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Sal de Mar Condimentada Con Especias

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SAL DE MAR CONDIMENTADA CON ESPECIAS: EL

INNOVADOR NEGOCIO DE EMPRENDEDORA DE


PUTAENDO
Fue a través de los programas de cocina gourmet de la televisión que hablaban de alimentos bajos en sodio
y los beneficios de las sales condimentadas, que a la emprendedora Soledad Vejar, de la comuna de
Putaendo, se le ocurrió innovar con su producción agrícola. Y a su predio, que ya tenía una variada
producción de hortalizas orgánicas, decidió agregar hierbas aromáticas como el romero, la salvia, el
tomillo y el orégano. Luego mezcló estas especias con sal de mar, traída desde el sector de Cáhuil en la
región de O’Higgins, y logró una gama de exquisitos sabores.
“Vi que la sal de mar al condimentarla tenía un mejor potencial, porque mezcla dos productos y esta sal
es más sana, con menos sodio. Desde ahí empecé a mezclarla, en forma artesanal, con distintos
condimentos como la salvia el romero y el merkén, este último lo traemos de Nueva Imperial donde lo
produce un grupo de mujeres de la Conadi”.
Pero la historia de esta inquieta emprendedora parte hace cinco años cuando quedó sin trabajo y con dos
niñas que alimentar. Decidió sacarle provecho al patio de más de media hectárea de su predio y se integró
a la Oficina Municipal de Información laboral, Omil, de la municipalidad local donde aprendió sobre
lombricultura. Luego tomó un curso de agricultura orgánica y otras capacitaciones adicionales hasta que
ingresó al programa Prodesal de INDAP: “recibí asesorías técnicas en agricultura orgánica, donde aprendí
desde hacer abono hasta el manejo y rotación de cultivos. Primero empecé haciendo humus de lombriz
que vendía a productores locales y con el tiempo ingresé al programa de asesorías técnicas, SAT. Ahora
también cultivo frutillas y hierbas aromáticas que uso para las sales condimentadas”.
ALIMENTOS ORGÁNICOS
Junto a su marido forman la empresa familiar “Agrícola Dos Espinas” donde ofrece una variada
producción de alimentos orgánicos certificados entre los que se cuentan los condimentos frescos,
deshidratados y la producción de sales condimentadas “Chadiwe” las que comercializa principalmente a
través de ferias temáticas de INDAP, redes sociales y en forma directa a clientes.
Sus próximos proyectos son ampliar la variedad de productos que ofrece y mejorar la imagen corporativa.
En todo el proceso de crecimiento de su negocio reconoce que el apoyo de INDAP ha sido fundamental:
“las asesorías técnicas han sido súper específicas. Por otro lado, los créditos me han ayudado bastante, así
como las ferias de INDAP y otras expo agrícolas donde se generan contactos y son verdaderas vitrinas
para poder mostrar nuestros productos”.
El director regional de INDAP, Helmuth Hinrichsen, dijo que “el Ministerio de Agricultura a través de
INDAP está trabajando para fortalecer los emprendimientos de la agricultura familiar, sobre todo de
mujeres campesinas que están innovando con producciones agrícolas de calidad y con valor agregado.
Hoy la mujer rural representa un porcentaje muy importante dentro del universo de agricultores y es por
eso que estamos reenfocando nuestros instrumentos hacia este segmento como el crédito especial que
tenemos para las emprendedoras del campo”.
BENEFICIOS DE LA SAL DE MAR
Una es marina; otra de ras de suelo. Ambas sirven para reforzar sabores y cocinar, pero sólo una cuida la
salud, alimenta y entrega minerales al cuerpo para mantenerlo sano.
Mientras la sal marina se obtiene de la evaporación del agua de mar y concentra varios minerales naturales,
la llamada sal de mesa resulta de la extracción minera y contiene un alto nivel de sodio: 100%.
La sal de mar, por otro lado, contiene todos los minerales necesitados por el ser humano como azufre,
boro, bromo, carbono, estroncio, magnesio, potasio, sodio, aluminio, arsénico, bario, cesio, cobalto, flúor,
fósforo, hierro, litio y manganeso, por nombrar algunos.

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