Los Adolescentes Los Adultos y Las Instituciones
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LOS ADOLESCENTES,
LOS ADULTOS Y LAS1
INSTITUCIONES
Silvia Baeza
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CONTENIDO
Sobre este publicacin.....2
Introduccin..5
Los Inicios...6
Las Tareas del Desarrollo...9
No ser que se aproximan nuevas premisas paradigmticas?......17
Infancias y Adolescencias22
El estilo de padre sobreviviente......24
El estilo de padre cmodo......25
El estilo de padre resignado............26
El estilo de padre contenedor..........27
El estilo de padre encapsulador......28
La Escuela........................................36
Las Posibilidades..38
Preguntarnos..41
Bibliografa..42
Sobre la autora..46
El Terapeuta Estpido Publicaciones48
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INTRODUCCIN.
El adolescente argentino hoy vive en una familia ms permisiva que
antao, con menor nmero de hermanos, la pareja de sus padres
puede cambiar varias veces durante su vida, su madre en general
trabaja fuera de la casa, chatea por computadora, escucha msica y ve
TV nacional y mundial durante largas horas, la sociedad que lo rodea
es ms tolerante ante su sexualidad y muy turbulenta en las
circunstancias sociales, econmicas, polticas que le toca atravesar.
Cules sern las influencias de estas caractersticas sobre su
desarrollo?
Y sobre sus padres y maestros?
Y sobre nuestras propias prcticas profesionales?
Ms interrogantes y dudas que certezas y respuestas.
Sin entrar en una tediosa y conocida historia del perodo que hoy nos
ocupa - la adolescencia- recorramos brevsimamente algunos hitos que
vale la pena tener en cuenta al iluminar esta etapa, tradicionalmente
considerada un perodo entre la niez y la edad adulta.
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LOS INICIOS.
Fue G. Stanley Hall quien por primera vez habl y cre el trmino
adolescencia en 1904. En nuestro pas cabe mencionar a Victor
Mercante en 1918 (La crisis de la pubertad y sus consecuencias
pedaggicas) y Anbal Ponce, en la dcada del treinta, autor cuyos
textos hemos estudiado quienes ya somos mayores (Ambicin y
angustia de los adolescentes) y Elena y Plcido Horas tambin
preocupados por los adolescentes, su insercin en la escuela y la tarea
psicopedaggica especfica que demandaban.
Por aquella poca esta etapa se extenda aproximadamente entre los
14 aos de comienzo y los 20 como final.
Los marcos tericos que intentaron explicarlos / comprenderlos
fueron predominantemente dos: el marco psicoanaltico y el
sociolgico.
El primero casi siempre a partir de la psicopatologa con un particular
nfasis en la tensin y el conflicto adolescente (Freud- Anna FreudPBlos- E.Erikson- A.Aberasturi).
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Creo que nos llevara meses, y tal vez no fuese una tarea muy fecunda,
definir claramente lo que queremos significar con cada una de estas
metas, tampoco s si lograramos consensuar y me pregunto si ser
esta la nica forma posible de verlo.
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NO SER QUE SE
APROXIMAN NUEVAS
PREMISAS
PARADIGMTICAS?
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En todo caso, parece necesario y esta vez si creo que fecundo, ampliar
la reflexin sobre la adolescencia, los adultos y las instituciones.
Cuatro ejes centrales guan mis reflexiones en torno al tema:
1. Nuestra poca postmoderna o de modernidad lquida, con su legado
de nuevas pobrezas, desilusin, desencanto y falta de proyecto de
muchos de nuestros adolescentes.
2. Las nuevas configuraciones familiares y su impacto sobre la
subjetividad de nios y jvenes.
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Zygmunt Bauman
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La generacin Odisea es un
concepto acuado por William
Galston, Investigador del
Brookings Institute of
Washington (2007).
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2. Existen investigaciones de
campo (Solowa,R. Premio
Nobel de Economa)que
muestran cmo las personas
que estn desocupadas por un
perodo mayor a un ao, se
retiran totalmente del mercado
de
trabajo, se retraen
socialmente porque hay un
marcado descenso de
la
autoestima
personal.
Ver
Kliksberg,B
en
Nuevas
direcciones en
el debate
mundial sobre la pobreza..
