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1929 Creacion PDF

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LA CREACIÓN

Prueba bíblica de la creación de todas las


cosas, visibles e invisibles, mostrando el
Plan Divino desde el -Logos hasta la com-
pletación de la familia real celestial y la
restauración del hombre a la perfección.

Por J. F. Ruther!ord

..tt~tor 11•
I!Jl Arpa de Dios
Consuelo a los Judíos
Millones no Morirán Jamá1
Consuelo a la Gente
'En Dónde Están los Muertost
Liberac-ión
etc., etc.

Edición de 2,553,500

Impresore1

lnternational Bible Students Association


Watch T ower Bible and T ract Society
Brooklyi:J, N ew York, U. S. A. ·
También
Loncl~, Toronto, Melbourne, Berna, Madeburgo, ete•

. oLA TORRE DE L V IG IA•


Calzado M elchor Ocampo 71
MEXLCO. D . F.
Como Testimonio al Nombre de
Dios, el Señor,
El Dador de todo dón bueno y perfecto
Se Dedica Este Libro

"El que creó 1m cielos v 'te., dio· su e:~:pan·sión, el q1¿e


c::ct endió la tierra 11 sus· productos'; d que· da aliento a la
gente q1¿e .~o!)re ella. vive 11 espíritu a. loa q·ue can~inan
por clla.."-Isaías 42: 5.

("Creation" in Spanish),

copyrlghted 1927 by
J. F. Ruthcrford
Mad &· in U. S. A..
r r
PREFACIO

e J
ON bastante placer presentamos •un nuevo libro de
la pluma del Juez Rutherford. Durante los últimos
, , 1n o años ·.sus libros han sido pub1icados en más de
lr1 lnta idiomas y han alcanzado una circulaeién combi-
ut dil de veintisiete millones de ejemplal'es. Es probable
•tu los -escritos de n·i ngún otro hombre en la tier.ra hayan
l••uido mayor circuJación. Este libro Be publica con el
1 de ayudar a la gente a entender mejor su !relación
• \ 11 1 Gran Creador. A:~da a adquirir rese conocimiento.
1 •)~¡ un 'testimonio al nombre de Jehová, y lo ponemos en
llt nnos '<le la gente·.en la'()()nfianoza de que ha de redundar
1·1 l au provecho.

Los l:Ml'RESORES
UNA PALABRA AL LECTOR
EHOVA es el Creador de los cielos y la tierra y el
J Dador de todo dón bueno y perfecto. Su nombre
hasta ahora no ha recibido el honor debido, pero ~está
llegando el tiempo en que El será mejor conocido por
sus criaturas. Este libro se publica con el fin de capa-
citar a la gente a tener una clara . concepción del Gran
Creador y de su bondad para con la raza humana. El
conocer a Dios y el apercibirse de su relación para con
su creación, pondrá al que indaga muy por encima de las
cosas sórdidas del presente mundo malo dándole una
hermosa perspectiva de las bendiciones que, despren-
liéndose de las bondadosa mano de Dios, han de alcan-
zar a todo sér humano. La paz, la prosperidad, la vida
y la felicidad están al alcance de todos, y n(l.die deberia
desaprovechar la oportunidad de informarse con respecto
a la manera de obtener estas cosas tan deseables.
EL AUTOR
LA CREACIÓN
J '.. '> 1 ,; liH

LA cR.EA'C lóN
Se:re'S Espir-ituales '>
1

AS condiciones. y medio ambiente, lo· mismo que·


L el -aspectcr general del pais son ta:l'es' en: Palestina
· q1re inducen a una sol'emne meditación. Af subir
l11rJ colinas' de Ju·dea· en el' otoño pro.nto se convence uno
d que son p-oco comunes' lo raro de la atmósfera y lo
1 lrt ro del ciel'o. Y e'n las noches· las estrellas se ven
•ll r tan grandes· c·antida:d'es que parece se codearan para
rLIJI'irse · paso. Se-gún los· astrónomos, exrsfurr treinta
nril millones de cuerpos· astrales en el universo. Estas
po.l abras no pueden s·er plenamente entendidas por la
'tt( nte humana~ pero de todos modos, al contemplar los
ll!lninosos· astros a lo menos puede uno· esta'r· de acuerdo
en que los astrónomos no han. exagerado· las cosas. Con
' dmiración y reverencia, al mirarlas, no podrá usted
m nos que hacerse la pregunta: ¿ Quién hizo esa infi-
1icl ad de hermosas estrellas cuyos gentrles ra:yos llenan
1 alegria la fatigosa senda d'el solitario viajero?
Siendo ust ed una persona sensata, dotada de facul-
'Lttdes de raciocinio, buscará 'sin dml'a una razonable
nontestación a su pregunta. Usted habrá oído hablar
el e la teoría de la evolución, pero ante lo majestuoso
d •l espectá:culo usted la rechazará como fudigna de con-
sideración. N o. es razonable pensar que esas estrelli,IS
r;e hicierorr a sí mismas o que resultaron ·p or casualidad.
'u misma existencia es un elocuente t estimonio de que
existe un C1·eador, & cual es superior a esas estreHas;
el que Yas hizo y l·as culoc6· en el' firmamento.
'l
8 La Creación.

Sin duda . usted siente un sincero déseo de infor-


marse con respecto a las· maravillas . que contempla.
¿ Quién puso ese deseo en su mente? ¿ Quién dio a usted
el poder de raciocinar y la facultad de buscar la i.nforma-
ción? Si existe un gran Creador que hizo esos mara-
villosos. astros y quien lo hizo a usted, ¿no es razonable
el que El hiciera posible para usted el obtener una res-
puesta del origen de las cosas visibles? Necesariamente
ese registro debe ser consistente consigo mismo y con
el gran Hacedor.
Todos los libros .escritos por el hombre no llenan la
medida de la ·requerida norma porque son solamente .la
opinión expresada de seres imperfectos. N o son con-
sistentes· consigo mismos ni con el Creador, quien de
necesidad posee ilimitada sabiduría y poder. Solamente
la Biblia llena todos los requisitos. · Es consistente con-
sigo misma y no se contradice cuando se entiende debi-
damente. Es también consistente con Aquel que es
perfecto en sabiduría, justicia, amor y poder. La Biblia
responde sus preguntas; sus respuestas son enteramente
satisfactorias a una mente razonable. Es la sagrada
Palabra del Creador.
La Biblia revela que Dios es el nombre de Aquel que
ejerce el poder supremo en la creación y en todas las
cosas. Según la Biblia, El tiene otros nombres, toJos
los cuales llevan consigo el sig¡üficado concerniente a
su relación con sus criaturas. Un estudio cuidadoso ele
la Biblia muestra que es absolutamente correcta en
todas sus pal'tes. En proporción a que uno avanza en
el examen de las sagradas páginas no puede menos que
maravillarse de las sublimes cosas que revela. Se ve
uno forzado a llegar a la conclusión de que solamente
el Sér Supremo y Eterno pudo haberla dictado. La
Biblia no solamente revela la existencia de . ese gran
Dios, y que El es el Autor de la creación, sino además
hace patente un maravilloso progPama que el gran
Creador está llevando a cabo de una manera perfecta
Seres Espirituales 9

1 ordenada, .y el cual redundará finalmente en el eterno


htcn de todas sus criaturas y en la gloria del gran
rcador.
Con profundo interés la mente reverente la estudia,
al ensancharse su mente, y al aumentar su entendi-
lr\iento de las grandes verdades que ella contiene, no
puede menos que exclamar: "¡Oh profundidad de las
riquezas, así . de la sabiduría como de la ciencia de
1 ios !" Si, siendo hombre imperfecto, usted antes de
omenzar a edificar un edificio hace un plano, ¿no será
r.<tzonable esperar que ·el poderoso Creador del universo
latya formado desde un mismo principio un plan de
n ción en lo que a su obra respecta? La Bibila muestra
c¡ue Dios tiene un plan, y que en el orden progresivo
de su obra cada acontecimiento ocurre exactamente al
tiempo por El marcado de antemano.
Para todo aquel que diligente y sinceramente busca
onocimiento, el desarrollo del plan de Dios es ele sumo
interés. El hombre sabio oye para aumentar su caudal
lle sabiduría, y el entendido, para adquil'ir consejos sa-
bios. (Prov. 1 :5). "Cuando entrare la sabiduría en
tu corazón, y la ciencia fuere grata a tu alma, la dis-
creción vigilará sobre ti, y la inteligencia te guardará,
para librarte del camino del inicuo, de los hombres que
hablan cosas perversas."-Prov. 2:10-12.
¿Pero cómo comenzar a aprender sabiduría? La
reverencia a J ehová es el principio de la sabiduría.
(Prov. 1 :'l'; Sal. 11 :10) . Los que de una manera re-
verente, y diligentemente tratan de entender los se-
cretos de Jehová, serán debidamente recompensados.
"La privanza [el secreto] de Jehová es con los que le
temen, y haráles conocer su pacto."-Sal. 25:14.
:Fe implica el adquirir un conocimiento verdadero y
el confiadamente depender de ese conocimiento. La fe
en Dios implica el ·adquirir la verdad y los hechos con
respecto a Dios y luego confiacJamente depender en
ello. Si usted desea conocer· a Jehová y recibir su bene-
10 · La; Oreacion · ·
plácitq/ le es preciso creer que El existe ' y que ~s 1e~
remunerador de los que le buscan diligentemente. '(Heb.1
11 :6). N,o se puede creer sin conocimiento. · Con el
~in de. que eL hombre. pueda adquirir conucimiento lo ha
dotado Dios de facultades. de raciocinio, y h invita a
que use esas facultades· y razene suhre- las gra:ndes ver-
dades reveladas ·en la&· Escrituras. ( Isá. 1 :18). Al
cl·ebido tien:po hallará: usted que la mzón y. las EscriJ
tur3is están en perlecto acuerdo.
Ahora, vol vamos a la pregunta que usted mismo se
hizo:· ¿Quién hizo las estrel'l'as-? La Palabra de Dios
responde: '''Hizo Dios dos grandes lumbreras ;, la lum-
brera mayor para :regir el dia,' y la lumbrera menor para
Tegir la r¡.oche; hizo, tambiérdas estrellas." (G·én. 1: '16).
Pero, no solamente El laiJ hizo, sino qu:e también
"<menta la, muchedumbre de. las estrellas, y a todas
ellas las llama por s1:1s, nombres." (Sal. 147. :4). Su
eterno. poder · y dilivinidad son clatamente ma:J ifestados,.
siendo percibidos po'l' medio de: sus obras. (:J1,om. 1 :20).
El observar esas maravillas que se contemplan en el
cielo, induce a; una sobria meditación. Ahora, pasem0s
::\ "razonar j,u ntos" sobre las• c9sas creadas por Dios.

EL PRINCIPIO DE LA CREACION
De necesidad hubo un•tiempo en que Dios estaba solo.
AF debido tiempo comenzó su · creación. . El iiiempo en
que Dios comenzó su creación no se revela en las Es-.
crituras, es decir; no se espeeií'ica fecha alguna, pero si
se muestra cual fue el principio ele esa creación. Aun
cuando· esto hftya ocurrido hace un millón de años, o
dieZ' millones· de años, es• enteramente inmaterial para
nosotros~ Le que· queremos averiguar• es el comienzo de
esa creación. Es de esperarse que el Sér Eterno que
creó todas las cosas .oonforme· a su sobe:rana voluntad,
y quien hizo 4lllC un regiist:F(;)' de es~ creación ·se pre-
1

Sere8 $spirituales 11

IWl'ara, tuviera .cuidado de que ese re~istro fuese ver-


dalero.
Por lo tanto, la Biblia, la Palabra de Dios, de nece-
Hid.ad nos trae la absoluta verdad. N o · habla razón
11inguna para tener un registro falso. Los hombres
que Dios us6 pata que escribieran la Biblia fueron diri-
ódos por su poder ilimitado y por su perfecta sabiduria
•on el fin de que hicieran de ese registro uno verda-
<1. ro y correcto. "Las oj;lras de sus manos son verdad
y juicio; seguros son todos sus preceptos; establecidos
para siempre jamá~, hechas en verdad y en rectitud."
( al. 11:7, 8). La Palabra de Dios .es verdadera y El
In. engrandece sobre su nombre. ,(Sal. 138: 2). l~l gran
'er Et.erno no cambia, y para El lo que úna yez El~ ver-
dÍ\dero siempre lo es. "¡ Susténtame conforme a tu
promesa, para que viva; y no quede yo avergonzado ele
mi esperanza!" (Sal. 119': 116). La Palabra de Dios e.s
11na indisputable ,autoridad copcerniente al principio de
In. creacipn. Eim autondad es verídica y el qué la es-
'll,ldia puede confiadamente depender ae ella.
La Palabra de' Dios registra el hecho dé q'ile much9
tipmpo antes de la creación de la t~erra, cuando1 no. habia
mares, ni manantiales, ni lagos; antes de qile hubieran
olinas, y aun antes de que fueran creado~ el sol, la luna
y las estrellas, Dios comenzó su· creaci6n. El principio
de esa creación fue el Logos, ·el Amado. El nombre
:Logos es uno de los nombres o titulos dados al amado
H ijo de Dios y lleva consigo un profundo significado.
iempre que Dios da a una criatura algún nombre, ese
Dombte significa mucho. El Logos quiere decir el que
tcpresenta o habla por . ó en lugar del g.ran Creador.
Por esta razón el titulo frecuentemente se traduce como
.EL VERBO, puesto que el LOgos es la expresa palabra o
verbo de. Aquel a qu~en representa. . 1
, Plugo a Dios hablar por medio del Logos para que
su mensaile fuera llevado lt sus otras criaturas inteli-
gentes. (Heb. 1 :2). Es por lo tanto bastante apro-
12 La Creación

piado el que este poderoso y amado Hijo de Dios reciba


el nombre de El Verbo de Dios. Concerniente a El se
escribió "En el prmcipio era el Logos [el Verbo], y el
Logos estaba con el Dios, y el Logos era un · Dios."
(Jn. 1:1, 2; traducción interlineal del. Diaglott). Este
Sér poderoso, el Logos, hablando como el autorizado
representante del gran Jehová Dios, dijo con referencia
a la creación:
"Jehová me formó como el principio de su carrera,
antes de hacer sus obras de tiempo antiquísimo. Desde
la eternidad fui yo ungido, desde el principio, antes
que existiera la tierra. Cuando no habían abismos, fui
dado a luz, cuando no había manantiales abundantes
en aguas; antes que se afirmasen las montañas, antes
de haber collados, fui dado a luz; cuando no se había
hecho todavía la tierra, ni los campos, ni el principio de
la materia térrea del mundo. Cuando Jehová estable-
ció los cielos, alli estaba yo; cuando trazó un circulo
sobre la haz del abismo; cuando fortaleció las nubes
allá arriba; cuando dio resistencia a las fuentes del
abismo; cuando impuso al mar su decreto, para que las
aguas no traspasasen su mandato; cuando ordenó los
cimientos de la tierra."-Prov. 8:22-29.
Este Sér amado, el principio de la creación de Dios,
fue la delicia de Dios, y su Padre, su Creador, lo tomó
en su confianza y desde entonces en adelante, por medio
de El creó todas las cosas que han sido creadas.
. "Todas las cosas por medio de El fueron hechas, y sin
El nada de lo que ha sido hecho fue hecho."-Jn. 1:3.
Al debido tiempo de Dios, el Logos fue transferido
del cielo a la tiena y hecho en la forma del hombre.
"El Verbo [el Logos] se hizo carne, y habitó entre
nosotros." (Jn. 1 :14). Desde entonces ha sido cono-
cido con el nombre que ;Dios. le dio, Jesús, porque
Jesús significa Salvador. (Mat. 1: 21). Al tiempo ~el
comienzo de su ministerio en la tiena, 'El fue ungido
/ por Dios del espiritu santo, y desde ese ti~mpo en ade-
Seres Espirituales 13
lnnte se conoció con el titulo de Cristo Jesús porque
( risto significa el Ungido. (Mat. 1: 16). Después de
haber representado fielmente a Jehová en la tierra, a
rl r{ts de sus otros titulos le fue dado el de "Fiel y
V raz."-Apoc. 19:11.
Las Escrituras, refiriéndose en otra parte a este
nsunto, llaman al Logos "el principio de la creación de
l)ios." (Apoc. 3 :14). Después de su creación, Dios hizo
nl Logos su agente activo en lo que toca a la creación
de todo lo demás que fue creado. El Logos fue puesto
•·n una posición de confianza. Jehová consultaba con
l•ll, y todas las cosas fueron bajó la dirección del Todo-
¡)oderoso Dios y por medio del Logos. Con referencia
n esto está escrito:
"El cual es la imagen del Dios invisible, el primo-
I(Ónito de toda la creación; porque por El fueron crea-
das todas las cosas, en los cielos y · en la tierra, visibles
invisibles, ora sean tronos, o dominios, o principados,
o poderes; todas las cosas por medio de El y para El
Cueron creadas. El es antes de todas las cosas, y todas
las cosas subsisten en El."-Col. 1:15-17.
Como prueba adicional de que el Logos fue el depo-
Hitario ele la confianza de Dios en cuanto a la creación.
1 emos: "Para nosotros empero hay un solo Dios, el
)adre, de quien son todas las cosas, y nosotros para El,
y un solo Señor, J esu-Cristo, por medio de quien son
todas las cosas, y nosotros por medio de EL" ( 1 Cor.
8 :6). :Esto no quiere decir que al tiempo en que todas
las cosas ·fueron CI'eaclas ya llevaba El el nombre de
J·esu-Cristo, sino que el que ahora lleva ese título, lo
mismo que otros titulas, fue el que creó todas las cosas.
espués de crear al Logos, el Todopoderoso no creó
ninguna otra cosa ni sér sino por conducto del Amado
R ijo suyo.
Esta es pues la prueba positiva de que las estrellas y
toda otra. cosa visible e invisible fueron creadas por
J e~ová Dios, por la instrumentalidad de su 4gente
14 La Oreació1'~

Actiyo, el Logos. '.rapto en' eito,' com~ ~:r¡. tóda ,¿tra


éosa, el .Logos •en.Í odo tiemp~ lÍa ,s'ídb fiel ''en representar
al gran Jehová Dios.
"Dios es Espíritu:'' (Jn. 4:24). Dios es y siempre
será invisible para el hombre. "El cual 'sólb tiene in!
mortalidad, habitando en una luz inaccesi:ble; a quien
ninguno de los hombres ha visto, ni le puede ver; a
qu~en se honra ·y poder ·eternos.:' · (1 , 'l'im. 6 :16). 1L'd
palabra '"esp'íritu" proviene de· una raiz que apropia c1A-·
fuente se traduce 'viento. El viento es ¡nvisible para
elliombre y tiene poder. Dios es invisible al hombre y
tiene 1 infinito poder. Por lo tanto, es apropiado que
hablemos de Dios como El Espíritu p,orque El es Y'
siempre será invisible al hombre, y porque en El :¡:-es~ de
toda potestad. ·
Dios no es una criatura espiritual pero es un Sér
espiritual El Logos si es una crí~tura espiritt¡al, y
fue creado ,por el Gran S'é r Espiritual, Jehová. :Desdé
el tiempo de su creación El estaba con Dios, en su [n:e-
sencia, y era siempre su delicia. Por lo tanto, es ente-
r amente propio, conforme a las Escrituras, que hable-
mos del Logos, ahora ta:mbién conocido como Cristo
J esús, el gran ele y poderoso Hijo de Dios, como un sér
espiritual, y · como la primera criatura o primogénitd
de toda la creación .
. Ninguna criatura puede existir sin un organismo.
'l'odo sér espiritual necesita un cuerpo apropiado. ((Hay
cuerpo natm;al, hay también cuerpo espiritual." (1 · Cor.
15 :44). El cuerpo natural está compuesto de carne,
sangre y1 ht¡esos, Un cuerpo espiritual no tiene nin-
guna de estas cosas: (Luc. 24 :39; 1 Cor. 15 :50). U:r¡.
sér humano no puede describir la apariencia de un Eér
espiritual porque este conocimiento no le ha sido dado.
No sabemos lo que es un sér espiritual.-Jn. 3 : 2. . 1
Eu lenguaje simbólico, las estreUas se usan para.' \ ·c-
presentar seres espirituales. (Num. 24:17; Job 38 :7;
Sal. 14:8·:3; Isa. l4 :13'; Dan. 12 :3; apoc. 2 .28). ·•Asi
Ser63 Esp,irituales 15
il mo las estrellas que contemplamos despiden luz que ·
r flej ~ la gloria del gran Creador, de igual manera los
11 tes espirituales que moran con Dios son portaluces en
llll nombre y para su gloria. 1
;Entre los peres espirituales 'creados por Jehová; por
ynedip del Logos, se llncontraba Lucifer. Su nombre
!lignifica "el po.rtaluz" o estrella de la mañap.a. (Isa..
l1: :12).. Concerniente a é.l se escribió: "En el santo
n onte de Dios estabas; en medio .de las piedras de fuego
te paseabas.'' (E7.e. 28 :14). El término "piedras de
Lltego" es simbólico, y parece aplicar a otras criaturas
•spirituales despidiendo gran cantidad de luz. (Heb.
,l: 7; Sal. 104.: 4). Una clase de criaturas creadas por
io¡¡ por medio del Logos ·se · clescriben en las , ,Escri-
turas como querubines. ( 1 Sam. 4: 4; 2 ·Sam. 6 : 2;
1 al. 99 :1). De este modo las F...scrituras muestrap. que
los queru).Ji,nes ocupan una posición de honor . y. con-
fianza cerca del gTan J ehov.á Dios.
A otra~ criahú.as del reino espiritual s~ les da el
'ltOmbre de serafines. , Estos fueron creados por el Lo;
gos, ·bajo la dirección del gran Jehová Dios. Estas
r.iaturas son portadoras de h1z, •y<reflejan ,la. gloria , el~
Dios.-Isa. 6:2-4. ·
Arcángeles es el nombre dado a otras de · las cria:-
t urns .espirituales de Dios, y este nombre signHica "pri-
ner .rango." (1 'l'es. 4:16). El titulo o nombre de ar-
ángel también se aplica al Logos cuando servía á.
Jehová en alguna específica capacidad. Uno de su,s
titnlos es "Miguel," que quiere decir "como Dios."
(Judas 9; Dan. 10 :13; Apoc. 12 :7}. Es sin embargp
bastante claro que el título Miguel apLica a todo. men-
sajera de Dios revestido cott autoridad especjal y en- ·
viado a una misión ,especial. En pru.eba de. , esto se
ncuentra escrito: "Miguel, uno de los principal~s prín-
cipes, vino a ayudarme." N o obstante, ·este titulo per-
tenece especialmente al grande y amado Hijo de Dios.
- Dan. 12:1. ·
16 La Creación

· Otras de las criaturas espirituales o 'Celestiales de


Dios, formadas por conducto de su amado Hijo, el La-
gos, son los ángeles. "Que hace sus ángeles los vientos;
los flamiferos rayos sus ministros." (Sal. 10{:4). El
nombre ángel significa mensajero o representante en-
viado a ejecutar un asignado deber. En el desarrollo del
plan divino Jehová ha usado a estos mensajeros o án-
geles para llevar a cabo sus órdenes. Estos ángeles son
seres espirituales y por lo tanto son invisibles a los hom-
bres. De vez en cuando se les ha concedido el poder
·de aparecer ante los hombres en cuerpos materiitles y
luego, al propio y oportuno. momento, desmaterializarse.
Muchos casos se registran en la Biblia en que ángeles
han aparecido en forma humana para llevar a cabo
cierta misión encomendada a ellos por Jehová.
En una ocasión .Abraham se encontrába sentado a la
entrada de su tolda que había plantado en el encinar
de Mamré, en la parte sur de Palestina. .Alzando los
ojos vio ante él tres varones de pie cerca de él. Las
circunstancias que se registran en conexión con esto, y
los acontecimientos que se siguieron, establecen el hecho
de que uno de estos tres mensajeros era el Lagos, el
cual apareció en forma humana paTa dar un mensaje
de gran importancia a .Abraham.-Gén. 18 :2-20.
Cuando .Abraham, en obediencia a la orden de Dios,
ofreció en sacrificio a su hijo Isaac, "el .Angel de Je-
·hová le llamó desde los cielos." (Gén. 22 :11) probando
con esto que ángeles aparecian como mensajeros de
Jehová a dar mensajes en su nombre, y se encontraban
en la presencia de seres humanos, siendo a ellos invi-
sibles a causa de sus cuerpos espirituales. Los cielos
quieren decir lo que es alto y elevado y que es invisible
al ojo humano. Los ángeles son superiores y más ele-
vados que el hombre. El ángel que habló a .Abraham
era más elevado y superior que él y fue invisible para
.Abraham. . Ese ángel . que le habló era un mensajero
del gran Dios. ·
Seres Espirituales 17
Estos seres espirituales o mensaje:ros de Dios también
aparecen en otras formas aparte de la humana cuando
·on enviados con el fin de llevar a cabo las órdenes de
Jehová. Como prueba de esto tenemos el caso en que
Moisés vio una zarza ardiendo que no se consumía. El
fue a observar el fenómeno, "y viendo Jehová que se
desviaba para mirar, le llamó Dios de en medio de la
zarza, diciendo: ¡Moisés! ¡Moisés !".,-Ex. 3 :2-4.
Los ángeles han sido usados como guías invisibles de
los hombres. Cuando Dios instruyó a Moisés para que
guiase a los israelitas por el desierto hasta la tierra de
Canaán, le dijo: "He aquí, yo envio mi Angel delante
de tu rostro, para guardarte en el camino, y para intro-
ducirte en el lugar que te tengo preparado."-Ex.
23:20.
· Estas criaturas espirituales. frecuentemente ·han sido
enviadas por Jehová Dios, como mensajeros de guerra,
a ejecutar órdenes en contra de los enemigos de su
pueblo. Cuando J osué estaba para entrar con los is-
raelitas a la tierra de Canaán, Dios mandó a uno de sus
ángeles como ~apitán de su. propio ejército para dirigir
a Josué.
"Y aconteció que estando Josué cerca de Jericó, alzó
los ojos, y miró; .y he aquí un hombre que estaba en
pié frente a él, con su espada desenvainada en la mano.
Josué entonces fue a él y le dijo: "¿Eres tú de los
·nuestros, o de nuestros enemigos? Y él respondió:
·Ninguno d~ los dos, sino soy el Príncipe del ejército de
Jehová; ahora ·acabo de llegar. Entonces J osué cayó
en tierra sobre su rostro, y adoró. Y díjole: ¿Qué dice
mi Señor a su siervo? Y el Príncipe del ejército de
J ehová dijo a J'()sué: Quítate el calzado de los pies, por-
que el lugar donde tú estás es santo. Y J osué lo hizo
asi."-J os. 5 :13-15.
En los cielos hay. multitudes de criaturas espiritua-
les del rango angelical: "Los carros de Dios son veinte
millares, ángeles miles; el Señor está . en medio de
r- La Oreació~ · ·.

elfos." ( Sál. 68 :17, Leeser). Dios los manda como


protectores de los qt¡e son suyos : "Mas J acob siguió
su camino; y saHeren a recibirle ángeles de Di~$. Y
dijo J acob al verlos: Campamento de Dios es éste; y
llamó aquel lug~rc Mahanaim."-Gén. 3~ :1, 2.,
. De estos· ángeies se habla como los . ejércitos de Je-
hPvá. Cuando el Logos, en la tierra y llevando el nom-
bre de Jesús, .~staQa a punto 1de ser tomJldo en man()fl
de sus enemigos, El dijo a uno de sus .discípulos:
"Acaso piensas .tú que no puedo erar a. mi Padre, y El
ahora mismo, pondrá .a mi ·servicio más de doce, legio-
nes de ángeles ?"-Mat. 26:53.
Dios ha ereado a estas poderosas criatur.as espiritua~
les para sus propios fines y:para placer ,suyp. N o puede
haber la menor duela ele que son hermosos, más hermo-
sos de ló q_ue al hombre es-posib'le describirlos. Ningún
hombre puede ver a .una criatura. .espi<ritual y vivü:.
Cuando alguno de éstos han aparecido en forma .de hom7
b:res, han .sido hennosos y ·gloriosos. De eso .se saca eB
consecuencia que sus cuerpos espirih1ales son much0
mas hermose.s ·y gl.ofiosos: Daniel nos. habla de estos
ca'sos. Esfas son sus palabras : .
"Alcé mis oj0s y miré, y he aqui a un varón que traía
·vestiduras de lino blanco, y tenía ceñidos los lomos de
.oro fino de Ufaz'; y su cuerpo era como un crisólito, y
•su rostrd como la aparieBcia del relámpago, y sus bra-
:zos y sus pies .como 1a refulgencia de bronce b¡·uñido, 1
la voz de sus palabr.as era como el estruendo de un ejé:v-
ciio."-Dan. 10:5, 6. .
En la mañana ,de la resurrección de Jesús, cuando al-
gunos de sU:S fieles seguidore.s fueron a la tumba .a cui-
.dar .de su ·cuerpo, "un ángel del :Señor descenoi6 del
lCielo, y llegándose. . .ren>lvió la . piedr.a. de la puert11 del
sepulcro, y se sentó sobre ella. S,u aspecto era .como
un relámpago, y·su v.estido blanc!> como la nieve."-Mat.
28:2, 3.
Y'pttesto .que 1M :telaciones dadas son. selamente eSr
Seres Espirituhles l!l
.. r r • 1 •
f:ner.ws pnm describir l¡t gloria y la beUeza de los án-
reles de menos rango, ¡ cuánta más será la belleza y
glol'ia del Lagos! Del amado T-Iijo de Dios se ha es-
crito~ ''Más hermoso eres que los hijos de .adán; la
gracia _es derram~da en tu~ labios; por tanto' Dios te ' ha
bendec1do para s1e1trp're." (Sal. 45 :2). Después de que
Jesús sl'ibió al cielo, 'Saula de 'I'arso tuvo una 'visión de
~n 'gloria refléjada, la cual fue tan maravillosa y des-
lumbradora que Saulo quedó ciego. La luz de esa
gloria -reflejada fue más brillante que el ·sol a medio
d1a.-Hech. 9 :3-8. '
JDn el misnio sagrado registro se es·cri:be concerniente
n: este Sér poderoso y glorioso: u'h1i amado es blnn co Y.
rubio, · el más señalado entre diez ' mil. Su cabeza es
comp el oro más fino, sus cabellos ·ondulantes y negros
cómo el. cuervo; sus ojos como . palomas, junto a los
arroyos de agun.s, lavadas con leche, sentadas junto a
las corrientes abundantes; SU$ mejíiias como eras ue
M1 samo, como montones de yerbas olorosas; sus labios,
lirios rosados que gotean la mina liquida; sus manos
cilindros de oro guarnecidos de crisólito; su cuerpo, una
obra de 111arfil esmatalda' de zafi<Tos; sus· piemas como
columnas de mármol qla.pco, que descansan sobre basas
de oro :f.ino; su aspecto es como el Liba no, majestuoso
como los cedros; su boca es la dulzura misma; ¡ en fin,
El es del todo amable! ¡Tal es mi amado y tal es mi
amiO'o, oh hijas de Jerusalem !"- Cant. 5 :10-16.
Hace muchas edades, antes de que' comenzara el
tiempo terrestre, el gran J ehová Dios tenía una mara-
villosa qtganización consistente de ejércitos 'de seres
espirituales, 1os ·hermosos ángeles entre ellos, arcánge-
les, serafines, querubines, Lucifer, y el poderoso Lagos,
los dos últimos siendo también designados como uestre-
llas de la maJl.ana.)' Podemos sentirnos seguros de que
él gran Creador no trajo a }a existencia estos seres sin
ningún objeto; por lo tanto, podemos imaginar que cada
uno de ellos tiene ·asignados algunos deberes de impar-
20 La Creac·ión

tancia. Todos ellos, cuando fueron creados, y al asig-


nárseles sus deberes, eran santos, es decir, por entero
a
dedicados · Jehová. Estas gloriosas· criaturas espiri-
tuales, todas en armonía con Dios, constituyen lo que
se llama cielos.
Sobre todos ellos, y más elevado que todos ellos, por
supesto que estaba el gran Jehová Dios, y todas
sus santas criaturas se encontraban cantando alabanzas
y regocijados ante el Eterno. "¡ Cantad a Dios, cantad
alabanzas a su nombre 1 preparad el camino para Aquel
que marcha triunfante por los desiertos, en la potencia
de Y ah, nombre suyo, y alegráos delante de El. . . Al
que marcha triunfante sobre los antiquísimos cielos de
los cielos ! ¡ He aquí que El hace resonar su voz 1 ¡ Su
poderoso voz 1" (Sal. 68 :4, 33). 'l'odos estos seres del
reino espiritual obedecían, ponían en alto, alababan,
rendían su lealtad y dependían del gran Jehová. Por
eso está escrito que Jehová marcha o cabalga sobre los
cielos de los cielos. 'l'odos los cielos declaran su gloria
y cantan sus alabanzas.
Hasta el tiempo que hemos descrito de la creación de
Dios, no había tierra, y, por supuesto, el hombre no
había sido creado. Es razonable imaginar que Dios
manifestó a sus criaturas espirituales su propósito de
crear otro sér, el cual llamaría hombre, y el cual sería
el rey de su hogar, al que se le daría el nombre. de tie-
rra. Llegó el tiempo cuando El puso los fundamentos
de la tierra, y esa ceremonia de colocar la piedra prin-
cipal del lugar de habitación de la criatura que se ha-
bía propuesto traer a la existencia sin duda trajo gran
gozo a todas las criaturas en los cielos. Las dos pode-
rosas '~estrellas de la mañana" entonaron un jubiloso
dueto y todos los hijos de Dios prorrumpieron en ruido-
sas manifestaciones de gozo.-J ob 38 : 7.
Indudablemente que para este tiempo había ya en
existencia un buen número de estrellas y planetas que
llevaban a cabo sus funciones y reflejaban la gloria de
Seres Espirituales 21
~u gran Creador, pero aún no existía la tierra. Cuando
"Sta hermosa y gozosa ceremonia en que las gloriosas
criaturas de Dios entonaron sus alabanzas, se celebró en
los cielos, tan solo despuntaba el comienzo de la tierra.
Hasta entonces nada existía en el cielo para empañar
la paz, la belleza y la felicidad en él. Esto lo sabemos
'¡:Jorque todo lo alli creado E)ra obra de Dios, y la obra
de Dios es perfecta. (beut. 32 .: 4). Hasta donde es po-
ible llegar por medio del registro divino, nada aún
había ocurrido que pudiera dar margen al desvío de
alguno de·'sus seres espirituales. Como un gran ejército,
tlirigido por el Logos y por la otra estrella de la ma-
fiana que marchaba a su lado, todos proclamaban las
alabanzas del que habita en la eternidad. Con gozosa
anticipación esperaban el día en que habría otro reino
en el cual otra criatura formada a la imagen y seme-
janza de su Creador, dotada de sabiduría, justicia, amor
y poder, sería puesta como soberana del lugar de su
habitación.
t l f
CAPITULO II

La Tierra
A TIERRA es el globo terre~tre más gra~de. den-
L tro de la órbita del planeta Júpiter, siendo este
último de dimensiones mucho mayores. L,a tierra
es el tercer p~aneta en distancia desde el sol, y g.ira al
derredor del Astro Rey en una .órbita elíptica, llevando
al mismo tiempo un movimientd de rotación como sobre
un eje. El sol es fuente de luz para aquella parte de
la tierra que :le da frente. La distancia media de la
tierra al sol es· aproximadamente noventa y tres millo-
nes de millas.
El, diametro de la tierra ,es siete mil novecie:qtas diez
'y siete millas, 'en tant.o que el' diámetro de Júpiter es
de ochenta y seis mil doscientas cincuenta y nueve. La
circunferencia de la tierra es de veinti cinco mil millas.
Se mueve sin cesar y regularmente en sn órbita y fija
nuestro año en trescientos sesenta y cinco días, cinco
horas, cuarenta y ocho minutos y cuarenta y seis se-
gundos. La rotación de la tierra es tan perfectamente
r~gular y uniforme que los experimentos hechos en un
período de dos mil años muestran que la variáción ha
sido menos de un milésimo de segundo.
La tierra está su. pendida en el espacio. En su su-
perficie hay grandes montañas, inmensos depósitos de
agua, anchurosos campos, y unas cuantas cosas que el
hombre ha formado sobre ella. En ella se enceuntran
todos los preciosos metales conocidos al hombre. Su
suelo produce innumerables clases de plantas y árbole,',
lo mismo que flores de extraordinaria belleza y frutas
y aliment<~s de diversas forma s y clases.
22
La Tierra 23

¿ QU:i~n · hizo · este maravilloso pláneta y lo colocÓ · n


c·l espacio? Los ·que se dan el nombre' Ue sabios, to
mnndb aspecto d'e sabios, y en su asumida sabiduría,
tratan de explicar· que la formó la naturaleza. Pero,
¿para qué desperdiciar tiempo en las· cosas y teorías de
tos hornhres imperfectos cuand'o' tenemos un seguro y
t}ositivo testj:monio del cual n~· pnede haber la meno:v
eluda? La tierra: es la obra del gran Creador, Diqs.
?1 hizo que su siervo escribiera en el Sagrádo Registro :
"De· Jehovál es la tieJTa y cuanto eUa contiene." (Sal.
24:1 ). "El extiende el norte sobre el vacío, y sus-
pende fa tiena de la nada." (Job 26:7). "¡Bendice,
~h alma mia, a J ehov4! Jehová, Dios ,mio, 'l;'ú e,res
muy grande; te has revestido de gloria y de majestad .
. . . EI fundó lw tierra sobre sus basas; no será jamás
movida. · La cubrió con el mar profundo, como con un
vestido; sobre· las montañas· estaban las aguas."-Sal.
104:1, 5, 6. ·

TIEMPO DE LA CREACION
En ninguna pa<rte ·se nos indica el tiempo eñ que se
hizo la tierra. Ltls hombres •han expresado varias opi-
niones, pero opiniones solamente no prueban mucho. El
registro divino nos informa: "En el principio· creó Dios
los cielos' y Ta tierra. La tierra empero estaba sin forma
y vacía; y yacían ·tinieblas sobre la haz del abismo; y
el Espiritu de Dios cobijaba la haz de las aguas."-Gén.
1:1, 2.
La forma de l'as rocas muestra de una manera con-
cluyente que en un tiempo esas rocas estavieron suje-
tas a u.n intenso calor. Si Ta tierra en un tiempo fue
una masa candente no podia al mismo tiempo haber
habicl'o· agwas en el1a: Rocas igneas o minerales derre-
tidos: y aguas· nO' podían pennanecer juntos por mucho
tiempo' en el mismo lugar. Por eso, la relación de la
creaei'6n de· l!f tierra; que da- el Génesis aplica solamente
a la tal'ea de p:reparaci6n para sostener vida en ella.
24 La Creación

¿Cuándo comenzó ·ese período? Las Escrituras .di-


viden la tarea de la creación en siete días o períodos de
tiempo. Aun cuando Dios, al haberlo querido .así, hu-
biera podido hacer toda su obra en siete días de veinti-
cuatro horas cada uno, sin embargo, los hechos muestran
que no fue así, sino que el término "día" aplica a un
período de tiempo cubriendo muchos siglos, y no tiene
referencia a días de veinticuatro horas. Puesto que Dios
dividió los períodos creativos en siete, es razonable
suponer que esos días o periodos creativos son todos de
igual duración.
La ley ·de Dios que más tarde fue dada al hombre,
hizo provisión de una semana de siete días cada una,
cada día siendo de veinticuatro horas. Puesto que cada
uno de esos días es de igual duración, lo mismo tiene
) que ocurrir en lo que toca a los siete días de la creación,
es decir, son siete períodos de tiempo cubriendo cada
uno el mismo número de años. En cuanto a la dura-
ción de estos períodos, las Escrituras, lo mismo que
algunos hechos posteriores que se han constituido en
pruebas indisputables que no dan lugar a duda, indican
que el séptimo día o época de la creación que se men-
ciona en el Génesis cubre un periodo de siete mil años
de nuestro tiempo.
Si en atención a lo anterior asumimos que cada uno
de los días creativos fue del mismo tamaño, tenemos
que arribar a la conclusión de que el periodo de tiempo
transcurrido desde el principio de la obra criativa hasta
su final es un período de tiempo de cuarenta y nueve
mil años. N o siendo necesario, y no siendo la voluntad
de Dios el que 'el hombre se enterara de ella, no se revela
cuánto tiempo antes de la preparación de la tierra para
ser habitada comenzó su formaéión o construcción. Lo
que nos es necesario saber es cuándo comenzó a lle-
varse a cabo el plan de Dios en lo que se relaciona ·al
acondicionamiento de la tierra .para sustentar la vida.
Bajo la inspiración y dirección de Jehová (Moisés es-
La Tierra 25

cribió el libro del Génesis. Por supuesto que es un


r.egistro que Dios hizo que su siervo escribiera. Sus
primeras palabras son: "En el principio Dios creó los
cielos y la tierra." Esta es una expresión abstracta y
profunda, pero al mismo tiempo pone fin a toda dis-
puta. El gran Constructor, en un principio; creó los
cielos y la tierra, pero precisamente cuándo, nos es in-
material. Dios, siempre que le place, revela sus secre-
tos. Luego sigue la expresión: "La tierra empero es-
taba sin forma y vacía." Al no tener forma estaba
uesolada, y en ella no había vida. Estaba vacia. N o
habiendo luz en ella, estaba oscura. Desde este punto
es que comienza el principio del período o semana crea-
tiva de los siete días de la creación.
TEORIA DE LA CREACION DE LA TIERRA
Es de esperarse que las teorías de los hombres con
referencia a la creación de la tierra tuvieran que diferir.
Aquella teoría que es razonable y al mismo tiempo está
apoyada por las Escrituras merece una cándida consi-
deración. Las teorías que están fuera de armonía con
las Escrituras deben ser rechazadas por ser inservibles.
Parece ser que el plan de Dios ha sido el de comenzar
a dar luz sobre su gran obra para provecho del hombre
desde el año ele 1874 E. C. Fue en ese año cuando Mr.
I saac N. Vail por primera vez publicó un cuadernito
titulado "El Sistema Anular de la Tierra." Anular
significa en forma ele anillo y en este caso aplica a los
anillos o círculos ele agua o vapor que rodeaban a la
tierra y que se precipitaron sobre ella en diferentes pe-
riodos. Un breve compendio ele .la teoría anular, como
la presenta Mr. Vail, y la que examinaremos antes de
pasar al registro bíblico, es como sigue:
Que la tierra en su estado primitivo era una masa
derretida girando rápidamente por el espacio; que el
calor intenso que de ella se desprendía motivaba la ema-
nación de toda clase de vapores, tanto acuosos como

1
26 La Creación

metálicos, y que éstos fueron conducidos' al firmamento,


que tanto el calor como la fuerza centrífuga hiceron ~
que estos· vapores se aclimularan en el firmamento, es-
pecialmente en la región ecuatorial; que estos vapores
tgneos contenian todos· los minerales fusibles y vapora-
Mes, eonoci'dos en la: tierra; que en proporción a que la
tierra se enrfri6 los más pesados· de estos· vapores· se di-
fundieron en ci'rculos próximos a la tierra y las sustan-
cias más ligeras también se forma-ron en una gran can-
trdad de anillos o capas con~orme a su Ileso y densidad;
que estos anillos o capas se encontraban bien definidos
y sep-arados ; que la: rotación de éstos, cerca de las re-
giones polareS'"·era· más lenta que en el ecuador; que a
medida que estos anillos compuestos de vapores acuosos
y en gran manera cargadas de carbón se enfriaron, , se
aproximaron más y más a al tierra hasta que se preci-
pitaron sobre ella, el más pesado y más próximo siendo
el. púmero en caer, y los demás cayendo a su turno, al
enfriarse, y conforme tomaban su lugar de pr0xomidad
a: la tierra de acuerd'o con su densidad.
El Profesor Vail razona que aun cuando' todos estos
anillos contenian algunas cantidades de carbón y otras
substancias minerales que el gran calor de la tierra babia
expelido de ella, sin embargo el último en su mayor
parte fue de agua; que la luz que penetraba al anillo o
anillos que rodeaban la tierra hizo ele ella algo asi como
un invernadero, haciendo la vída vegetal y ammal ex-
huberante t anto en los polos como en cualquier otra
parte de la tierra ; que estos círculos al derredor de la
tierra rotaban más rápidamente que la tierra sobre su
eje, pero que con el tiempo el proceso de enfriamiento
motivó el que cayeran sobre la tierra, el último en caer
siendo el que se precipitó en los tiempos de Noé. Toma-
mos lo siguiente de "El Sistema Anular de la Tierra" :
Durante esa edad de excesiv<r calor, todas las aguas de 111
tierra est!lba·n suspendidas, en gran manera retirndns de la
La Tierrfl 27
superttcle de la hlrvlen'te, encendida y humeante IJÍilSa .de-
rretida de la tierra.
Este suspendido océano de vapores, de la manera que
nuestra abnósfera ahora, giraba como parte Integrante de
In. tierra, ·formando una atmósfera primeva de gran com-
plexidad ~e materiales.

Este cuadt·o muestra la entera vista de la tierra y su


sistema anular. A es la tierra; B representa la atmós-
fera de la tierra ; O los carbonos pesados y sus subll·
mudos minerales acompafiantes; ]) los carbonos menos
pesados y los hidro-carbonos ¡ E las nieves glaciales y
sus ncompaiiantes; F los vapores exteriores, princl·
palmente acuosos y en unn condición congelada. De
este anillo extedor provinieron las nieves polnt·es que
lwlnron In tierra edénica. Ln calda <le ese anillo pl'o-
uujo el !]lluvio.
28 La Creación
Esta materia suspendida, con el curso de tiempo, se jun.t ó
en los cielos ecuatoriales de la tierra y al condensarse ne.
cesariamente se contrajo, formándose en anillos que giraban
al derredor de la tierra Independientes los unos de los
otros, ltaciendo así posible un gran lapso de tiempo entre
la caída del primero, las aguas más cerca de la tierra, y el
tíltimo, las que se encontraban más remotas en el sistema
anular.
Las aguas que quedaban suspendidas, una vez que las
aguas interiores del primer océano cayeron ·a la tierra,
fu eron cayeado sucesivamente en Inmensos cataclismos, se-
parados por desconocidos periodos de tiempo.
Necesariamente el primer océano se encontraba Impreg-
n ado con grandes cantidades de minerales y sales metálicas,
o lleno de partfculas minerales y metállcas en una cantidad
mucho menos mayor que cualquier ot.ra sección de las aguas
o vapores exteriores, por la sencilla razón que en el sistema
de anlllos, los más pesados vapores se aproximan más a la
tierra en proporción a que ésta se enfría.
'l'odos estos cambios necesitaron mucho tiempo y un mo-
vimiento progresivo de materia repulsada, del ecuador hacia
los polos. También, los anillos o cfrculos del sistema anu-
lar de la tierra indudablemente presentaban el mismo
aspecto general que presentan Saturno y Júpiter hoy en dfa ."
Necesariamente que una sucesión de anillos concéntricos
requiere mucho tiempo entre la ca ída de uno de esos anillos
de vapores y la calda del siguiente. Una vez expulsado de
su posición, cada anlllo, al alcanzar la atenuada atmósfera
de la tierra, con ·velocidad progresivamente decr eciente,
continuaba girando como una banda al derredor de la tierra,
extendiéndose hacia los polos y cubriéndola.
El humo, o carbón sin consumir, mezclándose con los
vapores de los varios anillos, los oscurecía formando capas
o círculos oscuros en medio de otros luminosos, nsf como
po<lemos contemplar hoy en día en ot ros planetas.
Después de que un anillo de vapores caín al aire, es de
suponer que cubría al globo y finalmente descendía a la
tierra, dejando la atmósfera clara antes de que el siguiente
anillo, en su continua declinación, tomaba su lugar en ella.
El evidente retraso de la luna no es otra cosa que la
grad'Jal retirada de nuestro satélite, ocasionada poi ·i a

1
)~
La Tierra 29
ntrncción a que ha tlntlo margen la desaparición del sitema
nnular. La presión !'Jt'r !(In sobre los anillos giratorios de
necesidad reducía su ór·l)ltu,. aproximándolos más a la tierra
hasta por llltlmo, n¡lnr·t tle otras razones, hacerlos caer
oobre ella. Además, c~;; l l" traso de la luna prueba la exis-
tencia ue un sistema llllulnt· en lo que toca a la tierra.
Los depósitos metal!l!eros arqueanos están localizados de
tul manera que su exlst 11 ' la es por completo Inexplicable
conforme a la antigua teol"ln de et·osiones ocasionadas por el
ngua, pero está hermosnnr 11 te de acuerdo con la nueva.
Las capas sllularias, y specialmente el orden en que
ocurren, refutan por compl lo 'la idea de que se derivaron
ue depósitos anteriores. Es ¡>Or lo tanto evidente que du-
ran te la edad palezóica baufa un sistema anular al derredor
ue ia tierra. En otrns pnlnbras, s evidente que no toans
las aguas pl"lmevas cayet-on unte. de que comenzara la vida
en el globo.-The Earth's A.nnnta.r System, páginas 72-74.

Un argumento de mucho peso presenta Mr. Vail al


efecto de que todos los planetas se forman por una ley
inexorable e universal, y puesto que podemos ver los
anillos que rodean a Saturno, y puesto que podemos
ver a Júpiter formando su sistema anular, no
podemos menos que arribar a la conclusión de que la
tierra fue igualmente desarrollada por medio de pro-
gresivos y sucesivos desplomamientos de capas acuosas.
Creo que el nacimiento, crecimiento y desarrollo de los
mundos se encuentra regulado por una ley l.nexorable, y· sl
alguno de los planetas se hu encontrado rodeado de ·anillos,
un planeta hermano, bajo las mismas circuntanc!as, gober-
nado por las mismas condiciones din{nnicas y estáticas de
~uerza, y en proceso de desarrollo, de necesidad tiene que
encontrase rodeado de anillos durante algún tiempo de su
carrera. No igno110 el hecho ue que al variar las circuns-
tancias varía ~~ resultante fenómeno de fuerzas dominantes,
pero los grandes principios de crecimiento planetario tienen
que ocurrir en todos los planetas.
·Por ejemplo, tan esencial es que la formación de círculos
siga a la acción ígnea, como g,ue la . forma achataua hacia
30 La Creación
los polos de un planeta r esulte de su :h1pida· rotació11.l
li:stos no son más que r esultados de fuerzas activas mani-l
festadas en todas tnn·tes del s istema: solar, desde el ar-
diente, hi'r vleute y hmnenate sol •lmsta . el más I\equefío
satélite. Si podemos discernir esta ·tUsposlcléu uulvei'Slll
de los mundos al uuesh'<> derredor, podemos descansar sc-
~'l.lros de que el nuestro ha pasado por esos mismos gran<les
siclos de cambios. Aun más, de hecho podemos leer la his-
toria gCQlógica de In tierra en los mundos con anillos y
fnj :.:.s · del sistema solar.
Debe· ya ser evhlente a todos que los rasgos exhibidos
por las capas vaporosas de 'Snturno y Júpiter son !le ~i:t ul
Importancia y Y:tlor. · La ciencia moderna ha establecido
fu er a de toda dnlla •el hecho de •que el movimiento <le sus
cnpas o fajas polares es müs lento que eu el ecuaclot.. Esto
nos forza a la concim;ión de que su Tevolución éstá allí mús
pró~imu a su origen.
Si de al guna ma nera esas fajas pudiel'an aumenta r su
movimiento, se moverían de los polos hacia el ecuador. Por
el coritra.rio, si las fajas ecuatoriales perdieran algo cJ.e sq
fuerza de r otación, se hundiría n hacia los polos. ¿Sería
posible que en un univer so de l eyes inalte~ables uu pla-
neta llegara a ser posee·clor de un sistema anular a menos
que las causas. producentes no fuerah universales? ¿ l:'o.drá
ser posible que la ti na, bajo las influencias de. esas causas
universales, no haya pasado por el mi smo proceso de evo
lución planetaria?
La univer salidad de este proceso .no se puede dudar, como
no se puede dud ar qu e una manzana caería de un árbol
en Saturno o Ctl .Tllpiter. Y cuando a más del desarrollo
a nula r evidente no tamos que la condición de la ti.erra pri-
mi t iva exige tal desanollo, no nos qu eda siquiera lu gar a
eutreteneT una eluda sobr e el particular. Si las leyes de
gravitación son uni versales, lo son también las causas de
las formaci ones anulares y los efectos tienen que hacer se
sentir. Pudiera decirse que condiciones desconocid as pue-
den modificar las operaciones de esta ley. Induclablemente
11ue esto es cierto, pero también puclleran·' modilficor las
leyes de gravitación universal, mas ¿en d(lnde se encuentra
la persona que dude de' su apUcación univers~\l a pesar 'de
todas lns tendencias modificauoras 1 ~
La. Tiet"r:a 31
1 1 Mólo hecho de que las fajas o círculos de J úpiter 1
,.¡ 111' 1\Q se mueven mús lentamente e11 los p.olos que en el
, 11111 1 1' prueba positivamente que han iuo moviéndose
1o 11 111 la. r egiúnes ecuatoriales y que en el sistema solat·
'"1,\' 111\lt perpetua tendencia a hacer caer las tajas o cfrcu-
1· 1 1111 lo polos. Esto nos campele· -seto~cillmuente a admitir
''"" tu forma original de todas las fn:iils en movimiento era
'" "il11t·, y que durante a lgún perioclo d.e la historia de cncta-
tol"'' ttl estos anill'Os se ·eneon.t raban eu Las regi()nes ecua-
' "' 11 11 •:;. Y con est.a también se da ·UUJl enfát:lca nprobaciótt
' l¡¡ ·uposición de que estas fajas tienen que llegar a la
il tl(ll' l'lcie de los planetas en inmensos desplomes y durante
1 IIIIH ICs intervalos de tiempo.
Hl, siguiendo el senclero seiíalado por la ln.e rrllble vo;~: .
•In 111 ley, podemos mirar esos gigantescos mundos y allí
l• ,,. la ·historia de los grandes cumaios que han hecho de
11 11 fJtt·o mundo lo ,que es hoy en d!a. Por .edades dcs<.'Ono-
' ld11 anillos y fajas rodeaban .a In .tierra. Una .por una
111• 1)' n declinll!udo, llegando au~.st.n la ·s uperficie de la 't ier,r ll
' •lt'<'a de los polos.-1.'ho .J~ m·t1~'s :ilm¡.ular Sy.ston~, plig·inas
1' ' 14.

1 1~ l sistema anular reh¡tivo a la tierra que advoca :Mr.


1til es razonable . . Está de- acuer do .con llli verdad reve-
Judo. en la Palabra ele Dios. Dios nos invita a razonar
y '!J por lo tanto de esperar que encontremos en su Pa·
ltlhl·a, cuand0 se .aplica debidamente, nada más que
11\ ( ~l llo que es Fazonable. .
PEHIODOS CHEATIVOS
Dios dividió la tarea ele la preparación de la tierra en
f) riodos creativos a los cuales les dio el nombre de
1
días," y los que se encuentran numerados en orden de
uno a siete. Es sin embargo daramente ·mostrado por
)na .Escrituras que el material iormatiyo de la tierra ha·
IJ!a .sido produ.cido y la .t ierra formada mucho antes del
'Omitmzo de las épocas o días creati vos. Antes de que
11 menzaran esos siete días Ja masa der.retida había ya
fL.u ojado grandes cantidades de ,sustancias minerales en
32 La 'Creación
forma de vapor, y éstas se habían formado en anillos al
derredor de la tierra.
Estas graneles masas de vapores cálidos se encon-
traban cargados de carbono, motivando el que "tinie-
blas" rodearan la tierra. Es seguro que estas tinieblas
se extendían por un gran número de millas al derredor
de la tierra y más allá de ella. En la profecía de Job
encontramos información concerniente al comienzo del
período creativo, la cual está ele acuerdo con la relación
del Génesis: "¿ Quién encerró con puertas la mar,
cuando se lanzó afuera, como si saliera del seno ma-·
terno? ¿Cuando le puse las nubes por pañales y las
densas tinieblás por envoltura; .cuando la domeñé con
n¡.i decreto, y le puse barras y puertas ?"-Job 38 :8-10.
Estas tineblas extendidas al derredor de la tierra for-
maron la "envoltura" y las "tinieblas sobre la haz del
abismo" de que nos habla el Génesis. Ninguna luz en7.
tonces penetraba hasta la tierra. Estando ésta rodeada
de numerosos anillos o capas, compuestas de vapores
bastante cargados de carbón y de otras sustancias mine-
raies, era imposible a la luz el penetrar esa envoltura
de densas tinieblas que rodeaban a la tierra.
"Y dijo Dios : Haya luz, y hubo luz." E stas pala-
bras deben referirse .a la luz que procediendo de la
esfera celestial iluminaba los anillos al derredor de la
tierra pero no alcanzando a llegar hasta ella. La luz
es coexistente con Dios. Sobre este particular nos dice
la Palabra: "Dios es luz, y no hay en El tinieblas nin..:
gunas." (1 Jn. 1 :5). "Jehová, Dios mío, Tú eres muy
grande ; te has revestido de gloria y de majestad. Tú
eres Aquel que se cubre de luz como de vestidura; que
extiende los cielos como una cortina."-Sal .. 104 :1, 2. ·
El sol tuvo que haberse creado mucho antes de que
la tierra tomara forma porque el sol es el centro de
atracción del sistema solar nuestro. La luz del sol
brillaba a través del espacio pero no brillaba aún sobre
la tierra a causa de la "envoltura" que la rodeaba. Peró
La Tierra 33

había llegado el tiempo en que la luz brillara sobre lo


que rodeaba a la tierra. dijo Dios: "Haya luz, y
hubo luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó
Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día,
y a las tinieblas llamó Noche. Y hubo tarde y hubo
mañana el día primero."-Gén. 1:3-5.
Antes de comenzar el primer día creativo, como se
describe en la relación del Génesis, algunos de los ani-
llos al derredor de la tierra habían probablemente caído,
pero de todos modos quedaban varios de ellos. Al co-
menzar el primer día o periodo creativo "yacían tine-
blas sobre la haz del abismo; y el Espíritu de Dios cobi-
jaba la haz de las aguas."
¿ Qué se da a entender por "el abismo" y "haz de las
aguas"? Sin duda alguna habían aguas sobre la tierra
y en la tierra. Esto es evidente por la relación del
Génesis. El abismo, por lo tanto, debe referirse a las
aguas sobre la tierra las cuales se encontraban suspen-
didas a caus~ de hallarse en rápida rotación en una ór-
bita al derredor de la tierra. Al dejar de dar vueltas
de necesidad tendrían que caer. Los anillos más livia-
nos se encontraban más retirados <le la tierra y más
cercanos al sol.
Llegó el tiempo en que el espíritu de Dios, es decir,
su poder ejercitado conforme a su soberana voluntad,
cobijó o entró en acción en la haz de las aguas, y la luz
penetró este abismo que rodeaba a la tierra. . Lo que en
realidad se da a entender es que Dios hizo que la luz
del sol brillara sobre la haz de las aguas y el abismo,
iluminándolos. Dios aprobó la luz y llamó Dios a la
luz día, y a las tinieblas llamó noche, y separó la luz
de las tinieblas. Ese fue el comienzo de la división del
día y de la noche. En cuanto a lo que se refiere el
registro divino, esto constituyó la tarea del primer día
creativo. El registro termina con las palabras: "Y
hubo tard~ y hubo mañana el día primero." . N o hay
34 La Creación

evidencia alguna que dé margen a creer que la )uz en


ese entonces penetró hasta la tierra.
EL FIRMAMENTO
El arco visible del cielo que podemos contemplar al
mirar hacia arriba es la "expansión" o firmamento. Es
una gran expansión de aire en donde se encuentran la
atmósfera y éter qu.e rodean a la tierra. La tarea del
segundo ·día o periodo creativo se uedicó a preparar
esta gran expansión y a dividir .las aguas. Al firma-
mento se le da. el nombre de cielo por su elevación y
porque está por encima de la tiera~a. "Y dijo Dios:
Haya una expansión en medio de las aguas, que separe
las aguas de las aguas. E hizo la expansión, y se-
paró las aguas que están debajo ele la expansión de las
aguas que están sobre la expansión, y fue así."-Gén.
1:6-7.
Todos los anillos formados por los vapores que r odea-
ban a la tierra necesariamente contenían grandes can-
tidades de agua, carbón y algunas otras sustancias mine-
r ales. Estos giraban con grande rapidez cerca del ecua-
dor y gra.dualmente se esparcian hacia los polos a
manera de envoltura, cubriendo la tierra. En propor-
ción a que se extendía hasta los polos su movimiento
se r etardaba, motivando su caída. A medida que caían,
indudablemente rrraudes cantidades de agua se preci-
pitaban sobre la tierra. Todas las substancias minera-
les que esas aguas contenían caían en los polos y rápi-
damente eran lanzadas hacia el ecuador.
Para ese entonces, ·por supesto, habian aguas en la
tierra y sobre la tierra. m profeta de Dios apoya esta
conclusión en la inspirada Palabra cuando dice : "Un
abjsmo llama a otra abi ·mo, a la voz de tus cataratas;
todas tus ondas y tus ohts han pasado sobre mi." (Sal.
4>3 :7). "El fundó la tierra. sobre sus basas; no será
jamás movida. La cubrió con el mar profundo, como
con un ves~ido; sobre las montañas estaban las aguas."
La Tierm 35

, 'nl. 104 :5, 6; Prov. 8 :27, 28; Job 38 :9-11). Por


111 dio ue la caída de esos anillos acuosos se formaron
loa océanos, y, estos gl'andes cuerpos de. agua en la tierra
rll cron sepamdos del abismo sobre la tierra por el firma-
111 nto. El fil'man1ento no sostenía a las aguas; ese
1U.rismo se encontraba allí a causa de que giraba rápida-
mente en su órbita, de la misma manera que ' UD a:vco-
pl ano se mantiene en el aire cuando en movimie:nto,
p ro si cesa su movimiento de propulsión, cae.
El firmamento solamente sirvió para formar una di-
vi ión entre las aguas en la tierra y el gran abismo o
ncío circundando la tierra. Entendemos que su forma-
ción ocurrió poco más o menos de la siguiente manera:
Primero la tiena; luego el firmamento o atmósfera de
In tierra; en seguida, muchos anillos cargados de car-
b no y 0tra.s sublimaciones minerales, los anillos conte-
üendo los hidro-carbonos estando más retirados de la
tierra, y el anillo exterior estando compuesto en su
mayor parte de agua. En cima de todo, el firmamento
obre la tierra, llamado cielo.
APARECE LA TIERRA
Fue durante el tercer día o época cuando aparec10
la t ierra. Diferentes teorías han sido presentadas en
nanto al proceso de aparecimiento de la tierra seca.
La tierra pudo haber salido por causa de la presión
del agua haciendo que algunas partes se hundieran y que
otras salieran más, o pndo ocurrir a causa del agua ha-
ber caído en las grietas de las rocas ígneas levantando
la corteza. No importa cómo haya ocurrido, sabemos
que fue hecho conforme a la voluntad de Dios, y esto
nos es suficiente. Luego Dios juntó las aguas en la
tierra para que otras porciones estuvieran libres ele
ellas, como está éscrito: "Y dijo Dios: J·únte>nse las
aguas que están debajo ele los ciclos en un mismo lugar,
y aparezca. lo seco; y iue asi. Y llamó Dios a lo seco
36 La Creación

'l'ierra, y al conjunto de las aguas llamó Mares; y vio


Dios que era bueno."-Gén. 1:9, 10.
P or primera vez en las Escrituras se nos mencionan
aquí las aguas sobre la tierra como mares. Por lo tanto,
la prueba concluyente de las Escrituras es que había un ,
gran abismo sobre la tierra, separado y distinto de las
aguas en la tierra. Las aguas sobre o por encima de la
tierra son designadas como "el abismo," en tanto que
las aguas en la tierra reciben el nombre de "mares" u
océanos.
La obra preparatoria iba en progreso. La tierra seca
no apareció de una manera repentina sino gl'adual-
mente, y sin duda esta tarea ocupó una gran parte del
tercer dia creativo. Durante ese período la tiena pro-
dujo yerbas y plantas, dando semillas y frutos conforme
a su clase. Un género de semillas no se convirtió en
otro, sino que cada clase produjo su propia simiente, la
cual, a su debido tiempo, produjo más yerbas y plantas.
"Y dijo Dios: Produzca la tierra yerba, planta que dé
simiente, árbol de fruto que produzca fruto según su
género, cuya simiente esté en él, sobre la tierra; y fue
así, porque brotó la tierra yerba, planta que da simiente
según su género ; y vio Dios que era bueno. Y hubo
tarde y hubo mañana el dia tercero."-Gén. 1:11-13.
A causa de las capas o anillos rodeando la tierra, el
calor y las condiciones sobre la tierra eran propicios
para el crecimiento de los árboles y yerbas. Parece ser
que el crecimiento vegetal de ese tiempo fue muy r ápido
y lujuriante. Algunos geólogos pretenden que de esas
plantas de prodigioso crecimiento se deben los depósitos
de carbón; que esas plantas y musgos fueron cubiertos
con arena y barro y que con el curso del tiempo se tor-
naron en carbón. Otros presentan una teoría mucho
más razonable, es a saber, que la masa derretida y en
combustión, que era la tierra, arrojaba grandes cantida-
des de vapores cargados· con carbono, los que se formaron
en anillos o circulos al derredor de la tierra, y que esto~
La Tierra 37

urtillos cayeron en diferentes tiempos y a diferentes in-


Ir r·valos sobre la tierra, depositando grandes cantidades
rf( carbón, siendo de este modo formados los grandes
dt pósitos de carbón que hoy se encuentran en la tierra
r•n diferentes profundidades.
P uesto que el humo y gas que se desprendían de la
1í rra estaban cargados de carbono, es mucho más razo-
rlrLble creer que al caer los anillos se iban formando los
rf pósitos de carbón en cambio de creer que el carbono
wimero se convirtió en plantas y que luego las plantas
r¡¡rmaron los depósitos de carbón. Se han encontrado
wandes cantidades de carbón en las capas más viejas
¡l la tierra, que indudablemente existió con anterio-
d tlad a la vida vegetal.
Todos los geólogos esttin de acuerdo en que el el carbón
•ll un producto ' vegetal el grafito tuvo también que tener un
rrl'lgen vegetal, y hasta conceden que los organismos ani-
runles probablemente ayudaron en el proceso, lo cual sólo
•'rlrpeoru las cosas puesto que el carbón es el que forma el
•rrganlsmo y no el organismo el carbón. .Aqul pues encon-
lr·runos un problema que ningún vegetariano puede rodear ni
rmltar a no ser por medio de la teoría anular. La piedra
undamental sobre la cual se basa la teoría vegetariana se
hn desvanecido en el fuego primitivo y el entero edificio se
rl . ¡llomu en una masa de ruinas.
os vemos compelidos a admitir que el grafito es un Cal"
lrón primitivo; que el carbón existió y fue colocado en dc-
nósitos sedimentarios en la tierra untes de que sobre ella
llu biera crecido planta alguna. De acuerdo con este eterno
l)l an el mundo fue construido. Comenzando con los dcpó-
ultos de carbón entre las basas metálicas y de granito de la
co -tra de la tierra, y llegando hasta los pantanos turbosos
(l l día, el carbón ba sido rey y la vegetación uno de sus
l)roductos.-~'he Earth's Anmaar System, página 398.

Es también razonable que el petróleo o aceite de roca


ptoviene de la misma fuente. 'l'odos estos elementos se
ncontraban en la roca ignea antes de ser anojauos
La OreacÍÓ1~

por el vroceso de combustión. Es también razonable


el deducir que el carbón y el aceite en la t ierra fueron
f ormados por los anillos que cayeron, mucho antes de
que hubiera vegetación en la tierra.
Tenemos algunos hechos conocidos en cuanto a la pro-
posición a la mano. Es sabido que esta tierru en el ama-
necer del tiempo geoló.n·ico fue una masa ,uerretltla y en
eombustión, y ya sea que la llamemos el Crisol uel Gran
Alquimista, un sol flamante o una estrella centellante, da
lo mismo en cuanto a la obra de la crecÍón ue los mundos,
El fuego tenia el control dinámico. Es bien sabido que el
carbono y el hidrógeno eran dos elementos que abundaban
en el horno pt:imitivo. Es bien sabido que el carbono y
el hiclrógeno en tales condiciones, activamente tratan tle
combinarse, y a menos que en su camino bacln el cielo atra·
vezaran un mar de o.·ígeno puro, se desprendieron como
productos oleaginosos de la joven tierra, llenando los cielos
o atmósfera ul derredor con carbonos livinnos, carbonos
pesados, carbonos asfálticos y carbonos grnfitosos. Sabe-
mos también que esto ocurrl.ó muchísimo antes del d!a de
los peces.
r~s sabido que los oceános vaporizados existían entonces,
y r¡ue tomaron una parte activa en este plan de desal'l'olio
del mundo estan-do siempre activos y lis tos a enriquecet•
y a aumentar los productos oleaginosos del planeta. Es
bien sabitlo que la resolución y descomposición de la materia
tenéa en su estado primitiva no se diferencia de la de su
condición secundarla a no set· en grado de ~alcance. Por lo
tanto, si la descomposición de materia orgúnica puede fo r-
mar petróleo en cantidades infinitesimales al poner en con-
tacto carbono incipiente con hidrógeno, ¡en euantn mayor
cantidad debió haberse producido cuando el hidrógeno y el
carbono de la derretida tierra entraron en contacto por
millones de años bajo condiciones mil veces más propicias
para efeetuar una rúpi da combustión! El punto por lo tanto
no es el de dudar de la habilidad ele la tlena íguea para
p roducir compuestos oleaginosos sino el explicar cómo bu-
lliera podido evitar el haberlos formado. Set•ía tan ram-
nallle el dudar de la competencia de la re(orta de un quí-
mico como dudar de la competencia de la tierra den·etida
La Tiet··ra 39
'"'I'Hto que l'Os mismos elementos son manejados, de la
,,¡ IJana manera, diferenciándose solamente las condiciones y
fii'Of)Ol'Ción.
Una de las grnndes lecciones que aprendemos de la re-
t• lrln es que se requiere una gran cantidad de calor y la
~~"''8 ocia de vapor para producir legítimos hidro-carbonos,
111111 en los casos en que se suple la materia orgánica. Uu
11111111lo derretido suplía el inverterado calor y todos los
1 11 mentos necesarios, y el químico solamente puede imitar

d \11'111 rt1unera poco práctica lo que la naturaleza contiuua-


"'f\nte lleva a cabo en millones de orbes derretidos. Si
"' n.\n geólogo niega este proceso universal tiene también
''" negar que el hidrógeno y el c<arbono son elementos d .¡
u11lverso, cosa que en lo que toca a nuestro mundo es In-
" r¡able. Y siend'O este el caso, no se puede, lógica o rar.o-
Jiilhlemente, siquiera por un momento, opener lo que qucd1l
11 r>u sto, es decir, que todo el petróleo de la tierra se en-
I'Un lraba en el horno del planeta cuando ·b rillaba como una
,. f ¡·eJia.-The Jj)af'th's Anmaar Systen~, p{l,ginas 398, S9U.

El peso de autoridad no soporta la teoria de que los


d<'pósitos de carbón y aceite fueron formados por ~~
d sintegración de vida vegetal o animal, sino que sus
t'l mentos componentes se hallaban en la masa ignea,
i ,nclo alli colocados por el gran Creador. Al ser arro-
Jtldos de la tierra en forma de vapor formaron los ani-
¡los al derredor de ella; estos anillos al debido tiempo
rn ron depositados en las varias partes de la tierra for-
1\lando los depósitos de carbón y aceite a diferentes
profundidades. De modo que en vez de ser éstos for..:
1nados en el tercer día creativo, o época, es bastante
rawnable el llegar a la conclusión de que fueron forma-
dos con anterioridad.
LUCES EN EL FIHMAMENTO
La relación biblica del cuarto dia creativo dice: "Y
lijo Dios : Haya lumbreras en la expansión de los cielos,
para separar el dia de la noche; y o"ean p:ua sc.iiales, y
pnra estaciones, y pu.ra días y años; y sean para lum-
40 La Creación

lirerM en la expansión de los cielos, y para alumbrar ·


sobre 1a tierra; y fue así; porque hizo Dios dos grandes
lumbreras; la lumbrera mayor para regir el día, y la
lumbrera menor para regir la noche; hizo también las
estrellas; y las estableció Dios en la expansión de los
cielos, para alumbrar sobre la tierra, y para regir el día
y la noche, y parn separar la luz de las tinieblas; y vio
Dios que era bueno. Y hubo tarde y hubo mañana el día
cuarto."-Gén. 1 :14-19.
Si como ya hemos dicho la luz que apareció cuando
Dios dio la orden en el primer día creativo fue la luz
producida por los rayos del sol, ¿cómo podemos arm~
nizar eso con la declaración de que el sol y la ltma no
fueron visibles sino hasta el cuarto día? Ni en las Es-
crituras ni en ninguna otra parte podemos encontrnr
pruebas de que el sol brill6 sobre la tierra en' el cuarto
día creativo, o de que de haber sido posible para un
hombre hallarse en ese entonces en la tierra, qne hu·
hiera podido ver el sol, la luna y las estrellas. Puesto
que, como hemos visto, la tierra es parte del sistema
solar, de necesidad el sol tuvo que ser creado mutho
antes del tiempo que estamos discutiendo.
P ero el sol no brillaba directamente en la t ierra en
el cuarto día creativo. Por lo contrario, la prueba es
bast ante concluyente de que en el sexto día, cuando
Adán estaba en la tierra, aun no se veía brillar, y que
nadie lo vio brillar antes del tiempo de Noé. Estos
hechos, sin embargo, no contradicen el hecho de que la
luz emanando del sol iluminaba el gran "abismo" ni lo
dicho en el texto arriba citado indica la aparición del
sol en el firmamento.
N6tcse que con respecto al primer día creativo se
dice : "El espíritu de Dios cobijaba la haz de las aguas
•.. y hubo luz." Sin duda esta luz era de los rayos
del sol y alumbraba el gran cuerpo de agua que estaba
sobre y al derredor de la tierra.; en el segundo día creó
La Tierra 41
llios .el firmamento, y en el cuarto período creativo la
1111. ele los rayos del sol por primera vez penetraron hasta
•' Firmamento.
11ll registro del Génesis está de acuerdo con esto,
1'1• sto que dice: "Y dijo Dios: Haya lumbreras en la
1' \ pnnsión de los cielos, para separar el día de la noche."
unca antes se hace mención de luz en el firmamento,
v por lo tanto es concluyente que el tiempo aquí men-
l•lt)llado es la primera vez que la luz apareció en el fir-
1111\mento; esto fue en el cuarto día creativo. La luz
dPsprencliéndose del sol, la luna y las estrellas, pene-
l••nndo a través de las aguas que estaban sobre la ex-
pnnsión o firmamento, lo alumbraron y dividieron el
dln de la noche.
Luego sigue la declaración de que Dios hizo dos gran-
11 ' lumbreras para regir el di a y la noche. N o quiere
dt;cir esto que en ese entonces las hizo, sino que aun
'u ando habían sido hechas antes sólo hasta entonces
li nbía llegado el tiempo para que una rigiera el día y la
11 rn la noche. El sol entonces no era visible desde la
1i rra y no podía serlo. La luz del sol que iluminaba
,,¡ firmamento, a travós de los traslucentes anillos que
quedaban, llegaba hasta la tierra, pero el sol mismo no
hrillaba directamente sobre ella.
Una de las pruebas concluyentes de que Adán no vio
la luz del sol, y que nadie la vio sino hasta los tiempos
d 1 diluvio en los días de Noé, es que el arco iris apa-
,. •i6 por primera vez después de que Noé salió del aren.
(Gén. 9:9-13). Esa fue la primera vez que los rayos
¡] 1 sol se mezclaron con la lluvia. En los días de Adán
110 había lluvia pero la tierra se rociaba por medio de
11na neblina que subía de ella. ( Gén. 2 :5-6). N o podía
haber habido lluvia mientras se encontrara sobre la
ierra ese dosel acuoso, y el diluvio que las Escrituras
dicen ocurrió en los días de Noé no hubirea sido posible
11 in ese anillo o dosel de agua, y hasta que no cayó el
tltimo anillo de agua no pudo haber arco iris.
42 La C·reación
La conclusión ineludible es entonces que los rnvos
del sol no comenzaron a Brillar sobre el firmamento o
expansión de aire hasta el cuarto día creativo. Las
plantas y las hierbas necesariamente aumentaron en
gran manera en ese día porque los rayos del sol brillan do
sobre el firmamento causaban en la tierra una condi-
ción muy propicia al lujuriante crecimiento de las plan-
tas. Hasta ese entonces, como lo muestra el re~·i stro
saga·ado, no había aparecido ninguna criat'ura viviente
en la tierra. ' .
CRIATURAS VIVIENTES
El quinto ' período o día creativo fue entonces u1tro-
ducido. El anillo o anillos acuosos aun rodeando a la
t ierra y formando un dosel al derredor de ella, y . que
ahora recibían la luz del sol, produjeron una condición
favorable a la vida animal sobre la tierra. El espíritu
o poder invisible de Dios, operando sobre las aguas en
armonía con leyes fijas, motivó el que las aguas produ-
jeran una cantidad abundante de seres vivientes, tales
como los peces, y aves que volaron sobre la tierra.
"Y dijo Dios: Produzcan las aguas en grande abun-
dancia enjambres de almas vivientes ; y vuelen las aves
sobre la tierra en la abierta expansión de los cielos. Y
creó Dios los grandes monstruos marinos, y toda alma
viviente que se mueve ; los cuales las aguas produjeron
abundantemente, según su género; y toda ave alada se-
gún su género; y vio Dios que era bueno. Y los bendi;jo
Dios, diciendo: Sed fecundos y multiplicáos, y henchid
las aguas en los. mares ; y multiplíquense las aves sobre
la tierra. Y hubo tarde y hubo mañana el día quinto.'~
-Gén. 1 :20-23.
Durante este quinto periodo creativo Dios hizo' qu~
s0 produjeran enjaJ.Tlbres de seres vivientes en las aguas,
ballenas, reptiles y criaturas qu~ pueden, vivir tanto en
el agua c_oll).O en la tierra.; también los mariscos y . or~
ganismos crustáceos. Los geólogos han descubierto qn e
La 'l'ie1Ta 43

1 11n inmensos depósito~ de piedra d,e cal en varias


11 l1 de la_Úerra, encont~ándose allí gTandes cantida-
' 1d concha, a los cuales se les da el nombre de "ce-
,_., ,ti ríos de crtlStáceos." Esto parece apoyar la con-
' 111d(Jn de que después del comienzo del qnil1to día
• 1''"U vo cayeron uno o vários anillos cerca de los polos,
'111 en la precipitación de nieve y hielo hacia el ecua-
,¡" ' perecieron muchos de esos seres, todo esto prepa-
""td la tierra para la creación y reinoducción de otros
' tt/J vivientes.

EL SEXTO DIA q .m A'I'IVO


( n el comienzo del sexto día o período creativo, ha-
¡, !lttdo sido separada la tierra de las aguas por un pe-
' ttd aproximado de veinte mil años, .la superficie de
11 Li na estaba seca. Producía yerbas, plantas y frutas;
t11d sto, junto con las condiciones climáticas, era apro-
lil fldo para la 'vida animal. • La rela:ción bíblica sobre
• 1 período creativo dice: "Y dijo Dios: Produzca la
111 t'l'a almas vivientes según su género, bestias y reptiles
1 ri l'US de la tiena según SU género; y fue asÍ; porque
l1 •t. Dios la fiera de la tierra según su género, y la bes-
1 1 ~ •·cgún su género, y todo reptil del suelo según su
¡•,'¡n ro; y vio Dios que era lmeno."-Gén. 1 :24, 25.
Las bestias de la tierra no han sido siempre lo mismo.
llttbo un tiempo en que sobre la tierra se encontraban
, n rmes animales, algunos midiendo hasta ochenta pies
tlt largo. Pruebas de esto se encuentran en los esque-
¡, l s que se han hallado a grandes profundidades.
t 1,·ancles caritidacles ele estos inmensos animales vagaban
11>.r toda la ·tierra. Algunos de ellos han sido hallados
, nterraclos en hielo y nieve, en tanto que otros han sido
' ü raídos de los depósitos de tieua y piedra en las re-
¡ Iones tropicales. .
La conclusión razonable es la de cada una ele esas
¡ dades o períodos creativos terminó con una gran ca-
l(l strofe motivada por la ruptura y caída' de uno de esos
' '
44 La Creación

anillos acuosos en los polos, lo que, a su turno, permitía


la precipitación de grandes cantidades de agua, hielo
y nieve que banía con toda la vida animal y vegetal que
encontraba a su paso, dejando desolada .la tierra. Con
el transcurso del tiempo, otros animales y plantas to-
maban su lugar. Diferentes clases de animales apare-
cieron en las diferentes etapas del período creativo
animal. Durante estos períodos, una condición seme-
jante a un invernadero existía en la tierra a la cual el•
hielo y la nieve daban fin. Esto está demostrado por
los hechos. De mucho interés sobre el particular es
una carta de Mr. Yail que apareciQ en el Scientific
American:

Sr. Editor del ,tqcienti!io American:


Con mucho interés lte leído en su m'mero de Abril 12 la
nota con respecto al reciente descubrimiento del cuerpo de
un mastodonte en hielo por el Dr. Herz en el orien te de
Siberia. Para mf esto es algo más que un "Abrete Sésame"
en la senda del geólogo. Ofrece el m:ís fuerte testimonio
en apoyo de la pretensión de que las edades glaciales y los
diluvios que han ocurrido en la tierra fueron causados por
el progresivo y sucesivo declinar de los vapores primilivos
que rodeaban nuestro planeta a la manet·a ele las nubes ele
vapores que rodean hoy en día a los planetas Júpiter y Sa-
turno.
Permítaseme insinuar a mis hermanos geólogos que re-
siduos de los vapores acuosos emanando ele la tierra pudie-
ron haber rodeado a la tierra, como el dosel que tiene Jú-
piter, hasta tiempos geológicos recientes. Esos vapores
tuvieron que caer principalmente en las r egiones polares
donde hay menos resistencia y mayor atracción, y como
grandes avalanchas de nieves cósmico-telúricas. También,
que ese dosel templó el clima hasta los polos proporcio-
nando así pastura al mastodonte y sus congéneres del
mundo ártico--convirtiendo la tierra en un Invernadero.
Si esto se admite, no podemos poner límites a la magnitud
y eficiencia de esas avalanchas para desolar a un mundo
de vida exhuberante. '
La Tierra 45
l'tlr ce ser que el mastodonte encontrado por el Dr. Herz.
'" 111ISJno que algunos otros que se han hallado enterrados
• " lu~:~ reglones glaciales con yerba sin digerir en sus es-
'''""' r,os, prueban que fueron repentinamente cogidos por
1 ototlll s cantidades de nieve que cara. En este caso, con
1' ' ' htt sin masticar aun en su boca, se nos da la inerrable
loi iiOt·ia de una muerte en una tumba de nieve. Si accr>-
''""08 esto tendremos una por entero competente tuente dtJ
" 1 c.t glaciales, y podremos escapar gustosos la poco filo-
•·· r1:a alternativa de que In tierra se enfrió para poder
oolii oncr su capa de nieve, cuando, seg~.\n lo veo yo, fue todG
''' t'Ontrario, es decir, que la. tierra. ae enfrió a. c~usa ele '"
' oqlc' de niev.e.

Este cuadro representa la tierra desprovista de sus


anillos y con el último dosel, en fo rma de clensns nubes,
suspendido sobre las reglones polares. Sobre los tró-
picos y en la mayor parte de las zonas templadas los
vapores habían llegado a ser tan tenues que podía en
iertos lugares y a ciertos tiempos discernirse el claro
cielo. El sol resplandecía sobre este tenue vapor ha-
'léndolo brlllar en gran manera. El mi smo sol podía
vagamente discernirse en este luminoso cielo como un
héroe conquistador luchando vigorosamente en contra
ele sus vaporosos enemigos.
Durante el período de ignición los océanos se vapori-
r.n ron, subiendo con grandes cantidades de sublimados mine-
rules y metálicos, y si concedemos que estos vapores se
ormaron en un sitema anular y volvieron a la tierra a
(l'avés de las edades y en grandes cantidades, algunos de
llos demorlindose aun hasta la edad del hombre, podremos
46 La Creación
explicarnos muchas cosas que nos han mantenido perplejos
y que son difíciles de entender en este cHa.
Desde el afio de 1874 publiqué algunas de estas ideas en
:l'orma de folleto, y con la esperanza ele que los pensadores
de este siglo veinte las examinen es que bago referencia a
la "Teorfa Anular."
ISAAC N. V .u r..

Cuando tomamos en cuenta que cada uno ele estos


días creativos fue de siete mil años podemos ente'i1der
cómo una clase ele animales apareció y luego élesapareció
para ' ser sucedida por otra y en el mismo día creativo.
• Al debido tiempo creó Dios las bestias del campo, según
su género, y los reptiles, y los animales domésticos de
todos los cuales algunos se encuentran en la tierra.
Cada uno vino a su tiempo conforme a la voluntad de
Dios; cada uno tenía ciertas funciones 'que llevar a cabo,
y cada uno fue necesariamente importante en la t area
creativa de Jehová con relación a la tierra.
Es evidente que más de cuarenta mil años habían
transcurrido desde que Dios comenzó su tarea creativa
como se describe en Génesis 1 :2. En ese período de
tiempo la gran bola de fuego llamada tierra había arro-
jado graneles cantidades de sustanciaS' minerales en
forma de vapores, y éstos habían formado anillos al
derredor de la tierra los cuales al debido tiempo ·se
tornaron en doseles que la cubrieron por entero.
A intervalos re~:,"lliares, y exactamente com0 Dios lo
había determinaclo, estos anillos (con la probable ex-
cepción de uno solamente) ha.bian caido, depositando
en la tierra el oro, la plata y todos los metales preciosos,
y grandes depósitos de hierro, carbón, aceite, asfalto y
otras sustancia valiosas; la tierra seca había aparecido ;
la vegetación había comenzado, y una clase tras otra
había perecido para dar lugar a una nueva form, .
Luego vinieron los peces y las aves y demás organismos
de esa clase. Aparentemente un desastre tras otro ocu-
rría, y las cosas continuaron asi hasta que la tiena se
La Tim··ra 4?'

1tlrrió y estuvo en condiciones de producir vida vegetal


1 1111i.mal. '
Ul'ante todo ese período creativo Dios había estado
11(11'1U1do por medio de su amado Hijo, el Logos, quien
11'¡ siempre fiel al Sér Eterno. Grandes ejércitos de
1ng les habían llevado a cabo sus respectivas partes
11mo mensajeros del Gran Hacedor. De tl!lO de esos
11'1''S espirituales se dice: "En medio de las piedras 1 de
11 ' O te paseabas." (Eze. 28 :14). 'l'ambiép. está es-
~ · l'ito : "Que hace a los án~ele sus mensajeros, los fla-
"ilf rós rayos sus ministros."-Sal. 104:4. .
lhstos seres espirituales velal:¡an los graneles fuegos
1
¡l¡ la tierra y los :resultados progresivos ele ellos. Evi-
d n;tem~nte, estos planetas o bolas de fuego no le.· in-
nnclian terror. Cada uno 'de ellos proseguía cumpliendo
1 ¡¡ ~ respectivos deberes que Jehová le había ilp.pt¡esto con
l'l lo.ción a la creación de la tierra. 'foclos ellos ob. er-
ILban con profundo interés y gozo los pasos progresivos
d : este ·desarrollo o período de creación y preparación
d la tierra porque indudablemelil.te saLían que estaba
i Jl(lo preparada para alguna otra clase de sere .
¿Para qué fue creada la tierra? ¿Por qué se tTajo
1t la existencia con tanto costo y esfuerzo? ¿Para qué
L mó el gran Jehová toclos esos siglos y gastó toda esa
energía en traer la tierra a la condición en que se en-
•ontraba cerca del final del sexto día creativo? ¿Para
qu é había puesto los fundamentos de la tierra y ln
había desarrollado hasta este grado? Si lo habí.a he-
oho para beneficio de alguna criatura, tenemos que
onceder que su amor por esa criatura debe ser grande.
1.l'odos los que leen estas lineas deben sentirse profun-
damente interesados en la correcta· respuesta a la pre-
>'i ll1Ül. : ¿:Para qné ·creó Dios la tierra? Que la Palabra
uc Dios dé la respuesta. ·
CAPITULO III

El Hombre
EHOVA Dios es su propio consejero. El for-
J mula sus propios planes y los lleva a cabo. Su
consejo, según lo revela al hombre, se nos pre-
senta en su Palabra. "Cada designio se hace estable
por medio de un buen consejo." (Prov. 20 :18). Dios
tiene un propósito definido en todas las cosas que lleva
a cabo. El tomó más de cuarenta mil años en preparar
la tierra para ser habitada. Antes de comenzar la
tarea El sabía lo que iba a hacer y cómo resultaría.
(Hech. ·15 :18). Por lo tanto, desde el mismo princi-
pio El tenía un propósito definido en crear la tierra de
la manera que la creó.
Está escrito : "Porque yo soy Dios, y no hay otro
alguno. Dios, y no hay ninguno como yo, que declaro
el fin desde el principio, y desde la antigüedad cosas aun
no hechas; que digo: Mi consejo quedará firme, y haré
todo mi placer. . .. No sólo lo he dicho, sino que lo
sacaré a luz; he trazado el plan y lo voy a hacer." (Isa.
46:9-11). "Así será mi palabra que sale de mi boca;
no volverá a mi sin fruto, sino que efectuará lo que yo
quiera y prosperará en aquello a que yo la envíe."-Isa.
55:11.
El propósito de Dios es que la tierra nunca sea des-
h·uida. "La tierra permanece para siempre." (Ecle.
1 :4). Puesto que ha de permanecer para siempre, de
necesidad el propósito de Dios es el de que se use para
siempre. Sobre este punto Dios expresamente dice:
"El que formó la tierra y la hizo, el cual la estableció;
no en vano la cre6 sino para ser habitada la formó. Yo
soy Jehová, y no hay otro alguno."-Isa. 45 :18.
48
El Hombre 49

N o solamente hizo Dios la tierra en la forma de un


1 1 bo y la colocó en el espacio, sino que con no poco
¡,nsto de energía la hizo apropiada para que el hombre
IIL habitara. Ella creó para ser habitada, y su propó-
r~ito no quedará sin cumplirse. El habitar un lugar
implica el que alguien viva en él y permanezca alli.
Puesto que la tierra permanece para siempre y puesto
f)tte conforme a la voluntad de Dios tiene que ser ha-
hitada, alguna criatura inteligente tiene que ser puesta
11 bre ella para que la use debidamente.
Esa criatura es el hombre, a quien Dios formó. N o
1 o]amente es un insulto a J ehová el decir que el hombre
1 desarrolló a si mismo, sino que además es un pecado
de presunción. (Sal. lOO :3). La teoría de la evolución
humana es un insulto a la inteligencia del hombre, y
puesto que es un insulto aún mayor a Jehová, la des-
artamos aquí sin discusión. O creemos a Dios a no le
creemos. Si le creemos, seremos guiados por su Palabra.

PROCESO DE CREACION
Uuchos siglos antes de la creación del hombre Dios
puso los fundamentos de la tierra. La Palabra de Dios
.no revela si alguna de sus criaturas en el plano espiri-
tual supo entonces que al debido tiempo sería creado el
hombre. Sin embargo, es evidente que fueron informa-
das de que una criatura inteligente sería el jefe de la
tierra. Cuando se puso el fundamento de la tierra hubo
gran regocijo en el cielo. Los dos hijos de Dios, el
Logos y Lucifer, se juntaron en un cántico de alabanza,
y el conocimiento de su significado, junto con la mara-
villosa melodía de ese canto, hizo que los hijos de Dios
prorrumpieran en alabanza y gloria a Dios. (Job 38:6,
7). Probablemente el gmn Creador informó a sus
hijos celestiales que el planeta que El estaba ahora de-
sarrollando, en algún tiempo futuro, estaría presidido
por un sér inteligente, y el conocimiento de este hecho
hizo que los cielos resonaran con cánticos de gozo.
J.íO La Creación

Llegó el tie:rppo para la creación ·dd ·sér inteligente,


el hom~re. Parece evidente que Dios· hu:bló con el Lo-
gos, su amado Hijo, con respecto al propósito de crear
al hombre. El registro dice: "Entonces dijo Dios:
Hagámos al hombre a nuestra imagen y semejanza; y
tengan ellos dominio sobre los peces del mar, y sobre
las aves del cielo, y sobre 4s bestias, y sobre toda la
tierra, y sobre todo reptil que se arrastra sobre la tierra,.
De ;manera que creó Dios al ]fombre a su imn.g en, a la
imagen de Dios le creó; varón y hf:!mbra los ere~."
La imagen que aquí se menciona no puede :¡;eferirse
a forll\a corp<;>1·al puesto que Dies es 13l Espiritu Etemo
a quien ningún hombre ha visto ni le puede ver. J)}n
ninguna parte de las Escrituras se dice que el hombre
debería t en:er , un cuerpo como el de un sér espiritual.
Por el contrario, las Escrituras nos informan que los
que han ,de ¡¡m: cambiad.os del plano humano al plano
espiritual t endrán aL del;>ido tiempo que recibir" cuerpos
apropiados para la fase espiritual. Hay cueq )os espi-
rituales y hay cuerpos humanos. (1 Cor. 15 :111). Es
también ev:i!dente que el cuerpo humano 110 es en la
forma de un cuerpo espiritual. ( 1 J n. 3 :2). ¿En qué
.sentido fue el hombre hecho a la imagen y semejanza
del gran Jehová?
Los atributos de Dios, los cuales son en El inherentes,
son sabiduría, justicia, amor y poder, totlos cuah·o
operando en exacto equilibrio. Esto se prueua .Por el
plan revelado. Las bestias del campo nunca han po-
seido estos atributos o cualidades inherentes. Aun el
.hombre, imperfecto como lo vemos ahora, tiene alguna
sabiduría, alguna justicia, algún amor y algún poder.
Bl. hecho de que estas cualidades están ahora incom-
pletas muestra que el sér perfecto las tendrá en perfec-
ción y operando ele una manera enteramente equH.i-
braJa.
I'or lo tanto, la expresión de que el hombre :fue hecho
a la imagen y semejanza de Dios implica ·qu,e fue dotado
El Ilomb1·e 51

d' s1bidur.ía, justicia:, amor y poder. Por añadidura,


puede apropiadamente decirse que Dios tiene dominio
sobre toda la creación. Cuando el dio al hombre do-
lllinio sobre la tierra, hasta ese gTado el hombre fue
'!\echo a la semejanza de Di'os. De esto no puede infe-
rirse que las criaturas espirituales no poseen la imagen
ue Dios. E ste t exto solamente muestra que de entre
lrts criaturas te1Test1·es solamente el hombre es a la
imagen y semejanza de Dios.
Jehová suministró los planes y especificaciones para
construir al p1:imer hombre. En esos planes se des-
pliega una sabiduría maravillosa. Se hizo prbvisión
para el exacto número de huesos que habian de formar
el esqueleto humano, doscientos seis por todos·. Se hizo
provisión para un perfecto sistema de circulación de la
·angre. Se hizo provisión para los pulmones, para que
mantuvieran la sangre pura y :funciona11do ese sistema
ele circulación. También se hi:w provisión del sistema
eléctrico más maravilloso, al cual damos el nombre de
sistema nervio o. No es nuestro propósito aquí discu-
t ir en detalle el plan sino solam ente ll amar la atención
a que todos los detalles fueron ejecutail.os cuidadosa-
mente, aun hasta el grado de numerar los cabellos de
]'a cabeza.-Mat. 10: 30.
Luego el Lagos procedió a ejecutar esos planes para
fonnar al hombre conforme a las especificaciones. E sta
escrito que el hombre es de la tierra, te1;restre. ( 1 Cor.
15 :47 ). Esto es cierto porque fue hecho ele los ele-
mentos que forman la tierra.. Por esta razón la tierra
contiene todos los elementos necesarios para un orga-
nismo perfecto. El proceso empleado en la creación del
hombre se expone así : "Y Jehová Dios formó al hom-
bre del polvo de la tierra, y sopló en sus narices aliento
de vida, y el hombre vino a ser alma viviente."-Gé11.
2 :7.
A los animales que ,fueron · créados antes de crear. e
el hombre también les· fue dado· el nombre de itlmas-

/
52 L a Creación

por cuanto todo sér que respira es un alma. ( Gén. 1 :20) .


En el registro de la creación del hombre ni siquiera se
insinúa que primero Dios creó al hom~>re y que luego
le dio un alma. Lo que dice es que lo formó, y que
luego sopló en las narices de ese organismo el soplo que
El había provisto para todo sér viv~ente, y de esto re-
sultó un alma. Un alma es un sér que respira, que
tiene vida y que se encuentra consciente de su existen-
cia.
¿ Pudiera decirse que puesto que Dios es inmortal, y
puesto que el hombre fue hecho a su imagen y seme-
janza, que por eso Dios le dio un alma inmortal? Tal
conclusión es irrazonable y no tiene el apoyo de las
Escrituras. Si Dios hubiera dado al hombre un alma,
el registro de su creación tendría que indicarlo, y si esa
alma dada era inmortal, entonces no podría pagar con
la muerte su violación de la ley. Esto implicaría que
una vez que Dios comenzaba una vida no podría acabar
con ella. 'fal cosa no es consistente con su poder ili-
mitado. Además, las Escrituras nos dicen que sólo
Dios tiene inmortalidad. (1 Tiro. 6 :16). Dado el caso
de que Dios es el Da~lor de vida se saca en consecuencia
que tiene el poder de quitarla a voluntad. Las Escri-
turas muestran que El se ha reservado el derecho de
privar a sus criaturas de la vida,' al no mostrarse dignas
de ella; esto por lo tanto es una prueba concluyente de
que el hombre es mortal.
¿Es acaso el soplo de vida que Dios sopló en las
narices del hombre la chispa divina e inmortal que se
dice Dios puso en él? La respuesta es nó, por cuanto
las Escrituras no dicen tal cosa. El soplo de vida es
solamente lo que mantiene la sangre en circulación y
anima al cuerpo humano. Las Escrituras nos dicen
que Dios creó al hombre de los elementos .de la tierra, y
cuando le puso el soplo de vida en sus narices se tornó
en un sér que se movía y respiraba. Esto es un alma.
El soplo de vida que respira el hombre pertenece a J e-
El Hombre 53
1 vá porque todas las cosas son de Dios. El derecho a
~~~ vida procede de Dios. El soplo de vida aun cuando
produce vida no tiene vida y por lo tanto no puede ser
inmortal puesto que lo que no tiene vida no puede ser
nmortal. Las Escrituras claramente nos informan que
la vida está en la sangre. (Deut. 12 :23). 'l'odos los
1\Tlimales, incluso el hombre, tienen el mismo soplo de
vida (Ecl. 3 :19), pero el hombre es del orden más
levado de la creación animal.
La 'experiencia humana prueba de una manera con-
luyente que el hombre muere, y la criatura que muere
lto es inmortal. Para que una criatura sea inmortal
ltecesita estar fuera del alcance de la muerte. Dios
reó al hombre como la superior creación de la tierra:
'¿Qué viene a ser el mísero hombre para que tengas de
:w memoria, y el ·hijo de Adán para que le visites ? ..•
T,.,e hiciste un poco inferior a los ángeles ; le coronas
también de gloria y honra, le haces señorear las obras
de tus manos; todas las cosas has puesto debajo de sus
pies." (Sal. 8 :4-6). Dios se sintió satisfecho de su
obra en la creación del hombre y prouncióla "muy
buena." El hombre era el hijo t erreno de Dios, y Dios
le amaba. Lo rodeó de todas las cosas propicias para
su felicidad.

HOGAR
Dios hizo que una porción de la tierra, la cual recibió
el nombre de Edén, fuera tratda a una condición de
perfección. Tuvo que ser un hermoso lugar. El hom-
bre a quien había creado para que lo ocupara era un
sér perfecto y su hogar era t ambién perfecto porque la
obra de J ehová es perfecta. (Deut. 32 :4;). N o se nos
dice en las Escrituras qué tanto lugar ocupaba el Edén
vero por la descripción se saca en consecuencia que era
bastante grande. Hay algunas evidencias de que el
Edén se encontraba situado en la parte montañosa de
la tierra que ahora se conoce con el nombre de Armenia.
54 La Creación
En la parte oriental del Edén Dios plantó un jarclín
que erp. un verdade~o pa;raíso. Allí se encontraban ár-
boles que producían hermosas flores para deleitar la
vista del ho,mbre y para perfumar el aire que respiraba.
Otros árboles producían toda clase de frutas de las que
el hombre derivaba su susteJ;lto. Allí se encontraba t oda
clase de bestias, pero no salvajes sino mansas y obe-
dientes; ellas se paseaban delante de Adán, su tey, quien
les dio nombre y ellas respondían a su voz. Hermosos
pájaros de vistosos plu:¡.:najes se e:ncontrt1ban también
allí, entre ell~s el ave del paraíso. El clima era per-
fecto, y el blando céfiro esparcía aromas deliciosas mez-
cladas con dulces cárrt'icos de alabanza a Dios.
Por el Edén se deslizaba un gran río que se repartía
en cuatro brazos ·y r~gaba el j ardín y sus contornos,
realzando la gloria y belleza del lugar. Había oro en
e'se j ardín, y preciosas p~edras que el hombre podía usar
para su deleite. La descripción bíblica del Edén es
como sigue: "Y Jehová Dios había plantado un jardín
en Edén, a la parte del oriente, y puso alli al hombre
que formó. Y Jehová Dios había hecho nacer del suelo
toda suerte de árboles gratos a la vista y buenos para
comer, y el árbol de vida que estaba en medio del jardín,
y el árbol del conocimiento del bien y del mal.
"Y un río salia de Edén que r egaba el j arclín ; y de
allí se dividía, y se repartía en cuatro brazos. Era el
nombre del primero Pisón, el cual da vuelta a toda la
tierra de Hávila, donde' hay oro; y el oro de aquella
tierra es bueno; allí hay también berilo y piedra de
ónix. Y el nombre del río segundo es Gih6n, que da
vuelta a toda la tierra' de Ous. Y el nombre del río
t ercero es rl'igris, el cual corre enfrente ele Asiria. Y el
río cuarto es el Eufrates. Tomó ¡mes Jehová Dios al
hombre, y le puso en el jardín del Edén, para que lo
labrara y lo guardase. Y Jehová Dios mandó al hombre
diciendo: De todo árbol del jardín podTás libremente
comer;
'
mas t clel árbol del
'
conocimiento
'
del bien y del
,J •
' 1
El Hombre 5:3

111nl no comerás, porque en el día que comieres de él, de


1(' uro morirás." --Gen. 2:8-17.
dijo Dios : "N o es bueno que el hombre esté solo."
l)ios queria hacer completa la felicidad del hombre. En
t;nnto que Adán dormía J ehová le creó una compañera.
l despertarse Adán ante él se encontraba una perfecta
mujer, lo más hermoso que hasta entonces sus. ojos ha-
habían contemplado. El por supuesto la amó desde aquel
mismo instante y allí comenzaron ju¡;1tos a ' gozar de ias
lorias de su pertecto ho~-ar. Juntos se paseaban; jun-
o's hablaban, y mezclaban sus voces en alabanza a su
z 1
Tan Creador. ' 'l'an feli y ,dichosa unión nunca desde
·nton ·es ha sido conocida entré un hombre y una mu-
jer porque ninguna otra pareja ha ~ido per:fecta.
Adán, el príncipe de la t ierra, con una bella princesa
a su lado, y rodeado de todo lo que su corazón pudiera
desear, se gozaba en gran manera en sus posesiones y
en su glorioso hogar. ¿ QuiéÍl había provisto todo esto
para el hombre? Jehová; el 'l'odopoderoso Dios, en
e;jercicio de su nmante bondad había ·hecho todo esto
para él. Puesto que hllbía sido dot.'tdo de veneración
era una necesidad para el hombre rendir homenaje a su
Hacedor o a alguna otra cosa en su lugar.
P ero un sagaz y encarnizado enemigo surgió en la
senda de esta feliz pareja echanclq a pique su idilio en
corto tiempo. Hay alguna evidencia bíblica que indica
que solamente fueron dos aftos el tiempo transcurrido
en que esta pareja gozó de las dichas de su hogar y de
la belleza del paisaje en dulce comlmión. Entonces
comenzaron los dolores, y desde entonces han estado
presentes con la raza humana. Existe una razón para
esto, y es preciso que entendamos esa razón para poder
apreciar debidamente al gran Creador.

LA PRUEBA
¿Pero, por qué permitió Dios que un sutil eüemigo
t endiera uri lazo a esta perfecta pareja, poniendo tra.bas
56 La Creación

a su felicidad? , Lllcifer fue uno de los ·híj os de Dios


que unió su voz a ese hermoso cántico celestial feste- ·
jando la·preparación de la tierra. Dios no lo creó .como
un enemigo del hombre sino que lo colocó en el Edén,
donde el hombre moraba, dándole un puesto honorable
y de responsabilidad. Le tocaba supervisar al hombre, y
le habían sido encomendados ciertos deberes en el per-
fecto Edén.-;-Eze. 28:13, 14. .
Como sér espiritual Lucifer no , era visib1e al hombre,
pero muy ..bicn podía él emplear otros medios para con- ·
versar con ~Adán y su esposa. La serpiente era un
animal sagaz y sutil, poseído de gracia y belleza, y en·
ese tiempo andaba como . otros animales. Lucüer em- ·
pleó a la serpiente para llamar la atención ·de Eva, y
por .su conducto le habló. Las Escrituras dejan ver que
los animales eran ca.paces de transmitir sus . pensa;mien-
tos al hombre-y podían entenderle.-Gén. 2 :20; 3 :1, 2.
Lucifer sabía que Dios había dotado a Adán y a Eva
con la facultad de reproducir su propia especie. Se dio
cuenta de que al debido tiempo liarían uso de esta fa~
cultad y traerían a la exist encia hijos, y que estos hijos
a su turno t endrían t ambién hijos, llenando por último
la tierra con una raza de seres que proclamarían las
alabanzas de Jehová.
La iniquidad entró en el corazón de Lucifer. Sus
deberes se hallaban claramente prescritos por la ley de
Dios, mas él tenía el deseo de excederse y hacer las
cosas conforme a su propia voluntad. Hazonaba: <¿Por
qué no he de ser yo como el Altísimo? El tiene domi-
nio sobre los cielos y la tierra, y a mí me ha delegado
únicamente .la tarea de cuidar al hombre, la criatura
más inteligente de la tierra. ¿Por qué no comparte
Dios conmigo toda su gloria?' Estas reflexiones dieron
por resultado que puso su deseo en práctica esforzándose
por establecer su propio trono, encumbrándose sobre
otros seres y siendo ,semejante al Altísimo. (Isa. 14:13,
14) . . Entonces fue cuandoJ la iniquidad fue hallada. en .
El Bombr~ 57

11 orazón. · Desde ese momento vino a ser enemigo de


1 Ofl y se volvió el astuto enemigo del hombre, el cual,
, 111 h ·i.agado en su dicha, ignoraba los malignos intentos
11 l(j uados en la mente de Lucifer.
1ndudablemente que J ehová hubiera podido impedir
11, fi ncifer llevar a cabo sus malévolos intentos pero no
1. plugo el hacerlo. El hombre· perfecto, dotado de libre
ulb drio, tenia que ser sometido a prueba para que de-
111 ~trara ·si permanecía o·no leal a Dios. Si en realidad
1tl1 tüba a su gran Creador y apreciaba debidamente sus
~ ~ vores resistiria todos los esfuerzos por apartarlo de
111 Dios, y al mostrarse leal y fiel probaría ser digno de
lll posición que ocupaba y digno de gozar eternamente
d su vida. No fue injusticia de Dios el someterlo a
prueba· puesto qu.e ésta era necesaria. Por eso Dios
permitió a Lucifer· llevar adelante sus malvados planes.
Dios había dado a Adán su ley antes de crear a Eva,
1 indudab.lem.ente Adán había informado a su esposa las
IIHtipulaciones de esa ley puesto que cuando el punto se
!.rajo en cuestión ella fue · capaz de interpretarla. Lu-
¡•i Por también estaba al coniente de la ley que r egirí.a
tll hombre y para llevar a cabo sus inicuos propósitos le
pareció oportuno aprovecharse de esa ley. Pensó que
1 ría más fácil convencer a Eva de lo correcto de su
JI sición que lo seria a Adán, y que con Eva de su parte
t ndria ganada más de la mitad de la batalla porque
lla induciría a Adán a participar en su transgresión
n cambio de quedarse sin ella. N o ignoraba Lucifer
Jo mucho que Adán amaba a Eva, como tampoco que ella
jcrcia mucha influencia sobre él.
Empleando a la serpiente para obtener sus fines Lu-
·i:fer se acercó a Eva y entró en conversación con ella.
'on:forme a las Escrituras su conversación fue más o
menos la siguiente :
'¡Qué hermoso hogar el que tenéis ! ¡Qué de árboles
flores y frutas! P ero, según noto, no pocléis comer de
todas las frutas porque· Dios os ha prohibido algunos de
58 La Creación

los árboles. ¿No es esa la razón por la cual no coméis


de algunos de ellos?'
Eva contestó "Del fruto de los árboles del jardín po-
demos comer ; mas del fruto del árbol que está en medio
del jardín, ha dicho Dios: N o comeréis de él, ni le to~
caréis, no sea que muráis."-Gén. 3 :2, 3.
El siguiente paso de Lucifer fue el de convencer a
Eva oe que él era 1m verdadero amigo de ella y de su
marido, y que en realidad, Dios era enemigo de ellos
por cuanto por r azones egoístas los mantenía en la ig-
norancia de muchas cosas que era preciso para ellos el
saber. Sú argumento por lo tanto fue al efecto de qúe
el árbol que ella había mencionado producía aliment o
OUeno y saludable, que' SUS frutas eran hermosas y IT\U-'
cho de desearse por uno que quisiera ser sabio. Le dijo :
"De seguro que no moriréis; antes bien, sabe Dios que en
el día que comiéreis de él, vuestros ojos serán abiertos, y
seréis como Dios, conocedores del bien y del mal." -
Gén. 3:4, 5.
Eva cedió a la seductiva influencia, tomó del f~uto
y comió. Luego fue a su marido y le dijo lo que habia
hecho y él t ambién participó. El hacer esto era con-
trario a las claras especificaciones de la ley de Dios y
t anto la acción de Eva como la de Adán fueron viola-
ciones voluntarias de esa ley. Dejaron de ser buenos
y el remordimiento de sus conciencias los hizo escon-
derse. Habían sido pu estos a prueba; habían cedido a
la maléfica influencia de uno que debería haber seguido
un curso contrario; con su acto se habían probado des-
leales a Dios, su Creador.
¿ Qué debería hacerse ? La justicia ~ uno de los
atributos de Dios, y por eso El tiene que ser justo y
recto. Sería impropio de parte de Dios el permitir al
hombre continuar v~viendo en la tierra y ser el rey de
ella después de desobedecer, puesto que tal curso de
condu cta haría a su ley sin efecto alguno. Además, si
r odeado de perfectas condiciones el hombre desobedeció,
El Hombre 59
• 1 (' ntin uaría haciéndolo en toda otra circunstancia e
1111 1u iría a otras criatu,ras a seguir un curso malo. Para
• 1 J) I'Opio provecho del hom bre, lo mismo que para man-
' " ' 1· en alto la majestad de la ley, le era preciso hacer
¡, tllll a la pena impuesta.
11a justicia exigía que la ley fuera puesta en vigor.
\ti LU y Eva se declararon culpables de haber violado
11 1 y de Dios. Ambos sabíau que esa ley decía : "En
• 1 dfa que comiéreis de él, el e sen·uro morirás." A causa
dt la cónducta por ellos seguida a Dios le era p;reciso
••nlrar en acción, y la det ern;J.inación judicial sobre el
¡illllto tendría que ser en ar,monía con su misma ley. S u
1111[ ncia fue como sigue :
A la mujer dijo: Haré que sean muchos los traba-
Jol! de tus preñeces; con dolor parirás los hijo's ; y a tu
illlriclo estará sujeta tu voluntad, y él será tu señor. Y
11 clán dijo: Por cuanto escuchaste la voz de tu muj er,
. t'Omiste del árbol que te mandé diciendo : N o comerás
d él; maldita sea la tierra por tu cansa; con trabajo
1•1 mcrás de ella todos los días de tu vida; y te produ-
Pirít espinos y abrojos, y comerás de las plantas del
l'llmpo. Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta
que vuelvas a la tierra ele donde fuistes tomado; porque
polvo eres, y al polvo tornarás. . . . Por tanto le echó
.1 'hová Dios del jardín de Edén, para que labrase la
1i na de donde fue tomado. De modo que arrojó al
11 mbre, y coloc6 al frente del jardín ele Eclén los que-
rubines y tma espada de fuego que daba vueltas por
l. dos lados para guardar el camino del árbol de la
ida."-Gén. 3 :16-19, 23, 24.
La ley de Dios y su juicio prueba que El no creó
~ara el hombre un alma inmortal ni t ampoco le dio una.
¡:,a ley decía: "Rn el día que de él comieres,. muriendo
morirás." (Gén. 2 :17). El juicio de :Oios en contra
t1 l hombre fue en completa armonía con esa ley. No po-
día ser de otro m(ldo porque Dios es siempre consistente.
•' n determinación o j~cio fue: "Con el sudor de h t
60 La Crcaci6n

rostro comerás él pan hasta que vuelvas a la tierra de


donde fuiste tomado; porque polvo eres, y al polvo
tornarás." (Gén. 3 :19). Había sido tomado de- la tie-
n 'a y a ella le tocaba ·ahora volver en forma de materia
inanimada. ·
El registro del Señor muestra que solamente el Edén
se encontrab'a completo y perfecto, y que las otras part es
de la tierra no estaban aun terminadas. La expresión:
"Maldita sea la tierra por tu causa," sólo impl.ica que
la tierra estaba incompleta para provecho del hombre.
¿ Peró por qué para provecho del hombre ? Porque
ahora le tocaba ir a esa parte no terminada, que produ.:
cía espinos y abrojos, y por medio de su trabajo conse-
gUir su ·alimento necesario. El trabajo siempre ha
sido aigo en provecho clel hombre. Una 'persona · de~o­
cupada a nadie es útil. Fue por lo t anto un acto de
bondad ·de parte de Dios el proveer trabajo para el
hombre. '
Dios arrojó ai honi.bre del paraíso a esa porción no
terminada de la tierra y le dio 'trabajo por novecientos
treinta años, y alli, bien seguro, tuvo tiempo suficiente
para pensar en el t errible error que había cometido.
Durante ese período gradualmente el proceso ele muerte
operaba· en él, dando por resultado que finalmente ·
murió. Por supesto que Dios hubiera podido acabar
con Adán instantáneamente, peró prefirió no seguir ese
curso. Su plan revelado muestra que la muerte gra-
dual de Adán resultará en el bien final ele la raza hu-
mana y para gloria ae Dios.
En el Edén se encontraba un árbol que llevaba por
nombre "el árbol ele la vida" porque Dios lo 'había pues-
to alli yle había dado ese nombre, y la criatura a quien
m permitiera participar ele ese árbol viviría y no mo-
riría. La vida no se encontraba en ese árbol, pero el
árbol y su fruto simbolizaban la vida, y la ley de Dios
era que si ·alguno se mostraba digno de particip'a r' del
fruto del árbol ue ' la vida vivíría· eternamente. 1 De
El Hombre 61
h11 1 rso probado Ad{m fiel bajo la prueba a que fue
11 11t Li.do, es indudable que al debido tiempo se le hu-
I• 1 1'11 permitido participar de ese árbol de la vida, de
•'1 1 modo testificando Dios que habia sido fiel y verda-
d¡ •'O y que por lo t anto tenia derecho a la vida eterna
o•n l11 tierra.
1,u. ley o regla de acción de Dios nunca canibia. Su
11• sobre este punto es; "Al que venciere, le daré a
''IP11er del árbol de la vida que está en medio del pa-
oiJ!¡¡o de Dios." (Apoc. 2:7). Esta regla, de necesidad
on,plica que todo miembro de la raza humana que en
'1111lquier tiempo o condición alcance vida eterna tiene
qn ser puesto a prueba y tiene que ser vencedor en ella,
il (l ese modo probándose fiel. Esta es una evidencia
11 di ional de que el árbol de la vida es un simbolo de
vi da para los que son obedientes a Dios, y que nadie
oJIJI cndrá la ;vida eterna a menos de ser obediente.
m organismo humano es · ele carne. La mente es la
Ol L ligencia o facultad del sér por medio de la cual la
1 l'iutura llega a una conclusión. La voluntad es la fa-
' t~l.tud del sér que determina el hacer · o no hacer cierta
1\ su. A Eva se le presentó la tentación en tres formas:
ltna prueba a la. carne, otra a la mente y otra a la vo-
luntad. Ella se dio cuenta ele que el árbol era bueno
1 ara comer y razonó: 'Esto debe ser bueno para mi
1110rpo. Usaré mis facultades para provecho y gratifi-
ación de mi carne.'
Ella también vio que era grato a la vista. Su apa-
,.¡ ncia exterior le agradaba; era hermoso y deseable.
Por lo tanto ella dijo: 'Particip}),ré de este hermoso
i!'uto.' Vio que ese árbol era deseable para alcanzar
nabüluria. Esto era uña tentación a su orgullo o a su
u ntimiento de propia importancia y valor, y ella quizo
1:1 r sabia sin esperarse al tiempo debido de Dios. A
nusa de esto determinó ejercer su voluntad en contra
flc la voluntad de Dios y se dijo: 'Comeré, y seré más
uabia que. toda otra criatura, ,y aun más sabia que Dios.'
62 La Cr'eación
Sobre tódos estos tJ:es. puntos Eva fue tentada,, y ella
cedió y cayó. Se sintió tan impresionada con ·su propia
importancia que dio de la fruta a su marido y él comió.
Ei se, dio cuenta de que lo hecho por ella la separarla
de Dios; pero él pTefiri6 ceder al deseo de su propia'
ca;me en cambio de obedecer a Dios; por eso comió.
Ella era hermosa; atractiva .a sus ojos;· pensó que era
mejor estar en su compañia, y ceuió en este .punto. Se
dio cuenta de ·que la voluntad de Dios era la de que 1,1 0
comiera de ese fruto pero se apercibió de que podía
usar. su propia voluntad diferentemente, así adelantán-
dose a Dios. Sin eluda algtma Dios tenia el propósito
de permitirle comer de él al debido tiempo, mas por
ejercer su propia voluntad ele una manera egoísta, A.dán
cedió en este punto. Vemos p1leS que el hombre cedió
:x las 1tres tentaciones y cayó. ·
,Las posteri01:es revelaciones de Diqs muestran que
estos ' tTes n étoclos de tentación han sido permitidos y
que El rio ha. impedido a Satanás que las presente do
una manera sutil a todo miembro ele la familia humana
que ha pretendido· estar en armonía con Dios. Leemos
en .su Palabra: "Porque todo lo que hay en el mundo,
l::t conscupiscencia ele la carne, y la concupiscencia ele
los ojos, y la vanagloria ele la vida, esto no es del Paure,
SIDO que es del munélo. Y el mund.o S() va pasando, y
la concupiscencia de él; mas el que hace la voluntad de
Dios permanece para siempre." (1 Jn. 2:16, 17). Esta
es una prueba adicional de que a la familia humana no
se le ha concedido la vicla et erna sino que tiene· que ser
puesta a prueba, y bajo esa pruc:: ba demostrar su fic1c-
lic1ad y lealtad a Dios.' '
Adán y su esr>osa fueron arrojados del paraíso. Fue-
ron arrojados· de' él sin el favor ele Dios y sentenciacl.os
i muerte, y Jehová puso guardia a la entrada del jardín
para jmpedirles volver. . Voluntariamente habían · que- 1
brantado la ·.ley de Dios y ahora .t enían que recibir el
castigo que la ley les imporiíá. Su alimbJto 'en el Edén
El Hombre

. 1'1 p rfecto, pero ahora fuera del Edén creo-i;¡1n espinos


11b1;ojos . y, árboles con frutas ;ponsoñozas. De ésto~;
¡lli '' ¡n edio el~ ¡abol'iosos esfuerzqs tenían qu,e procu~·ar
1111 nUp1ento, el que, con !')l curso del 1tiempo, ~o¡; en ve;
l liill tl '·ia y finalmente mo't ivaría su muerte.
• j 1 ji
Fue un ;

l 1 • l t~ tc clia para ellos . Clfflpdo abanqonarpn el Edén, y1


1
111nt inuó oscuro; su ' lm:ga jornada por la sepda de la
1i'l t~tcza y e~ 'd~lOT habia ,come;nzaclo. Novecientos treinta
1111 s más .tarde, , Adáh, en ,tjnieblas y en pecado, bajó a
111 htmba. y lo cubrieron con tierrá.
tra, p~.rfe de 1~ se11,tenc}a fue : ((A la mujer dijo :
ll nré qtJ~ sean muchos los trabajos de ·tus preñeces; con
dll lor parirás los hijos; y a tu marido e,sta1·á lm~·eta tu
V< 1untad, . y él será . tu señor." .( Gén. 3 :16-) . · Los , .seis
111 il mios ele sufrimientos qúe la mujer ha tenido para
dt r a luz .sus hijos abu.ndant'ement~ p:rueban .que esta
¡111 rtc de la sentencia ha ~staclo e¡¡. vigor. ,Jehová ter!ía
hli cnas razones para este castigo, y al clebiclo tiempo esto
probará ' ser una bendici9n. Se expresó alli co1;no la ley
d Dios que la mujer estaria sujeta al hombre; existe
pnn buena razón también para esto. A causa ele que la
1'(1 ·la ha sido violada frecuentemente, mucho sufrimien-
lo ha resultado y muchos hogares han sido disueltos.
Las lecciones que en efecto son provechosas cuestan
1'11 ras. Dios ha provisto, en provecho de sus cria:turas,
vu liosas lecciones. Al debido tiempo aprenderán que
.J hová hace todas las cosas ele una manera ordenada;
1 tL el hombre es la cabeza ele la muj€r; que Cris'to es la
nbeza de la iglesia, y que J ehová es la Cabeza ele
( 1·isto y el Dios Altísimo sobre todos. El enemigo, Sa-
l 11 n ás, ha procurado hacer que esta regla se viole en casi
1 <lo hogar. El ha hecho del esposo tUl vicioso y bestial
111110 y asi fácilmente ha inducido a la mujer a creer que
11 debería sujetáJ:sele. De esto ha resultado mucha elis-
rrlia y sufrimiento.
Cuando Dios creó a .t\clál1 y a Eva dijo : "Sed fecun-
l1 s y ·mu1til)licáos y henchid la tierra." Con esto ex-
. ' ¡ • ), .

r
64 La Creación

presó su voluntad de que ellos debían producir una raza


de su misma esp_ecie, para que poblaran la tierra que
para ellos había creado. Hasta el tiempo en que Adán
y Eva salieron del Edén no habían ejercido la facultad
a ellos concedida. Más tarde comenzaron a nacer sus
hijes. (Gén. 4:1, 2). ¿Qué clase de hijos era de espe-
rarse nacieran de padres imperfectos bajo la sentencia
de muerte? Es preciso tener en cuenta que Adán no
tenía derecho a la vida y por lo tanto no podía transmi-
tir ese derecho a sus hijos. Aparte de eso, es decir, a
más de no tener el derecho a la vida, estaba sometido
al proceso de muerte y bajo tales circunstancias sus hijos
no podían ser perfectos.
Tanto Adán como Eva eran ahora pecadores y por lo .
tanto sus hijos tenían de necesidad que nacer pecadores.
Más tarde uno de los profetas de Dios hizo presente la
regla que gobierna todos los casos: "He aquí, .en ini-
quidad nací yo, y en pecado me concibió mi madre."
(Sal. 51: 5). Sobre e1:rte punto, otro de los inspirados
testigos de Dios escribió: '~Por tanto, de la manera que
por medio de un solo hombre entró el pecado en el
mundo, y por medio del pecado la muerte, así la muerte
pasó por todos los hombres, por cuanto todos pecaron."
(Rom. 5 :12). Estos te}.{os, expresando la regla de
Dios, explican por qué los niños nacen imperfectos y sin
el derecho a la vida y con el tiempo se enferman y
mueren.
Todos estos sufrimientos han .sido motivados por el
pecado. Pero, ¿qué es pecado? Pecado es la transgre-
sión de la ley de Dios. ( 1 J n. 3 :4). Toda transgresión
es pecado o "ilegalidad," o sea hacer algo fuera de la
ley. El no hacer caso de la ley de Dios es serle desleal.
Lucifer tuvo conocimiento de la ley de Dios y la que-
brantó. Adán supo la ley de Dios, pero la transgredió.
El salario o gajes del pecado es la muerte. (Rom. 6 :23).
Estas son leyes incambiables porque Dios no cambia.-
. Mal. 3:6.
¿Quién hizo Pi'H' mara-
villoso pl a nPta y lo col !!ó
en el e ·pacio? los que se
dan el nombre de ·ubios,
tomando el aspecto ne
sabios, y eu su asumida
sabiduría, trntun de ex-
plicar que lo formó la
naturaleza . Pei'O, ¿para
qué clesperdi cinr tiempo
eu las cosas ~· ·teorías ele
los hombres imperfectos
cuando tenemo un se-
guro ~ po, itivo te;;limo-
nio clPl cual no puede
haber la menor eluda?
La ti erra es la obra del
~ran Creador, Dio· ... ·
Las R CI'ifnras diY idcn
la obra creatint en siete
días o períodos 1le tiem-
po. . .. FJI término !lh
n[>lica n un periodo de
tiempo nhareaudo mu-
chos siglos . un
período de cuarenta y
nueve mil años.
inas 23, N.
T.a Sabid1tria _de este :l!undo Km·l Spitzweg
Jehová creó al
hombre . .. con
sabiduría mnra-
Yillosa. . . . . e
h i z o provisión
para el exacto
número de hue-
sos que habían
de formar el es-
queleto humano .
. . . para un per-
fecto sistema de
circulación . . .
pulmones q u e
mantuvieran l a
sangre pura y
funcinando e s e
sistema de circu-
lación. El
sistema eléctrico
más maravilloso,
al cual damos el
nombre de ner-
vios. . .. Todos
los deta Bes fue-
r o n ejecutados
cuidadosamente.
Página 51.
La. Tentación Hans Thotna
¿Pero por qué permitió Dios que un sutil enemigo tendiera .
un lazo a esta perfecta pareja? . . . Inclulablemente que
Jehová hubiera podido impedir a Lucifer el llevar a cabo
sus malévolos intentos. . . . El hombre perfecto, dotado de
libre albedrío, tenía que ser sometido a prueba para que
demostrara si permanecía o no leal a Dios. Por eso
Dios permitió a Lucifer llevar adelante sus malvados
planes. Pcigina. 57.
CaLn y A.7JeZ La1·1Usla1ts IIeged1ts
Uabiénd ol dudo Eva los informes con respecto u la
"simient e" qu había de Yencer al enemigo, Abel sin duda
pen ·aba en ese liempo futuro en que Dio · clispen aria esa
bendició n ·obr él y lo· demás que le sirvieran . Su fe fue
grata a Dio.· y creció en su favor. Por supuesto que mien-
tras tan lo 'alanás habría e taclo vigilando muy de cerca
a eslos dos hijos ele Adún. El que parecl ru recibir más
favor de Jehová necesari amente sería su en mi"'O, y le sería
preci. ·o dar lo · pasos conducen tes pura destruirl o. Págillla 74.
El Hombrts 69
EL DIABLO
La primera criatura espiritual que pecó fue Lucifer.
De las criaturas terrestres Adán fue el primero en pe-
car. A causa de su acción, el pecado entró en el mundo.
¿Es entonces la. muerte la pena que ha de i-mponerse a
Lucifer por su transgresión de la ley de Dios? Si; · el
juicio de Dios es el de que tiene que morir y quedar
eternamente muerto. (Eze. 28:15-18; Heb. 2:14). El
castigo por esta violación de la ley será aplicado al de-
bido tiempo de Dios. Dios tiene un debido tiempo para
todo lo que hace.
El nombre Lucifer quiere decir porta-luz o estrella de
la mañana. Después de su pecado se le conoció con los
nombres de Dragón, Satanás, Serpiente y Diablo.
(Apoc. 20:1-3). Siempre que Jehová da un nombre a
alguna de sus criaturas, ese nombre lleva consigo mucho
significado. El nombre Dragón significa devorador;
Satanás, oponente o adversario; Serpiente, engañador,
y Diablo quiere decir uno que calumnia. Estos nom-
bres indican el curso inicuo y de completo abandono
que el Diablo ha seguido desde su crimen en el Edén.
El desde entonces ha sido el enemigo de Dios y el
enemigo y adversario ele todo el que se ha esforzado por
obedecer la ley de Dios. Por lo tanto, todo aquel que (
ha sido opuesto por Satanás, hasta ese grado ha sido
sometido a prueba. La Palabra de Dios claramente
revela su propósito de conceder a toda criatma una
oportunidad para escoger el seguir al Diablo o ser obe-
diente a Dios. Esto explica el por qué la ejecución del
juicio en contra de Satanás ha siclo tan largo tiempo
~emorada.

UN RAYO DE ESPERANZA
Otra parte de la sentencia impuesta por Dios fue .uy
pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu si-
miente y su simiente; ésta te quebrará la cabeza, y tú
le quebrarás el calcañar." ( Gén. 3 :15). Esta expresión
70 La Creación

bíblica tiene un doble significado. La serpiente, que


entonces andaba en otra forma, fue sentenciada a arJ.·a s-
trarse s0bre su vientre y a ser aborrecida y muerta por.
los hombres. 'l'ambién, y habiendo sido tan solo nn
instrumento de él, la serpiente representó a Satanás y
llegó a ser un símbolo de engaño. La "simiente" de la
serpiente que a('_[ui se menciona se. refiere a los que lle-
gan a ser instrumentos o voluntarios representantes del
Diablo.-Jn. 8 :40-44. '
La mujer simboliza la oi·ganización de Dios llamada
t ambién Sión, la cual da a luz la "simiente de la pro-
mesa." Esa "simiente es ,eJ Cristo, el Ungido de Dios.
(G ál. 3:16, 27, '29). La sentencia especificaba que
desde entonces habría enemistad entre la ''simiente de
hl. serpiente" y la "simiente de la mujer." El Diablo y
sus ángeles, lo mismo que sus representates visibles,
abierta y violentamente han opuesto a todo el que sin-
ceramente se 1\a esforza.do por servir a Jehová y por se-
guir en las h udlas de Cristo Jesús. ·L a lucha ha sido,
y aun es, entre los ungidos ele Dios· por un lado y er
Diablo y sus ángeles por el otro.- Efe. 6:12. ·
En esta parte de la sentencia hay una vaga promesa
de victoria para la "simiente de la muj er" en las pala-
bras : "te quebrará la cabeza." La simiente tiene pri-
meramente que ser preparada y escogida, y hasta ese
entonces Dios permitirá al enemigo el continuar su ne-
fanda tarea. Pero la promesa de Dios es que Satanás
será vencido y que al debido tiempo el Ungido aplastará
su cabeza. (Rom . 16:.20) . El hecho que la cabeza del
enemigo ha de ser aplnstada, y que esto será hecho por
''la simiente d.e la muj er," es un r ayo de luz que brilla:
en la senda humana e inllica que el futuro traerá mejo-
res tiempos.
Puesto que esas me:jores con el iciones ha~ de ser traí-
das por conüncto de la "simiente ele la mujer," el ins-
trumento divino, es indispensable que esa simiente sea
· perfeccionada y lRlesta en completa armonía con Dios.
El Homb1·c 71

Para que esto pueda llevarse a cabo una unueva crea-


ción" tiene que ser preparada por Jehová. Unos cuan-
tos de los hijos de Adán tenazmente se han asido a ese
rayo de esperanza. Esto ha sido cierto aun en el caso de
aquellos que ni aun siquiera lograron entender el sig-
nificado de esa promesa, pero hoy en día el estudiante
del plan divino que· con agradecido y reve~ent~. corazón
contempla el desarrollo de los propósitos de Dios puede
con mayor razón regocijarse por ese leve r&yo de espe-
~anza que comenzó a brillar •desde el ]ejano día en q~e
se pronur¡.dó la sel).tencia.
Muy bien supo Dios los detalles de su plan con res-
pecto a la raza humana desde el tiempo en que pronun-
ció su sentencia en contra del hombre. Su amor, el cual
es la perfecta expresi(¡n de la carencia de egoismo, hizo
provisión para que al debido tiempo se llevaran a cabo
todos los detalles ele ese plan. Ese plan hace la provi-
sión del recobro de la raza humana por conducto y
medio de una nueva creación. La sabiduría de Dios ha
dir igido de una manera gradual el desanollo y ejecu-
ción de su plan, el cual, cuando haya sido ejecutado
exhibirá su gloria, su sabiduría, su justicia, su amor y
su ilimitado poder:. Apurémon0s a aprender más ele
las maravillosas obras de Dios porque el que las apren de
encuentra el camino que conduce a la vida y a la feli-
cichcl .- Jn. 3:17.
CAPITULO IV

Degeneració1z
I!}GENERACION quiere decir el proceso de de-
D terioro, es decir, ir de mal en peor, con la pers-
pectiva de una completa degradación. Fuera
del Edén la degradación de la raza humana comenzó y
continuó hasta llegar a un punto culminante.
Un sér perfecto a más de su perfección mental y cor-:
poral tiene derecho a la. vida. La sentencia de Dios en
contra de Adán le quitó ese derecho. Cuando fue arro-
jado del Edén, aun se encontraba él poseído de mente
y organismo sanos, pero estando condenado a muerte
el decreto tenia que llevarse a cabo y el proceso de
muerte comenzó. Aun cuando el hombre había desobe-
decido a su Creador, perdiendo por tal razón todo dere-
cho a su amistad, sin embargo Dios lo trató con consi-
deración. Como él y su esposa se encontraban desnudos
('hizo Jehová Dios para Adán y para su mujer túnicas
de pieles, y los vistió." ( Gén. 3 :21). Se pretende que
esas pieles fueron tomadas de animales, pero esto no es
un hecho probado y de todos modos es inmaterial. Lo
importante es apercibirnos de que Dios los vistió.
El objeto de vestirlos no pudo ser para protegerlos de
las inclemencias del tiempo, o de las tempestades, por-
que en ese entonces no habían tempestades en la tierra
ni había tampoco frío excesivo. En toda la tierra la
temperatura era casi igual debido al dosel acuoso que la
cubría. Probablemente las túnicas tuvieron por obj eto
el cubrir su desnudez tanto de los mismos ojos de ellos
como de los ojos de sus hijos cuando nacieran Cual-
quiera que haya sido la razón fue un acto de bondad de
parte del gran Creador.
'12
Degeneración 73

El registro concerniente a1 nacimiento de los hijos


de Adán y Eva es bastante breve y no pretende dar los
nombres de todos ellos. Caín es el primero que se nom-
bra, Abel el segundo. Es evidente sin embargo que les
nacieron otros hijos e hijas quienes vinieron contem-
poráneamente con Caín y Abel. Es probable que estos
dos hombres eran cabezas de familias, a lo menos, de
Caín las Escrituras claramente dicen que tenia una
esposa la cual indudablemente fue hija de Adán y por
lo tanto su hermana. (Gén. 4:17). El nombre Caín
significa "adquisición." Probablemente Eva al nom-
bralo pensaba en la simiente que Dios había prometido
quebraría la cabeza de la serpiente y con bastante razón
pensaba que con Caín había adquirido la simiente que
finalmente la haría salir victoriosa.
Caín era labrador. Tenia que trabajar entre las es-
pinas y abrojos para producir su propio alimento y el
de la familia. Evidentemente sus padres lo informaron
de sus experiencias en el Edén y que Dios había orde-
nado que trabajaran con el sudor de sus frentes para
obtener su alimento. Su lucha en contra de las espinas
y abrojos lo hicieron agrio y áspero. El heredó de sus
padres todas las malas inclinaciones que resultaron de
su violación a la ley de Dios. ·
Su segundo hijo, Abel, era pastor. Su nombre signi-
fica alimentador o nutridor. El ayudaba a proveer las
necesidades de la famila de su padre, y probablemente
tenía una familia propia. Supo del Edén por boca de
sus padres, quienes bien seguro le contarían lo hermoso
que era, y las duras experiencias que habían tenido <lc;;de
. que habían sido arrojados de él a causa ele su desobe-
cliencia; también se le inforn1ó de la leve esperanza que
les había sido dada de volver a recibir la bendición de
Dios.
Durante el día Abel cuidaba el rebaií.o para prote-
gerlo de los ataques de las fieras. En la noche se en-
cnrgaría de encorralarlo y ·cuidarlo, meditando muchas
74 La Creación

veces quizás en las altas vigilias de la noche sobre lo


que .sus padres le habían contado y contempiando las
manifestaciones de la gloria de Dios exhibidas en su
creación. Probablemente r azonaba que el gran Dios que
había dado la vida a su padre y a su madre, también la
había dado a las ovejas de su rebaño, ?f que si él, Abel,
se complacía en cuidar y proteger los animales, sin duda
Dios se complacería en cuid.a1:, de todos los que le obe-
decieran y le sirvieran. Abel reverenciaba a Jehová, y
su fe en Dios au,mentaba. hacién,dolc sentir mayores de-
seos ele obedecerle. ,
Habiéndole dado Eva los informes cpn respecto a la
" simiente" que habría de vencer al enemigo, Abel sin
duela pensaba en e. e tiempo futuro en que Dios dis-
pensr.uía esa bendición sobre él y los demás que le sir-
vieran. Su fe fue grata a Dios y creció en su favor.
Por supuesto que Satm1ás habría estado vigilando
muy de cerca estos dos hijos de Adán. El que pare-
ciera recibir m.ás favor de Jehová necesariamente .seria
su enemigo, y le sería p;reciso dar los pasos necesarios
para destruil'lo.
En el transcurso uel tiempo estos dos hijos, Caín y
Abel, trajeron ·us ofrendas a Jehová. Caín, quejoso y
desabrido, trajo del fruto de sus labores, en su egoísmo
quizás pensan<lo lo mucho que había trabajado, los mu-
chos espinos y abrojos que hn.bia tenido que arrancar
para producir su oiren da que al dársela a Jehová ningúu
provecho le traería. Pensó que estaba haciendo un favor
a Dios en ofrecer ese sacrificio; qne no le era preciso
hacerlo porque siendo el mayor de necesidad era el fa-
vorito ele J chová. Toda esta arrogancia y acrimonia.
hab.ía sido plantada en su corazón por Satanás.
Abel también, ·bondadoso y reverente, trajo su ofrencl.a
a Jehová. Razonaba que t odo lo que él tenia eran
dúdivas de Dios y ahora deseaba mostrar su gratitud
trayéndole lo mejor que él poseia. Degolló varios pri-
;mog6llitos de sus ovejas y trajo al altar la carne y el
Degenera:cióir. 7&

ll Lo; él 1 seb'o representando sus . mejorés ' esíudrzos, su


unhente celo, y su abnegada devoción> a Dios' y a la jus-
"Li. i. a. Le era un sacrificio el dar sus mejores animales,
p ro consideraba CNe ~'o , :rpás valioso que tenía era cosa
:rnuy poca que ofrecer a 3 ehová. ·Estú · escrito : "Y J e-
hová miró a Abel y su ofrenda; mas a Caín y su ofrenda
no miró."-Gén . 4:4-5.
· Abel tenia fe y amaba a Dios. N o así Caín, quien
era egoísta y desabrido. Abel a causa de su fe fue re-
putado por justo ante Jehová, pero Cain por su mal
corazón f>ue desaprobado. «Por fe Abel ofreció a Dios
más excelente sacrificio que Cain; por medio del cual
se le dio testimonio de que era justo, atestiguando Dios
respecto de "sus dones; y por medio de ella, estando
muerto aun habla."-Heb. 11:4.
Dándose cuenta que Dios no aceptó su egoísta ofren-
da, ensañ6se Caín en gran manera, su ira siendo mani-
festada en su semblante. Este fue el oportuno momento
para que Satanás entrara en acción. Insinuó a Caín
qu e debería quitar de su camino a su hermano porque
era un rival y amenazaba ser el más importante de la.
familia. Caín esperó una oportunidad y al estar los dos
en el campo lo mató. Para cubrir su mala acción echó
mano ele la mentira. ( Gén. 4 :8-11). Cain había en-
trado de lleno a servir a Satanás y, como su Señor, llegó
a ser mentiroso y homicida. ( J n. 8 :44). Satanás razonó
que la muerte de Abel no solamente lo libraría de un
enemigo sino que además quitaria a otros el deseo de
servir a Jehová Dios.
:Pasaron los años. Muchos otros niños y niñas na.cie-
ron. Entre ellos se encontraba J abal quien encabezó la
· tribu de los que cri a.b an ganado y habitaban en tiendas.
Después vinoJJ.ubal, quien fue el padre de los que tocan
el arpa y la flauta. Se nos ha:bla de 'l'ubal-cain, fabri-
cante de toclo instrumento cortante de cobre y de hierro.
Cuando nació Enós, nieto de Adán, ya había sobre la
tierra un gran número•de seres 1nunanos 't o<los los cuales
'1& La Creación

se eneontraban bajo la influencia de Satanás.' La burla


e hipocrecia tuvo comienzo entonces y comenzaron los
hombres a llamarse del nombre de Jehová, pero en rea-
lidad ridiculizando y blasfemando su santo nombre.
Cuando Adán fue arrojado del Edén no se encontraba
físicamente débil ni enfermo. Aun cuando había sido
privado de su derecho a la vida tenía sin embargo vigor
y fuerza. La pena por su pecado la tenía que pagar
gradualmente. Cuando llegó a los 130 años de edad
tuv9 un hijo a quien le puso por nombre Set, que quiere
decir sustitución, porque él venía a sustituir a Abel ·a
quien mató Caín. Luego le nacieron otros hijos e hijas
y a los 200 años de edad pudo contemplar a sus biznietos
en la fuerza y vigor de la juventud y él mismo capaz de
engendrar más hijos. Después de engendrar a Set, vivió
800 años, y engendró muchos hijos e hijas, muriendo de
930 años de edad.
El vigor y fortaleza de los hombres de ese entonces se
muestra por el hecho de que podían luchar en contra de
los elemep:tos de la tierra y con todo vivir largo tiempo,
según lo indican las Escrituras. Set vivió 912 años ;
]!}n6s, el nieto de Adán, murió a la edad de 905 años;
Cainán, el hijo de Enós, vivió 910 años; :M:ahalaleel
vivió 890 años; J ared a la edad de 162 años engendró a
Enoc, y después vivió 800 más, muriendo a la edad de.
962 años. Enoc, a la edad de 365 años, y encontrán-
dose todavía con vigor y fortaleza, no fue hallado porque
lo tomó Dios. Su hijo, Matusalem, alcanzó a vivir 969
años.
Pero nótese que ni Adán ni ninguno de sus descen-
dientes vivieron mil años completos. ¿Por qué fue eso?
Porque la ley que Dios dio a Adán decía: "En el día
que de él comiéres, muriendo morirás." ( Gén. 2: 17).
Esta es una prueba de que Adán tenia que morir gra-
dualmente y que para el final del "día" tenía que estar
muerto por completo. Todos los otros mencionados eran
hij ós y nietos de Adán, y nacieron sin derecho a la vida;
Degeneraci6n 77
t (,nftm que morir dentro de los límites de un día porque
11 reclaron el resultado de la mala acción de Adán.
Un «día" se usa para representar un período fijo de
i ropo, y cuando se refiere a la creación las Escrituras
testran que es un periodo de siete mil años. Cuando
rrl L
aplica a la creación del hombre y al tiempo relacionado
n el hombre se refiere a. un periodo de mil años, según
l cómputo del hombre. "Un solo día para con el Señor
s como mil años, y mil años como un solo dia."-2 Ped.
u: 8.
Enoc nació en la séptima generación desde Adán, y
durante todo ese período de tiempo, más de 600 años,
solamente dos personas, Abel y Enoc, manifestaron fe
y amor por J ehová y le sirvieron. El Diablo h abía
hecho matar a. Abel y Dios tomó a Enoc para que no
viera la muerte. Sin duda alguna que el Diablo hubiera
ncabado con él si Dios no lo hubiera protegido. 'fodos
los demás en la tierra se encontraban bajo la influencia
ele Satanás y eran inicuos. Después de la muerte de 1
Enoc la maldad continuó en aumento y la raza fue de-
generándose de día en día. N o hay pnteba ninguna
de que desde que Enoc fue tomado hasta el nacimiento
ele Noé hubiera en la tierra alguno que temiera. a J ehová.
El nombre Noé significa descanso o consuelo, y parece
indicar que durante su tiempo algún cambio ocurriría
que le traería consuelo y aumentaría su fe.
De todas las criaturas terrestres una mujer perfecta
es el sér más hermoso que se puede contemplar. Por
supuesto que la única mujer perfecta que ha existido fue
Eva. Dios la hizo perfecta. (Deut. 32 : 4). Cuando
ella dejó el paraíso, su hogar en el Edén, retuvo su gra-
cia y belleza de forma. Sus hijos e hijas nacieron en
tanto que ella experimentaba el proceso de muerte.
Cuando estas hijas y nietas de Eva llegaron a la puber-
tad, eran expresiones de belleza femenina tales como no
es posible describir con el lenguaje humano. .
Muchos poetas y es~ritorea en prosa han. empleado
78 La C1·eaC'ión

to<los los adjetivos conocidos para describir !11 bell ézn. de


las muje~es que vivi eron cuando Grecia se ~ncontraba
en • el cenit de su glm:ia y1 poder. Si las mujeres en ese
entonces emn hermosas, cuánt,o, más , hermosas de):Jieron
ser las hijas y nietas de Eva. Debemos· recordar que
éstas se encontraban mús cerca de la perfección en lo que
a forma y figura toca. En los dí.as de la anti g~ta Grecia
la raza ya habia degenerado en gran manera y la dege-
neración ahora es aún mayor.
Solamente por medio de , la comparación podemos
aproximar las cualidades naturales de las muj eres que
vivían en la tierra en los tiempos de Noé. Como Eva,
estas muj eres eran vr.nas. Se encontraban listas a ceder
a las t entaciones que gratificaban los deseos de la carne
o los deseos ele sus oj os, o que fuera grato a su orgullo.
anhelaban ser aduladas y admiradas. Siendo volup-
tuosas y sensuales, y teniendo sus mentas lejos de Dios y
de la justicia, estaban listas a ceder a cualquier influen-
cia que les prometiera exaltación o la sati ·facción ele su
egoismo. Lo que a estas muj eres agradaba e1·an hom-
bres robu stos que las adularan y que satisfacieran sus
deseos egoístas.
La mujer siempre ha sido la. más hermosa y más peli-
grosa de las criaturas de la tierra. Su belleza y atrac-
tivos cautivan al hombre y lo ciegan a cosas más nobLes,
induci6ndolo a olvidar a Dios. 'l'al :fue la seductiva
influencia que ejerció la encantadbra Eva y que condujo
a Adán a una tumba ele criminal. Sin embargo, una
mujer buena y virtuosa, por completo dedicada a Dios,
es una bendición para UJ;l buen hombre, porque conoce
y sabe mantener su propio lugar. El que cede a la, in-
fluencia de una muj er ambiciosa y egoísta anda en la
senc}a que conduce a la degradación y a la muerte. Casi
todas las mujeres de los días de Noé eran egoístas, sen-
suales y vanidosas. Eran hermosas de figura y forma;
hermosas para contemplar, pero estaban llenas de or-
Degeneración 'l'9

11llo y de un deseo de ser vistas y aprobadas por los


hombres.
EL DIABLO Y SUS ANGELES
atanAs, el Diablo, el enemigo de Dios y de .la justicia,
fl nsó que había llegado el tiempo op()rtuno para dar
otro paso. Había comenzado su obra inicua usando a
1111.11 mujer, y ahora podía continua·r usando a las muje-
1' s para adelantar sus nefarios propósitos. Durante el
p riouo de 1,600 años, ,desde la expulsión del hombre del
l•lclén, solamente tres personas habían tomado el lado de
.J ehová. U no de esos Satanás lo hab¡a hecho matar;
tro Dios lo había tornado. Satanás muy bien podía
u ar e ·tas circumstancias como un buen argumento para
nd lantar sus inicuos designios.
En el cielo habbn ejércitos de seres espirituales lla-
'l'nados áugeltJs y quienes eran ''hijos de Dios." Bien
H guro estas criaturas se encontTarían observando el
~ urso dtJ conducta de la creación terrena. Las Escritu-
ras claramente muestran que estos ángeles tenían la
fncultad de aparecer en forma humana, sin duda alguna
• n el consentimiento ele J ehová. (Gén. 18: 1-10; Jue.
3 : 1-21). Cuando estos "hijos de Dios" aparecían en
j:orma humana eran más atractivos para 1as mujeres
JUe los hijos y nietos de Adán. El plan de Satanás era
1 de trabajar por medio ele las mujeres para obtener
una raza de gente en la tierra que él pudiem completa
y absolutamente dominar. Según lo que ha acontecido,
y conforme al registro de las Escrituras, la siguiente
conclusión es bastante razonable:
Satanás convocó a los muchos hijos de Dios y razonó
on ellos de la siguiente manera: 'Por los 1,600 años
pasados habéis sido expectadores de este drama en la
t.ierra. Desde que Jehová me desi.gnó como el supervi-
so.dor del hombre he tenido el poder de la muerte. J e-
hová declaró que yo debería morir a manos de la si-
miente de la mujer, pero habéis visto que eso no pasó
80 La Creación

de ser una amenaza. Durante los· 1,606 anos pasados ·dos


hombres han tomado el lado de J ehová. Uno de éstos
yo hice que lo mataran, y el otro, J ehová, temiendo lo
que yo pudiera hacer con él, se lo llevó. En la tierra
todos me reconocen como dios. La única excepción es
ese hombre Noé. Al debido tiempo veré que ese tro-
piezo sea quitado de en medio.
'Si vosotros, hijos de Dios, cooperáis conmigo y me
rendís obediencia, estableceremos un gran imperio sobre
la tierra con una clase de gente que nunca morirá. Te-
néis la facultad de aparecer en forma humana· y sois
más fuertes que los hijos de Adán, y estáis llenos de
vigor. Ved lo hermosas que son esas hijas de Adán; en
el cielo no hay nada semejante con lo que pudiérais
saciar vuestros placeres. Las podéis tomar por esposas
y satisfacer vuestros apetitos carnales y en ellas tener
hijos superiores a los de los hombres. Teniéndome como
vuestro guía y príncipe podremos establecer el más
grande imperio que ha existido y Dios no podrá inter-
venir. El periodo de tiempo transcurrido desde el Edén
os habrá demostrado que no estoy sujeto al poder de
Jehová.
'Dejaremos que este tonto de Noé siga su curso hasta
que sea mi voluntad destruirlo. En primer lugar le mos-
h·aremos que podemos tomar las muj eres y h acer el uso
que queramos de ellns. Los hombres se nos unirán, pero
en caso de que nó, los quitaremos de en medio. Mi
poder será supremo. Sabéis que Dios ha declarado que
el hombre tiene que morir, y ninguno de sus descendien-
tes podrá vivir más que un día de mil años; pero los
hijos resultantes de vuestro contacto carnal con esas
mujeres en la tierra no morirán jamás.'
El seductivo y plausible agumento de Satanás con-
vencería a muchos de los hijos de Dio¡¡ en el plano es-
piritual y se le sometieron. En ejercicio de sus faculta-
des se aparecieron como hombres. Grandes hombres
en verdad eran éstos. Andaban por la tierra tomando
D eg eneració·n 8!
nota de la situación y preparándose a llevar a cabo las
órdenes de Satanás. Se apercibieron de que las mujeres
eran voluptuosas, atractivas y seductoras, y ante ellas
exhibían sus hazañas y proezas para que pudieran ser
admirados.
La mente de las mujeres se trastorna fácilmente por
un hombre vigoroso, atractivo y fuerte. Estos ángeles
materializados eran gigantes y entre los hombres no
había ninguno a ellos comparable. Las mujeres cayeron
fácil presa de sus halagos y frases almibaradas y no se
registra que objetaron en lo más mínimo el ser sus es-
posas. "Y aconteció cuando comenzaron los hombres a
multiplicarse sobre la faz de la tierra y les nacieron
hijas, que viendo los hijos de Dios que eran hermosas
las hijas de los hombres, se tomaron mujeres de entre
todas aquellas que escogieron."- Gén. 6: 1, 2.
Las Escrituras claramente apoyan este punto de que
los hijos de Dios aparecieron en la tierra como "gigan-
tes" en la forma de hombres y que tomaron esposas de
las hijas de los hombres. El producto de esa unión fue
la raza de los N eílim. Las Escrituas los describe así:
''Los Neflim estaban en la tierra en aquellos dlas; y
también después de que se llegaron los hijos de Dios a
las hijas de los hombres y ellas les dieron hijos; éstos
vinieron a ser los poderosos que hubo en los tiempos an-
tiguos, varones de renombre."-Gén. 6: 4.
Puesto que estos hijos de Dios aparecieron en forma
humana para tener contacto carnal con las mujeres y
producir hijos, con ello dejaron "su propia habitación"
es decir, el estado de hijos de Dios en el plano espiritual,
y llegaron a ser pa:rte de la organización satúnica. Se
volvieron aliados y siervos de Satanás, diablos o demo-
nios, teniéndolo a él como su príncipe.-Mat. 9: 34;
12:24; Mar. 3:22; Jn. 12:31; 14:30; 1 Ped. 3:19,
20.
Estos demonios, apareciendo como hombres y pro-
creando una raza, junto con sus hijos, no podían tard~
82 'La Oreació 1~

mucho tí lf.lPO ·en dominar a los pueblos de Ja tierra que


se ,Jf.. 1 s.ometierari~ Ellos degradaron a la raza hum'a na
'apaHundo sus mentes de Dios' y haciéndolos entregarse
a toda clase de malas acciones. Estos N eflim, junto con
toLlas los hombres y, mujeres que se les juntaron, llega-
ron 'a ser en extremo malvados. ' '
t ''Y vio Jehovíí. que era mucha la maldad del hombre
'en la tierra, y qué toda ,imaginación 'de los pensamientos
1
de Su' cora'z6n era ·~olamente mala todos los días. Y pe-
sóle a ..Jehová el haber hecho al hombre en la tierra y
afligióse en su corazón. ( Gén. 6: 5, 6) . Esta terrible
maldad doliale a Diqs. El hombre perfecto que El habí.a
creado y puesto en el perfecto hogar con la facultad y
autoridad de llenar la tierra con una raza perfecta había
degenel:ado al grado que la tierra ahora estaba llena de
violencia y todos los pensamientos de los hombres eran
malos.
Hasta ese tiempo el hombre alcanzaba a vivir más de
900 años, pero entonces Dios limitó la duración de la
vida humana a 120 años. ''Y dijo Jehová: :M:i espirüu
no contenderá para siempre con el hombre; él es carne;
sin embargo, sus clías serán ciento veint e años." ( Gén.
6 : 3) . Los 120 años aquí mencionados se refieren al
hecho de que ese sería el límite de una generación ele
ese tiempo en adelante. Después del día de Noé Moisés
vivió 120 año·s, lo cual e¡¡ pTueba de que Dios había
puesto esa limitación en lo largo de la vida del hombre.
(Deut. 31: 2). "Y era Moisés ele edad de cieJ¡to y
veinte años cuando' murió; su vista no fue ofuscada, ni
se había debilitado su vigor."-Deut. 31: 7.
Entre los hijos ele Adán en la tierra había uno, Noé,
quien t enía fe en Dios y que había permanecido fiel a
pesal' de toda oposici6n. El se había mantenido aparte
de los' 1 ángeles caÚlbs que eran entonces · demonios en
forma humana.. El resistió sus malévolas influencias y
a pesar ele los atentados en contra ele su vida se man-
tuvo del lado de J chov:í. "Mas Noé halló gracia en los
Degencrac·ión 83

.i s de Jehová. Estas son las generaciones de Noé ;


N é era varón justo y perfecto en sus generaciones; Noé
1111daba con Dios. Y engendró Noé tres hijos: 'Sem,
am y Jafet."-Gén. 6 :8-10.
En la tierra todos iban ele mal en peor, y e¡¡taba
11 na de violencia. El Dios de justicia y de bondad tan
r;olo tenía un testigo en ella. A excepcjón ,de él y d_e sus,
hijos, todos los demás estaban ele parte del inicuo Sata-~
nás, desafiando a Dios y como enemigos de la justicia.
.1 or eso Dios determinó destruir ese inicuo elemento y
dar un nuevo comienzo a la raza humana. "Y habíase
orrompido la tierra de~ante ,de Dios, y estaba la tierra
llena de violencia. Y miró Dios la tierr'a, y he aquí que
·taba corrompida, porque toda carne había corrompido
su camino sobre la tierra. Y dijo Dios a Noé: El fin
d toda carne ha llegado delante de mí.; .porque la tierra
stá llena ele violencia a causa cle ellos, y he aquí que
voy a destruirlos juntamente con la tiern1-."-Gén.
G: 11-13. ·
EL ARCA
Noé fue lm predicador de justicia. (2 Ped. 2 :5). Con
esto se da a entender que él denodadamente se hizo del
lado de Jehová y proclamó la justicia de Dios. Lleno
ue fe y con la fortaleza del Señor dijo a la gente que
Jehová había decretado la destrucción de todos los ini-
cuos. Sin duda que su predicació:p. suminstraría oca-
sión a los demonios en figura humana, y capitaneados
por Satanás, para ridiculizar, mofarse y desafiar a Dios.
Probablemente Satanás prometió a sus siervos que algún
rUa, con un rayo, daría muerte a Noé. Quizás trató de
hacer algo en contra de él, pero nada hizo cejar a Noé
n su empeño de probar su fidelidad a J ehová.
N o hay evidencia ninguna de que el mismo Satanás
se materializara, sino que él dirigía y controlaba los
a untos de la tierra, siendo invisible a los ojos humanos.
Hay algunos textos que muestran que algunos de los
úngeles que se le asociaron y que él había seducido de
84 La Creación
los caminos de justicia nunca se materializaron y que por
lo tanto no dejaron su original estado como lo hicieron
los otros. Estos eran sus oficiales en su organización
invisible. De modo que había una organización visible
y una invisible en ese mundo que fue.
La palabra mundo significa una organización de hom-
bres en forma de gobierno bajo la supervisión de un
jefe o cabeza. Los cielos simbolizan la parte invisible
de esa organización, en tanto que la tierra simboliza o
representa la parte visible. Al examinar los pasajes
relacionados a estos sucesos vemos que Dios le dijo a
Noé : "He aqui que voy a destruirlos juntamente con la
tierra" y· también : "Todo lo que está en la tierra mo-
rirá." ( Gén. 6: 13, 17). La palabra tierra aqui se usa
simbólicamente y representa no solamente las criaturas
viviendo sobre al tierra sino también la parte visible de
la organización del Diablo entonces en poder.
Dios ordenó a Noé que edificara un arca, dándole
detalles en cuanto a los planos y especificaciones para
que la construyera. Los planos indicaban que esa gran
arca o barco debería ser de 450 pies de largo por 75 pies
de ancho y 45 de alto. Por medio de esa arca Noé y los
que con él entraran en ella serían salvos. Obedeciendo
a las órdenes ele Dios Noé se puso a construirla, de
acuerdo con las especificaciones. Su curso de acción en
preparar el material y edificar el arca fue su predica-
ción. Sus acciones eran más elocuentes que sus pala-
bras, y puesto que él· estaba procediendo debidamente al
seguil' las instrucciones del. que es Justo fue por lo tanto
1m predicador de justicia para todos los que le obser-
vaban.
Por supesto que a más de construir el arca Noé haría
presente a otros los propósitos de Dios y oon todo esto
condenaba el curso del mundo y asi hacia presente a
todos los que le rodeaban que El tenia fe en Dios. El
probaba su fe por medio de sus obras. Su predicación
era un reproche a los enemigos de Dios, demostrando
Degeneraci6n 85

su fe, la cual obtuvo para él el favor de Dios y por


medio de la cual él y su familia fueron salvos. "Por
fe Noé, habiendo sido amonestado por Dios respecto de
cosas que no se veían, movido de reverente temor, pre-
paró un arca para la salvación de su casa; por medio de
la cual fe condenó al mundo, y vino a ser heredero de la
justicia que es conforme a la fe."-Heb. 11: 7.
Las Escrituras no nos informan qué tanto tiempo
tomó la construcción del arca pero indudablemente fue
menos de cien años. Noé tenía 500 años de edad cuando
engendró a sus hijos y 600 cuando tocios ellos entraron
en el arca. ( Gén. 5: 32; 7: 6). Durante todo ese tiempo
Noé, el predicador de justicia, sería el objeto de la burla
y el ridículo de los inicuos ele la tierra y de los demonios
en forma humana, y también de los demonios invisibles.
La influencia de Satanás por seiscientos años había
completado la degeneración de la raza. El cuadro era
triste y la degeneración muy profunda. En abierto de-
safio y mofándose de Dios la gente echaba mano de toda
clase de iniquidad y de violencia, mostrándose solamente
dignos de la destrucción. De entre las gentes de Ia
tierra solamente un hombre y su familia más inmediata
tuvieron fe en Dios, y con la ayuda de Dios hicieron
frente a la ola de iniquidad, siendo contados como justos.
A causa de su fe, Dios confió a Noé sus propósitos.
Le dijo: "He aquí que yo voy a traer un diluvio de
aguas sobre la tierra, para destruir de debajo del cielo
toda carne que tiene en si aliento ele vida; todo lo que
está en la tierra morirá. Mas estableceré mi pacto con-
tigo, y entrarás en el arca tú, y tus hijos, y tu
~ujer, y las mujeres de tus hijos contigo. Y de todo lo
que vive, de toda carne, dos ele cada clase traerás dentro
del arca para conservarles la vida contigo; macho y
hembra serán; del ave según su género, y de todo reptil
de la tierra según su género ; dos de cada clase vendrán
a ti; para conservarles la vida." -Gén. 6 : 17-20.
En obediencia a estas Ól'denes de Dios Noé trajo ani-
86 La 01·eación
males, aves y pájaros y los puso en el arca que con no
poco esfuerzo y tomándole muchos años había preparado
para el suceso que estaba a punto de ocurrir. De nuevo
habló Jehová a Noé y le clij o : "Entra tú y toda tu casa
en el arca, porque te he visto a tí justo delante de mí en
esta generación. . . . Porque de aquí a siete días yo
haré llover sobre la tierra cuarenta días y cuarenta no-
ches, y raeré todo sér viviente que he hecho de sobre la
fa::: de la tierra. E hizo Noé conforme a todo lo que le
había mandado Jehová."-Gén. 7: 1, 4, 5.
Podemos imaginarnos lo tonto y ridículo que a los
ojos de los inicuos aparecería No~. Con su familia y
una gran cantidad de animales, aves y pájaros, se había
instalado en ·ese gran barco en tierra firme para floto:c
sobre aguas ele las que ni siquiera una gota había caído.
Por años él hallía predicado a la gente de un diluvio por
venir sin que hubiera la más leve evidencia tangible de
ello. Noé lleno de fe y confiru1za en Dios entró en el
arca y su :fe agradó a Dios. Había por fin sonado la.
hora en que todos pudieran ver quiénes habían tomado
el propio curso, si ellos, siguiendo a Satanás, o Noé con-
fiando en Dios. ¡ Se encontraban frente a :frente con la
prueba, y el fin de ese mundo habia llegado !

EL DILUVIO
Hasta ese entonces los ríos mansamente habían se-
guido su curso hasta los mares. Los manantiales re-
gularmente brindaban sus cristalinas aguas para saciar
la sed del hombre. Los lagos deleitaban la vista humana
y sobre sus apacibles senos majestuosamente se desliza-
ban gallardos bajeles. En la memoria humana, j.amás
se habían visto ríos desbordándose ni la cantidad de
agmt aumentada o disminuida notablemente. N aclic
,había visto llover porque no habia caído ninguna lluvia
desde que el hombre :Ene puc t o sobre la tierra. ]~a hu-
medad necesaria para la vegeta ción era suplida por una
neblina que subía ele la tierra y que regaba su ancha faz.
D eg eneraci6n 87
Siendo' ese el caso, ¿por qué esperar que cayese una
gran lluvia? Dios lo babia dicho y su palabra es ver-
-dacrera. Noé creyó y obedeció en conformidad. J chová
sabía exactamente el día y la hor~ en que El rompería
las fuentes del gran abismo y ábriría las ventanas del
cielo. 'Siete días antes se le dio la orden de entrar. Seis
días pasaron sin que cayera agua, pero había llegado el
séptimo día.
. Durante todo el tiempo que el arca estaba siendo
construida la iniquidad en la t ierra continuó en au-
mento. Los ángeles que a instigación de Satanás habían
asumido cuerp(}s humanos, bajo su dirección cometían
toda suerte de malas acciones; sus hijos se les habhm
juntado en ese camino de crimen y en sus pensamientos
no había otra cosa que mal. La completación del arca
y la entrada a ella de Noé y su familia sin duda fue una
señal para que los demonios en forma humana y sus es-
clavos humanos se entregaran a toda clase ele excesos.
De no haberlo impedido Dios, de muy buena gana Sata-
nás, o aJgunos de sus ángeles, hubieran prendido· fuego
al arca para acabar con ella y con los que en ella esta-
ban. En el arca estaban los testigos de Dios y El
siempre proten·e a sus fieles. "Asienta campamento el
ángel de Jehová en denedor de los que le temen, y los
defiende."-Sal. 34: 7.
El tiempo había llegado para que Dios engrandeciera
su nombre y ckmostrara su poder ante toda la creación.
Las Escrituras muestran que estos malos ángeles que
abandonaron su estado primitivo para degradar a la
·r aza y conducirla a · la iniquidad, fueron aprisionados
o restringidos. Es razonable suponer que antes ele des-
Ü:iul· Dios toda carne sobre la tierra aprisionara a esos
ángeles para que la gente se pudiera dar cuenta ele lo
poco provechoso que les había sido el seguir a Satanás.
Satanás y sus cohortes resistirían en gran manera el
que fueran privados de sus libertades los ángeles caídos
a quien ·él había induciclo a que tomaran forma humana,
88 La Creación

pero nada podían en contra de Dios. Las Escrituras


muestra que los ángeles de Jehová han luchado del
lado de la justicia y en contra de los poderes de las tinie-
blas. ( J u e. 5 : 20; Apoc. 12: 7). El hecho de que estos
ángeles fueron aprisionados se indica claramente en la
Biblia. (1 Ped. 3:19, 20). Su delito fue el haber
abandonado su estado primitivo para llegarse a las hijas
de los hombres, mas ahora Dios iba a restringir sus
libertades y facultades hasta el juicio del gran día.
Indudablemente hubo gran conmoción en el cielo a
causa del aprisionamiento de estos ángeles materializa-
dos. De un lado estaría Satanás, a la cabeza de sus
huestes; del otro el I.~ogos, el fiel Representante de J e-
hová, y con El ejércitos de justos y santos ángeles. En
esa lucha los ángeles malos fueron vencidos y aprisio-
nados, demostrándose así el poder supremo de Dios.
"Dios no perdonó a los ángeles cuando pecaron, sino
41ue precipitándolos a Tartaro, los encerró en abismos
Q.e tinieblas, siendo guardados para el juicio." ( 2 Ped.
2 : 4). "También' a los ángeles que no guardaron su
original estado, sino que dejaron su propia habitación,
los ha guardado en prisiones eternas, bajo tinieblas,
hasta el juicio del gran dia." (Jud. 6). 'focaba luego
el turno a los hombres y mujeres que poblaban la tierra.
Como habían llegado a la absoluta iniquidad, les era
preciso morir.
Llegó el séptimo día, el cual también marcó el año
600 de la vida de Noé. Fue el día diez y siete del se-
gundo mes. Había sonado la hora para la destrucción
de ese mundo malo. Un terrible rugido llegaba del lado
norte, como si estuvieran siendo arrancadas las monta-
ñas. El lejano sur dejaba air roncos bramidos. Las
bestias del campo y las aves del cielo parecían darse
cuenta de que se cernía una gran calamidad. Tanto
del norte como del sur rápidamente avanzaban torrentes
de agua. "Fueron rotas las fuentes del gran abismo, y
las "entanas del cielo fueron abiertas."-Gén. 7: 11.
Degeneraci6n 89
A través de los ;valles se lanzaron las enormes olas de
agu~ con irresistible poder y arrancando todo lo que a
su paso se encontraba y en su seno exhibiendo los des-
pojos. El agua vino acompañada de fuertes vientos que
helaron hasta los tuétanos de esas criaturas que nunca
habian sabido· lo' que era frío. Aterrorizados, todos
corrían hacia los cerros, los cuales no les ofrecían un
asilo seguro sino un mejor punto de vista para contem-
plar las terribles devastaciones de esas terribles olas que
se les aproximaban.
· Por cuarenta días y con creciente furia, del norte, del
sur, y de arriba, venia más y más agua. Llegaron las
aguas al arca; se extremeció y CI'ugió, luego se levantó
y comenzó a flotar sobre ese improvisado mar, en tanto
que el viento, rabioso pero inutilmente, la azotaba. La
tierra temblaba y se mecía; más y más alto las aguas
subieron; llegando a las encumbradas crest as a clonüe
hombre y bestia habían b\1scado asilo, y después de arre-
batarlos, siguieron levantándose hasta cubrir las más
el evadas montañas acabando con t odo lo que en sus na-
rices t enia aliento de vida.
"Y prevalecieron las aguas, y crecieron en gran ma-
n era sobre la tierra; y andaba el arca sobre la haz de las
aguas. Y las aguas prevalecieron desmensuraclamente
sobre la tierra, y fueron cubiertas todas las altas monta-
ñas que habían debajo de todo el cielo. Quince codos
sobre ellas prevalecieron las aguas, y fueron cubiertas
las montañas. Y mmi6 t oda carne que se movía sobre
la tierra, así de ave como de bestia, y ele fiera, y ele t odo
reptil ~ hasta el ave de los cielos ; y así fueron raídos de
la tierra; y fueron dejados solamente Noé y los que con
él estaban en el arca. Y prevalecieron las aguas sobre
la tierra ciento cincuenta días."-Gén. 7: 18-24.
· Dios había vindicado su nombre en la mente de N oé
'y de los que con él sobrevivieron; también ·en la mente
d·e los ángeles del cielo. 'rodas las naciones y razas <le
gente que habrian de nacer de Noé y de sus hijos serian
90 La Creación

informadas de esta gran demostración del poder de Dios,


o a lo menos tendrían la oportunidad de saber de ella.
Todas las gentes que habían vivido en la tierra desde los
tiempos de Noé han visto evidencias del gran diluvio,
pero muchos se niegan a creerlas, y así como fue en los
d.ías de Noé, los que han apar,tado su mente de Dios son
los que se niegan a creer en su Palabra, a aceptar las
evidencias del diluvio, y los que no quieren informarse
de las grandes obras que muy pronto Dios ha de llevar
a cabo en la tierra.
"Porque están volu:atariamente. ciegot~ a1 hecho', de que
h 'lb ian cielos que existían de antiguo y una ticnn que se
levantaba del agua consolidada de en medio del agua,
por la palabra de Dios, y que por medio de esas aguas la
Taza que entonces existía fue anegada y peTeció. Pero
los presentes cielos y la presente tierra por la orden del
mi smo Dios, están almacenados, siendo reservados para
el fuego en preparación para el día del j Lticio y ele la
destrucción de los inicuos."-2 Ped. 3 : 5-7, lVeymouth.

CAUSA DEL DILUVIO


Por siglos la idea prevalente con respecto al diluvio
que destruyó el mundo en los tiempos de Noé era la de
que fue producido por lluvia cayendo de las nubes.
Tanto las Escrituras como los hechos físicos muestran
que esa conclusión es errónea. El gran diluvio no pudo
haber sido pro<luciclo solamente por lluvias, pero pudo
ser procluciclo, y fue producido, por la caída del último
dosel de agua que por largo tiempo habia estado al de-
rredor ele la tierra, 1a caída clel cual la fijó Dios ele ta1
manera que sirviera sus propósitos.
Anular quiere decir en Üf,'l.Ua ele anillo. El sistema
anular de la tierra tiene referencia a los anillos sucesivos
que rodeaban a la t~ erra compuestos de agua y de solu-
cio11es de substancias minerales desprendidas de la tierra
en combustión y mantenidas en su lugar por medio de la
fu erza centl'Ífnga. Los hombres de ciencia nos han di-
Degeneraci6n 91
cbo que nada puede permanecer en el aire a no ser que
sea más liviano que éste. · Esta teoría ha si.clo por com-
pleto probada falsa por medio de los areoplanos y globos
dirigibles. ¿Cómo puede ser posible para lm aparato
q-lte 'pesa varias toneladas estar en el aire y llevár carga
y p'lntjeros, y viajar !1 cien o IJ)ás millas por hora? La
respuesta es que se debe a su velocidad. Si se para la
maqui.nari(l y deja de moverse el aparato, inmediata-
mente cáe a tierr:t. La energía que movía ese dosel en
el espac:io lo tuvo en su lugar hasta el debido tiempo de
Dios para que C..'l.yera.
El anillo más retirado de la tierra, o sea al que damos
el nombre de anillo exterior, estaba compuesto casi en su
totalidad de agua. Mucho antes ele la creación del hom-
bre los otros anillos, estando más próximos a la tierra y
más cargados de sustancias minerales y carbono, habían
caiclo. Durante el período de tiempo desde la creación
del hombre hasta el diluvio el último anillo se extendió
sobre toda la tierra en forma de dosel. Esto motivó el
que las condiciones climáticas fueran casi las mismas
tanto en los polos como en el ecuador. Esto se prueba
por la vegetación que crecia en las regiones polares, y
por los restos de animales que se han encontrado allí.
En aftos recientes algunos animales particularmente
adaptables a las regiones tropicales se han encontrado
scpnltaüos en las nieves perpetuas del norte. En la
parte helada de Siberia se encontró un antilope en~e­
nado en hielo; tenía yerba verde en el estómago, lo que
prueba que se estaba alimentando cuando le llegó la
muerte y que la muerte le vino a causa del frío. •ram-
bién se encontró entre el hielo un mastodonte con yerba
verde en la boca. Los hechos son hechos, y no hacen el
alarde que hacen algunos hombres de ciencia; siempre
que uno de los que a si mismos se creen sabios hace a
un lado la Biblia se mete en aprietos.
El dosel o anillo de agua que envolvía la tier:ra hacía
imposible que el hombre pudiera ver el sol o la luna.
92 La Creación

Los hechos muestran que antes del diluvio el sol no ha-


bía sido visto por el hombre. Una prueba concluyente de
esto es el arco iris, el que no fue visto sino después del
diluvio. Si los cálidos rayos del sol hubieran brillado
directamente sobre la tierra, calentando su superficie,
se hubieran formado corrientes de aire las que hubieran
producido viento. También hubieran habido cambios
de temperatura, lo cual con las corrientes de aire hubie-
ran producido lluvias. Donde no brilla el sol y no hay
corrientes de aire no hay lluvia. Tal era la condición
que existía en la tierra cuando la en.volvía ese anillo de
agua. "Jehová Dios no había hecho llover sobre la tie-
rra . . . mas una neblina subía de la tierra, que regaba
toda la faz del suelo."-Gén. 2: 5, 6.
De haber habido vientos, lluvias, y cambios de tempe-
ratma, también hubieran habido estaciones de calor y
frío, invierno y verano, tiempo de siembra y tiempo de
siega. Pero antes del diluvio nada de eso había. La
primera mención que se hace del invierno, del frío y del
tiempo de siega es después del diluvio. ( Gén. 8 : 22).
Los anillos o doseles que habían caído antes de la crea-
ción del hombre en su mayor parte eran de agua y con
ellos se habían formado los mares, los lagos y los ríos.
Las E scrituras mencionan el gran abismo y lo dis-
tinguen de los mares. El gran abismo no puede refe-
rirse a los. océanos y mares sobre la tierra, y en realidad
no se refiere a ellos. Todo el peso de evidencia del
testimonio bíblico indica que el gran abismo se refiere
a las aguas que en forma de anillos estaban sobre el fir-
mamento y que la fuerza centrífuga mantenía en su
lugar. El firmamento dividía las aguas que estaban
sobre la expansión de las que estaban debajo de la ex-
pansión. (Gén. 1: 6, 7). Este texto muestra que había
un gran cuerpo de agua sostenido como un anillo y lejos
de la superficie ele la tierra.
Habiendo ya caído los demás anillos, y siendo el últi-
mo anillo compuesto de casi pura agua, admitía una
D eg eneraci6n 93
buena. cantidad de la luz del sol y también de él la tierra
derivaba su moderado y parejo calor. Esa condición era
algo parecida a un día con niebla en que el sol no se dis-
tingue aun cuando hay luz. El dosel de agua formado
al derredor de la tierra producía en ella una condición
semejante a la de un invernadero. Este dosel e anillo
cubrla a la tierra entera moviéndose en su órbita con
bastante rapidez la cual ·era mayor en el ecuador•.

Este · cuadro muestra nuestro Ultimo Do.~ ez de la


Tie·rra. El perío<lo glacial consiguiente al diluvio an-
terior ya hal>ía terminado y la tierra florecía de nuevo.
El hombre andaba desnudo en un mundo de clima
beni gno. La familia humana por mu<!b.o tiempo dirigió
su vista a un cielo acuoso y le dio un nombre adecuado
a esa condición. Los hebreos dieron a ese cielo el
nombre de Sharnavim que quiere decir "tres aguas";
los griegos lo .llamaron Ourano3, que quiere decir "cielo
de agua"; los indos lo llamaron Vanmo que también
quiere decir "cielo de agua"; los latinos lo llamaron
Oaleun~ y también fue para ellos un cielo de agua por-
que dejó de ser.
Las Escrituras no dan lugar a duda que el "grat.
abismo'~.
era ese anillo al derredor de la tierra. El re-
94 La Creación

gistro que se nos da en las Escrituras fue hecho bajo la


supervisión >divina y por lo tanto es correcto. Leemos:
"Cuando la dome:fié con mi decreto, y puse barras y
puertas, y dije: Hasta aqui llegarás, y no pasarás m:ís
adelante; y ahi se detendrán tus ondas orgullosas."
-Job 38: 8-11.
"Un ab~smo llama a otro abismo, a la voz de tus cata-
ratas; todas tus ondas y tus olas han pasado sol)re mí."
-Sal. 42:7.
"El fundó la tierra sobre sus basas; no será jam~s
movida. La cubrió con el profundo, como con un ves-
tido; sobre las montañas estaban las aguas."-Sal.
104 : 5, 6.
Hablando de las maravillas de la creación de Dios, su
P alabra nos muestra al Logos como diciendo: "Cuando
J ehová estableció los cielos, alli estaba yo; cuando trazó
un circulo sobre la haz del abismo; cuando fortaleció las
1mbes allá arriba; cuando dio resist encia a las fuentes
del abismo ; cuando impuso al mar su decreto, para que
las aguas no traspasasen su mandato; cuando ordenó los
cimientos ele la t ierra."-Prov. 8 : 27-2!:>.
Cuando llegó el tiempo para la destrucción del viej o
e inicuo mundo Dios ordenó a Noé entrar en el arca
junto con su familia y con los animales que El deseaba
preservar. Una vez seguros allí., Dios abrió las ventanas
del cielo e hizo que se rompiera el gran abismo que es-
taba sobre la tierra para que cayeran sobre ella sus
aguas : " En ese mismo día fueron rotas todas las fuentes
del grande abismo, y las ventanas de los cielos fueron
ab ·ertas; y hubo lluvia sobre la t ierra cuarenta dias y
cuarenta noches."-Gén. 7: 11, 12.
E sto no puede referirse a océanos o mares en la tierra
porque éstos no han sido "rotos." Aun se encuentran
en la tierra, y ésta es la prueba más con luyente de que
no han sido "rotos." Para quq la lluvia caiga de las
nubes es preciso primero que sean tomadas por el calor
llel sol y condcnsndas por hs corrientes de viento. -Ct1 an-
Degeneraci6n 95
do a causa de los rayos de sol y las cprrientes de aire se
lleva a cabo un cambio de tem~ratura se produce la
lluvia. Antes del diluvio no llegaban los rayos del sol
directamente a la tierra y por eso no podía el agua
ser tomada a las nubes. Por lo tanto, las "ventanas de
los cielos" se refieren a la fuerza que mantenía las aguas
sobre la tierra las cuales fuerolf abiertas cual}do el anillo
o dosel que cubría la tierra se "romp1o" y se desplomó
sobre ella. .
En las regiÓnes ecuatodales sería el 'lugar en que el
anillo acuoso se movía con mayor rapidez. La parte de
ese dosel que cubría los polos de necesidad se movía más
lentamente y alli era donde podía comenzar a caer. De
la misma manera que un areoplano caería al cesar todo
movimiento de avance, igualmente c1:1.ando el movi-
rn1ento del anillo disminuy0 considerablemente en sus
uos bordes hacia los polos, tuvo que caer, porque dio
margen a la ruptura del ·punto ele resistencia, directa-
mente sobre el ecuador, el cual ya estaba en gran ma-
nera debilitado a causa del gradual e>..'i:endimiento de las
agnas hacia los polos. Entonces, la misma fuerza que
había mantenido el anillo en su posición se tornó en
fuen~a viva que apresm6 las aguas a la atmósfera de la
tiena y precipitó la mayor parte de ellas desde los polos.
La rápida caiua de las aguas produjeron corrientes de
aire las cuales en su camino hacia el ecuador se torna-
ron en fuertes vientos. Esos vientos, aumentando en
vclociclacl, llevaron las aguas hacia el ecuador, y así. po-
demos ver cómo hacia él, el diluvio se precipitó del norte
y del sur. Estas conientes ele agua procediendo de dife-
rentes direcciones produjeron lo que hoy llamamos uu
torbellino, auojando grandes cantidades de l1¡,CTUa sobre
la tierra. Era ele esperarse que semejante desploma-
miento de agua fuera acompañado ele tremendos truenos
y gran ruido y no es imaginar mucho si creemos que
estuvo acompañauo de sonidos terribles que llenaron <le
;pavor a los que no habían puesto su con.:f'ianza en Dios.
96 La Creación

Por supesto que los extremos de ese dosel de agua


estaban más retirados del sol que otras de sus partes y
muy poco calor recibfan de él; por consiguiente estarían
fríos y seguramente congelados. Las Escrituras clara-
mente muestran que la parte exterior del dosel estaba
congelada : u¿ Del seno de quién salió el hielo ? y la
escarcha del cielo, ¿quién la dio a luz?. Como piedra
se esconden las aguas y la superficie del abismo se con-
gela."-Job 38: 29, 30.
La superficie o parte ext erior del abismo por supuesto
que estaba hacia las Pléyades, las que hay razones para
creer son la habitación de Jehová. El versículo si-
guiente del pasaje citado dice: "¿Puedes tú atar los
vínculos de las Pléyades, o desatar las ligaduras del
Orión?" (Versículo 31). Vemos que las Escrituras
claramente muestran que la superficie del abismo es-
taba congelada. Tendría la apariencia de piedra porque
el hielo parece piedra. Por escarcha aquí entendemos
las congelaciones o grandes depósitos ele nieve y hielo
colectados por siglos. Sin duda que el espectáculo que
ofrecían era hermoso e indescriptible. Era una ele las
maravillas de la creación.
Cuando el anillo se rompió, los vapores y aguas des-
cendieron a la atmósfera de la tiena; la velocidad con
que estaba viajando el dosel arrojó esas corrientes hela-
das de agua y vapor en dirección a los polos. Al mismo
tiempo que los vapores cayó gran cantidad de hielo y
nieve, los que también fueron llevados hasta los polos
por la fuerza centrlinga. Esto explica por qué en las
regiones polares se han encontrado esos animales con
yerba verde entre sus clientes y en sus estómagos.
La caida del hielo y de la nieve en los polos forzó el
aire cálido hasta el ecuador resultando en fuertes vien-
tos. Las grandes cantidades de agua mezcladas con
nieve y hielo, aceleradamente marchando hacia el ecua-
dor, acompañadas de grandes truenos, trituraron las
montañas y cerros, tornándolos en valles y · efectuando
D eg eneraci6n 97

muchos cambios en la superficie de la tierra. El agua


en extremo fría, la nieve y el hielo dieron fin a toda
forma de vida en los polos y esta condición climática en
poco tiempo hizo que el agua cayera casi en todas las
partes de la tierra.
Al tener en cuenta que por cuarenta días agua, nieve
y hielo se precipitaron en grandes cantidades, y que
esta agua subió más y más hasta que cubrió las monta-
ñas más encumbiradas, es fácil entender cómo teda
forma de vida en la tierra, exceptuando la que se en-
contraba en el arca, pereció, según lo dice la Biblia.
Ahora tanto en el polo norte como en el sur hay hielo,
y nieTes perpetuas. Hubo un tiempo en que en las re-
giones polares había una vegetación lujuriante. Este
hecho, junto con el hecho de que allí se han encontrado
restos de animales que estaban alimentándose de vege-
tación verde, son pruebas concluyentes de que hubo un
gran diluvio y se convierten en evidencias de cómo ocu-
rrió. Cuando el gran "abismo" quedó por completo roto,
y UBa vez que habían caído todos los anillos de agua
sobre la tierra, entonces el sol pudo brillar claramente
sobre ella. Y puesto que la tierra gira en su órbita
eliptica anualmente, el resultado tuvo que ser invierno
y verano, calor y frío; y puesto que las regiones polares
reciben menos calor del sol de necesidad resultaron' sus
nieves perpetuas y su hielo. ·
Todos los hechos físicos están en completa a:rmonia
con la Biblia. Sólo restaba que en nuestros tiempos mo-
dernos, hombres que se presentan ante la gente como
clérigos, eclesiásticos y sabios, nieguen la Palabra de
Dios y nieguen que en la tierra ha habido un diluvio
como el que describe la Biblia. Lo único que se puede
decir de estos hombres que a si mismos se dan el nombre
de altos críticos es que son ministros de Satanás y que
están ayudando al Diablo a desacreditar a Dios, su Pa-
labra y sus obras. Que toda persona que razone acepte
08 La Creación

la vel'dad mm cunndo queden por mentirosos estos a sí


mism'Os constituidos' sabios.-Uom. 3: 4.

LA TIERR.;\. REPOBLADA ,
Por medio del diluvio Dios expresó su j,usta incTigna-
ción en contra del mal c¡¡ue había sido plantado en los
corazones de los hombres por el Diablo. Dios vindicó
su santo nombre. Allí se exhibió su ilimitado poder.
Su sabiduría y amor, no obstante, habian hecho la pro-
visión de repoblar la tiena con hombres y bestias. Por
medio del diluvio el viejo e inicuo mundo pereció. Noé
y su familia, compuesta de siete personas más, fu9ron
pasados al nuevo mundo y fueron comisionados por
J ehová para comenzar un nuevo orden ele cosas
Cnanclo Noé entró en el arca tenía 600 años de edad.
El salió del arca un año y diez días después. Para ese
entonces ya las a1•uas en parte se habían acomodado en
los mare , lagos y ríos subterráneos y en los de la su-
perficie ele la tierra, dejando partes secas. "Y habló
Dios a Noé, diciendo : Sál del arca tú, y tu mujer, y tus
hijos, y las mujeres ele tus hijos contigo. Y todos los
animales ele toda C!lrne que están contigo, ele aves, ele
bestias y ele todo reptil que se arrastra sobre la tierra,
harás salir contigo, para que se r eproduzcan abundan-
t emente en la tienn, y sean fecundos y se multipliquen
sobre la tiena."- Gén . 8: 15-17.
Después ele que Noé salió del arca edificó un altar y
puso fuego sobre él, y luego tomó ele todo animal limpio,
y de toél.a ave limpia, y ofreció holocaustos a J ehová.
Esta exhibición él.e :fe ele parte de Noé :fue grata a Dios,
quien le dijo: "No volveré más a maldecir la tierra por
causa del hombre; porque la imaginación del corazón
del hombre es mala desde· su niñez ; ni volveré más a
herir todo sér humano como acabo de hacerlo. Mientras
dure la tierra, siembra y siega, frío y calor, verano e
invierno, y día y noche·no cesarán." - Gén. 8: 21, 22.
Esta es una solemna promesa de Jehová Dios ele que
Degeneraci6n

tcrnamente sob;re la tierra habrá verano e invierno,


siembra y siega, frío y calor. De esto podemos sentirnos
seguros. La fe de Noé fue grata a Dios, y Dios lo hizo
constar. Su fe resalta como un testigo eterno y un mo-
numento a todas las criaturas inteligentes del universo.
-Heb. 11:7.

PACTO .E'rERNO
Entonces Noé y sus hijos recibieron la con'1isión el~
multiplicarse y henchir la tierra. Alli comenzó un
nuevo mundo el cual las Escrituras nos indican ha de
terminar. Muchos entonces sufrirán por no haber sa-
cado ningún provecho de la lecci ón que enseñó el diluvio,
y ele nuevo J'ehovú. Dios demostrará su poder y engran-
decerá su nombre.
Después ele que Noé ofreció este sacrificio a J ehová,
Dios hizo tm pacto con él. Ese fue y aún es un pacto
ctcmo. Un pacto es un solemne convenio o contrato
que se hace, por medio del cual se promete hacer o no
hacer ciertas cosn.s. Un pacto unilateml es aquel en que
solamente una de las partes se compromete a hacer
ciertas cosas y la otra parte puede recibir el beneficio ele
él si cumpl e con sus términos. Cuando según los tér-
minos del contrato ambas partes se comprometen a 11a-
cer ciertas cosas, entonces es un pacto bilateml o de clos
luclos.
E l pacto que Dios hizo con Noé proveia obligaciones
para ambas partes. Dios se obligó a llevar a cabo su
parte clel pacto, y a Noé se le elijo que clesue ese entonces
en adelante el hombre tendría dominio sobre todo animal
tlc la tierra y sobre tocla ave del cielo y que estos ani-
males podrían ser degollados para que le sirvieran de
alimento, pero que la sangre no debería comerse por en-
contrase en ella la vida. La ley de ese pacto hizo tam-
bién la provisión de que ning ún hombre tendria el
derecho de quitar la vida u otro a no ser como ejecuto r
de parte de J'ehová. "El que denamare la sangre del
lOO La OreaC'ión
hombre, por hombre será derramada su sangre; porque
a la imagen de Dios hizo Jehová al hombre."-Gén.
9: 6.
Ese pacto hizo también la provisión de que nunca
sería otra vez exterminada toda carne con aguas de
diluvio. Como garantía de que El cumpliría su parte en
el pacto, Dios dio una prenda o señal a Noé la cual todo
hombre que ha vivido en la tierra desde entonces ha
tenido la oportunidad de ver. Esa señal fue el arco iris.
Mientras hubo un dosel de agua sobre la tierra no fue
posible un arco iris, por la sencilla razón de que los ra-
yos del sol no podían -penetrar directamente a la tierra.
El arco iris se produce por medio de la lluvia que cae
de las nubes y los rayos del sol que la atraviezan.
"Mi arco he puesto en la nube, y será por señal de
pacto entre mí y la tierra. · Y ser~ que cuando yo traiga
una nube sobre la tierra, será visto el arco en la nube; y
me acordaré de mi pacto que establezco entre mi y voso-
tros, y toda alma viviente de toda carne; y las aguas no
volverán más a ser duluvio para destruir toda carne.
Estará pues el arco en la nube, y yo lo miraré, para re-
cordar el pacto perpetuo entre Dios y toda alma viviente
de toda carne que hay sobre la tierra. Dios pues dijo a
N oe: Esta es la se:fial del pacto que he establecido entre
mi y toda carne que está sobre la tierra."- Génesis
9:13-17.
Este pacto es la primera expresión de la voluntad de
Dios en cuanto a lo sagrado de la vida humana. La
voluntad de Dios es su ley. 'l.' oda vida procede de J e-
hová, y puesto que nadie puede dar la vida a otro excepto
por medio del arreglo hecho por Jehová, nadie tiene el
derecho de quitarla sino con su permiso. Conforme a
los términos de este pacto la ley que por siempre ha d.e
gobernar a la raza humana es la · de que nadie puede
quitar la vida de otro impunemente. Si alguno toma
la vida humana en contra de la ley ele Dios, el tal tiene
que pagar la pena dando su propia vida. Bajo los tér-
D eg eneraci6n 101

minos del pacto eterno la vida puede ser quitada tan


solo cuando el que lo hace tiene la orden de Jehová y es
por lo tanto su ejecutor.
La ley de esé pacto tambi6n implica que nadie tiene
el derecho de quitar la vida a un animal o ave a no ser
con el fin de suministrar alimento al hombre o para su
protección. El matar animales y aves nada más que con
el fin de. divertirse es malo a los ojos de Dios. Los tér-
minos del pacto eterno han sido violados por todos los
pueblos y naciones de la tierra y el día viene en que
Dios entrará a cuentas con 'los responsables.
El clero pretende rep:t:esentar a Dios y enseñar la Pa·
labra de Dios. Sus miembros, sin embargo, han apro-
bado abiertamente el quitar la vida a seres humanos en
guerra sin ninguna causa justa ni excusa. Muchos han
muerto o ha~ quitado la vida a otros sin razón ninguna
para ello. Por lo regular las guerras no son ocasionadas
por los que van a la matanza. Los factores gobernantes,
compuestos de los elementos comercial, politico y ecle-
siástico son los que fomentan las guerras y luego mandan
al campo de batalla a gente inocente a destruirse unos a
otros. Dios declara que al debido tiempo El entrará
a cuentas por esa atrevida e inmisericorde violación del
pacto.- Isa. 24: 5, 6.
El gran diluvio plena y completamente dejó prqbados
los siguientes puntos : Que Dios pone ante su criatura,
el hombre, el bien y le indica el camino que debe seguir;
que El no impide al Diablo seguir su cul'so de iniquidad
ni el que induzca a algunos a seguir un curso inicuo;
que a su debido tiempo Jehová exhibirá su poder y sabi-
duría, demostrando a toda la creación que El es el Todo-
poderoso Dios y que la única manera de obtener vida es
· siéndole obediente.
Sólo hay un Dios, el Hacedor de los cielos y la tir.rra,
y el Dador de vida a todos. N o hay otro como EL A El
se debe toda la gloria y honor eternamente.
r
CAPl'rULO V r

Objeto de· la. Biblia

L A Biblia es la expresada voluntad de' Dios. Es una


luz a los-pies del homb're , para guiarlo en las' sen-
das del bien. ( S'al. 119 : 105 )·. Es la luz de J c- '
hová. "Luz está sembrada para el justo, y alegría pan
los rectos de corazón." (Sal. 97 :' 11). Bienaventurad•os
los que andan en la senda de la Palabra de Dios y se-
deleitan en su ley.-Sal. 1: 1, 2.
Los primeros cinco libros ele la Biblia faeron escritos '
por Moisés, y se conocen con el nombre del Pentateucd.
¿'Cómo sabia Moisés lo que · debería escribir, y cómo
sabemos que lo que él escribiÓ' es la; verdad? Para con-
testar estas preguntas es preciso el examinar•algunos de
los hechos que son conocidos al hombre. El hombre ha
sido dotado de facultades mentales y ue él se espera que·
las use·. L a Biblia está arreglada de· tal manera y bajo
tales condiciones, que una ve:.~ entendida establece plena~
mente la confianza del hombre en ella como la Palabra
ele Dios.
Noé fue un hombre dedicado completamente a J c-
hová. Desde el 1111111do que i1.te destruido por el diluvio
él fue traído al nuevo, y en obed:iencia a la orden. de
Dios comenzó a repoblar la. tierra. ( Gén. 9: 1). En
ese entonces Noé era el hombre más importante de la
ti.ena. El trajo consigo: a este lado del diluvio el cono-
cimiento ele algunas cos~ts que ning ún otro hombre en-
tonces po ·eía. Desde la cneacifut de Adán hasta el
final del diluvio. hubieron 1,65G años. Los hombres en
ese entonces vivían cerca de mil años.
Enoc fue un buen hombre, por c0rnpleto dedicaclo a
Jehová, y por supuesto que se esfol'n ria en juntar toda
102


Objeto de •la B ·i blia 103

In. información posible concerniente a los p1•op6si'tos de


ios en lo que al hombre toca. Adán vivió más de 300
años después del nacimiento de Enoc, quien fue de la
sép tima generación y vivió 365 años más, así que Enoc
tuvo una buena fuente de información y según la cos-
t umbre pudo transmitir a su hijo Matusalem mucho y
muy importante conocimiento. Matusalem alcanzó a
vivir hasta la edad de 966 años.
Noé fue de la tercera .generación desde Enoc, habiendo
nacido unos pocos años después de que éste fue milagro-
samente tomado. Necesariamente Noé t uvo bastante
contacto con su abuelo Matusalem, y de él y de su padre
Lamec recibir.ia toda la informaci6n concerniente aJ.
hombre dada !lJOr Dios ,a sus padres; y como t enía 600
años de ,edad, tuvo tiempo ·suficiente de obtener mucha
otra inf0rmación ele boca ele algunos de sus coDtemporá-
neos. 'l'0cla esta inform ación él la transmitiría a ' sus
hijos y nietos.
Noé y sus, hijos salieron del arca y Noé murió 350
aiíos más tarde, solamente dos años antes del nacimiento
de llfo:isés; pero por 150 ,aiíos Sem, .quien vivió 5.02 años
más después ~lel ·diLuvio, y Abrah~m, vivieron contem-
poráncamente y en la misma parte de la tierra. Sin
duela alguna se conocieron y evidentemente Abraham
recibió de Sem todos los detalles de las condiciones antes
del diluvio, y de la relación de la raza humana a Jeholl'á ..
A AbDaham se le da el nombre de "pad·re de los cre-
yentes," y rprresto que el conocimiento es esencial pana la
fe .no :¡Y0d:ia Abxa:ham haber ienido :fe a menos ele tener
corrocimrient0 de .Dios, de su creación del hombFe y de la
¡relación rdel rhnmbre para con Dios.
Isaac 'fue ·el hijo amado de Abraham. .Sin duda al-
guna 'que su pad1.·e le ílil'aHsmiili0 todo el con<rcimiento
que tenia. Isa:ac .amaba a J ehová, 'Y Dios lo bendido en
gran 'manera. El también alo&nz0 a Nivir en los tiempos
-de ·Sem, y de él. y tde <su ·pad-re ~clquil'ió ~l o0nocimiento
104 La Oreac·ión
que luego transl)'litió a su hijo favorito, .TacoO. ( Gén.
28: 5-14). J acob tuvo doce hijos, siendo el favorito
José.
A José, sus hermanos lo vendieron a Egipto, a donde
fue llevado, y después de estar alli por algún tiempo
llegó a ser el hombre más prominente del país. Más
tarde Jacob y los demás hijos fueron a Egipto. José
se esforzó en servir a ese pueblo y dio honra al nombre
de Jehová. Indudablemente que él recibió instrucción
especial de parte de J acob. ( Gén. 49: 1-28). La infor-
mación transmitida a José, y por José a sus hijos, no
pudo ser fácilmente olvidada.
Poco menos de cincuenta años después de la muerte
de José nació Moisés. Habiendo sido su vida milagrosa-
mente preservada al tiempo de su nacimiento, fue creado
con la familia real de la nación y llegó a ser un hombre
de importancia y ele saber; se dice de él que "fue ins-
truido en toda la sabiduría ele los egipcios." (Hech.
7 : 20-22). Cuando llegó a hombre se hizo del lado de
J eho:vá y de su pueblo escogido, prefiriendo sufrir por
causa de la justicia que gozar ele los placeres y de las ri-
quezas que Egipto y la familia real le ofrecían. (Heb.
11: 24-27). Egipto en ese entonces era el gran imperio
mundial de Satanás, y ofrecía a Moisés muchas cosas
de desar las que él rechazó y despreció a causa de su fe
en Dios, y llegó a ser un fiel testigo del nombre de
Jehová.
Es muy razonable llegar a la conclusión de que Moi-
sés estaba por- completo familiarizado con todas las tra-
diciones de sus padres. Hasta él llegal'on de generación
en generación. Así pudo él saber todo lo que había
ocurrido desde Adán hasta su tiempo. Aun en nuestro
día muchos hijos de boca de sus padres se enteran de
todo lo relacionado con la historia de su país, y esta cos-
tumbre era la que de necesidad se seguía en tiempos
antiguos. Con esta información y su educación, era
ampliamente competente para escribir la historia de la
Objeto· ele la Biblia 105
·nza humana hasta su tiempo, lo cual él hizo fiel~ente
por la gracia de Dios.
Los hechos bien conocidos hoy en día dan un elocuente
testimonio a la verdad de que el Gran Arquitecto, Je-
hová, colocó hace muchos siglos en la tierra los depósitos
c1e carbón y los pozos de aceite, e hizo las montañas y los
valles, los rios y los. mares, y también trajo a la existen-
cia la vida animal y vegetal, haciendo a la tierra un
lugar habitable. Aun el más "ignorante puede darse
cuenta de que el hombre ha sido maravillosamente for-
mado y que es la criatura más inteligente de la tierra.
El hombre tiene la tendencia de hacer un registro de
los acontecimientos, para su propio provecho y para el
de la8 generaciones venideras. Indudablemente Dios'
quizo que esto fuera asi, y por eso puso esa facultad en
él, y puesto que las evidencias muestran que el
hombre es eÍ sér más elevado de la creación de Dios en
la tierra, y siendo el caso que el hombre tiene la tenden-
cia de registrar los acontecimientos, es razonable que
Jehová haya provisto los medios para que el hombre
hiciera un registro de los sucesos más importantes en lo
que a El mismo respecta. Si Jehová tuvo que ver con
la preparación de ese registro, entonces podemos estar
seguros que ese registro es correcto y que contiene la
verdad.
La Biblia es la· historia de la creación en lo que a la
tierra toca, y sólo c1a informes concernientes a la creación
celestial en cosas que tienen que ver con el hombre
y su hogar. La Biblia es la revelación dé Dios, de su
misma persona, a sus criaturas inteligentes. Es su ex-
presada voluntad y por lo tanto es la ley que gobierna
a su inteligente creación t errenal. La mayor· parte de
la Biblia trata de cosas que ya han sido cumplidas y que
prefiguraban cosas por suceder en mayor escala. Lo que
llamamos profecia es la parte de la Biblia que registra Y,
predice, antes de llevarse a cabo, los acontecimientos que
han de ocurrir. Por lo tanto, la profecia es· la historia
WG , La Orcación · · ·\

· del hombre .escrita•.de antemano. Esta es la ,ra?.ón por


la cual no puede entenderse la profecía hasta qu~ ,está en
curso de cumplím.iento o ,c~ando ha sido cumplida. .
La Biblia nos ¡presenta a Jehová, el Eter.r;¡o, como el
Hacedor; el que hizo los cielos y la tierra; la personifi-
cación de la sabiduría, la justicia, el amor y el , pode-r, y
el Dador .de tod0 ·dón bueno y perfecto.. El .es la .com-.
pleta e¡x:presión de la .c arencia de .egoístn.o, y p.or eso está
escrito .en su Palabra : "Dios es Ampr." La Bib~ia nos
dice con ·qué fin fue cre.arlo el hombre; p<H qué, se :volvió
inicuo y fue sentenciado 'U· muerte,. y uosr in;forma de la
misericordiosa provisión para la .redención, r.ec0bro y ¡res-
tauración de la raza humana a la vjda ~ a su perfecto
hogar. , .
La Biblia contiene la enunciación de Í'~glas filosóficas:
D.e una manera plena y completa contrasta eLhien y el
mal. Muestra p<n- qu.é ·los resilltados del' mal son la
muerte y pClr .qué el bien 1Conduee ·,~ la vida eterna y a la
felii.cidad. Es la le~ de Dios .concerni¡:mte al hombre, y
por lt> tanto !Contiene un pede.cto y .completo cpdigo de
reg·la.s de acción para ,que -el}:l.omJbre se gobierne y ande
por Jas sendas de la justicia. Este código d.e leyes mues-
tra también el castigo que trae la violación de esa ley.
La Biblia fue escrita para provecho del hombr.e y para
gloria de Dios.
En vista de los hechos anteriores, y c~ntestando a la
pregunta que nos hicimos, hay dos buenas y suficientes
razones para que Moisés supiera lo que ten~a .que escribir
y para que él escribiera la verdad :
- ( 1) I.Jas experiencias dell1ombre, como éstas -ocurrie-
ron, fueron transmitidas de generación eu generación, y
'Moisés hizo un registr.o de ella¡¡. N o existía razón nin-
.g una para que 'e n ese regisb'o hubi(~ra cosa algu.na aparte
rle la verdad.
(2) Moisés era leal a Dios y se había dedicado a su
:servicio. El fue escogido para ha.cer el registro y para
prepararlo; la inerrable sabiduría de .Dios lo guió. En
Objeto de la Biblia 107
v rdad y hecho, Moisés actuó tá'n solo comp amanuense
d Jehová.' El poseía los quilates necesaribs, que ' Dios
podía requerir de la persona escog~da para ta!l tarea
puesto que despreció al Diablo y a su organiza:ci6n con
todos los atractivos que exhibía y se hi~o del lado de la
jttsticia aun en medro· de la adversida:d-. •No sola:mente
1

rp. de 1ma mente alerta e instruido en todo el saber


humano sino que además tenia la _principal cualidad de
1

encontrarse por completó dedicado a J'ehová. Muchas


de las gra;ndes verdades que él presentó no pudieron ha-
ber ieman'ado de una mente human'<\ sino que fueron el
resultado del invisible poder de· Jehová operando en su
mente. '
Y lo dicho con respecto a Moisés puede t ambién de-
cirse de todos los otros escritores de la Biblia. Dios los
scogió a causa de su fe y ¡¡u devoción a El, y así como
sn ilimitado. poder obTÓ para crear todas las cosas de la
tierra también obró para dirigir e· influenciar la mente
ele Moisés y de otros hombres santos para que hicieran
el registro de la voluntad de Dios con respecto al hom-
bre. Davi<t fne uno de esos hombres por entero d.edi-
cados a J ehová, y el que, concerniente· a la, parte d~ la
Biblia que le tocó escribir, dijo: "El espíritu de Jehová
habló por mi, y su palabra estuvo en mi lengua."
A estos hombres· fieles de tiempos antiguos se les dio
el nombre de profetas y escribieron profecías. EI Após-
tol P edro, a quien Jesús escogió como uno de sus discí'-
pulos, dijo: "Porque no de voluntad del• hombre fue
traíd.a la profecía en ning{m tiempo; sino qne, movidos
por el espiritu santo los hombres hablaron de parte de
Dios."-2 Ped. 1 :21.
Es en extremo interesante el obseryar cómo Dios· hizo
los arreglos necesarips para que· los hechos importantes
fueran transmitidos de generación en generación, desdJe
Adán hasta Moisés, para que' su expresada voluntad
f uera p.uesta: en la propia forma para provecho· del hom-
bre. ·
108 La Creación·

MANUSCRI'l'OS
La parte de la Biblia que recibe el nombre de Antiguo
Testamento fue escrita en el idioma hebreo. La que
recibe el nombre de Nuevo Testamento fue escrita en
griego. De las ' copias originales se hicieron después
otras copias, to'das las cuales reciben el nombre de ma-
nuscritos.
El pueblo escogido de Dios fue hecho custodio de los
sagrados escritos de Moisés y de los otros profetas. El
pueblo de Israel usó el mayor cuidado posible para pre-
servar estos escritos, haciendo conocer también su con-
tenido a la gente, para la cual tarea se usó a la tribu de
Leví, una de las doce, la que fue apartada con el fin de
atender a las cosas relacionadas con la educación de la
gente en las cosas pertenecientes a Dios. y a su Palabra.
De esa tribu se escogieron los sacerdotes de Dios, los
cuales eran representantes de J ehová y eran los que te-
nían a su cargo el servir a J ehová en el nombre de
Jehová y para provecho de la gente. -Ex. 28: 1-4.
Dios impuso a los sacerdotes la obligación de leer a la
gente la ley que había hecho escribir a Moisés. rrení.an
el deber ele infonnar al pueblo concerniente a la Palabra
de 'Dios hablada· por los profetas. En las instrucciones
dadas al primer sumo sacerdote Jehová dijo: "A fin de
que podáis hacer diferencia entre lo sagrado y lo pro-
fano, y entre lo inmundo y lo puro; y para que enseñéis
a los hijos de Israel todos los estatutos que les ha ha-
blado J erová por conducto de Moisés.". (Lev. 10:10,
11). "Porque los labios del sacerdote han de guardar
la ciencia, y de sus labios los hombres deben buscar la
ley ; porque mensajero es de Jehová de los Ejércitos."-
Mal. 2:7.
A la gente se le hizo presente que buscara instruc-
ción de boca de los sacerdotes. "Y te llegarás a · los
sacerdotes levitas, y al juez que hubiere en aquellos días,
y los consultarás ; y ellos te declararán la sentencia del
juicio." (Deu t. 17 : 9). El manifiesto propósito de
Objeto de la Biblw 109
·''''"'vf1 1r sto era el de que· en todos los tiempos hubie-
""' ul¡p1110S en la tierra que tuvieran fe en la · Biblia
'"'"" ll ' l • 'ol abra verdadera y sagrada.
M tl1 ·h s siglos después de darse la ley, el Apóstol
l'i d thl ttn judío y un inspirado testigo de Dios~ escribió:
" l ciL 1 y ha sido nuestro ayo para traernos a Cristo, a
r " d que seamos justificados por la fe," y dijo que la
lo y l'u una sombra de bienes venideros. (Gál. 3: 24;
'' ''"· 0: 1). El objeto de un ayo es el de instruir e
111 q )r rLir conocimiento, de modo que en este texto se
"''H'ftnl que el expreso fin de la ley de Dios es el de im-
1" " Li r a la gente el conocimiento de Dios y de su rela-
1 1 '' on el hombre.
lilt¡to confirma la idea de que Dios ha hecho arreglos
lli' '''L transmitir de generación en generación las vercla-
,¡, ¡¡ que El quiere lleguen al conocimiento de los hom-
111' u y lo ocurrido desde Adán hasta Moisés en particu-
'" "· Desde el tiempo de Moisés en adelante Dios ha
li ( 110 que su Palabra sea escrita por hombres fieles a
q¡il nes El ha dirigido, y esa Palabra es nuestra Biblia.
Aun cuando todos los manuscritos originales no exis-
¡, 11 esto no afecta en nada la autenticidad de la Biblia.
11() manuscritos originales se guardaban en el templo o
'' ' a de Dios y a tiempos especificados se sacaban para
¡,. rlos a la gente. (2 Crón. 34: 14-16). Cuando los
tl r íL litas volvieron de la cautividad de Babilonia y re-
' (1 iücaron las murallas ele J erusalem, poco más o menos
1 11 1 año 454 A. de C., la palabra que Dios dio a Moisés
11 flac6 y se leyó al pueblo.
'Entonces se reunió todo el pueblo como un solo hom-
hr n la plaza que está al frente de la puerta de las
uas; y dijeron a Esdras, escriba, que trajese el Libro
d la Ley de Moisés, que Jehová habia prescrito a Israel.
P ·lo cual Esdras, sacerdote, trajo la Ley delante de la
Asamblea, así de hombres como de muj eres, y todos los
nl fí.os que tenían inteligencia para escuchar, el día pri-
ft\ ro del mes séptimo; y leyó en él delante de la plaza
üo La Creación

qu,e1.éstá al frente ~e. la puérÚt de. las, Agu~s, · desde él


alba hasta el medio día, delante de los hon~bres y las
mujeres y, los ni:qos qhe tení[m inteligencia; y los OÍdos
~el 'puel?l'o estaban atentos al Libro de la Ley. Y el
escriba Esdtas se puso en pie sobre un púlJJito d·e ma-
dera, que habían hecho para este. fin; y estaban junto a
él Matías y Serna, y Anaya, y Drías, y Helcia~, y Maa-
s,ias, a su derecha;, y a su izquiercln. Pedaya, ,Y. Misael, y
Mala,quias, y Hasum, y HaSbadana, Zacarías y Masul'lam.
uEn ton ces Es,Clras abrió el libro, a vista de t o,d:o el
pueblo (porque estaba elevado sobre todo el' pueblo) ; y
luego que lo• abrió, todo el pueblo se puso en pie. Bn
seguida be:ndijo Esdxas a J ehová, el gran Dios. Y res-'
pondió todo el pueblo: i. ./\mén ! ¡ Amén ! levantando las
manos. Luego inclinaron las cabezas, y adof;arop. a J e-
hová, rostros a tierra. . . . Pues leyeJ:on en el libro, en la
ley (le Dio.s,. disfintamen.te, y ac:taraban el' sentido ; de
modo que el pueDlo entendió la lectura. Entonces N e-
hernias, que era gober:nador, con Esdras, sacerdote y
escriba,. y ros levitas q.ue 1\aciun entender al pueblo, di-
jeron a todo el pueblo : Hoy es día santo a Jehová
vuestro Dios; no estéis. tristes, ni lloreis ; porque todo el
pueblo lloraba al oir las palabras de la ley."-Neh.
8:1-6,8, 9.
La evic1enci'a· indisputable e histórica, aparte de la
Biblia, es que d:esde los días ele Ezra en adelante los
n1:1nuscritos originales fueron copiados, y las copias re-
copia<las por hombres fieles y devotos, continuando tal
tarea hasta cerca del año 900 E. C. Muchos de esos
manuscritos ·fueron destraid'os por algunos fanáticos, que
se' daban el nombre d'e cristianos, durante las persecu-
ciones de los j;udios en ,la edad' media, especialmente en
l0s ti~mpos de las cruzadas. Otros manuscritos fueron
.d.estru~dos por· los mismos judíos con el e'lridente propó-
.&ito O,e ímpeuir que c.ayeran en manos de. sus enemigos.
Es manifiesto pues que,, bajo. ~a supervisión de, Jehová,
desde el Ea.e'n hasf.a el año 90()-. de la era cristiana hubo
;

Objeto dda Z!iblia 111


111 111 ••hii1 \J11L no internampid.a ele ese regist:vo de la verdad..
v
1111 11h 1•a en ex~stencia tres manuscritos antiguos,
1 .. 1!1 1 11 11110 el Antiguo Testamento en griego, traduc-
' 11 11 do los setenta, X las copias del Nuevo. Estos ma-
11 11 11 1'l:oa muestran la Biblia eomo existía pGco después
.¡ .. ¡ 1 1\lll'pO del Séñor y de los apóstoles.
1111 M'anuscrito Alejandrino fue obsequiado por Cirilo
l o111 nr atriarca de Constantinopla, a Carlos I, rey de
111 lll llilt, en el aiio 1628, y se encuentra .aÚ'll en el Museo
1\1• lf1ni o hasta el día de hoy. En una de sus páginast
ll 1 ~ ~ ln ins.cripci6n de que fue .escrito por mano ele
'l1li 111 la el Mártir. , ·
1)1 Manuscrito Sinaí.tico :fue descubierto por 'l'ischen-
dl)l'r. un escolar alemán, en un convento situado al pie
dt l M' onte Sinaí. Este manuscrito se halla en la Biblio-
111\IL u Leningrado, ¡:¡.ntes San Petesburgo, en Rusia.
I•Jl manuscrito del Vaticano es el más antiguo ·ma-
1111 •rito en existencia. Se halla en la Librería del Vati-
