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La Pequeña Venecia

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EL CABAR O LA PEQUEA VENECIA

(Dramaturgia y borrador)

I Escena El arribo.
- Dos paneles juntos hacen el paisaje en primer plano, encuadrados; soplan los
treiles y el viento.-

Desde una loma lejana se divisa un puente colgante, une dos jorobas de tierra
dividida por un grueso, condensado, serpenteante y Arcano, pero calmado ro; en su
costilla izquierda reposan las costas de un pueblo comerciante y (aparentemente)
ocupado que nunca deja de trabajar. La gente que lo sostiene, que trajina en todas
las cavidades, que se aglutina en todos los recovecos, que escapa del pueblo y
vuelve a volver, la que llega establecindose, incluso el parsito que vigila como
un satlite ... todos estn repletos de magia, esfuerzo, alegra, fiesta, vicios,
resentimiento y pena. No vacilan en el orgullo, tampoco en la traicin.
El Detective llega a los ms alto del mirador, en vsperas de un San Juan. La
panormica ofrece ver el tallado en proceso del hombre instruyendo a la tierra,
sobrepasado por la armona ubicua de la naturaleza. Se siente en otro tiempo,
siendo otro aforno destinado a resolver, en su caso un crimen; en el caso de
otro, el descubrimiento, el progreso... Se siente un conquistador arribando a una
verdad, se siente un Quijote aventurado a rescatar a una Dulcinea.
Ideas romnticas nacen por la pasin de su oficio, por el vnculo personal que
contrae con el crimen; ah es donde flaquea su profesionalismo y lo sabe. Pero
tambin es el lugar el que le agita el corazn, que pareciese irreal, de ficcin,
como un recurrente sueo donde l ya no es dueo de la verdad, se siente un punto
ms de una historia repetida en el tiempo y el espacio eterno. Siente que no es
primera vez que est aqu.
Detective: (Temerario) El cuerpo de un hombre apareci flotando en el ro. Ha
ocurrido un crimen pasional, como los que han ocurrido ayer y como los que han
ocurrido hace siglos atrs; como ha ocurrido ms al norte y ms al sur, como ha
ocurrido en los asentamientos perdidos de las Amricas, como en las grandes
ciudades cosmopolitas del Conosur, como ha ocurrido en los desiertos y Junglas de
las Europas, como no dejar de ocurrir en Babilonia y como ocurrir hasta que el
hombre sea hombre, hasta que la pasin nos deje de mover y sedamos nuestros deseos
al razonamiento entero. An as erradicarlo jams, estara reprimindose,
rebullendo dentro cada corazn agitado que por la pasin; por esta viajaron, por la
pasin defendieron, mataron y se sacrificaron. Si juntramos y manipulramos todos
esos almas convulsionantes, tendramos combustible eterno, viajaramos las
galaxias; erradicaramos la pobreza y tambin habra de quienes querramos generar
armas para aterrorizar a todos los que quieran utilizar a su favor su pasin. Si no
fuese por la pasin y el crimen, esta historia no sera contada, este caso no sera
resuelto Y quin ha resuelto un crimen? Nadie lo resuelve, slo se reconstruye
para no olvidar o tal vez para sanar el dolor de nuestra alma llena de
constelaciones de deseos. Los autores somos un pueblo, los actores somos todos, los
personajes somos todos nosotros.
Comisario: (Terminando de subir al mirador de la loma. Muy agitado) Oiga que es
rpido usted pa'subir! Ni se le nota que viene viajando. Yo cuando tena su edad
mijo, pareca que volaba por estas lomas. (Incorporndose) Qu le parece esta vista
del pueblo, pareciese un pueblo imaginado cierto? Es como si alguien se lo hubiese
soado y lo hubiese pintado y colocado entre estas lomas. (Suspira) Bueno ese que
se lo imagin le cost la vida de muchas tropas y muchos indios... jajajaja
Detective: Primero, muchas gracias por el cumplido, pero el viaje en tren fue un
descanso la verdad de las cosas; por otro lado djeme decirle estimado comisario
que los indios son de la india y la gente aborigen que viva y sigue viviendo ac
son mapuches.
Comisario: (Chistando) Son lo mismo nomas... No son cristianos, andaban enpelota
y vivan en casas hechas de paja. Lo mismo.

