Control de Calidad
Control de Calidad
Control de Calidad
El control de calidad tiene como objetivo principal, brindar satisfacción máxima a los
consumidores, lo que facilita el conseguir los objetivos de la empresa, es por eso que
generalmente suele ser aplicado en las diferentes áreas y procesos de la empresa. Para
que dicho control sea aplicado de forma correcta, primero se hace un estudio de mercado
donde se obtenga la información de los estándares requeridos por el mismo, a partir de
esos datos se pueden establecer los diferentes controles que van a estar al pendiente de
cada proceso y producto, desde sus fases iniciales hasta el momento de su distribución.
Para poder aumentar los niveles de calidad de los diferentes mercados es necesario seguir
una serie de pasos.
Mejora de la calidad
El proceso para mejorar el nivel de rendimiento.
Pasos
Año Acontecimiento
1911 Se publica el trabajo de Frederick Winslow Taylor sobre medición del trabajo4.
Walter A. Shewhart publica el control estadístico de procesos (SPC) donde se trata el control de
1931 procesos mediante gráficos o cartas de contro (aún en uso actualmente) y otros métodos
estadísticos de la mayor parte de los temas que se han tratado en este escrito.
1979 Philip Crosby publica su teoría de cero defectos, las 5S y sus 14 pasos.
William Edwards Deming desarrolla las ideas de Shewhart mediante el concepto de Calidad Total
1986
de Procesos y Kaizen.
1985 Joseph M. Juran desarrolla los conceptos de trilogía de la calidad y de costos de calidad.
1988 Shigeru Misuno desarrolla el control de calidad a todo lo ancho de la compañía (CWQC).
1990 Administración por Calidad Total (TQM); uso de herramientas avanzadas como Seis Sigma.
Introducción
La calidad es el factor básico de decisión del cliente para un número de productos y servicios que hoy
crece en forma explosiva.
La calidad ha llegado a ser la fuerza más importante y única que lleva al éxito organizacional y al
crecimiento de la compañía en mercados nacionales e internacionales. Los rendimientos de programas de
calidad, fuertes y eficientes, están generando excelentes resultados de utilidades
en empresas conestrategias de calidad eficientes. Esto está demostrado por los importantes aumentos en
la penetración del mercado, por mejoras importantes en la productividad total, por los costos mucho
menores de calidad y por un liderazgo competitivo más fuerte.
Cuando se menciona el término "calidad", por lo general lo asociamos con productos o servicios
excelentes, que satisfacen nuestras expectativas y, más aún, las rebasan. Tales expectativas se definen
en función del uso que se le dará al producto o servicio en cuestión y de su respectivo precio de venta.
Cuando un producto mejora nuestras expectativas estamos hablando de calidad. Es decir, se trata de una
cualidad cuya valoración dependerá de lo que se perciba.
Debido a la gran variación de resultados de calidad, la búsqueda genuina del éxito en la calidad se ha
convertido en un asunto de gran interés en laadministración de las compañías de todo el mundo. Y la
experiencia está abriendo una base fundamental para lograr ese éxito.
La calidad es en esencia una forma de administrar a la organización. Como finanzas y mercadotecnia, la
calidad ha llegado a ser ahora un elemento esencial de la administración moderna. Y la eficiencia en la
administración de la calidad se ha convertido en una condición necesaria para la eficiencia de la
administración industrial en sí.
La empresa debe tener claro que las necesidades de sus clientes no son
estáticas, sino dinámicas y cambiantes a lo largo del tiempo, además de
ser los clientes cada vez más exigentes y cada vez está más informado.
Por ello, la empresa no sólo ha de esforzarse por conocer las
necesidades y expectativas de sus clientes, sino que ha de ofrecerles
soluciones a través de sus productos y servicios, y gestionarlas e intentar
superar esas expectativas día a día.
Principio 2: Liderazgo
“Los líderes establecen la unidad de propósito y la orientación de la
organización. Ellos deberían crear y mantener un ambiente interno en el
cual el personal pueda llegar a involucrarse totalmente en el logro de los
objetivos de la organización”.
Foco en el cliente
Los clientes y su satisfacción son la razón de ser del negocio. Los modelos de negocio se
conciben para “satisfacer necesidades y resolver problemas” no para “vender un producto.”
Los clientes eligen a una compañía basándose en su habilidad para satisfacer sus
necesidades de productos o servicios. Los negocios deben florecer continuamente para
comprender los deseos de sus clientes.
Las empresas aplican estrategias de foco en el cliente para mejorar la percepción del
consumidor, aumentar su participación en el mercado e incrementar las ganancias.
Las empresas hacen uso de varias herramientas para enfocarse en el cliente, conocer sus
gustos y preferencias, entre ellas las encuestas de satisfacción del cliente o grupos focales.
Éstos recogen, analizan datos y ejecutan acciones que buscan un uso efectivo de los
recursos limitados para obtener los resultados deseados.
Promover el Liderazgo
Los programas de aseguramiento de calidad exitosos tienen un liderazgo fuerte que inspira
confianza.
Un compromiso con la calidad y una cultura de liderazgo comienzan en la parte superior de
los niveles de una organización y se desplaza por todo el organigrama: los dueños,
directores, gerentes, líderes de equipo y personal de línea.
Los líderes de la empresa demuestran coherencia en cuanto a la visión, el curso de acción y
el objetivo de calidad. Los gerentes y líderes de equipo comprenden la necesidad de crear
un ambiente de trabajo a tono con las políticas de calidad. Los líderes efectivos comunican
exitosamente estas ideas a su personal.
Enfoque en los empleados
Los empleados poseen la creatividad para generar ideas que resuelven problemas, mejoran
procesos y ahorran dinero a la empresa. De hecho un sistema de gestión de calidad
incentiva la participación activa de los empleados en las propuestas y oportunidades de
mejora reconociendo sus aportes.
El personal de línea debe avanzar hacia la mejora continua de la calidad y no sentirse
intimidado por el proceso. Hacer que los empleados se involucren en los niveles bajos ha
probado ser una técnica efectiva para lograr su compromiso.
Las compañías eficientes comprenden las ventajas y establecen una prioridad en reconocer
las contribuciones del personal a sus programas de aseguramiento de la calidad, por la vía
de premios monetarios, becas u otros incentivos.
Además, las empresas proveen a los empleados recursos para asegurar que tengan las
habilidades requeridas y herramientas para tomar responsabilidad por sus papeles en busca
de la mejora de los objetivos de calidad.
Mejora continua
La mejora continua significa contar con políticas y procedimientos para asegurar una
evaluación constante de las actividades de la empresa y de su desempeño, de modo que los
procesos, sistemas, productos y servicios están bajo evaluación permanente.
Cada departamento y cada empleado se vuelven parte de un proceso continuo de
evaluación. Una vez que una organización establece sus metas y objetivos, los gerentes
imponen herramientas para planificar, medir y aplicar correctivos de cara al progreso en un
clico constante. Bajo la filosofía ¡siempre hay algo que mejorar!
Toma de decisiones con base en datos y hechos
Las decisiones efectivas se toman con base lógica y coherente que la proporcionan los
hechos y datos. La debida documentación y soporte de las decisiones brinda una capacidad
para medir la eficiencia de cursos de acción pasados, ajustes y revisiones de cara al futuro.
La aplicación de este principio implica el uso y registro de datos precisos y confiables, así
como metodologías rigurosas y válidas, donde las decisiones se fundamentan en hallazgos
del análisis de los datos y no suposiciones o juicios subjetivos.
Se deben estrechar alianzas con proveedores en una relación de interdependencia que cree
valor y beneficios para ambos.
Una alianza con un proveedor busca optimizar costos y recursos, imprime calidad en los
suministros y procedimientos de entrega, permite flexibilidad y velocidad de respuesta ante
un mercado y entorno cambiante.
Este principio impone una comunicación clara y abierta con los proveedores clave, planes
conjuntos o actividades comunes de desarrollo y mejoras.