Dislipemias
Dislipemias
Dislipemias
de las dislipemias
Fernando D. Brites
Bioquímico. Doctor de la Universidad de Buenos Aires. Profesor Adjunto Regular de la
Cátedra Laboratorio Avanzado en Bioquímica Clínica, Facultad de Farmacia y Bioquímica,
Universidad de Buenos Aires. Investigador Adjunto de CONICET.
Leonardo A. Gómez Rosso
Bioquímico. Jefe de Trabajos Prácticos Regular de la Cátedra Laboratorio Avanzado en
Bioquímica Clínica, Facultad de Farmacia y Bioquímica, Universidad de Buenos Aires.
Becario CONICET tipo II.
Tomás Meroño
Bioquímico. Ayudante de 1º de la Cátedra Análisis Clínicos I, Facultad de Farmacia y
Bioquímica, Universidad de Buenos Aires. Becario CONICET tipo I.
Laura E. Boero
Bioquímica. Especialista en Bioquímica Clínica, Área Endocrinología. Jefe de Trabajos
150
Prácticos Regular de la Cátedra Análisis Clínicos II, Facultad de Farmacia y Bioquímica,
Universidad de Buenos Aires.
Santiago Rivera
Médico Especialista en Nutrición y Clínica Médica. Médico de planta de la División
Nutrición del Hospital de Clínicas “Jóse de San Martín”.
Laboratorio de Lípidos y Lipoproteínas. Departamento de Bioquímica Clínica. Instituto
de Fisiopatología y Bioquímica Clínica. Facultad de Farmacia y Bioquímica. Universidad
de Buenos Aires. CONICET
Objetivos
• Conocer la definición de dislipemias, su clasificación e importancia como factor de
riesgo cardiovascular.
• Describir las diferentes lipoproteínas.
• Identificar los valores normales y patológicos del perfil lipídico.
• Interpretar los resultados del laboratorio.
• Memorizar la fórmula de Friedewald para calcular el colesterol LDL.
• Definir y aplicar los criterios de diagnóstico.
• Diferenciar las manifestaciones clínicas específicas y no específicas de las dislipemias.
• Detectar la dislipemia aterogénica como componente del síndrome metabólico.
• Reconocer cuándo investigar la presencia de dislipemia en un individuo.
Contenidos
Clasificación y diagnóstico de las dislipemias
Dislipemia postpandrial
Manifestaciones clínicas: hipercolesterolemia e hipertrigliceridemia
Organización
151
Introducción
La enfermedad cardiovascular aterosclerótica es una de las principales causas de morbi-morta-
lidad en el mundo occidental y, en particular, en nuestro país. Esta enfermedad comienza en las
primeras etapas de la vida y su evolución es lenta y progresiva, existiendo múltiples factores
condicionantes capaces de acelerar la aparición de sus manifestaciones clínicas.
Varios factores de riesgo han sido identificados como fuertemente asociados con la enfermedad
cardiovascular aterosclerótica. Entre los más tradicionales, se destacan el hábito de fumar, la
hipertensión arterial, la dislipemia (alteración en las concentraciones plasmáticas de lípidos y/o
lipoproteínas), la presencia de antecedentes familiares de enfermedad cardiovascular, la obesi-
dad, el sedentarismo, y el estrés, entre otros. Es de notar que en la actualidad la diabetes mellitus
es considerada directamente un equivalente de enfermedad coronaria. Por otra parte, el riesgo
aterogénico es mayor en hombres que en mujeres y se incrementa con la edad. Al respecto,
numerosos e importantes estudios epidemiológicos han demostrado que el riesgo de enferme-
dad cardiovascular aumenta con los niveles de colesterol plasmático. Por lo tanto, el diagnóstico
precoz de las dislipemias y su clasificación certera permite implementar estrategias de preven-
ción y/o tratamiento adecuadas a cada paciente.
Cabe destacar que alrededor del 70% de las dislipemias detectadas son secundarias a otras
patologías, siendo posible su corrección parcial o total a través del tratamiento de la enferme-
dad de base. Las restantes dislipemias serían de origen primario causadas por desórdenes genéti-
cos que afectan a uno o más genes.
Esta clasificación permite aproximarse al riesgo del paciente. Si presenta aumento de los niveles
plasmáticos del colesterol total, con incremento moderado de triglicéridos y disminución de C-
HDL, el paciente tendrá mayor riesgo de padecer algún evento cardiovascular que otro individuo
que presente hipercolesterolemia o hipertrigliceridemia aisladas. Si el paciente presenta una
elevación severa de los triglicéridos (>1000 mg/dl), estará en riesgo de padecer una pancreatitis
aguda.
Por otro lado, esta clasificación permite decidir cómo orientar el tratamiento específico de la
dislipemia.
b) Según la etiología
• Primarias: Son dislipemias de causa genética. Se generan por mutaciones en uno o más
genes que intervienen en la síntesis y/o metabolismo de las lipoproteínas. Se caracterizan
por:
- Aparecer en más de un familiar.
- Asociarse a valores de lípidos y lipoproteínas considerablemente alterados con res-
pecto a los valores de referencia.
- Ocasionalmente presentar manifestaciones clínicas características, consecuencia del
depósito de lípidos en zonas atípicas.
- Asociarse frecuentemente a enfermedad cardiovascular prematura.
• Adquiridas: Son producidas por situaciones que derivan de hábitos incorporados por el
paciente (Tabla 1).
• Secundarias: Son consecuencia de la presencia de otra patología de base.
c) Según Fredrickson-OMS
Esta clasificación también llamada fenotípica, se basa en el lípido y lipoproteína aumentados
(Tabla 2). Resulta de utilidad porque permite ordenar las hiperlipemias, aunque presenta impor-
tantes limitaciones como su incapacidad para diferenciar el origen y el mecanismo responsable
de la alteración lipídica. Tampoco contempla las hipolipemias como la disminución de los niveles
plasmáticos de C-HDL. En la actualidad, su empleo en la práctica clínica es limitado.
El fenotipo IIa representa una hipercolesterolemia por un aumento del C-LDL, mientras que el IIb
es una hipercolesterolemia a base de aumento en el C-VLDL y C-LDL, con elevación moderada de
los triglicéridos de origen endógeno.
El fenotipo III es una dislipemia caracterizada por presentar la denominada banda β ancha en la
electroforesis de lipoproteínas. Esta banda está compuesta por el conjunto de remanentes de
quilomicrones y VLDL, VLDL ricas en colesterol e IDL, las cuales se unen y forman la β-VLDL.
Como se detallará más adelante, esta dislipemia se halla, generalmente, asociada a un alelo del
gen de la apo E, el cual codifica para una apo E con baja afinidad por sus receptores hepáticos.
Por lo tanto, la vida media de los remanentes y otras lipoproteínas normalmente captadas por el 153
hígado mediante la apo E aumenta.
a) Hipercolesterolemias Primarias
Distintas entidades clínicas cursan con aumentos de los niveles plasmáticos de C-LDL (Tabla 3),
entre las cuales se encuentran: hipercolesterolemia familiar, defecto familiar de Apo B100 e
hipercolesterolemia poligénica. En la Tabla 3, se exponen también el gen mutado responsable de
la alteración y la prevalencia de las distintas entidades.
Es de remarcar que todas ellas se hallan asociadas a aterosclerosis prematura e historia familiar
de enfermedad cardiovascular precoz. Asimismo, las dos primeras presentan manifestaciones
cutáneas específicas debidas al depósito de colesterol en zonas atípicas.
TABLA 1
CAUSAS ADQUIRIDAS Y SECUNDARIAS DE DISLIPEMIAS
Disgammaglobulinemias ↑
Drogas
Estrógenos orales ↑ ↑
Inhibidores de la proteasa ↑ ↑
Progestágenos ↑ ↓
Corticoides ↑ ↑
β-bloqueantes ↑
Tiazidas ↑ ↑
Isotretinoína ↑
Testosterona ↑ ↓
Ciclosporina ↑
Rapamicina ↑
Colestiramina ↑
Probucol ↓
Acromegalia ↑
Déficit aislado de hormona del crecimiento ↑ ↑
Lipodistrofias ↑
Enfermedad por almacenamiento de glucógeno
(enf. de von Gierke) ↑
Hipertrigliceridemia ↓
Lupus Eritematoso Sistémico ↑
Estrés ↑
TG, triglicéridos; CT, colesterol total; HDL, lipoproteína de alta densidad.
La hipercolesterolemia familiar se origina por defectos en el receptor de LDL o en alguno de los
pasos de internalización y reciclado de los receptores. Se han identificado hasta el momento
más de 860 mutaciones, de las cuales un 15% corresponde a grandes deleciones o inserciones,
mientras que el 85% restante a pequeñas mutaciones. Se han descripto distintos defectos que
abarcan alteraciones en el transporte del receptor desde el retículo endoplásmico hasta el apa-
rato de Golgi, en el reciclado del receptor, en la capacidad de unión a LDL, en la internalización
del complejo receptor-ligando e inclusive ausencia total del receptor. En la forma homocigota,
los valores de colesterol total pueden superar los 1000 mg/dl y los pacientes mueren por cardio-
patía isquémica en la adolescencia o juventud. Por otro lado, la forma heterocigota cursa con
valores de colesterol total de alrededor de 500 mg/dl y los síntomas y signos que presentan estos
pacientes dependen de la edad, con manifestaciones clínicas a partir de la segunda década de la
vida y con presencia de cardiopatía isquémica a partir de la cuarta década.
TABLA 2
CLASIFICACIÓN DE LAS HIPERLIPEMIAS
(SEGÚN FREDRIKSON - OMS)
TABLA 3
CLASIFICACIÓN DE LAS HIPERCOLESTEROLEMIAS PRIMARIAS
Actividades
1. Relacione los tipos de dislipemias con sus características principales
a) Aumento de quilomicrones.
b) Descenso del colesterol total.
c) Aumento únicamente de la banda β.
d) Aumento de triglicéridos sintetizados en el hígado.
b) Hipertrigliceridemias Primarias
156 Las hipertrigliceridemias primarias comprenden: deficiencia familiar de lipoproteína lipasa (LPL),
deficiencia familiar de apo C-II e hipertrigliceridemia familiar (Tabla 4).
TABLA 4
CLASIFICACIÓN DE LAS HIPERTRIGLICERIDEMIAS PRIMARIAS
Por otro lado, la hipertrigliceridemia familiar se caracteriza por un aumento de VLDL que puede
acompañarse o no por aumentos en los quilomicrones. El defecto en el metabolismo es descono-
cido pero se sugiere que no es debido a un aumento en la tasa de secreción de VLDL sino a una
lipólisis deficiente de las lipoproteínas ricas en triglicéridos, asociada a mutaciones en el gen de
la recientemente descripta apo A-V.
c) Hiperlipemias Mixtas
Son las que se caracterizan por aumento de los niveles plasmáticos de colesterol total y triglicéridos
simultáneamente. Entre las causas primarias, se destacan la hiperlipemia familiar combinada y
la disbetalipoproteinemia o hiperlipemia tipo III de Fredrickson (Tabla 5).
TABLA 5
CLASIFICACIÓN DE LAS HIPERLIPEMIAS MIXTAS
a) Hipercolesterolemia aislada.
b) Hipertrigliceridemia aislada.
c) Dislipemia mixta.
d) Colesterol HDL bajo.
5. La hipercolesterolemia poligénica:
a) Abetalipoproteinemia
Es una enfermedad de transmisión autosómica recesiva de muy baja incidencia que se manifies-
ta desde la infancia. Se caracteriza por la ausencia total de producción de quilomicrones, VLDL,
IDL y LDL, con concentraciones plasmáticas de triglicéridos y colesterol total extremadamente
bajas. El defecto radica en una deficiencia en la actividad de la proteína de transferencia
microsomal (MTP), que participa en el ensamblaje de las lipoproteínas en el intestino y en el
hígado. Hasta el momento, se han descripto 33 mutaciones diferentes en el gen que codifica
para la subunidad mayor de la MTP en pacientes con abetalipoproteinemia. Las manifestaciones
clínicas consisten en esteatorrea, malabsorción de vitaminas liposolubles y graves alteraciones
neurológicas, oculares, musculares y hematológicas.
b) Hipobetalipoproteinemia Familiar
c) Hipoalfalipoproteinemias
a) Diabetes Mellitus
Las alteraciones lipídicas que son características de los pacientes diabéticos consisten en
aumento de los niveles plasmáticos de triglicéridos, de las VLDL, disminución de la concentra-
ción de HDL, persistencia de IDL en el plasma en ayunas y presencia de LDL modificadas (LDL
pequeña y densa, LDL oxidada y LDL glicada, entre otras).
Diabetes tipo 1, la alteración de los lípidos plasmáticos ocurre como consecuencia de la defi-
ciencia de insulina. La actividad de la LPL del tejido adiposo se encuentra disminuida y, por lo
tanto, también el catabolismo de las lipoproteínas ricas en triglicéridos, hecho que reduce su
desaparición de la circulación. A su vez, la acción desenfrenada de la lipasa sensible a hormonas
(inhibida fisiológicamente por la insulina) contribuiría parcialmente a la hipertrigliceridemia.
Sin embargo, este segundo mecanismo no conduce a un aumento marcado en la síntesis de
triglicéridos en el hígado debido a que los ácidos grasos libres son mayoritariamente oxidados
dando lugar a la cetogénesis. Por otro lado, los niveles de C-HDL se encuentran disminuidos
debido a que la maduración de estas lipoproteínas requiere de componentes de superficie
(apoproteínas, fosfolípidos y colesterol libre) provenientes del catabolismo de los quilomicrones
y VLDL. Por lo tanto, en un paciente diabético de tipo 1, se observaría un fenotipo I o V de
Fredickson.
Por otro lado, los niveles de C-HDL se ven afectados en estrecha relación con el aumento de la
actividad de CETP, la obesidad del paciente, la hipertrigliceridemia y la exacerbada actividad de
la LH, enzima capaz de catabolizar a las HDL.
b) Obesidad
d) Hipotiroidismo
e) Síndrome nefrótico
161
Referencias: RI: resistencia a la insulina; AG: ácidos grasos; TG: triglicéridos; VLDL: lipoproteína de
muy baja densidad; LDL: lipoproteína de baja densidad; HDL: lipoproteína de alta densidad; LH: lipasa
hepática; CETP: proteína transportadora de colesterol esterificado; CE: colesterol esterificado; pyd:
pequeña y densa. Adaptado de Lender D y col. Pharmacotherapy 2006; 26: 3S-12S.
Asimismo, los niveles de HDL pueden encontrarse disminuidos principalmente por tres mecanis-
mos:
1. la pérdida renal de la LCAT
2. descenso de la actividad del receptor de HDL, scavenger receptor clase B tipo I (SRBI)
3. pérdida renal de HDL3 la cual por su pequeño tamaño puede filtrar por el glomérulo injuria-
do
No obstante, los niveles de HDL podrían estar conservados debido a que el hígado sintetizaría
también cantidades crecientes de apo A-I.
f) Tabaquismo
Actividades
6. ¿Cuál de las siguientes alteraciones no es característica de la dislipemia aterogénica que
aparece en el síndrome metabólico?
a) Hipotiroidismo.
b) Síndrome de Cushing.
c) Alcoholismo.
d) Disglobulinemia.
Variabilidad biológica
Dado la variabilidad biológica propia de cada individuo, la interpretación de los datos debería
realizarse luego de por lo menos 2 determinaciones realizadas con un intervalo de 15 días y
cuyos resultados fueran comparables.
En todos los adultos mayores de 20 años, el primer estudio debe comprender las siguientes
determinaciones:
Aspecto
En condiciones normales y en ayunas, el aspecto del suero es límpido. Cuando se incrementan
las VLDL y/o aparecen los quilomicrones, el suero se enturbia debido al gran tamaño de estas
partículas. En cambio, las LDL, por su menor tamaño, nunca pueden modificar el aspecto del
suero.
Triglicéridos
Actualmente, se considera a la hipertrigliceridemia como un factor de riesgo de enfermedad
cardiovascular. A su vez, en distintas situaciones clínicas el aumento en los niveles plasmáticos
de triglicéridos correlaciona con la presencia de lipoproteínas modificadas con potencial
aterogénico elevado, como ser LDL pequeñas y densas. De este modo, el valor óptimo para los
triglicéridos fue reducido de menor de 200 mg/dl a menor de 150 mg/dl.
TABLA 6
CONCORDANCIA ENTRE EL C-LDL CALCULADO MEDIANTE FÓRMULA DE FRIDEWALD
Y EL MÉTODO DE REFERENCIA
Fuente: Guías FAC III. Recomendaciones Bioquímicas para Médicos. Duymovich y col. 2005.
Colesterol total
El valor de colesterol total aislado, salvo que se encuentre francamente aumentado, aporta poca 163
información en cuanto a la evaluación del riesgo cardiovascular. Es necesario conocer la distri-
bución entre las dos lipoproteínas que lo transportan mayoritariamente: LDL y HDL.
C-LDL
Si bien puede calcularse mediante la fórmula de Friedewald, la cual estima el C-VLDL como
triglicéridos / 5, no siempre se obtienen buenos resultados, debido a que, como se discutió
anteriormente, en distintas condiciones clínicas la composición de las VLDL es variable y la
relación triglicéridos / colesterol de las VLDL se aleja de 5. No obstante, se acepta que esta
fórmula puede utilizarse si el valor de concentración de triglicéridos es menor de 200 mg/dl. Con
triglicéridos entre 200 y 400 mg/dl, la fórmula puede dar origen a valores distorsionados. Con
triglicéridos superiores a 400 mg/dl, la fórmula no debe ser utilizada, siendo imprescindible el
empleo de un método analítico. La Tabla 6 muestra como al aumentar la concentración plasmática
de triglicéridos la concordancia entre el C-LDL calculado por fórmula y el método de referencia
disminuye.
Fórmula de Fridewald
C LDL = TG + C HDL
5
Adicionalmente, el uso de los métodos analíticos permite calcular el C-VLDL (valor deseable ≤ 30
mg/dl) cuando la calidad de las lipoproteínas se aleja de una composición nativa.
C-HDL
Un gran número de estudios clínicos demuestra una correlación negativa entre el C-HDL y la
incidencia de enfermedad aterosclerótica. De acuerdo a estos estudios, un aumento de 1 mg/dl
de C-HDL corresponde a una reducción del riesgo de enfermedad cardiovascular a 10 años de un
2 a 3%. Por lo tanto, se requiere de un método altamente preciso para su determinación.
El conjunto de determinaciones y los valores de referencia se hallan expuestos en la Tabla 7. No
obstante, es de notar que la utilidad de los valores de referencia tomados de manera general,
especialmente para los niveles de C-LDL, es limitada. En cada individuo, se debe efectuar la
evaluación del riesgo global de enfermedad cardiovascular así como la presencia de factores de
riesgo aterogénico adicionales y, en base a ello, definir el objetivo de C-LDL.
TABLA 7
DETERMINACIONES DEL PERFIL BÁSICO Y VALORES RECOMENDADOS
En menores de 20 años, algunos de los valores de referencia del perfil básico de lípidos y
164 lipoproteínas son diferentes (Tabla 8)
TABLA 8
VALORES RECOMENDADOS PARA COLESTEROL TOTAL Y C-LDL
EN MENORES DE 20 AÑOS
C-noHDL
Representa el colesterol de las lipoproteínas que contienen apo B, las cuales en su mayoría son
consideradas aterogénicas. Es un parámetro secundario para la decisión en el tratamiento de
pacientes con triglicéridos = 200 mg/dl. Se calcula a partir de la diferencia entre el colesterol
total y el C-HDL. Una de las ventajas de este parámetro es que no se requiere de ayuno puesto
que sólo incluye fracciones de colesterol y no triglicéridos. El valor de referencia depende de la
categoría de riesgo definida en base al C-LDL (C-LDL + 30 mg/dl).
Electroforesis de lipoproteínas
Se reserva para las muestras de sueros hipertrigliceridémicos con el objeto de detectar la pre-
sencia de quilomicrones y sus remanentes, ß-VLDL y aumento de VLDL. Su evaluación es
semicuantitativa y debe realizarse teniendo en cuenta los datos de triglicéridos y colesterol
total.
Apolipoproteína B
Junto con otros parámetros es fundamental para la identificación de la
hiperapobetalipoproteinemia y de la hiperlipemia familiar combinada. Posee un elevado valor
pronóstico que en ciertos grupos etáreos supera al C-LDL. El valor de referencia es 70 – 140 mg/
dl. Algunos autores proponen que esta determinación gradualmente podría ir reemplazando a la
determinación de C-LDL.
Apolipoproteína A-I
Su medida no supera la utilidad diagnóstica del C-HDL. El valor de referencia es > 125 mg/dl.
Lp(a)
Debe medirse en hipercolesterolemia familiar para categorizar el riesgo y fijar las metas de C-
LDL. En pacientes sin hipercolesterolemia familiar y en los cuales no se han alcanzado las metas
deseables, la medida de Lp(a) contribuye a modular el juicio clínico para favorecer el uso de
fármacos. El valor de referencia es < 30 mg/dl.
Actividades
8. Para el estudio de las dislipemias: (señale la opción incorrecta)
Actividades
Caso clínico de integración
Antecedentes:
• 1 hermana hipotiroidea
• Padres fallecidos a edad avanzada
• 2 embarazos, 2 hijos
• HTA lábil
• Fumadora de 5 a 6 cigarrillos/día
• Sedentaria
Peso: 64 kg; Talla: 1,53 m; IMC: 27,35 Kg/m²
Estudios de laboratorio:
Glucemia: 80 mg/dl; Creatininemia: 0,73 mg/dl
Col total: 374 mg/dl; Col HDL: 53 mg/dl; TG: 211 mg/dl
1. ¿Qué dislipemia tiene según el perfil lipídico y a cuál fenotipo puede corresponder?
a) Hipercolesterolemia aislada
b) Hipertrigliceridemia aislada
c) Dislipemia mixta
d) Hipercolesterolemia poligénica
a) 259 mg/dl
b) 269 mg/dl
c) 279 mg/dl
d) 289 mg/dl
Actividades
Clave de respuestas
2. d
3. b
4. c
5. b
6. a
7. c
8. c
2. c
Consenso del Consejo Argentino de Aterosclerosis y Trombosis “Prof. Pedro Cossio”. Evaluación,
diagnóstico y tratamiento de los factores lipídicos que modifican el riesgo cardiovascular. Rev
Argent Cardiol 2006;74(1):1–13.
Kolovou GD, Anagnostopoulou KK, Kostakou PM, Bilianou H, Mikhailidis DP. Primary and secondary
hypertriglyceridaemia. Curr Drug Targets 2009;10(4):336-43.
Lender D, Sysko SK. The metabolic syndrome and cardiometabolic risk: scope of the problem and
current standard of care. Pharmacotherapy 2006;26(5 Pt 2):3S-12S.
National Cholesterol Education Program (NCEP) Expert Panel on Detection, Evaluation, and
Treatment of High Blood Cholesterol in Adults (Adult Treatment Panel III). Third Report of the
National Cholesterol Education Program (NCEP) Expert Panel on Detection, Evaluation, and
Treatment of High Blood Cholesterol in Adults (Adult Treatment Panel III) final report. Circulation
2002;106(25):3143-421.
Rifai N, Warnick G, Dominiczak M Eds. Handbook of Lipoprotein Testing. AACC Press. 1997.
Schreier LE, Berg G, Brites F, Wikinski R, Zago V, López G, González AI, Aisemberg L, Repetto EM. 167
Guía teórica del área lípidos y lipoproteínas. Materia Análisis Clínicos I. Facultad de Farmacia y
Bioquímica. Universidad de Buenos Aires (UBA). Buenos Aires, 2008.