Detective: (Corrigiendo) En ese caso, si no fuese por que se present, vindolo


usted vestir igual que un uniformado cualquiera, podra decir que es un guardia de
alguna tienda cualquiera, un subalterno cualquiera. Aun que haya mucho parecido
entre una cosa y otra, eso no significa que sea lo mismo. A caso usted cree que el
delfn es un pez? Los Mapuches son Mapuches y los Indios de la India. Ser minucioso
con este tipo de cosas hace de la investigacin un Arte.
Comisario: (Ofuscado) Bueno, usted es el detective, yo un simple servidor... Ya
mire, djeme mostrarle el pueblo: All la villa inmediata del ferrocarril, la
dinmica con tres pisos, a esa le dicen la villa de los perros; estos le dicen a
la que la sigue, La villa de los piojos y la tercera, la que esta asentada junto
al ro Damas, tiene este mismo nombre; cuando lo nombran le dicen que son de la
Villa Daaaamas (Exagerando el tono femenl). (Cortante) Ya, yo creo que me
devuelvo a mi cuartel.
Detective: No se amargue comisario, lo invito a tomar una bebida en esa casa en
la que suena msica all al otro lado.
Comisario: Tss... ta loco'eor! Es muy temprano para ir a hueviar por all. Esa
es la Casa Azl y mire, la otra que esta ms abajo, donde suenan las guitarras, esa
es la casa de la Marlen. Nosotros, mejor vamos donde el turco a comernos un ahumado
y aprovechamos de capear las nubes que vienen corriendo. En algn momento podramos
pasar por...
Detective: (Lo interrumpe, pegado en las casas) Oiga y el occiso habr visitado
esas casitas alegres?
Comisario: (lanza una risotada) Visitado? Ese cristiano era bravo pa' la lesera,
esa era una de las cosas que se conocan del tendero, otra era que compraba oro
clandestino a los mineros de la zona y que tambin haca sus prestamos con
intereses elevados. Nunca lo pudimos pillar en eso... Las chiquillas dicen que a
todas les prometa casorio. Tambin mosqueaba en la casa de Marlen, en la villa de
los perros, se tomaba sus navegados pa' pasar el fro y la soledad con el vapor
alcohlico... en este sur lluvioso.
Detective: El tendero era soltern cierto? Y Las chiquillas, como dice usted,
lo habrn visto el Jueves, Comisario?
Comisario: (Disgustado) Oiga, no se imagine... Es como le decimos ac en el
pueblo a las nias del ambiente... respete la edad seor detective. Adems parece
que el interesado es otro, me interrumpi con el tema de las casitas, justo cuando
le iba decir que luego del ahumado, pasramos por el Hospital para revisar los
objetos, as avanzamos en su investigacin Le parece?
Detective: Disculpe comisario, no quise... Pero no ser mejor que vayamos abajo a
las casitas, lo digo porque va a empezar a llove y segn dicen ac, esto se inunda.
Comisario: Usted si es que es obstinado, es un hombre joven y los jvenes suelen
ser impertinentes y atrevidos, est en su naturaleza. Ya, vamos a la villa! A la
casa de Marlene, La gringa Marlene.
- Bajan la loma y se dirigen al pueblo.-

II Escena El arribo (pasado)


- Se abren los paneles, se abre la escena al segundo plano donde se divisa una
fiesta de a cuatro (3 mujeres, 1 hombre - Anselmo-), un barman y el jolgorio de
noches continuas, de vidas discontinuas. Una de las mujeres slo observa. Un grupo
de muchachos tocan temas de arrabales centroamericanos, cuecas, cumbias y msica
bronco; saben animar a cuerpos gastados de euforiaCoro (de putas) : S sabemos que es la vida,
no sabemos de la ilusin,
sabemos de aquella cancin
que en la noche se hace rima,
cuando corren las cortinas

chiquillos, mineros, tiesos,


sueltos, los flacos y gruesos
acaban rico y nos pagan mal
la ilusin es agua con sal,
a niuno agarramoh a besos.
- La banda se hace msica gozadora, repentinamente se escucha un golpeteo de
puertas (callan). Entra un hombre que silva, oculto entre un gorro y un poncho
completamente mojado, tiene la presencia de una bestia; con un gesto pide un trago,
se lo sirven de inmediato, se retira del lugar silbando la misma cancin con la que
entr. El jolgorio vuelve, las nias bailan y coquetean con el festejado; los
msicos disfrutan del regalo que les dio la noche y la suerte del artista bohemio
(callan).
Entra el hombre nuevamente; da dos pasos a dentro, hace un gesto, las nias van
donde l y salen por la puerta de manera vertiginosa, Marlen camina lento y
pausado, se detiene antes de salir. El festejado (Anselmo) mira como salen sus
queridas, anselmo aulla:
Anselmo

: Por la reconcheturrico!
como lo hace uno que tiene
platita, negocioh y bieneh.
Tar parao, ser hombre rico.
Tengo la gran punta'el pico,
la loma ms reluciente
repleta de oro caliente.
Loh mineroh me lo entregan
pa' comerme las ternerah
que rapia el Venao futre.

- Entra Marlen Marlen

: Viejo, no te pongai a morir,


a las chicas las conoc,
casquivanas las colibr.
Piensa en ponerte a vivir gil!
pa' ponerle geno y seguir.

Anselmo

: Tu soy distinta, me quer,


Mirate, volviste por mi.

Marlen

: Ilusiones tuyas no ms!,


Tengo un cabro chico adems (calla y se mira el vientre),
ya, qudate tomando aqu! (lo acomoda, el la esquiva)
(despus de un silencio) Escucha. Viajar si o s
No me importa que me dirn
Ni lo que me prometern,
Mi decisin ya la sab.

Anselmo

: Ms pareciese que arrancai.


sab que yo te amo Marlen,
yo soy viejo y busco querer,
Voh sola, ya no te soai,
y pa que tu ni te movai,
vengo y te quiero pretender.

Marlen

: Somos mujeres de burdel


Puro soay viejo loco,
mejor tapate el hocico,
que te pueden hacer caer.

Anselmo

: Nicagando peleo como l.


Aunque igual mi orgullo herido
me pone'l cucharn vivo
pa pelear y hasta pa vencer.

Marlen

: Vo no matai. Te vay arriesgar?


Voh nunca hay finao a nadie aqu
El otro por docena s.
A la suerte no hay que tentar.
Calleuque te van a pitear.

Anselmo

: Es que te veo con el Don juan,


Saltando a los brazos del tran...
Me arde! yo te tengo marc,
vo soy ma de nadie mh;
me las voy a ver con ese tran.

- Anselmo se para decidido, se dirige hacia afuera donde se escucha una lluvia
interminablemente densa.
Los paneles se adelantan formando un callejn frontal en donde Anselmo camina como
un autmata decidido y perplejo por no comprender cual es su destino, se detiene y
estos se cierran frente a l, los paneles quedan en primer plano.
III Escena

Primera visita la casa de Marlen.

