Surrealismo
Surrealismo
Surrealismo
Pintura surrealista
El Surrealismo comienza en 1924 en Pars con la publicacin del "Manifiesto Surrealista" de Andr
Breton, quien estimaba que la situacin histrica de
posguerra exiga un arte nuevo que indagara en lo ms
profundo del ser humano para comprender al hombre en
su totalidad.
Siendo conocedor de Freud pens en la posibilidad que
ofreca el psicoanlisis como mtodo de creacin
artstica.
Para los surrealistas la obra nace del automatismo puro,
es decir, cualquier forma de expresin en la que la mente
no ejerza ningn tipo de control. Intentan plasmar por
medio de formas abstractas o figurativas simblicas las
imgenes de la realidad ms profunda del ser humano, el
subconsciente y el mundo de los sueos. Para lo que
utilizan recursos como: animacin de lo inanimado,
aislamiento de fragmentos anatmicos, elementos
incongruentes, metamorfosis, mquinas fantsticas,
relaciones entre desnudos y maquinaria, evocacin del
caos, representacin de autmatas, de espasmos y de
perspectivas vacas. El pensamiento oculto y prohibido
ser una fuente de inspiracin, en el erotismo descubren
realidades onricas, y el sexo ser tratado de forma
impdica.
Se interesaron adems por el arte de los pueblos primitivos, el arte de los nios y de los dementes.
Preferirn los ttulos largos, equvocos, misteriosos, lo que significa que importaba ms el asunto
que la propia realizacin.
Ernst (1891-1979)
Lleg a ser uno de los principales exponentes del Surrealismo utilizando la tcnica del frotagge.
Consiste en frotar una mina de plomo o lpiz sobre un papel que se apoya en un objeto y se deja
as su huella en dicho papel, con todas sus irregularidades. Las imgenes surgidas aparecern
cargadas de misteriosas evocaciones, de signos de catstrofe y desolacin.
Ciudades, Europa despus de la lluvia.
Tanguy (1900-1985)
Representa sueos desligados a toda referencia a la realidad. Los horizontes, la sensacin de
infinito, la presencia de objetos misteriosos y sin correspondencia con la realidad objetiva y las
alusiones a signos sexuales caracterizan su obra consiguiendo provocar angustia y misterio. Unos
transportes; Das de lentitud; Mam, pap est herido.
Magritte (1898-1976)
Ofrece cierta similitud con Chirico, es uno de los surrealistas ms claramente simbolistas.
Provoca el choque emotivo de color aplicado a formas realistas puestas en lugares y momentos
inverosmiles. Realiza absurdas combinaciones de paisajes, arquitecturas, esculturas, ambientes
externos e internos. En El tiempo detenido muestra el interior de una habitacin en el que un tren
sale llameante de una chimenea domstica. La voz de los vientos es la premonicin de una
amenaza, un grupo de globos pesados que flotan y son smbolo de algo que puede aplastar.
Masson (1896-1987)
Analiza la estructura del objeto para convertirlo en una elucubracin intelectual. Parece que el
color, conjugado de modo personal y con una valoracin casi abstracta es lo que ms le importa.
Su modo es ms vital, sin la opresin angustiosa de la mayora de los surrealistas. Dibujo
automtico, Desnudo, nfora.
Chagall (1887-1985)
Presenta hechos sacados de la realidad pero dentro de un ambiente ensoador. Sus figuras vuelan
sobre el paisaje. Yo y la aldea, evoca una serie de elementos reales de su tierra natal (casas,
vacas...), pero la magia del sueo lo transmuta. La vaca acoge en su cabeza a una lechera
ordeando, la campesina puede andar con la cabeza en el suelo, etc.
Joan Mir (1893-1983)
"Me es difcil hablar de mi pintura, pues ella ha nacido siempre en un estado de alucinacin,
provocado por un shock cualquiera, objetivo o subjetivo y del cual soy enteramente irresponsable".
Es el mximo representante del surrealismo abstracto, aunque fue solamente una fase dentro de
su produccin.
Sus cuadros estn llenos de poesa. Pinta con colores puros y tintas planas. La obra clave en su
evolucin es El carnaval del arlequn (1924).
Crea un mundo propio que se abre paso a la abstraccin. Sus imgenes son simples, con pocos
trazos, a la manera de los nios. Rechaza la perspectiva, el modelado, el claroscuro y el acabado
minucioso. Traza signos abstractos, simples, que no tratan de expresar una idea, sino que desean
bastarse a s mismos y son extrados de lo irracional.
Personajes de noche, El bello pjaro descifra lo desconocido a una pareja de enamorados,
Naturaleza muerta con zapato viejo, Mujeres y pjaros en claro de luna.
Los aos de la guerra civil espaola y mundial lo alejaron de la aventura surrealista. Una de las
ltimas obras fue el revestimiento cermico del edificio de la UNESCO en Pars,Noche y da.
Salvador Dal (1904-1989)
Dal es ms escandaloso y extravagante de todo el grupo. Sus cuadros presentan figuras
imposibles fruto de su imaginacin.
Le caracteriza la provocacin y su mtodo "paranoico-crtico". Su primera etapa surrealista es
furiosa y cida, las formas se alargan, se descomponen o resultan de apariencia equvoca. Utilizar
alusiones al sexo y la paranoia. La sangre es ms dulce que la miel, La persistencia de la
memoria, El ngelus arquitectnico o Premonicin de la Guerra Civil.
Tambin son caractersticos sus relojes blandos, sus altas y destacadas figuras sobre un lejano
horizonte y las vistas de Cadaqus.
Ms adelante su estilo se har ms barroco en Leda atmica y en El Cristo de San Juan de la
Cruz, donde el sentido de la composicin y del espacio es ms clsico, pero siempre inquietante.
Su pintura resulta excepcional en sus calidades plsticas por la correccin en el dibujo y por la
presencia de la luz, transparente y limpia.
El Surrealismo se extender desde 1924 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial.
Orden y secciones de esta pgina
La pgina del SURREALISMO est ordenada por subsecciones que aparecen en la columna de la
izquierda.
Surrealismo. Pgina principal
Marc Chagall
Salvador Dal
Joan Mir
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sobre arte en Espaa y el mundo occidental de todos los tiempos.
Surrealismo
Retrato en "Vertumnus" (Verano) del emperador Rodolfo II realizado porGiuseppe Arcimboldo. Todos los frutos
y flores representados en el cuadro eran propios de la estacin del verano en el siglo XVI. Algunos
surrealistas vieron en l a un precursor.
Precedentes[editar]
Los surrealistas sealaron como precedentes de la empresa surrealista a varios
pensadores y artistas, como el pensador presocrtico Herclito, el Marqus de
Sade y Charles Fourier, entre otros. En la pintura, el precedente ms notable
esHieronymus Bosch "el Bosco", que en los siglos XV y XVI cre obras como "El
jardn de las delicias" o "El carro de heno". El surrealismo retoma estos elementos y
ofrece una formulacin sistemtica de los mismos. Sin embargo su precedente ms
inmediato es el dadasmo, corriente de la que retoma diferentes aspectos.
Primeros pasos[editar]
La primera fecha histrica del movimiento es 1916, ao en que Andr Breton,
precursor, lder y gran pensador del movimiento, descubre las teoras de Sigmund
Freud y Alfred Jarry, adems de conocer a Jacques Vach y a Guillaume Apollinaire.
Durante los siguientes aos se da un confuso encuentro con el dadasmo, movimiento
artstico precedido porTristan Tzara, en el cual se decantan las ideas de ambos
movimientos. Estos, uno inclinado hacia la destruccin nihilista (dad) y el otro a la
construccin romntica (surrealismo) se sirvieron como catalizadores entre ellos
durante su desarrollo.
En el ao 1924 Breton escribe el primer Manifiesto Surrealista y en este incluye lo
siguiente:
Indica muy mala fe discutirnos el derecho a emplear la palabra surrealismo, en el sentido
particular que nosotros le damos, ya que nadie puede dudar de que esta palabra no tuvo
fortuna, antes de que nosotros nos sirviramos de ella. Voy a definirla de una vez para
siempre:
Surrealismo: "sustantivo, masculino. Automatismo psquico puro, por cuyo medio se
intenta expresar, verbalmente, por escrito o de cualquier otro modo, el funcionamiento real
del pensamiento. Es un dictado del pensamiento, sin la intervencin reguladora de la
razn, ajeno a toda preocupacin esttica o moral."
Filosofa: "El surrealismo se basa en la creencia de una realidad superior de ciertas formas
de asociacin desdeadas hasta la aparicin del mismo, y en el libre ejercicio del
pensamiento. Tiende a destruir definitivamente todos los restantes mecanismos psquicos,
y a sustituirlos por la resolucin de los principales problemas de la vida.
Han hecho profesin de fe de Surrealismo Absoluto, los siguientes seores: Aragon,
Baron, Boiffard, Breton, Carrive, Crevel, Delteil, Desnos, Eluard, Gerard, Limbour, Malkine,
Morise, Naville, Noll, Peret, Picon, Soupault, Vitrac."
Tal fue la definicin del trmino dada por los propios Breton y Soupault en el
primer Manifiesto Surrealista fechado en 1924. Surgi por tanto como un movimiento
potico, en el que pintura y escultura se conciben como consecuencias plsticas de la
poesa.
Tcnicas surrealistas[editar]
Artculo principal: Tcnicas surrealistas
La pintura surrealista[editar]
Masson adopt enseguida las tcnicas del automatismo, hacia 1923-1924, poco
despus de conocer a Breton. Hacia 1929 las abandon para volver a un
estilo cubista. Por su parte, Dal utilizaba ms la fijacin de imgenes tomadas de los
sueos, segn Breton, ...abusando de ellas y poniendo en peligro la credibilidad del
surrealismo...; invent lo que l mismo llammtodo paranoico-crtico, una mezcla
entre la tcnica de observacin de Leonardo da Vinci, por medio de la cual,
observando una pared se poda ver cmo surgan formas y tcnicas de frottage; fruto
de esta tcnica son las obras en las que se ven dos imgenes en una sola
configuracin. scar Domnguez invent la decalcomana (aplicar gouache negro
sobre un papel el cual se coloca encima de otra hoja sobre la que se ejerce una ligera
presin, luego se despegan antes de que se sequen). Adems de las tcnicas ya
mencionadas de la decalcomana y el frottage, los surrealistas desarrollaron otros
procedimientos que incluyen igualmente el azar: el raspado, el fumage y la
distribucin de arena sobre el lienzo encolado.2
Mir fue para Breton el ms surrealista de todos, por su automatismo psquico puro.
Su surrealismo se desenvuelve entre las primeras obras donde explora sus sueos y
fantasas infantiles (El Campo labrado), las obras donde el automatismo es
predominante (Nacimiento del mundo) y las obras en que desarrolla su lenguaje de
signos y formas biomorfas (Personaje lanzando una piedra). Arp combina las tcnicas
de automatismo y las onricas en la misma obra desarrollando una iconografa de
formas orgnicas que se ha dado en llamar escultura biomrfica, en la que se trata de
representar lo orgnico como principio formativo de la realidad.
Ren Magritte dot al surrealismo de una carga conceptual basada en el juego de
imgenes ambiguas y su significado denotado a travs de palabras poniendo en
cuestin la relacin entre un objeto pintado y el real. Paul Delvaux carga a sus obras
de un espeso erotismo basado en su carcter de extraamiento en los espacios
deGiorgio de Chirico.
El surrealismo penetr la actividad de muchos artistas europeos y americanos en
distintas pocas. Pablo Picasso se ali con el movimiento surrealista en 1925; Breton
El surrealismo en la historia[editar]
En la literatura[editar]
El surrealismo tuvo como antecedente la patafsica de Alfred Jarry, y el movimiento
dadasta fundado en Zurich en 1916 por T. Tzara, H. Ball y H. Arp. Animados por
idntico espritu de provocacin, Andr Breton, Louis Aragon y Philippe
Soupaultfundaron en Pars la revista Littrature (1919), mientras en EE.UU
manifestaban actitudes similares Man Ray, Marcel Duchamp y Francis Picabia, y en
Alemania, Max Ernst y Hugo Ball.
A esta fase sucedi una actitud ms metdica de investigacin del inconsciente,
emprendida por Breton, junto a Aragon, Paul luard, Soupault, Robert Desnos, Max
Ernst, etc. La primera obra de esta tendencia, que cabe calificar de primera obra
literaria surrealista, fue Los campos magnticos (1921), escrita conjuntamente
por Breton y Soupault. Tras la ruptura con Tzara, se adhirieron al movimiento Antonin
Artaud, Andr Masson y Pierre Naville.