1111\ en Roma. •rodos ·estos manuscritos ·en los últimos
han .sido .accesibles a los escolares. Ninguno .de és-
stá completo, pero es poco lo que les falta.

VEH.SIONES
1? r manuscritos se dan a entender las copias a mano
11 los originales y de las tempranas traducciones del
h breo al griego. A las traducciones se les da el nombre
do versiones. Las versiones más antiguas fueron tradu-
ldas de los idiomas originales a algún otro idioma. A
pl'incipios de la era cristiana se hicieron varias traduc-
li ones, algunas de ellas poco después del tiempo de los
11.pó toles.
Entre las versiones hay algunas al siriaco, un idioma
muy parecido al usado entre la gente con la que el Señor
o comunicaba y con quienes tenía que ver. Entre esas,
Jn mejor e:» la Antigua Versión Siriaca del Nuevo Tes-
tamento, hecha poco más o menos a mediados del siglo
~ gundo. Cerca del fin del siglo cuarto Eusebius Hi ci·o-
112 La Creación

nymus, conocido con el nombre de San Jerónimo, y


quien por muchos años vivió en Belén, revisó la antigua.
Versión Latina de la Biblia y más tarde hizo una nueva
versión del Antiguo Testamento, la que, junto con la re-
visión del Nuevo por él hecha, tomó el nombre de la
Vulgata Latina. E s una muy valiosa traducción de la
Biblia y frecuentemente se hace alusión a ella en otras
versiones.
Por medio de los esfuerzos de Juan Wiclef, en el año
1367, por primera vez se dio a la gente la Biblia en
inglés. Esta versión fue una traducción literal dellatin.
Aun cuando traducida desde esa temprana edad no fue
impresa sino cerca de 400 años más tarde. Tanto J eró-
nimo como Wiclef sufrieron mucha persecución a causa
de su fidelidad en traducir las Escrituras. Esa persecu-
ción provino especialmente de parte del clero. Satanás
siempre se ha opuesto a los que han sido testigos del
nombre de J ehová. Fue tan violenta la oposición a la
versión de Wiclef que muchos de los que estuvieron iden-
t ificados prominentemente con ella fueron quemados
vivos con copias de esa Biblia amarradas a su cuello.
La siguiente ver sión de importancia en inglés vino
cerca de lOO años más tarde. Fue traducida por 'l'yn-
dall, quien publicó varias ediciones del Nuevo T esta-
mento y tradujo bastante del Antiguo. Al hacer esas
traducciones Tynclall hizo uso de cuantos manuscritos
hebreos y griegos pudo disponer. La versión ele Tynclall
es en efecto la J3iblia que se usa ahora en los lugares en
donde se habla inglés, aun cuando ha sido revisada va-
r ias veces.
Satanás, el enemigo, usó al clero de Inglaterra para
perseguir a Tyn clall a causa de su fidelidad en traducir
la Biblia. Esta persecución es una de las mejores prue-
bas de que 'l'yndall fue un fiel siervo de Dios. Después
de traducir parte de las Escrituras se vio forzado a pasar
a Alemania en donde publicó muchas copias del Nuevo
'festamento. Determinado a hacer llegar su traducción
1
Objeto de la Biblia 113
" 1111111 0n <1 la gente en Inglaterra; la metió de contra-
' ''" '"" n barriles, en bultos de algodón, en sacos de
l1 11• 1111 y de otras modos semejantes.
111111 obispos de la' Iglesia Anglicana y Jos miembros del
1 1. 1 11 ul)aton todos los medios a su alcance para impedir
In pithlicación de la versión de 'fyndall. Miles de copia:s
• ¡11 • 11 aron a sus manos las quemaron en la cruz de
In11 l'n. lo. Mientras tanto Tyndall seguía en el des-
1 1 rr voluntario negándose a aceptar las ofertas que se
l1 luL ian para inducirlo a volver a Inglaterra, sabiendo
o¡11( si volvía los obispos buscarían la manera de darle la
rolll rt . Finalmente fue traicionado por un clérigo de
1 11 ania y puesto en la cárcel en donde se le hizo pa-
d·• · frío y hambre, y más tarde fue quemado vivo;
1od sto se hizo a instancias del clero.
P ro ni Satanás ni sus agencias podían impedir a la
1 111\t que tuviera la Biblia porque había llegado el tiem-
¡10 de Dios para que la tuvieran. Poco después de la
""l r te de Tyndall apareció la "Mathew's Bible," la que
1111 ·calidad fue la versión de Tyndall publicada bajo
1 Lr nombre. Luego apareció la "Great Bible" en el
111 de 1539, y más tarde, en el año 1560, la versión
1' nocida con el nombre de "Geneva Bible." Todas estas
rsiones no fueron otra cosa que ediciones revisadas de
In traducción hecha por Tynclall.
En el año de 1611 E. C. se produjo la Versión Auto-
r·i,.ada de la Biblia en inglés, conocida t ambién con el
11 mbre de la Versión "King James," porque ese rey de
1nglaterra fue el que la autorizó y dio los pasos condu- '1

' ntes a que se preparara. Los revisadores que traba-


jnron en ella fueron divididos en seis compañías, dándose
¡¡ cada compañía una porción del trabajo, y todos te-
niendo acceso y haciendo uso de toda la ayuda que era
posible. Los revisadores cuidadosamente estudiaron las
opias en hebreo y griego, y las traducciones al español,
italiano, francés y alemán, cotejándolas debidamente.
Sin duda alguna que nunca ha existido en inglés una
114: La Creación
obra literaria del mérito el~ la·Versión Autorizada de' Iá
'Biblüi. ' Esta• versión· se usa más que ninguna otra. N o
es una traducción perfecta pues co:t;ltiene una gí·au can-
tidad de errores de traducción como se .pudo compr~bar
más t arde cuando Se COmpaTÓ COn los tres más antiguos
manuscritos a -los cuales ·no tuvieran acceso los ·que pre-
pararon esa versión . ·
En 'el afio de 1870 un ' distinguido grupo de escalare~
ingleses se junt::h-on para dar comienzo a una re~isióu
de la V~rsión Auto1·izacla de la Biblia, y a poco tiempo,
con el mismo propósito, se formó un comité de distingu i-
dos escolar~ americanos. Para ese entoncc:s ya se l)a-
J:¡ían encontrado los tres manusctí~os antiguos, el del
•Vatícano, el .A.lej andrind y el Sin'ai~~co . ;Est'os manus~
CI'itos antigu9s, junto con las varias versione~, fueron
consultados y estudiac}os y se hicieron todo.s los esfuer-
zos posibles y se tomó todo el cuidado necesario para re-
producir el pensamiento expresado por los· manuscritos.
En 1881 se publicó la primera edición ele la Ver sión
Hevisada en inglés por el comité ·inglés, y en 1885 se
publicó la Versión Revisada pol' el comité americano.
La V ersión de 'l'ynclall fue usada ·pol' ambos ele estos
comités y fue una grtm ayuda en la tarea de revisión.
Estas versiones revisadas son sin duda las mejores de
todas las traducciones porque ·expresan en el más claro
inglés la idea de los originales. La Versión Mocler~a
Española es la que corresponde a estas dos excelentes
versiones. Hay que tener en cuenta que el len-
guaje habia cambiado de significado en muchos casos
durante los 300 aii.os mediando entre estas versiones y
la Versión Autorizada. ·
Este cambio de significado aplica no solamente al in-
glés, sino a todos los 'idiomas en que hay versiones anti-
guas Y, modernas de la Biblia. Como, ejemplo tomamos
la palabra inglesa "hell,' la que en el . inglés antiguo
significaba un httecq er¡, al tierra. El clero' del tiemvo
rp.odern'o ha definido esa palnb'ra como significando un
Objeto de la Biblia 115

l11 ·u.1· J:~ tormento, lo cual ni siqu.iera se in;¡.plica en el


¡,•~ to or¡ginal. Tomemos también la palabra inglesa
' (lomnation" la que 'originalmente significaba juz,qar,
11 1wu1as veces en sentido adverso o condenatorio. Los.
1 l siásticos modernos dan. a entender que significa el
' nsignar a alguien a un sufrimiento etérno.
Los traductores de la Versión Revisada 9,ejaron sin
ln1ducir las palabras sheol y hades que &on de las que se
l1·aduce, ''hell,'' a la cual el clero da e1 significad'p de fuego
tormento. La palabra "damnation" la substituyeron
¡)(lr judgment, (juicio) porque e~e , es S\¡. ,'equ'iyalent¡:l
til\ ra. Esta és la.· ~ejor prueba de que el clero le ha
d do una interpretación errónea. La culpa, entonces,
11 es tanto de los traductores, sino del clero que se ha
1 mpeñado en aprovecharse de la ocasión para atemorizar
11 la gente, dando un falso coforido a ciertas palabras.
El Empha.t·io D·iaglott es . una' de las mejor,es ~racluc-.
i nes del Nuevo Testamento.' Es una tn{ducción del
r.i{)'inal griego, y en ella se usó especialmente el manus-
t dto del Vaticano, teniendo en cuenta también el Sinat-
l,i o y algunos otros manuscritos. Expresa el pensa-
nüento en el lenguaje moderno ·y es una. gran ayuda.*
Sin eluda alguna que el poder in.visible de Jehová
(T U[6 las mentes y las manos de los hombres fieles que
ptcpararon los manuscritos originales de la Biblia. Es
lo. Palabra de Dios, y El la ha preparado debidamente.
siendo la P alabra de Dios, por supuesto que Satanás
1\il. tratado. de destruirla y de acabar con los que la han
raduciclo fielmente. Dios ha permitido a Satanás el
*l~ n beneficio de nuestros lectores damos una breve' lnfonna-
l6n con r especto a las mús Importantes vers iones en español. E n
Hí,Ul 'e publicó el Nuevo Testamento por Encinas. F:n 1569 se
1/"hlicó In Versión de Cusiodoro de Reina, traducida del latín. En
r.9G Cipriaoo do Valera publicó una revisión de la Versión !le
ltolnn. Las vers iones S cio !le San Miguel '1 Amat, traducidas de 1st
11lgnta Latina. J.a Rivera, , tradu.c idn de la francesa del Aba d
l' nll ce. Des pués de revisar con bastante éxito la Versión Valera,
rt·. H. P. Pratt emprendió la trad·ucci6n de In Biblia entern • utili-
~ u"()o los manuscritos antiguos ya mencionados y el Diaglott. JJtl
VOl'Slón Moderna es la única en español qu() puede pretender ser tra-
(J ilclda de los Idiomas originales,
116 • La Creación

llegar hasta ciertos límites en sus inicuos esfuerzos,


pero no le ha dado rienda suelta. Por medio de sus
agencias Satanás ha causado la muerte de muchos hom-
bres fieles que han ejecutado concienzudamente su tarea
en lo que a la Palabra de Dios toca, pero esto no ha ocu-
rrido sino hn sta que su tarea había sido t erminada.
'l'ambién ha hecho destruir miles de copias de la Biblia,
pero con todos sus esfuerzos no ha podido impedir el
progreso del plan de Dios ni la. revelación que Dios
hace por medio de su Palabra. N o logrando impedir
la publicación ele la Biblia el Diablo ha tratado de in-
t erpretarla erróneamente por medio de sus representan-
t es. El ha echado mano de todos los recursos para
apartar de las mentes de la gente al mismo Dios y su
Palabra de Verdad. Por muchos siglos estas grandio-
sas verdades han sido oscurecidas y . puestas fuera del
alcance ele la gente, pero habiendo llegado el debido
tiempo de Dios esas puras doctrinas han sido restaura-
das a los que sinceramente buscan la verdad.
Sobre todas las demás, .la criatura que más prominen-
cia tiene en las Escrituras es el amado Hijo de Dios.
Por 4,000 años los judíos han esperado un Mesías. Por
2,000 años las esperanzas de los cristianos se han ci-
frado en El Cristo y han estado en espera de su segunda
venida. El aniado Hijo de Dios, el Logos, es el Mesías,
el Ungido de Dios, el Cristo. Ha llegado el tiempo de
su segunda venida y aquí se encuentra ahora. Con su
venida ha venido también mayor cantidad. de luz sobre
la Palabra de Dios en provecho de los que sinceramente
buscan la verdad. Esto .es de acuerdo con la promesa
de Dios. (Prov. 4: 18 ; 1 Cor. 10: 11). La segunda
presencia de Cristo data desde 1874. Desde ese tiempo
en adelante muchas de las verdades que habían sido por
mucho tiempo oscurecidas por el enemigo comenzaron
a ser restauradas a los cristianos sinceros.
Asi como Guillermo Tyndall fue usado para traer
la Biblia al mundo inglés, de igual manera Dios usó a
Objeto de la Biblia 117

arlos T. Russell para hacer entender a la gente la


iblia, especialmente las verdades que habian sido qui-
tadas por las maquinaciones .de Satanás y sus agencias.
iendo el debido tiempo para ello Dios restauró esas
verdades, y para ello usó a Carlos T. Russell para que
scribiera y publicara los libros conocidos con el titulo
de Estudios de las Escrituras por medio ele los cuales
son aclaradas las grandes verdades fundamentales del
plan divino. Satanás ha hecho todos los esfuerzos posi-
bles por destruirlos porque explican la Biblia, y así
como la versión de Tp1clall fue destruida por el clero,
de igual manera varios miembros del clero en diferentes
partes de la tierra han juntado miles de volúmenes ele
los Estudios de las Escrituras y los han quemado pú-
blicamente. Pero esto tan solo ha servido para anun-
ciar la verdad del plan divino.
Este es el debido tiempo de Dios para que la verdad
sea conocida y nada ele lo que pudiera hacer o de lo que
haga Satanás impedirá el que la verdad sea conocida.
El tiempo ha llegado para que la bandera divina P.e la
justicia sea levantada y así la gente sepa qué camino
tomar. A esa bandera se juntarán los de corazón sin-
cero y que aman la justicia. La ola de la verdad con-
tinúa levantándose más y más, y continuará levantán-
dose hasta que cubra por completo la tierra a la manera
que las aguas cubren la mar, renundando para gloria
tle Dios. El tiempo ha llegado para que Jehová haga .
conocer su nombre en la tierra, y ésto lo hará El por
medio de su Palabra y por medio ele la manifestación
de su poder. La verdad no pertenece a ningún hombre,
sino que es ele Dios. Aun cuando El ha usado instru-
mentos humanos en tiempos diferentes y para cumplir
sus propósitos y para su gloria, sin embargo, la verdad
es, ha sido, y siempre será de Jehová. La Biblia es su
Palabra de Verdad, y guía a quienes aman la justicia.
Entre los santos hqmbres de tiempos antiguos que
escribieron profecías se encuentra Daniel, un hombre
. I;(J; e1'/~aciórn .
muy amado, por. Jehová. Dios dirigi01 s.u mente y sus.
manos pa1:a. que escribiera las cosas. marayillosas que
habían de suceder. Daniel mism..o. dice qu.e él 1io en-
tendía lo que escribía. Dios le dio algunos datos por
medio de los cuales entenderían. los que vivieran al
tiempo del cumplimie:n.to de sus ,proféeías. E~ localiza.
el cumplimiento de algunas. de. s:us profecías al tiempo'
de la segunda. venida. del Seflor, '~el g;ran príncipe que.
está. de parte de. los hijos de tu pueblo.'~ Pero a Daniel
se le dijo;, "Tú.empero, oh Daniel, cierra.estafi palabras,
y sella :el libro hasta el .tiempo del .ftn. Muchos. ,corre-
rán d'e aquí.para allá y la ciencia. será aumentada."
;Los pueblos d~ la tierra ven. cla~a~ , fndi~aciones det .
cmnplimiento de esta profecía. Esta .es la edad del1
cor,re): de aquí para allá y-del aumento de conocimiento.
Es un tiempo para entende:r la~ Escri~uras. . .
. Después .de escribir la historia. de los poderes mun-
diales y lo que acontecería mucho tiempo después de m
día, dij·o : "Y yo oí, pero no compren.dí. Dije pues:
S'eñor mío, ¿,cuál s.erá. el resultado ele estas cosas?"
(Dan. 12 :8) ~- En respuesta a s.u pregunta se le dijo:
"Anda Daniel; que estas palabras están cerradas y se.-
lladas hasta el tiempo del fin. Muchos serán purifi-
cados y em.blanqu.ecidos y- acrisolados;. pero los malos,
seguirán haciendo maldades; y no entenderá ninguno de
los malhechores; mas los sabios entenderán." (Dan.
],2: 1, 10). Sin duela alguna que ha llegado el tiempo
en que ha de entenderse la Biblia, y todos los q\le con-
fían en Dios y en su Palabra, y en el gran :;¡acriJício ele
SJ.~- amado Hij,o, serán puriHcaclos y emblanquecidos.
· Los "malhechores" son los que en algún tiempo han
t enido conocimiento de Dios y que han usado ese cono-
cimiento con :fines egoístas. Los tales no entenderán.
E sto ex.plica por qué los miembros del clero moderno
no entiei1,clen. Los "sabios" según la profecía de Da:niel
son los que tienen algo de conocimiento _de Dios y de
su Pal~bra y que aplican ese conocimiento conforme a.
Objeto de ltt Biblia 119
,' ' · ' , , ,.. r ,
la voluntad de ,Dios. Estos tales son los ,que humilde y
O'O zosamente . obedecen la. verdad según la van enten-
diendo. L~s ,g:t'l).ndes y precibs·as verdatle~ que ,por
mucho tie~po ha:p. sido, manten~clas en secre~o deben
,ser entend1das ahora y a los que smcera y honestamente
tratan de enten8erlas h\s dice Dios: ti'La privanza [el
secreto] de J eho~á es ,con los que le temen, y haráles
conocer su pacto, [plan.] "-Sal. 25 : 1'4,
En resumen, en:coll'tramos que' DiO'S ·creó ~1 homln'e
como el sér 'más elevado ele su creación terrena. Que
El creó la tiena para que fu~ra el hogar del · hombre.
Que su .voluntad fue la de que el ·hombre tuviera ,un
registro de las cosas mt!s importantes relaci-on ada : con
sus propia~ _experiencias, arregland-o las cosas el e . ta~
manera que el conocimiento de la relación del hombre
con Dios fuera transmitido de una• gen'era'ci:ón a otra,
desde Adán hasta Moisés. Que con Moisés El comenzó
el regi'stro de las Sagradas Escrituras. Que Dios guió
a Moi~és, .Y a otros hombres fieles que escribieron d~s~
pués de Moisés, para que prepari!-ran la Bi-bl-i'a. .Que El
ha preservado la Biblia en clmtra cte todos los esfuerzos
ele Satanás y de sus agentes para destruirla. , Que J:?ioE
l1a permitido_que se hayan 11echo 'vmi_as cnpias ele las
Escrituras, 1y esto, por hombres sinceros y le·ales. Qu.e
por lo tanto podemos sentirnos ple·n~onente · confi ados
de que la P~abra de Dios es absolutamente correcta.
David, uno ele los profetas de Dibs' escribió : "Porqtre
rebta es la ,palabra de J ehov'á, y tod-a su obra ·es hecha
con fidelidad."-Sal. 33: 4.
El de-yoto ·estudiante ;puede aceTcarse con confianza
a las I!JsCI:it,uras, s~guro de que allí se encuentra la vo-
'lunt~ra de. Dios con-cerniente al h01nbre y gue han sido
dadas _-con el fin de -in'StruiT en justicia. Las Escrituras
constituyen la base d-e su fe en Dios, y el sdber esto lo
cap~cita ·a entencl~'r en;parte el gntn amor ae Dios ha·cilt
la famili~. humana. En proporción ¡¡. lJ.ll;e Dios · arroj a
ltrz' sob1·e ·su -Pa'l'a'br'a; y -en ·¡n-o¡rordi'ó'n la ' cpTe est'l' luz
120 La Creación

ilumina la mente de los que se han consagrado a hacer


su voluntad, el verdadero sentimiento del corazón de los
tales puede expresarse con las .palabras del Salmista :
"Adoraré hacia tu santo Templo, y confesaré tu
Nombre por tu misericordia y tu verdad; porque has
engrandecido tu promesa sobre todo tu Nombre. El
día que clamé a tí me respondiste, y me fortaleciste con
vigor en mi alma. Te confesarán, oh Jehová, todos los
reyes cuando hayan oído las promesas de tu boca."
El que busca la verdad con sinceridad no está abando-
nado a conjeturas. No tiene que atenerse a las opinio-
nes de los hombres para arribar a conclusiones, puesto
que tiene la Biblia y sabe que es la Palabra de Dios y
que por lo tanto es absolutamente verdadera. Con ella
puede probar toda opinión y doctrina que se le pre-
sente. ''A la ley y al testimonio, si no hablaren con-
forme a esta palabra es porque no hay luz en ellos.''
( Isa. 8 : 20). En proporción a que se avanza en el
estudio del plan divino, que cada punto se pruebe por
medio de las Escrituras. Si lo que se dice no está en
armonía con ellas, debe rechazarse. Si está apoyado por
las Escrituras, entonces debe aceptarse.
¡Cuán bondadoso es Dios con su criatura humana 1
Dios le clice: "Venid pues, y arguyamos [razonemos]
juntos..•. Aun cuando vuestros pecados fuesen como
la grana, como la nieve serán emblanquecidos; aunque
fuesen rojos como el carmesí, como lana quedarán."
(Isa. 1: 18). Haciendo uso de sus facultades de ra-
ciocinio con que Dios nos ha dotado, y armonizando
escritura con escritura logramos edificar una base de fe
que no puede ser sacudida por ninguno de los sofismas
de los hombres ni por la influencia del Maligno. En
proporción a que uno. adquiere mayor conocimiento de
Dios y de su plan, crece el amor y la devoción hacia
ese "Dador de todo dón bueno y perfecto." Y si con-
tinúa andando en la luz, su senda aumentará más y más
en resplandor hasta llegar el día perfecto.-Prov. 4: 18.
CAPITULO VI

La Nueva Creación Prefigurada


EHOVA DIOS no necesita ejercer coerción para
J que el hombTe le obedezca. Dios es amor, y su plan
es el de enseñar a sus criaturas que el amor es el
único y propio móvil de acción. El amor es la com·
pleta expresión de la c.arencia de egoísmo. Dios ha
indicado el camino para obtener la vida y no hay nin-
guno otro. El que ama a Dios le obedecerá. El sér
que impulsado por el amor y obedientemente anda por
la senda que El ha señalado, finalmente recibirá la vida
eterna. Esta es la lección que Dios quiere que aprenda
el hombre.
Por medio del engaño y la coerción Satanás ha indu-
cido al hombre a que le obedezca. De este modo Sata-
nás ha apartado la mente ele los hombre;; lejos ele Dios y
los ha conducido a los senderos de la muerte. Es pre-
.ciso que el hombre tenga una oportunidad de escoger
la senda de la justicia o de la injusticia. A Adán se
le dio esa oportunidad y él escogió la senda del mal, y
hasta este tiempo, la· mayor parte de los seres humanos
han seguido el mismo curso malo. Tan solo los que
han confiado en Jehová y se han esforzado fielmente en
servirle, han escapado los frutos ele la injusticia.
Puesto que tenían la facultad de escoger, a J ehová
le ha · dolido el que la mayor parte de la raza humana
haya preferido seguir el camino de la iniquidad. Por
medio del gran diluvio· Dios mostró a sus criaturas
inteligentes su poder ilimitado y que finalmente los
obradores de iniquidad sufrirían una completa derrota.
El gran diluvio no fue una perversa expresión de ven-
ganza de parte de J ehová porque Dios no se complace
121
122 La Creación

en el mal. El diluvio fue con el fin de vindicar el


santo nombre de Dios y para el bien final de stts cria-
turas inteligentes, especialmente del hombre. Esto se
entenderá más claramente cuando el plan divino sea
entendido .por el hombre. El gran diluvio fue una
necesidad, y fue un acto de Jehová inducido por el
amor. .
¿Pudiera entonces clecirse que la creación del hombre
fue un fracaso? En lo que al hombre toca, podemos
decir que sí ; al tratarse. de J:?ios, n-6. De haber sido el
hombre obediente a Dios al' debido tiempo la tierra
hubiera sido llena de una raza de seres p'erfectos. Pero
habiendo sido inducido al. mal hacer, llegó a ser un fra-
caso, a excepción liecha de los que trataron d(;) obedece r
y scrivir a Dios a causa de su amor por El. El hecho
de que Dios hizo frente a la em~rgencia muestr¡_t que
desde su punto de vista' la creación dei ·'hombre no había
sido un fracaso. A su debido tiempo Dios demostrarú
la sabiduría del curso tomado por los que han sido fieles.
Su plan, al ser entendido, demostrará a todos que lo
por El hecho h~ sido bien hecho y en perfecto acuerdo
con la justicia.
El plan de Dios concerniente al hombre en ning(m
sentido fue un fracaso. Su plan fue hecho de tal
manera que pudiera hacer frente a toda contingencia.
Aun cuando El optó por destruir" ese mundo a causa
de la maldad de las criaturas que lo formaban, sin
embargo, su poder no tiene limites y al debido tiempo
El sacará mucho bueno de ese desastre. Desde el mismo
principio El sabía lo que ha:r;ía en caso ele que el hombre
cediera a la influencia del mal. Escrito está: a cono-
cido es a Dios ~l fin desde el principio." (Hech. 15: 18,
T. C.) . Es eyidente que Dios se hubiera sentido más
complacido en la absoluta obediencia del hombre, pero
el hecho de que su criatura desobedeció esa ley en nin-
gún sentido es un argumento en contra de la sabiduría
de su creación ni de su plan con respecto a esa creación.
La Nueva Creación P1'efigumda 123
Después del diluvio Dios ordenó al ·justo Noé y a sus
hijos .que ·se multiplicaran e hincheran la tierra. ( Gén.
9 : 1). Ellos procedieron a hacerlo. ¿Pero era Noé
j,usto? El era. un sér imper~ecto por cuanto era 'dl'\8-
cendiente de Adán, pe:t:o su corazón era , recto y t enia:
fe en Dios y manifestaba 'esa fe, por lo cual se le contó
a justicia. Sien lo descendientes de Adán, era imposible
a Noé y a los suyos el producir una raza perfecta.
Si la raza humana en algún tiempo ha de gozar de
vida eterna, un poder superior al humano tiene que
intervenir. Nadie, con sus propias manos, puede co-
gerse d'e los pies y suspenderse en el aire. De la misma
manera nadie puede hacerse perfecto por medio de sus
propios esfuerzos. Los evolucionistas exhil)en la misma
"sabiduría" que la exhibida por el que trata de suspen-
derse en el aire cogiéndose los pies con §us mismas
manos. Muchos son los .que componen esa clase insen·
sata que piensa el alcanzar la perfección por sus propios
esfuerzos. Es preciso enseñarles la verdad y mostrale$
que Dios ha hecho. amplias provisiones para ello.
Hace muchos siglos Dios comenzó a prefigurar los
medios que emplearía para traer a los obedientes ele la
raza humana hasta el estado ele perfección, y entre las
cosas pref,igmadas prefiguró la "nueva creación." Esto
no significa que El dispuso que toda la raza humana
tendría que ser destruida Y. una nueva raza creada, sino
que El crearía algo nuevo, y por ese conducto rehabili-
taría y restauraría a la raza humana.
Después del diluvio Noé- y sus hijos se establecieron
en diferentes partes de la tierra. J afet y sus descen-
dientes pasaron a lo que es ahora Europa. Cam y sus
hijos al norte de Africa, y Sem y sus hijos perman~­
cieron en el Asia. Concern.iente a Sem Noé profetizó :
"¡Bendito sea Jehová, el Dios de Sem !" indicando de
ese modo que Dios tenía en reserva una bendición espe-
cial para los descendientes d·e Sem. Las Escrituras
muestran que esto fue lo qn.e se dio a entender.
124 La
/ .,
ereacwn
Dos años depués del diluvio Sem engendró un hijo
y le puso por nombre Arfaxad. ( Gén. 11 : 10 )'. Taré
fue descendiente de1Arfaxad y de Sem. ( Gén. 11 : 24).
Al . debido tiempo Taré tuvo ·un hijo , al cual llamó
Abram, a quien más tarde Dios le cambió el nombre· por
Abraham. (Gén. 11: 27) . .Taré y su familia habitaron
en U r de los Caldeos en donde Abraham se casó con
Sara, la cual era estéril y no le daba hijos. ( Gén.
11: 30). ·Más tarde Taré y su familia, incluso Abraham
y Sara, emprendieron marcha para la tierra de Canaán.
Conforme a la relación bíblica, parece ser que viajaron
por el valle del Eufrates hasta Carán, en donde Taré
vivió con su familia hasta su muerte.
Abraham entonces llegó a ser el más importante de
la compañía que moraba en Carán. Como tenía fe en
Dios, Dios le dio una tarea que llevar a cabo. '~Y habí!).
dicho Jehová a Abram: Véte de tu tierra, y del lugar
de tu nacimiento, y de la casa de tu padre, a la tierra /
que yo te mostraré. Y haré de tí una nación grande, y
te bendeciré, y engrandeceré tu nombre; y tú serás m1<1
bendición. Y bendeciré a los que te bendijeren, y al
que te maldijere yo maldeciré; y serán bendecidas en
tí todas las familias de la ti erra."-Gén. 12: 1-3.
En obediencia a las órdenes de Jehová, Abraham
tomó todo lo que t enía, incluso lo que había traído a
Carán y lo que allí había obtenido; tomó a su esposa
Sara, y a Lot y su familia, y partió de Carán. Por el
desierto y a través de desnudos cerros iba la caravana
de camellos, asnos, ganado y ovejas con Abraham a la
cabeza, viajando hacia el suroeste a una tierra extraña.
Fue una jornada tediosa, larga y lenta, y la importancia
de ella no pudo entonces ser apreciada por Abram.
¿ Qué significó la marcha de Abram a esa tierra para
él desconocida? El gran Dios del universo estaba po~
niendo en acción a su siervo comenzando una cinta
cinematográfica que prefiguraba la nueva creación y la
formación de una nac'ión y gobierno perfectos que serían
La Nueva Creaci6n Prefigurada 125

los medios ·usados por Dios para dar su bendición a


todas las fámilias de la tierra·.
Por un continuo período de cerca de dos mil años
Jehová, de tiempo en tiempo, hizo a sus fieles siervos
producir varias partes de esa cinta cinematográfica
comenzada entonces por Abrum, con la cual El ense-
ñará a la humanidad la senda que conduce a la vida
eterna. Es en extremo interesante e instructivo el vi-
sualizar estos cuadros hechos hace t anto tiempo. Los
hombres que ejecutaron sus diferentes partes en ellos
no entendieron plenamente, pero sabían que J ehová
era el gran Director y Comandante, y esto les era su:fi-
ciente. (1 P ed. 1: 10, 12). Un registro de todo esto se
hizo para que los que vivieran' al tiempo del fin del
mundo, en el cual nos encontramos ahora, pudieran
saber y entender los caminos de Dios y experimentar
el consuelo que trae este conocimiento--1 Cor. 10: 11;
Roro. 15: 4.
Ahora Dios mandaba a Abram a la tierra de Pales-
tina en donde más tarde completaría los cuadros que
seria necesario hacer. Esa parte de la tierra ha llegado
a ser sagrada y santa a todos los que aman a Jehová.
Los acontecimientos que transcurrieron en la t ierra de
Palestina y territorios circunvecinos prefiguraron el
desarrollo del plan de Dios.
La frontera oriental de la tierra de Palestina se en-
cuentra guardada por una cadena de hermosas montañas
desde las cumbres de las que se tiene una excelente pers-
pectiva. Al acercarse la caravana por el éste es seguro
que Abram se detuvo allí a contemplar la primera vista
de la tierra prometida. Sin duda contempló con gozo
la maravillosa escena que se presentaba ante sus ojos y
qu,e pronto seria el lugar en que se haría el más hermoso
cuadro hecho en la tierra, y en donde más tarde tendría
su cumplimiento y coinpletación.
Desde la cresta de esa cordillera de montañas Abram
podía contemplar el Líbano, el Mar de Galilea, la lla~
126 La Creación

nura de Esdraelón~ el Monte Carmelo, el Valle del


Jordán y los ríos de mas o menos importancia que
desemboc¡¡,ban en las turbulen~as aguas de Jud~a y el
Monte Moría, el :Monte Sión, los cerros de Judea y el
azuloso Mediterráneo.' Los viajeros que pasan por allí,
al llegar a la cumbre de esta· montaña, exclaman exta-
siados· ~ " ¡ Esta es la vista rp.ás hermosa del mundo
entero!" ·
Al ·contemphÍr la maravillosa escena ante sus ojos,
Abram se· acordaría de la promesa a él hecha por Dios.
Su importancia sin duda alguna lo dejó impresionado,
pero le fue entonces imposible el comprender el pleno
significado y alcance de esa promesa y lo que· él estaba
haciendo en ' con'exión· con ella. La promesa que Dios
hizo a Abram f ue : "En tí serán benditas todas las
famili as de la ti:ena." En este cuadro Abram repr<>-
sentaba a ·Dios de quien procede todo dón bueno y
perfecto y de quien todo sér humano que le obedezca
recibirá finalment!'! una bendici'ón.
Al bajar de la cumbre de la montaña Abram entró
a la tierra de Palestina y pasó por ella hasta el Encinar
de :M:oré. "Y Jehová apareció a Abrahm y le dijo: · A tu
simiente daré esta tierra." ( Gén. 12 : 7) . Esta promesa
in cticaba que Dios al debido tiempo daría a todos los
que le obedecieran un lugar de residencia. Dios hizo
]la, tierra para que el hombre la habitara y al debido
tiempo la heredará en el más absoluto sentido de la
palabra.- I sa. 45: 12, 18. ·
A través de la t ierra, hacia el sur, siguió · Abram
hasta llegar a Egipto y plantó sus tiendas en el Encin ar
de Mamré. Allí le a:pareció Jehová y le dijo: "No
serás Hamado más Abram, sino que Abraham será tu
nombre; porque te he constituido padre d:e una multitud
de naciones." ('Gén. 17 : 5). Esta promesa de seguro
sonó algo extrafía a Abram pero con todo creyó a DioS'.
Para ese entonces Sara tenia noventa añds de edad y
a causa' de su es't:er il ida:d 'llO' le· habüi: dado hijos·. La
La Nueva Creación Prefigurada 127

que Dios le hacía ahora, era la de que sería


¡ it( lrc de muchas nacion,es. Más tarde Dios dijo a
llraham que tendría un hijo de Sara su esposa y que
1t !'In. llamado Isaac.-Oén. 17:19.
' nfon~e a la promesa hecha por Dios, cuando
hraham cumplió · cien años le nació un hijo de su
t'Hp a Sara, y él le puso por nombre I saac. ( Oén.
" :o ). Sin duda que ese hrij0 trajo mucha alegria al
t'orazón de Abraham y de su .esposa. Las palabras de
, 'ara indican que fue un tiempo de gozo paTa ellos.
l)ios les había dado un hijo en el cual podían ellos
(• ntrar sus esperanzas del cumplimiento de la promesa
1 bendición hecha por Dios. "Y dijo Sara: Heir me
h1t hecho Dios; y cualquiera que lo oyere se reirá con- ·
migo. Dijo también: ¿Quién hubiera dicho a Ab.raham
que Sara amamantaría hijos? pues que le he parido un
hijo en su vejez. Y creció el niño y fue destetado; e
hiv.o Abraham un gran banquete el día que fue deste-
Lndo Isaac."-('lén. 21: 6-8.

EL GRAN CUADRO
Llegó el tiempo para que Jehov·á hiciera el cuadro que
prefiguraría su plan para la salvación y bendición de
.la raza húmana. Los principales actores en este cuadro
fueron Abraham y su amado hijo, Isaac. En el cuadro,
Abraham representó a Dios, en tanto que I saac, el único
hijo de Abraham, representó al amado y unigénito Hijo
de Dios, Jesús, a quien Jehová trajo al mundo para ser
el Salv~dor de la humanidad. Abraham no pudo en-
tender entonces que esto era un cuad;ro de algo que
tomaría lugar en el futuro . 'l'uvo ;por lo tanto que .ser
una gran prueba para él y el registro que se hace del
incidente n111cstra que en efecto 'fue una gran prueba a
BU fe.
J ehová dio las siguiente:> direcciol}es a Abraham :
"Toma a tu hijo, a Isaac, tu hijo, único, a quien
amas, y véte a tierra de Moría, y ofréccle allí en bolo-
128 La Creación ·

cau·sto sobre uno de los montes que yo te diré" ( Gén.


22 : 2). Isaac era el tesoro más preciado del corazón
de Abraham porque era el unigénito suyo por su amada
esposa. Sin embargó, ·su amor por Dios . era mayol'
porque tenia fe en que El haría provisión para bien de
su hijo.:-Heb. 1.1: 19. .
En obediencia a las órdenes de Dios Abrah!).m se
proveyó de las cosas necesarias para hacer el altar, y de
leña para el fuego, y en compa:ñia de su hijo y ele sus
siervos se fue hasta Hebrón, al Monte Moría, donde hoy
se encuentra J erusalem. Allí edificó Abraham un altar
y se preparó a degollar a su amado hijo Isaac para que
'lo pudiera ofrecer como holocausto. Al ·momento crí-
tico Dios, por medio ele su ángel, habló a 4braham y le
ordenó que no siguiera adelante. Le dijo: "No ex-
tiendas tu mano contra el muchacho, n.i le hagas nada;
' pues ahora conozco que tú temes a Dios, ya que· no me
has negado tu hijo, tu hijo único."-Gén. 22 :12.
La fe que en esta ocasión exhibió Abraham fue grata
a Dios y por eso habló Jehová a Abraham nu.evamente
por conducto de su ángel y le dijo: "Por mí mismo he
jurado, dice Jehová, que por cuanto has hecho esto, , y
no me has negado a tu hijo, tu hijo único, que bendi-
ciendo te bendeciré, y multiplicando multiplicaré tu
simiente como las estrellas del cielo, y como las arenas
a la orilla del mar; y tu simiente poseerá la puerta de
sus enemigos; y serán bendecidas en tu simiente 'todas
las naciones de la tierra; por cuanto has obedecido mi
voz."-Gén. 22: 16-18.
¿Por qué se hizo este cuadro, el más grande de todos
los hechos en la tierra? Porque prefiguró que la pro-
mesa de Dios, que representó Sara la esposa de Abraham,
sería el medio de bendición ele todas las familias de la
tierra. La ofrenda ele Isaac prefiguró qtie en algún
tiempo futuro Dios ofrecería a su muy amado Hijo
como un gr~n sacrificio por el pecado en provecho del
La Nueva Creación Prefigurada 129

mundo, y que ese Hijo suyo seria el Salvador y Liber~


tador de la humanidad.-Jn. 3:16.
La promesa original hecha a Abraham fue : "En tí
11 l'án benditas todas las familias de la tierra." Ahora,
iil tiempo de la ofrenda de Isaac, y por primera vez, la
})l"Omesa fue: "En tu simiente serán benditas todas ·las
familias de la tierra." Estas promesas, en conexión
on el cuadro que aquí se verificó, prefiguran que las
bendiciones proceden de Jehová y que el conducto de
bendición será su amado Hijo.-Rom. 9: 7; Heb.
11: 17-19. •
La tendencia entre muchos ha sido la de atribuir to-
clas las bendiciones a Cristo, cuando en verdad y hecho
todas las bendiciones proceden de Jehová Dios, siendo
Cristo Jesús, su amado Hijo, su agente ejecutivo en
llevar a cabo esas bendiciones. Esto se indica clara-
mente por la promesa hecha a Abraham a la que hici-
m.os referencia. Isaac, siendo el único hijo de Abraham
por su esposa Sara, representa al Cristo. Que esto es
Ío que representa, claramente se indica en otra parte de
las Escrituras.-Gál. 3 : 16; 4: 28.
Llegó el tiempo para que I saac t omara una esposa.
Abraham mismo la escogió. El no mandó a Egipto por
una esposa para su hijo, ni t ampoco la tomó de entro
la gente de la tierra de Canaán. Abraham envió a su
siervo a su tierra natal, a la casa de su hermano Nacor,
y alli Rebeca fue escogida como esposa de I saac. ( Gén.
11: 29; 24: 1-67). El hecho que Rebeca era de la
misma familia y parienta de Abraham, muestra que
t endría la fe de Abraham. Rebeca vino a I saac y fue
su esposa, y en esto tenemos otro hermoso cuadro.
Abraham representa a J ehová Dios, e Isaac representa
al amado Hijo de Dios, Cristo Jesús. Abraham escogió
la esposa para Isaac. Jehová Dios escoge la esposa para
su amado Hijo, y el Esposo y la esposa juntos cons-
tituyen la nueva creación, la que aquí se prefigura.
lj:sto t ambién muestra que los que son escogidos para
[
1:30 '!Ja ·Oreación
1
constituir la esposa del amado Hijo de Dios tienen que
ser de la misma fe 'q:Ue :Abraham y que solamente lo!!
que 111antienen esa f,e llegarán finalmente a ser pa~·te
tle la nueva creación. Esto es lo que implica el Apóstol
Pablo cuando, al hablaT de la selección {le la esposa de
Cristo dice : "Porque ciertamente no echa ·mano de los
ángeles, sino que echa mano de ·la simiente de Abra-
ham." (Heb. 2 : 16). "Sabed pues que los que son de
la fe, los tales son hijos de Abraham." ( Gál. ·g : 7). Así
como a l-a: vista de Di'Os el. esposo y la ·eposa ·son uno, de
de igual modo Cristo Jesús y su esposa, gue constituyen
la nueva creaci611, son 'Uno y componen la simiente de
2\..bTaham de acuerdo con la promesa. ( Gál. 3: 16, '27,
29) . Esta nueva creación es " la simiente" por medio de
la cual han de venir las ben diciones a todas las fami-
lias de la tiena.
Isaac vino a ser el heredero de todo lo que Abraham
poseía. {Gén. 25 : 5) . E sto indica que aquel a quien
lsaac prefiguraba sería el "heredero de todas las cosas."
El Apóstol P ablo dice concerniente a Cristo Jesús, el
amado Hijo de Dios : "A quien ·h·a ·constituido heredero
de todas las cosas." (H eb. 1: 2) . Los que participan
en hacer estos cuadros no pudieron entender el signifi-
'Caclo de ellos, y por lo tanto esperaban que las prome-
tidas bendiciones vendrían por conducto de la simiente
·n at ural de Abraham. La intención ele Dios era la de
que el 'Verdadero significado de estos cuadros se entmi-
(lieran en el ·fl)turo y El los ll evó a cabo para préfigurar
:¡nayores cosas d.c las que entonce.· podian entenderse.-
'! Cor. 10: 11 ; Heb. 10: 1.
J ehová continuó estos cuadros prefigurando el uesa-
·rrollo de su pl an. Su promesa 'fue confirmada a I ·aac.
1
( Gén. 26: 4, 5) . Al debido tiempo nacieron uos hi;jos
a I .saac y a su esposa Rebeca, quienes fueron •gemelos.
Les ·pusi·eron ·:por 'nombre Esaú 'Y iJ acob. ·Siendo el
mayor, a Esaú tocaba recibir la bendición 'de su padre,
pero Dios dispuso •que Jncob 'fuera 'el 'favorecido y que

La Nueva Creación Prefig1trada 131

1 ,,.¡¡¡¡ ra esa bendición.. Estos, dos hijos, en_ ese cuaclr~,.


111'1' f1 tu aron dos clases ele cristianos pr.ofesos. .
l•lr;aú representa. a esos. cristianos que tan solo pró:fe-
11" ser obedientes a J eltová y que aparentemente están
1 11 linea. para recibir su bendición; en tanto que Jacob
•1 pr senta o prefigma a los cl'lstüvnos profesos. que con_-
1 n(•nn. fieles al Señor y que' llegan a ser los. receptores
dt ln.s bem1iciones, llegando a formar pa -te de, la misma
Miente de la pro¡:nesa. Esaú persiguió a Jacob; y, de
"''" rclo con el cuadro, encontramos qu<-) ,los que sola-
'"<ntc profesan ser· seguidores del Señor han perseguido
11 los verdader.os seguidores durante toda la er.a cris-
1litna. Los profesos, representados, por Esaú,. en reali-
tll tl son una parte del mundc;> o sea la organización del
1 in.blo. Los verdaderos, y. fielmente obedientes son
pnrte de la organización de Dios.
espués ele que J acob huy.ó de su hogar a causa de
l 1~ persecución, llegó a cierto lugar en donde descansó.
11 l' esa noche.. En su sueño vio una escalera cu.ya base
Pntaba erda t.ier.ra y su otro exh-emo tocaba el cielo; en
I'Hfl. escalera él vio los- ángeles ele Dios qué subían y ba~
Jnban por ella. Por medio ele este cuadro Dios prefi-
/ lll'ó que a su debido tiempo El establecería comunica-
ttión entre SLlS cr.iatm:as en la tieHa y sus criaturas en
11( cielo, y que e ·to se llevaría ¡¡ cabo por medio ele sn
•Ht va creación. Fue :en esta ocasión <mando Dios con-
r¡ rmó la prome¡¡a a J acob concerniente a la bendición ele
l das las familias ele la tierra.-Cén . 28 : 11-15.
Jacob, cuyo nombre más tarde fue cambiado por
~rael, fue el padre ele doce hijos, los cuales llegaron a
11 .r cabezas ele las doce tribus de I srael. Estas tribus,
11 Ja muerte de Jacob, se organizaron en el pueblo rle
1 ios en la tl"rra. Dios organizó a este pueblo con va-
,.¡ s fines, uno de los cuales fue el de prefigurar el
d sarroUo ele su plan con referencia a la nueva crea-
<•ión. C11an<lo Ja cob estaba a punto ele morir él ll;unó
11 su. hijos delante ele él para decirles las cosas que,
132 La Creación

habrían de acontecer en · el distante futur~. El poder


invisible de Dios movió la mente y la lengua de J acob
para que hablara proféticamente concerniente a la venida
del poderoso Gebernante y Príncipe de Paz.
Entre otras cosas dichas por J acob en esa memorable
ocasión fueron las palabras: "No se apartará de J udá
el cetro, ni la vara de gobernador de entre sus pies,
hasta que venga Shiloh; y a El será tributada la obe-
diencia de las naciones." ( Gén. 49 : 10). Esta profecía
muestra que la prometida simiente, por medio de la
cual las bendiciones han de venir, seria un descendiente
de la tribu de Judá. El cetro es simbólico de autoridad
para gobernar. Shiloh significa el Pacificador, Feliz
y Próspero. A ese poderoso Legislador y Gobernador
le seria concedido el poder y la autoridad de juntar a
todas las naciones de la tierra y de bendecirlas conforme
a la promesa de Dios. El será el que dispensará la ben-
. dición a las familias de la tierra. Esta profecía fue la
repetición de la promesa que Dios hizo a Abraham, y
forma parte del gran cuadro prefigurando la venida del
que ha de. dar la bendición.
Los israelitas en ese entonces moraban en Egipto.
Antes de eso, José el amado hijo ele Jacob, había sido
vendido a ·los egipcios y por la gracia de Dios había
llegado a ser un hombre de poder en Egipto, próximo
en poder a Faraón, el rey. Las bendiciones que Dios
trajo al pueblo de Egipto por medio de José prefigu-
raron cómo Aquel a quien José representaba bendeciría
al mundo entero. Después de la muerte de José subió
al trono ele Egipto otro emperador, uno que no tenia
respeto por Jehová y que había olvidado las bondades
de Dios dispensadas a Egipto por medio ele José, y el
cual, en su perversa condición de corazón, persiguió a
los israelitas, el pueblo escogido de Dios.
Fue durante ese período de persecución que nació
Moisés. El inicuo gobernante de Egipto había decre-
tado que las parteras mataran a todos los niños varones
V enUsq1ter·o en Grimclclwald-S7tiza.
Cuando l anillo se rompió los vapores y aguas descendieron
a la atmósfera de la tierra ..•• Las "TatHles cantidades de
aguas mezcladas con nieve y hielo, aceleradamente mar-
chando hacia el ecuador y acompaí'íaclas de grandes truenos,
triti.1raron las montañas y cerros, tornándolos en valles y
efectuando cambios en la superficie de la tierra. Pág. 96.
Fl!!n"l'lll!II'~..,......,...,..,....."!!"_ _ _-.::~-:!'-'T"''i-.....'\"'"----------~--':""'"-"'if :\Ioi::;és llegó a
ser un hom-
bre de impor-
tancia y ele
saber.
Es muy razo-
nable llegar a
la conclusión
, tle que i\loisé
estaba por
completo fa-
m i l i a r i-
zado con las
tradiciones de
sus padres.
Hasta él lle·
garon de ge-
neración en
generación y
pmlo él saber
todo lo que
había ocurri-
do desde
A<llin ha R t n
su tiempo.
l'áginct J 0-1.
Bnou e11tro de .lfoist-'i L. Alnut 1'culema

1
Lu¡¡ Bodas ele Caná Paolu rcrone.se
l!;rróueas doctrinas llau hecho creer a la ~ente que la santificación implica una n¡mricncia
exterior de santiclacl o piednd a ·umida, exhibiendo un ~rado exagerado de gra,·etlad y solem -
nidad. Con este fin muchos se visten de un a 111a nera. especial y asumen rostros largos y
solemn es y l1 abla n con graYecllul; otros se cogen las manos y tratan ele aparecer buenos, en
tanto que idea n medi os ~' maneras pn m f~oopernr con los e lementos político y comercial del
mund o para ndquirir Ju(LS poLlcr. l'ú yiua 212.
La R e8u1-recci 6n
Los miles de millones que han muerto y están en la tumba, al debidoAlb61·t v . K eller
desperta dos del sueño de la muerte. tiempo serán
La Nueva Creación Prefigurada 137

de los hebreos. (Ex. 1: 16, 22). Pero Dios, de una mar-


nera milagrosa, preservó a Moisés. Cuando el niño
cumplió tres meses de edad la madre hizo una arquilla
de juncos y puso en ella al niño y lo colocó en un carri-
zal a la orilla del Nilo. Un miembro de la familia real
encontró al niño y sin duda, por arreglo divino, la
misma madre de Moisés fue empleada como ama de
leche del niño.
Moisés creció como miembro de la familia real, pero
cuando llegó a la mayoria de edad se negó a ser llamado
hijo de la hija de Faraón. Prefirió en cambio estar
asociado con el pueblo de Dios, del cual él era un miem-
bro. (Heb. 11: 24). Su fe en Dios fue la que lo im-
pulsó a seguir tal curso de conducta, sin duda bajo la
dirección divina. La opresión de los israelitas en la
tierra de Egipto continuó. Esta es otra parte del cua-
dro que es posible ahora entender. El inicuo gober-
nante de Egipto de ese entonces representaba a Satanás,
el Diablo, oprimiendo a las gentes de la tierra.
Muchos han pensado que toda la gente de la tierra,
a excepción de los que pertenecen a alguna iglesia, son
parte del mundo; esto no es cierto. El mundo está
representado en los factores gobernantes que dominan a
la gente. El gobierno de Egipto, del cual Faraón era
la cabeza, representaba la inicua organización del Dia-
blo que oprime a la gente. Entonces Dios comenzó a
hacer un cuadro prefigurando cómo El libraria a la
gente de manos de Satanás, el Diablo, el opresor. J e-
hová mandó a Moisés a librar a los israelitas del yugo 1
egipcio. En este cuadro llfoisés representaba al gran
Mesías que librará a todas las gentes de la tierra del
yugo de Satanás y de todas sus agencias, y que condu-
cirá a la gente a una condición de bendición.
Cuando llegó el tiempo para que los israelii:.:'l.S salieran
de Egipto, Moisés iba adelante. Seiscientos mil hom-
bres de a pie con sus familias salieron de Egipto. En
este cuadro Moisés representaba a los que finalmente
138 - '

han de aceptar a• Cristo como el gran agente e:jocutivo


de J'ehová, provisto pan~ la liberación del hombre.
El inicuo Faraón, gobernaute de Egipto, siguió con
sli ejército tras los israelitas con el fin do d,estruirlos.
lliubiora t enido éxito en lle"\'ar a cabo sus malévolos
pTopósitos de no haber· Dios :i,ntervenido para proteger
a los isl'aelitas, in,dicúucloles ppr medio de Moisés el
camino que deberían andar. (Ex. 12:37, 38 ; 14: 1-5).
Faraón y sus ejércitos lJersi.guieudo a los isra.elitas, re-
presenta al Diablo y. sus agencia¡:¡ en sus esfuerzos por
destruir a los que atnan aL Seño:¡:.. • , , . , 1
Cuando los israelitas ll<;go.ron ,al :Mar Rojo y el cjér-
o.ito de Egipto ya cal>i los alcqnzaba-, D~os envió a su
ángel a protegerlos.. Entonces J ehová puso la columna1
uo nube e.n.txe. los dos ejércitos pa.ra ocult¡n a: los israeli-
tas. En seguida Dios indicó a Moi sés lo que debería
hacer y eu obediencia a lo orden Moisés ex~endió su
vara sobte el mar con el resultado de qu!'l las, aguas se.
dividieron pudiendo los israelitas,r guiados por Moi ·és,
atravezar por t ierra seca. 111as cuando los egipc;ios
entraTon uJ. mar con las murallas de agua de un lado
y de otro, l a:s aguas se ;juntaron y ellos perecieron.
(Ex. 14: 13-30). Este cua:dxo muest:¡:a .que a su de-
bido tiempo Dios librará de la opre ora mano de
Satanás a todos los que le obedezcan, y que por com-
pleto destruirá •l a organización de Satanás y finalmente
al mismo Satanás. También mu estra que en esa ¡p:an
tarea Aquel a quien Moisés representaba, es decir, Cris-
to, el agente e;jecutivo de Jehová, d;irigirá las cosas.
• Cuando Moisés y los israelitas se e.ncontraron seg¡,u~os
del otro lado del mar, entonaron un cántico ele alabanza
a J ehová. Entl'e otras cosas ese cántico dice : "Tu
diestra, oh Jehová, se ha hecho gloriosa en potencia.)
tu diestra, oh J'ehová,, ha destrozado al enemigo." (Ex.
15 : 6). Esto prefigura que cuando la gente esté 11lena-
1'nente librada del poder ele S:üanás,. el opresor, 'Se daml.n
cuenta de que en el' ejercicio de su·-amanto.bondad Dios
La Nueva Oreaoión P1·e[igumda liW

ha hecho provisión para su salvación. Entonces todos


notarán . como entonces lo hicieron : "Jehová es mi
i'uerza y mi canción. El ha sido mi salvación."
La demostración del poder de Jehová en destruir el
poder egipcfo y en la milagrosa preservación de los is-
raelitas fue con el objeto de mantener ante la mente ele
la gente que Jehová es el único y verdadero Dios, y qufl
solamente de El pueden venir bendiciones. Estas cosas
ocurrieron y fueron registradas no solamente en pro-
vecho de I srael sino particularniente en pl"<Necho de
las gentes de la tierra que buscaran la justicia en el
tiempo del fin, . en el cual nos encontramos. (1 Cor.
10: 11). Dios tuvo el propósito de que su pueblo aho1·a,
en este siglo veinte, recibiera consuelo y ánimo al obte-
ner la visión mental de este cuadro. El cuadro divina-
mente provisto prefigura que Dios desde un principio
Sfl propuso a suministrar una nueva creación que estarla
plenamente en armonia con El y que tendría fe y con-
finnza en El, y que por medio de esa simiente El
bendeciría a todas las familias de la tierra.
U. ando a su pueblo escogido, después del destrozo del
ejército egipcio en el Mar Rojo, Jehová hizo otra sel'i.e
éle cuadros. E stos cuadros prefiguran un gobierno justo
y recto por medio del cual la raza humana será traída a
la armonía con Jehová. Moi.-és representó a la nueva
creación, la que ha de constituir ese gobierno justo y
recto o autoridad oficial, en tanto que el pueblo de
I srael re1n·esenta a los pueblos de la tierra que desean
volver a una plena armonía con Dios. Un estudio de
estos cuadTos ahora, a la luz de la pmfecfa cumplida,
en gran manera fortalece la fe de todos los que esperan
un tiempo mejor y más feliz para la raza humana.
El pueblo de Israel sentó sus tiendas en el desierto,
cerca ·del Monte Sinaí. Dejando al pueblo en sus tien-
<las, :Moisés fue al monte. El registro dice: "Y Moisés
subió a donde estaba Dios ; y llamóle J ehová desde el
monte, y le dijo: Así diTás a la casa de Jacob y anrm-
.
140 La Creación

ciarás a los hijos de Israel." En seguida Dios dijo a


Moisés lo que debería decir. (Ex. 19: 3 ). Mientras
que Moisés estaba recibiendo instrucciones de parte de
Jehová era in.visible a los israelitas. De este modo el
cuadro muestra que el nuevo gobierno de justicia será
invisible a la gente y que r ecibirá plena autoridad de
parte de Jehová. Cuando Moisés volvió al pueblo pre-
figuró a los visibles representantes del nuevo gobierno.
Dios ordenó a Moisés que dijera lo siguiente a los
israelitas : "Vosotros hebéis visto lo que hice a los egip-
cios, y cómo os tomé sobre las alas de águila y os he
traido a mi mismo. Ahora pues, si escucháreis mi
pacto, me seréis un t esoro especial, tómaclo de entre
todos los pueblos; pues que mia es toda la tierra. Y
vosotros me seréis un reino de sacerdotes y una nación
santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de
Israel." (Ex. 19: 4-6). En obediencia a las órdenes
de Dios, Moisés elijo todas estas cosas al pueblo. "l!Jn-
tonces todo el pueblo respondió a una, diciendo : ¡ N o-
sotros haremos todo c-uanto ha dicho Jehová! Y Moisés
trajo a Jehová la respuesta del pueblo." · (Ex. 19: 8).
De este modo se hizo un pacto entre Jehová y los israe-
litas teniendo a Moisés como mediador entre Dios y el
pueblo y como el representante legal de ambas partes.
Los israelitas eran el pueblo escogido de Dios desde
el tiempo de la muerte de Jacob. Dios comenzó a dar
su ley a ese pueblo al tiempo de la pascua, cuando salie-
ron de Egipto, pero en el 111:onte Sinaí Dios inauguró
su pacto con ese pueblo para establecer un gobierno que
prefiguró el gobierno que ha de ser compuesto por la
nueva creación y por conducto de la cual, al debido
tiempo de Dios, vendrán las bendiciones a la gente.
Dicho de otra manera, Dios predijo en cuadros lo que
intentaba hacer a su debido tiempo. Ni Moisés, ni el
pueblo de Israel que tomó parte en hacer esos cuadros,
entendieron el pleno significado ele ellos porque Dios no
quiso que en ese entonces lo entendieran. .
La Nueva Creación Prefigurada 141

Cuando en el Nuevo Testamento encontramos la in-


terpretación- de un registro hecho en el Antiguo Testa-
mento, podemos sentirnos seguros de que tal interpreta-
ción es correcta. Concerniente a los miembros de la
nueva creación está escrito : "VoS'otros, al contrario,
sois una raza escogida, un sacerdocio real, nación santa,
pueblo de posesión exclusiva, a fin de que manifestéis
las excelencias de Aquel que os ha llamado de las tinie-
blas a su luz maravillosa; los que en un tiempo no erais
pueblo, mas ahora sois pueblo de Dios; los que no habías
alcanzado misericordia, mas ahora habéis alcanzado
misericordia." (1 Ped. 2:9, 10}. Por medio de estas
inspiradas palabras en el registro santo nos enteramos
de que el pueblo de Israel, guiado por Moisés y bajo la
dirección de Jehová, representaba la nueva creación.
Fue al tercer día después de que · Moisés subió al
monte a recibir instrucciones de parte de Jehová que su
pacto fue inaugurado. Esta parte del cuadro prefiguró
que en la temprana parte del tercer día de mil años,
después de la selección de la nueva creación, Dios inau-
guraría el Nuevo Pacto o nuevo gobierno en beneficio
de la gente. ' Está escrito en el N u evo Testamento que
"un día para con el Señor es como mil años, y mil años .
como un sólo día." ( 2 Ped. 3 : 8). De este modo se
indica el tiempo de la inauguración del pacto con el
gran Mesías. El Señor ha puesto muchas otras cosas
en su Palabra para corroborar esta conclusión. El ter-
cer día de mil aí'íos ha comenzado ya.
La inauguración del pacto y gobierno en el Monte
Sinaí, que prefiguró el gobierno mesiánico, fue accm·-
pañado por grandes convulciones de los elementos. "Y
aconteció que el día tercero, al despuntar la mañana,
hubieron truenos y relámpagos y nube densísima sobre
el monte, y sonido de trompetas sobre manera fuerte.
Y temblaba todo el pueblo que estabá en el campa-
mento." (Ex. 19 :16-18}. E sto prefiguró las condicio-