Cuando llegaron a la villa, el ro haba subido un metro de agua e invadido el


primer y segundo piso de las casas. El ro haba inundado las tierras agrcolas de
las dos riberas.
Al pi de la escalera de concreto que daba acceso a la calle, el Comisario llam a
un huei, con duros rasgos ancestrales, que ofreca rentar un bote. Al subir el
Comisario orden al chico que lo llevara por el cause en direccin a la Villa de
los Piojos.
Detective

: No puedo creer que la gente viva y duerma en sus casas inundadas como
si estuvieran en un palacio de piedra en Venecia.

huei : Esta es nuestra Pequea Venecia


Detective

: (Lanza una carcajada que comparte con el Comisario) Que picaresco...

huei

: (Enojado, abstrado y hacia el pblico)


Que se han credo los papis
cuatro veces ms le cobro
de lo que le sale a un vecino,
A los pacos y a los ratis
yo no les trabajo gratis.
Muchos como l vienen a ver,
las calles en ros recorrer,
del carnaval sacan foto,
no somos espectculo!
(vuelve a la escena)
Van donde la Sita Marlen?

Comisario

: As es.

Detective

: Es conocida la gringa esa...

Comisario

: Todos se mueren por ella Detective. Chicos y grandes, desde el


usurero Anselmo, hasta el sueco Olsen. Dicen que ste le canta
canciones en su idioma para enamorarla.

huei : (Grita) Cuidado! Vamoh'a encallar!


- De golpe se detiene la pequea embarcacin y sus dos tripulantes ms torpes,
desesperados buscan encontrar el equilibrio, el chiquillo re.Detective

: (Incorporndose) Llegamos?

Comisario

: Afirmativo. Vamos salte al otro lado para que entremos a la casa.

Detective

: (Salta indeciso) ya est!

Comisario

: Vamos ayude a este hombre que ha perdido sus habilidades (entre el


chiquillo y el Detective pasan al Comisario) Huei, tu espranos
ac que nos demoramos nada.

huei : S seguro, como si no se llenara de pacos.


Comisario

: Chiquillo insolente!

Detective

: Comisario, vehemencia por favor. Vamos por Marlen.

Comisario

: Vamos. A ver djeme tocar la puerta...

-Antes de que abrieran la puerta, abre una seora gorda, de voz gruesa y
contundente, con un par de nias pinturrajeadas tras ella.Comisario

: Buenas noches dama... bueno nosotros andamos buscando a

Doa

: La nia Marlen no se encuentra, se ha ido esta maana en el tren de


la siete, y no creo que regrese hasta que el ro baje y sequemos la
casa. Pero si quiere pasar, no tenemos problema... Chiquillas atiendan
a los caballeros...!

- Las nias hacen pasar a los investigadores de manera alegre y cariosa. Por otro
lado el Detective se encontraba confundido, no se senta muy a gusto con toda esta
humedad, el balanceo del bote y la lluvia; por otro lado las nias enriquecan los
aspectos llamativos de su visita. stas de una manera exageradamente minusiosa
seleccionaban papas en unas ollas. Comisario

: Detective, le aconsejo tome nota de toda la situacin.

Detective

: (Incorporndose) S seor. S hacer mi trabajo... Seorita, Cual es


el apellido de la Seorita Marlen y su direccin actual?

Doa

: Es un apellido alemn detective, toda esa informacin la mantengo en


una notita (manda a una de las nias a buscar un papel, esta deja su
tarea y luego vuelve con el papel se lo pasa al Comisario y sigue
seleccionando papas).

Comisario

: Froilan Marlen Shiller; Embajada Alemana, Calle Pedro de Valdivia


Norte #1374... San...

Detective

: Es su direccin actual?

Doa

: Eso no lo s seor, sabamos que tena que viajar, pero ms que


eso... (Las nias asienten). Disculpe que rompa el hielo as, mis
distinguidos, pero se serviran un limn con malicia? Pal fro digo
yo. (las nias ren entusiastas). Vamos, es un poquito de
agua'rdiente... Ni que pensar que me estoy ofreciendo... (Simula un
fingido aire de inocencia, mientras las nias ren ante la cara
sonrojada del Detective. Las calla un estruendo que hace crujir la casa
de madera).

Detective

:(Horrorizado)Que es eso!?

Comisario

: Tranquilo detective, son troncos que el ro se lleva y chocan contra


las casas.

Detective

: (Incomodo, se dirige al Comisario) Yo creo que hemos terminado,


regresemos por favor...

Doa

: Y tan rapidito se me va? No me dur ni la primera.. (Las nias


ren).

Comisario

: Muy agradecido por su cooperacin doa (le besa la mano). Pero antes
de irnos; respndame una pregunta... Toda la arena que se encuentra en

la orilla de este ro es la misma?


Doa

: Casi, por lo general es negra volcnica, con algo de slice. Despus


del ro damas, se mezcla con los lodos de las minas de oro de Santa
Celia.

Comisario

: Y Estuvo aqu don Anselmo la noche del Jueves?

- Las cuatro mujeres se ponen repentinamente serias y niegan moviendo la cabeza,


slo habla la mujer gorda Doa

: No inspectores.

Detective

: (Sumndose al interrogatorio) Porqu seleccionan las papas? No


sera ms rpido sacar un montn, lavarlas pelarlas y hacerlas?

Doa

: Nos estamos preparando para la noche de San Juan, detective. Las


papas no son pa' comerlas. (Lanza una gran carcajada) Sera todo?

- El detective se despide y el comisario hace un leve ademn de retirada, salen de


la casa y suben al bote, el detective vuelve a perder el equilibrio Comisario

: Chico, llvanos donde se encontr el cuerpo. (Al Detective)


Llevaremos un rastro de arena de donde lo encontraron para que la
analicemos.(cuando llegan, mandan al chico a buscar arena)

Detective

: Ya ahora llvanos a la escalera que esta humedad no le hace bien a


nadie...

- Se pierde la pequea navegacin por entre la densa neblina que se traga toda la
villa, el ro y el pueblo. -

IV Escena

- Designio (Pasado)

Derrepente entra Anselmo hecho un demonio, busca enajenado por todos lados algo o a
alguien, su criada lo mira tratando de decir algo, pero no se atreve hablar.
Anselmo pasa por su lado como si no existiese, la chica vota el vaso que trae en la
mano, Anselmo se detiene, la nia lo levanta y mientras lo recoge pregunta
insidiosamente:

Criada

: Que busca patrn, que perdi?


Es un papel importante?
con nmeros y con nombres?
Lo podra haber visto... Adis...

Anselmo
(Brusco)

: Detngase linda por dios,


Dnde dejaste ese papel!
Huacha de mierda te han de ver!
Linda dgame dnde est
Lo necesito de verdad
!Ya! te ordeno que me lo des.

(suave)

La criada indica debajo de un libro. Anselmo se lanza como un animal a buscar el


papel, cuando lo encuentra lo besa y se lanza al suelo, regocijndose en felicidad.
Cuando se da cuenta que su criada sigue en la habitacin se recompone y se arregla,
saca unos lentes y comienza a leer lo escrito, guarda minuciosamente el papel donde
mismo lo haba encontrado, comienza a echar a su criada de la habitacin.
Anselmo

: Ya mijita salga de ac
pngase atenta a la puerta
que estoy esperando visita.
!Me est dando una resaca,
y trigame las maracas,
con el tesito de infusin,
necesito una curacin
y descansar un poquito
estoy escuchando un pitito
mejor me siento en el silln.

Antes de que se siente entra una mujer muy extravagante de vestir con un aire
bufonesco, es una meca que raya entre la embriagues y lo esotrico ella trae las
maracas y el tesito de infusin. Detrs de ella entra la criada que no pudo detener
a este personaje que entr decidido a llegar hasta la habitacin del usururero para
hacer una entrada extraordinaria.
La meca

: Anselmo te vengo a sanar


a voh te echaron un gran mal
mancharon tu casa con cal,
al cacho le vamo'a ganar
la cola le vamo'a cortar.
Te voy a hacer una limpieza
toda astilla de tu pieza,
cada tronco y hasta el candado
nos va a quedar santiguado.
Ya despjame la mesa!

Anselmo

: Mamita, Por favor salve


ha este terrenal pecador,
soy culpable de todo horror:
Yo Don Anselmo Monsalve
Crado cerca de Malalhue
Renuncio a la vida de error
de las mujeres y el rubor
que les nace cuando el alcohol... (divaga)
entre faldas, en el colchn
y mis manos con el sudor...

La meca le tapa la boca y lo hace callar.


Crada

: Parece que el diablo lo posei


Usted nunca lo va ha cambiar
su naturaleza es pecar,
es que el diablo es este seor!

La meca grita alarido de infortunio a la criada, la asusta y la espanta, cierra la


puerta y le grita bruja sucia pecadora... en la misma santigua el lugar donde
ha estado la criada y la puerta que cerr. Se acerca a Anselmo mientras susurra
conjuros de limpieza, lo tiende sobre la mesa, lo agarra por todas partes, lo moja
y grita palabras inconexas: Sacalo Vete tu no eres de ac Hijo vuelve No
eres fro ni caliente, eres tibio Ella se va pual Detectives. Vuelve del
trance y cae desmallada.
La criada entra y ve a Anselmo sobre la mesa y a la meca tirada en el suelo,
trata de llevrsela arrastrndola, es un trabajo muy dificultoso, pide ayuda a dos
actores y se la llevan. Antes de que salgan cubren a Anselmo con una sabana blanca.

V Escena

Entrevista, Hospital.

- A pesar de lo irreal que puede parecer su visita, con lluvia toda esta villa
parece miserable para el detective. En primera instancia no ha venido por su gusto
a esta diligencia. Ha sido encargado en el caso, porque su to es amigo intimo del
comisario. Del pueblo le ha hechizado su precariedad. Van camino al hospital
comiendo pescado ahumado.Detective

: Seor comisario Que le deca el Turco?

Comisario

: Que l estuvo cuando levantaron el cuerpo.

Detective

: En dnde lo encontraron, exactamente?

Comisario

: A unos cien metros del muelle, atorados en unos mimbres... Ya


llegamos al hospital.

Detective

: Es ms grande de lo que me imaginaba!

- Entra el Doctor, los seores guardan el papel que sobraba del pescado-

Doctor

: Seores, los estaba esperando! (Se saludan). Sabe, no hay mucho que
decir, el occiso recibi una pualada en pleno corazn y, a pesar de
aparecer en el ro, no haba agua en sus pulmones.

Detective

: Quisiramos ver sus ropas doctor.