Breton redact la primera definicin del movimiento en su Manifiesto del
surrealismo (1924), texto que dio cohesin a los postulados y propsitos del
movimiento. Entre los autores que citaba como precursores del movimiento
figuran Freud,Lautramont, Edward Young, Matthew Lewis, Grard de
Nerval, Jonathan Swift, Marqus de Sade, Franois-Ren de Chateaubriand, Victor
Hugo, Edgar Allan Poe, Charles Baudelaire, Arthur Rimbaud, Mallarm y Jarry. En el
mismo ao se fund el Bureau de recherches surralistes y la revista La Rvolution
Surraliste, que sustituy a Littrature, de cuya direccin se hizo cargo el propio
Breton en 1925 y que se convirti en el rgano de expresin comn del grupo.
La produccin surrealista se caracteriz por una vocacin libertaria sin lmites y la
exaltacin de los procesos onricos, del humor corrosivo y de la pasin ertica,
concebidos como armas de lucha contra la tradicin cultural burguesa. Las ideas del
grupo se expresaron a travs de tcnicas literarias, como la escritura automtica,
las provocaciones pictricas y las ruidosas tomas de posicin pblicas. El
acercamiento operado a fines de los aos veinte con los comunistas produjo las
primeras querellas y cismas en el movimiento.
En 1930 Breton public su Segundo manifiesto del surrealismo, en el
que excomulgaba a Joseph Delteil, Antonin Artaud, Philippe Soupault, Robert Desnos,
Georges Limbour, Andr Masson, Roger Vitrac, Georges Ribemont-Dessaignes y
Francis Picabia. El mismo ao apareci el nuevo rgano del movimiento, la revista Le
La segunda guerra mundial paraliz toda actividad en Europa. Ello motiv que Breton,
como muchos otros artistas, marchase a los EE. UU.. All surgi una asociacin de
pintores surrealistas alemanes y franceses que se reuni en torno a la revista VVV.
Estos surrealistas emigrados a EE.UU. influyeron en el arte estadounidense, en
particular en el desarrollo delexpresionismo abstracto en los aos 1940. Cuando
Breton regres a Europa en 1946 el movimiento estaba ya definitivamente
deteriorado.
Entre los artistas plsticos se manifiesta una dualidad en la interpretacin del
surrealismo: los surrealistas abstractos, que se decantan por la aplicacin del
automatismo puro, como Andr Masson o Joan Mir, e inventan universos figurativos
propios; y los surrealistas figurativos, interesados por la va onrica, entre ellos Ren
Magritte, Paul Delvaux, o Salvador Dal, que se sirven de un realismo minucioso y de
medios tcnicos tradicionales, pero que se apartan de la pintura tradicional por la
inusitada asociacin de objetos y las monstruosas deformaciones, as como por la
atmsfera onrica y delirante que se desprende de sus obras. Max Ernst es uno de los
pocos surrealistas que se mueve entre las dos vas. La obra de Ernst ha influido
particularmente en un epgono tardo del surrealismo en Alemania que es Stefan von
Reiswitz.
Cabeza de Luis Buuel, obra del escultor Iaki, en el Centro Buuel deCalanda.
Luis Buuel, en colaboracin con Dal, realiz las obras ms revolucionarias: Un perro
andaluz (Un chien andalou, 1928) y La edad de oro (L'ge d'or, 1930).
Alfred Hitchcock y Salvador Dal colaboraron cuando el primero encarg al artista
cataln parte de la escenografa de Recuerda (Spellbound).
Cineastas contemporneos, como David Lynch, Jean-Pierre Jeunet, Julio Mdem,
oCarlos Atanes, entre otros, muestran la influencia del surrealismo.
Vase tambin[editar]
Historia:
La actitud irracionalista del movimiento dad deriv hacia un intento de mayor
envergadura.Andr Breton aseguraba que la situacin histrica de postguerra, exiga un
arte nuevo que se esforzara por indagar en lo ms profundo del ser humano. Bretn haba
contactado con las doctrinas de Freud, fundador del psicoanlisis, y entendi que la
palabra escrita descurre tan de prisa como el pensamiento y que las ensoaciones y
asociaciones verbales automticas podan ser mtodos de creacin artstica.
El Surrealismo trata de plasmar el mundo de los sueos y de los fenmenos
subconscientes. Este sector recndito del ser humano se considera apto para el anlisis
artstico. Breton intenta descubrir las profundidades del espritu. As lo pone de relieve en
su Primer Manifiesto del Surrealismo (1924): "Creo en el encuentro futuro de esos dos
estados, en apariencia tan contradictorios, como son el sueo y la realidad, en una especie
de realidad absoluta, de surrealidad". El Surrealismo no slo afect al mundo de la pintura,
sino tambin al cine, la fotografa, el teatro, la poesa... . El resultado es un mundo
aparentemente absurdo, algico, en el que los fenmenos del subconsciente escapan al
dominio de la razn.
Haba precedentes artsticos: El Bosco, Brueghel y Goya
Caractersticas generales:
Animacin de lo inanimado
Metamorfosis
Mquinas fantsticas
Elementos incongruentes
Perspectivas vacas
Autmatas
Espasmos
Representantes:
Surrealismo
Movimiento vanguardista que surge en 1924, con tres
hechos principales: la publicacin de un Manifiesto, la
fundacin
de
una
Oficina
de
Investigaciones
Surrealistas y la aparicin de un diario, " La revolucin
surrealista".
Influidos por las ideas de Freud sobre el inconsciente y
bajo la direccin de Andr Bretn, los surrealistas
utilizaban el automatismo psquico como mtodo de
creacin; ste consista en dejar expresar libremente el
pensamiento sin tener preocupaciones estticas o
morales sobre el resultado.
Para estos artistas, un pensamiento libre se asociaba
con la revolucin, y sta, a su vez, con el socialismo.
Otras tcnicas que ocupaban los surrealistas eran las de apropiarse las imgenes provenientes de los
sueos y traducirlas en sus obras, y hacer asociaciones sorprendentes entre objetos o situaciones que
aparentemente no tenan relacin alguna.
El fin de todo esto, como deca Bretn, era llegar a un punto donde no se percibiera como
contradiccin la vida y la muerte, arriba y abajo, blanco y negro, etc.
Publicado: septiembre 30, 2012 | Autor: Demian Paredes | Archivado en: Andre Breton, Artes, Len
Trotsky,Literatura, Poltica, Surrealismo | Tags: andr breton, Len Trotsky, Surrealismo |Deja un comentario
criticar la sociedad capitalista, a criticar la alienacin, la cosificacin del ser humano y la razn
instrumental y cuantificadora del sistema.
Lo que llevar a un posicionamiento poltico explcito a los surrealistas ser la Guerra de Marruecos
(1911-1926). En 1925, la redaccin completa de La revolucin surrealista, a pedido de la revista
que editaba el PC desde 1920, Clart, se sumar a la condena de los imperialismos espaoles y
franceses que masacraban a las tribus rifeas.
4
En 1927 Breton y la mayora de los surrealistas se afiliarn al PC, donde la cuestin de la
Revolucin Rusa ya est presente, y donde Breton y los dems surrealistas quedarn impactados
nada menos que con un libro incompleto o inacabado de Trotsky: Lenin: una coleccin de
siluetas del gran revolucionario, que funcionan adems como una gran discusin ante el
comienzo del culto a la personalidad, a la utilitaria glorificacin de Lenin, y a una lucha por la
sucesin del poder en el Estado obrero.
Dijo Paul luard en una carta a Breton: Este libro es uno de los ms grandes que jams haya
ledo. Breton, en una resea en 1925, cuando se publica Lenin, escribir: jurara que nada falta
all, ni en perfeccin ni en grandeza (La Rvolution surreliste N 5, 15 de octubre de 1925).
Breton se afiliar entonces como lo explica en el folleto A plena luz, reservndose su derecho a
la crtica.
Y la resea de 1925 no ser la nica expresin de la relacin Breton-Trotsky: ya el Segundo
Manifiesto publicado en 1930; y donde se postula el objetivo de arruinar las ideas de familia,
patria, religin, plantear el acuerdo de Breton con Literatura y revolucin, obra de Trotsky que
plantea la libertad de tendencias y escuelas artsticas en el Estado obrero, sin necesidad de
oficializar ninguna, y donde problematiza el tema de los llamados cultura y el arte proletarios, al
mismo tiempo que discute con otras corrientes, tanto las experimentales como las
tradicionalistas.
5
En 1935 Breton y la mayor parte de los surrealistas excepto los notables Luis Aragon y Paul
luard, que seguirn subordinados al stalinismo rompern con el PC burocratizado (ya un ao
antes un grupo de surrealistas haban publicado un folleto llamado Plantea sin visado ttulo de un
captulo de la autobiografa de Trotsky, Mi vida, en protesta por la expulsin de Trotsky de
Francia).
En 1936, cuando comienzan los Juicios de Mosc (las farsas de juicios donde el stalinismo liquida
a toda la vieja guardia bolchevique, y a diversos opositores polticos), Breton declar que Trotsky
es injustamente acusado, y que l representa una gua intelectual y moral de primer orden y cuya
vida, desde que est amenazada, nos es tan preciada como la nuestra).
Y, en 1938, el autor de Los vasos comunicantes visitar Mxico, quedndose unos 4 meses junto a
Len Trotsky; experiencia de la que finalmente surgir, a poco de comenzar la Segunda Guerra
Mundial, la FIARI (Federacin Internacional de Artistas Revolucionarios Independientes) y el
manifiesto Por un arte revolucionario independiente.
All el Manifiesto contiene un clebre pasaje que, tras la defensa del Estado obrero ruso, plantea:
Si para desarrollar las fuerzas productivas materiales, la revolucin tiene que erigir un rgimen
socialista de plan centralizado, en lo que respecta a la creacin intelectual debe desde el mismo
comienzo establecer y garantizar un rgimen anarquista de libertad individual. Ninguna autoridad,
ninguna coaccin, ni el menor rastro de mando!.
6
Aunque el desarrollo de la guerra trunc la posibilidad de desarrollo de este proyecto, ms all de
algunos contactos entre Europa y Amrica y algunas revistas (adems, Trotsky haba sido
asesinado en 1940), Breton seguir siempre reconociendo el valor de la figura de Trotsky. Al poco
tiempo de su regreso de Mxico, en un mitin del PCI, deca a propsito de su viaje a Mxico: Yo
me representaba a ese hombre que fue el jefe de la revolucin de 1905, uno de los cerebros de la
revolucin de 1917, no solamente como hombre que ha puesto su genio y todas sus fuerzas vivas
al servicio de la causa ms grande que yo conozco, sino tambin el testimonio nico, el historiador
profundo cuyas obras hacen ms que instruir, porque le dan al hombre deseos de sublevarse. Me
lo imagino al lado de Lenin y, ms tarde, solo, siguiendo la defensa de su tesis, la tesis de la
revolucin en el seno de congresos falsificados. Lo veo solo, de pie entre sus compaeros
ignominiosamente vencidos, solo, atormentado con el recuerdo de sus cuatro hijos a los que han
matado. Acusado del peor crimen que pueda ser para un revolucionario, amenazado en todas las
horas de su vida, librado al odio ciego de aquellos incluso a los que se consagr [...].
Tras la muerte de Natalia Sedova, la compaera de Trotsky, en 1962, entre otras cosas, a modo de
homenaje, Breton dijo que, finalmente, habr una revisin radical de la historia revolucionaria de
estos ltimos cuarenta aos, historia cnicamente deformada y donde no solamente se haga
completa justicia a Trotsky, sino que tambin alcancen todo su vigor y amplitud las ideas por las
que dio su vida.
Breton, adems de dar una incendiaria conferencia en Puerto Prncipe (Hait) en diciembre de
1945, en la dcada de 1950 mantendr relaciones junto a los surrealistas con los anarquistas, y
participar activamente de la defensa de la Argelia insurrecta contra el imperialismo francs, y en el
Mayo del 68 tambin. Su obra (manifiestos, escritos novelas, poesas y discursos) es una parte
fundamental de las histricas vanguardias artsticas. Como postul el mismo Breton en aquel
Congreso de Escritores de 1935, donde rompe con el stalinismo, Transformar el mundo, dijo
Marx; cambiar la vida, dijo Rimbaud: estas dos consignas para nosotros no son ms que una.
