Velas e Incienso
Velas e Incienso
Velas e Incienso
Desde el inicio de la humanidad el fuego siempre ha estado presente en la vida del hombre. Su
simbolismo es mágico y por ello aún se conserva en ceremonias y rituales.
Es indiscutible la importancia del fuego en la vida del hombre de las cavernas. Sin embargo, a
pesar de la evolución humana, el fuego no solo ha tenido una connotación funcional (cocinar los
alimentos, fundir los metales, calentar, etc.), sino que también le ha dado un uso simbólico o, si se
quiere, una particular utilización ritual en todo lo relacionado con la generalidad mágica que gira
en torno a él.
El fuego ha sido utilizado como el símbolo predilecto de la energía cósmica, de la activación y de
la consagración, porque el hombre ha observado que este se compone de innumerables
elementos, presentes en su forma, color y aroma.
No se puede negar que, actualmente, la ignistría gira en torno a la utilización de las velas, no solo
porque puedan tener un valor estético o decorativo, atractivo para las personas, sino porque su
uso se ha popularizado y extendido en todo el mundo.
Es importante mencionar que elementos reales como las velas, los inciensos, los pebeteros, las
quemas, los cerillos, las varitas de prender, las mancias tales como el cigarrillo o el tabaco, hacen
parte de la mencionada ignistría, la cual a su vez se compone de símbolos que forman los ciclos
de la consagración en todo ritual. Como se dijo anteriormente, la ignistría comprende varias
ramas, pero en este artículo sólo nos referiremos a algunos métodos específicos.
USO DE LAS VELAS
Antiguamente las velas eran conocidas como "candere", que quiere decir brillar. Eran elaboradas
de grasa animal, arcilla o metal. Dentro de las creencias populares se atribuyen muchos
conceptos a las formas y características de las llamas; se decía que cuando la vela chispeaba,
llegarían visitantes a la casa; o cuando la llama se dividía era señal de que habría un enfermo
grave.
Pero también, es importante tener en cuenta que la llama es como el testigo de la energía que
rodea la vela. Por eso, el color muy azuloso en una llama denota la proximidad de ondas
abstractas o de energía etérica; el amarillo intenso, con poco contenido de rojo, indica coherencia
y buenos resultados, y la llama roja–violácea sugiere un alto contenido de energía eléctrica.
Siempre que una vela se utilice ritualmente debe tener un determinado objetivo para que pueda
funcionar como el elemento activador y consagrador que es. Las velas tienen orientación
específica; el sentido norte o sentido magnético comprende el espacio entre la mitad de la vela
hacia arriba; y el sentido sur o eléctrico va desde la mitad de la vela hacia la base.
La orientación y ubicación de las velas es importante para decidir el carácter de la petición, que
es el medio por el cual unimos nuestra conciencia a la energía lumínica que transporta nuestra
idea y permite que nuestros pensamientos se hagan realidad.
EL COLOR
El color es una parte fundamental de un ritual, porque siempre existe una correspondencia con
planetas, estados de conciencia, ángeles, colores etéricos; es decir, todo lo relacionado con el
universo cósmico. La referencia al uso real del color se entiende como una situación particular de
energía que, cuando asume un determinado tono, también denota una cierta y singular
disposición de los factores físicos, químicos y eléctricos, para así formar una vibración específica.
Es bueno comprender que debe existir una coherencia entre el uso simbólico del color, y la
vibración real que un determinado color emana. Por ejemplo, el azul otorga una vibración
magnética y reconstructiva, pero al mismo tiempo, se relaciona con el agua, con Piscis, con la
primavera y con el arcángel Miguel.
Velas blancas
El blanco es una mezcla de todos los colores y en un caso determinado puede sustituir a una vela
de cualquier color. La vela blanca es usada para pedir ayuda o para fortalecer nuestra vida
espiritual. También se utiliza en procesos de curación y de limpieza.
Las velas blancas vibran más por su número. Es decir, cuando ponemos una sola vela, la idea es
armonizar. Dos velas simbolizan un ruego al ser superior para que ejecute justicia divina ante los
problemas que nos afligen. Tres velas representan un acto de limpieza profunda en nuestro ser.
Cuatro velas abren el camino hacia nuestro karma.
Velas rojas
Simbolizan la dignidad, la supervivencia y la lucha por la vida. Este color se utiliza cuando la
petición va encaminada a mejorar el estado de ánimo, confrontar al enemigo, despertar la pasión,
tener éxito, combatir el cansancio y alejar las malas energías.
Velas rosadas
Se utilizan como armonizantes o conciliadoras, para crear estabilidad en los lazos amorosos,
restablecer la imagen social o familiar, tener unión en el hogar, alejar la envidia y evitar los celos.
Es un color que fortalece la unión y la paz.
Velas naranjas
Son un símbolo de madurez y bienestar total. Además, traen buena suerte, prosperidad,
reconocimiento social y éxito profesional. Se utilizan para rituales de salud. Las velas color
naranja son activadoras de toda la conciencia superior, de la alegría de la vida y, en general,
estimulan la encarnación como proceso de búsqueda de la felicidad del hombre.
