Derecho Civil - Parte General
Derecho Civil - Parte General
Derecho Civil - Parte General
Ducci
Claro
DERECHO
CIVIL
PARTE GENERAL
Cuarta edicin
Salesianos
S. A.
IN CHILE
CARLOS
lHJCCI CLARO
DERECHO CIVIL
PARTE GENERAL
EL DERECHO
PRIVADO y EL DERECHO
CIVIL
TEORIA DE LA LEY
SUJETOS DEL DERECHO
OBJETOS DEL DERECHO
LA RELACION JCRIDICA DE DERECHO PRIVADO
TEORIA DE LOS ACTOS JURIDICOS
TEORIA DE LA PRUEBA
CUARTA EDICION
EDITORIAL
IURIDICA
DE
CHILE
CAPTULO
INTRODUCCION
EL ORDENAMIENTO jURIDICO
l. El ordenamiento jurdico est constituido por el conjunto
de imperativos jurdicos vigentes en una comunidad.
Estos imperativos, creados o reconocidos por el Estado y sancionados por l, constituyen el ordenamiento jurdico estatal. Pero
aunque ste es el ms importante de los ordenamientos jurdicos,
no es el nico. Existe una pluralidad de ellos.
El de los dems Estados forma el ordenamiento internacional;
ste slo puede tener autoridad en el rgimen interno en cuanto
y en la medida en que el Estado le reconozca eficacia.
Finalmente, dentro del mismo Estado pueden existir otros
complejos jurdicos, otros estatutos, que podrn tener valor en
cuanto el propio Estado se los conceda.
Dentro del ordenamiento estatal interno, los preceptos jurdicos tienen ciertas caractersticas.
En primer trmino tenemos la alternatividad o bilateralidad
del derecho. Esto significa que el derecho regula las relaciones
entre los hombres. Una conexin entre dos trminos, los cuales se
influyen recprocamente.
Como lo veremos ms adelante, estas relaciones humanas reguladas por el derecho constituyen la relacin jurdica.
En segundo lugar debemos sealar la estatalidad del derecho.
Dentro de este trmino se encierran dos conceptos distintos. PriIIHTO, que es el Estado el que crea o reconoce las normas obligatoriax. Segundo, que es el Estado el que garantiza la observancia
<Id orclcnamicruojurfdico.
1\1dccir qll(' e-l Estado "crea () reconoce" las normas, significa1I10S que (alcs prc('<')l(oS
pue-den ser dictados directamente por el
lO
INTIH
)1)\ 1(:(:1< JN
11
DERECHO
1"
INIWl!HI(:(:U)N
2 EDUARDO
GARCL>\ MAYNEZ. Introduccin al estudio del derecho. Porra,
1974,N"71.
:l ARISTOTELES.
Etica a Nicomaco. Inst. de Estudios Polticos. 1970. Cap. V,
prrafos 3" y 4.
GUSTAV RADBRUCH. Introduccin a lafilosofia del derecho. Fondo de Cultura
Econmica. 1965, pg. 31.
14
EL DERECHO PUBLICO
5. Si analizamos las distintas actividades que el derecho pblico debe reglamentar, considerando las diversas funciones que corresponden al poder, podemos resumirlas en cuatro categoras
esenciales: la funcin constituyente, la legislativa, la administrativa
y la judicial.
La funcin constituyente organiza el Estado; la funcin legislativa dicta las normas que rigen en la comunidad; la funcin administrativa vela por la aplicacin y cumplimiento de las leyes; la
funcin judicial, finalmente, resuelve los conflictos que se produzcan en el medio social.
Algunos autores consideran la actividad administrativa en trminos ms restringidos, estimndola slo como una parte de la
funcin ejecutiva o de gobierno que consiste en la formulacin de
polticas destinadas a asegurar la paz y la seguridad colectivas
como condicin necesaria para el normal desenvolvimiento de la
vida social.
La formulacin de polticas es una actividad de gobierno, pero
la realizacin legislativa y, en todo caso, su aplicacin concreta
implica siempre el desarrollo de una actividad o funcin administrativa.
Las funciones que integran el derecho pblico tienen fundamentalmente una cosa en comn y es que ellas deben basarse en
la juridicidad. Lo anterior se refleja en el concepto corrien te de
que en derecho pblico slo puede realizarse lo que est expresamente permitido o autorizado por la ley.
I NTR(
)PII(
:(
:I()N
is
DERECHO
1NIRUllll(
:(:1< lN
17
IH
INIR(
HllJC<:1< IN
1\1
20
DERECHO
TNTRODUCCION
21
DERECHO
INTRODUCCION
23
24
DERECHO
TNTRODUCCT()N
25
26
DERECllO
INTRODUCCION
27
1('
28
DERECHO
cida en forma genrica en el art. 12 al disponer que pueden renunciarse los derechos que slo miren el inters individual del renunciante. Dentro del mismo criterio el arto 1126 seala que si se lega
una cosa con la calidad de no enajenarla, la clusula se tendr por
no escrita, salvo que la enajenacin comprometiere algn derecho
de tercero. Por su parte el arto 1661 dispone que la compensacin
no puede tener lugar en perjuicio de los derechos de un tercero.
Generalmente la legitimidad o ilegitimidad de los derechos de
un tercero depende de si est o no de buena fe, lo que corresponde a si ignora o sabe la situacin antijurdica que puede desenvolverse en su contra. As, si est de buena fe, no le perjudica la
nulidad del contrato de sociedad en las acciones que le correspondan contra todos y cada uno de los asociados por las operaciones
de la sociedad (art. 2058 C. C.). Asimismo tendr acciones contra el
mandatario si el mandato expira por una causa ignorada del mandatario o ste, sabedor de la causa, hubiere pactado con l (art. 2173
C. C.). Tal vez el caso ms claro es que en la resolucin no proceda
la accin reivindicatoria contra terceros poseedores de buena fe
(art. 1490 C. C.); del artculo 1491 resulta que esta buena fe consiste en haber ignorado la existencia de la condicin.
Hay muchas otras disposiciones que se refieren a esta materia.
El art. 927 autoriza, en la accin posesoria de restitucin, para
cobrar perjuicios al tercero de mala fe. El arto 976 dispone que la
accin de indignidad no pasa contra terceros de buena fe. El
arto 2303 seala que el que pag lo que no deba, no puede perseguir la especie poseda por un tercero de buena fe.
En resumen, la autonoma de la voluntad tiene una amplia y
clara limitacin en cuanto no puede atentar contra los derechos
legtimos de terceros. Incluso al definir el dominio el artculo 582
dice que es el derecho real sobre una cosa corporal, para gozar y
disponer de ella arbitrariamente; no siendo contra ley o contra
derecho ajeno. Esta limitacin no se aplica slo al dominio, ya
que el art. 583 dice que sobre las cosas incorporales hay tambin
una especie de propiedad, concepto que ampla el N 24 del art. 19
de la Constitucin, al sealar que se tiene el derecho de propiedad en sus diversas especies sobre toda clase de bienes corporales
o incorporales; por lo tanto, las limitaciones al ejercicio del dominio se aplican tambin a todos los dems derechos.
-La buenafe
24. Un segundo principio fundamental en nuestro derecho
privado lo encontramos en la proteccin de la buena re y, conse-
INTRODUCCJON
cuencialmente, en el castigo de la mala fe. Ms de cuarenta disposiciones del Cdigo se refieren a la buena fe y otras tantas a la
mala fe.
Tampoco este principio est expresado en una frmula general, pero se encuentra en el trasfondo de todas las instituciones."
Tal vez la disposicin ms directa sea el inciso final del artculo 44,
que define el dolo como la intencin positiva de inferir injuria a la
persona o propiedad de otro. Pero si analizamos el concepto, vemos que la mala fe no siempre consiste en una intencin positiva,
puede significar una actitud culpable y desprejuiciada; por otra
parte, la mala fe no siempre va a ser necesariamente dirigida contra
otra persona; puede motivarse por un simple deseo de beneficio
personal o por tratar de soslayar requisitos o prohibiciones legales.
Por lo dems, la buena fe no es un concepto nico; bajo su
denominacin se agrupan dos situaciones distintas, perfectamente diferenciables. Ellas tal vez se reflejan en el lenguaje corriente,
pues entendemos que son dos conceptos diversos el estar de buena fe que el actuar de buena fe.
En el primer caso, la buena fe aparece como una actitud mental, actitud que consiste en ignorar que se perjudica un inters
ajeno o no tener conciencia de obrar contra derecho, de tener un
comportamiento contrario a l. El otro aspecto de la buena fe
consiste en la fidelidad a un acuerdo concluido 0, dentro del
Crculo obligatorio, observar la conducta necesaria para que se
cumpla en la forma comprometida la expectativa ajena. El primero es el estado de conciencia en un momento determinado; el
otro, la realizacin de una conducta.>
Ambos aspectos de la buena fe estn considerados en nuestro
derecho. El primero est claramente establecido en el arto 706 que
define la buena fe en materia posesoria como "la conciencia de
haberse adquirido el dominio de la cosa por medios legtimos,
exentos de fraude y de todo otro vicio". Lo encontramos en el
matrimonio putativo que, de acuerdo al art. 122, produce los mismos efectos civiles que el vlido respecto del cnyuge que de buena
fe y con justa causa de error lo contrajo. Los arts, 906 y sigtes. en las
prestaciones mutuas atienden a la buena o mala fe del poseedor
vencido, y el art. 913 seala que ella se refiere "relativamente a los
frutos, al tiempo de la percepcin, y relativamente a las expensas y
30
DERECHO
INTRODUCCION
31
"R.
1'. ~07.
(:'IIIS.
(H.
32
DERECHO
INTRODUCCION
33
1:1
.rrts. H 12 a H22 del Cdigo Civil alemn (BGB); los arts. 62 a 67 del Cdigo suizo
l le las Ohligaciones.
34
IlERECIIO CIVIL.
PARTE GENERAL
INTRODUCCION
35
11
R. D.J,
1.
7:), s. 1, p. 11'1.
36
DERECHO
37
INTRODUCCION
1:,
partt', Derecho,
p. HI.
38
DERECHO
y minuciosidad excesivas". Seala como lo ms interesante de poner en relieve la gran diversidad de fuentes que lo inspiraron,
recalcando su influencia en Amrica y cmo esta influencia alcanza a la codificacin espaola.I"
Principales
leyes modificatorias
16
manca,
INTRODUCCION
39
CAPTULO
LA NORMA]URIDICA
II
DE DERECHO PRIVADO
42
DERECHO
LA NORMAJURIDlCA
DE DERECHO
PRIVADO
43
LA LEY
- Concepto
44
DERECHO
1 MARCEL
PLANIOL,
1928, N 144.
lA NORMAjURIDICA
g.
DE DERECHO
PRIVADO
45
46
DERECHO
47
p.
:' R. 1). J. 1. 7~). s, (i, p. :!(): p. ~)7: p. 100. T. HO, x. (i, p. 7:;. T. Hl, s.6,
H:!, x, (i, p.l: p. :!; p. (i(i; p. m.
m. T.
p. 1;
48
DERECHO
R. D. J, t. 82, s. 5, p. 59.
lA NORMAJURlDlCADE
DERECHO
PRIVADO
49
.50
DERECHO
CI\1L.
PARTE GENERAL
En especial en cuanto a la materia, ya que sta debe ser sealada en forma precisa y se eliminan muchas de las posibilidades
de delegacin, especialmente las que deben ser materia de leyes
orgnicas constitucionales o de qurum calificado.
Se restringe tambin en cuanto al plazo ya que el trmino de
la delegacin no puede ser superior a un ao.
Por ltimo en cuanto a su tramitacin, ya que sta no es la de
los simples decretos sino que estarn sometidos en cuanto a su
publicacin, vigencia y efectos, a las mismas normas que rigen
para la ley.
Durante las situaciones de emergencia que ha vivido el pas,
en las cuales se ha interrumpido el funcionamiento normal del
poder legislador, la facultad legislativa ha sido ejercida por el
ejecutivo por medio de disposiciones legales que se han denominado decretos-leyes.
Respecto de los primeros, dictados hace ms de cincuenta
aos, se discutieron su legalidad y eficacia. La realidad prctica
determin que ellos fueran aceptados.
Desde 1973 y hasta la vigencia de la Constitucin de 1980 se
estableci un ordenamiento jurdico provisorio en que la regulacin legal se efectu por medio de los decretos-leyes dictados
dentro del marco de la Constitucin de 1925 y de las modificaciones introducidas asta, especialmente por las Actas Constitucionales.
Estos decretos-leyes tienen una numeracin progresiva, hasta
el nmero 3.660, y se encuentran comprendidos entre las leyes
Ns 17.982 y 17.983.
Los decretos-leyes tienen, en consecuencia, las mismas limitaciones y fuerza obligatoria de las leyes.
Al mismo tiempo, mientras los decretos corrientes pueden ser
modificados por otro decreto, tanto los decretos con fuerza de ley
como los decretos-leyes slo pueden serlo por una disposicin de
jerarqua legal.
- Inconstitucionalidad de las leyes
40. La ley, en sentido estricto, est subordinada a la Constitucin. Si la ley se aparta o contradice alguna de las normas que la
Constitucin establece, nos encontramos frente a una ley inconstitucional." La in constitucionalidad puede ser tanto de forma como
R, D,
l, t.
79, s. 5, p, 1.
lA NORMAjURIDlO\.
DE DERECHO
PRIVADO
51
"R. n.j.,
1.
XI,
S. ['"
p. ~Ir,.
52
DE lAS LEYES
R. D. J.,
t.
53
54
DERECHO
de la
ley
42. En derecho pblico slo es lcito hacer lo que expresamente permiten las leyes.
Este principio fundamental est establecido en el artculo 7
de la Constitucin. Dicha disposicin establece: "Los rganos del
Estado actan vlidamente previa investidura regular de sus integrantes dentro de su competencia yen la forma que prescriba la
ley.
Ninguna magistratura, ninguna persona ni grupo de personas
pueden atribuirse, ni aun a pretexto de circunstancias extraordinarias, otra autoridad o derechos que los que expresamente se les
hayan conferido en virtud de la Constitucin o las leyes.
Todo acto en contravencin a este artculo es nulo y originar
las responsabilidades y sanciones que la ley seale".
Por su parte el Cdigo Civil establece en su artculo 1462 que
hay objeto ilcito en todo lo que contraviene el derecho pblico
chileno.
La sancin en ambos casos es, por lo tanto, la nulidad.
En derecho privado el principio general es diverso. Se permite hacer todo lo que no est directa o indirectamente prohibido
por la ley. La libertad de los particulares para actuar en la vida
jurdica es la norma comn.
El principio de la autonoma de la voluntad, que establecen
en especial los artculos 12 y 1545 del Cdigo Civil, da a los parti-
LA NORMAjURlDICA
DE DERECHO PRNADO
55
56
DERECHO
1977. Vol. 1,
1957.
.',7
c.
H
'1
58
DERECHO
11
12
R. D.J,
R. D. J,
t.
t.
38, s. 1, p. 414.
43, s. 51 p. 339.
LA NORMAJURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
59
- Leyes prohibitivas
45. Las leyes prohibitivas contienen el mandato de no hacer
algo y no lo permiten en ninguna circunstancia.
En realidad ley prohibitiva y acto prohibido por la ley son una
misma cosa.
Respecto a las leyes prohibitivas hay que recalcar dos aspectos.
En primer trmino, que para que una disposicin sea prohibitiva
el acto no debe poder realizarse bajo ningn aspecto ni en ninguna circunstancia. Si la ley autoriza o permite realizar el acto en
determinadas condiciones no es prohibitiva sino imperativa. En
segundo lugar, no es necesario que la ley emplee la expresin "se
prohbe"; ser siempre prohibitiva si no permite realizar el acto
aun cuando utilice cualquiera otra expresin.
De acuerdo con lo anterior, son prohibitivas la disposicin del
arto 1796 del Cdigo Civil, que declara" ...nulo el contrato de compraventa entre cnyuges no divorciados perpetuamente, y entre el
padre o madre y el hijo de familia", y la del arto 402 el Cdigo
Civil que prohbe al guardador la donacin de bienes races del
pupilo, aun con previo decreto del juez. Los actos contemplados
en estas disposiciones no pueden realizarse en forma alguna.
En cambio no es prohibitiva la disposicin del art. 1797 del
Cdigo Civil, pues los administradores de establecimientos pblicos pueden efectuar las ventas contempladas en l con autorizacin de la autoridad competente.
Respecto a las distintas expresiones de que el Cdigo se vale
para establecer la prohibicin, podemos sealar: es prohibida
(art.402), no vale (art.1465), no valdr (arL1892), es nulo
(arts. 1462 y 1796), se tendr por no escrita (art, 1892), no dejarn de serlo (art. 1469), pero slo despus de (art. 2494), es indelegable (art, 1004), etc.
46. El art. 10 del Cdigo Civil dispone que "los actos que prohbe la ley son nulos y de ningn valor; salvo en cuanto designe
expresamente otro efecto que el de nulidad para el caso de contravencin".
De acuerdo con este precepto tenemos entonces que por regla
g('lll'ralla sancin por infraccin de una ley prohibitiva es la nulidad.
l." disposicin
del art, 1() la reitera el arto 1466 del Cdigo
(:ivil que dice <JIU' hay ol~j(to ilcito ('11 todo contrato prohibido
so
DERECHO
por las leyes. La sancin del objeto ilcito es, de acuerdo con el
arto 1682 del Cdigo Civil, la nulidad absoluta.
Sin embargo, el mismo arto 10 nos seala que la sancin de
nulidad absoluta tiene salvedades y ello sucede cuando la propia
disposicin prohibitiva seala otro efecto que el de nulidad para
el caso de contravencin.
Ejemplos de tales disposiciones que sealan una sancin distinta de la nulidad los encontramos en el arto 407 del Cdigo
Civil, referente al arriendo por el guardador de los predios rsticos del pupilo; en los arts. 745 y 769 del Cdigo Civil, referente a
los usufructos y fideicomisos sucesivos; en el arto 2206, referente a
los intereses en el mutuo, ete.
- Leyes imperativas
47. Las leyes imperativas son las que imponen la obligacin
de hacer algo o el cumplimiento de un requisito.
As son disposiciones imperativas, porque ordenan hacer algo,
la del arto 1826 del Cdigo Civil, que establece que el vendedor es
obligado a entregar la cosa vendida inmediatamente despus del
contrato, o en la poca prefijada en l, y la del art. 378 que obliga
al guardador a inventariar los bienes del pupilo, y son imperativas
porque imponen el cumplimiento de un requisito, la disposicin
del arto 1011 del Cdigo Civil que establece que el testamento
solemne es siempre escrito y la del ine. 2 del arto 1801 que exige
el otorgamiento de una escritura pblica para la venta de bienes
races, servidumbres y censos, y de una sucesin hereditaria.
48. La sancin de las leyes imperativas no es siempre la misma.
Para determinar su sancin debemos distinguir si dichas disposiciones son de inters pblico o general o si son simplemente
de inters particular o privado.
Por lo general se considera que son disposiciones imperativas
de orden social o general las que dicen relacin con el orden
pblico y las buenas costumbres.
49. El concepto de orden pblico es extremadamente difcil
de precisar.
En general puede decirse que est constituido por el conjunto
de reglas esenciales para el mantenimiento de la sociedad.
Junto a esta definicin, inevitablemente vaga, podemos sealar el criterio de algunos autores que consideran de orden pbli-
LA NORMAjURIDICADE
DERECHO PRIVADO
61
co todo lo que en las leyes interesa ms directamente a la sociedad que a los particulares, o la opinin de Planiol que estima que
una ley de derecho privado es de orden pblico si est inspirada
en una consideracin de inters general, que se encontrara comprometida si los particulares pudieran impedir libremente su aplicacin.
Dentro de este concepto tendremos algunas que dicen relacin con el orden pblico, en primer trmino, las leyes de derecho
pblico. El art. 1462 del Cdigo Civil nos dice que hay objeto ilcito
en todo lo que contraviene el derecho pblico chileno. Sern
tambin de orden pblico las disposiciones de derecho privado
que no pueden renunciarse por los particulares de acuerdo al
arto 12 del Cdigo Civil, porque no miran a su solo inters individual o est prohibida su renuncia. Igualmente las que no pueden
ser alteradas por los particulares, como los derechos y obligaciones
entre los cnyuges de acuerdo al arto 1717 del Cdigo Civil. Por
ltimo sern tambin de orden pblico las normas que no pueden
ser excluidas por voluntad de las partes. As tenemos el arto 1469
del Cdigo Civil que niega valor a las clusulas en que se renuncie
a la accin de nulidad y el arto 1892 del Cdigo Civil que declara
que no valdr estipulacin en que se diga que no podr intentarse
la accin rescisoria por lesin enorme, o el art. 2494 del C. C. que
prohbe renunciar anticipadamente a la prescripcin.
Otros autores, para determinar el carcter de orden pblico
de las leyes, atienden a la naturaleza del vnculo que las liga al
inters de la sociedad. Desde este punto de vista son de orden
pblico las leyes relacionadas con la organizacin poltica. Lo son
tambin las leyes relacionadas con la organizacin econmica en
cuanto tienden a la proteccin de derechos de terceros y de ciertos contratantes que la ley estima se encuentran en inferioridad
de condiciones, e igualmente en cuanto organizan la propiedad
raz y el crdito territorial. Son tambin de orden pblico las leyes
relacionadas con la organizacin social en cuanto organizan la
familia y regulan el estado y capacidad de las personas. Por ltimo
son de orden pblico ciertas leyes relacionadas con la organizacin moral como las que prohben los juegos de azar (art. 1466
del C. C.), fijan los impedimentos dirimentes para el matrimonio
(art, 5 de la Ley de Matrimonio Civil), o restringen la procedencia de la investigacin de la paternidad (arts, 272 y 288 del Cdigo
Civil).
Se ha expresado tambin que son de orden pblico las norlilas destinadas a cumplir con los fines esenciales del Estado, que
estn establecidas en el inlers g'cneral y no dicen relacin inmedi.ua y dircrta COIl los dncdlOs SlIhjclivos de los particulares. Su
1'11,
GENERAL
DERECHO
CIVIL. PARTE
t ravcncin
existe por el solo hecho de lesionar el orden jurdi('() objetivo, aunque de esa infraccin no resulte lesin de dere('hos subjetivos.l"
('011
SO. Las buenas costumbres corresponden a las normas morales conforme a las cuales se procede en forma concreta por la
generalidad de las personas de una sociedad en una poca determinada.
El Cdigo Civil se refiere a las buenas costumbres en numerosas disposiciones. As tenemos los arts. 58, 1461, 1475 Y 1717.
El art. 1467 en su inciso final al decirnos que tiene causa ilcita
la promesa de dar algo en recompensa de un crimen o de un
hecho inmoral, en realidad nos est sealando un ejemplo de una
causa contraria a las buenas costumbres.
51. La sancin de las leyes imperativas de inters general ser
la nulidad absoluta en cuanto el acto que las contravenga adolezca de objeto o causa ilcitos, o, si dichas leyes imponen un requisito, se trata de formalidades exigidas para ciertos actos y contratos
en atencin a la naturaleza de ellos.
La sancin, en cambio, ser la nulidad relativa si dichos requisitos se exigen en atencin a la calidad de las personas que los
ejecutan o acuerdan.
Podr tambin la propia disposicin sealar una sancin especial para el caso de incumplimiento (inc. 4 arto 146 C. C.).
Existen requisitos formales que slo estn establecidos por
razones de publicidad o de prueba. El no respetarlos traer como
sancin en unos casos la inoponibilidad; en otros, la limitacin de
los medios probatorios para acreditar el acto.
Hay excepcionalmente requisitos cuya omisin no est sancionada (art. 1026 en relacin con los arts. 1016, 1023 inc. 5 y 1024
inc. 2 del C. C.).
La sancin de las leyes imperativas de inters particular ser,
en caso de infraccin, la responsabilidad como norma general.
La responsabilidad por la infraccin de la norma imperativa
que obliga al cumplimiento de las obligaciones contractuales est
tratada en forma genrica en el Ttulo XII del Libro IV del Cdigo Civil relativo al efecto de las obligaciones.
A ms de la responsabilidad, el incumplimiento de estas obligaciones puede significar la sancin adicional de dejar sin efecto
el contrato a travs de su resolucin o terminacin.
13
lA NORNL\.[URlDICA
DE DERECHO
PRIVADO
63
Sin embargo, una disposicin especial de la ley puede establecer una sancin diferente, como lo deja a salvo el inciso final del
arto 1547 del C. C. (p. ej., art. 378 del C. C.).
La responsabilidad no slo est establecida en el Cdigo Civil
como una norma general de sancin sino que adems en numerosas disposiciones seala en forma especfica su procedencia (p. ej.,
arts, 1826, 1873, 1926,1929,1945,2083,2129,2178,2222,
etc.).
La responsabilidad ser tambin la sancin de la disposicin imperativa que surge de los artculos 2284 y 2314 del Cdigo Civil y que configuran la obligacin de no inferir un dao
ilcito a otro.
De ellos surge una institucin fundamental del ordenamiento
jurdico que denominamos la responsabilidad extracontractual.
- Leyes permisivas
52. Las leyes permisivas confieren un derecho que queda entregado al arbitrio del titular.
Las dems personas deben respetar este derecho y pueden, en
caso necesario, ser forzadas a ello o a indemnizar los perjuicios
resultantes para el titular si no lo hacen.
Por lo tanto podemos decir que la sancin de la ley permisiva
consiste en darle al particular los medios para obtener el reconocimiento de su derecho o la indemnizacin de los perjuicios que
le acarree su desconocimiento.
Los particulares pueden s renunciar a los derechos que les
confieren las leyes permisivas. El arto 12 del Cdigo Civil dice que
podrn renunciarse los derechos conferidos por las leyes, con tal
que slo miren al inters individual del renunciante y que no est
prohibida su renuncia.
Por lo tanto, los derechos conferidos por la ley no pueden
rcnunciarse, en primer trmino, si stos miran al inters general o
afectan intereses de terceros. No pueden renunciarse tampoco si
la ley expresamente prohbe su renuncia. Ejemplos de tales prohibiriones los tenemos en los arts. 153, 334 Y 1001 del Cdigo Civil,
1 !J(>9 (nulidad absoluta); 2494 (prescripcin no cumplida).
En cambio la rescisin o nulidad relativa los interesados pueden renunciarla (arts. 1684 y 1693 C. C.). Tambin el artculo 5
del Cdigo del Trabajo dispone que los derechos establecidos por
bs leyes laborales son irrenunciables.
:);~. En esta materia ('S preciso distinguir entre el no ejercicio y
LI nuunti de 1111 derecIJo.
64
DERECHO
EFECTOS
DE LA LEY
- Aspectos a considerar
- Promulgacin
y derogacin
LA NORMAjURlDICA
DE m:RECHO
PRIVADO
65
11
R.
I).J.
1. HO. s,
f. p. 11;:'
66
DERECHO
"
G
R. D.J, t. 80,
R. D. J., t. 78,
S.
S.
LA NORMA]URlDICA
DE DERECHO
PRIVADO
67
17
R. I).J,
1. HO, s. '2,
p, 10'2,
68
DERECHO
de la ley
18
R. D.].,
t.
LA NORMA]URIDICA
DE DERECHO
PRNADO
70
DERECHO
CIVIL. PARrE
GENERAL
- Leyes interpretativas
63. Merecen un anlisis especial las leyes interpretativas. Leyes interpretativas son aquellas que aclaran el sentido de otras
leyes.
El concepto de ley interpretativa se opone al de ley modificatoria. La ley modificatoria deroga y reemplaza la ley modificada.
La ley interpretativa no; ella y la ley interpretada constituyen dos
leyes coexistentes en torno al mismo objeto.
El carcter interpretativo de una ley debe nacer de su propia
naturaleza. No ser necesario que establezca expresamente su carcter interpretativo si l resulta de su propio contenido. Por el contrario, una declaracin expresa de su carcter interpretativo no le dar
tal naturaleza si en realidad se trata de una ley modificatoria.
El inciso 2 del artculo 9 del Cdigo Civil dispone que
.las
leyes que se limiten a declarar el sentido de otras leyes, se entendern incorporadas en stas; pero no afectarn en manera alguna
los efectos de las sentencias judiciales ejecutoriadas en el tiempo
intermedio". Lo anterior implica que la ley interpretativa es siempre y necesariamente retroactiva, ya que se entiende incorporada
a la ley anterior interpretada.
El carcter retroactivo de las leyes interpretativas tiene dos
rdenes de limitaciones. En primer trmino tendr las limitaciones generales de carcter constitucional que hemos sealado al
referirnos a las leyes retroactivas. En segundo lugar tiene la limitacin que seala el artculo 9 del Cdigo Civil, y es la de que ellas
no afectarn en manera alguna los efectos de las sentencias ejecutoriadas en el tiempo intermedio.
De ello resulta que si el juez ha interpretado algn precepto
legal en un sentido determinado en una sentencia que se encuentra ejecutoriada, dicha interpretacin se mantiene no obstante
que el legislador interprete posteriormente el precepto de una
manera diversa.
Aunque la interpretacin del legislador tiene una obligatoriedad general, ella no llega a alterar la interpretacin judicial ya realizada. Esta disposicin seala que, en el caso particular sometido a su
decisin, el juez es la autoridad definitiva para fijar el derecho.
ce
de las Leyes
LA NORMAURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
7J
1')
211
R. I l. J, 1. H~, x. 1, JI .. I:\.
R. D.J, 1. 77, s. :\, p. 17: 1. HI, x, '2, JI. (iH.
72
DERECHO
L\ NORMAJURlDICA
DE DERECHO
PRIVADO
73
la extensin del derecho, se atenta en realidad al derecho adquirido, que puede ser totalmente suprimido por la nueva legislacin.
d) Posesin. Se refiere a ella el art. 13 de la ley.
La ley posterior rige tanto la retencin como la prdida o
recuperacin de la posesin. En realidad la posesin queda totalmente entregada a la nueva ley. Es lgico, ya que la posesin no
constituye un derecho.
e) Derechos condicionales. Art. 14 de la ley.
El plazo para que se considere fallida una condicin bajo la
cual se ha definido un derecho es el de la ley antigua, a menos que
excediere el establecido en la ley nueva a contar desde su vigencia.
f) Sucesiones. Arts. 19, 20 Y21 de la ley.
Las solemnidades o requisitos externos de los testamentos se
rigen por la ley vigente a la poca de su otorgamiento.
Las disposiciones testamentarias y, por lo tanto, las reglas que
fijan la incapacidad o indignidad de los herederos o asignatarios,
las legtimas, mejoras, porcin conyugal y desheredaciones, se rigen por la nueva ley.
Nada dice la ley respecto de los requisitos internos del testamento, como la capacidad y libre voluntad del testador. Algunos
autores estiman que ellos deben regirse por la ley vigente a la
apertura de la sucesin; otros, a la ley vigente al otorgarse el
testamento; otros, en fin, que deben conformarse tanto a la ley
vigente al otorgarse e! testamento como a la apertura de la sucesin. La opinin hoy da ms aceptada es que ellos se rigen por la
ley vigente al tiempo de otorgarse el testamento.
En las sucesiones forzosas o intestadas el derecho de representacin de los llamados a ellas se rige por la ley bajo la cual se
hubiere verificado su apertura.
La adjudicacin o particin de una herencia o legado se rige
por la ley vigente al tiempo de su delacin.
Debe hacerse presente que de acuerdo a los arts. 955 y 956 de!
Cdigo Civil la sucesin de una persona se abre en e! momento
de su muerte y que en ese momento se defieren tambin las
herencias o legados.
g) Contratos. Arts. 22 y 23 de la ley.
El art, 22 de la ley de efecto retroactivo establece el principio
fundamental de que en todo contrato se entendern incorporadas las leyes vigentes al tiempo de su celebracin.
Por lo tanto, es la ley antigua la que rige tanto los requisitos
c-xrr-rnos corno los requisitos internos de los actos y contratos y
;1'-'11 m.is los ekclos
d(' dichos actos en el futuro.
E,~I('pri nri pio, d(' ('1101111(' i III porta nr.ia en la vida del derecho,
v '111(' ('S d(' ;Iplil';l('i('1I1 1'1;iclic;llll('I1(('
unive-rsal, pl<ll1le<l ('11 n-ali-
74
DERECHO
21
22
lA NORMA.lURIOlCA
DE DERECHO
PRIVADO
75
67. El artculo 14 del Cdigo Civil dispone que "La leyes obligatoria para todos los habitantes de la Repblica, inclusos los
cxr ranjeros".
~\ R.
I}.J.
1.
76
DERECHO
Es decir, toda persona que habite el territorio chileno, cualquiera que sea su nacionalidad, est sujeta a la ley chilena.
Esta disposicin puede relacionarse con el domicilio poltico a
que se refiere el artculo 60 del Cdigo Civil, que dice que es el
"...relativo al territorio del Estado en general. El que lo tiene o
adquiere es o se hace miembro de la sociedad chilena, aunque
conserve la calidad de extranjero". Todo el que habite en el pas
tiene domicilio poltico en Chile, de acuerdo al artculo 60, y est
sometido a la ley chilena, de acuerdo al artculo 14.
Las excepciones a este principio, reconocidas por el derecho
internacional y relativas a la persona de un Soberano extranjero,
de los Agentes Diplomticos y de las naves de guerra o tropas
extranjeras en trnsito, estn analizadas en una sentencia de la
Corte de Apelaciones de Santiago de 24 de septiembre de 1926
(R. D.]., t. 25, s. 2, pg. 49).
Naturalmente el que la ley sea obligatoria para todos los habitantes no significa que en todo momento deban cumplir todos
con todas las leyes. La ley ser potencialmente obligatoria para
todos, pero slo obligar efectivamente a los que se encuentren
en las circunstancias determinadas por la ley.
El concepto de chileno o extranjero lo establece el artculo 56
del Cdigo Civil al decir que: "Son chilenos los que la Constitucin
del Estado declara tales. Los dems son extranjeros".
Pero al mismo tiempo que el Cdigo somete a los chilenos y a
los extranjeros a la ley chilena, iguala o asimila a los extranjeros
en materia de derechos civiles. El artculo 57 del Cdigo Civil
dispone. "La ley no reconoce diferencias entre el chileno y el
extranjero en cuanto a la adquisicin y goce de los derechos civiles que regla este Cdigo".
Esta asimilacin o igualdad del extranjero frente a la legislacin civil tiene algunas excepciones. El propio Cdigo Civil prohbe a los extranjeros transentes pescar en el mar territorial
(art. 611), ser testigos en un testamento solemne (art. 1012), ser
tutores o curadores (art. 497), ser albaceas (art. 1272); la ley de
Matrimonio Civil en su artculo 14 no les permite ser testigos de
un matrimonio y la Ley de Registro Civil, en su artculo 16, ser
testigos de una inscripcin en el registro respectivo. La Ley N 7.492
restringi la capacidad de los extranjeros para adquirir propiedades en ciertas provincias limtrofes.
LA NORMAjURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
77
de la ley
78
DERECHO
de la ley
LA NORMAjURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
79
so
DERECHO
externos
LA NORMAjURTDICA
DE DERECIlO
PRIVADO
81
La autenticidad del instrumento pblico otorgado en el extranjero, es decir, el hecho de haber sido otorgado realmente por
las personas que aparecen suscribindolo y el hecho de que las
solemnidades se hayan ajustado a las leyes del pas en que se
otorg, se probar en Chile de acuerdo con las normas establecidas en el art. 345 del Cdigo de Procedimiento Civil (art. 17 del
Cdigo Civil).
Cabe sealar que la regla locus regit actum no es obligatoria.
Los chilenos pueden en el extranjero, si lo desean, sujetarse para
realizar determinados
actos a la ley chilena. En efecto, ciertos
funcionarios diplomticos y consulares chilenos tienen atribuciones para actuar como Ministros de Fe. Al realizar un acto de
otorgar un instrumento en el extranjero ante tales funcionarios se
simplifica enormemente la prueba de la autenticidad del mismo,
ya que se evitan los largos y costosos trmites de legalizacin en el
extranjero.
Puede sealarse como una excepcin a lo preceptuado en el
arto 17, el arto 18 del Cdigo Civil que dispone que: "En los casos
en que las leyes chilenas exigieren instrumentos pblicos para
pruebas que han de rendirse y producir efecto en Chile, no valdrn las escrituras privadas, cualquiera que sea la fuerza de stas
en el pas en que hubieren sido otorgadas". U no de los efectos de
un instrumento es la prueba o perfeccionamiento del acto o contrato de que da constancia; si la ley chilena exige a este respecto
que se otorgue un instrumento pblico, no tiene valor la escritura
privada otorgada en el extranjero, aunque tenga pleno valor en el
pas en que se otorg. Cabe sealar que el arto 16 no se refiere
slo a las pruebas judiciales, sino a todos los casos en que la ley
chilena exige el otorgamiento de un instrumento pblico. Es concordante en esta materia con lo dispuesto en el arto 1701 del Cdigo Civil que establece que cuando la ley requiere como solemnidad de un acto o contrato el instrumento pblico, su falta no
puede suplirse por otra prueba.
Otra excepcin que podra sealarse al arto 17 est contenida
en el arto 1027 del Cdigo Civil que slo reconoce validez a los
testamentos otorgados en pas extranjero si ellos lo han sido por
escrito. Los testamentos verbales otorgados en el extranjero no
tienen validez en Chile, sin entrar a considerar su valor segn las
leyes del pas en que se realizaron.
Respecto a la hipoteca el artculo 2411 del Cdigo Civil da
validez a los contratos hipotecarios celebrados en el extranjero
sobre bienes situarlos e-u Chile; pero, para dar hipoteca, exige que
dichos courr.uos s('al1 il1snito.~ ('11 el competente Registro.
82
DERECHO
- Requisitos internos
En general, la ley del pas en que se otorg el acto rige sus
requisitos internos, o sea, la capacidad y voluntad o consentimiento de los que lo otorgan, y el objeto y causa del acto.
No haya este respecto otra limitacin que la del arto 15 en
cuanto a que la capacidad y estado de las personas que ejecutan el
acto quedan sujetos a la ley chilena si dichas personas son chilenos.
-Efectos
Los efectos del acto, es decir los derechos y obligaciones que
de l emanan, quedan sujetos a la ley chilena. Dicha ley respeta
las estipulaciones contenidas en los contratos otorgados vlidamente en el extranjero, pero si en cuanto a los efectos del contrato hay contraposicin entre la ley chilena y la ley extranjera, prima la ley chilena de acuerdo con el inciso final del artculo 16.
INTERPRETACIN
DE LA LEY
- Concepto
73. La interpretacin de la ley consiste en fijar su verdadero
sentido y alcance, pero adems incluye el conjunto de actividades
indispensables para aplicar el derecho.
En realidad comprende dos elementos, uno abstracto, que es
la interpretacin propiamente tal, y radica en fijar el sentido de la
ley, y uno concreto, que es la aplicacin, y significa adaptar la ley
al hecho concreto. En la interpretacin judicial ambos procesos
constituyen un todo unitario. La leyes una formulacin general
de situaciones pensadas como posibles. En la sentencia, o sea, en
la individualizacin jurisdiccional del derecho, esta generalidad
de la ley debe armonizarse con las caractersticas y circunstancias
especficas del caso concreto. La norma jurdica debe tener idntico sentido que la situacin real para que puedan recprocamente ser puestas en correspondencia.
Segn que la legislacin establezca o no normas de interpretacin sta se denomina reglada o no reglada.
A diferencia del Cdigo Napolen, que no establece normas
para la interpretacin de la ley, nuestro Cdigo Civil ha adoptado
LA NORMAjURlDICA
DE DERECHO
PRNADO
83
doctrinal
'II
I~)~il,
84
DERECHO
25
26
F.K. SAVIGNYy otros, La escuela histonca del derecho. Surez, Madrid, 1908.
GERMAN KANTOROWICZ, La lucha por la ciencia del derecho. Losada,
1949.
27 RUDOLPH
VON IHERING, El [in. en el derecho. Traduccin
de Adolfo
Posada. Omega. Buenos Aires. 1960.
28 HANS KELSEN, Teoria Pum del Derecho. Universitaria,
Buenos Aires, I ~)(().
LA NORMAjURIDICA
DE DERECHO
PRlVADO
85
cerio libremente dentro del margen de posibilidades que le brinda la ley, sin necesidad de recurrir a ningn criterio director.
Interpretacin
por va de autoridad
por el legislador
77. El arto 3 del Cdigo Civil dispone que: "Slo toca allegislador explicar o interpretar la ley de un modo generalmente obligatorio.
Las sentencias judiciales no tienen fuerza obligatoria sino respecto de las causas en que actualmente se pronunciaren".
Esta norma establece la primera gran diferencia entre la interpretacin legal y la interpretacin judicial; la legal tiene una fuerza obligatoria general, la segunda una fuerza relativa exclusivamente al litigio que ha sido resuelto.
Desde otro punto de vista la interpretacin hecha por el legislador no est sujeta a reglamentacin alguna. A la inversa, la interpretacin judicial debe ceirse a las normas que establece el Cdigo Civil.
Esta interpretacin se llama tambin autntica por provenir
del mismo rgano que dict la norma interpretativa. Lo anterior
110 quiere
decir que la interpretacin autntica est restringida
.~lo a la ley; puede existir tambin una interpretacin autntica
d(' la sentencia (p. ej., el recurso de aclaracin) y aun del contrato, COIllO e-s e1 caso cOlltclIlplado ('11 el inciso final del art, E64
del ( :d igo ( .ivi1.
86
DERECHO
CML.
PARTE GENERAL
LA NORMAjURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
87
88
DERECHO
~\'l
LA NORMAjURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
89
1971.
F,MII ,J() BETTI, Inll'llJ1'1'1m.io//I' lidia ll',!!:!!:!'l' (~~lai : giuridici. GuifIre, 1927,
1.l J IS 1)) E 1.-1' 1( :/,( l, 1///I'III/I'/l/IiIJI di' la II'V,Anuario d(' ck-recho civil. Madrid
I ~170.
<a,
90
DERECHO
y con todas sus variantes especiales. Por otra parte, la norma no es,
por lo general, un texto simple y escueto, sino que, corrientemente,
para obtener la norma hay que coordinar textos diferentes.
Si esto no fuera as, no habra jams discrepancias en la aplicacin de la ley.
El que un tenor literal, gramaticalmente muy claro, no refleje
el sentido de la ley, puede provenir de muy diversas circunstancias. Principalmente de la necesidad de buscar el sentido de la ley,
disposicin general y previa frente a las circunstancias especficas
de un caso particular y posterior. Otras veces, porque las relaciones reguladas han sobrepasado la disciplina de la norma (as ha
sucedido con el contrato de promesa que reglamenta el artculo 1554 del Cdigo Civil). Tambin cuando la lgica orgnica de
una institucin obliga a abandonar el claro tenor literal del precepto (tal es el caso de la formacin de la cuarta de mejoras
frente al texto del inciso 2 del artculo 1184 del Cdigo Civil).
El que sea necesario determinar, en forma previa, si el sentido
de la leyes claro, significa que siempre debe realizarse un proceso
interpretativo. Sera imposible efectuar tal determinacin sin interpretar previamente la ley.
- Criterios de interpretacum
LA NORMAjURlDICA
DE DERECHO
PRIVADO
91
- Elementos de interpretacin
83. Para buscar el sentido de la ley, el Cdigo seala los elementos tradicionales de la interpretacin judicial: el gramatical, el
histrico, el lgico, el sistemtico y, en el art. 24, el espritu general de la legislacin y la equidad natural.
La ordenacin de estos elementos no significa que ellos deban
emplearse sucesiva y subsidiariamente; todos ellos deben ser utilizados para fijar el sentido de la ley frente al caso especfico al cual
debe aplicarse. Su concurrencia permitir aljuez llegar a la determinacin jurisdiccional del derecho.
84. El elemento gramatical que se seala en el inc. 1 del
art. 19 implica el anlisis de la semntica y de la sintaxis del precepto legal.
Al efecto los artculos 20 y 21 dan diversas normas.
En primer trmino que las palabras de la ley se entendern en
su sentido natural y obvio.l" Durante mucho tiempo nuestros tribunales estimaron que este sentido natural deba encontrarse en
el Diccionario de la Real Academia Espafiola.t? hoy da, y considerando los cambios que experimenta el lenguaje, se ha reaccionado frente a este criterio y se ha considerado que el sentido natural
de una palabra o frase es el que se le atribuye en el medio que la
cmplea.t" Es por lo dems el criterio del Cdigo que, en su artculo 51, al referirse a la denominacin de las medidas, dice que a
Ialta de definicin legal se entendern "en el sentido general y
popular, a menos de expresarse otra cosa".
Q
92
DERECHO
CIVIL
PARTE GENERAL
41
,12
R. D.J., t. 37,
R. D.J., t. 32,
S.
S.
1, p. 531.
1, p. 75; t. 61,
S.
2, p. 24.
LA NORMA.JURlDlCA
DE DERECHO
PRIVADO
93
87. En el elemento sistemtico esta correspondencia de la legislacin se busca ms all de la propia ley interpretada, analizando, como lo establece el inciso 2 del arto 22, otras leyes, particularmente si versan sobre el mismo asunto.
La extensin del elemento sistemtico puede llevar al anlisis
del espritu general de la legislacin, a que se refiere el arto 24.
88. El Cdigo, en ltimo trmino, se refiere al espritu general
de la legislacin y a la equidad natural. Aunque el arto 24, que los
contempla, comienza con la frase: "En los casos a que no pudieren
aplicarse las reglas de interpretacin precedentes", ello no significa
que se trate slo de elementos supletorios de interpretacin.f
Ya hemos visto que el espritu general de la legislacin se
encuentra implcito en el elemento sistemtico; ahora bien, la
equidad natural no puede estar ausente en ningn criterio de
interpretacin. El fin de la aplicacin de la leyes hacer justicia y
la equidad es la justicia referida a un caso concreto. Por lo tanto,
todo fallo y la interpretacin en que se fundamenta deben ser
justos y equitativos.
La frase inicial del art. 24 a que nos hemos referido slo tiene el
alcance de sealar que el juez no est facultado para dictar una
resolucin basada exclusivamente en la equidad, como l subjetivamente la entienda. Ello significara una absoluta falta de seguridad
jurdica. Por eso los dems elementos de interpretacin lo vinculan a
la norma para seguridad del derecho, pero no lo liberan de considerar fundamentalmente la equidad al realizar la interpretacin.v'
El juez debe buscar la solucin justa, la ms justa entre todas
las posibles.i''
89. La disposicin del art. 4 que establece la aplicacin preferente de los Cdigos especiales y la del arto 13 que dispone que las
disposiciones de una ley, relativas a cosas o negocios particulares,
prevalecern sobre las disposiciones generales de la misma ley, sealan la aplicacin preferente de las disposiciones especiales.
90. El arto 23 dispone que lo favorable u odioso de una disposicin no se tomar en cuenta para ampliar o restringir su interI irctacin.
11
94
DERF:CHO
LA NORMAURlDlCA
DE DERECHO
PRIVADO
95
incapacidades y prohibiciones, las leyes delegatorias, las que confieren un beneficio, las que limitan el derecho de propiedad, etc.
93. Fuera de la analoga existen diversos aforismos o reglas
prcticas que, en realidad, no son sino formas que toman la argumentacin o la lgica jurdicas.
Entre ellos podemos sealar el argumento ab auctoritate, que
consiste en invocar la opinin favorable de los tratadistas o de la
jurisprudencia.
El argumento a generale sensu, que supone que donde la ley no
distingue no es lcito al intrprete distinguir.
Los argumentos a [ortiori, que en realidad son dos. A maiore ad
minus, o sea, quien puede lo ms, puede lo menos; y a maiore ad
maius, que implica que a quien le est prohibido lo menos con
mayor razn le est prohibido lo ms.
Por ltimo, el argumento a contrario sensu, con el que se sostiene que incluida una cosa se entienden excluidas las dems.
- La lgica y el razonamiento jurdicos
94. Aunque las reglas prcticas que hemos sealado son llamadas operaciones lgicas y son de uso frecuente, ellas no constituyen por s solas una interpretacin lgica de la ley, ya que la
lgica impone un esquema muy preciso en toda la operacin
in telectual. 46
41; La lgica formal distingue dos modos de razonamiento:
el razonamiento
deductivo y el razonamiento inductivo.
Conviene sealar que toda la razn humana est dominada por un principio fundamental: el acuerdo del pensamiento consigo mismo, que se descompone en dos: el principio de la identidad y el principio de la contradiccin. Estos
constituyen los principios lgicos.
El principio de la identidad implica la necesidad de que cada cosa sea
idntica a s misma; todo sujeto es su propio predicado. Se expresa abstractamente en la forma ms simple: A es A.
El principio de la contradiccin establece que dos proposiciones de las
cuales una niega lo que otra afirma, no pueden ser ambas verdaderas. Es decir,
110 se puede a la vez afirmar y negar
lo mismo. "A" no puede ser a la vez "A" y
"no A".
El razonamiento deductivo consiste en pasar de una proposicin conocida a
Ilila desconocida, yendo de una proposicin general a una particular.
Esto se efecta a travs del silogismo, que consiste en una reunin de tres
proposiciones, de tal manera que de las dos primeras resulta necesariamente la
1(,l'cera.
l'od('llloS
expresarlo
lodo S ('s M (sq~IIIJ(LI
dici('lldo:
P'''I,,,si,i,'IIl),
y si
1<:11d
96
DERECHO
Es indudable que el juez no puede determinar la interpretacin de la ley arbitrariamente, por un mero capricho, sino que
tiene que ceirse a ciertos procesos de razonamiento de los cuales
emana su decisin y que, al mismo tiempo, la justifican.
Durante mucho tiempo se estim que la lgica pura, el razonamiento deductivo, era el mtodo de la ciencia jurdica. Dentro
de este razonamiento la norma jurdica era la primera proposicin, el caso concreto la segunda proposicin y de su puesta en
correspondencia emanaba la conclusin que constitua la decisin del caso.
La sencillez de esta solucin es engaosa, porque la aplicacin
del razonamiento deductivo puro resulta casi imposible. Para que
este razonamiento tenga valor es indispensable que la verdad de
las premisas sea absoluta, que haya sido constatada cientficamente; es tambin necesario que el proceso de razonamiento se desarrolle estrictamente de acuerdo a los cnones del silogismo.
Ahora bien, el juez al escoger y fijar el alcance de la norma,
que constituira la primera proposicin, no est estableciendo una
verdad absoluta, apodctica, sino que est sealando una normativa y un sentido de sta que le parecen los ms verosmiles yaceptables. Igualmente al fijar la segunda proposicin tampoco ha
sealado una verdad absoluta, porque al analizar el caso, al separar sus aspectos atinentes de aquellos que no lo son, al determinar
los elementos que considera probados de los que no lo estn, al
interpretarlo, al valorarlo jurdicamente, ha realizado una serie de
apreciaciones personales y subjetivas, no una constatacin cientfica de una realidad indiscutible.
De lo anterior resulta que el razonamiento lgico formal ser
difcilmente aplicable en la interpretacin y aplicacin de la ley.
L\ NORMAJlIR1D1CA
DE DERECHO
97
PRIVADO
17 A. <:IlII,IANI,
(:II.I'F.RFI,MAN,
/.1/ t'II//I/II/II'/\i!l.
1'; 1\' ja, I~)(i(i.
/.11.1')1///1'/1111"/1//11'.
NCllIl'<'ll<-r!J''IClri'III<'.lbIIOl,
1~)7(i.
98
DERECHO
99
La idea de un "sistema" entre nosotros es insostenible. Aunque nuestro sistema jurdico es completo, ya que en defecto de
norma existe la integracin de la ley, dista mucho de ser coherente. La coherencia significa que no exista contradiccin entre la
normas, ni en los principios axiolgicos o de valorizacin que las
informan, ni entre los fines o valores que persiguen o protegen.
Nuestra frondosa legislacin, inspirada por principios contradictorios y que a travs de los aos ha perseguido fines muy diversos,
no constituye en absoluto un sistema coherente de derecho.
Se ha reprochado adems a la jurisprudencia de conceptos su
carcter abstracto y no cumplir la funcin esencial, que es la de
dar soluciones reales y prcticas a los problemas vitales.
Ante ella se desarroll la 'Jurisprudencia de intereses", cuyo
origen puede remontarse a Von Ihering. La leyes una resultante
de expresin de intereses y los conflictos jurdicos son conflictos
de intereses. El intrprete no debe tratar de hacer deducciones
lgicas sino decidir el conflicto a favor de aquellos intereses que
han sido preferidos por el legislador. En un paso ms ha nacido la
'Jurisprudencia de valores", que ms que los intereses mismos
considera los juicios de valor que los intereses suscitan.
Lo anterior nos lleva al problema de saber qu juicios de valor
se aplican. Si son los del legislador, caemos de nuevo en los inconvenientes de la interpretacin subjetiva; si los del intrprete, nos
enfrentaramos con una interpretacin libre y la consiguiente falta de seguridad jurdica; por ltimo, pueden ser los juicios de
valor que actan, son admitidos y generales a la comunidad o
grupo humano en que el conflicto se suscita.
Se ha tratado, partiendo de la legislacin, de establecer categoras de intereses y su prelacin, pero casi siempre se llega al
punto en que concurren intereses de igual grado y entonces los
criterios de preferencia se hacen casi imposibles.
LA COSTUMBRE
- La costumbre como fuente
de derecho
IDO
DERECHO
ciones O conflictos deben ser abordados o resueltos en determinada forma. La ley no hace sino recoger esta costumbre y darle
fijeza, claridad y fuerza obligatoria.
El diccionario, en las definiciones de costumbre, distingue
entre hbito, y uso y prctica que ha adquirido fuerza de ley.
Pueden, pues, existir hbitos o usos que no constituyen costumbre dentro del concepto en que la estamos analizando. As los
hbitos de cortesa, los usos sociales, los usos del trfico a que se
refiere el Cdigo alemn.
Qu requisitos necesita la costumbre para tenerjurdicamente el carcter de tal? Generalmente se ha estimado que debe tratarse: a) de un uso social de carcter general (dentro de un mbito determinado); b) que tenga el carcter de uniforme; c) que sea
constante; d) que tenga una cierta duracin en el tiempo; e) que
tenga un substrato jurdico. Se entiende por esto ltimo, no que
se tenga el deseo de crear a travs del comportamiento normas
jurdicas o de contribuir a su creacin; basta la intencin o voluntad de obrar jurdicamente.
De lo anterior resulta entonces que en la costumbre intervendran elementos objetivos, la realizacin durante un espacio de
tiempo de actos uniformes y constantes en un territorio determinado, y elementos subjetivos, la conviccin de obrar jurdicamente y la aceptacin de este comportamiento por la comunidad.
Nuestro Cdigo Civil, aunque se refiera a la costumbre, no la
define ni seala sus caractersticas. El Cdigo de Comercio, en
cambio, en su artculo 4 dice que las costumbres mercantiles son
tales "cuando los hechos que las constituyen son uniformes, pblicos, generalmente ejecutados en la Repblica o en una determinada localidad, y reiterados por un largo espacio de tiempo, que
se apreciar prudencialmente por los juzgados de comercio".
La costumbre se diferencia de la ley en primer trmino en
cuanto a su origen. La costumbre emana de los usos del cuer'po
social, la ley requiere un acto de legislacin. A la inversa, mientras
la ley para que pierda su eficacia necesita ser derogada, la costumbre puede perderla porque desaparece cualquiera de los elementos que la constituyen. La ley rige en el acto; en cambio, la costumbre necesita la reiteracin de los actos que la conforman en
un largo espacio de tiempo.
98. En la clasificacin de la costumbre se ha distinguido entre
costumbre conforme a la ley, costumbre fuera de la ley y costumbre contra la ley.
La costumbre segn la ley consiste en maneras uniformes de
interpretar y aplicar la ley. Cuando esta costumbre emana de las
LA NORMAJURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
101
La costumbre puede clasificarse tambin en cuanto al territorio en que impera. As, en el Cdigo Civil los artculos 1938 y
1944, por ejemplo, se refieren a la costumbre del pas; el artculo 1986 a la costumbre del departamento. El artculo 4 del Cdig-o de Comercio, ya citado, habla de los actos ejecutados en la
Repblica o en una determinada localidad.
- Valor de la costumbre
99. El artculo 2 del Cdigo Civil dispone que: "La costumbre no constituye derecho sino en los casos en que la ley se remite
a ella".
El Cdigo no se refiere a la costumbre, sino en materias de
escasa importancia, lo que ha hecho decir que la costumbre no
tiene prcticamente aplicacin en materia civil.
Entre esas disposiciones podemos sealar los artculos 608, 1198
ine. final, 1938, 1940, 1944, 1951, 1954, 1986 Y 2117 ine. 2.
Pero existe una disposicin que ampla en mucho el mbito
de aplicacin de la costumbre en materia civil. El artculo 1546
del Cdigo Civil dispone: "Los contratos deben ejecutarse de buena fe, y por consiguiente obligan no slo a lo que en ellos se
expresa, sino a todas las cosas que emanan precisamente de la
naturaleza de la obligacin, o que por la ley o la costumbre pertenecc-n a ella".
Por lo tanto, por expresa disposicin de la ley, la costumbre
pasa a formar parle del contenido de los contratos y a constituir
1111 e1CIIH'lltode lo <)IIt'
se ha dcuominado la ley del contrato. En
el(-cto, d articulo Ir)/lr, dd (:(",digo Civil dice qlle todo contrato
JO:!
DERECHO
103
hay pena sin ley, ms an, sin ley anterior al hecho delictivo. Lo
anterior se aplica tanto al punto de determinar si un hecho cualquiera constituye o no delito, como para, en caso afirmativo, establecer la pena que debe aplicrsele.
- La costumbre jurisprudencial
100. El inciso 2 del artculo 3 del Cdigo Civil dispone: "Las
sentencias judiciales no tienen fuerza obligatoria sino respecto de
las causas en que actualmente se pronunciaren".
No obstante lo anterior, si los tribunales fallan determinadas
materias de una manera uniforme se produce lo que se llama
"jurisprudencia uniforme" sobre esa materia. Sobre todo si emana
de la Corte Suprema, que mediante la casacin en el fondo unifica la jurisprudencia,
se produce un antecedente muy fuerte en
Iavor de una forma constante de interpretar y aplicar la ley.
La Corte Suprema tiene, por disposicin constitucional, la superintendencia directiva de todos los tribunales de la Repblica.
Aunque los tribunales inferiores no estn obligados a ajustarse a
una determinada interpretacin
de la ley realizada por la Corte
Suprema, una razn de subordinacin hace que por lo general se
acate el criterio del ms alto tribunal. Por otra parte, un recurso
corriente de los abogados en los alegatos y escritos es apoyar la
tesis expuesta, sealando una jurisprudencia favorable a la pretensin, especialmente si ella emana de la Corte Suprema.
Lo anterior no significa que el ms alto tribunal mantenga
siempre un criterio invariable en la interpretacin de la ley.
En algunas ocasiones, porque no se estimaba satisfactoria
la solucin
dada con anterioridad
en algn caso de difcil
interpretacin
y aplicacin legal. Puede sealarse al efecto el
determinar la sancin que acarrea el no realizar las inscripciones que establece
el artculo 688 del Cdigo Civil. La Corte
Suprema, entre 1905 y 1912, dict cinco sentencias al respecto con criterios diversos; el ltimo criterio adoptado
es, sin
embargo, criticado por la doctrina.
En otros casos la evolucin de una institucin en el trfico
[urdico determin adaptar los criterios a las realidades prcticas.
As, al plazo que seala para el contrato de promesa el artculo 1554 del Cdigo Civil se le dio, durante mucho tiempo por la
[urisprudencia, el carcter de extintivo. Los insolubles problemas
pr;cticos <)lle originab.u: este criterio determinaron un cambio en
I; [urisprudcnria
<Ile hoy c,~tilll;1 qll!'
dicho plazo tiene el carcter
de suspe-nsivo.
10j
lA ~ORMAlJRlD[CA
DE DERECHO
PRIVADO
[05
IH V':':1I1S(' al c!('('lo
S('III('lIcias
d('
cOlllr:Hliclori:ls
sol n:
~()7 v ~~ 1, igll:t!IlI<'III('
);1 IlIi.'!lIa
la Excma.
11I:II('ri:1. Dos
d('
Corte Suprema
la misma
sala
H 1 Y ~()~.
absolutamente
y fecha: R. D.J,
106
DERECHO
LA NORMAJURlDlCA
DE DERECHO
PRIVADO
JO
lOS
DERECHO
LA NORMAJURIDlCA,.
DE DERECHO
PRIVADO
109
110
DERECHO
CAPTULO
III
112
LOS SUJETOS
DEL DEREClIO
l13
El propio Cdigo Civil establece en su arto 75 que la ley protege la vida del que est por nacer. En su art. 77 dispone, adems,
que "los derechos que se deferiran a la criatura que est en el
vientre materno, si hubiese nacido y viviese, estarn suspensos
hasta que el nacimiento se efecte. y si el nacimiento constituye
un principio de existencia, entrar el recin nacido en el goce de
dichos derechos, como si hubiese existido al tiempo en que se
defirieron" .
Lo anterior est de acuerdo con lo dispuesto en las sucesiones
por el arto 962 del C. Civil que hace vlidas las asignaciones hechas a personas que no existen al tiempo de abrirse la sucesin,
pero se espera que existan.
Igualmente los arts. 485 y ss. del C. Civil disponen que, a falta
de patria potestad de padre o madre, se nombrar un curador de
bienes para los derechos eventuales del que est por nacer.
Por su parte, la legislacin penal configura tambin como
delito los atentados contra la vida de la criatura que an no ha
nacido.
LA
114
DERECHO
CIVIL. PARI'E
GENERAL
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
115
La declaracin puede
que tenga inters en ello.
solicitarla al juez
cualquiera persona
112. En la muerte presunta se distinguen en general tres perodos: el de mera ausencia; el de posesin provisoria de los bienes del desaparecido; el de posesin definitiva de dichos bienes.
El perodo de posesin provisoria no est siempre presente,
para lo cual se atiende a la edad del desaparecido y a las circunsrancias en que se produjo su desaparecimiento.
El perodo de mera ausencia comienza desde que han dejado
de tenerse noticias del ausente. Es un estado de hecho en el cual el
objetivo fundamental es proteger los derechos del ausente, para lo
cual se tiende a la administracin
de sus bienes. Si el ausente ha
dejado apodcr;ldos o rt')rCSClllalltcs con poder suficiente o tiene
1111 f'('pl"<'sclllalll(l'egal, dl()s .u lministranin
los hicncs y 110 se adop-
116
DERECHO
tar medida especial alguna. Si no existen tales apoderados o representantes procede nombrar un curador de los bienes del ausente
en conformidad a los artculos 473 y ss. del Cdigo Civil.
El perodo de mera ausencia dura normalmente cinco aos,
pero durar un afio si la desaparicin se produjo en un sismo o
catstrofe (art. 81 N 9 del C. C.); o seis meses si provino de la
prdida de una nave o aeronave (art. 81 N 8 del C. C.).
El perodo de la posesin provisoria de los bienes del desaparecido no existir en los dos casos de excepcin seii.alados en el
prrafo anterior, o bien, cuando el desaparecido recibi una herida grave en la guerra o le sucedi otro peligro semejante (art. 81
N 7 del C. C.). En estas situaciones se concede de inmediato la
posesin definitiva de los bienes del desaparecido.
La posesin provisoria o definitiva de los bienes es una consecuencia de la declaracin de muerte presunta.
113. Para declarar la muerte presunta es indispensable que:
a) Se pruebe la ausencia. Para este efecto no basta la simple
ausencia fsica; es adems necesario que no se hayan recibido
noticias del desaparecido y que se hayan efectuado todas las posibles gestiones y diligencias para averiguar su paradero (art. 81
N l).
b) La citacin del desaparecido. Se efecta por una publicacin repetida tres veces en el Diario Oficial (art, 81 N 2).
c) Que se oiga al Defensor de ausentes (art. 81 N 4).
d) Que hayan transcurrido los plazos que la ley seala y a que
nos hemos referido. Adems el que tenga inters en ella no puede
pedir la declaracin de muerte sino transcurridos tres meses a lo
menos desde la ltima citacin (art. 81 N 3).
e) La sentencia debe publicarse en el Diario Oficial (art. 81
N 5).
Es adems indispensable ruar el da presuntivo de la muerte.
Para este efecto se atiende a las causas que motivaron el desaparecimiento y al respecto se fijan una norma general y dos excepciones.
La norma general es que eljuez fijar como da presuntivo de
la muerte el ltimo del primer bienio contado desde la fecha de
las ltimas noticias (art, 81 N 6).
La primera excepcin la encontramos cuando el desaparecido
recibi una herida grave en la guerra o le sobrevino otro peligro
semejante. El juez fijar como da presuntivo de la muerte el de la
accin de guerra o peligro o, no siendo enteramente determinado
ese da, un trmino medio entre el principio y el fin de la poca en
que pudo ocurrir el suceso. El mismo criterio se aplica en los casos
de prdida de una nave o aeronave (art. 81 N'" 7'-'y R).
LOS SUJETOS
La segunda excepcin
to ha coincidido con un
ser la fecha de tal evento
vo de la muerte (art. 81 N
DEL DERECHO
117
114. El decreto de posesin provisoria tiene diferentes efectos. En primer lugar pone trmino a la sociedad conyugal o al
rgimen de participacin en los gananciales, segn cual hubiera
habido con el desaparecido (art, 84 y 1764 N 2 del C. C.). Se
produce la emancipacin de los hijos, salvo que el desaparecido
sea el padre y le corresponda ejercer la patria potestad a la madre
(art. 266 NS 1, 6 Y 7 del C. C.). Se abre la sucesin del desaparecido. Al efecto se procede a la apertura y publicacin del testamento, si hubiere dejado alguno; en caso contrario se da la posesin provisoria a los herederos presuntivos; si no existieren se
declara la herencia yacente (arts. 84, 955 Y 1240 del C. C.).
Se entienden por herederos presuntivos los testamentarios o
legtimo a la fecha de la muerte presunta. Tienen los derechos y
limitaciones que sealan los artculos 85 a 89 del Cdigo Civil.
El decreto de posesin provisoria termina o bien porque el
presunto desaparecido reaparece o porque se concede la posesin definitiva de sus bienes.
115. El decreto de posesin definitiva de los bienes del desaparecido se concede sin pasar por la etapa de la posesin provisoria en los casos que ya hemos analizado.
Fuera de esos casos de excepcin se concede tambin de inmediato si pasados los cinco aos desde las ltimas noticias se probare
qlle han transcurrido setenta desde el nacimiento del desaparecido. El juez conceder la posesin definitiva transcurridos diez aos
dr-sde la fecha de las ltimas noticias, cualquiera que fuere la edad
(lel desaparecido a la expiracin de dicho plazo.
El decreto de posesin definitiva produce diversos efectos:
En primer trmino determina la disolucin del matrimonio. A
('sic efecto el artculo 38 de la Ley de Matrimonio Civil exige para
('110 que pasados cinco aos de las ltimas noticias el desaparecido
tuviere ms de setenta aos de edad; en caso contrario, que hubietranscurrido quince aos desde las ltimas noticias. Lo anterior
11<) se aplica en el caso de que la desaparicin se deba a la prdida
d(' una nave o aeronave, porque entonces el matrimonio se disuel\ (' Irnnsc.u rridos dos aos desde el da presuntivo de la muerte
(nrt :~~de la Ley de Matrimonio Civil, art. 81 N 8 del C. C.).
1(11 .sl'g-lIlldolug-ar, todos aquellos que tengan derechos subordill;lIlos ;1 la condicin de muerte del desaparecido podrn hacerlos vuk-r (1cg-;II;lIiosp, . l'j.), (arl.~)) del C. C.).
1('"
111)
DERECHO
En tercer trmino, si no hubiere precedido posesin provisoria, por el decreto de posesin definitiva se abrir la sucesin
segn las reglas generales (art. 90 inc. 3 del C. C.).
En cuarto trmino se cancelan las cauciones constituidas por
los herederos provisorios y cesan las restricciones impuestas a ellos
(art, 90 incisos 1 Y 2 del C. C.). En consecuencia, los herederos
no tendrn limitaciones y podrn enajenar libremente los bienes
de la herencia.
Finalmente, y en conformidad a las normas generales, podr
procederse a la particin de los bienes.
Q
ATRIBUTOS DE LA PERSONALIDAD
- Concepto
117. Existen ciertos elementos que son inherentes, que integran el concepto mismo de la personalidad. A veces se les dcuo-
LOS SUJETOS
DEI" DERECHO
119
mina atributos de la personalidad, pero esta expresin es engaosa, porque ellos no consisten solamente en derechos o prerrogativas, sino que imponen simultneamente deberes o cargas.
Desde el momento en que se tiene personalidad se tienen los
atributos anexos a ella, pero, al mismo tiempo, se est sujeto a los
deberes o cargas que impone. No pueden los atributos ser negados a una persona, ni sta tampoco puede despojarse de ellos.
Igual sucede con los deberes o cargas inherentes a ella; la ley los
impone por sobre la voluntad de los interesados.
Desde el punto de vista econmico se trata de bienes extrapatrimoniales, sin un significado o valor econmico directo. Ello no
impide que puedan llegar a tenerlo especialmente cuando se lesionan dichos atributos y hay lugar a una indemnizacin.
Muchos autores en lugar de atributos de la personalidad hablan de derechos de la personalidad. Creemos que esta denominacin slo conduce a equvocos. Los atributos de la personalidad
son calidades que corresponden a todo ser humano slo en virtud
de ser tal; en cambio "derechos" son aquellos esenciales o absolutos que pueden ejercerse eventualmente y estn destinados a proteger elementos que la constituyen, como el derecho a la vida, a la
integridad fsica, al honor, etc.
Desde este punto de vista podemos decir que los atributos
esenciales de la personalidad son:
a) el nombre,
b) la capacidad,
e) la nacionalidad,
d) el domicilio,
e) el estado civil,
f) el patrimonio,
g) los derechos de la personalidad.
EL NOMBRE
;t
R"
n J.
1.
120
DERECHO
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
121
122
DERECHO
identifica ..."; por su parte el artculo 8 dice que "se presume que es
autor de la obra la persona que figure como tal en el ejemplar que
se registra, o aquella a quien, segn la respectiva inscripcin, pertenezca el seudnimo con que la obra es dada a la publicidad". Por
ltimo el N 5 del art. 14 da al autor el derecho de exigir que se
respete su voluntad de mantener la obra annima o seudnima.
Dicha ley en su artculo 1 dice que el derecho de autor comprende los derechos patrimonial y moral, que protegen el aprovechamiento, la paternidad e integridad de la obra. El derecho patrimonial contiene el aprovechamiento de la obra y los beneficios
pecuniarios que de ella provengan. El seudnimo formar parte
del derecho moral como lo seala el art. 14 de la ley; como tal
ser un derecho extrapatrimonial y, por lo tanto, intransferible
pero transmisible por expresa disposicin del artculo 15 de la ley.
Formando parte de la propiedad intelectual gozar de la proteccin que la Ley N 17.336 otorga a dicha propiedad.
LA CAPACIDAD
122. Desde el nacimiento el ser humano puede ser sujeto de
relaciones jurdicas, puede ser titular de derechos; en otros trminos, adquiere personalidad.
Uno de los atributos de la personalidad es precisamente lo
que se denomina "capacidad de goce"; es decir, la posibilidad de
ser titular de derechos.
Pero ser titular de derechos no implica necesariamente el que
est habilitado para ejercitarlos personalmente. Esta posibilidad
es lo que se denomina "capacidad de ejercicio".
Si bien toda persona, por ser tal, tiene capacidad de goce, no
todas poseen capacidad de ejercicio. En otros trminos, aunque
pueden ser titulares de derechos no pueden ejercitar dichos derechos por s mismas.
Por lo tanto, en relacin a la capacidad de ejercicio debemos
distinguir entre capaces e incapaces. No hay persona que no tenga capacidad de goce, pero las hay que no tienen capacidad de
eJercICio.
La regla general es la capacidad. El art. 1446 del C. Civil dispone: "Toda persona es legalmente capaz, excepto aquellas que la
ley declara incapaces".
Estas incapacidades estn establecidas en razn de que el legislador considera que determinadas personas no tienen discernimiento para actuar en la vida jurdica, o no tienen el suficiente
discernimiento para actuar en ella correctamente.
123
El arto 1447 del C. Civil seala los casos de incapacidad y establece dos tipos de ella: la incapacidad absoluta y la incapacidad
relativa.
Los incapaces absolutos no pueden actuar nunca personalmente en la vida jurdica; pueden actuar slo representados. Los
incapaces relativos, adems de actuar representados, pueden actuar tambin personalmente si son debidamente autorizados.
El mismo artculo que hemos sealado establece que son absolutamente incapaces los dementes, los impberes y los sordomudos que no pueden darse a entender por escrito.
Son relativamente incapaces los menores adultos y los disipadores que se hallen bajo interdiccin de administrar lo suyo.
Dementes son los seres privados de razn y son absolutamente
incapaces, se encuentren o no declarados en interdiccin por
causa de demencia.
Con relacin a la edad, las personas son plenamente capaces,
como lo dispone el arto 26 del C. Civil, al cumplir 18 aos de
edad. Menores de esa edad se dividen en impberes y menores
adultos.
Impberes son el hombre que no ha cumplido 14 aos y la
mujer que no ha cumplido 12, y la ley los considera absolutamente incapaces. Mayores de esa edad y hasta cumplir 18 aos se
denominan menores adultos y son relativamente incapaces.
El disipador, como lo establece el art. 445 del C. Civil, es el
que manifiesta una total falta de prudencia por actos repetidos de
dilapidacin. Debe haber sido declarado en interdiccin como
disipador para que, ante la ley, sea relativamente incapaz.
Hemos visto que los incapaces pueden actuar en la vida jurdica representados y los relativamente incapaces tambin autorizados. Las personas a quienes corresponde esta representacin o
autorizacin son las que la ley denomina "representantes legales".
El art.43 del C. Civil dice: "Son representantes legales de una
persona el padre o la madre legtimos, el adoptante y su tutor o
curador".
De acuerdo con lo anterior el representante legal de los hijos
110 emancipados ser el padre
o madre que ejerza la patria potesrad. El adoptante ser el representante del adoptado. Para las
personas sometidas a tutela o curadura ser el guardador que
desempee el cargo el que las represente.
El ine. final del arto 1447 del Cdigo Civil se refiere a otras
incapacidades particulares. No se trata aqu de verdaderas incapacidades sino de prohibiciones impuestas a determinadas personas
para realizar ciertos .uros. Encontramos ejemplos de estos casos
('11 los <Iris.102,112, 12!',1,17!Hia l HOOc,tc., del Cdigo Civil.
124
LA
NACIONALIDAD
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
125
En el Cdigo Civil encontramos ciertas distinciones entre chilenos y extranjeros. Por ejemplo en el caso de extraterritorialidad
de nuestra ley que establece el artculo 15 y que se refiere slo a
los chilenos. Igualmente en el artculo 998 que da cierta proteccin a stos en la sucesin de un extranjero que se abra dentro o
fuera del territorio de la Repblica.
En otras materias el artculo 611 slo permite pescar en el mar
territorial a los chilenos y extranjeros domiciliados. Los extranjeros no domiciliados no pueden ser testigos de un testamento
(art. 1012 N 10), ni tampoco testigos de un matrimonio (artculo 14 N 6 de la Ley de Matrimonio Civil).
EL DOMICILIO
126
DERECHO
Otras legislaciones slo miran al elemento fsico. El artculo 40 del Cdigo Civil espaol dice: "el domicilio de las personas
naturales es el lugar de su residencia habitual".
De ambos el ms importante es el elemento "nimo"; puede
darse el caso de un nimo sin residencia, pero la sola residencia
sin nimo no puede constituir domicilio. Por esto nuestra jurisprudencia ha dicho que el domicilio, antes que un mero y simple
hecho, es un concepto jurdico.
Tenemos aqu que distinguir tres conceptos distintos: habitacin, residencia y domicilio.
La habitacin o morada es una relacin de hecho de una persona con un lugar donde permanece y generalmente pernocta, pero
puede ser accidental, ocasional o transitoria. Podemos pensar, al
efecto, en el pasajero que habita un tiempo en un hotel.
La residencia es siempre una nocin concreta. Se diferencia
de la habitacin en que aqu desaparece el aspecto de transitorio,
o mejor, de ocasional. La residencia implica la idea de algo estabilizado; la permanencia fsica de una persona en un lugar determinado en forma permanente o habitual, lo que no significa que
siempre, en todo momento, deba estar all. La mera residencia
har las veces de domicilio civil respecto de las personas que no
tuvieren domicilio civil en otra parte (art. 68 del C. C.).
El domicilio, en cambio, es la intencin de la persona de
tener el lugar de su residencia como asiento de su vida social y
jurdica.
El caso ms corriente es que ambos elementos coincidan. Por
eso, el artculo 62 del Cdigo Civil dispone: "El lugar donde un
individuo est de asiento, o donde ejerce habitualmente su profesin u oficio, determina su domicilio civil o vecindad".
De acuerdo con las disposiciones del Cdigo el nimo puede
ser real o presunto. Al efecto establece diversas presunciones de
domicilio o de nimo tanto positivas como negativas.
- Presunciones de domicilio
128. El Cdigo establece presunciones positivas y negativas de
domicilio o nimo.
Los autores consideran que el artculo 62 que hemos citado
implica una presuncin positiva de domicilio. Puede estimarse as,
pero en el fondo es la norma general que reconoce la situacin
corriente de las personas en cuanto al domicilio.
Otras presunciones positivas son que se presume desde luego
el nimo de permanecer y avecindarse en un lugar, por el hecho
LOS SUJETOS
DEL DEREClIO
1~7
del domicilio
12R
DERECHO
129
efectos a que diere lugar el contrato; esto mismo hace que deba
interpretarse y aplicarse restrictivamente. Es limitado en cuanto al
tiempo, porque slo durar mientras tenga efecto el contrato.
132. El domicilio real, llamado tambin de hecho o voluntario, es la norma general y el que resulta de la definicin del
artculo 59 del Cdigo Civil.
Estar constituido por la residencia acompaada del nimo de
permanecer en ella y ser aplicable siempre que el individuo no
est sometido a ninguna de las reglas que segn la legislacin le
imponen un domicilio especial.
Como los factores que configuran el domicilio pueden variar,
puede existir un cambio de domicilio. Ello suceder cuando haya
un cambio real y efectivo de sus elementos constitutivos.
Esta posibilidad de cambio nos lleva a examinar la prueba del
domicilio. Como una persona est amparada por la disposicin o
presuncin general del artculo 62, no necesita probar que el lugar en que est de asiento sea su domicilio. El que quiera alegar la
falsedad o el cambio de domicilio deber probarlo. Igualmente el
interesado si alega que el domicilio que se la asigna no es el
verdadero o ha sido cambiado.
El domicilio es un hecho material y, por lo tanto, al producirse prueba al respecto son admisibles todos los medios probatorios.
Debemos sealar, eso s, que no siempre el cambio de domicilio
tiene efectos jurdicos. El artculo 1589 del Cdigo Civil dispone:
"Si hubiere mudado de domicilio el acreedor o el deudor entre
la celebracin del contrato y el pago, se har siempre ste en el
lugar en que sin esa mudanza correspondera, salvo que las partes
dispon- gan de comn acuerdo otra cosa". Por lo tanto, salvo
convencin al respecto, el cambio de domicilio no vara el lugar del
pago de una obligacin de gnero que debe hacerse en el domicilio
del deudor.
Por su parte el artculo 49 del Cdigo de Procedimiento Civil
establece que el domicilio que cada litigante debe designar en su
primera gestin judicial "se considerar subsistente mientras no
haga otra la parte interesada, aun cuando de hecho cambie su
morada". El alcance de la norma es ms amplio del que aparece a
primera lectura; el domicilio designado subsiste, no slo si el litigante cambia de morada, sino tambin si cambia su domicilio real.