Doctor

: Ningn problema El Doctor los gui hasta una construccin situada


fuera del edificio del hospital y adelantndose abri la puerta de la
sala de la morgue. En un mesn estaban las ropas de Anselmo: Ropas
comunes, polainas, caf, zapatos del mismo color, camisa escocs,
gruesa y de lanilla; todo mojado e hinchado por su paso en el ro, la
billetera traa el carnet, unos billetes y papeles; su manta argentina
estaba bien doblada en una esquina.-

Detective

: Gracias doctor, si le parece examinaremos todo y luego pasaremos por


su oficina. - El doctor se retir, comenzaron a hacer lista de objetos-

Comisario

: Apunte todo Detective. Este hombre usaba anillo, en las ropas no se


encuentra nada. La manta contiene lodo arcilloso y arena mezclada con
partculas de mica. No hay nada ms de importancia en sus pertenencias.
Vamos donde el mdico. - Bajan escaleras -

Detective

: Doctor, aparte de esa pualada no tena nada ms?

Doctor

: Nada ms que una pualada recta; tal vez el asesino era ms alto que
l; de esa manera la cuchilla pudo viajar directa al pecho, pero eso es
slo una suposicin ma.

Comisario

: Tambin pudo ser una mujer...

Doctor

: Es cierto, aun que no tiene seales de lucha... Lo que s me llam la


atencin fue la arenilla arcillosa; ese barro no se ve en la orilla del
ro que se encontraba el cuerpo, es ms parecido al barro del ro
Damas.

Detective

: Muchas gracias por ese dato Doctor, iremos por ms pruebas. Hasta
luego. - Se despiden y salen del hospital -

Comisario

: Creo que debemos apurarnos y bajar a las villas, antes que anochezca.

Detective

: A las casitas de nuevo?

Comisario

: A la casa de Marlen, otra vez.

VI Escena La Juana Prez (Pasado).


- Anselmo reposa la borrachera en una mesa basta de caas moradas de vino, se le
escucha murmurar y tararear uno que otro sonido. Repentinamente realza su voz:
Anselmo

: Dicen que no me quiere


La Juana Prez.
Cuando me v con plata
casi se muere...

Doa Pocha : Que cantay viejo usurero!


Vete a tu casa, anda a dormir,
Si quer te ayudo a salir.
Anselmo

: No me trat como perro!


Mira que tengo un gen cerro,
una mina me voy a mandar.
Uta la minita a cagar;
Con ella pa toda la va
on ella de noche y de da.
Trae borgoa pa'celebrar!

Doa Pocha : Sueltal viejito atrevo!


Dime quin es la muchacha
que te vuela la cabeza
Que te tiene curao y aturdo.
Anselmo

Doa Pocha :

Anselmo

El mes pasado me di tres,


este mes me dar sus dos,
todos saben, soy comprador;
que presto con algn inters,
Hoy tengo ms kilos por mes!
Ca del rbol, me d cuenta!
No...Es verdad? La pulenta?...
Compraste una mina di'oro?
Anday en busca del tesoro!
Y donde queda la veta?
Sabes Pochita querida?
Ni con todas tus putitas,
ni con toditas juntitas,
yo no te dira, mi vida.
A ver,y vo'que te hay credo!
Metindote en mis asuntos
espiando por mis negocios.

Doa Pocha :

Viejo borracho y engredo


aqu hay bailao, llorao y redo;
y as pegay pualazoh...?
Vengan aqu los muchachoh!
Llvense al wen agrandao
hediondo a caca anda pasao.
Debe la cuenta el borracho...

-Los paneles cierran la escena y se ve entrar al Comisario y al Detective que


hurguetean el espacio en busca de algo que les pueda ser til; detrs entra Doa
Pocha que viene con dos vasos con trago-

VII Escena Segunda visita a la casa de Marlene.


- El comisario le pregunta a doa Pocha si Anselmo hablaba sobre sus negocios
cuando vena a la Casa Azul Doa Pocha : (Incorporndose a la conversacin y trayendo consigo un espejo y un
plato) Mire seores, a veces le daba de hablar por sus negocios, la
ltima vez quera celebrar con vino navegao una minita que se estaba
cocinando... No, miento, era una mina de oro que tena... La cuestin
es que se puso bien aweonao as que lo echamos cagando noms.
Detective

: Bueno muchas gracias por toda la informacin que nos ha dado. Mire
Doa Pocha, necesito saber si usted conoce de otros negocios que tena
Anselmo. Le puedo decir Doa Pocha?

Doa Pocha : Por su puesto detective, hasta las esposas de mis clientes me dicen
as. Adems usted puede llamarme as y como quiera. Tenga en cuenta que
sta es su casa.
Comisario

: Bueno saberlo!

Detective

: Y le conoce otros negocios o no?

Doa Pocha : Habladuras noms...


Detective

: Habladuras?

Doa Pocha : Bueno... que prestaba dinero... a intereses...


Detective

: Altos?

Doa Pocha : Ms que altos... leoninos.


Detective

: No le dijo quien le trabajaba la mina?

Doa Pocha : Nadie ha mencionado esa mina aparte de l mismo, Detective. Pudo ser
la euforia de esa noche, una fbula, un cuento y nada ms.
Comisario

: Bueno creo que hemos terminado la entrevista seores, ya es hora de


partir. Doa Pocha un gusto. Si tiene ms informacin puede ir a la
tenencia de carabineros y prestar su testimonio.

Doa Pocha : Si quiere algo, puede venir a buscarlo aqu Comisario. Siempre sern
bienvenidos.
Detective : (Ms suelto que antes) S quiero algo... dgame, ese espejo y el
plato es por las cosas de San Juan Cierto?
Doa Pocha : Cierto. Pero no son cosas. Son secretos que nos dejaron los abuelos
para poder saber lo que nos depara la vida y tratar de arreglarla. San
Juan nos protege de jugar con el mundo de los encantos en esta fecha.
Detective

: (Escptico) A pesar de su rubro es bien religiosa usted.