7
Michel Lwy, en El marxismo libertario de Andr Breton, escribi lo siguiente:
Breton sigue siendo un irrecuperable. Su inmenso proyecto necesariamente inacabado de
fusin alqumica entre el amor loco, la poesa de lo maravilloso y la revolucin social es inasimilable
para el mundo burgus y filisteo. Permanece irreductiblemente opuesto a esta sociedad y tan duro
de roer como un hueso un hermoso hueso, semejante a los que los indgenas de las islas
Salomn llena de inscripciones e imgenes atravesado en el gaznate capitalista.
***
El presente trabajo se propone, establecer un vnculo entre el movimiento surrealista fundado por el poeta y
crtico francs Andr Breton que lanza su primer manifiesto en 1924 y el movimiento poltico y social
anarquista que nace en el siglo XXI y cuyo principal exponente es Pierre Joseph Proudhon, llamado el "padre
del anarquismo", junto con tericos como: Mijail A. Bakunin, Piotr Kropotkin, Enrico Malatesta, etc.
El acercamiento entre ambos movimientos tiene lugar en la vida cultural y poltica de Francia en la dcada del
50, a travs del peridico de la Federacin Anarquista "Libertaire", de tirada semanal, en el cual los
surrealistas colaboraban.
Es menester aclarar, que los militantes anarquistas ms rgidos, no consideraban viable la fusin entre
anarquistas y surrealistas, ya que, sostenan que eran grupos completamente heterogneos, y no lograban
comprender el arte surrealista, postulando la necesidad de un arte realista, concreto y popular. Mientras que,
el resto de militantes consideraba que el surrealismo era el arte oficial del anarquismo.
Es el 12 de octubre de 1951, cuando el peridico "Le Libertaire" publica el primer manifiesto producido por la
fusin entre anarquistas y surrealistas, titulado "Surrealismo y anarquismo: Declaracin preliminar", en el cual
pretenden unificar todas las manifestaciones revolucionarias, de manera tal, que ninguna se encuentre aislada
ni sometida a una jerarqua arbitraria.
Asimismo critican al conjunto tridico "Estado-Trabajo-Religin", que impiden la liberacin del hombre. Por
consiguiente, proclaman abolir todos los regmenes polticos (capitalistas, democracias burguesas,
colonialismos, totalitarismos ya sea, nazi o stalinista, etc.). De manera tal, que luego de la cada del Estado,
solo quede la accin autnoma de los trabajadores.
Ahora bien, Cul es la funcin que cumple el movimiento surrealista en esta empresa anarquista?, la
actividad que se proponen los surrealistas, es la de transformar las estructuras mentales en el campo
sensible. Esto quiere decir, que otrora, el arte era meramente mimtico. Un arte espejo, donde
la clase burguesa se miraba. Muy por el contrario, el surrealismo plantea un cambio radical en la cultura.
Pero este viraje es posible gracias a la figura insoslayable de Sigmun Freud, que al desvelar el mecanismo del
sueo demuestra que ste esta constituido de los deseos secretos del hombre.
Es por ello, que el sueo de ningn modo es gratuito, sino ms bien, el hombre a travs del sueo trata de
cambiar su destino. Al respecto, el poeta surrealista, Jean Schuster dijo: "(...)Si el sueo es la expresin del
deseo (...) Cuando, una noche, todos los explotados sueen que es preciso terminar y cmo terminar con
el sistema tirnico que los gobierna, entonces, tal vez, la aurora surgir en todo el mundo, sobre las
barricadas."
Podemos apreciar que el poder transformador no esta en la Razn, sino mas bien, en la imaginacin. Dicho
de otro modo y aludiendo al slogan surrealista "La imaginacin es poder".
Con el fin de devolver sus derechos a la imaginacin y al sueo, los surrealistas experimentaron tcnicas en
las que el juego y el azar favorecan el surgimiento de la imagen mediante la libre asociacin de elementos no
premeditados, un ejemplo de este tipo es la obra "El cadver exquisito", creacin colectiva en la que
un individuo participa sin conocer la frase o el dibujo que ha hecho otro.
Asimismo, otra tcnica utilizada por los poetas surrealistas es la llamada "escritura automtica", la cual
consista en transmitir tal cual surgen las ideas de la mente, sin reflexionarlas y sin tener un tema preciso, y
plasmarlas directamente al poema. Estas frases procedan directamente del subconsciente y no tenan
coherencia lgica entre s. Dichas tcnicas son innovaciones del grupo.
Estamos en presencia de un nuevo tipo de artista, un artista revolucionario, que toma conciencia de
su naturaleza y de su lugar en el mundo. Sobre este punto, dejemos hablar al poeta surrealista Benjamn
Pret, quien aludiendo a la figura del poeta nos dice: "(...), el poeta lucha contra toda opresin: la del hombre
por el hombre, inicialmente, y la opresin de su pensamiento por los dogmas religiosos, filosficos o sociales.
l combate para que el hombre alcance un conocimiento siempre perfectible de s mismo y del universo (...)
Su cualidad de poeta hace de l un revolucionario que debe combatir en todos los terrenos: el de
la poesa por los medios propios de sta y en el terreno de la accin social".
Parece ser que la accin revolucionaria y la creacin potica se reducen, en ltima instancia, a un mismo fin
de orden moral, que no es otra cosa, que alcanzar la felicidad y hacer de ella una realidad para todos los
hombres.
As como en la Grecia arcaica el poeta, aedo, puede ver (Del latn vidre) la verdad revelada por los dioses;
en este marco Anarco-surrealista, el poeta tambin puede ver la verdad, ya no divina, sino revelada en el
mundo de los sueos y trasmitirla a los hombres, para que estos, saquen provecho de ella y puedan cambiar
su vida. No obstante, este cometido ser posible, si y solo si, existe libertad, como modo de garantizar poesa
autentica, esto quiere decir, liberada de toda carga religiosa y rgimen dictatorial.
A diferencia del arte comprometido y libertario que postulan los surrealistas, El arte moderno, es un arte
sumiso, tal como dice el poeta surrealista, Adrien Dax: "(...) un arte que podramos perdonar por ser un objeto
de lujo, si muy frecuentemente no se hiciese cmplice de una moral y de una religin que justifican la
esclavizacin de los hombres (...)". Estamos en presencia de un arte de tipo moralizante, de exaltacin blica,
retratista oficial, que no es otra cosa, que propagandista poltico. En cuyo seno, el artista, no es autnomo,
sino ms bien, se encuentra sometido al poder.
