Afecto Fraternal
Afecto Fraternal
Afecto Fraternal
Esta expresión se refiere literalmente al cariño que uno siente por su familia o por un amigo íntimo.
Así que no es que los cristianos verdaderos debamos querernos como si fuéramos hermanos.
Es que somos hermanos. Pablo dijo: “En amor fraternal ténganse tierno cariño unos a otros.
En cuanto a mostrarse honra unos a otros, lleven la delantera” (Romanos 12:10). Estas palabras
muestran que el amor que sentimos por los hermanos debe ser muy fuerte. Si nos tenemos amor
fraternal y amor cristiano, seremos buenos amigos y estaremos muy unidos.
Heb 13:1 Ámense siempre los unos a los otros, como hermanos en Cristo.
Heb 13:2 No se olviden de recibir bien a la gente que llegue a sus casas, pues de ese modo mucha gente, sin
darse cuenta, ha recibido ángeles.
Heb 13:3 Preocúpense por los hermanos que están en la cárcel y por los que han sido maltratados. Piensen
cómo se sentirían ustedes si estuvieran en la misma situación.
Heb 13:4 Todos deben considerar el matrimonio como algo muy valioso. El esposo y la esposa deben ser fieles
el uno al otro, porque Dios castigará a los que tengan relaciones sexuales prohibidas y sean infieles en el
matrimonio.
Heb 13:5 No vivan preocupados por tener más dinero. Estén contentos con lo que tienen, porque Dios ha dicho
en la Biblia: «Nunca te dejaré desamparado.»
No olviden la hospitalidad (Hebreos 13:2). ¿Qué signifi ca ser hospitalarios? Literalmente signifi ca
ser amables con los desconocidos. Esto quizá nos recuerde algo que hicieron Abrahán y Lot. Los
dos fueron amables al recibir a unos visitantes desconocidos, y después se enteraron de que en
realidad eran ángeles (Génesis 18:2-5; 19:1-3). Pablo les mencionó estos ejemplos a los cristianos
hebreos para animarlos a demostrar su amor siendo hospitalarios.
¿Cómo podemos demostrar que somos hospitalarios? Podemos invitar a los hermanos a nuestra
casa para comer o pasar un rato juntos. Y cuando el superintendente viajante y su esposa visiten
nuestra congregación, podemos invitarlos aunque no los conozcamos muy bien (3 Juan 5-8).
No tenemos que hacer un gran banquete ni gastar mucho dinero.
Lo que queremos es animar a los hermanos, no impresionarlos. Además, no invitemos solo a los que
puedan devolvernos el favor de algún modo (Lucas 10:42; 14:12-14). Aunque estemos muy
ocupados, no olvidemos ser hospitalarios.
“Recuerden a los que están en cadenas de prisión” (Hebreos 13:3). Cuando Pablo escribió estas
palabras, estaba pensando en los hermanos que estaban en prisión por ser fi eles a Jehová. Pablo
felicitó a los cristianos hebreos porque tuvieron compasión “de los que estaban en prisión”. Durante
los cuatro años que Pablo estuvo preso, algunos hermanos que vivían cerca lo ayudaron. Pero otros
vivían lejos. ¿Cómo lo ayudaron? Orando mucho por él.
Si bien, ésta forma es difícil, podemos ir a y ayudar a quellas personas que se encuentran prisioneras en
drogas, alcohol, depresión, decepciones amorosa, tristeza, soledad, abandono, etc.
“Que el matrimonio sea honorable entre todos” (Hebreos 13:4). Otra forma de demostrar que
queremos a nuestros hermanos es respetando el matrimonio y evitando los pecados sexuales. Por
ejemplo, si cometiéramos un pecado sexual con un hermano o una hermana, les haríamos mucho
daño a esa persona y a su familia. Además, dañaríamos la confi anza que hay entre nosotros y
nuestros hermanos. Pensemos también en cómo se sentiría una hermana si descubriera que su
esposo ve pornografía. ¿Sentiría que él la ama y que respeta su matrimonio? Seguro que no.
“Estén contentos con las cosas presentes” (Hebreos 13:5). Si confi amos en Jehová, estaremos
contentos con las cosas que tenemos. Pero ¿qué relación hay entre estar contentos y amar a los
hermanos? Si estamos contentos con lo que tenemos, sabremos que los hermanos son mucho más
importantes que las cosas materiales o el dinero. No criticaremos a los hermanos ni nos
quejaremos de cómo nos va en la vida. Tampoco envidiaremos a los demás ni desearemos tener
más y más cosas. Al contrario, seremos personas generosas.
“Podemos tener buen ánimo” (Hebreos 13:6). Si confi amos en Jehová, tendremos ánimo y valor
para aguantar problemas graves y ser positivos. Esta actitud nos permitirá animar y consolar a los
hermanos. Así demostraremos que los amamos. Si confi amos en Jehová, también tendremos ánimo
y valor cuando llegue la gran tribulación, porque sabremos que él nos liberará pronto.
“Acuérdense de los que llevan la delantera” (Hebreos 13:7). Aquellos que trabajan mucho por la
congregación y sacan de su tiempo para atenderla. Por eso debemos tenerles una “consideración
más que extraordinaria en amor por causa de su trabajo”. Debemos pensar en todo lo que hacen por
nosotros. Si lo hacemos, estaremos muy agradecidos con ellos y los amaremos más. No queremos
que pierdan su alegría ni que se frustren por algo que hagamos. Al contrario, queremos colaborar
con ellos y obedecerles.
Heb 13:17 Obedezcan a sus líderes, porque ellos cuidan de ustedes sin
descanso, y saben que son responsables ante Dios de lo que a ustedes les
pase. Traten de no causar problemas, para que el trabajo que ellos hacen
sea agradable y ustedes puedan servirles de ayuda.