_nes que existirán aproximadamente al tiempo de la
1-12 La Creación
inauguración . del .gobierno bajo la nueva creación. El
Apóstol Pablo menciona este incidente en conexión con
la. inauguración del reino del Mesías y alude a lo ocu-
rriclo en el Monte Sinaí mostrando que prefiguraba lo
que ha de ocurrir ·al tiempo del establecimiento ,del go-
bierno de justicia a manos de la simiente, la nueva
creaci6n.-Heb. 12: 18-2!1.
Jehová entonces di. o a la gente la ley por medio de la
cual debería ·ser gobernada, y ·enfatizó el hecho, de que
la ben'd.ición de la gente ·d ependía enteramente del hecho
. de que ·reconocieran, aceptaran y •sirvieran a Jehová
como el único y verdadero Dios, y reconociendo que no
hay ninguno otro. Luego rununció que la regla a la
cual estaba sujeta la bendición de todas las Í'nmilias de
la tierra era ta de que le reconocieran como el único y
verdadero · Dios y que TIO hay ·otio medio de obtener la
vida sino el arreglo hecho por El. Las provisiones del
pacto en el Sinaí perfiguraron lo que ha de constituir
la regla ele acción por meclio ·ele la cual las gentes. han
ele ser clominadas bajo ·el nuevo y justo gobierno de
Cristo, la nueva creación.-Ex. 20: l-17.
Que la inauguración 'del gobierno de· los israelitas,
con Moisés a la cabeza, prefiguró el mayor gobierno con
Cristo a la Cabeza, no queda lugar a duda. Esto quedó
claramente prefigurado por las palabras proféticas que
Dios hizo que Moisés. escribiera: "Jéhovú tu Dios le-
vantará para tí un Profeta de en medio de tí, ele tus
hermanos, semejante a mí; a él oiréis. . . . Profeta
les he de levantar, ele en medio de sus hermanos, seme-
jante a tí; y pondré mis palabras en su boca, y El les
hablará todo cuanto yo le mandare."-Deut. 18: 15, 18.
Que la inauguración de la organización gubernamen-
tal de Israel; la ley, estatutos y ordenanzas dadas a ese
;pnebl(J) conceriente a carnes, bebidas, la guarda del Sá-
bado, ·etc.¡ eran· sombras de "cosas por venir'' no puede
haber la menor duela porque está escrito : ." Las cuales
cosas son tuiá sombra de las que habiari de venir."
r,a Nueva C1·eación Prefigtl.1'ada 143

La promesa de Dios fue la de que el poclervso Gober-


l ante venclria por conducto de la tribu ele J u el á. ( Gén.
4.9 :10). David, el hijo ele Jessé (Isai ) de Belén, fue
de la tribu de Judá. Bajo la dirección del Señor él fne
n;ngido para ser rey sobre Israel. (1 Sam. 16:12, 13) .
David llegó a ser un poderoso gobernante. (2 Samuel
5 : 10) . Dios estableció a Davi'd sobre el trono de Israel.
El hizo que su profeta dijera a David: "Y tu casa y tu
reino serán eternamente estables delante de ti: tu trono
será inmovible para siempre." (2 Sam. 7: 16). Los
judios esperaban que David cumpliera las promesas que
Dios les habí.a hecho de traer bendiciones sobre las fa-
milias de la tierra por conducto de David y de su reino.
Es evidente que David no fue la prometida "simiente"
que había de establecer el gobierno eterno de justicia,
porque David murió y su reino no duró eternamente.
El nombre David significa amad:o. El Amado de Dios
es el Unigénito, a quien El envió al mundo. David
prefiguró a ese amado Hijo de Dios y prefiguró a El
Cristo. Desde que David fue ungido hasta su muerte,
tuvo experiencias bastante duras. En este cuadro él
prefiguró a los ungidos de Jehová, la nueva creación en
curso de preparación.
David escribió y cantó muchos cánticos proféticos
relacionados con el Poderosa Sér que prefiguró . Por
ejemplo, David escribió: "Jehová dijo a mi Señor:
¡ Siéntate a mi diestra hasta tanto que ponga a tus ene-
migos debajo de tus pies !" (Sal. 110: 2). De este
modo habló David con respecto al reino del Poderoso
que es la Cabeza de la nueva creación. Por esta razón
los miembros de la clase 1mgida leen los Salmos con
entendimiento y esos Salmos les traen gran consuelo y
g()ZO.
Muchos siglos pasaron desde el tiempo en que Dios
hizo la promesa a Abraham; entonces .Jesús vino a la
tierra. El nació de una mujer. Según el orden natural
de las cosas El fue de la tribu de Judá, un hijo o des-
144 La Creación

cendiente de David. El fue un hombre perfecto y en El


no hubo pecado. A la edad de treinta años fue ungido
como Rey y como tal se presentó a la nación de I srael,
siendo rechazado ·por ella. Poco tiempo después sufrió
una muerte ignominiosa, en la cruz.
Algunos de los sinceros y fieles descendientes de
Abraham esperaban que Jesús fuera el rey de Israel y
que El sería quien les traería las por tan larcro ti empo
esperadas bendiciones. Dos de esos fieles hombres di-
jeron después de su crucifixión : "Nosotros eSperábamos
que El era aquel que había de redimir a I srael." (Luc.
24: 21 ). Aun cuando El era el Rey ungido, sin em-
bargo no babia llegado el tiempo debido para que su
gobierno fuera establecido y estos fieles discípulos aún
no habían entendido tal cosa. Pero en el Día del Pen-
t ecostés, ellos comenzaron a entender. 'Y ahora ha
llegado el tiempo para el comienzo del cumplimiento
de estos cuadros.
Si un justo gobierno hubiera sido establecido en la
tierra, y si la gente lo hubiera aceptado y hubiera hecho
t odos los esfuerzos posibles para guardar sus leyes,
¿hubieran recibido las bendiciones prometidas? La
respuesta es nó. Y damos tal respuesta por la razón
de que siendo imperfectos todos los seres de la tierra,
y todos pecadores, a causa de la heredada imperfección
resultante de la desobediencia de Adán en el Edén,
todos están bajo condena. Sin embargo, no se encuen-
tran individualmente sentenciados, como hay quienes lo
insinúan. Solamente Adán fue juzgado y sentenciado,
pero sus descendientes no lo fueron. Los judíos entra-
ron en un pacto con Dios pero dejaron de guardarlo y
por ello tienen una desaprobación adicional. Toda la
raza humana se encuentra -desaprobada a los ojos de
Dios a causa de ser imperfecta, porque Dios no puede
aprobar una cosa imperfecta. La palabra condenar, · o
condenación, solamente significa un juicio desfavora-
ble. A causa de ser descendientes de Adán, y por lo
La Nueva Creación Prefigurada 145

tanto imperfectos, Dios tiene que juzgar a todos los


miembros de la raza adversamente, es decir, tiene que
desaprobarlos. Esto no se debe a causa de algún acto
directo de parte de cada uno.
Aun los fieles hombres que hemos mencionado, Abra-
ham y otros de esa talla, no pudieron recibir las bendi-
ciones prometidas. Ellos hicieron los mejores esfuerzos
por obedecer a Jehová pero todos ellos murieron en la
fe mas sin recibir las promesas. (Heb. 11: 13, 39). El
Apóstol Pablo indica por qué no pudieron recibir las
promesas. "Habiendo Dios provisto para nosotros una
cosa mejor, para que ellos no fueren perfeccionados sin
nosotros." En este texto "nosotros" se refiere a la
nueva creación. (Heb. 11: 40). Que la raza humana
estaba desaprobada ante Dios a causa del pecado se hace
evidente por los siguientes textos bíblicos: "He aquí,
en iniquidad nací yo, y en pecado me concibió mi ma-
dre" (Sal. 51: 5) y "Por tanto, de la manera que por
medio de un solo hombre entró el pecado en el mundo,
y por medio del pecado la muerte, así la muerte pasó
por sobre todos los hombres por cuanto todos pecaron."
Habiendo todos nacido pecadores están por lo tanto
desaprobados o juzgados adversamente por Jehová, y
para que la bendición pueda 'ser recibida es evidente
que tiene que hacerse la provisión de remover esa causa
del juicio adverso. ~i la nueva creación, ni ningún
gobierno justo podría remover la imperfección de la
raza humana ni traer alguna condición eternamente
provechosa para la gente. Es preciso que haya un
sacrificio por el pecado y ese sacrificio tiene que ser
el exacto equivalente del hombre perfecto que pecó en
el Edén. La ley de Dios exije "vida por vida." (Deut.
19: 21). La ley de Dios es justa y tiene que quedar
en pie. N o puede haber desviación de ella. A causa
de su vohmtariosa infracción de la ley, Adán fue sen-
tenciado a muerte, y le tocaba morir.
Puesto que la imperfección de la raza humana fue el
146 La C1·eación
resultado de ese juicio, era preciso hacer algo en :;n·mo-
nía con la ley de Dios para remover ese obstáculo antes
de poderse recibir la bendición. En completo acuerdo
con su propia ley, Jehová podria permitir que otro hom-
,bre perfecto, un equivalente de Adán, voluntariamente
tomara su lugar en la muerte y de este modo remover
el obstáculo para la bendición de los descendientes' de
Adán. Los mismos términos de la ley divina implicau
que tal cosa podría hacerse puesto que hace la provi-
ción de que una vida debería darse por otra vida. Pero
en la tierra no había ningún hombre perfecto que pu-
diera hacer frente a los requisitos de la ley. Está
escrito: "Ninguno podrá en manera alguna redimir a
su hermano ni dar a Dios su rescate." (Sal. 49 : 7). La
razón es la de que todos son descendientes de Adán.
¿Fracasaría la promesa de Dios a causa de que no
había quien llenara este requisito legal? Era imposible
que fracasara, porque en· su sabiduría y amor Dios habia
hecho provisión para hacer frente a esta emergencia.
Encontramos escrito en su Palabra : "Del poder del
sepulcro yo los rescataré, ele la muerte los redimiré."
(Os. 13 : 14). Esta prom esa de Dios de redimir a la
raza de la muerte y rescatarla del poder del sepulcro
tiene que ser cumplida puesto que la Palabra de Dios
siempre se cumple. ( Isa.. 55 : 11). Es inmediatamente
aparente a todo estudiante que . el punto céntrico del
plan de Dios para la bendición de la raza humana se
encuentra precisamente aquí. Es razonable esperar que
algunos de los cuadros dados por Dios prefiguren este
punto, y tal cosa encontramos, porque la mar·avillosa
provisión para ese gran rescate y ofrenda por el pecado
en provecho del hombre la encontramos prefigurada y
registrada en la Palabra de Dios. Esos cuadros o som-
bras fueron hechos por Jehová, usando para ello a su
pueblo escogido, con el fin de capacitar a todo aquel
que sinceramente basca la verdad en este tiempo a gue
entendiera el gran plan de •Dios. Al entender este plan
La Nueva Creación P1·efigurada 14'1'

el cristiano puede darse cuenta de que en verdad Dios


es amor y que ha hecho amplias •provisiones para la
bendición de todas las familias de la tierra.
Por largo tiémpo ha sido la costumbre del clero el
arrogarse para ellos exclusivamente la habilidad de in-
terpretar las Escrituras. Algunos de ellos dicen que
cualq1lier persona; por sus propios esfuerzos, • puede
llevar a cabo su propia salvación. El argumep.to que
presentan es el de que Je. ús fue lill ejemplo á los
hó¡:nl:¡resl pero que no hay eficacia en lá sangre que El
der~am'o. Estas h'ombres, por medio de sus falsos razo-
namientos, 1'la.n destruido la fe de mucha gente en lo
qué a la Palpbra. de Dios toca y han sido usaclps por el
Diablo para cegar . á los hombres a ·la parte más· vital
del plan ele Dios en cuanto a la raza humana. · 1

Lo;; cua~lros examinados en este capítnlo muestran


que J ehov:i Dios p'r efiguró ·una ''simiente," la cual ' es
la nueva hreación, y el establecimientó ele un ju¡;;t.o go-
l:¡iemo en provecho de 'la l¡umanidad, pero que antes de
que estas. cosas entraran im operación era preciso• <]'~le
se llev¡:tra a cabo una ofrenda por el pecado. rran cla¡
ramente está esto mostrado ep. las E~crituras por medio
de los cuadros que prefiguran el rescate y'la o:frenda por
el pecado, que no hay lugar a eluda. l~n 'proporción a
que uno ve esto se regocija en gran manbra por esa
rüanifestación ele amor de parte de J éhová en ·proveer
los medios para la salvación del hombre. Y no sola-
mente ha hecho El esa provisión sh1o que permite al
qi.le sinceramente busca la ·verdad que examine lo que
El ·hizo escribir, haee siglos y se a.perciba de los majes-
tuosos pasos de aYance en el desanolJ.o del maravilloso
programa divino. Ahora, en el sigui~hte capítulo, pasa-
remos a examinar los cuadros prefigurando el rescate
:y la ofr~nda por el pebado,' lo qu,e será ile profui1dd in-
1

~erés ara los que buscan ser' instruidos por la Pahtbra


de D'ios. ' ' ' 1
' • ~ ,,
CAPITULO VII

Un Perficto Sacrificio
EHOVA es la fuente de la vida. (Sal. 36: 9; Deut.
J 30 : 20; Job 33 : 4). El es el gran Dador de vida,
y sólo El puede legalmente privar a alguien de ella.
Si la vida se transmite de un sér a otro se debe sola-
mente al hecho de que Dios ha delegado esa facultad a
algunas de sus criaturas. La vida no solamente signi-
fica la existencia, sino también el derecho a esa exis-
tencia. La raza humana ha existido por varios siglos,
pero ha carecido del derecho a la vida, y por lo tanto
no ha gozado de ella.
Cuando Adán fue creado, tenía vida porque existía y
porque tenía el derecho de existir, derecho que había
recibido de Jehová. Nadie, a no ser Jehová, podría
privarlo de ese derecho. De haber sido obediente hu-
biera continuado poseyendo ese derecho. Dios le había
hecho presente que la infracción de la ley divina resul-
taría en la pérdida de su vida. Puesto que Adán violó
esa ley, el derecho a la vida le fue quitado y al debido
tiempo cesó de existir. Solamente los justos tienen el
derecho de vivir. Desde el momento en que Adán fue
sentenciado, Adán fue · injusto. En esa condición le
nacieron sus hijos, y puesto que Adán no podía trans-
mitir el derecho a la vida, sus hijos nacieron sin ese
derecho.
El mayor deseo del hombre ha sido el de que pudiera
gozar de vida en toda su plenitud. Puesto que ha sido
incapacitado a causa del pecado, y puesto que no tiene
l~ habilidad de obtener la vida por sus propios esfuer-
zos, la pregunta de vital interés para el hombre es:
¿ Cómo puede la raza humana obtener vida en su pleni-
148
Un Perfecto Sacrificio 149
tud ? El Hijo de Dios contestó esa pregunta; su res-
puesta la encontramos registrada por el Profeta David,
quien prefiguró a Jesús : "11fe mostrarás la senda de
la vida." (Sal. 16: 11). Más tarde Jesús, en beneficio
de la raza humana, dijo: "Y esta es la vida eterna, que
te conozcan a 'l'i, sólo Dios verdadero, y a Jesu-Cristo,
a quien Tú enviaste."-Jn. 17:3.
Sin apercibirse de la provisión hecha por Dios para
alcanzar la vida nadie podría obtenerla. Está escrito:
"El dón gratuito de Dios es vida eterna por J esu-
Cristo nuestro Señor." (Rom. 6: 23; 5: 18). Es im-
posible recibir el dón o dádiva de la vida eterna sin
conocer a Dios ni las condiciones que El impone como
autor de él. ¿Para qué, entonces, desperdiciar tiempo
con las teorías de los hombres concernientes a la vida,
presentadas por clérigos u otras gentes que a si mismos
se creen sabios? Esas teorías son peores que inútiles.
Los verdaderamente sabios se esfuerzan por enterarse
de los métodos de Dios y tratan de obedecer las reglas
que los gobiernan. Con el fin de que el hombre pueda
hacer uso de su privilegio de aceptar o rechazar la senda
que conduce a la vida, Dios ha hecho provisión para la
salvación del hombre y para que éste adquiera el cono-
cimiento necesario. Cuando se apercibe de que Dios
ha provisto un medio para que alcance la vida eterna,
y que la puede obtener al aceptarlo y obedecer los re-
quisitos, si comienza a obedecer entonces principia a
andar en la senda que conduce a la consecución de lo
que desea.
A causa de ser todos imperfectos es bastante difícil
entender. (Heb. 5: 11, 12). Además de esto, Satanás
ha impedido que el hombre entienda la verdad. Un
requisito indispensable para entender la verdad es que
uno sinceramente desee conocer a Dios y sus propósitod
con referencia al hombre. Con el fin de ayudar al hom-
bre a entender, Dios ha hecho algunos cuadros prefi-
gurando sucesos por ocurrir. Estos cuadros no son
150 La Oreación

parte del plan de Dios peTo son lecciones objctivns


mostrando el desarrollo de su plan. E stos cuadros son
provechosos poTque ( 1) instruyen al que busca la veT-
dad, y (2) establecen la fe en Dios.
"Sin fe es imposible agradaTle," dice el Apóstol Pa-
blo, porque de ningún otro modo puede uno conocer
el camino que condu ce a la vida. ( Heb. 11 : 6). "La fe
viene por el oir, y el oir es por medio de la Palabra de
Dios." En otras palabras, tenemos que t ener conoci-
miento, y este conocimiento tiene que proceder ele unfl
fuente verdadeTa. La Palabra ele Dios es esa fuente
verdad era, y no hay ninguna otra. Para poder tener fe
el hombre tiene que poseer ese conocimiento verdadero.
Dios, en su infinita bondad, ha provisto los medios
para que el que busca la verdad pueda obtener fe y
crecer en ella.
Puesto que Dios hizo la promesa de rescatar al hom-
bre, le es preciso proveer un rescate y así comprarlo.
(Os. 13 : 14). Rescate quiere decir un exacto precio
correspondiente. Un hombre perfecto violó la ley ele
Dios y por ello pagó con la muerte. La ley de Di os es
su volunt ad expTesada. Al fijarnos en la provisión de
redención encontramos que la ley de Dios hizo la provi-
sión de "vida poT vida." (Deut. 19: 21) . · Interpretado
esto debidamente, la ley dice que la vida de un sér 1m-
mano perfecto tic11e que ser dada como sustituto o en
lugar de la vida perfecta que Dios quitó a Adán a causa
de su desobediencia.
Sacrificar significa el acto de degollar una víctima,
e implica el hecho de ofTeceT o presentar la vida de esa
víctima a la per. ona autorizada para recibirla. Puesto
que una vida humana tiene que ser dada para proveer
el rescate del hombre, es imprescindible que haya un
sacrificio de una vida humana perfecta. Y puesto que
la pérdida de vida que sufrió Adán fue ocasionarla por
el pecado, se sncn en consecuencia qu e el sacrificio de
la vida humana periectn para proveer el re cate o ·precio
Un Perfecto Saorificl~o 151

:incl11ye también el acto de la o:frenda o presentación del


valor de esa vida perfecta usada como ofrenda por el
pecado. Y siendo J ehová el único autorizado p~ra reci-
bir la of:re11da por el pepado, esa ofrenda tiep.e que se
presentada por alguno que tenga acceso ,hasta donde
Jehová se encuentra.

La vida se encuentra en la sangre. Por esta razón
Dios ordenó que la sangre de ning1ma criatura se debía
comer. ( Ex. 9: 4; Deut. 12: 23 ). "Porque és la vida
de toda carne; su sangre lo mismo es que su vida. Por
t~tn to he dicho a 1los hijos de Israel : N o comeréis la
sangre; todo .aquel que la comiere será destruido." (Lev.
17 : 14). El der:r:amarse la sang1·e de una criatwra 'sig-
nifica que ha sido degollada o sacrificatla, y ql'te la vida
ha sido derramada. Vemos entonces que l a •provisión
hecha para un rescate y una ofrenda por el pecado (te
necesidad inc'hly~ el aetramamiento de la sángre "de un
sér humano pe1•fecto. '
Algunos miembros: del clero p predicadores, que no
tienen rfe en Dios ni el ,sincero deseo de honrar •su nom-
bre, se escandalizlj.Il con pretendido horror cuando se les
ll).enciona el dernunamiento de sa-ngre en cone>..'ión con
los animales usados para las ceremonias en el día de la
expiación. Si estos santimonias clérigos creyeran la
;{3iblia, la que pretenden enseñar, se ..enterarían de que
los judíos al saqrificar esos animales en el , dia de la
expiación lo hacian porque se les babia orde~ado ha-
cerlo. (Lev. 17: 11). Puesto que se pacía en obedien-
cia a la ley de ~íos era perfectamente propio el J;lacerlo.
"En cuanto a D~os, p~rfec.to es ~u camino. (Sal. 18 : 30 ·
2 Sam. 22: 3¡ ). 'rodas .las obras de Dios son perfectas.
(Deut. 32 : 4; Job 37 :16) .. "Porque rflcta es la Pala-
bra de Jehová. (Sal. 33 : 4) ~ "La ley de Dios es per-
fecta ." (Sal. 19: 17). A pesat: de todas estas declara~
4(iones de la Palabra de Dios un gn1po de hombres se
presenta ante la gente y critica~ el sacrificio de animale,s
152 La Creación

que Dios ordenó se hiciera. Seguramente que nadie


podrá decir que los tales son representantes de Jehová.
Ley significa una regla de acción. Cualquier regla
de acción o ley que Dios haya hecho para la consecución
de la vida eterna es perfecta y justa, no importa la
opinión de los hombres. Los medios que Dios ha de-
signado son los que cubren todo punto, y no hay ningu-
nos otros. Cualquier ley o regla de acción que Dios
haya hecho para prefigurar la manera de obtener la
vida, Dios ha tenido para ello buenas rawnes y esa ley
es justa y verdadera. Su ley o regla de acción ordenaba
a los judíos el que hicieran ciertas cosas que se consti-
tuyeron en cuadros vivientes o vistas cinematográficas.
Es preciso notar (1) el cuadro, (2) lo que ese cuadro
prefiguró, y (3) !a realidad o cumplimiento. El que
entiende esto en el orden dado tendrá su fe aumentada
en gran manera, y amará más y más a Dios, deseando
andar en el camino que El ha ordenado.

LA. PASCUA.
Cuando los israelitas estaban para salir de Egipto,
J ehová preparó e hizo un cuadro en extremo significa-
tivo. La importancia de este cuadro se insinúa por el
hecho de que Dios ordenó que ese día debería marcarse
entre los israelitas como el comienzo de sus meses. El
cuadro comenzó en el día diez del primer mes y llegó a
su punto culminante en el día catorce. Ese mes fue el
mes de Nisán, y corresponde aproximadamente a nues-
tro mes de Abril. De los israelitas se exigió que repi-
tieran ese cuadro al mismo tiempo por todos los años en
todas sus generaciones. -Ex. 12: 1-14.
Hablando a los israelitas por conducto de Moisés Dios
ordenó que en el día diez del primer mes cada una de las
familias de los israelitas escogiera un cordero para sacri-
ficio. Obedeciendo a la orden dada Moisés juntó a los
ancianos de Israel y les dio instrucciones en cuanto a
lo que deberian hacer. Las instrucciones fueron:
Un Perfecto Sacrificio 153
1
"Vuestro cordero será sin tacha, macho del primer
año, de las ovejas o de las cabras le tomaréis. Y le
guardaréis basta el día catorce de este mes ; entonces le
degollará toda la Congregación de Israel, a la caída de
la tarde. Y tomarán de la sangre, y hi pondrán en los
dos postes de la puerta · y en el dintel, de las casas en
que le han de comer. Y comerán la carne en aquella
misma noche; asada al fuego, con panes ázimos, y con
yerbas amargas la comerán. . • . De esta manera, pues,
le comeréis : Ceñidos vuestros lomos, con el calzado en
vuestros pies, y el báculo en vuestra mano; y le comeréis
apresuradamente; es la Pascua de Jehová. Porque yo
pasaré por la tierra de Egipto esta noche, y heriré a
todo primogénito en la tierra de Egipto, así de hombre
como de bestia; y en todos los dioses de Egipto ejecu-
taré juicios. Yo Jehová.
"Y la sangre os servirá ·de señal en las casas en donde
estuvieres; y yo veré la sangre, y os pasaré por alto, de
modo que no habrá entre vosotros plaga destructora,
cuando yo hiera la t ierra ele Egipto. Y tendréis este
día por memoria, y lo celebraréis como fiesta solemne
a Jehová durante vuestras generaciones; por estatuto
perpetuo celebraréis esta fiesta. • . . Y será que cuando
os preguntaren vuestros hijos: ¿Qué dais a entender
con este acto? responderéis: Sacrificio de la Pascua es
a Jehová, el cual pasó por alto las casas de los hijos ele
I srael en Egipto, cuando iba hiriendo a los egipcios, y
libró nuestras cas:is. Entonces el pueblo inclinó la
cabeza y adoró."-Ex. 12: 5-8, 11-14, 26, 27.

EL CUADRO
No hay ·prueba ninguna indicando que los judíos en-·
tendieron el significado de lo que iban a hacer. Por
conducto de Moisés tenían la orden de Jehová y eso les
era suficiente. A causa ele su fe llevaron a cabo lo que
se requería de ellos. En el día diez de ese mes cada
familia escogió un cordero sin tacha. Por la tarde del
154 La C1·eación
día n.lorce fue degollado. Luego se puso.la sangre en
1 dintel de la puel'ta y en los dos postes a los lados de
la puerta. Luego, sin partir ,ningún hueso, fue asado al
fuego. '1
Todos los miembros de la familia se reunieron y todos
juntos comieron del cordero con pan sin levadura y con
yerbas amargas, y esperaron que el Angel de J ehov4
pasara en su misión. A media noche el ángel, en repre-
sentación ,de Jehová, pasó por la tierra de Egipto y
degolló a los primogénitos de toda familia¡egip.cia, desde
el primogénito del :tey hasta el primogénito de la familia
más humilde. Los judíos que habían obedecido las ór~
deQ.es de Dios habían puesto de la, sallgre del cordero en
el dintel y postes· de sus puertas, y fin donde esa sangre
se encontraba, en obediencia a las órdenes de Dios, el
Angel de J ehová no llegó y el primogén'to de es11. fami-
lia no murió.-,-E.·. 12: 28-30. · . · '
¿ Pudiera décirse que los israelitas fueron protegidos
y sus primogénitos salvos a causa de la rsangre del cor-
dero? Nó; •la sangre del animal no los sa~vó, sino fue
Dios quien los salvó a causa ele su obediencia y porque
tuvieron fe en lo que esa sangre .representaba. La obe-
d,ienci~ a las órdenes. qe Dios probó su fe. La sangl'e
del cordero, derrap.1a(\a y puesta sobre los postes de sus
puertas y el dililtcl, representó más de lo que ellos podia:q
entender. Al• debido tiempo de Dios El permite que el
hombre entienda el pleno significado de estas cosas.

¿QUE PREl!'IGURO?
El sacrificio de rescate es la cosa más importante pre-
figuarada por este cuadro. Muchas otras cosas de me-
nor importancia también se prefiguran, pero lo más
importante es el rescate. El cuadro prefiguró que en
algún tiempo futuro una víctima se escogería para sacri-
ficio· y que esa víctima sería sacrificada, \jiendo su san-
gre derramada y que. esto. sería de gran valor para otros.
Implicó .que solamente los que htvi,eran d.e, en .esa ,vida
Un Pe1·tecto Sac·rificio 155

derramada encontrarían el camino que conduce a la


vida eterna.
La orden fue la de que un cordero del primer a.íio se
escogiera. Un cordero es una criatnra inofensiva. La
' 'í.ctima prefigurada por el cordero debería ser inofen-
siva. La orden además proveía que el cordero fuera
sin tacha, lo cual prefiguró que la víctima para el sacri-
ficio sería pedecta y sin mancha o pecado. El cordero
se escogió cuatro días antes de ser degollado, lo cual
prefigmó que la víctima que se representaba sería es-
cogida con anticipación cuatro días literales, y también,
cuatro días simbólicos, de mil años cada uno.
El derramamiento de sangre J e la víctima prefi gmó
que la sangre de la víctima representada tendrí a que
derramarse, y, puesto que la sangre es la vida, prefiguró
que la víctima representada pondría su vida en benefi-
cio de otros. 'l'odos los miembros de la familia tenían
que comer de la c.arne del cordero asado. El comer algo
implica recibü o apropiar alimento para sostener la
vida. Esto prefiguró que para obtener la vida todos
tendrán que recibir y participar por la fe lo represen-
tado por la carne del cordero.
La pascua fue el comienzo de la ley de Dios a I. rael.
(Oál. 3: 17). E:a ley fue dada con el fin ele prefigurar
cosas venideras. ( Heb. 10: 1). La ley requería que los
judíos repitieran esta misma ceremonia, al mismo tiem-
po, todos los años, lo cual implica que tendrían que
continuarla hasta que llegara lo prefigurado por ella.

LA REALIDAD
La realidad prefigurada por el cordero pascual ofren-
dado per I rael fue el am ado Hijo de Dio', J csús. La
sangTe del cm·dero en e te cuadro es importante por lo
que repre ·entaba. La sangre del amado Hijo de Dios,
derramada en sacrificio, es de la mayor importancia
pa.r a tod.os los miembros de la raza humana. Los qu e
de entre el clero pasan por alto o hacen poco a}lrccio n
156 La Creación

la sangre de Jesús, como el gran precio di¡! rescate del


hombre, hacen violencia a la Palabra de Dios y ayudan
a Satanás en la tarea de apartar a la gente del único
medio y camino para alcanzar la vida eterna.
La ley de Jehová exigía de los israelitas que hicieran
preparativos para la pascua. El jefe de la familia re-
presentaba a Jehová. Cuatro días antes de que se lle-
vara a cabo el sacrificio se escogía el cordero. Cuatro
días literales antes de la muerte de Jesús El fue ofre-
cido a la nación de Israel, y cuatro mil años antes
Jehová lo escogió como el Redentor del hombre. De
este modo, los cuatro días, tanto los literales como los
simbólicos, se · cumplieron en Cristo Jesús.
El cordero pascual tenía que ser un macho sin tacha,
y así lo fue el que el cordero prefiguró. ¿Por qué la
víctima para ese sacrificio tenia que ser un hombre per-
fecto? Porque el hombre perfecto Adán violó la ley
de Dios y como consecuencia le fue quitada su vida.
Puesto que la ley de Dios requiere "vida por vida," el
que sustituyera a Adán tenia que ser un hombre per-
fecto. El redentor de Adán y de su raza tenía que ser
un hombre perfecto, ni más, ni menos.
N o habiendo un hombre perfecto en toda la tierra,
ninguno estaba en condiciones de redimir a su hermano.
(Sal. 49: 7). Todos estaban bajo la condena a causa
de las imperfecciones resultantes del pecado de Adán.
(Sal. 14 : 3) . El deseo del horn bre es y siempre ha
sido el tener vida eterna. Dios ha prometido bendecir
a todas las familias ele la tierra, y esa bendición signi-
fica una oportunidad para alcanzar la vida. Dios
prometió redimir de la muerte a la raza humana. ¿Qué
podía hacerse para ello ? .
Jehová envió a su amado Hijo, el Logos, a la tierra.
¿Era necesario que el Logos muriera para tornarse en
un sér humano? N ó. Su derecho a la vida y su exis-
tencia fueron transferidos de la naturaleza espiritual a
la humana. El organismo determina la naturaleza de
Un Perfecto Sacrificio 157
la criatura. El fue engendrado como un nmo en el
vientre de María~ efectuándose esto por medio del poder
invisible o santo espíritu de Dios. Al debido tiempo
nació Jesús. Por medio de la directa operación de su
poder Dios dió al niño J esús vida y el derecho a ella, y
por esta razón nació como un niño perfecto. El hecho
de que Jesús nació de una mujer imperfecta no implica
que El era imperfecto en lo más mínimo. El derecho
a la vida y a la existencia que recibió, viniendo de J e-
·hová, el único de quien la vida emana directamente,
constituyó a Jesús per:l:ecto en todo respecto. Jehová
no podía hacer una cosa imperfecta porque todo lo que
El hace es perfecto. Su obra es perfecta.-Deut. 32 : 4.
Las Escti:turas identifican al Lagos con el amado
Hijo de Dios, el principio de la creación. De El está
escrito: "El Verbo se hizo carne, y habitó entre noso-
tros, y vimos su glotia," y también dice la Escritura
que El estaba lleno de gracia y de verdad. (Jn. 1: 14).
"Mas cuando vino la plenitud del tiempo, envió Dios
a su Hijo, hecho de mujer, hecho bajo la ley." ( Gál.
4 : 4) . Nació como sér humano perfecto para ser el
Salvador de la humanidad. (Luc. 2: 11). De este modo
J ehová preparó Uno que poseía todas las cualidades y
requisitos necesarios para cumplir lo prefigurado por el
·cuadro, por completo competente para proveer el precio
de rescate por la raza humana.-Heb. 10: 5.
Otro testimonio subsecuente, registrado en las Escri-
turas, muestra fuera de duda que el cordero pascual
representó al Hijo ele Dios, y que Jesús, el amado de
Jehová era la realidad. Juan el Bautista, el precursor
de Jesús, anunció su venida a cuantos quisieron oir.
Leemos: "Al día siguiente, Juan ve a J esús viniendo
hacia él, y dice: ¡ He aquí el cordero de Dios que quita
el pecado del mundo ! Este es aquel ele quien yo decía :
Después de mi viene un Varón que se me adelanta;
porque era antes que yo. : • • Y yo le he visto, y he
testificado que éste es el Hijo de Dios. Al día siguiente
158 La Creación

Juan · estaba otra vez en el mismo lugar¡ y dos de sus


discípulos; y mirando a. Jesús que iba .pasando, dijo :
¡He aquí el Cordero ele 'Dios !"-Jn. 1: 20, 30; 34.-36.
' Las Escr'ituras adern'ás · id'Qntífican a Jesús como 'uno
sin mácula, preordertado por' Dios 'para s~r el Redentot
de la human\dad y por lo t anto prefigurado por ePcor-
dero pascual. "Sabiendo G¡ue fuisteis redimidos 1 dP.
vuestra vana manera de vi vi.r, que . vuestros padres os
legaron, no con cosas conuptiblcs como phlta y oro, Bino
con pr,eciosa sangre, la de Cristo, como ele un cordero
sin .clefecto e ii\macu.lado, conocido en verdad en, Ja' prcs-
ci encia . de Dios, ante.s de la fundación . del munc1o, pero
manifest ado al fin , ele los tiempos.".- 1 Ped. 1: 18-20.
Bl animal en el cuadro ·era sin · m~'!J.,cha ni defecto.
J esús fue "Santo; inocente, inmaculado, apartadQ ele los
pecadores, y 4echo más excelso que los cielos.:' v( Heb.
7: 28 )'· De este modo, (')l ,testiiJlonio concluypnt~ es al
efecto que .el cordero prefigurab~ a Cristo J esús, el HijG
ele Dios, Jesús ·comenzó su mini sterio cua:ndo cumplió
treüÚa años de edad. Siendo perfecto, porque su rvida
h,abía sido recibida directam~nte de J ehová, ,y estando
por lo tm1to en condiciones G1~ redimir a la raz{t hu mana~
dio t estimonio ele que · habí,a, venido con ese fin. "El
J~lijo del hombre' no vino para ser servido si~o para
servir y para dar su vida en rescate por muchos."---:i\J:ü.
20:28.
1 Puesto. que la ley de . Di:os ,exigía que los juclío.s obser-
varan la pascua y mataran eJ. · corcl~ro en el día catorce
ele Nisán, era necesar'io que Jesús, el ve~·<ladeJ.:o cordero,
n1uriera .en el día catorce de Nisán. El comienzo del
día judaico es a ,las ,sois, de la tarde. Como Jesús había
•n.acid0 , bajo · la ley, t e:uia que observu.r . la· ·pascua. AJ
d!)bido tiempo J'esú's se sentó con sus discípulos a 9orner
el co1•dero pasaual. En esa oca;¡;ión dijo a su~ di¡;cípul-
os: "Con deseo he de$eado .eon;1er con vosotros esta
pascua, arntes que padezca.:' ! {Luc. · 22: ;¡p•). Esa· •fue
Un Perfecto Sacrificio 159
la última vez que el. cuadro fue propia y depidamente
repetido.
Más tarde, ¡y en el mismo día, Jesús fue crucificado.
En ese tiempo El cumplió en todas sus partes el cuadro
del cordero pascual. Lo que el con1ero pascual había
prefigurado, allí, a la muerte del amado Hijo 1de Dios,
llegó a ser una reaJidad. Jehová hace todas las cosas
precisamente a tiempo. Jehová mismo no quitó la vicln
a su amado Hijo, sino . que permitiq que otros lo hicie-
ran, pero El supervisó las co~as de tal modo que se lle-
vara a cabo precisamente a tiempo el cuadro represen-
tado por el cordero pascual.
Cuando el cordero pascual en el cuadro fue degollado,
no presentó protesta alguna. Por medio de su santo
profeta Dios .describió a su Hijo como un cordero que
fue hasta la muerte sin protesta alguna: "Fue oprimido
pero El mismo se humilló, y no abre su boca; como cor-
dero~ es conducido al matadero; y como es muda ~a
oveja ante los que la trasquilan, así El no abre su
boca."-Isa. 53 : 7.
Uno de los títulos que se dan al Hijo de Dios es el
de " El Cordero." De este modo El es una vez más
identificado con el cordero pascual. De El se escribió:
"Ifll Cordero inmolado desde la fundación del mundo."
(Apoc. 13 :8). En la misma. conexión está identificado
como el León de la tribu ele J udá ele quien J acob pro-
fetizó. (Gál. 49 : 10). Se muestra como el prefigurado
por David, el poderoso O:ficial Ejecutivo de Jehová a
quien se le rinde honor como el fiel y verdadero agente
de Dios en llevar a cabo su plan. f
De El está escrito: "He aquí que el León ele la
Tribu de Juclá, la Raíz de David, ha prevalecido para
abi'ir el libro y para soltar sus siete sellos. Y vi, de pie
en medio de ellos, entre el trono y los cuatro seres vi-
vientes y los ancianos, a un Cordero que parecía como
si hubiese sido inmolado. . . . Digno es el Cordero
que ha sido inmolado, de recibir el poder, y la riqueza,
160 La Creación

y la sabiduria, y la fortaleza, y la honra, y la gloria, y


la bendición." ( Apoc. 5: 5, 6, 12). El Apótsol Pablo,
como inspirado testigo de Jehová, también identifica
a Cristo Jesús como el prefigurado por el cordero pas-
1
cual: "Porque Cristo, nuestra pascua, ha sido sacrifi-
cado."-1 Cor. 5: 7.

EL PRECIO DE REDENCION
No se pierda de vista el hecho de que lo perdido por
Adán fue la vida y que es la vida lo que el hombre
anhela con más vehemencia, y que la única manera de
obtener la vida la prefiguró Dios por medio del sacrifi-
cio del cordero pascual, el cual representaba a su amado
Hijo. Esto explica el por qué el Logos fue hecho carne
y como hombre llevó el nombre de Jesús. "~iendo he-
cho en semejanza de los hombres, y siendo hallado en
condición como hombre, humillóse a si mismo, hacién-
dose obediente, hasta la muerte, y muerte de cruz.''
(Fil. 2: 7, 8). La incapacidad de la raza humana
solamente podía ser quitada por medio del valor del
sacrificio de una vida humana perfecta. La familia
humana se compara con un rebaño de ovejas que se han
extraviado por haber nacido en pecado y haber sido
concebidos en iniquidad. (Sal. 51: 5). Dios ha hecho
la provisión de remover la imperfección de la raza hu-
mana por medio de su amado Hijo que fue prefigurado
por el cordero.-Isa. 53: 6.
Mientras J esús estuvo en la tierra habló de la raza
humana como ovejas y se dio a si mismo el titulo de
pastor, y también, claramente mostró que el camino que
conduce a la vida es por medio de su sacrificio. "Jesús
por lo tanto les dijo otra vez: En verdad os digo: Yo
soy la puerta de las ovejas. • • . Yo soy la puerta;
por mi si alguno entrare, será salvo ; y entrará, y saldrá,
y hallará pastos. El ladrón no vine sino para hurtar, y
matar, y destruir: yo he venido para que tengan vida,
Un Perfecto Sacrificio 161

y para que la tengan en abundancia. Y o soy el buen


pastor; el buen pastor pone su vida por las ovejas.
El Hijo de Dios fue enviado a la tierra a proveer el
precio de redención por la humanidad. El no fue
obligado a venir a la tierra · y morir, sino que El vino
a hacer la voluntad de su Padre, y por esta razón su
Padre le ama. acomo el Padre me conoce a mi, así
también yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las
ovejas.••• Por esto el Padre me ama, por cuanto yo
pongo mi vida para volverla a tomar. Nadie me la
quita, sino que la pongo de mÍ mismo. Poder tengo
para .ponerla, y poder t engo para tomarla otra vez.
Este mandamiento recibí de mi Padre."
:J!e los israelitas se exigió que asaran el cordero y que
no ro:t:n pieran ninguno d~ los huesos, y que comieran
la carne junto con pa.n sin levadura. Por medio de su
profeta Dios mostró lo prefigurado por todo esto. (Sal.
34: 20 ). Cuando Jesús murió en la cruz, como el ver-
dadero cordero, no se rompió ninguno de sus huesos. '
aMas cuando vinieron a Jesús y vieron que ya estaba
muerto, no rompieron sus piernas. . . . Porque estas
cosas sucedieron para que se cumpliese la Escritura:
Hueso de El no será quebrado."-Jn. 19: 33, 36.
El pan que los judíos t enían que comer con el cor-
dero era pan sin levadura. La levadura es impura, y por
lo tanto es un símbolo apropiado del pecado. El pan
sin levadura prefiguraba la pureza de J esús. El pan
también fue una figura representando el cuerpo de
Jesús dado por la vida del mundo. De El mismo dijo
J esús : avuestros padres comieron el maná en el de-
sierto, y murieron; este es el pan que descic:-n de del
cielo para que uno pueda comer de él y no morir. Yo
soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno co-
miere de este pan, vivirá f!ternamente ; y el pan que yo
daré, es mi misma carne, la cual daré para la vida r1el
·mundo. . . . El que come mi carne y bebe mi sangre,
tiene vida eterna; y yo le resucit~ré en .el último día.
162 La Creación

Porque mi carne es verdadero alimento, y mi sangre es


verdadera bebida."-Jn. 6: 49-51, 54, 55. ·
La vida está en la sangre. La sangre derramada del
cordero indicó su muerte. La sangre que Jesús derramó
indicó la entrega de su vida como hombre. Profética-
mente se escribió de El: "Derramó su alma hasta la
muerte." (Isa. 53: 12). Este t estimonio muestra que
el punto céntrico del plan de Dios para la bendición de
todas las familias de la tierra ha sido y aún es la muer te
en sacrificio de su Hijo; muestra también que Dios
hizo por adelantado un cuadro de esto por medio del
sacrificio del cm·dero pascual, el que, bajo la ley, tenía
que ser repetido cada año hasta la venida ele la r ealidad,
Jesús; que Dios envió a su amado Hijo al m1mdo a que
muriera para que proveyese el precio de rescate de la
humanidad; que el derramamiento de la sangre del
c01·dero representó el derramamiento de la sangre de
Jesús, la cual fue derramada por nosotro , y que a
causa de su amor por la raza humana Dios hizo todos
estos arreglos. . .
Por eso está escrito: "Porque de tal manera amó
Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito; para que
todo aquel que cree en El, no perezca, sino que t enga
vida eterna. Pues qu e Dios no envió a su Hijo al
mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo
sea salvado por medio de El." (Jn. 3:16, 17). En
vista de todo este testimonio bíblico, ¿cómo es que al-
gunos pueden decir que la sangre ele J es ús no tiene
valor ninguno en cuanto a proveer para la humanidad
la manera para alcanzar la vida? ¿Puede sinceramente
alguno que se cree un predicador ele la Palabra de Dios
pretender que la sangre ele Jesús no es esencial para
dar vida a las fanúlias de la tierra·?
Redimir proviene de una palabra que litemlmente
significa soltar; implica la provisión de un precio o va-
lor suficiente para comprar la cosa que se desea La
preciosa sangre de Cristo, vertida en la cruz, proveyó
Un Perfecto Sacrificio 163

ol precio de redención para la raza humana. Su vida


humana perfecta correspondió con la perfecta vida que
Adán gozó en el Edén y por lo tanto satisfizo los requi-
sitos de la ley. Proveyó el precio para comprar vida
para la raza humana. "Porqué fuisteis comptados a
gran precio; glorificad pues a· Dios con V11estros cuer-
pos." ( 1 Cor. 6 : 20) . E sto corresponde con otro tes-
timonio que dice: "Fuisteis redimidos con la preciosa
s~mgre de Cristo."-1 Pcd. 1: 18, 1,9.
También está escrito de Jesús: "Fuisteis inmolado,
y has adquirido para Dios con tu misma sangre, hombres
de toda tribu, y lengua, y pueblo, y nación." ( Apoc.
5 : 9). El, por la gracia de Dios, probó la muerte por
todos. (Heb. 2: 9) . Fue el hombre perfecto, Jesús,
d rramando su vida, el que proveyó el precio de reden-
ción por la human idad, y al debido tiempo toda la
humanidad tendrá la oportunidad de saber esto. "Pues
que para todos hay un solo Dios, y un solo Medianero
entre Dios y los hombres, el hombre Cristo Jesús ; el
cual se dio a si mismo en rescate .por todos; de lo que
t estimonio habrá de darse a sus propias sazones."-
'I'im. 2: 5, 6. ,
LA OFRENDA POR EL PECADO
J ehová ha hecho la senda de la vida tan fácil de
di e rnir que no hay lugar a duda Cuando llegue el
debido tiempo de Dios para que todos los hombres se
apcrcib1m ele esa bienaventurada senda, aun los insen-
satos, por lerdos que sean, no se extraviarán. P or
mucl1os siglos Satanás, utili-zando los scrvioios de mac ·-
tros :f:ranclulentos y sus enseñaUZ!\S, ha apl!litado lar;
mente de la _gente de Dios y los ra cegado a la verdad
y s6lo un itúmero reducido ele entre la raza humana hn.
entendido el pln.n de Dio~>. ( 2 Cor. 4: 3; 4). Jehová
no ha impeclülo a Satanús el llevar u cabo . todo esto,
pero ha recompensado a l0s que diligentqmente se hau
164 La Creación

esforzado por conocer la voluntad de Dios y proceder


confonne a ella.
La era cristiana es un período de tiempo compren-
dido desde la primera venida de Cristo hasta su se-
gunda venida, durante el cual las buenas nuevas han
sido dadas a la gente. Esta predicación de las buenas
nuevas o evangelio ha parecido insensatez a los ojos de
los hombres que se creen sabios de este mundo, especial-
mente a los que se dan el nombre de modernistas, sabios
y predicadores. A causa de esto el Apóstol escribió:
"Porque la doctrina de la cruz es insensatez a los que
perecen, pero a nosotros que somos salvos, es el poder de
Dios."-1 Cor. 1: 18.
Los modemistas, quienes son sabios en sus propios
conceptos, y se presentan como grandes maestros de la
gente, dicen que es insensato el creer que la sangre de
Cristo tiene que ver con la consecución de vida para la
raza humana. Pero fij émonos en lo que ha dicho Je-
hová: "Porque está escrito: Destruiré la sabiduría de
los sabios, y desecharé la prudencia de los prudentes.
¿Dónde está el sabio? ¿dónde está el escriba ? ¿dónde
está el disputador de este siglo ? ¿No ha tornado Dios
en insensatez la sabiduría del mundo? Porque ya que
en la sabidmía de Dios el mundo por medio de su sabi-
duría no conocía a Dios, plugo a Dios salvar a los cre-
yentes por medio de la insensatez de la predicación."-
1 Cor. 1: 19-21.
Pero ahora, por la gracia de Dios, ha llegado el debido
tiempo en que el diluvio de su verdad y de su luz ba-
rrerá el refugio de las mentiras cegadoras para que la
gente pueda ver el camino verdadero. Toda persona
sensata se da cuenta de que es imperfecta. Todos de-
sean vida y felicidad. Por experiencia y observación
todos se han dado cuenta de que su porción ha sido
tristeza, sufrimiento y muerte. Todo esto se ha debido
al pecado. Ahora J chová dice a todo el que tiene un
sincero deseo de conocer la verdad: "Ven id pues y
Un Perfecto Sacrificio 165

arguyamos [razonemos] juntos. . • . Aunque vuestros


pecados fuesen como la grana, como la nieve serán em-
blanquecidos; aunque fuesen rojos cop1.0 el carmesí,
como lana quedarán. Si fuereis bien dispuestos y obe-
dientes, de lo mejor de la tierra comeréis."-Isa.
1: 18, 19.
El correcto y apropiado proceder del hombre es el
de buscar los caminos de J"ehová y ser obediente a ellos,
en cambio de seguir la sabiduría de los que se constitu-
yen en sabios y almibarados predicadores. Las Santas
Escrituras fueron dadas por inspiración de Dios "para
instrucción en justicia, a fin de que el hombre de Dios
sea cumplidamente instruido para toda buen obra."
( 2 Tim. 3: 16, 17). N o fueron escritas para que unos
cuantos hombres las torcieran y para que hicieran co-
mercio de ellas. Dios ahora invita al hombre a. razonar
·con El, con su Palabra, y no con las teorías humanas.
El cordero pascual se ofrendó en Egipto. Ese país
representaba el inicuo mundo del cual Satanás es el
gobernante. :M:undo significa la organización de hom-
bres en formas de gobierno bajo la supervisión de un
gobernante invisible. La parte gobernanice de la huma-
nidad, que constituye el mundo visible, está compuesta
de los elementos financiero, político y eclesiástico.
Cristo, a quien prefiguró el cordero pascual, fue muertv
en este mundo malo. Por esta razón El dijo a Pilato:
"Mi reino no es de este mundo." X dijo a sus dis-
cipulos: "Vosotros no sois del mundo," "así como yo
tampoco soy del mundo." ( J n. 18: 36; 15: 18, 19;
17 : 14). Cuando el cordero pascual fue degollado en
Egipto y los israelitas salieron y pasaron el Mar Rojo,
el cuadro terminó. Después de esto Dios dio ciertos
pasos para llevar a cabo algunos otros cuadros, y llevó
a cabo algunos otros cuadros ilustrando o prefigurando
otro paso por darse en el camino que conduce a la vida
eterna.
166 1 La C1·eación
EI. T A13ERN ACULO
J ehová ordenó a Moisés el que subiera al Monte
Sinaí. Moisés qbedeció y estuvo en ese monte por cua-
renta días y cuarenta noches. Alli Jehová le hizo saber
su propósito ele que se hiciera un tabernáculo. Luego
le dio instmcciones ele la clase de materiales que debería
recibir de la gente para la construcción de ese taber-
náculo.
"Y Moisés habló a toda la Congregación de los hij os
de Israel y dijo: Esto es lo que ha mandado Jehovú,
diciendo : Tomad de entre vosotros una ofrenda para
J ehová; todo ar:.uel que es de corazón e;·pontánco, traeri
la ofrenda para J ehová; a saber, oro, y plata, y bronce,
e hilo de jacinto, púrpma y escarlata, y lino fino blanco,
y pelos de cabra, y pieles ele carnero teñidas de rojo
y pieles de foca, y mad era de acacia, y aceite para el
alumbrado, y especias para el aceite de la unción, y para .
el efod y para el pectoral. Y todo sabio de corazón qne
hubiere entre vosotros vendrá, y ellos fabricarán todo
cuanto ha mandado Jehová." (Ex. 35 : 4-10 ). Es inte-
resante el apercibirse que Jehová no :forzó a ninguno a
que suministrara el material o trabajo para la edifica-
ción del tabernáculo. 'l'odo tiene que hacerse con vo-
luntad. Jehovú. dijo : "Y todo sabio ele corazón que
hubiere entre vosotros, vendrá., y fabricarán todo cuanto
ha mandado J ehová." Sabiuuría quiere decir el ha r~>r
llSO del conocimiento que se tiene en armonía con la
voluntad de Dios. Las lecciones que entonces se dieron
no tan solo fueron en beneficio de los que participaron
en ellas, sino de todos los que habrían de venir más
tarde. "Porque Jehová es qui en da la sabiduría, y de s11
hoca pToccden la ciencia y la inteligencia. . . . La
di screción vigilará sobre tí, y la inteligencia te guar-
dará."-Prov. 2: 6, 11.
Los que amaban a Dios obedecieron . avinieron pues
:<:::í hombres como mujeres, cuantos tuvieron corazón
espontáneo, tmyendo broches, y pendientes, y anillos y
Un Pm·fecto Sacrificio 167
collares de cuentas,r en fin, toda suerte de alhajas de
oro; es decir, toda persona que presentó ofrenda de oro
a Jehová. Y toda persona en cuyo poder se halló hilo
de jacinto y púrpura y escarlata, y lino fino blanco, ~'
pelos ele cabra, y pieles ele carnero teñidas de rojo, y
pieles ele foca, los trajeron."-Ex. 35 : 21, 22.
Por supuesto que Dios había podido obtener todo
esi:e ,material de alguna otrfJ. manera, pero al permitir a
los ¡nuelitas .el traerlos como una ofrenda redundó en
beneficio de ellos. N o fue este servicio confinado sola-
mente a unos pocos, sino que todos, tanto de e:o.tre la
gente como de entre los que ¡la diri~ían, tomaron parte.
1'odo el que ama:ba a Jehová sirv1ó. J!e esto pueden
aprender una buena lección los que aman al Señor. "Los
príncipes tambiér¡. tr:;tjeron piedras de ónix, y pieuras
de engaste para el efoq y el pqcto~·al."-J.l:x. 35: ~7.
Hubo una gran cantidad ele trabajo en con~xión con
la eclificación del taberJ¡~áculo. ~lgunos que eran com-.
petentes trabajaron en made;ra. Otros~ expertos en,
t rabajar el oro, la plata y el cob1¡e, hicieron eso, en tanto
que algunos ot ros bordaron las cortinas, cada cual ha-
ciendo su trabajo particular. Al estudiarse el plan de
Dios puede observarse que a todos los que Dios ha ilu-
minado les ha ofrecido la oportuniclád de llevar a cabo
algún trabajo o servicio en su •nombre, y los de corazón
sabio se han aprqvechado de ello y han recibido la con-
siguiente bendición.
Después de muqhos esfuerzos todo el material
para el tabernáculo se trajo conforme a las órdenes de
Dios, y luego Jehová dio .instruccions a Moisés con res-
pecto a la · manera de constn,ürlo: "Conforme a todo
lo que habí.a mandado Jehová a Moisés, así hicieron
los hijos de Israel toda la obra. Y vio Moisés toda la
obra; y he aquí que la hablan acabado de hacer; como
habla mandado Jehová, así la habían hecho ; y los ben-
di;jo Moi ~és ."-Exodo 39: 42, 43.
lJu año entero tran,scurrió desde el tiempo ~n que
168 . La Creación
los israelitas salieron de Egipto y la completación del
tabernáculo.
"Entonces J ehová habló a Moisés, diciendo : En el
mes primero, al primero del mes, erigirás la Habita-
ción, el Tabernáculo de Reunión. Y pondrás allí el
Arca del Testimonio, y con el velo ocultarás el Arca.
Luego meterás la mesa, y arreglarás sobre ella las órde-
nes de pan, meterás también el candelabro, y encende- ,
rás sus lámparas; y colocarás el altar de oro para el
incienso enfrente del Arca del 'l'estimonio ; y pondrás
la cortina a la entrada del Tabernáculo. Y colocarás el
Altar del Holocausto delante de la entrada ele la Habi-
tación, es decir, del Tabernáculo de Reunión. Y colo-
carás la fuente entre el Tabernáculo de Reunión y el
Altar, y echarás agua en ella. Luego pondrás el atrio
al rededor del 'l'abernáculo, y colocarás la cortina a la
puerta del atrio.
"Entonces tomarás el aceite de la unción, y ungirás
la habitación y todo lo que hubiere en ella; asi la san-
tificarás con todos sus utensilios, para que sean santos.
Ungirás también el altar del holocausto, con todos sus
utensilios; asi santificarás el altar, para que sea el altar
cosa santísima. Asimismo ungirás la fuente y su base,
y así las santificarás. En seguida harás que se presen-
ten Aarón y sus hijos a la entrada del Tabernáculo de
Relmión, y los lavarás con agua. Luego vestirás a
Aarón con las vestiduras santas, y le ungirás, y le san-
tificarás, para que sea mi sacerdote. Después harás que
sus hijos se presenten, y les vestirás las túnicas; y los
ungirás, como ungiste a su padre, para que sean mis
sacerdotes ; a si ha de hacerse, para que su ·unción les
sea por señal de un sacerdocio perdurable, durante sus
generaciones. Y lo hiw asi Moisés ; conforme a todo
lo que Jehová había mandado, asi lo hizo. Y aconteció
pues, en el mes primero del segundo año, al primero del
mes, que fue erigida la Habitación."-Ex. 40: 1-7.
La unción del tabernáculo y todo lo que allí se en-
Un Perfecto SacrificW 169

contra ha, eomo ya lo indicamos, significaba que el taber-


náculo y sus muebles, y todos los que alli servían, esta-
ban en él por la dirección de Jehová, siendo oficial-
mente designados por El para servir en sus respectivos
lugares y llegar a cabo sus respectivas funciones. Todos
y cada uno tenían que ejecutar las funciones y deberes
oficiales en el cuadro que Jehová estaba preparando
para prefigurar el desarrollo de su plan.

DESCRIPCION DEL TABERNACULO


El tabernáculo muy apropiadamente puede describirse
como una habitación construida de tablas paradas en
basas de plata, reforzadas y luego forradas con oro.
Cubriendo esta habitación de madera había una tolda
o cubierta.
Las medidas del tabernáculo se dan en codos. Hay
dos clases de codos, uno de veintiuna pugadas, las que
se miden con seis anchos de la mano de tres y media pul-
gadas ele ancho. Ezequiel menciona el codo del altar
como siendo de un codo y un ancho de mano. Sin-
embargo, el peso de la evidencia favorece la conclusión
de que la estructura era quince pies de ancha, quince
de alta y cuarenta y cinco de larga.
En ella habían dos cuartos o divisiones, separados
por una cortina o velo pesado. El más interior, hacia
el oeste, recibía el nombre del "santísimo" y sus dimen-
ciones eran quince pies · de alto, de largo y de ancho.
El otro compartimiento era quince pies de alto, quince
de ancho, y treinta de largo, y recibia el nombre de "el
santo.'' El velo que los separaba estaba suspendido en
cuatro columnas de madera de acacia cubiertas con oro.
El velo fue hecho de jacinto, púrpura y escarlata y tor-
zal de lino fino blanco, con figuras de querubines de
labor primorosa.--;-Ex. 26:31, 32.
La vía de entrada al santo recibía el nombre
de.la puerta del tabernáculo. Era una cortina de hilo
de jacinto y púrpura y escarlata, y torzal de lino fino
170 La Creación

blanco, de obra recamada, y estaba. suspendido sobre


cinco columnas o pilares de madera de acacia cubiertos
con oro.-Ex. 26 :36.
El Apóstol Pablo describe los muebles del taberná-
culo como sigue: "Porque un 'l'abernáculo fue prepa-
rado; el primero en que estaban el candelabro, y la
mesa, y los panes de la proposición, y el incensario de.