. Pluralidad de domicilios
1:n. Ap.uLi ndo:: del (:digo Napolen
doctrilla
rraIH"('S<I. qlle
('sLlhlccell
quc
una
(art. 1(2)
pcrsolla
slo
de la
puede
130
DERECHO
Cl\1L.
PARTE CENER,\L
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
131
- Concepto y caractersticas
diciendo: "El
132
DERECHO
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
133
136. Las fuentes del estado civil estn constituidas por hechos
jurdicos, actos jurdicos y sentencias judiciales.
Entre los hechos jurdicos podemos sealar el nacimiento, la
edad y la muerte. Entre los actos jurdicos, el matrimonio, la legitimacin, el reconocimiento voluntario de hijos naturales. Entre
las sentencias, las de nulidad de matrimonio, de reconocimiento
forzado de hijos naturales, la que declara verdadera o falsa la
legitimidad de un hijo.
Es necesario destacar que cuando el estado civil emana de un
hecho jurdico constituye una imposicin de la ley y la voluntad
de los interesados no tiene ninguna influencia. El hijo concebido
durante el matrimonio de sus padres es legtimo y el concebido
en una unin ilegtima ser necesariamente ilegtimo, cualquiera
que sea la voluntad del hijo o de los padres.
- La familia
y el parentesco
131
DERECHO
Se entiende por grado el nmero de generaciones que separan a los parientes. En la lnea recta el clculo es muy fcil. El
padre y el hijo son parientes en primer grado; el abuelo y el nieto
parientes en segundo grado.
Para contar los grados en la lnea colateral es necesario subir
desde un pariente hasta el antepasado comn, y desde l bajar
hasta el otro. As, entre to y sobrino tenemos: desde el sobrino a
su padre, un grado; a su abuelo, otro; del abuelo descendiendo al
to, un nuevo grado; en total tres grados. Los parientes ms cercanos por lnea colateral son los hermanos, cuyo parentesco es de
segundo grado de consanguinidad colateral.
Si aplicamos estas reglas en forma ilimitada, todas las personas
del mundo de acuerdo a la tradicin bblica seran parientes por
muy infinitamente lejano que fuera el grado. Hasta qu grado
podemos considerar que los colaterales son parientes y forman
parte de la familia?
La ley no da una respuesta directa a esta interrogante, pero si
examinamos las reglas de la sucesin intestada, en que los herederos son llamados en distintos rdenes sucesivos a la sucesin del
causante atendiendo a ser cnyuges o parientes de ste, podemos
encontrar una respuesta. En efecto el artculo 992 del Cdigo
Civil, que establece el ltimo orden de sucesin, a falta de ascendientes, descendientes o cnyuge sobreviviente, llama a la sucesin a los otros colaterales legtimos, prefiriendo a los de grado
ms prximo. En su regla 2 establece que "los derechos de sucesin de los colaterales no se extienden ms all del sexto grado".
En este grado de parentesco estn los que en el lenguaje corriente se llaman primos de segundo grado.
Los colaterales pueden serlo de simple conjuncin, esto es, los
que slo son parientes por parte de padre o por parte de madre,
o de doble conjuncin, esto es, los que a la vez son parientes por
parte de padre y por parte de madre. Ambos se consideran iguales; los ltimos no tienen ninguna preferencia en cuanto al parentesco sobre los primos (artculo 992 regla 3 del Cdigo Civil).
Por lo tanto, podemos concluir que jurdicamente el parentesco y la familia se extienden hasta abarcar a los colaterales de sexto
grado, sin que importe la simple o la doble conjuncin.
139. El parentesco por afinidad no se produce solamente entre un cnyuge y los consanguneos del otro. Nuestro Cdigo,
siguiendo la tradicin de Las Partidas, establece el parentesco de
afinidad entre dos personas que no han contrado matrimonio y
se han conocido carnalmente y los consanguneos de la otra (artculo 32 del Cdigo Civil).
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
135
El artculo 31 del Cdigo dice que la lnea y grado de afinidad legtima con un consanguneo de su marido o mujer, se
califican por la lnea y grado de consanguinidad
del dicho
marido o mujer con el dicho consanguneo. De acuerdo con
esto el marido est en primer grado de afinidad en lnea recta
con su suegro o suegra y en segundo grado de afinidad en
lnea colateral con su cuado.
Conforme con el artculo 33 del Cdigo Civil, en la afinidad
ilegtima se califican las lneas y grados de la misma manera que
en la afinidad legtima.
140. Lo anterior nos lleva a considerar el problema de la legitimidad o ilegitimidad del parentesco.
La distincin tiene especial importancia en el derecho de alimentos, en los derechos y deberes entre los padres y los hijos, en
materia sucesoria, etc. En esta ltima existen dos clases de sucesin intestada; una regular, cuando el causante es hijo legtimo, y
otra irregular, cuando el causante es hijo natural. Por otra parte,
en la sucesin regular el nico pariente ilegtimo que la ley considera es el hijo natural. Adems, en la sucesin testada, los nicos
parientes ilegtimos que pueden ser legitimarios son los hijos naturales y los padres naturales que hayan reconocido voluntariamente al hijo (art. 1182 del C. C.), y los hijos naturales son los
nicos parientes no legtimos que pueden ser asignatarios de la
cuarta de mejoras (art. 1184 del C. C.).
El parentesco es legtimo cuando, como lo expresa el artculo 28 del Cdigo Civil, todas las generaciones de que resulta han
sido autorizadas por la ley, e ilegtimo, de acuerdo al artculo 29,
cuando una o ms de las generaciones de que resulta no han sido
autorizadas por la ley.
Lo anterior se aplica tambin al parentesco por afinidad, pero
('11 ste existe
una causa adicional de ilegitimidad y es que el
hombre y la mujer no hayan contrado matrimonio.
De esta manera, el parentesco por afinidad puede ser ilegti(IlO en dos situaciones: existiendo matrimonio,
porque el consangllneo de uno de los cnyuges (pariente del otro por afinidad) es
ilegtimo; o bien, porque no existe matrimonio entre el hombre y
l.i rnujcr (arts. 31 y 32 del C. C.).
lmportancia del pareniesco
i urd
11(1.
iC<ls.
136
DERECHO
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
137
138
DERECHO
R. D.].,
t.
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
139
S('
140
DERECHO
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
141
('11
N" 1");
1;1
l'scrillll;l
dI'
1l'l'lllliaci(')ll
de
l'sll'
rt-ro nocim
ic-u to
142
DERECHO
LOS SLJETOS
DEL DERECIlO
14:'
EL PATRIMONIO
- Concepto e importancia
dI' Oroil
Cn! /<I1I1/(lIis,
1.
144
DERECHO
inciso 2 habla del patrimonio del desaparecido; el 534 del patrimonio del pupilo; el 347, en las guardas, habla de indivisin de
patrimonios y de su divisin; el 1341 se refiere a la confusin de
patrimonios; los 1170 y 1172 hablan del patrimonio del difunto;
los 1114 y 1115 hacen una clara distincin entre el patrimonio y
las cosas que existan en l; el 1750 dice: "el marido es, respecto de
terceros, dueo de los bienes sociales, como si ellos y sus bienes
propios formasen un solo patrimonio", etc.
Tal vez la disposicin que puntualiza con ms claridad el concepto de patrimonio, aunque no lo nombre, es el artculo 549 del
Cdigo Civil, que dice: "Lo que pertenece a una corporacin, no
pertenece ni en todo ni en parte a ninguno de los individuos que
la componen; y recprocamente las deudas de una corporacin,
no dan a nadie derecho para demandarlas, en todo o parte, a
ninguno de los individuos que componen la corporacin, ni dan
accin sobre los bienes propios de ellos, sino sobre los bienes de
la corporacin". Ms adelante el inciso final agrega: "Si una corporacin no tiene existencia legal segn el artculo 546, sus actos
colectivos obligan a todos y cada uno de sus miembros solidariamente".
Toda la esencia de la teora del patrimonio est en esta disposicin. Si la corporacin est constituida, es una persona jurdica,
tiene un patrimonio propio, sus actos no afectan el patrimonio
personal de los asociados. Si no lo est, no tiene patrimonio, y los
actos colectivos que realicen las personas que la forman obligan a
stas solidariamente en sus propios patrimonios.
154. El concepto de patrimonio es el que regula y hace posible la responsabilidad del deudor por sus obligaciones civiles.
El artculo 2465 del Cdigo Civil establece lo que denominamos la prenda general de los acreedores al disponer: "Toda obligacin personal da al acreedor el derecho de perseguir su ejecucin sobre todos los bienes races o muebles del deudor, sean
presentes o futuros, exceptundose solamente los no embargables, designados en el artculo 1618".
Lo anterior deja en claro que el deudor responde de sus obligaciones, no con los bienes que tuvo al tiempo de contraerlas,
sino con los bienes que existan en su patrimonio al tiempo de
exigirse el pago de la obligacin. Ello permite al deudor una
completa libertad en la vida jurdica; puede contraer nuevas obligaciones, puede enajenar sus bienes, puede adquirir nuevos bienes. Son los bienes que existan en el patrimonio al tiempo de
exigirse el cumplimiento de la obligacin aquellos sobre los cuales sta puede perseguirse.
145
sohre
hi('ll('s dctenllill;Hlos.
(:Il<lIIClo e-xiste-u
2;ar;1l1t;ISreales,
como
14t
DFRECHO CNIL.
PARTE GENERAL
la
LOS SUJETOS
DEI, DERECHO
147
14R
DERECHO
CIVIL
PARTE GENERAL
del artculo 245 del Cdigo Civil y 371 del Cdigo de Comercio,
entre otros, con autorizacin del mandante, pero, como regla
general, sin necesidad de autorizacin.
En ambos supuestos es imposible entender que la persona
est contratando consigo misma si no entendemos que est actuando por dos patrimonios: el propio y el del representado.
- Caractersticas
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
149
150
DERECHO
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
151
DERECHOS
DE LA PERSONALIDAD
nncepto
1 ():~. Corresponde ahora analizar un vasto conjunto de derec!Jos, an no totalmente determinados, pero que son inherentes a
1;1persona humana y que por esto llamamos derechos de la persounliclar]. (;OIlSliIIIY('11
1111 .u ribuio
de la persona por ser tal y, en
ceIIISC('llt'llcia,
Iodos.
lS2
DERECHO
Podemos agruparlos en categoras muy genricas, pero es imposible hacer una enumeracin exhaustiva de ellos. Como su violacin es sancionada generalmente por la responsabilidad civil,
los tribunales, sobre todo en los pases de una jurisprudencia ms
avanzada que la nuestra, van agregando peridicamente
nuevas
situaciones que estiman merecedoras de la proteccin jurdica y
que slo pueden englobarse dentro del concepto general de derechos de la personalidad."
Algunos autores, como Biondi, reconocen que no hay duda
de que existe un derecho al honor, al nombre, a la libertad y que
la ley acepta aquellos derechos que se resumen en la categora de
los derechos de la personalidad, pero puesto que tales derechos,
como todos otros, deben tener un objeto, es imprescindible reconocer que honor, nombre, libertad, son entidades jurdicas que
pueden encuadrarse en el amplio Crculo de las cosas."
Esto no constituye una objecin entre nosotros por el significado amplio de la palabra cosa, en cuanto objeto, que analizaremos ms adelante.
Otros autores, como Enrico Allorio, sealan con relacin a los
llamados derechos de la personalidad que ellos no son autnomamente declarables en juicio y, por consiguiente, no son autnticos
derechos o estados. Ellos seran slo un hecho constitutivo de la
obligacin de reintegro o de resarcimiento de daos, que se contrae comportndose de modo contrario a las fundamentales prerrogativas de la persona ajena."
En realidad estos derechos no tienen directamente un inters
pecuniario, son de los que comnmente se denominan extrapatrimoniales, pero ello no significa que no puedan llegar a tener una
valorizacin econmica, porque en caso contrario no podran tener una tutela jurdica.
Algunos autores llaman a estos derechos "derechos polticos"
por estar muchos de ellos consagrados en la Constitucin Poltica,
pero esto es reducir el mbito de aplicacin del concepto que en
realidad es mucho ms amplio.
Podemos intentar una clasificacin de estos derechos, distinguiendo aquellos que se refieren a la individualidad de la persona
y que comprenden dos rdenes de conceptos: la integridad fsica
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
153
y la libertad personal. En seguida, los que se refieren a la proteccin de la personalidad civil de las personas; por ltimo, los que
dicen relacin con la proteccin de su personalidad moral.
- Derechos a la individualidad
164. La individualidad comprende, en primer trmino, el derecho a la integridad fsica que implica la proteccin de la vida y
de la integridad corporal.
La Constitucin seala entre los derechos constitucionales, en
el N 1 del art. 19, "derecho a la vida y a la integridad fsica y
psquica de la persona". Los atentados a estos derechos constituyen delitos penados especficamente por el Cdigo Penal.
Los delitos de homicidio, mutilaciones y lesiones sancionan la
proteccin de la integridad fsica.
Estos hechos, aunque no lleguen a ser constitutivos de un
delito penal por la falta de intencionalidad, constituirn, generalmente, un hecho culpable en que la culpa, real o presunta, determinar la existencia de un cuasidelito civil y dar lugar a la indemnizacin correspondiente.
165. La proteccin de la individualidad, no ya como persona
fsica, sino como persona libre, comprende una serie de derechos
que en general, pero no necesariamente, tiene el individuo con
relacin al Estado; son definidos y reglamentados por el derecho
pblico y se encuentran establecidas en la Constitucin.
En primer trmino el derecho a la libertad misma. La Constitucin que ya en el N 1 de su artculo 19 reconoce el derecho a
la vida y a la integridad personal, en el N 7 del mismo artculo
establece el derecho a la libertad personal y a la seguridad individual.
Los crmenes y simples delitos que puedan cometer los particulares contra la libertad y seguridad de otros estn penados en el
prrafo 3 del Ttulo III del Libro II del Cdigo Penal.
El mismo Cdigo, en el prrafo siguiente, pena los agravios
inferidos por funcionarios pblicos a los derechos garantidos por
la Constitucin.
Dentro de este mismo orden de derechos que dicen relacin
con la libertad podemos sealar los derechos de reunirse y asociarse (N(lS 13 Y 15, art. 19 de la Constitucin); los derechos de
pel1sar, opinar y rrc-or (N(lS 6 Y 12); el derecho de residir y
r raxl.ularsc (N" 7"); el d('l('cho y la libertad de trabajo (N 16),
Q
DERECHO
citnl
166. Los derechos que se refieren a la proteccin de la personalidad civil de las personas consisten especialmente en el derecho al nombre, al estado civil ya la propia imagen.
Hemos estudiado el nombre como atributo de la personalidad; aqu nos referimos al derecho subjetivo que una persona
tiene de usar su nombre y oponerse a la usurpacin o uso indebido del mismo por parte de terceros.
La usurpacin del nombre es un delito contemplado en el Cdigo Penal. El artculo 214 castiga al que usurpare el nombre de
otro y agrega que esto es "sin perjuicio de la pena que pudiere
corresponderle a consecuencia del dao que en su fama o intereses
ocasionare a la persona cuyo nombre ha usurpado". Asimismo en la
falsificacin de instrumentos pblicos o privados una de las formas
de configuracin del delito es el contrahacer o fingir una firma.
Como toda responsabilidad penal es sin perjuicio de la responsabilidad civil que pueda acarrear el acto, es fcil ente-nder la pro(CCCi<'lIl
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
155
R. D.J,
1.
156
DERECHO
moral
167. La proteccin de la personalidad moral implica la proteccin de su honor, de su reputacin e incluso de sus sentimientos de afeccin.
Nuestra Constitucin consagra como derecho fundamental,
en el N 4 del art. 19 "el respeto y proteccin a la vida privada y
pblica y a la honra de la persona y de su familia". Conviene
sealar que esta disposicin tiene mayor amplitud que las normas
penales que configuran los delitos contra el honor de las personas
ya que consagra el respeto y proteccin de la vida privada y pblica de la persona y de su familia.s
El Cdigo Penal en sus artculos 412 y 416 contempla los delitos
de calumnia e injuria. El primero consiste en la imputacin de un
delito determinado pero falso y que pueda actualmente perseguirse
de oficio. El segundo, en toda expresin proferida o accin ejecutada en deshonra, descrdito o menosprecio de otra persona.
La correspondencia que existe siempre entre la sancin penal
y la indemnizacin civil del hecho se destruye aqu por una disposicin totalmente anacrnica de nuestro Cdigo Civil. En efecto,
el artculo 2331 dispone que: "Las imputaciones injuriosas contra
el honor o el crdito de una persona no dan derecho para demandar una indemnizacin pecuniaria, a menos de probarse dao
emergente o lucro cesante, que pueda apreciarse en dinero".
Cabe sealar que al adoptarse en Colombia nuestro Cdigo
Civil, el Ttulo XXXV del Libro IV no sufri modificacin alguna,
salvo la eliminacin de este artculo.
La proteccin de los sentimientos de afeccin constituye, dentro de la responsabilidad civil, el vasto campo de lo que se ha
llamado indemnizacin del dao moral.
Nuestra jurisprudencia ha definido el dao moral como el
que proviene de toda accin u omisin que pueda estimarse lesiva
R. D. j.,
t.
79, s. 5, p. 178.
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
157
a las facultades espirituales, a los efectos o a las condiciones sociales o morales inherentes a la personalidad humana.
Muy discutida en un comienzo la indemnizacin del dao
moral, es aceptada sin reservas por nuestra jurisprudencia, en
materia extracontractual, desde 1922, y en materia de responsabilidad contractual, desde 1951.
La objecin general consisti en que no se ve cmo un dao
que hera los sentimientos de afecto, que causaba dolor, poda ser
indemnizado pecuniariamente. Se ha considerado que la indemnizacin pecuniaria, aunque no significa una reparacin, constituye, a lo menos, una compensacin.
Aunque los tribunales civiles franceses han aceptado ya tradicionalmente la indemnizacin del dao moral, en materia administrativa el Consejo de Estado francs, que es el ms alto tribunal
en la materia, se neg hasta 1961 a aceptar la indemnizacin el
dao puramente moral. Antes haba concedido indemnizaciones
fundadas en la alteracin de las condiciones de existencia de los
demandantes, frmula bastante feliz, que no ha sido abandonada,
y que puede cubrir en muchos casos la indemnizacin del dao
exclusivamente moral.
La ley sobre abusos de publicidad contempla diversas situaciones relacionadas con esta materia y consagra el derecho de respuesta que se concede al afectado.
LAS PERSONASJURIDICAS
- Concepto)! clasificacin
'1
R. D.
158
DERECHO
Li<J
11
';'111'/11
di' /1/1
/Wt:\II//(/1
[urulicas.
R('IIS,
I~)~~).
iso
DERECHO
CNIL.
PARTE GENERAL
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
161
162
DERECHO
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
163
Iti4
DERECHO
ATRIBUTOS
CIVIL
PARTE GENERAL
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
165
166
DERECHO
15
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
167
168
DERECHO
RESPONSABILIDAD
CI\lL
PARTE GENERAL
- Responsabilidad penal
178. La posibilidad de responsabilidad penal para las personas jurdicas no ha sido resuelta de modo uniforme por los tratadistas.
Los partidarios de que la personalidad jurdica es una ficcin
estiman que ella es imposible porque, en primer trmino, tal responsabilidad se basa en la voluntad de un ser humano para realizar actos razonados; en segundo lugar, por el principio de personalidad o individualidad de las penas.
En efecto, la sancin contra una persona jurdica la sufriran
todos los asociados, incluso los que no tuvieron ninguna participacin en el hecho punible.
Los que estiman que las personas jurdicas son realidades objetivas admiten que tienen responsabilidad penal, pero deben restringirse a casos excepcionales y a penas determinadas.
Los que sostienen que las personas jurdicas son una realidad,
pero abstracta, estiman que no pueden ser autoras de delito en el
sentido natural o legal; que si por parte de la persona jurdica se
cometiere un delito, no personal sino colectivo, debe ser castigado a travs del derecho penal administrativo.
Entre nosotros no cabe esta discusin terica. En efecto, el
inciso segundo del artculo 39 del Cdigo de Procedimiento Penal dice: "La responsabilidad penal slo puede hacerse efectiva en
las personas naturales. Por las personas jurdicas responden los
que hayan intervenido en el acto punible, sin perjuicio de la responsabilidad civil que afecte a la corporacin en cuyo nombre
hubieren obrado".
- Responsabilidad civil
179. En la responsabilidad civil debemos distinguir si se trata
de responsabilidad contractual o extracontractual.
En materia contractual las personas jurdicas responden de
todas las obligaciones contradas en su nombre por sus representantes si stos han obrado dentro de los lmites de su mandato.
En efecto, el artculo 545 del Cdigo Civil dice que la persona
jurdica es capaz de contraer obligaciones civiles y de ser rcprcsentadajudicial v exrrajudiciairneu
n-.
LOS SUJETOS
DEL DERECHO
169
Por otra parte, el artculo 552 agrega que: "Los actos del representante de la corporacin, en cuanto no excedan de los lmites del ministerio que se le ha confiado, son actos de la corporacin; en cuanto excedan de estos lmites, slo obligan personalmente al representante".
Por lo tanto, la persona jurdica est obligada al cumplimiento
de sus obligaciones; en caso contrario, incurrir en responsabilidad civil contractual y estar constreida a pagar las indemnizaciones de perjuicios, compensatorias y/o moratorias, que procedan.
180. Igualmente la persona jurdica puede incurrir en responsabilidad civil extracontractual.
Ahora bien, esta responsabilidad emana de los delitos o cuasidelitos civiles, que son aquellos hechos ilcitos, dolosos o culpables que causan dao a un tercero. La responsabilidad consiste en
la obligacin de indemnizar este dao.
Considerando la disposicin expresa del artculo 39 del Cdigo de Procedimiento Penal que ya hemos citado y que no existe
ninguna disposicin limitativa en el Ttulo XXXV del Libro IV del
Cdigo Civil que reglamente la responsabilidad extracontractual,
no hay razn alguna para sostener, como lo han hecho algunas
sentencias, que la persona jurdica sea incapaz de cometer delitos
o cuasidelitos civiles.16
Si la persona jurdica puede contraer obligaciones civiles,
como expresamente lo dispone el artculo 545 del Cdigo Civil, no hay razn alguna para limitar esta capacidad a una sola
de las fuentes de las obligaciones, ni tampoco para excluir a
una de dichas fuentes.
En cuanto al dao que causen las personas, la responsabilidad
extracontractual puede provenir del hecho propio, o bien, del
hecho de un tercero por el cual se es civilmente responsable.
Esta situacin excepcional en que alguien responde del delito
o cuasidelito ajeno la plantea en forma general el artculo 2320
del Cdigo Civil al decir que "toda persona es responsable no slo
de sus propias acciones, sino del hecho de aquellos que estuvieren
a su cuidado". En los ejemplos que seala dicha disposicin, y que
no son taxativos, dice que los artesanos y empresarios responden
del hecho de sus aprendices o dependientes, mientras estn bajo
su cuidado.
II;R.Il.J.1
1'.~.,.I.I . III):I.~~,s.
I,p.(iHI:I.~H.s.
1,1'.11;1.
170
DERECHO
181. En relacin con la responsabilidad personal de las personas jurdicas, se ha sostenido por los autores franceses y por
Alessandri, entre nosotros, que el delito o cuasidelito debe haber
sido cometido por sus "rganos", esto es, por las personas naturales o asamblea en que reside la voluntad de la persona jurdica, o
sea, la mayora de la sala de acuerdo al artculo 550 o las personas
que la representan en conformidad al artculo 551 del Cdigo
Civil, y adems obrando en ejercicio de sus funciones.'?
De acuerdo a este criterio el dao inferido por cualquiera
persona natural que forme parte de la sociedad jurdica, pero que
no tenga su representacin, slo podra hacerla responsable a
travs del mecanismo de responsabilidad por el hecho ajeno.l''
No compartimos este criterio que parte de no considerar aqu
la diferente reglamentacin de la capacidad en materia contractual y en materia de responsabilidad civil extracontractual. Para
realizar vlidamente actos jurdicos es necesario tener la capacidad al efecto, capacidad que est regulada por las disposiciones
del artculo 1447 del Cdigo Civil. La capacidad para con traer
responsabilidad civil la fija el artculo 2319 del Cdigo Civil; de
acuerdo con l, los nicos incapaces son los menores de siete
aos (infantes) y los dementes.
Por lo tanto, para contraer responsabilidad civil no es necesaria la capacidad para realizar actos jurdicos, lo que es lgico,
porque aqu estamos en presencia de simples hechos jurdicos;
consecuencialmente, para que la persona jurdica contraiga responsabilidad civil no es necesario que acten las personas que la
representan y realicen los actos exigidos para obligarla contractualmente.
Cmo acta la persona jurdica en el mundo real? A travs de
las personas naturales que forman parte de ella en cualquier carcter, tengan o no su representacin. Es precisamente en los
hechos de la vida diaria, en las ocurrencias de la actividad, en los
que se causan daos y se incurren en responsabilidad civil. Ahora
bien, esta actividad no la realizan las personas jurdicas, entes
abstractos, sino las personas naturales que las componen o forman parte de ellas como administradores o como dependientes.
Por lo tanto, las personas jurdicas incurren en responsabilidad civil extracontractual por los daos que produzca su activi-
17 A. ALESSANDRI
R., De la responsabilidad extracontraciual en el derecho civil
chileno. Ed. Universitaria. 1943, N" 106.
18 A. ALESSANDRI
R., o1J, cit., N 111.
ros
SUJETOS
DEL DERECHO
171
CAPTULO
IV
174
DERECHO
LOS OBJETOS
DEL DERECHO
175
1i6
DERECHO
- Clasificacin
186. Las cosas corporales se clasifican a su vez en muebles e
inmuebles.
De acuerdo con lo que disponen los artculos 568, 569 Y 570
del Cdigo Civil, inmuebles son las cosas que no pueden transportarse de un lugar a otro, como las tierras y las minas. Tambin las
que adhieren permanentemente a ellas, como los edificios y los
rboles. Finalmente son inmuebles las cosas que estn destinadas
permanentemente por su dueo al uso, cultivo o beneficio de un
inmueble.
Para nuestra ley los trminos inmueble, finca o bien raz son
sinnimos.
En conformidad a los artculos 567 y 571 del Cdigo Civil,
muebles son las cosas que pueden transportarse de un lugar a
otro, ya sea movindose por s mismas (semovientes) o por uua
fuerza externa (inanimadas). Se consideran tambin muebles los
productos de los inmuebles y las cosas accesorias a ellos, para el
efecto de constituir un derecho sobre dichos productos o cosas a
favor de un tercero.
187. La distincin entre bienes muebles e inmuebles tienen
gran importancia en nuestro derecho. A travs de una tradicin
medieval recogida por el Cdigo francs, los bienes inmobiliarios
son la base de la fortuna; ste es el criterio que inspira nuestro
Cdigo Civil que, como veremos, aplica al trfico de bienes races
una serie de requisitos, garantas y controles que no son exigidos
para los bienes muebles. Hoy da aparece esta diferenciacin como
anacrnica, ya que los bienes muebles tienen una importancia
patrimonial igualo mayor que los bienes inmuebles.
Entre las diferencias ms importantes podemos serialar:
a) Con relacin a los modos de adquirir: la ocupacin se aplica slo a los muebles; las reglas de accesin son distintas; en la
tradicin, la entrega de la cosa, si sta es inmueble, debe efectuarse por la inscripcin en el Conservador de Bienes Races; en la
prescripcin, los plazos de la prescripcin adquisitiva ordinaria
son distintos para muebles e inmuebles.
b) Ciertos derechos reales, limitaciones del dominio, slo pueden ejercerse en inmuebles; as la servidumbre y el derecho de
habitacin.
c) Ciertos derechos reales de garanta slo proceden respecto
a inmuebles, as la hipoteca y el censo; la prenda slo cabe respecto de muebles.
LOS ORJETOS
DEL DERECHO
177
die"
<)("
Fditorialjurf-
178
DERECHO
los cuales pueden ser rsticos o urbanos. Para los predios rsticos
se usa tambin el nombre de "fundos".
Nuestro Cdigo ha distinguido entre bienes inmuebles por
naturaleza, por adherencia y por destinacin.
El actual Cdigo Civil italiano abandona tanto las definiciones
como la clasificacin, y en su artculo 812 enumera los bienes
inmuebles taxativamente.
El bien inmueble por naturaleza es el suelo. Nuestro Cdigo
seala las tierras y las minas, pero lo son tambin las cosas que son
inherentes a l o le estn incorporadas; por eso el artfculo 568 del
Cdigo Civil agrega las cosas que adhieren al suelo permanentemente, como los edificios, los rboles.
El concepto de los inmuebles por adherencia lo seala el artculo 569 del Cdigo Civil al decir: "Las plantas son inmuebles,
mientras adhieren al suelo por sus races, a menos que estn en
macetas o cajones, que puedan transportarse de un lugar a otro".
Tenemos finalmente los inmuebles por destinacin. AqU nos
encontramos frente a bienes que en realidad son muebles, pero
que, por una ficcin jurdica, pasan a considerarse inmuebles. Se
trata de las cosas que estn permanentemente destinadas al uso,
cultivo y beneficio de un inmueble, sin embargo de que puedan
separarse sin detrimento.
El artculo 570 del Cdigo Civil que las seala da diversos
ejemplos, algunos de los cuales no son exactos (como las losas de
un pavimento), pues en realidad son inmuebles por adherencia.
La disposicin exige que estos muebles deben haber sido "puestos, "destinados" o pertenecer al dueo de la finca. No se exige
esto en los dos primeros ejemplos, pero ya se ha sealado que
ellos son errneos, pues se trata de inmuebles por adherencia.
Se ha discutido si esta enumeracin tiene un carcter taxativo,
pero evidentemente ello no es as.
Bienes muebles
189. Los bienes o cosas muebles segn el arto 567 del Cdigo
Civil son los que "pueden transportarse de un lugar a otro, sea
movindose ellas a s mismas, como los animales (que por eso se
llaman semovientes), sea que slo se muevan por una fuerza externa, como las cosas inanimadas".
Lo anterior define los bienes muebles por naturaleza. Los autores han hecho enumeraciones de los bienes que deben entenderse comprendidos en la calificacin. Estimamos esto innecesario, pues los bienes muebles constituyen la regla ('01111'111 o )-\'ellC-
LOS OBJETOS
DEL DERECHO
179
ISO
DERECHO
CIVIL. PARrE
GENERAL
y fungibles
181
Las especies monetarias, como lo dice el inciso final del artculo 575, son esencialmente fungibles.
En general, son cosas fungibles las que pueden substituirse
unas a otras, porque se determinan slo por cantidad, peso o
medida.
El concepto de consumibles es distinto, aunque por lo general
las cosas fungibles son consumibles.
Los bienes consumibles son los que perecen por el uso que se
haga de ellos.
Puede distinguirse en consumibilidad fsica y consumibilidad
jurdica. La primera consiste en que la cosa desaparezca por el
uso, como el carbn o la harina; la segunda, en que el propietario
ejecute un acto de disposicin que no puede ser repetido respecto de la misma cosa.
Las cosas no consumibles no se destruyen al primer uso; admiten un goce material o jurdico prolongado, conservando su individualidad.
Hay ciertos contratos que slo pueden aplicarse a las cosas no
consumibles, como el comodato, ya que el comodatario debe restituir la misma especie despus de terminado el uso (art. 2174 del
C. C.). Otros, como el mutuo, deben referirse necesariamente a
cosas fungibles. El artculo 2196 del Cdigo Civil dice expresamente que el mutuo o prstamo de consumo "es un contrato en
que una de las partes entrega a la otra cierta cantidad de cosas
'fungibles' con cargo de restituir otras tantas del mismo gnero y
calidad".
COSA''; INCORPORALES
- Concepto
l)('rsol1;dsilllos.
I"te..
IlO
seral1 ni derec!Jos
l1i ('osas.
182
DERECHO
LOS OBJETOS
DEL DERECHO
18,1
en el recurso, no puedan ser considerados como bienes incorporales, respecto de los cuales la Constitucin Poltica asegura amplia libertad de adquisicin (artculo 19 N 23), y reconoce como
objeto del derecho de propiedad que, en sus diversas especies y
sobre toda clase de bienes, la misma Carta Fundamental asegura a
todas las personas (artculo 19 N 24).
Que, en efecto, la extensin de los trminos utilizados en las
citadas disposiciones constitucionales, plenamente concordantes
con los preceptos de los artculos 565, 582, 583 Y 584 del Cdigo
Civil, no faculta para restringir solamente a los derechos personales o reales del mbito propio de aquellos susceptibles de integrar
el concepto de cosa incorporal que puede ser objeto de dominio
o propiedad, sino que dicho concepto debe estimarse comprensivo, tambin, de bienes inmateriales diversos, como sucede con
simples relaciones de hecho o situaciones de trascendencia econmica, entre las que la doctrina civilista incluye, por ejemplo, el
crdito de un comerciante, la clientela de un establecimiento mercantil, etc."
Debe sealarse, eso s, que las preferencias generales de pago
de que gozan determinados derechos no constituyen por s mismas derechos subjetivos, sino que importan un accesorio, una
calidad o modo de ser de ciertos crditos."
Dentro de las cosas incorporales, y con la salvedad que hemos
hecho en los prrafos precedentes, estudiaremos en primer trrnino y separadamente los derechos reales y personales.
Derechos reales
193. Derecho real, dice el art. 577 del Cdigo Civil, "es el que
tenemos sobre una cosa sin respecto a determinada persona". Es
decir, en el derecho real hay una relacin directa entre el titular y
la cosa; no necesita para realizar su inters de un comportamiento
ajeno. El inters del titular est destinado a realizarse inmediatamente, sin intermediarios, y por su propia actividad; la exclusin
de los dems es una consecuencia. El deber ajeno slo tendr
relevancia cuando algn tercero llegue a estar en contacto con el
derecho real y pretenda desconocerlo o turbarlo. Es un problema
de precedencia; en el derecho real lo primero es el lado activo, el
poder del titular; en cambio, en las relaciones personales, lo pri-
r, R. D.
" R. I l.
J,
J,
1. HO, s.
C"
1. H 1, x. :~,
p. '1 1.
1'. 'l.
184
DERECHO
185
186
DERECHO
todas las tierras que, estando situadas dentro de los lmites territoriales, carecen de otro dueo".
La caza y la pesca son las especies ms corrientes de ocupacin.
El segundo de los modos de adquirir es la accesin. Como lo
dice el arto 643 del C. Civil, "es un modo de adquirir por el cual el
dueo de una cosa pasa a serlo de lo que ella produce, o de lo
que sejunta a ella".
Este modo de adquirir se aplica slo al derecho real de dominio, pero tanto de bienes muebles como inmuebles. Tiene importancia prctica, porque a travs de l el dueo se hace propietario
de los frutos naturales que produzcan sus cosas como igualmente
de sus frutos civiles, rentas o intereses.
La tradicin es el modo ms importante de adquirir el dominio de las cosas y consiste (art. 670 del C. C.) "en la entrega que el
dueo hace de ellas a otro, habiendo por una parte la facultad e
intencin de transferir el dominio, y por otra la capacidad e intencin de adquirirlo.
Lo que se dice del dominio se extiende a todos los otros
derechos reales".
Tiene una importancia fundamental, porque en nuestro derecho los contratos traslativos de dominio no transfieren la propiedad, slo dan al acreedor el derecho personal de exigir la entrega
de la cosa, su tradicin, y es esta la que los hace dueos. As, en
un contrato de compraventa, el comprador por el solo contrato
no adquiere el dominio; tiene nicamente un derecho personal
para que el vendedor le haga la tradicin de la cosa vendida y,
mientras ella no se efecte, no ser dueo.
La tradicin se aplica a todos los derechos reales, no slo al
dominio. Pueden adquirirse a travs de ella toda clase de bienes
ya sea muebles o inmuebles e incluso derechos personales (cesin
de crditos). Puede aplicarse tambin a una universalidad jurdica
ya que existe la cesin del derecho de herencia.
La prescripcin es un modo de adquirir las cosas ajenas
(art. 2492) por haberse posedo dichas cosas "durante cierto lapso
de tiempo, y concurriendo los dems requisitos legales".
Para que alguien pueda adquirir por prescripcin una cosa
ajena es necesario que la posea. El concepto de posesin es la
tenencia de la cosa con nimo de seor y dueo. El que tiene una
cosa, reconociendo dominio ajeno (arrendatario), es un mero
tenedor, no un poseedor, y no puede adquirir nunca la cosa por
prescripcin.
Por el modo de adquirir prescripcin adquisitiva pueden adquirirse todos los derechos reales, incluso el derecho 1(',11 de he-
LOS OBJETOS
DEL DERECHO
187
rencia. Se exceptan slo ciertas servidumbres especiales denominadas discontinuas e inaparentes. Los derechos personales no se
adquieren por prescripcin.
El ltimo modo de adquirir es la sucesin por causa de muerte. Ella est reglamentada en todo el Libro III del Cdigo Civil.
El arto 951 del Cdigo establece que se puede suceder a una
persona a ttulo universal o singular. Es a ttulo singular cuando se
la sucede en una o ms especies o cuerpos ciertos o en una o ms
especies indeterminadas de cierto gnero. A ttulo universal, cuando se la sucede en todos sus bienes, derechos y obligaciones transmisibles, o en una cuota de ellos, como la mitad, tercio o quinto.
La sucesin por causa de muerte es un modo de adquirir que,
por lo tanto, se aplica a toda clase de bienes, corporales o incorporales, muebles o inmuebles.
Ms adelante veremos cmo se constituyen los derechos personales.
Hemos sealado las diferencias fundamentales entre el derecho real y el derecho personal. No son las nicas; podramos
sealar las acciones que los protegen, la norma de operar la prescripcin, etc.
Derechos personales
194. El arto 576 del C. Civil dice que las cosas incorporales son
derechos reales o personales. El arto 578 define estos ltimos diciendo: "Derechos personales o crditos son los que slo pueden
reclamarse de ciertas personas, que, por un hecho suyo o la sola
disposicin de la ley, han contrado las obligaciones correlativas".
El derecho personal tiene, pues, por objeto la prestacin que
debe efectuar un miembro social en inters de otro miembro de
la sociedad. Esta prestacin est garantizada con los bienes del
deudor (art. 2465 del Cdigo Civil), y, en caso de incumplimiento, con las sanciones correspondientes.
Existe una total correlacin entre el derecho del acreedor y la
obligacin del deudor. Dicho derecho no puede hacerse efectivo
sino a travs de la prestacin del deudor, ya sea que sta se realice
en forma directa o subrogada.
En los derechos personales se resuelve un problema de cooperacin (cumplimiento de obligaciones convencionales o legales), o de reparacin (obligaciones de responsabilidad extracontractual) .
Es tan irnportantc
el que el derecho personal implique necesariamcntc la pr('sta('ill por parte de 1111tercero, que el lenguaje
188
DERECHO
jurdico enfatiza el aspecto pasivo de la relacin jurdica. No hablamos de derechos personales, sino de obligaciones; no indicamos la fuente de los derechos, sino que nos referimos a la fuente
de las obligaciones; no enumeramos los modos de cumplirse los
derechos personales, sino que indicamos los modos de extinguirse las obligaciones.
195. A diferencia de los derechos reales, cuyo nmero es limitado, los derechos personales son innumerables, porque las prestaciones a que el sujeto pasivo puede estar obligado no son susceptibles de determinacin dentro de la infinita diversidad posible. A lo
ms que puede llegarse es a clasificaciones genricas muy amplias.
Desde otro punto de vista existe una diferencia fundamental
entre los derechos reales personales. Mientas los primeros se constituyen a travs de los modos de adquirir, los segundos tienen su
origen en las fuentes de las obligaciones.
El artculo 1437 del Cdigo Civil dispone: "Las obligaciones
nacen, ya del concurso real de las voluntades de dos o ms personas, como en los contratos o convenciones; ya de un hecho voluntario de la persona que se obliga, como en la aceptacin de una
herencia o legado y en todos los cuasicontratos; ya a consecuencia
de un hecho que ha inferido injuria o dao a otra persona, como
en los delitos y cuasidelitos; ya por disposicin de la ley, como
entre los padres y los hijos de familia".
Por su parte, el artculo 2284 del mismo Cdigo expresa: "Las
obligaciones que se contraen sin convencin, nacen o de la ley, o
del hecho voluntario de una de las partes. Las que nacen de la ley
se expresan en ella.
Si el hecho de que nacen es lcito, constituye un cuasicontrato.
Si el hecho es ilcito, y cometido con intencin de daar,
constituye un delito.
Si el hecho es culpable, pero cometido sin intencin de daar, constituye un cuasidelito".
De las disposiciones citadas resulta que las fuentes de las obligaciones son: el contrato, el cuasicontrato, el delito, el cuasidelito
y la ley.
El contrato lo define el artculo 1438 del Cdigo diciendo:
"Contrato o convencin es un acto por el cual una parte se obliga
para con otra a dar, hacer o no hacer alguna cosa. Cada parte
puede ser una o muchas personas".
La definicin del Cdigo hace sinnimos los trminos contrato y convencin, que en teora jurdica tienen un alcance distinto.
Convencin es cualquier acto jurdico bilateral; cont rato es un
189
190
DERECHO
contenido de la relacin jurdica, como ms adelante lo analizaremos. En cuanto a la ejecucin forzada de la obligacin, que proceder siempre en las obligaciones de dar, excepto cuando la
prdida de la cosa debida no ha extinguido la obligacin; en las
obligaciones de hacer depender de la eleccin del acreedor, en
conformidad al art. 1553 del Cdigo Civil; por ltimo, en las obligaciones de no hacer cuando pueda deshacerse lo hecho. Tambin, y como ms adelante se estudiar, tendr importancia con
relacin a la constitucin en mora del deudor.
UNIVERSALIDADES
LOS OBJETOS
DEI, DERECHO
HJI
de comercio
198. Existen ciertas universalidades que, por no estar claramente configuradas en nuestra legislacin, merecen un anlisis
especial. Tales son las empresas y los establecimientos de comercio.?
Estas entidades no estn tratadas en el Cdigo Civil, pero s se
refiere a ellas el Cdigo de Comercio. El artculo 3 del Cdigo de
Comercio, al determinar cules son los actos de comercio, dice en
su nmero 2: "la compra de un establecimiento de comercio". El
concepto lo aclara ms adelante al tratar del seguro y establecer,
en su artculo 524: "Los establecimientos de comercio, como almacenes, bazares, tiendas, fbricas y otros, y los cargamentos terrestres o martimos pueden ser asegurados con o sin designacin
especfica de las mercaderas y otros objetos que contengan". Esta
disposicin fija dos aspectos fundamentales: en primer trmino,
que el establecimiento de comercio constituye una universalidad,
ya que su seguro se hace sin especificacin de los objetos que
contiene; en segundo lugar, que la expresin "establecimiento de
comercio" comprende tambin lo que se designa con el trmino
"empresa", ya que en la enumeracin seala las fbricas, que 110
son propiamente establecimientos de comercio sino establecimientos industriales, esto es, "empresas"." Hay que serialar aqu cierta
inconsistencia del Cdigo, ya que en el artculo 3 ha tratado se-
192
DERECHO
\) R. n.j.,
t.
59, s. 1, p. 118.
LOS OBJETOS
DEL DERECHO
193
111
1l)4
DERECHO
gnrale.
Da-
LOS OBJETOS
DEL DEREClIO
19.0
No entra en esta categora la razn social, ya que el artculo 369 del Cdigo de Comercio, al regular las sociedades colectivas, dispone que: "La razn social no es un accesorio del establecimiento social o fabril que constituye el objeto de las operaciones
sociales y por consiguiente no es transmisible con l".
El derecho de llaves constituye una figura especial, ya que va a
estar generalmente subordinado a la ocupacin de un local determinado. Es el traspaso de la ocupacin del local lo que puede
determinar la procedencia de un derecho de llaves. Dicho traspaso puede provenir del propietario mismo, o de un arrendatario
anterior que cede su calidad de tal, ya sea porque est autorizado
para hacerlo, o bien porque el propietario acepta el cambio de
arrendatario. Puede tambin estar incluido su valor en el de enajenacin de un establecimiento que ocupa el local.
Podemos sealar muchos otros casos de bienes intangibles,
como por ejemplo, la tecnologa intangible. El Decreto Ley N 1748
de 1977 sobre Estatuto del Inversionista admite el aporte y capitalizacin de la tecnologa y la cesin de su dominio, uso y goce en
forma separada de la empresa a la cual se haya aportado. Igualmente el know how o conocimiento tcnico especial, que es independiente de la patente o proceso a que es aplicable y que puede
tener un gran valor econmico.
- Derechos potestativos
MICIIFLE
CIORGIANI,
CIIIOVI':NDi\,
':/ISfl'VOI dr derecho cioil. vol. r, N" 11, p. 26.
L. FNNl'.(:< :li,RIIS. /11'/1'1'''0 Civil. I\osch, J~)!':I. Parle gelleral,
p.irralo
(i()'-:I. p. 2HH.
196
DERECHO
14
15
16
17
LOS OBJETOS
DEL DERECHO
197
198
DERECHO
199
CAPTULO
LA RELACION ]URIDICA
DE DERECHO PRIVADO
- Concepto
I.IAIMI,'.
(a
1~)71, p. 7.
202
DERECHO
LA RELACIONjURIDlCA
DE DERECHO
PRIVADO
203
204
DERECHO
LA RELACIONJURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
205
ellas consideraramos las relaciones jurdicas creativas, entendiendo por tales no slo las que constituyen sino tambin las que
modifican o extinguen una realidad jurdica.
Otro enfoque del problema sera examinar la situacin en
que una relacin jurdica integra el contenido de una situacin
de derecho determinada. Desde este ngulo podramos distinguir
entre relaciones jurdicas originarias, de las cuales nacen a la vida
del derecho ciertos poderes y ciertos deberes, normalmente un
deber y un poder correlativos. En segundo trmino, podramos
considerar las situaciones de desarrollo que marcan la evolucin
de la relacin jurdica. Por ltimo, las situaciones de terminacin,
que determinan la conclusin de la relacin jurdica.
Estimamos que en todos estos criterios de clasificacin que
han sealado muchos autores se pierde el concepto fundamental
que es fijar el contenido de la relacin jurdica.
Si queremos referirnos con claridad a l debemos atenernos al
momento en que la relacin jurdica se estructura. Es este momento de origen el que va a fijar su contenido esencial. Nada
importan las variaciones cualitativas o cuantitativas que pueda experimentar en el transcurso del tiempo; lo esencial permanecer
prestndole su carcter propio. Menos an importan los fenmenos de terminacin, porque ellos significarn la finalizacin de la
relacin jurdica.
Si deseamos realizar una clasificacin del contenido congruente
con el desarrollo sistemtico futuro del estudio del derecho y, al
mismo tiempo, til a su comprensin, debemos, como lo hemos
sealado, referirnos al momento de constitucin de la relacin
jurdica.
Sin que sta sea la nica clasificacin posible, y sin pretender,
por otra parte, que ella sea exhaustiva, existe una clasificacin
fundamental que consiste en distinguir entre las relaciones jurdicas de contenido real y las relaciones jurdicas de contenido personal.
Hemos dicho que esta clasificacin no es completa. Al analizar
las obligaciones cuya fuente es la ley, vimos cmo algunas difieren
o escapan de esta divisin. Pero, desde el punto de vista prctico,
sirve para fijar los conceptos del contenido de los dos tipos fundamentales de relacin jurdica.
211. En las relaciones jurdicas reales se resuelve un problema
de "tener", esto es, un problema de atribucin de bienes. Ellas
tienen por base 1111derecho real.
El artculo
qlle
206
DERECHO
LA RELACIONjURIDICA
DE DERECHO
PRNADO
207
212. Dentro de la clasificacin adoptada de las relaciones jurdicas con relacin a su contenido, resulta claramente una distincin en cuanto a su origen.
Las relaciones jurdicas de contenido real se configurarn a
travs de la existencia de un modo de adquirir.
Al estudiar los derechos reales dentro de las cosas incorporales hemos sealado los distintos modos de adquirir y su alcance.
Del mismo modo las relaciones jurdicas de contenido personal se originarn a travs de una de las fuentes de las obligaciones, las que ya hemos analizado.
Respecto de las relaciones jurdicas de familia ellas se originarn cuando S(' C()IISlilIIY1,1111 estado civil al qlle la ley asigna
deter- minadas COIIS('('lu'llciasjllrdic<ls.
208
DERECHO
lA RELACIONjURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
209
ni el orden pblico y, por lo tanto, dej abierta, como en muchas otras instituciones, su concepcin e interpretacin a la que
cuadrara, fuera socialmente actual y lgica, fuera justa, en el momento de aplicar el concepto.
Pero la expresin ilcito tiene indudablemente significados ms
amplios. As el artculo 1481 del Cdigo Civil habla de que una
persona se valga de medios ilcitos para que la condicin contenida en una asignacin testamentaria no pueda cumplirse. Indudablemente la ilicitud significa aqu la contravencin de otros conceptos que no son ni el orden pblico ni las buenas costumbres.
En general en estos casos la ilicitud provendr de no actuar en
la vida jurdica con aquella buena fe que, como hemos visto, es un
principio general de nuestro derecho e informa todo nuestro ordenamiento jurdico.
As los actos susceptibles de rescindirse por la accin pauliana,
de acuerdo con el artculo 2468 del Cdigo Civil, lo sern por
haber actuado el otorgante y/o los terceros de mala fe al conocer
el mal estado de los negocios del primero.
Es preciso, eso s, destacar que no toda conducta antitica es
necesaria o generalmente ilcita; eso llevara a confundir el derecho con la moral. En el campo de lo lcito jurdicamente entran
ciertos actos que no corresponden al rigor de los ideales ticos.
Una relacin jurdica inicialmente lcita puede transformarse
en ilcita si uno de sus sujetos pierde la buena fe. As, el que ha
recibido en pago de buena fe una cosa que no se le deba no
responde de los deterioros o prdidas, pero desde que sabe que la
cosa le fue pagada indebidamente contrae todas las obligaciones
del poseedor de mala fe (artculo 2301 del Cdigo Civil).
214. Como hemos visto, una relacin jurdica cualquiera puede nacer a la vida del derecho independientemente
de si exista o
sobrevenga un factor de ilicitud en su estructura.
Pero la denominacin de actos lcitos e ilcitos tiene un alcance ms limitado. Hablamos de actos ilcitos precisamente cuando
la ilicitud de la conducta es la que da nacimiento a la relacin
jurdica.
Desde este punto de vista los hechos jurdicos naturales y consecuencialmente las relaciones jurdicas que de ellos puedan derivarse no pueden clasificarse en lcitos o ilcitos. No admiten tal clasificacin, ya que en ellos no interviene la voluntad ni la capacidad.
Son los hechos jurdicos humanos voluntarios que no constituyan actosjurdicos los que admiten tal clasificacin.
Los <lelos jurdi('os darn nacimiento a una relacin jurdica
indcpclldi('llt('IIH'lll('
d(' ;]gt'tn factor ilcito <]11(' puedan rontc-uer.
210
DERECHO
En cambio, los hechos jurdicos voluntarios, a los que la ley atribuye un efecto jurdico no querido por su autor, son precisamente
clasificados en lcitos o ilcitos (artculo 2284 del Cdigo Civil).
Los actos ilcitos son los delitos y cuasidelitos civiles definidos
en el artculo 2284 del Cdigo Civil como hechos ilcitos dolosos
o culpables que causan dao a un tercero. Ellos necesariamente
dan nacimiento a una relacin jurdica, cuyos sujetos son el que
caus el dao y el que lo sufri, y cuyo contenido es precisamente
la indemnizacin de ese dao (artculo 2314 del Cdigo Civil).
Por lo tanto, la expresin "actos ilcitos" la reservamos particularmente para esta fuente de las obligaciones, los delitos o cuasidelitos civiles, cuya organizacin configura la institucin de la
responsabilidad civil extracontractual.
OBJETIVO y DERECHO
SUBJETIVO
LA RELACIONjURlDICA
DE DERECHO
PRIVADO
211
d la pensejuridiqu
moderne. Montchrticn,
212
DERECHO
Ihering" en una tesis que suscribe Baudry-Lacantinerie, Planiol y Capitant, sostiene que el derecho es un inters jurdicamente protegido. Segn la definicin de Capitant el derecho subjetivo
es un inters de orden material o moral protegido por el derecho
objetivo, que da a aquel que lo posee el de hacer los actos necesarios para la satisfaccin de ese inters."
Los autores ms modernos consideran que la esencia del derecho subjetivo contiene ambos elementos: la voluntad y el inters."
Coviello lo define como "poder de obrar en satisfaccin de los
propios intereses, garantizado por la ley"."
CLASIFICACIN
DE LOS DERECHOS
SUBJETIVOS
y privados
La clasificacin de los derechos subjetivos en pblicos y privados se hace en atencin a la norma objetiva en que se fundan. Si
dicha norma objetiva es de derecho pblico, el derecho subjetivo
que deriva de ella es pblico; si es de derecho privado, el derecho
subjetivo fundado en ella es privado.
1;
LA REI ACION.lURIDICA
DE DERECHO
PRIVADO
213
y extmpatrinwniales
214
DERECHO
- Derechos patrimoniales
U\ REUCTONjURlDlCA DE DERECHO
PRIVADO
215
- Derechos extrapatrmoniales
219. Generalmente se estima que los derechos extrapatrimoniales son los que carecen de valor pecuniario. Esto no es totalmente exacto porque lo adquieren cuando son lesionados y es
necesario determinar la indemnizacin a que esa lesin da lugar.
Lo que sucede es que estos derechos no tienen, como los patrimoniales, un valor original apreciable en dinero.
Pero ste no es el nico criterio de clasificacin, porque debemos examinar
su ejercicio, su posibilidad de transferencia y su
embargabilidad.
El artculo 1464 del Cdigo Civil dispone expresamente que
hay objeto ilcito en la enajenacin de los derechos o privilegios
que no pueden transferirse a otra persona. Por otra parte el N 9
del artculo 1618 del Cdigo Civil seala como inembargables, en
una categora genrica: "Los derechos cuyo ejercicio es enteramente personal, como los de uso o habitacin". El Cdigo no
enumera estos derechos; el uso y la habitacin son simples ejemplos y ello porque el artculo 819 establece que son intransmisibles, que no pueden cederse a ningn ttulo, prestarse ni arrendarse. Por su parte el artculo 334 del Cdigo Civil dice que: "El
derecho de pedir alimentos no puede transmitirse por causa de
muerte, ni venderse o cederse de modo alguno, ni renunciarse",
Estos derechos cuyo ejercicio es enteramente personal cubren
una amplia gama, desde el derecho de alimentos legales, que
tiene un claro valor pecuniario, hasta los derechos de potestad
que encontramos en las relaciones de familia.
La sola inembargabilidad no significa que un derecho sea extrapatrimonial; basta analizar al efecto la enumeracin de los bienes inembargables de los artculos 1618 del Cdigo Civil y 445 del
Cdigo de Procedimiento Civil para ver que la mayora de los
sealados son bienes claramente patrimoniales.
Por lo tanto, debemos buscar una combinacin de estos caracteres para determinar el carcter no patrimonial de los derechos.
Si no tienen un valor original apreciable en dinero, son de ejerccio enteramente personal, son intransferibles porque el acto de enajenacin adolecera de objeto ilcito y no pueden embargarse en conIorrnidad al artculo 1618; nos encontramos precisamente, entonces,
frente a derechos de los llamados comnmente extrapatrimoniales.
220. En las rel;ciollcs de familia nos encontramos frente l
dos rdelles de derechos, unos de potestad y otros de carcter
I)('('tllllano.
216
DERECHO
CIVIL. PARfE
GENERAL
En el Libro I del Cdigo Civil el Ttulo VI trata de las obligaciones entre los cnyuges; el Ttulo IX de los derechos y
obligaciones entre los padres y los hijos legtimos. Estos derechos de potestad que tienen el marido respecto a la mujer, el
padre con relacin a los hijos, forman parte de la organizacin
de la sociedad; son de orden pblico y escapan a la voluntad
de los interesados.
Son tpicamente derechos de ejercicio enteramente personal,
no negociables, es decir, derechos extrapatrimoniales.
Paralelamente a estos derechos de potestad existe otro que
ya tiene una significacin pecuniaria. En el rgimen de sociedad conyugal: los frutos de los bienes de la mujer los percibe
el marido (arts. 1725 inc. 2 y 1753 del C. C.). Igualmente el
padre tiene el usufructo de los bienes del hijo que se encuentra bajo su patria potestad (art. 243 del C. C.). El ine. 3 del
artculo 2466 del Cdigo Civil dice que "no ser embargable el
usufructo del marido sobre los bienes de la mujer, ni el del
padre o madre de familia sobre los bienes del hijo". En realidad esta disposicin es inexacta porque no estamos en presencia aqu de un verdadero usufructo. Adems la frase tiene relacin con lo que dispone el inciso 1 de la misma disposicin
que autoriza al acreedor a subrogarse en los derechos de usufructuario del deudor; por lo tanto, lo que establece es que
aqu no cabe la subrogacin por el acreedor. Los frutos que el
marido o padre reciban son perfectamente embargables despus de percibidos. Son, por lo tanto, bienes patrimoniales.
En la Ley N 17.336 sobre Propiedad Intelectual nos encontramos con el que se llama derecho moral de autor. Este,
aunque es transmisible de acuerdo al artculo 15, es inalienable en conformidad al artculo 16; nos encontramos pues frente a un derecho extra patrimonial.
En cambio, el derecho
patrimonial de autor puede transferirse total o parcialmente
de acuerdo al artculo 17 de la ley.
221. Tenemos por ltimo los derechos de la personalidad a
que ya hemos hecho alusin. Ellos se refieren a la individualidad
de las personas, tanto en su integridad fsica como en su libertad;
comprenden, asimismo. la proteccin de la personalidad civil; y,
por ltimo, la proteccin de la personalidad moral.
Se trata de derechos estrictamente extrapatrimoniales, no pueden enajenarse. no son renunciables. son inembargables, todo
ello porque son inseparables de la personalidad.
El hecho de ser estrictamente extrapatrirnoniales no significa
que estos derechos no sean susceptibles de valoracin econmica.
LA RELAClONJURJDICA
DE DERECHO
PRIVADO
217
NACIMIENTO,
- Nacimiento
222. Para estudiar el nacimiento o adquisicin de un derecho
debemos recordar la clasificacin que hicimos distinguiendo entre derechos originarios y derivados.
Si el derecho no exista antes, su titular ha realizado un acto
que ha creado el derecho a su favor. Es decir, el derecho originario nace directamente en manos de su titular.
Por el contrario, en los derechos derivados el derecho exista
antes en manos de otro titular, pero se ha verificado un acontecimiento que ha determinado el cambio del titular del derecho.
La mayora de los derechos personales nacen originariamente, pero hay excepciones, ya que puede efectuarse la tradicin de
dichos derechos (arts. 699 del Cdigo Civil).
Debe tenerse presente, eso s, que en los derechos personales,
el titular del derecho no lo puede adquirir o crear por un acto
exclusivo propio. Lo que puede crear una persona por un acto o
hecho suyo es una obligacin; al contraer dicha obligacin crea el
derecho correlativo para el acreedor de la obligacin.
La mayora de los derechos reales nacen derivativamente. En
('[(-elo, 110 SI' couril: qu(' ('11 nue-stro Cdig'o, para que s(' crc(' un
218
DERECHO
derecho real, se requiera la presencia de dos elementos: un antecedente jurdico que le sirva de causa, y se denomina ttulo, y un
modo de adquirir.
Los modos de adquirir los seala el arto 588 del Cdigo Civil, y
son la ocupacin, la accesin, la tradicin, la sucesin por causa
de muerte y la prescripcin.
Algunos de estos modos de adquirir son originarios, es decir,
se confunden en ellos el ttulo con el modo de adquirir. Es lo que
sucede con la ocupacin, la accesin y la prescripcin, que siendo
modos de adquirir de acuerdo al art. 588 del Cdigo Civil son, a
la vez, ttulos constitutivos de dominio de acuerdo con el arto 703
del Cdigo Civil.
Los derechos reales adquiridos por estos modos de adquirir,
que son a la vez ttulos constitutivos de dominio, son originarios y
no derivativos.
- Transferencia y transmisin
223. Hemos visto que en los derechos derivados, el derecho
pasa de un titular a otro. Este cambio del titular de un derecho es
lo que se denomina transferencia o transmisin.
Cuando este cambio en el titular del derecho se verifica por
un acto entre vivos hablamos de "transferencia". Cuando el cambio se produce por causa de muerte estamos en presencia de una
"transmisin" .
La transferencia de un derecho es a ttulo singular; esto no
quiere decir que slo pueda transferirse en cada acto slo derecho, sino que el adquirente no recibe otros derechos y obligaciones que los que resulten del ttulo mismo de la transferencia.
La transmisin puede ser a ttulo universal o a ttulo singular
(art. 951 Cdigo Civil).
La transmisin a ttulo universal se produce en las herencias, ya
que el heredero recibe todo el patrimonio del causante o una parte
alcuota (art. 1097 del Cdigo Civil). La transmisin a ttulo singular se produce en los legados, en los cuales el legatario no representa al testador ni tiene ms derechos o cargas que los que expresamente se le confieran o impongan (art. 1104 Cdigo Civil).
En nuestro derecho se denomina causante al que transmite el
derecho y causahabiente al que lo recibe.
La transmisin o transferencia no alteran la extensin ni el
contenido del derecho.
Debe sealarse que nadie puede transferir o transmitir ms
derechos que los que tiene, y que nadie puede adquirir ms dcrc-
lA RELACIONJURIDlCA
DE DERECHO
PRIVADO
219
chos que los que tena el causante. Diversas disposiciones del Cdigo consagran este principio.
El inc. 1 del art. 682 establece que: "Si el tradente no es el
verdadero dueo de la cosa que se entrega por l o a su nombre,
no se adquieren por medio de la tradicin otros derechos que los
transmisibles del mismo tradente sobre la cosa entregada".
El inc. 1 del arto 717 dispone que: "Sea que se suceda a ttulo
universal o singular, la posesin del sucesor, principia en l; a
menos que quiera aadir la de su antecesor a la suya; pero en tal
caso se la apropia con sus calidades y vicios". Es decir, el poseedor. para aadirse la posesin de su antecesor, tiene que hacerlo
con sus calidades y vicios.
- Derechos intransferibles
e intransmisibles
224. Hay derechos, tanto reales como personales, que no pueden transferirse o transmitirse. Se los llama derechos personalsin10S.
220
DERECHO
LA RELACTON)lJRlDICA
DE DERECHO
PRIVADO
221
extingue la obligacin que garantizan, como sucede con la hipoteca y la prenda (arts. 2434 y 2401 del Cdigo Civil).
Los derechos sujetos a plazo o condicin extintivos terminan
por el cumplimiento del plazo o el evento de la condicin.
Puede tambin ponerse fin al derecho personal porque el
acreedor y el deudor as lo convengan, o bien, puede terminar el
derecho al extinguirse la obligacin correlativa por cualquiera de
los medios que la ley reconoce al efecto. El art. 1567 del Cdigo
Civil seala los modos de extinguirse las obligaciones y son: 1 La
solucin o pago efectivo. 2 La novacin. 3 La transaccin. 4 La
remisin. 5 La compensacin. 6 La confusin. 7 La prdida de
la cosa que se debe. 8 La declaracin de nulidad o la rescisin.
- Fuentes de los derechos subjetivos
dar-ro;r
olro.
DERECHO
ABuso
DEL DERECHO
LA RELACIONjURlUICA
DE DERECHO
223
PRIVADO
lO
.J0SSER.AND,
Lib.
(;ral.
de
224
DERECHO
230. El inciso 1 del artculo 582 del Cdigo Civil dispone que
"El dominio (que se llama tambin propiedad] es el derecho real en
una cosa corporal, para gozar y disponer de ella arbitrariamente;
no siendo contra ley o contra derecho ajeno".
En realidad estas facultades se aplican a todos los derechos. Ya
el artculo 583 del Cdigo nos dice que sobre las cosas incorporales hay tambin una especie de propiedad, concepto que es an
ms expresamente establecido en el N 24 del artculo 19 de la
Constitucin, al sealar la proteccin de "el derecho de propiedad en sus diversas especies, sobre toda clase de bienes, corporales o incorporales".
Por lo tanto, si somos propietarios de nuestros derechos, las
limitaciones al ejercicio de la propiedad se aplican tambin al de
aquellos derechos de que somos dueos (titulares). En conseQ
u MARCEl. PLANIOL-G.
RIPERT, {JIJ.
01., (.
LA REL\CION]URlDICA
DE DERECHO
PRIVADO
225
226
DERECHO
Entre las segundas tenemos, en primer trmino, las que provienen del respeto a la buena fe de los terceros, las inherentes a la
concurrencia de derechos; en ltimo trmino, las que se originan
por la colusin de los derechos.
- Lmites intrnsecos
l~
t.
LA RELACIONjURlDIO\
DE DERECHO
PRIVADO
227
228
DERECHO
Pero en la situacin que ahora examinamos no existe solamente abuso que implica la idea de desviacin que se realiza en
causa propia. La anormalidad consiste en la alteracin de la finalidad del derecho. Con un cierto resultado jurdico, de por s admisible, se contrara sin embargo el alcance de otra figura jurdica
distinta. Es un acto fraudulento.
Este ejercicio actuando ms all de la interna finalidad y de la
funcin social del derecho subjetivo es un ejercicio inadecuado
distinto del acto de emulacin o abusivo a que nos referimos en el
prrafo anterior.!"
En el abuso el mecanismo de ejercicio del derecho puede ser
objetado de inmediato; en el fraude el mecanismo es irreprochable; es el resultado final el que revela la anormalidad.
As se ha resuelto que la facultad de una persona para entablar acciones judiciales o administrativas en contra de otra puede
adquirir una connotacin de ilicitud cuando esas acciones, apreciadas en conjunto y atendida su finalidad, han tenido como nico objetivo impedir o, al menos, restringir la competencia en la
comercializacin de un producto determinado.!"
En estos casos hablamos generalmente de fraude del derecho.
Para demostrar que es artificial e inexistente la aparente normalidad con que el derecho se ha ejercido, debemos examinar
otras situaciones a las que la anterior afecta y demostrar cmo el
resultado jurdico normal de estas situaciones fue alterado por el
fraude contenido en el ejercicio del derecho.
En el mbito del derecho privado los particulares pueden muchas veces utilizar libertades hacia metas que no slo no son las
previstas por el ordenamientojurdico,
sino que lo contradicen.
Algunos autores estiman, desde otro punto de vista, que los
derechos subjetivos son reconocidos a los individuos como funciones sociales, o, al menos, con determinados fines sociales. Si el
titular del derecho lo desva o aparta de su fin comete un fraude
que no merece proteccin jurdica.
En el derecho civil encontramos a veces disposiciones que
limitan el ejercicio de un derecho por consideraciones de orden
social; as, las limitaciones a la construccin que contienen los
artculos 600 y 601 del Cdigo Civil o las limitaciones al derecho
de propiedad que contemplan los artculos 930, 932, 937, 948,
etc., del Cdigo Civil. Los artculos 279 y 280 del Cdigo de Proce-
13 NATOLI,
Note preliminari ad una teoria ddl'abuso del diriuo. Studi Messinco,
vol. N, pgs. 265 ss.
14 R. n.j., t. 81, s. 6, p. 26, p. 99.
LA REIACIONjURIDlCA
DE DERECHO
PRIVADO
229
dimiento Civil contemplan la posibilidad de solicitarse como prejudiciales las medidas precautorias. Sin embargo, el ejercicio de
este derecho por el demandante debe responder a un fundamento y una finalidad legtimos; si por su inactividad o por resolucin
del tribunal dichas medidas no se mantienen el solicitante es responsable del perjuicio causado y el procedimiento se considera
doloso. Est claro aqu que es el resultado lo que ha determinado
la antijuridicidad de la conducta.
Igual criterio informa la responsabilidad del empresario en
los casos contemplados en los NS 3 Y 4 del artculo 2003 del
Cdigo Civil.
El artculo 524 del Cdigo de Procedimiento Civil autoriza a
los acreedores para exigir la liquidacin de la comunidad de que
sea parte el deudor, salvo si de ello resultare grave perjuicio.
- Lmites extrnsecos
230
DERECHO
15
LA RElACIONjURIDlCA
DE DEIlliCHO
PRNADO
17
IH
n.
In R.
232
DERECHO
LA REL'l.CIONjURlDICA
DE DERECHO
PRrv ADO
~33
tolerall('ia
gT'lV;JIIICII.
234
DERECHO
CAPTULO
VI
un il.uoral es la expresin
de voluntad
de una
IlIl('de xcr IIlIa sola p('rsoll;1 ('11 los <lelos
236
DERECHO
2~7
<1,)
en
oO"l
C'l
'0
;:
I
;:;,....,
C()
~
en
<1,)'0
-
:; ,
en
<1,)
'O
....... '"d
<?
.,_,
<1,)
(],) '"d
~
O
'"''0'0
'J.
s
en
v
O
ro
~ ~a~~~ ~ ~
:l
~::;_" ~
'J.
'S
'"'
238
DERECHO
TEORIA
DE LOS ACTOSJURIDICOS
239
Contratos
R. D.J.
1.
m,
S.
1, p. Ili:1.
240
DERECHO
242. Nuestro Cdigo emplea a veces la palabra acto en sentido genrico para referirse a toda manifestacin de voluntad, con
el objeto de producir efectos jurdicos (arts. 10, 11, 735, 766, etc.),
o bien en sentido restringido para contraponer el acto jurdico
unilateral a la convencin o contrato (arts. 1453, 1681, 1682, etc.).
ELEMENTOS CONSTITUTIVOS
243. En los elementos de los actos jurdicos debemos distinguir entre elementos esenciales, naturales o de la naturaleza del
acto y elementos accidentales.
Elementos esenciales
TEORlA
DE LOS ACTOSURlDICOS
241
del acto
.utor
242
DERECHO
TEORIA
DE LOS ACTOSjURIDlCOS
243
jurLos
y el
son
LA VOLUNTAD
249. La voluntad es el fundamento principal de los actos jurdicos y est implcita en sus dems requisitos. As no slo la voluntad debe estar exenta de vicios, sino que es ella la que debe emanar de una persona capaz, recaer en un objeto lcito y tener una
causa lcita.
Es necesario hacer la distincin entre la ausencia o falta de la
voluntad y la voluntad errnea. Puede concebirse que haya existido la apariencia de un acto jurdico, pero que el autor o las partes
no hayan tenido en momento alguno deseos de realizar ese u otro
acto real. Precisamente en esta situacin posible se fundamenta la
simulacin absoluta.
Disriut es el caso ('11 que las partes desean realizar un acto,
pero Sil voluut.u l ('S ('S('I\Ci;t1I1H'II(' enllca,
y" se;, porquc eke-
244
DERECHO
CML.
PARTE GENERAl
TEORIA
DE LOS ACTOSjURIDICOS
245
246
DERECHO
247
.:::
u
o
1:1
en
50
(LJ
(LJ
"O
;A
.3::
..!:i
(LJ
"O
<.O
c<")
;..l
u
O
01)
il
'O
"O
c<")
c-r
O
.-<
;..l
:~
u
il
il
V
"O
,.._,
01)
01)
'O
'O
,.....,
"O
O
<.O
......
;..l
'"I'
'" '
C':l
C':l
C':l
.C:'"'
C ': l
'" '
C':l
.D
en
C\le,
;..l
'"'es
u
en
(LJ
O
::
.~
en
~-----------v
ro
en
(LJ
e,
e,
:><
(LJ
'---
-------
248
DERECHO
EL
CIVIL
PARTE GENERAL
CONSENTIMIENTO
252. Hemos dicho que la expresin voluntad en sentido especfico se reserva para los actos jurdicos unilaterales; el concurso
de voluntades necesario en los actos jurdicos bilaterales recibe el
nombre de consentimiento.
Por lo tanto, para que el consentimiento se forme, se requiere
que concuerden las voluntades de dos partes.
Esta concordancia de voluntades debe producirse sobre el mismo objeto jurdico y con una causa jurdica; objeto y causa que,
como veremos ms adelante, deben ser lcitos.
Pero es imposible suponer que dos o ms personas concuerden en un acto jurdico en forma simultnea, sin una negociacin
previa. Lo natural es que una parte tome la iniciativa y la otra
concuerde con ella.
Estas dos etapas necesarias para la formacin del consentimiento son las que se llaman la oferta y la aceptacin.
La formacin del consentimiento no est reglamentada en el
Cdigo Civil. El Cdigo de Comercio, en cambio, se refiere a ella
en los artculos 97 a 106. En el Mensaje del Cdigo se seala que
en el Ttulo II se trata de un asunto difcil e importante, omitido
en la Ordenanza y aun en el Cdigo Civil, cual es el de fijar el
momento y el lugar en que las propuestas verbales o escritas asumen el carcter de contratos perfectos; agrega que "el Proyecto ha
dado soluciones satisfactorias a las cuestiones principales e incidentes que ofrece la materia; y de este modo ha llenado un sensible vaco en nuestra legislacin comercial y civil.
Una sentencia de 5 de agosto de 1934 analiza en detalle esta
materia y llega a la conclusin de que los artculos respectivos del
Cdigo de Comercio deben aplicarse en materia civil.2
En una sentencia posterior, al rechazar un recurso de casacin en el fondo por infraccin en una materia civil de las disposiciones citadas, la Corte opin que se trataba slo de principios
aplicables a toda clase de contratos, pero que el Cdigo de Comercio no es ley vigente para la formacin del consentimiento en
con tratos civiles."
Esta jurisprudencia es evidentemente errada. Si bien el Cdigo de Comercio dice en su art. 1 que rige las obligaciones de los
comerciantes, estas disposiciones legales tienen un carcter general, como el propio legislador lo advirti. La naturaleza de las
2
?>
R. D. J.,
R. O.J.,
t.
t.
34, s. 2, p. 28.
68, s. 1, p. 217 (cons. 18).
TEORIA
DE LOS ACTOS[URIDICOS
249
p. .; l.
250
DERECHO
de la oferta
255. La muerte, quiebra o incapacidad sobreviniente del proponente hacen caducar la oferta de acuerdo con lo dispuesto en
el arto 101 del Cdigo de Comercio y en el arto 64 de la Ley de
Quiebras.
TE ORlA DE I.OSACTOSjURlDICOS
251
- Vigencia de la oferta
256. De acuerdo con la parte final del inc. 1 del arto 99 del
Cdigo de Comercio, si el proponente ha establecido un plazo, la
oferta dura hasta el vencimiento del mismo.
Si no hay plazo, debemos distinguir entre la oferta verbal y
escrita.
La oferta verbal dura hasta que es conocida por la persona a
quien se dirige (art. 97 del Cdigo de Comercio).
La oferta por escrito dura 24 horas si la persona a quien se dirige
vive en el mismo lugar del proponente, o hasta vuelta de correo, si
estuviere en otro diverso (art. 98 del Cdigo de Comercio).
La aceptacin
258. La aceptacin pura, simple y oportuna forma el consentimiento y queda perfeccionado el contrato (art. 101 del Cdigo de
Comercio).
Sin embargo hay un caso, y es aquel en que se ha dirigido una
oferta indeterminada a personas determinadas en que el perfeccionamiento del contrato, no obstante que se ha producido la
aceptacin, queda sujeto a la condicin de que los objetos ofrecidos no S(' hayan ('II<lj(,llado, que no se haya alterado
su precio y
DERECHO
PRECONTRACTUAL
TEORIA
253
esto no es as. En efecto, el artculo 1554 del Cdigo Civil reglamenta la promesa de celebrar un contrato. Esta promesa constituye por s misma un contrato, que se ha denominado contrato de
promesa, en que la obligacin que nace de l es una obligacin
de hacer, la obligacin de realizar el contrato prometido, obligacin de hacer que, como otras anlogas, admite en este caso la
ejecucin forzada.
Pero el contrato de promesa es un contrato especialmente
limitativo; entre otras cosas, debe constar por escrito y contener
un plazo o condicin que fijen la poca de la celebracin del
contrato prometido. Como hemos visto en la formacin del consentimiento, generalmente estas circunstancias no van a estar presentes en la negociacin, por lo tanto, el acuerdo alcanzado no va
a reunir los requisitos legales para ser considerado un contrato de
promesa, una promesa de contrato.
Esto va a determinar que la negociacin realizada, en que ha
habido una oferta y una aceptacin definitivas, en que se ha formado el consentimiento, no va a permitir que se exija legalmente
el cumplimiento del contrato acordado.
Esta es la actual situacin del problema en nuestra jurisprudencia, ya que ella ha estimado que del artculo 1554 se deduce
que la regla general es no aceptar la promesa de celebrar un
contrato y reconocerla slo por excepcin cuando rene los requisitos que en dicho artculo se expresan.P
260. No obstante lo anterior, repugna a un criterio elemental
de equidad que un acuerdo libremente pactado, cuyo cumplimiento lleva envuelta indudablemente la buena fe de las partes,
pueda dejarse de cumplir por cualquiera de ellas sin que esto
implique ninguna sancin.
Adems, constituira un contrasentido legal que no importara
responsabilidad el incumplimiento de un contrato acordado cuando el Cdigo de Comercio hace responsable al oferente aunque
se retracte oportunamente de la oferta. En efecto, el artculo 100
del Cdigo de Comercio dispone: "La retractacin tempestiva impone al proponente la obligacin de indemnizar los gastos que la
persona a quien fue encaminada la propuesta hubiere hecho, y
los daos y perjuicios que hubiere sufrido.
Sin embargo, el proponente podr exonerarse de la obligacin de indemnizar, cumpliendo el contrato propuesto".
1.
r, (:. I!I Hi, ~" selll. N" 77. p. 40H. R. D. J, t. -1,1, s. 1, p. g9!1; t. 4!i, s. 2, p. 48;
'Hi, s. z. p. 71); l. (jO, s. ~, p. sr,; I 79, s, ~, p. ~(i.
2S4
DERECHO
6 H. ROSENDE
de Valparaso. 1979.
ALVAREZ,
TEORlA
255
1).
Priv., 1969.
2,,6
DERECHO
en nuestro ordenamiento como se desprende de diversas disposiciones particulares. AS, en la compraventa, el artculo 1814 que
obliga a resarcir los perjuicios al que vendi a sabiendas lo que en
el todo o una parte considerable no exista, o el 1859 que obliga
al vendedor a sanear los vicios ocultos, aunque se haya estipulado
lo contrario, si tena conocimiento de ellos y no dio noticia al
comprador. Lo dispuesto en los artculos 1928, 1932 Y 1959 en el
arrendamiento.
Los artculos 2188 y 2192 en el comodato, que
hacen responsable al comodante que saba que la cosa era ajena o
de mala calidad y no lo declar.
Por lo tanto, la responsabilidad precontractual puede desarrollarse entre nosotros en dos aspectos. Si se ha convenido en un
contrato y ste despus no se lleva a efecto porque cualquiera de
las partes no realiza las formalidades necesarias al efecto, o bien,
porque no se efecta la entrega de la cosa cuando ello es necesario, los daos que este incumplimiento pueda ocasionar a la otra
parte son indemnizables a travs de la responsabilidad extracontractual.
El incumplimiento constituye un hecho ilcito y, por lo tanto,
un delito o cuasidelito civil.
El otro aspecto resulta si el contrato se ha perfeccionado y una
de las partes, por mala fe o negligencia, no comunic a la otra u
ocult deliberadamente antecedentes o circunstancias o bien dio
informaciones inexactas, situaciones de las que se derivaron perjuicios para la contraparte. Esto constituye tambin un ilcito, porque contrara la buena fe que debe presidir las relaciones contractuales de acuerdo con el artculo 1546 del Cdigo Civil, y la responsabilidad que de l se deriva forma parte de la responsabilidad contractual.
EL AUTOCONSENTIMIENTO
263. Al tratar de la formacin del consentimiento hemos partido siempre de la situacin normal de un oferente y un aceptante
como personas naturales o jurdicas distintas. El problema que
debemos analizar es si es posible que una misma persona en una
misma relacin tenga simultneamente ambas calidades.
Nuestro Cdigo no contiene normas al respecto, pero la posibilidad de tal situacin resulta de diversas disposiciones.
Son especialmente claros los artculos 2144 y 2145 del Cdigo
Civil contenidos en el mandato. El primero dispone: "No podr el
mandatario, por s ni por interpuesta persona, comprar las cosas
que el mandante le ha ordenado vender, ni vender ck- lo suyo al
257
"1\. \1.l'.SS,\NIlRII{.
C''1V;II(('S,
I'nl.
25H
DERECHO
TEORIA
DE LOS ACTOSjURIDICOS
259
DERECHO
260
contrato que se ejecuta o celebra, como si una de las partes entendiese emprstito y la otra donacin". El segundo caso es aquel en
que recae "sobre la identidad de la cosa especfica de que se trata,
como si en el contrato de venta el vendedor entendiese vender
cierta cosa determinada, y el comprador entendiese comprar otra".
La nocin de que estas clases de error equivalen a una ausencia de consentimiento y deben ser tratadas en consecuencia, es
decir, sancionndolo con la inexistencia del contrato o, como lo
ha dicho una sentencia, con la nulidad absoluta, es un reflejo
entre nosotros de la doctrina francesa. 11
En efecto, el Cdigo francs no tiene sino una disposicin
sobre el error, el artculo 1110, que no considera sino el error
sobre la substancia de la cosa o sobre la persona. Por lo tanto, la
sancin de los errores de mayor gravedad y que nuestro Cdigo
contempla expresamente en el artculo 1453 ha debido ser elaborada por la doctrina. A falta de una disposicin expresa que sancione estos vicios, ha debido llegar a la conclusin de que ellos
son causal de inexistencia o, a lo menos, de nulidad absoluta.
No es una buena solucin porque, en tal caso, o no habra
prescripcin (inexistencia) o slo al cabo de diez aos (nulidad
absoluta) y en ninguno de ambos supuestos el acto sera susceptible de confirmacin.
Tanto es as que muchos autores franceses han objetado la
solucin doctrinal aduciendo que es injustificable que tales errores puedan permitir una accin de nulidad despus de cinco
aos y no dejen lugar a una confirmacin, cuando la solucin es
diferente si se trata de un error sobre la persona o la calidad
esencial de la cosa que impiden tambin la realizacin del fin
tenido en vista por los contratantes. En caso de malentendido
sobre la naturaleza u objeto del contrato, cada una de las partes
podr pedir la nulidad sin necesidad de que sta sea absoluta. No
habindose encontrado la voluntad de las partes, cada una de
ellas ha cometido un error y puede invocarlo. Ms grave an es
que no se acepte la confirmacin del acto, porque si una de las
partes acepta lo querido por la otra y confirma el acto ejecutndolo, no se entiende que la otra parte que ha sido satisfecha
pudiera pedir la nulidad.
Entre nosotros, ante el tenor expreso del artculo 1453 del
Cdigo Civil, que frente a estas situaciones dice explcitamente:
"el error de hecho vicia el consentimiento cuando recae, ...", no
hay necesidad de recurrir a teora alguna para llegar a una solu-
11
~61
1, A, 1,(i.()N IIIIRI'\I)().
lrr voiunuul la m/mcirl(ul
"di, ion, li,dit()li;dl"lldi,
d d .. (:hil,',
I ~)~1). N
1+1.
NI
2G2
DERECHO
TEORIA
DE LOS AGTOSjURIDICOS
263
Una divisin simplista llevara a establecer que los actos a ttulo gratuito se realizan en atencin a la persona y lo contrario
sucedera en los actos onerosos.
No obstante lo anterior, existen muchos actos onerosos que se
ejecutan en consideracin a la persona, ya sea de la persona de
ambas partes como la sociedad, o bien de una de ellas, como el
mandato. En general no puede decirse que tales o cuales contratos son intuitu personae; se trata de una cuestin de hecho que, en
defecto de una disposicin expresa de la ley, el juez deber decidir en cada caso particular. En el fondo es admisible que se pruebe que un contrato cualquiera se realiz en atencin a la persona.
Entre los actos de familia el ejemplo tpico de un contrato en
atencin a la persona es el matrimonio. El artculo 33 de la ley de
Matrimonio Civil dice que falta el consentimiento libre y espontneo si ha habido error en cuanto a la identidad de la persona del
otro contrayente.
En los actos patrimoniales tenemos la transaccin que, de acuerdo con el artculo 2456 del Cdigo Civil, se presume haberse aceptado por consideracin a la persona con quien se transige. Igualmente el depsito en el caso contemplado en el inciso 2 del
artculo 2216 del Cdigo Civil.
En algunos actos jurdicos el error en cuanto a una de las
partes puede viciar el consentimiento, no as respecto de la otra.
Por ejemplo, el pago, en que, por lo general, para que sea vlido
debe hacerse al acreedor mismo (art. 1576 del C. C.), pero que
puede realizarse por cualquiera persona a nombre del deudor
(art. 1572 del C. C.). Igualmente la tradicin que se invalida por
error en cuanto a la persona del adquirente, pero no del tradente
(art. 676 del C. C.).
El error en cuanto a la persona debe recaer en la identidad de
sta y no en el nombre. El error en cuanto al nombre no vicia el
consentimiento. As se deduce del artculo 33 de la ley de Matrimonio Civil a que nos hemos referido; del inciso final del artculo 676 del Cdigo Civil, que expresa: "Si se yerra en el nombre
slo es vlida la tradicin"; y del artculo 1057 del Cdigo Civil,
que dispone: "El error en el nombre o calidad del asignatario no
vicia la disposicin, si no hubiere duda acerca de la persona".
=Error en la magnitud de las prestaciones. La lesin
270. I lasta aqu hemos examinado los aspectos del error que
all;lli/,;ulo uadicionalrneut.
Sin embargo, surge el proble111<1 d(' ('sllllli<l!' si 110 ckl)(" couxuuirsr1111;1 lco!'<l (1<-1e-rror m.is
se hall
264
DERECHO
27l. El proyecto de Cdigo Civil de 1853 consideraba expresamente la lesin como un vicio especial del consentimiento y lo
estableca en forma general en el artculo 1638 diciendo que "la
lesin como causa de vicio en los contratos, es propia de los contratos conmutativos; y para viciar un contrato, ha de ser enorme,
esto es, tal que el valor de lo que el uno de los contratantes da al
otro no llegue a la mitad de lo que el otro reciba de l, no constando haber habido intencin de donar el exceso. y no se entender haber habido tal intencin sino cuando se mencionen especficamente las cosas o cantidades que se donan".
Este artculo y el siguiente, que estableca que no haba lesin
en las transacciones, en los contratos aleatorios, ni en la venta de
un derecho de herencia, no se mantuvieron en el texto definitivo.
Esta supresin ha hecho pensar que nuestra legislacin no
sanciona la lesin sino en los casos en que taxativamente la establece en una institucin determinada.
Estos casos son los siguientes:
TEORIA
265
1 \
R. D. J.
1.
7q. x. l. p. :.!.
266
DERECHO
268
DERECHO
dera necesario establecer que "el error de clculo no anula la transaccin, slo da derecho a que se rectifique el clculo".
Resulta as un todo lgico y armnico. Si la desproporcin de
las prestaciones ha sido impuesta, el contrato puede ser atacado
por el vicio de fuerza; si esa desproporcin proviene de un engao, por el vicio de dolo; si no se aceptara, adems el vicio de error
significara que la desproporcin originada por la ligereza o la
ignorancia sera legtima, no tendra sancin legal.
Debe tratarse naturalmente de un contrato oneroso conmutativo. Los contratos gratuitos son en beneficio de una sola de las
partes; los contratos onerosos aleatorios contienen una contingencia incierta de ganancia o prdida; en ninguno de ellos se
requiere ni es posible que las prestaciones puedan mirarse como
equivalentes.
273. Si la lesin es el perjuicio pecuniario que sufre una persona a consecuencia de un acto jurdico realizado por ella, puede
ser considerada desde un punto de vista subjetivo y desde un
punto de vista objetivo.!?
Subjetivamente la lesin existe cuando explotando la desgracia, inexperiencia o ligereza de otros se obtienen ventajas patrimoniales que exceden el valor de las prestaciones que se dan en
cambio.
Objetivamente la lesin consiste en que exceda ciertos lmites
sin examinar los motivos que la determinaron.
El Cdigo Civil italiano en su artculo 1448 combina ambos
caracteres. Slo concede la accin de rescisin si la desproporcin
de las prestaciones proviene del estado de necesidad de una de las
partes de que la otra se ha aprovechado para sacar ventajas, pero
en seguida la limita al caso en que la lesin exceda la mitad del
valor que la prestacin ejecutada o prometida por la parte perjudicada tena al tiempo del contrato.
En los casos en que la reglamenta especficamente nuestro
Cdigo, considera la lesin desde un punto de vista objetivo. La
mitad o el doble del justo precio en el artculo 1889; ms de la
mitad del valor de la asignacin en el artculo 1234; ms de la
mitad de su cuota en el artculo 1348.
Dentro de este criterio y de la tendencia general de nuestro
Cdigo, entendemos que la desigualdad de las prestaciones deber considerarse objetivamente.l? El juez deber examinar el valor
RAMON DOMINGUEZ AGUnA, Teora general del negocio jurdico. Editorial
de Chile, 1977, N 74.
15 Fallos del Mes, N 274, sent. 2, p. 38l.
14
Jurdica
TEORlA
269
de las prestaciones recprocas al momento de celebrarse el contrato y determinar si realmente existe una desproporcin que pueda
constituir un error sustancial, sin considerar las creencias o expectativas de las partes. No ser necesariamente la mitad o el doble,
porque esta magnitud de desproporcin ha sido establecida arbitrariamente por la ley en casos concretos. pero siempre deber
tratarse, no de cualquiera desproporcin, sino de una desproporcin esencial.
La desproporcin deber haber existido al tiempo de celebrarse el contrato, porque ste es el momento en que juega el
error.l" Una desproporcin producida a posteriori, como puede
suceder en un contrato de tracto sucesivo o ejecucin diferida,
podr constituir una onerosidad sobreviniente, otra figura jurdica distinta, pero en ningn caso una lesin.
Puede suceder tambin que la desproporcin existente al momento de celebrarse el contrato haya desaparecido con posterioridad. El Cdigo italiano se pone en este caso y dispone que la
lesin debe perdurar al momento de entablar la demanda.
- Error comn
274. Bajo la denominacin de error comn se plantean en
realidad dos problemas absolutamente distintos.
En primer trmino si en un contrato basta el error unilateral
o debe ser compartido por ambas partes, es decir, ser comn a
ambas partes para que vicie el contrato.
Es evidente que para que exista vicio no se requiere un error
compartido. Basta al efecto considerar las expresiones "si una de
las partes" del artculo 1453 y "por alguna de las partes" del 1454.
Lo anterior es sin perjuicio de que el elemento que constituye
la sustancia o calidad esencial del objeto debe tener tal carcter
de "esencial" objetivamente para ambas partes; en caso contrario,
caeramos en que un simple motivo individual, esencial subjetivamente para una parte, puede ser causa principal del contrato.
Adems el inciso 2 del artculo 1454 exige expresamente que cuando la calidad no esencial sea determinante, ello debe ser conocido por la otra parte para que pueda existir vicio.
Puede tambin suceder que el error de una parte sea tan
burdo, sea una demostracin de tal ligereza, que represente una
ignorancia inaceptable. En este supuesto, la parte ha incurrido en
1" R. D.
J.
1. (ir,. x.
l. p. ~ 1O.
270
DERECHO
CIVIL
PARTE GENERAL
276. El error, en las circunstancias que se han analizado, autoriza para solicitar la nulidad relativa o rescisin del acto o contrato.
Hemos sealado que el error esencial es considerado por
la mayora de los autores como falta de cousc-u tim ic-u r o y, CII
TEORIA
DE LOS ACTOSJURlDlCOS
~71
17
R. 1l.1.,
l.
oo.
272
DERECHO
hacer algo en sentido diverso a su intencin y sus deseos, o distinta de lo que stos habran sido de no existir el temor.
En este sentido es evidente que la fuerza que produce el temor debe actuar en el momento en que el acto se ejecuta o, como
dicen algunos autores, debe ser actual. Una fuerza ejercida con
mucha anterioridad o posteriormente a la realizacin del acto no
sera determinante del mismo.
Lo anterior no quiere decir que el dao con que se amenaza y
determina el temor deba ser coetneo al acto. La amenaza actual
de un dao futuro, ilcito y grave constituye fuerza.
2) La fuerza, en segundo trmino, debe ser injusta. Es decir,
no constituyen fuerza las amenazas legtimas conformes a la ley y
al derecho.
El Cdigo Civil no seala esta condicin para que la fuerza
vicie el consentimiento, pero ella emana del hecho de que no
puede constituir fuerza el ejercicio legtimo de un derecho. As la
jurisprudencia ha resuelto reiteradamente que no constituye fuerza la amenaza de entablar una demanda judicial.
3) Por ltimo, la fuerza debe ser grave.
El artculo 1456 del Cdigo Civil dice: "La fuerza no vicia el
consentimiento, sino cuando es capaz de producir una impresin
fuerte en una persona de sano juicio, tomando en cuenta su edad,
sexo y condicin".
La ley exige la existencia de un hecho tal que infunda un justo
temor de un mal irreparable y grave en la persona o en los bienes,
que debe realizarse si no se da el consentimiento. Un temor ridculo o balad no constituir entonces fuerza, pero la gravedad no
puede apreciarse en abstracto sino con relacin a la persona que
experimenta el temor. Lo que para una persona puede constituir
fuerza grave para otra puede no serlo.
El artculo 1456 agrega que "se mira como una fuerza de este
gnero todo acto que infunde a una persona un justo temor de
verse expuesta ella, su consorte o alguno de sus ascendientes o
descendientes a un mal irreparable y grave". La enumeracin contenida en este precepto no es taxativa. Puede considerarse tanto
como slo una presuncin de que constituye fuerza el temor de
que las personas indicadas estn expuestas a un mal irreparable y
grave, o bien como una disposicin imperativa a su respecto. En
todo caso, nada impide probar que ha constituido fuerza el temor
de que otras personas fuera de las enumeradas puedan verse expuestas a un mal. Basta sealar al efecto la expresin: "se mira
como una fuerza de este gnero ..." con que comienza el prrafo.
El artculo 1456, en su 2 inciso, termina expresando que "el temor reverencial, esto es, el solo temor de desagradar ;1 las personas
273
IH
1'1
(l/J. cil.
N" (fol.
274
DERECHO
mica extrema que obligue a una persona a celebrar un determinado negocio en ciertas condiciones. En situacin normal esa persona, o no habra realizado el negocio, o lo habra concluido en
condiciones muy diversas. Se presenta aqu tambin el interrogante de saber si ha existido una voluntad libre.
La opinin general ha sido que el estado de necesidad no
puede constituir entre nosotros el vicio de fuerza. Sin embargo,
un trabajo reciente de Mara E. Tocornal sostiene y fundamenta
la tesis contraria.s?
Es tambin nuestra opinin, no slo por razones de lgica,
sino porque estimamos que nada se opone a ello en nuestra legislacin positiva.
Por de pronto el trmino "acto" que emplea el inciso primero
del artculo 1456 no puede circunscribirse exclusivamente a un tercero; lo que infunde temor al capitn nufrago es el acto de decir
no al posible salvador que exige condiciones leoninas. Lo importante es el temor, no su causa. Lo aclara el inciso segundo al disponer
que, excepcionalmente, el temor reverencial no vicia el consentimiento. Ahora bien, el temor reverencial no proviene de actos de
terceros; se genera en la conciencia individual, derivado de circunstancias externas independientes de toda accin humana. Al excluir
especficamente el temor reverencial, el precepto est indicando
claramente, a contrario sensu, que un temor de las mismas caractersticas, pero que no sea reverencial, puede viciar el consentimiento.
Por otra parte, el artculo 1457, que se refiere a quien ejerce
la fuerza, tiene un alcance preciso. Se refiere exclusivamente al
temor que puede provenir de un acto humano y aclara que el que
lo ejerce puede ser la contraparte o un tercero. Pero no excluye la
fuerza constituida por un temor de otro origen.
Por lo dems el derecho es una unidad coherente. El artculo 1007 del Cdigo Civil dice que "El testamento en que de cualquier modo haya intervenido la fuerza, es nulo en todas sus partes". No se circunscribe a la nulidad derivada de actos humanos,
sino a la que se haya producido "de cualquier modo".
- Sancin de la fuerza
280. La fuerza, como los dems vicios del consentimiento, est
sancionada con la nulidad relativa del acto.
('1/
1'1
1/(~i!,YJ('i()
[uritliro.
TEORIA
DE LOS ACTOSJURlDCOS
275
Queda ella comprendida dentro de la norma general que contiene el inciso final del artculo 1682 del Cdigo Civil.
El dolo
276
DERECHO
277
278
DERECHO
285. El artculo 1459 del Cdigo Civil dispone que "el dolo no
se presume sino en los casos especialmente previstos por la ley. En
los dems debe probarse".
En otros trminos, salvo en los casos en que la ley lo presume,
el dolo debe establecerse, y para ello son admisibles todos los
medios de prueba.
Lo anterior es concordante con lo dispuesto en el artculo 707
del Cdigo Civil, que dice: "La buena fe se presume, excepto en
los casos en que la ley establece la presuncin contraria.
En todos los otros la mala fe deber probarse".
Existen diversas disposiciones que, atendidos ciertos antecedentes, establecen una presuncin de mala re, es decir, de dolo.
TEORIA
DE LOS ACTOSIURlDICOS
279
286. El artculo 44 del Cdigo Civil define la culpa grave, negligencia grave o culpa lata, como la que consiste en no manejar
los negocios ajenos con aquel cuidado que aun las personas negligentes y de poca prudencia suelen emplear en sus negocios propios. Esta culpa, agrega, en materias civiles equivale al dolo.
Aunque la ley no ha hecho una confusin entre los trminos
culpa lata y dolo en el sentido de considerarlos sinnimos, ha
establecido una equivalencia en sus efectos civiles, o sea, en la
igual responsabilidad que en lo civil debe afectar al que se vale del
dolo y al que incurre en culpa grave.
Es indudable que si una de las partes ha procedido con culpa
grave hay lugar a la indemnizacin de daos en su contra, al igual
que en el caso del dolo incidental. Es indiferente que se considere
al efecto si ha existido un delito o cuasidelito civil. Pero adems si
aparece claramente que sin culpa grave de una de las partes la
otra no hubiera contratado, nos inclinamos a creer que existe un
vicio del consentimiento tal como en el caso del dolo inductivo
dada la igualdad de efectos civiles que entre el dolo y la culpa lata
establece el artculo 44 del Cdigo Civil. Por otra parte, el elemento intencional que es la esencia del dolo constituir siempre
un factor difcil de probar; tanto es as que nuestra legislacin
penal revierte el peso de la prueba estableciendo la presuncin de
voluntariedad en la comisin de actos penados por la ley. La
culpa lata, en cambio, se puede desprender de antecedentes objetivos ms fciles de establecer; por ello nuestro criterio se funda
tambin en la posibilidad o facilidad de la prueba.
280
DERECHO
287. El dolo principal o inductivo, o sea, el que vicia la voluntad, acarrea la nulidad relativa del acto de acuerdo con el inciso
final del artculo 1682 del Cdigo Civil.
Debemos considerar aqu la situacin de los relativamente incapaces. Sus actos para tener validez deben cumplir con las formalidades habilitantes que la ley establece; de otro modo adolecen
de nulidad relativa, la que puede alegarse por ellos, sus herederos
o cesionarios.
Ahora bien, el artculo 1685 del Cdigo Civil dispone que "Si
de parte del incapaz ha habido dolo para inducir al acto o contrato, ni l ni sus herederos o cesionarios podrn alegar nulidad".
Nos encontramos frente a una situacin especial. Aqu el dolo
no ha llevado a la otra parte a contratar o a contratar en condiciones desfavorables; el dolo ha significado que la otra parte realice
un contrato, querido por ella, pero sin percatarse de que ste
adolece de un vicio de nulidad. La sancin del dolo aqu no es
anular el contrato sino, por el contrario, evitar que ste pueda ser
anulado por la falta de una formalidad habilitante no cumplida
por dolo del incapaz.
LA CAPACIDAD
288. Sealamos que el segundo requisito de validez de los
actos jurdicos es la capacidad de las partes.
Ya nos referimos a ella (ver N 122), pero es necesario tratarla
con mayor extensin.
La capacidad en general es la aptitud, el poder hacer algo. La
que vamos a analizar es la capacidad legal, o sea, la aptitud jurdica, el poder hacer algo en la vida del derecho.
El arto 1445 del Cdigo Civil dice que para que una persona se
obligue a otra por un acto o declaracin de voluntad es necesario
como primer requisito que ella sea legalmente capaz.
Esta aptitud jurdica, denominada capacidad, va a consistir en
la posibilidad de adquirir derechos o de ejercicios y contraer obli0ciones.
Cuando la capacidad consiste en la aptitud de adquirir derechos se denomina capacidad de goce. La aptitud de ejercer derechos y contraer obligaciones se llama capacidad de ejercicio.
[EORIA
CAPACIDAD
281
DE GOCE
289. La capacidad de goce, o sea la aptitud de adquirir derechos, se denomina tambin capacidad adquisitiva.
La capacidad de goce es inherente a toda persona; es un elemento de la personalidad, pues toda persona puede ser titular de
derechos.
El inc. 1 del art. 963 del Cdigo Civil establece que "son incapaces de toda herencia o legado las cofradas, gremios, o establecimientos cualesquiera que no sean personas jurdicas". Esto es
as, porque no siendo personas no pueden ser titulares de derechos.
La capacidad de goce pertenece, por lo tanto, a todas las
personas, en forma general, sin excepciones.
Originalmente el Cdigo contemplaba en los arts. 95 a 97 una
institucin denominada muerte civil, que se produca por la profesin solemne en un instituto monstico. Para los muertos civiles
desapareca la capacidad de goce en cuanto a los derechos de
propiedad. Los artculos sealados fueron derogados por la Ley
N 7.612 de 21 de octubre de 1943. Desde la promulgacin de
dicha ley la capacidad de goce de las personas no tiene excepcin
alguna.
CAPACIDAD
DE EJERCICIO
290. La capacidad de ejercicio es la aptitud legal de una persona para ejercer derechos y contraer obligaciones. La define el
inciso final del arto 1445 al decir que la capacidad legal de una
persona consiste en poderse obligar por s misma, y sin el ministerio o autorizacin de otra.
La capacidad de ejercicio es la norma general. Lo dice el
arto 1446 del Cdigo Civil al sealar que toda persona es legalmente capaz, excepto aquellas que la ley declara incapaces.I'
Por lo tanto, cuando el Cdigo nos habla de incapacidad se
est refiriendo a la incapacidad de ejercicio. La capacidad debe
existir en el momento de generarse el acto o contrato, como lo
vimos al tratar de la caducidad de la oferta (art. 101 del Cdigo de
Comercio).
"1
R. I).J. 1. liH.,
l. l' .!.',I).
282
DERECHO
CNIL.
PARTE GENERAL
TEORIA
283
Incapacidad absoluta
292. El arto 1447 dispone que son absolutamente incapaces
los dementes, los impberes y los sordomudos que no pueden
darse a entender por escrito.
Las personas que enumera el inciso 1 del arto 1447 no pueden ejecutar acto jurdico alguno, en ninguna circunstancia; la ley
las considera carentes en absoluto de voluntad capaz de producir
efectos jurdicos.
El inciso 2 del arto 1682 del Cdigo Civil dispone que sus
actos y contratos adolecen de nulidad absoluta y el inciso 2 del
art. 1447 que no producen ni aun obligaciones naturales y que no
admiten caucin. Adems, de acuerdo con el arto 1683 sus actos
no pueden ser ratificados. Tampoco sus obligaciones admiten novacin, porque de acuerdo al arto 1630 del Cdigo Civil para que
sea vlida la novacin es necesario que la obligacin sea vlida a
lo menos naturalmente.
- Los dementes
293. Demente o loco es la persona que est con sus facultades
mentales perturbadas. El trmino no est definido en el Cdigo
Civil.
Una definicin la encontrbamos en el inciso 2 del arto 172
del antiguo Cdigo Sanitario, que deca que se entiende por persona demente, o simplemente demente, la que tiene manifestaciones de una enfermedad o defecto cerebral caracterizado por
un estado patolgico desordenado, funcional u orgnico, ms o
menos permanente de la personalidad, y por la perversin, impedimento o funcin desordenada de las facultades sensoriales o
intelectuales, o por el menoscabo o desorden de la volicin.
Los dementes no son slo absolutamente incapaces de ejecutar actos jurdicos, sino que son tambin incapaces de delito o
cuasidelito conforme al arto 2319 del Cdigo Civil, y no pueden ni
aun adquirir la posesin de las cosas muebles por s mismos de
acuerdo al arto 723 del Cdigo Civil.
El demente puede o no estar declarado en interdiccin. La
interdiccin es la resolucin judicial que reconoce el estado de
demencia de una persona y la priva de la administracin de sus
bienes si la est ejerciendo. Con o sin interdiccin el demente es
absoluuuucutr
incapaz. La nica diferencia es que de acuerdo al
art, ;j(,!) d('1 (:dig"O Civil la interdiccin
constituye
una presun-
284
DERECHO
cin de demencia del interdicto que no admite prueba en contrario. Si no hay decreto de interdiccin, hay que probar el estado de
demencia y que ste exista al tiempo de celebrarse el acto que se
trata de anular.
Al efecto el artculo 465 del Cdigo Civil dice que "los actos y
contratos del demente, posteriores al decreto de interdiccin, sern nulos; aunque se alegue haberse ejecutado o celebrado en un
intervalo lcido.
y por el contrario, los actos y contratos ejecutados o celebrados sin previa interdiccin, sern vlidos; a menos de probarse
que el que los ejecut o celebr estaba entonces demente".
La demencia puede no ser permanente y el arto 468 del Cdigo Civil contempla la rehabilitacin del demente para la administracin de sus bienes si pareciere que ha recobrado permanentemente la razn.
- Los impberes
294. Pubertad es la aptitud para procrear. La edad de pubertad no es fija y vara por factores fisiolgicos y externos. El Cdigo
Civil, sin embargo, ha establecido una edad fija para considerar a
una persona pber en el arto 26.
Dicho artculo divide a las personas segn su edad y dice que
infante o nio es todo el que no ha cumplido siete aos; impber
el varn que no ha cumplido catorce aos y la mujer que no ha
cumplido doce; y adulto el que ha dejado de ser impber.
Por lo tanto, los hombres menores de 14 aos y las mujeres
menores de 12 aos son absolutamente incapaces.
La nica diferencia entre los infantes y los impberes es que
los infantes no pueden adquirir ni siquiera la posesin de las
cosas muebles, de acuerdo con el arto 723 del Cdigo Civil, ni son
capaces de delito o cuasidelito, de acuerdo con el art. 2319 del
Cdigo Civil. En conformidad a las mismas disposiciones los impberes mayores de siete aos pueden adquirir la posesin de las
cosas muebles y son capaces de delito o cuasidelito.
- Los sordomudos
295. La ltima categora de absolutamente incapaces la constituyen los sordomudos que no pueden darse a entender por escrito.
La incapacidad del sordomudo no proviene de Sil sordornudez, sino del hecho de no poder darse a cnu-ndi-r P()I'escrito.
285
de la incapacidad
absoluta
relatioa
297. El inciso tercero del art. 1447 del Cdigo Civil dice que
"son tambin incapaces los menores adultos y los disipadores que
se hallen bajo interdiccin de administrar lo suyo".*
Las personas enumeradas en el prrafo anterior son las que se
llaman relativamente incapaces. Su incapacidad no emana de la
naturaleza, como la incapacidad absoluta, sino de la disposicin
del legislador, fundada en el deseo de proteger sus intereses.
En contraposicin a los absolutamente incapaces, que no pueden
intervenir en forma personal en los actos jurdicos, pues ello acarrea
la nulidad absoluta del acto, los relativamente incapaces pueden hacerlo con las debidas autorizaciones y sus actos son entonces vlidos.
La incapacidad relativa, por tanto, se traduce para los relativamente incapaces en la obligacin de cumplir con los requisitos
que la ley les impone para que sus actos sean vlidos.
Tanto el art. 1681 como el 1682 del Cdigo Civil se refieren a
los requisitos que la ley prescribe para el valor de ciertos actos o
contratos en consideracin a la calidad y estado de las personas
que los ejecutan o acuerdan. Tales actos y contratos son los realizados por los relativamente incapaces. La omisin de los requisitos a que se ha hecho referencia, y que se denominan formalidades habilitan tes, produce la nulidad relativa del acto.
Los actos invlidos de los relativamente incapaces, excepto los
disipadores, pueden producir una obligacin natural de acuerdo al
N 1 del arto 1470 del Cdigo Civil; pueden en consecuencia novarse, conforme al arto 1630; pueden caucionarse, segn el arto 1472, y
pueden ser ratificados, de acuerdo al inciso 1 del art. 1684.
Examinaremos en forma separada las dos categoras de relativamente incapaces.
Q
aparece
('11 el texto,
,1 la muje-r ('as,ula.
por
la Ley
286
DERECHO
- Menores adultos
287
EL OBJETO
301. El artculo 1445 del Cdigo Civil seala entre los requisitos de una declaracin de voluntad el que sta recaiga sobre un
objeto lcito.
Por su parte, el artculo 1460 dispone: "Toda declaracin de
voluntad debe tener por objeto una o ms cosas que se trata de
dar, hacer o no hacer. El mero uso de la cosa o su tenencia puede
ser objeto de la declaracin".
Aunque esta disposicin no da una idea clara de lo que es
objeto y se refiere en el hecho al objeto de las obligaciones, corresponde a la opinin de Planiol, que sostiene que lo exacto es
hablar del objeto de la obligacin y no del objeto del contrato,
pues el de ste es la creacin de obligaciones. Para Planiol objeto
es lo que debe el deudor. Conviene sealar que mientras nuestro
Cdigo se refiere al objeto de la declaracin de voluntad el Cdigo francs en su artculo 1126 habla exclusivamente del objeto de
los contratos.
La distincin es, sin embargo, claramente posible; el objeto de
la dcclarariu
d(" vol!111 (ad es la operacin jurdica que se pretende
n-;IIi/,ar y distill(o d,' I;ls I'ITSt;lcioIlCS routenidas
('11las obligaciones
;1 IIIu' ('SI;I 01H'lwic'11 SI' Idi(')"(,. Pero dio 110(iclle Ilillgl'1I1 scnrido
288
DERECHO
ni conveniencia prctica. Por otra parte, nuestro Cdigo dice claramente lo que considera objeto de la declaracin de voluntad en el
artculo 1460, del objeto de la promesa en el 1462, objeto de la
donacin o contrato en el 1463, objeto del pacto en el 1465. Por lo
tanto, aunque corrientemente se define el objeto como el conjunto
de derechos u obligaciones que el acto o contrato crea, modifica,
extingue, transfiere o transmite, debemos entender que el objeto
del acto es el objeto de las obligaciones a que l se refiere.
De lo anterior resulta que, de acuerdo con el artculo 1460, el
objeto del acto puede ser una cosa, un hecho o una abstencin.
REQUISITOS
DEL OBJETO
302. Para determinar los requisitos del objeto debemos distinguir si l recae en una cosa material o si constituye un hecho o
una abstencin.
De acuerdo con el artculo 1461 del Cdigo Civil, si el objeto
recae sobre una cosa debe ser:
Real,
Comerciable,
Determinado o determinable,
y lcito, segn lo establecido en el artculo 1445.
Si el objeto recae sobre un hecho o una abstencin debe ser:
Determinado,
Fsicamente posible,
Moralmente posible,
Lcito.
- Objeto real
303. Objeto real significa que existe en la naturaleza actualmente o en el futuro.
El artculo 1814 inciso primero del Cdigo Civil dispone que
"la venta de una cosa que al tiempo de perfeccionarse el contrato
se supone existente y no existe, no produce efecto alguno". Es
decir, reafirma la necesidad de la existencia de un objeto real.
En este sentido nuestros tribunales han fallado que no produce efecto alguno el contrato de compraventa de terrenos de sales
potsicas si se establece que stas no han existido al tiempo de
celebrarse el contrato.v
~2
289
"", R. 1).".1.111."
1.1'
Ili'..'
290
- Objeto determinado
DERECHO
o determinable
TEORIA
291
posible
(l.
292
DERECHO
edificio no puede hacerlo porque el subsuelo no permite la edificacin proyectada, existe imposibilidad fsica. No es el caso si la edificacin es posible utilizando maquinarias especiales de que el contratista
carece; esto no constituye imposibilidad fsica y el objeto existe.
La imposibilidad fsica va variando con los adelantos tcnicos.
Durante mucho tiempo el ejemplo clsico de imposibilidad fsica
era la llegada de un hombre a la Luna.
- Hecho moralmente
imposible
309. La nocin de orden pblico ha sido siempre un concepto vago por su generalidad. Nuestra jurisprudencia ha dicho que
el orden pblico es la organizacin considerada necesaria para el
buen funcionamiento general de la sociedad. Se lo ha estimado
como una nocin de excepcin frente a la libertad contractual,
un concepto esencialmente prohibitivo o negativo, porque prohbe las convenciones que atenten contra los principios fundamentales sobre los cuales est constituida la sociedad.
310. El concepto de orden pblico es flexible y variable.
De acuerdo con la idea tradicional infringirn el orden phlico no slo las disposiciones contrarias a la ley prohibitiva, qllt' SOIl
TEORlA
293
prohibidas por la ley, sino las que vulneren algn precepto imperativo cuya inobservancia tenga aparejada la nulidad absoluta. Ms
all de un texto preciso ser opuesto al orden pblico lo que sea
contrario a los principios fundamentales de nuestro derecho y de
la organizacin social actual.
La flexibilidad que resulta para el concepto de lo anteriormente expuesto lleva al resultado de que la concrecin de la
nocin de orden pblico en los casos especficos deber ser hecha
por el juez. Pero esta precisin judicial no es libre; el juez no
puede fundamentarla en su concepto subjetivo del problema; debe
fundamentarlo en los textos en vigor; o en el espritu general de
la legislacin a que se refiere el artculo 24 del Cdigo Civil. De
esta manera la determinacin del orden pblico no es una cuestin de hecho sino de derecho. Constituyendo un punto de derecho el concepto de orden pblico que fijen los jueces de fondo
puede ser revisado por el recurso de casacin en el fondo.
311. Adems de flexible la nocin de orden pblico constituye un concepto variable que cambia segn las concepciones polticas, sociales y econmicas del legislador.
Ya hemos sealado cmo se ha querido ver una contraposicin entre el orden pblico clsico de nuestro Cdigo Civil y lo
que hoy da se denomina el orden pblico econmico. Hemos
indicado tambin lo arbitrario de esta contraposicin, ya que no
hay ninguna disposicin normativa en nuestro Cdigo que lmite
el concepto de orden pblico.
Si el orden pblico econmico es el conjunto de medidas que
adoptan los poderes pblicos con el propsito de organizar las
relaciones econmicas, no se ve cmo las medidas legales o reglamentarias que las contengan no van a ser consideradas dentro del
espritu general del ordenamiento jurdico que sirvan para determinarlo.v'
Pero este contenido amplio de la nocin de orden pblico
servir para recalcar su carcter de variabilidad. Los conceptos
con que el Estado organiza las relaciones econmicas se han demostrado extremadamente mutables a travs del tiempo.
"1
R. D.J,
294
DERECHO
TEORIA
295
1941,
296
DERECHO
sea real, o sea incomerciable, indeterminado o fsicamente imposible, ya que no va a cumplir con los requisitos que la ley establece
en el artculo 146l.
De otra manera entraramos al campo de la especulacin; suponer que a nuestro Cdigo se le olvid sancionar la irrealidad,
indeterminacin o la condicin de fsicamente posible del objeto.
Aun ms, nos llevara a buscar una sancin para una convencin
cualquiera sobre cosas incomerciables que no sea su enajenacin,
ya que sta es la nica que est expresamente considerada en el
artculo 1464.
El sistema del Cdigo es perfectamente lgico; la ley sanciona
el objeto ilcito y ste, para su licitud, debe cumplir los requisitos
que seala el artculo 1461 y no consistir en ninguno de los pactos
en que los artculos siguientes sealan expresamente que hay objeto ilcito.
Casos de objeto ilcito
- Actos prohibidos por la ley
TFORIA
297
315. El artculo 1462 del Cdigo Civil dice que "hay un objeto
ilcito en todo lo que contraviene al derecho pblico chileno ..."29
En realidad esta disposicin en cierto modo repite los preceptos citados anteriormente que sancionan todo acto ejecutado en
contravencin a la ley.
La misma sancin est contemplada en los incisos segundo y
tercero del artculo 7 de la Constitucin que establece que "ninguna magistratura, ninguna persona, ni grupo de personas pueden atribuirse, ni aun a pretexto de circunstancias extraordinarias, otra autoridad o derechos que los que expresamente se les
hayan conferido en virtud de la Constitucin o las leyes.
Todo acto en contravencin a este artculo es nulo y origina
las responsabilidades y sanciones que la ley seale".
- Pactos relativos a sucesiones futuras
2H
R. D. J.
~!I
R. D.
1.
J, 1. 7H, s.
z.
298
DERECHO
tI<I\.
300
DERECHO
'U
objetos inmorales
TEORIA
- Enajenacin
301
320. Todos los casos que analizamos anteriormente se referan a actos contrarios a la ley, a las buenas costumbres o al orden
pblico. El artculo 1464 del Cdigo Civil seala cuatro casos de
objeto ilcito que se refieren a la enajenacin de cosas incomerciables.
El artculo 1464 comienza diciendo: "Hay un objeto ilcito en
la enajenacin". La palabra enajenacin puede interpretarse tanto en un sentido restringido, como sinnimo de la transferencia
del dominio de la cosa a otra persona, cuanto en un sentido
amplio, como transferencia de todo o parte del dominio de la
cosa o constitucin sobre ella de un derecho real que lo limite.
Los autores no estn de acuerdo sobre el alcance del trmino.
Don Luis Claro opina que debe drsele el alcance restringido;
don Eugenio Velasco el significado amplio.I"
La jurisprudencia se ha uniformado en considerar que la palabra enajenacin empleada en el artculo 1464, sin ningn concepto que limite el significado y efectos, debe necesariamente entenderse en su acepcin ms comprensiva, o sea, como el acto por el
cual se transfieren a otro la propiedad u otro derecho real sobre
una cosa a cualquier ttulo. De modo que en esa denominacin se
comprenden las diversas especies de enajenacin que la ley reconoce, incluso si se la obliga o sujeta a ciertas limitaciones o gravmenes, como la prenda, la hipoteca o las servidumbres.U'V
Conviene destacar que dentro de esta misma interpretacin la
adjudicacin entre comuneros no constituye enajenacin.
Aun cuando la venta no implica enajenacin, pues, en nuestro
derecho, de un contrato nacen slo derechos personales y la transferencia del dominio se verifica exclusivamente por la tradicin
de la cosa vendida, el artculo 1810 del Cdigo Civil dice que
"pueden venderse todas las cosas corporales o incorporales, cuya
enajenacin no est prohibida por ley". En resumen, se prohbe
la venta de las cosas cuya enajenacin est prohibida.
30 LUIS CLARO SOLAR, op. cit., vol. V, t. XI, N 869. EUGENIO
VELASCO,
op. cit., p. 71.
31 R. D.J., t. 17, s. 1, p. 207; t. 32, s. 1, p. 474; t. 57, s. 2, p. 97; t. 79, s. 1, p. 90;
t. 82, s. 5, p. 62.
