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Familias Uniparentales

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“Amenazas a la estabilidad familiar”

Familias Uniparentales

Integrantes:
María Jesús Errázuriz
Mónica Cruzat
Paula Jordán
Florencia Espíldora

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Terminología

Las familias uniparentales, constituyen uno de los tipos especiales de familias


descritos por V. Satir (1978). La característica estructural que define a estas familias es la
ausencia de uno de los padres y la existencia de uno o más niños menores de 18 años que
son mantenidos por el otro padre (Hanson y Sporakowski, 1986). Bajo esta definición cabe
un amplio número de subtipos de familias, que pueden ser definidas de acuerdo a la causa
que origina la formación de la familia uniparental: viudez, separación, adopción, entre
otros.
Según Satir existirían tres tipos de familias uniparentales: aquella en que un padre
ha abandonado a la familia y, donde el padre que queda no vuelve a casarse; las que están
formadas por un padre e hijos legalmente adoptados; y las que se constituyen en base a las
madres solteras que mantienen a su hijo. ( Satir, 1978)

Por otra parte, existe familias en donde ha fallecido uno de los dos padres o bien
donde un padre se ha ausentando por un espacio temporal indefinido, lo que tiene como
efecto que el padre que queda en el hogar deba mantenerlo.

Ante esta variedad de subtipos nos vemos obligados a señalar que el término familia
uniparental es deficiente al no dar cuenta cómo ésta se constituye, ni de la dinámica que
podría derivarse de las circunstancias de su formación, ni del ajuste de sus miembros a esta
particular manera de constituirse. (Hanson y Sporakowski, 1986)

A partir de otras informaciones seleccionadas vemos que el término de familia


monoparental o bien uniparental aún no tiene una definición que englobe a este conjunto de
agrupaciones llamadas “monoparentales”; tampoco existen criterios sobre formas o hechos
que nos guíen para constituirlas. Es por esto que el término general se refiera a familias
constituidas por un solo progenitor y uno o más hijos. (Giraldes, M Penedo, E. Seco, M.
Zubeldia, U)

Estadísticas

Los hogares monoparentales representan el 16,4% de los hogares de Chile. Sin


embargo, dentro de estos, se encuentran los hogares nucleares monoparentales, los cuales
constituyen el 9,4%. Aunque este tipo de familia no representa una de las estructuras
familiares predominantes en el país, se destaca el aumento que ha ido teniendo en los
últimos años. En 1993 representaban el 8,6%, aumentando a 9,7% el 2002. (Tironi, E.,
Larrañaga, O., Valenzuela, E., Bravo, D., Teitelboim, B., Gubbins, V. 2003).

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Un tema relevante observado con los datos de la Encuesta CASEN 2009, es el
aumento de los hogares monoparentales en estos últimos años, los cuales se encuentran
encabezados, en su mayoría, por mujeres. “El aumento de las jefaturas de hogar femenina
es mayor en los estratos más pobres, lo que implica que ellas están siendo sostenedoras
económicas y de la gestión reproductiva de los hogares”. (Calvo, A. Tartakowsky, A.
Maffei, T., p. 24)
“Generalmente y a lo largo del tiempo, alrededor de un 84% de las familias
monoparentales están a cargo de una mujer, poniendo en evidencia una mayor ausencia del
padre en el núcleo monoparental”. (Calvo, A. Tartakowsky, A. Maffei, T., p. 24)

Posibles efectos sobre la estabilidad familiar

Ansiedad:
Los hijos que constituyen familias con un solo padre están más propensos a
experimentar ansiedad, el cual es el síntoma más común de la tensión emocional.
La ansiedad puede fomentar la competencia y el individualismo en todos los
ámbitos sociales (familia, escuela, comunidad), lo que en muchas personas genera,
conflictos, frustración y otros problemas emocionales. (Jadue, G. 2003)

Bajo rendimiento escolar:


Los hijos de familias uniparentales de madre sola, tienen bajo rendimiento escolar y
un riesgo bastante alto de abandono de la escuela, junto con experiencias negativas en la
escuela. El bajo rendimiento es asociado a hogares dirigidos por mujeres solas que se ven
enfrentados a dificultades económicas. (Jadue, G. 2003)
También si un estudiante forma parte de una familia uniparental y es de nivel
socioeconómico y cultural bajo, está en un alto riesgo de presentar problemas tanto en el
rendimiento de la escuela como en sus vivencias personales y sociales, puesto que en su
medio familiar, escolar y social existen características que lo predisponen a tener
dificultades académicas y personales, dadas por las experiencias negativas a las cuales
están expuestos. (Jadue, G. 2003)

