Los Vikingos
Los Vikingos
Los Vikingos
Se suele pensar en los vikingos como personas aterradoras, crueles y sanguinarias que
vivieron solamente del saqueo y el pillaje, pero muchas de esas historias no cuentan la
realidad completa. Veremos todo sobre los vikingos y su cultura.
Los vikingos tienen su origen en los pueblos germanos que habitaron Escandinavia en la
Era Medieval. Específicamente fueron p ueblos que vivieron en esta región de
Escandinavia entre los años 750 y 1100 aproximadamente. Se dedicaron al comercio, a
la artesanía y también a ser campesinos en un principio. Posteriormente, cerca del siglo
IX se convirtieron en piratas que navegaban los mares en busca de nuevos poblados
que saquear y así poder vender el botín, haciéndolo a la fuerza, lo cual los convirtió en
aterradores ante los reinos europeos.
Se consideraba que la máxima autoridad de estos pueblos era e l r ey, que recibía el
título de Jarl. Debajo de él existían los jefes de tribus y condes que si bien ocupaban un
rango inferior, disfrutaban de muchos privilegios y autoridad en el ámbito político. Los
jefes de las tribus y los condes se reunían con el rey para establecer las leyes verbales.
Su organización era muy buena y también sus técnicas de saqueo y conquista, ya que
hacían movimientos rápidos y sorpresivos al enemigo. En el caso de los reyes, no se les
consideraba mejor que la clase noble, ya que como eran un pueblo y no un reino, todos
tenían derechos.
En los inicios de los pueblos germanos, Escandinavia contaba con varios reinos
diferentes. Los reyes no contaban con todo el poder debido a la existencia de los jefes
de tribus, a quienes su tribu mostraba lealtad. El rey era encargado de realizar los
rituales religiosos y los comandaba en las guerras. Parte de su trabajo también era
mantener a los hombres entrenados para la batalla y contar con embarcaciones y armas
para defenderse de posibles ataques enemigos.
Un reino vikingo estaba compuesto por varias familias nobles, aparte de la familia del
rey. Quienes lideraban estas familias se les llamaba Jarls, y estos dependían del apoyo
de estas familias y del resto de quienes componían el reino. Estos tenían el mayor
poder y poseían grandes espacios de tierra, además de un grupo de guerreros leales
que los protegían.
La población más grande estaba formada por los Karls, que no eran más que hombres y
mujeres libres, quienes tenían a su cargo granjas, y otros se convertían en arrendadores.
Los hijos mayores eran quienes heredaban las granjas y todo lo que su padre poseía, lo
cual dejaba a los jóvenes con la única opción de ganar posesiones por su propia cuenta,
convirtiéndose en saqueadores, comerciantes, soldados, pescadores, cazadores o
artesanos. Muchos otros Karls simplemente trabajaban como servidores en granjas
ajenas.
La última clase social estaba compuesta por los Thralls, quienes eran esclavos que no
poseían ningún derecho en la sociedad vikinga, y eran comprados y vendidos como
cualquier objeto. Algunos otros eran capturados durante incursiones. Otros eran Karls
que debido a bancarrota o algún delito quedaron sin posesión. Su trabajo principal esa
ser siervos en granjas o artesanos. Estos tenían el derecho de comprar su libertad.
Además, los vikingos creían en mujeres que cabalgaban junto a Odin durante las
batallas, conocidas como las V alkirias, quienes además tenían la labor de llevar a los
guerreros que habían muerto en batalla hasta el Valhalla, considerado el paraíso de los
vikingos, donde se reunían con los reyes.
Valhalla
Posteriormente, l os vikingos se convirtieron al cristianismo de forma gradual, a través
de la Edad Media, aproximadamente en el año 1000, cerca del final de la Era Vikinga.
Esto ocurrió por medio del contacto con los europeos de las tierras conquistadas. No
mucho tiempo después, la cultura vikinga se desintegró entre los siglos XI y XII, debido a
los conflictos entre los vikingos y los británicos.
El comercio fue desarrollado por los vikingos tras la elaboración de embarcaciones que
les permitían llegar a tierras extranjeras y comerciar sus productos. Por varios siglos, los
vikingos dominaron muchas rutas marítimas en los mares europeos, pero que más tarde
fueron parte de los españoles, ingleses y portugueses. Por otro lado, las embarcaciones
vikingas eran tan eficaces que l es permitieron inmiscuirse en el mundo del saqueo y la
piratería.