Tesis PHC Ago-2016
Tesis PHC Ago-2016
Tesis PHC Ago-2016
2016
AGRADECIMIENTOS
Gracias a Ana Mara Gonzlez, Ruella Frank, Luis Mariano Aceves, Jos Gmez del
Campo, Anatolio Freidberg, Medardo Plascencia, Alberto Segrera y Steve Gunther, por
obsequiarme su conocimiento y su tiempo a travs de las extensas entrevistas que hice
con cada uno de ellos.
Gracias a Ti Gran Dios(a) que Todo lo ves y Todo lo sabes, y tanto me amas.
DEDICACIN
Dedico la presente tesis a mi hijo Matas, quien con su incansable rebelda, fuerza y
belleza me permite profundizar cada vez ms en mi propio camino de bsquedaencuentro.
NDICE
Resumen .................................................................................................................................6
Abstract ...................................................................................................................................7
Introduccin .............................................................................................................................8
Propsito de la investigacin ................................................................................................11
Justificacin ...........................................................................................................................12
Captulo Uno: Psicoterapia Humanista Corporal y la Dicotoma Cuerpo-Mente .................16
1.1. Conceptos de Psicoterapia Humanista Corporal y Espiritualidad a travs del
tiempo...19
1.2.1. Dicotoma Cuerpo-Mente.34
1.2.2. La sanacin de la Dicotoma Cuerpo-Mente43
1.2.2.1. Las creencias espirituales del psicoterapeuta:
afectan el proceso psicoteraputico?....................................................................52
Captulo Dos. Conceptos de la Dimensin Espiritual .....55
2.1. Definicin de Dimensin Espiritual...56
2.2. Principales elementos de la Dimensin Espiritual (Congruencia, respeto,
empata, aceptacin positiva incondicional, trascendencia, principio de Unidad,
compasin)61
2.2.1 El agradecimiento y la espiritualidad ...........................................................................66
2.3 El holismo como caracterstica fundamental de la Dimensin Espiritual ......................71
Captulo Tres. METODOLOGA ............................................................................ 72
3.1 Trabajo de Campo: Datos fuente....................................................................................73
Captulo Cuatro. RESULTADOS ..........................................................................................86
Captulo Cinco. DISCUSIN Y CONCLUSIONES ..............................................................96
REFERENCIAS ...................................................................................................................113
APNDICE. Referencias complementarias........................................................................121
5
RESUMEN
PALABRAS CLAVE
Dicotoma
Cuerpo-Mente,
Psicoterapia
Humanista
Corporal,
Tendencia
actualizante,
ABSTRACT
The present investigation emerges from the need to analyze the relation between
the Spiritual Dimension and the Dichotomy between Body and Mind in the humanistic
body psychotherapy. It was accomplished through a biographical investigation that
allowed to conform the theoretical framework and, on the other hand, nine interviews
were made with specialists in the subject. This investigation was done in Mexico City
and it is a qualitative analysis.
The present thesis searches to enrich the scientific reflection about the Spiritual
Dimension, the concept of Unity and the way in which these are integrated in
psychotherapeutic work, and in the body-mind Dichotomy, deepening our knowledge
about health and illness and the importance of Spiritual Dimension.
The content of the present document initiates within the frame of the investigative
question, and with the antecedent and the justification. After that, the theoretical
framework is established with specific references of the theme, and the methodological
framework. In the fieldwork chapter, we can find the interviews as well as the qualitative
statistic treatment of the present investigation. Finally, a data analysis is done and some
conclusions are made.
KEY WORDS
Body-Mind Dichotomy, Actualizing tendency, Spirituality, Humanistic Body Psychotherapy,
Organismic wisdom, Holistic, Psychosomatic, Psique and Soma
INTRODUCCIN
Existe una dicotoma histrica entre el cuerpo y la mente, la psique y el soma. Hay
escuelas que se basan en dicha dicotoma y hay otras que asumen una Unidad
inherente entre todos los aspectos del ser humano, y trabajan bajo esta visin. La idea
en este trabajo es revisar algunas visiones dicotmicas, y hacer nfasis en la visin
Humanista Psicocorporal que incluye y explicita el aspecto espiritual al trabajo
psicoteraputico, entiende y constata una Unidad que globaliza a la psique y al soma,
de la cual depende el resultado de su trabajo y la sanacin de las personas.
isqumica,
asma
bronquial, colon
psicgena, eczema, etc. En este estudio refieren que es fundamental tener en cuenta
que dividir al ser humano en cuerpo y mente es un artificio. Aaden que esta Dicotoma
sirve para clasificar una serie de enfermedades, pero la realidad es ms compleja, y la
interconexin entre lo que pensamos, nuestras emociones y nuestro funcionamiento
fsico es un hecho sustancial para considerarse en la sanacin.
Este fenmeno es muy evidente en los nios pequeos, en los cuales el lenguaje
aun no puede expresar el estado de nimo; de esta manera pueden expresar su
malestar, a travs de multitud de sntomas (clico abdominal, espasmo del sollozo,
dolor de cabeza, crisis de asma, etc.). En el adulto, de igual forma, pueden afectarse
todos los aparatos o sistemas orgnicos (cardiovascular, respiratorio, endcrino, etc.).
con una salud duradera se lleve a cabo y no solamente estemos trabajando sntomas y
reacomodando la neurosis.
Anatolio Freidberg
Medardo Plascencia
Ruella Frank
Steve Gunther
Alberto Segrera
10
PROPSITO DE LA INVESTIGACIN
11
JUSTIFICACIN
Yo pertenezco a una familia mocha y fijada en las formas y dems cumplimientos
sociales. Pronto me di cuenta que si bien eso es importante y refleja la intencin de
comunicar el afecto, me faltaban sustancia y profundidad. Me daba cuenta que la
verdadera bsqueda y encuentro espiritual no estaban presentes. Al tomar conciencia
de ello empez, quiz, mi verdadera bsqueda espiritual intentando trascender las
meras formas culturales y religiosas. As mismo, en los diferentes tipos de psicoterapia
que conoc como paciente y como estudiante, encontr en el trabajo Psicocorporal una
inigualable herramienta para facilitar el encuentro profundo con las heridas que nos
impiden ir al encuentro de lo verdaderamente Espiritual. Al estudiar filosofa y psicologa
comprend que la visin humanista del ser humano como valores, actitudes y su
paradigma en general coincidan profundamente con lo que yo era y anhelaba. Tiempo
despus fundo el Instituto Humanista de Psicoterapia Corporal, Integra S.C como fruto
de este camino de bsqueda espiritual a travs del Humanismo Psicocorporal. En esta
tesis contino con la pregunta personal y profesional de cmo es que, a travs del
trabajo Psicocorporal serio, podemos reconocer nuestra verdadera imagen y
semejanza, ser lo que verdaderamente Somos, y trascender para liberarnos de
dogmas, limitaciones y creencias negativas de nosotros mismos y del mundo.
los
ven
miles
de
diferentes
especialistas
como
dermatlogos,
como por ejemplo el descubrimiento de la funcin de la glndula pineal, que cada vez
se acerca ms a las propuestas msticas y filosficas de la antigedad, a travs de sus
descubrimientos (Strassman, 2001).
Tenemos que poner nuestra atencin en la luz porque all va la energa. Podemos y
es urgente que ya tengamos ms conciencia de que donde ponemos la atencin, va la
energa y dejar de pasar tanto tiempo en la patologa o en la negatividad. Sabemos que
la Dicotoma Cuerpo-Mente es de las armas ms destructivas que ha tenido el ser
humano en su historia. Divide a las personas, familias y naciones, las hace infelices,
inseguras y enfermas. Esto es lo que he visto en muchos aos de consulta y vida, y no
tengo duda. Creo que es momento de eficientar la tecnologa, la atencin y la teora
para permanecer habitando la luz, creando la conciencia de Unidad mucho ms tiempo,
como parte del quehacer Psicoteraputico moderno que pretende, si bien no eliminar, s
atenuar y concientizar la Dicotoma Cuerpo-Mente.
15
CAPTULO UNO
sta es una puerta que se abre, que est innovando las formas de hacer
psicoterapia en Mxico y en el mundo, y que nos impone el reto a quienes abrimos
camino, de mostrar que el ser humano necesita desarrollar su espiritualidad, en
armona y unin con el Cuerpo-Mente. Mientras ms desarrollo y consciencia tenga de
s misma la persona, ms acceso tiene a su espiritualidad y tender a crecer en todas
las dimensiones, lo cual supondra que deber resultar en una salud ms integral.
18
19
Ana Mara Gonzlez (2005) seala que Teilhard contempla a la espiritualidad como
un proceso dinmico de transformacin que constituye una parte integral del desarrollo
de la consciencia.
Jung
(1995)
es
el
primer
psicoanalista
en
reconocer
un
inconsciente
21
Gmez del Campo (1986) sostiene que las relaciones que se basan en el amor se
caracterizan por las virtudes espirituales de confianza, la actitud positiva incondicional,
el perdn, la empata, la aceptacin, la perseverancia y el apoyo. La relacin amorosa
mejora la autoestima, la autoaceptacin y el sentimiento de ser digno del amor de los
dems es una necesidad pacfica. La idea de significado les permite a las personas
resistir la privacin de las necesidades, incluidas en muchos casos, las ms bsicas.
Conforme la persona crece y desarrolla su autoestima, va alejndose de la imitacin, se
sita por encima de la presin de los pares y empieza a desarrollar la integridad
personal y la fuerza interior de convicciones actuadas como dedicacin a una
motivacin personalmente significativa.
El desarrollo humano viene intentando dar respuesta desde hace varias dcadas a
la pregunta de cmo hacemos para considerar y desarrollar la espiritualidad en las
22
personas. El enfoque centrado en la persona, creada por Carl Rogers (1964) parece ser
uno de los que ms naturalmente se acerca a esta propuesta.
Al tratar de definir qu es la terapia corporal somtica, Acero (2013) nos dice que
sta es la psicoterapia que intenta trabajar psicolgicamente en conjunto, comprendiendo
al ser humano como una unidad integral sin dicotoma cuerpo-mente. Esto se logra
trabajando asuntos del pasado as como desarrollando nuevas habilidades y recursos
presentes. Refiere que la personalidad desarrolla una plasticidad corporal ofreciendo
nuevas respuestas.
