Cómo Hacer Jabón Casero en Venezuela
Cómo Hacer Jabón Casero en Venezuela
Cómo Hacer Jabón Casero en Venezuela
Este producto aparte de ser económico y fácil de usar es muy versátil, ya que puedes elegir la
fragancia que más te agrade para aromatizar el jabón, que además de cuidar nuestra piel sirve
para perfumar el ambiente.
Antes de explicar el proceso de elaboración de este producto, hay que definir qué es la glicerina y
los beneficios que trae su uso para el cuerpo humano. Este producto, también conocido con el
nombre de glicerol es un alcohol líquido que suele usarse para la elaboración de productos
cosméticos.
Entre los beneficios de la glicerina, tenemos que es ideal para hidratar la piel y matar bacterias,
además que es incolora e inodoro. El pH del jabón de glicerina es muy parecido al de la piel es
por eso que cualquier persona puede usarlo sin tener ninguna complicación algo que pasa muy a
menudo con los jabones industriales.
Como hemos visto, el jabón de glicerina es capaz de mantener la hidratación de la piel y esta
propiedad hace que actúe eliminando la picazón, la descamación y la sequedad de la misma.
Esto lo convierte en el jabón ideal para aquellas personas que tengan alergias de piel, ya que
además tiene un buen efecto calmante.
Ingredientes
Utensilios
Un recipiente
Moldes de silicona o plástico
Paletas o algún utensilio que sirva para remover
Preparación
Paso 1
El primer paso es derretir la glicerina, para ello hay que considerar el estado en que se encuentra
la misma, ya que si es un pastilla se debe trocear y colocar en un recipiente y derretirla de el
microondas o en su defecto en baño de maría, sea cual sea el caso es importante recordar que el
envase debe ser apto para esto y solo usarse para hacer jabón.
Paso 2
Si su caso es la glicerina liquida, no se preocupe ya que sirve igual, lo único es que el
procedimiento es diferente, dado que para ello deberás calentar agua y cuando esté a punto de
hervir, agregar la glicerina poco a poco en forma de hijo para que vaya espesando. Es importante
tener en cuenta revisar el envase donde viene el producto y conocer la cantidad de glicerina
necesaria por cada litro de agua.
Paso 3
Paso 4
Si los prefieres de colores, agrega a la mezcla el de tu preferencia y remueve para que adquiera
el color deseado.
Paso 5
Para ir terminando nuestro jabón artesanal, debes agregar las esencias de tu preferencia así lo
desees.
Paso 6
Ya por último, solo debes agregar la mezcla a los moldes, se recomienda aceitarlos un poco para
que sea más fácil de desmoldar.
Paso 7
Deja reposar la mezcla para que se enfríe y solidifique naturalmente, pasadas unas horas,
cuando lo veamos que esté bien seco ya podrás desmoldar tu jabón de glicerina y disfrutar del
resultado.
El jabón casero a base de sábila es de gran beneficio para la piel, ya que esta planta tiene muy
buenas propiedades, además de conseguirse en todas partes. A continuación te explicaremos
como se realiza.
Ingredientes
Preparación
Paso 1
El proceso es muy parecido al anterior, lo único que en este caso primero se debe pelar el tallo de
la sábila hasta dejar solo el cristal o la pulpa que luego se va a licuar obteniendo un liquido blanco
y bizcoso.
Paso 2
Al tener este liquido, procedemos a rallar los jabones de glicerina y lo vamos calentando a baño
de maría hasta queda en estado líquido.
Paso 3
Apagamos el fuego y vamos incorporando el áloe licuado junto a las gotas de esencia.
Mezclamos todo muy bien, una vez todo unificado pasamos a desamoldar y dejaremos enfriar
hasta que endurezcan en un lugar fresco, el tiempo variara según en la zona donde nos
encontremos y la temperatura.
Los beneficios de este productos son diversos entre los que podemos destacar podemos
destacar: estimula la generación de nuevas células, gracias a su alta capacidad absorbente, logra
penetrar en las tres capas de la piel: la epidermis, la dermis y la hipodermis, con lo que ayuda a
retrasar la aparición de arrugas por efecto de la edad, y también a la prevención e incluso la
eliminación de pequeñas estrías en nuestra piel.
