Ensayo Pensamiento
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Pensamiento Político l
Ensayo
“Nicolás Maquiavelo”
Sin duda alguna muchas afirmaciones sobre filosofía política, hechas en el pasado siguen
aún vigentes en la actualidad, muchos filósofos, han dejado grandes aportaciones a las
actuales civilizaciones, Nicolás Maquiavelo sin duda no es la exención es por eso que en el
siguiente ensayo aborda su filosofía política.
Para efectos del presente ensayo primeramente indagaremos un poco sobre la vida y obra
de este filosofo esto con el fin de conocer el contexto en el que desarrolla sus ideales, de
igual forma tratare de explicar las ideas filosóficas de Nicolás Maquiavelo en cuanto
concierne al estado, los medios inmorales usados para fines políticos y la creencia de que el
gobierno se basa en gran parte por la fuerza y la astucia, con base al contexto en el cual
Maquiavelo desarrolla su filosofía política y una vez conocidos sus ideales sobre el estado y
gobierno, tratare de explicar si estas ideas son aún vigentes, si el gobierno y los
representantes de este mismo, se basan aun en las aportaciones de Maquiavelo, de esta
manera trasladaremos el pensamiento político del filósofo a la actualidad y la situación
política de México 2013, para finalmente concluir afirmando o negando que tan validos son
los argumentos de Maquiavelo en la actualidad.
Maquiavelo Ideas fundamentales de su pensamiento
Si nos ubicamos en su fecha de nacimiento, nos fijaremos que este nace precisamente, en el
año que se produce la muerte de Pedro Médicis, muerte que coincidió también con la larga
dominación de Florentina- cerca de los treinta comienza a desarrollarse como político,
cuando entra a trabajar a la cancillería florentina, donde empieza su carrera funcionaral, la
cual estuvo llena de éxitos y que le permitieron estar casi tres lustros en las cercanías del
poder político.( MACKALEX, Maquiavelo: Héroe o Villano?, p.65).
Fue un importante político, toda la labor que hizo desempeñó un gran papel en la formación
de su pensamiento político. Este pensamiento se centraba en la labor del Estado y la forma
de pensar de los gobernantes. Uno de sus principales objetivos fue hacer que Florencia
mantuviese la soberanía, ya que se veía continuamente amenazada por otras potencias
europeas. Para ello, decidió crear en 1505 la milicia nacional. (Santiago, 2012)(párr. 3)
Sus obras políticas más importantes fueron El Príncipe y Los Discursos sobre la primera
década de Tito Livio, comenzados ambos, y en gran parte terminados, en 1513.Es significativo
el distinto modo de considerar el gobierno en ambas obras, algunos escritores, siguiendo a
Rousseau, han creído que eran contradictorias. Ello no parece ser cierto, en especial si se toma
en cuenta las circunstancias que rodean la composición de El Príncipe, pero es lamentable que
la mayor parte de los lectores hayan conocido a Maquiavelo, a través de esta última obra.
Ambos libros presentan aspectos del mismo problema: las causas del auge y decadencia de los
estados y los medios por los cuales puedan los estadistas hacer que perduren. El Príncipe trata
de las monarquías o gobiernos absolutos y Los Discursos se ocupan se ocupan principalmente
de la expansión de la republica romana. (Sabine, 1968, p. 270)
Sabine (1968) nos relata que, tras casi todo lo que dijo Maquiavelo a cerca de política
practica estaba en el supuesto de que la naturaleza humana es esencialmente egoísta y de
que los motivos reales en los que tiene que apoyarse un estadista tales como el deseo de
seguridad de las masas y el deseo de poder de los gobernantes, son de ese carácter. Además
la naturaleza humana es profundamente agresiva y ambiciosa; los hombres aspiran
conservar lo que tienen y adquirir más. Ni en el poder y ni en la posesiones hay ningún
límite normal para lo deseos humanos; en consecuencia los hombres se encuentran siempre
en situación de lucha y competencia.
Sabine nos dice que Maquiavelo insiste sobre todo que el gobierno que quiera tener éxito
debe aspirar ante todo a la seguridad de la propiedad y la vida, ya que estos son los deseos
más universales que hay en la naturaleza humana.