32 Debe sealarse
que el incumplimiento
de una clusula que contenga una
prohibicin
de gravar y enajenar que emane de un acuerdo de voluntades
no
afecta la valid('/. dd acto, sino que importa exclusivamente una infraccin a una
()hli~acilI el" 110 hacer, cllya consecuencia
contempla
el art. 1555 del C. Civil
(R. n.j., 1. HO, s, 1, 1'. Q1).
'\02
DERECHO
303
304
DERECHO
33
305
[A
CAUSA
326. El artculo 1445 del Cdigo Civil dice que para que
una persona se obligue a otra por un acto o declaracin de
voluntad es necesario: "4 que tenga una causa lcita". El artculo 1467 agrega que "no puede haber obligacin sin una causa real y lcita".
El inciso 2 del artculo 1467 define la causa diciendo que "se
entiende por causa el motivo que induce al acto o contrato".
Antes de analizar el concepto mismo de estas disposiciones,
surge un primer problema, cual es determinar si el Cdigo se
refiere a la causa del acto, a la causa del contrato o a la causa de la
obligacin.
El artculo 1131 del Cdigo Civil francs habla de la causa de
la obligacin; en cambio el Cdigo Civil italiano en los artculos 1343 y siguientes se refiere a la causa del contrato; igual criterio sustenta ("1 (:digo Civil espaol,
pormenorizando lo que se
306
DERECHO
~1 RICARDO
HEVLi\. C., Concepto y funcin de la causa en el Cdigo Civil chileno.
Editorialjuridica de Chile. 1981.
y, M. PLANIOL, op. rit., t. 11, N" 1039.
GIORGIO GIORGI, Teoria del/e obligazioni nel diriito moderno italiano. Call1I1IClIi, 1898.
F. LAURENT, Principes de Droit Ciuilfrancais. Marcscq., I HH7.
J. DABIN, La teoria de la musa. Ed. Rev. de 1). Priv., I!)!",!"" ". 7:\.
TEORIA
307
30S
DERECHO
309
debe confundirse con el fin individual o motivo; en sentido similar se pronuncian Coviello, Stolfi, Ferrara y Betti.38
Pero a este respecto debe tenerse presente que el Cdigo Civil
italiano hace una clara distincin entre "causa" y "motivo". Los
artculos 1343 y 1344 hablan de causa, pero el artculo 1345 declara la invalidez de un contrato que las partes han acordado exclusivamente por un motivo ilcito comn.
329. Entre nosotros se ha considerado en forma casi unnime
que el concepto de causa de nuestro Cdigo Civil corresponde al
de la teora clsica.
Como dice Claro Solar, el legislador no se ha preocupado ni ha
podido preocuparse de las causas ocasionales de las declaraciones
de voluntad; para descubrir tales causas sera necesario escrutar los
pensamientos, los deseos de cada una de las partes, cosa imposible
para eljuez. Igual opinin sostienen Alessandri y Len Hurtado.l"
330. No participamos de este criterio porque, a diferencia del
Cdigo francs, nuestro Cdigo Civil defini expresamente la causa y dijo en el inciso segundo del artculo 1467: "Se entiende por
causa el motivo que induce al acto o contrato".
El Cdigo ha dicho pues claramente que entiende por causa
el "motivo". Ya antes el artculo 1455 haba empleado los conceptos de intencin o motivo y causa al decir que el error de la
persona con quien se tiene la "intencin" de contratar no vicia el
consentimiento, salvo que la consideracin de esta persona sea la
"causa" principal del contrato. El inciso 1 del artculo 2456 dice
que "la transaccin se presume haberse aceptado por consideracin a la persona con quien se transige".
Por lo tanto, el considerar la intencin o motivo no es una
cosa extraa o contraria al ordenamiento de nuestro Cdigo Civil,
38 GIOVANNI
FERRI, Causa e tipo nella teoria del negozio giuridico. Giuffre,
1968.
ALBERTO TRABUCCI, Instituciones de Derecho Civil. Ed. Rev. de D. Priv.,
1967, t. l, p. 178.
NlCOLAS COVIELLO, Doctrina General del Derecho Civil. Hispanoamericana,
1938.
GIUSEPPE STOLFI, Teora del Negocio Jurdico. Ed. Rev. de D. Priv., 1959,
p.41.
F. FERRARA, op. cit.
E. BETTI. 0tJ. cit.
'19 LUIS ClARO
SOLAR, op. cit.
A. AI.ESSANI)RI - A. V()()ANOVIC, Derecho Cioil. Parte General, t. 1, p. 403.
AVIQ ,IN() I,I/,()N 1IIIRTAI)(). J atusa. Edilorial.lurdica
de Chile, 1990.
310
DERECHO
TEORlA
DE LOS ACTOSrURIDICOS
311
un verdadero trabajo de orden psicolgico." Se comprende frente a esto la reticencia de los autores clsicos franceses a aceptar los
motivos como causa frente al peligro de absoluta arbitrariedad e
inseguridad jurdica que ello poda representar.
El artculo 1560 de nuestro Cdigo Civil dispone tambin que
se estar a la voluntad real y no a la declarada, pero lo establece
en los siguientes trminos: "Conocida claramente la intencin de
los contratantes, debe estarse a ella ms que a lo literal de las
palabras".
Con esta redaccin desaparece de inmediato toda investigacin puramente psicolgica; la intencin debe haberse manifestado, ya que sta es la nica forma de conocer "claramente" la
intencin de los contratantes.w'"
Se realiza as una fusin de las ideas subjetivas y objetivas
predominantes. Nuestro Cdigo ha consagrado desde un comienzo las ideas que, no hace muchos aos, propiciaba el Decano
Maury de combinar los puntos de vista objetivos y subjetivos; de
limitar, por la consideracin de elementos objetivos, la bsqueda
de la intencin.v'
Las otras razones que se dan en favor de la teora clsica
carecen de valor. No puede darse como antecedente el Cdigo
Napolen, porque al amparo de sus disposiciones la doctrina y la
jurisprudencia francesas no han coincidido y porque ya hemos
visto cmo nuestro Cdigo vari la redaccin de los artculos que
juegan en esta materia; por lo dems, la definicin de la causa
como motivo fue agregada intencionalmente en la ltima revisin
del Cdigo, pues no apareca en el proyecto de 1853 en el artculo correspondiente que es el 1642. La pura liberalidad a que se
refiere el inciso segundo del artculo 1467, aunque coincide con
una adaptacin de la escuela clsica, constituye precisamente la
consignacin de una intencin o motivo; igual sucede con los
ejemplos del inciso tercero del mismo artculo. La casi uniformidad de la jurisprudencia es slo un ref1ejo del peso de la opinin
de nuestros tratadistas clsicos.
JEAN CARBO NNIER, Thorie des obligations. 1963, p. 251.
CRISTINA TALAMON, Le pouvoir de controle de la cours de cassation sur
t interpretoiion et l'applimtion des conlrats. Tesis, 1926, p. 24.
12 JORGE
LOPEZ SANTA MARIA, Sistema de interpretacin de los contratos. Ed.
LJ. ele Valparaso. Seala entre nosotros que "el alcance elel arto 1561 no es
diferente del art. 1156 del C. francs" (p. 83), pero agrega ms adelante que hay
una diferencia ele matiz y que "la intencin no es solamente necesario probarla,
sino que la prueba debe procurar aIjuez una conviccin sin equvoco" (p. 84).
nJ. MAURY, Rev. Int. DO Comp. 1951, pg. 493.
11 R. D.J., t. 82, S. 2, p. 67, cons. 13 y 18.
41
312
DERECHO
DE LA CAUSA
TEORIA
DE LOS ;\CTOSJURIDICOS
314
DERECHO
TEORlA
315
bra con la intencin positiva de perjudicar a terceros ya que adolece de causa ilcita.
Por lo tanto, si la causa verdadera es ilcita el acto ser nulo.
- Actos abstractos
316
DERECHO
:117
LAS FORMALIDADES
338. Los requisitos externos de que puede estar rodeado un
acto jurdico se denominan formalidades o solemnidades.
En nuestro criterio, formalidad es el gnero y solemnidad es
una especie de formalidad. Hay autores que sostienen que ambos
trminos son sinnimos.
Nuestro Cdigo Civil confunde a veces ambas palabras. Hay
artculos que usan el trmino "solemnidades" en su sentido propio; as, por ejemplo, el 679, el 999, el 1000, el 1008, el 1027, el
1470 N 3. En cambio hay otras disposiciones que confunden
ambos trminos, como los arts. 17, 1026, 1036, 1443, 1599, 1682.
Hay actos respecto de los cuales la ley no exige ninguna formalidad: son los actos no formales; hay otros respecto de los cuales la ley exige determinadas formalidades: constituyen los actos
formales.
En el derecho antiguo el formalismo era la regla general; hoy
da constituye la excepcin.
El formalismo tiene ciertas ventajas en cuanto permite que
haya constancia fehaciente del acto, su naturaleza y contenido, y
facilita su prueba.
339. No todos los requisitos externos ajenos a un acto tienen
un mismo valor.
Debemos distinguir entre:
a) Las solemnidades propiamente tales y que se exigen para el
valor de ciertos actos o contratos en atencin a la naturaleza de
los mismos. Su omisin acarrea la nulidad absoluta del acto.
b) Las formalidades habilitantes. Estos son requisitos que el
legislador ha establecido para la proteccin de los incapaces, como
medidas de defensa de su patrimonio. Tales incapaces no pueden
318
DERECHO
disponer de ciertos bienes libremente; para hacerlo necesitan cumplir ciertas formalidades que como los habilitan para actuar se
denominan habilitan tes.
La omisin de las formalidades habilitantes acarrea la nulidad
relativa del acto.
c) Las formalidades exigidas por va de prueba. El ejemplo
principal de estas formalidades lo encontramos en el arto 1709 del
Cdigo Civil, que exige que todo acto o contrato que contenga la
entrega o promesa de una cosa de valor de ms de dos unidades
tributarias debe constar por escrito. Por su parte el art. 1708 del
Cdigo Civil dispone que no se admitir prueba de testigos respecto de una obligacin que haya debido consignarse por escrito.
El acto no solemne que ha debido constar por escrito, pero
no consta en esa forma, es perfectamente vlido; la nica sancin
de la omisin es que no puede probarse por medio de la prueba
testimonial.
Otros ejemplos de tales actos los encontramos en el prstamo
a la gruesa, que debe constar por escrito segn el arto 1170 del
Cdigo de Comercio, y en el contrato de transporte, cuyas estipulaciones deben constar en la carta de porte segn el art. 173 del
mismo Cdigo.
d) Las formalidades exigidas como medios de publicidad. La
omisin de estas formalidades tampoco acarrea nulidad. La sancin normal ser que el acto sea in oponible o, en otros trminos,
no afecte a los terceros en cuyo beneficio se establecieron los
medios de publicidad.
Ejemplos de tales formalidades los tenemos en al notificacin
de la cesin de crditos que, de acuerdo con el arto 1902 del
Cdigo Civil, es necesaria para que produzca efectos respecto del
deudor y terceros; en los avisos en que se dan noticias de la disolucin de la sociedad, para que sta pueda alegarse en contra de
terceros (art. 2114 del Cdigo Civil); en la inscripcin en el Conservador de Bienes Races del embargo de bienes inmuebles, sin
cuyo requisito no produce efecto respecto de terceros, segn el
arto 297 del Cdigo de Procedimiento Civil.
e) Por ltimo, existen formalidades cuya omisin no tiene sancin. Podemos sealar como ejemplos las designaciones prescritas
respecto al testamento en el arto 1016, inciso 5 del 1023 e inciso 2
del 1024 del Cdigo Civil, cuya omisin no produce efecto alguno
si no hay duda acerca de la identidad personal del testador, escribano o testigo, de acuerdo al arto 1026 del Cdigo Civil.
Nos referiremos en detalle solamente a las solemnidades y
formalidades habilitantes, que son las nicas que afectan la validez del acto o contrato.
TEORIA
319
SOLEMNIDADES
340. Las solemnidades son una especie de formalidad y constituyen un requisito de determinados actos jurdicos, que se denominan actos solemnes.
Acto solemne es aquel en el que la manifestacin de la voluntad debe sujetarse a ciertas formas externas determinadas para
que produzca efectos civiles.
La solemnidad es, de acuerdo con el arto 1682 del Cdigo
Civil, aquella formalidad que las leyes prescriben para el valor de
ciertos actos o contratos en atencin a la naturaleza de ellos.
Las solemnidades varan segn sea el acto de que se trate.
- El instrumento pblico
341. En primer trmino tenemos el instrumento pblico. De
acuerdo con el arto 1699 del Cdigo Civil lo es tal el autorizado
con las solemnidades legales por el competente funcionario.
La escritura pblica es una especie de instrumento pblico y
consiste, de acuerdo al inciso 2 del mismo artculo, en el que ha
sido otorgado ante escribano (notario) e incorporado en un protocolo o registro pblico. El otorgamiento de las escrituras pblicas est reglamentado en los arts. 403 a 413 del Cdigo Orgnico
de Tribunales.
El instrumento pblico no constituye solamente una formalidad sino tambin una prueba fehaciente de la celebracin del
acto de que da testimonio y de las condiciones de dicho acto. El
arto 1701 del Cdigo Civil dice que la falta de instrumento pblico
no puede suplirse por otra prueba en los actos en que la ley
requiere esa solemnidad. Esta disposicin alcanza aun a los actos
realizados en pas extranjero, cualquiera que fuere la fuerza de las
escrituras privadas en el pas en el que hubieren sido otorgadas
(art. 18 C. C.).
El mrito probatorio del instrumento pblico se analizar en
detalle al estudiar los medios de prueba.
El Cdigo Civil establece numerosos actos que deben otorgarse por instrumento pblico.
Podemos sealar: la legitimacin voluntaria (art, 208); la emancipacin voluntaria (art, 265); el reconocimiento de hijo natural
por acto entre vivos (art, 271 N 1); la tradicin del derecho de
servidumbre (art, 698); la constitucin de fideicomisos (art. 735);
el otorgamiento de usufructo sobre inmuebles (art. 767); la cons-
320
DERECHO
titucin de los derechos de uso y habitacin (art. 812); la donacin de bienes races (art. 1400); las capitulaciones matrimoniales
(art.1716); la venta de bienes races, servidumbres y censos, y la
de una sucesin hereditaria (art. 1801 ine. 2); la permuta de bienes races (art. 1898); la constitucin de un censo (art. 2027); la
constitucin de renta vitalicia (art. 2269); el otorgamiento de la
hipoteca (art. 2409).
Fuera de! Cdigo Civil podemos indicar: la adopcin (art. 5
de la Ley N 7.613); la constitucin de las sociedades comerciales
(art. 350 del Cdigo de Comercio), y la constitucin de sociedades annimas (art. 3 de la Ley N 18.046).
Se discute si la omisin de instrumento pblico acarrea la
inexistencia o nulidad absoluta de! acto, como lo veremos en su
oportunidad.
- El instrumento privado
342. El instrumento privado o escritura privada puede ser exigido por la ley como solemnidad o como prueba.
Si e! instrumento privado se exige por va de solemnidad, su
falta acarrea la nulidad absoluta del acto.
Entre los actos en que se exige el instrumento privado como
solemnidad tenemos el testamento solemne (art, 1011 del Cdigo
Civil); la promesa de celebrar un contrato (art. 1554 N 1 del
Cdigo Civil); el seguro (art, 514 del Cdigo de Comercio): debe
hacerse notar que e! seguro verbal vale como promesa de acuerdo
con el art. 515 del Cdigo de Comercio y que la omisin del
instrumento no acarrea, por lo tanto, nulidad; la fianza mercantil
(art. 820 del Cdigo de Comercio); el avo de minas (art, 179 del
Cdigo de Minera).
Hay casos en que se exige que el instrumento privado sea
autorizado por un notario o un Oficial del Registro Civil. As e!
concurso de prenda agraria (art. 5 de la Ley N 4.097); e! contrato de prenda industrial (art, 27 de la Ley N 5.687); el contrato de
compraventa de cosas muebles a plazo con prenda (art. 2 de la
Ley N 4.702).
- Presencia de un funcionario determinado y/o testigos
343. Entre los actos que requieren esta solemnidad tenernos
solemne abierto, que puede otorgarse ante cinco
el testamento
TEORlA
DE LOS ACTOSJURIDICOS
321
en registros especiales
322
DERECHO
TEORIA
Hay otros actos de los menores en que no basta la autorizacin de la persona de quien dependen, sino que la ley exige
adems la autorizacin o aprobacin de la justicia.
Al respecto el arto 255 del Cdigo Civil dispone que no se
podrn enajenar ni hipotecar en caso alguno los bienes races del
hijo, aun pertenecientes a su peculio profesional, sin autorizacin
del juez con conocimiento de causa.
El arto 393 del Cdigo Civil dice que no ser lcito al tutor o
curador, sin previo decreto judicial, enajenar los bienes races del
pupilo, etc.
El inc. 2 del arto 402 exige decreto del juez para que el guardador pueda hacer donaciones en dinero u otros bienes muebles
del pupilo. Lo mismo se aplica al padre o madre que ejerza la
patria potestad en virtud de lo dispuesto en el arto 256 del Cdigo
Civil. A la misma exigencia est sometida la aceptacin o repudiacin de una herencia de acuerdo al art. 397 del Cdigo Civil; la
aceptacin debe hacerse con beneficio de inventario. El guardador necesita tambin decreto del juez para repudiar una donacin o legado al pupilo (art. 398 del Cdigo Civil). Tambin se
necesita autorizacin judicial para provocar la particin en que
tenga in ters un menor (arts. 1322 y 396 del Cdigo Civil). Otros
casos en que se exige autorizacin judicial los hallamos en los
arts, 393, 400, 401, 404, 410, 412,1721 Y 1781 del Cdigo Civil.
En ciertos casos se exigen otros requisitos adicionales, como la
pblica subasta (art. 394 del Cdigo Civil) o la tasacin de bienes
(art. 398 del Cdigo Civil).
- Disipadores
349. El disipador, como el menor bajo guarda, puede actuar
autorizado por su curador o representado por ste.
Las limitaciones del curador en la administracin de los bienes del disipador son anlogas a las del curador del menor que ya
VImos.
- Casos especiales
350. Existen en las leyes diversos casos especiales de incapacidad de determinadas personas para realizar ciertos actos sin cumplir con determinados requisitos.
As los curadores de bienes, que son los que se designan a una
herencia yacente, a una persona ausente o a los derechos eventua-
324
DERECHO
les del que est por nacer, tienen de acuerdo con los arts. 487 y
488 del Cdigo Civil facultades administrativas y de disposicin
muy restringidas. Para realizar los actos que les estn prohibidos
necesitan autorizacin del juez, previa justificacin de su necesidad o
utilidad (art. 489 del Cdigo Civil).
El mandatario para realizar los actos que seala el art.2144
del Cdigo Civil necesita la aprobacin expresa del mandante.
El arto 1800 del C. Civil somete al sndico, en cuanto a la
compra o venta de las cosas que han de pasar por sus manos, a lo
dispuesto en el arto 2144 del C. Civil. Lo anterior debe entenderse
modificado por la nueva Ley de Quiebras, N 18.175, que en sus
arts. 109 y 120 Y ss. da al Sndico facultades mucho ms amplias
para la realizacin del activo.
El albacea est sujeto a los bienes relativos a su encargo tanto
a la incapacidad sealada anteriormente 2144 (art. 1800 del Cdigo Civil) como a la que establecen para los guardadores los arts. 394
y 412 del Cdigo Civil (art. 1294 del Cdigo Civil) y requerir
para realizar los actos respectivos la autorizacin de otros albaceas no
implicados o de la justicia.
- Omisin de las formalidades habilitantes
351. La omisin de las formalidades habilitantes, por tratarse
de requisitos que la ley ha establecido, no en consideracin al
acto mismo, sino en atencin a la calidad de las personas, produce la nulidad relativa del acto, de acuerdo con el inciso final del
arto 1682 del Cdigo Civil.
En el curso de este captulo hemos sealado los casos de excepcin en que su omisin tiene otros efectos.
32.5
DERECHO
3~(j
45
R. D.J., t. 79, s. 1, p. 1.
'1~7
Como ya lo hemos visto al estudiar la derivacin de los derechos, se llama causante al que transmite un derecho y causahabiente al que lo recibe. Hemos sealado tambin que si la derivacin se verifica por un acto entre vivos se denomina transferencia
y si se produce por causa de muerte, transmisin, y que esta ltima puede ser a ttulo universal (herencia) o a ttulo singular
(legado) (art. 951 del C. C.). Es decir, los causahabientes son los
cesionarios o sucesores de las partes.
Los causahabientes a ttulo singular sufren los efectos de los
actos realizados por su causante slo en relacin con la cosa o
derecho que se les ha transmitido y anteriores a la transmisin.
En cambio a los causahabientes a ttulo universal los afectan todos
los actos de su causante, y en especial estn sujetos a cumplir sus
obligaciones.
Pero no solamente los causahabientes pueden tener el carcter de terceros relativos; pueden tenerlo tambin los acreedores
comunes del deudor.
El arto 2465 establece que toda obligacin personal da al acreedor el derecho de perseguir su ejecucin sobre todos los bienes
races o muebles del deudor, sean presentes o futuros, exceptundose solamente los no embargables. Esto es lo que se denomina el
derecho de prenda general de los acreedores. Ahora bien, los
acreedores de un deudor no son partes en los actos jurdicos que
ste haya celebrado o celebre; pero mientras ese acto les sea oponible, sufren sus efectos en cuanto pueda afectar a su derecho de
prenda general al alterar el patrimonio del deudor.
En resumen, los actos jurdicos no afectan a los terceros absolutos, es decir, un acto jurdico no puede crear derechos y obligaciones para los terceros totalmente extraos a l, sin que intervenga la
voluntad de dichos terceros. En ciertos casos los actos jurdicos
pueden afectar, a ms de las partes, a los causahabientes a ttulo
universal, a los a ttulo singular ya los acreedores de las partes.
- Actosjurdicos unilaterales
354. En el acto jurdico unilateral existe la emisin de voluntad de parte de una sola persona, que se denomina el autor del
acto jurdico.
Sobre esta sola parte que ha emitido su voluntad van a producirse los efectos del acto.
Pero muy generalmente el acto jurdico unilateral puede servir de base para que un tercero adquiera determinados derechos.
As la d(,c!;lr;lcin de reconocimiento de un hijo natural (art.271
328
DERECHO
bilaterales. Contratos
355. Los efectos de los actos jurdicos bilaterales son los que
hemos sealado en forma general.
Sin embargo, merece un anlisis especial el efecto de los contratos.
El arto 1545 dispone que todo contrato legalmente celebrado
es una ley para los contratantes y no puede ser invalidado sino por
su consentimiento mutuo o por causas legales.
Esta disposicin es la que fundamentalmente establece en nuestro Cdigo el principio de la autonoma de la voluntad.
De ella se desprende que lo estipulado por las partes se asimila
para ellas a una ley que deben cumplir y cuya violacin est sancionada del mismo modo que la violacin de cualquiera ley general a
que est sometido el contrato. Es lo que se denomina la ley del
contrato. Se desprende tambin que la estipulacin contractual slo
obliga a las partes que han intervenido en el contrato.
Debe recalcarse que no slo son partes los que actan personalmente, sino tambin los que han actuado por medio de un
representante, de acuerdo a lo dispuesto en el art. 1448.
Aunque puedan celebrarse contratos lcitos sobre derechos de
un tercero, ste no queda obligado sino en voluntad de su aceptacin. As el arto 1815 establece que la venta de cosa ajena vale, pero
para que el dueo sea afectado el arto 1818 requiere su ratificacin.
El artculo 1449 autoriza a cualquiera para estipular a favor de
una tercera persona, aunque no tenga derecho para representarla; pero el contrato puede revocarse sin participacin de dicha
persona mientras no intervenga su aceptacin expresa o tcita. Es
decir, es esa aceptacin lo que la transforma en parte.
En el arto 1449 a que nos hemos referido y que contempla la
estipulacin por otro, se trata de hacer nacer un derecho a (~IV()r
de un tercero que no ha sido parte en el contrato. En el are I,(!)O,
TEORH
DE LOS ACTOSURlDlCOS
que trata de la promesa del hecho ajeno, se contempla la situacin inversa: se trata de hacer nacer una obligacin para el tercero que no ha sido parte en el contrato. Dicho artculo dispone
expresamente que esta tercera persona no contraer obligacin
alguna, sino en virtud de su ratificacin.
Como puede verse, se requiere siempre la voluntad expresa o
tcita de una persona para que la alcancen los efectos de un acto
jurdico.
Lo que hemos dicho se aplica a los actos patrimoniales.
Los contratos de familia tienen efectos absolutos.
SANCIONES CIVILES
356. La ley sanciona la inobservancia u omisin de los requisitos
y formalidades que se han sealado necesarios para que el acto produzca todos sus efectos jurdicos. La ley protege los actos realizados
conforme a sus preceptos .. Esta proteccin disminuye hasta desaparecer si dichos preceptos no se cumplen en la realizacin del acto.
Decimos que disminuye hasta desaparecer, porque la sancin
no es siempre una misma. La sancin vara y es ms severa cuanto
ms grave sea la omisin en que se ha incurrido, es decir, cuanto
mayor sea la importancia del requisito o formalidad que falta.
En orden decreciente de gravedad las sanciones civiles por la
inobservancia u omisin en los actos jurdicos
de los requisitos y
formalidades sealados por la ley, son en teora:
a) Inexistencia;
b) Nulidad;
c) Inoponibilidad;
d) Limitacin de los medios de prueba.
INEXISTENCIA
DERECHO
46
R. D.J.,
t.
51, s, 1, p. 475.
TEORIA
DE LOS ACTOSURIDlCOS
331
Inexistencia
Nulidad
por
cual-
Slo puede
ser alegada por
ciertas personas (arts. 1683 y
1684 del Cdigo Civil).
Fuera de esta diferencias de carcter terico existe la diferencia prctica fundamental que mientras la nulidad est detalladamente reglamentada en nuestro Cdigo, la inexistencia no es considerada en ninguna de sus disposiciones.
Cabe sealar, adems, que el art. 464 del Cdigo de Procedimiento Civil que enumera taxativamente las excepciones que
pueden oponerse en los juicios ejecutivos, seala en el N 14
la nulidad de la obligacin y no se refiere a la inexistencia de
la misma.
- Discusin del problema
358. Si la inexistencia existe o no como sancion en nuestro
derecho positivo, ha dado lugar a encontradas opiniones de nuestros tratadistas y profesores.
Don Jos Clemente Fabres, don Alfredo Barros Errzuriz y
don Arturo Alessandri, entre otros, han sostenido que la ausencia
de 10 que hemos llamado requisitos de existencia produce la nuli-
332
DERECHO
dad absoluta. Don Luis Claro Solar y don Enrique Rossel, especialmente, han sostenido la tesis de la inexistencia juridica.F
Para examinar el problema conviene analizar separadamente
los argumentos que se han dado en favor de una y otra tesis frente
a cada uno de los requisitos de existencia y sealar la jurisprudencia de nuestros tribunales al respecto.
1) Falta de objeto. Don Jos Clemente Fabres seala que aunque el artculo 1682 no consigna expresamente como causa de
nulidad la falta de objeto y seala slo el objeto ilcito, la sancin
es la misma: la nulidad absoluta. En efecto, el arto 1461 del Cdigo Civil equipara el hecho imposible (fsicamente imposible) al
hecho ilcito (moralmente imposible o contrario a las leyes, a las
buenas costumbres o al orden pblico). Agrega que el hecho
imposible no slo no existe sino que no puede existir; es la falta
de objeto ms radical y absoluta y sin embargo la ley dice que es lo
mismo que el hecho ilcito.
Agrega que el arto 1814 del Cdigo Civil, que trata de la venta
de una cosa que no existe, seala que tal venta no produce efecto
alguno, y que sta es una de las frmulas de que se vale la ley para
designar la nulidad absoluta. Un argumento anlogo se hace respecto del arto 2452 del Cdigo Civil que dispone que no vale la
transaccin sobre derechos que no existen.
Los partidarios de la teora de la inexistencia argumentan que
el arto 1682 no seala la falta de objeto como causa de nulidad
absoluta, de lo que habra que concluir que produce nulidad
relativa, lo que segn ellos sera absurdo. Lo anterior demuestra
que produce la inexistencia. Consideran adems que la frase "no
produce efecto alguno" del arto 1814 significa inexistencia, como
igualmente la frase "no hay sociedad" que emplea el arto 2055 del
Cdigo Civil para el caso en que la sociedad carece de objeto por
falta de aporte.
La escasa jurisprudencia que hay sobre esta materia ha aplicado la nulidad. As se ha fallado que habiendo vendido el demandado derechos que no existen, falta el objeto de la obligacin y se
declara nulo el contrato.f
La Corte Suprema ha resuelto que no pudiendo jurdicamente existir obligacin o declaracin de voluntad sin objeto cierto
47 JOSE CLEMENTE
FABRES, Obras completas, t. III, pgs. 81 a 120.
A. ALESSANDRI, citado porVodanovic,
op. cit., t. I, V. 1, N 614.
LUIS CLARO SOLAR, op. cit., vol. VI, t. XII, N')S 1908 Yss.
ENRIQUE ROSSEL, Teora de las nulidades. Santiago, I !)2('.
48 G. 1897, 1el sem., p. ] 395.
TEORIA
t.
S.
1, p. 606;
t.
39, s. 2, p. 77;
334
DERECHO
TEORIA
de la prueba de las obligaciones. Sealan adems como argumento fundamental que la falta de solemnidades est expresamente
sancionada con la nulidad en el arto 1682.
- Conclusin
359. No obstante la diversidad de opiniones que se ha sealado, es evidente que la inexistencia como sancin por la inobservancia u omisin de ciertos requisitos externos o internos de los actos
jurdicos es extraa a la organizacin de nuestro Cdigo Civi1.56
Su diferencia fundamental con la nulidad en cuanto a que no
necesitara ser declarada por el juez, no tiene valor prctico, pues
sern los tribunales los que en definitiva deban resolver una contienda entre partes.
Si se declarara inexistente un acto ya cumplido, no se ve cmo
podran regularse las prestaciones mutuas entre las partes, al no
estar reglamentada la inexistencia sino recurriendo a las normas
de la nulidad.
Por lo dems, su valor prctico como excepcin queda tambin muy limitado al no estar considerada especficamente entre
las excepciones que pueden oponerse en el juicio ejecutivo.
Por el juego de la posesin y de la prescripcin adquisitiva es
muy difcil concebir en los actos patrimoniales un caso en que
tuviera una aplicacin distinta de la nulidad.
Lo anterior hace concluir que, para todos los efectos prcticos, debe estimarse que la nulidad absoluta es la sancin mxima
civil que contempla nuestro Cdigo, criterio que parece an ms
aconsejable si se considera la jurisprudencia al respecto de nuestros tribunales. 57
LA NULIDAD
- Generalidades
360. La nulidad es una sancin civil establecida por el legislador y que consiste en el desconocimiento de los efectos jurdicos
de un acto por la omisin en l de los requisitos y formalidades
prescritos por la ley.
"l>
,,7
DERECHO CIVIL
336
PARTE GENERAL
El inc. 1 del arto 1681 del Cdigo Civil dice que "es nulo todo
acto o contrato a que falta alguno de los requisitos que la ley
prescribe para el valor del mismo acto o contrato, segn su especie y la calidad o estado de las partes". A su vez el arto 10 del
Cdigo Civil dispone que "los actos que prohbe la ley son nulos y
de ningn valor; salvo en cuanto designe expresamente otro efecto que el de nulidad para el caso de contravencin".
La nulidad tiene el carcter de medida de proteccin, ya sea
del orden jurdico, ya de ciertas personas que la ley estima estn
en una situacin de inferioridad. En este sentido es de orden
pblico y por lo tanto irrenunciable, como expresamente lo dispone el art. 1469 del Cdigo Civil diciendo que "los actos o contratos que la ley declara invlidos, no dejarn de serlo por las
clusulas que en ellos se introduzcan y en que se renuncie a la
accin de nulidad".
La nulidad tiene adems el carcter de una sancin, es decir,
de una pena de ndole civil; esto determina que para aplicarla
debe estar expresamente establecida en la ley, que debe interpretarse restrictivamente y que es de derecho estricto, no pudiendo
ser aplicada por analoga.
Nuestro Cdigo Civil trata de la nulidad en el Ttulo XX del
Libro IV, despus de los medios de extinguir las obligaciones; ello
se debe a que el Cdigo la considera uno de tales medios. Esto no
es exacto. La nulidad es un medio de invalidar los actos jurdicos;
las obligaciones derivadas de tales actos slo se extinguen por la
declaracin judicial de la nulidad.
El concepto de nulidad, no obstante las distintas locuciones
que emplea el Cdigo para establecerla, es uno solo para todo el
derecho civil y ms ampliamente para todo el derecho privado,
salvo los casos expresamente exceptuados por la ley.
Entre los trminos que emplea el Cdigo para expresar la
nulidad encontramos: "es nulo" (arts. 1107, 2270); "no valdr"
(arts. 1207,2451); "son rescindibles" (arts. 1425, 2456); "para que
valga" (art. 675); "para que sea vlida" (art, 674); "no produce
efecto alguno" (art. 1814), etc.58
361. La nulidad puede ser expresa o tcita. Ser expresa cuando la ley diga explcitamente, al reglamentar un acto jurdico, que
la omisin de talo cual requisito produce nulidad. Ser tcita o
58
R. D.]., t. 75,
S.
1, p. 131.
TEORIA
337
virtual cuando la nulidad se derive de la aplicacin de los principios generales que sealan los arts. 10 y 1681 del Cdigo Civil.
La nulidad puede ser tambin total o parcial. Ser total la
nulidad que afecte a todo el acto o contrato y parcial la que vicie
slo ciertas disposiciones de un acto jurdico determinado.
En los actos unilaterales, especialmente en el testamento, el
Cdigo Civil contempla la nulidad parcial. Los arts. 1059, 1060,
1061, 1105 Y 1107 sealan vicios que pueden afectar a ciertas
clusulas del testamento, sin que la nulidad de que adolezcan
afecte a la totalidad del testamento.
En los contratos tambin la jurisprudencia ha estimado que
la nulidad "segn los casos, afecta a la totalidad del convenio o a
la estipulacin particular viciada, dejando subsistente el acto o
contrato en todo aquello que no se encuentre afectado por el
vicio.P?
'>9
R. D. J,
t.
14, s. 1, p. 320.
338
DERECHO
Nulidad absoluta
362. En concordancia con el criterio de que la omisin de un
requisito de existencia est sancionada tambin con la nulidad
absoluta, las causales de nulidad absoluta, de acuerdo con lo dispuesto en el art. 1682 del Cdigo Civil, son las siguientes:
a) Falta de objeto;
b) Objeto ilcito;
c) Falta de causa;
d) Causa ilcita;
e) La falta de voluntad o consentimiento;
f) La incapacidad absoluta;
g) La omisin de requisitos o formalidades exigidos en atencin a la naturaleza del acto o contrato.
En los captulos anteriores hemos ya analizado en detalle estas
causales.
363. Tres categoras de personas pueden solicitar o declarar la
nulidad absoluta, de acuerdo con el art. 1683 del Cdigo Civil:
a) El juez que conoce de la causa en que se hace valer el acto
o contrato nulo. Puede declararla aun sin peticin de parte, si la
nulidad aparece de manifiesto en el acto o contrato.
b) El ministerio pblico que puede pedirla en el inters de la
moral o de la ley.
c) Todo el que tenga inters en ella, que puede alegarla, salvo
si ejecut el acto o celebr el contrato, sabiendo o debiendo saber
el vicio que lo invalidaba.
El art. 1683 dice en primer trmino que eljuez puede y debe
declarar la nulidad absoluta, aun sin peticin de parte, cuando
aparece de manifiesto en el acto o contrato.
De este artculo se desprende que sta no es una facultad sino
una obligacin impuesta al juez. Requiere para que ste la cumpla
que exista un juicio entre partes, que en este juicio se haga valer
el acto o contrato viciado de nulidad absoluta y que el vicio aparezca de manifiesto en el acto o contrato.
La jurisprudencia entiende que la nulidad aparece de manifiesto cuando se halla presente, consta y aparece a la vista en el
instrumento mismo que da fe del acto o contrato. Esto suceder
generalmente con la omisin de una solemnidad.
El mismo arto 1683 dice que puede pedirse la declaracin de
nulidad por el ministerio pblico en el solo inters de la moral ()
de la ley.
TEORlA
339
340
DERECHO
TEORIA
341
342
DERECHO
fEORIA
acciones emanados del acto nulo. La cesin puede haberse referido incluso exclusivamente al derecho de alegar la nulidad.
369. El art. 1684 dispone que la nulidad relativa puede sanearse por la ratificacin de las partes.
Ya sealamos que la ratificacin consiste en la renuncia a pedir la declaracin de nulidad por el vicio que afecta al acto, el que
pasa a considerarse vlido y como si nunca hubiera sido viciado.
Sealamos tambin que la doctrina considera ms propio, en este
caso, el trmino confirmacin.
La confirmacin o ratificacin es un acto jurdico unilateral e
irrevocable.
La confirmacin puede ser expresa o tcita; la confirmacin
tcita consiste, de acuerdo con el arto 1695 del Cdigo Civil, en la
ejecucin voluntaria de la obligacin contratada.
Para que la confirmacin proceda se requiere:
a) Que el acto sea nulo relativamente; ya vimos que no proceda en el caso de nulidad absoluta;
b) Que emane de la parte o partes que tienen derecho a
alegar la nulidad. Lo dispone expresamente as el arto 1696 del
Cdigo Civil.
c) Que el confirmante sea capaz de contratar. El arto 1697 del
Cdigo Civil dice al respecto que no vale la ratificacin expresa o
tcita del que no es capaz de contratar; esto no significa que un
incapaz no pueda ratificar un acto nulo; puede hacerlo cumpliendo con las formalidades habilitan tes que fije la ley;
d) La confirmacin expresa debe hacerse con las formalidades legales. Es decir, la confirmacin debe cumplir con las formalidades impuestas por la ley a la realizacin del acto que se ratifica
(art. 1694). Debemos, s, sealar que respecto de los incapaces, si
confirman personalmente una vez alcanzada la plena capacidad,
no necesita obviamente cumplir con las formalidades habilitan tes
que les impona su incapacidad.
Respecto a la confirmacin tcita el art. 1695 dice que consiste
en la ejecucin voluntaria de la obligacin contratada. Aunque
esta disposicin pareciera referirse slo a la obligacin emanada
de un contrato, se la ha interpretado en un sentido amplio, entendiendo que comprende todos los hechos que manifiesten la voluntad de dar valor al acto nulo, y respecto de cualquier acto o
contrato, sea o no generador de obligaciones.
370. La nulidad relativa se sanea por el transcurso de un plazo de cuatro aos.
El inciso 1 del arto 1691 del Cdigo Civil dispone que el plazo
para pedir la rescisin durar cuatro aos.
344
DERECHO
TEORIA
DE LOS ACTOS)URlDICOS
mente pronunciada, y del 1567 N 8 que, entre los modos de extinguirse las obligaciones, seala la "declaracin" de nulidad.
El que la nulidad deba ser declarada judicialmente implica el
que existe una presuncin de validez de los actos jurdicos. El acto
se supone vlido, salvo que exista una resolucin judicial en contrario.
El juicio en que se discute la nulidad puede ser un juicio
ejecutivo, pues el arto 464 del Cdigo de Procedimiento Civil seala la nulidad de la obligacin entre las excepciones que pueden
oponerse en dichos juicios. Acogida la excepcin, la nulidad produce todos sus efectos y no puede discutirse nuevamente la cuestin en unjuicio ordinario.
