Las Guerras Médicas-1ero
Las Guerras Médicas-1ero
Las Guerras Médicas-1ero
A finales del siglo VI, las polis habían conseguido tres cosas de la que sus ciudadanos se sentían orgullosos:
En esos momentos, la expansión del Imperio Persa representó una amenaza a la tierra y la libertad misma de la
polis, ante la cual todos los griegos se unieron. El resultado fue una lucha de casi medio siglo, que se ha
denominado guerras médicas.
En el siglo VI a.C., Tracia, Macedonia y las ciudades y poblados ubicados en las costas del Asia Menor
perdieron su autonomía en manos de los persas. El detonante de la guerra dure la rebelión de las ciudades
griegas del Asia Menor contra la dominación extranjera (año 500 a.C) apoyados por Atenas y otras polis
griegas. Una vez sofocada la rebelión. Darío I, rey de los persas, decidió enviar una expedición para castigar la
intromisión de los atenienses en su área de influencia.
LA CONSOLIDACIÓN DE ATENAS
Después de las victorias de Platea y Micala, Atenas asumió el liderazgo contra Persia y formó, junto con las
islas del Egeo y las polis del Asia menor, la Liga de Delos. El objetivo de la Liga era la menor. Sus miembros
se comprometían a contribuir con naves y hombres o con dinero. El tesoro de la Liga y la celebración de las
asambleas se establecieron en la isla de Delos, y llegaron a formar parte de la agrupación unas cuatrocientos
ciudades.
Pensaba como elemento de defensa común, la alianza fue, sin embargo, utilizada poco a poco por Atenas para
afirmar su predominio y convertirse en la gran potencia hegemónica. En el año 454 a.C. usando como excusa
la posibilidad de una invasión persa, el tesoro de la Liga fue trasladado desde Delos a Atenas. Desde ese
momento, los dirigentes atenienses lo utilizaron en beneficio de la ciudad.
La tercera guerra médica terminó en el año 449 a.C. con la firma de la paz de Cimón, que convirtió a Atenas en
la dueña del mar Egeo.
EL SIGLO DE PERICLES
Bajo el gobierno de Pericles (461 – 431 a. C), Atenas vivió su periodo de mayor esplendor y se convirtió en la
polis más importante. Esta época es conocida como el siglo de oro de Grecia o el siglo de Pericles.
La obra más importante de su gobierno fue consolidar la democracia además de activar la vida económica y
cultural de la polis. Pericles estableció los pagos a los asistentes a la Asamblea y a los que ocuparan cargos
Los estrategos, que integraban el Estado mayor y eran los máximos dirigentes de Atena. Cada Distrito o
tribu elegía un estratego, que dirigía el ejercito.
La Eclesía o Asamblea popular, compuesta por todos los ciudadanos mayores de treinta años, tenía como
función principal el asesoramiento de la Eclesía.
El tribunal de los Heliastas, que se ocupaba de gestiones judiciales.
Muchas ciudades fueron destruidas o seriamente dañadas. Finalmente, la guerra concluyó, tras veintisiete años
de lucha con la derrota de Atenas. Esparta, la nueva potencia, impuso su política en toda Grecia. Gracias a la
flota que construyó con la ayuda financiera proporcionada por los persas, paso a controlar las principales rutas
comerciales. Estableció gobiernos aristocráticos en todas las polis y persiguió a los partidarios de la
democracia.
Atenas fue severamente castigada, obligada a reducir sulfota y a destruir sus fortificaciones y perdió áreas de
influencia. La democracia fue sustituida por una tiranía.
Tras una nueva lucha por supremacía, esta vez entre Tebas y Esparta, Grecia quedó debilitada. Las ciudades
habían sufrido serios daños, los campos quedaron devastados y la población masculina se redujo
sensiblemente. Quedó así abierto el camino para la intervención de Macedonia, un reino ubicado al norte de
Grecia, gobernado por un hábil monarca, Filipo II.
UN NUEVO IMPERIO
Filipo II, gran admirador del mundo griego, tenía como ideal conquistar Grecia unificarla para terminar
definitivamente con las aspiraciones del Imperio Persa de dominarla. En el año 338 a. C. Sometió a toda
Grecia, tras la batalla de Queronea. Las polis, aunque mantenían su independencia política, pasaron a formar
parte de la Liga de Corinto, dirigida por Filipo II. El objetivo de la Liga era oponerse a Persia y liberar a las
ciudades Griegas del Asia Menor. Cuando Filipo II se preparaba para iniciar la campaña contra Persia, murió
asesinado por uno de sus oficiales.
Quien continuó la obra de Filipo II fue su hijo, Alejandro Magno.
Este había recibido una educación al estilo griego, que combinaba los ejercicios físicos, el adiestramiento en el
arte de la guerra y una sólida formación intelectual. Alejandro tuvo como maestro a Aristóteles.
Alejandro Magno se lanzó a la invasión del Imperio Persa. En el primer enfrentamiento, Alejandro derrotó a los
persas en la batalla de Gránico (334 a.C). Al año siguiente, derrotó nuevamente a los persas en Isso.
Finalmente en el 331 a.C., Alejandro atravesó el Éufrates y el Tigris y venció en forma definitiva a los persas en
Gaugamelas o Arbelas, invadió Persépolis (capital de Persia), y marchó a la conquista de la India. El imperio de
Alejandro Magno incluía Egipto, Asia Menor, Siria y Mesopotamia, y fue el más grande del mundo antiguo hasta
las conquistas romanas.
Alejandro estableció la capital de su imperio Babilonia, tratando de vincular a la cultura griega con la oriental.
Todo esto dentro de una política tolerante. A la muerte de Alejandro, comenzó un largo periodo de luchas entre
los principales generales macedónicos por la sucesión del imperio. Finalmente, a fines del siglo IV a.C., el
imperio se fraccionó en tres grandes reinos, denominados reinos helenísticos:
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS