El Proposito de Dios en Las Aflicciones B
El Proposito de Dios en Las Aflicciones B
El Proposito de Dios en Las Aflicciones B
Eareckson Tada y Estes, When God Weeps, p. 117 (citado por Miguel Mesas en Perspectiva Biblica del Sufrimiento p.207)
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2.
Las aflicciones existen para hacernos aorar la consumacin del Reino de Dios.
Hebreos 12:2,3 - "puestos los ojos en Jess, el autor y consumador de la fe; quien por el gozo que
tena por delante sufri la cruz, menospreciando el oprobio, y se ha sentado a la diestra del trono
de Dios. 3 Considerad, pues, al que soport tanta hostilidad de pecadores contra s mismo, para
que no decaiga vuestro nimo ni desmayis.
Romanos 8:18 - Porque considero que los padecimientos del tiempo presente no son dignos de
comparar con la gloria que pronto nos ha de ser revelada.
1 Pedro 5:10 - Y cuando hayis padecido por un poco de tiempo, el Dios de toda gracia,
quien os ha llamado a su eterna gloria en Cristo Jess, l mismo os restaurar, os afirmar, os
fortalecer y os establecer.
3.
La afliccin existe para incrementar nuestra sensibilidad hacia el dolor de los dems:
Tenemos compasin y dolor por otros
2 Corintios 1:4 - quien nos consuela en todas nuestras tribulaciones. De esta manera, con
la consolacin con que nosotros mismos somos consolados por Dios, tambin nosotros podemos
consolar a los que estn en cualquier tribulacin.
El Dr. Jorge Maldonado dice: El Ministerio de la Consolacin Consiste en acompaar a una
persona, pareja, familia o comunidad en la elaboracin de sus prdidas y sus crisis, no slo para que
logre su recuperacin, sino para que salga de la experiencia traumtica con mejores recursos para
vivir plenamente (Juan 10:10) y para ayudar a otros ...por medio de la consolacin con que
nosotros somos consolados por Dios (2 Cor. 1:4)2
Al exponernos al dolor, la angustia, la muerte, la desesperanza, etc del otro, nosotros nos hacemos
vulnerables, estos sentimientos nos incomodan, y cada intervencin nos afecta. Sin embargo
tenemos la certeza de que Dios est por y con nosotros en el ministerio de la consolacin
1 Pedro 5:9 (7 Echad sobre l toda vuestra ansiedad, porque l tiene cuidado de vosotros. 8 Sed sobrios y
velad. Vuestro adversario, el diablo, como len rugiente, anda alrededor buscando a quin
devorar)
9 Resistid al tal, estando firmes en la fe, sabiendo que los mismos sufrimientos se van
cumpliendo entre vuestros hermanos en todo el mundo
4.
5.
A. - El Dios de Consolacin
Dios es un Dios amoroso que se conmueve y se identifica con el que sufre
2 Cor. 1:3 El Dios de toda consolacin
Juan 14:16 El Espritu Santo es El otro Consolador. Tambin es el paracleto el que
acompaa.
B. - La Omnipresencia de Dios
Salmo 16:11 - En tu presencia hay plenitud de gozo, delicias en tu diestra para siempre.
Salmo 73:28 - En cuanto a m, la cercana de Dios constituye el bien. En el Seor Jehovah he
puesto mi refugio para contar todas tus obras.
Salmo 139:12 - Aun las tinieblas no encubren de ti, y la noche resplandece como el da; lo mismo
te son las tinieblas que la luz!
Josu 1:9 - Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque
Jehov tu Dios estar contigo en dondequiera que vayas.
Hebreos 13:5 - Sean vuestras costumbres sin amor al dinero, contentos con lo que tenis ahora;
porque l mismo ha dicho: Nunca te abandonar ni jams te desamparar.
Mateo 28:20 - he aqu, yo estoy con vosotros todos los das, hasta el fin del mundo
La Omnipresencia de Dios dice: Estoy contigo y te amo
l se compadece (He.4:15), No tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de
nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo segn nuestra semejanza, pero sin pecado
es pastor del que est herido y del que cojea, y hasta lleva en sus brazos a los dbiles y lastimados
(Sal.23, Jer.23, Ez.34, Jn.10).
Cuando vez solo un par de huellas en la arena, no es que Dios se alej, mas bien, es
porque en tu afliccin por un tiempo te lleva en sus brazos
Nos asegura que nada puede separarnos de su amor (Ro.8:35-39).
Quin nos separar del amor de Cristo? Tribulacin? angustia? persecucin?
hambre? desnudez? peligros? espada? Como est escrito: Por tu causa somos muertos
todo el tiempo; fuimos estimados como ovejas para el matadero. Ms bien, en todas estas
cosas somos ms que vencedores por medio de aquel que nos am. Por lo cual estoy
convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ngeles, ni principados, ni lo presente, ni lo
porvenir, ni poderes, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podr
separar del amor de Dios, que es en Cristo Jess, Seor nuestro.
La promesa de Dios de estar con nosotros es la solucin mxima para el sufrimiento (Ap.21:3,4).
Dios mismo estar con ellos como su Dios. Enjugar Dios toda lgrima de los ojos de
ellos; y ya no habr muerte, ni habr ms llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras
cosas pasaron.
La Omnipresencia de Dios dice: Estoy contigo y te escucho
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Dick Dickinson, Inter Community Counseling Center, Long Beach, California. Citado por Norman Wright Como aconsejar en
situaciones de crisis, Barcelona, Clie, 1985, p.145