El poder aprender cómo hacer jabón casero hoy en día puede ser una idea excelente por varias
razones, por un lado está la de poder crear tus propios jabones totalmente artesanales y a tu
propio gusto o necesidades, no todos tenemos el mismo tipo de piel ni gustos en cuanto a olores,
por otro lado también es una buena fuente de ingresos por lo que podrías dedicarte a la
fabricación y venta como complemento a tus ingresos mensuales.
Hoy en día existen muchas más posibilidades para la realización de tu propio jabon casero,
añadiendo diferentes concentrados para poder darle color y que no quede descolorido, también
se le pueden añadir aceites esenciales con lo que mejorar el jabón o darle un buen olor, en este
articulo os mostraremos una de las posibles maneras para que podáis elaborar vuestro
propio jabón casero con aceite, lo que también repercutirá en la protección del medio ambiente,
como a continuación comprobareis.
La fabricación de este tipo de jabón no sólo es buena desde el punto de vista medioambiental
como os indique anteriormente, sino que también es ideal para la piel, la ropa y para nuestros
propios bolsillos al ser muy económico y una manera de ahorrarnos un poco de dinero mes a
mes, al reciclar el aceite usado.
El método que vamos a utilizar es en frío y se puede utilizar cualquier aceite vegetal de cocina
que se haya usado, eso sí, previamente lo tendremos que colar para eliminar las posibles
impurezas tras su uso, también podremos usar aceite sin usar, eso ya lo dejo a vuestra propia
elección.
Se diluye la sosa cáustica en el agua OJO!! Nunca hacerlo a la inversa pues la reacción química
que se produce puede provocarnos importantes quemaduras en la piel, ir agregándola poco a
poco y lentamente y con mucho cuidado, ya que puede producir vapores que son muy tóxicos.
A continuación se producirá una reacción química de la sosa caustica que liberará calor, pudiendo
hasta llegar hasta los 80º. Mucho cuidado con ello y esperar a que enfríe, esté preparado que
obtendremos se lo conoce como lejía caustica.
Vierte lentamente la lejía cáustica sobre el aceite, siempre y cuando estén aproximadamente a la
misma temperatura, que no haya más de 5 grados de diferencia a ser posible, para ello se puede
calentar el aceite hasta que llegue a unos 40º de temperatura más o menos, que sería la ideal
para realizar la mezcla, removiendo en forma constante y en el mismo sentido, para evitar que se
corte el jabón, también se puede utilizar una batidora para que la mezcla se haga más rápida con
una velocidad baja, con mucho cuidado para que no nos salpique.
Sabremos cuando esta ya bien en el momento que tenga una espesura y consistencia similar al
de la mahonesa, si se desea, se puede aromatizar y colorear, agregando los colorantes naturales
y los aceites esenciales, eso siempre y cuando la mezcla tenga una temperatura igual o más baja
a los 40ºC.
Por último se vuelca la mezcla obtenida en los moldes que deseéis, que pueden ser de silicona,
plástico o madera, se debe tapar con un film de cocina y cubrir con un paño para que el calor se
mantenga y enfrié poco a poco, una buena recomendación es untar con un poco de aceite los
moldes para un mejor desmoldado.
Esta mezcla la dejaremos reposar durante un día o dos para luego proceder a su desmoldado y
su posterior corte a los tamaños deseados si el molde que utilizamos es grande. Es importante
dejar endurecer durante aproximadamente un mes o mes y medio para que se culmine
satisfactoriamente el proceso de saponificación. Después ya lo podréis utilizar, vender o regalar.
Para completar un poco más el artículo os dejo una pequeña guía sobre los colorantes que
puedes usar para los jabones.
Una forma barata y totalmente natural de colorear los jabones artesanales y darles también un
poco de perfume, es usando especias o infusiones de plantas, lo que nos permitirán obtener
bonitos colores y aromas naturales. Las especias se pueden se pueden usar directamente en
polvo, mientras que en el caso de las plantas, es necesario realizar una infusión bien concentrada
previamente, para obtener los colorantes y aromas que deseemos obtener.