En esta visin dualista del universo los individuos somos vistos y asumidos como
entidades desconectadas y autosuficientes. Nuestra percepcin del mundo es automtica
y nos brinda una imagen adecuada de cmo son realmente las cosas. Nuestra verdadera
naturaleza queda totalmente definida por el cuerpo y su percepcin a travs de los cinco
sentidos. En esta visin el tiempo existe como absoluto y somos cautivos de ese
absoluto, nadie escapa a los estragos del tiempo. No es de sorprenderse que el estrs y
el miedo sean los males de nuestros tiempos, ya que parecera ser esta la visin del
slvese quien pueda. No parecera haber otra alternativa que nacer, crecer,
reproducirse y morirse, todo ello con poca esperanza y tratando de encajar dentro de
juicios de valor o diagnsticos pequeos que no nos llegan a definir ni por un momento.
que los seres humanos estamos teniendo en nuestra sociedad cada vez con ms
claridad? No ser momento de sealar con ms nfasis y valenta la gran insatisfaccin
colectiva que la mayora de los seres humanos estamos teniendo con esta locura
econmica, de persecucin sin fin por lograr satisfactores materiales que no nos
satisfacen ms que momentneamente? No ser momento de crecer como adultos,
dndole un mayor lugar a nuestra autoestima y pudiendo satisfacer lo que realmente
necesitamos, como sociedades en donde hay ms equidad, respeto por las diferencias y
por lo sagrado, por la salud y la bsqueda de sentido?
Deepak Chopra (2009) aade que pesar de la apariencia de que los individuos
estamos separados, todos estamos conectados con los modelos de inteligencia que
gobiernan el cosmos en donde tyo, y t-tu ambiente son una sola cosa: si t observas
percibirs que tu cuerpo est en cierto punto separado de la pared o del rbol por un
espacio vaco; sin embargo en trminos cunticos la distincin entre slido y vaco es
insignificante: cada centmetro cbico del espacio cuntico est lleno de una cantidad
finita de energa y la ms pequea vibracin es parte de tu campos de vibracin, que
abarcan galaxias enteras que son un sentido muy real tu cuerpo prolongado (pg. 42).
27
Gracias a la fsica cuntica podemos saber que estas palabras de Chopra no son meros
actos de reflexin mstica, sino hechos cientficos comprobados (Sheldrake, 2013).
Rosal Corts (2013) seala que la psicoterapia humanista tiene varias metas
especficas. La primera es el crecimiento personal, siendo este el objetivo del trabajo
psicoteraputico pero tambin el objetivo ltimo de la vida. Esto nos diferencia de otros
modelos que simplemente se limitan a querer un estado esttico. Buscan darle al cliente
la posibilidad de obtener un trabajo ms profundo: una plena recuperacin y animacin
del proceso de crecimiento que tambin se llama autorrealizacin.
Esta actitud creadora manifiesta la capacidad para vivir el momento presente del
aqu y el ahora sin la evasin del pasado y el futuro. Subrayan que todo el conjunto de
la psicoterapia humanista se orienta hacia facilitar el implicarse con la actualidad
temporal y espacial como una manera de enraizar a la persona en la realidad presente
(Rosal Corts & Gimeno-Bayn, 2013, p. 163).
manifestacin hacia otros sino en el amor a uno mismo: esta capacidad y actitud
compleja que denominamos amor, integra factores cognitivos y se radica en unas
convicciones y sentimientos bsicos hacia un ser humano percibido y sentido
favorablemente.
mismo,
gratificacin,
crecimiento,
autoactualizacin,
organismo,
valores
necesidad
superiores,
bsica
ser,
de
devenir,
objetividad,
autonoma,
responsabilidad,
salud
psicolgica
30
en
varias
31
Buber (1943) al hablar de las polaridades en el ser humano como partes ineludibles
de la dualidad, indica que la dualidad es la esencia fundamental del mundo. Espritu y
materia, forma y contenido, vida y muerte, etctera. Llegan solamente a la Unidad si el
ser humano se confronta con las polaridades y no intenta alejar del mundo las
tensiones inherentes.
integracin y diferenciacin. De este modo para Rogers toda eleccin realizada por los
seres humanos es una expresin de la bsqueda de autorrealizacin. Afirma que la
autorrealizacin es entonces un proceso y no una meta a la que se llega, como lo dira
Maslow. El hombre en su vida debe de contestar las preguntas de quin soy? y cmo
puedo convertirme en m mismo? y para ello debe atravesar las mscaras de defensa
que tiene ante s mismo. As Maslow se plantea que un hombre que sigue este proceso
"desarrolla confianza en su propio organismo que hace valoraciones a partir de s
mismo, y que vive su vida como un proceso que fluye y en el que descubre
constantemente nuevos aspectos de su vida en la corriente de su experiencia" (Rogers
citado por Quitman, pg. 320). Entonces un proceso de actualizacin como este, se
prolonga a lo largo de la vida. ste es pues el devenir y el famoso gerundio: todo el
tiempo nos estamos convirtiendo en lo que somos, y ese es el camino espiritual.
Quitman (1989) sostiene que, segn Rogers, la congruencia puede darse entre el
s mismo tal y como lo percibe el individuo y la vivencia concreta del organismo.
Tambin puede darse entre la realidad subjetiva y la realidad del mundo de afuera, o
puede darse entre el s mismo y un s mismo deseado. La incongruencia es
amenazante para el ser humano cuando no penetra en la conciencia, entendiendo por
congruencia la coincidencia con uno mismo.
33
Casanova (2014), explica que a pesar de que el sentido comn nos dice que la
mente y el cuerpo deben de interactuar conjuntamente, al ser el cerebro y el sistema
nervioso parte del mundo fsico y tangible y al ser los pensamientos y sentimientos
diferentes estados de la mente parte del mundo intangible, hemos asumido que es
imposible para el cerebro generar la mente o que la mente afecte al cerebro.
34
Esta dicotoma y contradiccin forman parte bsica del problema cuerpo-mente. Sin
embargo sabemos que los estados del cerebro y del sistema nervioso, es decir, del
cuerpo fsico, genera estados mentales y en un momento especfico, estados de
conciencia. Dicho estado de conciencia determina la percepcin y conocimiento del
mundo psquico individual y el que nos rodea.
Carvajal (2000), al referirse a las crisis de salud que tienen que ver con la dicotoma
cuerpo-mente seala que a veces perder el rumbo es una estrategia de ese orden
oculto y explcito para hacernos recuperar el sentido de vida. El destino nos lleva a
comprender que cada persona, aunque se siente perdida, tiene la mejor oportunidad
para el desarrollo del potencial. Indica que pretender estar donde no estamos, hacer lo
que no somos o vivir en el futuro o pasado, nos impide comprender que cuando el ro
va crecido hay que esperar o tomar otro rumbo, y que ese rumbo exterior es ms que el
camino interno que nos lleva a la oportunidad de dar lo que somos y as encontrar
nuestro potencial oculto.
La literatura sobre Mente-Cuerpo y su interaccin es algo singular. Los
especialistas de otras reas mdicas no la conocamos. Comprob qu adelantadas
estaban la teologa, la psicologa y la holstica a este respecto (Siegel, 1998). As
mismo, Siegel reconoce la necesidad de incorporar al sistema mdico esta nueva-vieja
visin de que el Cuerpo y la Mente son Uno y no dos.
Siegel (1998) sugiere que a todos los mdicos se les debera pedir como parte de su
formacin
que
ofrecieran servicios
a donde
pudieran
Este poder gobierna al universo entero. Ha sido llamado chi en China; ki, en el
Japn; prana, en la India; soplo de vida, por los hebreos; Verbo, por los cristianos.
Refiere que se emplean estos trminos para expresar el principio creativo que da
existencia a todas las cosas, principio que todo lo contiene y lo mantiene, que conecta
todo y que siempre existi.
Por lo tanto, Bianchi (2010) expresa que la meta de la prctica espiritual genuina es
la integracin de nuestra dimensin corporal, mental/social y espiritual (intentar eliminar
la dicotoma cuerpo-mente). Recomienda perodos regulares de silencio y soledad que
aquietan la psiquis, alimentan el silencio interior e inician la dinmica del
autoconocimiento, y es as como la persona comienza a auto observar si lo que piensa,
lo que siente sensorialmente, lo que siente emocionalmente, lo que habla y lo que acta
estn integrados, son congruentes. Sabemos que es muy comn que estas funciones
del comportamiento estn disociadas y pensamos de una manera, pero actuamos de
otra, y hasta sentimos contradictoriamente.
38
nico!
Para tener una buena calidad de vida, estudia, consguete un trabajo con buenas
prestaciones y jublate vs. Para tener una buena calidad de vida, consigue muchas
fuentes de ingresos, no solo un empleo
Para ganar mucho dinero es necesario trabajar duro vs. Para ganar mucho dinero es
necesario trabajar inteligentemente
39
Jerome Groopman (2005, pg. 23) se refiere a la confusin que muchas veces se
tiene entre tener suficiente informacin y tener suficiente insight o darse cuenta, y
desde ah sentirse preparados para dar psicoterapia a otras personas. Seala que
mucho tiempo estuvo muy bien preparado para la ciencia pero lamentablemente no
preparado para el alma humana. Indica que en la carrera de medicina y de psicoterapia
no nos preparan adecuadamente en materias como esperanza o dolor como parte del
currculo. Indica cmo las etiquetas causan distancia entre paciente y terapeuta,
quitando responsabilidad al terapeuta de sus manos y solidificando este sentido de
dolor y soledad que rodea al paciente. No saba, seala, entonces que lo que hacemos
tiene tanto que ver con aprender a despertar y dar esperanza a las personas en su
proceso de restablecimiento de su salud general. Aade que la esperanza no es un
constructor racional deliberado que venga de la conciencia y de la informacin, sino que
emerge como una amalgama entre el pensamiento y el sentimiento, y stos son
creados en parte por la informacin neural que emerge de los rganos y los tejidos
(pg. 120). Nuestras emociones, pensamientos, percepciones, reflexiones y deseos,
todas son actividades de la mente y parecen existir como si estuvieran desencarnadas
fuera de nuestras cabezas. Lo cierto es que no es as, sino que la mente es una
manifestacin del cerebro, segn Jerome. Indica que los pensamientos, sentimientos y
emociones son productos de la mente y una mezcla de qumicos y circuitos elctricos
que han evolucionado por milenios y que siguen cambiando. Es as como vemos que
tambin la consciencia, la memoria del pasado, el darnos cuenta del presente y la
anticipacin del futuro cambian. El cuerpo incluye al cerebro y por tanto a la mente. Por
lo tanto el constructo de conexin cuerpo-mente slo enfatiza la artificialidad con la
que tradicionalmente los hemos dividido. El alma es fundamentalmente un concepto
religioso y metafsico, en donde reside la chispa divina. Para el agnstico el alma est
en duda, para el ateo es ficcin. Para una persona de fe, el alma tiene permanencia
mientras que el cuerpo -incluyendo el cerebro y la mente- no lo tiene, indica (pg.166).
rezagando
de
esta
forma
su
sabidura
organsmica.