Doa Pocha : Es que no confunda las cosas Detective, una cosa es la Fe y la otra
el trabajo o acaso cree que el delfn es un pez?. Mire sin F no hay
trabajo; la f es lo ltimo que se pierde... le recomiendo que ponga
un espejo y una carta... un joker. Tal vez los espritus y los duendes
le ayude con ms pistas sobre el finao...
Detective

: Es muy particular su forma de investigar, pero yo no lo hago as


Doa. Muchas gracias de todas formas.

Comisario

: Bueno detective, no importunemos ms a la dama y dejmosla en su


tramite que debe ser realizado en una hora exacta.

-Se despiden todos corts mente de la Doa y salen abotagados de ideas, sospechas y
especulaciones-

VIII Escena La vida de los villanos


- El Detective y el Comisario caminan por la calle y se detienen en un mirador.Comisario : Debo felicitarlo por el interrogatorio, Detective. Esta doa pudo
decir la verdad o parte de la verdad. Lo de la mina pudo ser un volador de luces,
solo ella la ha mencionado...
Detective

: Y no est el involucrado para contradecirla...

Comisario

: Exactamente. Lstima que no encontramos a Marlen. Vamos a tener que


ir a la casa del viejo a encontrar las respuestas.

Detective

: No le parece raro que Marlen justamente desaparece despus del hecho


criminal?

Comisario

: Piense en las condiciones que viva la nia.

Detective

: Es cierto comisario. Se necesita mucha valenta para aguantrselas


ah, en un invierno como ste. Pensndolo bien, no critico a la
desconocida Marlen, porque solo de pensar en una noche durmiendo en su
casa, con el ro metido debajo del catre... brrr!

Comisario

: Es su pas Detective, y usted y yo estamos obligados a entender su


situacin y mantenerla, como en este caso, por ejemplo. Don Anselmo era
un honrado y buen Burgus para algunos y para otros era un usurero
clandestino, influyente poltico y liviano de casco. Pero eso da lo
mismo, nosotros tenemos que descubrir al criminal para que sea juzgado
segn nuestras leyes. De esta manera establecer el imperio de la
justicia como valor principal, justicia sana y sin distincin.

Detective

: ...La gente de este villorio es admirable, resisten las condiciones


del clima; sus casas son como arcas ancladas. Rehacen su vida despus
de cada crecida, annimamente, lo hacen slos, realmente slos, nadie
los ayuda y si los ayudan es para sumarse a alguna campaa poltica.

Comisario

: O para sacar fotos, con sus lentes enfocados; demonizndolos por sus
vicios, culpndolos por sus tragedias para vender la cochina noticia.
Un da Detective, no lo dude, van a encontrar la forma de dominar el
ro y a lo mejor usted mismo les contar a sus nietos, camino al puerto
en un verano, que conoci este villorio con sus calles sepultadas en
agua.

Detective

: Para mi inspector, con todo respeto, este barrio me choc desde un


principio. Ser porque es primera vez que salgo de la capital y me
enfrento a un invierno en esta latitud.

Comisario

: Lo s, su to es muy amigo mo y mi habl harto de usted. Me cont su


ambicin por ser el mejor detective del pas, y lo ser; este viaje es
algo que no olvidar jams... por lo que ha visto y todo lo que le
falta por conocer y comprender... Este lugar existe por los lavaderos
de oro que explot Pedro de Valdivia, fueron tan ricas esas minas que
esto fue la virtual capital del Reino de Chile, as lo atestigu su
antiguo nombre: La Imperial. Estas tierras modifican a todo aquel que
respire entre sus lomas.

Detective

: As le pas a Anselmo, se aprovech tanto de la explotacin de las


minas, termin vicindose con la ganancia, prestando dinero, ganndose
enemigos, borracho a ms no poder, terminando como bulto flotando en el
ro. Gran cambio.

Comisario

: Eso es un caso particular, generalmente aqu se la llevan trabajando


en sus ferreteras, mecnicas y negocios, tambin se divierten de vez
en cuando... Hablando de divertimentos, vamos a la hotel le quisiera
mostrar algo divertidsimo y que puede ayudarnos en el caso. Mire
adelntese y yo llego en quince minutos. Nos vemos all.

- El detective y el comisario se separan, cada uno sale hacia el lado contrario del
otro, el Comisario esta muy entusiasmado en mostrar su sorpresa, el detective mira
como se pierde entre las callesIX Escena El viaje El Detective se encuentra ordenando su equipaje para viajar a la Capital e ir a la
Direccin que le haba facilitado Doa Pocha, tocan la puerta y cuando este abre se
encuentra con el Comisario que viene con un espejo, unas cartas y unas velas; antes
de saludarse el comisario entra y dispone el espejo apoyado en una silla, deja el
mazo de cartas frente a este (el joker se encuentra sobre el mazo), pega la vela a
un plato y la apaga.
Detective : Que significa este teatro Comisario?
Comisario : Esto puede que nos ayude seor, usted prenda la velita a las doce de la
noche de San Juan y deje que el joker le entregue las pistas, a ver si
se le aparece la verdad en el espejo!
Detective: (insolente)Puras tonteras comisario, no me haga perder ms tiempo, que
debo viajar a la embajada esa para saber sobre esta seorita Marlene.
No ve que el tiempo se nos agota... A todo esto, cundo es San Juan?
Comisario: (Serio)En dos noches ms.

Detective

:(tratando de arreglar la situacin) Bueno, yo viajo ahora, llego


maana, hago la entrevista y me vengo, tal vez alcance a ayudarle a
hacer su rito...

