhesin a la
apelacin. Producida la adhesin a la ape-
lacin en la primera instancia, el escrito
respectivo ser provedo "tngasele por
147
adherido"; y, por consiguiente, tanto la
apelacin principal cuanto la adhesin a
ella sufrirn una misma tramitacin.
En consecuencia, elevados los autos
al tribunal superior, debern hacerse parte
en la oportunidad legal debida, tanto el
apelante primitivo cuanto el adherente a
esta apelacin, sopena de declarar desier-
tos los respectivos recursos.
Es preciso tener tambin presente que
se aplicar a la adhesin a la apelacin lo
establecido en los artculos 200, 201 y 211
del CPC (vase tambin arto 217, inc. a).
VI. Pruebas, incidentes y notificaciones
en la alzada
508. Pruebas en la segunda instancia.
Sobre el particular dispone el artculo 207
del Cdigo de Procedimiento Civil: "En
segunda instancia, salvo lo dispuesto en
el inciso final del arto 310 y en los arts.
348 y 385, no se admitir prueba alguna.
No obstante y sin peIjuicio de las de-
ms facultades concedidas por el artculo
159, el tribunal podr, como medida para
mejor resolver, disponer la recepcin de
prueba testimonial sobre hechos que no
figuren en la prueba rendida en autos,
siempre que la testimonial no se haya po-
dido rendir en primera instancia y que
tales hechos sean considerados por el tri-
bunal como estrictamente necesarios para
la acertada resolucin del juicio. En este
caso, el tribunal deber sealar determi-
nadamente los hechos sobre que deba re-
caer y abrir un trmino especial de prueba
por el nmero de das que fije pruden-
cialmente y que no podr exceder de ocho
das. La lista de testigos deber presentar-
se dentro del segundo da de notificada
por el estado la resolucin respectiva".
El actual arto 207 del CPC sienta la
idea que la produccin de pruebas en la
segunda instancia es algo excepcional. En
efecto, en el inciso 1establece que no es
admisible la prueba en segunda instan-
cia, salvo los casos contemplados en los
arts. 348 y 385 del CPC, en los cuales
encontramos reglas especiales sobre la opor-
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Mario Casarino Viterbo
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Mario Casarino Viterbo
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cin legalmente vigente. As, si el recur-
so termin por la dictacin del fallo, o
bien, por la declaracin de desercin o
prescripcin del mismo, no cabe hablar
de desistimiento.
Sus efectos son de importancia, puesto
que la sentencia impugnada adquiere de
inmediato el carcter de firme o ejecuto-
riada, si el proceso se halla en la primera
instancia, o una vez notificado el respec-
tivo cmplase si se encontraba en la se-
gunda instancia y fueron devueltos los
autos al tribunal inferior.
Naturalmente que si hay varios ape-
lantes y uno solo se desiste, o si el apela-
do se ha adherido a la apelacin, los autos
deben continuar en su tramitacin res-
pecto de los recursos no afectados por el
desistimiento.
513. La desercin. Es la segunda for-
ma anormal de poner trmino al recurso
de apelacin. Se la define, como aquel
modo de terminar un recurso de apela-
cin, a virtud del incumplimiento por par-
te del apelante de determinadas gestiones,
lo que produce, segn la ley, tal efecto.
En el fondo, pues, la desercin del
recurso de apelacin es una verdadera
sancin impuesta por el legislador al ape-
lante negligente en el cumplimiento de
determinadas obligaciones o cargas pro-
cesales, y cuya actitud revela falta de inte-
rs en continuar en la tramitacin del
respectivo recurso.
Las causales de desercin del recurso
de apelacin son las siguientes:
a) Por no depositar el apelante en
secretara dineros para sacar fotocopias o
compulsas, dentro del plazo de cinco das,
a contar desde la concesin del recurso
de apelacin slo en el efecto devolutivo
(art. 197, inc. 2, CPC);
b) Por no comparecer el apelante al
tribunal superior a proseguir el recurso
en el trmino legal (art. 201, inc. 1,
CPC).
La primera causal opera cuando el
proceso se encuentra en poder del juez a
qua, y la desercin es declarada sin ms
trmite, a peticin naturalmente del ape-
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE 150
lado. La ley emplea la expresin "desisti-
do"; pero, en verdad, se trata de un real
caso de desercin, pues, si as no fuere,
tendramos que estimar que estamos fren-
te a un desistimiento tcito.
La causal restante es propia de la se-
gunda instancia, o sea, se producen ante
el tribunal ad quem, y tambin se decretan
a peticin del apelado y de acuerdo al
procedimiento que oportunamente estu-
diamos (vase nmero 502 del presente
tOJllo) .
-Sus efectos son semejantes al del desis-
timiento, puesto que, declarada la deser-
cin, si el proceso se halla en la primera
instancia, la resolucin apelada adquiere
de inmediato el carcter de firme o eje-
cutoriada; y si se encuentra en segunda,
se devolver al tribunal inferior y, una
vez notificado el decreto que ordena cum-
plirla, adquirir ese mismo carcter.
514. La prescripcin. Tambin es un
medio de terminar anormal o indirecta-
mente una apelacin. Se la define como
aquel modo de poner trmino a un re-
curso de apelacin por haber dejado las
partes transcurrir cierto tiempo sin hacer
gestin alguna para llevarlo a efecto y de-
jarlo en estado de fallo.
Para que opere la prescripcin de la
apelacin, de conformidad a lo precep-
tuado en el artculo 211 del Cdigo de
Procedimiento Civil, es preciso la concu-
rrencia de tres requisitos:
a) que las partes no hayan hecho ges-
tin alguna para que el recurso se lleve a
efecto y quede en estado de fallarse por
el superior;
b) que esa inactividad de las partes
haya durado determinado espacio de
tiempo; y
c) que la prescripcin de la apelacin
sea alegada por cualquiera de las partes.
La pasividad de las partes, en conse-
cuencia, debe decir relacin con gestio-
nes tiles, esto es, tendientes a tramitar
el recurso y a dejarlo en estado de fallo
por el superior; las cuales, a su vez, de-
ban ser cumplidas por las partes y no por
el propio tribunal. Ejemplos: se dicta el
decreto de autos en relacin y dicha re-
solucin no es notificada, etc. En estos
casos, concurriendo los dems requisitos
legales, procede la prescripcin de la ape-
lacin. A la inversa, ella no proceder, si,
dictado el decreto de autos, legalmente
notificado a las partes, nada hace el tri-
bunal por colocar la causa en tabla, pues
semejante gestin es privativa de ste.
El espacio de tiempo de pasividad de las
partes, como requisito constitutivo de la
prescripcin de la apelacin, es diferente
segn sea la naturaleza de la resolucin
apelada. As, ser de seis meses si se trata
de sentencias definitivas, y solamente de
tres meses cuando la apelacin verse so-
bre sentencias interlocutorias, autos o de-
cretos.
La prescripcin de la apelacin ha
sido instituida en el inters de las partes;
de suerte que solamente podr ser decla-
rada a peticin de parte -de cualquiera de
ellas- y jams de oficio, con lo cual el
legislador mantiene tambin el principio
fundamental de la pasividad de los tribu-
nales.
Ahora bien, puede suceder que con-
curriendo los tres requisitos legales antes
sealados, no se alegue la prescripcin de
la apelacin y, en cambio, se efecte cual-
quiera otra gestin en los autos, qu efec-
tos produce ella? De conformidad al inciso
segundo del artculo 211 del Cdigo de
Procedimiento Civil, interrmpese esta pres-
cripcin por cualquiera gestin que se
haga en el juicio antes de alegarla.
Estamos en presencia de un caso de
extincin del derecho a pedir la prescrip-
cin de la apelacin, antes que de inte-
rrupcin propiamente dicha de ella; pues,
si antes de vencido el plazo de seis o tres
meses, segn el caso, cualquiera de las par-
tes hace gestiones tendientes a que el re-
curso se lleve a efecto y quede en estado
de fallo, dicha actitud impide que opere la
prescripcin, y es necesario comenzar a con-
tar de nuevo los correspondientes plazos.
151
Eso s que las gestiones que tienen la
virtud de extinguir el derecho a solicitar
la prescripcin de la apelacin, deben ha-
berse efectuado dentro del juicio, por
cualquiera de las partes, sea el apelante
o el apelado; y todava, cualquiera que
sea su naturaleza, dados los trminos am-
plios empleados por el legislador.
La prescripcin de la apelacin debe-
r pedirse al tribunal en cuyo poder se
halle el expediente (art. 211, inc. 1,
CPC), tan pronto concurran los tres re-
quisitos legales antes analizados. Esta pe-
ticin, a falta de reglas especiales, deber
tramitarse y resolverse, si ha sido promo-
vida en la primera instancia, como un inci-
dente ordinario; yen la segunda instancia,
de conformidad a lo preceptuado en el
artculo 220, o sea, de plano o como inci-
dente, y, todava, en este ltimo caso, ya
en cuenta o previa vista de la causa, a
eleccin del tribunal, pues es evidente que
se trata de una cuestin accesoria que se
ha suscitado en el curso de la apelacin.
Del fallo que declare admitida la pres-
cripcin podr pedirse reposicin dentro
de tercero da, si aparece fundado en un
error de hecho (art. 212 CPC). Lo ante-
rior se entiende sin perjuicio de los de-
ms recursos ordinarios o extraordinarios
que procedan. Ejemplos: si la prescrip-
cin es declarada por el tribunal inferior
podr deducirse en contra de esta reso-
lucin, apelacin y casacin en la forma;
y si ha sido declarada por el tribunal de
segunda instancia, podr recurrirse de ca-
sacin de forma y de fondo, etc.
Ejecutoriada la resolucin que decla-
ra la prescripcin de la apelacin, tiene
la virtud de producir, a su vez, la firmeza o
ejecutoriedad del fallo en contra del cual
se haba deducido el correspondiente re-
curso de apelacin. Tanto es as que la
peticin de declaracin de prescripcin
de la apelacin lleva anexa la de declara-
cin a firme de la resolucin apelada
(art. 211, inc. JO, CPC).
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Captulo Tercero
EL RECURSO DE HECHO
SUMARIO: 1. Generalidades; II. El recurso de hecho propiamente dicho;
III. El falso recurso de hecho.
l. Generalidades
515. Concepto. Las fuentes legales del
recurso de hecho son los artculos 196,
203, 204, 205 Y206 del Cdigo de Proce-
dimiento Civil.
Nuestro legislador no ha definido este
recurso, a diferencia de lo que acontece
con la apelacin y la casacin; sin embar-
go, el contexto de los preceptos antes ci-
tados nos permite definir el recurso de
hecho diciendo que tiene por objeto ob-
tener del tribunal superior que enmien-
de en conformidad a derecho los agravios
que causa el inferior al pronunciarse so-
bre un recurso de apelacin.
En consecuencia, el recurso de he-
cho se halla estrechamente unido al de
apelacin, siendo este ltimo un presupues-
to del primero, puesto que no se concibe
la interposicin de un recurso de hecho
si no se ha deducido previamente uno de
apelacin.
Sus caractersticas ms esenciales son
las siguientes:
a) Es un recurso que se interpone ante
el tribunal superior y para ser conocido y
resuelto por este mismo tribunal;
b) Es un recurso extraordinario, por-
que su procedencia est condicionada a
causales taxativamente enumeradas en la
ley; y
c) Es un recurso que se interpone li-
bremente, esto es, sin necesidad de de-
positar o consignar suma alguna en la
cuenta corriente del tribunal.
La razn de ser del recurso de hecho
no es otra que si se dejara al solo arbitrio
del juez inferior juzgar acerca de la pro-
cedencia de la apelacin que se deduzca
153
en contra de sus resoluciones, se correra
el riesgo de que este ltimo recurso lo
declarara inadmisible, a fin de impedir
que ellas sean revisadas por un tribunal
superior, o, por lo menos, que lo restrin-
giera en cuanto a sus efectos.
516. Causales de procedencia del re-
curso de hecho. El recurso de hecho tie-
ne lugar en los siguientes casos:
a) Cuando el tribunal inferior denie-
ga un recurso de apelacin que ha debi-
do concederse (art. 203 CPC);
b) Cuando el tribunal inferior con-
cede un recurso de apelacin que es im-
procedente (art. 196, ine. 2, CPC);
c) Cuando el tribunal inferior con-
cede un recurso de apelacin slo en el
efecto devolutivo, debiendo haberlo con-
cedido en ambos efectos (art. 196, ine. 1,
CPC);y
d) Cuando el tribunal inferior con-
cede un recurso de apelacin en ambos
efectos, debiendo haberlo concedido slo
en el efecto devolutivo (art. 196, ine. 2,
CPC).
Como se ve, los casos anteriores con-
templan todos los posibles errores en que
puede incurrir el juez inferior, al pronun-
ciarse sobre la solicitud en que se inter-
pone un recurso de apelacin.
517. Clases de recurso de hecho. En
atencin a la diversa tramitacin que ex-
perimenta el recurso de hecho, segn sea
la causal en que se funda, la doctrina lo
ha clasificado en: verdadero y falso recur-
so de hecho.
El verdadero recurso de hecho, o recurso
de hecho propiamente dicho, como tam-
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
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Mario Casarino Vterbo
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Manual de Derecho Procesal
bin se le llama, se encuentra reglamen-
tado en los artculos 203 al 206 del Cdi-
go de Procedimiento Civil; y es aquel que
tiene lugar cuando el tribunal inferior
deniega un recurso de apelacin que ha
debido concederse.
Se trata, por consiguiente, del caso
ms grave de procedencia del recurso de
hecho; y de ah tambin que el legislador
se haya preocupado de sealarle plazo
para su interposicin y de reglamentar
adecuadamente su tramitacin.
El falso recurso de hecho, en cambio, se
encuentra reglamentado nada ms que
en el artculo 196 del Cdigo de Procedi-
miento Civil; y es aquel que tiene lugar
cuando el tribunal inferior concedi un
recurso de apelacin improcedente, o lo
concedi slo en el efecto devolutivo, de-
biendo haberlo concedido en ambos efec-
tos, o lo concedi en ambos efectos, en
circunstancias de que slo proceda en
lo devolutivo.
Esta segunda clase de recurso de he-
cho no tiene un plazo para su interposi-
cin, y carece de la adecuada reglamenta-
cin legal. A continuacin estudiaremos
cada una de estas dos clases de recurso de
hecho, por separado.
n. El recurso de hecho propiamente dicho
518. Concepto. Hemos expresado que
este recurso de hecho tiene lugar cuando
el tribunal inferior deniega un recurso
de apelacin que ha debido concederse
(art. 203 CPC) .
En este caso, la parte agraviada con
la actitud deljuez inferior es el apelante;
y tiene dos caminos a seguir para obtener
que se repare el perjuicio que se le ha
causado: primero, pedirle reposicin al
mismo juez inferior de la resolucin que
deneg la apelacin; y segundo, recurrir
de hecho ante el tribunal superior.
519. Plazo para interponerlo. Si opta
por interponer recurso de hecho, debe
hacerlo dentro del plazo que concede el
artculo 200, contado desde la notifica-
EDITORIAL /URIDICA DE CHILE 154
cin de la negativa, ante el tribunal supe-
rior y a fin de que declare admisible el
recurso de apelacin que le fue denega-
do (art. 203 CPC).
Se trata de un plazo de das, luego
para computarlo se descuentan los fe-
riados (art. 66 CPC); de un plazo fatal,
y, por consiguiente, su vencimiento ex-
tingue el derecho a recurrir de hecho
(art. 64 CPC); de una extensin igual al
que tendra el apelante para compare-
cer a proseguir su recurso de apelacin,
o sea, de cinco das si el tribunal infe-
rior funciona en la misma comuna en
que lo hace el tribunal superior, de ocho
das ms el emplazamiento si el tribunal
inferior funciona en una comuna diver-
sa a aquel en que lo hace el tribunal su-
perior (arts. 200 y 203 CPC); y que se
cuenta desde la notificacin de la negati-
va, o sea, desde la notificacin al apelan-
te de la resolucin que declara improce-
dente la apelacin que ha interpuesto
(art. 203 CPC).
Es conveniente insistir en la diferencia
que se advierte entre los trminos para
recurrir de hecho y para comparecer a la
segunda instancia a proseguir un recurso
de apelacin, a objeto de no confundir-
los.
Dicha diferencia es:* El trmino para
recurrir de hecho se cuenta desde la no-
tificacin de la negativa del tribunal infe-
rior a conceder el recurso de apelacin;
en cambio, el trmino para comparecer
a la segunda instancia a proseguir el re-
curso de apelacin se cuenta desde la fe-
cha del ingreso de los autos a la secretara
del tribunal superior.
520. Tramitacin. Ahora bien, una vez
interpuesto el recurso de hecho ante el
tribunal superior, pedir ste al inferior
que lo informe sobre el asunto en que hu-
biere recado la negativa (art. 204, ine. 1,
parte P, CPC). En consecuencia, la pri-
mera resolucin que se pronuncia dentro
* Modificado por la Ley N 19.374. Actualiza-
do Depto. D. Procesal U. de Chile.
del recurso de hecho es precisamente
sta: "informe el juez recurrido".
La manera de poner en conocimien-
to del juez inferior la resolucin anterior,
a objeto de que se sirva darle cumplimien-
to, es envindole el correspondiente ofi-
cio. La ley no ha sealado plazo al juez
inferior para evacuar este informe. Gene-
ralmente lo hace en el menor tiempo po-
sible; pero si es reacio, no hay ms camino
que el recurrente de hecho pida al tribu-
nal superior que le seale un plazo al
inferior para cumplir con su obligacin.
Si tampoco cumple el juez inferior, al ape-
lante y recurrente de hecho no le queda
ms camino que interponer un recurso
de queja en su contra.
Una vez llegado el informe del juez
inferior al tribunal superior, con lo que
all se exprese y lo afirmado por el recu-
rrente, este ltimo resolver si es o no
admisible el recurso de hecho (art. 204,
ine. 10, parte final CPC). Sin embargo no
olvidemos que en los tribunales colegia-
dos los asuntos contenciosos se resuelven
previa vista de la causa (art. 68 COT); de
suerte que el informe del juez inferior
ser provedo "autos en relacin", se co-
locar en seguida la causa en tabla y se
ver el da sealado.
La tramitacin anterior es la que se
observa corrientemente dentro de un re-
curso de hecho; pero puede sufrir dos va-
riantes motivadas, ya por expresa peticin
del recurrente de hecho, ya por ordenar-
lo de oficio el mismo tribunal. Ellas son:
a) Puede el tribunal superior orde-
nar al inferior la remisin del proceso, siem-
pre que, a su juico, sea necesario
examinarlo para dictar una resolucin
acertada (art. 204, ine. 2, CPC); Y
b) Puede, asimismo, el tribunal supe-
rior ordenar al inferior que no se innove
cuando haya antecedentes que justifiquen
esta medida (art. 204, inc. 3, CPC).
Esta ltima medida se conoce en la
prctica con la denominacin de "orden
de no innovar"; y tiene por objeto impe-
dir que se cumpla o ejecute una resolu-
cin cuya firmeza o ejecutoriedad est en
tela de juicio, puesto que mediante el re-
155
curso de hecho se pretende, nada me-
nos, que se conceda el recurso de apela-
cin que se ha interpuesto en su contra.
En su oportunidad expresamos que esta
orden de no innovar, por analoga, se uti-
liza tambin en la tramitacin de los re-
cursos de queja.
521. Fallo. Por ltimo, si el tribunal
superior declara inadmisible el recurso de
hecho, lo comunicar al inferior, devol-
vindole el proceso si se ha elevado (art.
205, ine. 10, CPC); Ysi el recurso, en cam-
bio, es declarado admisible, el tribunal su-
perior ordenar al inferior la remisin
del proceso, o lo retendr si se halla en
su poder, y le dar la tramitacin que
corresponda (art. 205, inc. 2, CPC).
y si el juez inferior ha continuado en
la tramitacin de la causa, no obstante la
interposicin del recurso de hecho, por
no haberse decretado orden de no inno-
var, y dicho recurso es acogido, qu suer-
te corren esas gestiones posteriores?
Resuelve expresamente el caso el ar-
tculo 206 del Cdigo de Procedimiento
Civil, al disponer: "En el caso del segun-
do inciso del artculo precedente, queda-
rn sin efecto las gestiones posteriores a
la negativa del recurso y que sean una
consecuencia inmediata y directa del fa-
llo apelado".
Estimamos que esta peticin de de-
clarar sin efecto dichas gestiones, deber
formularse al juez inferior, si los autos
permanecen en su poder, para lo cual
tiene jurisdiccin de acuerdo a lo pre-
ceptuado en el artculo 191, ine. 2; o
bien, en caso contrario, al tribunal supe-
rior, quien har semejante declaracin
como algo consecuencial al recurso de
hecho recin acogido.
III. El falso recurso de hecho
522. Concepto. Hemos expresado
anteriormente que el falso recurso de
hecho tiene lugar en tres casos: cuando
el tribunal inferior concede una apela-
cin improcedente; cuando concede
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Manual de Derecho Procesal
una apelacin slo en el efecto devolu-
tivo, debiendo haberla concedido en
ambos efectos; y cuando concede una
apelacin en ambos efectos, debiendo
haberla concedido slo en el efecto de-
volutivo.
En consecuencia, para determinar
quin es la parte agraviada, ser necesa-
rio precisar previamente cul es la causal
que sirve de fundamento al respectivo re-
curso de hecho. As, en el primer caso, lo
ser apelado; en el segundo, lo ser el
apelante; y, en el tercero, volver a ser
agraviado el apelado.
La parte agraviada con semejantes ac-
titudes del tribunal inferior tiene en sus
manos dos caminos a seguir, para obtener
la reparacin del perjuicio causado: pri-
mero, pedir reposicin al tribunal infe-
rior para que deniegue la apelacin
concedida, o bien, ample o limite sus
efectos, segn el caso; y segundo, recu-
rrir de hecho ante el tribunal superior
con idnticos objetivos (art. 196, incs. 10
y 2
0
, CPC).
Para recurrir de hecho, la ley no le
ha sealado plazo; de manera que estima-
mos que ser oportuno siempre que el
respectivo recurso de apelacin no se
haya extinguido por el fallo de segunda
instancia o por los medios anormales,
como son el desistimiento, la desercin
la prescripcin del mismo; en otros tr-
minos, siempre que haya posibilidad y
utilidad de reparar los agravios causa-
dos por el tribunal inferior al pronun-
ciarse sobre la admisibilidad de un
recurso de apelacin.
523. Tramitacin. Interpuesto el falso
recurso de hecho, el tribunal superior le
dar la tramitacin sealada en el artcu-
lo 220 del Cdigo de Procedimiento Ci-
vil, puesto que se habr suscitado una
cuestin accesoria en el curso de una ape-
lacin, o sea, lo resolver de plano, o como
incidente, y, en este ltimo caso, lo podr
fallar en cuenta o previa vista de la causa,
segn lo estime por conveniente.
Es preciso sealar que, en el falso re-
curso de hecho, el tribunal superior no
EDITORIAL jURIDICA DE CHILE 156
pedir informe al tribunal inferior, ni me-
nos exigir la remisin de los autos, pues-
to que siempre obrarn en su poder el
expediente original o las fotocopias o
compulsas, segn el caso.
524. Fallo. Una vez resuelto el falso re-
curso de hecho, las declaraciones que se con-
tengan en dicho fallo pronunciado por
el tribunal superior, se comunicarn al in-
ferior para que se abstenga, o siga cono-
cie[ldo del negocio, segn los casos (art.
19G,'ine. 30, CPC).
Ejemplo para que se abstenga: la ape-
lacin fue concedida slo en el efecto
devolutivo y el tribunal superior declara
que debe concederse en ambos efectos.
Ejemplo para que siga conociendo:
la apelacin fue concedida en ambos efec-
tos y el tribunal superior declara que debe
concederse slo en el efecto devolutivo;
la apelacin fue concedida en ambos efec-
tos y el tribunal superior declara que es
improcedente.
y qu suerte corren las gestiones efec-
tuadas ante el tribunal inferior cuando
concedi la apelacin slo en el efecto
devolutivo y el tribunal superior, acogien-
do el correspondiente recurso de hecho,
declara que ha debido concederse dicha
apelacin en ambos efectos?
Lajurisprudencia ha estimado que, a
falta de una disposicin semejante a la
contemplada en el artculo 206 para el
verdadero recurso de hecho, en el caso
antes planteado, la abstencin del tribu-
nal inferior slo nace con la comunica-
cin del fallo que acoge el recurso de
hecho y que, en consecuencia, todo lo
actuado con anterioridad es vlido.
525. Control de las apelaciones im-
procedentes. Por ltimo, hay que hacer
notar que cuando la apelacin es impro-
cedente y el tribunal inferior la ha con-
cedido, puede el superior de oficio
declarar sin lugar el recurso, sin perjui-
cio de que la parte agraviada pueda tam-
bin deducir el correspondiente recurso
de hecho (art. 196, ine. 2
0
, parte final,
CPC).
En consecuencia, la procedencia de
un recurso de apelacin est sujeta a un
cudruple control:
a) Al del juez inferior cuando tiene
que pronunciarse en la primera instan-
cia sobre la concesin o no concesin de
la apelacin interpuesta;
b) Al del tribunal superior, cuando,
una vez ingresados los autos a su secreta-
ra, antes de dictar la primera resolucin,
debe estudiar la admisibilidad o inadmi-
157
sibilidad del recurso de apelacin inter-
puesto y concedido;
c) Al del tribunal superior, cuando el
inferior concede el recurso de apelacin
y la parte agraviada recurre de hecho ante
el primero de los nombrados, sostenien-
do la improcedencia de aqulla; y
d) Al del tribunal superior, cuando
entra a conocer de la vista misma de la
causa, o sea, sobre el fondo del recurso
de apelacin.
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I
Captulo Cuarto
EL RECURSO DE CASACIN EN LA FORMA
SUMARIO: 1. Generalidades; II. Resoluciones judiciales susceptibles del recurso
de casacin en la forma; III. Causales que justifican el recurso de casacin
en la forma; IV. Limitaciones del recurso de casacin en la forma;
V. Interposicin del recurso de casacin en la forma; VI. Efectos del recurso
de casacin en la forma; VII. Tramitacin del recurso de casacin en la forma;
VIII. Extincin del recurso de casacin en la forma; IX. La casacin
en la forma y los juicios o reclamaciones regidos por leyes especiales;
X. La casacin en la forma y la apelacin; XI. La casacin en la forma de oficio.
I. Generalidades
526. Concepto. La nocin etimolgica
de la palabra "casacin" la encontramos
en el verbo latino "cassare", que significa
"quebrar", "anular", "destruir", etc.; y en
sentido figurado, equivale a "derogar",
"abrogar", "deshacer", etc. En un sentido
restringido, y de acuerdo a los usos forenses,
"casar" significa "anular", "invalidar", "de-
jar sin efecto", etc.