El
proceso
42
El Dalai Lama (2001) en su artculo llamado "Ethics for a secular millennium" seala
que cuando las personas rechazan a la religin o no se interesan en ella, tambin
rechazan valores como la compasin, la importancia de compartir y el sentido del
cario, ya que los consideran mensajes religiosos y los rechazan: ese es un error. La
tica secular no es un mensaje religioso y es para todos. Todos pueden entender que el
ser humano quiere una vida feliz, una familia feliz y tener felicidad individual, y que las
cosas materiales no nos van a dar paz interior real o felicidad interna. Los valores
humanos son esenciales, debemos encontrar una manera de presentar los valores
humanos a todo el mundo y hacerlo no de manera religiosa, sino con una tica secular
para que sea importante y significativo.
Taboada (2014), menciona que los sntomas fsicos son una llamada que nos dice
que necesitamos cuidados en nuestras vidas. En los sntomas psicosomticos el estrs
y la vida afectiva hacen que stos se incrementen. Se resalta que detrs de todo
sntoma fsico hay sentimientos, temores guardados. Escucharlos es mantener
equilibrio y salud. Por eso surge la medicina psicosomtica, que incluye los aspectos
somticos, psquicos, sociales y culturales que pretende eliminar la Dicotoma CuerpoMente. La medicina psicosomtica no sera verdaderamente integral si no incluimos
tambin la Dimensin Espiritual.
Taboada (2014) resalta la manera en que lo que inicialmente fue orgnico, puede
repercutir emocionalmente y viceversa. Tambin se subraya la importancia que tiene la
enfermedad somtica en lo anmico y lo psicolgico y cmo los estados depresivos y de
tensin
emocional
prolongada
de
estrs
producen
disminuciones
en
las
inmunodefensas.
44
Guillen (2014) afirma que la salud y la curacin provienen del ncleo energtico del
ser humano y que nuestra energa vital u orgn es la misma fuerza que constituye el
universo y determina sus leyes. Sabemos que la pulsacin con la funcin del orgasmo
es la misma energa del eros y del amor (Reich, 1991). Esta energa vibra, y pulsa
irradiando dentro del cuerpo humano y en su campo inmediato unindose a la
consciencia y generando luz, calor y creacin, diluyendo la dicotoma cuerpo-mente.
Esto es obtenido a travs de la conjuncin de nuestros atributos de razn, emocin y
voluntad (Broch Pierrakos, 2005).
45
Cada uno de nosotros tiene un ncleo nico y distinto que vive en el ncleo de cada
clula, que es energa y conciencia. Nuestro ncleo encierra y seala nuestras
capacidades espirituales. La energa se mueve con la voluntad hacia la creatividad o la
unificacin y es pura inteligencia, no tiene criterio moral, solo es benigna, abundante y
siempre disponible al ser humano.
Conger (1993) seala que si estamos a gusto y como en casa adentro de nuestro
cuerpo, nos vamos a sentir como en casa en cualquier parte. En un nivel somtico
estar sano significa haber atravesado la armadura de carcter y poder establecer un
flujo energtico claro. Significa tambin conectar el rompimiento que hay entre las
partes, de manera que estamos enteros y en contacto con nosotros y con otros, es
decir, somos ya un carcter genital como lo describe Reich (1991). Esta persona
saludable y fluida est en contraste con el carcter neurtico, cuya energa sexual
reprimida le impide hacer fluir su energa y su funcionamiento sexual pleno. El carcter
genital esta emocionalmente presente y es espontneo sexualmente: es vivo y vital
fsicamente y est gobernado por su autorregulacin natural, en vez de estar gobernado
por las reglas de complacencia inconscientes. Ninguna mencin se hace de la
necesidad de trascendencia y de la vida espiritual para una salud plena. Parecera que
el nico criterio es la genitalidad funcional, lo cual nos hace ver que el paradigma no es
integral.
Conger (1993) seala que el menage-a-trois entre cuerpo, psique y espritu es muy
complejo. La separacin entre cuerpo y mente se va sanando con el trabajo corporal
que incluye la Dimensin Espiritual y se va sintiendo una sensacin de estar encarnado
mucho mayor, pero este proceso tiene sus conflictos y es doloroso. Estar encarnado
significa soltar la ilusin, la grandiosidad, a cambio de tener una realidad arraigada, un
contacto genuino, placer y capacidad relacional. La escisin entre la psique y el soma
conforman nuestra sombra. La escisin como defensa primitiva disminuye la ansiedad
y es la base de la construccin caracterolgica, y reduce nuestro mundo a pedazos ms
manejables, mientras alguna parte de nuestra vida nos decepciona. Conger sostiene
que en los organismos unicelulares, la escisin llamada mitosis existe para la
46
Conger (1994) seala que la mayor parte de personas hemos vivido en nuestros
cuerpos
como
rentando
una
casa
que
apenas
consideramos
habitable
sin
verdaderamente hacerla nuestra. Con el costo que ha tenido esta visin hemos
aprendido que tenemos que depender de nuestra mente, de nuestro espritu, de nuestro
cuerpo de la misma manera. Sufrimos de enfermedades crnicas, problemas con
nuestras espaldas, estmagos, pies y muchas veces nuestras soluciones son las dietas o
en las terapias racionales que slo atienden la mente. Si bien sabemos que las
enfermedades son inevitables tambin sabemos ahora que un gran remanente de
nuestro pasado est anclado en nuestras estructuras cubiertas creando potenciales y
debilidades fsicas. Por muchos aos nuestros cuerpos cargan con heridas no sanadas
ya que el cuerpo legalmente graba los eventos traumticos a travs de la estructura
muscular o tejido que energticamente est tenso. Al tomar una psicoterapia corporal
unimos la mente, el cuerpo, el espritu y la voluntad y podemos restaurar los
sentimientos, el placer y la expresin emocional. Ya no necesitamos vivir adentro de la
prisin si no que podemos vivir de manera liberada y encarnada. Sin embargo estar
encarnados y arraigados implica soltar muchas ilusiones, la grandiosidad y el ser
especiales para poder vivir una realidad arraigada y honesta con contacto y placer en la
47
experiencia de vida. Seala que en la terapia intentamos unir el cuerpo y la psique que
estn tan separados en la cotidianidad, encontrando un eslabn perdido de unin.
posibilidades infinitas, en donde cada uno de nosotros es una ola de este ocano. Seala
que somos creados a partir de l y que somos simultneamente, ocano y ola
ntimamente vinculados. As es como sabemos que somos seres circunscritos y no
circunscritos. Una parte de nuestra alma es no circunscrita, pura y poderosa; y por otro
lado es cuntica, personal y circunscrita.
Segn Thorwald Dethlefsen y Rdiger Dahlke (1983), mencionan que nuestro cuerpo
nunca est enfermo ni sano ya que en l solo se manifiesta la informacin de la mente.
Sealan que el cuerpo de una persona viva debe su funcionamiento precisamente a las
instancias inmateriales que llamamos consciencia (alma) y vida (espritu). La consciencia
emite la informacin que se manifiesta y se hace visible en el cuerpo. Hacen la
semejanza y dicen que la consciencia es al cuerpo lo que un programa de radio al
receptor, y dado que la consciencia representa una cualidad material y propia no es
producto del cuerpo ni depende de su existencia. Al hablar de sntomas de salud o de
enfermedad, podemos sealar entonces que ninguna de ellas puede ser propiamente
entendida, si no hablamos de la consciencia.
Dethlefsen y Dahlke (1983) sealan una diferencia entre combatir una enfermedad y
transmutarla. Sealan que la sanacin se produce exclusivamente desde una
enfermedad transmutada y jams desde un sntoma derrotado. Ya que la sanacin
significa que el ser humano se hace ms sano, es decir ms completo. Sabemos que
sanacin entonces significa redencin, incorporando lo que falta, proceso imposible si no
hay expansin de la consciencia. Entendemos entonces que los conceptos de
enfermedad y sanacin pertenecen a la consciencia, no slo al cuerpo en donde solo se
reflejan los estados de consciencia. Realmente llaman la atencin de manera importante
que la medicina acadmica habla de curacin sin tener en consideracin este plano de la
consciencia nico. Es importante entender que la aceptacin positiva incondicional de la
propia
dicotoma,
es sustancial
para
su sanacin,
ya
que
sta es amor y
Mattieu Ricard (2003), seala que la salud est totalmente relacionada con la
felicidad y que cuanto ms dependamos de las cosas externas y cambiantes para ser
felices, tenemos menos libertad interior y nuestra felicidad es menos estable. Aade que
tendramos que poder ser afectados por el mundo externo, aceptando nuestro sentir, sin
adjudicarle el poder de darnos o quitarnos la felicidad.
50
Cuando el cliente llega a psicoterapia podemos ver como tenemos ante nosotros la
separacin clara entre cuerpo y mente que se expresa a travs de sus interrupciones, de
sus aislamientos y del detenimiento especfico que tiene cada parte que no permite el
flujo de energa. Por otro lado, la psique tiene una idea de s misma y a travs de
imgenes, recuerdos se percata de s misma y se comunica. Poco a poco vamos
construyendo un poco de consciencia para unir secuencialmente estos mundos
aparentemente separados, para poderlos unir y comprender profundamente que en
origen siempre estuvieron unidos y que gran parte de la problemtica tiene que ver con
haberse separado en el camino. Es as como a travs del trabajo psicolgico y corporal
se redirige el flujo energtico y podemos encontrar la correspondencia (Reich, 1949).
51
no sabe que eso est ocurriendo es totalmente impensable. Debido a esto existe una
ceguera virtual en la medicina moderna hacia estos temas y una gana inconsciente de
negar los hechos demostrados. Seala que es muy sencillo darse cuenta que los
doctores prefieren la comodidad psicolgica de no tener que considerar los efectos de
sus pensamientos y creencias y en todo lo que esto puede acarrear. Implicara admitir
que mientras el cerebro acta de manera local, la consciencia puede actuar a distancia.
Cita al psiclogo Donald O. Hebb, quien en 1949 sostena lo que todava hoy domina la
neurociencia:
A pesar de haber sido escrito hace casi un siglo, este punto de vista en donde la
consciencia es inseparable del funcionamiento individual de los cerebros, permanece
siendo como una piedra fundamental de la psicologa fisiolgica. Las posiciones
materialistas como estas abundan y son parte del credo comn de la medicina
moderna. No hay espacio para las creencias del mdico para que se afecte de manera
no lgica el resultado de la psicoterapia. Sabemos que estas creencias como otras
estn fuertemente talladas en profundidad y en niveles emocionales profundos y
reflejan nuestro punto de vista, autoconcepto y nuestras actitudes bsicas acerca de la
consciencia.