Dicho arte, impone al hombre "deberes" sociales, exaltando el trabajo esclavo y la productividad, a travs de
sus obras. Es por ello, que es un mero medio poltico.
Contrario a esto, los surrealistas sostienen que el arte no es un medio para..., sino que el arte es un fin en s
mismo, esto quiere decir, que el arte se basta a s mismo. En consecuencia, los anarco-surrealistas se
preguntan cul es la utilidad social que pueden tener tales obras alineadas. A dicho interrogante, responde
Adrien Dax: "(...) A quin se har creer que, salido de su pozo, el minero sienta an necesidad de contemplar
las escenas de un trabajo que conoce exhaustivamente? Placer de reconocerse, discutir el detalle que
"parece verdadero"? Semejante espritu de adulacin es en s mismo bastante enojoso, y tambin se habr de
convenir que es limitar singularmente el alcance de una obra de arte".
Siguiendo esta lnea de anlisis, Jos Pierre tambin cuestiona, esta limitacin, subordinacin del arte al
poder poltico y su respectivo inters, que no es otro que la adulacin de la masa trabajadora. Al respecto nos
dice: " (...) La lechera manipulando sus vasijas? Ella lo hace todos los das! As, terminado su trabajo, le
sera todava necesario verse en el trabajo, all, en la pared?, Ustedes conocen a muchos trabajadores que
ornamentaran su cuarto o su cocina con una foto que los representara en pleno trabajo? Antes el calendario
del correo! Una imagen de infancia, de casamiento, de vacaciones, las alegras que garantizan todava la
vida, las situaciones en las que todava se es s mismo, libre de las opresiones que lo rebajan. Entonces,
esas telas? Terminarn en algn lujoso comedor burgus adonde, a su manera, pondrn una nota inslita,
una nota de sorpresa, de exotismo".
Como bien dijo Jos Pierre, la finalidad de estas obras es la contemplacin por parte del seor burgus que
observa en la obra de arte una cultura, que no le es propia, alejado completamente del estilo de vida, de la
realidad que observa en el cuadro, siente placer, justamente porque l no se ve afectado por dicha realidad.
Mientras que el obrero, el campesino sufren ante la misma, generndoles displacer, porque dicho arte refleja
el sufrimiento de la masa laboriosa y no hace otra cosa que primar el trabajo, antes que la liberacin
del hombre. Aludiendo a esto, Jos Pierre dice: "(...) observe qu buen tema es usted para un cuadro, se dice
al trabajador, observe su imagen; pues bien, se trata de permanecerle fiel: Trabaje! ".
Amn de todos los ideales surrealistas hasta aqu postulados, a saber, la lucha contra el Estado,
el trabajo esclavo y la religin, es comprensible el lazo que se establece con el movimiento revolucionario
anarquista, quienes exaltaban las mismas ideas. Es por ello, que Andr Breton insiste en esta identidad, tal
como dice en su proclama titulada "La clara torre": "(...) Fue en el negro espejo del anarquismo donde
el surrealismo se reconoci por primera vez, mucho antes de definirse a s mismo y cuando era apenas una
asociacin libre de individuos, que rechazaban espontneamente y en bloque las opresiones sociales y
morales de su tiempo". El presente isomorfismo en cuanto al pensamiento de ambos movimientos, permite
la fusin de los mismos, y juntos promueven un mundo Libertario o un mundo surrealista, que en ultima
instancia, son la misma cosa.
Al cabo de diez meses de colaboracin surrealista en Le Libertaire, Jean Schuster
establece un primer balance, en "El sentido de un encuentro" en donde reitera la adhesin de los surrealistas
a los ideales de la Federacin Anarquista, dejando en claro, que el movimiento surrealista y anarquista deben
operar en campos diferentes, el primero en terreno del espritu y la sensibilidad, en aras de una
transformacin de las estructuras mentales y el segundo en terreno de la accin directa, preparando
la revolucin social.
El balance realizado por Jean Schuster, genera polmica, en el punto, en que sostiene que todos
los problemas de dominio intelectual, sensible o espiritual son tan importantes como los problemas sociales,
sobre valorando la actividad realizada por los surrealistas en dicho campo y subestimando el accionar
anarquista, que solo opera en el campo social, sin tomar concienciade que la revolucin debe ser total.
A raz de esta controversia desatada, un grupo de militantes anarquistas establece un dilogo con Jean
Schuster, a travs de la proclama "El verdadero sentido de un encuentro", en el mismo acusan a los
surrealistas de no ser militantes polticos, ya que no son fieles a los mtodos y el accionar de la federacin
anarquista. Seguidamente, denuncian el esoterismo surrealista, postulando la necesidad de un arte sencillo y
accesible a todos.
Finalmente, los militantes anarquistas dejan en claro que el artista que se apasiona por la revolucin y toma
partido en ella, empero no posee un status superior que el resto de los camaradas, ni se diferencia de estos
por su condicin de artista.
La ruptura era inminente. La colaboracin surrealista en Le Libertaire se extendi
apenas unos cinco meses ms y el punto de ruptura se produjo durante una reunin entre Andr Breton,
Benjamn Pret, Jean Schuster, Jean-Louis Bdouin y Adonis Kyrou en representacin de los surrealistas, y
Georges Fontenis, Serge Nin y Pal Zorkine en representacin de los anarquistas. A pesar de ello, los
surrealistas continuaron participando en actividades organizadas por los anarquistas, ya sea hablando de
anarquismo en sus nuevas publicaciones, e incluso, en algunos casos, militando en el movimiento anarquista.
A modo de conclusin, cabe preguntarse por qu la identificacin del surrealismo y el anarquismo no pudo ser
total y slo se trato de encuentros, tal vez se deba a una cuestin de poder por parte del movimiento
surrealista, que en esencia era anarquistas, pero nunca se sometieron a las doctrinas del partido. Para
finalizar, Andr Bretn tambin se pregunta: "(...) Por qu no pudo, en ese momento, operarse una fusin
orgnica entre elementos anarquistas, propiamente dichos, y elementos surrealistas? Todava, veinte aos
despus, me lo estoy preguntando".
