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Obligaciones Resumen

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Derchos y Oblicaciones de Ramon Silva Alonso.

DERECHO CIVIL – OBLIGACIONES


LECCIÓN 1 LA RELACION OBLIGATORIA
CONCEPTO es un vínculo jurídico por el cual una persona llamada deudor debe a otra
llamada acreedor una prestación apreciable en dinero y este se halla facultado a exigirla. La
obligación puede ser de hacer, de no hacer, de dar cosa cierta, de dar cosa incierta y de dar
suma de dinero.
EVOLUCIÓN
1) en el derecho primitivo la acción del acreedor se dirigía contra la persona del deudor, en
caso de incumplimiento el acreedor podía apoderarse del deudor y aún venderle como
esclavo más allá de los límites de la ciudad 2) la lexpoeteliapapiria con ella la acción del
acreedor se dirige hacia el patrimonio del deudor no más contra su persona.
Actualmente el deudor responde del cumplimiento de sus obligaciones con todos sus bienes
presentes y futuros
FUENTES DE LAS OBLIGACIONES LAS GRANDES FUENTES
En el derecho moderno han quedado identificados los delitos y cuasidelitos, contratos y
cuasicontratos
Los delitos son los hechos punibles cuya sanción sea pena privativa de libertad de hasta
cinco años o multa, los cuasidelitos son los hechos causados por culpa o imprudencia. Los
contratos dos o más personas se ponen de acuerdo sobre una declaración de voluntad
destinada a reglar sus derechos. Los cuasicontratos alude a los hechos lícitos que se
aproximan a los contratos pero no son contratos. La ley es la fuente de todas las
obligaciones
TEORIAS ACERCA DE LA NATURALEZA DE LA RELACIÓN OBLIGATORIA
1) TEORIA OBJETIVA el crédito es fundamentalmente un título de obtención o
consecución de una prestación, la teoría objetiva caracteriza la relación obligacional desde
el ángulo del sometimiento del patrimonio del deudor a la acción del acreedor
2) TEORIA SUBJETIVA para ésta el crédito es sobre todo un poder o potestad sobre la
conducta del deudor, el acreedor ostenta un poder jurídico o derecho subjetivo de exigir del
deudor ese cumplimiento, la voluntad del acreedor es subordinante.
DEUDA Y RESPONSABILIDAD FACTORES DE ATRIBUCIÓN DE
RESPONSABILIDAD
La obligación contiene dos elementos:
1) el débito es el deber realizar una determinada prestación
2) la responsabilidad de que si no paga se ejecuta su patrimonio. El debitum es el deber de
cumplir y la obligatio es la responsabilidad
Vinculo jurídico por el cual una persona llamada deudor debe a otra llamada acreedor una
prestación apreciable en dinero y éste se halla facultado a exigirla

LECCIÓN 2
ELEMENTOS DE LA RELACIÓN OBLIGATORIA.
Los elementos esenciales de la relación obligatoria pueden ser definidos como
“aquellos factores irreductibles que entran necesariamente en la noción de obligación de
modo que no podría concebirse esa relación jurídica sin la existencia de tales elementos”1
Estos elementos son los siguientes:
Los sujetos activo y pasivo de la relación;
El objeto de la relación o prestación;
La causa, en las obligaciones contractuales, elemento sumamente discutido.
SILVA ALONSO afirma que: “hay autores que afirman que a los citados deben agregarse
otros elementos, como el vínculo, el contenido, la compulsión”.
Los sujetos.
Concepto.
Toda obligación supone necesariamente un sujeto activo, llamado acreedor, a cuyo favor ha
de llevarse a cabo la prestación, y un sujeto pasivo, el deudor, quien tiene a su cargo la
realización de esa misma prestación.

1
Capacidad.
Pueden ser sujetos de una relación obligatoria toda aquella persona de derecho. En tal
motivo, todos aquellos que invistan tal carácter, es decir, con capacidad para adquirir
derechos y contraer obligaciones, tienen aptitud para ser sujetos de obligación. Así tanto las
personas físicas, como las jurídicas (sean públicas o privadas) pueden ser sujetos de
obligaciones. Además de los patrimonios, como la masa de los concursos y la comunidad
hereditaria deberían poder ser considerados como sujetos activos o pasivos de obligación.
Para que la obligación sea válida resulta indispensable que los sujetos se invistan de
capacidad de derecho. Esto significa que “...el acreedor debe poder ser titular del crédito
que otorga y el deudor debe poder quedar obligado por la deuda que adquiere”.Tal es la
importancia de la capacidad de derecho que su ausencia aparejaría la nulidad de la
obligación misma.
Si faltase en cambio la capacidad de hecho en los sujetos, el acto constitutivo de la
obligación sería nulo pero de nulidad relativa, lo que implica que la nulidad sería
subsanable.
Unidad o pluralidad.
Nada obsta a que dentro de una relación obligatoria puedan existir más de dos
sujetos. Incluso puede darse el caso en que frente a un solo acreedor haya varios deudores o
frente a un solo deudor haya varios acreedores en una misma relación. Esto es así, ora
porque el vínculo se haya constituido de esa manera ora porque por sucesión (generalmente
hereditaria) al único acreedor o deudor hubiese subsistido una pluralidad.
Cuando es posible que se de una multiplicidad de sujetos son factibles tres hipótesis:
a) que de la obligación quede fraccionada en otras obligaciones, dando lugar a tantas
deudas o créditos cuantos sean los acreedores o deudores.
b) que la obligación, aunque susceptible de división por la naturaleza de la
prestación, resulta no serlo por voluntad de las partes o por disposición de la ley.
c) que el vínculo sea irrescindible, por la misma naturaleza de la prestación, la que
no resulte ser susceptible de ejecución por partes.
Determinación.
La determinación, dentro de una relación obligatoria se refiere a que los sujetos de
la misma (de la obligación) deben estar plenamente determinados al tiempo de constituirse
la misma. En cualquier caso, ellos deben ser susceptibles de ulterior determinación. En tal
caso, se da la obligación un sujeto transitoriamente indeterminado.
La doctrina suele hablar de indeterminación transitoria en supuestos como: “las promesas al
público, los títulos al portador y las obligaciones ambulatorias”.
Obligaciones ambulatorias u obligaciones propter rem.
Este tipo de obligaciones han sido definidas como: “aquellas que incumben al propietario o
poseedor de una cosa en cuanto tal, de manera que desaparecida esta calidad, desaparecen
aquellas”.
El principal carácter de este tipo de obligaciones es que se transmiten al sucesor particular
de la cosa que se enajena, sin que sea necesario un convenio especial al efecto.
Las obligaciones siguen a la cosa y gravan a los adquirientes sucesivos de ella al tiempo
que se extinguen para el enajenante.

BOLILLA 3
ELEMENTOS DE LA RELACIÓN OBLIGATORIA (cont.)
EL OBJETO.
Concepto.
“El objeto de la obligación es la prestación, acto o conjunto de actos que el deudor se ve
constreñido a efectuar a favor del acreedor. El objeto de una objeto de una obligación es
aquello que debe el deudor”.
Caracteres.
a) Posibilidad
b) Determinación O POR LO MENOS DETERMINABLE
c) Debe tener contenido patrimonial.
Art. 418º C.C.P.- “La prestación que constituye el objeto de la obligación debe ser
susceptible de valoración económica y corresponder a un interés personal, aún cuando no
sea patrimonial del acreedor”.
Disposiciones del Código Civil sobre la materia.
Sobre este punto nos remitimos a los artículos de nuestro Código Civil desarrollados en la
presente bolilla
BOLILLA 4
ELEMENTOS DE LA RELACIÓN OBLIGATORIA (cont.)
LA CAUSA.
Dificultad de la materia. LA MAYOR DIFICULTAD.
Como dice SILVA ALONSO :“una de las dificultades reside en el sentido en que se utiliza
la voz causa. En el derecho romano la causa era la formalidad (verba), la entrega de la cosa
o el cumplimiento del factum necesarios para el nacimiento del contrato formalista, real o
innominado”.
Debemos agregar a esto, que los romanos llamaban causa a la fuente de la obligación:
contrato, cuasicontrato, delito, cuasidelito.GAYO en este sentido lo utilizaba cuando aludía
a las fuentes de la obligación denominándolo así variaecausarumfiguris. Así tomado, al pie
de la letra, desde luego el sentido de la expresión es causa de la obligación. Aquí, lo que se
trata de desentrañar es porqué existe la obligación, porqué está constreñido el deudor. Esta
obligado porque ha celebrado un contrato, porque ha cometido un delito, etc.
BORDA buscando los diversos significados del tema que nos trata dice lo siguiente: “La
palabra causa tiene en el Derecho dos acepciones diferentes:
a) Designa, a veces, la fuente de las obligaciones, o sea, los presupuestos de hechos de los
cuales derivan las obligaciones legales: contratos, hechos ilícitos, etc.;
b) otras veces, en cambio, es empleada en el sentido de causa final, significa el fin que las
partes se propusieron al contratar.
Es el segundo significado lo que nos interesa. Por el se ha trabajo un debate doctrinario,
discutiéndose si la causa... ¿debe o no se considerada como un elemento esencial del acto
jurídico?, se ha cuestionado incluso la propiedad de la palabra causa; y, lo que es más grave
aún, existen profundas divergencias respecto del significado cabal de esta institución.”
Es necesario confesar que los esfuerzos de los juristas por preciar con claridad el concepto
no han sido muy fructíferos, subsistiendo hasta hoy día, después de una abultadísima
literatura sobre el tema, profundas divergencias.
Aparición del problema de la causa en el campo del derecho. La doctrina causalista de
Domat y Pothier.
El tema de la causa ha sido introducido en el derecho contemporáneo por el Código Civil
Francés de 1.804. En efecto, el Código de Napoleón se refería al tema en cuatro artículos:
1.1.08º, 1.131º, 1.132º y 1.133º.
El primero alude a los elementos para la validez del contrato y entre ellos menciona la
capacidad de las partes, su consentimiento, un objeto legítimo y una causa lícita. Los otros
artículos son complementarios de este.
Así, los redactores del Código de Napoleón se limitaron a reproducir en los artículos
anteriormente mencionados las brillantes ideas de DOMAT, que no en balde ha sido
llamado a ser el creador de esta noción y su doctrina considerada:
Doctrina Clásica de la Causa.
Como era lógico, DOMAT profundamente influenciado en el sistema formalista del
Derecho Romano, entiende la causa en los hechos objetivos del contrato. Sus enseñanzas
fueron difundidas por PHOTIER en su obra “Tratado de las Obligaciones”.
BORDAsobre el referido dice: “Su concepción de la causa es definitivamente objetiva, la
causa es el fin del acto jurídico; cuando se habla del fin, no debe creerse que se trata de los
móviles personales y psicológicos de cada contratante, sino de los elementos materiales que
existen en todo contrato; por consiguiente, en los contratos sinalagmáticos, la causa de la
obligación de cada una de las partes es la contraprestación de la otra. Así, por ejemplo, en la
compraventa, la causa de la obligación contraída por el vendedor, es el precio que recibirá;
mientras que para el comprador, la causa es la cosa que adquiere. En los actos a título
gratuito es el animus donandi, o intención de beneficiar al que recibe la liberalidad. Faltaría
la causa si no existe contraprestación o si no hay animus donandi.”
El anticausalismo de Ernst y Laurent y los grandes civilistas europeos.
Hablando de la tesis anticausalista, podemos enunciar que el mismo surgió a partir de un
celebre artículo publicado en Bélgica en 1.826, por un profesor de la Universidad de Lieja
ERNST, más tarde por LAURENT(Principes du DroitCivile, T. XVI, n. 111), donde la
teoría de la causa sufrió rudos ataques de parte de los más ilustres juristas. PLANIOL la
impugnó por falsa e inútil.
Es falsa, sostiene, porque existe una imposibilidad lógica de que en un contrato
sinalagmático, una obligación sea la causa de la obligación de la contraparte. Las dos nacen
al mismo tiempo. Ahora bien: no es posible que un efecto y su causa sean exactamente
contemporáneos; el fenómeno de la causa mutua es incomprensible.
Es inútil, porque esta noción de causa se confunde con la de objeto; y, particularmente, la
causa lícita no parece ser otra cosa que el objeto ilícito.
Finalmente, en materia de actos gratuitos, el animus donandi, considerado de una manera
abstracta y con independencia de los motivos verdaderos que inspiraron el acto, resulta una
noción vacía en todo sentido.
La reacción neocausalista de Capitant, Maury y Josserand.
El neocausalismo surgió en Francia como una reacción a los excesos del anticausalismo.
El replantea con nuevos y fundados criterios la anticua doctrina causalista de DOMAT y
POTHIER.
Este tipo de reacción neocausalista ha traído aparejada nuevas orientaciones que, ensayan
dar en nuevas ideas el contenido de la noción de causa y que acaparan a la mayor parte de
la doctrina de este siglo.
Los neocausalistas han seguido tres orientaciones, siendo estas:
La noción de causa no puede ser, en un sistema consensualista, sino subjetivista.
Por oposición al anterior, no admiten esta noción sino como un elemento material,
Se sitúan en una posición intermedia haciendo de la causa una combinación de elementos
subjetivos y materiales.
En verdad, los estudios del Decano MAURY y de HENRY CAPITANT 2los que han
obtenido el mayor consenso en la doctrina no sólo francesa sino europea y americana.
MAURY declara que “la causa de las obligaciones de los contratantes en los contratos a
título oneroso es el equivalente deseado, tal como existe o debe existir en el momento en
que el contrato se forma”.
Pero ha sido por sobre todo HENRY CAPITANT, quien en su obra que se ha vuelto célebre,
el que se ha desenvuelto con mayor éxito en la nueva doctrina. En él, la noción de causa “se
vuelve de naturaleza esencialmente psicológica y al mismo tiempo absolutamente
indispensable a la validez de la obligación contractual. La causa es el fin perseguido que las
partes buscan en un tipo determinado de acto jurídico”.
SILVA ALONSO sobre el referido tema el mismo dice: “La teoría de CAPITANT marca la
resurrección de la concepción que existía en el Derecho Canónico. Es la voluntad de los
contratantes lo que constituye la clave gracias a la cual puede explicarse el mecanismo de la
obligación”.
Con posterioridad a CAPITANT, el célebre neocausalista JOSSERAND, entre tantos otros,
han proseguido con el estudio del tema.
La causa en el Código Civil.
Se alude a la causa en nuestro Código Civil en el Art. 417, diciendo el mismo...
Art. 417º C.C.P.- “Las obligaciones derivan de alguna de las fuentes establecidas por la
ley”.
El Código alude a la noción como fuente de las obligaciones y estableciendo que ellas
derivan de alguna de las fuentes instituidas por la ley.
En cuanto a la causa como finalidad del acto o de la obligación en un contrato es innegable
que la noción queda incorporada al Código, aunque claramente no se utilice la voz causa.
Disposiciones que contiene el Código Civil Paraguayo.
Art. 1.801º C.C.P.- “La promesa de pago o el reconocimiento de una deuda, exime a aquel a
favor de quien se la otorgue de probar la relación fundamental. La existencia de ésta se
2
presume, salvo prueba en contrario. Para que la promesa se convierta en causa de la
obligación debe consignársela por escrito”.
Art. 1.817º C.C.P.- “El que se enriquece sin causa esta obligado, en la medida de su
enriquecimiento, a indemnizar al perjudicado la correlativa disminución de su patrimonio.
Cuando el enriquecimiento conste en la adquisición de una cosa cierta, corresponderá la
restitución en especie, si existe al tiempo de la demanda”.
Art. 1.819º C.C.P.- “El que paga lo que no debe tiene derecho a repetir lo pagado, con
frutos e intereses desde el día de la demanda, si el que cobró procedía de buena fe; si era de
mala fe, desde el día del pago”.
En ambos artículos precedentes está consagrado el principio de que “todo acto tiene que
envolver una razón de si mismo o de que ha de existir en el acto una justificación o
fundamento jurídico”.
Art. 722º C.C.P.- “Si la prestación a cargo de una de las partes se hace imposible por su
culpa, la otra podrá cumplir su obligación, exigiendo daños e intereses, o resolver el
contrato resarciéndose de aquellos”.
Art. 725º C.C.P.- “En los contratos bilaterales, el incumplimiento por una de las partes
autoriza a la que no sea responsable de él, a pedir la ejecución del contrato, o su resolución
con los daños e intereses, o ambas cosas”.
Demandada la resolución, ya no podrá pedirse el cumplimiento, pero después de reclamado
éste, podrá exigirse aquella”.
Estas disposiciones hablan de una interrelación entre las prestaciones que está en la
intención de las partes. Se halla el substactumde esa interrelación la noción de causa.
Art. 1.820 C.C.P.- “No procede la repetición de lo pagado espontáneamente cumpliendo
deberes morales o sociales, salvo caso de incapacidad del que pagó. Tampoco procede la
repetición de la prestación cumplida con una finalidad contraria a la ley o a las buenas
costumbres”.
La noción de causa-lícita se halla en nuestro Código Civil en disposiciones como las que
establecen que no procede la repetición de la prestación cumplida con finalidad contraria a
la ley o a las buenas costumbres.
BOLILLA 5
TEORIA DEL CUMPLIMIENTO.
Introducción.
BORDA al referirse a este punto dice: “El efecto normal de la obligación es el
cumplimiento específico o in natura de la prestación debida: se paga exactamente lo que se
debe y no otra cosa en su reemplazo (indemnización de daños). Este incumplimiento puede
ser voluntario, forzado o hecho por un tercero”.
“El efecto esencial de las obligaciones es el deber de cumplir con las prestaciones
prometidas. Ese cumplimiento es, en la inmensa mayoría de los casos, voluntario. Sea
movido por el sentimiento moral del deudor de hacer honor a la palabra empeñada, sea por
conveniencia, sea finalmente, por el deseo de evitar la ejecución forzada, la gran masa de
las obligaciones surgidas del tráfico humano recibe cumplimiento espontáneo”
Así, todos los efectos de la relación obligatoria pueden referirse a cuatro ordenes diferentes:
Ejecución directa de la obligación (in specie o in natura) sea que la ejecución se cumpla
voluntariamente o forzadamente, sea que ella se ejecute por el deudor o por un tercero;
Ejecución indirecta de la obligación (ejecución por equivalente en numerario o bajo la
forma de indemnización por daños), cuando se da el supuesto de falta de cumplimiento.
Medios y medidas concedidas al acreedor para la tutela del crédito.
Estudio de aquellas obligaciones que carecen de los efectos normales de las obligaciones,
que son las obligaciones naturales e imperfectas.
supone la consideración de los siguientes puntos:
1º) Teoría del cumplimiento directo;
2º) Teoría del cumplimiento por equivalente o indemnización de daños;
3º) Teoría de la Tutela del crédito;
4º) Teoría de las obligaciones imperfectas.
Cumplimiento Directo.
El estudio de esta sección se ocupa del cumplimiento directo de la obligación, sea por el
deudor, sea por un tercero. Vale decir, en ella se habla del cumplimiento in natura o en
especie, de la obligación.
También la ejecución puede ser voluntaria o forzosa.
Ejecución Voluntaria: aquí las obligaciones se ejecutan o cumplen voluntariamente, sin
necesidad de acción alguna del acreedor. Al cumplirse de esta manera, las obligaciones se
extinguen o mueren, suele decirse, de muerte natural.
Ejecución Forzada: el deudor debe cumplir con la obligación en época y de la manera
debida.
Si se demora en hacerlo, se encuentra en la situación que en derecho se denomina mora 3, y
este estado de mora entraña para él consecuencias jurídicas diversas
Si aún compelido al pago, existiera renuencia al mismo, el acreedor está facultado a exigir
el cumplimiento de grado o por fuerza, de acuerdo con los poderes que la ley pone a su
alcance para obtener el cumplimiento de la prestación que le es debida.
Esta es la denominada ejecución forzada.
SILVA ALONSO sobre el principio que rige en este tipo de ejecución: “La ejecución
forzada tiene primeramente a que la prestación se cumpla directamente, es decir, en
especie, sea que la ejecute el deudor, sea que la prestación sea cumplida por un tercero.
Solo cuando ello no es posible corresponde al acreedor obtener el cumplimiento indirecto o
por el equivalente (indemnización de daños)”.
Ejecución por el deudor.
La ejecución forzada por el deudor presenta determinadas variantes según se trate de
obligaciones de dar, de hacer y de no hacer.
En el decurso de esta exposición sistemática de las variantes dadas en la ejecución hecha
por el deudor, iremos desmenuzando cada uno de los tipos que se pueden dar el la misma.
Obligaciones de dar.
En las obligaciones de dar, el deber de conducta que recae sobre el deudor le impone la
necesidad de desprenderse de un bien para entregárselo al acreedor, a título diverso según
las circunstancias. Así, puede ser a fin de transferirle el dominio; puede ser para transferirle
la simple tenencia y puede ser para restituir al propietario algo que le pertenece y que el
deudor detenta a título de mero depositario o consignatario.
Si fuere necesario, en este tipo de obligaciones, el acreedor puede hacer uso de la fuerza a
fin de que el deudor entregue lo que es debido.
Cuando la prestación consista en una suma de dinero, se procederá al embargo de bienes
del deudor y constatada la relación jurídica y no abonándose la suma adeudada se llevará a
cabo la venta de dichos bienes en subasta pública hasta el monto de lo debido.
Basta con que la cosa exista y que se halle en poder del deudor para que ella pueda serle
reclamada e, incluso, arrancada, cumpliéndose así la ejecución forzada.
Obligaciones de hacer.
En las obligaciones de hacer, por su naturaleza misma, no es posible la imposición del
cumplimiento coactivo al deudor.
En primer término, porque la conducta de la persona humana es incoercible.
En segundo lugar y aunque se pudiese obligarse al deudor a ejecutar, ese cumplimiento
obligado, en la mayoría de los casos resultaría inconducente o insatisfactorio para el
acreedor, que no podría conseguir de tal manera el objetivo deseado.
SILVA ALONSO con respecto a las obligaciones de hacer, dice el mismo: “en el supuesto
de las obligaciones de hacer si la obligación fuera susceptible de cumplimiento por tercero
sin desmedro del derecho del acreedor, no habría inconveniente en que la ejecución se
llevará a cabo por otra persona a cargo del deudor”.
Si la obligación no fuese susceptible de cumplimiento personal por el deudor, por haber
sido contraída teniendo en cuenta sus personales aptitudes y éste no pudiese o no quisiese
ejecutarle, no cabría sino la solución de indemnización por daños.4
Obligaciones de no hacer.
Si el deudor dejara de abstenerse o hiciera lo que se obligó a no hacer, lo hecho debería ser
destruido, a su costa. Y si tal cosa no fuese factible, procedería la pertinente indemnización.
3
4
Ejecución por un tercero.
El acreedor está asistido del derecho de hacerse procurar por otro la prestación que el
deudor se niega a ejecutar. Todo por cuenta de éste.
Entendemos que el acreedor no puede obligar al deudor a cumplir, pudiendo sí recurrir a un
tercero para obtener el cumplimiento de la prestación debida. En casos como estos, los
gastos corren por cuenta del deudor.
Si pagase el acreedor, este queda a salvo en su derecho contra el primitivo deudor si este le
adeudase alguna cosa.
Si el tercero cumpliese con la prestación y el acreedor no le pagase, el mismo se subroga en
los derechos del primitivo acreedor contra el deudor quien le mandó hacer el trabajo
determinado.
Obligaciones de dar.
En las obligaciones de dar cosas inciertas o de género se suelen dar estos supuestos.
En las obligaciones de dar cosas ciertas, cuando las cosas debidas se hallan en poder del
tercero.
Obligaciones de hacer.
Aquí el cumplimiento por tercero resulta posible en las obligaciones de hacer que no
hubiesen sido contraídas intuitupersonae.5
El acreedor es asistido del derecho de hacerse procurar por otro la prestación que el deudor
se niega a ejecutar. En caso del incumplimiento por el tercero, los gastos son por cuenta del
deudor. El tercero que ejecuto la prestación puede reclamar el pago al acreedor que le
encomendó al deudor.
Obligaciones de no hacer
Este tipo de relación obligatoria obsta a una reacción negativa, un dejar de hacer algo, un
impedimento que, siendo negativo para el deudor es positivo para el acreedor.
BOLILLA 6
TEORÍA DEL CUMPLIMIENTO INDIRECTO
Diversas denominaciones: cumplimiento indirecto. Cumplimiento por indemnización.
Incumplimiento.
Al producirse el incumplimiento de la prestación sobreviniendo por tal motivo la
imposibilidad de su ejecución para el futuro por causa imputable al deudor, el acreedor
tiene la facultad de solicitar la indemnización de los daños que tal incumplimiento pudiere
haberle acarreado.6
La acción del acreedor está destinada a obtener el resarcimiento de los daños ocasionados
por incumplimiento contractual, por causa imputable al deudor, en esencia, no es diferente
a la acción dirigida a lograr la reparación de los daños que ocasionamos a los demás en el
decurso de la vida, al margen de cualquier relación contractual.
En tal sentido, hoy se habla ya de un derecho de daños o responsabilidad por daños. La
doctrina señala la autonomía de este derecho o que es lo mismo, la unidad de
responsabilidad contractual o extracontractual.
El fundamento de la responsabilidad de responder se halla en la Teoría del Acto Dañoso o
Daño Civil.
El daño.
La antijuridicidad del daño puede entonces provenirde un acto culposo, doloso o de un acto
de otra naturaleza. Inclusive puede provenir de un acto ajustado a derecho (sería el caso de
una expropiación, dispuesta por la ley, a consecuencia de la cual el propietario deba ser
indemnizado).
Concepto.
“Es el perjuicio material o moral sufrido por una persona”.
Especies.
El Art. 1.835º7 de nuestro Código Civil nos permite distinguir 3 categorías diferentes de
daños:
Daños causados a la persona en su salud o a su vida. Estos daños pueden consistir en
heridas, enfermedades, incluso la muerte.(daño físico)
5