La nulidad judicialmente declarada slo afecta a las partes
que han intervenido en el juicio. El inc. 1 del arto 1687 del Cdigo Civil dice que la nulidad pronunciada en sentencia que tiene
la fuerza de cosa juzgada da a "las partes" derecho para ser restituidas. Por su lado el arto 1690 del Cdigo Civil establece que
cuando dos personas han contratado con un tercero, la nulidad
declarada a favor de una de ellas no proyectar a las otras. De
acuerdo con lo anterior la declaracin de nulidad aprovecha nicamente a las personas que intervinieron en el juicio respectivo y
no a otros que puedan tener inters en esa nulidad y que no
intervinieron en el litigio.
El que la nulidad declarada judicialmente slo afecte a los que
fueron partes en el respectivo litigio, no implica que la parte a
quien aprovecha la declaracin de nulidad no adquiera ciertos
derechos o acciones que puede hacer valer contra terceros.
Lo anterior nos lleva a distinguir entre los efectos de la declaracin de nulidad entre las partes y sus efectos respecto de
terceros.
- Efectos de la nulidad entre las partes
372. El efecto fundamental de la declaracin de nulidad lo
establece el ine. 1 del arto 1687 del Cdigo Civil, que dispone que
la nulidad pronunciada en sentencia que tiene la fuerza de cosa
juzgada, da a las partes el derecho para ser restituidas al mismo
estado en que se hallaran si no hubiese existido el acto o contrato nulo.
La declaracin de nulidad tiene entonces un efecto retroactivo: las cosas deben volver al estado en que se encontraban antes
de celebrarse el acto o contrato nulo, cuyos efectos y consecuencias jurdicas desaparecen.
346
DERECHO
TEORIA
347
348
DERECHO
Para deducir reivindicacin contra terceros poseedores es indiferente que stos estn de buena o mala fe. La accin reivindicatoria en caso de nulidad se diferencia entonces de la que puede
proceder en caso de resolucin, porque esta ltima slo da accin
reivindicatoria contra los terceros poseedores de mala fe de acuerdo con los arts. 1490 y 1491 del Cdigo Civil.
El arto 1689 dice que la nulidad da accin reivindicatoria contra terceros poseedores, sin perjuicio de las excepciones legales.
Entre estas excepciones podemos sealar, en primer trmino,
el caso en que el tercer poseedor haya adquirido la cosa por
prescripcin.
Otras excepciones encontramos en la rescisin por lesin enorme, pues en tal caso subsisten las hipotecas y derechos reales
constituidos sobre la cosa, ya que antes de restituirla el comprador debe purificarla (art. 1895 del Cdigo Civil). Igualmente en
el caso de la muerte presunta, cuya rescisin slo permite recobrar los bienes en el estado en que se hallaren, subsistiendo las
enajenaciones, las hipotecas y dems derechos reales constituidos
legalmente en ellos (art. 94 N 4 del Cdigo Civil). En las donaciones entre vivos la rescisin slo da accin contra terceros en los
casos sealados en el arto 1432 del Cdigo Civil.
- Acciones derivadas de la nulidad
375. De un acto o contrato nulo pueden derivarse dos acciones segn lo que hemos sealado: la accin de nulidad y la accin
reivindicatoria.
Como ya hemos dicho, la nulidad puede hacerse valer como
accin y como excepcin. Como accin puede entablarse tanto
en la demanda como en la reconvencin.
La accin de nulidad es personal, se dirige contra la persona
que celebr el acto o contrato nulo; los terceros poseedores de la
cosa que puede haber sido objeto del acto o contrato no son
legtimos contradictores en esta accin de nulidad.
La accin reivindicatoria es real, y puede dirigirse tanto contra
la persona que celebr el acto o contrato nulo, para que restituya la
cosa que recibi en virtud de l, si la conserva en su poder, como
en contra de un tercer poseedor a quien se haya enajenado la cosa.
Para que proceda la restitucin por parte de terceros poseedores es indispensable haber entablado en su contra la accin reivindicatoria; la simple declaracin de la nulidad no sirve al efecto.
Las acciones de nulidad y reivindicatoria pueden deducirse
conjuntamente en un mismo juicio, ya quc de acucrdo con el
TEORIA
DE LOS ACTOSjURIDICOS
'ISO
DERECHO
Nulidad absoluta
Nulidad relativa
Causales.
Falta de objeto.
Objeto ilcito.
Falta de causa.
Causa ilcita.
Falta de consentimiento.
Incapacidad absoluta.
Omisin de solemnidades.
t>O
TEORIA
Diferencias
Nulidad absoluta
351
Nulidad relativa
Sus herederos.
Sus cesionarios.
Confirmacin
(ratificacin) .
No admite
cin.
Admite
confirmacin
Expresa - Acto unilateral
e irrevocable:
a) que
emane de la parte que
puede alegarla; b) que el
confirmante
sea capaz;
e) con las formalidades
legales.
Tcita. Ejecucin voluntaria del acto.
Saneamiento
(prescripcin) .
10 arios.
Desde la celebracin del
acto
4 aos.
Desde la celebracin del
acto.
(Salvo casos de violencia
e incapacidad,
desde
que stas hayan cesado.)
Se interrumpe.
Se interrumpe.
No se suspende, salvo
caso herederos menores.
Efectos
confirma-
Iguales s[ectos
Acto
No se ha cumplido.
Se ha cumplido
Respecto a terceros
- Accin reivindicatoria
1895-94-
352
DERECHO
LA INOPONIBILIDAD
377. Segn la definicin de Bastian, la inoponibilidad "es la
ineficacia respecto de terceros de un derecho nacido a consecuencia de la celebracin o nulidad de un acto jurdico". En
otros trminos consiste en la imposibilidad legal de hacer valer
contra terceros un acto vlido o las consecuencias o efectos de su
nulidad.v'
378. Para analizar esta materia es necesario, en primer trmino, distinguir entre los efectos y la realidad jurdica de un acto. La
realidad jurdica no puede ser desconocida por los terceros; lo
que nos preocupa es si esa realidad jurdica puede hacerse valer
frente a dichos terceros. En otros trminos, la eficacia frente a
terceros de un determinado derecho. En esto consiste el problema de la inoponibilidad.
Los efectos del acto jurdico son las obligaciones y derechos
que de l nacen. En otra parte analizamos cmo estos efectos slo
alcanzan a las partes, es decir, a aquellos que con su voluntad o
consentimiento han dado nacimiento al acto, y slo excepcionalmente a determinados terceros que englobamos dentro de la denominacin de terceros relativos. Pero si bien los efectos de la
relacin jurdica no pueden hacerse valer o ser exigidos por terceros, otra cosa distinta es la existencia de la relacin jurdica misma, o la eficacia de un determinado derecho, la que normalmente no puede ser desconocida por ellos.
En general, puede sealarse que, a diferencia de la nulidad, la
inoponibilidad no ataca la validez del acto mismo. El acto produce todos sus efectos con relacin a las partes, de acuerdo con los
principios generales del artculo 1545 del Cdigo Civil. Pero el
acto, vlido para las partes, no produce efectos o no tiene eficacia
respecto de terceros, ya que la inoponibilidad est establecida
precisamente para la proteccin de los terceros de buena fe.62
La inoponibilidad es una institucin que no est tratada sistemticamente en nuestro Cdigo, pero cuyas caractersticas, requisitos y efectos pueden deducirse deljuego de diversas disposiciones.
Un ejemplo claro de esta situacin lo proporciona el artculo 1815 del Cdigo Civil que autoriza la venta de cosa ajena, venta
que es perfectamente vlida y produce todos sus efectos entre las
(i1
i)~
RASTIAN, Essais d'une thori g,fnhale di' I"wfi!/()\(hilil;. Pars, I~):27,p. :\.
R. D.]., t. 67, s. t. p. ')(i.
TEORIA
DE LOS ACTOSURIDICOS
I>'l
R. D. J,
354
DERECHO
En virtud de dicha disposicin, los acreedores en cuyo perjuicio el deudor ha realizado determinados actos pueden pedir su
rescisin, cumplindose los dems requisitos que dicha disposicin seala. Igualmente la nulidad del pago hecho en fraude de
los acreedores a que se refiere el N 3 del artculo 1578 del Cdigo Civil.
Esta causal es tambin el fundamento de las inoponibilidades
que establecen los arts, 74 y 76 de la nueva Ley de Quiebras
N 18.175.
d) La lesin de derechos adquiridos.
Esta causal se desprende, por ejemplo, de los efectos de la
rescisin del decreto de posesin definitiva de los bienes del desaparecido (N 4 del art. 94 del Cdigo Civil). De la validez de los
actos realizados por la mujer si se restablece la sociedad conyugal
(arts. 165 y 178 del Cdigo Civil). Del respeto de la prescripcin
ya cumplida (arts. 1815,2517 del Cdigo Civil).
e) La lesin de las asignaciones forzosas en las sucesiones.
Al efecto, los artculos 1216 y 1221 del Cdigo Civil conceden
a los legitimarios y al cnyuge sobreviviente, a quienes el testador
no haya dejado lo que por ley les corresponde, una accin para
pedir la reforma del testamento.
f) La buena fe en el caso de la resolucin de un contrato.
En efecto, los arts. 1491 y 1492 del Cdigo Civil slo dan accin en contra de terceros poseedores si se declara la resolucin
de un contrato cuando stos se encontraban de mala fe.
Entre las causales de forma pueden sealarse:
a) La falta de publicidad. Al estudiar las formalidades o requisitos externos de los actos jurdicos sealamos que un grupo de
ellos se exiga en razn de publicidad. El cumplimiento de esta
publicidad hace que el acto llegue a conocimiento de terceros y
les sea oponible.
Estas formalidades de publicidad pueden ser de la ms diversa
ndole: notificacin, publicaciones, inscripcin en determinados
registros, etc.
En el derecho de las personas y especialmente en los actos de
familia encontramos diversas materias que deben ser objeto de
una inscripcin. As los arts. 1716 y 1723 la exigen respecto de las
capitulaciones matrimoniales y el pacto celebrado durante el matrimonio para establecer la separacin total de bienes o el r).!;imen de participacin en los gananciales. Las interdicciones dcben publicarse e inscribirse de conformidad a los arts. 447, 4!)! Y
468 del Cdigo Civil. La ley de Registro Civil exige, enl re otras, Lt
inscripcin de las escrituras pblicas de <ldo!>ci{n (<lrl.;r' N" /1");
de las sentencias ejecutoriadas qlle c(cl;tr(" 1;1 nulid.ul del uuu ri-
TEORlA
DE LOS ACTOSURTDICOS
355
356
DERECHO
TEORlA
357
358
DERECHO
65
66
R. D. J.,
R. D. J.,
t.
t.
52, s. 2, p. 60.
79, s. 1, p. 40.
R. D.J.,
Giuseppi
m R. D.J.,
ti7
GH
46, s. 1, p. 737.
Stolfi , op. cu., pg. 158.
t. 52, s. 2, p. 60.
t.
DERECHO
360
70
71
R. D . j.,
R. D . j.,
t.
1.
33. s. 2. p. 17.
3.5. s. 1, p. 13R; 1. 5R. s. 2. p. 21.
TEORIA
DE LOS ACTOSJURlDlCOS
361
Ante la ley el acto aparente tiene plena validez y efectos mientras no se establezca la simulacin. Aunque reconoce la posibilidad de actos simulados, nuestro Cdigo establece en el art. 1545
la presuncin de sinceridad de los actos y su validez.
389. Entre las partes el acto aparente, en el caso de simulacin absoluta, no produce efecto alguno.
Podr, sin embargo, darse el caso de que alguna ele las partes
intente aprovecharse del acto simulado y exigir su cumplimiento.
En tal evento la otra parte podr oponer la excepcin de simulacin. Tambin cualquiera de las partes podr intentar la accin
de simulacin para evitar los efectos del acto aparente que de otro
modo se produciran por la presuncin de sinceridad a que nos
hemos referido.
Acreditada la simulacin absoluta resultar evidente la nulidad absoluta del acto simulado, pero sta deber ser declarada
judicialmente de acuerdo a las normas generales que regulan la
nulidad.i?
390. Respecto a los terceros de buena fe y de acuerdo con lo
que dispone especialmente el arto 1707, en el sentido de que las
contraescrituras no tienen efecto contra ellos, se encuentran protegidos frente a la simulacin. Esta proteccin es doble.
Consiste en primer trmino en que no les afecta el acto real y
podrn atenerse al acto aparente. El acto real les ser in oponible
por clandestinidad y tendrn al efecto la excepcin respectiva.
Pero puede suceder a la inversa: que el acto aparente sea
perjudicial a los terceros y les convenga hacer prevalecer el acto
real. En tal caso, al igual que las partes, podrn intentar la accin
ele simulacin.
El que la proteccin alcanza slo a los terceros de buena fe se
desprende del sistema general de nuestro Cdigo, de las diversas
disposiciones en que la proteccin legal se limita a los que se
encuentran de buena fe, como los arts. 2568 N 1, 2302, 2303,
1490 Y 149l.
El arto 1876 otorga, en un caso especfico de simulacin, la
proteccin que dan a los terceros poseedores de buena fe los
artculos 1491 y 1492.
Estos terceros, para tener el carcter de terceros relativos, debern tener un inters actual comprometido.
72
R. D ..,J., t. 81,
S.
2, p. 119.
362
DERECHO
Si este inters actual resulta de actos cometidos con conocimiento de la simulacin ya no tendrn el carcter de terceros de
buena fe y no gozarn de la proteccin legal.
Los terceros, en cuanto sean sucesores de las partes, pueden
tener un doble carcter frente a la simulacin. En cuanto acten
como sucesores sern continuadores de la personalidad del causante
y se les aplicarn los criterios que hemos sealado para las partes en la
simulacin. Pero puede suceder tambin que el acto realizado por el
causante los haya perjudicado en forma directa independientemente
de los derechos y obligaciones que les ha transmitido el causante.
Sera, por ejemplo, el caso en que un acto simulado del causante
hubiera perjudicado a un heredero en la asignacin forzosa a que
tuviere derecho. Estimamos que en tal caso el sucesor puede ejercitar
las acciones que como tercero de buena fe le corresponderan.
39l. La simulacin podr hacerse valer como accin y como
excepcin. La accin de simulacin es una accin personal, declarativa, transmisible y prescriptible conforme a las reglas generales.
Esta prescripcin deber contarse para los terceros desde que
tuvieron conocimiento de la simulacin. Respecto a las partes, el
criterio es ms difcil de establecer. Podra sostenerse que la prescripcin se cuenta desde que se celebr el acto simulado, o bien,
desde que una de las partes pretende servirse del acto aparente,
esto es, exigir su cumplimiento. A nuestro entender el criterio
aceptable es este ltimo.
392. Hemos sealado ya la presuncin de sinceridad con que
nuestra legislacin inviste a los actos aparentes. De acuerdo con
esto la simulacin deber ser declaradajudicialmente.P
Esta declaracin slo alcanzar a los que fueron partes en el
juicio de acuerdo con el efecto relativo de las sentencias.
Si la simulacin fue declarada en un juicio entre las partes,
ella no afectar a terceros, pues no existirn efectos reflejos de la
sentencia que los alcancen.
- Prueba de la simulacin
393. La simulacin puede probarse por los terceros
quier medio de prueba.?"
73
71
t.
22, s. L p. 27'2.
por cual-
TEORIA
DE LOS ACTOSJURlDICOS
3G3
364
DERECHO
365
366
DERECHO
LA CONDICIN
- Definicin
399. El arto 1473 dice que "es obligacin condicional la que
depende de una condicin, esto es, de un acontecimiento futuro
que puede suceder o no".
Se define generalmente la condicin como el hecho futuro e
incierto del cual depende el nacimiento o la extincin de un
derecho.
- Elementos de la condicin
400. De la definicin anterior resulta que el hecho constitutivo de una condicin debe tener dos caractersticas: el ser futuro y
el ser incierto.
=Futuridad
En primer trmino la condicin debe consistir en un hecho
futuro. El are 1071 dice que la condicin que consiste en un
hecho presente o pasado, no suspende el cumplimiento de la
obligacin.
La jurisprudencia ha resuelto que un hecho presente no puede constituir condicin. Igualmente no constituye condicin la
verificacin de ciertos requisitos de hecho establecida en un contrato para que una parte pueda ejercitar ciertos derechos."
- Incertidumbre
La incertidumbre consiste en la posibilidad de que el hecho
se verifique o no.
La incertidumbre debe ser objetiva, es decir, existir para todos. Nace entonces de la naturaleza misma y no del concepto
personal de las partes.
Del carcter de incierto que debe revestir el hecho que constituye una condicin resulta que, como lo ha dicho una sentencia,
", R. D. J,
t.
35, s. 2, p. 65.
TFORIA
DE LOS ;\CTOS_rURlDlCOS
367
de las condiciones
71;
R. D. J,
t.
9, s. 1, p. 426.
36H
DERECHO
77
78
'~~)!).
TEORlA
369
La condicin resolutoria puede adoptar tres formas: condicin resolutoria ordinaria, condicin resolutoria tcita y pacto comisorio.
a) Condicin resolutoria ordinaria. La condicin resolutoria ordinaria es la establecida expresamente por las partes y puede consistir en un hecho cualquiera, siempre que ste no sea el cumplimiento de la obligacin contrada en un contrato bilateral.
b) Condicin resolutoria tcita. La condicin resolutoria tcita es
una condicin subentendida por la ley y que consiste en la resolucin del contrato bilateral por incumplimiento de su obligacin
por una de las partes.
El arto 1489 dispone que en los contratos bilaterales va envuelta la condicin resolutoria de no cumplirse por uno de los contratantes lo pactado.
Por lo tanto, la condicin resolutoria tcita no corresponde a
todos los actos jurdicos sino slo a los contratos, y no a todos los
contratos, sino exclusivamente a los contrato bilaterales. As lo ha
resuelto reiteradamente la jurisprudencia. Ya sabemos que contrato bilateral, de acuerdo con el arto 1439, es aquel en que las partes
contratantes se obligan recprocamente.
Para que la condicin resolutoria tcita opere es necesario
que slo uno de los contratantes est en mora; el otro debe haber
cumplido o estar llano a cumplir la obligacin (art. 1552).
c) Pacto comisario. El pacto comisorio consiste en la estipulacin expresa que hacen las partes de la condicin resolutoria
tcita.
- Estado en que pueden encontrarse las condiciones
402. Tanto las condiciones suspensivas como resolutorias pueden encontrarse en tres estados: pendientes, cumplidas o fallidas.
La condicin se encuentra pendiente cuando el hecho futuro
e incierto puede an verificarse o no.
La condicin se encuentra cumplida cuando el hecho futuro
e incierto se ha verificado.
La condicin se reputa fallida cuando ya se sabe que el hecho
futuro e incierto no se verificar, o ha transcurrido el plazo fijado
por las partes o la ley para que dentro de l se verificara.
El arto 1482 dispone que se reputa haber fallado la condicin
positiva o haberse cumplido la negativa, cuando ha llegado a ser
cierto que no suceder el acontecimiento contemplado en ella, o
cuando ha expirado el tiempo durante el cual el acontecimiento
ha dehido verificarse y no se ha verificado.
:m
DERECHO
371
ine. 3 del arto 1492 y el arto 1078 autorizan al acreedor para impetrar, mientras pende la condicin, las providencias conservativas
necesanas.
El derecho y la obligacin condicional se transmiten a los
herederos (1492), salvo que los derechos del acreedor condicional emanen de una asignacin testamentaria (962 ine. 2), o de la
donacin (1390 inc. 2).
2) Cumplida. Una vez cumplida la condicin suspensiva nacen
el derecho y su obligacin correlativa. La obligacin se hace exigible (1485 ine. 1), y el derecho del acreedor se reputa haber existido desde la celebracin del acto condicional; en otros trminos,
la condicin opera retroactivamente.
Esta retroactividad tiene la excepcin que sealamos de que
los frutos percibidos en el tiempo intermedio pertenecen al deudor, como igualmente de que el acreedor recibe la cosa en el
estado en que se encuentra, aprovechando sus aumentos o mejoras y sufriendo sus deterioros o disminuciones (1486 ine. 2).
3) Fallida. Si la condicin falla, desaparece el acto jurdico
condicional y todos su efectos se borran.Y
Si el deudor ha ejecutado actos de disposicin respecto a la
cosa que deba condicionalmente, stos se consolidan. Si el acreedor los ha realizado, ellos caducan. Por ltimo, si se han impetrado medidas conservativas, ellas desaparecen.
- Efectos de la condicin resolutoria
404. Para estudiar los efectos de la condicin resolutoria distinguiremos tambin entre si ella se encuentra pendiente, cumplida o fallida.
1) Pendiente. De la condicin resolutoria no depende el nacimiento del derecho, sino su extincin o resolucin. Por lo tanto
mientras la condicin resolutoria se encuentra pendiente no slo
existe el acto jurdico sino tambin los derechos y obligaciones
sujetos a condicin resolutoria que de l emanan. Tales derechos
y obligaciones han nacido, y para todos los efectos el acto se
reputa como si fuera puro y simple.
De lo anterior resulta que la obligacin es exigible desde el
momento de celebrarse el acto o contrato. El que tiene una cosa
bajo condicin resolutoria puede enajenarla y percibe sus frutos.
La prescripcin corre en contra del acreedor desde la celebracin
7'1
372
DERECHO
del acto (2514 ine. 2), Y el deudor que paga no ha hecho sino
cumplir su obligacin y no puede repetir lo pagado.
El derecho sujeto a condicin resolutoria slo supone para su
titular el riesgo de perderlo si la condicin se cumple.
Esta situacin de que el derecho pueda eventualmente extinguirse, impone al duefio de una cosa cuyo dominio est sujeto a
condicin resolutoria la obligacin de conservarla como buen padre de familia (1486-758). Da derecho tambin para solicitar medidas conservativas al que puede recibir la cosa si el evento de la
condicin se produce (1492-761).
2) Cumplida. El cumplimiento de la condicin resolutoria produce la consecuencia de hacer desaparecer los efectos del acto
jurdico. El derecho condicional y su obligacin correlativa se
extinguen como se desprende de la definicin de la condicin
resolutoria del arto 1479, de lo dispuesto en el arto 1487, y del N 9
del art, 1567, que seala el evento de la condicin resolutoria
como uno de los modos de extinguirse las obligaciones.
En general, el evento de la condicin resolutoria opera con
efecto retroactivo y la situacin debe retrotraerse al estado anterior a la celebracin del acto condicional.s"
Pero al estudiar los efectos de la condicin resolutoria cumplida debemos sealar que existen diferencias segn se trate de la
condicin resolutoria ordinaria o de la condicin resolutoria tcita.
a) La condicin resolutoria ordinaria opera de pleno derecho, al verificarse el evento de la condicin y puede ser alegada
por cualquiera que tenga inters en ella.
La condicin resolutoria tcita slo opera en virtud de sentencia judicial que la declare; slo puede ser alegada por el otro
contratante, que ha cumplido su obligacin o se allana a cumplirla (1489-1873), e incluso este contratante puede no pedir la resolucin sino el cumplimiento de la obligacin (1489 ine. 2).
b) Producido el evento de la condicin resolutoria ordinaria,
no es posible evitar sus efectos. En la resolutoria tcita puede
enervarse la accin cumpliendo la obligacin (310 C. P. C.). El
pago puede efectuarse antes de la citacin para sentencia en primera instancia, o de la vista de la causa en segunda.t"
En teora se ha sostenido, sin embargo, que el derecho del
acreedor de pedir el cumplimiento o la resolucin del contrato,
es un derecho potestativo, esto es, el que atribuye a un sujeto el
KI)
81
R. D. J,
R. D. J,
t.
t.
80, s. 2, p. 126.
77, s. 2, p. 77; t. 44, s. 1, p. 21-\1-\;
t.
11l, s, 1, p. 1l97.
TEORIA
DE LOS ACTOS]URIDICOS
373
R2 AUGUSTO
ELGUETA, Resolucin de los contratos y excepcin de pago. EditorialJurdica
de Chile, 1981. Ver supra N 200.
374
DERECHO
CIVIL
PARTE GENERAL
De los artculos citados se desprende que la accin reivindicatoria slo procede contra los terceros poseedores de mala fe; esto
es, que conocan que el derecho que tena el causante que enajen o grav la cosa estaba sujeto a condicin resolutoria. Respecto
a los bienes races este conocimiento lo deduce la ley de que la
condicin aparezca expresa o implcitamente en el ttulo y que
ste haya sido otorgado por escritura pblica o inscrito.
3) Fallida. Si la condicin resolutoria falla, los efectos del acto
jurdico quedan definitivamente a firme.
La obligacin de conservacin que tena el dueo de una cosa
cuyo dominio estaba sujeto a condicin resolutoria, desaparece. Si
se han impetrado medidas conservativas, ellas terminan.
El Cdigo no ha reglamentado esta materia, pero lo anterior
resulta del hecho de que el acto jurdico pasa a considerarse como
puro y simple.
- Pacto comisario
B.>
t.
46, s. 1, p. ]01;
t,
(ir,. x, 2.
p. 21.
TEORIA
DE LOS ACTOSJLJRIDICOS
La accin derivada del pacto comisorio prescribe necesariamente en cuatro aos contados desde la fecha del contrato. Se ha
estimado que esta prescripcin no enerva la procedencia de la
accin resolutoria normal.
- Accin resolutoria
406. Como hemos sealado, la condicin resolutoria tcita y
el pacto comisorio, que es slo su estipulacin expresa, no operan
de pleno derecho sino que en su caso la resolucin debe ser
declarada por una sentencia judicial.
La accin para pedir tal resolucin se denomina accin resolutoria.
La accin resolutoria es una accin personal o patrimonial
que, por lo tanto, puede cederse o transmitirse. Mueble o inmueble, segn la cosa en que recaiga. Indivisible, pues si son varias las
personas que pueden pedir la resolucin, deben ejercitarla en
comun.
Cuando procede la accin reivindicatoria contra terceros poseedores ella puede establecerse justamente con la accin resolutoria, de acuerdo con lo dispuesto en el artculo 18 del C. de P. C.
La accin resolutoria prescribe segn las reglas generales.
EL PLAZO
- Concepto
407. El arto 1494 dice que el plazo es la poca que se fija para
el cumplimiento de la obligacin.
En doctrina se lo define como el hecho futuro y cierto del
cual depende la exigibilidad o la extincin de un derecho.
En consecuencia el plazo tiene de comn con la condicin el
requisito de que debe consistir en un hecho futuro; pero mientras
el hecho futuro de la condicin es incierto, el hecho futuro del
plazo debe con seguridad realizarse.
Pero la circunstancia de que el plazo consista en un hecho
cierto, no significa necesariamente que se sepa de antemano cundo ha de verificarse. Esto lleva a distinguir entre hechos ciertos y
determinados, que se sabe que han de llegar y cundo han de
llegar, como una fecha futura cualquiera; y hechos ciertos e indeterminados, que se sabe que han de suceder necesariamente, pero
no se sabe cundo, como la muerte de una persona.
376
DERECHO
- Clasificacin
de los plazos
de
y tcitos
TEORIA
:\77
y extintivos
409. Como hemos dicho, el plazo suspensivo suspende la exigibilidad del derecho, pero no su nacimiento.
Antes de cumplirse el plazo suspensivo no puede exigirse la
obligacin (1496-1084), pero si sta se paga antes de cumplirse el
plazo, el pago no est sujeto a restitucin (1495 inc. 1).
Antes del vencimiento del plazo puede exigirse, sin embargo,
la obligacin si se ha renunciado al plazo o ste ha caducado.
El plazo puede ser renunciado por aquel en cuyo beneficio se
ha establecido. Aunque el artculo 1497 pareciera indicar que slo
el deudor puede renunciar al plazo, ello no es as. Debe aplicarse
;11 efecto la regla general del arto 12. La redaccin del arto 1497 se
,178
DERECHO
TEORL\
DE LOS ACTOSURIDICOS
'\79
- Las asignaciones a da
411. En las asignaciones testamentarias a da, el Cdigo, en
los arts. 1080 y siguientes, hace una serie de aclaraciones ya que
ellas pueden tener el carcter de plazos o condiciones, dependiendo de su certeza y determinacin.
El Cdigo seala que el da es cierto y determinado si necesariamente ha de llegar y se sabe cundo, como el da tanto de tal
mes y tal ao. Es cierto pero indeterminado si necesariamente ha
de llegar y no se sabe cundo, como el da de la muerte de una
persona. Es incierto pero determinado si puede llegar o no, pero
en caso afirmativo se sabe cundo, como el da en que una persona cumpla tal edad. Por ltimo es incierto e indeterminado si no
se sabe si ha de llegar ni cundo, como el da en que una persona
se case.
La ley distingue las asignaciones "desde tal da" respecto de las
asignaciones "hasta tal da", y da una serie de normas en los artculos 1083 a 1088 que son a primera vista confusas, pero que
pueden resumirse en dos proposiciones:
1 Las asignaciones "desde tal da" son siempre condicionales,
salvo que el da sea cierto y determinado;
2 Las asignaciones "hasta tal da" son siempre plazo, salvo
que el da sea incierto e indeterminado.
- Cmputo del plazo
412. El cmputo de los plazos est reglamentado en los arts. 48,
49 Y50 del C. C.
Dichas disposiciones son de aplicacin general, pero ello no
obsta a que las partes puedan convenir un cmputo diferente.
Se distinguen plazos de das, meses y aos.
Lo establecido en los artculos citados puede resumirse en las
siguientes normas:
1) Los plazos se entienden completos y corren hasta la medianoche del ltimo da del plazo (48 inc. 1).
2 El primero y el ltimo da de un plazo de meses o de aos
tiene un mismo nmero en el respectivo mes. No importa que el
mes o ao tenga ms o menos das.
3) Si el plazo de meses o de aos principia en el da de un
mes que no tiene el mes final, por tener menos das, el plazo
termina el ltimo da del mes final. As, el plazo de dos meses que
parte el 31 de diciembre, termina el 28 de febrero.
380
DERECHO
- Concepto
TEORIA
DE LOS ACTOSjURIDICOS
381
LA REPRESENTACION
- Concepto
416. Lo normal es que una persona manifieste su voluntad
personalmente en los actos jurdicos. Pero esta manifestacin de
voluntad puede tambin hacerse por intermedio de otra persona,
llamada representante.
Al actuar un representante va a ser l quien va a manifestar la
voluntad necesaria para que el acto jurdico se perfeccione sustituyendo a la voluntad del representado, pero una vez realizado el
acto jurdico el representante desaparece y los efectos del acto van
a afectar exclusivamente al representado.
El principio de la representacin est establecido en el arto 1448
del C. C., que dispone que lo que una persona ejecuta a nombre
de otra, estando facultada por ella o por la ley para representarla,
produce respecto del representado iguales efectos que si hubiese
contratado l mismo.
La representacin tiene especial importancia, pues a travs de
ella pueden actuar los incapaces en la vida jurdica. Respecto a las
personas capaces les permite realizar los actos jurdicos que por la
poca o lugar en que deben celebrarse les sera imposible, difcil
u oneroso hacerlo personalmente.
- Naturaleza jurdica de la representacin
417. Para explicar la naturaleza jurdica de la representacin
se han formulado diversas teoras, cuatro de las cuales merecen
sealarse:
a) Teora de la ficcin. Es la teora clsica expuesta por Pothier.
Segn ella, se estima que la representacin es una ficcin en
virtud de la cual se considera que el representado manifiesta su
voluntad por intermedio del representante.
382
DERECHO
crVIL.
PARTE GENERAL
Esta teora no explica la representacin legal, ya que un absolutamente incapaz, por ejemplo, no tiene voluntad que manifestar; ni resuelve el problema de cul de las dos voluntades, la del
representante o del representado, engendra el acto jurdico.
En algunas sentencias la Corte Suprema sostiene que sta es la
teora que informa nuestro Cdigo.'"
b) Teora del emisario o del "nuntius". Esta teora, formulada por
Savigny, sostiene que el representante es el portavoz del representado y transmite su voluntad.
Esta teora admite la misma objecin que la anterior respecto
al caso de los incapaces; no explica adems el caso de los mandatos generales en que no se ha encargado especficamente al representante la realizacin de un determinado acto jurdico.
c) Teora de la cooperacin de voluntades. Segn ella, concurren
tanto la voluntad del representante como la del representado a la
formacin del acto jurdico.
Fuera de no explicar la representacin legal ni los casos en
que el mandatario obre en contra de la voluntad del representado, esta teora, al ser aceptada, acarreara innumerables complicaciones.
d) Teora de la modalidad del acto jurdico. Esta teora, expuesta
por los jurisconsultos franceses Pilon y Levy Ullmann, considera la
representacin una modalidad del acto jurdico. Parte de la base
de que el concepto subjetivo de la obligacin como vnculo entre
dos personas debe reemplazarse por un concepto objetivo de vnculo entre los patrimonios. La modalidad consiste en que los efectos del acto jurdico que realiza el representante no van a radicarse en su patrimonio sino en el patrimonio del representado.f?
Esta teora explica la representacin legal. Adems aclara que
es la voluntad del representante la que genera el acto jurdico. Un
fallo de la Corte de Temuco sustent que era sta la teora que
informaba nuestra legislacin y la expuso con mucha claridad,
pero l fue casado por la Corte Suprema, que sostuvo que el
Cdigo Civil est inspirado en la teora de la ficcin.f"
Sin embargo, otra sentencia de la Corte Suprema ha acogido
la teora de la representacin.f?
TEORlA
C.
383
c., que disponen que para que la tradicin sea vlida "debe ser
418. En general todos los actos jurdicos pueden ser ejecutados por representacin; sin embargo hay ciertos actos que deben
necesariamen te realizarse personalmente.
Estas excepciones son muy reducidas en materia patrimonial.
Podemos sealar el arto 1004 del C. C., que dispone que "la
facultad de testar es indelegable". El art. 1280, inc. 1, que establece que "el albaceazgo es indelegable, a menos que el testador
haya concedido expresamente la facultad de delegarlo". Por ltimo el arto 1721, del cual se desprende que el menor y el que se
halla bajo curadura deben actuar personalmente al otorgar capitulaciones matrimoniales, sin perjuicio de la autorizacin del curador y de lajusticia que el mismo artculo seala.
- Clases de representacin
384
DERECHO
TEORIA
3H5
de la representacion
'1\
R.
1).
J,
t. 43, s, 2,
r ()[t. )7S;, s.
1, p. 17'1.
386
DERECHO
:lH7
En una sentencia posterior, aceptando la teora de la modalidad, estableci que la representacin autoriza al representante
slo para ejecutar actos lcitos a nombre del representado; en
consecuencia, el representado puede solicitar la nulidad absoluta,
ya que no se puede imputar a l el acto ilcito."
En cambio, si el representado conoci o debi conocer el
vicio de que adoleca el acto, no puede solicitar su nulidad absoluta, aunque el representante haya ignorado el vicio.i"
- Representacin sin mandato
422. Hemos visto que para que una persona pueda obligar a
otra por el acto jurdico que realiza en su nombre es menester
que est facultada por la ley o por dicha persona para representarla.
Si una persona acta en representacin de otra sin poder, el
acto que realiza es in oponible al representado.
El representado puede en tal caso, y como lo hemos sealado,
aceptar voluntariamente que el acto lo afecte por medio de la
ratificacin, dentro de los principios generales que sealan los
arts. 1449 y 1450 del C. C.
Hay, sin embargo, un caso en que, sin existir mandato y sin
que haya ratificacin posterior, lo que una persona ejecuta a nombre de otra sin poder puede obligar a esta ltima.
Tal sucede en la agencia oficiosa o gestin de negocios que,
de acuerdo al arto 2286 del C. C., "es un cuasicontrato por el cual
el que administra sin mandato los negocios de alguna persona, se
obliga para con sta, y la obliga en ciertos casos".
94
'J5
9(i
388
DERECHO
CAPTULO
TEORIA
VII
DE LA PRUEBA
CONCEPTOS GENERALES
NOCIONES
y REGLAMENTACIN
- Ubicacin
390
DERECHO
y nociones generales
TEORIA DE LA PRUEBA
391
existan en poder de terceros o que stos declaren como testigos (arts. 349 y 359 C. P. C.).
La prueba que se rinde est sometida al control de la otra
parte (arts. 255, 324, 366, 392, 405, 419,795 N 4 del C. de P. C.).
El juez tiene un papel pasivo y neutral. Su funcin consiste
en fijar los hechos sobre los cuales debe rendirse la prueba si,
a su juicio, hay controversia sobre ellos (art. 318 C. P. C.), pero
salvo casos de excepcin (art. 159 C. P. C.) se limita a recibir
las pruebas que rindan las partes sin buscarlas por s mismo.
Rendida la prueba, el juez la analiza y la aprecia comparativamente, prefiriendo, entre pruebas contradictorias, las que crea
ms conforme a la verdad (428 C. P. C.), pero respetando la
fuerza probatoria relativa de los distintos medios de prueba
que estudiaremos ms adelante.
- Normas que regulan la prueba
OBJETO DE LA PRUEBA
- Hechos
y derecho
392
DERECHO
R. D. J.,
t.
29, s. 1, p. 2\1''..
TEORli\ DE LA PRUEBA
~93
y actosjuridicos
428. Hemos visto que, salvo las excepciones sealadas, el derecho no necesita probarse.
La prueba puede recaer sobre la afirmacin relativa a hechos.
Estos pueden ser materiales o actos jurdicos.
La disminucin entre hechos materiales y actos jurdicos tiene
una gran importancia desde el punto de vista de la prueba.
La afirmacin relativa a hechos materiales, y dentro de ellos
comprendemos a los hechos jurdicos, puede, en general, efectuarse por todos los medios de prueba.
Las afirmaciones inherentes a la existencia de actos jurdicos
son generalmente objeto de prueba preconstituida. Esto resulta
especialmente de los arts. 1701 y 1709 del C. C.
Nos remitimos aqu a lo dicho respecto a las solemnidades y a
las formalidades exigidas por va de prueba. La materia est analizada en el Mensaje del Cdigo Civil en los dos primeros prrafos
de las observaciones generales con que ste termina.
- Clasificacin
de los hechos
394
DERECHO
Los hechos constitutivos especficos deben probarse. As, en la compraventa ser necesario probar que se acord por una parte dar
tal cosa y por la otra pagar tal precio, y en la compraventa de
bienes races la solemnidad de la escritura pblica.
Si nos remitimos al estudio de los elementos constitutivos del
acto jurdico que seala el arto 1444 y su divisin en esenciales, de
la naturaleza y accidentales, podemos sealar que los elementos
esenciales o comunes a todos los actos jurdicos no necesitan probarse. Los elementos esenciales particulares a determinado acto
jurdico necesitan probarse.
Los elementos de la naturaleza de un acto jurdico, cuando
son los establecidos por la ley y no han sido modificados por las
partes, no necesitan probarse, pues, como lo hemos dicho, no
requieren prueba las consecuencias jurdicas de un acto establecidas por la ley. Por el contrario, si los elementos de la naturaleza
de un acto han sido modificados por las partes debern probarse,
pues constituirn hechos modificativos de acuerdo con la clasificacin que se seala ms adelante.
Los elementos accidentales debern probarse siempre, pues
no emanan de la ley sino de la voluntad de las partes.
En responsabilidad extracontractual pueden considerarse hechos constitutivos genricos la capacidad, y hechos constitutivos
especficos el dolo o la culpa, la relacin de causalidad y el dao.
La relacin de causalidad inviste un carcter especial, pues en
la prctica resulta establecida por la accin de probar el hecho
doloso o culpable, y el dao que ste produjo. Corresponder
entonces al autor del hecho ilcito probar como circunstancia
impeditiva la causa eximente de la responsabilidad que destruye
esta relacin causal.
b) Circunstancias impeditivas son aquellas que obstan a la
generacin vlida de una relacin jurdica, como los vicios del
consen timien too
Las circunstancias impeditivas deben probarse por quienes las
invocan. As, la incapacidad (1446), el dolo (1459), etc.
c) Hechos modificativos son los que alteran en su contenido o
efectos la relacin jurdica, como las modalidades, el pago parcial,
una imputacin diferente del pago, etc.
Los hechos modificativos deben ser probados por el que los
alega.
d) Hechos extintivos son los que hacen desaparecer una relacin jurdica o sus efectos. As, los modos de extinguirse las obligaciones (1567).
Los hechos extintivos deben probarse por el que los hace
valer.