(Internet Nov. 2006).
INFANCIAS Y
ADOLESCENCIAS.
Claramente hay muchas y mltiples infancias y adolescencias. Hasta
hay o puede no haber espacios que puedan denominarse de esta
manera.
Nuevas son las subjetividades infantiles y juveniles y quienes
trabajamos con ellos debemos deconstruir unas y construir otras
representaciones de la infancia, la adolescencia y la juventud.
Los cambios en la familia actual han afectado profundamente a sus
miembros en sus vnculos, roles, funciones e interacciones cotidianas y
en su forma de insercin en la sociedad ms amplia.
La falta y precarizacin del trabajo y la subocupacin (de una mayora
de hombres) erosionan la autoestima y la dignidad personal [2]. Este
factor resuena negativamente en toda la familia y mucho de este
malestar se traslada a la escuela (media en especial).
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EL ESTILO DE
PADRE
SOBREVIVIENTE.
Se ubica en un polo de alta permisividad y tolerancia frente a los
lmites o reglas en general. Est sobrepasado por la situacin que
debe enfrentar y adopta una actitud pasiva, indiferente, sin posibilidad
de actuar, decidir y ejercer su autoridad. Zafa, como dirn los
mismos jvenes, pasa el momento.
Supone una alta y activa permisividad. Es un padre adolescente,
compinche y en competencia a veces con el hijo, con relaciones
democrticas/simtricas Esta desjerarquizacin acarrea falta de
lmites y excesiva flexibilidad en el sistema familiar, que asume una
lgica cultural postmoderna, como hemos planteado (Bauman, 2003).
Es interesante que en la investigacin, los mismos chicos manifestaran
incomodidad frente a este estilo, ya que no cumple con lo esperable
para el rol parental.
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EL ESTILO DE
PADRE CMODO.
El cmodo es permisivo desde una actitud pasiva hace como que no
sabe, no se involucra para no crearse problemas. No niega el
problema en su dimensin social pero no lo ve en su caso/hijo
particular.
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EL ESTILO DE
PADRE
RESIGNADO.
El resignado expresa un discurso contrario a la idea de permisividad
pero en los resultados deja hacer y considera que no est en sus manos
la solucin. Cuando su actitud es ms pasiva se vuelve cercano al
cmodo cuando su actitud es ms activa se acerca ms al cmplice.
Esta caracterstica de confusin y alternancia caracteriza su
comportamiento errtico, a veces catico.
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EL ESTILO DE
PADRE
CONTENEDOR.
El estilo contenedor, se enmarca en un punto medio del espacio de
permisividad, buscando cumplir una instancia de equilibrio .Es el tipo
que ms se acerca al imaginario juvenil ideal, cumple el rol mediador,
de paso al mundo adulto. Manifiesta un pensamiento crtico y aunque
valora el dilogo en este sistema se respetan los espacios de jerarqua,
autoridad y pautas claras. Los lmites actan como proteccin,
contencin y cuidado.
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EL ESTILO DE
PADRE
ENCAPSULADOR.
El encapsulador: se ubica en el grado de menor permisividad, que es
a su vez el grado de mayor prohibicin, con la idea de preservar a los
hijos de los riesgos del mundo. Predomina una actitud prohibicionista
activa (no porque no), que suele interferir el desarrollo de la
autonoma de los hijos.
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LA ESCUELA.
Desde la perspectiva de otras instituciones, una de ellas la escuela, ya
no se trata solamente de redefinir el contrato social de la escuela, ni
limitarse al contrato familia - escuela, es necesario incorporar otros
sistemas sociales que modelan y transmiten contenidos socializadores,
valores, normas y actitudes.
No profundizaremos aqu el llamado declive de la escuela, su desgaste.
S interesa rescatar la idea de escuela como horizonte de posibilidad en
red con el contexto mayor.
La sociedad de la informacin y del conocimiento trajo grandes
cambios. Si es el conocimiento la variable ms importante, su
produccin y manejo son insoslayables, y, no mirarlos como ejes del
proceso de aprendizaje, es enfrentar el riesgo de separar
definitivamente conocimiento y pensamiento como predijo Arendt.
Si la comunicacin y el manejo de la informacin son cada vez ms
importantes, la formacin a lo largo de la vida, de modos diversos y
flexibles, adquiere un significado central.
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LAS
POSIBILIDADES.
- Enfatizar la mirada sobre los nuevos agentes educadores y los nuevos
escenarios pedaggicos (los medios, las calles, los centros comerciales/
comunales, las plazas, los parques, la ciudad toda).
-Educar para la significacin, entendiendo por tal dar sentido, educar
a protagonistas activos capaces de expresarse en y a travs de muchos
lenguajes diferentes.
-Educar para una convivencia, que articule la participacin y el afecto,
el respeto y la apertura hacia el otro aunque sea diferente, permitiendo
tejer una trama de paz, tolerancia y aceptacin recproca. Entender al
prximo como prjimo y a uno mismo como sujeto de
responsabilidades y derechos, deberes y libertades.
-Discutir una autntica formacin tica y ciudadana desde edades
tempranas que permita en el tiempo adquirir la capacidad de
participar y elegir, combinando armnicamente la autonoma y la
solidaridad.
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PREGUNTARNOS.
-Si ser la escuela un sistema socializador en el futuro prximo,
-Si los docentes sern aquellos que trabajan en la escuela o comparten
su rol de educadores con otros agentes sociales (locutores,periodistas,
actores, educadores comunitarios, grupos de accin social, artistas)
- Cul es/ser el rol de los educadores annimos de hoy: la calle, la
tele, la noche.
-Si estimular la rivalidad y la competencia o negar la violencia no
significa no poder reflexionar y operar sobre ella.
- Si la clase de los excludos (la infraclase como la llama Bauman)
frente a la clase de los consumidores se modificar o inexorablemente
se agradar la brecha.
- Si podrn los analfabetos funcionales y los analfabetos tecnolgicos
tener alguna posibilidad de dejar de ser los excludos del sistema.
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BIBLIOGRAFA.
Arendt, H (1996) Entre el pasado y el futuro. Barcelona. Ed. Pennsula
Baeza, S. (a) (2003) Representaciones sociales y creencias
Rev.Aprendizaje Hoy Ao XXIII N 56, BsAs.
Baeza, S. (c) (2006) Las transformaciones de la familia Rev Signos
Universitarios (USAL).N Especial. 50 Aniversario Ao XXV
Baeza, S. (d) (2006). El imprescindible puente familia-escuela.
Buenos Aires. Ed Apendizaje Hoy.
Baeza, S. (2007). Las nuevas pobrezas. BsAs. Revista Aprendizaje
Hoy N XXVII N 68
Bauman, Z. (a) (2006). La vida lquida. Buenos Aires. Paids
Bauman, Z. (b) (2005). Amor lquido. Acerca de la fragilidad de los
vnculos humanos. Buenos Aires, Ed. Fondo de Cultura Econmica.
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SOBRE LA AUTORA
Silvia Baeza es Doctora en Psicologa, profesora titular de Psicologa
de la Familia y Clnica Psicopedaggica y Coordinadora Pedaggica de
la Maestra en Familia en la Facultad de Psicologa de la Universidad
del Salvador en Argentina, donde adems es Asesora Acadmica para
alumnos de programas de Intercambio Internacional.
Ha llevado un Entrenamiento especializado en Terapia Breve
Interaccional en el MRI de Palo Alto, adems de una Especializacin
en Terapia Familiar Estructural en el Minuchin Center for the
Family de Nueva York. Ha publicado dos libros: en el 2006, El
indispensable puente familia- escuela, y en el 2005,
Funcionamiento y clima relacional del aula, adems de un
centenar de artculos en distintas publicaciones del mundo.
Silvia aborda de forma sistmica su trabajo relacionando a la familia y
la escuela en la intervencin psicopedaggica. Su propsito es conectar
ambos sistemas
en una actitud cooperativo/colaborativa,
desarrollando un mtodo que ha resultado ser muy efectivo en estos
contextos. Indudablemente su enfoque le debe mucho a las novedades
tcnicas y estratgicas desarrolladas en psicoterapia. Ella misma
asegura que su intencin es utilizar estos recursos para ampliarlos en
contextos no clnicos, trabajando siempre con la intencin de
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