Obesidad y Ejercicio Físico
Obesidad y Ejercicio Físico
Obesidad y Ejercicio Físico
Introduccin
La obesidad consiste en un exceso de peso por un aumento de grasa, que conlleva una serie de problemas
endocrino-metablicos, estticos y socio-econmicos de la ms diversa ndole. Es de gran inters controlar
la obesidad para minimizar estos efectos nocivos. El ejercicio fsico est entre las ayudas a considerar para
mantener el peso ms adecuado para la salud.
al mirar las tablas siempre se deben restar entre 1 y 1,5 kcal/min, correspondientes al gasto metablico en
reposo o sentado que se produce de todas formas.
En condiciones normales, la tercera parte de la energa consumida corresponde al trabajo muscular, siendo
esta proporcin an mayor en el trabajador manual. Como la actividad muscular es, con diferencia, el gasto
de energa ms importante del organismo, se considera que la obesidad se debe a una ingesta de alimentos
excesiva en comparacin con la cantidad de ejercicio realizado (Tabla l).
Tabla I: Valores diarios del gasto energtico para varios trabajos
El esquema es el siguiente:
La cantidad de ATP que hay en los msculos basta para mantener la potencia mxima durante 3 segundos,
por lo que es esencial que se forme continuamente ATP nuevo, incluso durante la ejecucin de la actividad
deportiva.
Las etapas iniciales del proceso de degradacin de la glucosa, la gluclisis, se producen sin necesidad de la
utilizacin de oxgeno, constituyendo lo que se conoce como la glucolisis anaerbica. Durante esta gluclisis
cada molcula de glucosa se convierte en dos molculas de cido pirvico y se producen dos molculas netas
de ATP.
Normalmente, el cido pirvico entra en las mitocondrias de las clulas musculares y, al oxidarse, forma una
gran cantidad de ATP. Sin embargo, cuando la provisin de oxgeno es insuficiente para que se produzca esta
segunda etapa oxidativa del metabolismo de la glucosa, la mayor parte del cido pirvco se convierte en
cido lctico, que difunde hacia el exterior de las clulas musculares y llega a la sangre. Por esta razn,
gran parte del glucgeno muscular, en estas circunstancias, se convierte en cido lctico pero, al hacerlo, se
forman ciertas cantidades de ATP, aun sin tener oxgeno.
Este sistema del glucgeno-cido lctico puede formar molculas de ATP con una rapidez 2,5 veces mayor
que el mecanismo oxidativo de la mitocondria. Cuando se requieren grandes cantidades de ATP para un
perodo moderado de contraccin muscular, este mecanismo de gluclisis anaerobia se puede utilizar como
fuente rpida de produccin de energa.
En condiciones ptimas, el sistema del giucgeno y el cido lctico permite formar el ATP necesario para
1,3-1,6 minutos de actividad muscular, adems de los 8-10 segundos proporcionados por el sistema del
fosfgeno.
Sistema aerobio
Este sistema implica el consumo de oxgeno a nivel de las mitocondrias para sintetizar el ATP necesario para
la contraccin muscular. La glucosa, los cidos grasos y los aminocidos de los alimentos, despus de cierto
procesamiento metablico intermedio, liberan electrones que al final se combinan con el oxgeno,
producindose en el proceso de transferencia de los electrones, saltos energticos que permiten convertir el
ADP en ATP.
Si comparamos los tres mecanismos, las velocidades relativas mximas de produccin de ATP son:
Segn el vigor de la actividad fsica y su duracin, se pueden estimar cules son los sistemas energticos que
se emplean para cada actividad (Figura 2 y Tabla III).
En la Figura 3 se muestra el consumo relativo aproximado de grasas y carbohidratos para obtener energa
durante el ejercicio exhaustivo prolongado bajo tres condiciones dietticas diferentes: dieta rica en
carbohidratos, dieta rica en grasas y dieta mixta. Se observa que la mayor parte de la energa se deriva de
los carbohidratos durante los primeros segundos o minutos del ejercicio, pero que, en el momento en que
sobreviene el agotamiento, se est extrayendo del 60 al 85% de la energa de las grasas.
Figura 3: Efecto de la duracin del ejercicio y del tipo de dieta sobre los porcentajes relativos de
carbohidratos o grasas utilizados por los msculos para obtener energa
No toda la energa procedente de los azcares se deriva del glucgeno muscular almacenado. Tambin se
almacena una cantidad notable de glucgeno en el hgado, que puede degradarse hasta glucosa, que pasa a
la sangre y es captada por los msculos para obtener energa. Por tanto, si se dispone de glucgeno muscular
y de glucosa en la sangre, stos sern los nutrientes de eleccin para la actividad muscular intensa.
An as, para un acontecimiento de verdadera resistencia y, por tanto, de larga duracin, la grasa aporta
ms del 50% de la energa requerida despus de las 3 a 4 primeras horas de esfuerzo.
En ocasiones, basta un intenso ejercicio fsico para conseguir el adelgazamiento. Asimismo, Racette y cols.
(1995) y Kempen y cols. (1995), han mostrado el efecto beneficioso del ejercicio aerbico sobre la
composicin corporal y sobre el gasto energtico total diario en sendos estudios de reduccin de peso
mujeres en obesas. De hecho, los libros monogrficos sobre la obesidad suelen dedicar siempre un captulo
al inters de la actividad fsica en el manejo de este problema (Figuras 4 y 5).
Figura 4: Prdida total de peso durante un programa de dieta hipocalrica, con y sin ejercicio, de 12
semanas de duracin (x + SEM). Los sujetos ejercitados andaban 5 das/semana.
Figura 5: Porcentaje de grasa corporal en funcin del grupo, tras un programa de reduccin de peso,
con y sin ejercicio, de 12 semanas de duracin (x + SEM).
El ejercicio fsico permite o adelgazamiento local, al reducir la grasa de una forma ms notable en aquellas
zonas del cuerpo que ms participan en la actividad.
El ejercicio fsico ayuda, sobre todo, a la prdida de grasa corporal, estando especialmente indicado el
ejercicio aerbico de baja intensidad y de larga duracin, considerado como el ms apropiado para formar
parte, junto a la dieta, de los programas de adelgazamiento, ya que se puede realizar a diario y permite los
mismos cambios en la masa corporal que la dieta y el ejercicio de alta intensidad y corta duracin y
presenta muchos menos riesgos (Tabla IV).
Heymsfield y cols. (1989) han demostrado que la actividad fsica aadida a la dieta hipocalrica favorece y
facilita la prdida de masa grasa, sin variar la proporcin de masa magra, siendo sto lo deseable en la
reduccin de peso corporal, adems de conseguirse otros beneficios fsicos y psicolgicos, con un perfil ms
positivo, como la disminucin de la ansiedad, mejora de la depresin y mejora del humor que, con
frecuencia, se acompaa de la reduccin de ingesta calrica y que, tambin, favorece el adelgazamiento.
En algunos estudios han demostrado que estos efectos se consiguen con actividad fsica no muy prolongada
(Tabla V).
Esto es de gran importancia, ya que el contenido en grasa corporal para la mayora de los adolescentes en
nuestra sociedad oscila entre el 15 y el 23%, siendo superior en las mujeres que en los hombres, sobre todo
tras la pubertad. Esta proporcin de grasa corporal se correlaciona de forma inversa con la actividad fsica
desarrollada, en estudios realizados en nios preescolares. Este porcentaje de grasa corporal aumenta con
la edad, tanto en hombres como en mujeres, y normalmente va acompaado de una disminucin de la masa
corporal magra y un pequeo aumento en el peso corporal total. As, para varones, la grasa corporal puede
aumentar del 18-20% a la edad de 20 aos, hasta el 35% a la edad de 60 aos, con pequeos cambios en el
peso corporal y el correspondiente descenso en la masa magra corporal. Sera deseable, por tanto,
mantener el contenido en grasa corporal en proporciones no superiores al 20-25% para varones, y al 25-30%
para mujeres.
El ejercicio fsico sensibiliza al adipocito a la accin lipoltica de las catecolaminas y de otras hormonas,
favorecindose por este medio el catabolismo de las grasas.
Por otra parte, se ha estudiado, tanto de forma experimental como clnica, la relacin entre la ingesta
alimentaria y el gasto energtico con el ejercicio fsico. Se ha visto que existe una estrecha relacin entre la
ingesta y la duracin del ejercicio, mantenindose el peso corporal constante, hasta un punto en el que se
produce la prdida de ese equilibrio ingesta-ejercicio. De gran inters es el hecho de que, a medida que la
actividad fsica se reduce por debajo de 1 hora/da en los animales de laboratorio, la ingesta no se reduce
ms, sino que se desequilibra y luego aumenta, por lo que se produce un incremento de peso.
Los estudios realizados en nos han demostrado una relacin similar entre los grados de actividad y la ingesta
(Figura 6).
Figura 6: Ingesta calrica e intensidad de la actividad fsica. Obsrvese que con las ocupaciones
sedentarias aumenta la ingesta calrica
Incluso el ejercicio puede aumentar la preferencia para ingerir glcidos en lugar de grasas, lo que es muy
conveniente para disminuir grasa y mantener esta prdida.
Otras observaciones tambin nos indican la relativa inactividad de los sujetos obesos, tanto de adolescentes
como adultos, y se ha demostrado en estudios comparativos que son menos activos que los sujetos controles
no obesos. Esta menor actividad conlleva un menor gasto energtico y, por tanto, contribuye al balance
positivo que mantiene o aumenta la obesidad.
Adems esta inactividad relativa podra incrementar la ingesta de alimentos. Estas observaciones apoyan la
necesidad de algn tipo de actividad fsica como parte integrante de cualquier programa de reduccin de
peso. Es importante mantener el ejercicio fsico, ya que una menor actividad fsica se correlaciona con un
aumento de la Lipoprotein-Lipasa del tejido adiposo, lo que aumenta la lipognesis y la recuperacin de la
grasa. Otro efecto interesante de la realizacin de ejercicio fsico es la potenciacin de los efectos de
ciertos frmacos, como los agonistas beta-3.
Un reciente estudio ha demostrado la efectividad del ejercicio fsico en minimizar el aumento de peso que
suele producirse al dejar de fumar. Se ha demostrado que una gran acumulacin de grasa, especialmente en
la mitad superior del cuerpo, est asociada con ciertas complicaciones metablicas, como intolerancia a la
glucosa, llegando incluso a la diabetes, hiperlipidemias e hipertensin.
Figura 7: Capacidad metablica mxima de las clulas adiposas de ratas controles jvenes, ratas
entrenadas y ratas controles de la misma edad, en un estudio del mecanismo del aumento de la
actividad transportadora de glucosa en ratas entrenadas fsicamente. La utilizacin de glucosa se midi
en clulas adiposas en presencia de glucosa 10mM e insulina 7mM. Datos expresados/clula. Las tasas de
las ratas ejercitadas diferan tanto de los controles jvenes como de los controles de la misma edad
(p<0,0001).
Estudios experimentales realizados por Hirshman y cols. (1989), han demostrado que el entrenamiento fsico
mantiene un tamao pequeo de clula adiposa, al ser utilizadas las grasas para dicha actividad fsica, y
aumenta el nmero total de transportadores de glucosa en las clulas adiposas, producindose este
incremento por incorporacin de los transportadores almacenados en el interior de la clula. Con la
Diversos trabajos apuntan al posible papel preventivo del ejercicio fsico sobre determinados tipos de
cnceres, en especial el de colon, al acelerar el trnsito intestinal, y los estrgeno-dependientes (de mama,
tero), al disminuir la produccin de los estrgenos si se controla el tejido adiposo.
El grado de obesidad, en relacin con los niveles ideales de peso corporal para el individuo.
2.
3.
Realizar diariamente, durante quince das, 10-15 minutos y 2-3 veces al da, ejercicios de
flexibilidad, relajacin y resistencia: Estiramientos, caminar, subir escaleras, etc.
4.
Repetir durante otros quince das la misma pauta de ejercicio pero con una duracin de 15 a 20
minutos.
5.
6.
En cuanto a los tipos de ejercicio a realizar, se recomiendan los ejercicios aerbicos de media a larga
duracin como son, por ejemplo:
Andar rpido, a paso ligero notando que se est haciendo un esfuerzo. Prctica especialmente
recomendada para las personas mayores.
Bailar.
Footing.
Natacin.
Ciclismo.
Gimnasia.
Esqu.
Remo.
Es aconsejable que se inicie la actividad fsica desde el comienzo del tratamiento de exceso de peso.
Dado que se producen tantos fracasos en los tratamientos de la obesidad, incluso en los sensatos, con
reduccin calrica combinada con un aumento de la actividad fsica, es conveniente utilizar el ejercicio
fsico regular en la prevencin del desarrollo de la obesidad y en el mantenimiento de un peso estable.
http://www.seme.org/area_pro/textos_articulo.php?id=7