TEORIA
DE lA PRUEBA
R.
IR.
'> R.
"R.
3
l. Hl, s. 2,
396
DERECHO
PESO DE LA PRUEBA
- Norma general
430. Al estudiar el peso de la prueba u onus probandi debemos
determinar la persona a quien le corresponde producir la prueba.
Ante todo debemos sealar que el rendir prueba no es una
obligacin; es simplemente una necesidad para el que quiere fundamentar su derecho.
El inc. 1 del arto 1698 del C. C. dice que "incumbe probar las
obligaciones o su extincin al que alega aqullas o sta".
Aunque este artculo habla slo de las obligaciones, se aplica a
toda prueba, ya sea de hechos, derechos u obligaciones.
La disposicin del art. 1698 puede traducirse en la proposicin general de Baudry-Lancantinerie que dice que "la necesidad
de probar se impone a aquel que asevera un hecho contrario al
estado normal o habitual de las cosas, o bien contrario a una
situacin adquirida't.? Ampliando este mismo concepto, la Corte
Suprema ha fallado que los actos deben reputarse cumplidos correctamente salvo prueba en contrario.f
Procesalmente se dice en forma general que corresponde al
demandante probar los fundamentos de su accin y al demandado los fundamentos de su excepcin.
Volviendo a la divisin de los hechos
que hemos sealado,
corresponder el peso de la prueba al que alegue en su favor un
hecho constitutivo especfico, para demostrarlo. Lo mismo, los
que invoquen en su beneficio hechos impeditivos, modificativos o
extintivos, tendrn necesidad de probarlos.
A-s, si una parte cobra en un juicio una suma de dinero que
entreg en mutuo, deber probarlo. Si la otra parte niega simplemente el prstamo del dinero, no deber probar nada. En cambio, si el demandado no niega el mutuo, pero se excepciona
alegando haberlo pagado, deber probar el hecho extintivo que
es el pago y el demandante no necesitar probar el mutuo que ha
sido reconocido por la otra parte. Puede suceder que el demandante acepte haber recibido una suma en pago, pero alegue que
dicho pago fue imputado a una deuda diferente. En este caso el
demandado estar relevado de probar el pago, que ha sido acep-
7
8
TEORIA
DE LA PRUEBA
397
tado por la otra parte, y el peso de la prueba volver al demandante, quien deber probar el hecho modificativo como es justificar
una imputacin diferente del pago.
- La responsabilidad
43l. La manifestacin de esta responsabilidad se expresa generalmente en la frase: "Nadie puede ir en contra de sus propios
actos", es decir, nadie puede ejercitar una facultad o hacer valer
una pretensin en contradiccin con una conducta anterior.
Se trata de una tesis que la doctrina extranjera ha analizado
detalladamente," pero que nuestros autores, salvo algunos casos
puntuales 10 y nuestra jurisprudencia no han desarrollado. Como
es un tema complejo y que crea numerosas interrogantes slo lo
trataremos en forma muy general. La teora corresponde generalmente a la tcnica procesal y, por ello, conviene exponerla dentro
de las reglas generales de la prueba.
En el derecho ingls se denomina "stoppel'', esto es, impedimento, y ha sido una creacin de la prctica jurisprudencial. El
dicho derecho es una proteccin de la apariencia jurdica, un
medio de defensa, nunca causa de una accin, y tiene carcter
recproco. Se distingue la situacin en que un individuo manifiesta solamente una intencin, lo que no impide un posterior cambio de opinin, de aquellos otros en que se da, con palabras o
conductas, como existente una determinada situacin de hecho;
slo en este ltimo caso hay verdadero "stoppel";!'
En los Cdigos Civiles alemn y espaol no existen disposiciones generales sobre la materia. Esto no ha impedido que, tanto
los tratadistas como la jurisprudencia, hayan elaborado doctrinas
completas, aunque no siempre coincidentes, al respecto.
En nuestro Cdigo Civil la regla de la ilicitud de contravenir
los propios actos no ha sido consagrada como norma individual
independiente, como regla de carcter absoluto.
En realidad la in admisibilidad de no poder alegar en contra
de los actos propios es slo una derivacin del principio general
que impone la obligacin de actuar en conformidad a los dictados
de la buena fe, materia a la que nos hemos referido al sealar los
9 LUIS DIEZ-PICAZO, La doctrina de los pro/lios actos. Bosch, 1963, y la bibliografa citada en l.
lO JORGE
LOPEZ SANTA MARIA, R. D. J, primera parte. Derecho, t. 82,
p. 33. 1985, 1 parte, p. 33 Ysiguientes, especialmente punto VIII.
II JOWIT,
The Diclionary o{Enr;lish lruu. Londres, 19f9.
'198
DERECHO
principios generales de nuestro derecho. La falta de lealtad respecto a un acto o una conducta debe ser sancionada con la dese stimacin.l? Esta buena fe tiene, como lo hemos sealado (N 24),
dos aspectos distin tos: uno psicolgico, la ignorancia de la juridicidad o antijuridicidad de una situacin de hecho; el otro, una
buena fe de actuacin, la lealtad y fidelidad en el desarrollo y
cumplimiento de los deberes jurdicos. El primero es un estado
de conciencia en un momento determinado; el otro, la realizacin de una conducta.!"
Una de las consecuencias de este deber de obra de buena fe,
de ejercitar los derechos de buena fe, de esta buena fe como
conducta, es la exigencia de un comportamiento coherente. Cuando una persona suscita en otra con su conducta una confianza
fundada en una determinada conducta o situacin jurdica futuras deducidas de la conducta anterior, no debe defraudar la confianza suscitada y es inadmisible, por contrariar a la buena fe, toda
actuacin incompatible con ella.':'
Aunque el principio de la responsabilidad por los propios
actos no est precisado en forma general, existen numerosas disposiciones que constituyen su aplicacin.
Entre otras: as, el arto 280 del C. c., que permite establecer la
filiacin del hijo natural por la conducta del padre o madre en el
N 2, o por el silencio del padre en el N 4; el ine. final del
art. 669 que supone la aquiescencia del dueo si se ha edificado,
plantado o sembrado su terreno con su conocimiento; el art. 702,
ine. final, sobre presuncin de la tradicin; el art. 925, sobre prueba de la posesin por la concurrencia de hechos positivos; el
arto 1230 que supone la aceptacin por parte del asignatario si
vende, dona o transfiere el objeto que se le ha deferido; el art. 1244
que dispone que se toma el ttulo de heredero por la enajenacin
de cualquier efecto hereditario, sin reserva de derechos; el
arto 1449, que en la estipulacin a favor de un tercero, establece
que constituye aceptacin de ste la realizacin de actos que slo
hubieren podido ejecutarse en virtud del contrato; el arto 1564,
ine. 3, que autoriza la interpretacin de un contrato por la aplicacin prctica que han hecho las partes; el arto 1695 que dispone
que la ejecucin voluntaria de la obligacin contratada implica la
TEORJA DE LA PRUEBA
399
15
R. D.
J.
4(1)
DERECHO
la mera tolerancia de actos de que no resulta gravamen no confieren posesin, ni dan fundamento a prescripcin alguna".
En resumen, de acuerdo a estos conceptos, debe estimarse que,
salvo disposicin legal contraria, un acto o una conducta, que no
sean vinculantes por s mismos, hacen inatendible o inadmisible la
pretensin que se hace valer en una actuacin judicial si son contradictorios con ella. Esta contravencin, esta contradiccin, a una
conducta anterior, debe producirse en un litigio y ser una misma
persona, jurdicamente, la que ha realizado la conducta y formula
la pretensin. Constituye una traba de orden procesal la imposibilidad de hacer valer, como factor decisivo de un litigio, una alegacin, bien sea de carcter sustantivo (formular una accin o una
excepcin) o bien de carcter procesal (aducir alegaciones o defensas) , cuando esto es contradictorio con una conducta anterior.
La pretensin contradictoria puede ser un acto del demandante, pero tambin del demandado. Puede, por lo tanto, producirse formulando una accin o una excepcin, reconviniendo o
contestando la reconvencin, replicando o duplicando.
La sancin de la actuacin contradictoria no significa, como
tal, el desconocimiento o extincin de un derecho, tal vez slo un
lmite a su ejercicio; no significa tampoco una ineficacia o un
resarcimiento de daos; tiene exclusivamente un carcter procesal y probatorio; es inadmisible la prueba en contradiccin con
una conducta anterior.
Los hechos constitutivos de la conducta anterior podrn probarse por cualquier medio de prueba. (Merece una atencin especial esta materia con relacin a lo dispuesto en los dos ltimos
incisos del art. 1709 del C. C.)
La conducta anterior establecida servir de base, a lo menos, a
una presuncin judicial que puede tener la fuerza que seala el
arto 426 del C. de P. C.
- Modificaciones
al onus probandi
La presuncin est definida en el art. 47 del C. C., que dispone "se dice presumirse el hecho que se deduce de ciertos antecedentes o circunstancias conocidas.
Si estos antecedentes o circunstancias que dan motivo a la
presuncin son determinados por la ley, la presuncin se llama
TFORlA
DE LA PRUEBA
40]
legal". El inciso final del mismo artculo expresa que "si una cosa,
segn la expresin de la ley, se presume de derecho, se entiende
que es inadmisible la prueba contraria, supuestos los antecedentes o circunstancias".
Las presunciones pueden ser judiciales o legales.
La presuncin judicial es la deduccin realizada por el juez de
un hecho desconocido a travs de ciertos antecedentes o circunstancias conocidos.
Cuando los antecedentes o circunstancias de que se deduce el
hecho estn determinados por la ley, la presuncin es legal; si esta
presuncin no admite prueba en contrario, se denomina presuncin de derecho.
El que aduce un derecho amparado por una presuncin no
necesita probarlo si concurren los requisitos en que ella descansa.
En tal caso, ser la otra parte la que tendr que rendir prueba
para destruir dicha presuncin; si sta es de derecho, no se admitir ninguna prueba para desvirtuarla.
Pero el hecho de que la presuncin releve del peso de la
prueba no significa que no deban probarse los hechos constitutivos de ella o, como dice el arto 47, los antecedentes o circunstancias en que sta se basa.
En el Cdigo Civil encontramos numerosos artculos en que
se establecen presunciones legales; as los arts. 180, 232, 306, 719,
853, 1595, 1790, 1942, 2221, 2510. Algunas disposiciones establecen presunciones de derecho, como los arts. 76, 706, 1805,2510.
No siempre la ley emplea la expresin "presumirse" para establecer una presuncin; as los arts. 1942, 1956 Y 1971, por ejemplo, usan la expresin "no hace prueba". A veces la presuncin
est establecida negativamente, como en los arts. 385 y 1957.
El onus probandi puede ser subvertido tambin cuando los contratantes alteran convencionalmente el peso de la prueba.
Se ha dicho que nuestra Corte Suprema rechaza tales convenciones y se cita al efecto una sentencia de 1909.16
Dicho fallo es ajustado a derecho en cuanto se refiere a las
reglas procesales sobre la forma o modo de producir las pruebas y
a los medios de prueba que pueden emplearse; no lo es, en nuestro concepto, en cuanto pueda referirse al onus probandi.
El Cdigo Civil acepta expresamente que las partes puedan
alterar el onus probandi, como sucede en los incisos finales de los
arts. 1547 y 1558. Por lo dems en esta materia no est en juego
sino el inters particular de las partes y cabe aplicar entonces la
1"
R. 1).1., t. R, S. 1, P .I:!.
402
DERECHO
- Definicin
433. Los medios de prueba son aquellos que las partes pueden emplear, de acuerdo a la ley, para producir el convencimiento del juez.
Las partes no estn autorizadas para establecer la verdad en
cualquiera forma que estimen conveniente; deben necesariamente usar un medio autorizado por la ley, y ste es el que se denomina medio de prueba.
Pero aun los medios legales de prueba no pueden utilizarse
siempre, pues en ciertas ocasiones la ley no los admite, como la
prueba testimonial en las obligaciones que han debido constar
por escrito.
- Sistemas probatorios
434. De lo anterior se deduce que nuestra legislacin establece taxativamente los medios de prueba y, como lo veremos ms
adelante, determina tambin su valor probatorio y la oportunidad
en que la prueba debe ser rendida. Es lo que se llama sistema de
prueba legal.
En contraposicin a l existe en otras legislaciones el sistema
de prueba libre, en que las partes pueden usar cualquier medio
para producir el convencimiento del tribunal, y en que el juez
valoriza discrecionalmente las pruebas rendidas.
Existe tambin un sistema de prueba mixto que combina los
dos anteriores.
Algunos autores estiman que nuestro sistema no es propiamente el sistema de prueba legal, sino un sistema mixto, ya que el
arto 428 del C. de P. C. autoriza a los tribunales a preferir la que
crean ms conforme a la verdad entre dos o ms pruebas contradictorias. Asimismo el inc. 2 del art. 426 del C. de P. C. los Elcldta
TEORIA DE LA PRUEBA
403
- Admisibilidad
y valor probatorio
404
DERECHO
de la prueoa
17
t. 79, s. 4, p. 80.
t.
s.4,
pp. 95-!)(i;
TEORIA
DE LA PRUEBA
405
1'1
406
DERECHO
- Clasificacin
INSTRUMENTOS
EN GENERAL
- Definicin
~l
mORIA
DE LA PRUEBA
407
408
DERECHO
TEORIA
DE L\ PRUEBA
409
22
R. D.].,
t.
74, s. 4, p. 335.
410
DERECHO
to pblico es solemnidad del acto o contrato, el instrumento defectuoso por incompetencia del funcionario o por otra falta en la
forma, valdr como instrumento privado si estuviere firmado por
las partes.
Por lo tanto, un instrumento pblico que no llena los requisitos sealados, no vale como instrumento pblico, pero vale como
instrumento privado si estuviere firmado por las partes, ya que,
como lo ha expresado la Corte Suprema, "colocar una firma en
un documento significa que el suscriptor acepta su contenido'U"
En tal caso el instrumento deber hacerse valer como instrumento privado y tiene slo el valor probatorio de tal, es decir,
cuando haya sido reconocido o mandado tener por reconocido.
El alcance de esta disposicin la hemos analizado al tratar de
la conversin de los actos nulos.
24
445. El ine. 1 del arto 1700 del C. C. dice que "el instrumento
pblico hace plena fe en cuanto al hecho de haberse otorgado y
su fecha, pero no en cuanto a la verdad de las declaraciones que
en l hayan hecho los interesados. En esta parte no hace plena fe
sino contra los declarantes".
En primer trmino cabe sefialar que este artculo seala que
el instrumento pblico hace "plena fe", es decir, constituye plena
prueba respecto a los hechos que atestigua, lo que significa que
ellos quedan acreditados por el solo instrumento pblico sin necesidad de concurrencia de otras pruebas adicionales.
De la misma disposicin resulta que el instrumento pblico
atestigua respecto al hecho de haberse otorgado, a su fecha y a la
verdad de las declaraciones en l contenidas, distinguiendo adems el artculo entre las partes y los terceros.
a) Valor probatorio respecto a las partes.
Entre las partes el instrumento pblico hace plena fe, en primer trmino en cuanto al hecho de haberse otorgado. Esto debemos entenderlo en forma ms amplia, de acuerdo con la definicin de autenticidad que da el art. 17 del C. c., como el hecho de
haber sido realmente otorgado y autorizado por las personas y de
la manera que en el instrumento se expresa.
~1
TEORIA
DE LA PRUEBA
411
Como la disposicin considera ms adelante en forma separada las declaraciones de los interesados, debemos concluir que en
este primer punto estn comprendidas solamente las declaraciones del funcionario que autoriza el instrumento y en cuanto se
refieren a actuaciones propias suyas o a hechos que ha percibido
personalmente o ha comprobado en forma legal. Este aspecto es
la base fundamental del valor del instrumento pblico. En los
puntos sealados debe hacerse plena fe en lo que el funcionario
declara constarle, pues por algo la autoridad lo ha hecho depositario de la fe pblica en las materias de su competencia.
En segundo trmino el instrumento hace plena fe respecto a
su fecha. El Cdigo la ha considerado separadamente, aunque en
realidad forma parte de la autenticidad del instrumento.
Por ltimo, el instrumento hace plena fe entre las partes en
cuanto a la verdad de las declaraciones que en l hayan hecho los
interesados.
En este punto debemos distinguir entre la efectividad de que
se hayan hecho por los interesados las declaraciones de que da
cuenta el instrumento y la verdad o exactitud de dichas declaraciones.
El instrumento hace indudablemente plena fe en cuanto al
hecho de que las declaraciones se han formulado. Ese hecho est
cubierto por la fe pblica del funcionario que las ha percibido
personalmente. As lo confirma adems el art.477 del C. de P.
Penal.
El instrumento pblico hace tambin plena prueba en contra
de las partes con respecto a la verdad de las declaraciones que en
l han formulado, pero las partes pueden impugnar esas declaraciones probando que no son sinceras, pero como el instrumento
pblico hace "plena" prueba contra ellas, necesitarn producir
otra plena prueba para impugnarlas; una prueba de menor entidad, testimonial, p. ej., no servira al efecto.
Las declaraciones de las partes se presumen verdaderas, pero
esa presuncin no est amparada por la fe pblica, pues al funcionario no ha podido constarle tal verdad. Por este motivo las partes
pueden impugnar la verdad de las declaraciones, probando que
son falsas, y para ello no necesitan impugnar la autenticidad del
instrumento pblico.P
La distincin la establece claramente el
inciso final del arto 429 del C. de P. C. que dice que sus disposiciones sobre impugnacin de la autenticidad de una escritura pblica se aplicarn cuando se trate de impugnar la autenticidad de la
e!,
R. D.J,
t.
74,
S.
1, p. 166.
412
DERECHO
ClVTL. PARfE
GENERAL
TEOR[A
DE LA PRUEBA
4[3
~6
27
414
DERECHO
y copias
447. El mrito probatorio que se ha analizado del instrumento pblico corresponde en primer trmino e indudablemente al
instrumento original.
La copia autorizada legalmente por un funcionario competente es en s un instrumento pblico que hace fe de reproducir
fielmente el original y tiene, por ello, indirectamente su mismo
valor probatorio. Esto es lo que dispone el arto 342 del C. de P. C.
que dice que sern considerados como instrumento pblico en
juicio: 1 los documentos originales; 2 las copias dadas con los
requisitos que las leyes prescriben. Generalmente son competentes para dar copias los funcionarios que han autorizado el original
u otros a quienes la ley faculta al efecto, como los archiveros
respecto de los documentos que existieren en su archivo (art. 455
N 4 del C. Orgnico de Tribunales).
En cuanto a las copias no dadas con dichos requisitos, el
arto citado en su N 3 les da valor si no son objetadas como inexactas por la parte contraria dentro de tercero da; en tal caso se
presumen fieles. En su N 4 da valor a las copias objetadas si son
cotejadas y halladas conformes; en este caso el atestado del funcionario que practica el cotejo les da el carcter de instrumento
pblico.
Es por las razones indicadas que las copias de instrumento
pblico se acompaan en juicio con citacin.
- Instrumentos
TEORIA
DE LA PRUEBA
415
DEL INSTRUMENTO
PBLICO
416
DERECHO
c.
- lmp'ugnacin
porfalsedad
de las declaraciones
452. Al hablarse de impugnacin de las declaraciones contenidas en el instrumento pblico, nos referimos a las rlcclararionc-s
de las partes, ya que las declaraciones del lncioll;lrio l'st;ll ;1I11pa-
TEORIA
DE lA PRUEBA
417
~'I
R. D.].,
t.
52, s. 4, p. 52.
41H
DERECHO
CIVIL. PARl'E
GENERAL
Las partes pueden entonces impugnar la verdad de las declaraciones, pero es distinta la situacin si esta impugnacin se hace
respecto a las otras partes con relacin a terceros.
En cuanto a las otras partes, stas pueden impugnar la verdad
de las declaraciones probando su falsedad. En todo caso debern
producir un elemento de conviccin que destruya la plena fe que
seala el artculo 1700.
El Cdigo de Comercio contempla, sin embargo, una situacin en que no se admite impugnar la verdad de las declaraciones
contenidas en una escritura pblica.
El arto 350 del C. de Comercio dispone que la sociedad colectiva se forma y prueba por escritura pblica. El arto 353 establece
por su parte que no se admitir prueba de ninguna especie contra
el tenor de las escrituras otorgadas en cumplimiento del arto 350,
ni para justificar la existencia de pactos no expresados en ellas.
Respecto a los terceros la norma general es distinta; las partes
no pueden impugnar la verdad de sus propias declaraciones. El
art. 1707 no admite que dichas declaraciones se alteren con relacin a terceros ni siquiera por una escritura pblica y por lo
tanto, con mayor razn tampoco podrn alterarse con otro medio
de prueba de menor valor.
Ya hemos dicho que la impugnacin de la verdad de las declaraciones por terceros, ya sea contra las partes, ya sea contra otros
terceros, es indiscutible.
Esta impugnacin se puede hacer por cualquier medio de
prueba, pero, en cuanto a la prueba de testigos, est naturalmente sujeta a la limitacin del artculo 1708, no pudiendo
emplearse si el acto revocado es de aquellos que han debido
constar por escrito.
LA ESCRITURA
PBLICA
- Definicin
453. El art. 1699 del C. C., despus de definir el instrumento pblico, agrega en su inciso 2: "Otorgado ante escribano e incorporado en un protocolo o registro pblico, se
llama escritura pblica".
Por su parte el arto 403 del C. O. de T. establece que "escritura
pblica es el instrumento pblico o autntico otorgado con las
solemnidades que fija esta ley, por el competente notario, e incorporado en su protocolo o registro pblico".
TEORIA
DE LA PRUEBA
419
420
DERECHO
TEORlA
DE L\ PRUEBA
421
PROTOCOLIZADOS
422
DERECHO
PRN ADO
privado es reconocido
TEORV\
DE LA PRUEHA
DEL INSTRUMENTO
PRIVADO
460. Para las partes, una vez reconocido o mandado tener por
reconocido, tiene el valor de escritura pblica. Por consiguiente,
hace plena fe entre las partes:
l. En cuanto al hecho de haberse otorgado.
2. En cuanto a su techa. La techa no es para las partes la del
reconocimiento, sino la del momento en que se otorg el instrumento.
3. En cuanto a la verdad de las declaraciones que en l se
consIgnan.
Respecto de terceros, el instrumento privado no tendr jams
valor probatorio, por cuanto sera muy fcil, de aceptarse una
posicin contraria, coludirse con el fin de perjudicarlos.
Sin embargo, respecto de terceros pueden adquirir fecha cierta, no la del momento en que se otorg sino la que seala el
arto 1703:
l. Desde el fallecimiento de una de las partes que lo han
firmado.
2. Desde el da en que ha sido copiado en un registro pblico.
3. Desde el momento en que ha sido presentado en juicio.
4. Desde el momento en que se ha tomado razn de l.
5. Desde el momento en que ha sido inventariado en calidad
de tal por funcionario competente.
6. Segn el C. O. de T. desde el momento de su anotacin en
el Repertorio, si el documento se protorolivn (arts, 419 y 420 C. O.
dcT.).
424
DERECHO
y papeles domsticos
por el acreedor
462. Sea que se encuentre en poder del deudor o del acreedor la escritura en que aparece la nota, sta aprovecha siempre al
deudor, y sigue la regla de la confesin. El deudor deber tomar
tanto lo favorable como lo desfavorable (art, 1705).
LA PRUEBA DE TESTIGOS
463. Son testigos aquellos que, sin ser partes en el proceso,
declaran sobre hechos de que tienen conocimiento.
Lo que caracteriza a los testigos y los diferencia de otros medios de prueba, como la confesin, es la circunstancia de ser,
procesalmente, personas extrarias al pleito.
El C. de P. C. seala la habilidad o inhabilidad o tacha para
testificar; seala tambin la forma de rendir la prueba, y el valor
probatorio que a ella corresponde.
El Cdigo Civil se refiere a la admisibilidad del testimonio.
ADMISIBILIDAD
DE U\ PRUEBA DE TESTIGOS
TEORIA
DE LA PRUEBA
426
DERECHO
No se admite, adems, la prueba de testigos, en cuanto adicione o modifique lo expresado en el contrato; asimismo, no se
admite sobre lo que se alegue haberse dicho antes, aun cuando
en algunas de estas adiciones se trate de una cosa cuyo valor no
alcance a dos unidades tributarias (art. 1709, ine. 2).
La limitacin que hemos estudiado es una norma de excepcin; por lo tanto, podrn probarse por testigos, conforme a lo ya
explicado:
a) Los hechos.
b) Los cuasicontratos.
c) Cuando exista un principio de prueba por escrito.
d) Los actos y contratos cuando stos no contengan la entrega
o promesa de una cosa o sta sea de menor valor que el indicado.
La ley, en ciertos casos, autoriza la prueba testimonial aun
cuando el acto no conste por escrito.
En materia mercantil es admisible la prueba de testigos, cualquiera que sea la cuanta de la obligacin que se trata de probar
(art. 128 del Cdigo de Comercio).
En materia civil es admisible la prueba de testigos, en primer
trmino, cuando la ley la autoriza en una institucin determinada, exceptundola de la inadmisibilidad; por ejemplo, el comodato (art. 2175 del C. C.), el depsito necesario (art. 2237 del C. C.).
En segundo lugar, cuando haya sido imposible obtener prueba
escrita. Por ltimo, cuando exista un principio de prueba por
escrito (art. 1711 del C. C.).
La imposibilidad de obtener una prueba escrita puede ser de
carcter moral o fsico.
La imposibilidad moral existe cuando razones de afecto, de
etiqueta o de complacencia social impiden exigir documento escrito. Tal sera el caso del hijo de familia con respecto a sus padres. Puede el hijo probar una obligacin contrada en su favor
por su padre, por testigos.
La imposibilidad fsica existe cuando las circunstancias materiales no han permitido otorgar el instrumento. Ello ocurre, por
ejemplo, en el caso del depsito necesario.
Claro est que la parte que pretende probar el acto por testigos deber probar en primer lugar la existencia de la imposibilidad, fsica o moral.
En tercer trmino los casos en que haya un principio de prueba por escrito. Se entiende por principio de prueba por escrito, el
acto escrito del demandado o de su representante que haga VCl'Osmil el hecho litigioso.
LA CONFESION
467. La confesin de parte es el reconocimiento que uno de
los litigantes hace de la verdad de un hecho que puede producir
consecuencias jurdicas en su contra.
Sus caractersticas son:
1. Es una declaracin de voluntad. La cual reviste jurdicamente
el carcter de unilateral.
2. Esta declaracin unilateral produce consecuencias jurdicas en contra del confesante. No favorece al que la presta sino a la parte que la
obtuvo o la pidi.
3. Es indivisible. Por cuanto la confesin, por regla general, no
puede dividirse en perjuicio del confesante .'10 Esta regla la seala
el arto 401 del C. de P. C. Por excepcin, puede dividirse la confesin en dos hiptesis:
lO
R. D.j., t. RO, s. 2, p. 7.
428
DERECHO
TE ORlA DE lA PRUEBA
429
11
R. n.j., t. ti:!. s. 2.
p. sn.
430
DERECHO
LAS PRESUNCIONES
471. Presumir un hecho es deducirlo de ciertos antecedentes
o circunstancias conocidos.
La presuncin requiere la existencia clara y precisa de ciertos
hechos o datos en que se fundamentar, Estos son los llamados
presupuestos de la presuncin.
Las presunciones pueden ser legales o judiciales.
PRESUNCIONES
LEGALES
JUDICIALES
TEORlA
DE LA PRUEBA
4~1
tratndose de actos o contratos solemnes, en los cuales la solemnidad exigida sea el instrumento pblico, pues ste no puede ser
suplido por prueba alguna.
Se puede probar con presunciones judiciales una obligacin
que ha debido consignarse por escrito y no lo fue. Claro est que
si la presuncin se construye sobre la base de circunstancias que
han sido acreditadas en el proceso solamente por testigos, la jurisprudencia les resta valor a las presunciones, para evitar la burla
del principio sobre limitacin de la prueba testimonial.
- Condiciones y valor probatorio de la presuncin judicial
INSPECCION
'l~
432
DERECHO
CIVIL. PARl'E
GENERAL
INFORME DE PERITOS
477. El informe de peritos o peritaje es un medio de prueba
que consiste en un dictamen u opinin sobre hechos discutidos
en el pleito, para cuya apreciacin se requieren conocimientos
especiales de alguna ciencia o arte.
El informe de peritos puede ser obligatorio en los casos en
que la ley lo exija. Ejemplos: arts.848, 855, 1335, 1943, 1997,
2002, 2006 del C. C.
Puede ser facultativo, es decir, lo decretar el tribunal cuando
verse sobre hechos que requieren conocimientos especializados, y
tambin sobre algn punto de derecho referente a legislaciones
extranjeras.
Los peritos se designan en una audiencia ante el juez por las
partes. Si no hay acuerdo, y se entiende no haberlo cuando no
concurren todas las partes o concurriendo no llegan a un entendimiento, los nombra el juez dictando resolucin.
Los peritos realizan la operacin del peritaje y presentan al
tribunal su informe con sus conclusiones.
Normalmente el perito debe citar a las partes para evacuar su
informe (inc. 3 del arto 417 del C. de P. C.), pero se ha fallado
que la omisin de esta citacin no es constitutiva de causal de
casacin en la forma, sin perjuicio del valor probatorio que pueda
asignrsele al haber sido producido irregularmente.P
Valor probatorio
478. Los tribunales aprecian la fuerza probatoria del informe
de peritos en conformidad a las reglas de la sana crtica.
35
R. D.]., t. 81,
S.
2, p. 96.
TEOR[A
DE LA PRUEBA
433
4.'H
DERECHO
TEORJA DE LA PRUEBA
36 JUAN AGUSTIN
FIGUEROA Y, NI/mI/s orientaciones de la prurbn. Editorial
.Jurdica de Chile, 1981, p,gs. 99 y ss.
436
DERECHO
TEORlA
DE LA PRUEBA
437
INDICE
Captulo
INTRODUCCION
EL
ORDENAMIENTO
DERECHO
EL
EL
El.
PBLICO
.JURDICO
y DERECHO
PRIVADO
DERECHO
PBLICO
DERECHO
PRIVADO y EL DERECHO
CDIGO
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
CIVIL
CIVIL CHILENO
LAS Fl!ENTES
23
24
28
32
33
36
38
II
LA LE'y'
9
11
14
14
16
16
18
20
PRIVADO
41
DEL DERECHO
,
'"
Concepto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Definicion. del Cdigo Civil
Diversas variedades de leyesy su jerarqua
Potestad reglamentaria
43
43
45
46
48
440
INDlCE
49
50
52
54
58
59
60
63
64
64
64
64
68
70
70
75
77
77
77
78
80
80
82
82
82
82
83
85
85
87
87
88
90
91
95
99
99
101
103
106
INDICE
Captulo
441
III
y REU\CIN
JURDICA.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Sujetos
LAs PERSONAS NATURALES
- Concepto y existencia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
La muerte natural
La muerte presunta.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
ATRIBUTOS
DE U PERSONALIDAD
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Concepto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
El nombre
La capacidad
La nacionalidad.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
El domicilio
- Presunciones de domicilio. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Clasificacin del domicilio
- Pluralidad de domicilios
- Importancia del domicilio
El estado civil
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Concepto y caractersticas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Fuentes del estado civil. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Lafamilia y el parentesco
- Importancia de! parentesco. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Prueba del estado civil . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Sentencias en materia de estado civil
- El Registro Civil
El patrimonio
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Concepto e importancia
- Caracteristicas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Derechos de la personalidad
- Concepto. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Derechos a la individualidad.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Derechos a la personalidad civil . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Derechos a la persanalidad moral . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
LAS PERSONAS JURDICAS
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Corporaciones
- Furulaciones
111
111
112
112
113
115
118
118
119
122
124
125
126
127
129
130
131
131
133
133
135
136
140
141
143
143
148
151
151
153
154
156
157
lS7
160
161
162
442
INDTCE
164
164
165
166
167
168
168
168
Captulo
IV
Cosas corporales
- Clasificacin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Bienes inmuebles
Bienes muebles
- Especie y gnero .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Cosas consumibles y jngibles
Cosas incorporales.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Concepto. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Derechos reales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Derechos personales.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Derechos muebles e inmuebles
Universalidades
- Establecimientos de comercio. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Bienes intangibles
,
,
,....
- Derechos potestativos
El cuerpo humano y el cadver como objetos del derecho
173
175
176
177
] 78
179
180
181
181
183
187
189
]90
191
194
195
196
Captulo V
LA RELACIONjURlDICA
-
DE DERECHO
PRIVADO
Concepto. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Contenido de la relacin [uridica
Clasificaciones de la relacin juridica
, . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
OrZ~enes de la relacin jurdica .".........................
Actos lcitos e ilcitos
LOS DERECHOS
SUBJETrvOS
, , . . . . . . . . . . ..
, . . . . . . ..
201
204
204
207
208
21 ()
21 ()
212
INDICE
Nacimiento, transferencia,
subjetivos
-
443
transmisin y extincin
..
..
..
..
..
de los derechos
Nacimiento
Transferencia y transmisin.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Derechos intransferibles e intransmisibles
Modificacin de los derechos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Extincin de los derechos
Fuentes de los derechos subjetivos
212
213
213
213
213
214
215
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
217
217
218
219
220
220
221
222
224
226
229
Captulo VI
TEORlA DE LOS ACTOS JURIDICOS
HECHOS
y ACTOS]URDICOS
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
242
243
243
expresa y tcita. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
real y voluntad declarada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
244
246
DE EXISTENCIA
La voluntad
- Volunlad
- Voluntad
235
238
239
240
240
240
241
241
El consentimiento
La oferta
- Revocacin de la oferta
- Caducidad de la ojrta
- Vigencia de la oferta
La aceptacin
- Efectos de la aceptacin
Responsabilidad
precontractual
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
248
249
250
250
251
251
2f I
2))2
444
INDlCE
El autoconsentimiento
Vicios de la voluntad
El error
-
Error de derecho . . .
Error esencial
Error sustancial.
. .
Error en la persona
Error en la magnitud
Error comn
Sancin del erTor . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
de las prestaciones.
La lesin . . . . . . . . . . . . ..
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
La fuerza
- Origen de la fuerza
- Sancin de lafuerza
El dolo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Dolo principal o inductivo
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Dolo incidental
Prueba del dolo
Dolo y culpa grave
Efectos del dolo
LA CAPACIDAD.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Capacidad de goce
Capacidad de ejercicio
Incapacidad absoluta
-
Los dementes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Los impberes
Los sordomudos que no pueden darse a entender Ijar escrito . . . . . . ..
Consecuencia de la incapacidad absoluta . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Incapacidad
relativa
- Menores adultos
- Los disipadores
- Efectos de la incapacidad
EL OBJETO
relativa
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Objeto real. . . . . . . . . . . . . . . . .
Objeto comerciable
Objeto determinado o determinable
Hecho determinado
Hecho fsicamente posible. . . . . .
Hecho moralmente imposible
El orden pblico
Las buenas costumbres . . . . . . . .
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
El objeto ilcito
Casos de objeto ilcito . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Actos prohibidos por la ley
- Aclos y contratos contrarios al derecho phlic chileno . . . . . . . . . . ..
- Pactos relativos a sucesunu [uturas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
256
257
258
258
259
261
262
263
269
270
271
273
274
275
276
277
278
279
280
280
281
281
283
283
284
284
285
285
286
286
287
287
288
288
289
290
291
291
292
292
294
294
296
296
2\)7
~~)7
INDlCE
44:'
299
299
300
301
305
LA CAUSA. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Requisitos de la causa
- Causa real
- Causa ilcita . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Causa simulada
- Actos abstractos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Sancin de la causa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
305
312
312
313
314
315
316
LAs FORMALIDADES.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Solemnidades. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- El instrumento pblico. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- El instrumento prioado
- Presencia de un funcionario determinado ylo testigos
- Inscripciones en registros especiales. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Otras solemnidades
- Omisin de las solemnidades
Formalidades habilitantes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Menores
- Disipadores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Casos especiales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Omisin de las formalidades habilitantes
317
319
319
320
320
321
321
322
322
322
323
323
324
EFECTOS
326
326
326
327
328
Concepto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Partes y terceros . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Actos jurdicos unilaterales
Actos jurdicos bilaterales. Contratos
SANCIONES
CIVILES
Inexistencia
- Discusin del problema
- Conclusin
La nulidad
Generalidades
Nulidad absoluta . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Nulidad relativa. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Efectos de la nulidad
- Efectos de la nulidad entre las partes
- Excepciones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Electos de la nulidad respecto a terceros. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Acciones derivadas de la nulidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
329
329
331
335
335
335
338
341
344
345
346
347
,HH
446
INDICE
349
350
352
356
357
362
MOOALIDADES
363
363
363
364
365
365
366
366
366
366
366
367
369
370
371
374
375
375
375
376
376
377
377
378
379
379
380
380
380
380
- Concepto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
-Origen de las modalidades
- Actos que no admiten modalidades . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Clases de modalidades . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Carcter excepcional de las modalidades . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
La condicin
- Definicin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Elementos de la condicin
- Futuridad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Incertidumbre
- Clasificacin de las condiciones
- Estado en que pueden encontrarse las condiciones . . . . . . . . . . . . . ..
- ~lectos de la condicin suspensiva
- Efectos de la condicin resolutoria
- Pacto comisorio
- Accin resolutoria
El plazo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Concepto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Clasificacin de los plazos
- Expresos y tcitos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Plazos suspensioos y extintivos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Efectos del plazo suspensioo
- Efectos del plazo extintivo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Las asignaciones a da
- Cmputo del plazo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
El modo................................................
- Concepto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Reglas generales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- E/eclos del modo
LA REPRESENTACIN
EN LOS ACTOS]URDICOS
Concepto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Naturalezajuridica de la representacum . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Actos no susceptibles de representacin
Clases de representacin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Requisitos de la represeruacum . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Efectos de la representacion
Representacin sin mandato
381
381
381
383
383
385
38ti
gS7
TNDICE
447
Captulo VII
TEORIA DE LA PRUEBA
CONCEPTOS
GENERALES
Nociones y reglamentacin
- Ubicacin
- Definicin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Importancia y nociones generales
- Normas que regulan la prueba . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Objeto de la prueba
- Hechos y derecho
- Hechos y adcsjuridicos .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Clasificacin de los hechos
Peso de la prueba
- Norma general. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- La responsalnlidad. por los actos propios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Modificaciones al onus probandi . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Los
MEDIOS
DE LA PRUEBA
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
PBLICO
.....
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Definicin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Requisitos
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Instrumentos pblicos nulos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Valor probatorio del instrumento pblico
- Declaraciones dispositivas)' enunciativas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Originales y copias
- Instrumentos jJblicos otorgados en el extranjero
. . . . . . . . . . ..
Impugnacin del instrumento pblico
- Impugnacum por nulidad
- 1rnpugnacin j}()rlalLa de autenticidad
- lmpuenocion por falsedad de las declaraciones . . . . . . . . . . . . . . . ..
La escritura pblica.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Definicin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
- Requisitos
389
389
389
390
390
391
391
391
393
393
396
396
397
400
402
402
402
402
403
403
404
406
406
406
407
407
408
408
408
409
410
413
414
414
415
415
415
416
418
418
419
448
INDICE
- Copias
Documentos
"
420
421
422
422
423
423
424
424
LA PRUEBA DE TESTIGOS
424
424
425
427
protocolizados
'.
- Clasificacin de la confesin
- Casos en que no se admite la confesin
Valor probatorio de la confesin
"
427
428
429
429
LAs PRESUNCIONES
Presunciones legales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
Presunciones judiciales
"
- Condicioness valor probatorio de la presuncum judicial
"
430
430
430
431
INSPECCIN
431
432
PERSONAL
DEL TRIBUNAL
- Valor probatorio
INFORME
432
432
DE PERITOS
- Valor probatorio
OTROS
ELEMENTOS
DE PRUEBA
"
433
J",,,
00'893
ISBN 956-10-0189-6
~ EDITORIAL
IURlDICA
DE
CHILE
didctico