A pasar de que Maquiavelo cuenta con dos obras sobresalientes, es la de El Príncipe, la que
sobresale aún más, debido a su forma de redacción y a la dureza de los consejos que en el
da el filósofo, es por eso que, para profundizar más en su filosofía me basare en los algunos
de los capítulos más significativos a mi parecer, resaltando los consejos que en dichos
capítulos da, para dar paso a la filosofía de Maquiavelo en la actualidad.
Durante todo el libro Maquiavelo da una serie consejos a los Príncipes (gobernantes) sobre
como llegar al poder y una vez estando en el mantenerlo.
Atreves de las siguientes citas extraídas del libro el príncipe de Maquiavelo daré a conocer
las ideas a mi parecer más interesantes de este autor y a la vez tratare de interpretarlas.
Es más fácil conservar un Estado hereditario, acostumbrado a una dinastía, que uno nuevo,
ya que basta con no alterar el orden establecido por los príncipes anteriores, y
contemporizar después con los cambios que pueden producirse. (Maquiavelo. El príncipe
cap. II)
Maquiavelo nos dice que un estado hereditario es el mejor y tiene toda la razón ya que todo
esta establecido el príncipe que pasa a ocupar el poder no tiene mucho trabajo, solo debe
mantener lo establecido.
“No se debe permitir jamás que continúe un desorden para evitar una guerra porque no se la
evita, sino que se la retrasa con desventaja propia” (El Príncipe de Maquiavelo, Capítulo
III.)
Para Maquiavelo la guerra es un arte y es de las principales armas o métodos para mantener
el poder, como nos indica lo mejor no es tratar de evitarla porque de ninguna manera esta
se evitara únicamente se retrasara y esto provocara desventaja para el príncipe.
“El que ayuda a otro a hacerse poderoso causa su propia ruina” (Maquiavelo, el príncipe
1513)
Maquiavelo dice que es natural que el que se ha vuelto poderoso recele de la misma astucia
o de la misma fuerza gracias a los cuales se lo ha ayudado. La ayuda hacia otro provocara
nuestra propia ruina ya que lo que mostremos ser para ayudar al otro, cuando este esté en el
poder lo podrá utilizar en contra nuestra y de esta forma llevarnos a la ruina con nuestras
propias artimañas.
“Un príncipe jamás debe dejar de ocuparse del arte militar, y durante los tiempos de paz
debe ejercitarse más que en los de guerra; lo cual puede hacer de dos modos: con la acción
y con el estudio. En lo que atañe a la acción debe, tener bien organizadas sus tropas,
dedicarse constantemente a la caza con el objeto de acostumbrar el cuerpo a las fatigas y de
conocer la naturaleza de los terrenos, tal estudio aprende dos utilidades: primero se aprende
a conocer la región donde se vive para defenderla mejor; después, en virtud del
conocimiento de otra donde sea necesario actuar de manera que el conocimiento de otra
donde sea necesario actuar.” (El príncipe cap. XIV)
Como mencionábamos anteriormente para Maquiavelo la guerra es un arte y el príncipe
nunca debe olvidar que es una de sus principales armas, de tal manera el príncipe debe
mantener en condición siempre a las milicias, debe conocer igual a la perfecciona su estado
para poder defenderlo.
Declaro que todos los príncipes deben desear ser temidos por clementes y no por crueles.
Surge de esto una cuestión si vale, más ser amado que temido o temido que amado declaro
entonces que es más seguro ser temido que amado. Cuando el príncipe está al frente de sus
ejércitos y tiene que gobernar a miles de soldados, es absolutamente necesario que no se
preocupe si merece fama de cruel, porque sin esta fama jamás podrá tenerse ejército alguno
unido y dispuesto a la lucha.
De lo anterior podemos concluir que más vale ser temido que amado, el príncipe no debe
buscar el amor de sus súbditos pero tampoco su odio, debe mantener una apariencia
templada que no genere odio, pero tampoco amor. Sus súbditos deben guardarle respeto
pero sin llegar al odio.
El príncipe debe comportarse como zorro y como león ya que el león no es capaz de
protegerse de las trampas y el zorro no es capaz de espantar lobos, si el príncipe junta
ambas características será capaz de escapar de trampa y ahuyentar a sus enemigos.
Un príncipe debe temer dos cosas: en el interior, que se le subleven los súbditos; en el
exterior, que lo ataquen las potencias extranjeras. Los estados bien organizados y los
príncipes sabios siempre han procurado no exasperar a los nobles y, a la vez, tener
satisfecho y contento al pueblo.
Un príncipe debe estimar a los nobles pero sin hacerse odiar por el pueblo, cuando el
príncipe no puede ser evitado odiado por una de las dos partes, debe inclinarse hacia el
grupo más numeroso, y cuando esto no es posible, inclinarse hacia el más fuerte.
(Maquiavelo, el príncipe cap. XIX, 1513)
El príncipe debe conocer perfectamente de qué lado estar, conociendo las situaciones debe
elegir si estar de lado de los más fuertes o de los que son más en cantidad, siempre debe
tener contento a su pueblo.
La primera opinión que se tiene del juicio de un príncipe se funda en los hombres que lo
rodean: si son capaces y fieles podrá reputárselo por sabio, pues supo hallarlos capaces y
mantenerlos fieles; pero cuando no lo son, no podrá considerarse prudente a un príncipe
que el primer error que comete lo comete en esta lección. (Maquiavelo, el príncipe cap.
XXII, 1513)
El príncipe debe elegir perfectamente a sus ministros ya que ellos lo rodearan durante su
tiempo de poderío, debe elegir a personas que le sean fieles y que sean sabios.
El maquiavelismo en México 2013
“Maquiavelo estaría orgulloso de los políticos mexicanos. Hacen todo para buscar el poder:
roban, mienten, corrompen. Pero al mismo tiempo estaría muy molesto, cuando tiene el
poder no saben qué hacer con el”
Lorenzo Meyer
Nascimento (2012) nos dice que “casi todos los políticos profesionales son pragmáticos, es
decir practicantes de las artimañas que recomienda Maquiavelo para obtener conservar el
poder. La mayoría de las actitudes de los políticos actuales en situaciones practicas fueron
descritas con perfección por Maquiavelo; Nada más basta con ver la actitud y comparar con
lo que él escribió y comprobaremos cuan actual sigue su pensamiento.”
En México desde que este consiguió su libertad y se volvió democrático, los políticos
siempre han sido maquiavélicos, se basan de artimañas para llegar al poder y una vez
estando en el buscan la forma de mantenerse siempre, tenemos el grandioso ejemplo de
Porfirio Díaz que ocupo el poder más 30 años, después cuando lograron derrocarlo entro el
PRI que se mantuvo igual por muchos años hasta que en el 2000 el PAN logra sacar al PRI
de Los Pinos y es aquí el claro ejemplo de que las ideas de Maquiavelo siguen siendo
vigentes, aquí podemos observar como nuestro gobernantes “Príncipes” adquieren el poder
de forma hereditaria cuanto tiempo el PRI estuvo en el poder era de cada 6 años traspasar el
poder hasta que finalmente, fuimos espectadores de otra de las formas que menciona
Maquiavelo para obtener el poder, cuando el PAN toma el poder podemos percatarnos que
lo hace por armas ajenas ya que el pueblo estaba cansado del PRI y su forma de gobierno,
pero sin embargo el PAN usa las mismas armas del PRI para arruinarlo, sigue sus mismos
pasos y llega al poder y es aquí donde nuevamente aparece la toma del poder de forma
hereditaria.
Es más que claro que los partidos políticos de México tienen muy bien estudiadas las
formas de obtener el poder que nos menciona Maquiavelo, nuestro filosofo estaría más que
satisfecho al ver como la política en México actual toma el rumbo que el describía.
Una vez que nuestros príncipes llegan al poder es muy claro que siguen cumpliendo los
mandamiento de Maquiavelo, Maquiavelo nos mencionaba que el príncipe no debe cumplir
lo que prometió si esto va en contra de sus propios beneficios y nuestros políticos
mexicanos es lo que mejor saben hacer, durante sus campañas dicen hasta misa, pero a la
hora de llegar al poder pareciera ser que se les olvida hasta su nombre, pero es claro que
saben que es lo que prometieron pero como nos decía Maquiavelo si esta va en contra de
tus intereses no lo debes cumplir y es lo que hacen , ya que la mayoría de sus propuestas de
campañas van en contra de sí mismos, pero las tienen que decir y le tienen que prometer a
sus súbditos para que logren llegar al poder.
Maquiavelo nos decía que el príncipe debe tener contento a su pueblo, para que este no se
revele en su contra y en México esto es lo que mejor le sale a los príncipes, organizan un
festival, una verbena, un concierto etc.. Para que la gente vaya i diga a mira que bueno es
nuestro príncipe, les regalan una despensa y con esto el pueblo está conforme y para ellos
su príncipe es el mejor.
Otra cosa que no podemos dejar de mencionar, es como para los príncipes de México el
ejército es parte fundamental, como menciona Maquiavelo en su obra el príncipe la guerra
no se puede evitar, y este último sexenio lo pudimos observar de la mejor manera ya que
nuestro príncipe saliente inicio su lucha (guerra) contra el narcotráfico, no se preocupó por
buscar otras alternativas frente a este problema , para el sí que los enfrentamientos y la
violencia es la mejor forma de desvanecer este problema.
Y ni que decir de los ministros de nuestros príncipes en México, es más que obvio que
nuestros príncipes saben elegir a los mejores ministros, eligen a pura celebridad, claro así el
pueblo creerá que son muy sabios y estarán tranquilos al igual que el príncipe ya que eligió
a puras amistades y de esta forma puede asegurarse de que le serán fieles como decía
Maquiavelo.
“cuando se ve que un ministro piensa más en él que en uno y que en todo no busca sino su
provecho, estamos en presencia de un ministro que nunca será bueno y en quien el príncipe
nunca podrá confiar” (Maquiavelo. El Príncipe, Cap. XXIII).
Y en México tanto como hay ministros fieles también los hay llenos de mañas, pero los
príncipes siempre tratan de ser cuidadosos al elegirlos.
Un príncipe debe aparentar lo que no tiene, debe aparentar las virtudes que no tiene, y si
esto lo aplicamos al caso de México, no solo lo podríamos hacer en el ámbito político, todo
mexicano es especialista en aparentar lo que no es, es de ahí que en México todos los
príncipes que han pasado por el poder son maquiavélicos.
En México todos nuestros políticos tienen claro que deben seguir los consejos de
Maquiavelo sin estos no podrían ser nadie, y es que en México todos los políticos son de la
misma índole se dedican a recorrer el país entero llevándoles sus apariencias y mentiras a
los súbditos que con una trota y un refresco quedan satisfechos, nuestros príncipes
mexicanos sí que saben tener al pueblo de su lado saben utilizar a la perfección el consejo
de Maquiavelo que dice, que el príncipe debe saber de qué lado estar de el de los más
fuertes o de los de mayor cantidad.
Por otra parte Maquiavelo recomienda que en cuanto estemos en el puesto, ubiquemos
quienes son los poderosos y quienes los débiles, aquí es importante que nos debemos aliar
con los débiles y ser su defensor en México esto es lo que más se da los políticos
aprovechan de los más débiles para manipularlos y tenerlos de su lado, ofreciéndoles muy
poco, casi nada pero debido a la debilidad de estos, estos no pueden notarlo y se siente
satisfecho con muy poco.
En las últimas elecciones presidenciales pudimos observar todo lo que Maquiavelo maneja
como sus consejos hacia un buen príncipe, pudimos ver a enrique peña nieto que fon su
simpatía y por aparentar lo que no es llego al poder aunque también podríamos mencionar
que lo obtuvo de forma hereditaria, pero también observamos a Andrés manual López
Obrador como menciona Maquiavelo para ser amado, hay que mostrarse “piadoso, fiel,
humano, recto y religioso” (Cap. XVIII). Esta última candidata siempre se mostró así, a
fin de cuenta apariencias también.
Conclusiones
Nuestros políticos únicamente se interesan por ellos y sus cercanos, únicamente si eres
parte de su familia podrás ascender al poder.
Como menciona Lorenzo Meyer nuestros políticos una vez que tienen el poder no saben
qué hacer con él, este es precisamente el caso de los políticos actuales, con tantas malas
jugadas, poco a poco van perdiendo el sentido de ser temidos, poco a poco la sociedad va
despertando y esperemos que pronto jueguen con la carta del castigo, y los PRIncipados no
vuelvan a repetirse.
Bibliografías
Sabine, H. George. Historia de la teoría política. Ed. FCE, México, 1968, Cap. XVII.