Neuroendoscopio PDF
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ISSN 0025-7680
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NEUROENDOSCOPIA
UTILIDAD EN EL MANEJO DE LA HIDROCEFALIA
EN NIOS DE PAISES EN VIAS DE DESARROLLO
JUAN C. JIMENEZ-LEON, CRISTINA S. JIMENEZ, YALINE M. BETANCOURT
Departamento de Neurociruga, Escuela de Medicina, Universidad de Carabobo. Valencia, Venezuela
Resumen:
La Hidrocefalia Infantil es una carga enorme para todos los pases, especialmente para los no desarrollados, donde la proporcin es mayor si se compara a pases con niveles sanitarios desarrollados. En Latinoamrica las causas de hidrocefalia ms comunes estn ligadas al mal control prenatal y a la
sepsis neonatal, con meningitis y ventriculitis, produciendo hidrocefalia como consecuencia de dao en el sistema de drenaje del lquido cefalorraqudeo (LCR). Las tcnicas neuroendoscpicas: Tercer la ventriculostoma y
cauterizacin de los plexos coroides son una alternativa viable para el control de estos pacientes evitando la
colocacin de sistemas de derivacin ventrculo peritoneales (DVP) y sus complicaciones en el manejo y seguimiento. La Tercer Ventriculostoma asociada a la cauterizacin de los plexos coroides (TV-CPC), es una tcnica cada da ms usada para el control de la hidrocefalia infantil, secuelar a estados post ventriculitis o a espina
bfida (mielomeningoceles). Presentamos la anatoma ventricular normal, las anormalidades asociadas a estados post ventriculitis, y la ventriculoscopia vista en pacientes con Mielomeningocele. Describimos cmo funciona la TV y como evita la colocacin de shunts en muchos nios hidroceflicos. Presentamos nuestra experiencia inicial con 100 pacientes consecutivos en nuestra Institucin en Valencia, Venezuela. La utilidad de la
neuroendoscopia para el control de la hidrocefalia infantil va a permitir el menor uso de vlvulas y por ende de
sus complicaciones. Presentamos los datos clave en el uso de la tcnica y su algoritmo en nios menores o
mayores de un ao con hidrocefalia post infecciosa o asociada a mielodisplasias. Insistimos en el uso de esta
tcnica como alternativa de la dependencia de las vlvulas y sus complicaciones.
Palabras clave: hidrocefalia, ventriculitis, neuroendoscopia, ventriculoscopia, tercer ventriculostomia,
mielomeningocele, mielodisplasia, derivacin ventrculo peritoneal, vlvulas
Abstract
Neuroendoscopy. Its usefulness in the hydrocephalus management of children in developing countries. Hydrocephalus is a huge burden, specially in the poor countries with a big proportion of sick children with this condition, against the countries with good sanitarian conditions. In Latinamerica
the most common etiological factors of hydrocephalus are associated with bad prenatal controls, neonatal sepsis and consequent meningitis and ventriculitis. The hydrocephalus is a consequence of the damage in the circulation of the cerebrospinal fluid (CSF). Neuroendoscopy specially third ventriculostomy, associated in some
patients with choroid plexus cauterization, represents an alternative method to manage this condition avoiding
shunts and its complications. Endoscopic third ventriculostomy (ETV) alone or with choroid plexus cauterization
(CPC) is an emerging and very useful technique to manage hydrocephalus specially in children with: ventriculitis
as a consequence of meningitis, myelomeningocele, obstructive hydrocephalus idiopathic or seconday to posterior fossa tumors. One hundred consecutive children (100) underwent ventriculoscopy preceding EVT as an initial treatment of hydrocephalus since January 2001 to July 2006, median age was 15.5 months with a range
between 2-48 months, 55% are males of our Institution in Valencia, Venezuela. We describe the normal and
pathological ventricular anatomy with emphasis in the endoscopic technique and its challenges. We present how
the EVT works to prevent the shunt implantation. In the future, neuroendoscopy prevents the use of shunts to
treat hydrocephalus in children, avoiding its complications and cost. Neuroendoscopy is a neurosurgical technique everyday most common to manage hydrocephalus and intraventricular lesions in the world. We report an
algorythm to use in children younger than 1 year of age with postinfectious hydrocephalus (PIHC) or associated
with myelomeningocele. We stress the use of EVT as an alternative because of its low cost to treat hydrocephalus avoiding the complications and dependency of shunts.
Key words: endoscopic third ventriculostomy, neuroendoscopy, hydrocephalus, ventriculitis, myelomeningocele
Direccin postal: Dr. Juan Carlos Jimnez-Len, Centro Policlnico Valencia, Torre C. Cons. 112 Av. Carabobo. Urb. La Via, Valencia 2002,
Venezuela.
Fax: 58 241 823534
e-mail: neurojcj@gmail.com
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La Hidrocefalia infantil presenta un reto visto de diferentes maneras en los pases desarrollados y en los pases en vas de desarrollo. Desde la misma etiologa encontramos que la sepsis neonatal y la meningitisventriculitis es la principal causa de hidrocefalia en los
pases pobres, la cual est asociada a precarios controles prenatales y deficiente atencin obsttrica del parto;
hemorragia de la matriz germinal, la prematuridad y las
condiciones genticamente determinadas son mayormente vistas como causa de hidrocefalia neonatal en los pases desarrollados. Muchos nios hidroceflicos tienen
dificultad para ser atendidos por neurocirujanos debido
a mltiples factores: distancia de los poblados a los centros especializados, falta de conocimiento de la enfermedad o su diagnstico tardo en fases de macrocefalia.
La manera usual de manejo de los neonatos y nios
menores de un ao con hidrocefalia es mayormente colocando un sistema de derivacin ventrculo peritoneal
del LCR. Un nio con una vlvula constituye un problema serio en su manejo y seguimiento, las complicaciones relacionadas a infecciones, malfuncionamiento, migraciones, muchas veces estn asociadas a las condiciones de mala nutricin de estos nios. La eventual posibilidad de controlar la hidrocefalia mediante ventriculoscopia, usando tercer ventriculostoma y eventual cauterizacin de los plexos coroideos puede representar una
alternativa de tratamiento en nuestros pases, liberando
un importante grupo de nios de la dependencia de la
derivacin ventrculo peritoneal. Presentamos una experiencia piloto en nuestra ciudad, basndonos en series
realizadas en pases en vas de desarrollo como Uganda,
en Africa, por el Dr. Benjamn Warf1, 2 y cuyos resultados
llenan muchas expectativas de resolver este grave problema.
Consideraciones anatmicas en el
hidrocfalo post infeccioso
Una severa distorsin de la anatoma ventricular puede
ser el resultado de una meningitis/ventriculitis con la consecuente hidrocefalia post infecciosa. Muchas veces esa
distorsin entorpece la realizacin de una tercer ventriculostoma debido a las severas adhesiones de las
estructuras ependimarias secundarias a la ventriculitis.
Lo que ocasionalmente hace al procedimiento tcnicamente imposible. En condiciones ideales, el LCR debe
estar estril y con nula celularidad. Los casos ms difciles corresponden a los nios que han permanecido con
sistemas de drenaje ventricular externo donde se dificulta realmente la esterilizacin del LCR. Las caractersticas ventriculoscpicas ms comunes en estos nios son:
exudados inflamatorios amarillentos, manchas de
hemosiderina en el epndimo y engrosamiento de las
membranas, especialmente del piso del tercer ventrculo.
Podemos observar obstruccin del Silvio por pus,
hemosiderina o engrosamiento ependimario post infeccioso. Una caracterstica casi constante en estos casos es la
tabicacin ventricular, causante de la hidrocefalia multiseptada o multi compartamental. Estos casos requieren
la fenestracin de los septos para lograr un ventrculo nico comunicable, ya que en estos casos no funciona la tercer ventriculostoma, y necesitamos un ventrculo libre para
colocar una derivacin ventrculo peritoneal (Fig. 3).
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Fig. 2. Anatoma neuroendoscpica normal: Vista del interior del III Ventrculo con
neuroendoscopio rgido, observando el nivel de la TV en la ML.
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Fig. 3. Anatoma del Hidrocfalo Post Infeccioso: Depsitos inflamatorios que cubren los
plexos coroides en el interior del III Ventrculo.
Fig. 4. Anatoma del Hidrocfalo asociado a mielomeningocele; asociado a Chiari II, con ausencia de Septum Pellucidum, estenosis de los Monro y alargamiento de la masa intermedia.
que es en estos casos grueso y poco traslcido, frecuente asociacin a estenosis acueductal.
Una vez realizada la TV en estos pacientes la anatoma intracisternal es bastante diferente encontrando:
desplazamiento anterior de la arteria basilar y el tallo
cerebral, desplazamiento inferior del pex basilar, engrosamiento de la Membrana de Liliequist que amerita una
fenestracin ms laboriosa despus de ser perforada hacia la cisterna y ocasionalmente podemos ver tejido
cerebeloso en el receso lateral de la cisterna pontina cerca
de los cndilos occipitales (Chiari) (Fig. 4).
culares y pre-pontinas. Se realiza un desvo de la circulacin del LCR que debera pasar a travs del acueducto
de Silvio, 4to ventrculo y sus salidas a travs de los
foramenes de Luschka y Magendie en las cisternas de la
fosa posterior. Se realiza un cortocircuito del LCR omitiendo cualquier obstruccin de su flujo en esta va. Se
espera que la TV funcione si no hay obstruccin al flujo
del LCR de las cisternas interpedunculares y pre-pontinas
donde circula el LCR hacia las granulaciones aracnoideas
de la convexidad craneal y hacia su drenaje natural a los
senos venosos, especialmente el seno longitudinal superior. En los casos de existir un trastorno en la absorcin del LCR a nivel de las vellosidades aracnoideas o
de dao del drenaje venoso no funcionar la TV, ya que
aun desviando el flujo del LCR de las estructuras bloqueadas, los mecanismos de absorcin pudieron ser lesionados en algunos casos de meningitis y ventriculitis,
o eventualmente por falta de desarrollo de los mecanismos de absorcin. En estos casos no funciona la TV y la
colocacin de una DVP es mandatoria.
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Metodologa
Entre enero de 2001 y julio de 2006 hemos tratado mediante TV a 100 nios con hidrocefalia procedentes de
los sectores marginales de Valencia, Venezuela, y su rea
de influencia. La edad de estos nios oscil entre 2 meses y 48 meses de edad, con un promedio de 15.5 meses de edad, el sexo predominante fue el masculino y la
etiologa de la hidrocefalia estuvo principalmente determinada por la secuela de una sepsis neonatal o ventriculitis en un 64%; un 15% fue asociado a mielomeningocele; 30% de los casos present hidrocefalia no infecciosa de tipo obstructivo asociada a estenosis acueductal,
hemorragia de la matriz germinal (prematuridad) y lesiones tumorales. Todos los pacientes fueron seguidos con
controles clnicos, medidas de los permetros ceflicos y
controles de tomografa axial computarizada (TAC) o de
resonancia magntica (RM). El seguimiento fue de 6
meses a 60 meses del post operatorio.
Resultados
Los pacientes con hidrocefalia post infecciosa (HPI) tuvieron un comportamiento diferente si eran mayores o
menores de un ao; de hecho, el xito de la TV fue de un
83% en los nios con HPI mayores de un ao, a diferencia de los menores de un ao donde slo un 43% mejor
su condicin requiriendo de una nueva TV o finalmente
la colocacin de una vlvula. Los pacientes con hidrocefalia asociada a mielomeningocele tuvieron un control de
su condicin en un 72% mediante la TV. Los pacientes
con hidrocefalia post hemorrgica (HPH) controlaron su
hidrocefalia mediante TV en un 61% en los menores de
un ao, con mejores resultados en los mayores de un
ao con un 79% de xito de la TV. En todos los casos
donde la TV no pudo controlar la condicin despus de
una segunda intervencin se coloc una derivacin
ventrculo peritoneal. Slo en un 20% de los casos de
esta serie se intent cauterizacin de los plexos coroides
mediante electrocoagulacin bipolar endoscpica, espe-
Discusin
La Neuroendoscopia fue iniciada a comienzos del siglo
XX con el objeto de manejar pacientes hidroceflicos.
En 1910 Vctor LEspinasse, un urlogo de Chicago, practic la primera exploracin neuroendoscpica al introducir un cistoscopio dentro de los ventrculos laterales de
un paciente hidroceflico para cauterizar y remover los
plexos coroides, y de este modo pensaba resolver la hidrocefalia3. Los primeros intentos fueron un fracaso ya
que el colapso ventricular y la hemorragia asociada a la
mala calidad ptica del endoscopio colaboraron al poco
auge de la tcnica. Walter Dandy4, en 1918 practico lo
que l bautiz como Ventriculoscopia, una tcnica para
el control de la hidrocefalia, fulgurando y removiendo los
plexos coroides de nios hidroceflicos. El mismo Dandy
pronostic que al mejorar la instrumentacin y la calidad
ptica esta tcnica sera muy til a futuro4-6.
En 1923, Mixter7 reporto la primer ventriculostoma del
tercer ventrculo exitosa y su utilidad en el control de la
hidrocefalia no comunicante. De all en adelante otros
autores publicaron sus experiencias de navegacin
endoscpica intraventricular, relacionada fundamentalmente al control de la hidrocefalia. La aparicin de las
derivaciones ventrculos peritoneales disminuy el inters en la neuroendoscopia como tcnica para control de
la hidrocefalia. Fue a comienzos de la dcada del 70 cuando Harold Hopkins8, un fsico ingles, desarroll los sistemas pticos que utilizamos actualmente en todas las
reas de la endoscopia.
Gracias a los neuroendoscopios rgidos de Hopkins
se reinicia la neuroendoscopia a inicios de los 80. En
Bristol, Griffith9, 10 reimpulsa la neuroendoscopia en la neurociruga peditrica y recoge una serie basada en ventriculostomas del III ventrculo y control de hidrocefalia
compleja mediante sta tcnica. Desde 1995, prcticamente todos los servicios neuroquirrgicos cuentan con
el neuroendoscopio como un recurso ms de diagnstico y tratamiento; publicaciones acerca de sus ventajas y
usos son cada da mas frecuentes en todas las revistas
de la especialidad11. Los sistemas flexibles de fibra ptica desarrollados por Fukushima12-14 en Japn permitieron la creacin de neuroendoscopios flexibles de dimetros delgados de 1 a 2 milmetros que revolucionaron la
exploracin cerebral asociada a la microciruga y la
estereotaxia.
Mediante la perforacin neuroendoscpica del suelo
del tercer ventrculo en la zona premamilar, se comunica
ste con las cisternas basales, logrando un pasaje adecuado del LCR desde el sistema ventricular al subarac-
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TABLA 1. Resultados del tratamiento1
HPI
HNPI
H + MM
<1/Ac Abierto
>1/Ac Abierto
<1/Ac Cerrado
>1/Ac Cerrado
TV (71%)
TV (40%)
TV (45%)
TV (81%)
TV (91%)
TV (74%)
TV (70%)
TV (78%)
TV (83%)
TV (90%)
HPI: Hidrocefalia post infecciosa. HNPI: Hidrocefalia No Post Infecciosa (hemorrgica u obstructiva) H + MM:
Hidrocefalia con Mielomeningocele. Ac: Acueducto abierto o cerrado. TV: Tercer Ventriculostomia.
pacientes con HNI y un 45% de los hidrocfalos asociados a mielomeningocele tuvieron buenos resultados con
la TV. Un grupo excepcional fue el de los menores de un
ao con HPI con estenosis acueductal, donde la TV fue
exitosa en el 70% de los casos. Pero en general menos
del 50% de las TV son exitosas en menores de un ao
con hidrocefalia, excepto las estenosis acueductales. Al
final un importante grupo de menores de un ao necesit shunt ventrculo peritoneal.
Conclusiones
La dependencia a la derivacin ventrculo peritoneal
puede ser evitada en algunos casos, esto es especialmente til en los pases en vas de desarrollo donde se
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