Bibliografa Especfica
A modo de eplogo
Theodore Adorno detestaba el jazz. Sin embargo, valoraba la capacidad de
sorprender musicalmente y defenda tal concepcin con mpetu. Para ello
podemos valernos de una ancdota, que ilustra un modo de pensar la
msica.
La ancdota lleg por boca de Eduardo Rinesi, fantico de la Escuela de
Frankfurt y profesor de sociologa en la UBA. Sin revelar nunca la fuente,
(porque l tampoco la saba, sospecho), nos contaba el relato de un alumno
que le haba comunicado efusivamente a Adorno que acababa de crear una
pieza musical perfecta. A semejante aseveracin, Adorno le pregunt si se
la poda tararear. El alumno, muy emocionado, le contest, obviamente, que
s, que no tendra problema. "Entonces, mi amigo, si puede tararearla
Musica surrealista
-Origen y uso: Msica que utiliza yuxtaposiciones inesperadas y otras tcnicas
surrealistas.
-Anne Lebaron : una estadounidense compositora y arpista, cita el
automatismo,incluyendo la improvisacin y el collage como las principales tcnicas de la
msica surrealista.
- Principales compositores: En la dcada de 1920 varios compositores fueron
influenciados por elsurrealismo, los dos compositores ms asociados fueron:
Erik Satie: Compositor francs, nacido en Honfleur (Normanda). Estudi en el
Conservatorio de Pars y trabaj como pianista en un caf. Entre 1880 y1890 compuso
numerosas obras para piano, entre las que destacan Gymnopdies (1888) y Gnossiennes
(1890). Convencido de que sus conocimientos de contrapunto no eran suficientemente
slidos, cuandotena 40 aos decidi volver a estudiar con los compositores franceses
Vincent d'Indy y Albert Roussel en la Schola Cantorum. Regres a la composicin,
bsicamente con obras para piano, a menudo conttulos surrealistas que parecan guardar
poca relacin con la msica, como, por ejemplo, Prludes flasques pour un chien (1913),
Sonatine burocratique (1917) y 3 morceaux en forme de poire (1903, parapiano a cuatro
manos) y que realmente son seis piezas para piano. Rebelde contra el carcter plmbeo y
la complejidad de la msica de su tiempo e innovador en el uso de ciertos recursos
armnicos, marcla tendencia futura de la msica francesa. Escribi la msica para el
ballet Parade.
George Antheil: Compositor estadounidense, Naci el 8 de julio de 1900 en
Trenton, Nueva Jersey (Estados Unidos). En 1921 parti a Europa donde desempe un
papel importante dentro de la vanguardia musical francesa. El 4 de octubre de 1924,
estrena su msica de vanguardia ante el pblico en Pars. A su regreso asu pas, en 1933,
trabaj para diferentes compaas de cine como compositor y productor asociado. Entre
sus obras destacan el Ballet mcanique (1925), en cuya partitura se oyen hlices de avin
y...
Andr Breton
Primer manifiesto surrealista [1924].
El clsico texto de Andr Breton que acompa la fundacin del movimiento surrelista.
Publicado durante la dcada de 1920, tuvo un fuerte impacto sobre el desarrollo
esttico contemporneo.
o la otra... Todos sabemos que los locos son internados en mritos de un reducido
nmero de actos reprobables, y que, en la ausencia de estos actos, su libertad (y la
parte visible de su libertad) no sera puesta en tela de juicio. Estoy plenamente
dispuesto a reconocer que los locos son, en cierta medida, vctimas de su imaginacin,
en el sentido que sta le induce quebrantar ciertas reglas, reglas cuya transgresin
define la calidad de loco, lo cual todo ser humano ha de procurar saber por su propio
bien. Sin embargo, la profunda indiferencia de los locos dan muestra con respecto a la
crtica de que les hacemos objeto, por no hablar ya de las diversas correcciones que les
infligimos, permite suponer que su imaginacin les proporciona grandes consuelos, que
gozan de su delirio lo suficiente para soportar que tan slo tenga validez para ellos. Y,
en realidad, las alucinaciones, las visiones, etctera, no son una fuente de placer
despreciable. La sensualidad ms culta goza con ella, y me consta que muchas noches
acariciara con gusto aquella linda mano que, en las ltimas pginas de LIntelligence,
de Taine, se entrega a tan curiosas fechoras. Me pasara la vida entera dedicado a
provocar las confidencias de los locos. Son como la gente de escrupulosa honradez,
cuya inocencia tan slo se pude comparar a la ma. Para poder descubrir Amrica,
Coln tuvo que iniciar el viaje en compaa de locos. Y ahora podis ver que aquella
locura dio frutos reales y duraderos.
No ser el miedo a la locura lo que nos obligue a bajar la bandera de la imaginacin.
Despus de haber instruido proceso a la actitud materialista, es imperativo instruir
proceso a la actitud realista. Aqulla, ms potica que sta, desde luego, presupone en
el hombre un orgullo monstruoso, pero no comporta una nueva y ms completa
frustracin. Es conveniente ver ante todo en dicha escuela bienhechora reaccin contra
ciertas risibles tendencias del espiritualismo. Y, por fin, la actitud materialista no es
incompatible con cierta elevacin intelectual.
Contrariamente, la actitud realista, inspirada en el positivismo, desde Santo Toms a
Anatole France, me parece hostil a todo gnero de elevacin intelectual y moral. Le
tengo horror por considerarla resultado de la mediocridad, del odio, y de vacos
sentimientos de suficiencia. Esta actitud es la que ha engendrado en nuestros das esos
libros ridculos y esas obras teatrales insultantes. Se alimenta incesantemente de las
noticias periodsticas, y traiciona a la ciencia y al arte, al buscar halagar al pblico en
sus gustos ms rastreros; su claridad roza la estulticia, y est a altura perruna. Esta
actitud llega a perjudicar la actividad de las mejores inteligencias, ya que la ley del
mnimo esfuerzo termina por imponerse a stas, al igual que a las dems. Una
consecuencia agradable de dicho estado de cosas estriba, en el terreno de la literatura,
en la abundancia de novelas. Todos ponen a contribucin sus pequeas dotes de
observacin. A fin de proceder a aislar los elementos esenciales, M. Paul Valry
propuso recientemente la formacin de una antologa en la que se reuniera el mayor
nmero posible de novelas primerizas cuya insensatez esperaba alcanzase altas cimas.