7
Daños causados a los bienes. (daño material)
Aquí el daño puede producirse tanto el los bienes corporales, incorporales. Un ejemplo del
primero sería un daño causado a un automóvil por colisión y del segundo sería el daño
causado por la falsificación de un documento, billete, etc.
Daño causado a una persona en sus facultades o en sus afecciones legítimas (daño moral)
Evaluación.
Nuestro Código Civil en su Art. 1.856º, consigna la norma jurídica que se
debe tener en cuenta para establecer la estimación del daño.
Si el perjuicio es causado en un bien corporal, el monto de la pérdida, se estima
según el importe de la reparación, si la cosa puede ser reparada, y a falta de ello teniendo en
cuenta el valor de los restos.
El daño ocasionado a la persona comprende no solo el perjuicio que efectivamente
se le ha acarreado con el hecho (daño emergente), sino también la utilidad que ha dejado de
percibir (lucro cesante).
Extensión del resarcimiento.
El resarcimiento habrá de abarcar, como ya se ha dicho, el perjuicio efectivo que produjo a
la víctima o sea el daño emergente como también la utilidad que la misma deja de percibir
durante su periodo de recuperación o convalecencia, vale decir el lucro cesante.
Época.
Se denomina así al momento de la apreciación de los daños. Esta difiere según se
trate de daños provenientes de un incumplimiento contractual o de los hechos ilícitos.
Responsabilidad contractual (incumplimiento de contrato).
Si bien la doctrina no es uniforme en este aspecto, la mayoría de los autores
advierten que perjuicio debe ser apreciado al tiempo de la ejecución del contrato.
Responsabilidad extracontractual (hechos ilícitos).
La jurisprudencia en nuestro país se inclina a apreciar el daño al tiempo de su
producción, pero quizás sea más justo apreciarlo al tiempo de la sentencia, teniendo en
cuenta el tiempo que puede haber transcurrido, entre uno y otro momento.
Prueba. La carga de la prueba corre por parte del actor que inicia la demanda por
indemnización de daños y perjuicios, siendo este quien debe buscar los medios que atraigan
la atención del juez o los magistrados, para que estos en forma inequívoca otorguen la
correspondiente condena pecuniaria al demandado, quien ha producido el daño.
En los casos de “daño eventual”.
La acción no puede iniciarse, porque se requiere que el perjuicio exista. Puede
ocurrir que la simple posibilidad de un daño cree un perjuicio inmediato, en cuyo caso la
acción sería procedente porque el perjuicio puede ser objeto de estimación. Ejemplo: La
excavación que se realiza al lado de los cimientos de una vivienda contigua producirían el
derrumbe de la misma si se continua con dichos trabajos.
En los casos de “daño futuro”.
La víctima puede actuar inmediatamente. Si el perjuicio puede ser calculado de modo
exacto, como lo exige nuestra legislación civilista, los jueces acordarán una indemnización,
ya sea bajo la forma de capital o de la forma de renta.
El daño moral.
SILVA ALONSO con respecto al referido afirma: “El daño que puede acarrearse a las
personas puede alcanzar a otros bienes que los descriptos más arriba. El puede a menudo
afectar sus afecciones legítimas, sus facultades, es decir, aquellos bienes inmateriales que
son objeto de la protección de la ley”
En este caso, la indemnización, tiene por objeto compensar el perjuicio material,
con el único objeto material capaz de hacerlo en alguna medida, la indemnización en
metálico.
Entendamos bien, el daño moral, el bien afectado es un bien no patrimonial.
Es decir, el daño moral está expresamente consagrado en la norma jurídica como
daño posible de ser sufrido, reconociéndose el derecho que tiene todo damnificado de ser
indemnizado no solo en las pérdidas materiales o patrimoniales, sino también en aquellas
otras que no revisten este carácter, acaso en un carácter

La indemnización.
Concepto.
Definiendo a la indemnización SILVA ALONSO 8dice: “Es el resarcimiento de los daños y
perjuicios causados a otra persona, en ella y en sus bienes materiales o no sea por
incumplimiento del contrato o por otros hechos”.
Clases.
Pueden existir dos tipo o clases de indemnización, las que devienen del contrato o las
extracontractuales.
Contractual.
En el campo de las obligaciones contractuales, la indemnización supone siempre el
incumplimiento imputable de una prestación anteriormente prometida y la acción tendiente
al resarcimiento de los daños ocasionados es siempre subsidiaria, teniendo en cuenta que
ella solo procede cuando la prestación no ha podido cumplirse por causas imputables al
deudor.
Como ya se tiene por sabido, la obligación del deudor el cumplir con la prestación en
especie. Cuando se incurre en el incumplimiento por un hecho que le es imputable al
mismo, este está obligado a reparar el perjuicio que ese incumplimiento acarrea.
En tal caso, el acreedor esta facultado a obtener del deudor la prestación equivalente a lo
que le hubiese significado la prestación prometida. La indemnización, no es otra cosa que el
equivalente en metálico de la prestación prometida.
SILVA ALONSO afirma: “El incumplimiento puede revestir un carácter provisorio o
definitivo, lo que da lugar al siguiente esquema:
Incumplim. provisorio (mora) : imputable (dolo o culpa) + daño = indemnización.
Incumplim. provisorio (mora): imputable (caso fortuito) + daño = exoneración de
responsabilidad.
Incumplim. propiamente dicho: imputable (dolo o culpa) + daño = indemnización.
Incumplim. propiamente dicho: inimputable (caso fortuito o fuerza mayor) + daño=
exoneración de responsabilidad”.
Extracontractual:
Son de esta clase los derivados de los hechos ilícitos. La indemnización supone un daño
causado a otro individuo de un hecho no ilícito.
Aquí no existe incumplimiento de alguna obligación preexistente al hecho que se acomete,
teniendo su origen la obligación en un hecho antijurídico, la obligación que se genera
entonces es la de reparar el perjuicio, traduciéndose siempre esta en una indemnización de
daños y perjuicios.
Antiguamente se aplicaba la lextalionis, donde como ya se sabe, el autor del daño era
obligado a sufrir un daño similar en cu cuerpo. Cuando se suavizaron las costumbres se
permitió lo que se ha llegado a denominar composición, que era un procedimiento donde el
actor de un perjuicio podía liberarse de la aplicación de laley del talión, abonando a la
víctima una cierta suma de dinero, con tal que este aceptara la solución. Posteriormente, ya
con una mayor humanización y siendo desde ahí el patrimonio del deudor la prenda común
de sus acreedores, la composición se hizo obligatoria para quien sufría el daño, que no
podía negarse a aceptarla. Eso último es hasta hoy en día, pues como se ha dicho ya, las
obligaciones no comprometen el cuerpo del deudor, sino solo su patrimonio, siendo desde
ya la indemnización de daños la única prestación exigible.
De la diferencia entre las indemnizaciones contractuales y extracontractuales, resulta un
régimen legal distinto:
Solo en las obligaciones nacidas de la voluntad de las partes, puede hablarse de
incumplimiento imputable o no.
2. Solo en esta existe la posibilidad de constituir en mora al deudor.

BOLILLA 7
TEORÍA DEL CUMPLIMIENTO DIRECTO, CLASES DE INDEMNIZACIÓN
8
Indemnización contractual.
Inejecución.
Como ya se ha hecho mención anteriormente, en la bolilla Nº 7 (3.2.1), la indemnización
supone siempre el incumplimiento imputable de una prestación anteriormente prometida.
La indemnización inviste siempre de carácter subsidiario, teniendo un cuenta que ella solo
procede cuando la prestación no ha podido cumplirse por causas imputables al deudor.
La obligación del deudor es cumplir con la prestación en especie. Al incurrir en
incumplimiento por un hecho que le es imputable, está obligado a reparar el perjuicio que
ese incumplimiento acarrea.
Mora: del deudor y del acreedor.
Hablamos de mora en el caso de retardo en el cumplimiento de una obligación.
Para que pueda hablarse de retardo es indispensable que la obligación esté con plazo
vencido, sea líquida y exigible.
Mora del deudor.
El deudor es responsable por los daños y perjuicios que su morosidad ocasione al acreedor
en el cumplimiento de la obligación.
En cuanto al alcance de las consecuencias de la mora del deudor, debemos decir, que ellas
alcanzan a los efectos inmediatos de la mora, y en casos de inejecución maliciosa,
responderá por las consecuencias mediatas.
Además, el deudor es responsable por la mora de sus representantes legales y por personas
que hubiera utilizado en el cumplimiento de la obligación, como lo pueden ser sus
dependientes y empleados.
Si lo llegase a convenir con su acreedor, el deudor no será responsable de las
consecuencias de la mora de sus agentes.
Así mismo, el deudor podrá quedar exonerado de cualquier tipo de responsabilidad, si la
mora no le es imputable por obedecer a caso fortuito o fuerza mayor.
Mora del acreedor.
El acreedor puede ocasionar retardo en el cumplimiento de la obligación en los siguientes
casos.
Si rehusare recibir la prestación ofrecida a pesar de reunir estas condiciones de pago.
Cuando intimado al efecto no realizare los hechos que le incumben para verificarlo o
siempre que no estuviese en condiciones de cumplir con su contraprestación.
No incurre en mora el acreedor, si el deudor que efectúa el requerimiento no pede efectuar
el pago en su oportunidad.
Imputabilidad: Culpa. Dolo.
El incumplimiento es imputable cuando el mismo se debe a la culpa o dolo del deudor, es
decir, cuando es debido o a la falta de previsión o de cuidado del mismo o incluso a su falta
de voluntad de ejecutar la obligación.
La culpa.
La culpa es todo modo antijurídico de conducta, acción u omisión que implica negligencia,
impericia o imprudencia en el agente.
El dolo.
El dolo es el incumplimiento de la obligación hecha por el deudor consiente y
voluntariamente. De igual manera existe dolo cuando una persona consiente y
voluntariamente causa a otra un perjuicio en su persona o en sus bienes.
Este elemento intencional de conciencia y voluntariedad es lo que distingue al
incumplimiento doloso del culposo.
Indemnización extracontractual.
Cuando de obligaciones extracontractuales se trata, la indemnización supone un
daño causado a otra persona, el cual es causado generalmente por un hecho ilícito. En estos
casos no existe incumplimiento de una obligación preexistente, a menos que se hable de
obligación general de abstenerse de realizar actos ilícitos. La obligación que existe se
traduce siempre en indemnización de daños.
Si bien la ilicitud es regularmente presupuesto para la indemnización, en numerosas
situaciones no lo es. Así tenemos casos de resarcimiento sin que se dé ilicitud o
antijuridicidad. Ejemplo: El caso de una persona que daña a otra en defensa propia.
Existen también casos en que hay ilicitud o antijuridicidad y no existe reparación.
Ejemplo: Si una industria o comercio con actividad peligrosa se instalara en el centro de
una ciudad, estallara y ocasionara daños a un imprudente que provocó el mismo (fumando
un cigarrillo y tirando la colilla encendida cerca de un material inflamable), el propietario
de la fábrica no responderá por los daños a pesar de haber ocurrido en antijuridicidad en la
instalación de la fábrica.
Responsabilidad por hecho propio y por hecho ajeno.
Responsabilidad por hecho propio.
Responsabilidad por hecho ajeno.
El incumplimiento puede no deberse en absoluto a la falta de voluntad de cumplimiento del
deudor. El puede deberse a factores extraños por completo a su voluntad. Este es el caso del
incumplimiento debido al caso fortuito o la fuerza mayor.
En tal caso, estamos frente a un incumplimiento no imputable.
BOLILLA 8
TEORIA DEL CUMPLIMIENTO DIRECTO. LA INDENIZACION
PREDETERMINADA.
Cláusula penal.
Concepto.
Cuando se debe determinar la cantidad debida en la indemnización, hemos hecho referencia
que el mismo puede ser fijado de las siguientes maneras.
Legalmente, cuando es la misma ley la que determina el monto,
Judicialmente, cuando ese monto resulta fijado por sentencia del juez,
Convencionalmente, cuando son las partes quienes lo determinan.
De cualquier manera, la norma jurídica, salva cualquier inconveniente con respecto al
último supuesto, cuando por voluntad de las partes se fija una determinada cantidad como
indemnización.9
En el último caso, donde surge que las partes han predeterminado de antemano que los
daños han sido fijados convencionalmente, es lo que se denomina, al decir de SILVA
ALONSO (y a la cual nos adherimos), con una no del todo adecuada terminología, cláusula
penal.
Convengamos finalmente, que la cláusula penal es la cláusula accesoria incorporada a un
acto jurídico por la cual se conviene en pagar determinada prestación para el caso de
incumplimiento de las obligaciones asumidas por el deudor o de retardo en su
cumplimiento.
Caracteres.
El referido objeto de estudio reúne los siguientes caracteres:
1º) Es accesoria de una obligación principal, puesto que opera en función de ésta. Por lo
mismo, a las resultas de la nulidad de la resolución de la obligación principal acarrea la
nulidad o resolución de la cláusula penal10. Otrora, la nulidad o resolución de la cláusula
accesoria deja intacta la de la obligación principal.
2º) Es subsidiaria, pues el objeto de la obligación sigue siendo la prestación principal.
Esta caracterización, apareja las siguientes consecuencias al decir de SILVA ALONSO: “en
primer lugar, el deudor no puede eximirse de la obligación principal cumpliendo con la
cláusula penal11. El acreedor posee siempre la facultad de exigir el cumplimiento en
especie.
En segundo lugar, y precisamente por la función de la cláusula penal, el acreedor no está
facultado a requerir al propio tiempo el cumplimiento de la obligación principal y el de la
prestación que comprota la cláusula penal. Sus facultades se limitan a la potestad de poder
reclamar una cosa u otra. Pero no ambas a la vez. Salvo caso que la cláusula penal aludiere
a la mora del deudor, en cuyo caso pueden acumularse ambas pretensiones o que se haya
convenido que el pago de la pena no extinguiera la obligación principal. Ella no es
accesoria cuando la obligación principal se refiere a terceros.”
3º) Es condicional, puesto que no funciona sino en caso de retardo (mora) en el
cumplimiento o de inejecución.
9
10
11
4º) Es inmutable, puesto que ni el acreedor puede pretender una indemnización mayor a la
establecida en la cláusula “penal”, demostrando la existencia de un mayor daño, ni el
deudor puede pedir abonar una suma menor, alegando la existencia de un perjuicio inferior
al que supone la cláusula penal.
EFECTOS:
A) EFECTO PARA EL DEUDOR: El deudor no podrá eximirse de cumplir la obligación
principal por el pago de la pena, sino en el caso en que expresamente se hubiere reservado
este derecho
B) EFECTO PARA EL ACREEDOR; El acreedor no podrá pedir el cumplimiento de la
obligación y de la pena, sino una de las dos cosas, a su arbitro, a menos que aparezca
haberse estipulado la pena por el simple retardo, o que se haya pactado que por el pago de
la pena no se entienda extinguida la obligación principal
C) EFECTO PARA TERCEROS: podrá estipularse una pena para el caso de
Incumplimiento, total o parcial o de retardo en la ejecución de una obligación, sea a favor
del acreedor o de un tercero.
BOLILLA 9
LIMITACIONES AL PRINCIPIO Y PRIVILEGIO
PATRIMONIO DEL DEUDOR COMO PRENDA COMÚN DE LOS
ACREEDORES
Limitaciones al principio del patrimonio del deudor como prenda común de los acreedores.
Anteriormente, el deudor quedaba atado con su persona y sus bienes a sus acreedores, en
caso de no pago, podía ser vendido como esclavo, luego se creo la ley poeteliapapiria que
creo el principio de que el patrimonio es prenda común de los acreedores vigente hasta hoy
día. DER. ROMANO.
En cuanto a los bienes.
Si bien el patrimonio del deudor responde de sus deudas, no todos sus bienes se hallan
comprometidos por sus obligaciones. Hay bienes que son inejecutables y por lo tanto
escapan de las acciones del acreedor.
SILVA ALONSOafirma que: “Por tal motivo vemos que existen limitaciones a las
facultades del acreedor, ya que hay bienes que escapan de sus acciones. Son inejecutables,
inembargables entre otros las normas mencionadas por el Código Civil y Procesal Civil
Paraguay, el Código Procesal Laboral Paraguayo. Es que, por encima del derecho sagrado
del acreedor a percibir su crédito está el derecho aún más sagrado del deudor a mantener su
vida.” En cuanto a los sujetos acreedores.tre los medios destinados a tutelar el patrimonio
del deudor encontramos dos grandes categorías: los medios de garantía y las acciones
conservatorias.
“Los medios de garantía constituyen un conjunto de instituciones cuyo fin último es la
defensa del crédito o su protección y cuyo fin inmediato es el de amparar el patrimonio del
deudor, reforzar el vínculo obligatorio y asegurar el cumplimiento de la prestación.”
Entre estos institutos algunos son de carácter procesal. Otros pertenecen al derecho material
y son la retención y los privilegios.
“Las acciones conservatorias en el sentido estricto deben considerarse como tales solo
aquellos destinados a mantener incólume el patrimonio del deudor. En tal sentido, impedir
que los valores que le pertenecen desaparezcan o que valores que le son adeudados dejen de
ingresar en él por fraude o injuria de los deudores”.
Estas acciones forman tres especies. La primera es la denominada acción subrogatoria u
oblicua; La segunda y no menos importante es la acción pauliana,finalmente, la última
especie es la acción de simulación.