Velas doradas
Este es un color de realización, fortalece la vida espiritual y crea conciencia. Se utiliza para
fraternizar en planos astrales o cósmicos y para la intuición. Desarrolla la concepción
premonitoria e incrementa la sensibilidad. El color dorado, en el plano material, está relacionado
con el progreso y los bienes materiales, porque aumenta la fortuna.
Velas amarillas
El amarillo es un color que se refiere a la comprensión, la suerte, la creatividad, la astucia, la
intuición y la expansión. Es importante tener en cuenta que las velas de este color no se deben
mezclar con velas verdes, a menos que en el ritual se incluyan velas moradas, puesto que las
connotaciones de la vela verde y amarilla indican maldad y negativismo. El mejor complemento de
las velas amarillas son las velas doradas y naranjas.
Velas verdes
Las velas verdes de utilizan para incrementar y hacer prosperar algún proyecto. Generalmente se
usan solas cuando se quiere obtener éxito en los negocios, los cultivos y el comercio. Son
excelentes para todo lo relacionado con la fecundidad, el embarazo, el matrimonio y la familia.
Existe la tendencia a creer que las velas verdes tienen relación con el dinero porque ayudan a
generarlo. Sin embargo, esto no es cierto; el verde sirve para incrementar algo que ya se tiene.
Las velas verdes sólo actúan si se mezclan con una de color naranja o dorado.
Velas azules
Se utilizan para proporcionar sentido común. El azul es un color de conciencia práctica, racional y
equilibrada. Su uso es aconsejable en asuntos de popularidad y fama. Se usa como medio de
protección; por eso, se debe emplear con mucha responsabilidad y cordura.
Velas púrpuras
Ayudan a deshacer los lazos o ataduras que nos afligen. Es un color transmutador y
transformador que actúa sobre los planos del bien y del mal, formando procesos de nivelación y
cambio de energía. Se usa para alejar las malas influencias. Estimula el sentido de la autoridad y
la moral. Este color es utilizado con fines materiales o espirituales.
Velas violetas
Se utilizan para meditar, resolver problemas de carácter intelectual, religioso o emocional, y
también para combatir estados de ansiedad, miedo e inestabilidad. Procura éxito en tratamientos
contra la drogadicción y el alcoholismo.
Velas café
Se usan cuando la petición se relaciona con conceptos en que priman el sentido de la
organización, el deber y la consecución de apoyo; es decir, la ayuda externa. Obviamente, este
color guarda estrecha relación con la tierra y mantiene un lazo de comunicación permanente con
entidades de naturaleza terrena.
Velas plateadas
Este es un color que favorece los procesos de comunicación y de comercio. Esto quiere decir que
todas las actividades relacionadas con estos aspectos se ven favorecidas. Las velas plateadas
ayudan a agilizar los procesos judiciales a las personas que están privadas de la libertad.
Velas negras
Estas velas tienen una influencia netamente saturnina y por ello poseen una connotación maligna.
Sin embargo, es bueno recordar que su uso ayuda a limpiar y a liberar a la persona de las deudas
kármicas. En general, este color no debe ser utilizado, salvo que se tenga un conocimiento claro y
profundo de su uso.
EL ALTAR
Es importante que el altar donde se pongan las velas se ubique hacia el Oriente, y que además
mantenga una relación simétrica y geométrica con su superficie y con el orden que aquellas
tengan sobre el altar. Las velas son elementos que generan mucha energía y pueden transformar
o hacer decrecer algo con sólo el uso coherente de sus atributos mágicos. Es preciso que usted
haga las cosas con conciencia y conocimiento de lo que quiere obtener, para que el resultado sea
consecuente con su petición.
QUEMAS
Existen diferentes elementos que se pueden hacer arder para obtener sus cualidades
magnéticas.
Carbón vegetal con sal: Combaten las energías negativas. Estas quemas no deben durar más
de tres minutos.
INCIENSOS
El incienso guarda una estrecha relación con la cadena espiritual de los seres humanos, por esto
es utilizado, principalmente, como puente o testigo de estados del espíritu o la materia.
Incienso de Jazmín: Para dar rumbo al cuerpo emocional y fortalecer las capacidades y la
razón. [Depurador. Neutraliza la envidia.
Incienso de Lavanda: Útil para conocer nuestras carencias. [Aleja miedos e inseguridades.]
Incienso de Manzana: Propicio para la salud. Estimulante en los estados de recuperación
física y mental.
Incienso de Pino: Utilizado para desencadenar los registros del cuerpo emocional y
armonizarlos con nuestra moral.
Incienso de Sándalo: Conecta los deseos espirituales o terrenales con nuestro destino. Atrae
dinero, suerte y fortuna; purifica el alma.
Incienso puro: Nos conecta con lo espiritual, bloquea el cuerpo emocional para que la
mente nos transporte de una manera sencilla a través de nuestro
astral. Trabaja directamente con la glándula pituitaria.