Segn Dossey (1949) lo ideal es que las creencias del paciente y del mdico
coincidan. Ambos tienen que creer que el tratamiento va a servir. Ambos afectan el
resultado. El hecho de saber que las creencias del mdico y del psicoterapeuta afectan
el resultado nos deberan invitar a examinar crtica y detalladamente el comportamiento
y las creencias que traemos al tratamiento. Algunos doctores estn aconsejados por
sus abogados a poner el peor escenario ante sus pacientes. Muchos doctores lo nico
53
hemos
cubierto
condensado,
apresado
encerrado
casi
definitivamente el olvido del hombre y de la totalidad que nos trasciende sin reclamar la
totalidad. Indica que hemos olvidado que ms all de las posturas filosficas o
espirituales con las que acompaamos a los pacientes, tenemos que ver que habita en
un cuerpo que lo limita y lo posibilita y que posiblemente cada clula suya tiene
consciencia de totalidad. Indica que fue el primero en invitarnos a incluir lo corpreo:
hablando de mi estmago y no de el estmago de mi hgado y no de el hgado,
etc. Desde el lenguaje nos obliga a re-poseernos y ya no a ponernos en manos de otro
como un paquete que no sabemos lo que contiene.
Adriana Schnake (1995) seala que el psicoterapeuta tiene que dejar de temerle
al cuerpo y tiene que saber que se puede contar con l, porque est hecho de tal modo
que es ptimo para lo que de l esperamos, todo esto podemos y debemos aprenderlo,
porque para que realmente podamos facilitarle a otra persona que se re-conecte con su
cuerpo, tenemos nosotros que empezar a vivenciar el propio. Sin embargo, sabemos
ms de autos y motores que de nuestro propio cuerpo, y esta ignorancia no nos est
ayudando a unir las partes separadas, puntualiza.
54
CAPTULO DOS
1990), los psicoterapeutas no nos salvamos de esas creencias compartidas que tanto
enferman al alma humana y de las que creemos habernos librado por ser terapeutas o
por estar en algn proceso espiritual y/o psicoteraputico.
Carvajal (2000), en El arte de curar refiere que "si la sugestin salva una vida
entonces la sugestin es un medicamento imperial". Refirindose a cmo la creencia ha
salvado a muchsimos de sus pacientes de cncer terminales. "Como si creer fuera en
s mismo una prodigiosa medicina. En esos cuerpos derrotados sin energa, sin apetito,
existan reservas para sobrevivir en una energa mayor, ms grande sin duda que toda
la reserva de la energa fsica les devolvi la vida". Carvajal indudablemente se est
refiriendo a una energa espiritual que sostiene, da pie, e inyecta de fe al enfermo para
salir adelante, echando mano de fuerzas mayores a su reserva fsica.
y que cuando hacemos uso de ella podemos sobreponernos a grandes retos tanto de
enfermedad como de dificultades de la vida en general. En nuestra cultura, en donde no
tenemos la costumbre de darle su lugar preponderante a la Dimensin Espiritual como
la fuente del crecimiento y de la sanacin, que por otro lado tanto anhelamos, estos
tipos de sanacin milagrosos sorprenden y a veces se les atribuye una denominacin
mgica o diablica.
en
algunas
regiones
andinas
altas,
pueden
comunicarse
con seres invisibles y demandar su proteccin y ayuda; por ejemplo, una casa que es
un lugar sagrado como una montaa, es el hbitat de una presencia sagrada; el
equivalente de los ngeles o devas, que en esta cultura andina reciben el nombre de
apus. Estos mdicos, al comunicarse con el mundo espiritual, son guiados para hacer
algn tipo de sanacin y curacin especfica, y no podran concebir su trabajo sin esta
comunicacin y respaldo espiritual. Es decir, la dicotoma cuerpo-mente est alejada de
su paradigma mdico y saben por tradicin que la presencia de la espiritualidad en la
sanacin y en la curacin de sus pacientes es deseable, inevitable y definitoria.
(Carvajal Posada, 2000)
58
Laura Huxley (como se cit en Jay Brown, 1993) en su artculo Uniendo al cielo y la
tierra dice:
Cuando el Cuerpo/Mente es atendido, entonces, como una flor libre de semillas,
el Ser Superior naturalmente emerger
Huxley (como se cit en Jay Brown, 1993) al referirse al movimiento del potencial
humano y el humanismo, se refiere que es un aspecto muy interesante de la vida el que
al tener cuerpos y mentes limitadas siempre tendrn un potencial hacia donde crecer y
ms curiosidad. Lo posible es inmenso y refiere que ella siempre quiere estar presente
en ello aunque sea muy cansado. ste inters en lo posible y a veces lo imposible le
surge cuando la clnica Mayo dictamina que su mejor amiga Ginny Pfeiffer morir en
seis meses por cncer terminal y ella comienza a investigar en ella y vive 23 aos ms.
Refiere que la relacin entre cuerpo y mente es misteriosa y muy enorme.
Al hablar del rompimiento histrico entre cuerpo y mente, se refiere que empez
mucho antes de que Descartes dividiera la mente de lo divino y antes de que San
Agustn condenara al cuerpo sino que empez con los catlicos que queran controlar la
vida espiritual y separarla del cuerpo porque el cuerpo era sucio y que comenz
tambin desde los griegos Platn y Aristteles (como se cit en Jay Brown, 1993).
Al hablar de lo eficiente de una psicoterapia (como se cit en Jay Brown, 1993) dice
que lo ms importante es la relacin entre el terapeuta y el cliente, ponindole nfasis al
59
valor humanista, y subraya que cualquier psicoterapia que no incluya el cuerpo desde el
principio est incompleta. Seala que cada vez es ms obvia la manera en la que
tratamos a nuestro cuerpo- mente es la manera en la que nuestro cuerpo-mente nos
tratar a nosotros. Al hablar de la diferencia entre lo psicosomtico y lo psicolgico dice
que es una diferenciacin absurda, ya que lo psicosomtico es una caracterstica
presente en cualquier estado del ser. Seala que la psicoterapia debe ser una prctica
somtica, afectiva, cognitiva, volitiva y transpersonal, incluyendo todas las dimensiones
de la naturaleza humana de manera comprensiva.
La dimensin espiritual del ser humano siempre est presente, pero muchas veces
est dormida y emerge de manera natural cuando estamos listos, no como una meta a
obtener. La espiritualidad necesita un espacio para emerger como una flor que necesita
florecer y todo lo que est encima de ella se necesita limpiar. Tenemos que darle
espacio y la flor florecer hermosa por s sola. Cuando el cuerpo-mente ha sido
atendido entonces como una flor sin ramas que la cubran, el ser superior va a florecer
en el servicio como parte de su propia auto expresin. El cuerpo, la mente y el espritu
no estn divididos ni se separan: son un continuum.
Goleman (1999) comenta que hace 20 aos que los mdicos, bilogos y psiclogos
han empezado a asumir la interrelacin entre los estados emocionales y el bienestar
mental y fsico. Sin embargo los pensadores budistas han sido conscientes de esta
capacidad de sanacin de la mente desde hace ms de 2000 aos.
Goleman (Pg. 42) seala que nuestras emociones pueden afectar de gran manera
nuestra salud. Indica que por una parte el peso de los datos cientficos demuestran que
el vnculo entre las emociones y el cuerpo son especialmente fuertes en el caso de los
sentimientos negativos, como son la ira, la ansiedad y la depresin. Si estos estados
son intensos y prolongados, pueden aumentar la vulnerabilidad a la enfermedad,
empeorar los sntomas o dificultar la recuperacin. Por otra parte, estados ms
positivos como la ecuanimidad y el optimismo, parecen tener efectos positivos sobre la
60
salud, a pesar del dato de que el impacto de las emociones positivas no es tan fuerte
como el de las negativas.
Indica que el nuevo descubrimiento de los ltimos cinco o diez aos es que los
estados mentales pueden afectar la fuerza del sistema inmunitario y cardiovascular. Los
estados emocionales concretos que voy a tratar son los nicos sobre los que se ha
llevado a cabo algn tipo de investigacin. Los estados afectivos que se han estudiado
son la ira y la hostilidad, la depresin que no slo incluye la tristeza, sino tambin la
autocompasin, la culpa y la impotencia; el estrs que abarca la agitacin, el
nerviosismo y la ansiedad, y la represin o la negacin de la ansiedad.
Carvajal (2000) seala que "entre pensar algo, sentirlo, gritarlo, no existe
energticamente mayor diferencia. El pensamiento da en el blanco, casi tan
seguramente como nuestras palabras. Todos respiramos en la atmsfera creada por
nuestros pensamientos y emociones y esa atmsfera se mezcla con los pensamientos y
61
Carvajal (2000) refiere que "en la medicina una molcula se mira como un paquete
de energa y un hombre como un campo de conciencia, y donde adems de sangre,
tiene molculas. En un paciente se percibe un potencial de Amor Infinito". Y contina:
en ese salto ocurre un profundo proceso de transformacin interior, por eso es un salto
hacia adentro en la que la prctica mdica deja de ser slo una actitud determinada por
conocimientos externos, para convertirse tambin en una actitud diferente hacia la
62
vida. Refiere que muchos pacientes han encontrado otra forma de ver su cuerpo: una
enseanza
de
sus
enfermedades
un
propsito
en
su
vida.
en esta relacin. Al respecto, nos dice: Detrs de cada tcnica teraputica deba existir
un terapeuta consciente de lo que hace un servidor amoroso que sirve de puente para
la restauracin de la integridad del ser. Detrs de cada paciente debe haber alguien con
una conciencia participativa. (Carvajal Posada, 2000)
Carvajal (2000) subraya que la actitud de escucha es aquella que nos permite
acompaar al paciente, despertarlo ms que hipnotizarlo, escucharlo ms que
sermonear. El camino de la terapia propone conquistar ese tiempo interior del silencio
en el que es posible auscultar el alma y leer el mensaje que cada enfermedad nos trae
para comprender que las obras en el cuerpo o la psique son slo el reflejo de algn
aspecto de la conciencia.
64
Carvajal (2000) indica que cuando la ciencia y el arte se conjugan con el amor y la
teraputica en el fluir total de la conciencia intencional dirigida a restaurar las relaciones
del hombre consigo mismo y su entorno, hablamos de sanacin. La sola intencin de
sanar abre la brecha por donde circula la conciencia de s. Es la forma de conciencia
humana que da al hombre la posibilidad de sanar desde toda su vida, con toda su vida
para que los ojos sean canales del alma. Sanar es una bsqueda del sentido de la vida
con todos los sentidos unidos al sentido sinttico de la mente y el sentimiento
impersonal del amor.
65
Samso (2014) plantea que es muy importante la gratitud, aunque no hayan hechos
extraordinarios as logramos estar ms contentos sean cuales sean las circunstancias
de nuestras vidas. Explica que existe en la gratitud condicional y la incondicional. La
primera consiste en sentirse bien cuando las cosas salen como uno espera, pero como
no siempre, es as acaba siendo una emocin poco duradera. La segunda consiste en
una actitud, es el hbito de vida sentirse bien sin que haya ocurrido nada especial, es
decir, estar agradecido por todo y por nada a la vez, ya no estar condicionados por
ningn otro acontecimiento. Esta actitud es precursora de la felicidad y el xito personal
en la vida.
Si tenemos en cuenta cuntas personas han contribuido a que este da sea posible,
que nos levantemos, que nos acostemos, que recibimos bendiciones innumerables de
personas desconocidas que a veces hacen que nuestras vidas sean mejores. Por
ejemplo: el desayuno, el agricultor, el granjero, el molino, el transportista, el tendedero,
el sol, la lluvia, el viento, las manos que te sirvieron, etctera.
Necesitamos estar muy presentes para ser conscientes de las cosas buenas y
positivas que nos rodean. Necesitamos ver hacia atrs para ver por ejemplo los
descubrimientos y avances tecnolgicos que hacen que nuestra vida sea ms segura,
sin olvidar a los pensadores y sabios que han enriquecido a la humanidad. Creo que
cuanta ms claridad tenemos en la sensacin de pertenencia a la humanidad ms fcil
66
Parece entonces que el hbito del agradecimiento nos ayuda a reintegrar las partes
de las que estamos hechos ayudndonos a conectar con el Principio de Unidad, y
ponindonos ms en contacto con la espiritualidad innata, con el anhelo profundo de
trascendencia. El famoso Thanks Giving de Estados Unidos y Canad es el da de dar
gracias, es una de sus fiestas ms importantes. El agradecimiento se ensea
culturalmente ms en algunas sociedades que en otras. El agradecimiento como virtud
humana no es religioso, pero nos acerca paradjicamente a Dios. Podramos pensar
que para verbalizar el agradecimiento, primero hay que recibir algo favorable. No es as:
ser capaz de dar gracias por algo que an no ha sucedido, aunque esta posibilidad
puede ser incomprensible para muchos, tiene ventajas: la ms obvia es que podemos
empezar a estar agradecidos en este momento, sea cual sea la situacin personal.
Las personas felices sienten gratitud por todo y por nada. No necesitan razones
concretas. Viven instaladas en reconocer lo bueno que tienen por el simple hecho de
estar vivas, al margen de lo que les sucede. No necesitan razones de peso para estar
67
agradecidas por haber recibido la vida; inclusive hay personas que agradecen cosas tan
intangibles como una sonrisa, un amanecer, etctera. Incluso agradecen el futuro,
eventos negativos o dolorosos en su vida. Esta es ya una maestra en el
agradecimiento: es bueno lo malo finalmente. Ese es el tipo de agradecimiento gratuito.
Al hablar de espiritualidad Amar sobretodo es estar presentes, dice Thich Nhat
Hahn (1991, pg. 32), es muy difcil ser agradecidos si no se est presente. Sin
embargo, seala que para estar presente se necesita entrenamiento prctico si no, no
ests presente. La pregunta es tienes tiempo para estar presente y amar? Amar es
estar. Ser amado es ser reconocido por el otro que est. Nhat Hahn seala que
tenemos cuatro aspectos en el amor: primero el Maitri, o amor amabilidad. Segundo el
amor karuna o amor compasin. Tercero: el amor mudita que es el amor alegra y el
cuarto, el amor upeksha o amor ecuanimidad. Todos estos tipos de amor nos llevan a
conectarnos con la Unidad o Espiritualidad.
Abrir el corazn es, entonces, estar presentes, y esto nos hace tocar la profundidad
de nuestro ser o espiritualidad. No es una teora, sino que es un darnos cuenta sentido
por el cuerpo-mente. Es una experiencia innegable aunque la ciencia no lo sepa
explicar con precisin y quiz nunca pueda. De esta manera el corazn crece y vemos
cmo en realidad estamos hablando de la aceptacin positiva incondicional humanista.
Como indica Anatolio Freidberg (1983), seala que los fsicos cunticos han estado
aproximndose a temas en el campo de la filosofa y la psicologa, basndose en los
estudios acerca del comportamiento de las partculas y de las ondas, llegando a la
conclusin de que la percepcin influye determinantemente en el fenmeno que se
pretende identificar. Esto nos ha llevado a la conviccin de que existe la posibilidad de
una coexistencia de realidades diferentes que requieren de una percepcin no
convencional para poder tener acceso a ellas. Lo cierto es que estamos ante un
fenmeno que est acercando al mundo del mstico-espiritual con el del cientfico: los
lenguajes son diferentes y sin embargo ambos estn manejando aspectos de los cuales
no podemos tener certidumbre. Es algo que va ms all de la percepcin ordinaria y es
68
algo que podemos considerar fsico e interconecta a todo el universo y que puede ser
percibido por el camino de desarrollo, de las tradiciones msticas, o por el pensamiento
inferencial del cientfico cuntico. Realmente estamos cada vez pudiendo integrar la
ciencia y la espiritualidad en un lenguaje, en una visin, misin y bsqueda, que son la
misma.
69
Como hemos sido moldeados por nuestra educacin y cultura bajo el punto de vista
material y dual, para entrar en contacto con este Todo, con la mente Universal o Dios,
parte del proceso consiste en un desaprender el miedo perceptual y cognoscitivo, por
medio de prcticas como la meditacin, la oracin, la reflexin, el arte, la utilizacin de
cuentos de enseanza, koans, parbolas, psicoterapia que incluyan la espiritualidad,
etc. El ser humano anhela reconectarse con su propio origen y con Dios: recuperar la
memoria.
psicodlicas. La glndula pineal se activa cuando la gente tiene experiencias msticoespirituales. sta se forma en el da 49 del embarazo y los tibetanos dicen que el
da
49
el
alma
encarna
en
el
cuerpo.
En
el
da 49 tambin el
feto se forma como femenino o masculino. Es por eso que se le llama la glndula de la
Espiritualidad.
El
DMT
es
un
componente
qumico
que
puede
ser
un
71
CAPTULO TRES
METODOLOGA
publicaciones
importantes,
son
maestros
universitarios,
expositores
El anlisis de los datos a partir de las entrevistas grabadas con cada uno de los
especialistas fue:
73
74
ENTRE-
TEMAS
VISTADO
PRINCIPIO
PSICOTERA-
PSICOTERA-
CUERPO-
RELACIN
LA
DE
PIA
PIA
MENTE
ENTRE ESPI-
DEL
UNIDAD
RAL
RITUALIDAD
TERAPEUTA Y
Y/O
SUS VALORES
ESPIRITUA
RAPIA
Y CREENCIAS
CORPO-
HUMA-
NISTA
PSICOTE-
PERSONA
PSICO-
LIDAD.
RELIGIN
1.Juan
Siento mu-
La necesidad
El mbito de
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Lafarga
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las
la
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Tanto
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75
que
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La
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inherente
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para mi.
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un
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de l, por eso
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personas
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76
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vez
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tiene
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2.Jos
La
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Contacto con
Lo importante
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es
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la
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tienen
los
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mente
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persona
haba
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la
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Como
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La
el cuerpo sano
el
espiri-
sana
verdad.
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ms
que
te-
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de
cimiento de tu
Dios
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cambiando
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y no es una
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77
imagen fija.
esto.
Finito nunca
vas
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que
vaya-
mos ya con
la
nece-
sidad de la
concepcin
unitaria.
3.Ana
Adems de
La espirituali-
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Hay
Mara
la
dad
tros no diag-
que
ayudar
Gonzlez
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ps-
que trasciende
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quica,
so-
el cuerpo y lo
de todas ma-
hacia la tras-
espiritualidad,
lugar a donde t
cial y fsica,
integra. Traba-
neras tenemos
cendencia,
es decir, que
no has ido y no
jar la espiritua-
una
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tiene
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tualidad:
mas
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persona.
una
la espiritual
bajar
Adems de la
sin. Siempre
ejemplo, intro-
y que es la
memoria
congruencia,
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el aqu y el
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alguna
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actitud
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con
la
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unidad
con alegra.
idea
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ir
probleen
valores,
que
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ya no est de
tales. Lo que
acuerdo
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proceso es T
de manera
eres eso. No
formal.
lo tienes que
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buscar afuera,
sona va a
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elegir
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gente
se
por
no le sirve, o
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psicoterapia
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Cada
el
mucha
con
lo
78
al-
le
va
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Hay
intro-
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yectos
piritualidad
simplistas,
pseudo-
conec-
muy
tarse en la
espirituales,
unidad.
La
cons-
ciencia evo-
que
luciona
en
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una espiral
tristeza, no de-
ascendente
beras de llorar
si alguien que
descen-
no
dente.
quieres
Somos
muere.
te
se
la
luz.
4.Luis
Cada
vez
No concibo a
El ser huma-
El
Mariano
me
Aceves
ponen
la psicoterapia
no no necesita
anlisis
ms de mal
de Rogers co-
para
reca estarme
humor
mo no trans-
ser bueno, ni
dando y no me
divisiones y
personal:
el
para amar, ni
daba nada: en
creo menos
enfoque
cen-
cambio en la
en ellas.
trado
es uno.
meditacin
las
en
la
Dios
psico-
persona es o
Zen
no es, y si es,
cosas
es
nutridoras.
trans-
personal.
pa-
encontr
muy
79
5.Ruella
Cuando fui
El propsito
No
Frank
al
de
es
espiritual.
pueda poner en
Gran
Can
por
quin?
si
lo
Porque
el
Tanto el Gran
palabras. Creo
primera vez
propsito
es
Can
que
o algo tan
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el
bello como
consciencia
son momentos
espirituales
eso, es tan
est
de gran com-
damos un paso
resonante
damos
pasin,
hacia
kinsica-
paso
ah
y
un
como
nacimiento
esta
cuando
estamos siendo
el
hacia
no es empata,
presente.
te
ella, quiz ni
es estar pre-
Cuando
das cuenta
siquiera es tu
quedamos con
que el Todo
propsito ni el
magnitud que
lo que sentimos
es
mo,
eres
y en contacto
mente,
ms
quiz
grande que
damos
t. Sientes,
paso
resuenas
propsito
con todo lo
mayor
que es y lo
nos
damos
que fue. En
cuenta,
terapia,
mas
no
testigo,
nos
un
ests con el
con
un
otro y el otro
cuerpos,
est
contigo.
sentimos ms y
Podemos decir
ms. No hablo
que
com-
mucho de esto.
nada
pasin es el
Para m cuando
pasa.
camino
hacia
me quedo en el
la experiencia
presente con lo
no
todo el con-
quiz
tacto
es
propsito ms
espiritual.
que
mutuo
ni
grande es una
Yo
aunque
recproco.
experiencia
trabajo
Cuando hay
espiritual
un contacto
tambin pode-
sonancia,
compartido
mos
incluyo en mi
universo
aunque sea
paso
experiencia
general no es
moment-
afuera de ella.
neo,
hay
una presencia
ms
el
la
nuestros
dar
un
hacia
con
como
eso,
la
rete
siento,
sea
doloroso, siento
que
hay
una
bondad ah, y el
en
eso es la base
benigno.
de
Simplemente
compasin.
la
traer a alguien
al cuerpo y la
grande y no
presencia
se
s si tenga
expande en el
las palabras
presente.
para ello.