Los privilegios.
Concepto.
“Es la facultad conferida por ley, a un acreedor, para ser pagado con preferencia a otro”.
Fundamento.
Esta institución encuentra su fundamento en la diferente situación de los acreedores
respecto del patrimonio del deudor. En principio, todos los acreedores tienen un derecho
igual sobre el patrimonio del deudor.
Naturaleza.
Salvo los derechos reales de garantía, los autores no están de acuerdo acerca de la
naturaleza jurídica de los privilegios. La cuestión no es puramente académica, pues si
consideramos a los privilegios como derechos reales, debemos admitir que sus titulares
gozan de facultades para ejercer acciones persecutorias contra los terceros, y al propio
tiempo habría que aceptar necesariamente su indivisibilidad.
Pero estos caracteres mencionados son propios de la hipoteca y no aparecen en los demás
privilegios, salvo excepcionalmente.
Esto se explica por que los privilegios no son sino derechos que determinan la prioridad en
el cobro de los créditos a los acreedores.
Los privilegios no recaen sobre un objeto sino sobre el precio.
Clasificación.
BORDA, con respecto de la clasificación de los privilegios el mismo dice: “Los privilegios
se clasifican en generales, que recaen sobre un conjunto o masa de bienes, y especiales, que
recaen sobre ciertos bienes particulares. A su vez, los primeros pueden ser sobre la
generalidad de los bienes muebles e inmuebles del deudor o solo sobre la generalidad de los
muebles. No hay privilegios que recaigan sobre la generalidad de los inmuebles”
Según se desprende de la lectura del Art. 435º del Código Civil Paraguayo, los privilegios
pueden ser de dos categorías:
1º) Generales: son los que comprenden todo el patrimonio del deudor.
* Nota de clase: Este tipo de privilegios solo pueden hacerse valer en procesos de quiebra y
convocación de acreedores o insolvencia declarada de Acreedores. La sucesión tiene que
ser insolvente.
2º) Especiales: comprenden una determinada parte de los mismos. Son aquellos que gravan
ciertos muebles o inmuebles. A raso modo, pueden ser:
En cuanto al privilegio del obrero al cobro de su indemnización por despido injustificado,
debe ser estudiado dentro de la legislación laboral, sin que el carácter singularísimo que
éste le pueda conferir implique que el mismo deba escapara a las previsiones y reglas de la
materia de los privilegios, dentro de la cual se encuentra, por lo que en la cita a pie de
página trascribimos parcialmente dichos artículos referentes a la norma laboral de fondo.
La clasificación de los privilegios dan lugar a dudas en la doctrina y en la jurisprudencia.
Orden de los privilegios.
Los créditos con privilegio especial prevalecen sobre los créditos con privilegio general.
Los privilegios generales de hipoteca y de prenda, confiere el derecho al pago con
preferencia del crédito garantizado. Aquel será computado desde la inscripción del derecho
real de garantía en el registro público correspondiente. Las inscripciones del mismo día
concurren a prorrata.
Complejidad de los problemas de la materia.
La complejidad de la problemática de la materia se ve en el rango de los privilegios. Puesto
que la teoría de los privilegios se ve ligada a la situación de los acreedores respecto del
patrimonio del deudor.
SILVA ALONSO, con respecto al referido tema: “El principio general de que el patrimonio
es la prenda común de sus acreedores y de que él debe responder de sus obligaciones con
todos sus muebles e inmuebles implica que todos los acreedores tienen un derecho igual”.
El problema radica entonces cuando el patrimonio es exiguo, no alcanza para satisfacer a
tantos acreedores como créditos de diversa índole tenga el individuo (el deudor). Entonces,
el perjuicio de los mismos (los acreedores), será proporcional al respectivo valor de sus
créditos.
Reglas generales sobre el rango de los privilegios. Extinción.
Con respecto a la complejidad de los problemas sobre el estudio de esta materia son la regla
de los rangos de los tipos de créditos privilegiados sobre determinados muebles, inmuebles
y créditos preferidos, que se hallan descritos a cabalidad en los Arts. 437º, 438º 434º y 444º
del Código Civil Paraguayo, Arts. 247º y 248º del Código Laboral Paraguayo; nos
remitidos para su estudio detenido y pormenorizado, como así también recomendamos una
lectura exhaustiva del libro de maestro argentino GUILLERMO A. BORDA 12. A pesar de
ello y esperando dar una pequeña contribución al estudio de esta bolilla en particular, hago
un escueto destaque sobre los tipos de privilegios, de categoría general y especial, pueden
ser en resumidas cuentas:
PRIVILEGIOS GENERALES.
A) Sobre la Generalidad de Muebles e Inmuebles.
a.1) Gastos de Justicia;
a.2) Impuestos;
B) Sobre la Generalidad de los Muebles.
b.1) Los gastos funerarios;
b.2) Los gastos de la última enfermedad durante seis (6) meses;
b.3) Los salarios del personal de servicio y dependientes;
b.4) Los alimentos suministrados al deudor y su familia;
b.5) Los créditos a favor del fisco y de las municipalidades por impuestos públicos.
II. PRIVILEGIOS ESPECIALES.
Privilegio sobre bienes muebles.
a.1) Privilegios del locador;
a.2) Privilegio del posadero;
a.3) Privilegio del acarreador;
a.4) Privilegio del obrero o artesano;
a.6) Privilegios por gastos de conservación;
a.7) Privilegios del vendedor de cosas muebles;
a.8) Privilegios del depositante.
B) Privilegios especiales sobre inmuebles.
b.1) Privilegio del vendedor de inmuebles;
b.2) Privilegio del suministrador de fondos para la adquisición de un inmueble;
b.3) Privilegios de los coherederos o copartícipes;
b.4) Privilegios del donante;
b.5) Privilegios de los arquitectos, empresarios y obreros de la construcción;
b.6) Privilegios del suministrador de materiales;
b.7) Privilegios del acreedor hipotecario;
b.8) Privilegio del crédito por expensas comunes derivadas de la propiedad horizontal;
BOLILLA 10
MEDIDAS CONSERVATORIAS
LAS MEDIDAS CONSERVATORIAS.
Dentro de las medidas de protección, que la ley acuerda a los acreedores, para asegurar el
cobro de sus créditos, se encuentran las medidas conservatorias.
Estas medidas o acciones están destinadas fundamentalmente a mantener incólume el
patrimonio del deudor. A través de ellos el acreedor puede impedir que el patrimonio del
deudor se pauperice o disminuya, ya sea realmente o en apariencia, en su detrimento.
El derecho de retención.
En ciertos casos, la ley confiere al acreedor que detenta un objeto corporal cuya propiedad
pertenece a otra persona la facultad de mantenerse en esa detentación, en tanto su crédito
vinculado a ese mismo objeto no sea satisfecho.
Entonces vemos que la retención representa una garantía excepcional para el acreedor el
cual se asegura de este modo la satisfacción de su crédito, por un medio que tiene una
eficacia muy análoga a la que puede ofrecer la prenda.
Este iusretentionis es conferido ordinariamente para tutelar el crédito por gastos efectuados
en la cosa, por mejoras hechas en ella o por daños producidos por ella a quien debía
restituirla.
Concepto.
“Facultad que corresponde al tenedor de una cosa ajena para mantenerse en la tenencia
hasta el pago de lo que le es debido en razón de la misma”
Naturaleza.
Cuesta distinguir al derecho de retención de entre los derechos reales y los privilegios.

12
El hecho de que el derecho de retención aparezca oponible erga omnes es lo que lo
aproxima a ser considerado como un derecho real, no obstante esta aproximación, ambos
derechos son realmente diferentes.
Los derechos reales son iura in rei(derechos en la cosa).
El derecho de retención no se funda “en una relación directa entre el sujeto y la cosa, sino
en un crédito emergente de los gastos de la cosa”
En cuanto a su fundamento, ambas clases de derechos son diferenciables
En nuestra norma legal la enumeración de los derechos reales debe resultar de un texto
expreso en la ley. Por ello no se puede sostener que el derecho de retención tenga el
carácter de derecho real.
En los privilegios, la preferencia subsiste aunque la cosa se halla convertida en dinero, en el
derecho de retención, la facultad se ejerce sobre el mismo objeto y no cuando la cosa deja
de esta en manos del detentador.
Si la cosa es trasferida por su propietario, el adquiriente carece de derecho de obtener la
entrega en tanto no satisfaga el crédito debido en razón de ella.
Elementos.
Del mismo Código Civil se deduce los elementos que debe reunir la tenencia de una cosa
para la constitución del iusretentionis.
1º) Corpus posesorio por un acreedor: cualquiera que sea la cosa, puede ejercerlo.
2º) Un objeto corporal: puede ser cualquier mueble o inmueble susceptible
3º) Un objeto ajeno: pues no existe derecho de retención cuando la propiedad le pertenece,
a pesar de estar obligado a entregarla.
4º) Un crédito en virtud del cual se detenta un objeto: al cual debe estar vinculado.
En la jurisprudencia nacional, por Acuerdo y Sentencia Nº 36, de fecha 20 de agosto de
1.970, la Corte Suprema de Justicia ha establecido que los extremos a darse para que se
considere constituido el derecho de retención son los siguientes: “la posesión de la cosa por
el detentador; crédito a su favor contra el propietario de aquella, por mejoras efectuadas en
ella. La naturaleza de buena o mala fe en la posesión es irrelevante, salvo el caso de
mejoras suntuarias”.
Efectos.
El detentador esta facultado legalmente a resistir toda acción personal o real encaminada
a que se desprenda del objeto.
Si hubiere sido despojado de ella contra su voluntad sea por el propietario o por un tercero,
está facultado a reclamar la restitución por las acciones concedidas al poseedor
desposeído.13
Cuando la cosa mueble ha pasado a poder de un tercero de buena fe, la restitución no puede
ser reclamada, sino en el caso de haber sido robada o perdida.14
El derecho de retención no impedirá que los otros acreedores embarguen la cosa retenida y
hagan la venta judicial de ella, siempre que el comprador del objeto consigne el precio a las
resultas del juicio.15
Si los bienes embargados o a embargar fueren inmuebles no podrá oponerse la retención a
los terceros que hubiesen adquirido derechos reales sobre ellos inscriptos antes de la
constitución del crédito del oponente. Entre tanto los inmuebles inscriptos después, no
podrá hacer valer la retención si no se anotó preventivamente en el registro
correspondiente, con anterioridad al crédito y su monto efectivo o eventual.
El derecho de retención es indivisible. El pago parcial de la obligación no confiere el
derecho de reclamar la restitución de las cosas retenidas.
Los privilegios no podrán hacerse efectivos sobre las cosas muebles sujetas a retención.
Extinción.
Siguiendo el Art. 1.830º del Código Civil Paraguayo del mismo se colige que, el derecho de
retención se extingue por tres supuestos:
1º) Por la extinción de la obligación que le sirve de sustento.
2º) Por destrucción de la cosa retenida.

13
14
15
3º) Por entrega o abandono voluntario de la cosa a su propietario. En este caso el derecho
de retención no renace, aunque la cosa volviera al detentador por otro título.
La acción oblicua o subrogatoria.
Esta es una de las manifestaciones de la intención del legislador de proteger el crédito a
través de facultades que confiere al acreedor cuando el deudor omite ejercitar derechos y
acciones que le pertenecen.
Estas situaciones pueden darse en diferentes casos, como por ejemplo cuando el deudor
omite interrumpir una prescripción que le perjudicaría, no acepta una herencia que le
beneficiaría u omite reclamar la partición de una herencia que pudiera corresponderle.
En estos casos el acreedor no puede ejercer sus derechos de ejecución porque ellos solo se
ejercen sobre los bienes existentes que halla en el patrimonio del deudor.
Mediar esta situación, la misma ley dota al acreedor de las facultades que le permitirían a
él mismo ejercer las acciones de su deudor.
Concepto.
“Es la facultad reconocida a los acreedores a promover acciones que corresponden a su
deudor, en caso de inejecución de éstos”.
2. 2. Procedencia.
Como en el punto anterior, los requisitos para la procedencia de dicha acción se hallan
insertas en el Art. 446º del Código Civil Paraguayo del cual hacemos mención en la c. p. p.
nº 107.
Si bien, en un principio, los acreedores pueden ejercer todos los derechos y acciones
relacionados con los bienes del deudor, le quedan excluidos los derechos y acciones
siguientes, facultades legisladas en el Código Civil Paraguayo en su Art. 447º:
1º) Las facultades de disposición y administración de los bienes que inviste el deudor.
2º) Las facultades inherentes a la capacidad jurídica y al estado en las relaciones de familia
aunque tuviesen efectos patrimoniales.
3º) Los derechos y bienes inembargables por disposiciones.
Naturaleza.
Los autores no se hallan contestes en este punto, afirman algunos juristas que esta es una
acción ejecutiva, en donde se reclama un crédito cierto, líquido y exigible.
No se acepta esta doctrina por el simple hecho de que la acción no pretende ejecutar, sino
muy por el contrario, impedir la pérdida de un valor.
Otros autores ven en la acción una medida meramente conservatoria. Esta acepción aunque
jurídicamente se acerque más a la realidad, tampoco es exacta, porque en realidad el
acreedor se subroga16 en los derechos de su deudor y persigue realizar un valor que le
pertenece.
Elementos.
Los elementos que deben reunirse para la procedencia de la acción subrogatoria son:
1º) Existencia de un crédito perteneciente al deudor.
2º) Inacción del deudor.
3. La acción revocatoria o pauliana.
La denominada acción revocatoria o fraude pauliano es una de las tres acciones destinadas
a proteger el patrimonio del deudor. Su nombre proviene de aquel pretor llamado Paulo,
quien fue el que lo instituyó en el derecho romano.
Su objeto es impedir que el deudor empobrezca su patrimonio mediante actos fraudulentos
enderezados a burlar a sus acreedores.
Esta acción se da en las situaciones en que el deudor de mala fe, sabiendo que sus
acreedores van a ejecutar sus bienes para hacerse con el cobro de sus créditos, los enajena
para evitar pagarles.
De tal manera transfiere sus bienes y burla a sus acreedores.
Concepto.
Es la acción destinada a dejar sin efecto los actos del deudor otorgados en fraude de sus
acreedores.
Requisitos.
SILVA ALONSO en el referido punto: “Los artículos 311 y 312 C. C. enumeran las
condiciones para el ejercicio de la acción. El primero se refiere a las condiciones de actos a
16
título gratuito. El segundo alude a las necesarias cuando hay de por medio un acto a título
oneroso”.
I. A título gratuito:
1º) Que el acto sea ejecutado por un deudor insolvente o que se halla reducido a la
insolvencia por causa del acto a imputarse.
2º) Que el crédito sea de fecha anterior al acto impugnado.
II. A título oneroso:
1º) La insolvencia del deudor.
2º) Que el crédito sea de fecha anterior al acto.
3º) Que la insolvencia fuera notoria o hubiese motivo fundado para ser conocido por el otro
contratante.
No es necesario que el crédito sea de fecha anterior al acto impugnado, cuando por el acto
se tratase de eludir la responsabilidad derivada de la comisión de un delito penal.
El acto puede ser ejercido a nombre propio, por cualquier acreedor que se viera perjudicado
por los actos del deudor.
Así, si el deudor renunciara a derechos con los que pudo haber mejorado el estado de su
fortuna o impedir la disminución de ella, el acreedor puede obtener la revocación de dicha
renuncia y ejercer los derechos y acciones renunciados.17
También, el acreedor puede accionar por revocación, cuando el deudor constituyere
derechos rea les de garantía sobre sus bienes en perjuicio de sus acreedores.
Efectos.
El adquiriente que deba restituir tiene derecho a reparación por el perjuicio que se le
hubiese ocasionado, si se tratan de actos a título oneroso.
La acción de simulación.
La simulación antes de se un fenómeno jurídico es un hecho de la vida humana. Con
frecuencia y por razones de muy diverso orden se alteran en la vida humana la apariencia
de las cosas.
Por razones de convergencia, de trabajo, de necesidad, incluso de humanidad y de
seguridad, los hombres se ven llevados a alterar la apariencia de las cosas.
Concepto de la figura.
El Código Civil Paraguayo expresa que la simulación tiene lugar cuando se encubre el
carácter jurídico de un acto bajo la apariencia de otro o cuando el acto encierra cláusulas
que no son sinceras o fecha que no son verdaderas o cuando por el se constituyen o
transmiten derechos a personas interpuestas que no son aquellas para quienes en realidad se
constituyen o transmiten.
Clases de simulación.
La simulación puede presentarse en dos formas: la absoluta y la relativa.
Absoluta: cuando el acto celebrado nada tiene de real hay en el una absoluta ficción.
Ejemplo: una persona transfiere un bien inmueble en dominio a través de una escritura
pública y al mismo tiempo en un documento separado manifiesta que no existe la
transferencia y que el inmueble le sigue perteneciendo en propiedad.
Relativa:cuando bajo el acto aparente existe otro que es real cuyo verdadero carácter
aparece disfrazado por aquel.
Ejemplo: El caso de las donaciones que asumen al forma de venta. Aquí hay dos tipos de
actos jurídicos:
El acto aparente u ostensible que es aquel que las partes simularon otorgar.
El real o verdadero que permanece en reserva, y el que las partes verdaderamente han
querido cumplir.
Lícita: cuando a nadie perjudica y persigue un fin lícito.
Ejemplo: un hombre con el fin de proteger a sus futuros herederos de malos
administradores, los transfiere simuladamente a un amigo o pariente, por el cargo de que
este los restituya a sus herederos cuando estuviesen en condiciones de administrarlos.
Ilícita: cuando se otorga en perjuicio de terceros o con un fin ilícito.
Ejemplo: del primer caso sería cuando se realizara para burlar a sus acreedores
aparentando una insolvencia que no existe en realidad. Y tendría un fin ilícito cuando se

17
otorgan actos cuyos importes no fueren los reales y se pretendiera de esta manera burlar los
derechos del fisco.
Prueba de la simulación.
Entre partes: El contradocumento.
El contradocumento: es el documento donde se establece cual es el negocio en realidad.
Su finalidad es ser mantenido en secreto por las partes.
Por terceros.
Los terceros perjudicados por el acto pueden justificar la simulación por todos los medios
de prueba a su alcance.
La acción que sea promovida por el tercero debe dirigirse conjuntamente contra las partes
del acto simulado.
Efectos de la declaración de simulación.
La declaración de simulación conlleva la nulidad, haya sido alegada por las partes o por
terceros.
El adquiriente de los bienes, está obligado a restituir los mismos que aparentemente habían
salido del patrimonio del vendedor con todos sus frutos o productos.
En cuanto a los autores de la enajenación simulada en perjuicio de terceros, deben
responder solidariamente de los daños y perjuicios que le ocasionen, ya que está en
presencia de un delito civil.
Prescriptibilidad de la acción.
En la doctrina este punto es cuestión de controversia. El maestro paraguayo DE GÁSPERI,
en nuestro país al igual que otros grandes juristas de la talla de FERRARA, PLANIOL y
RIPERT, sostienen la imprescriptibilidad18 de la acción.
En la Argentina dentro del Código de Vélez, participaba de la misma opinión antes
expuesta.
Con respecto al mismo debemos fijarnos en lo dispuesto por nuestra norma civil en su Art.
658º. Correspondiente al tema que nos acomete, el Profesor PANGRAZIO comenta: “Los
actos nulos son contrarios al orden público y a las buenas costumbres.” En el referido
artículo se colige que no prescriben, entre otras acciones, la acción de impugnación de actos
nulos.
BOLILLA 11
POR EL VÍNCULO.
Obligaciones “civiles” y “naturales o imperfectas”.
Concepto.
Las obligaciones civiles“son aquellas que dan derecho a exigir su cumplimiento o que
subsidiariamente concede derecho al resarcimiento económico”. Por su origen este tipo de
obligaciones provendrán del contrato o de la ley. Ejemplo: Obligaciones entre comprador y
vendedor (contrato-ley), entre padres e hijos (ley).
En tanto las obligaciones naturales o imperfectas “son aquellas fundadas en la equidad y en
el derecho natural, no confieren acción para exigir su cumplimiento, pero que cumplidas
por el deudor, autorizan a retener lo que se ha dado por razón de ellas”.
Las obligaciones imperfectas en nuestro Código Civil.
El Art. 1.820º19 consigna los casos de obligaciones naturales en dos apartados. Así, dispone
que no habrá de proceder la repetición de lo pagado espontáneamente cuando:
1º) Se cumplen los deberes morales o sociales:
Si alguna persona voluntariamente decide ejecutar un deber cuyo cumplimiento no puede
ser exigido la líele presta la eficacia jurídica a esa ejecución. En consecuencia, cumplido el
deber no cabe la repetición de lo pagado.
La ley reconoce una excepción para el supuesto de las personas dotadas de incapacidad en
cuyo caso sí procedería la repetición de lo pagado
2º) Las prestaciones tengan una finalidad contraria a la ley o a las buenas costumbres:
Se entiende perfectamente el hecho de que aquí no procede la repetición de lo pagado, pues
la ley no puede amparar actos que se hallen en controversia a lo que ella disponen que sean
contrarios a la norma moral.

18
19
El efecto fundamental de las obligaciones naturales es que su cumplimiento no puede ser
reclamado, pero que una vez cumplidas no pueden repetirse lo pagado en su virtud.
Las obligaciones son de naturaleza ética-jurídicas (mixta).
Éticas: En el sentido que suponen una obligación moral o de conciencia y una ejecución
libre, es decir, no coercible.
Jurídicas: En cuanto producen efectos en el mundo del derecho, de los cuales el principal
es la irrespetabilidad del pago cumplido.
La obligación natural no es una obligación civil desprovista de acción, sino una figura
autónoma del derecho de las obligaciones, con caracteres propios.
Obligaciones principales y accesorias.
Se dice que la obligación es principal“cuando posee una existencia por completo
independiente” y es accesoria“cuando su existencia se halla subordinada por razones
económicas o prácticas a la principal”.
El nexo jurídico que une a ambas obligaciones entre sí puede brotar de dos fuentes
diferentes, la convención y la ley.
En relación a ellas la doctrina admite la posibilidad de dos formas de accesoriedad: una
voluntaria y otra legal.
En virtud del principio de accesoriedad se dice que “la suerte jurídica de la obligación
accesoria esta subordinada a la suerte del principal, y este vínculo de dependencia hace que
extinguida la obligación principal, quede extinguida la accesoria, pero que, en cambio la
extinción de la obligación accesorial no lleve aparejada la de la obligación principal”.
Régimen Jurídico en el Código Civil.
Históricamente, la distinción entre obligaciones principales y obligaciones accesorias se
remonta a la doctrina francesa, adquiriendo amplitud con los primeros comentarios al
Código de Napoleón, por parte de THOULLIER y ZACHARIE.
El “Esboço” de FREITAS lo contempla en tres -3- artículos que sirvieron de inspiración al
Código de Dalmacio Vélez Sarsfield.
Nuestro Código Civil, al igual que el Proyecto Argentino de reforma de 1.936 y otras tantas
legislaciones modernas no adopta de modo explícito esta clasificación.
BOLILLA 12
POR LOS SUJETOS
POR LOS SUJETOS.
Sujeto múltiple. Disyunción o conjunción de los sujetos.
Generalmente la calidad de sujeto activo y sujeto pasivo de una deuda o crédito
corresponden a una sola persona de ordinario, el titular del crédito (acreedor) es una sola
persona y lo mismo acontece con el obligado (deudor).
Tengamos presente que, no siempre es así. A veces una obligación puede asignarse a varias
personas simultáneamente. Así, en una misma relación pueden haber uno o varios sujetos
activos y uno o varios sujetos pasivos, por lo que se habla en tal caso de la existencia de
pluralidad de sujetos o de obligaciones de sujetos múltiples o complejos.
Las obligaciones de sujetos múltiples“son aquellas que corresponden a varios acreedores y
se hallan a cargo de varios deudores, con respecto a una sola prestación debida y en razón
de una causa única”.
Obligaciones disyuntas. Concepto. Aplicación.
Concepto.
“La pluralidad es disjunta cuando los acreedores o deudores lo son excluyente o
alternativamente, de manera que la obligación de uno descarta la del otro”.
Ejemplo: En un depósito bancario formulado a la orden recíproca de los depositantes, el
banco tiene la obligación de abonar a cualquiera de los depositantes los depósitos.
Aplicación.
No esta legislada en el Código Civil estas obligaciones, a ellas se aplican las disposiciones
que regulan las obligaciones solidarias, pues en estas el deudor se libera pagando a
cualquiera de los acreedores, y por su parte el acreedor tiene derecho a reclamar de
cualquier deudor la totalidad de la deuda.
Obligaciones conjuntas: Mancomunación simple y mancomunación solidarias.
“Hay pluralidad conjunta cuando los acreedores y deudores lo son simultáneamente y todos
tienen su parte en el crédito o la deuda”.
En teoría es posible agrupar las obligaciones conjuntas en cuatro categorías:
1º) Obligaciones de objeto: aquí se cuenta la caracterización de las prestaciones según ella
permita o no su fraccionamiento.
Divisibles.
Indivisibles.
2º) Obligaciones:
Simplemente mancomunadas.
Solidarias.
Las obligaciones conjuntas pueden ser simplemente mancomunadas o solidarias, según que
la prestación debida este o no fraccionada. En las primeras, se produce un fraccionamiento
del crédito o la deuda entre acreedores o deudores. En las segundas por el contrario no se
fracciona la prestación debida.
Obligaciones simplemente mancomunadas: Concepto.
“La obligación simplemente mancomunadas es aquella donde se produce un
fraccionamiento del crédito o la deuda entre acreedores y deudores”.
Mancomunadas divisibles.
Concepto.
En la práctica las obligaciones simplemente mancomunadas y las divisibles, no tienen
diferencia de régimen por lo que se dice de una vale para decirlo de las otras.20
Efectos.
Cada uno de los acreedores sólo puede exigir de cada uno de los deudores la parte que le
corresponde en la obligación.21
Exigibilidad.
Cada uno de los acreedores solo puede exigir de cada uno de los deudores la parte que le
corresponde en la obligación.
Pago.
Cada uno de los deudores está obligado al pago de su parte en la deuda. Si uno de ellos
hubiera pagado a uno de los acreedores más de lo que le correspondía, tiene derecho a
repetir lo pagado de más. Así el deudor que hubiera pagado a uno solo de los deudores toda
la deuda no queda liberado por ello de pagar su parte en la deuda a cada uno de los
acreedores, los cuales tienen acción contra el para reclamar lo que es debido.
Insolvencia.
Aquí uno se pregunta, ¿quién soporta la insolvencia de alguno de los codeudores en una
obligación simplemente mancomunada?. La respuesta surge del principio de división de las
deudas y créditos.
En caso de insolvencia de un deudor los acreedores habrán de soportar esa situación en
proporción a sus respectivos créditos.
Prescripción.
La prescripción corre separadamente para cada uno de los deudores, así como también la
interrupción o suspensión de ella no tiene efecto respecto de las demás.
Mora.
La mora o el incumplimiento de cada uno de los codeudores carece de influencia sobre los
demás. Siempre el principio de la independencia de los créditos juega en el
desenvolvimiento de la vida de la obligación, haciendo que cada crédito marche
separadamente de los demás.
Culpa.
Lo dicho en el punto anterior (mora) es también aplicable a la culpa.
BOLILLA 13
POR LOS SUJETOS
Mancomunación solidaria.
Obligaciones solidarias. Concepto.
“La solidaridad es un modo de ser de las obligaciones de sujeto múltiple que se opone a la
división, ora del crédito, ora de la deuda.”
Naturaleza.

20
21
La solidaridad y las obligaciones indivisibles constituyen una excepción a la regla común
de la divisibilidad de las deudas o créditos. Si bien ambas figuras se asemejan en el sentido
de que la prestación no se fracciona se dan entre ellas diferencias sensibles.
En efecto, la solidaridad es arbitraria, en el sentido que persigue un propósito que proviene
de la voluntad de las partes o de la ley y constituye una garantía para el acreedor. Por el
contrario, la indivisibilidad surge de la naturaleza del objeto que se opone a la división de la
deuda, pero que aparece de hecho y no persigue ningún propósito.

Unidad de vínculo y pluralidad de relaciones subjetivas.


La unidad del objeto de la prestación en las obligaciones solidarias supone unidad de
vínculo. Pero esta unidad no basta a que existan un multiplicidad de relaciones subjetivas o
independencia relativa de las obligaciones.
Así, tenemos que la incapacidad del deudor que se obligó con otros que son capaces, o la
del acreedor que estipuló con otros que son capaces, no excluirá la solidaridad de la
obligación, pues la incapacidad solo puede ser opuesto por el deudor o por el acreedor
incapaz.
La solidaridad tampoco quedará excluida por el hecho de que los deudores singulares estén
cada uno obligado con modalidades diversas o que el deudor común este obligado con
modalidades distintas frente a los acreedores singulares.
Fuentes de la solidaridad: Clasificación.
La solidaridad no se presume. Ella debe surgir de la ley, de modo expreso e inequívocos.
La solidaridad según se de entre pluralidad de acreedores o deudores puede ser: activa o
pasiva.
Solidaridad activa.
Concepto.
Se habla de solidaridad activa cuando varios acreedores conjunta o separadamente están
facultados a reclamar de un deudor la totalidad de la prestación.
Esta especie de solidaridad se caracteriza por que solo puede derivar de la voluntad, sea que
esta se exprese a través de un contrato o testamento. En ningún caso emana de la ley, de
pleno derecho.
En algunos casos, la sentencia puede ser fuente de la solidaridad activa, cuando traduce la
voluntad que se ha buscado en un acto jurídico.
Finalidad.
La solidaridad activa persigue el propósito de conferir a cada uno de los acreedores la
facultad de exigir el total de la prestación al deudor. Cumplida esta el deudor se libera con
respecto a todos.
Cumplimiento.
En la vida práctica esta forma de solidaridad se manifiesta raramente porque el resultado
buscado pude ser obtenido igualmente a través de un simple mandato, e incluso con
ventajas ya que se obvia el inconveniente que podría plantearse, con la insolvencia
sobreviniente del acreedor que recibió el pago.
Efectos.
Los efectos de la solidaridad activa pueden ser estudiados en dos supuestos: principal y
secundario.
1º) El efecto principal está en la facultad conferida a los acreedores de exigir conjunta o
separadamente el cumplimiento de la prestación entera del deudor
2º) El pago hecho por el deudor a uno, extingue la obligación respecto a todos los
acreedores, sin necesidad de su citación o comparecencia.
3º) No habiendo mediado prevención, el deudor es libre de pagar a cualquiera de los
acreedores, pero una vez promovida la acción judicial, el deudor está obligado a pagar al
acreedor que lo ha demandado. A partir de ella no hay en la relación obligatoria sino un
solo acreedor y un solo deudor.
4º) La sentencia dictada en el juicio que siguió el acreedor contra uno de los deudores
solidarios o contra el único deudor, no producirá efectos en cuanto a los demás, pero estos
podrán invocarlo a menos que se fundare en una causa personal para el deudor litigante.
5º) Si ocurriese el fallecimiento de uno de los acreedores sus herederos carecerían de la
facultad de reclamar el total de la prestación y no podrán demandar sino por parte que le
corresponde en el crédito, según su haber hereditario.
6º) Cualquier acto que interrumpa la prescripción a favor de uno de los acreedores o en
contra de uno de los deudores aprovechará o perjudicará a los demás.
7º) El acreedor que hubiese cobrado todo o parte de la deuda, hecho remisión o novación o
aceptado la delegación por otro deudor o algunos de los solidarios, con liberación de los
demás o la hubiese extinguido por compensación, queda obligado a entregar a cada uno la
parte que en el crédito le correspondía, según el título constitutivo. En caso de dudas las
partes se entienden por iguales. De igual modo se procederá en caso de confusión.
8º) La solidaridad activa puede ser renunciada por el acreedor y esto torna al deudor
solidario, en simple mancomunado.
Solidaridad pasiva.
Concepto.
“Existe solidaridad pasiva, cuando cualquiera de los acreedores puede reclamar de
cualquiera de los deudores el total de la obligación.”
Este tipo de solidaridad que permite al acreedor dirigirse contra cualquiera de los deudores
es el más frecuente en la vida cotidiana.
Fuentes.
A diferencia de lo que ocurre en la solidaridad activa, la solidaridad pasiva reconoce dos
fuentes, la voluntad y la ley.
También la sentencia puede ser considerada como fuente inmediata de la solidaridad
pasiva, pues ella no genera la obligación solidaria, sino que reconoce su existencia.
Caracteres.
1º) Todos los deudores se obligan a una misma prestación, lo que lleva a decir, que en la
obligación hay unidad de vínculo.
2º) Esta unidad no impide la existencia de multiplicidad de relaciones subjetivas o
independencia relativa entre las obligaciones y los codeudores, sin que los demás lo sean.
Esto puede ocurrir en la confusión, en la remisión personal de la deuda y en la
compensación.
3º) La obligación solidaria se fracciona en caso de transmisión por causa de muerte, ya que
la solidaridad no hace indivisible la obligación.
Efectos de la solidaridad en las relaciones entre acreedor y deudores.
Los efectos de la solidaridad pasiva pueden agruparse en dos categorías: efectos principales
y efectos secundarios.
A. Efectos Principales: radica en la imposibilidad jurídica de la división del crédito o de la
deuda y que constriñe a cada deudor al cumplimiento total como si el fuese el único deudor.
B. Efectos Secundarios: son los que derivan del hecho de que la solidaridad establezca
entre el acreedor y el deudor una unidad de vínculo sin perjuicio de una pluralidad de
relaciones subjetivas.
Efecto principal.
El efecto principal de la solidaridad pasiva es el de “conferir al acreedor el poder de exigir
el pago de la deuda por entero a todos los deudores solidarios, conjunta o cualquiera de
ellos a su elección”.
El poder del acreedor no se limita a la elección del deudor contra el que va a dirigir la
acción, sino que puede ir incluso sucesivamente contra cada uno de los demás, si el primero
se hallara imposibilitado de cumplir, por que los demás deudores deben soportar la
insolvencia del deudor requerido.
Los deudores no pueden oponer ante el acreedor accionante, el beneficio de división como
consecuencia de la facultad conferida al acreedor de poder exigir el total de la deuda y el
deber de cada deudor de cumplir con la prestación total.
No obstante la facultad conferida al acreedor de reclamar el total de la prestación, este
puede reclamar al deudor a cada uno de ellos exclusivamente su parte. Este hecho de haber
admitido el pago parcial a algún acreedor no significa la renuncia de la solidaridad respecto
de los otros.
Al contrario de lo que antecede con otros ordenamientos jurídicos aquí el deudor
demandado al pago no puede oponer la excepción dilatoria de la citación en garantía de sus
codeudores.
Así mismo en nuestro derecho el deudor solidario carece del beneficio de excusión, que
permite al deudor reclamar que el acreedor dirija previamente su acción contra un deudor
que sería principal. Ejemplo: el fiador puede pedir que el acreedor vaya primero contra el
deudor.
Efectos Secundarios.
Ellos tienen relación con el carácter de unidad del vínculo y al propio tiempo con la
pluralidad de relaciones subjetivas.
1º) La demanda de intereses entablada contra uno de los codeudores solidarios hace correr
el curso de los intereses contra todos lo demás.
2º) El incumplimiento provisorio o mora de alguno de los deudores, así como el perjuicio
de que ella puede surgirse perjudica a todos los demás.
3º) Si la prestación se hiciere imposible por culpa o durante la mora de alguno de los
codeudores solidarios, todos deberán pagar su valor. En cambio, los daños e intereses solo
serán debidos por aquel deudor culpable o el moroso.
Excepciones oponibles al acreedor.
El deudor puede oponer a la acción del acreedor dos tipos de excepciones, las comunes y
las personales.
1º) Las comunes: Estas benefician a todos los deudores. Así la nulidad de la obligación por
el hecho de ser ilícito el objeto de la prestación o las causa que hacen a la extinción de la
obligación o la falta de cumplimiento de una condición o de un plazo, alcanza a todos los
deudores.
2º) Las personales: son aquellas que afectan a alguno de los deudores en particular y solo
pueden ser opuestos por él. Ejemplo: Una obligación en que alguno de los co-obligados
hubiese realizado el acto afectado de un vicio como el error, el dolo o la violencia.
Sin embargo hay excepciones que aunque estrictamente personales, benefician a los demás.
Aquí pueden citarse la remisión de la deuda hecha a favor de alguno de ellos o la confusión
que afecta a algún deudor. En estos casos, los demás solo pueden ser demandados por el
saldo.
Relaciones entre los codeudores entre si.
Si bien cada deudor se halla obligado por el total de la deuda ello no obsta a que la misma
una vez cumplida, se distribuya entre todos en proporción a sus respectivas porciones.
Así, el deudor que ha pagado tiene la facultad de reclamar a los demás codeudores sus
partes correspondientes mediante la acción de regreso.
Cesación de la solidaridad.
La solidaridad puede extinguirse en el caso de que el acreedor consintiera que ella se
fraccionara. Así mismo la extinción de la obligación por el pago o por algún otro modo que
afecte el vínculo trae aparejada la cesación de solidaridad.
Solidaridad imperfecta.
La solidaridad imperfecta sería aquella que “carece de alguno de los efectos comunes
reconocidos a la solidaridad”, como el de la acción de regreso conferida al deudor que ha
pagado por los otros, y que falta en la obligaciones de indemnizar como aquellas que
provienen de hechos delictuosos.
La solidaridad emergente a los delitos niega la acción recursoria a quien abonó la
obligación.

BOLILLA 14
POR EL OBJETO
De hacer. De no hacer.
Sentido de esta clasificación. Distinción entre el dar y el hacer.
Desde el punto de vista del objeto, las obligaciones se clasifican en primer lugar en
obligaciones de dar, hacer y no hacer, según cual sea la prestación prometida.
Así en las obligaciones de dar existe el deber de entregar un objeto, en las de hacer el deber
de prestar un servicio y en las de no hacer un deber de abstención.
Siguiendo a SILVA ALONSO podemos afirmar que: “toda prestación debida en virtud de
una obligación supone una actividad humana, un acto o una serie de actos del ser humano,
sea que la prestación consista en dar, en un hacer o en un no hacer”.
No obstante, esta distinción entre uno y otro grupo existe y ella es fundamental por los
efectos que conlleva en las obligaciones de dar el énfasis descansa en el objeto a entregarse,
siendo la actividad humana solo un medio de alcanzarla.
Por el contrario, en las obligaciones de hacer, la ponderación está en la actividad del ser
humano. De ahí que en el supuesto anterior pueda hablarse de entrega de bienes en este
prestación de servicios.
El interés de esta distinción se da en una doble circunstancia:
1º) En las obligaciones de dar es posible compelir el cumplimiento en especie por la fuerza,
si fuere necesario.
En las de hacer por el contrario no es posible ejercer violencia sobre la persona del deudor,
de modo que si éste se negare a ejecutar el cumplimiento, debería hacerse por un tercero y a
su costa, y si la obligación fuese intuitupersonae solo cabría la indemnización.
2º) En las obligaciones de dar, resulta usualmente indiferente la persona del deudor, no
hacía en las de hacer.
Desde aquí se deduce que en las obligaciones de hacer el límite de exigibilidad o
posibilidad está determinada por la capacidad física y mental del deudor, en tanto que en las
obligaciones de dar la imposibilidad es independiente a la aptitud del obligado para cumplir
la prestación.
Las obligaciones de dar. Generalidades.
Nuestro Código Civil admite tres clasificaciones de la obligación de dar:
1º) Cosas ciertas;
2º) Cosas inciertas, no fungibles o de género;
3º) Sumas de dinero. La principal diferencia que existe entre las mencionadas
obligaciones se da en que en las obligaciones de dar cosas ciertas, el objeto debe estar
determinado individualmente, en cambio en las otras, el objeto está determinado
genéricamente.
Dar cosas ciertas. Concepto de esta especie.
Las obligaciones de dar cosas ciertas son aquellas que tienen por objeto una o varias cosas
individualmente determinadas, ya sea que ellas deban darse en conjunto o
alternativamente.”22
Efectos.
La obligación de dar cosas ciertas impone al deudor dos deberes fundamentales:
1º) La conservación de la cosa prometida, hasta el momento de su entrega;
2º) Su entrega en el tiempo y lugar determinado.
Responsabilidad del deudor.
La responsabilidad que el deudor tiene es idéntica al efecto que se produciría al dar una
cosa cierta, o sea:
1º) La conservación de la cosa prometida, hasta el momento de su entrega;
2º) Su entrega en el tiempo y lugar determinado.
Principio.
En cuanto al deber del deudor de conservar la cosa rige el principio de que el “debe poner
en ella los cuidados que un buen padre de familia tendría en ellas”
Riesgo.
Los riesgos que podría acarrear el uso o la tenencia de la cosa son los siguientes:
Pérdida de la cosa;
Deterioro de la cosa.
Deber de conservación. Pérdida o deterioro de la cosa.
Como en puntos anteriores debemos recalcar que la responsabilidad que carga el obligado
en las relaciones obligatorias de dar cosas ciertas son la conservación de la cosa y su
posterior entrega según los cánones prometidos .
Ahora, si ese deber de conservación fuese violado, ora por dolo ora por culpa del deudor,
corresponde preguntarnos ¿a quien perjudica el mismo?. Al... ¿deudor? o... ¿al acreedor?.

22
Digamos desde ya que el principio general es que las cosas pertenecen y aumentan o
acrecen para su dueño.23
Pero más claros aun, esta regla general no es estricta, debiendo de ajustarse a las diversas
situaciones que pueden presentarse en materia de obligaciones de dar cosas ciertas.
Pérdida de la cosa:
Pérdida de la cosa es la “destrucción total de la misma”, pudiendo producirse:
1º) destrucción material de la cosa,
2º) desaparición de ella del patrimonio del deudor por un hecho que no le es imputable, tal
como la expropiación,
3º) el hecho de que haya sido puesta fuera del comercio,
4º) La desaparición de un modo que no se sepa de su existencia (extravío/robo)
*Deterioro de la cosa:
El deterioro de la cosa es “un daño parcial de la misma, pero pudiendo el mismo
subsanarse”.
Casos de culpa del deudor. Ausencia de culpa.
Como se dijo anteriormente la pérdida puede darse:
Ausencia de culpa: extingue la obligación.
Con culpa: el propietario está facultado a reclamar el equivalente, más los daños y
perjuicios.
Mientras que el deterioro se puede también generar:
Ausencia de culpa: el propietario debe recibir la cosa en el estado en que se hallare.
Con culpa:el propietario está facultado a reclamar el equivalente más los daños y perjuicios.
Mejoras. Frutos.
Mejoras.
Si después de constituida la obligación, la cosa que deba ser transferida a título oneroso,
para constituir dominio, usufructo, uso o habitación, mejorase o aumentase por hecho ajeno
al deudor y aunque fuere sin desembolso alguno, podrá éste exigir un suplemento
proporcional de la contraprestación.
En caso de disconformidad del acreedor la obligación quedará disuelta.
Frutos.
Los frutos percibidos antes de la entrega pertenecen al deudor y los pendientes al acreedor.
Deber de constituir derechos reales. Muebles. Inmuebles. De transferir el uso o la
posesión. De restituir cosas a sus propietarios.
Deber de constituir derechos reales. Cosas muebles e inmuebles.
A) Cosas muebles.
Art. 467º C.C.P.- “Entre varios acreedores con derecho a una misma cosa mueble será
preferido, si no se hubiere hecho la tradición, aquel a quien debía ser restituida, si de ella
tenía título que acredite su dominio. En su defecto, será preferido el acreedor de título más
antiguo”.
Cosas inmuebles.
Art. 464º C.C.P.- “Si la prestación consiste en la entrega de un inmueble, la obligación será
válida solo cuando el inmueble fuere individualmente determinado o determinable”.
Art. 466º C.C.P.- “Cuando varios acreedores tuvieren derecho a la entrega de un mismo
inmueble, será preferido aquel que primero inscribió su título en el registro. En ningún caso
puede invocarse el conocimiento del acreedor sobre la existencia de otros créditos, aunque
sea de fecha anterior. A falta de inscripción, la preferencia corresponde al acreedor de título
más antiguo”.
De transferir el uso o la posesión.
Art. 468º C.C.P.- “Si la obligación fuere de dar cosas ciertas para transferir solamente el uso
de ellas, los derechos se reglaran por las normas relativas a la locación de cosas. Si la
obligación fuere para transferir solamente la tenencia, los derechos se regirán por las
disposiciones referentes al depósito”.
Aquí el deudor está obligado a entregar la cosa en buen estado. Si durante el cumplimiento
la cosa se destruye o deteriora el contrato quedará resuelto y lo mismo ocurriría si el
locatario se viera impedido por caso fortuito de usar o gozar de la cosa.
En el caso de la tenencia rigen las disposiciones referentes al depósito.
23
De restituir cosas a su propietario.
En el caso de entregar una cosa a otra persona para que la use, esta tiene la obligación de
restituir la cosa una vez terminada la locación.
Siendo por el contrario transferida la tenencia de la cosa esta deberá ser entregada a su
propietario con todos sus frutos y productos, cuando le fuera pedida. La entrega se hará en
el lugar en que se hizo el depósito o en donde lo designe el contrato.

BOLILLA15
POR EL OBJETO CONTINUACIÓN
POR EL OBJETO (Cont.)
Dar cosas de Género.
En detrimento de lo que hemos estudiado sobre las obligaciones de dar cosas ciertas, ahora
veremos esta parte donde la determinación se da por la misma especie, recordemos siempre
que el género nunca perece.
Concepto.
Se entiende género “el conjunto de individuos que tienen caracteres comunes”.
Esta expresión puede ser tomada en un sentido más amplio o más restringido, según que
ellas puedan ser sustituidas por otras de igual calidad, dentro de un grupo mayor o menor.
Principio.
Lo característico dentro de las obligaciones de genero es la posibilidad de la sustitución de
un individuo de la especie prometida, por otro de la misma especie o calidad. Una vez que
el objeto a entregarse ha sido elegido la prestación indeterminada se transforma en
obligación de prestación cierta. Recordemos que elgénero nunca perece.
Efectos:
Antes de la elección de la cosa.
En tanto la individualización o elección de la cosa no ha tenido lugar el deudor no se exime
de la obligación de cumplimiento por razón alguna.
Esta disposición se funda en la idea que nos viene ya del derecho romano
“genusnunquantperit” (el género nunca perece).
El deudor al incurrir en mora, queda a merced de la facultad que tiene su acreedor de exigir
el cumplimiento de la obligación con los daños provocados por aquella o disolver la
obligación con la indemnización de daños.
Después de la elección de la cosa.
Efectuada la elección deja de ser de género y le serán aplicables las reglas sobre
obligaciones de dar cosas ciertas.
Facultad de elección. Regla de elección. Doctrinas sobre la elección.
Facultad de elección.
Nuestro Código Civil no indica que la facultad de elección corresponde al deudor.
Regla de la elección.
Naturalmente, ella supone que las partes nada han convenido, pues de existir acuerdo de
voluntades, la elección incumbe a aquel a quien se atribuye la facultad, incluso a un tercero.
El Código Civil limita la facultad de elección, estableciendo que el deudor no podrá
escoger cosa de la peor calidad de las especies, cuando invistiera la facultad de elección, ni
el acreedor la de mejor calidad, cuando se hubiese convenido dejar en sus manos el derecho
de elección.
Doctrinas sobre la elección.
En cuanto al momento en que se produce la determinación del objeto, la doctrina discute
tres aspectos:
La declaración;
La separación; y,
La entrega.
Lo más propio sería concluir que la elección se tiene por hecha cuando exista al respecto
una declaración de voluntad, pues la ley no exige expresamente la entrega de la cosa para
su individualización y la separación no importa necesariamente su individualización.
Obligaciones de género limitado.
Cuando se trata de obligaciones de entregar una cosa no individualizada dentro del grupo
limitado, la obligación se extingue, si se pierden los objetos del grupo.

BOLILLA 16
DE DAR SUMAS DE DINERO
Dar sumas de dinero.
Concepto de obligación dineraria.
“Las obligaciones de dar sumas de dinero, son aquellas que connotan el deber del deudor de
efectuar entrega de determinada cantidad de moneda”.

Objeto y naturaleza de las obligaciones dinerarias. Importancia.


Las deudas puras de dinero deben ser distinguidas de otras obligaciones que también
suponen entrega de dinero pero que no son deudas pecuniarias puras sino deudas de valor.
En las primeras, el objeto es la moneda misma, en las de valor, el acreedor está facultado a
exigir una prestación equivalente que se medirá en moneda, pero que no tiene valor.
La obligación dineraria es de una naturaleza o especie particular de las obligaciones,
teniendo en cuenta que la prestación a que se obliga el deudor, el dinero, no es propiamente
una cosa sino por su carácter representativo.
Estas obligaciones tienen en la vida del comercio jurídico una importancia fundamental,
puesto que el dinero el denominador común de todas las prestaciones. Así vemos que la
contratación de bienes y servicios de toda índole se efectúa por medio del dinero, incluso el
cumplimiento indirecto o por indemnización se efectúa mediante él. De ahí radica su
importancia y el hecho de que sea la más corriente de las especies de las obligaciones.
La moneda. Especies. El principio nominalista.
“La moneda es el instrumento legal de pagos, que tiene una base metálica resultante de la
adopción de uno o varios materiales preciosos como común medida de valor, o una base
fiduciaria resultante de la atribución de determinado valor a billetes de curso legal, emitidos
por el Estado o n banco autorizado por él.”
Las deudas de dinero hacen referencia normalmente a la moneda, en la que se debe la
obligación. así cabe distinguir entonces los diferentes tipos de monedas:
1º) La metálica: es la elaborada con metales generalmente nobles como: el oro, la plata y el
níquel, cuyo valor intrínseco puede corresponder al valor representativo.
2º) La moneda papel: consiste en un valor emitido por el Estado con respaldo de oro y que
él se obliga a canjear por su equivalente en ese metal a su presentación ante el Banco
Oficial.
3º) El papel moneda: es aquel que se emite sin respaldo metálico y tiene curso forzoso. Su
firmeza depende de otros factores de carácter económico, social e incluso políticos.
Este es el sistema universalmente aceptado en nuestros días.
El principio nominalista.
Los economistas no están de acuerdo en el valor de los signos monetarios. Los partidarios
del valor intrínseco de la moneda sostienen que lo que le confiere poder es su valor en si.
En cambio, para la doctrina nominalista o estatal, el exclusivo fundamento del valor de la
moneda descansa en la ley.
En nuestros días el nominalismo es la tendencia predominante universalmente según ella,
existiendo una deuda en dinero ha de pagarse siempre la cantidad o suma que aparece
debiéndose, al margen de cualquier fluctuación que haya padecido su valor.
Si bien este sistema impone con frecuencia a alguno de los contratantes graves penurias,
sobre todo en épocas de fluctuaciones del valor de los signos monetarios, tiene la ventaja de
dar seguridad a las transacciones y al comercio jurídico.
Sistema monetario paraguayo. Ley de guaraní.
Sistema monetario paraguayo.
Nuestro Código en el Art. 474 consagra el sistema nominalista.
Según él, las deudas pecuniarias se extinguen por el pago hecho con el signo monetario que
tenga curso legal y fuerza cancelatoria a la fecha de su vencimiento y por su valor nominal.
Las obligaciones y el pago en monedas distintas se regirán por leyes especiales.
Esto es debido a que las obligaciones pecuniarias se hallan gobernadas no solo por normas
del Derecho Civil, sino también por reglas del Derecho Administrativo.
Ley de guaraní.
El Decreto Ley Nº 655 de 1.943 establece el régimen monetario de la República. Crea el
Guaraní y elimina totalmente en las transacciones las monedas extranjeras, sea que
imponga pagos en plata, oro metálico o sellado. Dispone además que las monedas o divisas
extranjeras o cualquier otra unidad monetaria que no sea el guaraní serán nulas y no tendrán
efecto jurídico.
Este decreto convierte así al Guaraní en la única moneda de curso legal en la República.
Este instrumento jurídico fue complementado con el Decreto-Ley Nº 18 de 1.952 que crea
el Banco Central del Paraguay.
En su Art. 63º del mismo, modificado por la Ley Nº 76/90 y la Ley Nº 776/93, expresa lo
siguiente: “Todos los precios, impuestos, tasas, contribuciones, honorarios, sueldos, salarios
de cualquier naturaleza, que deban ser pagados, cobrados o exigidos judicialmente en la
República se expresarán y liquidarán exclusivamente en guaraníes”.
Toda cláusula calificativa o restrictiva que imponga pagos, en plata y oro metálico,
monedas o divisas extranjeras o en cualquier otra unidad monetaria que no sea el Guaraní,
será nula y no tendrá ningún efecto jurídico.
Modo de cumplimiento. Principio general. Moneda de curso legal en la República.
Debiéndose determinada suma de moneda corriente nacional (el supuestos más común), se
cumple entregando el signo monetario con curso legal y fuerza cancelatoria.
Obligaciones en moneda sin curso legal. Eficacia.
Art. 1º.- “Los actos jurídicos, las obligaciones y los contratos realizados en monedas
extranjeras son válidos y serán exigibles en la moneda pactada.”
Art. 2º.- “Las obligaciones efectuadas en moneda extranjera podrán garantizarse con
prendas con registros, hipotecas, warrants u otras formas de garantías, por el monto
expresado en la moneda de la obligación y deberán inscribirse en el registro público
respectivo, expresándose el importe de la obligación y de la garantía.”
Art. 3º -3º párrafo- “...Las obligaciones de dar sumas de dinero en moneda extranjera que se
instrumenten en títulos de crédito, incluyendo los certificados de saldos definitivos de
cuentas corrientes bancarias en moneda extranjera que tengan fuerza ejecutiva, podrán
reclamarse judicialmente por el procedimiento del juicio ejecutivo”24
Esta ley deroga el Dto.-Ley Nº 18 del 25 de marzo de 1.952, así como todas las
disposiciones legales, generales y especiales, y las reglamentaciones contrarias a la misma
ley.
La eficacia de las obligaciones contraídas en monedas sin curso legal se encuentra basada
en la misma ley y en los distintos fallos jurisprudenciales que se han dictado sobre el
particular.
“La obligación expresada en moneda extranjera es válida. Solo debe considerarse nula
cuando se ha impuesto el pago en moneda extranjera y se pretende que el pago sea
realizado en una moneda extraña al signo nacional.”25
Correcciones al principio nominalista. La cláusula oro y la cláusula valor oro.
Correcciones al principio nominalista.
Debido a la fluctuación monetaria, característica de nuestros días, los contratantes adoptan
medidas tendientes a asegurarles contra los riesgos de recibir una moneda desvalorizada.

24
25
Para ello se incluyen generalmente en las convenciones las llamadas cláusulas de reajuste,
de tal modo que el deudor al tiempo del cumplimiento de la obligación pague la cantidad
adeudada más el importe de las sumas destinadas a completar la diferencia del valor
existente entre la cantidad fijada en el acto de constitución y esa misma cantidad al tiempo
del cumplimiento.
Usualmente para regular o establecer esta diferencia se toma como medida una moneda
fuerte o los índices de valores establecidos por una institución oficial, como lo es el Banco
Central del Paraguay.
La cláusula oro y la cláusula valor oro.
La llamada cláusula oro puede adoptar dos modalidades:
1º) Cláusula “Moneda Oro”: Por la cual el deudor se obliga a abonar una determinada
moneda de oro. Esta cláusula se considera ineficaz si pretende exigir el pago en especie y
en consecuencia desechar la moneda nacional.
2º) Cláusula “Valor Oro”: Por ella se obliga a abonar en moneda corriente la cantidad de
monedas de oro o simplemente de una cantidad de oro, esta cláusula puede ser tenida por
válida, si con ella se pretende exigir el pago en especie, y en consecuencia desechar el pago
en moneda nacional, todo esto de acuerdo al nuevo régimen monetario.
Interés. Concepto. Clases de interés. Pago y prescripciones. Anatocismo.
Concepto.
WINDSHEID lo define como: “es la compensación al acreedor por la privación de un bien
al que tiene derecho”.
El interés presupone pues una obligación de capital cuyo rendimiento presenta.
Clases de interés.
Los intereses pueden ser clasificados desde dos puntos de vista:
1º) Sus fuentes: o sea según de donde provenga, este a su vez puede ser:
- Convencionales, su origen está en la convención, el acuerdo de las partes.
- Legales, su origen se encuentra en la misma ley.
2º) Su función que desempeña: también se da en este tipo:
- Compensatorio o Retributivos:son los que se abonan por el uso o utilización de un capital
ajeno.
- Moratorio o Punitivos: son los que se abonan en concepto de indemnización o reparación
por el perjuicio ocasionado al acreedor, debido al retardo en el cumplimiento de la
obligación.
Estos tipos de intereses no se contraponen. Así es frecuente que en los contratos de
mutuo se establezca un interés que reviste el carácter de compensatorio y un interés
punitorio para el supuesto de mora en la devolución del interés.
El interés punitorio comporta una real cláusula penal, lo que significa que tiende a
fijar el perjuicio sufrido por el acreedor, por el retardo de la devolución.
Pago y prescripciones
Las tasas activas y pasivas de interés compensatorio será determinadas libremente
conforme a la oferta y la demanda de dinero. Los intereses compensatorios serán
considerados intereses usuarios cuando excedan en un 50% el promedio de las tasas
máximas establecidas por el Banco Central del Paraguay.
Además del interés moratorio, los acreedores podrán percibir un interés punitorio
El simple hecho de la mora impone la obligación de pagar intereses, no es menester en
modo alguno que el acreedor justifique la existencia de perjuicios, porque los intereses se
deben (como ya se hizo mención) por haber incurrido en mora.
Es así que el acreedor no podrá pretender un interés mayor si ha sufrido un perjuicio mayor,
debido a la inejecución, pues los intereses representan la compensación del daño sufrido
por el retardo en el incumplimiento.26
Anatocismo.
El anatocismo es definido como la “capitalización de intereses”.
Esto sucede cuando al capital se le acumulan los intereses y a su vez este capital aumentado
reditua interés.
El anatocismo aparece como una modalidad de la usura, y por tal razón el Código lo
rechaza, de acuerdo al principio de que no se deben intereses sobre intereses.
26
Sin embargo, como toda reglas, reconoce excepciones:
1º) Cabe la acumulación de intereses al capital, cuando esta acumulación resulta de una
convención posterior al tiempo que los intereses se devengaron.
2º) La acumulación del capital y los intereses producen intereses cuando la obligación
hubiese sido judicialmente liquidada, y el deudor se mostrara remiso a abonar la cantidad
liquidada.

BOLILLA 17
OBLIGACIONES DE HACER Y DE NO HACER
Obligaciones de hacer y de no hacer.
Desde el punto de vista del objeto, las obligaciones se clasifican en primer lugar, en
obligaciones de dar, hacer y no hacer.
Toda obligación supone siempre una actividad humana, sea que la prestación consista en
dar, en un hacer o en un no hacer.
Afirmamos entonces que toda prestación consiste en un hacer, pues aún en las obligaciones
de dar el hombre debe desarrollar una determinada actividad encaminada a la entrega del
objeto.
La diferencia fundamental existente entre estos dos tipos de prestaciones recae en el objeto
a entregarse, y en las de hacer y no hacer en la actividad humana.
Obligaciones de hacer. Concepto. Caracteres de esta especie.
“Las obligaciones de hacer importan el deber de prestar un servicio”.
Caracteres de esta especie.
1º) El deudor no puede ser compelido por la violencia al cumplimiento del servicio o la
obra.
2º) Si el hecho pudiera ser cumplido por otro, el acreedor podría exigir su cumplimiento por
un tercero.
3º) Si se trata de un hecho en que las condiciones personales tuvieran relevancia el acreedor
estaría facultado a reclamar la pertinente indemnización.
Cumplimiento. Modo. Época. Incumplimiento.
Cumplimiento. Modo.
El principio que rige este tipo de obligaciones está en el Art. 476º de nuestro Código Civil
este precepto alude a dos extremos a referirse al cumplimiento: al modo de hacerlo y a la
época.
Al referirse al modo o forma de hacerlo entendamos que la intención de las partes puede
ser expresa o tácita. Cuando el Juez haya de juzgar el punto debe tener en cuenta las
circunstancias que rodearán al acto y lo que resulte habitual en casos semejantes, a los
efectos de un pronunciamiento sobre el particular.
Cumplimiento. Época.
En cuanto a la época, siempre guiándonos por el citado artículo de referencia, la prestación
debe ser efectuada en el tiempo en que las partes hubieran convenido que se llevara a cabo.
Si las partes no hubieran convenido ni expresa ni implícitamente el tiempo de ejecución de
la obligación, es el Magistrado quien debe decidir teniendo en cuenta las circunstancias del
caso. No es menester que el tiempo de realización de una prestación sea explícitamente
indicado, ya que éste puede resultar de los términos de la convención.
Incumplimiento.
Aquí nuestro desarrollo nos lleva íntegramente a la interpretación del Arts. 477º, 478º y
479º de nuestro Código Civil
2. Obligaciones alternativas.
Concepto.
“Son las que tienen por objeto una de entre varias prestaciones independientes y distintas
las unas de las otras, de modo que la elección que deba hacerse entre ellas quede desde el
principio indeterminado”. Ejemplo: Me obligo a entregar esta casa o 100 cabezas de
ganado. Aquí el deudor de la obligación alternativa se libera cumpliendo una de las
prestaciones disyuntivamente comprendidas en la obligación.
Elección de la prestación.
La elección de la prestación puede corresponder al deudor, al acreedor o a un tercero, e
incluso al Juez, si lo anteriormente mencionado no lo hubiesen hecho en el plazo
establecido.
La obligación alternativa simple.
La obligación alternativa se considera simple si una de las dos prestaciones no podría
constituir objeto de la obligación o si ha llegado a ser imposible por causa no imputable a
alguna de las partes. En tales casos, la otra prestación es debida al acreedor.

Imposibilidad de cumplimiento.
Cuando la elección corresponde al acreedor, el deudor queda liberado de la obligación, si
una de las dos prestaciones se hace imposible por culpa de aquel, salvo que el acreedor
prefiera exigir la otra prestación y resarcir el daño. Si de la imposibilidad debe responder el
deudor, el acreedor puede elegir la otra prestación o exigir el resarcimiento del daño.
Cuando ambas prestaciones se hayan hecho imposibles y la una ha dejado de serlo por
culpa del deudor, debe éste pagar el equivalente de la que se ha hecho imposible en último
lugar, si la elección correspondía a él.
Si la elección correspondía al acreedor, podría esta pedir el equivalente de la una o la otra
prestación.
Obligaciones de pago facultativo.
Concepto.
“Son aquellas que teniendo por objeto una sola prestación confieren al deudor la facultad de
sustituir una por otra”. Ejemplo: Me obligo a entregar este automóvil, pero con la facultad
de poder sustituir o poder entregar tal terreno.
Aquí el acreedor solo tiene derecho a pedir el cumplimiento de la prestación principal, pues
es el único objeto debido en realidad. En cambio, el deudor tiene la facultad de sustituir esa
prestación por la accesoria.
Imposibilidad de cumplimiento.
La obligación de pago facultativo se extingue cuando la principal se hiciere imposible, sin
culpa del deudor, aunque pudiera realizarse la accesoria. Si la imposibilidad fuera
imputable al obligado, el acreedor podrá pedir su equivalente o la prestación accesoria.
Disposición legal en caso de duda sobre si la obligación es alternativa o facultativa.
En caso de incertidumbre sobre si la relación obligatoria es alternativa o facultativa, se
considerará que dicha relación es alternativa.
BOLILLA 18
CESION DE CRÉDITOS.
Introducción.
El primitivo principio en esta materia ha sido el de la intrasmisibilidad de las mismas con
carácter absoluto, por ser ella considerada como una relación personalísima entre dos
sujetos de derecho que no podían sustituirse pues la relación quedaba destruida, de ahí que
en el derecho romano fuera desconocida la transmisión de créditos y deudas por actos entre
vivos.
SILVA ALONSO comenta que: “si se admitía la transmisión de créditos o deudas por causa
de muerte era solo porque la persona del causante debía continuar y se tenía al heredero por
continuador de la persona del difunto”.
BORDA nos dice que: “hay transmisión de un derecho cuando una persona sucede a otra
como titular del mismo. El acreedor o deudor ha cambiado, pero el derecho en si mismo
permanece idéntico. Esta transmisión puede ocurrir por acto entre vivos o por muerte del
titular del derecho u obligación”.
Esta conceptualización de la transmisibilidad de las obligaciones se ve modificada en el
derecho moderno. En este, actualmente se piensa que es posible separar la relación
obligatoria de los sujetos que la forman sin que por esto esa obligación deba sufrir
deterioro. En nuestros días, se pone énfasis realmente al objeto de la obligación, la
prestación, ya que en una gran cantidad de casos, ellas carecen de relevancia en lo que se
refiere al cumplimiento de la obligación.
Concepto.
SILVA ALONSO siguiendo la definición que aparece legislada en el Código de Vélez
Sarsfield (aunque prestaba a equívocos en su decir), conceptualizaba lo siguiente: “Hay
cesión de créditos cuando una parte se obliga a transferir a la otra el derecho que le
compete contra su deudor, entregándole el título de crédito sin existiere, lo que parece dar a
entender que no basta el simple consentimiento para que se produzca la cesión, sino que es
necesaria la tradición de instrumento de crédito”.
Siguiendo una conceptualización académica y no tan normativista, puede definirse a la
cesión de créditos, como al “acto jurídico bilateral por el cual una parte se obliga a la otra a
transferirle un crédito que le correspondía y la otra a aceptarle, y en determinados casos a
pagar por ella un precio”.
Caracteres.
1º) Es un contrato consensual, pues basta el simple consentimiento de las partes para su
perfeccionamiento.
2º) No es necesaria la notificación o aceptación del deudor cedido para que se produzca la
cesión.
3º) La cesión de crédito, como se trata de un contrato consensual, de caracteres variables,
pues a veces puede ser a título gratuito y a veces a título oneroso.
4º) La transferencia del crédito comprende todos sus accesorios y privilegios, incluso la
fuerza ejecutiva del título, si éste la tuviese.27
Sujetos de la cesión: Capacidad.
Los sujetos de la cesión pueden ser:
el cedente(acreedor originario),
el cesionario (nuevo acreedor),
el cesionado(deudor).
Como todo acto jurídico, la cesión requiere la pertinente capacidad de los otorgantes para
realizarla. Puesto que la cesión implica un acto de disposición se requiere que las partes
tengan capacidad para enajenar, es decir, comprar y vender.
Objeto: Derechos que pueden cederse.
La ley establece como principio general el de la negociabilidad: de tal manera, puede ser
cedido todo bien incorporal, todo derecho y toda acción sobre una cosa que se encuentre en
el comercio.
El Art. 524º dispone que el crédito puede transferirse, siempre que no tenga carácter
estrictamente personal o que su transferencia no este prohibida por la ley.
Formas
Por lo común, el crédito se transfiere a través de un pacto (acuerdo de voluntades) entre el
cedente y el cesionario, independientemente de la aceptación o no por parte del deudor.
En ciertos casos la transferencia, tiene lugar en virtud de la ley o de sentencia
independientemente de toda manifestación de voluntad de parte del precedente acreedor.
Efectos.
Entre partes.
La cesión se produce con el solo consentimiento de las partes, sin que sea necesaria la
tradición del título del crédito.
La cesión confiere al cesionario las acciones que correspondían al cedente, incluso la fuerza
ejecutiva del título y todos los derechos accesorios.
a) Tratándose de actos a título gratuito, el cedente no responde ni de la existencia del
crédito, ni de la insolvencia del deudor28
b) Si se trata de acto título oneroso, él se halla obligado naturalmente por evicción y en
consecuencia responderá de la existencia y legitimidad del crédito a no ser de que lo haya
cedido como dudoso. Pero no responde de la insolvencia del deudor o sus fiadores, a no ser
que la insolvencia fuese pública y anterior a la cesión.

27
28
c) El cedente de buena fe está obligado a restituir lo recibido por la cesión si el crédito no
existía al momento de la cesión y si lo hubiere hecho de mala fe deberá restituir el valor del
importe nominal y será responsable además de todos los perjuicios causados al cesionario.
Con relación a terceros.
Tercero es todo aquel que no es parte en el acto de cesión que no es parte en el acto de
cesión, el cual comprende solo al cedente y al cesionario. De acuerdo a esto el deudor
cedido es tercero en el contrato de cesión.
Son considerados también terceros los segundos cesionados y los acreedores del cedente.
En cuanto al deudor, la cesión se produce independientemente de su aceptación o
notificación.
a) Si existieran terceros que tuviesen interés legítimo en objetar la cesión para conservar
derechos adquiridos después de ella, el crédito solo se transmitirá si mediare aceptación del
deudor o fuere notificado del traspaso.
b) La notificación deberá hacerse bajo la pena de nulidad del acto, por una disposición
judicial, por medio de escribano público, telegrama colacionado u otro medio auténtico y se
transcribirá en ella la parte substancial del contrato.
El deudor cedido quedará libre si paga al cedente antes de la notificación a la aceptación del
traspaso, salvo el caso de colusión o culpa grave.
e) Cuando los hechos y las circunstancias del caso demostraren una colusión del deudor con
el cedente, o una imprudencia grave de aquel, el traspaso del crédito surtirá respecto de él
en todos sus efectos, aunque no fuere notificado ni aceptado.
f) En caso de quiebra del cedente, la notificación o aceptación del deudor no surtirá efecto
para los acreedores del fallido, si tuviere lugar después la declaración de falencia.
g) La notificación o aceptación de la cesión tampoco producirá efecto cuando haya un
embargo sobre el crédito, exceptuando a aquellos acreedores y cesionarios que no hubiesen
pedido el embargo para quienes revestirá eficacia.
i) Si un mismo crédito ha sido objeto de varias cesiones otorgadas en distintos días,
prevalecerá la cesión notificada por acto de fecha cierta, aunque la misma sea posterior.
j) La notificación y la aceptación posterior de transferencia causan el embargo del crédito a
favor del cesionario independientemente del título constitutivo del crédito, pudiendo haber
estado un cesionario anterior en posesión de dicho título constitutivo, no siendo este eficaz
respecto de otros interesados, si no es notificada por un acto público.
BOLILLA 19
CESIÓN DE DEUDAS.
BORDA nos indica que: “si se concibe sin dificultad la cesión de créditos, resulta, en
cambio, más difícil admitir la posibilidad de una cesión de deudas. Pues, mientras al deudor
lo mismo le da pagarle a un acreedor que a otro, al acreedor no le resulta indiferente la
persona del deudor, pues el originario puede ser solvente y el otro no”.
Eso nos explica lo que en el Derecho Romano los mismos juristas romanos entendieron a
rajatabla, comprendiéndose, pues, que en este tipo de cesión no fuera aceptado en tal
derecho, salvo el caso de cuando se trataba de transmisiones globales de patrimonio: la
sucesión mortis causae, la bonorumvenditio, y la bonorum cesio.
Siguiendo nuevamente las enseñanzas de BORDA: “en la práctica, sin embargo, era posible
lograr aproximadamente sus efectos por medio de una novación por cambio de deudor.
Solución imperfecta, pues la novación supone la extinción de la anterior obligación (con
todos sus accesorios) y el nacimiento de una nueva”.
Este pensamiento fue mantenido hasta muy avanzado el siglo XIX, cuando aún se pensaba
que siendo la obligación un vínculo entre dos o más personas, no se podía cambiar esas
personas sin destruir el vínculo mismo, todavía se añadía la consideración práctica, que,
desde el punto de vista de la solvencia, la persona del deudor es, ya lo dijimos, de
importancia fundamental.
SILVA ALONSO, afirma que: “la posibilidad de una transmisión pasiva de la obligación no
es sino la extensión de la idea de la cesión de créditos”.
Según la doctrina dominante en la materia de cesión, solo es posible mediante la
intervención de la voluntad del acreedor. Hasta este momento ella no existe sino en
proyecto, bajo la forma de una oferta de un tercero respecto a él de liberar al deudor y
obligarle a él.
La doctrina seguida por el derecho germánico, por el contrario, otorga una infirma
importancia al papel del acreedor, ya que la cesión existe solo por el acuerdo de partes, la
adhesión del acreedor, solo tiene por objeto hacerle oponible el acto.
De tal manera, la cesión de las deudas es entonces definida como: “la sustitución de una
persona por otra como deudor, sin que el cambio afecte la relación preexistente y con las
permanencia de los accesorios”. Esta es la forma en que la cesión de las deudas resulta el
contraste maestro de la cesión de créditos, de tal manera que en ambos se prestan las
mismas aplicaciones.
Regulación en el Nuevo Código Civil.
El Código Civil legislado en 1.985 y que entro en vigencia el 1º de enero de 1.987,
proveyó nuevas normas que tratan específicamente de la materia en los Arts. comprendidos
del 538º al 546º. El mismo concede a la voluntad del acreedor un papel principal en el acto
de la cesión de las deudas.
Entonces, la cesión de deudas puede darse de los siguientes modos:
Por Delegación; y,
Por Expromisión.
La Delegación.
Concepto.
“La delegación es el modo de cesión de deudas que se produce cuando un tercero a
iniciativa del deudor asume la obligación que éste tiene para con el acreedor y éste acepta
al tercero”.
Requisitos.
Los requisitos que se deben reunir en la cesión de deudas por delegación son:
1º) Que el tercero (delegado) asuma la obligación del deudor (delegante); y,
2º) Que el acreedor acepte al tercero (delegado), si no acepta, claramente la obligación le es
inoponible.
Efectos.
Siguiendo los dictados del Art. 538º podemos afirmar que el acreedor tiene ante si a dos
deudores, por lo que la referida obligación se denomina también imperfecta o acumulativa.
Así, el delegado a quien el deudor encargó honrar el pago de la deuda, puede obligarse con
respecto al acreedor, aunque no estaría obligado a que el mismo acepte dicho encargo, aún
en el caso de que fuera el deudor del delegante.
Mientras que el delegado no haya asumido la deuda a favor de su delegatario o no se haya
cancelado la deuda, la delegación puede ser revocada por el acreedor, sin expresión de
causa, inclusive.
Hasta que el acreedor no haya declarado expresamente que libera al deudor originario, este
no quedará liberado de sus obligaciones. En tal motivo, la obligación habrá de denominarse
perfecta, puesto que se habrá de liberar al deudor primitivo, habiendo en adelante un solo
deudor, siendo de ahí en más el delegado o nuevo deudor.
La expromisión: Concepto.
SILVA ALONSO lo conceptualiza de la siguiente manera: “la expromisión se da cuando un
tercero conviene con el acreedor hacerse cargo de la obligación que tiene para con él
deudor, sin conocimiento ni consentimiento de éste”.
La asunción de cumplimiento o promesa de liberación.
El deudor y un tercero pueden convenir en que éste último asuma su deuda, y esta
estipulación hecha a su favor será irrevocable cuando el acreedor se adhiera a la
convención.
El deudor originario solo quedará liberado si el acreedor lo libera expresamente o si esto
constituía una condición expresa de la estipulación.
Si no hay liberación, el deudor queda solidariamente obligado con el tercero.
En cualquier caso el tercero queda obligado dentro de los límites que ha asumido la deuda y
puede oponer al acreedor las excepciones fundadas sobre el contrato en virtud del cual la
asunción se ha verificado.
Esta institución es originaria del derecho germano. Según el Art. 175º del Código Suizo de
las Obligaciones, la promesa hecha a un deudor de hacerse cargo de la deuda obliga a que
la formula a liberarlo, sea pagando al acreedor, sea haciéndose cargo de la deuda con el
consentimiento de éste.
El Proyecto Argentino de 1.936 contiene una breve disposición referida a este instituto en
su Art. 680º diciendo que: “el que conviniere con el deudor en liberarlo de la obligación,
quedará obligado a ello, sin que ese acuerdo confiera acción directa al acreedor”.
La asunción acumulativa o de refuerzo.
El acreedor que a consecuencia de la delegación ha liberado al deudor originario no tiene
acción contra él si el delegado se vuelve insolvente, salvo que haya hecho expresa reserva
de ello.
Pero el deudor originario no queda liberado si el delegado era insolvente en el momento
que asumió la deuda.
Las mismas disposiciones se observarán cuando el acreedor aceptó la asunción estipulada a
su favor y era condición expresa de la estipulación, la liberación del deudor originario.
Las garantías anexas se extinguen en todos los casos en que el acreedor libera al deudor
originario, a no ser que el que las ha prestado consienta en mantenerlas expresamente.
Siendo declarada nula la obligación asumida por el delegado y habiéndose liberado ya el
delegatario, dicho vínculo renace, pero el acreedor no podrá valerse de las garantías
prestadas por terceros.
BOLILLA 20
RECONOCIMIENTO DE OBLIGACIONES.
Concepto.
BORDA dice: “quien es titular de un derecho y necesita hacerlo valer en justicia, debe
probarlo. El juez, en efecto, debe fallar según lo alegado y probado por las partes; solo en
caso de que el hecho sea de pública notoriedad puede prescindirse de acreditarlo por alguno
de los medios legales”.
Entonces, podemos definir al reconocimiento de una obligación como “la declaración por la
cual una persona reconoce que está sometida a una obligación respecto de otra persona”.
Esto es trascendental, pues constituye un medio de prueba de las obligaciones e igualmente
interrumpe la prescripción.
Naturaleza jurídica.
En doctrina se distinguen varias corrientes con respecto a la naturaleza jurídica del
reconocimiento de las obligaciones:
1º) Para algunos es un mero acto lícito, cuyas consecuencias son determinadas por las
normas jurídicas.
2º) Para la mayoría se trata de un acto jurídico, pues quien lo reconoce lo hace con el fin
inmediato de admitir la existencia de una obligación preexistente y someterse a las
consecuencias jurídicas derivadas de ella. En esta corriente se encuentran eminentes juristas
de la talla de SALVAT, SPOTA y LLAMBIAS.
3º) Otro criterio sostiene que según los casos, el reconocimiento puede ser tanto un mero
acto voluntario como un acto jurídico. Este punto de vista adolece del defecto de que, si
consideramos el reconocimiento como una figura única, esta no puede ser al mismo tiempo
un mero acto y un acto jurídico.
Requisitos.
El acto de reconocimiento de las obligaciones está sujeto a todas las condiciones y
formalidades de los actos jurídicos:
En consecuencia, será necesario que:
1º) El sujeto que reconozca la obligación sea capaz en el momento de hacerla y que exprese
su voluntad conforme a los requisitos internos del discernimiento, intención y voluntad.
2º) Debe estar legitimado para obrar (capacidad de hecho), y si lo hace por representante,
este debe ser investido de poderes especiales cuando el reconocimiento es de obligaciones
interiores al apoderamiento.
3º) El objeto de la obligación reconocida debe existir y la prestación debe ser lícita.
4º) Se requiere el propósito de reconocer que se está obligado y que esa voluntad sea
manifestada por un hecho exterior reconocido por la ley.
5º) El acto de reconocimiento debe contener la causa de la obligación original, su
importancia (o sea la prestación debida) y el tiempo en que fue contraída.
Formas.
El reconocimiento puede ser:
a) expreso o tácito. Ejemplo: Del reconocimiento expreso sería el reconocimiento realizado
en un instrumento y del reconocimiento tácito los pagos hechos por el deudor, pues este
hecho implica la confesión de la existencia del derecho por parte del acreedor.
b) Reconocimiento por instrumentos: públicos o privados.
b. 1) Instrumentos públicos: debido a las formalidades de que se hallan revestidos hacen
plena prueba, tanto en las partes como así también para terceros, sobre la autenticidad de su
contenido.
b. 2) Instrumentos privados: en cambio no tiene la fuerza probatoria sino desde su
reconocimiento judicial o extrajudicial, sin embargo, respecto a terceros y sucesores a título
singular, no prueba la verdad de la fecha.29

Efectos.
El reconocimiento de un acto jurídico hace plena prueba de las declaraciones contenidas en
el acto original.30
Ahora, si en el acto de reconocimiento, se agrava la prestación original, o se la
modifica en perjuicio del deudor, se atenderá a lo establecido en el título original, a no ser
que hubiese una nueva y lícita causa del deber.
El reconocimiento interrumpe la prescripción y solo incide sobre ella si el plazo
respectivo no se ha cumplido. Si ese plazo ya se ha agotado, la obligación subsistirá como
natural.

BOLILLA 21
EXTINCIÓN DE LAS OBLIGACIONES PAGO
GENEREALIADES. MODOS. Clasificación.
El Código Civil enumera en diferentes artículos los modos de extinción de las obligaciones.
así, menciona el:
Pago (Art. 547),
La novación (Art. 602),
La remisión de la deuda (Art. 610),
La compensación (Art. 615),
La confusión (Art. 623),
La imposibilidad del pago (Art. 628),
La prescripción liberatoria (Art. 633).
Esta enumeración no es completa. Existen otros modos de extinción que el codificador ha
omitido referir.
El Código omite aludir entre otros modos a:
La transacción (legislada como contrato especial Art. 1.495-1.506),
La condición y plazo resolutorios o terminus ad quem,
La muerte del deudor, en el caso de obligaciones intuitupersonae; y,
Al abandono de la cosa debida.
Estos modos pueden ser considerados especiales, pues se dan solo en cierto tipo de
obligaciones.
En cuanto a la nulidad, la doctrina se ha preguntado si puede esta considerarse como modo
de extinción de las obligaciones.
Si bien unos y otros hacen desaparecer los efectos los efectos de la obligación, hay entre
ellas una sensible diferencia.
En la nulidad, la obligación no ha llegado realmente a formarse por lo que, producido su
pronunciamiento el vínculo deja de producir efectos, inclusive desde el tiempo del acto de
constitución. En los modos de extinción en cambio los efectos desaparecen en el momento
en que se produce alguno de ellos, teniendo validez, los producidos anteriormente.
En otras palabras, la nulidad no puede considerarse como modo de extinción de las
obligaciones.
Clasificación.

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Los autores acostumbran clasificar a los modos de extinción de las obligaciones, en dos
grandes grupos:
1º) Los que satisfacen al acreedor: como el pago, compensación y la transacción, en donde
la extinción de la obligación opera por el cumplimiento de la prestación adeudada.
2º) Los que no satisfacen el derecho del acreedor: como la confusión, remisión de la deuda,
prescripción, imposibilidad de pago, condición y el plazo resolutorio, la muerte del deudor,
etc.
El Pago. Concepto. Naturaleza.
“Pago es el cumplimiento de la prestación objeto de la obligación, sea de dar, hacer o no
hacer”.
SILVA ALONSO, dice del mismo: “En el lenguaje profano, pago es el abono de una suma
de dinero adeudada. En la terminología del derecho la expresión pago alude al
cumplimiento de cualquier tipo de obligación”.
Naturaleza.
En cuanto a la naturaleza de esta forma de extinción de la obligación, hay un sostenido
debate en la doctrina.
Algunos autores sostienen que es un contrato, puesto que en el acto de pago ha de contarse
no solo con la voluntad del solvens(deudor), sino también con la cooperación del
accipiens(acreedor).
Esta doctrina carece de suficiente fundamento porque la ejecución del pago es
independiente de la voluntad o cooperación del acreedor. Así en el caso de que este
rehusara a cooperar cabría el pago por consignación, al menos en las obligaciones de dar.
De modo que, desechada la necesidad del concurso de dos voluntades no cabe pues, sino
considerar el pago como acto jurídico unilateral.
Sujetos. Capacidad.
El pago supone al menos dos personas que intervienen en él. El accipiens(acreedor), o
destinatario del pago, que es la persona que recibe el pago y el solvens(deudor) o la persona
que paga.
En cuanto a las personas que pueden hacer el pago tenemos:
1) El deudor capaz de administrar sus bienes.
2) Toda persona interesada en el cumplimiento de la obligación entre estos se encuentran
naturalmente los fiadores del deudor, el tenedor o adquiriente de un inmueble hipotecario.
3) El tercero no interesado, con asentimiento del deudor o sin él.
El pago puede ser legítimamente cumplido con asentimiento del deudor y aún contra la
voluntad de este o del acreedor, por un tercero, salvo el interés legítimo del acreedor en
que el cumplimiento sea personalmente ejecutable por el deudor, en atención por ejemplo,
las condiciones personales que hubiesen sido tendidas en cuenta en la obligación, en cuyo
caso puede oponerse al pago
Los terceros que cumplieron la obligación, ya sea en su nombre o en el del deudor, tendrán
acción de repetición contra éste. El tercero no interesado, que pago contra la voluntad del
deudor, solo tendrá derecho en la medida del beneficio recibido por este.
El Art. 551º enumera a las personas a quienes el pago puede hacerse:
1º) En primer término tenemos al acreedor que tuviere libre administración de sus bienes o
las personas que representen legal o convencionalmente al acreedor e invistan facultad para
recibir el pago.
2º) Al que presentare el título de crédito, si este fuere al portador o tuviere recibo del
acreedor, salvo fundada sospecha de no pertenecerle el documento o de no estar autorizado
para el cobro.
3º) Al tercero indicado para recibir el pago, aunque lo resistiere el acreedor y aunque se le
hubiere satisfecho una parte de la deuda.
4º) Al que estuviere en posesión del crédito, aún cuando después dicho poseedor fuese
vencido en juicio sobre el derecho de crédito.
El pago realizado ante quien no tuviere la autorización correspondiente para recibirlo será
válido sólo si el acreedor lo ratifica o en la medida que se convierte en su utilidad.
El deudor que informando de la incapacidad sobreviniente del acreedor, le hiciere el pago,
no extinguirá la obligación a menos que pruebe que el pago redundó en beneficio del
acreedor.
El pago hecho al acreedor cuyo crédito estuviere embargado o pignorado, no será válido,
pues el deudor debe pagar a los acreedores prendarios o embargantes. Si hubiere pagado al
acreedor tendrá su derecho de repetición contra éste.31
Capacidad.
A) Del acreedor:
En cuanto a la persona que recibe el pago, ella debe ser capaz pues recibir la prestación
implica la extinción de la obligación y disponer del crédito.
El Código Civil Paraguayo reputa como capaces de administrar sus bienes, a las personas
que hubiesen cumplido 20 años y no hayan sido declaradas incapaz judicialmente 32; y a los
menores emancipados
No obstante aún cuando la persona que recibe el pago fuera incapaz la obligación se
extinguirá si el deudor prueba que la prestación fue cumplida en beneficio de aquel.
Del deudor:
La persona que paga debe tener la capacidad requerida para los actos de disposición. Quien
carece de ella no puede pagar válidamente, salvo que se trate de obligaciones de hacer, es
decir, de prestar servicios, para lo cual los menores adultos están facultados por el Código
Laboral.
El pago con subrogación.
Se ha podido observar que el pago puede ser cumplido por un tercero, coobligado o extraño
a la relación jurídica obligatoria.
Tal hecho de pago de la obligación a cargo del otro, confiere a quien lo hace una acción
especial contra el deudor, a no ser que hubiese cumplido el pago animus donandi.
Al margen de tal acción personal que le correspondería, el tercero puede adquirir la acción
que el acreedor hace a favor de la persona que efectúa el pago que recibe el nombre de
subrogación.
Subrogado el tercero en los derechos del acreedor, este podrá ejercer así contra el deudor la
primitiva acción que existía contra él y con ella todas las garantías accesorias.
La subrogación puede ser legal o convencional.
Subrogación legal: se opera de pleno derecho a favor de:
El acreedor que paga la deuda del deudor común a otro acreedor que le es preferente.
Cuando alguno paga por tener interés legítimo en cumplir la obligación.
Cuando un tercero no interesado en la obligación paga, ya sea con aprobación expresa o
tácita del deudor o ignorándolo éste.
Subrogación convencional: tiene lugar
Cuando el acreedor recibe el pago de un tercero y lo sustituye expresamente en sus
derechos.
Cuando el deudor paga con una cantidad que ha tomado prestada y subroga al prestamista
el en los derechos del primitivo acreedor. No hará falta el asentimiento del acreedor si el
dinero fue tomado prestado en escritura pública, haciendo constar en ella su propósito.
La subrogación legal o convencional tiene por efecto fundamental traspasar al nuevo
acreedor todos los derechos, acciones y garantías del antiguo acreedor, que podrá de esta
manera actual contra el deudor como contra los fiadores.
Esta transferencia de acciones del acreedor opera dentro de ciertos límites o restricciones
que se deberán leer íntegramente del Art. 596º de nuestra legislación civil vigente.
El pago por consignación.
Podría suceder que el deudor en su intención de pagar, se halle ante obstáculos jurídicos o
hechos que le impidan o dificulten el cumplimiento y lo pongan en peligro de incurrir en
mora. En tales supuestos, la misma ley le permite la consignación del pago mediante su
depósito judicial y la promoción de la acción ante el juez, el cual habrá de decidir si el pago
efectuado fue de legítimo abono.
El pago por consignación, es solo posible en las obligaciones de dar y en los siguientes
casos:
1º) Si el acreedor incurre en mora o se niega a recibir el pago;
2º) Si es incapaz para aceptarlo y carece de representante;

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3º) Si es desconocido, o su derecho resulta dudoso, o concurren otras personas a
reclamar el pago;
4º) Si la deuda ha sido embargada, o retenida en poder del deudor, y éste quiere
exonerarse del depósito;
5º) Si el acreedor perdió el título de la obligación;
6º) Si el que adeuda el precio de un bien gravado, quiere redimirlo de la garantía
real; y,
7º) Si el acreedor se rehúsa a presentar el documento o alega no tenerlo en su poder.
Para que la consignación surta efectos legales es indispensable que concurran todos
los requisitos del pago convenido, las circunstancias de personas, objeto, modo y tiempo.
Si la deuda consiste en entregar una cosa cierta, la consignación requiere una
intimación judicial del deudor al acreedor para que la reciba. No recibiéndolo el acreedor,
puede autorizarse el depósito en otra parte.
Si se deben cosas inciertas cuya elección corresponda al acreedor procede una
intimación a fin de que la efectúe. El depósito suspende el curso de los intereses.
Si la consignación no es impugnada o es declarada válida, ella surte los efectos del
pago, desde el día del depósito. En tales supuestos los gastos son a cargo del acreedor. El
deudor carga con ellos si desiste de la consignación o es rechazada por el juez.
Mientras la consignación no haya sido aceptada o no existe sentencia que la declare
válida, el depósito puede ser retirado por decisión del deudor. producido el retiro, las cosas
vuelven al estado anterior al depósito.
El objeto del pago. La dación de pago.
El objeto del pago.
El deudor debe entregar la misma cosa o cumplir exactamente el hecho a que estuviese
obligado. No puede sustituirse con los daños y perjuicios de la inejecución o mediante otra
cosa u otro hecho, aunque fueren de igual o mayor valor
El acreedor no está obligado a aceptar en parte, el cumplimiento de la prestación, cuando
los pagos parciales estuvieren autorizados.
Siendo la deuda fuese en parte líquida y en otra no líquida, el acreedor estará facultado a
reclamar el cumplimiento de la obligación líquida antes que corresponda el pago de la otra.
Si fuere una obligación de dar suma de dinero con intereses, el pago solo será completo
después de abonados el capital y los intereses.
La dación de pago.
BORDA dice: “El pago supone la entrega al acreedor de la misma cosa o prestación a que
el deudor se obligó. Es el cumplimiento exacto de lo debido. Pero puede ocurrir que
interese a ambas partes la entrega de una cosa distinta de la prometida. Ningún
inconveniente hay en que el acreedor acepte una prestación diferente, quedando con esa
entrega extinguida su obligación.”. SILVA ALONSO lo define de la siguiente manera:
“Hay, pues, dación en pago cuando el acreedor acepta recibir de su deudor una cosa diversa
a la prestación debida según la obligación”
Para que haya dación en pago deben estar reunidos los siguientes requisitos:
Una obligación preexistente que extinga por efecto de la dación en pago, requisito sin el
cual ésta sería un pago indebido.
La entrega efectiva y actual de una cosa distinta de la debida. No basta la simple promesa
de pagar otra cosa, aunque esa promesa sea aceptada como modo de extinción anterior.
Entonces se estaría dando una novación.
El consentimiento del acreedor, en tanto el pago puede hacerse aún contra la voluntad del
acreedor que está obligado a recibirlo, la dación en pago requiere indispensablemente su
conformidad.
Imputación de pago.
Siguiendo a SILVA ALONSO: “En la vida de los negocios, acreedor y deudor pueden estar
vinculados por más de una obligación. Pedro puede ser acreedor de Juan por diversos
conceptos. Puede serlo por haberle otorgado en préstamo una suma de dinero, y porque
adeuda alquileres, etc. En situaciones como éstas puede suceder que Juan (el deudor) haga
entrega de dinero para el abono de sus obligaciones, pero que la cantidad oblada no alcance
a cubrir el total de las distintas obligaciones. se plantea entonces la cuestión de saber a qué
obligaciones debe imputarse el pago efectuado. El problema está vinculado con el objeto
del pago, pues dice la relación con su determinación”
El Código en su Art. 591º establece al respecto el principio general en la materia y al
mismo tiempo las excepciones al caso, nos remitimos a él para su detenida lectura y
estudio.
El pago no debido.
Todo acto supone siempre una obligación válida. Por ello, el pago que no tiene por
fundamento una obligación válida o se lleva a cabo por errores no es un pago, ya que carece
de apoyo jurídico y en consecuencia daría lugar a la repetición. Lo que la ley quiere es que
el pago responda a una deuda, de modo que quien recibe el pago no se enriquezca
indebidamente a costa de otra. Sobre el tema del pago indebido y enriquecimiento sin causa
nuestro Código Civil estipula que aquel que se enriquezca sin causa dañando a otro, está
obligado en la medida en que se enriquezca, a indemnizar al que se perjudica en la
disminución gradual de su patrimonio. Si el mismo consiste en la obtención de una cosa
cierta habrá de corresponder la restitución en especie, si esta existe al tiempo de la
instauración de la demanda correspondiente.
“El enriquecimiento sin causa es el beneficio o ventaja de naturaleza económica obtenida
por una persona con menoscabo del patrimonio de otro y que carece de absoluta
justificación”.
Según CAPITANT, el enriquecimiento sin causa es: “desplazamiento del valor de un
patrimonio a otro, con empobrecimiento del primero y enriquecimiento del segundo y sin
que ello esté justificado por una operación jurídica o por la ley.”
La persona que paga lo que no debe tiene derecho a repetir lo pagado o sea la actio in rem
verso. Si el que cobró procedió de buena fe, queda con los frutos e intereses desde el día de
la demanda: si era de mala fe desde el día del pago.
Si una persona, por error excusable paga una deuda ajena, creyendo la propia, puede
repetir lo pagado; si el acreedor no se ha despojado de buena fe del título o de las garantías
del crédito. Si la repetición no se admitiera, el que pago se subrogaría en los derechos del
acreedor. Si fuere un incapaz el que recibió el pago indebido, este queda obligado en la
medida del beneficio que le hubiere reparado el mismo.
El tiempo del pago.
Nuestra legislación estipula en su Art. 561º que el pago de una obligación debe efectuarse
en el tiempo acordado por las partes, en el día de vencimiento de la obligación.
Si, por el contrario, se estipuló un plazo para su cumplimiento, el acreedor podrá exigir al
deudor el cumplimiento de la obligación antes del vencimiento de la misma, si el mismo
hubiere llegado al estado de insolvencia o por el contrario ha disminuido las garantías
estipuladas. Si fuere una obligación solidaria, no será exigible en tales casos para los
codeudores. Tampoco será para los fiadores, que habrán de gozar del término que se ha
fijado de antemano.
Si por el contrario, el plazo se dejó a voluntad del acreedor, su deudor para poder liberarse
deberá pedir al Juez que lo señale para el efecto del pago de la obligación.
El lugar del pago.
El pago deberá realizarse en el lugar designado para tal efecto. Si no se estimó el lugar
debido y la obligación fuere de cosas ciertas, el lugar será el mismo donde se hallaba la
cosa al tiempo de constituirse la obligación.
Tratándose de otro tipo de obligaciones y no habiéndose designado un lugar para el pago de
la misma, este será el del domicilio del deudor, al tiempo en que habrá de vencer la
obligación.
Cuando se ha convenido que el pago deba realizarse en el domicilio del deudor, y si este
trasladase su domicilio, el acreedor tendrá opción de exigir que se realice en el actual o en
el primero. Igualmente tendrá el deudor el derecho cuando se trasladare de domicilio su
acreedor siendo el primero indicado para el pago.
En el caso de las obligaciones dinerarias como precio de una cosa enajenada, si no se ha
designado el lugar de pago, el mismo se habrá de ejecutar donde haya de cumplirse la
tradición, salvo que el pago fuese a término.
Los gastos del pago.
Los gastos del pago serán a cargo del deudor, porque de otra manera el mismo no sería
completo, ya que el acreedor tendría que restar al pago el importe de lo que hubiera costado
en obtenerlo (tal cosa significaría que el mismo habría recibido solo en parte lo que se le
debía). Ejemplo: En un contrato de compra-venta de un vehículo, el comprador habrá de
correr con los gastos notariales, tanto del protocolo de compra-venta, transferencia e
inscripción en el Registro Nacional del Automotor del referido (se incluyen en el mismo los
gastos de tasas, impuestos y honorarios profesionales).
Como es natural, las partes de acuerdo al principio de autonomía de la voluntad, de común
acuerdo pueden disponer lo contrario, adecuándolo a su mejor conveniencia.
Los gastos por cesión de bienes a los deudores.
La cesión contractual de bienes a los acreedores es una figura jurídica que procediendo
históricamente de la bonorum cesio instituída por la Lex Iulia de boniscedendi fue legislada
en el Código Francés como posteriormente en el Código Civil Argentino de Dalmacio
Vélez Sarsfield.
La cesión voluntaria (o espontánea al decir de SILVA ALONSO) de los bienes a los
acreedores se vincula, en algunos aspectos, a la ejecución forzada individual.
Aquí, el deudor procede a ceder sus bienes a su/s acreedor/es, con el fin de que esto/s los
liquiden y se hagan con el cobro de la deuda, liberando de la misma al deudor cedente.
Concepto.
El pago por la cesión de los bienes a los acreedores es definida como: “un acto jurídico
bilateral, un contrato por el cual el deudor pone a disposición de uno o más de sus
acreedores sus bienes para que sean liquidados para que el resultado de los mismos sean
aplicados al pago de sus deudas”

Formas de cesión.
La cesión, como acto formal, debe ser realizada por escrito, so pena de nulidad.
Si entre los cedidos existieren créditos, estos deberán de ser observados sobre las
disposiciones obre la transferencia de créditos legislado en el Art. 576º del Código Civil
Paraguayo.
Administración de bienes.
Legislado en el Art. 577º, 579º y 581º, que tratan el tema de la administración de los bienes
cedidos, el referido hace hincapié en que los bienes cedidos incumbe a los administradores
cesionarios, los cuales podrán ejercer toda acción pertinente de carácter patrimonial relativa
a dichos bienes.
El deudor no podrá disponer de los bienes que cedió, aunque tiene el derecho de verificar
la gestión de sus acreedores cesionarios, obteniendo de ellos la rendición de cuentas al final
de la liquidación, o al fin de cada año, si la gestión dura más de un año. Si se nombró a un
liquidador para tal efecto, el mismo habrá de rendir cuentas al deudor cedente.
Acreedores anteriores a la cesión que no participaron en ella.
Sobre el referido el Art. 578º legisla que aquellos acreedores anteriores a la cesión que no
han acudido a participar de la misma, pueden accionar ejecutivamente sobre los bienes que
fueron cedidos para su liquidación.
Limitaciones a los derechos de los acreedores cesionarios.
Siguiendo los pasos del punto anterior, el mismo Art. 578º limita en su desarrollo los
derechos que los acreedores cesionarios tiene sobre la cosa, según si la cesión ha tenido
como fin solo alguno de los bienes de deudor. En tal caso, estos no podrán accionar
ejecutivamente sobre otros bienes sin antes haber liquidado los ya cedidos.
Una vez repartidas las sumas de dinero obtenidas en proporción a los respectivos créditos,
el saldo deberá ser entregado al deudor, quedando desde ahí liberado de la obligación.
Efectos de la cesión. Crítica a la metodología del Código Civil.
Uno de los efectos más que fundamentales y de los que persigue la cesión de bienes a los
acreedores es que, respecto a los acreedores el deudor queda liberado, toda vez que estos
reciban la parte que le corresponde en el producto de la liquidación y dentro de los límites
de lo que han recibido, salvo pacto en contrario.
Crítica a la metodología del Código Civil.
El pago por cesión de bienes a los acreedores no puede ser considerado como un modo que
produce la extinción de las deudas, debiéndose de considerar si, como un contrato, con la
particularidad de que este contrato no tiene la virtualidad de producir la extinción de las
obligaciones, por lo cual el lugar que debería de corresponderle sería el Libro III de nuestro
Código Civil, denominado “De los contratos y otras Fuentes de las Obligaciones”.
El pago por compensación.
La compensación. Concepto. Importancia.
Siguiendo la definición que hace de ella nuestro Código Civil, en su Art. 615º podemos
conceptuarla como “un modo especial de extinción de las obligaciones recíprocas de
naturaleza fungible que dispensa mutuamente a los deudores del cumplimiento efectivo
hasta la concurrencia de la menor de ellas”.
Así, si dos sujetos se adeudan recíprocamente prestaciones fungibles, no habrá necesidad
que cada una de ellas pague a la otra lo que le debe. Sería más sencillo liberar a ambas
hasta la concurrencia de la menor de las obligaciones, de modo que solo el excedente de la
mayor pueda ser objeto de efectivo cumplimiento. Ejemplo: Pedro debe la suma de
1.000.000 Gs. a Juana y este a su vez le debe a Pedro la suma de 500.000 Gs. El pago por
compensación se dará cuando Juana condone a Pedro la mitad de la deuda que este había
contraído con ella (500.000 Gs), puesto que es la misma suma líquida que ella le adeuda a
Pedro, quedando desde ahí en más exigible saldo de la deuda que Pedro tiene con Juana,
liquidándose la que Juana debía a Pedro.
Importancia.
La compensación juega un rol de considerable importancia al evitar que los traslados
numerarios y de remesas de dinero, que suponen retardo, gastos e incluso riesgos
considerables.
La aplicación principal de la institución tiene lugar en el mundo de los negocios de la
banca, donde funcionan las ya famosas cámaras compensadoras, organizadas sobre el
modelo de la CleaningHouse de Londres, Inglaterra. Allí, los banqueros detentadores de
toda clase de efectos de comercio, lo equilibran entre sí, sin el desplazamiento de
numerario.
En Economía Política Internacional, los movimientos de oro y plata destinados a pagos son
raros y reducidos, pues los intercambios entre Estados se gobiernan en una amplísima
medida por compensación.
Requisitos de la compensación legal.
La compensación legal admite tres variedades, que son:
1º) Legal: opera ministerio legis.
2º) Convencional: Se produce como resultado del acuerdo de partes.
3º) Judicial: Es declarada en juicio por el Juez.
Para que la compensación pueda darse de pleno derecho, nuestro ordenamiento jurídico
exige los siguientes requisitos:
a) Reciprocidad de obligaciones: al menos dos personas que reúnan mutuamente las
calidades de acreedor y deudor simultáneamente.
b) Fungibilidad de las prestaciones: prestaciones que sean homogéneas o de la misma
especie.
c) Liquidez de las obligaciones: se requiere que ambas prestaciones estén determinadas.
d) Exigibilidad de las mismas: así, una obligación civil no podría compensarse con una
obligación natural, porque esta última carece de acción.
e) De plazo vencido: la obligación no es exigible mientras no hubiere vencido el plazo.
f) Si fuesen condicionales: que se halle cumplida la condición.
g) Que sean civilmente subsistentes: es decir que no esté extinguida por prescripción, que
proceda de un acto jurídico revestido por las solemnidades de la ley para que produzca
efectos legales, que haya sido reconocida en juicio y que derive de una convención no
prohibida por la ley.
Obligaciones que pueden compensarse.
Nuestro Código Civil establece en forma taxativa en su Art. 681º los casos en que se
pueden admitir el pago por compensación.

1º) De las pagaderas en distintos sitios; siempre que se computen los gastos de transporte o
la diferencia de cambio al lugar de pago.
2º) En caso de concurso del deudor, de las que tuviesen sus acreedores con los créditos de
aquel, aunque ni uno ni otro fuesen exigibles al dictarse el acto declaratorio.
3º) Aunque se trataren de créditos o deudas ulteriores a la declaración del concurso, cuando
el deudor obtuvo el crédito después del acto declaratorio como subrogación legal, como co-
obligado, garante o tercero poseedor de bienes hipotecado o en virtud de actos anteriores
cumplidos de buena fe.
4º) La obligación derivada de la fianza con aquello que el acreedor adeude al fiador o con el
crédito que contra el mismo acreedor corresponda al deudor principal.
Efectos.
Hecha la compensación, ella extingue con fuerza de pago las dos deudas, hasta donde
alcance la menor de ellas, desde el tiempo en que ambas comenzaron a coexistir.
En nuestro derecho, para que opere la compensación no es necesario el acuerdo de partes,
pues se produce de pleno derecho.
Ahora bien, ello no significa que el Juez pueda declararla de oficio. Es necesario que ella
sea invocada como defensa por la parte a quien favorece.
BOLILLA 22 MODOS
La novación.
Concepto. Relación con la compensación.
La novación es la transformación de una obligación por otra.
Esta produce la extinción de una obligación por la creación de una nueva, destinada a
reemplazarla. La misma, debe diferir de la anterior por algún elemento nuevo, ya sean los
sujetos, el objeto o la causa. Si no hubiere elemento nuevo la primitiva obligación seguirá
subsistiendo.
Relación con la compensación.
Cuando dos personas se adeudan recíprocamente prestaciones fungibles no es
imprescindible para la extinción de las obligaciones que cada una de ellas pague a la otra lo
que le debe. Más sencillo resulta considerar liberadas a ambas hasta la concurrencia de la
menor de ambas obligaciones, de modo de que el excedente de la mayor pueda ser objeto
de efectivo cumplimiento.
Puede, pues, definirse la compensación como: “un modo especial de extinción de las
obligaciones recíprocas de naturaleza fungible que dispensa mutuamente a los deudores del
cumplimiento efectivo hasta la concurrencia de la menor de ellas”.33
La delegación es entonces una forma que está estrictamente vinculada con la novación y a
menudo tiende a confundirse con esta.
Propiamente en la delegación, el deudor de una obligación propone a un tercero hacerse
cargo de su deuda frente a su acreedor. Si el acreedor recibe como deudor al tercero, pero
no libera al primitivo deudor, estamos ante una novación imperfecta o acumulativa, pues en
lo sucesivo, existirían dos deudores: el delegante y el delegado. Aquí vemos entonces que el
deudor primitivo no queda liberado de sus obligaciones; si en cambio el acreedor recibe
como deudor al tercero y libera al deudor primitivo, habrá una delegación perfecta y aquí,
por haber habido un cambio en uno de los sujetos de la relación será constitutiva de
novación. En tal sentido se expresa el Art. 607° del Código Civil Paraguayo.
No obstante, está estrecha vinculación, la novación seguirá siendo el único modo de
sustituir y otros elementos substanciales de la obligación como el objeto y la causa.
Elementos.
Se requiere para que exista una novación:
1. Una obligación a extinguir: Toda novación supone una obligación válida que le sirve de
causa jurídica o fuente. Si no existiera la misma, la novación habría de carecer de sentido y
sustento jurídico, ya que el acto realizado equivaldría a un pago o a la asunción o al
reconocimiento de una obligación.
2. Una obligación nueva a ser creada: El acto moratorio vinculado a la primitiva obligación,
se extingue con la nueva, que nace. Para su constitución requiere que exista un cambio en
algunos de sus elementos substanciales, ya sea la sustitución de uno de los sujetos de la
obligación, un cambio de objeto o en la causa, es decir, en su fuente jurídica.

33
El libramiento de un documento o su renovación, la eliminación o adición de un vocablo, o
cualquier otra modificación accesoria como las relacionadas con el timepo, lugar o modo de
cumplimiento solo modifican la obligación, pero no la extinguen.34
3. Voluntad de novar: la intención de novar debe manifestarse pues ella no se presume.35
4. Capacidad para la realización: al igual que cualquier acto jurídico la novación requiere
que los sujetos sean capaces para otorgar el acto. La capacidad necesaria es la requerida
para contratar, porque el deudor al contraer una nueva obligación debe ser capaz de
obligarse y el acreedor capaz de acto de disposición, puesto que extingue un derecho. No es
suficiente que el deudor tenga capacidad para efectuar pagos y el acreedor para recibirlos.
Efectos.
El efecto de la novación es doble, porque por un lado extingue un crédito y por el otro hace
nacer otro, en un solo acto.
La novación extingue no solo la obligación principal sino también las accesorias contraídas
para asegurar su cumplimiento.
Si la novación se efectúa entre el acreedor y uno de los deudores solidarios con efecto
liberatorio para todos, los privilegios y garantías reales del crédito anterior pueden
reservarse solamente sobre bienes del deudor, quien es el que celebra la novación.
Si al realizar el acuerdo entre el acreedor primitivo y el que lo sustituye fuere hecho sin
asentimiento del deudor estaremos ante una cesión de derechos, si por el contrario, el
contrato fue hecho con asentimiento del deudor, habrá entonces novación.36
La transacción.
Concepto. Metodología del Código Civil.
“La transacción es el contrato en virtud del cual las partes haciéndose concesiones
recíprocas extinguen obligaciones litigiosas o previenen litigios. Por medio de ella se
pueden crear, modificar o entinguir además relaciones jurídicas, diversas de las que fueron
objeto de litigio o motivo de controversia.”

Metodología del Código Civil.


El Código Civil Argentino de Dalmacio Vélez Sarsfield no consideraba a la transacción
como un contrato, por una razón muy simple: el contrato es solo fuente de obligaciones y
no un instrumento capaz de extinguir obligaciones.
Nuestro Código lo considera como un modo de extinguir las obligaciones, regulándolo en
el Libro II, como contrato nominado.
Efectos.
La transacción produce una extinción de las obligaciones y derechos en cuestión y da lugar
a una excepción perentoria que impide en adelante todo debate sobre la cuestión.
De ahí que se puede afirmar que la transacción reviste los caracteres de la cosa juzgada, en
este sentido, el Art. 150° de Código Civil Paraguayo, explica que la transacción extingue
los derechos y las obligaciones que las partes hubieren renunciado y tiene para ellas y sus
sucesores la misma autoridad de la cosa juzgada.
La nulidad o anulación de cualquier cláusula de una transacción deja sin efecto el contrato
pues ellas son indivisibles.
Las partes podrán demandar la rectificación, cuando la transacción recaiga sobre una cuenta
litigiosa en donde ha habido un error o cuando se hubiese entregado la parte determinada
de una suma en la cual había un error aritmético de cálculo.
La transacción puede ser anulable:
a) Cuando hubiere tenido por objeto, un título nulo o subsanar derechos constituídos en
virtud del mismo, conocieren o no las partes tal nulidad o si lo creyeren válido por error de
hecho o de derecho. Sin embargo la transacción será válida si expresamente se hubiese
tratado sobre la nulidad del título.
b) Si por documentos de que no se tuvo noticia al tiempo de celebrarla resultare que una de
las partes no tenía derecho sobre el objeto litigioso.
Cuando la transacción versare sobre un pleito ya fallado por sentencia firme, si la parte que
pretendiese anularla hubiere ignorado el fallo.
34
35
36
Si en la transacción entre el acreedor alguna cosa como propia y luego el poseedor fuese
vencido en juicio, la parte que transfirió deberá indemnizar a la otra, pero la evicción no
revivirá la obligación extinguida.
La transacción entre el acreedor y el deudor puede ser invocada por el fiador que
expresamente se hubiese obligado a pagar, previa excusión del deudor principal y puede ser
opuesta al fiador solidario que se hubiese obligado sin esta limitación.
BOLILLA 23 MODOS
CONFUSIÓN
Concepto. Efectos.
“La confusión es uno de los modos de extinción de las obligaciones que se da cuando se
reúnen en una misma persona la calidad de acreedor y deudor”.
Se discute si la confusión constituye propiamente un modo de extinción, pues la ley
dispone que si las circunstancias que dan lugar a la confusión desaparecen, la obligación
primitiva se ve reactivada con todos sus accesorios.
Así la confusión puede derivarse de una transmisión de derechos a título universal y a título
singular. El primer caso se da cuando el deudor de una persona resulta luego su heredero, y
el segundo caso cuando el que es deudor de una firma comercial viene a convertirse en
propietario de ella.
La remisión de deuda.
Concepto. Elementos.
La remisión de la deuda es el acto por el cual una persona voluntariamente abandona,
abdica o desiste de un derecho de crédito que tiene contra un deudor en forma gratuita.
Esta puede a su vez, se de forma expresa, o sea por escritura pública, o tácita, con la entrega
de documentos.
La entrega del documento original que justifica el crédito realizado voluntariamente por el
acreedor al deudor, constituye prueba de liberación. La posesión del título por el obligado
hace presumir que el acreedor se lo entregó voluntariamente.
Elementos.
1.- Capacidad de quien la otorga: siendo la remisión un acto gratuito requiere la plena
capacidad jurídica, dado que se trata de un acto que significa un empobrecimiento del
patrimonio del acreedor sin contraprestación.
2.- Una voluntad libre de vicios: al igual que todo acto jurídico, supone una voluntad libre
de vicios que la invaliden.
3.- Objeto lícito: en principio cualquier clase de crédito puede ser objeto de remisión
siempre que no esté comprometido el orden público. Así no será posible que fuera objeto de
remisión una pensión de alimentos.
4.- Una forma jurídica: La remisión no está sujeta a forma alguna, salvo que el crédito o sus
derechos accesorios consten en escritura pública. En este caso para que la remisión pueda
ser opuesta al tercero, deberá hacerse en la misma forma e inscribirse en el Registro Público
correspondiente.
Deudores solidarios. Fiadores. Restitución de la cosa entregada con prenda.
1º) La remisión extingue la obligación y si es aceptada por el deudor será irrevocable.
2º) La remisión hecha al deudor principal libera a los fiadores, pero la concedida a éstos no
libera a aquel.
3º) La remisión a uno de los fiadores no libera a los otros más que en cuanto a la parte del
fiador liberado, pero si los fiadores han consentido la liberación, quedan ellos obligados por
la totalidad. Aquí hay una obligación simplemente mancomunada, pero al aceptar los demás
fiadores la liberación, quedarán obligados por el todo, o sea, la obligación así se vuelve
solidaria.
Restitución de la cosa entregada con prenda.
“La renuncia del acreedor a las garantías de la obligación no hace presumir la remisión de
la deuda.”
Imposibilidad de pago.
Concepto.
La obligación puede tornarse por circunstancias posteriores a su constitución, imposible de
cumplir. Esta imposibilidad sobreviniente puede ser resultado de la culpa del deudor, o de
un hecho realmente extraño a la concepción de su entorno, como los que son denominados
de fuerza mayor o caso fortuito.
Diversas situaciones de imposibilidad.
El obstáculo que hace imposible la ejecución de una obligación varía según la naturaleza
del objeto debido. Así pues, puede llegar a tratarse de una obligación de dar cosas ciertas,
de género, de hacer o de otra especie.
Obligaciones de dar cosas ciertas.
La imposibilidad puede resultar en este tipo de relaciones, de la pérdida, destrucción o
extravío del objeto o del hecho de haber sido puesto fuera del comercio. Su entrega se hace
así imposible sin culpa del deudor y la obligación se concluye.
Obligaciones de género.
En tal supuesto, la imposibilidad es menos fácil de concebir, ya que es máxima del derecho
que el género nunca perece. No obstante, es posible admitir que se hubiese prometido una
animal o planta de una especie que luego se extinguiera.
A pesar de tal motivo, nuestro Código Civil establece que en este tipo de obligaciones el
pago nunca se juzgará imposible37. Obviamente la disposición no resulta en nada acertada,
dado que cada día existe un mayor número de especies, que van extinguiéndose dentro de la
naturaleza. Aquí la obligación se resolverá en indemnización de pérdidas.
Obligaciones de hacer.
En este tipo de obligaciones la muerte o la incapacidad de la persona obligada (si la
obligación hubiera sido constituida intuitaepersonae), daría lugar al caso de imposibilidad
que extingue la obligación.
Si la imposibilidad es meramente temporal, el deudor, en tanto ella subsista, no es
responsable del retardo de su cumplimiento. Pero si ella perdura hasta el punto de que el
deudor no puede ser considerado obligado a cumplirlo o el acreedor no tenga ya interés en
conseguirla, la obligación se extinguirá
Si la prestación se ha hecho imposible solo en parte, el deudor se libera ejecutando la
prestación en la parte que sigue siendo posible de cumplimiento.

BOLILLA 24
MODOS PRESCRIPCIÓN LIBERATORIA
El derecho que la ley reconoce al acreedor para obtener del deudor una prestación o
derecho creditorio es una facultad destinada a tener una vigencia en el tiempo. Este derecho
no está destinado a durar o extenderse indefinidamente
NATURALEZA TEMPORAL DEL DERECHO DE CREDITO
Cuando ha transcurrido un tiempo que la ley considera como prudente y el acreedor deja de
accionar o ejercer las facultades que le son conferidas por el derecho. La prescripción
liberatoria es entonces un modo de extinción de las obligaciones. Su fundamento se
encuentra en el interés social de mantener y conservar las situaciones que se suponen, luego
de un tiempo, definitivamente establecidas. En el interés de preservación de un cierto orden
constituido y que tiende a consolidarse
ELEMENTOS: la prescripción supone la presencia de dos elementos: inacción del titular y
transcurso del tiempo. La prescripción liberatoria supone la inacción del acreedor desde el
momento en que la obligación se hace exigible. Necesario a su vez, es que la inacción se
prolongue durante un lapso de tiempo establecido en la ley.
SUSPENSIÓN DE LA PRESCRIPCIÓN: la prescripción se suspende cuando en virtud
de una causa legal, el término deja de correr, pero cesada la causa legal de suspensión, el
plazo se reanuda, computándose el tiempo anteriormente transcurrido. La suspensión del
plazo de prescripción procede de la misma ley, que establece las causas de la misma. La
suspensión se produce: entre cónyuges, aunque estén separados por mutuo acuerdo o
judicialmente, cualquiera sea el régimen patrimonial por el que hubiesen optado, entre
quienes ejercen la patria potestad y las personas sometidas a ella, entre tutor y el menor o
interdicto sujeto a tutela o curatela, mientras no se haya aprobado la cuenta final, respecto
del heredero que ha aceptado la herencia bajo beneficio de inventario con relación a sus
créditos contra la sucesión. Entre las personas jurídicas y sus administradores, mientras
estén en el cargo, por las acciones de responsabilidad contra ellos. Entre el deudor que ha
37
ocultado dolosamente la existencia de la deuda y el acreedor mientras el dolo no haya sido
descubierto, a favor de los ausentes del país en servicio público y los que estuvieren
sirviendo en las fuerzas armadas.
INTERRUPCIÓN DE LA PRESCRIPCIÓN
La interrupción de la prescripción consiste en la pérdida de tiempo transcurrido para que
ella se produzca, por el advenimiento de un hecho que lo hace desaparecer. Este hecho
generalmente es un acto del acreedor que connota un reclamo al deudor o un acto de éste
que reconoce la existencia de la obligación.
HECHOS INTERRUPTIVOS DE LA PRESCRIPCIÓN
La interrupción se produce por intimación de pago, demanda judicial, cualquier acto del
deudor reconociendo la deuda
La demanda notificada al deudor aunque fuere ante juez incompetente tiene la virtud de
interrumpir la prescripción. La presentación del título de crédito en juicio sucesorio o de
convocación de acreedores produce el efecto de interrumpir la prescripción. El compromiso
por el cual las partes se someten a un juicio arbitral la cuestión de la obligación, por
escritura pública, interrumpe la prescripción
PERSONAS A QUIENES APROVECHA
La interrupción de la prescripción, en el caso de demanda judicial y con mayor razón aún
en el caso de presentación de títulos, no beneficia sino al que la lleva a cabo y a sus
causahabientes
EFECTOS: el efecto de la interrupción es hacer desaparecer el tiempo de inacción
anteriormente transcurrido. Lo que significa que si la prescripción volviera a correr de
nuevo no se computaría el lapso a ningún efecto
PLAZOS DE PRESCRIPCIÓN: prescriben por diez años: las acciones de los incapaces
contra sus representantes, la derivada del derecho reconocido por sentencia firme, la acción
de petición de herencia, la acción de colación de herencia, y todas las acciones personales
que no tengan fijado otro plazo en la ley. Prescriben por cinco años los atrasos de pensiones
alimentarias, el precio de los arrendamientos o alquileres, los derechos que derivan de la
relación entre socios y de éstos con la sociedad, la responsabilidad de los administradores.
Prescriben por cuatro años las acciones de los herederos para reclamar la disminución de la
parte asignada a uno de ellos cuando éste hubiere recibido un exceso respecto de la porción
disponible. La de reducción conferida a los herederos contra terceros, para salvaguardar la
legítima y los provenientes de cualquier instrumento endosable o al portador. Prescriben
por tres años las acciones derivadas del contrato de cuenta corriente, acciones entre
comerciantes y las acciones de indignidad y desheredación. Por dos años: las acciones para
obtener la nulidad de los actos jurídicos por error, dolo o violencia o intimidación, la acción
revocatoria de los acreedores en caso de fraude, la acción de reclamación de pago de
honorarios profesionales, la responsabilidad civil derivada de actos ilícitos, etc. Por un año:
los gastos debidos a hoteleros, pensiones, sanatorios y establecimientos análogos por la
comida y alojamiento, lo correspondiente a los institutos de enseñanza, acciones de
rematadores, comisionistas y corredores, etc.
RENUNCIA A LA PRESCRIPCIÓ: Art.640.- No puede renunciarse una prescripción
futura, ni convenirse un plazo distinto del legal. Puede renunciarse una prescripción ya
cumplida. La renuncia puede ser expresa o tácita. Los acreedores de los que renunciaron
pueden oponer la prescripción
CADUCIDAD: consiste en la pérdida de un derecho como consecuencia de la inacción del
titular durante el término fijado por la ley. La caducidad afecta el derecho mismo.-
DIFERENCIA ENTRE CADUCIDAD Y PRESCRIPCIÓN. CADUCIDAD: La
caducidad afecta el derecho mismo.
LA PRESCRIPCIÓN extingue la acción, pero la obligación permanece como natural.-
La caducidad suele resultar de actos positivos del titular del derecho.-
La prescripción resulta siempre y exclusivamente del transcurso del tiempo. El termino
caducidad puede ser fijado también por contrato o por disposición de última voluntad; El
termino de prescripción resulta siempre de la ley.
La caducidad es irrenunciable y puede y debe ser aplicada de oficio en el problema juega
un interés de orden público.- La prescripción puede ser renunciada y debe ser alegada
por la parte interesada La caducidad no se suspende por incapacidad del titular ni entre los
esposos.- En la prescripción si, La caducidad tiene por objeto consolidad ciertos derechos o
situaciones legales que la ley está interesada en amparar.- ; En las prescripción se busca
poner en orden las relaciones jurídicas del deudor para con el acreedor.- Art.633.- Todo
aquél que estuviere obligado al cumplimiento de un hecho o a abstenerse de él, podrá
eximirse de su obligación fundado en transcurso del tiempo, conforme con las
disposiciones de éste Código. No estarán sometidos a prescripción extintiva los derechos
derivados de las relaciones de familia. Art.635.- La prescripción empieza a correr desde el
momento en que nace el derecho de exigir. Si éste tiene por objeto una comisión, la
prescripción comienza desde que se ha efectuado un acto contrario.
LA CADUCIDAD DE LA INSTANCIA: PLAZO: se operara la caducidad de la instancia
en toda clase de juicios, cuando no se instare su curso dentro del plazo de 6 meses. Dicho
plazo será el fijado por las leyes generales para la prescripción de la acción, si éste fuere
menor.- El impulso del procedimiento por uno de los litisconsortes beneficiará a los
restantes.-
BOLILLA 25
NECESIDAD LÓGICA Y JURÍDICA DE LA EXISTENCIA DE UNA FUENTE DE
OBLIGACIÓN
TEORÍA GENERAL DE LAS FUENTES estudiar las fuentes de las obligaciones es
explicar porque y de que modo una persona queda sometida al deber de tener que efectuar a
favor de otra una prestación, cualquiera sea ella. La existencia de una obligación supone
necesariamente un hecho antecedente que le sirve de fundamento y sustentáculo jurídico.
Toda obligación exige jurídicamente hablando la existencia de una fuente que explique el
porque de la deuda.
EVOLUCIÓN HISTÓRICA en un primer momento en Roma se reconoció solo dos
fuentes de obligaciones: el delito y el contrato. Luego Gayo amplia esta clasificación
bipartita y la convierte en tripartita: delito, contratos u otras figuras. En el digesto de
Justiniano: las fuentes son llevadas a cuatro, delitos cuasidelitos contratos y cuasicontratos.
CLASIFICACIÓN MODERNA quintuple clasificación: ley, contrato, cuasicontrato,
delito y cuasidelito
CONTRATO
CONCEPTO IMPORTANCIA ELEMENTOS habrá contrato cuando dos o más personas
convengan entre sí una obligación o modifiquen otra existencia. Los elementos que
conforman el contrato son de tres clases: esenciales sin los cuales no se concibe la
existencia de contratos. Naturales, y accidentales. Los esenciales son: capacidad de los
otorgantes, consentimiento, objeto cierto, causa licita, forma exigida por la ley
CLASIFICACIÓN formales y no formales, unilaterales bilaterales plurilaterales,
consensuales y reales, típicos y atípicos
EFECTOS sus efectos son la obligatoriedad, la relatividad. La obligatoriedad “las
convenciones hechas en los contratos forman para las partes una regla a la cual deben
atenerse como a la ley misma y deben ser cumplidas de buena fe.” El contrato es relativo
solo obliga a las partes que concurrieron a su formación. Los efectos particulares son: la
excepto de non adimpleticontractus o defensa de incumplimiento, determina que en los
contratos bilaterales una de las partes no podrá demandar su cumplimiento si no probare
ella haber cumplido o no ofreciere cumplirlo, a menos que la otra parte debiera efectuar
antes su prestación. El pacto comisorio legal según el cual la parte cumplidora de un
contrato que se encontrare ante el incumplimiento de la otra podrá optar entre pedir la
ejecución del contrato o su rescisión. La señal o arras es una indemnización convencional
tendiente a resarcir los daños sufridos por la contraria
EXTINCIÓN DE LOS CONTRATOS por revocación: se produce por voluntad de una
parte en ciertos tipos de contratos en los que existe especial confianza de una parte hacia la
otra, ejemplo el mandato. Rescisión tiene lugar cuando una de las partes de común acuerdo
resuelve disolver el contrato. Resolución se da cuando el contrato es disuelto por un
acontecimiento diferente a la voluntad de las partes.
LA VOLUNTAD UNILATERAL COMO FUENTE EN NUESTRO CÓDIGO CIVIL
IMPORTANCIA DE ESTA FUENTE la voluntad unilateral produce efectos jurídicos en
los casos admitidos en la ley. La voluntad unilateral es el poder de la sola voluntad de la
persona del deudor para crearse obligaciones a su cargo perfectamente válidas y exigibles,
antes de la concurrencia de la voluntad del acreedor, y cuyo apartamiento le impone
responsabilidad por los perjuicios ocasionados.
DEFECTUOSA METODOLOGÍA DEL CÓDIGO CIVIL:
LOS SUPUESTOS DE VOLUNTAD UNILATERAL:
LA PROMESA DE RECOMPENSA la promesa de pago o reconocimiento de deuda,
exime a aquien a favor de quien se la otorgue de probar la relación fundamental
LA OFERTA AL PÚBLICO el que dirige al público, y promete una prestación a favor de
quien se encuentre en una determinada situación o lleve a cabo una determinada acción
queda vinculado por la promesa tan pronto como ésta se hace pública, aun a favor de quien
procediere sin interés por la recompensa. Si no se pone un plazo a la promesa, o si éste no
resulta de su naturaleza o finalidad, el vínculo del prometiente cesa cuando dentro del año
desde la publicación de la promesa no se haya comunicado la existencia de la situación o el
cumplimiento de la acción prevista en la promesa. La promesa no puede ser revocada antes
del vencimiento del plazo indicado sino por justa causa
LOS TÍTULOS DE CRÉDITO son promesas unilaterales, obliga según el contenido del
título que puede ser cheque, pagaré, letra de cambio.

BOLILLA 26 FUENTES NO VOLUNTARIAS


LOS DAÑOS NO RESARCIBLES el responsable es aquel que debe hacerse cargo de la
situación cualquiera.
EL TEMA DE RESARCIMIENTO POR DAÑOS CAUSADOS
Cualquiera que causa un daño debe responder tanto civil como penalmente
EVOLUCIÓN DEL SISTEMA DE EXCLUSIÓN DE RESPONSABILIDAD: en Roma
se respondía al principio con el propio cuerpo, es decir el deudor quedaba atado a su
acreedor con su propia persona, esto cambio con la lexpoeteliapapiria donde el patrimonio
de convirtió en prenda común de los acreedores. La materia de responsabilidad civil en
nuestro código civil se halla en el libro III “de los contratos y otras fuentes de
obligaciones”. El que comete un acto ilícito queda obligado a resarcir el daño. Si no
mediare culpa se debe igual indemnización en los casos previstos por la ley, directa o
indirectamente. Los elementos de la responsabilidad civil son: producción de un daño o de
un hecho exterior susceptible de ocasionarlo, antijuridicidad, imputabilidad, relación de
causalidad
PRESUPUESTOS DE RESPONSABILIDAD
EL DAÑO, ESTIMACIÓN Y LIQUIDACIÓN DEL DAÑO el daño emergente es el
causado. Los daños que se causan al objeto en sí, y el lucro cesante son los daños
consiguientes. En cuanto a la estimación del daño se debe tener en cuenta las consecuencias
mediatas, inmediatas y causales, el código dispone que se indemnizarán todas las
consecuencias inmediatas, mediatas previsibles o las normales según el curso ordinario de
las cosas, pero no las causales, salvo que éstas deriven de un delito y debieran resultar
según las miras que el agente tuvo al ejecutar el hecho. En cuanto a la forma de
resarcimiento del daño el código prevé el principio de reparación en especie.
IMPUTABILIDAD DEL AGENTE. CULPA O DOLO actúa con dolo el que emplea la
maquinación para realizar un daño y con culpa el que actúa con imprudencia, impericia o
negligencia.
RELACIÓN CAUSAL para que se haga paso al derecho de obtener reparación del daño,
debe haber un nexo entre el autor, la acción u omisión y los daños acaecidos, caso
contrario, no hay derecho a reparación
ANTIJURIDICIDAD solo los actos que contraríen las leyes dan paso a reparación, no así
los lícitos.
RELACIONES ENTRE ACCIÓN CIVIL Y PENAL UNIFICACIÓN DE LA
MATERIA DE RESPONSABILIDAD POR DAÑOS la acción civil y la penal son
independientes en su ejercicio la una de la otra. El fallo en sede civil anterior al fallo en
sede penal conservará todos sus efectos cualquiera sea la sentencia en el proceso pena. Si la
acción penal hubiese precedido a la civil o fuese intentada pendiente el juicio civil, no se
dictará sentencia en éste, mientras no hubiere sentencia en el proceso penal; corresponde el
ejercicio de la acción civil a la víctima y a sus herederos
BOLILLA 27 FUENTES NO VOLUNTARIAS
EL ENRIQUECIMIENTO SIN CAUSA. Cuando se produce el aumento de un
patrimonio en detrimento de otro, sin causa justificada, se habla de un enriquecimiento sin
causa.-
ANTECEDENTES el patrimonio de las personas tanto naturales como jurídicas se halla en
constante y perpetuo movimiento, ellos se ensanchan o se restringen por el curso normal de
situaciones diarias de la vida. Ello es regular y normal. Este movimiento tiene siempre una
causa. Cuando este antecedentes falta y uno de los dos patrimonios se empobrece a costa
del otro, sin causa justificada, estamos en presencia de un enriquecimiento ilegítimo. La
teoría del enriquecimiento se ha abierto paso en el derecho moderno. Su origen lo
encontramos en el derecho romano.
LA FIGURA EN EL CÓDIGO CIVIL: legisla en los artículos 1817 y 1818, el que se
enriquece sin causa en daño de otro está obligado en la medida de su enriquecimiento a
indemnizar al perjudicado la correlativa disminución de su patrimonio. Cuando el
enriquecimiento consistiere en la adquisición de una cosa cierta, corresponderá la
restitución en especie, si existiere al tiempo de la demanda
LA ACCIÓN POR ENRIQUECIMIENTO SIN CAUSA la acción de enriquecimiento no
procederá si el perjudicado puede ejercer otra para resarcirse del daño sufrido.
REQUISITOS:
1- ENRIQUECIMIENTO DEL DEMANDADO. Consiste en una ventaja de carácter
pecuniario que se incorpora al patrimonio de una persona.-
2- EMPOBRECIMIENTO DEL DEMANDADO: el segundo requisito de la acción es el
empobrecimiento del demandante por existir una disminución efectiva de su patrimonio
3- Relación de causalidad entre el enriquecimiento y el empobrecimiento. Debe existir
un nexo adecuado de causa a efecto el enriquecimiento y el empobrecimiento, es decir que
uno haya sido la causa del otro.-
EFECTO: Art.1817.- El que se enriquece sin causa en daño de otro está obligado, en la
medida de su enriquecimiento, a indemnizar al perjudicado la correlativa disminución de su
patrimonio. Cuando el enriquecimiento consiste en la adquisición de una cosa cierta,
corresponderá la restitución en especie, si existe al tiempo de la demanda.
LIMITES DE ACCIÓN Art.1818.- La acción de enriquecimiento no será viable si el
perjudicado puede ejercer otra para resarcirse del daño sufrido.
LA GESTIÓN DE NEGOCIOS AJENOS CONCEPTO la gestión no connota un
concierto de voluntades, ella contempla la hipótesis en que alguien se inmiscuya en
negocios ajenos, no mediando mandato expreso ni tácito. Los efectos de la gestión de
negocios con relación al gestor son los mismos que del mandato
ELEMENTOS EFECTOS el gestor debe contar con la capacidad necesaria para contratar.
El dominus puede ser incapaz. La gestión llevada a cabo por quien resulta gestor debe
versar sobre negocio que no le pertenezca, es decir, que sea de otra persona. La gestión
debe ser emprendida con ánimo de obligar al dominus. En caso contrario, se trataría de una
liberalidad. El negocio debe preexistir a la gstión. El gestor queda obligado a las
obligaciones inherentes al mandato
OBLIGACIONES DEL GESTOR el gestor debe comunicar al dueño del negocio la
gestión que asumió, aguardando respuesta para continuarla, siempre que la demora no sea
perjudicial. Responde toda culpa en el ejercicio de la gestión. Responde aun del caso
fortuito, si ha llevado a cabo obligaciones arriesgadas. Si el gestor contrata con terceros
responde directamente ante ellos, salvo ratificación del Dominus. El gestor debe culminar
los negocios. Responde por los daños.

OBLIGACIONES DEL DOMINUS el Dominusestá obligado al reembolso de todos los


gastos del gestor, gastos necesarios y útiles, no así los suntuarios. El Dominus debe cumplir
todas las obligaciones asumidas por el gestor en su nombre. Podría eventualmente estar
obligado a una módica retribución al gestor establecida por el juez.
LEY COMO FUENTE DE LAS OBLIGACIONES es la fuente de toda obligación. Es
toda norma jurídica escrita dictada por autoridad competente, conforme al ordenamiento
legal, para regir la vida en sociedad, con el fin de llegar al bien común y a la justicia “las
convenciones hechas en los contratos, forman para las partes como una ley y deben ser
cumplidas de buena fe”....

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