Comisario

: No se moleste, sin Fe no funciona esto. Buenas Tarde... (Sale)

El detective se queda mirando los objetos un rato, despabila; cierra su maleta y se


sienta en una silla que se transforma en un viaje hacia el norte, un sueo leve y
saltn cubri sus ojos despertndolo en la sonora Capital, se diriji en taxi hasta
la embajada en cuestin, camin por jardines y un pasillo escondido dentro de una
gran casona antigua de corte Alemn, miraba ese lugar desconocido como un palacio
de cristal. Una Dama lo llev hasta donde se encontraba la seorita que el
solicitaba entrevistar. Se sent en una silla esper somnoliento hasta que apareci
la tan famosa Marlen.
Marlene

: Usted es el detective que anda por la muerte de Anselmo No?

Detective

: En efecto es un asesinato, porque encontraron al cuerpo sin vida, con


una pualada en el pecho.

Marlene

: Que horror!

Detective

: Por qu se encuentra en la Capital Seorita, sabiendo que Anselmo,


un muy conocido suyo, ha sido liquidado de esta manera? (pregunt
secamente)

Marlene

: (Afectada) Usted acaso no se da cuenta que el clima en esta fecha no


es de lo mejor por esos lugares, adems estoy esperando un nio y
no quiero que sufra el fro y la humedad de esos villorios.

Detective

: Ese hijo es de Anselmo?

Marlene

: No.

Detective

: Puede probarlo?

Marlene

: Es del Vendo.

Detective

: (anota curioso de ese personaje) Ese venado conoca a Anselmo?

Marlene

: S, tenan negocios.

Detective

: Compra y venta de oro o prestamos?

Marlene

: (Sorprendida de lo que tena que responder) si. Las dos.

Detective

: (Satisfecho) Alguna cosa que quiera agregar?

Marlene

: Sabe, no me siento bien, djeme pedirle que se retire por


favor...

Detective

: Gracias, no la incomodo ms.

El Detective sale del lugar. Toma una taxi, sube a un bus y llega al glido sur, su
cabeza da vueltas, muchas ideas golpean la cabeza, no ha dormido mucho y siente que
sus defensas han bajado considerablemente; gracias a este caso no se ha alimentado
bien, ni descansado, ni mucho menos le ha quedado tiempo para respirar. Cansado
llega a su habitacin y al entrar se encuentra con la instalacin que el Comisario
haba dejado en pleno centro de la pieza.
Detective

: Hoy es noche de San Juan!

X Escena El Crimen Intrigado por la composicin frente a l, dej sus maletas, comenz a observarla
detenidamente, mir el espejo, corrigi el leve desorden en la geometra del mazo,
contempl al joker, revis la vela, revis sus bolsillos, sac una tira de fsforos
y prendi la vela. Cuando terminaba de hacer esto, sonri (tal vez se sinti
ridculo realizando esta accin, pero bueno, nadie lo estaba mirando), mir
fijamente al espejo y pregunt solemnemente:
Detective

: Hoy es San Juan!?

Luego de esperar unos segundo y ocurrir nada, el detective realmente se sinti


ridculo apag la vela y se apresur a tomar las valijas para ordenar su ropa.
Pero cuando fue por equipaje se llev la sorpresa de que un hombre de semblante
desconocido pero familiar, entre sabio y grotesco; se encontraba parado detrs de
l, haba recorrido con su dedo desde la punta de la nunca hasta los ltimos huesos
de la columna, solt su maleta. Su primera reaccin fue la de defenderse, cubrirse,
pero luego not que el hombre solo estaba parado mirndolo apaciblemente, sin decir
nada. ste ltimo, al ver que su anfitrin no reaccionaba, tom asiento sobre la
mesa y comenz a prender un cigarrillo; pero antes de que lo prendiera el detective
lo detuvo por medio de un movimiento confuso, le apag el fsforo y le quit el
cigarro, cuando termin su accin se atrevi a decir:
Detective
: Soy agente oficial de las instituciones policiales de este pas, le
pido por favor se identifique y que con el sumo respeto que merece mi autoridad no
fume cigarros en mi habitacin (silenci como un nio luego de recitar poesa).
l

: (Caballerosamente) Lo del cigarro puedo hacer


la segunda no es tan fcil,
yo se que usted es hombre gil
y entender mi proceder
no es que yo no quiera querer,
es simplemente... que es usted
quin debe explicar a mi merced,
para qu me llam a llamar.
Si es slo para preguntar
sobre lo de San Juan o qu.

Confundido y sin entender, el detective reaccion a agarrar la vela y a disponerla


como un objeto amenazante ante el hombre que lo acababa de interpelar. El
interlocutor se vio ofendido ante la reaccin del otro.
Detective

: Esta usted detenido por irrupcin a morada de un oficial en serv...

: (colrico) Cllese imbcil! Entienda.


Porqu no haya aparecido
con estruendoso alarido
ni con alas, cachos y rienda
yo quiero que usted comprenda
que soy el mismo aparecido
ese que del cielo ha cado,
el que a su sangre desangr,
soy aquel querubn que pag
por todos tu libre albedro.

El detective comenz a hacerse reaccionar, no poda creer lo que suceda, pens que
todo era producto de su mal dormir, la fatiga que lo acosaba y la falta de energa,
sucumbi en la silla ms prxima y balbuce unas palabras.
Detective

: Tu eres parte de mi imaginacin. Estoy cansado y estoy teniendo


alucinaciones.

: Como sea me da lo mismo,


usted necesita ayuda
puedo disipar la duda
que usted tenga en algn caso... (insinuante)

Detective

: (Ofendido) No! No necesito del diablo para resolver mi trabajo.


(comienza a gritarle) Desaparece! Desaparece!

El hombre se acerca a l para tranquilizarlo, el otro se encrespa como un gato, el


visitante calmadamente le dice:
L

: Se comporta como un nio...


tranquilo, usted mrelo as,
soy su imaginacin, casi.
Soy una idea, soy como un guio,
soy el que de adentro alio
esa idea confusa, rara.
Quiero que usted vea la cara
del misterioso asesino,
permita que yo hile fino
y el crimen desenmascara.

Detective

: Tu quieres que yo piense eso... (reaccionando) No, espera tu eres


parte de mi imaginacin, no eres real, esto es un sueo en donde se me
puede devalar una verdad.

El

: (satisfecho) De eso se trata querido


Quiere descubrir el crimen?
Le ayudo con un resumen?
Aqu est lo sucedido.

Los pocos muebles que estaban en el escenario se abren hacia un infinito quedando
un lugar vaco con una msica abombada, la ropa del detective yaca bajo un manta y
un gorro que nunca en su vida haba ocupado, en el fondo se divisaba una delgada
figura masculina con un pual en la mano, unos espectadores semidormidos. Cuando el
sujeto del arma blanca procede a caminar uno de los espectadores comienza a narrar
todo lo que ocurra en ese tiempo aletargado.
Espectador : Anselmo grit para enfrentar del cual su orgullo y sus celos su
sangre clamaba, lo insult dicindole quera un minero pobre, que ya no
tena nada ms que barro entre sus botas, que la mina iba ser de l.
Que la Marlene no lo iba a querer que se fuera de este pueblo porque el
se encargara de que nadie le diera pega -Te maldigo! - Le alcanz a
gritar cuando el venado di tres pasos, enterr el cuchillo hasta el
final, lo saco lentamente y del lugar se alej y nada ms. Marlene
cuando lo encontr hasta el ro lo arrastr.
El detective se encontraba tirado en el suelo con un dolor corto punzante en el
pecho, ya no tena el poncho, ni el gorro, en la habitacin slo estaba la silla y
la mesa de costumbre, a lo lejos su maleta donde mismo haba quedado no haba
rastros del espejo, las cartas y ni la vela.
Escena XI El Papel Desde afuera se escucha que golpean la puerta y entran bruscamente, era el
comisario que se encuentra con el detective en el suelo, apretando fuertemente el
pecho como si tuviera una herida mortal, al revisar, se percata que no tiene nada y
lo estira en el suelo como si calmase a una persona con una crisis epilptica,
cuando el detective logra despertar, comienza a repetir palabras y nombres
inconexos el venado fue El cuchillo en el pecho el papel debajo del libro.
Despus de un momento, ya reincorporado le dice al Comisario:
Detective: Por favor! Vamos a la casa de Anselmo ah est el papel con los datos
del Venado, l es el asesino! Comisario, disculpe por insultarlo antes
de irme al Norte, pero estaba alterado...
Comisario

: No se preocupe, despus conversamos sobre trivialidades, vamos a la


casa del usura.

Detective

: Que hora es?

Comisario

: Las ocho y treinta de la maana...

Detective

: Gracias seor...

El comisario atiende a la urgencia del detective y lo ayuda a dirigirse hasta la


casa de Anselmo, cuando llegan a esta casa-almacen, una criada los atiende y los
hace pasar hasta la oficina del viejo, el detective hurguetea debajo de un libro
que se encontraba sobre la mesa y ah estaba el papel con el nombre de todas las
personas a las cuales le hacia prestamos o tena negocios ilegales, estaba tambin
el seudnimo del venado anotado ah y remarcado. Las cosas estaban ms que claras
haba que ir a buscar al bandido, pero una nota detrs del papel lo hacia detener
su iniciativa. Desenvuelve lo escrito, la nota deca algo as:
Ancelmo

: Dicen que no me quiere


La Juana Prez.
Cuando me v con plata
casi se muere...
La Marlene, prea del perro
yo como un viejo feo y slo
me queda el brillante oro
y un grande y brillante cerro.
Yo le entrego mi alma al diablo
vengndome delante de l,
me asesino sin conocer
ese gran amor eterno,
la sonrisa del pequeo,
de mi nio sin conocer.
Que el que la vida me cag
que l sea el que me liquide
es lo que mi alma me pide,
pero el asesino soy yo.
Le dejo todos mis vienes,
a ese querubn que vendr,
porque si sigo en la ram,
me gasto todos los miles
acto como los cobardes,
ni pa colgarme me atrevo
por eso es que as resuelvo
al coludo visarle el poder
y que me ayude a proteger
lo que a mi hijo yo devuelvo.

Detective

: Comisario detngase no busquemos ms, esto no es asesinato, esto es


un suicidio, no busque al venado, este hombre se mat.

Comisario

: Est seguro detective, mire que su palabra es ley.

Detective

: As es, resolvamos que se suicid, terminemos esto de una vez y


descansemos, respiremos, tomemos aire y dejemos de pensar en este caos.

Comisario

: Que caos detective?

Detective

: Nada Comisario, slo divago. Le parece que vamos a tomar una bebida?

Comisario

: Se siente bien?

Detective

: Slo me falta sueo... me quiero sentar un poco en la plaza y


respirar, ver como la gente pasa, es bien bonita, pero desde que llegu
aqu no he podido contemplarla.

Comisario

: Vamos a tomarnos una bebida all... esa plaza tiene una historia,
dicen que cuando uno da doce vueltas alrededor de ella, a las doce de
la noche, uno se pierde, aparece en la misma plaza pero en los tiempo
en los que esto estaba colmado de... mapuches...
(Salen)

FIN

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