Vulnerabilidad y factores de riesgo:


Aumenta la vulnerabilidad y factores de riesgo cuando el jefe de familia se ausenta
para trabajar y debe dejar a sus hijos solos o al cuidado de un externo.
La vulnerabilidad ocurre solamente cuando el riesgo está presente, si no hay riesgo no
posee efecto. (Cervini, R., Dari, N., Quiroz, S. 2014)

Parentalidad:
A falta de figuras parentales (femenino o masculino), el niño muchas veces puede
sentir la responsabilidad de asumir roles que no le corresponden a su edad, como por

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ejemplo: el estar pendiente de cuidar a la madre en todo momento para que no sufra.
(Cervini, et at. 2014)

Valores y creencias:
A la falta de uno de los padres, los sistemas de creencias se ven alterados. No
existen diferentes puntos de vista, solo hay una figura paterna de la cual se pueden abstraer
diferentes valores y creencias. (Cervini, et al. 2014)

Hipótesis

En cuanto a familias que se han separado recientemente es bueno que los padres les
informen de la decisión de separación explicándoles la situación con un lenguaje simple y
siempre manteniéndose atento ante las respuestas de los hijos y alentarlos a que expresen
sus sentimientos. Por otra parte, el niño debe saber que sus padres no van a tomar partido
por alguno de los hijos sino que su amor se mantiene hacia ellos y la separación no va a
afectar ese cariño.

Debido a que estadísticamente el hombre es quien sale de la familia, dejando a la


madre sola con los hijos, se debe prever que uno de sus hijos va a ejercer los roles de aquel
padre. Es necesario estar atentos para no sobrecargar a los hijos con roles que aún no les
corresponden a su edad.
Por otra parte es la madre quien va a tomar el rol de sustentadora para la familia.
Una medida adaptativa para una madre que va a ejercer el rol de proveedora es que exista
un programa de ayuda económica que le de facilidades en lo económico sobre todo si esta
madre no ha trabajado nunca antes y por primera vez se enfrenta a una situación como esta.

Para todas las madres viudas o solteras la creación de un programa de servicios


sociales que estén dedicados a ellas para poder darles protección legal y no caigan en riesgo
social. Un programa de este tipo pondrían ayudarles a encontrar jardines infantiles para sus
pequeños, alojamientos alternativos, subsidios y derechos que ayuden a su reinserción
social y a su equilibrio familiar.

Para aquellas madres que deben dejar a los hijos solos en su casa o bien a cuidado
de un vecino o persona externa al núcleo familiar, una medida adaptativa en la creación de
un establecimiento cercano al colegio u hogar donde estos niños puedan acudir después de
su jornada escolar, de esta manera se pueden evitar distintos tipos de abusos y los niños
pueden hacer sus tareas y otro tipos de actividades recreativas. Estos establecimientos
pueden funcionar de manera más óptima si los mismos padres hacer turnos para el cuidado
de los menores.

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Referencias:
A. Reinoso, C. Serrat (1992) “ Familias uniparentales derivadas de la separación
matrimonial, Chile” http://www.psykhe.cl/index.php/psykhe/article/view/21/21 (visitado el
20 de abril 2015)

Calvo, A. Tartakowsky, A. Maffei, T. (2011) “Transformaciones en las estructuras


familiares en Chile”. Ministerio de planificación, Gobierno de Chile.
http://www.ministeriodesarrollosocial.gob.cl/btca/txtcompleto/mideplan/transformac.fam.c
hilenas.pdf ( Visitado el 27 de abril de 2015)

E. Tironi, O. Larrañaga, E. Valenzuela, D. Bravo, B. Teitelboim, V. Gubbins. (2003)


“Cuánto y cómo cambiamos los chilenos”. Santiago: Instituto Nacional de Estadísticas.

G. Jadue (2003)“Tranformaciones familiares en Chile: Riesgo creciente para el desarrollo


emocional, psicosocial y la educación de los hijos” http://www.scielo.cl. (Visitado el 19 de
abril)

R. Cervini, N. Dari, y S. Quiroz. (2014) “Resiliencia familiar: nuevas perspectivas en


la promoción y prevención en salud”RIME vol.19 no.61 México (abr/jun 2014).

Satir, V. (1978). Relaciones humanas en el núcleo Familiar. Edit. Pax. México.

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