Prolapso de La Glándula Del Tercer Parado
Prolapso de La Glándula Del Tercer Parado
Prolapso de La Glándula Del Tercer Parado
Introducción
En el perro la protrusión de la glándula del tercer párpado (GTP) ha sido reportada por
más de 30 años en el mundo. De igual modo, existen reportes actuales que indican la
presentación de esta patología oftalmológica en otras especies, como felinos y leporinos
(Chahory et al. 2004). Algunas razas de caninos, especialmente el Cocker Spaniel
Americano, Bulldog inglés, Beagle y Pequinés en edades tempranas (Morgan et al.
1993), presentan predisposición para desarrollar prolapso dorsal de la glándula del
tercer párpado. Se sabe que este proceso se desencadena por debilidad y desarrollo
incompleto de los ligamentos que sostienen la base de la glándula contra el tejido
periorbitario (Christmas 1992, Morgan et al 1993)
El sistema lacrimal del ojo canino está conformado por la glándula lacrimal, glándula del
tercer párpado, glándulas lacrimales accesorias, película lacrimal precorneal,
secreciones mucosas, puntos y canalículos nasolacrimales, conducto nasolacrimal y
punto nasal (Slatter 2001).
Revisión bibliográfica
Definición:
Los perros y los gatos tienen dos glándulas lacrimales en cada ojo.
La glándula del tercer párpado o nictitante, se localiza en la base del cartílago hialino,
en la superficie bulbar entre la córnea y el párpado. Es responsable de la producción del
30 a 50% de la porción acuosa de la película precorneal (Slatter, 2005).
Etiología
Se relaciona habitualmente con la incapacidad del tejido conjuntival bulbar en la porción
ventral del tercer párpado y los tejidos periorbitarios, para impedir que la glándula se
mueva dorsalmente; una vez se prolapsa, la exposición crónica hace que duplique su
tamaño y se inflame (Slatter, 2005; Plummer et al., 2008).
En esta etapa puede existir secreción ocular mucopurulenta y suele acompañarse de
epífora por la alteración funcional del lago lagrimal medial. La exploración clínica suele
ser normal y en la exploración oftalmológica lo más evidente es la presencia de esta
masa lisa, rosada en el canto medial. Puede cursar con hiperemia conjuntival leve y
escasa secreción serosa pero sin blefaroespasmo ni otras molestias. Se observa que la
masa puede extenderse a partir de la conjuntiva bulbar del tercer párpado y que el borde
de avance de la membrana nictitante no es visible. Por lo general no existe ulceración y
su diagnóstico generalmente se lleva a cabo por la apariencia clínica. Debe descartarse
la eversión del cartílago a través de la palpación. Se debe considerar la aspiración con
aguja fina para una citología de manera de descartar una neoplasia (Morgan 2007,
Turner 2010).
Frecuentemente es unilateral y ocurre antes del primer año de vida, siendo inusual
bilateral (Baungarten et al., 2008; Plummer et al., 2008) cuando sucede, la literatura
reporta que es simultáneo o con máximo tres meses de diferencia entre uno y otro
(Mazzucchelli et al., 2009).
Figura N°1: Anatomía del tercer párpado. 1. Figura N°2: prolapso del tercer parpado.
Cartílago 2.Conjuntiva 3.Glándula del tercer
párpado 4.Retináculo fascial 5.Vasos
sanguíneos.
Diagnostico:
Generalmente se lleva a cabo por la apariencia clínica.
Diagnóstico diferencial:
Otras técnicas:
Anatomía quirúrgica:
Método del Bolsillo o Técnica de Morgan.
6° Paso: Se suturan los bordes conjuntivales con PDS 6-0, mediante patrón de sutura
invaginante de Lembert. El nudo de anclaje debe ser submucoso y el nudo de remate
de la sutura debe ser terminado en la cara externa de la porción medial del tercer
párpado.
Instrumentos y materiales
Previa depilación palpebral, el ojo afectado debe ser lavado copiosamente con solución
de agua con yodo povidona (López et al. 2011).
PROTOCOLO
Cefalotina (30mg/kg)
Premedicación Tramadol (2mg/kg)
Acepromacina (0,04/kg)
Ketamina (15mg/kg)
Diacepam (0,25 mg/kg)
Inducción Lidocaína
Dexametazona (directo al ojo)
Resultados y Discusión
Cada procedimiento tiene ventajas y desventajas de tipo técnico y funcional, que
incluyen dificultad para colocar suturas, riesgo de perforación del globo ocular,
ulceración corneal, inflamación, dehiscencia e inmovilidad del tercer párpado, entre
otros (Slatter 2001).
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2. Morgan R, J Duddy, K McClurg. 1993. Prolapse of the gland of the third eyelid in
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