Junto A Un Muerto
Junto A Un Muerto
Junto A Un Muerto
a un
muerto
Guy de
Maupassant
(1850-1893)
0á
JUNTO A UN MUERTO
Guy de Maupassant
Entonces, sin variar de postura, leía, leía con los ojos y con el
pensamiento: parecía que todo su pobre cuerpo desfalleciente
leía, que su alma penetraba, se perdía, desaparecía en aquel
libro hasta la hora en que el aire fresco lo hacía toser un poco.
Entonces, levantándose, penetraba en el hotel.
1
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx
Una vaga curiosidad me atrajo hacia él. Un día me senté a su
lado, teniendo yo también en la mano, por el bien parecer, un
volumen de poesías de Musset.
2
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx
Voltaire:
¿Duermes contento, y tu sonrisa horrible
envuelve aún tu rostro de ironía indecible?
3
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx
Me contó la entrevista del "viejo demoledor" con un político
francés, republicano, el cual, queriendo ver a aquel hombre, le
encontró en una cervecería tumultuosa, sentado entre sus
discípulos, seco, arrugado, riendo con una risa inolvidable,
mordiendo y desgarrando las ideas y las creencias con una sola
palabra, como un perro que de un mordisco deshace los tisúes
con que está jugando, y me repitió la frase de aquel francés, que
al irse, enloquecido y azorado, exclamaba: "He creído pasar una
hora con el diablo".
Luego, añadió:
4
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx
"Su pensamiento, o mejor dicho, sus pensamientos nos
envolvían; nos sentíamos más que nunca en la atmósfera de su
genio, invadidos, poseídos por él. Su dominio nos parecía más
soberano a la hora de su muerte. Un misterio se mezclaba con el
poder incomparable de aquel espíritu.
5
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx
"Mi compañero me propuso que nos trasladáramos al cuarto
inmediato, dejando la puerta abierta; y yo acepté.
"De pronto nos pusimos de pie, sin saber que pensar, alocados
por un terror estúpido, dispuestos a huir. Luego nos miramos el
uno al otro. Estábamos horriblemente pálidos.
"El corazón nos latía con tal fuerza que se notaban sus latidos
sobre nuestras levitas.
6
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx
"—¿Has visto?
"—Sí; he visto.
7
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx
su mirada, descubrí en el suelo, bajo la butaca, al lado de la
cama, muy blanca, sobre la oscura alfombra, abierta como para
morder, la dentadura postiza de Schopenhauer.
Material autorizado sólo para consulta con fines educativos invariablemente como fuente de la información la expresión
8
“Edición, culturales y no lucrativos, con la obligación de citar digital. Derechos Reservados. Biblioteca Digital ©
Instituto Latinoamericano de la Comunicación Educativa ILCE”.
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx