Estimulacion Musica
Estimulacion Musica
Estimulacion Musica
EMBARAZO?
BENEFICIOS DE LA ESTIMULACIÓN MUSICAL DURANTE EL
EMBARAZO
Cuando una madre o un padre cantan una nana, canción, melodía…o pone música a algún
momento cotidiano, ya transmite sentimientos de amor, cuidado, respeto, tranquilidad y
seguridad.
Es un momento de comunicación íntima que queda fijado en la memoria del niño, ya desde
antes de nacer. Realizarlo desde que el feto está dentro del vientre materno, prepara de una
mejor forma a nuestro bebé para el futuro. Estos son algunos de los beneficios de
escuchar música durante el embarazo:
- Las audiciones y el contacto con los progenitores, aumentan la actividad inmunitaria.
- Los bebés nacen más relajados, con los ojos y manos abiertas, y lloran menos.
- Duermen y se alimentan mejor y además son capaces de concentrar su atención durante más
tiempo y aprender más rápidamente.
El bebé desde el quinto mes ya está preparado para escuchar cualquier tipo de música,
¿Quién no ha oído hablar del famoso 'Efecto Mozart'?. Está demostrado que escuchar a
Mozart aumenta las defensas y fortalece la capacidad neurológica de los bebés, aún así existe
una gran cantidad de Música además de la Mozart, muy beneficiosa para ellos. Sólo
debemos orientarla a un estado anímico determinado.
. Música para relajar al bebé: Para Elisa, de Chopin, Claro de Luna, de Debussy, Baladas.
Música con tiempos lentos y melodías suaves, e incluso alguna banda sonora como
Gladiator.
. Música para fortalecer las capacidades neuronales y defensas: Cualquier composición de
Música clásica es apropiada. Las 4 Estaciones de Vivaldi, La 5ª Sinfonía de Tchaikosky, El
Carnaval de los Animales de Saent Saens, o cualquier pieza musical de Mozart.
. Música para bailar y estar en movimiento: Buscar canciones alegres llenas de energía y con
las que puedas danzar y moverte al movimiento de ella. Queen, Madonna, The Beatles,
Abba... o incluso dejarte llevar por alguna canción que pongan en la radio e improvisar algún
baile.
Siempre debe estar en sintonía el estado anímico de la mamá para hacer partícipe al bebé.
Todas las sensaciones que te aporte la Música llegarán al bebé y compartiréis ya desde el
interior del vientre una conexión muy íntima y placentera.
El oído es el único sentido sobre el que se puede llevar a cabo la estimulación prenatal, y en
él se basa precisamente este tipo de estimulación. Escuchar música pausada y realizar
ejercicios de respiración al ritmo del corazón de la madre contribuye a fortalecer la
estimulación sensorial y cognitiva de nuestros bebés .
Estimular la audición de tu bebé tiene numerosos beneficios, entre ellos, le ayuda a hablar
antes. Háblale, preséntale objetos que suenen y repite lo que diga tu bebé. Aprende a utilizar
el recurso de tu voz para llamar su atención con distintas voces, tonos, canciones y risas.
Desde el nacimiento, la voz de la madre le calma y le tranquiliza, igual que el latido del
corazón, porque está acostumbrado a su musicalidad familiar, ya que diversos estudios han
revelado que el bebé puede escuchar desde el útero materno. Al principio, son las voces
humanas los sonidos que más atraen la atención del bebé y es importante saber utilizar este
recurso para llamar su atención con distintas voces, tonos, canciones y risas.
El oído, a diferencia de la vista, es un sentido que recibe información sin que nosotros
hagamos nada porque permanece "conectado" y no es preciso dirigirlo de forma consciente.
Durante el primer mes de vida, es aconsejable dirigirse al bebé siempre de frente. La
estimulación auditiva está estrechamente relacionada con la adquisición temprana
del lenguaje y la comunicación. Una estimulación auditiva adecuada va a determinar que el
niño pueda reconocer los sonidos del ambiente y responder a ellos.
Es muy importante, alentar y reforzar sus emisiones mediante el juego vocal. Para ello, es
recomendable aprovechar ocasiones tales como el baño, los cambios de pañal, o cualquier
otro momento en el que el niño esté tranquilo y cómodo, para jugar hablando y cantando con
él. Para ello, es importante realizar juegos o actividades que incluyan:
- Hacer ruido con campanas y sonajeros. Si lo escucha bien, el bebé dirigirá la cabeza hacia
el sonido y cuando vea el aparato que hace ruido repite el sonido nuevamente.
- Repeticiones. Posibilitan que el bebé vaya reconociendo los sonidos y se gire cuando los
escuche a su espalda.
- Acompañamientos. El sonido puede ir unido a otros estímulos sensoriales como la vista.
Esto ayuda a que al escuchar un sonido pueda reconocer su procedencia.
- Recién nacidos. Ante un sonido brusco, seguramente se despertará. Si le gusta, agitará sus
brazos y emitirá algún sonido como respuesta. El estímulo sonoro preferido en estos primeros
momentos es la voz materna, que no sólo le estimulan sino que también le tranquilizan.
- Cuatro meses. Buscará la procedencia del sonido con la mirada para ver qué lo produce. Al
principio, la búsqueda es muy rudimentaria y después se mostrará cada vez más seguro sólo
en el plano lateral.
- Cinco a seis meses de vida. Comienza a imitar con vocalizaciones los sonidos de los
adultos.
- Segundo semestre. Busca lateralmente y hacia abajo el objeto o la persona que emitió el
sonido. Alrededor de los 12 meses, hacia arriba.
- Año y medio. Es capaz de encontrar la fuente sonora en cualquier dirección: arriba, abajo
y a sus costados.
- Veinticuatro meses. Localiza los sonidos en todos los ángulos.
BENEFICIOS DE LA MÚSICA EN EL
DESARROLLO DEL NIÑO
Beneficios de la música y los instrumentos musicales en bebés y niños
Que los más peques disfrutan de la música desde bien pequeños, no es ninguna novedad.
Seguro que los has visto mover sus caderitas instintivamente al son de la misma cuando
empezaron a dar sus primeros pasitos o los has escuchado tararear la melodiá e intercalar
algún vocablo semi-inteligible cuando empezaron a hablar.
Aparte del disfrute que les supone escucharla, en ambos casos son evidentes los beneficios
de la música como estimuladora de la motricidad y del habla. Pero la música y el aprendizaje
de música tiene múltiples beneficios que no son tan evidentes y que se manifiestan en una
multitud de áreas durante el desarrollo de los más peques, tanto a nivel sensorial y motriz
como a nivel intelectual, psicológico y sociológico.
1. Más atención, memoria y concentración. Para cantar una canción o tocar un instrumento,
el niño previamente tiene que realizar un ejercicio de escucha activa, lo que desarrolla su
capacidad de atención, memoria y concentración.
2. Alfabetización. Al cantar una canción, y no sólo tararear la melodía, se estimula la etapa
de alfabetización ya que mejoran la forma de hablar a través de la repe-tición de versos y
rimas, aprendiendo además el significado de las palabras.
3. Desarrollo psicomotriz. Si la la canción se acompaña de un baile, se estimula el desarrollo
psicomotriz a través de los diferentes movimientos corporales.
4. Desarrollo de psicomotricidad fina. Esto también ocurre cuando se aprende a tocar un
instrumento, ya que por ejemplo deben aprender a utilizar las manos si están aprendiendo a
tocar el piano o cualquier otro instrumento de cuerda (como la guitarra o el violiń ).
5. Desarrollo del mecanismo respiratorio. Algunos instrumentos necesitan que el niño utilice
la boca y el mecanismo respiratorio, como es el caso de cualquier instrumento de viento
(como la flauta), o la coordinación de brazos, manos, piernas y pies cuando aprenden batería
o percusión.
4. Seguridad en sí mismos. Por otra parte, al compartir una canción con sus semejantes, los
niños desarrollan confianza y seguridad emocional, habilidades sociales a través de la
colaboración y se forman en el respeto mutuo y en la tolerancia al escuchar a los demás.
5. Facilita el aprendizaje de las matemáticas y los idiomas. Algo muy interesante es que
facilita el aprendizaje de las matemáticas y de los idiomas. En el primer caso ocurre porque
la lógica y las matemáticas son imprescindibles para entender y seguir el ritmo. En el caso
de los idiomas, ocurre no sólo por lo que mencionamos sobre el desarrollo de la memoria,
sino porque se educa el oid́ o para distinguir las variaciones en los sonidos.
Y todo esto se potencia aún más cuando aprenden a tocar un instrumento, leyendo una
partitura donde tienen que 'traducir' las notaciones musicales (notas, figuras de nota, clave,
etc) como si estuvieran leyendo otro alfabeto.