Nuestro Cdigo de Procedimiento Ci-
vil establece que el recurso de casacin se
concede para invalidar una sentencia en
los casos expresamente sealados en la ley,
y que es de dos especies: de casacin en el
fondo y de casacin en la forma, siendo
en el fondo en el caso del artculo 767 y en
la forma en los casos del artculo 768 (van-
se tambin arts. 764 y 765 CPC).
Nos interesa, por el momento, el re-
curso de casacin en la forma, el cual
difiere del de casacin en el fondo, funda-
mentalmente en cuanto a su proceden-
cia, causales y tramitacin.
Ahora bien, la ley no ha definido el
recurso de casacin en la forma: se ha
limitado a sealar su objeto; pero del con-
texto y aplicacin prctica de sus disposi-
ciones por parte de los tribunales podemos
formular la siguiente definicin:
"La casacin en la forma es un recurso
extraordinario que la ley concede a la par-
te agraviada en contra de determinadas re-
soluciones judiciales, para obtener su
anulacin, cuando han sido dictadas con
omisin de sus requisitos legales formales
o dentro de procedimientos viciosos".
El objeto o finalidad del recurso de ca-
sacin en la forma, en consecuencia, es
159
obtener la invalidacin del fallo recurri-
do, motivado por la infraccin de las le-
yes que determinan: a) la sustanciacin o
ritualidad esencial del proceso, o b) los
requisitos formales a que debe ajustarse
el juzgador al pronunciar sus sentencias.
527. Fundamentos del recurso de ca-
sacin en la forma. El legislador se ha
preocupado de sealar la manera como
los litigantes deben recurrir a los tribu-
nales de justicia en defensa de sus dere-
chos y, al mismo tiempo, la forma como
stos deben tramitar y resolver los asun-
tos judiciales sometidos a su decisin, para
evitar as el caos dentro de la administra-
cin de justicia.
Pero nada habra sacado el legislador
con establecer esas normas si no hubiera
creado tambin un rgimen especial de
sanciones para el caso de infraccin o
violacin de ellas, las cuales, en sntesis,
se traducen en la nulidad o invalidacin
del acto realizado en tan anormales con-
diciones.
El recurso de casacin en la forma,
pues, es uno de los aspectos de esta san-
cin, llamada nulidad procesal, e integra,
naturalmente, la teora general de la mis-
ma, persiguiendo una doble finalidad:
a) Vela por que los juicios se tramiten
previa observancia de todos los trmites
o diligencias prescritos como esenciales
por la ley, en atencin a que en ellos va
envuelta la igualdad en la defensa de los
derechos de las partes y la seguridad de
que sean legalmente declarados o reco-
nocidos; y
b) Vela por que los jueces, en la dicta-
cin de las sentencias, observen las leyes
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Que la sentencia haya sido pro-
nunciada por un juez, o con la concu-
rrencia de un juez cuya recusacin haya
sido declarada por tribunal competente.
El primer caso dice relacin con la insti-
tucin procesal de las implicancias, o sea,
de verdaderas prohibiciones impuestas por
el legislador a los jueces para intervenir
en determinados juicios, por razones de
alta conveniencia pblica y, por consiguien-
te, irrenunciable. Se hallan enumeradas
en el artculo 195 del Cdigo Orgnico
de Tribunales y se aplican tanto a los jue-
ces de los tribunales unipersonales como
a los de los tribunales colegiados. Por eso
es que la disposicin en estudio se pone
en la situacin de la sentencia pronuncia-
da por un juez, o con la concurrencia de
un juez. Tampoco es necesario distinguir
segn si la implicancia est pendiente o,
por el contrario, ha sido declarada. Para
la existencia de la causal de casacin en la
forma que estudiamos basta que el magis-
trado que dicta la sentencia, o que concu-
rre a su dictacin, se halle afecto a un
motivo legal de implicancia, pues no po-
demos olvidar que las implicancias son ver-
daderas prohibiciones, y an ms, irrenun-
ciables.
El segundo caso est relacionado, a la
inversa, con la institucin procesal de las
recusaciones, o sea, con obstculos legales
que impiden al juez conocer de un deter-
minado juicio, a menos que las partes re-
nuncien a ellas, y comprenden tambin
tanto a los tribunales unipersonales como
a los colegiados. Se hallan enumeradas en
el artculo 196 del Cdigo Orgnico de
Tribunales y, desde el momento en que
son susceptibles de renuncia, su sola con-
currencia no basta para que la sentencia
que dicte un juez en estas condiciones sea
nula; es preciso, adems, que esa recusa-
cin se encuentre pendiente, o sea, que
se la haya formulado por va incidental.
El tercer caso, por ltimo, alude a la
dictacin de la sentencia por un juez, o
con la concurrencia de un juez, cuya re-
cusacin haya sido declarada por tribu-
nal competente. Si es nula la sentencia
dictada por un juez, o con la concurren-
EDITORIAL JURIDICA DE CHIlE 166
cia de un juez, cuya recusacin est pen-
diente, con mayor razn lo ser cuando
sta haya sido legalmente declarada.
En resumen, tratndose de implican-
cias, basta su concurrencia para que la
sentencia sea nula; en cambio, tratndo-
se de recusaciones, es preciso que se ha-
yan hecho valer estando pendiente su
resolucin, o bien, que hayan sido legal-
mente declaradas.
En ambos casos se est en presencia
muy semejantes a la de la
incompetencia del tribunal; y tanto es as
que la existencia de estas inhabilidades
ocasiona, segn los autores, la incompe-
tencia accidental del rgano juzgador.
537. Tercera causal. En haber sido acor-
dada en los tribunales colegiados por menor
nmero de votos o pronunciada por menor n-
mero de jueces que el requerido por la ley o con
la concurrencia de jueces que no asistieron a
la vista de la causa y viceversa (art. 768,
N 3, CPC).
Se trata tambin de vicios cometidos
en la dictacin de la sentencia misma, pero
pronunciada por tribunales colegiados. En
el fondo, la causa en estudio sanciona con
la nulidad del fallo las infracciones a las
disposiciones legales que regulan los acuer-
dos de dichos tribunales.
Comprende cuatro situaciones diversas:
P. Que la sentencia haya sido acor-
dada por menor nmero de votos que el
requerido por la ley;
2
a
Que la sentencia haya sido pro-
nunciada por menor nmero de jueces
que el requerido por la ley;
3
a
Que la sentencia haya sido pro-
nunciada con la concurrencia de jueces
que no asistieron a la vista de la causa; y
4
a
. Que la sentencia haya sido pronun-
ciada sin la concurrencia de todos los jue-
ces que asistieron a la vista de la causa.
Recordemos, en cuanto a la primera
situacin, que el nmero de votos necesa-
rios para acordar sentencia en los tribu-
nales colegiados es la mayora absoluta
de votos conformes, salvo las excepcio-
nes legales (arts. 72, parte final, y 103
COT).
Recordemos, igualmente, en cuanto
a la segunda situacin, que los tribunales
colegiados debern funcionar, para cono-
cery decidir los asuntos que les estn
encomendados, con un nmero de miem-
bros que no sea inferior al mnimo deter-
minado en cada caso por la ley, y que
este nmero es de tres, tratndose de au-
tos, sentencias interlocutorias y senten-
cias definitivas, y de uno solo, si se refiere
a los decretos (arts. 72, parte 1a, Y 105
COT Y168 CPC).
En cuanto a la tercera situacin tam-
bin es del caso recordar que no pueden
tomar parte en ningn acuerdo los que
no hubieren concurrido como jueces a
la vista del negocio (art. 75 COT); y en
cuanto a la cuarta, expresada en la fr-
mula "y viceversa", que ningn acuerdo
podr efectuarse sin que tomen parte to-
dos los que comojueces hubieren concu-
rrido a la vista, salvo las excepciones
legales (arts. 76, 77, 78 y 105 COT).
Para comprobar, pues, la existencia de
esta causal de casacin en la forma, espe-
cialmente las situaciones tercera y cuarta
antes indicadas, habr que recurrir a las
actas de instalacin del respectivo tribu-
nal y, muy particularmente, a la constan-
cia que estampa el relator en los autos
cuando el proceso ha quedado en acuer-
do (art. 372, N 5, COT).
538. Cuarta causal. En haber sido dada
ultra petita, esto es, otorgando ms de lo pedi-
do por las partes, o extendindola a puntos no
sometidos a la decisin del tribunal, sin per-
juicio de la facultad que ste tenga para fallar
de oficio en los casos determinados por la ley
(art. 768, N 4, CPC).
Es otro vicio de forma en que puede
incurrirse al momento de pronunciar la
sentencia misma y de excepcional impor-
tancia, y pueden cometerlo tanto un tri-
bunal unipersonal cuanto uno colegiado.
Ello se demuestra con slo considerar
que el legislador crey prudente definirlo
y lo excluy de preparacin o reclamo pre-
vio, materia a la cual nos referiremos ms
adelante en momento oportuno.
167
La definicin de la ultra petita que
da el referido artculo 768, N 4, del C-
digo de Procedimiento Civil, compren-
de, pues, dos aspectos y una excepcin.
En efecto, hay ultra petita cuando la sen-
tencia otorga ms de lo pedido por las
partes. Ejemplo: se demanda cien pesos
a ttulo de mutuo y el tribunal condena
al demandado a pagar dicha suma y, ade-
ms, los intereses respectivos; se deman-
da cien pesos a ttulo de saldo insoluto
del precio de una compraventa y el tribu-
nal condena al demandado a pagar la
suma de ciento cincuenta pesos por igual
ttulo, etc.
Pero hay, adems, ultra petita cuando
la sentencia se extiende a puntos no so-
metidos a la decisin del tribunal. Ejem-
plo: se demanda el cumplimiento de un
contrato y el tribunal cree del caso re-
chazar esta accin y acoger, en cambio,
la de resolucin del mismo, que no se ha
deducido; se demanda la nulidad de un
contrato de compraventa, y el tribunal,
junto con declarar dicha nulidad, tam-
bin declara la de un contrato de arren-
damiento que recae sobre la misma cosa
materia de la compraventa, etc.
y la excepcin, de los dos casos ante-
riores, dice relacin con las facultades de
oficio de que se hallan premunidos los
tribunales por expresa disposicin de la
ley. Ejemplo: se discute sobre el cumpli-
miento de un determinado contrato y el
tribunal advierte que es nulo, cuya nuli-
dad aparece de manifiesto, y lo declara
as sin que litigante alguno se lo haya pe-
dido (art. 1683 CC).
La causal o vicio de forma que esta-
mos analizando es tambin una infraccin,
por parte del juzgador, de lo preceptua-
do en el artculo 160 del Cdigo de Pro-
cedimiento Civil, que dice: "Las sentencias
se pronunciarn conforme al mrito del
proceso y no podrn extenderse a pun-
tos que no hayan sido expresamente so-
metidos a juicio por las partes, salvo en
cuanto las leyes manden o permitan a los
tribunales proceder de oficio".
Ahora bien, la manera de constatar si
existe o no ultra petita en el fallo que se
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trata de casar es analizando la cuestin
controvertida en el pleito con la parte
resolutiva de la sentencia misma. A su vez,
la cuestin controvertida la hallamos, por
regla general, consignada a la conclusin,
en forma de peticiones concretas, en los
escritos fundamentales de demanda y de
contestacin, y, excepcionalmente, en los
de rplica y dplica, si se trata de la ni-
ca o primera instancia, y en el escrito de
apelacin cuando el pleito se halla en
alzada.
Hay veces que esta conformidad es
aparente, pues existen fallos que, a pesar
de pronunciarse sobre la cuestin con-
trovertida, esto es, sobre las acciones y
excepciones hechas valer por las partes,
alteran el objeto o la causa de pedir de las
mismas. En tales casos la jurisprudencia
reiterada y uniforme de nuestros tribu-
nales ha declarado que dichos fallos son
nulos porque han sido pronunciados con
el vicio o defecto de forma de la ultra
petita.
Ejemplos: demando la resolucin de
un contrato y la restitucin consecuen-
cial de la cosa materia del mismo, y el
tribunal accede a la demanda, pero orde-
na restituir una cosa diferente; demando
la suma de cien pesos, a ttulo de mutuo,
y el tribunal accede a la demanda, pero a
ttulo de renta de arrendamiento, etc.
A la inversa, no habr ultra petita si las
razones de orden legal contenidas en la
parte considerativa de la sentencia difie-
ren de aqullas hechas valer por las par-
tes como fundamento de su accin o
excepcin, pues, repetimos, este vicio o
defecto de forma slo debe constatarse
en la parte resolutiva; a menos que tales
considerandos, como se comprende, tu-
vieren, a su vez, el carcter de resolutivos
o previos de la cuestin controvertida.
539. Quinta causal. En haber sido pro-
nunciada con omisin de cualquiera de los
requisitos enumerados en el artculo 170 (vase
tambin arto 768, N 5, CPC).
En su oportunidad estudiamos que las
sentencias definitivas de nica o primera
instancia y las de segunda que modifi-
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE 168
quen o revoquen en su parte dispositiva
las de otro tribunal, deban ajustarse en
su dictacin a lo preceptuado en el artcu-
lo 170, so pena de incurrir en un vicio o
defecto de forma que autoriza interpo-
ner en su contra el correspondiente re-
curso de casacin a objeto de anularlas.
Estos requisitos formales, en sntesis, son
los siguientes: la designacin precisa de
las partes litigantes, su domicilio y profe-
sin u oficio; la enunciacin breve de las
peti<;:iones o acciones deducidas por el
delandante y de sus fundamentos; igual
enunciacin de las excepciones o defen-
sas alegadas por el procesado;* las consi-
deraciones de hecho o de derecho que
sirven de fundamento a la sentencia; la
enunciacin de las leyes y, en su defecto,
de los principios de equidad con arreglo
a los cuales se pronuncia el fallo; y la
decisin del asunto controvertido.
Es interesante sealar que el legisla-
dor sanciona con la nulidad del fallo la
falta de consideraciones de hecho o de de-
recho que deban servirle de fundamen-
to, mas no las consideraciones erradas o
deficientes; y que habr, adems, falta de
consideraciones cuando sean entre s con-
tradictorias o se destruyan unas a las otras,
aunque el fallo las contenga.
La causal en estudio ha dado origen
a diversas cuestiones en su aplicacin prc-
tica, a saber:
1". Si los requisitos omitidos estn con-
templados en el Auto Acordado de 30 de
septiembre de 1920, sobre la forma de
las sentencias, hay casacin? Se ha esti-
mado que no cabe invalidar la sentencia,
a menos que el requisito omitido est con-
templado tanto en el artculo 170 cuanto
en el Auto Acordado antes citado.
2". Si los requisitos omitidos estn con-
templados en el artculo 171, o sea, se
trata de una sentencia interlocutoria de
aquellas que ponen trmino al juicio o
hacen imposible su continuacin, hay ca-
* Artculo nico de la Ley N 19.114, publica-
da en el Diario Oficial de 4 de enero de 1992. Ac-
tualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
.".
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saGn? Se ha estimado, en principio, que
no hay casacin; a menos que el requisi-
to omitido fuera la decisin del asunto
controvertido.
3". Si los requisitos omitidos estn con-
templados en los artculos 640 y 826, o
sea, se trata de sentencias definitivas pro-
nunciadas por jueces rbitros arbitradores
o en negocios de jurisdiccin voluntaria,
hay casacin? No obstante referirse el ar-
tculo 768, N 5, al artculo 170, la juris-
prudencia estima que los artculos 640 y
826, para los efectos de este recurso, de-
ben considerarse como equivalentes del
170 y que, por consiguiente, hay casacin
en el supuesto de que se omitieran algu-
nos de los requisitos de forma que dichos
preceptos contemplan.
540. Sexta causal. En haber sido dada
contra otra pasada en autoridad de cosa juz-
gada, siempre que sta se haya alegado opor-
tunamente en el juicio (art. 768, N 6,
CPC).
En su tiempo estudiamos tambin el
concepto de la cosa juzgada, las resolu-
ciones judiciales que la producen, sus re-
quisitos de procedencia y las diversas
maneras de hacerla valer, en otros trmi-
nos, su oportunidad para alegarla.
Por el momento nos interesa hacer
notar que para que exista la causal de for-
ma en referencia es necesaria la concu-
rrencia copulativa de dos requisitos: 1) que
la sentencia recurrida se haya pronuncia-
do contra otra pasada en autoridad de
cosa juzgada, y 2) que la cosa juzgada se
haya alegado oportunamente en eljuicio
de que se trata.
Es otra sentencia pasada en autori-
dad de cosa juzgada podr ser una senten-
cia definitiva o una sentencia interlocutoria,
pero en ambos casos debern estar fir-
mes o ejecutoriadas a su vez, y la alega-
cin oportuna de la cosa juzgada dentro
del pleito cuya sentencia se trata de anu-
lar, ser en la demanda, si se la invoca
como accin, y en la contestacin de la
demanda, si se hace valer como excep-
cin; y, adems, como excepcin dilato-
ria en el plazo para contestar la demanda,
169
y como excepcin perentoria en cualquier
estado del juicio (arts. 175, 304 Y 310
CPC).
Ejemplo: A demanda a B, cobrndole
la suma de cien pesos, a ttulo de mutuo.
Se niega lugar a la demanda, y la senten-
cia queda ejecutoriada. Transcurre cierto
tiempo y nuevamente A demanda a B,
cobrndole igual suma de dinero y por
idntico ttulo; B, al contestar la deman-
da, se excepciona de la demanda, invo-
cando la primitiva sentencia. El juez acoge
la nueva demanda y rechaza la excepcin
de cosa juzgada, y la Corte confirma. B
puede recurrir de casacin en la forma
para ante la Corte Suprema, fundado en
la causal 5" del artculo 768, a objeto de
que se anule dicha sentencia, pues ha sido
dada contra otra pasada en autoridad de
cosa juzgada, la que fue oportunamente
alegada dentro del juicio.
541. Sptima causal. En contener deci-
siones contradictorias (art. 768, N 7,
CPC).
Mientras en la causal anterior esta-
mos en presencia de dos sentencias con-
tradictorias, en la presente causal la
contradiccin debe hallarse en un solo y
mismo fallo.
De los trminos empleados en el pre-
cepto legal antes transcrito se desprende
que es necesario que concurran dos requi-
sitos o condiciones para que tenga lugar
esta causal de casacin en la forma:
1. Que la sentencia contenga varias
decisiones; y
2. Que esas decisiones sean contra-
dictorias.
Ahora bien, para que una sentencia
contenga varias decisiones es indispensa-
ble que las partes, a su vez, hayan hecho
valer dos o ms acciones o dos o ms
excepciones. Por consiguiente, si la cues-
tin controvertida es una sola, mal pue-
de hablarse de pluralidad de decisiones y
de contradiccin entre ellas.
y qu entendemos por decisiones
contradictorias? La ley no se ha encarga-
do de definirlas; pero estimamos que pue-
de decirse que las decisiones de una
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Manual de Derecho Procesal
sentencia son contradictorias cuando hay
oposicin entre ellas, de suerte que no
pueden cumplirse simultneamente.
Ejemplo: la sentencia declara resuel-
to el contrato y, al mismo tiempo, que
debe cumplirse.
En resumen, la contradiccin debe
existir y estudiarse su presencia solamen-
te en la parte dispositiva o resolutiva de
la sentencia que se trata de casar. Toda
contradiccin en los considerandos, o en-
tre stos y la parte resolutiva, escapa a la
causal de forma en estudio.
542. Octava causal. En haber sido dada
en apelacin legalmente declarada desierta, pres-
crita o desistida (art. 768, N 80, CPC).
Nos encontramos en presencia de las
tres formas anormales en que puede termi-
nar un recurso de apelacin: desercin,
prescripcin y desistimiento, las cuales
hemos oportunamente estudiado.
Imaginemos ahora que a pesar de ha-
berse declarado desierta, prescrita o de-
sistida una apelacin, el tribunal de alzada
insiste en conocer del correspondiente
recurso, y lo resuelve confirmando, mo-
dificando o revocando el fallo de prime-
ra instancia.
Es evidente que el fallo de segunda
instancia pronunciado en estas condicio-
nes anormales es nulo, puesto que el tri-
bunal que lo pronunci careca de
competencia para conocer de un recurso
de apelacin que ya estaba legalmente
terminado; y la manera de obtener esta
nulidad es invocando la causal en estu-
dio como fundamento del correspondien-
te recurso de casacin en la forma.
543. Novena causal. En haberse faltado
a algn trmite o diligencia declarados esen-
ciales por la ley o a cualquier otro requisito por
cuyo defecto las leyes prevengan expresamente
que hay nulidad (art. 768, N 9, CPC).
Mientras las ocho causales o vicios de
forma antes analizados dicen relacin con
los que pueden cometerse en la dicta-
cin de la sentencia que se trata de anu-
lar, la presente causal contempla la
situacin de vicios o defectos de forma
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE 170
cometidos o que inciden en el procedi-
miento mismo.
El artculo 768, N 9, como ya tuvi-
mos oportunidad de expresarlo, contem-
pla una regla de carcter general, que recibe
adecuada reglamentacin en los artcu-
los 766, 788, 789, 795, 796 Y800, encar-
gados de sealar los trmites o diligencias
esenciales en los diversos juicios, segn
su clase e instancia por la cual pueden
atravesar.
El tenor literal de este precepto per-
mit afirmar que en l se contemplan dos
situaciones enteramente diversas:
1". En haberse faltado a algn trmi-
te o diligencia declarados esenciales por
la ley; y
2". En haberse faltado a cualquier otro
requisito por cuyo defecto las leyes pre-
vengan expresamente que hay nulidad.
Por consiguiente, la frmula que tie-
ne el legislador para velar por la correc-
cin del procedimiento es indicar de
manera concreta qu trmite o diligen-
cia considera esenciales o qu requisito
estima que, de omitirse, debe ser sancio-
nado con la nulidad.
En el primer caso la sancin de nuli-
dad es indirecta, en el segundo directa,
pero en ambos se desemboca en la insti-
tucin de la nulidad procesal, cuya for-
ma de hacerla valer es por medio del
correspondiente recurso de casacin.
El carcter, pues, de trmite o dili-
gencia esencial es asignado expresamen-
te por la ley, no importando qu clase de
ella sea la que cumple esta misin. Por
regla general, es la ley procesal la llama-
da a indicar los trmites o diligencias esen-
ciales de los diversos juicios, pero esta
labor tambin puede ser cumplida por
una ley especial.
En consecuencia, por muy importante
que sea el trmite o diligencia omitido, si
la ley no lo ha elevado a la categora de
esencial, su falta no autoriza interponer re-
curso de casacin en la forma. Ejemplos: el
trmite de audiencia del ministerio pbli-
co o del ministerio de los defensores p-
blicos en determinados juicios; el trmite
de tasacin en el juicio ejecutivo, etc.
Otras veces el legislador dispone que
la falta a talo cual requisito deber san-
cionarse con la nuldad del acto o del
procedimiento mismo. En el fondo, este
requisito omitido para el legislador tam-
bin es esencial; pero en vez de em-
plear un rodeo prefiere indicar, concre-
tamente y de inmediato, que esa falta u
omisin est sancionada con la nulidad.
A continuacin examinaremos los di-
versos trmites o diligencias declarados
esenciales por el legislador, segn la na-
turaleza de los juicios y sus instancias.
544. Trmites o diligencias esenciales
en la nica o en la primera instancia en
los juicios de menor o de mayor cuanta
y en los juicios especiales. El artculo 795
es el encargado de sealar estos trmites
o diligencias esenciales, y lo hace en la
forma siguiente:
"En general, son trmites o diligen-
cias esenciales en la primera o en la ni-
ca instancia en los juicios de mayor o de
menor cuanta y en los juicios especiales:
1. El emplazamiento de las partes en
la forma prescrita por la ley;
2. El llamado a las partes a concilia-
cin en los casos en que corresponda con-
forme a la ley;*
3. El recibimiento de la causa a prue-
ba cuando proceda con arreglo a la ley;
4. La prctica de diligencias proba-
torias cuya omisin podra producir in-
defensin;
5. La agregacin de los instrumen-
tos presentados oportunamente por las
partes, con citacin o bajo el apercibi-
miento legal que corresponda respecto
de aquella contra la cual se presentan;**
6. La citacin para alguna diligencia
de prueba; y
7. La citacin para or sentencia de-
finitiva, salvo que la ley no establezca este
trmite".
* Agregado por la Ley N 19.334, artculo ni-
co, N 7, de 7 de octubre de 1994. Actualizado
Depto. D. Procesal U. de Chile.
** Nmero sustituido por el que aparece en
el texto, por el art. 1, N" 27 de la Ley N 18.882,
de 20 de diciembre de 1989.
171
Ahora bien, el juicio ser de nica ins-
tancia cuando su sentencia es inapelable,
y de primera instancia, a la inversa, cuan-
do su sentencia queda sujeta al recurso
de apelacin (art. 188 COT) , y ser el
juicio de menor cuanta cuando el mon-
to de la cosa disputada es superior a diez
Unidades Tributarias Mensuales (10
UTM), pero no excede a quinientas Uni-
dades Tributarias Mensuales (500 UTM);
de mayor cuanta cuando el monto de la
cosa disputada excede de quinientas Uni-
dades Tributarias Mensuales (500 UTM) ,
o sea de cuanta indeterminada; especial
cuando est sometido a una regla extraor-
dinaria y diversa (arts. 130 y 131 COT Y
3 Y698 CPC).
A continuacin examinaremos en par-
ticular cada uno de los trmites o dili-
gencias esenciales en la nica o primera
instancia en los juicios antes sealados:
A. El emplazamiento de las partes en la
forma prescrita por la ley (art. 795, N 1,
CPC).
En general, emplazamiento es el lla-
mado que se hace al demandado para
que comparezca a contestar la demanda;
pero, desde un punto de vista ms con-
creto y formal, se entiende por emplaza-
miento la notificacin de la demanda
hecha en forma legal al demandado y el
transcurso de plazo que ste tiene para
contestarla.
Por consiguiente, el emplazamiento
consta de dos partes fundamentales: a) la
notificacin de la demanda en forma le-
gal, y b) el transcurso del plazo sealado
por la ley para contestarla.