Para realizar los concentrados de las infusiones, se colocaran 3 partes de plantas por 1 de agua
es muy fácil, por ejemplo usaremos 3 tazas de hierbas frescas por una taza de agua, para ello
usaremos un recipiente al fuego, tapado hasta que el agua alcance la ebullición, cuando
comienza a hervir la infusión, reducimos el fuego al mínimo para que esta siga cociendo
lentamente, hasta que el líquido se haya reducido más o menos a la mitad, y las plantas que
usemos hayan soltado su color, luego lo dejamos enfriar lentamente, lo colamos bien y lo
podremos guardar en un tarro de vidrio añadiendo un poco de alcohol y también unas gotas de
algún conservante natural, como por ejemplo el aceite, la Vitamina E, etc. Y luego guárdalo en
algún lugar seco y preferentemente también lo más oscuro posible De todos modos, es
recomendable no realizar mucha cantidad de una sola vez (no más de 50 o 100 ml), para que
pueda conservarse sin problema alguno.
Los ejemplos de colorantes que se pueden conseguir que os muestro a continuación a base de
infusiones de diferentes plantas o polvo de diferentes especias, habitualmente no causaran
posibles contraindicaciones a nuestra piel, tampoco conseguiremos lograr colores muy vivos, por
el hecho de que no son pigmentos muy estables y la intensidad que logremos irá disminuyendo
con el paso del tiempo poco a poco, aunque también os digo que vale mucho la pena tenerlos
muy en cuenta para realizar variedad de tonalidades en nuestros jabones naturales.
Color rojo: con infusiones de raíz de Alcaneta o con Flores de Bignonia roja.
Color amarillo: con polvo de Jengibre, Raíz de lirio, Azafrán, cúrcuma, curry y polen, o
con infusiones de Caléndula o de Manzanilla Común.
Color verde: mediante infusiones de Menta, Té verde, u hojas de Romero.
Color rosa: con infusiones de Remolacha o de pétalos de Rosas.
Color morado: con infusiones de Flor de Violetas o flor de lavanda.
Color marrón: con polvo de Henna, Canela o Cacao.
Color azul: con infusiones de Bayas de ciprés, Flor de lirio azul o Manzanilla Romana.
Cómo elaborar jabón artesanal en casa
Hacer jabón en casa puede ser muy sencillo. Además de ahorrar dinero y de usar un
jabón más natural estamos reciclando el aceite usado. Los usos que puedes dar a
este jabón casero artesanal son muchos, como por ejemplo se puede utilizar para la
ducha, lavar el cabello, para la lavadora y lavar la ropa a mano, para las manos o
incluso para fregar los suelos.
A la hora de hacer jabón artesanal debemos tener una precaución mínima, como por ejemplo no
usar utensilios de aluminio, optar por los de madera o plástico resistente. Debemos hacer el jabón
en un lugar que esté bien ventilado y ponernos unos guantes y gafas.
Pon el agua tibia en un barreño de plástico duro o de madera y poco a poco ve echando la sosa y
moviendo con un palo o cuchara de madera. Irás notando que la temperatura del agua va
subiendo, puede llegar incluso a alcanzar los 90ºC, por lo que ten precaución en este paso.
Debemos mover bien para asegurarnos que la sosa está totalmente diluida en el agua y luego lo
dejaremos reposar para que baje la temperatura. Esperaremos unos 30 minutos.
Una vez que el agua está a temperatura ambiente vamos añadiendo el aceite despacito y en
pequeñas cantidades mientras al mismo tiempo vamos moviendo la mezcla en círculos. Verás
que poco a poco la mezcla se va volviendo más densa y va tomando más cuerpo. Sigue
moviendo hasta que veas que va costando seguir dando vueltas con el palo y que tiene una
consistencia de natilla. Si quisieras añadir algún detalle al jabón, como por ejemplo unas flores,
aceite esencial, arcilla o pulpa de aloe vera, ahora sería el momento de hacerlo.
Con cuidado vertemos la mezcla en los moldes, si son de silicona mejor porque así se desmolda
muy fácilmente, los cubrimos y envolvemos bien con film transparente y lo dejamos en un lugar
seco fuera del alcance de niños. A las 48 horas ya se ha endurecido el jabón y ya se puede
desmoldar y cortar.
El último paso es dejar “curar” el jabón para que finalice el proceso de saponificación y así la sosa
sea totalmente inocua para su uso. Coloca los jabones ya cortados en una bandeja de rejilla y
sobre un papel en un lugar sin luz directa y fresco. Cada dos días dale la vuelta a los jabones
para que se vayan secando de forma homogénea. Una vez que dejamos el jabón curar durante 4
semanas este jabón es totalmente apto para usar.
Cómo Hacer Jabón Artesanal o Casero. Los jabones de glicerina son muy
sencillos de hacer. La elaboración de jabones caseros o artesanales puede
ser para nuestro propio uso o para empezar nuestro propio negocio.
Se debe cortar el bloque de glicerina en pequeños trozos, después se debe derretir la glicerina en
baño de maría hasta que esté liquida.
Este es el momento de agregar a la glicerina líquida, las fragancias, extractos, aceite esencial,
colorantes y otros aditivos.
Tenga ya los moldes engrasados con aceite de maíz o vaselina y vierta la glicerina en cada
molde, si se forman pequeñas burbujas, las eliminamos rociándolas con alcohol rebajado.
Aunque la forma más común de hacer jabón casero es con aceite y sosa, también podemos
elaborar jabón, tanto líquido como en pastillas, a partir de plantas como la saponaria o jabonera
(Saponaria officinalis), la cual aporta al jabón las propiedades jabonosas, y también con glicerina
neutra.
Puedes personalizar los jabones según tus necesidades particulares, echa un vistazo a la gran
variedad de plantas medicinales que hay y utiliza las que más te interesen en cada momento.
Estos jabones son muy fáciles de hacer en casa y son una alternativa excelente para cuidar tu
piel.
Elaboración:
Pon el agua a calentar en un cazo. Cuando vaya a romper a hervir retíralo del fuego y añade las
plantas medicinales e inmediatamente lo tapas.
Elaboración:
Derrite la glicerina al baño María y la retiramos del fuego. Poco a poco vamos añadiendo la
ralladura de la naranja y el aceite esencial mientras vamos removiendo.
El jabón de lavanda casero nos ofrece unas propiedades muy buenas para el cuidado de nuestra
piel, siendo muy beneficioso para hidratar la piel, eliminar impurezas y protegernos ante los
agentes bactericidas.
Además, las grandes propiedades relajantes que posee la lavanda hacen que este jabón sea
ideal para tomarnos un baño muy placentero y relajante, además ayuda a aliviar las tensiones y
favorecer nuestro bienestar general.
Si quieres aprovecharte de todos estos beneficios que nos proporciona y además, de forma
económica y entretenida, en este artículo de hoy, os traigo una receta muy sencilla y fácil, para
poder aprender a realizar un jabón casero de lavanda que nos dará muchas alegrías y
satisfacciones e incluso lo podremos utilizar para realizar un regalo muy original.
Infusión de lavanda
210 gr de agua
85 gr de sosa cáustica
680 gr de aceite de oliva virgen extra
10 gr de aceite esencial de lavanda
Planta de lavanda fresca
Recipientes de platico
Moldes
A continuación vamos añadiendo poco a poco la sosa cáustica y vamos removiendo poco a poco
la mezcla hasta que se disuelva, para este paso es muy importante realizar lo en un lugar
ventilado, además de usar para protegernos de posibles salpicaduras y vapores con mascarilla y
guantes, ya que la sosa es una sustancia bastante peligrosa en el contacto con la piel y los
vapores que desprende al calentarse también son perjudiciales si los respiramos de manera
continuada.
Luego de realizado esto y mientras la mezcla se enfría, vamos a ir calentando el aceite de oliva a
fuego lento hasta alcanzar unos 30 o 40 grados más o menos.
Una vez la primera mezcla se haya enfriado y tengamos el aceite caliente, iremos añadiendo el
aceite de oliva poco a poco en el recipiente de plástico con mucho cuidado para no salpicarnos,
una vez vertido iremos removiendo todos los ingredientes siempre en el mismo sentido de
rotación hasta que veamos que la mezcla empieza a espesarse.
Para finalizar el proceso de elaboración de nuestro jabón casero de lavanda verteremos la mezcla
resultante en el recipiente que hayamos elegido como molde para el jabón, os recomiendo que
este sea bien ancho y de poca altura y de un material flexible para un mejor desmoldado, los
ideales son de silicona.
Por último puedes espolvorear por encima de la mezcla antes de que comience a solidificarse
unas flores de lavanda bien desmenuzadas para darle otro toque distinto a nuestro jabón.