En esta antologa tambin figuraran obras de los autores ms famosos. Esta es una
idea que honra a Paul Valry, quien no hace mucho me aseguraba, en ocasin de
hablarme del gnero novelstico que siempre se negara a escribir la siguiente frase: la
marquesa sali a las cinco. Pero, ha cumplido la palabra dada?
Si reconocemos que el estilo pura y simplemente informativo, del que la frase antes
citada constituye un ejemplo, es casi exclusivo patrimonio de la novela, ser preciso
reconocer tambin que sus autores no son excesivamente ambiciosos. El carcter
circunstanciado, intilmente particularista de cada una de sus observaciones me induce
a sospechar que tan slo pretenden divertirse a mis expensas. No me permiten tener
siquiera la menor duda acerca de los personajes: ser este personaje rubio o moreno?
Cmo se llamar? Le conoceremos en verano...? Todas estas interrogantes quedan
resueltas de una vez para siempre, a la buena de Dios; no me queda ms libertad que
la de cerrar el libro, de lo cual no suelo privarme tan pronto llego a la primera pgina
de la obra, ms o menos. Y las descripciones! En cuanto a vaciedad, nada hay que se
les pueda comparar; no son ms que superposiciones de imgenes de catlogo, de las
que el autor se sirve sin limitacin alguna, y aprovecha la ocasin para poner bajo mi
vista sus tarjetas postales, buscando que juntamente con l fije mi atencin en los
lugares comunes que me ofrece:
La pequea estancia a la que hicieron pasar al joven tena las paredes cubiertas de
papel amarillo; en las ventanas haba geranios y estaban cubiertas con cortinillas de
muselina, el sol poniente lo iluminaba todo con su luz cruda. En la habitacin no haba
nada digno de ser destacado. Los muebles de madera blanca eran muy viejos. Un
divn de alto respaldo inclinado, ante el divn una mesa de tablero ovalado, un lavabo
y un espejo adosados a un entrepao, unas cuantas sillas arrimadas a las paredes, dos
o tres grabados sin valor que representaban a unas seoritas alemanas con pjaros en
las manos... A eso se reduca el mobiliario.(1)
No estoy dispuesto a admitir que la inteligencia se ocupe, siquiera de paso, de
semejantes temas. Habr quien diga que esta parvularia descripcin est en el lugar
que le corresponde, y que en este punto de la obra el autor tena sus razones para
atormentarme. Pero no por eso dej de perder el tiempo, porque yo en ningn
momento he penetrado en tal estancia. La pereza, la fatiga de los dems no me
atraen. Creo que la continuidad de la vida ofrece altibajos demasiado contrastados
para que mis minutos de depresin y de debilidad tengan el mismo valor que mis
mejores minutos. Quiero que la gente se calle tan pronto deje de sentir. Y quede bien
claro que no ataco la falta de originalidad por la falta de originalidad. Me he limitado a
decir que no dejo constancia de los momentos nulos de mi vida, y que me parece
indigno que haya hombres que expresen los momentos que a su juicio son nulos.
Permitidme que me salte la descripcin arriba reproducida, as como muchas otras.
Y ahora llegamos a la psicologa, tema sobre el que no tendr el menor empacho en
bromear un poco.
El autor coge un personaje, y, tras haberlo descrito, hace peregrinar a su hroe a lo
largo y ancho del mundo. Pase lo que pase, dicho hroe, cuyas acciones y reacciones
han sido admirablemente previstas, no debe comportarse de un modo que discrepe,
pese a revestir apariencias de discrepancia, de los clculos de que ha sido objeto.
Aunque el oleaje de la vida cause la impresin de elevar al personaje, de revolcarlo, de
hundirlo, el personaje siempre ser aquel tipo humano previamente formado. Se trata
de una simple partida de ajedrez que no despierta mi inters, porque el hombre, sea
quien sea, me resulta un adversario de escaso valor. Lo que no puedo soportar son
esas lamentables disquisiciones referentes a tal o mal jugada, cuando ello no comporta
ganar ni perder. Y si el viaje no merece las alforjas, si la razn objetiva deja en el ms
terrible abandono -y esto es lo que ocurre- a quien la llama en su ayuda, no ser
mejor prescindir de tales disquisiciones? La diversidad es tan amplia que en ella
caben todos los tonos de voz, todos los modos de andar, de toser, de sonarse, de
estornudar...(2) Si un racimo de uvas no contiene dos granos semejantes, a santo
de qu describir un grano en representacin de otro, un grano en representacin de
todos, un grano que, en virtud de mi arte, resulte comestible? La insoportable mana
de equiparar lo desconocido a lo conocido, a lo clasificable, domina los cerebros. El
deseo de anlisis impera sobre los sentimientos(3). De ah nacen largas exposiciones
cuya fuerza persuasiva radica tan slo en su propio absur?do, y que tan slo logran
imponerse al lector, median?te el recurso a un vocabulario abstracto, bastante vago,
ciertamente. Si con ello resultara que las ideas generales que la filosofa se ha ocupado
de estudiar, hasta el presente momento, penetrasen definitivamen?te en un mbito
ms amplio, yo sera el primero en alegrarme. Pero no es as, y todo queda reducido a
un simple discreteo; por el momento, los rasgos de ingenio y otras galanas
habilidades, en vez de dedicarse a juegos inocuos consigo mismas, ocultan a nuestra
visin, en la mayora de los casos, el verdadero pen?samiento que, a su vez, se busca
a s mismo. Creo que todo acto lleva en s su propia justificacin, por lo menos en
cuanto respecta a quien ha sido capaz de ejecutarlo; creo que todo acto est dotado
de un poder de irradiacin de luz al que cualquier glosa, por ligera que sea, siempre
debilitar. El solo hecho de que un acto sea glosado determina que, en cierto modo,
este acto deje de producirse. El adorno del comentario ningn beneficio produce al
acto. Los per?sonajes de Stendhal quedan aplastados por las apre?ciaciones del autor,
apreciaciones ms o menos acerta?das pero que en nada contribuyen a la mayor gloria
de los personajes, a quienes verdaderamente descubrimos en el instante en que
escapan del poder de Stendhal.