Toda demanda debe ser notificada per-
sonalmente al demandado; y podr prac-
ticrsele esta notificacin en forma perso-
nal propiamente dicha, de conformidad a
lo preceptuado en el artculo 44, o por
medio de avisos; y todava puede notificar-
se tcitamente de la demanda, al hacer
cualquiera gestin en el pleito que supon-
ga su conocimiento y que no entraa re-
clamo por falta de notificacin o por ha-
berse practicado sta en forma ilegal.
El plazo que tiene el demandado para
contestar la demanda sabemos tambin
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
que en el juicio ordinario de mayor cuan-
ta es, por regla general, de quince das
y, excepcionalmente, de dieciocho das,
o bien, de dieciocho das ms el aumen-
to contemplado en la respectiva tabla de
emplazamiento.
En consecuencia, la causal de casa-
cin de forma en estudio tendr lugar:
1) cuando la demanda no ha sido notifi-
cada al demandado; 2) cuando le ha sido
notificada en forma ilegal; y 3) cuando
no ha transcurrido el trmino para con-
testarla y dicho trmite se da por evacua-
do en su rebelda.
En todos los casos el juicio puede ha-
ber seguido adelante y terminar mediante
sentencia, la cual podr ser anulada por
falta de emplazamiento del demandado.
Pero esta causal es an ms amplia,
pues la ley dispone que el trmite o dili-
gencia esencial omitido, que autoriza la
casacin, es el emplazamiento "de las par-
tes"; de suerte que podr haber faltado
tanto el emplazamiento del demandado
cuanto de cualquiera otra persona que
desempee el papel de parte en el juicio,
como podra serlo un tercero.
La importancia de este trmite o dili-
gencia esencial es obvia: tiene como fun-
damento el principio que dice que "nadie
puede ser condenado sin ser odo". No
es posible que se dicte una sentencia ju-
dicial en contra de una persona a la cual
no se ha puesto en su conocimiento el
juicio en que ella incide o no se le ha
dado la oportunidad de defenderse.
y este trmite o diligencia esencial
omitido podr haberlo sido en la nica o
primera instancia de un juicio de menor
o de mayor cuanta o en un juicio espe-
cial, sin que tenga importancia la instan-
cia ni la clase o naturaleza del juicio de
que se trate.
B. El llamado a las partes a conciliacin
en los casos en que corresponda conforme a la
ley (art. 795, N 2, CPC).
La Ley N 19.334, de 7 de octubre de
1994, sustituy el artculo 262 del CPC
en lo relativo a la conciliacin, disponien-
do que en todo juicio civil en que legal-
mente sea admisible la transaccin, con
EDlTORJAL JURIDICA DE CHILE 172
excepcin de los juicios o procedimientos
especiales de que tratan los Ttulos 1, II,
III, V YXVI del Libro III, una vez agota-
dos los trmites de discusin y siempre
que no se trate de los casos mencionados
en el artculo 313, el juez llamar a las
partes a conciliacin y les propondr per-
sonalmente bases de arreglo.
Seala el mismo artculo en su inciso
segundo que para tal efecto citar a las
partes a una audiencia para un da no an-
terior al quinto ni posterior al decimoquin-
to contado desde la fecha de notificacin
de la resolucin. En los procedimientos
que contemplan una audiencia para reci-
bir la contestacin de la demanda, se efec-
tuar precisamente en ella la diligencia
de conciliacin, evacuado que sea dicho
trmite.
As, el llamado a conciliacin es obli-
gatorio en los casos, y forma que estable-
ce el artculo 262 ya citado, elevndose
dicho llamamiento a la calidad de trmi-
te esencial en la primera o nica instan-
cia en los juicios de mayor o de menor
cuanta y en los juicios especiales, todo
ello segn dispone el artculo 795 del
CPC.*
C. El recibimiento de la causa a prueba
cuando proceda con arreglo a la ley (art. 795,
N 3, CPC).
Recordemos que, terminado el perio-
do de discusin, en el juicio ordinario de
mayor cuanta, el tribunal debe resolverse
si procede o no recibir la causa a prueba.
No se recibir la causa a prueba: 1) si el
demandado acepta llanamente las peti-
ciones del demandante; 2) si el deman-
dado en sus escritos no contradice en
materia sustancial y pertinente los hechos
sobre que versa el juicio; y 3) si las par-
tes piden que se falle el pleito sin ms
trmite (art. 313 CPC).
En cambio, se recibir la causa a prueba
cuando el tribunal estime que hayo pue-
da haber controversias sobre algn he-
* N 2 del artculo N 795 del CPC, agregado
por la Ley N 19.334, de 7 de octubre de 1994; ar-
tculo N 262, sustituido por la misma ley. Actuali-
zado Depto. D. Procesal U. de Chile.
1
",
:i
I
I cho sustancial y pertinente en el juicio
(art. 318, ine. 1, CPC).
Privar, pues, a las partes del derecho a
rendir prueba sobre los hechos sustancia-
les ypertinentes del juicio sobre los cuales
se ha controvertido, implica colocarlas en
la indefensin; y, por tal razn, el legisla-
dor ha elevado el trmite de la recepcin
de la causa a prueba, cuando proceda en
conformidad a la ley, a la categora de esen-
cial, y su falta, como constitutiva de causal
o vicio de casacin en la forma.
D. La prctica de diligencias probatorias
cuya omisin podra producir indefensin
(art. 795, N 4, CPC).
En general, las partes litigantes son
las llamadas a suministrar dentro del plei-
to las pruebas necesarias para acreditar
los hechos que sirven de fundamento a
su derecho; y el tribunal, el encargado
de resolver si tales medios probatorios son
o no admisibles.
Por consiguiente, esta causal exige la
concurrencia de dos requisitos o condicio-
nes: 1) que se haya omitido la prctica
de una determinada diligencia probato-
ria; y 2) que esa omisin pueda haber
producido la indefensin de la parte que
propuso tal medio probatorio.
El primer requisito se demuestra con el
solo examen de los autos, en el cual cons-
tar el ofrecimiento de la prueba y su
rechazo de parte del tribunal; en cam-
bio, el segundo es de carcter intelectual, y
queda entregado al criterio del tribunal,
llamado a conocer del correspondiente re-
curso de casacin en la forma, determi-
nar si la prctica de la diligencia proba-
toria omitida ha tenido o no la virtud de
producir la indefensin de la parte que
lo ha deducido.
En resumen, la omisin en la prcti-
ca de un determinado medio probatorio
no constituye por s sola causal de casa-
cin en la forma; es preciso, adems, que
esa omisin haya podido producir la in-
defensin de la parte. As, si he ofrecido
prueba testimonial y el tribunal la recha-
za, pero a pesar de tal prueba siempre la
demanda deba ser denegada, no concu-
rre la causal o vicio de forma analizado.
173
E. La agregacin de los instrumentos pre-
sentados oportunamente por las partes, con
citacin o bajo apercibimiento legal que corres-
ponda respecto de aquella contra la cual se
presentan (art. 795, N 5, CPC).
Sabemos que si se invoca un instru-
mento como medio probatorio dentro del
pleito es necesario cumplir con dos forma-
lidades legales: 1a) agregarlo materialmen-
te a los autos, salvo que por su naturaleza
o por motivo fundado el tribunal mande
mantenerlo fuera de ellos (art. 34 CPC);
2
a
) conceder citacin del instrumento a
la parte en contra de la cual se hace valer
(Ns 383 y 389).
Este plazo de citacin, por regla ge-
neral, es de tres das, salvo tratndose de
instrumentos privados emanados de la
parte en contra de la cual se hacen valer,
en que se ampla a seis das y bajo aperci-
bimiento legal (art. 346, N 3, CPC).
En consecuencia, si en la sentencia
se pondera este instrumento en circuns-
tancias que no se acompa a los autos;
o bien, en que, no obstante haberse acom-
paado, no se confiri citacin de l a la
parte en contra de la cual se invoca y bajo
apercibimiento legal si fuere instrumento priva-
do, dicha sentencia ser nula por haber
incurrido en el vicio o defecto de forma
antes sealado.
F. La citacin para alguna diligencia de
prueba (art. 795, N 6, CPC).
Sabemos tambin que toda diligencia
probatoria debe practicarse previo decre-
to del tribunal que conoce de la causa,
notificado a las partes (art. 324 CPC).
Sin embargo, el precepto antes indi-
cado agrega una formalidad legal ms: la
citacin de las partes.
Por consiguiente, la causal o vicio de
forma que analizamos tendr lugar:
1) cuando se practique una diligencia
probatoria sin orden previa del tribunal;
2) cuando se haya dictado tal orden, pero
no se hubiere notificado legalmente a las
partes; y 3) cuando se haya decretado la
diligencia sin citacin o, decretndola de
esta manera, se hubiere llevado a efecto
antes del vencimiento de los tres das.
WITORIAL /URIDICA DE CHILE
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XI. La casacin en la forma de oficio
573. Concepto. La fuente legal de esta
institucin es el artculo 775 del Cdigo
de Procedimiento Civil, que prescribe:
"No obstante lo dispuesto en los ar-
tculos 769 y 774, pueden los tribunales,
conociendo por va de apelacin, con-
sulta o casacin o en alguna incidencia,
invalidar de oficio las sentencias cuando
los antecedentes del recurso manifiesten
que ellas adolecen de vicios que dan lu-
gar a la casacin en la forma, debiendo
or sobre este punto a los abogados que
concurran a alegar en la vista de la cau-
sa e indicar a los mismos los posibles
vicios sobre los cuales debern alegar.
Si el defecto que se advierte es la omi-
sin del fallo sobre alguna accin o ex-
cepcin que se haya hecho valer en el
juicio, el tribunal superior podr limitar-
se a ordenar al de la causa que complete
la sentencia, dictando resolucin sobre
el punto omitido, y entre tanto suspen-
der el fallo del recurso".
De su tenor li teral podemos, pues, de-
ducir que la casacin en la forma de oficio es
la facultad que la ley confiere a los tribu-
nales para que en determinados casos pue-
dan, de propia iniciativa, invalidar las
sentencias cuando sus antecedentes de-
muestran la existencia de vicios que ha-
bran autorizado interponer en su contra
el correspondiente recurso de casacin en
la forma.
Desde el momento en que en este
caso los tribunales pueden actuar de pro-
pia iniciativa, quiere decir que estamos
en presencia de una manifiesta excepcin
al principio fundamental de la pasividad
de los mismos, consagrado en el artculo
10 del Cdigo Orgnico de Tribunales;
pero esta intervencin de oficio es, al mis-
mo tiempo, esencialmente facultativa del
tribunal llamado a ejercerla, pues la ex-
presin "pueden" empleada por el legis-
lador as lo confirma.
La casacin en la forma de oficio de-
muestra, pues, que la observancia de las
leyes procesales no slo interesa a las par-
tes litigantes, sino, adems, a la sociedad
EDITORIAL JURIOICA DE CHILE 192
en general; de suerte que su infraccin,
aun cuando no sea reclamada u observa-
da por aqullas, puede ser sancionada de
propia iniciativa por los tribunales me-
diante la invalidacin de las sentencias
que han sido pronunciadas sin atenerse
a las normas sealadas por el legislador.
574. Casos en que procede. La defi-
nicin de la casacin en la forma de ofi-
cio nos permite afirmar que ella procede
cuando los tribunales estn conociendo
de' ,un determinado asunto judicial por
va de apelacin, consulta o casacin o
en alguna incidencia.
Por va de apelacin lo ser cuando el
negocio pasa a la segunda instancia; de
consulta, cuando el negocio es enviado al
tribunal superior para que sea revisado
por ste, en atencin a que no lo ser
por va de apelacin; de casacin, cuando
se interpone cualquiera de estos recur-
sos, sea de forma, sea de fondo; y, por
ltimo, en alguna incidencia, o sea, cuan-
do el tribunal est conociendo de una
cuestin accesoria.
y la causal que justificar la invalida-
cin de oficio de la sentencia por vicios o
defectos formales, ser precisamente la
existencia de dichos vicios que habran
autorizado la interposicin del correspon-
diente recurso de casacin en la forma.
Naturalmente que estos vicios deben
aparecer de los mismos autos, o sea, de
los propios antecedentes. Es una situa-
cin semejante a aquella de la nulidad
absoluta de los actos o contratos, la cual
para declararla de oficio debe aparecer
de manifiesto.
Ejemplos de vicios manifiestos: la in-
competencia del tribunal, la omisin de los
requisitos formales de la sentencia, la ultra
petita, las decisiones contradictorias, etc.
Es preciso llamar la atencin acerca
de que si el tribunal desea casar en la
forma de oficio una sentencia, por haber
observado la presencia de un vicio que
habra autorizado interponer el corres-
pondiente recurso de casacin, no est
afecto a las limitaciones sealadas en los
artculos 769 y 774.
En otras palabras, no importa que la
parte agraviada con el vicio o defecto de
forma no haya reclamado de la falta ejer-
ciendo, oportunamente y en todos sus gra-
dos, los recursos establecidos por la ley,
como igualmente carece de toda trascen-
dencia que la parte agraviada haya dedu-
cido recurso de casacin en la forma
fundada en determinadas causales, y que
el tribunal anule la sentencia por una cau-
sa o vicio de forma diversa de aquel he-
cho valer en dicho recurso.
Adems, la Corte Suprema ha resuel-
to reiteradamente que la limitacin esta-
blecida en el artculo 768, N 9, inciso
2, del Cdigo de Procedimiento Civil,
slo rige el recurso deducido por las par-
tes y, en consecuencia, la casacin en la
forma de oficio puede tener lugar por
cualquiera de las causales previstas en di-
cho precepto, aun tratndose de los jui-
cios o reclamaciones reglados en leyes especiales.
La casacin en la forma de oficio,
como se ve, est por encima del inters
personal y privado de las partes litigan-
tes, pues su finalidad, como ya lo hemos
expresado, es velar por los intereses su-
premos de la sociedad y de la ley.
575. Tramitacin y efectos. Desde el
momento en que la casacin en la forma
de oficio es una facultad privativa del tri-
bunal, no cabe siquiera hablar de tramita-
cin; pero, en todo caso, el legislador ha
impuesto el cumplimiento de una traba
previa, la cual, en cierto sentido, viene a
resguardar los intereses de las partes liti-
gantes y a brindarles la oportunidad de
orlas sobre el vicio o defecto de forma
que se supone existente.
Nos referimos a la obligacin que pesa
sobre el tribunal, que desea casar en la
forma de oficio una sentencia, de or so-
bre este punto a los abogados que concu-
rran a alegar en la vista de la causa y de
indicar a los mismos los posibles vicios
sobre los cuales debern alegar. La obli-
gacin, en consecuencia, tiene un doble
objeto: or a los abogados e indicarles los
posibles vicios de casacin. No basta, pues,
escucharlos; hay que facilitarles su misin,
193
sealndoles el posible vicio o defecto de
forma que se supone existente.
Cumplida esta obligacin previa, y
constatada por el tribunal la existencia
del vicio o defecto de forma, siempre que
sea de aquellos que, a su vez, sirven de
causal o fundamento de un recurso de
casacin en la forma, podr de oficio anu-
lar la sentencia de que se trate, indican-
do, al mismo tiempo, el estado en que
quede el proceso, el cual se remitir para
su conocimiento al tribunal correspon-
diente (art. 786 CPC).
Es evidente que, en estos casos, los
recursos de apelacin o de casacin o el
trmite de la consulta se hacen innecesa-
rios, y que el tribunal tambin har de-
claracin sobre el particular.
Tampoco hay que olvidar que si el
defecto que se advierte es la omisin de
fallo sobre alguna accin o excepcin que
se haya hecho valer en el juicio, el tribu-
nal superior podr limitarse a ordenar al
de la causa que complete la sentencia,
dictando resolucin sobre el punto omi-
tido y, entre tanto, suspender el fallo
del recurso.
576. El fallo en la casacin en la for-
ma de oficio. Para los efectos de deter-
minar el tribunal que dictar el fallo en
el evento en que se case en la forma de
oficio una sentencia, es necesario hacer
la misma distincin que hicimos a prop-
sito de la extincin del recurso de casa-
cin en la forma mediante la dictacin
del fallo de casacin.*
En efecto, si la causal por la cual se
casa en la forma de oficio una sentencia dice
relacin con un vicio relativo al procedimiento
-causales 1a, 2\ 3\ 8
a
y 9
a
del artculo
768 del Cdigo de Procedimiento Civil-,
el tribunal ad quem, al casar de oficio la
sentencia y declararla nula, debe determinar
en su fallo el estado en que quede el proceso.
Acto seguido debe remitir los autos al tribunal
* Modificacin introducida por el artculo 2
del Decreto Ley N 1.682, de 4 de enero de 1977,
publicado en el Diario Oficial de 25 del mismo mes
y ao. Actualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
EDITORIAL /URIDICA DE CHILE
Mario Casarino Viterbo
que corresponda para que siga tramitando el
proceso desde el momento inmediatamente an-
terior a aquel en que se cometi el vicio y dicte
una nueva sentencia que resuelve el juicio
(art. 786, ine. JO, CPC). El tribunal com-
petente para seguir conociendo del jui-
cio y al que debe remitirse el proceso es
aquel a quien tocara conocer del nego-
cio en el caso de recusacin del juez o
jueces que pronunciaron la sentencia ca-
sada (art. 786, ine. 2, CPC). Esto significa
que el juez que dict la sentencia que ha
sido casada queda inhabilitado para seguir
conociendo del asunto por el solo hecho
de acogerse la casacin, sin que sea nece-
saria declaracin expresa al respecto.
Por otra parte, si la causal por la cual
se casa en la forma de oficio una sentencia
Captulo Quinto
EL RECURSO DE CASACIN EN EL FONDO
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C3
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::.
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Judicial- cumplan esta trascendental fun-
cin, dndoles a las leyes el mismo senti-
do y alcance, por diversas que sean las
personas y las materias llamadas a juzgar.
La misin de los jueces, pues, fuera
de ser constante, debe, al mismo tiempo,
ser uniforme para todos los que recla-
man justicia, sean nacionales o extranje-
ros, sea que residan o no en el territorio
de la Repblica.
Con el objeto de obtener esta aplica-
cin genuina y exacta de las leyes y, a la
vez, uniforme, el legislador establece el
recurso de casacin en el fondo, permi-
tiendo la anulacin de una sentencia
cuando en su dictacin se infringe la ley,
la que ser reemplazada por una nueva
sentencia y en la cual se har la correcta
y verdadera aplicacin de la norma in-
fringida.
Adems, el recurso de casacin en el
fondo procura la formacin de la jurispru-
dencia, pues aunque los fallos que recaen
en esa clase de recursos no obligan a los
tribunales inferiores, desde el momento
en que las sentencias judiciales no tienen
fuerza obligatoria sino respecto de las cau-
sas en que actualmente se pronunciaren
(art. 3, inc. 2, CC), influyen sobre ellos
con gran fuerza moral, logrndose as la
aplicacin constante, uniforme y metdi-
ca de los numerosos y variados preceptos
legales que reglan la vida jurdica del pas.
EDITORIAL JURlDICA DE CHILE
579. Caractersticas del recurso de ca-
sacin en el fondo. Sus caractersticas ms
esenciales son las siguientes:
a) Es un recurso extraordinario, o sea,
slo procede en contra de determinadas
resoluciones judiciales y por causal tam-
195
1. Generalidades
SUMARIO: 1. Generalidades; II. Resoluciones judiciales susceptibles
del recurso de casacin en el fondo; I11. Causal que justifica el recurso
de casacin en el fondo; IV. Limitaciones del recurso de casacin
en el fondo; V. Interposicin del recurso de casacin en el fondo;
VI. Tramitacin del recurso de casacin en el fondo;
VII. Extincin del recurso de casacin en el fondo; VIII. La casacin
en la forma y la casacin en el fondo; IX. La casacin en el fondo de oficio.
577. Concepto. Lo mismo que tratn-
dose del recurso de casacin en la forma,
la ley no ha definido el recurso de casa-
cin en el fondo: se limita a expresar su
objeto, cual es invalidar determinadas sen-
tencias en los casos expresamente seala-
dos por la ley (art. 764 CPC).
Sin embargo, el precepto antes indi-
cado, en unin del 767, que indica los
casos y las resoluciones judiciales en con-
tra de las cuales procede este important-
simo recurso, nos permite formular la
siguiente definicin:
"El recurso de casacin en el fondo
es un recurso extraordinario que el legis-
lador concede a la parte agraviada, en
contra de determinadas resoluciones ju-
diciales, para obtener su anulacin, cuan-
do han sido dictadas con infraccin de
ley, siempre que esta insfraccin haya in-
fluido sustancialmente en lo dispositivo
de ellas".
El objeto, preciso y determinado, es
obtener la invalidacin, la anulacin del
fallo impugnado; y su fundamento, la in-
fraccin de la ley con influencia sustan-
cial, esto es, decisiva, en lo dispositivo o
resolutivo de la sentencia.
578. Fundamento del recurso. La
Constitucin Poltica del Estado asegura
a todos los habitantes de la Repblica la
igualdad ante la ley y agrega que en Chi-
le no hay clase privilegiada (art. 19, N 2).
Ahora bien, la manera como esta
igualdad ante la ley se obtiene en la prcti-
ca es procurando que los organismos lla-
mados a aplicarla -en este caso, el Poder
dice relacin con un vicio cometido en la dic-
tacin misma de la sentencia -causales 4
a
,
5
a
, 6
a
y 7
a
del artculo 768 del Cdigo de
Procedimiento Civil-, el tribunal ad quem,
al casar de oficio la sentencia y declararla nula,
debe dictar la sentencia que corresponda con
arreglo a la ley. Esta sentencia debe dictar-
se por el tribunal ad quem acto continuo y
sin nueva vista de la causa, pero separada-
mente de aquella resolucin que cas en
la forma de oficio la sentencia (art. 786,
incs. 3 y 4, CPC).*
* Modificacin introducida por el artculo 2
del Decreto Ley N 1.682, de 4 de enero de 1977,
publicado en el Diario Oficial de 25 del mismo mes
y ao. Actualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
194
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
Mario Casariuo Viterbo Manual de Derecho Procesal
bin expresamente contemplada en la ley
(art. 767 CPC);
b) Es un recurso que se interpone ante
el tribunal que dict la resolucin que se
trata de invalidar o casar y para ante el
tribunal inmediatamente superior en gra-
dojerrquico (art. 771 epC);
c) Es un recurso de derecho estricto,
esto es, en su interposicin deben ob-
servarse necesariamente determinadas
formalidades legales, so pena de ser de-
clarado inadmisible, hallndose limitada
la competencia del tribunal ad quem por
la causal o causales invocadas como fun-
damento del respectivo recurso (arts. 772
y 774 CPC);
d) Es un recurso establecido en bene-
ficio de las partes litigantes agraviadas,
puesto que solamente stas pueden in-
terponerlo (art. 771 CPC); pero cuyos fun-
damentos, como hemos tenido oportuni-
dad de verlo, persiguen fines del ms alto
inters pblico;
e) Es un recurso que, por regla gene-
ral, se deduce en contra de sentencias inape-
lables pronunciadas por las Cortes de
Apelaciones; de suerte que bien puede
afirmarse que es el ltimo recurso den-
tro del juicio y deducido en contra de la
ltima sentencia; y
f) Es un recurso esencialmente de de-
recho, vale decir, que no constituye una
instancia judicial, puesto quc en sta el
tribunal superior revisa las cuestiones de
hecho y de derecho; en cambio, median-
te el recurso de casacin en el fondo slo
se analiza la correcta aplicacin de la ley,
de suerte que si la sentencia impugnada
contiene infracciones legales se la anula
y se dicta una nueva, haciendo una co-
rrecta aplicacin de las disposiciones le-
gales infringidas, respetando, en todo
caso, los hechos en la misma forma como
vienen establecidos en el fallo recurrido.
580. Antecedentes histricos del re-
curso de casacin en el fondo. Nada es-
pecial sobre el mencionado recurso
encontramos en el derecho romano yen el
derecho germnico, no obstante que ellos
constituyen los antecedentes histricos
IDITORIAL /URIOICA DE CHILE 196
inmediatos de la mayora de nuestras ac-
tuales instituciones jurdicas.
Su historia, en realidad, comienza bajo
el reinado de San Luis, rey de Francia, en
el siglo XIII, como un recurso de nuli-
dad deducido ante el monarca en contra
de las sentencias pronunciadas por las
Cortes, de origen feudal o regio, y su prin-
cipal cuerpo legal son Les tablissements de
Saint-Louis.
La institucin experimenta diversas y
sucesivas reformas, hasta llegar a la Asam-
blea" Constituyente de 1789, en la cual se la
acepta con la denominacin de recurso
de casacin, cuyo objetivo preciso es anu-
lar las sentencias pronunciadas con in-
fraccin de las leyes y a fin de obtener la
igual y uniforme aplicacin de ellas, que
era uno de los postulados bsicos de esta
Revolucin.
De ah pas, con ligeras variantes, al
Cdigo de Procedimiento Civil francs de
1806, al italiano de 1865 y a las leyes de
Enjuiciamiento Civil espaolas de 1855 y
1881, principales antecedentes legislativos
extranjeros de nuestra actual legislacin.
En nuestro pas se elaboraron diver-
sos proyectos de leyes tendientes a esta-
blecer cuanto antes este importante
recurso, a saber:
a) Proyecto elaborado por don Enri-
que Tocornal, presentado a la Cmara de
Diputados, con fecha 17 de agosto de 1871,
con motivo de la discusin del proyecto
de Ley de Organizacin y Atribuciones
de los Tribunales;
b) Proyecto enviado por el Ejecutivo
al Congreso Nacional, con fecha 3 de ju-
nio de 1881, a pedido que le hiciera en
este sentido el 5 de enero de igual ao la
Primera Comisin Revisora del Proyecto
de Cdigo de Procedimiento Civil;
c) Proyecto elaborado por los diputa-
dos seores Bannen, Silva Cruz y Ynez,
presentado a la Cmara respectiva con
fecha 30 de julio de 1894; y
d) Proyecto elaborado por don Jos
Antonio Gandarillas, tomando como base
el signado con la letra a), presentado al
Congreso Nacional con fecha 18 de di-
ciembre de 1895.
,
l'
I
I
Todos estos proyectos de leyes tuvie-
ron accidentada tramitacin en las Cma-
ras y no lograron su aprobacin definitiva.
Mientras tanto, se discuta paralelamente
el proyecto de Cdigo de Procedimiento
Civil, lo que permiti que el 17 de mayo
de 1902 la Comisin Mixta de Legislacin
y Justicia manifestara a los seores con-
gresales que toda discusin sobre el recur-
so de casacin en el fondo era inoficiosa,
puesto que su creacin vena ya contem-
plada en el proyecto del mismo Cdigo.
La casacin en el fondo naci, pues,
a la vida institucional del pas junto con
el Cdigo de Procedimiento Civil, esto es, el
28 de agosto de 1902, mediante la pro-
mulgacin de la Ley N 1.552, que entr
a regir ellO de marzo de 1903.
11. Resoluciones judiciales susceptibles
del recurso de casacin en el fondo
581. Cules son? Contesta el artcu-
lo 767: "El recurso de casacin en el fon-
do tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables y contra sentencias interlocu-
torias inapelables cuando ponen trmino
al juicio o hacen imposible su continua-
cin, dictadas por Cortes de Apelaciones
o por un tribunal arbitral de 2
a
instancia
constituido por rbitros de derecho en
los casos en que estos rbitros hayan co-
nocido de negocios de la competencia
de dichas Cortes, siempre que se hayan
pronunciado con infraccin de ley y esta
infraccin haya influido substancialmen-
te en lo dispositivo de la sentencia". *
En consecuencia, los requisitos o con-
diciones que determinan la procedencia
del recurso de casacin en el fondo, en
relacin con la naturaleza de la resolu-
cin recurrida, son los siguientes:
10. Que se trate de una sentencia defi-
nitiva o de una interlocutoria que ponga
trmino al juicio o haga imposible su con-
tinuacin;
* Mudificado, como aparece en el texto, por
la Ley N 19.374. Actualizado Depto. D. Procesal U.
de Chile.
197
2
0
. Que dichas sentencias sean inape-
lables; y
30. Que dichas sentencias sean pronun-
ciadas por alguna Corte de Apelaciones o
por un tribunal arbitral de segunda ins-
tancia, constituido por rbitros de dere-
cho, en los casos en que estos rbitros
hayan conocido de negocios de la com-
petencia de dichas Cortes.
582. Anlisis de los requisitos ante-
riores. Desde el momento en que los pre-
ceptos legales indicados no definen lo que
entienden por sentencia definitiva ni in-
terlocutoria, habr que darles a ellas su
significado legal.
En efecto, recordemos que sentencia
definitiva es la que pone fin a la instancia,
resolviendo la cuestin o asunto que ha
sido objeto del pleito, y que sentencia in-
terlocutoria es la que falla un incidente del
juicio, estableciendo derechos permanen-
tes a favor de las partes o resuelve sobre
algn trmite que debe servir de base en
el pronunciamiento de una sentencia de-
finitiva o interlocutoria (art. 158, incs. 2
y 30, CPC).
Pero las sentencias interlocutorias,
para los efectos de la procedencia del
recurso de casacin, se subdividen en
aquellas que ponen trmino al juicio o
hacen imposible su continuacin y en
aquellas que no participan de estos ca-
racteres: solamente las primeras de las
nombradas son susceptibles de casacin
en el fondo.
An ms, las sentencias definitivas y
las interlocutorias, en razn de las diver-
sas instancias en que pueden ser dicta-
das, se subclasifican en de nica, primera
y segunda instancia. Todas ellas sern
susceptibles de casacin en el fondo? Evi-
dentemente que no.
Debe tratarse de sentencias definiti-
vas o interlocutorias de aquellas que po-
nen trmino al juicio o hacen imposible
su continuacin, inapelables, esto es, no
susceptibles de recurso de apelacin; en
otros trminos, son nicamente senten-
cias pronunciadas por va de apelacin o
de segunda instancia.
EDITORIAl /URIDlCA D[CHILf
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Mario Casarino Viterbo
Empero, lo anterior no basta. Es pre-
ciso, adems, que la sentencia haya sido
pronunciada por alguna Corte de Apelacio-
nes, o bien, por un tribunal arbitral de se-
g;unda instancia, constituido por rbitros
de derecho, en negocios de la competen-
cia de dichas Cortes.
Manual de Derecho Procesal
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5
:2
m EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
suprema, y, por consiguiente, su infrac-
cin tambin motivar la procedencia del
precitado recurso.
b) En segundo trmino, la palabra
"ley" comprender el tratado internacional.
En el fondo el tratado internacional per-
sigue dejar constancia del acuerdo de vo-
luntades de dos o ms Estados con el fin
de regular determinadas relaciones de ca-
rcter jurdico, y desde el punto de vista
formal constituye una verdadera ley para
los Estados que lo celebran.
Por consiguiente, no es forzada la con-
clusin anterior, en el sentido de que el
tratado internacional, desde el momento
en que constituye una ley, puede ser in-
fringido al ser aplicado en un fallo judi-
cial y, en consecuencia, que dicha
infraccin puede servir de fundamento a
un recurso de casacin en el fondo.
Recordemos que son atribuciones ex-
clusivas del Congreso Nacional aprobar
o desechar los tratados que le presenta-
re el Presidente de la Repblica antes
de su ratificacin (art. 54, N JO, CPR).
En otras palabras, el tratado internacio-
nal para que tenga fuerza de ley tiene
que ser sometido a los mismos trmites
formales que se observan en la elabora-
cin de ella.
De ah, tambin, que autores y juris-
prudencia sostengan que un tratado in-
ternacional debe ser interpretado lo
mismo que una ley, o sea, de conformi-
dad a lo preceptuado en los artculos 19
al 24 del Cdigo Civil, prescindiendo de
las normas legales sobre interpretacin
de los contratos.
c) En tercer trmino, cabe pregun-
tarse si la costumbre est involucrada den-
tro de la palabra ley y, en consecuencia,
si su infraccin puede originar un recur-
so de casacin en el fondo.
En nuestro derecho hay dos clases de
costumbres: la civil y la comercial. La pri-
mera tiene como fundamento legal el ar-
tculo 2 del Cdigo Civil, que dice: "La
costumbre no constituye derecho sino en
los casos en que la ley se remite a ella".
La segunda est reconocida en el artcu-
lo 4 del Cdigo de Comercio, que pres-
199
dictada, quiere decir que l habr sido
resuelto mediante una ley extraa, la cual,
por consiguiente, tambin habr sido vio-
lada.
En resumen, contravencin formal de
una ley, interpretacin errnea de la mis-
ma y falsa aplicacin de ella son sinnimos
de infraccin de ley y, por consiguiente,
son uno de los elementos constitutivos de
la causal que justifica el recurso de casa-
cin en el fondo.
585. Significado o alcance de la pala-
bra "ley". Determinar el alcance o signi-
ficado de la palabra "ley", empleada en
el artculo 767, del Cdigo de Procedi-
miento Civil, equivale a precisar el campo
de actuacin del recurso de casacin en el
fondo. Esta labor, en consecuencia, es de
gran importancia prctica.
Ahora bien, la historia fidedigna del
establecimiento de este precepto legal nos
ensea que la palabra "ley" que en l se
utiliza ha sido empleada por el legislador
en un sentido amplio, o sea, que en ella
se comprenden no solamente las leyes
constitucionales sino, adems, otros ac-
tos o hechos que se hallan estrechamen-
te vinculados a tal concepto.
A continuacin trataremos, pues, de
precisar su contenido y alcance:
a) En primer trmino, la palabra "ley"
comprender la ley constitucional o formal,
como tambin se la llama, en contraposi-
cin a la ley material. Entendemos por ley
constitucional o formal aquella que ema-
na de una manera normal de los rganos
constitucionales llamados a producirla, y
por ley material aquella norma que pro-
viene de cualquier rgano pblico.
Recordemos que la leyes una decla-
racin de la voluntad soberana que, ma-
nifestada en la forma prescrita por la
Constitucin, manda, prohbe o permite
(art. 1 Ce). Luego, la infraccin a esta
clase de leyes formales dar origen, como
regla general, a la procedencia del recur-
so de casacin en el fondo.
Es evidente que dentro de la ley for-
mal incluimos a la Constitucin Poltica
del Estado, puesto que constituye la ley
"1''
y
I
I
I
mente o haciendo una falsa aplicacin
de ella.
a) Se entiende que hay contravencin
formal de una ley cuando, dada una de-
terminada situacin de hecho, el tribu-
nal al 3lplicarla prescinde de su propio
texto. Este es el caso ms tpico de trans-
gresin de la ley y es por eso que es el
que ms frecuentemente sirve de causal
o fundamento del respectivo recurso de
casacin en el fondo. Empero, no siem-
pre). en la prctica, es fcil distinguir el
casO de una contravencin formal de la
ley con el de su interpretacin errnea.
b) Tambin se infringe una ley cuan-
do se la interpreta errneamente. Ahora bien,
si interpretar la leyes far su verdadero
sentido y alcance quiere decir que se in-
terpretar errneamente la ley, toda vez
que un tribunal, al aplicarla a un caso
determinado, le da un alcance distinto
de aquel que previ el legislador, o sea,
ampliando o restringiendo el sentido de
sus disposiciones.
Pero no hay que olvidar que el tribu-
nal, dentro de nuestro derecho positivo,
no es soberano en la labor de interpreta-
cin de los textos legales: los artculos 19
al 24 del Cdigo Civil le sealan normas
rgidas sobre el particular. De esta suerte,
la interpretacin errnea de una ley, a
veces, trae consigo una doble infraccin
legal, o sea, un doble motivo de casacin
en el fondo: infraccin de la ley aplicada
al caso concreto por errnea interpreta-
cin e infraccin de las leyes que fan las
normas sobre interpretacin de las mis-
mas mediante su contravencin formal.
c) Por ltimo, se entiende que hay fal-
sa aplicacin de la ley cuando se la aplica a
casos para los cuales ella es extraa, o bien,
cuando se prescinde de ella en aquellos
casos para los cuales fue dictada.
Esta ltima situacin de transgresin
legal presenta, en consecuencia, un do-
ble aspecto. En efecto, si se aplica la ley a
un caso en que ella es extraa, quiere
decir que se habr dejado de aplicar la
verdadera ley, la cual tambin habr sido
violada; y, a la inversa, si se prescinde de
la ley en un caso para el cual ella fue
198
III. Causal que justifica el recurso
de casacin en el fondo
583. Concepto. A diferencia de lo que
acontece en el recurso de casacin en la
forma, en que las causales o motivos que
lo justifican son variados y se hallan ex-
presa y taxativamente contemplados en
la ley, en el recurso de casacin en el
fondo la causal o motivo que lo justifica
es una sola: la infraccin de la ley con
influencia sustancial en lo dispositivo de
la sentencia.
En efecto, el artculo 767 parte final
del CPC. dispone, luego de referirse a las
resoluciones susceptibles de recurso de
casacin en el fondo, que dicha resolu-
cin se haya pronunciado con infraccin
de ley y esta infraccin haya influido subs-
tancialmente en lo dispositivo de la sen-
tencia.*
Por consiguiente, son dos los requisi-
tos o condiciones que constituyen la cau-
sal de casacin en el fondo en estudio:
1) que la sentencia recurrida haya sido
pronunciada con infraccin de ley; y
2) que dicha infraccin de ley haya
influido sustancialmente en lo dispositi-
vo de la sentencia.
A continuacin examinaremos, sepa-
radamente, cada uno de estos dos requi-
sitos.
* Modificado, como aparece en el texto, por
la Ley N 19.374. Actualizado Depto. D. Procesal U.
de Chile.
584. Formas o maneras de infringir
la ley. Hay consenso entre los autores y la
jurisprudencia en que la forma o manera
de infringir una leyes: contravinindola
formalmente, interpretndola errnea-
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo
cribe: "Las costumbres mercantiles suplen
el silencio de la ley, cuando los hechos
que las constituyen son uniformes, pbli-
cos, generalmente ejecutados en la Re-
pblica o en una determinada localidad,
y reiterados por un largo espacio de tiem-
po, que se apreciar prudencialmente por
los juzgados de comercio".
En consecuencia, hay diferencia no-
table entre una y otra costumbre. Mien-
tras la civil se aplica slo y cuando la ley
se remite a ella, la comercial entra en
juego en el silencio de la ley y siempre
que se renan los requisitos copulativos
antes sealados.
Ahora bien, partimos de la base de
que la ley civil se haya remitido a la cos-
tumbre y que sta se encuentre acredita-
da legalmente en el proceso; o bien, que
no existe ley comercial llamada a resol-
ver la contienda y que se haya acreditado
legalmente la existencia de la costumbre
comercial; puede el tribunal infringir es-
tas costumbres sin incurrir en una causal
de casacin en el fondo?
Para ser lgicos estimamos que no po-
dra hacerlo, desde el momento en que
el mismo legislador autoriz la aplicacin
supletoria de estas costumbres, las cuales
revisten por tal concepto el carcter de
normas de derecho, cuya violacin debe
traer consigo, en consecuencia, la invali-
dacin del fallo que se dicte en semejan-
tes condiciones.
En resumen, la palabra ley compren-
de la costumbre siempre y cuando el le-
gislador autorice la aplicacin de ella al
caso controvertido y se halle acreditada
legalmente en el proceso: su infraccin,
en estas condiciones, har procedente el
recurso de casacin en el fondo.
d) En cuarto lugar, es motivo de con-
troversia si la ley extranjera queda com-
prendida dentro de la palabra "ley".
En principio, no podemos descono-
cer que el recurso de casacin en el fon-
do tiende a obtener la genuina y correcta
aplicacin de la ley nacional como coro-
lario del principio de la soberana de los
Estados, pero tampoco podemos prescin-
dir del hecho de que nuestra ley nacio-
Manual de Derecho Procesal
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o;:
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mEDITORIAL JURIDICA DE CHILE 200
nal en repetidas ocasiones manda aplicar
una ley extranjera.
De esta manera, el tribunal chileno
que aplica una ley extranjera por manda-
to expreso de su ley nacional, buen cui-
dado ha de tener de no infringir aqulla.
En otras palabras, aplicar la ley extran-
jera en conformidad a su propio texto,
interpretndola correctamente y utilizn-
dola al caso para el cual fue dictada.
En consecuencia, la aplicacin de la
a nuestro juicio, puede dar
orIgen a una doble infraccin legal de
parte del tribunal sentenciador: en pri-
mer lugar, prescindiendo lisa y llanamen-
te de su aplicacin, con lo cual, fuera de
infringir esta ley extranjera, dejndola de
aplicar se viola, adems, la ley nacional
que ordena aplicar aqulla; y, en segun-
do lugar, si bien se desea aplicar la ley
extranjera, esta labor se cumple en for-
ma defectuosa, interpretndola errada-
mente o haciendo una falsa aplicacin
de ella.
En ambos casos habr, pues, infrac-
cin de ley y, por consiguiente, la posibi-
lidad de deducir recurso de casacin en
el fondo.
e) En quinto lugar, se discute si la
doctrina legal debe equipararse a la ley y,
en consecuencia, si su infraccin puede
dar motivo a la interposicin de un re-
curso de casacin en el fondo.
Entendemos por doctrina legal la que
emana de la jurisprudencia de los tribuna-
les; y se llama jurisprudencia, naturalmen-
te en sentido restringido, la interpretacin
que los tribunales hacen de la ley.
La claridad del texto legal que esta-
blece la causal o motivo de interposicin
del recurso de casacin en el fondo per-
mite afirmar que la palabra ley que en l
se emplea no puede confundirse con la
expresin doctrina legal; de suerte que si
sta es violada, por muy uniforme y cons-
tante que ella sea, es improcedente el re-
curso de casacin en el fondo que
pretendiera fundarse en esta clase de in-
fraccin.
Por lo dems, la historia fidedigna del
establecimiento de la ley as tambin lo
li
1
I
demuestra, puesto que la infraccin de
la doctrina legal se contemplaba expresa-
mente como causal de casacin de fondo
en uno de los proyectos, y fue eliminada
con posterioridad; a lo que cabe aadir
que en nuestro pas las sentencias judi-
ciales slo tienen fuerza obligatoria en
las causas en que actualmente se pronun-
ciaren (art. 3, inc. 2, CC), sin que por
ello le desconozcamos, por cierto, su gran
valor cientfico y moral que reviste la doc-
trina legal.
f) En sexto lugar, se plantea la interro-
gante acerca de si la ley del contrato cabe
considerarla dentro de la expresin ley
empleada en el artculo 767 del Cdigo
de Procedimiento Civil y, por consiguien-
te, si su infraccin autoriza la interposi-
cin de un recurso de casacin en el fondo.
La ley del contrato es aqulla estable-
cida en el artculo 1545 del Cdigo Civil,
en los siguientes trminos: "Todo contra-
to legalmente celebrado es una ley para
los contratantes, y no puede ser invalida-
do sino por su consentimiento mutuo o
por causas legales".
Algunos han sostenido que esta ex-
presin del legislador, en orden a que los
contratos legalmente celebrados consti-
tuyen una ley para los contratantes, slo
constituye una metfora jurdica, esto es,
una manera grfica de expresar el carc-
ter vinculante del contrato y que, en con-
secuencia, la infraccin de ste no se
equipara a la de la ley, para los efectos de
la procedencia del recurso de casacin
de fondo.
Sin embargo, otra doctrina, y tambin
lajurisprudencia de nuestra Corte Supre-
ma, ha credo que el contrato se iguala a
la ley, siendo el primero la ley principal y
la segunda la supletoria; de suerte que
tanto la infraccin de una ley formal como
la de una convencional autorizan la in-
terposicin de un recurso de casacin en
el fondo.
Naturalmente que el problema de la
efectividad de la celebracin del contra-
to y del contenido de sus clusulas es una
cuestin de hecho que resuelven en for-
ma soberana los tribunales de fondo; al
201
tribunal de casacin, en cambio, le est
reservado determinar la aplicacin del
contrato en su correcto y verdadero sen-
tido, incluso interpretando el alcance de
sus clusulas a la luz de la intencin o
espritu de los contratantes.
g) Por ltimo, escapan del campo de
actuacin del recurso de casacin en el
fondo las infracciones a las ordenanzas ge-
nerales, los reglamentos y los decretos supre-
mos, por ser ellos emanacin de uno solo
de los Poderes Pblicos y no constituir
leyes en sentido formal; como tambin
acontece con las infracciones de los autos
acordados y de las circulares que emanan
del Poder Judicial, las cuales indudable-
mente tampoco revisten el carcter jur-
dico de leyes.
En cambio, la infraccin a los decretos
leyes y a los decretos con fuerza de ley hace
procedente el recurso de casacin en el
fondo, por cuanto ellos, si bien no revis-
ten el carcter formal de leyes, en el he-
cho se equiparan a stas. Adems, al
desconocerles el carcter de normas jur-
dicas se alterara an ms gravemente la
vida institucional del pas.
586. Influencia de la infraccin legal
en lo dispositivo de la sentencia. Estable-
cido cmo puede infringirse una ley y qu
se entiende por tal, para los efectos de la
procedencia del recurso de casacin de
fondo, cabe analizar ahora el segundo re-
quisito de la causal o fundamento de este
ltimo recurso, o sea, que la infraccin
legal haya tenido influencia sustancial en
lo dispositivo de la sentencia.
En consecuencia, entra aqu en jue-
go la distincin de las diferentes partes
de que consta una sentencia, a saber:
enunciativa, considerativa y dispositiva. La
infraccin legal debe analizarse nada ms
que a la luz de esta ltima parte, o sea, de
aquella que contiene la decisin del asun-
to controvertido.
Empero, a veces sucede que los consi-
derandos de una sentencia forman un todo
inseparable con su parte resolutiva; de
manera que puede acontecer que la in-
fraccin legal haya influenciado tanto esta
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE m
Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
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Mario Casarino Viterbo Manual de Derecho Procesal
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ms debe dictar la sentencia que corres-
ponda con arreglo a la ley, la que debe
dictar acto continuo y sin nueva vista de
la causa, pero separadamente de aquella
resolucin que acogi el recurso de casa-
cin en la forma (art. 786, inc. 3, CPC).
En cambio, en el recurso de casacin en
el fondo la sentencia de reemplazo es pro-
nunciada siempre por el tribunal que dic-
t la sentencia de casacin, vale decir,
por la Corte Suprema;
j) En cuanto a su preparacin: el recur-
so de casacin en la forma para que pue-
da ser admitido necesita de preparacin
previa, o sea, es indispensable que el que
lo entabla haya reclamado de la falta, ejer-
ciendo oportunamente y en todos sus gra-
dos los recursos establecidos por la ley; el
recurso de casacin en el fondo, en cam-
bio, no necesita para ser admitido de este
reclamo previo; y
k) En cuanto a su extensin: en el re-
curso de casacin en la forma, cuando es
acogido, por regla general, se invalida la
sentencia recurrida y, adems, excepcio-
nalmente, todas aquellas actuaciones pos-
teriores al vicio o defecto en que se
fundament dicho recurso; en el recurso
de casacin en el fondo, en cambio, cuan-
do es aceptado, solamente se invalida la
sentencia recurrida.
IX. La casacin en el fondo de oficio
611. Concepto. La fuente legal de esta
institucin es el inciso 2 del artculo 785
del Cdigo de Procedimiento Civil, ar-
tculo que en sus dos incisos prescribe:
"Cuando la Corte Suprema invalide
una sentencia por casacin en el fon-
do, dictar acto continuo y sin nueva
vista, pero separadamente, sobre la cues-
tin materia del juicio que haya sido
objeto del recurso, la sentencia que crea
conforme a la ley y al mrito de los he-
chos tales como se han dado por esta-
blecidos en el fallo recurrido, reprodu-
ciendo los fundamentos de derecho de
la resolucin casada que no se refieran
a los puntos que hayan sido materia del
EDITORIAl JURIDICA DE CHILE 214
recurso y la parte del fallo no afectada
por ste.
En los casos en que desechare el re-
curso de casacin en el fondo por defec-
tos en su formalizacin, podr invalidar
de oficio la sentencia recurrida, si se hu-
biere dictado con infraccin de ley y esta
infraccin haya influido sustancialmente
en lo dispositivo de la sentencia. La Cor-
te deber hacer constar en el fallo de
casacin esta circunstancia y los motivos
ql!e la determinan, y dictar sentencia de
remplazo con arreglo a lo que dispone
el inciso precedente".
De su tenor literal podemos, pues,
deducir que la casacin en el fondo de
oficio es la facultad que la ley confiere a
la Corte Suprema para que, de propia
iniciativa, invalide la sentencia objeto
del recurso, cuando sta haya rechaza-
do el recurso de casacin en el fondo
por defectos en su formalizacin, siem-
pre que concurran las circunstancias
que constituyen la causal del recurso,
es decir, si la sentencia se ha pronun-
ciado con infraccin de ley y esta in-
fraccin ha influido sustancialmente en
lo dispositivo del fallo.
Desde el momento en que en este
caso los tribunales pueden actuar de pro-
pia iniciativa, quiere decir que estamos
en presencia de una manifiesta excepcin
al principio fundamental de la pasividad
de los mismos, consagrado en el artculo
10 del Cdigo Orgnico de Tribunales;
pero esta intervencin de oficio es, al mis-
mo tiempo, esencialmente facultativa del
tribunal llamado a ejercerla, pues la ex-
presin "podr" empleada por el legisla-
dor as lo confirma.
La casacin en el fondo de oficio de-
muestra, pues, que la observancia de las
leyes no slo interesa a las partes litigan-
tes, sino, adems, a la sociedad en gene-
ral, de suerte que rechazado el recurso
de casacin en el fondo por defectos en
su formalizacin y concurriendo las cir-
cunstancias que constituyen la causal del
recurso en estudio, la Corte Suprema pue-
de invalidar de oficio la sentencia objeto
del mismo.
612. Casos en que procede. La defini-
cin de la casacin en el fondo de oficio
nos permite afirmar que ella procede cuan-
do la Corte Suprema desecha el recurso
de casacin en el fondo por defectos en
su formalizacin, siempre que concurran
las circunstancias que constituyen la cau-
sal del recurso en estudio, es decir, si la
sentencia se ha pronunciado con infrac-
cin de ley y esta infraccin ha influido
sustancialmente en lo dispositivo del fallo.
Si el tribunal hace uso de la facultad sea-
lada, deber dejar constancia en el fallo
que dicte de la circunstancia anterior y los
motivos que la determinen, dictando la
sentencia de reemplazo correspondiente.
La casacin en el fondo de oficio,
como se ve, est por encima del inters
personal y privado de las partes litigan-
tes; pues su finalidad, como ya lo hemos
expresado, es velar por los intereses su-
premos de la sociedad y de la ley.
215
613. El fallo en la casacin en el
fondo de oficio. La Corte Suprema
cuando casa de oficio la sentencia im-
pugnada al rechazar un recurso de ca-
sacin en el fondo por defectos de
formalizacin, dicta un extenso fallo
que consta de dos partes: la primera, que
constituye el fallo de casacin en el fon-
do propiamente tal; y la segunda, que
es la sentencia que viene a sustituir a la
sentencia anulada, llamada por eso sen-
tencia de reemplazo, y cuya misin es ocu-
par el mismo lugar y funcin de la
sentencia recurrida que se acaba de
anular.
Finalmente es necesario recordar que
el fallo anteriormente sealado lo dicta
tambin la Corte Suprema cuando aco-
ge un recurso de casacin en el fondo
por haber infraccin de ley y haber sta
influido sustancialmente en lo dispositi-
vo del fallo.
EDITORIAL IURIOICA OECHILE
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Captulo Sexto
EL RECURSO DE REVISIN
SUMARIO: 1. Generalidades; II. Resoluciones judiciales susceptibles del recurso
de revisin; III. Causales que justifican el recurso de revisin; IV. Interposicin
del recurso de revisin; V. Tramitacin y fallo del recurso de revisin.
...,
i
l. Generalidades
614. Concepto. La ley procesal civil
dedica los artculos 810 al 816 al recurso
de revisin, pero no seal su objeto ni
lo defini.
Se contenta, en cambio, con sealar
sus causales y efectos, para el caso de ser
acogido. De estos preceptos legales po-
demos deducir la siguiente definicin: el
recurso de revisin es un medio de im-
pugnacin extraordinario que la ley con-
cede por las causales y en contra de las
resoluciones judiciales firmes que ella mis-
ma seala, ganadas injustamente, con el
objeto de anularlas en todo o en parte.
Difiere, pues, de la apelacin en cuan-
to a su objeto, puesto que sta persigue la
enmienda de una resolucin judicial, y la
revisin, en cambio, la anulacin o inva-
lidacin de la resolucin recurrida; y se
asemeja a la casacin, en cuanto a que
ambos recursos persiguen la anulacin de
la resolucin recurrida, si bien las causa-
les en que ellos se fundan son entera-
mente diversas.
Pero la caracterstica ms sobresaliente
del recurso de revisin la hallamos en
que procede en contra de las sentencias
firmes; a diferencia de todos los dems
recursos, sean ordinarios o extraordina-
rios, que atacan solamente a las resolu-
ciones que an no han pasado en
autoridad de cosajuzgada.
615. Fundamento del recurso. No pue-
de ser ms simple, lo mismo que su re-
glamentacin. Recordemos que toda
sentencia judicial firme o ejecutoriada
produce, entre otros efectos, el de la cosa
217
juzgada, en su doble aspecto de accin y
de excepcin: accin para exigir su cum-
plimiento y excepcin para impedir que
se vuelva a discutir idntica cuestin con-
trovertida entre las mismas partes.
La sentencia firme o ejecutoriada,
o pasada en autoridad de cosa juzgada,
como tambin se la llama, es tenida
como la expresin de la verdad ms
pura, tanto de parte de los tribunales
como de los litigantes, cualesquiera que
sean los errores de hecho o de derecho
que contenga. Sin embargo, esa ficcin
de verdad no puede mantenerse cuan-
do con posterioridad a la dictacin de
la sentencia aparece un hecho o circuns-
tancia que por s sola demuestra su in-
justicia.
Una sentencia injusta, por consiguien-
te, debe anularse, y el medio para obte-
ner esta finalidad es, precisamente, el
recurso de revisin. A la postre, pues, este
recurso vela por la integridad de la cosa
juzgada, aun cuando, en apariencia, tien-
da a destruirla.
616. Caractersticas del recurso de re-
visin. Sus caractersticas ms esenciales
son las siguientes:
a) Es un recurso extraordinario, o sea,
slo procede en contra de determinadas
resoluciones judiciales y por causales tam-
bin expresamente sealadas en la ley
(art. 810 CPC);
b) Es un recurso que se interpone ante
y para ante la Corte Suprema, con lo cual
se altera la regla general de que los re-
cursos se interponen ante el tribunal que
pronunci la resolucin recurrida y para
ante el tribunal inmediatamente superior
EDITORIAL jURIDICA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
en gradojerrquico (arts. 98, N 5,* COT,
y 810 CPC);
c) Es un recurso que procede en con-
tra de sentencias firmes cuando han sido
ganadas injustamente, lo cual se probar
en el curso de su tramitacin (art. 810
CPe); y
d) Es un recurso de mero derecho, o
sea, no constituye una instancia judicial,
puesto que el tribunal ad quem, en vez de
conocer y fallar las cuestiones de hecho y
de derecho ventiladas en el juicio, se li-
mita a constatar si existe o no la causal
que le sirve de fundamento.
617. Antecedentes histricos del mis-
mo. En las antiguas legislaciones romana
y francesa no encontramos el recurso de
revisin con las caractersticas que hemos
sealado, confundindose ms bien sus
causales con las de la casacin.
En las Leyes de Partidas se reglamenta
un recurso parecido a nuestra actual re-
visin, aunque el tribunal llamado a co-
nocer de l era el mismo que dict la
sentencia recurrida; el plazo para inter-
ponerlo tena una duracin de veinte
aos, y se tramitaba de conformidad a las
normas del juicio ordinario.
En nuestro pas su antecedente legis-
lativo inmediato lo constituye el Decreto Ley
de 10 de marzo de 1837, sobre nulidad pro-
cesal, elaborado por don Mariano Egaa
y conocido junto a otras leyes semejantes
con la denominacin de Leyes Marianas.
En dicho cuerpo legal se establecen diver-
sas causales parecidas a nuestra revisin, y
la sancin que ellas traen consigo es tam-
bin la nulidad o invalidacin del fallo
dictado en tales condiciones.
La redaccin del Ttulo XX del Libro
III del Cdigo de Procedimiento Civil fue
obra exclusiva de don Manuel Egidio Ba-
llesteros, a quien se la encomendara, en
una de sus sesiones, la Comisin Mixta
Revisora del Proyecto de Cdigo de Pro-
*Modificado, como aparece en el texto, por el
arto 1, N 13, letra a) de la Ley N 19.708, publica-
da en el Diario Oficial el 5 de enero de 2001.
EDITORiAl JURIDICA DE CHIU 218
cedimiento Civil, despus de haberse dis-
cutido extensamente la conveniencia o
inconveniencia de mantener como cau-
sales de nulidad las antes indicadas.
La historia fidedigna del establecimien-
to de la ley demuestra, pues, que la insti-
tucin del recurso de revisin fue aceptada
tomando en consideracin que ella no
constituye una tercera instancia ni est des-
tinada a alargar los juicios, y que si, por
excepcin, puede llegar a anular una sen-
tencia firme, es justamente para mante-
ner la pureza de la cosajuzgada.
11. Resoluciones judiciales susceptibles
del recurso de revisin
618. Resoluciones judiciales suscepti-
bles de tal recurso. El artculo 810 del C-
digo de Procedimiento Civil comienza
diciendo que la "Corte Suprema de Justi-
cia podr rever una sentencia firme en los
casos siguientes: ...". Luego, la resolucin
judicial susceptible de este excepcional re-
curso debe reunir dos requisitos: ser sen-
tencia y estar firme o ejecutoriada.
Ahora bien, las sentencias en nuestro
derecho pueden revestir dos formas, o
sea, pueden ser definitivas o interlocuto-
rias (art. 158 CPe), cuyas respectivas de-
finiciones hemos formulado en diversas
oportunidades. Desde el momento en que
la ley no distingue, quiere decir que se
refiere a ambas clases de sentencias. Es
preciso agregar que debe tratarse de sen-
tencias definitivas o interlocutorias pro-
nunciadas ante cualquier tribunal y en
cualquiera instancia, no importando la
cuanta o el monto del juicio en que ha-
yan recado.
Pero no basta que se trate de una sen-
tencia. Es necesario, adems, que la sen-
tencia est firme o ejecutoriada; entendiendo
por tal, de conformidad a lo preceptuado
en el artculo 174 del Cdigo de Procedi-
miento Civil, aquella en contra de la cual
no procede recurso alguno, y, en caso con-
trario, aquellas en que ha sido notificado
el decreto que la manda cumplir, o en
que han transcurrido todos los plazos que
1
la ley concede para interponer recursos
sin que se hayan hecho valer por las par-
tes, certificndose esta ltima circunstan-
cia por el secretario, si se tratare de una
sentencia definitiva.
619. Sentencias rrrmes en contra de
las cuales no procede la revisin. Hay ca-
sos en que, no obstante hallarnos en pre-
sencia de una sentencia firme, es imposible
deducir legalmente en su contra recurso
de revisin. Se trata del caso de excepcin
contemplado en el inciso final del artcu-
lo 810 del Cdigo de Procedimiento Civil,
que dice: "El recurso de revisin no pro-
cede respecto de las sentencias pronun-
ciadas por la Corte Suprema, conociendo
en los recursos de casacin o de revisin".
De acuerdo, pues, al claro tenor literal
de la ley, la revisin no procede en contra
del fallo pronunciado por la Corte Supre-
ma conociendo de un recurso de revisin,
sea acogindolo o rechazndolo. Esta re-
gla legal se traduce en el aforismo jurdico
que dice que "no hay revisin de revisin".
Tampoco proceder la revisin en
contra de las sentencias pronunciadas por
la Corte Suprema, conociendo de un re-
curso de casacin en el fondo, sea acogin-
dolo o rechazndolo; y, en atencin a que,
como ya sabemos, cuando esta clase de
recursos son acogidos, la Corte Suprema
dicta dos sentencias, la de casacin y la
de reemplazo, quiere decir que la impro-
cedencia de la revisin debe afectar a am-
bas clases de fallos.
Adems, tampoco proceder la revi-
sin en contra de la sentencia pronun-
ciada por la Corte Suprema, conociendo
de un recurso de casacin en la forma, sea
acogindolo o rechazndolo. A la inver-
sa, si la sentencia de casacin en la forma
es del conocimiento de otra clase de tri-
bunal (por ejemplo, de una Corte de Ape-
laciones o de un juez de letras por no ser
de aquellas pronunciadas por el Tribunal
Supremo), ser susceptible de revisin.
La jurisprudencia agrega que tampo-
co procede el recurso de revisin en con-
tra de los fallos pronunciados por la Corte
Suprema, conociendo de un recurso de
219
queja, porque donde hay la misma razn
debe existir idntica disposicin.
En resumen, las excepciones antes se-
aladas reafirman la seriedad y la estabi-
lidad del principio de la cosa juzgada
emanado de las sentencias judiciales fir-
mes o ejecutoriadas.
111. Causales que justifican el recurso
de revisin
620. Primera causal. Si se ha fundado
en documentos declarados falsos por sentencia
ejecutoria, dictada con posterioridad a la sen-
tencia que se trata de rever (art. 810, N 1,
CPe).
Son tres, por consiguiente, los requi-
sitos que vienen a constituir la primera
causal del recurso de revisin en estudio:
1) que la sentencia que se impugna se
haya fundado en documentos; 2) que
dichos documentos hayan sido declara-
dos falsos por sentencia ejecutoria; y 3)
que la sentencia que declar falsos estos
documentos haya sido pronunciada con
posterioridad a la sentencia que se trata
de rever.
La sentencia recurrida de revisin ha
debido, pues, fundarse en documentos. No
basta que los tales documentos hayan sido
acompaados por las partes, o bien, que
el tribunal se haya limitado a ordenar
agregarlos: es preciso que el tribunal haya
ponderado los documentos en su senten-
cia, sirvindoles a ella de fundamento.
Pero no es necesario que estos documen-
tos hayan sido el nico y necesario fun-
damento de la sentencia, ya que la ley no
lo exige: ser el tribunal llamado a cono-
cer de la revisin quien juzgar la influen-
cia de los tales documentos en la sentencia
que se trata de anular.
En seguida se requiere que los docu-
mentos en que se ha fundado la senten-
cia recurrida hayan sido declarados falsos
por sentencia ejecutoria. Nos encontra-
mos entonces en presencia de dos sen-
tencias firmes o ejecutoriadas: la primera,
o sea, aquella que se ha impugnado por
medio del recurso de revisin; y la segun-
WITORIAL JURIDICA DE UIILf
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Mario Casarino Viterbo
220
Manual de Derecho Procesal
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626. Forma de interponer el recurso
de revisin. Con la derogacin del arto 812
por la Ley N 19.374, de 18 de febrero de
1995, se suprimi la nica norma de la
cual se poda deducir que el recurso de-
ba ser interpuesto por escrito. No obstante
ello y en base a que la idea del legislador
fue suprimir la consignacin y no la for-
ma de interponer el recurso, podemos co-
legir que ste deber hacerse por escrito.
Tampoco seala el legislador los re-
quisitos o menciones esenciales que deba
contener este escrito; pero pensamos que,
en todo caso, deber mencionar, expresa
y determinadamente, la causal que le sir-
ve de fundamento e individualizar de ma-
nera adecuada la sentencia firme que se
625. Quin puede interponerlo? Nue-
vo silencio observado por el legislador so-
bre este importante particular. La solucin
tendr que ser la misma dada para los ~
ms recursos, esto es, que podr interpo-
ner el recurso de revisin la parte agraviada,
entendiendo por tal aquella persona que
figur como parte dentro del juicio en
que se pronunci la sentencia recurrida
de revisin, y siempre y cuando esta sen-
tencia le cause agravios o perjuicios.
* Modificado, como aparece en el texto, por
el arto JO, N" 13, letra a) de la Ley N 19.708, publi-
cada en el Diario Oficial el 5 de enero de 2001.
to a su interposicin, de la mayora de
los recursos, los cuales siempre se dedu-
cen ante el tribunal que pronunci la sen-
tencia que se trata de impugnar.
y se interpone para ante la Corte Su-
prema por corresponderle a este alto tri-
bunal la competencia exclusiva del
conocimiento y fallo del recurso de revi-
sin, cualquiera que sea la jerarqua del
tribunal que pronunci la sentencia que
se pretende rever (arts. 98, N 5,* COT,
Y810, inc. JO, CPe). Escapa tambin as
el recurso de revisin a la regla general
de que los recursos se interponen para
ante el tribunal inmediatamente superior
en grado jerrquico de aquel que pro-
nunci la sentencia recurrida.
221
623. Cuarta causal. Si se ha pronuncia-
do contra otra pasada en autoridad de cosa
juzgada y que no se aleg en el juicio en que la
sentencia firme recay (art. 810, N 4, CPe).
Esta ltima causal requiere: 1) que la
sentencia que se trata de impugnar por
medio de la revisin haya sido pronun-
ciada contra otra pasada en autoridad de
cosa juzgada; y 2) que esta excepcin de
cosa juzgada no se haya opuesto en el
juicio en que se pronunci la sentencia
impugnada.
Para saber si la segunda sentencia ha
sido o no pronunciada contra otra pasa-
da en autoridad de cosa juzgada, bastar
examinar si entre ellas concurre o no la
triple identidad legal a que alude el ar-
tculo 177 del Cdigo de Procedimiento
Civil, o sea, identidad legal de personas,
identidad de la cosa pedida e identidad
de la causa de pedir.
Yen cuanto a que no se haya alegado
en el juicio en que se pronunci la sen-
tencia que se trata de rever, ello es lgico,
desde el momento en que si se hubiere
alegado en las variadas formas y oportuni-
dades en que la ley procesal civil lo permi-
te habra habido ya un fallo anterior sobre
el particular y, por consiguiente, cosajuz-
gada al respecto. En todo caso carece de
importancia averiguar la razn o causa por
la cual no se aleg la cosa juzgada en el
juicio en que recay la sentencia firme:
basta que no se haya alegado para que
concurra el segundo requisito constituti-
vo de la causal de revisin en estudio.
IV. Interposicin del recurso
de revisin
624. Ante quin y para ante quin se
interpone? El recurso de revisin se in-
terpone directamente ante la Corte Supre-
ma. No existe, en verdad, un texto legal
expreso que as lo establezca; pero ello
se desprende de lo preceptuado en el ar-
tculo 813 del Cdigo de Procedimiento
Civil, cuando dispone que "presentado el
recurso, el tribunal ordenar... ". Difiere
entonces el recurso de revisin, en cuan-
ls
causal anterior, esta sentencia condena-
toria podr haberse pronunciado antes o
despus de dictada la sentencia impug-
nada de revisin.
Por ltimo, la condena de los testigos
ha tenido que ser motivada precisamente
por las declaraciones que prestaron den-
tro del juicio cuya sentencia se pretende
rever. No basta, pues, cualquiera conde-
na por falso testimonio para encasillarla
en la causal en estudio.
'622. Tercera causal. Si la sentencia fir-
me se ha ganado injustamente en virtud de
cohecho, violencia u otra maquinacin fraudu-
lenta, cuya existencia haya sido declarada por
sentencia de trmino (art. 810, N 3, CPe).
Tres circunstancias constituyen esta ter-
cera causal: 1) que la sentencia que se
impugna se haya obtenido por medio de
cohecho, violencia u otra maquinacin
fraudulenta; 2) que el cohecho, violen-
cia o maquinacin fraudulenta hayan sido
determinantes en la dictacin de la refe-
rida sentencia; y 3) que la existencia del
cohecho, violencia u otra maquinacin
fraudulenta haya sido declarada por sen-
tencia de trmino.
El cohecho, la violencia u otra ma-
quinacin fraudulenta constituyen verda-
deros delitos y, por ello, son base o
fundamento de esta causal de revisin.
El cohecho ha debido operar en la per-
sona del juez lo mismo que la violencia o
la maquinacin fraudulenta, no impor-
tando si se trata de jueces unipersonales
o colegiados.
Pero no basta cualquier cohecho, vio-
lencia y otra maquinacin fraudulenta:
deben ser de tal naturaleza que hayan
determinado o influido manifiestamen-
te en el pronunciamiento de la senten-
cia, de suerte que sin la existencia de
estos delitos la decisin judicial habra
sido diversa.
Por ltimo, todos estos delitos de co-
hecho, violencia u otra maquinacin frau-
dulenta debieron haber sido investigados
y constatados en un proceso penal, el cual,
a su vez, termin mediante sentencia fir-
me o ejecutoriada.
da, esto es, aquella que ha declarado fal-
sos los documentos en que se fund la
primera. La naturaleza del juicio en que
deber pronunciarse la segunda senten-
cia podr ser civil o penal, sin que ello
tenga influencia en los resultados de la
revisin: lo nico que interesa, para los
fines del recurso, es que esta sentencia se
encuentre firme y que haya declarado la
falsedad de los referidos documentos.
Por ltimo, el fallo que declara la fal-
sedad de los documentos en que se fun-
d la sentencia que se trata de rever debe
ser posterior a sta, pues si fuere anterior
debi ser invocada por la parte a quien
beneficiaba en el juicio respectivo. Su si-
lencio lo sanciona la ley procesal con la
prdida del derecho a interponer recur-
so de revisin fundado en una causal evi-
dentemente extempornea.
621. Segunda causal. Si pronunciada
en virtud de pruebas de testigos, han sido s-
tos condenados por falso testimonio, dado es-
pecialmente en las declaraciones que sirvieron
de nicofundamento a la sentencia (art. 810,
N 2, CPC).
Tambin son tres los requisitos que
constituyen esta segunda causal de revi-
sin: 1) que la sentencia que se impug-
na haya sido pronunciada teniendo como
nico fundamento la prueba de testigos;
2) que dichos testigos hayan sido conde-
nados por falso testimonio por sentencia
ejecutoriada; y 3) que los testigos hayan
sido condenados precisamente por las de-
claraciones que sirvieron de nico fun-
damento a la sentencia impugnada de
revisin.
A diferencia de la causal anterior, aqu
se necesita que la prueba testimonial haya
sido el nico fundamento de la sentencia
que se trata de rever, de suerte que si la
sentencia se apoya en otros medios pro-
batorios, la causal en estudio es improce-
dente.
La sentencia condenatoria de los tes-
tigos por falso testimonio deber estar eje-
cutoriada y su exhibicin ser la prueba
precisa y directa de esta segunda causal
de revisin. Tambin, a diferencia de la
~ EDITORIAL jURIDICA Ole CHILE
Mario Casarino Viterbo
trata de rever, acompaando copia auto-
rizada de ella.
627. Plazo para interponer el recurso
de revisin. El recurso de revisin slo
podr interponerse dentro de un ao, con-
tado desde la fecha de la ltima notifica-
cin de la sentencia objeto del recurso
(art. 811, ine. 1, epC).
Se trata, por consiguiente, de un pla-
zo: 1) fatal, por la expresin "dentro de"
empleada por el legislador al establecerlo;
2) comn, porque se cuenta para todos los
litigantes desde la ltima notificacin; 3)
legal, porque est contemplado por la mis-
ma ley; 4) improrrogable, en atencin a que
los plazos legales tienen esta caracterstica,
a menos que la ley disponga expresamen-
te lo contrario, 10 que no se ha hecho con
este plazo para interponer revisin; y 5)
de ao, de suerte que pard computarlo no
se descuentan los feriados (art. 66 CPC) .
En cuanto al momento desde el cual se
cuenta este plazo de un ao, la redaccin
defectuosa del precepto legal en estudio
ha dado origen a ciertas dificultades. En
efecto, recordemos que este recurso proce-
de en contra de las sentencias firmes, en-
tendindose que una resolucinjudicial ha
adquirido este carcter, desde que se haya
notificado a las partes, si no procede recur-
so alguno en su contra; y, en caso contra-
rio, desde que se notifique el decreto que
la manda cumplir, una vez que terminen
los recursos deducidos, o desde que trans-
curran todos los plazos que la ley concede
para la interposicin de dichos recursos,
sin que se hayan hecho valer por las partes.
Por consiguiente, si la sentencia no es
susceptible de recurso alguno no habr dificul-
tad para computar el plazo de un ao, pues-
to que habr que hacerlo desde la fecha de
la ltima notificacin de la sentencia obje-
to del recurso de revisin; pero si esta sen-
tencia es objeto de algn otro recurso, sea
que se haya deducido o no, tambin ha-
br que computar el plazo de un ao des-
de la fecha de la ltima notificacin?
Evidentemente que no, pues si as fue-
re, quiere decir que se estara interpo-
niendo recurso de revisin en contra de
z
:::
m EDITORIAL JURIDICA DE CHIU
tar a las personas a quienes afecte dicha
sent.encia para que comparezcan en el
trmino de emplazamiento a hacer valer
su derecho (art. 813, ine. P, CPC).
Esta primera resolucin, pues, consta de
dos partes: la primera, que ordena traer a la
vista t.odos los antecedentes del juicio en
que recay la sent.encia impugnada; y la
segunda, que cita a todas las personas a
quienes dicha sent.encia afect.e, a fin de que
comparezcan a hacer valer su derecho.
Como se t.rat.a de una primera resolu-
cin dictada en una gestin judicial, ser
necesario notificarla personalmente (art. 40
CPC), y el o los notificados tendrn un
plazo para comparecer igual al sealado
para contest.ar la demanda en el juicio
ordinario (arts. 258 y 259 CPC); compa-
recencia que, en todo caso, deber efec-
tuarse por medio de abogado habilitado
o de procurador del nmero (art.s. 398,
ine. 1, COT, y 2, Ley N 18.120).*
Los t.rmites posteriores al vencimien-
to de este trmino se seguirn conforme
a 10 est.ablecido para la sust.anciacin de
los incidentes, oyndose al fiscal judicial"**
ant.es de la vista de la causa (art.. 813,
ine. 2, CPC).
En otras palabras, con lo expuest.o por
el recurrido o sin ello, el tribunal que est
conociendo del recurso de revisin lo re-
cibir a prueba por el trmino de ocho
das, en caso necesario. Vencido est.e tr-
mino, ordenar que pasen los anteceden-
t.es en vista al fiscal; y, evacuado el informe,
proveer "en relacin", con lo cual el re-
curso queda en estado de verse, de acuer-
do con las normas generales sobre vista
de la causa ante los t.ribunales colegiados.
Se recordar que del recurso de revi-
sin conoce la Corte Suprema por inter-
medio de la sala que se halle de turno
para el conocimiento de esta clase de ma-
t.erias (arts. 98, N 5,*** Y99 COT).
* Actualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
** Modificado, como aparece en el texto, por
el art. 2 de la Ley W 19.806, publicada en el Dia-
rio Oficial el 31 de mayo de 2002.
*** Modificado, como aparece en el texto, por
el arto l, N 13, letra a) de la Ley 1\0 19.708, publi-
cada en el Diario Oficial el 5 de enero de 2001.
223
rrente y odo el fiscal judicial",* ordenar que
se suspenda la ejecucin de la sentencia,
siempre que aqul d fianza bastante para
satisfacer el valor de lo litigado y los peIjui-
cios que se causen con la inejecucin de la
sentencia, para el caso de que el recurso sea
desestimado (art. 814, ine. 2, CPC).
En consecuencia, por excepcin el re-
curso de revisin suspende la ejecucin
de la sentencia impugnada en que concu-
rran los siguientes requisitos: 1) que lo pida
el recurrent.e; 2) que se oiga al minist.e-
rio pblico; 3) que las circunstancias as
10 aconsejen; y 4) que el recurrente rin-
da fianza bastante para satisfacer los per-
juicios que pudiere causar a su cont.endor
con la inejecucin de la sent.encia, para el
caso de que el recurso sea rechazado.
La suspensin de la sentencia impug-
nada, por consiguient.e, queda entregada
al buen crit.erio del t.ribunal llamado a co-
nocer del respectivo recurso de revisin, ya
que este derecho se lo ha conferido el le-
gislador en forma facultativa por la expre-
sin "podr" que emple al establecerlo.
Manual de Derecho Procesal
629. Su tramitacin. Una vez int.er-
puesto el recurso de revisin, el primer
examen que debe efectuar el tribunal lla-
mado a conocer de l es si ha sido inter-
puesto en tiempo o no.
Si se ha presentado fuera de plazo, se
rechazar el recurso de plano, o sea, sen-
cillamente no se admite a tramitacin (art.
811, ine. 2, CPC).
En caso contrario, esto es, si el recur-
so de revisin fue interpuesto dentro de
trmino, el tribunal llamado a conocer de
l lo admit.e a t.ramitacin, lo que se tra-
duce en la dictacin de la primera reso-
lucin, que ordenar que se t.raigan a la
vista t.odos los antecedentes del juicio en
que recay la sent.encia impugnada y ci-
* Modificado, como aparece en el texto, por
el arto 2 de la Ley 1\0 19.806, publicada en el Dia-
rio Oficial el 31 de mayo de 2002.
V. Tramitacin yJallo del recurso
de revisin
una sentencia que todava no habra ad-
quirido el carcter de firme o ejecutoria-
da. Lo anterior debe llevarnos a la con-
clusin de que una aplicacin armnica
de los artculos 174 y 811 del Cdigo de
Procedimiento Civil exige considerar que
el plazo de un ao, establecido en este
ltimo precepto, se cuenta desde que la
sentencia objeto del recurso de revisin
ha adquirido el carcter de firme; vale
decir, desde la notificacin del cmplase
en caso de haberse deducido recursos o
desd el vencimiento del plazo para in-
terponerlos en caso de que los tales re-
cursos no se hubieren deducido.
Recordemos t.ambin que las tres pri-
meras causales del recurso de revisin exi-
gen, ent.re ot.ros requisitos, la dictacin de
una sentencia firme sobre falsedad de do-
cumentos, peIjurio de los t.est.igos o cohe-
cho, violencia u otra maquinacin fraudu-
lenta; y que los juicios penales destinados
a constat.ar est.os delit.os pueden demorar:
qu suerte corre, en est.os casos, el recur-
so de revisin que ha debido ser int.er-
puesto dent.ro del plazo de un ao conta-
do desde que la sent.encia objet.o de l
haya quedado firme o ejecutoriada?
La solucin la da el legislador en
los siguient.es t.rminos: "Sin embargo,
si al t.erminar el ao no se ha an falla-
do el juicio dirigido a comprobar la fal-
sedad de los documentos, el perjurio
de los testigos o el cohecho, violencia u
otra maquinacin fraudulenta a que se
refiere el artculo anterior, bastar que
el recurso se int.erponga dentro de aquel
plazo, hacindose presente en l esta circuns-
tancia, y debiendo proseguirse inmedia-
tamente despus de obt.enerse senten-
cia firme en dicho juicio" (art. 811,
ine. 3, CPC).
628. Efectos del recurso de revisin.
Existe sobre ello una regla general y una
excepcin. En efecto, por regla general el
recurso de revisin no suspende la ejecu-
cin de la sentencia impugnada (art. 814,
ine. 1, CPC).
Podr, sin embargo, el tribunal, en vista
de las circunstancias, a peticin del recu-
222 EDITORIAL JURIDICA DE CHJlt
,
Mario Casarino Viterbo Captulo Sptimo
EL RECURSO DE INAPLlCABILIDAD*
SUMARIO: 1. Generalidades; II. Requisitos de procedencia del recurso
de inaplicabilidad; I1I. Interposicin del recurso de inaplicabilidad;
IV. Tramitacin del recurso de inaplicabilidad;
V. Fallo del recurso de inaplicabilidad; VI. La inaplicabilidad de oficio.
z
630. Su fallo. Podr ser de dos clases:
acogiendo el recurso de revisin o bien
rechazndolo.
a) Se dictar sentencia acogiendo el re-
curso de revisin cuando el recurrente lo-
gre, con arreglo a la ley, comprobar la
efectividad de los hechos en que se fun-
da (art. 815, inc. 1, CPC).
Esta sentencia deber contener diver-
sas declaraciones, a saber:
1a. Que el tribunal estima proceden-
te el recurso, o sea, que lo acoge;
2
a
Que se anula en todo o parte la
sentencia impugnada;
3
a
. Si debe o no seguirse nuevojuicio; y
4
a
Si debe seguirse nuevo juicio de-
ber, adems, determinar el estado en que
queda el proceso, el cual se remitir para
su conocimiento al tribunal de que pro-
cede (art. 815, incs. 1 Y2, CPC).
Las declaraciones anteriores, fuera de
su importancia intrnseca, revisten espe-
cial trascendencia, pues servirn de base
en el nuevo juicio, en el cual no podrn
ya ser discutidas (art. 815, inc. 3, CPC).
Ejemplo: se acoge un recurso de revi-
sin fundado en que la sentencia impug-
nada se bas en documentos declarados
EDITORIAL JURIOICA DE CHTLE 224
falsos por sentencia ejecutoriada dictada
con posterioridad a aqulla, y se declara
que debe procederse a dictar nueva sen-
tencia por el tribunal que corresponda;
en esta nueva sentencia no podrn consi-
derarse ms los ya referidos documentos.
Se acoge un recurso de revisin fun-
dado en que la sentencia impugnada fue
pronunciada contra otra pasada en auto-
ridad de cosajuzgada, la cual no fue opor-
tunamente alegada en eljuicio en que se
pronunci la primera de estas sentencias,
y S'' declara que no es necesario seguir
nuevo juicio, pues ste se encuentra fa-
llado a virtud de la primera sentencia.
b) Se dictar, en cambio, sentencia
rechazando el recurso de revisin cuando
el recurrente no logre, con arreglo a la
ley, comprobar la efectividad de los he-
chos en que se funda (a contrario sensu,
arto 815, inc. 10, CPC).
En este ltimo caso, fuera de la de-
claracin anterior, "se condenar en las
costas del juicio (debi decir del recurso)
al que lo haya promovido y se ordenar
que sean devueltos al tribunal que corres-
ponda los autos mandados traer a la vis-
ta" (art. 816 CPC).
I
I. Generalidades
631. Concepto. El recurso de inaplica-
bilidad es el medio que consagra la Cons-
titucin Poltica de la Repblica para que
determine que todo precepto legal con-
trario a ella sea declarado inaplicable, de-
claracin que puede hacer de oficio o a
peticin de parte en las materias de que
est conociendo o cuando se le solicite la
declaracin de inaplicabilidad de la ley en
recurso interpuesto en cualquier gestin
que se siga ante otro tribunal.
Su objeto, en consecuencia, es obte-
ner que un determinado precepto legal,
por estimrsele inconstitucional, sea de-
clarado inaplicable dentro de la gestin
en que dicho recurso incide; y, por consi-
guiente, su importancia no puede ser ms
manifiesta.
Se discute acerca de la verdadera deno-
minacin que debe drsele a este recurso,
o sea, si se llama recurso de inaplicabili-
dad o, por el contrario, de inconstitucio-
nalidad. La primera expresin, en verdad,
proporciona una idea ms exacta en cuan-
to a la finalidad que se persigue mediante
este recurso, y la segunda, en cambio, dice
relacin con su fundamento.
*Con la entrada en vigencia de la Ley N 20.050,
reforma constitucional que introduce diversas mo-
dificaciones a la Constitucin Poltica de la Rep-
blica, se reformula este recurso pasando su cono-
cimiento al Tribunal Constitucional. Segn la
norma transitoria decimosexta, las reformas intro-
ducidas al Captulo VIII "Tribunal Constitucional"
entrarn en vigor seis meses despus de la publica-
cin de dicha reforma, lo que ocurri el 22 de sep-
tiembre de 2005.
225
Pensamos que, en nuestro derecho,
la denominacin ms exacta es la de re-
curso de inaplicabilidad, puesto que ste es
su objeto preciso y determinado; y as lo
llaman nuestro legislador (art. 96, N 1,
COT) y la misma Corte Suprema en Auto
Acordado de 22 de marzo de 1932 y en
sus numerosos fallos.
632. Fuentes legales. Este recurso tie-
ne como fuente legal inmediata y directa
el artculo 80 de la Constitucin Poltica
de la Repblica, que dice: "La Corte Su-
prema, de oficio o a peticin de parte,
en las materias de que conozca o que le
fueren sometidas en recurso interpuesto
en cualquier gestin que se siga ante otro
tribunal, podr declarar inaplicable para
esos casos particulares todo precepto le-
gal contrario a la Constitucin. Este re-
curso podr deducirse en cualquier estado
de la gestin, pudiendo ordenar la Corte
la suspensin del procedimiento".
El precepto constitucional antes
transcrito est reglamentado en el Auto
Acordado de fecha 22 de marzo de 1932,
expedido por la Corte Suprema, y cuyo
texto es: "En Santiago, a 22 de marzo de
1932, se reuni la Excma. Corte Supre-
ma, en acuerdo eX,traordinario, presidi-
da por don Javier Angel Figueroa, y con
asistencia de los ministros seores: Oya-
nedel, Trucco, Novoa, Burgos, Alonso,
Schepeler, Rondanelli, Silva Cotapos,
Fontecilla y Hermosilla, y teniendo pre-
sente: Que ni la Constitucin ni las le-
yes procesales han reglamentado la
tramitacin a que debe someterse el re-
curso de inaplicabilidad que confiere el
artculo 86 de esa Carta; y, por consi-
EDITORIAL IURIDICA DE CHILE m
Mario Casarino Viterbo Manual de Derecho Procesal
guiente, se hace necesario fijarla para
asegurar la defensa a que tienen dere-
cho los interesados. Al respecto acuer-
da: Presentado el escrito, se confiere
traslado comn por siete das, aumenta-
dos con el emplazamiento que corres-
ponda, segn la tabla, a las dems partes
en el pleito. Transcurrido el plazo ante-
dicho con o sin la respuesta de los inte-
resados, se pasarn los antecedentes para
que dictamine el seor Fiscal; y evacua-
do el trmite se pondr la causa en ta-
bla para su vista y fallo como los otros
asuntos de que conoce el tribunal ple-
no. Para debido testimonio se levant la
presente acta que firman los SS.SS. Mi-
nistros y el Secretario (fdo.) J. A. Figue-
roa, etc. Claudio Droguett, Secretario".
633. Caractersticas del recurso de
inaplicabilidad. Sus caractersticas ms
esenciales son las siguientes:
a) Es un recurso que tiene por objeto
obtener que se declare que un determi-
nado precepto legal es inconstitucional y
que, por consiguiente, no se aplique en
la sentencia que tendr que pronunciar-
se en la gestin de que se trata; luego,
como se ve, difiere de los dems recursos
que siempre persiguen la impugnacin
de una determinada resolucin judicial;
b) Es un recurso extraordinario, en
atencin a que la causal o motivo que lo
justifica, cual es la existencia de una ley
inconstitucional que se pretende aplicar
en un determinado juicio, tambin es de
carcter extraordinario;
c) Es un recurso que se interpone ante
y para ante el mismo tribunal que va a
conocer de l, o sea ante y para ante la
Corte Suprema;
d) Es un recurso que no tiene plazo
para ser deducido y cuya reglamentacin
de su tramitacin, en vez de hallarla en la
ley, se encuentra en un Auto Acordado
de la Corte Suprema; y
e) Es un recurso establecido en el solo
inters de los litigantes; pero la existencia
de la causal que lo motiva, o sea, de una
ley contraria a la Constitucin, autoriza
tambin al tribunal para que, de oficio,
EDITORIAL JURI OleA DE CHILE 226
pueda declarar su inaplicabilidad en las
materias de que est conociendo.
f) En cuanto a los efectos de la decla-
racin de inaplicabilidad ellos estn indi-
cados en la misma disposicin constitu-
cional, al decir que la atribucin de la
Corte ser declarar inaplicable "para esos
casos particulares" todo precepto legal
contrario a la Constitucin. En otras pa-
labras, la ley sigue vigente, slo no se apli-
ca al caso particular de que ha conocido
la Corte Suprema, ya sea de oficio o por
va del recurso.
Cabe hacer presente que en la Comi-
sin de Estudios de la Nueva Constitu-
cin fue extensamente debatido el pro-
blema de los efectos de la declaracin de
inaplicabilidad, y se plante la posibili-
dad de que despus de tres fallos conse-
cutivos esta declaracin tuviera efectos
generales, posicin sostenida por el Con-
sejo de Estado que no prosper, puesto
que en el articulado final del Antepro-
yecto se elimin el inciso que contempla-
ba la posibilidad de los efectos generales
de la declaracin de inaplicabilidad en
ciertas circunstancias, y dej subsistente
en este aspecto el texto de la Constitu-
cin de 1925; y
g) El texto actual del artculo 80 de
la Constitucin Poltica del Estado auto-
riza a la Excma. Corte Suprema para de-
cretar la suspensin del procedimiento, lo que
significa una importante innovacin en
relacin con los efectos de la interposi-
cin del recurso de inaplicabilidad.
Analizando someramente la disposi-
cin constitucional anteriormente referi-
da, podemos concluir que la suspensin
del procedimiento tiene a su vez dos ca-
ractersticas:
En primer trmino es facultativa, o
sea, que la Corte Suprema no est obliga-
da a acceder a la peticin de suspensin
de la tramitacin de la gestin si se le
solicita; y en segundo trmino la Corte
Suprema puede ordenar la suspensin del
procedimiento de oficio.
634. Su verdadera naturaleza jurdi-
ca. Sealadas las principales caractersti-
cas del recurso de inaplicabilidad, cabe
preguntarse: es realmente un recurso?
Estimamos que un mejor estudio de
la institucin hace llegar a la conclusin
de que el encasillamiento de la inaplica-
bilidad dentro del rgimen jurdico de
los recursos no es exacta.
En efecto, recordemos que los recur-
sos son medios que la ley concede para
impugnar una resolucin judicial, a fin
de obtener su modificacin, revocacin
o invalidacin. Aqu, en cambio, no se
persigue impugnar resolucin alguna; lo
que se pretende conseguir es que un de-
terminado precepto legal, porque se le
estima inconstitucional, se le declare
inaplicable en el juicio de que se trata.
A nuestro juicio, la declaracin de la
inaplicabilidad de determinados precep-
tos legales, por estimrseles contrarios a
la Constitucin Poltica de la Repblica,
es ms bien una cuestin prejudicial de ca-
rcter constitucional y no un recurso.
Empero, de nuestra Carta Fundamen-
tal, de algunas leyes de la Repblica y del
Auto Acordado de 22 de marzo de 1932
se desprende que no puede sostenerse
en nuestro derecho positivo la conclusin
anterior, la cual slo revestir, entonces,
el carcter de doctrina.
635. Antecedentes histricos del re-
curso de inaplicabilidad. Este recurso
debe su creacin al derecho moderno, por-
que por muchos esfuerzos que se gasten
no se hallan vestigios de l en la legisla-
cin griega ni en la romana. Tal vez po-
dra encontrarse un pequeo esbozo
acerca de la declaracin de inconstitu-
cionalidad de las leyes entre las variadas
atribuciones que posea el Arepago o
conjunto de ancianos notables y vitalicios.
En realidad, en los Estados Unidos de
Norteamrica es donde este recurso se pre-
senta con caracteres definidos, siendo su
fuente legal inmediata el artculo 30 de
la Constitucin Poltica de 1787, que dice:
"El Poder judicial se extender a todos
los casos, ya de justicia, ya de equidad,
previstos en esta Constitucin, en las le-
yes de los Estados Unidos y en los trata-
227
dos hechos o que se hicieren bajo su au-
toridad". Un caso se presentar, pues,
cuando se discuta la constitucionalidad
de una ley o de un tratado ante los tribu-
nales de justicia.
Pero la Ley de Organizacin y Atri-
buciones de los Tribunales de 1789, de
ese mismo pas, fue ms explcita al res-
pecto, cuando estableci "Que correspon-
de al Poder judicial conocer de la validez
de una ley o de la autoridad ejercida bajo
el poder del Estado por creerlo contrario
a la Constitucin, a los Tratados o a las
Leyes de los Estados Unidos... ".
La jurisprudencia se encarg despus
de perfeccionar este recurso, y, en lneas
muy generales, podemos decir que: a) su
conocimiento es de la competencia ex-
clusiva de la Corte Suprema; y b) la de-
claracin de inconstitucionalidad slo
produce efecto entre las partes y en el
juicio para el cual fue solicitada.
En Chile la Constitucin Poltica de 1833
no contuvo precepto alguno que faculta-
ra al Poder judicial para pronunciarse
acerca de la constitucionalidad o incons-
titucionalidad de las leyes. De ah que la
Corte Suprema siempre estim que care-
ca de atribuciones para hacer declara-
ciones semejantes; pues, de hacerlo,
invada las atribuciones de los dems Po-
deres Pblicos.
A pesar de ello la Corte Suprema en
una ocasin dej de aplicar los incisos 2
y 3 del artculo 25 de la Ley de Organiza-
cin y Atribuciones de los Tribunales, en
atencin a que, en su elaboracin, no se
haban observado las normas constitucio-
nales respectivas, o sea, por tratarse de una
inconstitucionalidad formal. Tambin al-
gunas Cortes de Apelaciones prescindie-
ron de la aplicacin de determinados
preceptos legales, cuando stos aparecan
en contradiccin con lo dispuesto en la
Constitucin Poltica de la Repblica, la
cual, a juicio de ellas, deba constituir la
ley suprema.
Fue, pues, la Constitucin Poltica de
1925 la que en el inciso 2 del artculo 86
puso trmino a esta situacin incierta que
exista sobre la suerte que deban correr
f.DITORiAL jURI DICA DE CHILE
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Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
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640. Quin puede interponerlo? La
Constitucin Poltica se preocup exclu-
sivamente de sentar las lneas fundamen-
tales del recurso, de suerte que no seal
normas sobre este particular. Tampoco el
legislador ha tratado de subsanar este va-
co dictando una ley especial al respecto.
Por consiguiente, slo cabe recurrir
a la aplicacin de los principios genera-
les y recordar que en todos los recursos
fOllORIAL JURIDICA DE CHILE ~
judicial, debe ser entregado a cualquier
tribunal o solamente al tribunal supremo?
Nuestros constituyentes del ao 1925
optaron por entregar el conocimiento y
fallo de este recurso al Poder Judicial, y
dentro de l, con competencia exclusiva,
a la Corte Suprema. La Constitucin Polti-
ca de 1980, al igual que el texto de 1925,
inicia el artculo SO indicando en forma
expresa que es la Corte Suprema el tri-
bunal que tiene competencia exclusiva
para conocer del recurso de inaplicabili-
dad, reafirmando que el conocimiento y
fallo de este recurso le corresponde al
Poder Judicial. Justificando este sistema,
don Eliodoro Yez expres: "El da que
se entregue esta facultad a los jueces o
Cortes de Apelaciones, se producira una
grave perturbacin en la Administracin
de Justicia".
En consecuencia, el recurso de inapli-
cabilidad se interpone ante la Corte Su-
prema y para ante este mismo tribunal.
La Corte Suprema conocer del recurso,
por expresa disposicin de la ley, en Ple-
no (art. 96, N l, COT).
Cabe sealar que en la Comisin de
Estudios de la Nueva Constitucin se plan-
te, especficamente, el problema de si
la Corte Suprema poda o no conocer en
sala una inaplicabilidad planteada de ofi-
cio o a peticin de parte. Al respecto se
desestim la posibilidad de que la Corte
Suprema conociera de esta materia en
sala, toda vez que era presupuesto bsico
para que se diera esta forma de conoci-
miento que la declaracin de inaplicabi-
lidad tuviera en ciertos casos efectos
generales, posicin que como vimos an-
teriormente no logr prosperar.
229
639. Ante quin y para ante quin se
interpone? Al legislador que desea esta-
blecer el recurso de inaplicabilidad se le
plantean dos importantes problemas re-
lacionados con la anterior interrogante:
a) debe entregar su conocimiento a cual-
quier poder pblico o solamente al judi-
cial?; y b) en el supuesto de entregarlo al
111. Interposicin del recurso
de inaplicabilidad
titucionales sobre creacin u organizacin
de los poderes pblicos, cuanto los que
amagan las garantas individuales.
638. Inconstitucionalidad de forma.
Se entiende, en cambio, que un precep-
to legal es inconstitucional en cuanto a
la forma cuando en su elaboracin no se
han respetado las disposiciones conteni-
das en la Constitucin sobre la forma-
cin de las leyes. Ejemplo: se aprueba un
proyecto de ley en la Cmara de Diputa-
dos y se omite la aprobacin del Senado
y, sin embargo, el ~ u t i v o procede a pro-
mulgarlo como ley de la Repblica.
Se ha pretendido por algunos que los
preceptos legales que en su gestacin con-
tienen claros vicios formales no constitu-
yen verdaderas leyes y que, por consi-
guiente, escapan al campo de actuacin
del recurso de inaplicabilidad, debiendo
los tribunales limitarse a prescindir de
ellos.
Sin embargo, el artculo 80 de la Cons-
titucin Poltica no hace distingo alguno
acerca de la manera como un precepto
legal puede ser contrario a ella; de modo
que no habr razn para no incluir la
inconstitucionalidad formal entre los fun-
damentos del recurso de inaplicabilidad.
A mayor abundamiento, la Carta Funda-
mental tiende a garantizar tanto el con-
tenido de las leyes cuanto su correcta
generacin, de suerte que todo lo que
persiga el mantenimiento del orden cons-
titucional debe ser admitido, para que as
las normas jurdicas vuelvan a su cauce
normal.
Tampoco importa determinar lajerar-
qua, clase o categora del tribunal ante
el cual est pendiente la gestin, ni me-
nos su naturaleza, pues podr ser tanto
un tribunal ordinario cuanto un arbitral
o especial.
En seguida, es preciso que en la ges-
tin de que se trate se pretenda aplicar
cualquier precepto legal contrario a la
Constitucin. En relacin con este requi-
sito los constitucionalistas analizan los si-
guientes puntos:
/ 1) Concepto de precepto legal;
, 2) Contradiccin entre el precepto le-
gal y la Constitucin;
3) Que el precepto legal contrario a
la Constitucin se pretenda aplicar a la
gestin pendiente; y
4) Formas en que un precepto legal
puede ser contrario a la Constitucin.
y cabe ahora preguntarse: de cun-
tas maneras un precepto legal puede ser
contrario a la Constitucin?
La doctrina distingue entre la incons-
titucionalidad de fondo y la de forma, la
que pasamos a analizar.
637. Inconstitucionalidad de fondo.
Se entiende que un precepto legal es in-
constitucional en cuanto al fondo cuando
es contrario a la letra o al espritu de
cualquiera disposicin de carcter consti-
tucional.
Se trata, por consiguiente, de una ley
que en su elaboracin se ha ajustado es-
trictamente a la Constitucin Poltica de
la Repblica, pero que en cuanto a su
contenido atenta en contra de cualquie-
ra de los preceptos constitucionales.
Ahora bien, hay algunos de estos pre-
ceptos que tienen como misin crear y
organizar los poderes pblicos, y otros
destinados a enumerar y reconocer de-
terminados derechos, los cuales reciben
el nombre de garantas individuales.
Desde el momento en que el artculo
80 de la Constitucin Poltica no hace
distingo en cuanto a los preceptos lega-
les contrarios a ella, quiere decir que po-
drn ser declarados inaplicables, tanto los
que atentan en contra de las normas cons-
las leyes inconstitucionales frente a los
tribunales de justicia, al crear el corres-
pondiente recurso de inaplicabilidad y fa-
cultar al Tribunal Supremo para que en
los casos particulares de que conociera
dejara de aplicar aquellas leyes que, a su
juicio, fueren inconstitucionales.
Finalmente, la Constitucin Poltica de
1980 consagra en el artculo 80 el recur-
so de inaplicabilidad en los trminos que
se pasarn a analizar a continuacin.
11. Requisitos de procedencia del recurso
de inaplicabilidad
636. Cules son? De acuerdo al cla-
ro tenor literal del artculo 80 de la Cons-
titucin Poltica de la Repblica, los re-
quisitos para que proceda el recurso de
inaplicabilidad son:
a) Que exista una gestin pendiente
que se siga ante otro tribunal o ante la
propia Corte Suprema deJusticia; y
b) Que en dicha gestin se pretenda
aplicar un precepto legal cualquiera, con-
trario a la Constitucin.
Por la expresin "gestin" el consti-
tuyente de 1980 ampli la extensin de
la norma de la Constitucin de 1925 que
usaba la expresinjuicio, con lo cual pro-
cede, actualmente, el recurso de inapli-
cabilidad en el caso de una queja o en
casos de jurisdiccin voluntaria.
Ahora bien, esta gestin debe hallar-
se pendiente para que pueda deducirse v-
lidamente un recurso de inaplicabilidad;
y lo estar siempre que se hubiere inicia-
do en la forma antes expresada y no hu-
biere terminado a virtud de sentencia
firme o ejecutoriada. No importa, pues,
la instancia en que se encuentre la ges-
tin, ni menos si est recurrido de casa-
cin, o de queja, o est siendo revisado
por va de consulta: slo lo que interesa
es que se halle pendiente, esto es, no ter-
minada, ya sea que se encuentre pendien-
te ante otro tribunal (caso del recurso de
inaplicabilidad) o bien ante la propia Cor-
te Suprema (caso de la peticin de inapli-
cabilidad) .
EDITORIAL JURIDICA DECHllL 228
n
Mario Casarino Viterbo Manual de Derecho Procesal
su interposicin corre a cargo de la parte
agraviada.
Interpondr, pues, el recurso de inapli-
cabilidad todo aquel que figure como par-
te en el juicio de que se trate y que
experimente un peJjuicio con la aplica-
cin de la ley inconstitucional en el plan-
teamiento de su accin, segn el caso.
El recurrente tendr, en consecuen-
cia, que preocuparse de demostrar que
el precepto legal cuya aplicacin no de-
sea que se haga en el juicio es inconstitu-
cional, sea en el fondo o en la forma, y
que esa posible aplicacin influir en la
aceptacin o rechazo de sus derechos que
ha hecho valer judicialmente.
A su vez, el recurso de inaplicabili-
dad podr ser deducido por la parte, o
por su apoderado en el juicio en que inci-
de, puesto que ste acta del mismo modo
en que podra hacerlo el poderdante. Eso
s que tendr que preocuparse de acredi-
tar su personera, ya que no existe vincu-
lacin material alguna entre el juicio y el
recurso que se pretende deducir.
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641. Forma de interponer el recurso.
Se interpondr por escrito, de acuerdo a
los principios generales sobre la forma
de nuestras actuaciones judiciales y, en
especial, a lo que prescribe el Auto Acor-
dado de 1932.
Dicho escrito, tanto en su presenta-
cin cuanto en su contenido, se ajustar
tambin a las normas generales que ya
conocemos, a falta de disposiciones lega-
les especiales en contrario. Sin embargo,
la prctica exige que debe mencionar ex-
presa y determinadamente:
a) El juicio en que recae el recurso
indicando el tribunal, nmero de orden,
materia sobre que versa, partes litigantes
y estado en que se encuentra;
b) Nombre, domicilio y profesin u
oficio de las partes litigantes;
c) El precepto o preceptos legales que
se estiman contrarios a la Constitucin y
cuya declaracin de inaplicabilidad se pre-
tende; y
d) Las razones que demuestran la in-
constitucionalidad de los antedichos pre-
WITORIAL JURIDICA DE CHIlE 230
ceptos legales y su influencia en la deci-
sin del juicio.
Deber, adems, conferirse poder o
delegarlo, segn el caso, en un procura-
dor del nmero, o designar un abogado
habilitado desde el momento en que ante
la Corte Suprema slo se puede compa-
recer en esta forma (arts. 398, inc. 10,
COT Y2 Ley N 18.120); abogado habi-
litado para ejercer la profesin que tam-
bin se har cargo del patrocinio del
r ~ u r r n t (art. 2 Ley N 18.120).
642. Oportunidad para interponer-
lo. Dispone el precepto constitucional
que consagra este recurso que podr
interponerse "en cualquier estado de la ges-
tin".
En consecuencia, la gestin podr ha-
llarse en nica, primera o segunda ins-
tancia; o en va de casacin o de queja.
Como se ve, el espritu del constituyente
ha sido facultar a las partes para interpo-
ner el recurso de inaplicabilidad en cual-
quier momento de la gestin, o sea,
siempre y cuando el fallo que pueda re-
caer en aqul pueda ser oportunamente
utilizado en sta.
643. Efectos. Agrega el mismo texto
constitucional que la Corte Suprema pue-
de ordenar la suspensin del procedimiento,
lo que constituye una importante innova-
cin en relacin con los efectos de la in-
terposicin del recurso de inaplicabilidad.
Al respecto cabe destacar que es facultati-
vo para el Tribunal Supremo acceder o
no a la suspensin del procedimiento; y
por otra parte se deduce tambin del tex-
to constitucional que dicha suspensin
puede decretarla la Corte Suprema de ofi-
cio. El hecho de que la suspensin del
procedimiento sea facultativa para el Tri-
bunal Supremo tiene como fundamento
la idea del legislador de evitar la paraliza-
cin de la gestin en que incide, toda vez
que de no ser as se transformara nada
ms que en una herramienta para que
los peticionarios paralizaran la gestin so-
bre la que recae.
IV. Tramitacin del recurso
de inaplicabilidad *
644. Primera resolucin. Interpuesto
el recurso, en la forma que hemos sea-
lado anteriormente, la Corte Suprema
procede a pronunciar la primera resolucin,
que no es otra que un simple "traslado".
Traslado significa poner el recurso de
inaplicabilidad en conocimiento de las
dems partes litigantes en el juicio, las
cuales, para los efectos del recurso, des-
empearn el papel de partes recurridas,
con el objeto de que expresen lo que
estimen conveniente a su derecho.
Este traslado es por seis das, plazo
que presenta las siguientes caractersticas:
a) es comn, o sea, si hay dos o ms
partes recurridas, corre desde la ltima
notificacin;
b) es susceptible de aumento, de con-
formidad a los plazos contenidos en la
tabla a que alude el artculo 259 del C-
digo de Procedimiento Civil; y
c) sin ser fatal, su solo vencimiento per-
mite continuar en la tramitacin del re-
curso, no siendo necesario acusar la
correspondiente rebelda y a pesar de no
haberse evacuado el trmite de responde.
Como toda primera resolucin pro-
nunciada dentro de un recurso, que no
es conocido por el tribunal ante el cual
se sigue el juicio, deber notificarse perso--
nalmente al litigante a quien haya de afec-
tar en sus resultados.
A quin se notifica? A la parte o a
su apoderado? En estricto derecho debe
notificarse al apoderado, desde el mo-
mento en que se trata de una resolu-
cin recada en la tramitacin de un
recurso deducido en juicio. Pero en aten-
cin a la naturaleza sui generis de este
recurso, o sea, a la falta de vinculacin
material entre ste y la gestin misma,
se acostumbra notificar la primera reso-
lucin que recae en el recurso de inapli-
* El recurso de inaplicabilidad se encuentra re-
glamentado en el Auto Acordado de fecha 22 de
marzo de 1932, expedido por la Corte Suprema.
Actualizado Depto. D. Procesal U. de Chile.
231
cabilidad a la parte litigante en persona,
prescindiendo del apoderado que en l
haya constituido.
645. Curso posterior del recurso. Una
vez evacuado el traslado, vale decir, el es-
crito de responde que deber presentar la
parte litigante recurrida, se ordena pasar
los antecedentes al Fiscal para que dicta-
mine.
Igual orden se dictar en caso de que
el escrito de responde no haya sido pre-
sentado dentro de trmino, pues el Auto
Acordado de 1932 dispone que "transcu-
rrido el plazo antedicho, con o sin res-
puesta de los interesados, se pasarn los
antecedentes para que dictamine el se-
or Fiscal".
Evacuado el trmite del Fiscal, se pro-
veer autos en relacin; y notificada legal-
mente esta resolucin, los autos quedan
en estado de tabla, para su vista y fallo,
como los dems asuntos de que conoce
el tribunal en pleno.
V. Fallo del recurso de inaplicabilidad
646. Fallo que acoge el recurso. La
Corte Suprema acoger el recurso si coin-
cide con el recurrente en la apreciacin
de que el precepto legal que se pretende
aplicar en la gestin actualmente pendien-
te es inconstitucional, haciendo declara-
cin expresa en este sentido.
Este fallo se pronuncia en nica ins-
tancia, por cuanto ya no es susceptible de
ninguna otra clase de recursos; y sus efec-
tos, como se comprende, se producen ex-
clusivamente dentro de la gestin para el
.cual fue interpuesto, empleando los tr-
minos constitucionales "para ese caso".
Ser necesario, por consiguiente, po-
nerlo en conocimiento del tribunal que
est conociendo de la gestin, oficindo-
le al efecto, a objeto de que se abstenga
de aplicar el precepto legal que ha sido
declarado contrario a la Constitucin.
Sin embargo, ese tribunal conserva
siempre plenas atribuciones en orden a
la sustanciacin, fallo y ejecucin del plei-
EDITORIAL jURlDICA DE CHILE m
Mario Casarino Viterbo
to con una sola y excepcional limitacin:
no podr utilizar en aqul el precepto
legal que la Corte Suprema declar inapli-
cable o inconstitucional.
y si, en el hecho, aplica este precepto
legal, qu medios tiene el litigante agra-
viado para obtener la reparacin de esta
i ~ u s t i c i A nuestro juicio, no le queda
otro camino que deducir los recursos or-
dinarios y extraordinarios que procedan,
a fin de que el tribunal superior enmien-
de el error o la falta del inferior, esto es,
prescinda de la aplicacin del precepto
legal declarado inaplicable; todo ello sin
peIjuicio de la responsabilidad penal del
juez por haber fallado contra ley expresa
(arts. 223 y siguiente C. Penal).
647. Fallo que niega lugar al recurso.
A la inversa, la Corte Suprema desechar
el recurso cuando estime, contra lo soste-
nido por el recurrente, que el precepto
legal cuya constitucionalidad se impugna
no es contrario a la Constitucin.
Como en el caso anterior, esta sen-
tencia se dicta en nica instancia; y sus
efectos, lo mismo que los de toda senten-
cia judicial, se limitan a la causa en que
actualmente se hubiere pronunciado.
En atencin a que el tribunal que est
conociendo de la gestin, hasta esos mo-
mentos, no ha tenido conocimiento de
la interposicin del recurso de inaplica-
bilidad, pensamos que, en caso de ser ste
rechazado, nada hay que comunicarle.
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650. Los actos procesales. Sin embar-
go, la cuestin controvertida en juicio se
manifiesta y desarrolla mediante una se-
rie compleja de actos jurdicos -actos pro-
cesales o de procedimiento, como tambin
se les llama- y en que son actores las par-
tes, el juez y los funcionarios auxiliares.
Desde el punto de vista dinmico,
pues, el juicio viene siendo un conjunto
de actos procesales o de procedimiento,
encadenados unos a los otros, en un or-
den armnico y previo sealado por la
misma ley.
En ltimo trmino, el Derecho Pro-
cesal es el que determina los diversos ac-
tos que forman el juicio y el orden o la
armona en que dichos actos van desa-
rrollndose, de acuerdo a la naturaleza
de la accin deducida; o sea, el procedi-
miento a que aqul debe ajustarse.
En todo caso, cualquiera que sea la
naturaleza de la accin y, por consiguien-
te, el procedimiento a observar en el jui- :":
EDITORiAL JURIDICA DE CHILE m
esenciales para la validez del juicio, por-
que, si bien pueden faltar, no por eso
ste desaparece o deja de ser tal.
Ahora bien, tanto los elementos cons-
titutivos del juicio cuanto aquellas condi-
ciones esenciales para su validez se
conocen en doctrina con la denominacin
de presupuestos procesales; y la relacin ju-
rdica que se forma entre las partes, y
entre stas y el tribunal, con el nombre
de relacin jurdica procesal. Por consiguien-
te, para que la relacin jurdica procesal
produzca todos sus efectos legales ser
necesario que el juicio, a la cual ha dado
origen, se ajuste, en todo, a los presu-
puestos procesales ya sealados.
233
Captulo Octavo
LA NULIDAD PROCESAL
SUMARIO: 1. Generalidades; 11. Fonnas en que puede hacerse valer y declararse
la nulidad procesal; III. La nulidad civil y la nulidad procesal.
1. Generalidades
649. Juicio, causa o pleito. Recorde-
mos que juicio, causa o pleito es toda con-
troversiajurdica y actual producida entre
dos o ms personas y que se somete a la
decisin de un tribunal; y que el juicio,
como institucin jurdica que es, consta
de elementos constitutivos y de condicio-
nes esenciales de validez.
Los elementos constitutivos del juicio son
tres:
a) la contiendajurdica actual;
b) las partes entre las cuales se pro-
duce y desarrolla la contienda; y
c) el tribunal llamado a conocerla,
sustanciarla y resolverla en definitiva. Se
les llama elementos constitutivos porque
su falta implica la inexistencia del juicio
o bien, su desnaturalizacin en una insti-
tucin diferente. Empero cada uno de
estos elementos desempea un papel di-
verso: la contienda constituye el objeto
del juicio; las partes impulsan la contro-
versia manifestndola, desarrollndola y
ponindole trmino; y, por fin, el juez o
tribunal que resuelve la contienda me-
diante la dictacin de la sentencia. Mien-
tras ste es esencialmente pasivo, aqullas
actan en forma activa.
En cambio, son condiciones esenciales
para la validez del juicio:
a) la competencia del tribunal llama-
do a resolver la contienda;
b) la capacidad de las partes litigan-
tes para comparecer en l;
c) la observancia de las solemnidades
prescritas por la ley para la validez de los
diversos actos que lo forman. Se les lla-
ma, como se comprende, condiciones
rias de que conozca, o que le fueren so-
metidas en recurso interpuesto en cual-
quier gestin que se siga ante otro
tribunal, podr declarar inaplicable para
esos casos particulares todo precepto le-
gal contrario a la Constitucin".
Se trata, por consiguiente, de una fa-
cultad de oficio, esto es, que no requiere
peticin alguna de parte interesada; y ser
ejercida por la Corte Suprema en los ca-
sos particulares de que conozca, o sea,
en l.os juicios que estn pendientes del
coocimiento de dicha Corte.
Sabemos que un juicio puede estar
sometido al conocimiento de la Corte Su-
prema por va de incidencia, de apela-
cin, de casacin en la forma, de casacin
en el fondo, de revisin y de queja; en
cualquiera, pues, de estas oportunidades
procesales la Corte Suprema podr de-
clarar inaplicable, para ese caso, un de-
terminado precepto legal contrario a la
Constitucin.
Como toda facultad de oficio que se
entrega a un tribunal, ser ejercida pru-
dencialmente, sin que sea imperativo for-
mular declaraciones de inaplicabilidad de
preceptos legales contrarios a la Consti-
tucin.
y si el juicio pende de alguna de las
salas en que se divide la Corte Suprema,
que sern los casos de ordinaria ocurren-
cia, pueden ellas declarar la inaplicabili-
dad de oficio?
Pensamos que si el recurso de inapli-
cabilidad es del conocimiento del tribu-
nal pleno, las salas no podran declarar la
inaplicabilidad de oficio, y que, en pre-
sencia de un caso en el cual se pretenda
aplicar un precepto legal contrario a la
Constitucin, no les quedara ms cami-
no que dar cuenta al pleno, para que
adoptara la resolucin que creyere de de-
recho.
232
VI. La inaplicabilidad de oficio
648. Concepto. La inaplicabilidad de
oficio la consagra el mismo artculo 80
de la Constitucin Poltica de la Repbli-
ca al disponer que "La Corte Suprema,
de oficio o a peticin de parte, en las mate-
~ EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
Mario Casarino Viterbo
Manual de Derecho Procesal
657. La declaracin de nulidad de ofi-
cio. Es aquella declaracin que hace el
EDIlOR1Al JURIDlCA DE CHILE ~
z
~
::3
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cio, lo cierto es que hay actos procesales
destinados a or al actor, al demandado y
al juez. El acto procesal inicial del pleito
es la demanda, luego le sigue la contesta-
cin y en seguida viene la sentencia, que
es el acto procesal de trmino.
651. La nulidad procesal como sancin
de los actos procesales irregulares. Hemos
dicho que el juicio consta de diversos ac-
tos procesales desarrollados en un orden
armnico y preestablecido en la ley. Pues
bien, el elemento ms simple del juicio es
el acto procesal aislado; por ejemplo, la
notificacin de la demanda, la declaracin
de un testigo, la sentencia, etc.
Pero estos actos procesales no se lle-
van a efecto de conformidad al mero ca-
pricho de las partes o del juez; por el
contrario, su ejecucin se ajusta a claros
requisitos o condiciones de orden legal,
los que a veces son generales para toda
clase de actos procesales, y otras, especia-
les, para determinada clase de ellos.
Ahora bien, establecido que los actos
procesales deben ajustarse a determina-
dos requisitos o condiciones legales, cabe
preguntarse: qu sancin tienen estos ac-
tos procesales ejecutados con omisin de
tales requisitos o condiciones legales?
Desde un punto sustantivo o material,
la sancin no puede ser otra que la nulidad
del acto, puesto que sabemos que es nulo
todo acto o contrato a que falta alguno de
los requisitos que la ley prescribe para el
valor del mismo acto o contrato, segn su
especie y la calidad o estado de las partes;
nulidad que todava puede ser de dos cla-
ses, absoluta o relativa (art. 1681 CC).
En derecho procesal, la sancin a apli-
car tambin tendr que ser la nulidad del
acto, ya que por nulidad se entiende el
hecho de privar de todo efecto jurdico
al referido acto como si jams hubiere
existido; pero buen cuidado hemos de
tener en precisar que se trata de una nu-
lidad procesal y no civil, las cuales no es
posible confundir.
Razones de orden doctrinario y legal,
en todo caso, abonan y justifican la exis-
tencia de la nulidad procesal.
EDITORiAl jURIDICA DECHILE 234
652. Fundamentos doctrinarios de la
nulidad procesal. Los actos humanos pro-
ducen efectos jurdicos por s solos; es la
ley la que viene a atribuirles determina-
dos efectos siempre y cuando en su eje-
cucin se ajusten a ella.
La ley, en consecuencia, se encarga
de sealar para cada acto en particular
los elementos o condiciones de existen-
cia e igualmente los necesarios para su
validez, otorgndoles la correspondiente
proteccin jurdica solamente a aquellos
~ t que se cian a ella.
Por el contrario, los actos ejecutados
con prescindencia de los preceptos lega-
les carecen de proteccin jurdica, se les
desconoce eficacia legal y terminan por
considerrseles comojams ejecutados, o
sea, nulos.
Si esta sancin, llamada nulidad, ope-
ra de manera indiscutible en materia ci-
vil, no se ve la razn por la cual tampoco
deba aplicarse en materia procesal, tal vez
ms formalista que la ley sustantiva al se-
alar los requisitos o condiciones esen-
ciales de los actos que reglamenta.
A mayor abundamiento, la ley proce-
sal es fundamentalmente imperativa, de
suerte que su infraccin llevar siempre
implcita la sancin de nulidad para el
acto realizado sin sujecin a los requisi-
tos o condiciones que ella seala o exige.
653. Fundamentos de derecho positi-
vo de la nulidad procesal. Si se examina
cualquier ordenamiento legal encargado
de regular el proceso, se observar, fcil-
mente, que todos sus preceptos estn ela-
borados en forma tal que la inobservancia
de la ley debe estar sancionada con la
nulidad de los actos procesales ejecuta-
dos en condiciones irregulares.
Cierto es que no existe en la mayora
de los Cdigos de Procedimiento Civil;
por ejemplo, en el nuestro, una disposi-
cin legal que, con caracteres de preci-
sin y generalidad, establezca la nulidad
como sancin para los actos procesales
irregulares, al igual que acontece con el
Cdigo Civil (art. 1681); pero no pode-
mos desconocer que esta sancin de la
nulidad fluye, de una manera natural, de
diversos preceptos contenidos en el pri-
mero de los Cdigos antes nombrados.
As, por va de ejemplo, sealamos los
artculos 55, 69, 80, 84, 85, 86, 182, 234,
433, 768, N 9, etc.; y estamos ciertos que
nadie podr pensar que se trata de casos
aislados de nulidad procesal sino, por el
contrario, de manifestaciones evidentes
de un principio general, segn el cual
todo acto procesal que en su ejecucin
no se ajuste a los requisitos o condicio-
nes legales, deber considerrsele priva-
do de toda eficaciajurdica, o sea, nulo.
Pudo haberse contemplado una fr-
mula de carcter general; pero su falta,
repetimos, no autoriza para pensar que
nuestro legislador ha descartado la nuli-
dad procesal como sancin de los actos
procesales irregulares.
654. Efectos de la nulidad procesal.
Los efectos de la nulidad procesal son
especialsimos por la naturaleza tambin
especial de los actos a quienes ella afec-
ta: junto con hacer desaparecer el acto
procesal cuya nulidad se ha declarado,
echa por tierra todos aquellos dems ac-
tos procesales posteriores y consecuencia-
les del acto nulo.
Ejemplo: se anula la notificacin de
la resolucin que recibi la causa a prue-
ba y, por consiguiente, tampoco es vlida
la prueba que ha podido rendirse con
posterioridad.
En realidad no existe frmula de ca-
rcter general que establezca un principio
semejante, pero se llega a su aplicacin
teniendo en consideracin que los actos
procesales no son algo aislado, sino el uno
consecuencia y, a su vez, antecedente del
otro.
Hay veces que los actos procesales pro-
ducen un doble efecto: uno, de carcter
estrictamente procesal; y otro, de carc-
ter sustantivo o material. Ahora bien, si
se anula dicho acto, no solamente des-
aparece para los efectos procesales, sino,
adems, para los de orden sustantivo o
material, porque stos son consecuencia
de aqullos. Ejemplo: se anula la notifi-
cacin de una demanda; no solamente
falta el emplazamiento del demandado,
sino que, adems, esta notificacin no ha
tenido la virtud de interrumpir la pres-
cripcin.
11. Formas en que puede hacerse valer
y declararse la nulidad procesal
655. Premisa fundamental. Nos corres-
ponde, ahora, estudiar los medios que
franquea la ley para reclamar y obtener
la declaracin de nulidad de los actos pro-
cesales; pero antes es previo establecer
dos reglas fundamentales sobre la mate-
ria, de carcter general, que son:
a) La nulidad de los actos procesales
slo puede obtenerse dentro del mismo
juicio del cual ellos forman parte y por
medio de los recursos que la ley se encar-
ga de establecer; y
b) Estos recursos que la ley concede
para invalidar los actos procesales slo pro-
ceden mientras est pendiente el juicio
del cual stos forman parte, o sea, antes
que la sentencia definitiva que le ponga
trmino adquiera el carcter de firme o
ejecutoriada y goce, en consecuencia, de
la autoridad de la cosajuzgada.
Se entiende que los principios anterio-
res, por ser reglas generales, sufren excep-
ciones, las cuales veremos oportunamente.
656. Cules son estos medios lega-
les? La doctrina los clasifica en medios
directos e indirectos. Medios directos son
aquellos que atacan derechamente el acto
procesal que se pretende invalidar. Ellos
son: la declaracin de nulidad de oficio,
el incidente de nulidad y el recurso de
casacin en la forma. Medios indirectos son
aquellos que persiguen la nulidad del acto
procesal como consecuencia de otra de-
claracin. Ellos son la apelacin, la repo-
sicin y la queja.
A continuacin estudiaremos cada uno
de estos medios directos en particular.
235
s
6
~
Mario Casarino Viterbo Manual de Derecho Procesal
236
juez de propia iniciativa, anulando todo
lo obrado, cuando estima que la relacin
procesal se halla viciada.
Sus fundamentos legales son los artcu-
los 83, 84, 85 Y86 del Cdigo de Procedi-
miento Civil.
Esta declaracin de nulidad la puede
hacer el tribunal durante todo el curso
del juicio, pero constreido por dos gran-
des limitaciones, a saber: siempre que no
se haya notificado la sentencia a alguna
de las partes (art. 182, inc. P, CPC) y
siempre que no hubiere vencido la opor-
tunidad que las mismas partes litigantes
tenan para reclamar de dicha nulidad
procesal.
La primera limitacin es una conse-
cuencia del principio del desasimiento, o
sea, que pronunciada una sentencia defi-
nitiva o interlocutoria y notificada a algu-
na de las partes, no podr el tribunal que
la dict alterarla o modificarla en mane-
ra alguna; y la segunda, desde el momen-
to en que si las partes afectadas no han
reclamado del vicio se produce una ver-
dadera renuncia a impetrar la nulidad y,
por consiguiente, el acto irregular queda
saneado.
Ahora bien, para que el tribunal pue-
da declarar de oficio la nulidad de todo
lo obrado es indispensable que el hecho o
circunstancia que le sirve de fundamento
conste del mismo proceso, pues las reso-
luciones deben pronunciarse conforme
al mrito de ste y no por el conocimien-
to personal que tenga el magistrado
(art. 160 CPC).
y al declarar la nulidad de oficio de
todo lo obrado, el tribunal no debe con-
tentarse con hacer desaparecer las actua-
ciones viciadas, sino que tambin debe
adoptar las medidas que sean necesarias
para que dichas actuaciones se realicen
vlidamente. Todava ms, podr asimis-
mo tomar las medidas que tiendan a evi-
tar la nulidad de futuros actos del
procedimiento.
Son casos frecuentes de nulidad pro-
cesal de oficio aquellos que declara el
magistrado cuando: el juicio se est desa-
rrollando ante un tribunal absolutamen-
~ FDITORIAI /URIDICA DI CHILE
te incompetente; el demandado no ha
sido legalmente emplazado; las partes li-
tigantes son incapaces para comparecer
en juicio por s mismas; hay vicios que
permitan casar en la forma, etc.
658. El incidente de nulidad. Es aque-
lla cuestin accesoria que pueden pro-
mover las partes en el curso del juicio
acerca de la falta de validez de la rela-
cin procesal o de determinados actos
de procedimiento.
, Se acostumbra clasificar los incidentes
de nulidad en aquellos que se refieren a
todo el proceso y en aquellos que dicen
relacin con actuaciones judiciales deter-
minadas; y todava, dentro de los prime-
ros, hay incidentes de nulidad generales e
incidentes de nulidad especiales, como son
los contemplados en los artculos 79 y 80
del Cdigo de Procedimiento Civil.
Por regla general, los incidentes de
nulidad pueden promoverse en cualquier
estado del juicio, salvo que ya se hubiere
pronunciado sentencia y se hubiere noti-
ficado a alguna de las partes, o que se
tratare de la nulidad de determinados ac-
tos procesales, pues stos deben promo-
verse tan pronto el hecho que les sirve
de fundamento haya llegado a conoci-
miento de la parte. Es necesario tener
presente que el arto 83, inc. 2, estableci
que la nulidad slo podr impetrarse den-
tro de 5 das contados desde que aparez-
ca o se acredite que quien debe reclamar
de la nulidad tuvo conocimiento del vi-
cio, a menos que se trate de la incompe-
tencia absoluta del tribunal.
~ m p o s de incidentes de nulidad
que se refieren a todo el proceso: la in-
competencia del tribunal; la falta de ca-
pacidad, representacin o de personera
de las partes litigantes; la falta de empla-
zamiento del demandado, etc.
Ocurre que estos incidentes de nuli-
dad de todo el proceso revisten formas
procesales especiales, como ser el de excep-
ciones dilatorias, cuando se fundan en la
incompetencia del tribunal ante el cual
se hubiere presentado la demanda, la fal-
ta de capacidad del demandante o de per-
sonera o de representacin legal del que
comparece en su nombre, etc.
y dentro de los incidentes de nulidad
de todo el proceso hay algunos especiales;
tales son los contemplados en los ya cita-
dos artculos 79 y 80 del Cdigo de Pro-
cedimiento Civil que pasamos a analizar:
a) El primero de ellos est consagrado
en la ley en los siguientes trminos: "Po-
dr un litigante pedir la rescisin de lo
que se haya obrado en el juicio en rebel-
da suya, ofreciendo probar que ha esta-
do impedido por fuerza mayor.
Este derecho slo podr reclamarse
dentro de tres das, contados desde que
ces el impedimento y pudo hacerse va-
ler ante el tribunal que conoce del nego-
cio" (art. 79 CPC).
Su fundamento es la imposibilidad del
litigante para actuar, motivada por razo-
nes de fuerza mayor, lo que permiti al
contrario que agitara el juicio en su re-
belda; y hace aplicacin del conocido afo-
rismo de que "al impedido no le corre
plazo".
Pero el derecho a impetrar la nuli-
dad de lo obrado, fundado en razones
de fuerza mayor, prescribe en el brevsi-
mo plazo de tres das, a contar desde que
ces el impedimento y pudo hacerse va-
ler la nulidad ante el tribunal que est
conociendo del respectivo negocio.
Ejemplo: se notifica la demanda al
demandado, quien se halla gravemente
enfermo y no puede, naturalmente, con-
testarla en el trmino legal, y a pesar de
ello se le acusa la correspondiente rebel-
da; podra, posteriormente, solicitar la
nulidad de lo obrado en su rebelda acre-
ditando el hecho de la enfermedad o im-
pedimento.
b) El segundo incidente especial de
nulidad de lo obrado se halla establecido
en la siguiente forma: "Si al litigante re-
belde no se le ha hecho saber en perso-
na ninguna de las providencias libradas
en el juicio, podr pedir la rescisin de
lo obrado, ofreciendo acreditar que, por
un hecho que no le sea imputable, han
dejado de llegar a sus manos las copias a
que se refieren los artculos 40 y 44, o
237
que ellas no son exactas en su parte sus-
tancial.
Este derecho no podr reclamarse
sino dentro de cinco das, contados des-
de que aparezca o se acredite que el liti-
gante tuvo conocimiento personal del
juicio" (art. 80 CPC).
De acuerdo, pues, al claro tenor lite-
ral anterior, para que este incidente pue-
da tener lugar se requiere:
1. Que el litigante que lo hace valer
se encuentre rebelde;
2. Que no se le haya hecho saber en
persona ninguna de las providencias li-
bradas en el juicio;
3. Que ofrezca probar que por un
hecho que no le sea imputable han deja-
do de llegar a sus manos las copias a que
se refieren los artculos 40 y 44, o que
ellas no son exactas en su parte sustan-
cial, y
4. Que se interponga en momento
oportuno, o sea, dentro de quinto da
contado desde que aparezca o se acredi-
te que el litigante tuvo conocimiento per-
sonal del juicio.
Este incidente tiene, adems, una es-
pecial particularidad, y ella es que se pue-
de hacer valer, concurriendo los requisitos
legales antes sealados, a pesar de que se
haya pronunciado sentencia y se hubiere
notificado a alguna de las partes (arts.
182, inc. 2, y 234, inc. final, CPC).
En otras palabras, el incidente se for-
mula ante el mismo tribunal que est co-
nociendo del pleito y con el objeto de
anular todo lo obrado, aun la sentencia
definitiva que l puede haber dictado, la
cual tendr solamente la apariencia de fir-
me o ejecutoriada.
c) No hay que olvidar, en todo caso,
que los incidentes a que den lugar las
disposiciones contenidas en los artcu-
los 79 y 80 del Cdigo de Procedimiento
Civil no suspendern el curso de la causa
principal y se sustanciarn en cuaderno se-
parado (art. 81 CPC).
659. El recurso de casacin en la for-
ma. Es un recurso extraordinario, como
ya sabemos, y, por antonomasia, de nuli-
IDlTORIAL /URIOICA DE CHILf
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m
Mario Casarino Viterbo Manual de Derecho Procesal
dad, puesto que tiende a invalidar deter-
minadas sentencias en los casos expresa-
mente sealados por la ley.
Las causales o motivos que lo justifi-
can los hemos clasificado en vicios come-
tidos en la dictacin de la sentencia y vicios
cometidos durante la sustanciacin del jui-
cio. Ejemplo de los primeros: no haber
sido extendida la sentencia en conformi-
dad a la ley; ejemplo de los segundos: la
falta de emplazamiento del demandado.