Cuando yo me
Para m mi
siento
en
80
propsito es
silencio,
antes
encontrar
de
ms
com-
paciente, rezo.
pasin para
Y no siempre lo
m misma y
hago antes de
para la otra
cada
persona, si
pero
es
que
mucho cuando
tengo
una
tengo
meta
en
ver
un
sesin
lo
hago
algn
problema
con
terapia
alguien
me
sera
siento
ayudarlos a
encontrar
solo
compasin
consciente,
por s mis-
sentirse
mos y por
contenido por ti
otros.
atorada
en
el
es
cuando
te
sientes
contenido
seguro
y
enton-
ces te puedes
abrir un poco tu
corazn ms a
la
compasin.
Si la compasin
est
ah,
somos
conscientes de
ella
ya
entramos en el
mbito
espiritual.
Nos
sentimos
seguros con el
otro.
81
6.Medar-
Para
que
La
memoria
Si un espritu
El espritu es
Las
do
exista
una
no es nutrido y
un
somos
experiencia
hace
alimentado,
vivo y encar-
dores
llamada
queda desnu-
nado que no
esencia o natu-
religiosa,
obscena o con
trido,
puede
ser
raleza y eso es
tenemos
una
sonrisa,
brecido,
neutro,
que
lo
que
ms
all
ms
posible
enferme,
Plas-
cencia
tener
resonar
de
empoes
espritu
personas
buscapor
que
facili-
tiene la opor-
tamos
tunidad
terapia: la bs-
experien-
nuestra
que
cias
que
comprensin,
porque la vida
desarrollarse
queda.
van
ms
porque resue-
del
espritu
hacia la luz o
El mstico (el
all
del
na en lugares
est
hecha
hacia
que
espacio y el
ms profundos
para
enrique-
tiempo,
de nosotros y
cerse,
como es la
de
rrollarse
cultura
historia.
humana, el
La
enfer-
Si el terapeuta
lenguaje, el
medad
fsica
no ama a su
arte,
quiz
es
paciente,
pintura
producto
de
difcilmente
La
una
la
vida
nuestra
crecer.
enfer-
desay
obscuridad.
de
en
la
est
en
contacto con la
divinidad)
es
ms emptico y
menos dspota.
trabajo
su
ser
espiritual es
medad en el
profundo
la que nos
espritu que se
delicado,
permite
llama apego.
entendiendo por
tener
un
futuro
tener
una
amar
no
posesin,
la
sino
la bsqueda del
esperanza
bien
Pensar que
otro.
la
para
espiri-
tualidad es
solo
para
aquellos
que
prac-
tican un tipo
de
religin
especfica
es no en-
82
el
tender
la
naturaleza
humana.
7.Alberto
Si decimos
Espiritualidad
Segrera
que de aqu
es
a la dere-
dencia
cha y a la
rente a todo
izquierda es
ser humano.
trasceninhe-
Para lograr la
Adems
lio
conexin espi-
actitud
Freidberg
ritual con mi
de
paciente,
de
debe
Para
la
espiritualidad
separacin
la
cuerpo mente
en terapia es el
conocimiento
viene de haber
tipo de relacin
para
poder
idealizado las
que establezco.
que
trasmitir
la
ciencias emp-
Si logro esta-
ricas
esto
dificulta mucho
de relacin, va
interno y de tu
el
ms all de lo
propio
miento
no
depende
de tu momento
y
tu
ritmo
proce-
so. El trabajo
haber
La gnesis de
espiritualidad.
acercaa
la
emocional y de
espiritualidad.
lo relacional. El
con el cuerpo
contacto espiri-
es
tual
necesario
con
mi
porque a ve-
paciente es casi
ces el trabajo
fundamental
psicolgico no
para el trabajo y
basta.
la resolucin de
sus temas.
Desde joven he
buscado
la
espiritualidad
ms all de la
religin y des-
83
pus lo hice en
el budismo zen
y ahora en el
sufismo.
9.Steve
El primero,
Ahora, cuando
Gunther
es los con-
les pregunto de
ceptos espi-
un objetivo es-
rituales
piritual, pueden
creen-
empezar a pen-
cias espiri-
sar qu tanto
tuales;
tiene
las
la
que
ver
segunda
tiene
que
acciones
experien-
prcticas,
cias espiri-
cunto
tuales;
la
tercera tie-
modo de ser. Lo
ne que ver
con
es que pode-
las
tiene
prcticas
mos aplicar el
espirituales.
mismo
Asi
que
estos
son
tiene
modelo
que
el
ver
con
desa-
ceptos fun-
rrollo personal,
damentales
porque en tr-
para poder-
minos de mejo-
nos zambu-
rarnos
llir a lo que
personas,
es la espiri-
mejorar
tualidad.
tras relaciones,
como
nues-
tenemos varias
ideas que tienen que ver con
el
desarrollo
personal, crear
84
los
conceptos,
como la autenticidad,
algo
muy comn en
el mundo psicoteraputico. Tenemos muchas
prcticas
que
85
CAPTULO CUATRO
RESULTADOS
1. PRINCIPIO DE UNIDAD Y/O ESPIRITUALIDAD
ENTREVISTADO
Juan Lafarga
86
Ruella Frank
Frank recuerda que cuando fue al Gran Can por primera vez o al
ver algo tan bello como eso, se da una resonancia quinsica, y nos
damos cuenta de Todo lo que es ms grande que nosotros. Sentimos
que resonamos con todo lo que es y todo lo que fue. En psicoterapia,
no todo el contacto es mutuo ni recproco. Cuando hay un contacto
compartido, aunque sea momentneo, hay una presencia ms grande
y refiere que no sabe si tenga las palabras para ello, refirindose a la
Unidad.
Seala que para ella su propsito es encontrar ms compasin para
s misma y para la otra persona como una de sus metas al dar
psicoterapia. Es decir, apoyar a las personas a que encuentren
compasin por s mismos y por otros.
Alberto Segrera
87
Anatolio Freidberg
Steve Gunther
2. PSICOTERAPIA CORPORAL
ENTREVISTADO
Juan Lafarga
No coment al respecto
88
Ruella Frank
Indica que la memoria del cuerpo nos hace resonar con una seal
obscena o con una sonrisa, ms all de nuestra comprensin, porque
resuena en lugares ms profundos de nosotros y de nuestra historia.
Opina que la enfermedad fsica quiz es el producto de una
enfermedad en el espritu que se llama apego.
Alberto Segrera
Anatolio Freidberg
Steve Gunther
No coment al respecto
3. PSICOTERAPIA HUMANISTA
ENTREVISTADO
Juan Lafarga
89
Ruella Frank
la
vida
del
espritu
est
hecha
para
enriquecerse,
Alberto Segrera
Anatolio Freidberg
Steve Gunther
4. CUERPO MENTE
ENTREVISTADO
Juan Lafarga
90
viene algo ms y otros piensan que ah acaba todo: que solo somos
cuerpo. Aade que hay preguntas que no tienen solucin ni por la
ciencia ni por la filosofa y que solo se contestan por la propia salud y
el propio desarrollo: el propio proceso.
En sus palabras, comenta: Si negamos la relacin que hay de
teologa y de filosofa dentro de la psicologa por querer ser cientficos
extremos, no agarramos el toro por los cuernos y el toro nos puede
embestir. Una espiritualidad que niega las otras realidades (materia o
ciencia) es dudosa para m: somos cuerpo y mente.
Ruella Frank
Alberto Segrera
Anatolio Freidberg
Steve Gunther
91
Juan Lafarga
Ruella Frank
92
presente con tal magnitud que eres testigo, estas con el otro y el otro
est contigo. Aade que podemos decir que la compasin es el
camino hacia la experiencia espiritual dentro de la psicoterapia, as
como de la vida. Comenta que como trabaja con la resonancia y la
incluye de forma emptica, ve que eso es la base de la compasin.
Alberto Segrera
es
Anatolio Freidberg
Steve Gunther
93
Juan Lafarga
Ruella Frank
94
sienta en
Alberto Segrera
Anatolio Freidberg
Steve Gunther
95
CAPTULO CINCO.
DISCUSIN Y CONCLUSIONES
El experimento es el cuestionamiento que la ciencia le
hace a la naturaleza, y la medicin es el registro de la
respuesta de la naturaleza.
Max Planck
Todo el universo est dentro de cada persona; por lo
tanto, Dios est dentro de cada persona. Y cada
criatura viva lleva dentro de s una parte de Dios. La
nica manera de llegar hasta esa parte divina que se
halla dentro de ustedes es recorriendo el estrecho
sendero del autodesarrollo... La base de este esfuerzo
es el autoconocimiento.
Pierrakos, 2015. Conf. 11,
Cada vez que haces esfuerzos (por ser consciente),
adquieres un poco ms de msculo espiritual. Tal como
un infante que aprende a caminar, uno comienza y
vuelve a comenzar.
G. I. Gurdjieff
El tema del Principio de Unidad vs. la Dicotoma entre espritu y cuerpo, entre materia y
espritu, entre ciencia y espiritualidad, etctera, es un tema muy antiguo y se ha investigado
mucho con respecto al efecto de dicha separacin. Cogito ergo sum o pienso, luego existo
dicho por Ren Descartes (1988) en el siglo XVI marca en la historia del pensamiento
humano esta posibilidad filosfica de separar al hombre en sus partes para comprenderlo y
marcar as el inicio de un pensamiento cientfico que para profundizar y comprender
96
como proceso mental no es una verdadera Unin, sino que solo el contacto real de un
individuo con otro establece en la personalidad las condiciones que son requisito para la
verdadera Unin interior, mostrndose como una fuerza tremenda, que mueve a los
individuos el uno hacia el otro, haciendo que la separacin sea muy dolorosa. En esta
lectura se nos aclara que la vida y el placer son una Unidad. Se subraya que la meta de la
vida tiene que ver con el contacto y la Unidad, que nos hace salir de la reclusin y la
separacin. Se nos recuerda que existe, sin embargo, en el ser humano el miedo a la
aniquilacin, y por eso nos oponemos a la Unidad, naciendo de ah la creencia de que
oponernos a la vida da vida, paradjicamente. Esto nos deja claro que la naturaleza
humana, por temor, desarrolla una oposicin a la Unidad que precede al surgimiento de la
filosofa cartesiana. En esta paradoja es que aprendemos a desconfiar de nuestra fuerza
espiritual y de la Unidad misma. De esta paradoja nace, segn Eva Broch Pierrakos, la
insistencia de dividir cuerpo y espritu perpetuando este concepto dualista de generacin en
generacin, etiquetando aquello que tenemos como errneo y malo. Vemos cmo as a
travs de la historia las personas han sealado que el cuerpo es pecaminoso y opuesto al
espritu que es bueno.
La maestra Ana Mara Gonzlez (2012) nos recuerda que la psicologa y la psicoterapia
reincorporan el principio de Unidad y de espiritualidad a partir del surgimiento de la
psicologa transpersonal, y es as como vemos que la consciencia es una espiral
ascendente o descendente, enmarcada dentro de la visin Unitaria en donde no es mejor o
peor tener ms o menos consciencia. Sin embargo, nos subraya que estamos en un nivel
de consciencia en donde permanentemente estamos en la dualidad entre la sombra y la luz.
Luis Mariano Aceves (2012) nos recuerda que es importante dejar de creer en las
divisiones y de esta manera poder ir atenundolas.
Ruella Frank (2013) sostiene que un buen vehculo para reconectar con el principio de
Unidad es la belleza ya que al percibirla con consciencia sucede una resonancia quinsica
que nos hace sentir y entender que hay algo ms grande que nosotros a lo cual
pertenecemos. Al referirse a la psicoterapia y el principio de Unidad, refiere que, aunque el
98
Plascencia (2015) nos seala que reducir a la religin la vida espiritual es no entender la
naturaleza humana y toca un punto muy importante al referirnos que es la espiritualidad y el
principio de Unidad mismos, los que nos dan una idea de futuro y de esperanza. Para l
alguna de las formas de ponernos en contacto con la Unidad tienen que ver con el arte, la
cultura, el lenguaje, etctera, para poder estar en conexin con dimensiones ms all del
tiempo y del espacio.
Segrera (2012) nos recuerda que dentro del desarrollo humano y las psicoterapias
mismas, nos tenemos que alejar de crear fronteras entre desarrollo humano bueno y
desarrollo humano malo. Parece cierto que mientras llevemos las dicotomas y
separaciones dentro de nosotros, las vamos a proyectar necesariamente a todo nuestro
entorno laboral, sexual, social, personal, poltico, cultural, etctera.
Steve Gunther (2012) al hablar del principio de Unidad, nos dice que es importante
distinguir entre creencias y prcticas espirituales, para poder as profundizar y adentrarnos
en la vida espiritual misma, que ser lo que nos ayude a integrar la experiencia y la prctica
de Unidad.
Es bien sabido que existe una espiritualidad terica, teolgica y filosfica y que existe
una espiritualidad prctica, o de la conducta, o de las relaciones, o de la accin. Cuando
estamos hablando de la espiritualidad en la psicoterapia, de cmo favorecer y apoyar el
desarrollo espiritual en nuestros pacientes y en nosotros mismos, lgicamente nos estamos
refiriendo a la espiritualidad prctica, tambin llamada en ingls engaged spirituality. El
doctor Lafarga (2012) al referirse a que la espiritualidad si no es prctica se queda coja o es
insuficiente, nos relata el siguiente cuento: estaban varios maestros espirituales trabajando
juntos,
cuando
se
fue
la
luz.
Los
dominicos
dijeron
vamos
hacer
unas
franciscanos dijeron haba que darle gracias a Dios porque nos quita lo que no
necesitamos y se preguntaron, dnde estn los jesuitas?, y alguien contest se fueron a
arreglar el fusible. Es as como en esta pequea historia nos cuenta cmo la parte prctica
de la vida, la parte de la accin que slo es posible a travs de nuestra dimensin
psicocorporal, es fundamental para que realmente estemos hablando de una espiritualidad
completa. De esta amena manera nos aclara cmo es que la espiritualidad tiene que ser
conducta aterrizada en el cuerpo y no slo teora, es decir, no debe de ser un impedimento
para resolver las cosas de la cotidianeidad ni evitar responsabilidades.
La psicoterapia humanista que surge en los cincuentas y sesentas como producto de una
necesidad de tener una psicoterapia menos elaborada, ms humana, prctica y no por ello
menos profunda, surge en un momento colectivo de profundo anhelo de mayor verdad y
respuesta espiritual a tantas incgnitas humanas que slo estaban siendo atendidas por el
psicoanlisis y el conductismo de manera parcial, racional, sin ningn inters por el holismo
ni por la Dimensin Espiritual del ser humano, ni fuera, ni dentro del consultorio. Surge
como un grito de esperanza, como una necesidad profunda de sentirnos aceptados y vistos.
Surge como una necesidad de pertenencia y consciencia de Unidad y desde luego, de
evolucin. En ese sentido Lafarga (2012) nos recuerda que Carl Rogers, quien estudi
teologa, deca que la materia orgnica y la materia inorgnica conforman el desarrollo de la
consciencia, y ms all de ella, cada vez sta se va haciendo ms compleja. Rogers, como
sabemos, hacia finales de su vida con la muerte de su esposa, desarroll ms su parte
espiritual. Sin embargo podemos percibir en toda su obra esperanzadora y de fe en el ser
humano, que l tena una espiritualidad slida a partir de la cual se poda ver a s mismo
como un ser digno de confianza, con capacidad para desarrollar su sabidura organsmica a
travs de sus dificultades y as por lo tanto, pensar que lo pueden hacer sus clientes. Difcil
sera imaginar una psicoterapia humanista sin el trasfondo, motivacin y meta espirituales.
Al haber revisado en esta tesis a cada uno de los autores en psicoterapia humanista,
podemos comprender que la psicoterapia humanista intrnsecamente es espiritual en su
origen, en su metodologa y en sus resultados. El vehculo para la sanacin de la dicotoma
es la incorporacin de la Dimensin Espiritual en nuestra vida y en el trabajo
psicoteraputico.
de llorar si alguien se nos muere, etctera, y que esto solamente nos confunde.
Entendemos entonces que cuanto ms espiritual es una persona, ms profundamente
humana es y se muestra. Al respecto Luis Mariano Aceves (2012) seala que no concibe a
la psicoterapia de Rogers como no transpersonal, es decir, el enfoque centrado en la
persona es o no es, y si es, es transpersonal. Medardo Plascencia (2015) nos comenta al
respecto de la psicoterapia humanista que si un espritu no es nutrido y alimentado, queda
desnutrido, empobrecido y es ms posible que enferme, porque la vida del espritu est
hecha para enriquecerse, desarrollarse y crecer y que eso es el desarrollo humano. Y
acerca del mismo tema Anatolio Freidberg (2015), nos recuerda que en el desarrollo
humano, adems de actitud debe de haber conocimiento para poder trasmitir la
espiritualidad.
102
cuernos y el toro nos puede embestir. Una espiritualidad que niega las otras realidades
(materia o ciencia) es dudosa para m: somos cuerpo-mente.
Gmez del Campo (2015) sugiere que la conexin entre espritu y cuerpo se facilita a
travs de la percepcin de la belleza, entendiendo a sta como un vehculo reunificador
del cuerpo-mente. Al respecto, Ana Mara Gonzlez (2012) sugiere que en nuestro intento
del ser humano de ir ms all del cuerpo y la mente, nos conectamos con la necesidad de
trascendencia, acercndonos hacia la propia espiritualidad. Luis Mariano Aceves (2012),
asevera al respecto de la Dicotoma cuerpo-mente en el ser humano, que no tenemos que
buscar a Dios o a la espiritualidad all afuera, sino que somos Uno con Dios, a travs de
nuestro cuerpo-mente. Coincidentemente el doctor Medardo Plascencia (2015) subraya que
el espritu de Dios que est dentro de nuestro cuerpo-mente inseparablemente, no puede
ser neutro, sino que innegablemente tiende hacia la evolucin. A partir de la idealizacin de
la razn y de la mente, es segn Anatolio Freidberg (2015), que se logra la separacin
cuerpo-mente, dificultando nuestra evolucin. Por ello podemos concluir que a partir de la
reunin del cuerpo y la mente lograremos una evolucin integral. As mismo Reich (1991)
sostiene que a travs del trabajo psicolgico y corporal se redirige el flujo energtico y
podemos encontrar la correspondencia entre ambas y un hilo conductor ms profundo.
Matthieu Ricard (2003), seala que por muchos aos ha estado investigando acerca del
entrenamiento de la mente, su qumica, y su relacin con la felicidad, junto con Francisco
Varela, Paul Eckman y Daniel Goleman (como se cit en Ricard, 2003), y de cmo los
estados de atencin plena y compasin pueden influir mucho en nuestro estado de
felicidad. Seala que por aos ha ledo todo lo que ha encontrado acerca de la felicidad y
bienestar en filosofa, psicologa, sociologa, ciencia cognitiva, etctera. Seala que muchas
definiciones de salud personal y salud pblica se han contradicho o son muy superficiales.
Sobre todo a este monje tibetano cientfico le interesa, seala, entender la relacin entre
103
Lafarga (2012) aade que todos los sistemas psicoteraputicos deberan tener en cuenta
al aspecto espiritual, es decir que la dimensin espiritual es inherente al ser humano y no va
ms all de l, por eso seala que no entiende el vocablo de lo transpersonal, que va ms
104
all del ser humano. Contina diciendo que si fuera ms all del ser humano no lo
podramos comprender, que lo nico que tenemos es nuestra verdad, y todos nos vamos
aproximando as a una realidad, que es ms que nada un acercamiento, ms no una
verdad absoluta. Aade que a lo que podemos llegar es a compartir nuestras verdades,
tratando de unirnos en la espiritualidad dentro del proceso de psicoterapia. Quiz entonces
a lo que se refiere es que la creacin de la relacin psicoteraputica con los fundamentales
ingredientes de respeto, empata, aceptacin positiva incondicional y congruencia, segn
Rogers (1964), es esta combinacin de realidades conversadas, que acercan a los
implicados a su dimensin espiritual dentro de un proceso teraputico. Gmez del Campo
(2015) seala que para transmitir la espiritualidad dentro del marco de la psicoterapia
tenemos que ir ms all de las tradiciones especficas, logrando transmitir los valores
mismos. Al respecto de la importancia de los valores la maestra Ana Mara Gonzlez (2013)
indica que en la psicoterapia muchas veces nos encontramos con lo que ella denomina
enfermos de espiritualidad, es decir, personas que en el pasado introyectaron valores que
hoy ya no son propios ni estn actualizados y que sin embargo, continan practicndolos,
traicionando de esta manera su verdadero ser. Dentro de la psicoterapia misma, sera
importante que los terapeutas pudiramos entonces ayudar a que las personas puedan vivir
de acuerdo a sus propios valores actualizados, pudiendo sentirlos y expresarlos, as como
sentirse identificados con ellos, facilitando el camino hacia la consciencia de su dimensin
espiritual y la posibilidad del arraigo de la misma.
Al estar revisando las opiniones de los entrevistados Lafarga, Gmez del Campo y Ana
Mara Gonzlez, con respecto a la dimensin espiritual y psicoterapia, me doy cuenta que
los tres hablan de los valores y de su importancia, invitndome a reflexionar con respecto a
ese tema y al valor de la espiritualidad misma y a su elaboracin. Cuando nos referimos a
los valores positivos y universales en que nos apoyamos para desarrollarnos, generalmente
nos referimos a el respeto, la honestidad, la libertad, la justicia, el amor, el agradecimiento,
la bondad, la paz, el honor, etctera. Sin embargo tenemos que entender que los valores no
son solo conceptos, sino que la conducta de todos los das est motivada y sustentada por
nuestros valores. Sabemos que todos ellos se relacionan entre s y aportan bienestar,
contribuyen a la sociedad, nos sostienen en momentos de crisis, y nos ayudan a sostener
105
nuestra fe y nuestra dimensin espiritual. Nos definen. Sabemos que estos valores
universales estn presentes en diferentes culturas, a diferencia de los valores individuales.
Dichos valores universales se pueden abordar tambin desde la tica y la moral. Los
valores ticos son las pautas de comportamiento que van regulando nuestra conducta y se
van adquiriendo en el desarrollo individual de las personas, ayudndonos a crecer y
trascendernos. Existe lo que se llama la escala de valores, que es un sistema jerarquizado
en el cual se priorizan algunos valores por encima de otros, sobre todo cuando existe un
conflicto. Del cultivo de estos valores universales y ticos es que nacen las virtudes
espirituales, que son opuestas o antdotos a los pecados cristianos y catlicos. Como
seala Frondizi (1958), estos valores tienden a ser subjetivos y debemos intentar que
coincidan con el bien comn. Como dira Fromm (1956), la razn humana misma es la que
deber equilibrar el desarrollo y uso de estos valores, tratando de encontrarse con el orden
social exterior. Seala adems, que es el hombre mismo quien puede determinar su propio
criterio de virtud y pecado y no as una autoridad externa, alejndose de la tica autoritaria
quien nos dira qu es lo bueno para nosotros valorativamente. Fromm cree que los valores
y la tica humanistas no son incompatibles con el ejercicio de una autoridad racional. Es as
como diferentes pacientes llegarn con diferentes valores y creencias y el psicoterapeuta
humanista tendra que poder empatizar y comprehender el origen de los mismos, su utilidad
actual, si estn implantados mecnicamente o para complacer a otros solamente, y si son
autnticos y actualizados poderlos arraigar, explicitar y concientizar. Podemos ver cmo
nuestros pacientes, por ejemplo, tienen el valor de la lealtad y sin embargo son desleales
obedeciendo tambin a ese antivalor, motivo este de culpa, de auto reproche y de
infelicidad. En el proceso de psicoterapia humanista corporal tendramos que poder
comprender adultamente que sostener nuestros propios valores no siempre es fcil, ya que
se necesita voluntad. Es muy importante poder diferenciar entre valor y costumbre.
Nuestros valores presentes deben de tener durabilidad, integridad, flexibilidad y dinamismo,
como sostiene Judith Hernndez (2010).
Luis Mariano Aceves (2012), hace una diferenciacin entre la terapia psicoanaltica y la
meditacin, ya que en la meditacin encontr cosas ms nutridoras que en la terapia
psicoanaltica. Parece ser que Aceves, en su experiencia, no logra encontrar esta relacin
106
entre la dimensin espiritual y la psicoterapia humanista, ya que para l son dos cosas no
necesariamente compatibles.
Lafarga (2012) indica que cuando los terapeutas no piensan que les compete el mbito
espiritual y no validan las necesidades o preguntas de sus pacientes en este sentido, stas
quedan como una inquietud, como una ansiedad y quedan pendientes. Aade que si no es
considerada la dimensin espiritual en la psicoterapia o la educacin, de todas maneras va
a emerger por algn lado. Supone que en el fondo todo psicoterapeuta estudi para serlo
porque cree en el ser humano y en su desarrollo, aunque no sea espiritual. Seala que la
manera en que los terapeutas humanistas podemos contagiar la espiritualidad es
vivindola: esa es la manera de promoverla. Indica que no se puede vivir de otra forma: no
se puede hablar nada ms de la espiritualidad sin vivirla. Si hablas de ella, que la persona
sienta que la respetas en sus creencias. Una manera de vivir la espiritualidad es a travs
del autocuidado disciplinado y amoroso del psicoterapeuta.
Ana Mara Gonzlez (2012) seala con respecto al autocuidado y el desarrollo personal
del psicoterapeuta que no podemos ayudar a alguien a ir a un lugar a donde no hayamos
ido y ni conocido. Es por eso que un terapeuta que no tiene un trabajo espiritual cotidiano y
sostenido, no podr facilitar el desarrollo espiritual dentro del desarrollo humano de su
paciente, no lo visualizar como necesario, ni tampoco podr observar ni reflejar cuando
108
una necesidad o un tema espiritual emerjan. Ruella Frank (2013) seala que no sabe si lo
pueda poner en palabras: que cuando estamos siendo espirituales damos un paso hacia el
presente, que cuando nos quedamos con lo que sentimos y en contacto con nuestros
cuerpos sentimos ms y ms. Es as como una vez ms se sostiene el hecho de que la
espiritualidad es una dimensin humana que se percibe en un presente ampliado, motivo
por el cual tantas tradiciones nos invitan a permanecer en el famoso aqu y ahora. Frank
contina sealando que cuando se puede quedar en el presente con lo que siente en una
sesin, aunque sea doloroso, siente que hay una bondad ah y en general el universo es
benigno. Dice que simplemente hay que traer a alguien al cuerpo y la presencia se expande
en el presente. Al compartir su experiencia nos dice que cuando se sienta en silencio, antes
de ver a un paciente, ella reza, y que no siempre lo hace antes de cada sesin, pero lo hace
mucho cuando tiene algn problema con alguien o se siente atorada con algo. El paciente
conscientemente se puede sentir contenido por ella y cuando eso pasa seguramente puede
abrir un poco su corazn ms hacia la compasin. Si la compasin est ah y somos
conscientes de ella ya entramos en el mbito espiritual. Nos sentimos muy seguros con el
otro. Frank (2013) subraya la importancia de aceptacin de la sensacin sentida por parte
del terapeuta durante la sesin, as como de sus sentimientos, ya que esto nos ayudar a
incrementar nuestra compasin y nuestra empata, mantenindonos en el presente y
pudiendo acercarnos a interiorizar la dimensin espiritual compartida.
Por otro lado, Plascencia (2015) indica que las personas somos buscadores por esencia
o naturaleza, y eso es lo que facilitamos en terapia: la bsqueda. Indica que el mstico (el
que est en contacto con la divinidad) es ms emptico y menos dspota. Indica que si el
terapeuta no ama a su paciente, difcilmente su trabajo ser profundo y delicado,
entendiendo por amar no la posesin, sino la bsqueda del bien para el otro. Entonces es
nuestro amor por nuestro paciente lo que tambin facilita el poder entrar a la dimensin
espiritual de manera consciente. Parecera que el amor es entonces, el gran portal a travs
del cual atravesamos juntos terapeuta y paciente, sintindonos en Unidad y acercndonos a
nuestra trascendencia. Al respecto, Anatolio Freidberg (2015) indica que la espiritualidad en
terapia es el tipo de relacin que establecemos: Si logro establecer este tipo de relacin, va
ms all de lo emocional y de lo relacional, el contacto espiritual con mi paciente es casi
109
fundamental para el trabajo y la resolucin de sus temas. Aade que desde joven ha
buscado la espiritualidad ms all de la religin y despus lo hizo en el budismo zen y
ahora en el sufismo. Al respecto Steve Gunther (2012) seala que la espiritualidad tiene
que ver en psicoterapia con las experiencias, acciones y prcticas y con el modo de ser.
Agrega que es importante que podamos aplicar el mismo modelo para todo lo que tiene que
ver con el desarrollo personal, porque en trminos de mejorarnos como personas, mejorar
nuestras relaciones, tenemos varias ideas que tienen que ver con el desarrollo personal,
crear los conceptos, como la autenticidad, algo muy comn en el mundo psicoteraputico.
Indica que tenemos muchas prcticas espirituales que tienen que ver mucho con la
psicoterapia.
Habiendo hecho el anlisis de los datos obtenidos a travs de las entrevistas con los
autores, y la relacin de sus reflexiones con el marco terico planteado en la presente tesis,
y retomando las preguntas mencionadas en la justificacin que originaron mi inters por
llevar a cabo esta investigacin, las conclusiones que por el momento tengo con respecto al
tema de la dicotoma cuerpo-mente y de la importancia de la espiritualidad en la
psicoterapia moderna son:
4. No cabe duda que este tema da para toda la vida, y siempre ser motivo de
reflexin y autoobservacin en el quehacer psicoteraputico. Espero haber
colaborado un poco con la coleccin de datos a travs de las entrevistas de algunos
lderes de opinin y algunos personajes interesantes en el mundo de la psicoterapiaespiritualidad. Por otro lado, espero haber colaborado tambin subrayando la
relevancia de la Dimensin Espiritual tanto en el terapeuta como en el oficio
psicoteraputico. Debo comentar tambin que me sent durante este proceso,
honrada por el inmenso apoyo de estos maestros de vida y de pizarrn
entrevistados. Especialmente honro a mi maestro Juan Lafarga por su cario, inters
y apoyo incondicional. Estoy segura de que l estara muy contento de ver este
trabajo impreso. Tengo el privilegio de tener todas las voces de mis entrevistados
grabadas en mi computadora, para poder reflexionar en el futuro y permanecer
sintonizados en la curiosidad, en el intento de apertura y de trascendencia. Tambin
reconozco el acompaamiento y gua de mis tres sinodales. Debo de sealar
tambin que me he sentido excesivamente limitada por los lineamientos del APA,
aunque a veces tambin contenida.
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