oro, el cual se llama el lugar santo ; y después del se-
gundo velo, el •rabernáculo, que se llama el lugar san-
tisimo, el que contenía el Arca del Pacto, cubierta toda
en derredor de oro, en el cual estaba el vaso de oro con-
teniendo el maná, y la vara de Aarón que floreció, y las
tablas del pacto, y sobre ella, los querubines de gloria
que hacían sombra al propiciatorio; de las cuales cosas
no podemos ahora hablar en particular."-Heb. 9: 2-5;
Ex . 40 : 19-29.
El tabernáculo era el lugar de reunión entre Dios y
el pueblo de I srael; esto se manifestaba por medio de
nna luz sobrenatural que aparecía en el santisimo, entre
los querubines, y la cual representaba la presencia di-
vina. No había ninguna otra luz en el santísimo. En
el santo había la luz del candelabro, el cual estaba
siempre encendido. La pesada co1;tina que cubría al
tabernáculo excluía toda otra luz.
Este tabernáculo se encontraba rodeado por un atrio
o corte que media setent.a y cinco pies de ancho por
ciento cincuenta de laTgo, y estaba formado por una
cortina de lino que se hallaba suspendida en postes de
madera por ganchos de plata; esos postes se encontra-
baJl colocados sobre basas de cobre. Esta corte no for-
maba parte del tabernáculo pero lo rodeaba, y se usaba
en conexión con él. Se llamaba la corte del tabernnctt1o.
La entrada. a ella estaba al lado oriental, y recibía el .
nombre de puerta. Era una cortina de lino blanco con
bordados de jacinto, púrpura y escarlata.-Ex. 27: 9-18.
En las Escrituras, cuando se describe al pueblo de
Israel cómo reuniéndose a la puerta del tabernáculo de
Un Perfecto Sae1·i[icio 171

reunión la referencia evidentemente es a que se reunian


al lado este de la sagrada estructura en cambio ele estar
desplegados por todos los cuatro lados como sería el
caso si estuvieran en sus toldas o tiendas. Es también
evidente que la entrada a la corte se dej aba abierta en
esas ocaciones para que el tabernáculo quedara a plena
vi sta de los representantes de las tribus que se colocaban
el frente de la entrada.
Adentro de la corte y delante ele la puerta del taber-
náculo ele reunión se encontraba el altar para los sacri-
ficios. En cone)¡ión con el altar habían varios ganchos,
palas, y otros utensilios necesarios. El altar era hecho
de mad era y cubierto con cobre, y llevaba el nombre de
altar de bTonce. ·
Entre el altar de bronce y la puerta del tabernáculo
de reunión estaba la fuente. (Ex. 40 : 5-7, 29, 30) .
Esa fuente- era ele cobre, y en ella se lavaban las manos
y los pies Moisés, Aarón y sus hijos.-Ex. 40: 31-33.
Las Escrituras frecuentemente usan la expresión:
''Delante de la puerta del tabernáct~lo de reunión." De
las citas relacionadas con el tabernáculo se saca en con-
secuencia que esta expresión siempre se refiere a la
entrada a la habitación y no a la entrada a la corte. La
corte era relativamente ·de poca importancia para los
judíos, quienes t enían libre acceso a ella todos los días
menos en el día de la expiación. (Lev. 1: 3; 12: 6;
Núm. 6 : 13-18). Lo que era de mucha importancia
para ellos era el tabernáculo }Jorque era el lugar ele re-
tmión entre ellos y Jehová.
Todo el pedazo de tierra que quedaba . incluido por
las cortinas de la. corte era terreno sagrado. Esto era
particularmente cierto al tiempo de las ceremonias del
día de la expiación.
Los israelitas se encontraban acampados de una
manera ordenada al derredor del tabernáculo. Esto se
debía a que asi lo había ordenado Dios: "Y habló J e-
hová a Moisés y a Aarón, diciendo: Los hijos · de I srael
172 La Creación

acamparán cada cual junto a su propia bandera, bajo


el estandarte de las casas paternas de sus mismas tribus,
dando frente al tabernáculo de reunión, acamparán en
su derredor."-Núm. 2: 1, 2.
El campamento de Judá quedaba en la posición de
favor, hacia el oriente, frente al tabernáculo; a la dere-
cha y a la izquierda de Judá, respectivamente, se en-
contraban las tribus de Isacar y de Zabulón. Al lado
norte se encontraban las tribus de Dan, Aser y N eftali;
al occidente, Benjamín, Efraim y Manasés; al sur,
Hubén, Gad y Simeón.
Las familias de la tribu de Leví recibieron posiciones
de preferencia cerca del tabernáculo. La familia de
Gersón levantó sus tiendas al lado de Coat. Moisés y
Aarón eran nietos de Coat y su familias se encontraban
estacionadas inmediatamente al oriente del tabernáculo
porque habían sido separados de entre sus hermanos,
por medio de una unción especial, para ofrendar los
sacrificios, especialmente los del día de la expiación, los
que eran ofrendados por el pecado.
Jehová hizo que se escogiera un sacerdocio, que se
ungiera y se instalara en conexión con el servicio del
tabernáculo. Un sacerdote es- un siervo oficial de J e-
hová. En las organizaciones humanas por lo regular
los sacerdotes son puestos en oficio por sí mismos o por
otros hombres, y frecuentemente usan su oficio con fi-
nes egoístas y a veces comerciales. El sacerdocio de
Israel llegó en ciertos casos a degenerar a esa condi-
ción, pero no fue ese el propósito de Jehová. Ningún
hombre tiene autoridad para tomar ese honor para sí
mismo. ( Heb. 5 : 4) . Los sacerdotes que servían en
conexión con el tabernáculo eran siervos d~ Jehová y
llevaban a cabo los deberes que Jehová les había asig-
nado. La ley de Dios requería que fuera escogido de la
tribu de Leví: Aarón fue el primer sumo sacerdote. Sus
hijos fueron sacerdotes bajo él. · ··
Un Perfecto Sacrificio 173

uEn seguida harás que se presenten Aarón y sus


hijos a la entrada del Tabernáculo de Reunión, y los
lavarás con agua. Luego vestirás a Aarón con las ves-
tiduras santas, y le ungirás, y le santificarás, para que
sea mi sacerdote. Después harás que sus hijos se pre-
senten, les vestirás las túnicas y los ungirás, como un-
giste a su padre, para que sean mis sacerdotes; así ha
de hacerse, para que su unción les sea por señal de un
sacerdocio perdurable, durante sus generaciones."-Ex.
40: 12-15 . .
La unción del sacerdocio y las vestiduras que se les
puso, son todas simbólicas y testificaban que eran ofi-
cialmente designaclos por . Jehová. Eran formalmente
inaugurados o instalados en oficio, y en esa ocasión
todos los que componían la congregación se juntaban a
11. puerta del tabernáculo; luego Moisés informó a la
gente lo que Jehová le había ordenado con referencia
a la instalación del sacerdocio. (Lev. 8: 2-5). Luego
Moisés procedió a consagrar o instalar a los sacerdotes
como se describe en Levítico, capítulo ocho.
En esta ceremonia es importante el que nos demos
cuenta de que el aceite de unción fue derramado sobre
la cabeza de Aarón pero no sobre sus hijos. Esto da
testimonio de que Aarón era la cabeza del sacerdocio, o
el sl).mo sacerdote, y que sus hijos se encontraban bajo
éL Todos juntos representaban a la nueva creación,
Cabeza y cuerpo, en proceso de desarrollo y mientras
se encontraban en la tierra. Los sacerdotes no sola-
mente estaban oficialmente ungidos para servir a Jehová
en una capacidad oficial, sino que también el servicio
que rendían en conexión con la consagración e instala-
ción del sacerdocio prefiguraba que los por ellos repre-
sentados tendrían que entrar en un pacto con Jehová y
estar por completo dedicados a El y a su servicio, ha-
ciendo su voluntad.
Hay muchos cuadros y detalles en conexión con la
construcción del tabernáculo, la inauguración del sacer-
i'N La O·reación
<locio y los sacrificios, pero el que está particularmente
relacionado con el asunto en cuestión fue el cuadro qua
tomó lugar en el día de la e.xpiaci6n.

EL DIA DE LA EXPIACION
J:ehová dio la orden de que en el día diez del mes
séptimo de cada año debería haber un día de la expia-
ción. "Porque en este día se ha de hacer expiación por
vosotros para purificaros; y ele todos vuestros pecados
' quedaréis limpios delante ele J ehová." (Lev.16 : 30).
En ese día el sacerdote que había sido ungido y consa-
grado para servir como sumo sacerdote se vest ía sus
vestiduras blancas. .Muy apropiadamente pueden estas
vestidmas llamarse vestiduras de sacrificio.
Aun cuando los otros sacerdotes asistian en lo to-
cante a los sacrificios de ese dí a, solamente el sumo
sacerdote era el que tenía acceso al santísimo. Y ha sta
el sumo sacerdote no podía entrar alli sino obedeciendo
exactamente los requisitos ele la ley sobre el particular.
Si dejaba de hacerse esto, la pena era la muerte. (Lev.
16: 2). La estricta obediencia de las órdenes de Dios
exigidas en esta conexión indica la gran importru.1cia
del cuadro. J·ehová usaba a Moisés para dar instruc-
ciones a Aarón en cuanto a la manera que debería pro-
ceder en ciertas ocasiones de importancia.-Lev. 16: 3-5.

EL CUADRO
En obedienc ia a las órdenes de Jehová el sumo sacer-
dote comenzó a hacer un maravilloso cuadro prefigu-
rando sucesos por venir. Lo vemos en la corte a donde
le traen un novillo para ofrenda por los pecados, un
carnero para holocausto y dos machos cabríos y otro
carnero para ofrenda por los pecados. Luego el sacer-
dote degüella la ofrenda por los pecados que es por sí
mismo y por su casa. La sangre del novillo se toma
en una vasija provista con ese fin. Luego toma un in-
ciensario lleno de brazas de sobre el altar y un puñado
¡l.
Un Pe·rfecto Sam-ificio
de incienso. Todo esto es en la corte. Ahora, con la
· sangre, el incensario, el fuego y en incienso, se dirige
hacia el santísimo.
En est e cuadro no hay ocasión para que él se demore
en el santo, y no hay evidencia de que lo hiciera. El
incien, o que se quemaba en el santo era solamente en
la mañana y en la. tarde y no al tiempo de los sacrifi-
cios del día de la expiación. Luego pasa a través del
velo dentro del santísimo, pone el incienso en las brazas,
el cual, al quemarse, produce una nube que se extien de
delante del asiento ele la misericordia. De no h acer
esto, moriría. Luego el sacerdote toma la san gre del
novillo y la rocía con su dedo soLre el asiento de la
misericordia, al oriente, y delante del asiento de la mise-
ricordia o propiciatorio, siete veces. Luego regresa a
la corte.
¿QUE SE PREFIGURO?
El cuadro anterior, hecho en obediencia a las órdenes
ele Dios, prefiguró ''bienes venideros" o cosas buenas por
venir. (Heb. 10 :1). La r ealidad debía llevarse a cabo
al debido tiempo de Dios.
El campo estaba formado por los israelitas. Ese .
pueblo había entrado en un pacto con J ehová y se en-
contraba bajo la ley ele ese pacto y estaban en busca de
la vida que esa ley prometía. Pero a causa del pecad0
no podían guardar perfectamente el pacto y los sacri-
ficios del día de la expiación se hacian con el fin de que
pudieran ser restablecidos a su condición de pacto.
Cuando se juntaban en frente ele la puerta del taber-
náculo de r eunión el pueblo prefiguraba a todos los
pueblos de la tierra buscando la vía o camino de volver
a Dios y a la vida, camino que sólo puede abrirse por
medio de un sacrificio por el pecado. Fuera del campo
se encontraban los que estaban opuestos a Dios, prefi-
gurando al mundo, o sea a la organización del Diablo.
El día de la e:>..'Piación era un día de veinticuatro horas
1'/G La Creación

que observaba el pueblo de Israel una vez al año, a cuyo


tiempo una ofrenda por sus pecados se hacía y se pre-
sentaba en el santísimo. Prefiguró un periodo de tiem-
po mucho mayor, la era cristiana o periodo de sacrificio
en el que una ofrenda por el pecado mucho mayor sería
ofrecida y presentada en el mismo cielo.
La corte era un lugar santo y por lo tanto represen-
taba la condidón ele paz con Dios. En el día de la ex-
piación solamente los sacerdotes podían estar allí. Pre-
figuraba una condición de paz con Dios que es disfru-
tada por algunos durante el pel'íodo ele sacrificio. Re-
presenta una condición de justificación, lo cual quiere
decir una condición o estado de armonía con Dios. Allí
era donde se sacrificaban los animales, los cuales repre-
sentaban el mayor sacrificio que se llevaría a cabo en la
tierra.
El tabernáculo representaba cosas espirituales o ce-
lestiales. Lo que allí ocurrió fue invisible para los que
se encontraban afuera porque solamente el sumo sacer-
dote podía entrar alli en el día de la expiación. Lo quP.
allí ocurrió en el día de la expiación prefiguró lo que
ha de ocurrir en el mismo cielo en la tarea de abrir e]
camino de la vida para la humanidad.
El sacerdote, siendo el siervo oficial de Dios, prefiguró
el mayor Sumo Sacerdote y Siervo de Dios, Cristo, el
Ungido de Dios. La tarea que llevó a cabo Aaarón, el
sumo sacerdote, en el día de la expiación, prefiguró una
tarea mejor y más grande que el gran sacerdote, Cristo,
llevaría a cabo durante la era cristianá.
El novillo que fue sacrificado, que no tenía defecto
alguno, prefiguró el mayor sacrificio que tendría que
ser perfecto. La sangre del novillo, derramada en la
corte, prefiguró la vida (la vida está en la sangre) del
mejor sacrificio, la perfecta vida humana derramada en
la tierra para proveer el precio de rescate: es decir, pre-
figuró la ofrenda o sacrificio de rescate hecha en la
tierra por el Hijo de Dios, el perfecto sér humano, Je'-
Un Perfecto Sacrificio 177

sús. La llevada de la sangre del novillo al santísimo


prefiguró la presentación en el cielo mismo del valor
del perfecto sacrificio o precio de rescate como ofrenda
por los pecados en provecho del hombre.

LA REALIDAD
La ley requería una vida por una vida, por lo tanto
una perfecta vida humana tenía que sacrificarse para
proveer el precio de la vida perfecta que Adán perdió
a causa de su desobediencia. Cuando Jesús cumplió
treinta años de edad, siendo un hombre perfecto y ha-
biendo llegado a su mayoría legal según la ley judaica,
se presentó a sí mismo en plena consagración a Dios, lo
cual implicó que entró en un pacto para hacer la volun-
tad de Dios. (Sál.40:8; Heb.10:7). Su consagra-
ción fue aceptada y por lo tanto fue engendrado del
espíritu para la naturaleza divina y fue ungido del es-
píritu de Dios. (Mat. 3: 16, 17). El por lo tanto llegó
a ser un Sumo Sacerdote conforme al orden de Melqui-
sedec, instalado en oficio para hacer servicio a Jehová.
-Heb. 7: 1-17.
Aarón no fue tipo de Cristo porque Cristo Jesús fue
un sacerdote de un orden superior al de Aarón, pero
Aarón prefiguró a Cristo y la obra que El haría du-
rante la era cristiana. Puesto que El estuvo siempre en
armonía y paz con Dios, Jesús durante su ministerio
en la tierra siempre estuvo en la condición representada
por la corte. Corno un sér humano perfecto, prefigura-
do por el novillo, Cristo Jesús en su calidad de sacerdote
prefigurado por Aarón, se ofreció a si mismo a Diod
corno un sacrificio. Esta tarea la hizo como Sacerdote
conforme al orden de Melquisedec y la hizo en la tierra.
En el día de la expiación lo único que prefiguró el pre-
cio de rescate fue el degüello del novillo en la corte. . La
realidad la cumplió Jesús cuando murió en la cruz.
Habiendo sido provisto el precio de rescate en la
tierra tenía que ser presentado en el cielo. Cuando
178 La Creac-ión
J esús fue levantado dP. entre los muertos como un sé t·
divino y subió a los cielos,. alli El presentó el valor del
rescate a Jehová como una ofrenda por los pecados.
Esto fue la realidad de lo prefigurado por el rocia-
miento de sangre en el santísimo que hizo Aarón sobre
el asiento de la misercirdia o propiciatorio. La tarea
que Aarón llevó a cabo al sacrificar el novillo y llevar
la sangre dentro del santísimo la llevó a cabo en la rea-
lidad Jesús desde el tiempo de su bautismo en el J"ordán
hasta qne ascendió al ciclo y apareció en la presencia de
Dios.
Al tenerse en cuenta el rescate y la ofrenda por los
pecados como se prefiguraron en el día de la expiación,
el primer compartimiento del tabern:'tculo, el santo, es
de adrede pasallo por alto por la razón qlle nada tiene
que ver con los sacrificios del día de la expiación. En
ese día el incienso se quemaba en el santlsimo, ponién-
dose en el fuego que se colocaba en el inciensario que
llevaba el sumo sacerdote. El incienso que se quemaba
en el santo, en el altar del incienso, o altar de oro, se
quemaba todos los dias en los sacrificios de la mañana
y de la tarcle.- Ex. 30 : 1-8.

EL MACHO CABRIO EN EL CUADRO


Dcs1més de derram arse la sangre uel novillo en el
santísimo, el sumo sacerdote, liarán, volvió a la corte
y allí otro cuadro comenzó "Luego tornará los dos
máchos cabrios y los har[L colocar delante de J ehová a
a la entrada del T'abernáculo de Reunión. Y Aarón
echará suertes sobre los dos machos cabrios, la una
suerte para Jehová, y la otra para Azazel. Entonces
presentará Aarón el macho cabrio sobre el cual cayó l t
suerte para J ehová, y le ofrecerá como ofrenda por el
pecndo. . . . Después degollará el macho cabrío de la
ofrenda por el pecado, que es pam el pueblo; y traerá su
snngl.'c adentro del velo, y hará con su sangre lo mismo
que hizo con la Sangre del noYillo, rociándola sobre el
Un Perfecto Sac1·ificio 179
propiciatorio y delante del propiciat01'io." (Lev. 16: 7-
99 ;15 ). En este cuadro solamente el macho cabrio del
Señor entJ:a en acción y por lo tanto dejamos el macho
cabrio de Azazel (o macho cabrío emisario) para más
tarde. El propósito del día de la expiación es el de
prefigurar el rescate y la oíTenda por los pecados.

¿QUE SE PREFIGURO?
El macho cabrio del Señor representó a los ungidos
tlc Dios, o sea a la clase que se cuenta como miembros
del cuerpo de Cristo, durante la era cristiana. Esa
mi sma clase fue prefig11racla por los hijos ele Aarón, los
·accrdotes que servian bajo el sumo sacerdote. Sobre
ellos no se derramaba el aceite de la unción, sino que se
derramaba sobre la cabeza de Aarón y corria por sus
ve tidos, prefigurando la clase de sacerdotes que recibi-
rüm su unción por conducto de su Cabeza, Cristo Jesús.
-Sal.13 3.
El degüello del macho cabrio del Señor y la llevada
de su sangre al santísimo, prefiguró la muerte en sacri-
ficio del cuerpo de Cristo y que el Señor presentaria
una vez más su sangre como ofrenda por el pecado al
final del periodo prefigurado por el día de la expiación,
en el cual la iglesia lJarticipará a causa de ser parte del
Cristo.
LA REALIDAD
Durante la era cristiana, la cual se prefiglll'ó por el
dia de la expiación del pueblo ele I srael, varios hombres
y mujeres se han consagrado a hacer la voluntad de
Dios. Esto lo han hecho porque han tenido fe en la
sangre de Cristo Jesús, el amado Hijo de Dios, como
• su precio de rendención. Habiendo sido aceptada su
consagración han sido tmidos a la condición de justifi-
caci6n, y esto se prefiguraba por la corte.
Esa justificación resultó para ellos en el derecho de
vivir como seres humanos, y ese derecho a la vida enton-
180 La Creación

ces Jehová lo acepta como parte del sacrificio de su


amado Hijo, Cristo Jesús. Siendo engendrados del es-
piritu santo los tales llegan a ser miembros del cuerpo
de Cristo, y luego son ofrecidos por El en su calidad
de Sumo Sacerdote y como parte de su propio sacrificio.
Cuando se completa el sacrificio de los miembros de su
cuerpo, Cristo Jesús, el gran Sumo Sacerdote, presenta
nuevamente el valor de su sacrificio en el cielo mismo,
como ofrenda por el pecado en provecho de la gente.
La Ófrenda de la sangre del novillo fue por Aarón y
su casa. (Lev. 16: 11). En la realidad la ofrenda de la
sangre de Cristo J esús, cuando ascendió al cielo, se .pre-
sentó en provecho de los que han sido engendrados del
espíritu a la naturaleza divina durante la era cristiana.
La lll'esentación de la sangre del macho cabrío fue en
provecho de la gente. (Lev. 16: 15). Al final del pe-
ríodo de sacrificio prefigurado por el día de la expia-
ción, la sangre de Cristo se presentará como una ofrenda
en favor del pueblo o gentes de la tierra. Por lo tanto
se puede ver que en el día de la expiación el rescate se
representaba en la corte y la ofrenda por el pecado en
el santísimo. .
El tabernáculo era parte del Pacto de la Ley y sus
requisitos, el cual fue inaugurado en el Monte Sinai,
"Y en verdad el primer pacto también tenía reglamen-
tos de culto, y su santuario, que lo era de este mundo.
Porque un tabernáculo fue preparado; el primero en
que estaban el candelabro, y la mesa, y los panes de la
proposición, y el altar de oro, el cual se llama el lugar
santo. Y después del segundo velo, el tabernáculo que
se llamaba el lugar santísimo, que contenía el arca del
pacto, cubierta de oro, en la cual estaba el vaso de oro
conteniendo el maná, y la· vara de Aarón que floreció, y •
las tablas del pacto; y sobre ella, los querubines de glo-
ria, que hacían sombra al propiciatorio; de las cuales
cosas no pedemos ahora hablar en particular. Y estando
estas cosas dispuestas de esta manera, en el primer
Un Perfecto Sacrificio 181

tahernáculo entraban los sacerdotes continuamente, en


cumplimiento del culto de Dios.
La idea aquí es la de que el sacer dote "continua-
mente," es decir, diariamente, entraba al santo a cum-
plir con el culto o servicio de Dios. Ese servicio con-
sistía en los sacrificios de la mañana y de la tarde, y
nada tenia que ver con los sacrificios del día de la ex-
piación.-N úm. 28: 3, 4.
El santísimo, o sea el segundo compartimiento del
tabernáculo, era el lugar para rociar la sangre de los
animales que se ofrendaban en el día de la expiación.
Por lo tanto prefiguraba la presentación del gran sa-
crificio del Señor en el mismo cielo. Cristo Jesú~,
cuando estuvo en la tierra, puso su vida como un sacrifi-
cio perfecto. Luego ascendió a lo alto y allá en el cielo
presentó su sacrificio como una ofrenda por el pecado,
así como está escrito : '
"Mas en el segundo, el sumo sacerdote solo, una vez
al año, y eso no sin sangre, la cual ofrecía por si mismo,
y por los errores del pueblo; dando a entender esto el
espíritu santo, que no se babia hecho patente todavía la
entrada del verdadero santuario, mientras estuviera aún
en pie· el primer tabernáculo. Lo cual era una parábola
para aquel tiempo entonces presente; conforme a la
cual se ofrecían dones y sacrificios que no podían, en lo
que toca a la conciencia, perfeccionar al que tributaba
el culto, consistiendo solamente (además de viandas y
bebidas y diversos géneros de bautismos) en reglamen-
tos carnales, impuestos hasta el tiempo de reformación.
P ero habiendo venido Cristo,· Sumo Sacerdote de los
bienes venideros, por medio del mayor y más perfecto
tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta
creación."-Heb. 9: 12-14.
La sangre de los animales en el Monte Sinai prefi-
guró el rescate y la ofrenda por ·e~ pecado, y fue la base
para la confirmación del Pacto de la Ley. La sangre
de Cristo Jesús proveyó el precio de redención y una
182 La O·reación
ofrc)lcla por el pecado en provecho de la humanidad, y
constituye la base para que se haga y se inaugure el
Nuevo Pacto de la Ley. (Heb. 9: 15-21). En seguida
el apóstol hace claro y positivo el hecho de que la sangre
de Cristo Jesús es esencial para la salvación:
"Y según la ley, casi todas las cosas son purificadas
con sangre ; y sin derramamiento de sangre no hay re-
misión. Fue pues necesario que las represent aciones
de las cosas celestiales fuesen purificadas con estos sacri-
ficios, pero las mismas cosas celestiales, con mejores
sacrificios que éstos. Porque no entró Crito en un lugar
santo hecho de mano, que es una representación del
verdadero, sino que en el cielo mismo, para presentarse
ahora delante de Dios por nosotros. Ni tampoco fue
necesario que se ofreciera a si mismo muchas veces,
como el sumo sacerdote entra en el lugar santo año por
año con sangre ajena; de otra suerte le hubiera sido
necesario padecer muchas veces desde la fundación del
mundo; mas ahora, tma sola vez en la consumación ele
los siglos, El ha sido manifestaclo para efectuar la des-
trucción del pecado, por medio del sacrificio de si
mismo."-Heb. 9: 22-26.
El argumento bíblico anterior prueba fuera de dnrla
que la sangre de Jesús es el gran precio de r edención
por la r aza humana, y que la presentación ele esa sangre
en el cielo constituye la ofrenda por el pecado en pro 7
vecho de la raza humana.
Muchos, naturalmente, pregllDtarán : ¿por qué, en
vista del gran número de pruebas mostrando el valor
de la sangre derramada de Cristo J esús, muchos que
pretenden ser predicadores del evangelio niegan que la
sangre de Cristo tenga valor alguno? Dios hizo que su
profeta escribiera una respuesta a esta pregunta: "Em-
pero babia además falsos profetas en medio del pueblo,
asi como también habrán falsos maestros en medio de
vosotros, los cuales introducirán her ejías destructoras,
renegando atm del Soberano que los rescató, trayendo
Un Perfecto Sacrific--io 183
sobre si una presurosa destrucción." (2 Ped. 2:1).
"Porque se han .entrado disimuladamente ciertos hom-
bres impios (hombres que de antiguo fueron señalados
para esta condenación), los cuales tornaron en lascivia
la gracia de nuestro Dios, y reniegan de nuestro único
Soberano y Señor, Jesu-Cristo."-Jud. 4.
¿Continuará la gente siendo engañada por estos fal-
sos profetas que son sabios en su propio concepto y que
pretenden ser predicadores del evangelio, o se dejarán
guiar por la Palabra de Dios la cual ha llegado el de-
bido tiempo de entenderse de una manera clara? Que
cada lector se responda a si mismo.
Lo anterior muestra que el perfecto sacrifico de nues-
tro Señor fue representado, prefigurado, y llevado a
cabo. Muestra además que su sangre den-amada en el
Calvario proveyó el precio de rescate; que fue presen-
tada en el cielo y que a causa de ello Dios abrió el ca-
mino de la vida para la raza humana, y "vida en abun-
dancia" para la nueva creación.
CAPITULO VIII

La Nueva Creación
EHOV A terminó su obra en el séptimo día. uy
J descansó en el día séptimo de toda la obra que había
hecho." ( Gén. 2 : 2, 3). Sin duda alguna estas
palabras se relacionan con la obra creativa de Jehová
en lo que toca a cosas de la tierra. J ehová nunca podría
estar desocupado. Mucho tiempo después de la creación
del hombre dijo J es ús: "Mi Padre hasta ahora está
obrando, y yo obro."- Jn. 5 : 17.
Con la creación del hombre culminó la creación de
Dios en lo que a la tierra toca. Su obra fue perfecta.
(Deut. 32:4). Mucho después de esto fue cuando Je-
sús vino · al mundo, y alguno pudiera preguntar : ¿N o
fue su venida y su creación como hombre una obra re-
lacionada con las cosas de la tierra? Respondemos nó.
El fue el segundo hombre perfecto en la tierra pero El
no fue creado ele la misma manera que fue creado Adán.
Su vida o existencia, junto con el derecho a ella, fqe
transferido del plano espiritual al terreno. El fue en-
gendrado en el vientre de Maria por el poder de Dios,
naciendo de una virgen, así como había sido profetizado.
(Isa. 7: 14). Fue el Unigénito de Dios. (Jn. 3: 16).
Las Escrituras frecuentemente hablan de El como el
Hijo Unigénito de Dios.
Muchos han cometido el error de creer que Dios es el
responsable del nacimiento de t odo niño. Dios delegó
a Adán el poder y autoridad de transmitir la vida;
cuando Adán fue sentenciado a muerte le fue quitado
el derecho a. la vida y por lo tanto no podía transmitir
ese derecho aun cuando si pudo transmitir, hasta cierto
grado, y transmitió la vida. Jesús nació de la mism¡¡
184
La Nueva Oreaci6n 185
manera que nace todo otro niño, pero su vida fue per-
fecta por cuanto procedía directamente de Jehová. "El
primer hombre fue de la tierra, terreno; el segundo es
del cielo."-1 Cor. 15: 47.
Puesto que toda la raza humana proviene de Adán y
fueron engendrados y nacidos en pecado, todos nacieron
pecadores. Abraham, I saac, J acob y todos los demás
hombres se encontraron sujetos a esa imperfección. La
única excepción fue J esús, quien fue perfecto por la
razón de que, según ya lo indicamos, no fue engendrado
por hombre. Es por lo tanto evidente que Jehová des-
cansó ele su obra creativa con relación a la tierra una
vez que Adán fue creado.
Cuando Abraham ofreció a su hijo Isaac Dios le elijo:
"Y serán bendecidas en tu simiente todas las familias
de la tierra." (Gén. 22: 18). Una bendición para la
humanidad, que sea de eterno provecho, de nece¡;;idad
incluye la oportunidad para obtener la vida eterna.
Siendo los hijos de Abraham imperfectos, es evidente
que la prometida bendición no podría venir por con-
ducto de ellos. El hecho de que I saac murió y que la
bendición no llegó en su día es en si mismo una prueba
de que Isaac solamente prefiguró esa simiente de la
promesa. "Y la Escritura, previendo que Dios había
de justificar a los gentiles por la fe, predicó de ante-
mano el evangelio a Abraham, diecendo: En tí serán
benditas todas las naciones. . . . A Abraham pues
fueron dadas las promesas, y a su simiente. N o dice a
simientes, como si se hablase de muchas, sino a una sola,
a tu simiente, la cual es Cristo."-Gál. 3: 8, 16.
Por siglos la "simiente de la promesa" por medio de
la cual han de venir las bendiciones a las familias de la
tierra estuvo envuelta en gran misterio. Dios dispuso
que así .fuera. El misterio comenzó a entenderse en el
Pentecostés y entonces solamente por los qu ese encon-
traban consagrados y por entero dedicados a Dios. (Col.
1 : 26; Efe. 4: 4, 9). La simiente de la promesa, la
186 La Creación
c11,al es el misterio de Dios, es la nueva creación, y cons-
tituye el medio empleado y que ha de ser empleado por
Jehová para llevar a cabo su plan de bendecir a todas
las familias de la tierra.
La nueva creación es El Cristo. El Cristo es un
cuerpo compuesto ele muchos miembros. La Cabeza es
Jesús, el amado Hijo de Dios. Los miembros del
cuerpo de ese Cristo son los que se escogen de entre los
hombres; son justificados por Dios; engendrados y
ungidos por el espiritu de Dios, y que luego son fieles
hasta la muerte. (Efe. 1 : 22, 23). ''Y El es la Cabeza
del cuerpo, es decir, la iglesia, ele la cual El es el prin-
cipio, el primogénito de entre los muertos; para que en
todas las cosas El tenga la preeminencia. Porque plugo
al Padre que la plenitud de todo residiese en El."
Mientras está en la tierra, la nueva creación es una
cosa real y verdadera, y no algo imaginario o imputado.
N o está compuesta ele todos los que pretenden ser cris-
ti anos sino solamente de los que han sido adoptados en
la familia de Dios por medio de Cristo. "Por tanto, si
alguno está en Cristo, es una nueva criatura; las cosas
viejas pasaron ya, he aqui que todo se ha hecho nuevo."
-2 Cor. 5 :17.
El cuerpo humano se toma como ilustración del
Cristo, .la Cabeza y los miembros del cuerpo siendo to-
mados como uno. "Porque de la manera que el cuerpo
es uno mas tiene muchos miembros, y todos los miem-
bros del cuerpo siendo muchos, son un mismo cuerpo,
asi también es Cristo. . . . Porque el cuerpo no es un
solo miembro, sino muchos." (1 Cor.12: 12, 14). El
Cristo y la nueva creación, por lo tanto, son lo mismo.
Cristo quiere decir el Ungido. El acto de derramar
el aceite sobre la cabeza de Aarón quiso simbólicamente
decir: 'Este tal ha sido 1mgido y apartado para servir
a Jehová Dios en el oficio de sacerdote para el cual ha
sido señalado.' Esto prefiguró la unción de Cristo
Jesús. Dios era el que ungia, de manera que Cristo
La Nveva Oreación 187

J csús es · el Cristo de Dios, señalado, ungido, y puesto


en el o:[icio de Sumo Sacerdote para el servicio de J e-
hová. ( 1 Cor. 12 : 13; Efe. 1: 17). "Del Hijo empero
se dice así: Tu trono, oh Dios, es por los siglos de los
siglos; y un cetro de rectitud es el cetro de tu r eino.
Has amado la :i usticia, y aborrecido la maldad; por
t anto, Dios, el Dios tuyo, t e ha un gido con unción de
alegria sobre tus compañeros."-Heb. 1: 8, 9; Sal.
45 : 6, 7.
El Cristo es la "simiente de la prom esa" o "simiente
de Abraham ," el conducto oficial por medio del cual
han de venir las bendiciones a todas las familias de la
tierra. ( Gúl.3 :27-29; 4 : 28 ; Heb.6:17; 2 Ped.3:13).
Una vez que la simiente ele la promesa queda definitiva-
mente identificada con El Cristo, es fácil ver que Dios
dcmora.ria la bendición de tod as las familias ele la tierra
hasta que esa "simiente" fnera escogida, desarrollada y
completada. Esa " simiente" es la nueva creación.
El clero de los sist emas clcnominacionales ha enseñado
a la gente que el único lugar en qu.e la gente puede ser
sal va es en el cielo, y que nadie puede salvarse a meno3
que no se haga miembro de alguna iglesia o sist ema
denominacional; si hace eso, al morir va al cielo. Han
hecho creer a la gente que Dios está haciendo inauditos
esfuerzos por conseguir que algunos cuantos vayan al
cielo. El responsable de estas ideas del clero es Satanás,
el engañador. Su propósito ha sido el ele apartar el e
Dios las mentes de la gente, cegándola a las provisiones
que El ha hecho para la salvación y bendición. Hasta
ahora Satanás ha t enido éxito en cegar a la raza hu-
mana, pero ha llegado un cambio por ser éste el debido
tiempo de Dios para que la gente conozca la verdad.
E s evidente que el tiempo ha llegado cuando la gente
pueua entender que el misterio de Dios es El Cristo,
la "simiente de la promesa" por medio de la cual han de
venir las bendiciones. Cristo es el camino provisto por
Dios para que el hombre obtenga vida. La vida es la
188 La Creación

dádiva de Dios por medio de Cristo Jesús. ·( Jn. 14: 6;


Rom. 5 : 18 ; 6 : 23). Antes de que la gente pueda acep-
tar la dádiva de Dios tienen que saber algo con respecto
a ella. Al debido tiempo Dios traerá a todos los hom-
bres al exacto conocimiento de la verdad, y parece que
ese tiempo ha llegado. Ahora la gente puede tomar
ánimo y estudiar el plan de Dios con la esperanza de
encontrar el camino que conduce a la vida y a la bendi-
ción. Esto es cierto no porque los hombres ahora sean
más sabios, sino porque es el debido tiempo de Dios para
aumentar el conocimiento.-1 Tim. 2: 3-6.

LA CABEZA
El hombre perfecto, Jesús, a si mismo se consagró a
Dios. El consagrarse a Dios quiere decir el hacer un
pacto o trato con Dios de hacer su voluntad. Jesús
dijo: "He aqui yo vengo . . . para hacer, oh Dios, tu
voluntad." (Sal. 40: 7, 8; Heb. 10: 7). Esto lo hizo
cuando se presentó en el Jordán a ser bautizado por
Juan el Bautista. Su bautismo fue un cuadro simbóli-
camente testificando su muerte como hombre para po-
der ser el redentor del hombre. (Rom. 6: 3, 4). Desde
el tiempo de su nacimiento como un niño hasta el mo-
mento de su bautismo, El fue un sér humano, ni más
ni menos, pero fue un sér humano perfecto.
Al tiempo de su bautismo Jesús fue engendrado por
Jehová para la naturaleza divina. Alli fue cuando
Dios lo ungió con el espiritu. (:M: at. 3 : 13-17). Alli fue
cuando El llegó a ser Cristo Jesús, el Ungido de Dios.
"Relativo a Jesús de Nazaret, como Dios le ungió con
el espiritu santo y con poder." (Hech. 10: 38). Alli
comenzó la nueva creación, y alli fue donde Jesús fue
constituido Cabeza de' los miembros de la nueva crea-
ción, la cual es su cuerpo. (Col. 1: 18). Su unción in-
cluía la comisión de parte de Jehová para llevar a cabo
una obra especial. (Isa. 61:1, ' 2). Después de que
La Nueva Oreaci6n 189
Jesús fue ung~do El comprendió la tarea que tenía que
llevar a cabo a nombre de Jehová.-Luc. 4: 16-21.
Al tiempo de su bautismo y unción Jesús fue señalado
e instalado en oficio como el Sumo Sacerdote de Jehová.
El fue y aun es Sacerdote conforme al orden de Mel-
quisedec. (Heb. 7: 1-22). En tal capacidad El es, y por
siempre será el exaltado Siervo y Oficial Ejecutivo de
Jehová Dios. Como gran Sumo Sacerdote El se ofre-
ció a sí mismo como un sacrificio humano para proveer
el precio de rescate.
Cristo J esús murió en la cruz y con su muerte se dio
en rescate por toda la raza humana. ( 1 rrim. 2: 5, 6;
Heb. 2 : 9). Fue muerto en o como carne, pero resucitó
en espíritu o como un sér espiritual. (1 Ped. 3 :18). El
fue el primero en ser levantado de entre los muertos.
(1 Cor.15: 1-20). Conforme a la promesa de Dios le
fue dada la inmortalidad, y aun cuando murió como
hombre, fue levantado de entre los muertos y ahora vive
eternamente.-Jn. 5: 26; Apoc.1: 18.
Por ser Cristo Jesús el ungido Sacerdote de Jehová
para ministrar en el oficio al que había sido señalado,
El dijo: "De' mi mismo no puedo hacer nada . . . por-
que no procuro hacer mi propia voluntad sino la volun-
tad del que me envió."· ( J n. 5 : 30). Desde el tiempo en
que El fue ungido toda la obra de juicio concerniente a
la ejecución del plan divino con referencia a la salva-
ción del hombre le fue encomendada. ( J n. 5 : 22).
Cuando El dijo: "De mi mismo no puedo hacer nada,"
no quiso decir que estaba siendo obligado por Jehová a
obedecer, sino quiso decir que su devoción a su Padre
era tan absoluta y completa que no podía hacer nada
a no ser que fuera en completa armoniEt con la voluntad
de Dios.
En su calidad de Sumo Sacerdote del orden de Mel-
quisedec, Cristo fue resucitado de en~re los muertos y
subió al cielo, y allí apareció en la presencia de Dios y
presentó el valor de su sacrificio humano como una
190 La Creación

ofrenda por el pecado. (Hcb. 9: 24-26). Su sacrificio


era aceptable y fue aceptado por Jehová. y la manifes-
tación de esa aceptación se dio con las lenguas de fuego
que cayeron sobTe sus discípulos en el día del Pentecos-
tés. (Hech. 2: 1-4). De este modo Jehová abrió el
camino de la vida y de la inmortalidad por medio de
Cristo Jesús, su Hijo amado.-2 Tim. 1: 10.
La prueba que se da en las Escrituras establece el
hecho de que el Logos, J esús, y. Cristo J esús son la
misma persona. Que cuando El vino a la tierra no
muTió, sino que su vida fue tmnsferída del plano espi-
irtual al humano, se prueba con las palapras suyas :
"Antes que AbTaham hubiese nacido, soy yo." (Jn.
8: 58) . Estas palabTas .implican una continua existen-
cia. El morir quiere decir el dej ar de existir. Las
palabra. de J esús por lo t anto deben entenderse como
indicando que desde el momento en que El vino a ser el
principio de la creación de Dios basta el momento en
que estaba hablando El había existido y tenia el derecho
a esa existencia. El murió en la cruz como hom bre, y
como hombre nunca más ha de vivir porque el derecho
a esa vida humana lo da por la vida del mundo. Esto
se prueba por sus mismas palabras : "Poder tengo para
ponerla [la vida], y poder tengo para tomarla otra vez.
Este mandamiento recibí de mi Padre."-Jn. 10: 18;
6:51.
LOS :MIEMBROS DE SU CUERPO
Cristo J csús es más que suficiente para llevar a ca.bo
el plan de Jehová. Su vida sola proveé el precio de
rescate. P ero a Jehová, en ejercicio de su bondad, le
plugo escoger a otros para que fueran miembros del
cuerpo de Cristo y por lo tanto una parte del Cristo.
Al hacer esto, Dios no escogió a los ángeles, sino a los
hombres y mujeres que han tenido la fe de Abraham.
(Heb. 2: 16, 17). Dios visitó a los gentiles para tomar
de entre ellos un pueblo para su nombre. (Hech.
La Nueva O·reaci6n 101
15: 14:). Estos son hechos aceptos a Dios por medio de
Cristo Jesús, siendo ésta la única manera. Dios no
predestinó a los individuos que han de componer el
cuerpo de Cristo, sino predestinó que debería haber
cierto número escogido de entre la raza humana para
que constituyeran ese cuerpo. Concerniente a esto está
escrito :
"Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor J esu-
Cristo, el cual nos ha bendecido en Cristo con toda
suerte de bendición espiritual, en las regiones celestia-
les; según nos escogió en El antes de la fundación del
mundo para que fuésemos santos e irreprensibles de-
lante ele El. Habiéndonos predestinado en su amor a
la adopción de hijos, por medio de Jesu-Cristo, para sí
mismo, según el beneplácito de su voluntad; para loor
de la gloria de su gracia, de que nos hizo merced en el
amado Hijo suyo. En quien t enemos redención por
medio de su sangre, la remisión ele nuestros pecados,
según las riquezas de su gracia, que hizo abundar para
con nosotros, en toda sabiduría e inteligencia; habién-
donos dado a conocer el misterio de su voluntad, según
su beneplácito, que se propuso en sí mismo."-Efe.
1: 3-9.
LO PREFIGURADO
La nación de Israel fue el pueblo escogido ele Dios.
Ese pueblo no constituyó la nueva creación, pero pre-
figuró a la nueva creación que es la clase seleccionada y
escogida por Dios con un fin. El Israel conforme a la
carne fue la cinta cinematográfica que Dios proveyó y
la cual prefiguró lo verdadero, es a saber, al Israel espi-
ritual, la nueva creación. El comienzo ele los israelitas
conforme a la carne fue J acob, cuyo nombre más tarde
ÍQe cambiado en I srael. La descendencia natural de
Jacob, bajo los términos del Pacto confirmado en el
Monte Sinaí, nació al mismo favor. La nueva creación
1!)2 La Creación
.es el Israel espiritual engendrado y producido bajo los
términos de otro pacto.
Los israelitas entraron en un pacto con Jehová, y el
Mediador de ese pacto fue Moisés. Al aceptar las con-
diciones o términos del pacto se sometieron a hacer la
voluntad de Dios. El pacto confirmado en el Sinai sir-
vió como un ayo o pedagogo para proteger y guiar en
los senderos de la obediencia a los fieles de Israel hasta
el debido tiempo de Dios para comenzar la nueva crea-
ción, el Cristo. Como nación, los israelitas no lograron
g.u ardar los términos del pacto y perdieron todo lo que
ese pacto prometía. Sin embargo, un resto del pueblo
aceptó a Cristo como el gran Redentor y Libertador y
por la gracia de Dios los tales formaron parte de la
nueva creación.-Rom. 11: 5.
Al Israel natural Dios dijo en el M:onte Sinaí; "Ahora
pues, si escucháreis atentamente mi voz y guardáreis
mi pacto, me seréis un tesoro especial, tomado de entre
todos los pueblos; pues que mía es to.da la tierra; y vo-
sotros me seréis un reino de sacP.rdotes, una nación
santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de
I srael."-Ex. 19: 5, 6.
Al I srael espiritual, .prefigurado por el Israel natural,
o sea a los que han aceptado Cristo como su Redentor y
han llegado a formar parte de Cristo, Dios les dice por
meuio Q.e uno de sus testigos : "11fas vosotros sois una
raza escogida, un sacerdocio real, una nación santa, un
pueblo con un propósito." (1 Ped. 2:9, Diaglott). Es-
tos textos prueban concluyentemente que Israel con-
forme a la carne fue un cuadro prefigurando al Israel
espiritual, el cual es la realidad, y que esa realidad es
la nueva creación.
La nueva creación o sea el Israel espiritual es co-
menzada y completada de acuerdo con los términos de
un pacto. Jesús, la Cabeza de ella, en el Jordán hizo
un pacto con Jehová por medio del cual se comprometió
a hacer la voluntad ·del Padre. Ese sacrificio impli-
La Nueva Oreaci6n 193
caba para Jesús su sacrificio como hombre. No hay
evidencia alguna de que en ese entonces El supo tendría
que morir. Por cuarenta días y cuarenta noches El
estuvo en un monte, estudiando el plan de Dios y comu-
nicándose en Jehová después de haber sido iluminado
por el espíritu santo. Entonces se dio cuenta. de ese
plan y desde entonces, fiel e inteligentemente llevó a
cabo su pacto. ·
Los mien¡.bros de su cuerpo tienen que seguir el mis-
mo camino. (1 Ped. 2: 21). Todos los que llegan a ser
miembros de la nueva creación lo logran por m~dio de
un pacto de sacrificio. (Sal, 50: 5). Cuando los discí-
pulos de Jesús creyeron que Jesús era el Mesías y le
siguieron con ello se comprometieron a hacer la voluntad
de Dios. Un pacto. es un solemne acuerdo de hacer o no
hacer una cosa. Cuando ellos aceptaron a Jesús como
el Mesías, ese fue el comienzo de su pacto. 'l'al cosa
marcó su consagración. Sin embargo, no pudieron ser
justificados sino hasta que se presentó en el cielo la
qfrenda de rescate como una ofrenda por el pecado y fue
aceptada en tal capacidad. · Esa aceptación se manifestó
en el Pentecostés, y allí fue cuando los discípulos fueron
justificados y engendrados del espíritu santo. · .
·La nueva creación es una clase o compañía elegida
que es tomada de entre los hombrE)s y adoptada en la
familia de Dios por medio de Cristo. Es bastante im-
portante la manera en que Dios escoge y forl):la esa
nueva creación. Esta manera se nos muestra en su
Palabra, y así recibimos la inform~ción de cómo puede
uno llegar a ser un verdadero cristiano.
Puesto que toda la raza humana ha nacido en pecado
y ningún pecador puede llegarse a Dios, ¿qué puede
hacer un pecador para llegar a ser miembro de la nueva
creación? Las Escrituras declaran que la vida es una
dádiva de Dios por medio de J esu-Cristo nuestro Señor,
por lo tanto es esencial que se tenga conocimiento en
'cuanto a la dádiva y la manera en que se ofrece. Es
194 La Creación

preciso que el hombre se dé cuonta por información, o


por medio de la lectura de la Palabra de Dios, que es un
pecador, que necesita ayuda, y que es incompetente para
ayudarse a si mismo. Viendo que el curso de la huma-
nidad es uno de injusticia, necesita desear la justicia.
Se pone al tanto de que Jehová es Dios y cree en ello.
Esto costituye fe en Dios sin la cual es imposible agra-
oarle. (Hcb. 11: 6). Luego se apercibe que Jesús es el
amado Hijo ele Dios cuya vida se dio en rescate de la
humanidad.
Su reverencia a Jehová es el principio ele la sabiduría.
( Sal. 111: 10). Esto implica que ha comenzado a allli-
car su conocimiento en armonía con la voluntad de Dios,
y esto lo hace cuando comienza a reverenciar a Jehová.
Siente un deseo de saber algo más de Jesús y por qué
El murió y resucitó de entre los muertos. Por medio
ele este conocimiento y deseo Dios lo atrae a Jesús. Esto
estú en armonía con las palabras de Jesús: "Nadie
puede venir a mi si el Pedre que me envió no le atra-
jere." (Jn. 6: 44) . Vemos entonces que el sincero de-
seo de vivir, y de vivir en armonía con el Creador, es
uno de los requisitos para llegar a ser un cristiano.
Es razonable suponer que Dios rodea al tal de las
circunstancias que han de atraerle a Jesús y así lo con-
duce hasta El. Pmeba de esto se encuentra en las expe-
riencias de Cornelio. N a da sabía él del plan de salva-
ción por medio de Jesús, pero tenía fe y reverencia para
Jehová. Tenia el sincero y justo deseo de estar en ar-
monía con Dios. Oró a Dios y su oración llegó hasta
El. (Hech. 10: 1-48 ). Al debido tiempo Jehová trajo
a su conocimiento el camino de la vida enviando a Pedro
para que se le indicara .
Muy frecuentem ente ocurre que cuando uno tiene un
sincero deseo de conocer a Dios alguien viene y pone
algún libro en sus manos o le dice algo con res¡)ecto al
misericordioso plan de salvación. Al recibir este cono-
cimiento en un corazón bueno y sincero se apercibe ele
La Nueva Creación 195
que e] camino de Dios para volverlo a El y darle vida
eterna es por medio de Cristo J csús. El testimonio de
Jesús es : "Y o soy el camino, la verdad y la vida; nadie
viene al PadTe sino por mi."- Jn. 14: 6.
Hasta este punto ese tal ha andado por la senda de
los pecadores. Su mente ha sido deilicada a cosas egoís-
tas. Pero ahora, teniendo un deseo de obtener vida y
buscando el camino de la vida, se arrepiente. El an:e-
pentimiento implica un cambio de propósito. Por medio
del conocimiento adquirido ha cambiado de propósito y
desea conocer el camino de Dios para alcanzar la vida.
Estando en esta actitud inquisitiva llegan hasta él las
palabras de Jesús : "Si alguno quiere venir en pos de
mi, niéguese a si mismo, tome su cruz, y sigame."-
Mat. l6: 24.
El obedecer lo que Cristo pide implica que debe ha-
cerse tma consagración. El que se consagra se compro-
mete a hacer la voluntad de Dios. Una vez apercibién-
dose de que es un pecador y que el camino para volver
.
a Dios y alcanzar la vida es por medio de Cristo Jesús,
m ás o menos el t al dice: 'Estoy determinado a hacer la
voluntad de Dios,' y luego, de una manera solemne, con
su mente o haciendo uso de sus labios, dice: 'Confiando
en 'l'i y en tu Palabra, y creyendo en la precíosa sangra
de Cristo, me comprometo a hacer tu voluntad.' Esto
constituye el negarse a si mismo ; esto es su consagra-
ción; y puesto que es su compromiso de hacer la volun-
tad de Dios, es su parte en el pacto con Dios.
Entonces puede apTopiadamente decirse que el tal ha
sido convertido. El estar convertido implica el cambio
de curso de acción. El tal cambia su curso de acción al
dejar de seguir su propio curso egoísta y comprometerse
a seguir, y siguiendo al Señor, quien entonces se pre-
senta como fiador del que de tal manera se consagra a
causa de su fe, y en tal capacidad lo presenta a Jehová.
196 La Creación
JUSTIFICACION
Pero aun es imperfecto y Dios no puede recibir nada
imperfecto. Sin embargo, Dios lo puede justificar. La
justificación quiere decir el hacer justo o completo con
Dios. El proceso de justificación puede definirse apro-
piadamente como el acto judicial de parte de Jehová por
medio del cual El determina que alguien es justo y que
está en paz con El. Para la justificación se requieren
tres cosas vitalmente esenciales: ( 1) Fe en Dios y en
el sacrifício de Cristo ; ( 2) la sangre de Jesús, r epre-
sentando su vida, aplicada en beneficio del que va a se¡•
justificado, y ( 3) el acto judicial de parte de Jehová
justificando al tal. Fe implica el t ener conocimiento de
estas cosas y el confiadamente descansar en ese cono-
cimiento; el cual procede de la Palabra de Dios.
Abraham creyó a Dios y su· fe le fue imputada a jus-
ticia. · Eso fue escrito no solo en provecho de Abraham
" sino por el nuestro también, a quienes será contada; a
nosotros que creemos en Aquel que levantó a Jesús, Se-
ñor nuestro, de entre los muertos; el cual fue entregado
a causa de nuestras transgresiones, y fue resucitado para
nuestra justificación." (Rom. 4: 20-25). A Abraharn
no le fue abierto el camino para obtener la vida porque
entonces no se había derramado la sangre de Jesús como
precio de rescate ni había sido presentada como ofrenda
por el pecado. La sangre de Jesús es la base para la
justificación. El que ejercita fe en ella, se consagra a
Dios comprometiéndose a hacer su voluntad y así ejer-
citando fe en la sangre de Cristo. Esto muestra que
Dios es el que lo justifica.
Fijérnono·s que las Escrituras muestran las tres cosas
esenciales para la justificación: Fe, la sangre de Jesús y
la determinación judiqial de parte de J ehová. "Siendo
pues justificados por la fe, tenemos paz con Dios, por
medio de nuestro Señor Jesu-Cristo.'' (Rom. 5: i).
":Mucho más, pues, siendo justificados por su sangre,
La Nueva Creación 197
seremos salvados de la ira por medio de El." (Rom.
5: 9). "Dios es el que justifica."-Rom. 8:33.
La justificación redunda en el derecho a la vida por
la razón de que a todas las criaturas justas les pertenece
la vida. ¿Para qué justifica Dios ahora a algunas de
sus criaturas? ¿Será con el fin de habilitarlas a vivir
eternamente como seres humanos en la tierra? La vo-
luntad de Dios con respecto a todos los que son justifi-
cados en la era cristiana o día· de sacrificio, prefigu-
rado por el día de la expiación, es la de que los tales
formen parte del sacrificio por los pecados, ofrendado
por Cristo Jesús. La justificación durante la era cris-
tiana no tiene ningún otro objeto. Al que Dios acepta
lo justifica y así queda hecho el pacto de sacrificio entre
el hombre y Dios por medio de Cristo Jesús. (Sal.
50: 5 y. El que ha sido aceptado tiene que morir puesto
que es la voluntad de Dios que muera como parte del
sacrificio del Señor. Por eso es un pacto de sacrificio.
Recordemos ahora el cuadro que se hizo en el día de
la expiación y los dos machos cabrios que se trajeron a
la corte. La corte representaba la condición de justifi-
cación. Los dos machos cabríos representaban s¡ todos,
los que durante la era cristiana han sido justificados
por fe en la sangre de Cristo. Se echaban suertes para
señalar el macho cabrio que tenia que ser sacrificado,
mostránodse de esa manera que Jehová no procede arbi-
trariamente, sino que concede a los que han sido justi-
ficados el privilegio de cumplir el pacto en que han
entrado. Los que cumplen con su pacto fueron repre-
sentados por el macho cabrío del Señor y el sacrificio de
ese macho cabrio prefiguró que los tales formarían parte
del sacrificio de Jesús. ,
Pero es bueno que averigüemos qué es lo que sacrifica
el que se consagra. Sacrifica· su derecho de vivir como
sér humano en la tierra. Pero, habiendo nacido peca-
dor, ¿cómo obtuvo ese derecho a la vida? Lo obtuvo
por haber sido justificado por Dios. El sacrificio de su
108 · La C1·eación
vida se -representó por medio del degüello del macho ca-
brío del Señor en la corte. El sumo sacerdote era el que
llevaba a cabo el sacrificio, prefigurando la realidad, en
la cual Cristo Jesús, el Sumo Sacerdote, sacrifica como
parte de su propio sacrificio a los que han sido justifi-
cados. De modo que no es el consagrado el que se sa-
crifica, sino el Sumo Sacerdote, el consagrado some-
t iéndose a hacer la voluntad ele Dios.

LLAMADA DE L.A. NUEVA CRE.A.CION


Con respecto a la nueva creación leemos : "Porque los
dones y la vocación [llamada] de Dios no están sujeto::;
a cambio de ánimo." (Rom. 11: 29 ). La dádiva ele
Dios en vida y Ella da a los que justifica. La llamada
de Dios es una invitación a una posición o plano de vida
más elevado. El que ha sido aceptado, desde su acepta-
ción tiene que vivir en un plano de vida más elevado o
no recibir vida ninguna. El apóstol dice que esa llama-
da es irrevocable, no sujeta a cambio. Concierne averi-
guar, ¿en qué consiste la llamada ? ¿Pudiera decirse
que Dios ha estado extendiendo invitaciones de una
manera promiscua para llevar algunos al cielo? La res-
puesta es N ó. Dios no llama a ningunos otros sino a
los justificados, y la justificación es con el fin <le hacer
· al justificaclo parte del sacrificio de su amado Hijo.
Dios predestinó la nueva creación; no los individuos
de ella sino la clase que habin. de componer el cuerpo:
"Y a los que predestinó, los llamó también, y a los que
llamó, los justificó también, y a los que justificó tam-
bién los glorificó." (Rom. 8: 30). Esto prueba que los
justificados son los que se llaman y que a ninguno se
llama hasta no haber. sido justificado, porque Dios no
llama pecadores a ocupar una posición elevada con su
amado Hijo. ¿A qué son llamados los justificados? La
respueeta es, son llamados a lma llamada celestial.
( H eb. 3 :1). Dios es el que los llama a una llamada o
vocación santa, como está escrito: "El cual nos ha sal-
La N·ueva Creación 199
vado, y nos ha llamado con una vocación santa, no según
nuestras obras, sino conforme a su rrüsmo propósito, y
la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los
tiempos de los siglos."-2 'fim. 1: 9.
Este texto no puede interpretarse como implicando
que la llamada empezó antes de que el mundo comenzara,
sino que el propósito de Dios, desde antes del mundo,
