Cultura Wari
Cultura Wari
Cultura Wari
Wari o fue una civilización andina que floreció en el centro de los Andes aproximadamente
desde el siglo VII hasta el XIII d. C., llegando a expandirse hasta los actuales
departamentos peruanos de Lambayeque por el norte, Moquegua por el sur y hasta la selva
del departamento del Cusco por el este.
La ciudad más grande asociada con esta cultura es Wari, que se encuentra ubicada unos
15 kilómetros al noroeste de la actual ciudad de Ayacucho. Esta ciudad fue centro de un
imperio que cubría la mayor parte de la sierra y la costa del Perú actual. El Imperio wari
estableció centros arquitectónicos distintivos en muchas de sus provincias, tales
como Cajamarquilla o Piquillacta. Es, junto al Imperio incaico, una de los dos únicas culturas
consideradas «imperiales» aparecidas en el hemisferio sur.
Su principal actividad era de carácter militar. Combatieron a lo largo y ancho del territorio
peruano, conquistando los diversos señoríos de su tiempo. También tuvieron grandes
centros religiosos como Pachacámac.
La cultura wari fue una cultura política y social estatal que surge entre el 550 d. C. y el
900 d. C. (aunque existen discrepancias sobre los fechados entre algunos investigadores).
D. Menzel dividió a la cultura wari en seis etapas: 1A, 1B, 2A, 2B, 3 y 4.
La etapa 1A
En la etapa 1A surge la ciudad capital denominada Wari, que dio el nombre a esta cultura.
En este periodo se nota una elevada influencia de la mitología tiahuanacota deducida de las
vasijas halladas en Qonchopata (Ayacucho), en donde se representa repetitivamente el
tema plasmado en la Portada del Sol de Tiwanaku.
Existen dos estilos alfareros waris representativos de este periodo, denominados
«qonchopata» y «chakipampa A». La influencia tiahuanacota se evidencia también en el
templete semisubterráneo encontrado en la ciudad de Wari. También durante este periodo
destacan enclaves en la costa de Ica y Moquegua.
La etapa 1B
Las etapas 2A y 2B
Etapas 3 y 4
Estas son las etapas de la decadencia de la cultura wari. En la etapa 3 se inicia la decadencia
de la ciudad de Wari; sin embargo el sitio de Pachacámac mantiene su prestigio religioso,
además de surgir en Huarmey un sitio influenciado en la arquitectura por los waris.
En la etapa 4 se inicia un periodo de desecamiento de la sierra, un cambio climático que
perduraría por un largo espacio de tiempo y que posiblemente sea la causa del colapso del
Estado panandino wari
Características principales
1- Religión
La religión Wari adoptó los dioses, mitos y ceremonias de la cultura tiahuanaco. Adoraban al dios
de las Varas o al dios Bizco.A través de los textiles transmitían sus pensamientos religiosos. Las
túnicas bordadas con iconografías místicas fueron parte de la vestimenta de los sacerdotes para
realizar las ceremonias y rituales.El templo de Pachacamac fue el lugar más importante donde
realizaban los cultos. La religión wari se expandió desde el norte hasta el sur, abarcando gran
parte de la sierra hasta el callejón de Huaylas.La evidencia de su expansión tiene origen en los
hallazgos de piezas empleadas para sus ceremonias, que fueron encontradas a lo largo de todos
los lugares mencionados.
2- Arquitectura
En la civilización wari se podían apreciar grandes edificaciones. Entre estas destacan los
templos, los mausoleos y las galerías subterráneas.Introdujeron el modelo arquitectónico urbano
en la ciudad, donde se destacan los diferentes edificios públicos administrativos ubicados en
sitios estratégicos. Esto demuestra que era una sociedad rígida y planificada.La capital wari
constaba de grandes ciudades urbanas amuralladas, con almacenes, calles, plazas y patios.Las
residencias de la élite militar y política fueron construidas de tres pisos. Algunas de estas
estructuras fueron pintadas de blanco, lo que a su vez hacia que resplandecieran con la luz
solar.Sus edificaciones eras mayormente rectangulares y en otros casos cuadradas, y estaban
construidas de piedra y barro. Además, construyeron caminos que conectaban a los pueblos
cercanos.Las murallas o capillapatas fueron construidas con piedras alargadas pegadas con
barro. Estos muros tienen alturas de 8 metros hasta 12 metros de altura por 3 metros de ancho,
superando los 400 metros de largo. Esto formaba un gran cercado.El templo Pachacamac es
uno de los centros religiosos más importante en la arquitectura wari. Este recinto funcionó como
un oráculo.Se trata de una plataforma en forma de pirámide de escalones y seis lados. En este
templo se encuentran almacenes, habitaciones, una plaza principal y un atrio, entre otros
espacios.
3- Economía
El imperio wari no contaba con monedas para el comercio, ya que el gobierno estaba a cargo de
la producción y distribución de los productos. Sin embargo, el pueblo wari producía sus propios
alimentos y hacían trueques en los centros comerciales a través de cerámicas, textiles, piedras
preciosas, orfebrería y estatuillas. La economía wari se basaba en la agricultura. Gracias a la
fabricación de canales y sistemas de riego lograron impulsar una mayor producción de maíz,
mashua, quinua, papa, yuca, camote, algodón, coca, entre otros productos. Mediante las
manufacturas el pueblo logró expandirse por los andes centrales, desde el siglo VI al siglo X. Por
otro lado, también se dedicaron a la ganadería con la crianza de llamas y alpacas. Las redes de
caminerías que conectaban con todos los centros administrativos provinciales fueron vitales para
el Imperio wari, sustentando las relaciones económicas y brindando así una mejor comunicación
con las demás comunidades.Como resultado, esta ciudad se convirtió en un motor de
producción, explotación de riquezas minerales, agropecuarias, ganaderas y manufactureras
debido a su rigurosa planificación.
4- Cerámica
En la primera fase de la cerámica wari sus piezas fueron de gran tamaño, hechas para los rituales
funerarios como ofrendas. Esta práctica evidencia la influencia de la cultura tiahuanaco. Con el
pasar del tiempo, el tamaño de las piezas de cerámica se redujo y la producción se volvió mucho
más ambiciosa. Los diseños de las cerámicas estaban inspirados en animales, seres místicos y
seres mitológicos con cabezas de felinos. La cerámica wari fue policromática. Entre sus colores
se destaca un tono crema, los ocres, el negro, rojo y marrón. Sus piezas se caracterizaban por
tener colores brillantes; los tazones ceremoniales fueron los objetos más relevantes. También
fueron muy comunes las botellas, las vasijas modeladas, los vasos y los pequeños cántaros con
cuello de esfinge.
5- Textilería
La textilería wari fue de buena calidad y utilizaron fibras de colores blanco, negro, rojo brillante,
azul brillante, dorado y gris. Sus diseños tenían forma de pumas, cóndores, seres mitológicos y
cabezas humanas. Utilizaban la lana para confeccionar las prendas de vestir. Sus tapices se
encuentran entre los más finos del mundo, por su estética e imágenes; estos fueron hechos de
algodón y lana de vicuña. Por otra parte, las túnicas fueron hechas con diseños abstractos y
geométricos de brillantes colores.
La mayoría de los diseños eran en forma de patrones y utilizaban la técnica de tapicería para su
elaboración. Asimismo, los wari elaboraron bellos tejidos de algodón y plumas, los cuales
demuestran una gran armonía en el color. Los tejedores de tapices crearon telares muy grandes,
de 2 metros de alto por 2 metros de ancho, por lo que se necesitaban dos o más elaboradores
que debían trabajar meses de forma continua para completar una pieza. Las creaciones
contenían bandas verticales con diseños que se repiten, con trama y simples cruces sobre una
urdimbre para que no se deshilacharan. En algunos casos se pueden ver figuras comprimidas,
mientras que en otros se amplifica la imagen.