El poder hacer Jabón liquido casero para lavadora es muy fácil, además de
entretenido y económico con el uso de aceite reciclado, mejor que este sea
de oliva o de otro vegetal. El aceite usado para freír, es muy contaminante
una vez usado si nos deshacemos de él y no se debe tirar por el fregadero.
Si este llegara a una depuradora, mataría a las bacterias que ayudan a
depurar nuestras aguas, por eso hay productos que no se deben tirar por el
desagüe. Por eso mismo lo recomendable es o reciclarlo o si no se debe llevar a un punto limpio
de reciclaje, pero nunca tirarlo por el desagüe.
Sin embargo, lo mejor que se puede hacer con el aceite usado es hacer jabón, un producto que
nos puede servir para el cuerpo, para la lavadora, para fregar el suelo, incluso para venderlo y
sacarnos un poco de dinero al mes, es muy simple y fácil el poder hacerlo, sólo se necesita algún
tipo de aceite vegetal usado, un poco de agua, y sosa caustica, que se puede encontrar de venta
en supermercados o droguerías. Si el aceite que vamos a utilizar es de freír lo recomendable es
colarlo antes para eliminar las impurezas y si no evitar usar los posos del fondo, no os preocupéis
por los olores de este aceite usado ya que desaparecen con la sosa caustica.
Hay muchas técnicas y maneras diferentes de poder hacerlo, antes de hacerlo os sugiero leer
bastante sobre el tema, para tenerlo bastante claro, pero no obstante para poder hacer jabón
casero liquido para lavadora, simplemente necesitaremos los tres ingredientes comentados,
además de unos pocos utensilios, un cubo preferentemente de plástico y una cuchara o palo de
madera para remover la mezcla, también podremos usar una batidora. Como podréis observar en
esta misma web, existen varias maneras para obtener un jabón diferente, pero una forma muy
simple y efectiva es la siguiente:
Lo primero seria escoger un lugar bien ventilado, que sea muy fácil de limpiar, por si salpicamos
algo en su realización, también evitar los niños y las mascotas, que puedan llegar a derramar la
mezcla.
Luego se vierte lentamente tratando de no salpicar, un máximo de 700 gramos de sosa caustica.
Con la cuchara o el palo de madera, iremos removiendo lentamente evitando respirar los vapores
que desprende, la mezcla resultante se calienta y no se debe tocar, por eso es recomendable
usar guantes y gafas para evitar el contacto con posibles salpicaduras.
A continuación añadimos los 2 litros de jabón liquido y continuamos removiendo bien hasta que
esté todo bien mezclado.
Después podemos añadir los 2 litros de suavizante, esto es para que le dé un mejor olor a
nuestro jabón, removemos bien hasta que esté bien unificada la mezcla, también podremos
añadir algún aceite esencial para aromatizar nuestro jabón liquido.
Recordar que estos 2 últimos pasos son opcionales, aunque yo os recomendaría realizarlos, para
conseguir un mejor producto.
Una vez conseguida la consistencia deseada y la mezcla este bien realizada y uniforme,
dejaremos reposar la mezcla hasta el día siguiente.
Una vez pasadas las 24 horas removemos la mezcla y le añadimos unos 2 litros de agua mas,
removiendo muy bien la mezcla y dejándola reposar hasta el día siguiente.
Este último paso lo iremos realizando diariamente durante unos 8 días más o menos, hasta que
logremos una mezcla parecida a la del champú, un líquido cremoso y uniforme.
Al final habremos usado entre 20 y 25 litros de agua, para conseguir una cantidad de entre 25 y
30 litros de un estupendo jabón líquido para lavadora, luego de dejarlo reposar un tiempo
prudencial de unos 3 o 5 días podremos pasar a envasarlo y comenzar a usarlo.
El jabón resultante es un excelente anti manchas, para manchas difíciles es recomendable frotar
el jabón líquido en la mancha antes de meterlo a lavar en la lavadora. Se puede usar un chorrito
de vinagre como suavizante, y también el bicarbonato sódico que es un excelente quitamanchas y
desinfectante.
Ya por ultimo os dejo un excelente video de cómo hacer jabón casero líquido para lavadora, que
también es válido para usar como liquido friegasuelos.
Espero que lo disfrutéis y que entre todos ayudemos a cuidar un poco mas nuestro medio
ambiente, os agradaría mucho que pudieseis compartir este artículo en vuestras redes sociales.