Los efectos de la casacin en la forma,
en el caso de ser acogido, son los genera-
les de toda nulidad procesal; o sea, des-
aparecen la sentencia recurrida y todas
las actuaciones judiciales anteriores a ella
cumplidas irregularmente, segn sea el
vicio o defecto en que se funde. Ejem-
plo: se anula la sentencia por haber sido
pronunciada ultra petita; aqu desapare-
ce nicamente la sentencia recurrida, y el
tribunal dispone que se dicte una nueva
sentencia por el tribunal no inhabilitado
que corresponda. Se anula la sentencia por
falta de emplazamiento del demandado;
.aqu desaparece la sentencia y, adems,
toda." las actuaciones a contar desde el
supuesto emplazamiento del demandado,
y el tribunal ordena que se reponga la
causa al estado de emplazar legalmente
al demandado.
De lo expuesto se desprende que la
casacin en la forma es una especie de in-
cidente de nulidad de todo lo obrado; y
que mientras aqulla persigue, por regla
general, invalidar las sentencias y, por ex-
cepcin, tambin actos de procedimien-
to, el incidente de nulidad de todo lo
obrado ataca a cualquier acto procesal.
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
III. La nulidad civil y la nulidad
procesal
660. Sus diferencias. La nulidad civil
la reglamenta el Cdigo Civil, en espe-
cial el Ttulo XX del Libro IV; la nulidad
procesal, en cambio, se ajusta a las pres-
cripciones dispersas contenidas en el C-
digo de Procedimiento Civil.
I
238
La nulidad civil persigue la invalidacin
de los actos o contratos ejecutados o cele-
brados sin sujecin a las prescripciones le-
gales; en cambio, la nulidad procesal sola-
mente est destinada a sancionar los actos
procesales viciosos o irregulares.
La nulidad civil se hace valer en juicio
y mediante la accin ordinaria de nuli-
dad; la nulidad procesal, en cambio, si bien
se hace valer dentro de juicio, debe im-
petrarse por los medios y recursos que la
misma ley procesal seala.
L;i nulidad civil admite ser clasificada
en absoluta y relativa; la nulidad procesal,
en cambio, no permite clasificacin ni gra-
dacin alguna.
La nulidad civil, por regla general, no
puede ser declarada de oficio por el tri-
bunal; la nulidad procesal, en cambio, por
regla general, puede ser declarada en esta
ltima forma.
661. La accin ordinaria de nulidad.
Hemos dicho hace un instante que la nu-
lidad civil se hace valer en juicio median-
te la accin ordinaria de nulidad. Esta
afirmacin es exacta, por cuanto los ac-
tos o contratos civiles son nulos no por la
falta u omisin de determinados requisi-
tos, sino a virtud de sentencia judicial pa-
sada en autoridad de cosajuzgada, la cual
es la que viene a atribuir todos los efec-
tos legales a la nulidad as declarada
(art. 1687 CC).
La persona que tiene inters en que
se declare nulo un determinado acto o
contrato deber, pues, iniciar el corres-
pondiente juicio en contra de la persona
o personas a quienes dicha nulidad vaya
a afectar en sus resultados; y la accin a
instaurar se conoce con el nombre de
accin ordinaria de nulidad, la cual, a falta
de disposiciones especiales, se sustancia
de conformidad a los trmites del juicio o
procedimiento ordinario.
Diversa es la situacin, en cambio, que
se presenta cuando se est en presencia
de actuaciones judiciales que adolecen del
vicio de nulidad. En este evento, el cami-
no a seguir es formular incidente de nuli-
dad de todo lo obrado, o bien, interponer
los correspondientes recursos procesales, a
fin de obtener la invalidacin de la sen-
tencia, e incluso, de determinados actos
de procedimiento.
Debe, por consiguiente, rechazarse la
idea de que puede en un juicio poste-
rior, mediante el ejercicio de la accin
ordinaria de nulidad, solicitarse la nuli-
dad de un juicio o de algunas de sus ac-
tuaciones, que se habran desarrollado
con infraccin de la ley procesal.
Esta accin ordinaria de nulidad de
los actos procesales era admitida en la
legislacin espaola antigua; pero hoy
frente a nuestro actual derecho positivo
ella es inadmisible. As qued claramen-
te instituido en la historia fidedigna del
establecimiento de nuestra ley procesal
civil; a lo que cabe aadir que las pres-
cripciones del Ttulo XX del Libro IX
del Cdigo Civil son propias de los actos
o contratos, y que la autoridad de la cosa
juzgada es el manto protector de cual-
quier posible vicio o defecto de carcter
formal.
239
En todo caso, el problema antes plan-
teado presenta especial importancia cuan-
do se trata de invalidar actos de doble
carcter, o sea, civiles y procesales a la vez;
por ejemplo, cuando se trata de anular
una compraventa celebrada por interme-
dio del ministerio de la justicia.
Lajurisprudencia de nuestros tribuna-
les ha sostenido que, en tales ca.<;os, la fuen-
te u origen de la nulidad que se pretende
ser la que dar la pauta en cuanto al ca-
mino a seguir. As, en el ejemplo propues-
to, si se omiti la solemnidad de la escritura
pblica, el consentimiento de las partes
estaba viciado, etc., se tratar de una nuli-
dad civil y podr hacerse valer por medio
de la accin ordinaria de nulidad; y, a la
inversa, si se omitieron formalidades de
publicidad, de tasacin, etc., se estar en
presencia de una nulidad procesal, la cual
sabemos que se hace valer por los medios
o recursos que la ley procesal franquea y
siempre que el juicio se halle pendiente,
o sea, que la sentencia no haya pasado en
autoridad de cosajuzgada.
EDITORIAL JURIDICA DE eH11 E
<:
<
NDICE DE MATERIAS
SEGUNDA PARTE
LOS PROCESOS DECLARATIVOS YEJECUTIVOS
COMUNES O LOS PROCEDIMIENTOS CONTENCIOSOS
DE APLICACIN GENERAL
Introduccin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11
A. Juicio, proceso y procedimiento . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11
B. Clasificacin de los procedimientos judiciales 11
C. Clasificacin de los procedimientos judiciales segn la ley procesal civil chilena 12
Seccin Primera
ELJUICIO ORDINARIO DE MAYOR CUANTA
Captulo Primero
GENERALIDADES
323. Caractersticas e importancia del juicio ordinario de mayor cuanta 17
324. Esquema del juicio ordinario de mayor cuanta 18
325. Periodos o fases del juicio ordinario de mayor cuanta 19
Captulo Segundo
LA DEMANDA
326. Concepto 21
327. Forma y contenido de la demanda . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
328. De los documentos acompaados a la demanda . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23
329. Resolucin que recae en el escrito de demanda 23
330. El emplazamiento del demandado .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 24
331. Modificacin de la demanda. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25
332. Actitudes del demandado una vez notificado de la demanda 26
Captulo Tercero
LAS EXCEPCIONES DILATORIAS
I. Generalidades
333. Concepto 29
334. Cules son? 29
241 EDITORIAL JURIDICA DE CHILE m
EDITORIAL jURIDICA DE CHILE
ndice de Materias
n. Anlisis particular de las excepciones dilatorias
335. Incompetencia del tribunal .
336. Incapacidad, falta de personera o de representacin legal .
337. Litispendencia .
338. Ineptitud del libelo .
339. Beneficio de excusin .
nI. Procedimiento
340. Manera y oportunidad de oponer excepciones dilatorias .
341. Tramitacin, fallo y recursos .
342. Curso posterior del juicio .
IV. Excepciones mixtas o'anmalas
343. Su rgimen legal
Captulo Cuarto
lA CONTESTACIN, lA RPLICAYlA DPLICA, YlA RECONVENCIN
1. La contestacin de la demanda
344. Concepto .
345. Clases de contestacin de la demanda .
346. Forma y contenido de la contestacin de la demanda .
347. De los documentos en que se funda la contestacin .
348. Plazo para presentar la contestacin de la demanda y resolucin que en ella debe recaer ..
349. Oportunidad para oponer excepciones perentorias .
n. La rplica y la dplica
350. Concepto .
351. Ampliacin, adicin o modificacin de las acciones y excepciones .
352. Tramitacin .
In. La reconvencin
353. Concepto .
354. Sujetos de la reconvencin .
355. Condiciones de procedencia de la reconvencin .
356. Tramitacin .
Captulo Quinto
lA PRUEBA EN GENERAL
1. Generalidades
357. Concepto .
358. Naturaleza de las normas legales sobre la prueba .
359. Elementos de la prueba .
360. Los medios de prueba .
361. Clasificacin de los medios probatorios .
362. Sistemas probatorios .
~ EDITORIAL jURlDICA DE [HIU 242
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1
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ndice de Materias
363. Apreciacin comparativa de los medios de prueba .
364. Reglas reguladoras de la prueba .
n. Recepcin de la causa a prueba
365. Diversas actitudes del tribunal .
366. La resolucin que recibe la causa a prueba .
367. Recursos con motivo de la recepcin de la causa a prueba .
368. Ampliacin de la prueba .
369. Prctica de diligencias probatorias .
III. Del trmino probatorio
370. Concepto .
371. Caractersticas del trmino probatorio .
372. Clases de trminos probatorios .
373. El trmino probatorio ordinario .
374. El trmino probatorio extraordinario .
375. El trmino probatorio especial .
Captulo Sexto
lA PRUEBA INSTRUMENTAL
1. Generalidades
376. Concepto .
377. Clasificacin de los instrumentos .
378. Iniciativa en la prueba documental .
379. Oportunidad en que debe rendirse la prueba instrumental .
380. De los instrumentos extendidos en lengua extranjera .
11. Los instrumentos pblicos
381. Concepto de los instrumentos pblicos enjuicio .
382. Instrumentos pblicos otorgados en el extranjero .
383. Manera de acompaar los instrumentos pblicos en juicio .
384. Valor probatorio del instrumento pblico .
385. Impugnacin de los instrumentos pblicos .
386. Formas de impugnar los instrumentos pblicos .
nI. Los instrumentos privados
387. Concepto .
388. Reconocimiento de los instrumentos privados .
389. Manera de acompaar los instrumentos privados enjuicio .
390. Valor probatorio del instrumento privado .
391. Impugnacin de los instrumentos privados y, en especial, del cotejo de letras .
Captulo Sptimo
lA PRUEBA TESTIMONIAL
1. Generalidades
392. Concepto .
393. Procedencia de la prueba testimonial .
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ndice de Materias
394. Iniciativa en la prueba testimonial .
395. Oportunidad para rendirla .
11. Los testigos
396. Definicin .
397. Clasificacin de los testigos .
398. Habilidad para ser testigo .
399. Inhabilidades absolutas .
400. Inhabilidades relativas .
401. Obligaciones que pesan sobre los testigos .
402. Derecho de los testigos .
III. Forma de producir la pruebodestimonial
403. Presentacin de minuta de puntos de prueba y nmina de los testigos .
404. Tribunal ante el cual se rinde la prueba testimonial .
405. Fijacin de audiencias de prueba .
406. Citacin de los testigos .
407. Examen de los testigos .
408. Acta de la prueba testimonial .
409. Recapitulacin .
IV. Las tachas
410. Concepto .
411. Oportunidad para oponer tachas .
412. Forma o manera de hacer valer las tachas .
413. Efectos de la oposicin de las tachas .
414. Tramitacin, prueba y fallo de las tachas .
V. Valor probatorio de la prueba testimonial
415. Distingos previos .
416. Testimonios de odas .
417. Testimonios presenciales .
418. Testimonios contradictorios .
419. Testimonio de los menores de catorce aos .
Captulo Octavo
LA PRUEBA CONFESIONAL
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429. Personas que deben prestar confesin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 95
430. Personas que estn exentas de la obligacin de comparecer ante el tribunal a confesar .. 96
431. Forma de proceder 96
432. Sanciones en que incurre el confesante rebelde . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 97
433. Problemas varios 98
111. La confesin extrajudicial
434. Concepto 99
IV. Valor probatorio de la confesin
435. Distingo previo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 99
436. Valor probatorio de la confesin extrajudicial 99
437. Valor probatorio de la confesinjudicial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 100
V. Efectos legales de la confesin y sus limitaciones
438. Cules son? 101
439. El principio de la indivisibilidad de la confesin en doctrina 101
440. El principio de la indivisibilidad de la confesin ante nuestra legislacin 103
441. Solucin histrico-legal 104
442. El principio de la irrevocabilidad de la confesin y sus excepciones. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 105
Captulo Noveno
INSPECCIN PERSONAL DEL TRIBUNAL
I. Generalidades
443. Concepto 107
444. Clasificacin 107
445. Requisitos de procedencia. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 108
11. Procedimiento
446. Tribunal que la ordena 109
447. Tribunal que la practica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 109
448. Tramitacin 109
449. Concurrencia con otros medios probatorios 110
I. Generalidades
420. Concepto .
421. Sus caractersticas .
422. Requisitos de validez de la confesin .
423. Clasificacin de la confesin .
II. La confesin judicial
89
89
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91
450. Cul es?
III. Valor probatorio
Captulo Dcimo
LA PRUEBA PERICIAL
I. Generalidades
110
244
245
424. Concepto y clases .
425. Tribunal competente .
426. Funcionario competente .
427. Oportunidad yveces en que puede exigirse confesin en juicio .
428. Iniciativa en la prueba confesional .
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
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93
94
95
451. Concepto 111
452. Procedencia del informe pericial 111
453. Clases de informe de peritos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 112
454. Oportunidad para decretado 113
455. Requisitos para ser perito 113
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE m
ndice de Materias ndice de Materias
n. Procedimiento
456. Nombramiento de los peritos 113
457. Formalidades posteriores o o 114
458. Del reconocimiento o o' o o o o o 115
459. Presentacin del informe pericial o 115
460. Opiniones periciales discordantes o 116
461. Gastos y honorarios periciales o o o o 116
480. Clasificacin de los recursos o 131
481. Tramitacin de los recursos o o o o 131
Captulo Segundo
EL RECURSO DE APELACIN
I. Generalidades
463. Concepto o o o 117
464. Clasificacin o o 117
Quin puede apelar? o o 135
Ante quin y para ante quin se apela? 136
Plazo para apelar 136
Formas de apelar o o o 137
Resoluciones que pueden recaer, una vez interpuesta la apelacin o 137
462. Cul es?
In. Valor probatorio
...................................................................
Captulo Undcimo
LA PRUEBA POR PRESUNCIONES
I. Generalidades
no Las presunciones legales
116
482.
483.
484.
485.
486.
I
I
I
487.
488.
489.
490.
491.
Concepto o o
Caractersticas de la apelacin o o
Personas que intervienen en la apelacin o o
Resoluciones judiciales apelables o o o
Resoluciones judiciales inapelables o o o o
n. Interposicin del recurso de apelacin
133
134
134
134
135
465. Concepto o 118
In. Efectos del recurso de apelacin
III. Las presunciones judiciales
466. Concepto o o o o 118
467. Su admisibilidad .. o o' o 119
468. Requisitos de las presunciones judiciales o 119
469. Bases de presunciones judiciales o o o 120
492. Concepto 138
493. El efecto devolutivo 139
494. Casos en que se concede apelacin slo en el efecto devolutivo 140
495. Carcter de la jurisdiccin del tribunal inferior, concedida apelacin en lo devolutivo 140
496. El efecto suspensivo ..... o o o o o o 141
N. Tramitacin del recurso de apelacin
Captulo Primero
GENERALIDADES
Captulo Duodcimo
TRMITES POSTERIORES A LA PRUEBA
Seccin Segunda
LOS RECURSOS YLA NULIDAD PROCESAL
476. Definiciones o o o 129
477. Fundamentos de los recursos o o 129
478. Cules son los recursos procesales? o o o 130
479. Caractersticas principales de los recursos o 131
WITORlAL JURIDICA DE CHILE 247
V. De la adhesin a la apelacin
VII. Extincin del recurso de apelacin
497. Remisin de los autos originales o de las compulsas, segn el caso, al tribunal superior .. 142
498. Recepcin de los autos por el tribunal superior o 143
499. Declaracin previa de admisibilidad o inadmisibilidad del recurso 143
500. Primera resolucin destinada a tramitar el recurso 143
501. Comparecencia de las partes o 144
502. Sancin por la incomparecencia de las partes , . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 144
503. Curso posterior de la apelacin hasta su fallo 145
504. Concepto 146
505. Requisitos de procedencia de la adhesin a la apelacin o 146
506. Oportunidad para adherirse a la apelacin o 147
507. Tramitacin de la adhesin a la apelacin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 147
VI. Pruebas, incidentes y notificaciones en la alzada
508. Pruebas en la segunda instancia ..... o 147
509. Incidentes en la segunda instancia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 148
510. Notificaciones en la segunda instancia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 148
511. Mediante el fallo de segunda instancia 149
246
470. Escritos de observaciones a la prueba o o o 121
471. Citacin para or sentencia o o 121
472. Medidas para mejor resolver .. o o o 122
473. Agregacin de la prueba rendida fuera del tribunal .... o o 124
474. La sentencia definitiva o o 124
475. Formas anormales de terminacin de la primera instancia del juicio ordinario de mayor
cuanta . o o o o o 125
EDITORIAL ]URIDICA DE CHJLf
ndice de Materias
ndice de Materias
512. El desistimiento .
513. La desercin .
514. La prescripcin .
Captulo Tercero
EL RECURSO DE HECHO
149
150
150
543.
544.
545.
Novena causal .
Trmites o diligencias esenciales en la nica o en la primera instancia en los juicios de
menor o de mayor cuanta y en los juicios especiales .
Trmites o diligencias esenciales en la segunda instancia de los juicios de menor o de
mayor cuanta y en los juicios especiales .
IV. Limitaciones del recurso de casacin en la forma
170
171
174
1. Generalidades
515. Concepto 153
516. Causales de procedencia del recurso de hecho. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 153
517. Clases de recurso de hecho . . . . 153
11. El recurso de hecho propiamente dicho
518. Concepto 154
519. Plazo para interponerlo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 154
520. Tramitacin 154
521. Fallo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 155
111. El falso recurso de hecho
522. Concepto 155
523. Tramitacin 156
524. Fallo....................................................................... 156
525. Control de las apelaciones improcedentes 156
546. Concepto 176
547. Preparacin del recurso de casacin en la forma 176
548. Casos en que no se exige preparacin previa del recurso de casacin en la forma 177
549. Falta de perjuicio reparable slo con la invalidacin del fallo o de influencia del vicio en
lo dispositivo del mismo 178
550. Falta de pronunciamiento sobre alguna accin o excepcin hecha valer oportunamente
en el juicio 179
V. Interposicin del recurso de casacin en la forma
551. Ante quin y para ante quin se interpone? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 180
552. Quin puede interponer el recurso? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 180
553. Forma de interponer el recurso 181
554. Resoluciones que pueden recaer en el escrito de interposicin del recurso 182
555. Impugnacin de la resolucin que declara admisible o inadmisible el recurso de casacin
en la forma 182
VI. Efectos del recurso de casacin en la forma
Captulo Cuarto
EL RECURSO DE CASACIN EN LA FORMA
556. Concepto y evolucin histrica legislativa 183
557. Solucin legal actual 183
VII. Tramitacin del recurso de casacin en la forma
VIII. Extincin del recurso de casacin en la forma
Mediante el fallo de casacin 187
El desistimiento 189
La desercin 189
La prescripcin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 189
Remisin de los autos al tribunal superior e ingreso de los mismos 184
Declaracin previa de admisibilidad o inadmisibilidad del recurso de casacin en la forma .. 185
Comparecencia de las partes. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 185
Designacin de abogado patrocinante . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 186
Escrito con observaciones para el fallo del recurso. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 186
Vista del recurso . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 186
La prueba y el recurso de casacin en la forma. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 186
Disposiciones especiales enjuicios de mnima cuanta y de menor cuanta. . . . . . . . . . . . . 186
EDITORIAL JURIDICA Df CHILE m
190
190
190
249
X. La casacin en la forma y la apelacin
IX. La casacin en la forma y los juicios o reclamaciones regidos por leyes especiales
570. Procedencia del recurso de casacin en la forma en juicios o reclamaciones regidos por
leyes especiales .
571. Causales de casacin en la forma en los juicios o reclamaciones regidos por leyes especiales ..
572. Su interposicin conjunta
558.
559.
159
560.
159
1
561.
160
562.
160
563.
564.
565.
161
161
I 566. 162
I
567. 163
I
568.
569.
248
111. Causales quejustifican el recurso de casacin en la forma
534. Su clasificacin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 164
535. Primera causal 164
536. Segunda causal. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 165
537. Tercera causal. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 166
538. Cuarta causal 167
539. Quinta causal 168
540. Sexta causal. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 169
541. Sptima causal 169
542. Octava causal 170
EDITORIAL JURIDICA DE CHILE
526. Concepto .
527. Fundamentos del recurso de casacin en la forma .
528. Caractersticas del recurso de casacin en la forma .
529. Antecedentes histricos del recurso de casacin en la forma .
1. Generalidades
11. Resoluciones judiciales susceptibles del recurso de casacin en la forma
530. Cules son? .
531. Primer caso: las sentencias definitivas .
532. Segundo caso: las sentencias interlocutorias cuando ponen trmino al juicio o hacen
imposible su continuacin .
533. Tercer caso: las sentencias interlocutorias a que se refiere el artculo 766, inciso 2, parte final
ndice de Materias
ndice de Materias
210
210
210
211
212
VII. Extincin del recurso de casacin en el fondo
Mediante el fallo de casacin .
La sentencia de reemplazo .
El desistimiento, la desercin y la prescripcin .
IX. La casacin en el fondo de oficio
Concepto 214
Casos en que procede 215
El fallo en la casacin en el fondo de oficio 215
604. Vista del recurso .
605. La prueba y el recurso de casacin en el fondo .
606.
607.
608.
VIII. La casacin en la forma y la casacin en el fondo
Su interposicin conjunta 212
Sus diferencias ms esenciales. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 212
Captulo Sexto
EL RECURSO DE REVISIN
609.
610.
195
195
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611.
196
612.
613.
I
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197
197
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193
193
Captulo Quinto
EL RECURSO DE CASACiN EN EL FONDO
XI. La casacin en la forma de oficio
n. Resoluciones judiciales susceptibles del recurso de casacin en el fondo
581. Cules son? .
582. Anlisis de los requisitos anteriores .
1.
577. Concepto .
578. Fundamento del recurso .
579. Caractersticas del recurso de casacin en el fondo .
580. Antecedentes histricos del recurso de casacin en el fondo .
573. Concepto .
574. Casos en que procede .
575. Tramitacin y efectos .
576. El fallo en la casacin en la forma de oficio .
In. Causal que justifica el recurso de casacin en el fondo
1. Generalidades
n. Resoluciones judiciales susceptibles del recurso de revisin
618. Resoluciones judiciales susceptibles de tal recurso 218
619. Sentencias firmes en contra de las cuales no procede la revisin 219
614. Concepto 217
615. Fundamento del recurso . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 217
616. Caractersticas del recurso de revisin 217
617. Antecedentes histricos del mismo 218
...............................................................
219
220
220
221
In. Causales que justifican el recurso de revisin
IV. Interposicin del recurso de revisin
..............................................................
..............................................................
...............................................................
Primera causal
Segunda causal
Tercera causal
Cuarta causal
620.
621.
622.
623.
I
I
I
I,
206
207
205
205
206
206
198
198
199
201
202
202
203
204
V. Interposicin del recurso de casacin en el fondo
587. Concepto .
588. Primera limitacin: las causales del recurso de casacin en la forma .
589. Segunda limitacin: los hechos del juicio .
590. Excepcin a la limitacin anterior: infraccin de las leyes reguladoras de la prueba
IV. Limitaciones del recurso de casacin en el fondo
583. Concepto .
584. Formas o maneras de infringir la ley .
585. Significado o alcance de la palabra "ley" .
586. Influencia de la infraccin legal en lo dispositivo de la sentencia .
591. Ante quin y para ante quin se interpone? .
592. Quin puede interponer el recurso? .
593. Forma de interponer el recurso .
594. Resoluciones que pueden recaer en el escrito de interposicin del recurso .
595. Impugnacin de la resolucin que declara admisible o inadmisible el recurso de casacin
en el fondo '" .
596. Efectos de la concesin del recurso .
"'
o,,
z
VI. Tramitacin del recurso de casacin en el fondo
597. Remisin de los autos al tribunal superior e ingreso de los mismos .
598. Declaracin previa de admisibilidad o inadmisibilidad del recurso de casacin en el fondo ..
599. Comparecencia de las partes .
600. Designacin de abogado patrocinante .
601. Escrito con observaciones para el fallo del recurso .
602. Los informes en derecho .
603. Conocimiento y resolucin del recurso de casacin en el fondo por el pleno del Tribunal
V. Tramitacin yfallo del recurso de revisin
629. Su tramitacin 223
630. Su fallo 224
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624. Ante quin y para ante quin se interpone? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 221
625. Quin puede interponerlo? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 221
626. Forma de interponer el recurso de revisin 221
627. Plazo para interponer el recurso de revisin . . . . . . . . . . . 222
628. Efectos del recurso de revisin 222
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ndice de Materias
Captulo Sptimo
EL RECURSO DE INAPLICABILIDAD
1. Generalidades
631. Concepto 225
632. Fuentes legales 225
633. Caractersticas del recurso de inaplicabilidad 226
634. Su verdadera naturalezajurdica 226
635. Antecedentes histricos del recurso de inaplicabilidad 227
11. Requisitos de procedencia del recurso de inaplicabilidad
636. Cules son? <.............................. 228
637. Inconstitucionalidad de fondo 228
638. Inconstitucionalidad de forma 229
III. Interposicin del recurso de inaplicabilidad
639. Ante quin y para ante quin se interpone? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 229
640. Quin puede interponerlo? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 229
641. Forma de interponer el recurso 230
642. Oportunidad para interponerlo 230
643. Efectos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 230
IV. Tramitacin del recurso de inaplicabilidad
644. Primera resolucin. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 231
645. Curso posterior del recurso. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 231
V Fallo del recurso de inaplicabilidad
646. Fallo que acoge el recurso . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 231
647. Fallo que niega lugar al recurso 232
VI. La inaplicabilidad de oficio
ndice de Materias
657. La declaracin de nulidad de oficio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 235
658. El incidente de nulidad 236
659. El recurso de casacin en la forma . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 237
111. La nulidad civil y la nulidad procesal
660. Sus diferencias 238
661. La accin ordinaria de nulidad. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 238
648. Concepto
Captulo Octavo
LA NULIDAD PROCESAL
1. Generalidades
232
649. Juicio, causa o pleito 233
650. Los actos procesales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 233
651. La nulidad procesal como sancin de los actos procesales irregulares 234
652. Fundamentos doctrinarios de la nulidad procesal 234
653. Fundamentos de derecho positivo de la nulidad procesal 234
654. Efectos de la nulidad procesal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 235
11. Formas en que puede hacerse valer y declararse la nulidad procesal
655. Premisa fundamental .
656. Cules son estos medios legales? .
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