era el de proveer esa clase y al debido tiempo llamarla. ,.
El argumento del apóstol es el de que somos salvados y
luego llamados con esa vocación santa. El mismo após-
tol, conccrn icut e a si mismo, dice: "Llamado a ser
apóstol ele J esu-Cristo por la voluntad de Dios . . . así
como el t estimonio de Cristo ha sido confirmado entre
vosotros." ( 1 Cor. 1 : 6). Todos ellos son llamados
en una esperanza, la cual es la de alcanzar la resurrec-
ción de Cristo, el premio de la llamada celestial ele Dios
en Cristo J esús.-Fil. 3 : 11, 14.
De estos textos se hace evidente que la nueva creación
es la que es llamada, concediéndose la justificación con
el fin de que el justificado pueda formar parte del sacri-
ficio. De esto se deduce que la justificación, en conexión
con el engendro del espiritu, lo que toma lugar pudiera
decirse simultáneamente, constituye la llamada o invi-
tación a un puesto en ~l cuerpo ele Cristo. Dios justi-
fica con el fin de que pueda aceptar el ·sacrificio y en-
engedrar al t al; por lo tanto, la llama<la toma lu1•ar al
tiempo ele la justificación y del engendro del espiritu.
Recordemos ahora que el sumo sacerdote tomó al
macho cabrío del Señor y lo degolló, y luego con su
sangre fue basta el santisimo, asi como había hecho con
la sangre del novillo. La muerte del macho cabrío del
Señor prefiguró el sacrificio de la vida humana que e>
el resultado para el que Dios justifica. Entonces, e in-
mediatamente, es que el consagrado es engendrado del
espíritu como nueva criatura en Cristo.
200 La Creación.
ENGENDH.O DEL ESPIRITU
Algunos han enseñado .que la nueva criatura en Cristo
tiene la simiente de Dios o sea la inmortalidad, puesta
en ellos y que tal simiente se encuentra en el cuerpo
humano hasta que finalmente va al cielo o al infierno.
Esta doctrina no es bíblica y por lo tanto no es correcta.
Una criatura inmortal no puede morir. Si la doctrina
mencionada fuera correcta, entonces al llegar uno a ser
una nueva criatura y luego repudiar a Cristo y a Dios,
podía continuar viviendo. Por lo contrario, las Escri-
turas muestran que si alguno es engendrado del espíritu
como nueva criatura en Cristo y ele ese modo ha gustado
ele las glorias del siglo venidero, y luego cayere en apos-
tasía, repudiando al Señor, muere y no hay resurrección
ninguna para él.-HeL. 6: 4-6; 10: 26-29.
Otros han enseñado y aun enseñan que el engendro y
nacimiento de un animal ilustra el comienzo y naci-
miento de la nueva creación en Cristo, es decir, que hay
un engendro y luego un período de gestación y aviva-
miento a la vida y crecimiento. Esa doctrina es tam-
bién errónea y no se encuentra apoyada por las Escri-
turas. Si esa teoría fuera cierta no hubiera responsa-
bilidad de parte de la nueva criatura durante el período
de gestación, avivamiento y crecimiento hasta el na-
cimiento. Por lo contrario las Escrituras muestran que
la nueva criatura es responsable desde el mismo comien-
zo.-Rom. 8: 1-13.
La enseñanza bíblica es la de que la nueva criatura
comienza y es completada por medio de y de acuerdo
con los términos de un pacto. El engendro es un acto
de Jehová y por lo tanto es su parte en el pacto con el
que se consagra. "De su propia voluntad El nos engen-
dró, con la palabra de verdad, para que seamos nosotros
en cierto sentido las primicias de sus criaturas." (Sant.
1: 18). Esto quiere decir la voluntad de Dios es la de
que el que es· justificado sea entregado, y esto lo hace El
La Crucifixión Max Klinger
La sangre de Jes11s representaba su vida derramada; tenía que ser presentada en el cielo
como nna ofrenda por los pecados de la humanidad, y sin ser presentada esa sangre la gente
no podía ser santificada. Página. 226.
Deuterono-
mio 10:::?1,
d e b i t1 n-
mente in-
terpretado,
indica qu e
la •ida de
un sér hu-
mano per-
fecto tiene
que ser
dada como
S U S t i-
tuto o en
lugar ele la
•ida per-
fecta que
Dios quitó
n. Adán a
e a usa ele
la desobe-
diencia.
I'cíg. 150.
1!Jl Entierro de Jesús Max Klinuer
Solos, debido a, la. G-uerra A1tgttst Roth
"Cna ;joven y . . . feliz pareja en tretenía la esperanza
de uu hermoso y feliz hogar, adorn::ülo por niií"Os obedientes.
Y en tanto que ab ortos en su dicha ponfan los cirriient"Os de
su .fut ura fe licidad, las agencias satánicas ponen en vigor
uu~ ley de e pionaje prohibiendo l que se ponga en duela
el . (lerecho de la nación para quitat· lu vi l a humana. . • .
El·· esposo tiene que present:nse para servir en la guerra.
La; .ioven esposa, con su niño en brazos, viene n. darle s u
tl'iste de pedida; él se va para nunca más volver. Pág. 274.
Y tras la guerra
viene el hambre,
las pestes, los su-
frimientos y la
angustia que no
puede el lengua-
je humano des-
cribir. Los asilos
y los hospitales
se llenan con al·
gunos inválidos,
en tanto que
otros se quedan
sin atención al-
gu n á. Y una
multítud de viu-
das y huérfanos
quedan como
carga adicional
para los habitan-
tes del país.
Página 275.
Refugiados Herbert von Hm·komer
La Nueva Creaci6n 205
por medio de su Palabra de Verdad y ·el ejercicio . de su
santo espíritu o poder invisible.
Sobre este mismo punto está escrito :, a Asi como su
divino poder nos ha dado todas las cosas pertenecientes
a la vida y a la piedad; por medio del conocimiento de
Aquel que nos ha llamado por su propia gloria y poder ;
a causa de los cuales también nos han sido dadas sus
preciosas y muy grandes promesas; para que por medio
de éstas llegáseis a ser participantes de la naturaleza
divina, habiendo escapado de la corrupción que está en'
el mundo a causa de la conscupiscencia." (2 Ped. 1: 3,
4). El Apóstol Pedro aquí se dirige a la nueva criatura
y su argumento es el de que Dios en ejercicio de su ·,
divino poder y voluntad ha dado a algunas de sU:s cria-
turas las grandes y preciosas promesas para que por
medio de estas promesas puedan llegar a ser participan-
tes de la naturaleza divina, siendo la condición la de
que la nueva criatura tiene que cumplir su parte en el
pacto.
El engendro implica el comienzo de la nueva criatura,
con una esperanza puesta ante ella de ver completado lo
ofrecido. ¿A qué, entonces, es engendrada la nueva
criatura? El Apóstol contesta: "Dios . . . el cual' con-
forme a su grande misericordia, nos ha engendrado
para una esperanza viva por medio de la resurrección ele
Jesu-Cristo de entre los muertos; para la posesión de
una herencia incorruptible, y sin mancilla, e inmarce-
sible, guardada en los cielos para vosotros."-1 Ped.
1:3, 4: '
N o hay nada en estos textos que indique que la nueva
criatura es como un feto y que .h ay un período de ges-
tación y avivamiento. · Por el contrario, uno llega a
ser una nueva criatura desde el momento en que Dios
lo engendra y su responsabilidad comenza desde ese
mismo memento. El que es así engendrado por adop-
ción, es colocado en el cuerpo de Cristo. El apóstol
die~: "Porque no recibisteis espíritu de servidumbre
La Ureación

otra vez, para estar con temor;. mas recibistei.s espírH•t


de adopción, en virtud del cual nosotros clamamos :
¡ Abba, Padre !"-Rom. 8: 15.
BAU'riZADOS A CRISTO
Cuando tmo llega a . ser una nueva criatura en Cristo
cesa su derecho a la vida como sér humano. Ese dere-
cho a la vida humana existió solamente por un período
de tiempo bastante breve, desde el tiempo en que fue
justificado hasta que fue engendrado, lo cual es casi
simultáneo. Concerniente a este punto escribe el após-
tol : "¿Ignoráis acaso que cuantos fuimos bautizados
a J·esn-Cristo, a su muerte fuimos bautizados?" .
¿Cómo pudiera esto ser cierto de uno que atm viviera
en la tierra ? Vida significa el tener existencia y i:!l
derecho a esa existencia. El cm1sagrado solamente ad-
quirió ese derecho de existencia como sér humano al
tiempo de le justificación y engendro. Cuando fue en-
gendrado del espíritu de Dios cesó su derecho a vivir
como un sér humano. üuando es aceptado por J ehová
como parte del sacrificio del Señor es sumergido o bau-
t izaslo a Cristo. Es· bautizado a la muerte de Cristo
porque tiene que morir tma muerte en sacrificio como
murió Cristo. "Fuimos pu~s sepultados con El, por
medio del bautismo a- .la muerte, para que, de la manera
que Cri~to fue resucitado de entre los muertos por el
glorioso pocTer del Padre, asi también nosotros andu-
viésemos en la virtud: de, urut vida nueva. Pu es si hemos
venido a ser unidos con El por la semejanza: de su
muerte; ra seremos tamóién por la semejanza de su
resurrección."'-Rom 6: 4, 5.
¿Toma lugar el bautismo a la muerte de Cristo in-
mediatamente que se hace una plena entrega o consa-
gración para hacer ra vohmta-d de · Dios ? :F_,e respuesta
es Nó. La consagración puede tomar lugar algún tiem-
po antes de la justificación, pero nadie puede ser acep-
tado como parte diel sacrificio hasta no ser justificado. El
La .Nueva {h·eación 207

bautismo a la muerte de Cristo toma.btgar al ·tiempo en


que se hace el pacto entre el que ,se consagra y J ehová,
.es decir, al tiempo que es justificado y engendrado del
, espíritu santo y que pasa a formar parte del Cristo.
Esto se muestra claramente por lo que sucedió a los
discípulos. Ellos se consagraron a hacel' la voluntad
de Dios m11cho tiempo antes de .ser justificados. Su
consagración comenzó a lo menos desde que aceptaron
a Jesús como el Uesias y comenzaron a seguirlo.
Algún tiempo después Jesús les dijo : "¿Podéis be-
ber de la copa que yo voy a beber? Le dicen : Si; pode-
mos. El les dice: Beberéis a la verdad de mi copa."
(Mat. 20 : 22, 23). El bautismo a muerte de Jesús co-
menzó al tiempo de hacer su pacto y .de la aceptación
de ese pacto por Jehová. Su bautismo fue completado
al tiempo de .su .muert.e en la rcruz.
Hablando de su bautismo Jesús dijo a sus discipulos.:
ucon Ulil. bautismo [inmersión] empero tengo que ser
bautizado; y cómo me angustio hasta ·que s.e haya Clilll-
plido." Según algunos de los manuscritos Jesús dijo
a sus discípulos en conexión con Mateo 20: 22, 23 :
"Con mi bautismo seréis bautizados." Estas pa.labra,s
muestran que los discípulos no habían aún tenido ese
' bautismo. ¿Cuándo, pues, fueron bautizado a la muerte
de Cristo? La respuesta es que fue el día del Pente-
costés, cuando fueron justificados y engendrados ;por el
espíritu santo. La misma regla aplica a todos los que
son b,autizados a Cristo, es decir, s:u. bautismo a Cristo
toma lugar al tiempo de ser justificados y engendrados
del espíritu, las cuales cosas tienen que seguir a la con-
sagración.
Esta conclusión está apoyada por las inspiradas pala-
bras concernientes a la nueva criatura : "Pensad en las
.cosas que están arriba, no en las que están sobre la
tierra; porque ya morístesis y vuestr.a vida está escon-
dida con Cristo por Dios." (CoL 3 : 2, 3). E l argu-
mento del apóstol es el de qae el · engendr.a~lo murió
1
208 La Creación

como hombre al tiempo en que fue engendrado como


nueva criatura y que por lo tanto su existencia y su dere-
cho a esa e}.:istencia están escondidos por Jehová con
y en Cristo Jesús. Y que ese bautismo es enteramente
indispensable para formar parte de El Cristo, lo pone
claramente de manifiesto el apóstol cuando dice: "Por-
que cuantos habéis sido bautizados a Cristo, os habéis ·
revestido de Cristo."-Gál. 3: 27.
Existe una clara distinción entre la completación de
·un pacto y la ejecución de él. El pacto de sacrificio
entre el que se consagra y Jehová queda completado al
tiempo de la justificación y engendro del espiritu, pero
no es un pacto ejecutado o llevado a cabo, y no lo será
hasta que el que ha llegado a ser una nueva criatura
termina su carrera y entra de lleno a la gloria del Señor.
El bautismo a la muerte de Cristo toma 'lugar al tiempo
en que el pacto he quedado hecho por completo. "Ha-
biendo sido sepultado en el bautismo, en el cual también
fuisteis resucitados con El, por medio de la fe en la
operación de Dios, que le resucitó de entre los muertos."
Col. 2: 2.
Habiendo sido completado el pacto al tiempo en que
uno es engendrado como una nueva criatura en Cristo
tiene que de ese tiempo en adelante hacer su parte lle-
vando a cabo las obligaciones contraídas. Dios es justo
y es fiel, y El guarda la parte que le corresponde en el
pacto, y si la nueva criatura es fiel a su ·parte, el pacto
será plenamente consumado o ejecutado.
La nueva criatura en Cristo es ungida por el espíritu
santo. El urigir quiere decir el designar para un ofiCio
o posición de autoridad o servicio de parte o como repre-
sentante de Dios. Aarón, el sumo sacerdote, fue ungido
para servir en el oficio de sacerdote. (Ex. 40: 13). El
fue oficialmente designado .para ese puesto. La unción
de Aarón prefiguró la unción de Jesús como El Cristo.
J·esús fue ungido por o como Cabeza de la nueva crea-
ción. (Col. 1: 18, 19; J n. 1": 32). Dios ungió a Jesús
La Nueva Oreaci6n 209 ~

de Nazaret con el espíritu santo y con poder. ·(Hech.


10: 38). Fue ungido por encima de todos los demás.
(Heb.1: 9). De este modo El fue oficialmente desig~
nado como el gran Sumo Sacerdote.
Todos los miembros del cuerpo reciben la unción del
espíritu santo pero no de la misma manera en que
J esús la recibió. Un cuadro de esto se suministra en la
manera en que Aarón fue ungido. En ese caso el pre~
cioso aceite fue derramado sobre su barba y rodó hasta
los bordes de sus vestiduras. (Sal. 133 : 2). Los hijos
de Aarón llevaban bonetes y no recibieron directamente
el aceite, mas fueron contados como parte del sacerdocio
en virtud de encontrarse bajo Aarón: Esto prefiguró a
la nueva creación. Los miembros del cuerpo son ungidos
a causa de haber sido introducidos al cu~rpo de Cristo.
Son contados como una parte del Cristo, siendo miem~
bros de ese cuerpo desde el tiempo en que fueron intro~
ducidos a El. (Isa. 61: 2). Dios unigió la Cabeza, Cristo
Jesús, y unge a todos los miembros de ese cuerpo por
conducto de la Cabeza.-2 Cor. 1: 21; 1 Jn. 2: 20.
El que .es traído al cúeqio de Cristo, de hecho es una
nueva criatura. El apóstol dice: "Si alguno está en
Cristo, es una nueva criatura; ias cosas viejas pasaron
ya, he ·aquí que todo se ha hecho nuevo." ( 2 Cor. 5 : 17) .
N o dice que el que ha sido engendrado es reconocido o
contado como una nueva criatura, sino sus palabras son
claras y positivas en cuanto a que en efecto es una nueva
criatura.
¿De qué consiste una nueva criatura? La nueva cria-
tura está compuesta de una mente, una voluntad y un
corazón y un cuerpo completamente dedicados a Dios.
La mente es la facultad del sér que se emplea en escu~
driñar los hechos, pesarlos y alcanzar una decisión. La
voluntad es la facultad del sér que determina el hacer
o no hacer cierta cosa. El corazón es la facultad del
sér de la cual emanan los móviles. También es el asiento
de las afecciones. Y puesto que ninguna criatura puede
/

210 La Creación

vivir sin un organismo, encontramos que el organismo


de la nueva criatura es el cuerpo de carne.
Para -poder ilustrar debidamente las cO'sas vamos a
llamar a una nueva criatura Juan. Cuando Juan nació,
siendo de la raza adámica, era pecador. Como hombre
tenia una mente, una voluntad, un corazón y un orga-
nismo correspondientes al sér hum ano. P ero ninguna
de esas cosas las había dedicado a Dios. El espíritu o
invisible poder de Dios no operaba en su mente, y sus
esperanzas y prospectos y d -seos tendían en dirección del
egoísmo. Cuando Juan llegó a ser una nueva criatura
en Cristo, el espíritu santo comenzó a operar en él a
causa ele haber ejercitado su voluntad determinando
hacer la voluntad de Dios y porque sus anhelos son
los de hacer lo que Dios quiere que él haga y todo aquello
que es ·apropiado y recto. Al operar en él el espíritu de
Dios las cosas viejas dejan de ser y todo llega a ser
nuevo para él.
Hay tma distinción entre la creación del primer hom-
bre, ·Adán, y el comienzo de Ia nueva criatura. Adán
fue hecho de los -elementos de la tierra sin el ejercicio de
su voluntad. La nueva criatma es heeha de material
terreno enteramente dispuesto ,Y en manos de Dios, y
por medio dcl ejercicio de la voluntad humana que in-
duce al sér humano a completa y plenamente entregarse
a hacer la voluntad de Dios. Al ser creado Adán, su
cuerpo humano fue primero hecho de los elementos de
la tierra, y cuando Dios sopló en sus ,narices el 'aliento
de vidas' resultó un s~r capaz-de moverse y pensar. En
la llueva creación el ·orden es reversado. La voluntad
13e ejerce para hacer la consagración a hacer la voluntad
ele Di'Os. La mente se transforma en proporción a qtl€
el espíritu de Tiios opera sobre ella. _ ·
Pero en 'tanto que esta transformación se está llevando
a cabo, la mente necesita un cuerpo en el cual poder
funcionar. Ninguna criatura puede ·e xistir sin un cuer-
po u organismo. El cuerpo humano de Juan, el peca.aor,
La Nueva Creación 211
se encontraba dominado por la.. voluntad de la came. La
nueva criatura ahora engendrada tiene que tene:c un
cuerpo apropiado para. su nueva condición. Dios. por lo
tanto cuenta el cuerpo de carne de Juan como justo par-
que él se halla como una nueva criatura consagrada.
"Pero si el espiTitu de Aquel que resucitó a Jesús de
entre los muertos habita en vosotros, el que resucitó a
Cristo de entre Ios muC!I.·tos vivificará también vuestros,
cuerpos mortales, por medio de su espiritu que habita
en vosotros."-Rom. 8: 11. •
El texto últimamente citado no quiere decir que unif
nueva criatura es engendrada o concebida de la misma
manera que una criatura animal y que lueg,o el feto es
vivificado y da señales de vida. Dice que el que ha
llegado a ser una nueva criatura en Cristo a causa clel
espiritu santo de Dios operando en él,, es estimulado a
actividad para, usar todas sus facultades de que ha sido
dotado, incluso su cuerpo. mortal, para la .gloria de Dios.
En este texto no hay la menor idea ¡;lel avivamiento que
tiene referencia a la creación animal. La idea es la de
que la nueva criatura tiene ahora que ser el siervo de
J'ehová, y que el cuerpo de.esa nueva criatura tiene que
ser usa:do pwra la gloria de Dios, y que ser{~ usado de esa
manera en proporción a la medida del espíritu de Dios
poseído por el tal.
ESPOSO Y ESPOSA
En· la creación del hombre Dios estableció la relación
de esposo y esposa; ( Gén. 2 : 18-24). La misma: relación
se reconoce entre C:risto Jesús, el Esposo, y su cuerpo,
la esposa, que es la iglesia. ( J n. 3: 29). Esto se prefi-
guró cuando Abraham envió a su siervo a escoger a Re- /
beca como esposa :para su hijo, Isaac. Rebeca fue des-
posada. a Isaac antes de que fuera su esposa. De la mis-
ma manera los miembros del cuer,po de Cristo son. des,.
posados a Cristo. an.tes,. de que lleguen a ser parte de la
esposa. Este desposorio toma lugar ai tiempo en que.
212 La Creación
se veriíica el engendro · del espíritu y la unción. Este
desposorio está predicho por uno de los profetas de Dios.
En lo que al Señor toca, es absolutamente irrevocable, y
en tanto que la desposada es fiel, e},-iste la relación.
"Te desposaré conmigo para siempre; si, te desposaré
conmigo en justicia y en rectitud, y en misericordia y
en compasiones; también te desposaré conmigo en fide-
lidad y tú conocerás a Jehová." (Os. 2: 19, 20). Por
eso, nara poder finalmente formar parte de la esposa en
gloria, se necesita ser justo, recto, misericordioso, com-
pasivo y fiel; hasta la muerte. Todos los que lo hagan
así serán presentados sin mancha alguna ante la presen-
cia de su gloria y con gozo extremado. El Apóstol Pablo
habla de lo mismo cuando dice: "Porque estoy celoso
de vosotros, con celos que son de Dios; pues que os he
desposado con un solo esposo, para que os presente a
Crito, cual virgen casta." ( 2 Cor. 11 : 2). Cuando los
miembros de la nueva creación estén completos, esta
unión del Esposo y la esposa será consumada.-Apoc.
19: 7; 21: 2.
SANTIFICACION
En la memorable oración de Jesús a Jehová, poco
antes de su crucifixión, El dijo concerniente a los que
llegarían a ser de su desposada : "Santifícalos con tu
verdad; tu Palabra es la verdad." ( J n. 17: 17). Tam-
bién está escrito que Cristo amó la Iglesia y se dio a si
mismo por ella, para limpiarla y santificarla. (Efe.
5 : 25). "Para santificarla, habiéndola limpiado con el
lavamiento de agua con la palabra; para que se la pre-
sentara a si mismo, I glesia gloriosa, no teniendo man-
cha, ni arruga, ni otra cosa semejante, sino que fuese
santa e inmaculada."-Efe. 5: 26, 27.
El santificar quiere decir el hacer santo y purificar.
J ehová es santo porque todas sus sendas son justicia.
(Sal. 18: 30). Jesús es santo porque siempre ha estado
y está en armonía con Jehová y haciendo su voluntad.


La Nueva Oreaci6n 213
Los m'iemhros de la nueva creación tie~en que ser hechos
santos como su Cabeza. Dios los reconcilia consigo
mismo por medio de Jesu-Cristo. (2 Cor. 5 :18). Toda
]a creación es de Jehová y por medio de Cristo Jesús.
(Col. 1 : 16). Cuando uno entra en pacto con Dios se
compromete a hacer su voluntad. Al ser adoptado en el
cuerpo de Cristo es apartado para el servicio de Dios, y
tiene que estar completamente dedicado a El. Satanás
apartó a Adán y a toda la raza lejos de Dios, pero como
nueva creación, Dios tendrá una gente o nación abso-
lutamente y por completo dedicada a El, y que se negará
siquiera a tener simpatías por Satanás o por alguna
parte !le su organización.
El presente mundo es la organización del Diablo.
Esta compuesto de los elementos politico, comercial y
religioso. El Diablo ha atraído a miles de profesos
cristianos dentro de su organización. Les ha hecho por
completo entender. mal el asunto de ]a santidad. Por
medio de sus asalariados agentes y sus erróneas doctrinas
los ha hecho creer que la santificación implica una apa-
riencia exterior de santidad o piedad asumida, exhi-
biendo un grado exagerado de gravedad y solemnidad.
Con este fin muchos se visten de una manera especial y
asumen rostros largqs y solemnes y hablan con gravedad;
otros se cogen las manos y tratan de aparecer buenos,
en t anto que idean medios y maneras para cooperar con
los elementos político y comercial del mundo.
A la vista de Dios aquel que pretende ser cristiano
y al mismo t iempo apoya los poderes comercial y polí-
t ico del mundo, y se conforma o adapta a alguna parte
de él, teniendo sus simpatías alli, es un adúltero. Dios
no aprueba el que un miembro de la nueva creación
t enga relaciones con la organización del Diablo, o sea el
mundo. Asi como el esposo y la esposa deben ser fieles
el uno al otro, de igual manera debe suceder con Cristo
y su desposada. Cristo Jesús es siempre fiel, y los que
quieren permanecer como parte de la nueva creación,
214 La Creación

tienen q,ue s.erle fieles. Relativo a esto encontramos


escrito.: "Adúlte1·os, ¿No sabéis acaso que la amistad
del mundo es enemistad contra Dios? Aquel pues que
quisiere ser amigo del mundo se hace enemigo de Dios."
-Sant. 4:4.
Todo lo que no está en armonia con Dios no es. santo.
Satanás y su organización están fuera de armonia, opues-
tos a Dios, y por lo tanto no son santos. N o puede haber
comunión entre las cosas santas y las que no lo son.
"Nadie puede servir a dos. señores." (Luc.16: 13). Na-
die puede dedicarse a Dios y peTmanecer formando parte
de la organización de Satanás. Los miembros de la nue-
va creación no pueden ni siquiera abrigar simpatías
hacia la organización del diablo o hacia alguna. parte de
ella.
Los miembros de la nueva creación están en el mundo
pero no son del mundo, y por eso no deben formar parte
de él. Jesús. estuvo en el mundo pero no formó parle
de él. El dija a los miembros. de. su cuerpo: "Si fuéseis
del mundo, el mundo os amaría c.omo a cosa suya; mas
por cuanto no sois del mundo, sino que yo os he escogido
del mundo,. por esto os. odia el mundo."-Jn. 15: 19.
Es posible pensar que al llegar a ser cristiano es
enteramente apropiado el que uno tome parte y siga el
mismo curso que la parte respetable del mundo. Pero
nadie puede hacer esto y seguir siendo santo. Tiene que
dejar a otros los asuntos políticos, las reformas, las medi-
das de temperancia, etc. y dedicarse por completo al
Señor, usando las facultades de que ha sido dotado para
la gloria de Dios. De ningún otro modo puede ser santo.
El Apóstol Pablo confirma esto cuando dice: "No os
conforméis con este siglo [mundo], sino antes transfor-
máos por medio de la renovación de vues.tra mente; para
que hagáis. experiencia de cuál sea la buell:a, la acepta, y
la pe1·fecta voluntad de Dios."-Rom. 12:2.
El Diablo ha inducido a alguROs a creer que el ser
santimonia es el ser santo. U,:n hipócrita puede tener la
La Nueva Creación 215
apariencia de un santo, y hablar muy piadosamente, ser
considerado como santo por otros a causa de su quietud
y sumsión, pero no puede engañar a Dios. Lo que en
-:realidad se requiere del cristiano es que, hasta donde le
sea posible, se someta a la más elevada norma de pureza
y rectitud, y que por completo se dedique al Señor, usan-
do sus facultades para gloria de Dios, negándose a apo-
yar en lo más mínimo la organización del Diablo. El
verdadero sentimiento del corazón de un cristiano se
expresa en las siguientes palabras: "Porque Tú eres
grande, y haces maravillas, 'l'ú sólo eres Dios. Ensé-
ñame tu camino, oh J ehová; andaré en tu verdad ; aúna
los sentimientos de mi corazón para t emer tu nombre."
"Guíame en el camino eterno."-Sal. 86: 10, 11.
El que ora ele esta manera con diligencia tratará de
hacerse del lado de Dios y se negará a conformarse con la
organización del Diablo. Los caminos del mundo son
engañosos. Aun cuando antes el cristiano deseabn. las
buenas cosas de él, ahora sin .embargo ya no le toca tener
ni aun siquiera simpatía por él. "Por medio de tus pre-
ceptos he adquirido entendimiento; por tanto aborrezco
todo sendero falso." (Sal.119: 104). Para andar en el
camino recto, las afecciones del cristiano no pueden en-
contrarse divididas entre la oTgani.zación de Dios y la1
organización del Diabl0, o algo que forme parte de ella.
El cristiano, pam ser 'Santo, tiene que esforzarse por
pensar en las cosas que 'están arriba y no en las que están
'Sobre la tierra. (Col. 3 ~ 2). Para poder ser santo el
hijo de Dios tiene qilll.e c0nformarse a la imagen del santo
Hijo de Dios. (Rom. 8: 29). La palabra imagen signi-
fica parecido o semejanza. El Hijo de Dios hizo frente
a las tentaciones de Satanás y permaneció fiel en su de-
voción a Dios. (Mat.4: 1-11). La organización del
Diablo es el mundo, y el cristiano se encuentra en el
mundo. Jesús venció el mundo siendo obediente al Pa-
dre, y El dijo: "En el mundo tendréis tribulación, mas
tened buen ánimo, yo he vencido al mundo."
216 · La Creación

También dice el Apóstol: "Teniendo pues tales pro-


mesas, amados míos, limpiémonos de toda inmundicia
de la carne y del espíritu, perfeccionando la santidad en
el temor de Dios." ( 2 Cor. 7 :1) . El adversario ha in-
ducido a algunos a creer que todo lo que según este texto
se requiere es que uno se limpie de 'los hábitos inmundos
de la carne y de los malos pensamientos y palabras. Por
supuesto que esto tiene que hacerse, sin embargo la gente
noble del mundo se esfuerza por limpiarse de las inmun-
dicias de la carne, .de las inmundicias de la mente y de
las inmundicias de palabra y de conducta. Pero aper-
cib:ímonos que el apóstol dice además : "Perfeccionando
la santidad en el temor de Dios." Esto quiere decir una
completa separación de todo lo que tiene que ver con la
organización del Diablo y estar completa y absoluta-
mente dedicado a Dios.
También está escrito concerniente a la nueva creación:
"Porque tanto el que santifica como los que son santifi-
cados, de una misma son: por cuya causa no se aver-
güenza de llamarlos hermanos." (Heb. 2:11, 12). Los
miembros de la nueva creación han sido santificados
por medio de Cristo Jesús. Por eso El no se avergüenza
de llamarlos sus hermanos. Esto de por si es una prueba
concluyente de que el que recibe la aprobación de Dios
tiene que ser absolutamente santo y estar dedicado sin
reservas a Dios, así como lo estuvo Jesús. Los miembros
de su cuerpo tienen que ser como El y a todos ellos les
toca declarar su nombre y cantar las alabanzas de J e-
hová. Esto es santificación en el sentido más absoluto de
la palabra.
LEY DE LA NUEVA CREACION
Ley significa una regla de acción, aprobando lo que
es recto y desaprobando lo malo. Las leyes de la tierra
son hechas para los injustos, para restringirlos y para
proteger a la gente. La ley de la nueva creación es la
regla de acción por medio de la cual debe ser gobernada
La Nueva Creaci6n 217
y dirigida. Jesús, como el Oficial Ejecutivo de Jehová,
mostró la regla de acción o ley por medio de la cual la
nueva creación debe ser gobernada cuando dijo: "Un
nuevo mandamiento os doy, que os améis los unos a los
otros; según yo os he amado, que también vosotros os
améis los unos a los otros. En esto conocerán todos que
sois discípulos mios, si tenéis amor los unos a los otros."
-Jn. 13: 34, 35.
El amor es la completa expresión de la carencia de
egoísmo. Cuando Jesús puso su vida para que el hom-
bre pudiera tener una oportunidad de alcanzar vida,
mostró de ese modo su carencia de egoísmo. (Jn.
15: 13). La orden es que los miembros de la nueva
creación deben amarse los unos a los otros así como
Jesús los amó a ellos. El amor es el cumplimiento de la
ley. (Rom. 13: 10). Esto implica que si cada cual está
directamente controlado en su curso de acción hacia
sus hermanos por un altruista deseo de hacerles bien, y
está poniendo en operación ese deseo hasta donde le es
posible, está cumpliendo la ley. Esto implica que cada
cual tendrá un vivo interés en el bienestar de su hermano
y que se esforzará por hacerle bien en cambio de hacerle
daño .
. Luego el Señor puso la regla en cuanto al curso de
acción de la nueva creación hacia Jehová y hacia Jesús :
"Si me amáis, guardaréis mis mandamientos. . . . El
que tiene mis mandamientos y los guarda, ese es el que
me ama; y el que me ama, será amado de mi Padre, y
yo le amaré y me manifestaré a él."-Jn.14: 15, 21.
Un código ele proceder es la declaración de reglas es-
pecíficas concerniente al curso de acción que debe se-
guirse en ciertos casos. En tanto que los miembros de
la nueva creación se encuentran en la tierra, tendrán
algunas .dificultades a causa de su incapacidad de proce-
der perfectamente. Por supesto que el Sefíor supo esto,
y por eso proveyó un código ele proceder que debe ser
·seguido en esos casos. Ese código de proceder es ·como
218
si~ue: ((Si tu hermano pecare c_o ntra tí, vé, mani:féstale
su 1culpa entre tí y él solo ; si te oyere, habrás ganado a
tu l1ermano. Si no te oyere, toma contigo uno o dos
más para que de boca de dos o tres testigos. conste 'toda
palabra. Y si no los oyere a ellos, dilo a la iglesia; mas
si no oyere a la iglesia, sea para tí como un gentil y un
publicano."-:M:at. 18.: 15-17.
Si un miembro de la nueva cread6n ofende a otro y
pide perdón, debe ser perdonado. Si oiende a una igle-
sia de la nueva creación y pide perdón, debe ser perdo-
nado. Los hombres dicen: "Perdono pero no olvido."
Esto no procede de . Dios .sino .de Satanás. N o puede
haber verdadero •perdón, mientras se tenga presente la
acción mala del. que la ha .cometido. Cuando. alguno
se ,arrepiente y pide, perdón, el perdón deb.e de .ser abso-
luto, asi como el .Señor nos :perdona. Jesús nos enseñ6
a orar: "Perdónanós nueshas deudas así como nosotros
perdonamos a nuestr.os ,deudores."-Mat. 6:14. 1

En cuanto. a la·cantidad de veces que se debe perdonar,


el código ,de proceder indica que no hay limites : "En-
tonces llegándose· P.edro, le dijo .: Señor, ¿cuántas veces
pecará mi l;lel'mano contra mí, que yo haya de perdonar.?
¿hasta siete? Jesús le aice: N o te digo : Hasta siete;
sino: Hasta setenta veces siete."-:M:at. 18: 21, 22.
N o existe ningún otro código .de prpcecler .para que la
nueva creación se gobieme y arregle las dificultades
que 0curren entre sus miembros, .a no .ser .el ·que el Señor
ha indicado. Todo curso contrario q¡.:¡.e se siga, es im-
propio, no importa· lo que los hombres digan.
SE REQUIERE FID.EIJIDA.D
D1os es siempre fiel. Cuando El hace una promesa
la guarda. (Isa. 46: 11). "Fiel es Dios, por medio de
quien habéis· sido llam¡tdo,s ala comunión de Jesu-Cristo
nuestro Señor." ( 1 Cor. 1: 9). "Fiel es .Aquel que os
llama, el cual también lo hará asi." (1 Tes. 5; 24).
J .esús siempr.e ha sidoiiel, y a .causa de.suii.delidatil ganó
La Nueva 01'eaci6n 219
el títuTo de uEi testigo fiel y verdadero." ( Apoc: 19 :11).
Puesto que Dios ha encomendado a cada uno de los en-
gendrado y ungidos del. espíritu ciertos deberes que lle-
var a cabo, se requiere de cada uno de ellos que sea fiel
como mayordomo del Señor. (1 Cor. 4:: 2). La Cabeza
de la nueva creación, en su calidad de Sumo Sacerdote,
dice a los miembros de su. cuerpo : "Sé fiel hasta la
muerte· y yo te daré la corona de vida." (Apoc. 2: 10).
Lo que busca la nueva creación es vida, y la condición
de obtenerla es la fidelidad.
EKiste una diferencia entre lealtad y fidelidad. El
Señor requiere ele los miembros de la nueva creación que
sean ambas cosas, leales y fieles. El ser leal implica el
ser obediente a la letra de la ley divina, esto es, el servir
a Dios conforme a las reglas de acción que han sido
puestas en las Escrituras para dirigirnos. La fidelidad
implica no solamente la obediencia a la leb-a y al espíritu
de la ley o reglas de acción, sino también una devoción
absoluta al Señor en todo tiempo, sin siquiera por un
momento el rendir obeuiencia al enemigo ni simpatizar
con ninguna parte de su organización mundana, la cual
es la organzición del Diablo. Lealtad •y fidelidad _por
lo tanto implican 'el llevar a cabo el pacto hecho, impul-
sado" por la absoluta devoción al Señor.
El inspiTado •t estigo· dei 1Señor; qu'ien fue miembro de·
la nueva· creación, escl'ib1~ : ('T:fermanos, poned el mayor
empeño· en hacer segura vuestra vo c~ción· y elección :
porque si hacéis estas cosas,. DO' tropezaréis nunca." (2
Ped. 1 : 1 O). Las cosas mencionadas err conexión con
este pasaje son la' fe, el p'Oder (virtud)., lÁ ciencia o· co-
nocimiento; la templanza la paciencia, la piedad, el amor
f1·atemll.l y el amor pa;ra: con todos. El hac!:)r estas cosas
dilig,tmtemente es el llevar a caoo la parte de la nueva
eriafura len el pacta. Su organismo, el cual es el cuerpo
de came, debe servir ~ Dios. El hacer su llamada y
elección segura quiere decir que tiene que hacerla firme,
estable y cierta, y esto lo. consigue pur mediotd'e•la gozosw
220 La Creación
ejecución de ·la voluntad de Dios en armonía .con los
términos del pacto de sacrificio.
Por lo tanto, el servir al Señor con la mente, con la
voluntad y con el corazón, lo mismo que con el cuerpo,
es esencial para el bienestar de la nueva criatura. Su
cuerpo y todas sus facultades deben ser usadas para la
gloria de Dios. Está escrito: "¿No sabéis que vuestros
cuerpos son miembros de Cristo?" ( 1 Cor. 6: 15). E sta
es la razón por la cual en las Escrituras se prohibe a una
nueva criatura contraer matrimonio.con una persona que
no sea consagrada.
El sér humano justificado llega a ser parte del sacrifi-
cio de Cristo J esús. El Sumo Sacerdote es el único que
ofrece el sacrificio. Los miembros del cuerpo no pre-
sentan su propio sacrificio. Sin embargo, los miembros
del cuerpo tienen que mantenerse a sí mismos en actitud
de entera devoción al Señor. Con ese fin está escrito:
"Atad la víctima con cuerdas, y traédla hasta los cuernos
del altar." (S al. 118: 27). En armonía con esto está
escrito: "Ruégoos pues, herman0s, por las compasiones
de Dios, que le presentéis vuestros cuerpos como sacrifi-
cio vivo, santo y acepto a Dios, culto racional vuestro."
· En sustancia, el texto últimamente citado dice : 'Ha-
béis sido engendrados y ungidos, y en tal capacidad go-
záis del mayor privilegio. Vuestros cuerpos son santos
porque son parte del cuerpo de sacrificio del Señor.
Vuestro servicio razonable es el de procurar que vuestros
cuerpos y las facultades con que está dotado, sean usados
para la gloria del Señor.' Por está razón toda criatura
nueva, según los términos de su pacto, está obligada a
usar sus facultades y su organismo en el servicio del
Señor según se le presentan las oportunidades. El opo-
nerse al servicio del Señor, por le tanto, implica el estar
en oposición a los propios intereses de la nueva criatura.
La tendencia natural de la carne es mala, pero la
carne o humanidad que ahora se reputa. como justa a
causa de· la justificación, tiene que ser traída a sujeción
La Nueva Creación 221

a la nueva . voluntad la cual está en armoni.a bon Dios.


La voluntad de la nueva criatura debe estar siempre en
armonia con la voluntad de su Dios porque la nueva
criatura se comprometió sin reservas a hacer su volun-
tad. Por eso la nueva criatura medita en la Palabra de
Dios y por medio de ella trata de apercibirse de su vo-
luntad. Por esta razón es necesario q.ue la nueva cria-
tura estudie la Palabra de Dios no de vez en cuando sino
constantemente. Y en proporción a que estudia la Pala-
bra y busca en ella la voluntad de Dios, ocurre una trans-
formación, y por eso hallamos escrito: "Transformáos
por medio de la renovación de vuestra mente, para que
hagáis experiencia de cuál sea la buena, la acepta y la
perfecta voluntad de Dios."-Rom. 12: 2.
Una criatura que no ha sido regenerada usa su mente
y su voluntad para la gratificación de sus deseos egoís-
t as. · Esa mala t endencia y curso de acción es lo que re-
cibe el nombre del hombre viejo, porque esa es la tenden-
cia del hombre caído. El "hombre viejo" tiene que ser
puesto a un lado y el "hombre nuevo" debe crecer.
El hombre nuevo es la nueva criatura en Cristo con
la mente, voluntad corazón y organismo dedicados al
Señor. Como tal crece y se desarrolla. Como tal se en-
cuentra creciendo hasta llegar a la estatura de un hom-
bre perfecto en Cristo Jesús. (Efe. 4: 13). Para llevar
a cabo el deseado fin el apóstol dice: "Si es así q1,1e le
habéis oído, y habéis sido enseñados de El, según es la
verdad en J'esús, que os desnudéis tocante a vuestra
pasada manera de vivir, del hombre viejo· [el hombre de-
pravado] que es corrupto, conforme a las concupiscen-
cias engañosas ; y que seáis renovados [hechos de nuevo]
en el espíritu [el poder invisible] de vuestra mente
[intelecto], y que os revistáis del hombre nuevo, el cual
según la imágen de Dios es creado en justicia y santidad
verdadera."-Efe. 4: 21-24.
Los miembros de la nueva creación no son criaturas
duales, sino son una nueva criatura. El cuerpo de carne
222 La e~reación

en el organismo de in! cria~ura que ahora es, nueva. La


expresión "criaturas duales'' es motivo de confusión y
muestra ·que. las palabras del apóstol han sido mal en-
t endidas. El apóstol dice: "M:as aunque nuestro hom-
bre exterior s.e vaya decayendo, el hombre interior em-
pero va renovándose de día en día." ( 2 Cor. 4: J.6). m
hombre exterior es aquello que es visto de todos. El
hombre interi01: quiere decir lo que Di:os mira en noso-
tros, es decir, la mente, la voluntad y e} corazón plena-
mente dedicados a El y en annonia con los términos del
pacto. Los homores se fijan en, y juzgan según, la apa-
riencia exterior. P ero Dios :mj.ra el corazól,l y la mente,
y los intentos, y juzga de acuerdo con lo que en ellos
encuentra. (Heb: 4: 12 ). Lo que en realidad da a en-
t ender el apóstol es que el "hombre exterior," el cnal es
visto por las otras criaturas en la tierra, está pereciendo,
pero que si está siend0 usado ·en armonía con los térmi-
nos de su pacto con Dios, el "hombre interior," es decir,
la mente, la voluntad y el corazón, está creciendo día
tras día más y más ·a la semejanza del Señor. 1
Al escribir 1t la iglesia ele Colosia., el Apóstol •P ablo
hace una erara di stinción entre el hombre viejo y el
nuevo. El dice : "Haced puee morir vuestros miembros
que están sobre la tierra." (Col. 3 : 5 ~. La: expresión~
"haced inorir'? qiuere decir el acabar con o el privar ele
vida. ' En sustancia: las palabP~l del apóstol • impli~a.n :
'Si sois nuev-as•criaturas en Cristo, buscad1 las cosas que
1

están ani:ba en cambio de laJs que están sobre' l'a tiena:


H abéis muert0 como hombres, 'p ero· com0 nuevas criatu~
ras vuestm vida! e!ltw escon'dida! con ·Cristo en D 1os.' P0r
lo tanto: "Haced mmir rvuestros miembros que están
sobre la1 tier:vw; forniml:c:lói:r, inmrmdicial pa:Siranes il:rnro.l
derada'.S,' malos' deseos} y avaricia, la cual les: idola'trí.a; a
causa de J.ras .cuales cosas viene' la ira de !)Íos isobre los 1

hijos1 de la desobediencia .• .. mas ahora renunciad tam-


bién vosotros <todas: estas cosas: l Í'l.'al, enejo, . malicia,
maledicencia, palabms l;!J(l).rpes ttC' cvuestlla¡ ooca.'' Por
La Nueva C1·eación 223
medio ,dre estas palabras él define 'a l ''lwmhre viejo" y
muestra que es el que toma el nombre de hombre caído.
Luego el apóstol muestra el curso de acción del "hom-
bre nuevo" y como el "hombre nuevo" es renovado por
meclio del conocimiento .del Señor : "Y os habéis reves-
tido del hombre nuevo, el cual se va renovando en cien-
cia, según la imagen de Aquel que le creó. . . . Reves-
tíos pues; como los escogidos de Dios, santos y amados,
de una tierna compasión, de benignidad, de humildad de
fmimo, de mansedumbre, de longanimidad ; sufdéndoos
los unos a los otros, perdonándoos los unos a los otros,
si n1guno ,tmriere queja contra o.tr.o; asi ·como .el. Señor
iiambién ¡os ha per.donado1 haced ,así también vosotros¡
Y sobre toda& estas cosas, revestíos de amor, que es el
:vinculo de la perrección. Y .reine en vuestros corazones
la paz de Dios, ra la !Cual también .. sois llamados en un
solo cuerpo, y 1sed agmdeciuos;''-Col. 3: 10, ·12-15.
Cuando Dios •arrojó a Ad,án deL Ed~ en la se,ntencia
entonc~s 1aplicada ,dij·o entre ,otr~ , cosas,: , "Y pondré
f:jnemistad .entre tÍr y¡ la ,mujer, ¡y ,entre tu simiente y tu
simiente; ésta te quebrará la tcabeza, y tú le quebrarás
el calcañar." {Gén. 3 ~ 15). Ambos términos, "mujer"
y "serpiente" fueron usados de una . manera simbólica.
r,a simiente de la mujer es la nueva •creación. La si-
miente.de la serpiente está .compuesta de las agencias de
Satanás en la 1tierra, especialmente los hipócritas maes-
tros que pretenden servir el Señor pero que en verdad
y •hecho sirven. al Diablo.-Jn .. 8: 44..
Satanás, el Diablo,. sabiendo que Jesús es el Ungido
de Dios y por lo tanto "la simiente de la promesa," se
esforzó por acabar con El. Esto trató de hacerlo alm
antes de que naciera el niño. (:M:at. 1: 19, 20). Nue-
vamente trató de destruirlo cuando, era un niño. (Mat.
2: 16-18). Por meclio del irraude•y del engaño trató de
acabar con Jesús cuando El comenzó su ministerio.
(Mat.¡4(: 1-lf)., No. logrando ..conseguir ,su ·intento,
Satanás¡hizo .que -el clero .d,e ~e ..tiempo acusara; ,a Jesús
224 La Creación

ue toda clase de crímenes. Estos enemigos de Jesús


trataron de acabar con El porque El les decía la verdad.
J csús les dijo que ellos componían la "simiente" del
Diablo. "¿Por qué no entendéis mi lenguaje? por lo
mismo que no podéis escuchar mi palabra. Vosotros
sois de vuestro padre el Diablo, y los deseos de vuestro
padre queréis cumplir. El fue homicida desde el prin-
cipio, y no permaneció en la verdad por cuanto no hay
verdad en él. Cuando habla mentira, de lo suyo habla,
porque es mentiroso, y padre de mentiras."---Jn.
8:43, 44.
Esos hipócritas miembros del clero y los que los sopor-
taban formaban parte del mundo del cual Satanás era
y aún es el invisible gobernante. Fue la oposición y
contradicción a Jesús por estos hipócritas de rostros
piadosos la que El sufrió. (Heb. 12: 3'). El se encon-
traba en el mundo pero sin ·formar parte de él. "Y El les
dijo: Vosotros sois de abajo; yo de arriba soy: vosotros
sois de este mundo; y no soy de este mundo." ( J n.
8: 23). El fue la gran luz que vino a este mundo. (Jn.
9: 5). Sus discípulos y los que desde ese entonces lle- ·
garon a ser sus seguidores verdaderos han recibido pro-
vecho por medio de esa gran Luz. Por siglos el nombre
de Dios ha sido hecho un reproche por el Diablo y su
"simiente," y ese reproche ha llegado ahora hasta J esús,
como fue predicho por el profeta.-Sal. 69 : 9 ; Rom.
15: 3.
Siendo parte de la nueva creación, los miembros del
cuerpo de Cristo tienen que sufrir asi como El sufrió.
"Porque a esto mism<;> fuistes llamados; pues que Cristo
también sufrió por vosotros, dejándoos ejemplo, para que
sigáis en sus pisadas." ( 1 P ed. 2 : 21). Asi como El no
fue parte del mundo malo de Satanás, tampoco forman
parte de él los miembros de su cuerpo, los verdaderos
seguidores suyos. Así como El fue odiado por el mundo,
de la misma manera los miembros de su cuerpo lo son.
A los miembros de su cuerpo dijo Jesús: "Sí el mundo
La Nueva Oreaci6n 225

os odia, sabéís que me odió a mi antes que a vosotros. Si


fueseis del mundo, el mundo os amaría como a cosa
suya; mas por cuanto no sois del mundo, sino que yo os
he escogido del mundo, por esto os odia el mundo."
( J n. 15: 18, 19). Y t ambién, al darles instrucciones
finales antes de· partir, les dijo: "Estas cosas os he di-
cho para que en mí t engáis paz. En el mundo t endréis
tribulaci ón, mas t ened buen ánimo, yo he vencido al
mundo."-Jn. 16: 33.
A muchos se les ha hecho extraño por qué es tan difi-
cil ser un verdadero y ..constante cristiano. La respuesta.
es que el mundo, siendo la organización del Diablo,
siempre ha opuesto todo lo que está en armonía con
Dios, y que el Diablo y sus agencias han hecho sufrir a
los cristianos por causa de su fidelidad a Dios. Si se
tiene en cuenta que el mundo incluye la parte invisible
de la organización del Diablo, que controla a la gente,
y que el clero por lo general es una parte del mundo, es
fácil ver el por qué muchos miembros del clero que pre-
tenden ser cristianos persiguen a los verdaderos y hu-
mildes seguidores de Jesús.
La nueva creación es separada y distinta del mundo y
por lo t anto tiene que estar siempre del lado del Señor.
Millones de gente han pensado que son cristianos y al
mismo tiempo han tratado de mantener el favor de los
financieros, de los políticos y del clero, y al hacer eso
han caído en las mismas garras de Satanás. (1 Jn. 2:15;
San t. 4: 4). Es un hecho bien conocido que las perse-
cusiones religiosas que han sobrevenido a los verdaderos
cristianos han sido instigadas por otros que pretendían
ser cristianos. Asi como E saú persiguió a J acob, de la
misma manera los cristianos nominales han perseguido
a los verdaderos. Esaú prefiguró a los hipócritas y frau-
dulentos tal llamados cristianos, en tanto que J acob pre-
figuró a los verdaderos. Esaú prefiguró a los represen-
tantes del Diablo en tanto que J acob prefiguró a los re-
presentantes del Señor.
226 La Creación
OBJBTO DE LOS 'SBFRl:$ENTOS
¿Por qué era necesario que J-esús sufriera a manos del
enemigo? ¿Tuvieron sus sufrimientos algo que ver con
ei rescate -o 'la ofrenda por el pecado? La respuesta es
Nó, por la razón de que como hombre perfecto fue que
Adán perdió el derecho a su vida, y la perfecta vida hu-
mana de Jesús constituye el l'escate, sin ser neces ar~o
ninguno ·ae los sufrimientos ocasionados por la contra-
dicción de pecadores. Al-considerar estas cosas es bueno
tener en C"\}enta que el degüello de lo.':l animales repre-
sentando la muerte del Señor se llevó a cabo en la corte,
la cual representa la condición de justificación, y que la
presentación de la sangre por la o-frenda por el pecado
se llevó a cabo en el santísimo, el cual representa el
mismo cielQ,' Los sufrimientos de Jesús se muestran
fuera de la corte, en el campo. Entonces, ¿por qué
sufrió Jesús? Escrito está: "Porque los cuerpos de
aquellos animales, cuya sangre es presentada por el sumo
sacerdote en el Santuario, como o:frenda por el pecado,
son quemados fuera del 'Campamento. Por lo cual tam-
bién Jesús, para santificar al pueblo de Dios, con su pro-
·pia sangre, padeció fuera de la puerta. Salgamos pues
a El fuera del campamento, llevando su vituperio."-
Heb. 13: 11-1'3.
A los •oj-os 'de io·s judíos el que moría en h cruz era
un pecador maldii:o '}JOl' Dios, ¡porque estaba escrito en la
ley: "Ma1aito ele Dios es 'e1 colgado en un madero."
(Deut. 21: 23; -Gál. G:1'3). La sangre de ·Jesus repre-
se'nVliba su vida -deramada; tenia que •ser presentada en
el cielo como ·una ofrenda por los pecados de la humani-
dad, y 'Sin ser p1·esentad:a •esa osanf:,'l'e la gente no puede
13er santificada. '" Porque ~on una 'Sola ofrenda ha '}Jerfec-
dionado pam -siempre a los que .son sant'ifi~ados." (Heb.
10~ 14). Pe;ro antes ile ·que Jesfls 'Pudiera aparecer en
el cielo y presentar su vida como nn·a ofrenda por el
pecado, le ·er.a p1·edso mostmr que 'e ra digno ile presen-
tarse ante Dios. Para hacer ·esto i'e -era"'n'ecesaTio prebar
La Nue.va Orcaci.6n 22)('

su fidelidad. a Dios. Tenía. que ser sometido a. la. más


severa clase de prueba, y tenía que demostrarse leal y
fiel.
El sufrir la oposición de los pecadores, los re.presen-
tantes del enemigo, lo cual estaba indicado en la ·parte
fuera del campamento, fue la gran cruz de sufrimrento
que tecó llevar a Jesús, y que tuvo su pleno cumpli-
mient0 cua:m:rilo fue eDucificado. como un pecador. I.1as
cosas. que sufrió J es.ú:s; fueron las siguiemtes : El repro-
che lanzade al nombre del Padre; el repreche que cayó
sobre sí mismo a causa de su servicio fiel al Padre; la
contradicción de los pecadores, y el ser clasificado como
un pecador, muriendO' eomo tal en. la cruz. El soportó
todos esos sufrimientos y se reg.ocij aba en ellos perque.
1:\ab.í:a que estaba llevando a cabo la voluntad de su Pa-
clre. El pacto que había hecho era el de cumplir la vo-
luntad de Dios, y era la voluntad de Dios. la de. que. su
lealtad y fidelidad fue:ran de este. modo probadas. Si
sop0rtaba la prueba,, saliendo victotioso de. ella, c0n est0
mostraba su perfección.
Pm: eso está: es.c rito: "Aunque. eta. Rijo, aprendió
la obediencia. por las cosas que padeció ; y habiendo sido
hecho perfecto, vino a. ser Autor de eterna salvación a
todos los que le obedecen." ( Heb. 5 : 8, 9). Esto en si
mismo prueba concluy,entemente que. por medio del su-
frimiento El aprendió la obediencia y fue de est~ modo
perfeccionado como el Autor de la eterna salvacióu de
la raza humana. "Pues convenía. a Aquel para: quien son
todas las cosas, y por medio de quien son todas las cosas,
habiendo de llevar a muchos hijos a la gloria, hacer per-
fecto al Autor de su salvación por medio de los padeci-
mientos."-Heb. 2: 10.
Se pretende por alg,unos que la. perfección de Jesús
,consistió en su "desarrello de catácter." Es,to no puede
ser ciert0 por cuanto Jesús ha sido y es un perfecto ca-
rácter. Un perfecto ca1:áeter es una criat,ura. o sér per-
fecto. Jesús fue un hombre pedecto y por· lo bnto un
228 La Creación
carácter perfecto. ¿Qué se da a entender, entonces, por
ser hecho perfecto? Quiere decir que El probó su leal-
tad y fidelidad bajo las condiciones más adversas y a
pesar del sufrimiento. De esE: modo probó que era fiel
y que siempre lo seria, y que Jehová podía eternamente
confiarle la más elevada posición en todo el universo. Y
siendo de este modo perfeccionado tenia el derecho de
llegar al cielo como el gran representante de Jehová, y
allí presentar su sangre como una ofrenda por los peca-
dos en provecho de la raza humana. Esta es la razón
por la cual el apóstol dice: "Por lo cual también Jesús,
para santificar al pueblo, con su propia sangre, padeció
fuera de la puerta."-Heb. 13: 12.
Dios se propuso a tener una creación que fuera siem-
pre fiel y leal a El. N o poclia poner a examen a esta
nueva creación a no ser que sometiéndola a la más
severa prueba. Jesús fue puesto a prueba y se mostró
fiel y leal, y como resultado recibió el titulo de "El 'l'es-
tigo Fiel y Verdadero." Le hubiera sido imposible pre-
sentar su sangre en el cielo como ofrenda por el pecado
a menos que se hubiera probado fiel y verdadero. Ef,!a
prueba tenía que ser con y por medio de sufrimientos.
A causa de su completa obediencia a la voluntad del
Padre, aun hasta el sufrir una muerte ignominiosa, Dios
le concedió la naturaleza divina y le dio el puesto más
elevado en el universo, como está escrito: "Sino que se
desprendió de ella, tomando la forma de un siervo,
siendo hecho en · semejanza de los hombres. Y siendo
hallado en condición como hombre, humillóse a si mis-
mo, haciéndose obediente hasta la muerte y muerte de
cruz. Por lo cual Dios también le ha dado nombre que
es sobre todo nombre; para que en el nombre de Jesús,
toda rqdilla se doble, tanto de lo celestial, como de lo
terrenal, como de lo de debajo de la tierra; y toda lengua
confiese que Jesu-Cristo es Señor para gloria de Dios
Padre."-Fil. 2: 'l'-11.
La Nueva Oreaci6n 229
MIEMBROS DEL CUERPO
Los que alcanzan el privilegio de ser miembros del
cuerpo de Cristo de necesidad tienen que alcanzar la
misma naturaleza. Todos los miembros de la nueva
creación han de tener la naturaleza divina. Todos tie-
nen que aparecer ante la presencia de Dios. Seria en-
t erament e irrazonable el permitir que los miembros del
cuerpo obtuvieran su exaltación sin haber sido probados
habiendo Dios requerido de su Hijo que pasara por la
prueba. Por lo tanto está escrito: "Porque a esto mis-
mo fuistes llamados; pues que Cristo también sufrió
por vosotxos, dejándoos ejemplo para que sigáis en sus
pisadas."-1 Ped. 2: 21.
Los sufrimientos de los miembros del cuerpo no son
con el fin de suministrar precio alguno de rescate, sino
con el fin de que lleguen a ser parte del Cristo. Por eso
está escrito: "Y ahora me regocijo en los sufrimientos
por vuestra causa, y estoy cumpliendo de mi parte lo que
falta de los padecimientos del Ungido, en mi carne, por
causa de su cuerpo, el cual es la congregación. (Col.
1:24, Diaglott). Cada uno de los miembros de la
nueva creación tiene que probarse leal y fiel a Dios, y
el apóstol aquí se regocija de que tiene el privilegio de
participar de los sufrimientos de Cristo por ser ésta una
condición precedente a la de formar parte de El Cristo.
También está escrito: "El espíritu da testimonio a nues-
tro espíritu, que somos hijos de Dios, y si hijos, luego
herederos; herederos de Dios y coherderos con Cristo, si
es así qt!oil sufrimos con El, para que también seamos
glorificados con El. Pues yo calculo que los padecimien-
tos de este tiempo presente no son dignos de ser compa-
I'ados con la gloria que ha de ser revelada en nosotros."
-Rom. 8: 16-18.
Como una prueba adicional de que cada uno de los
miembros de la nueva creación tiene que ser sometido a
prueba y demostrax su fidelidad, leemos : "Por tanto yo
lo sufro todo a causa de los escogidos, para que ellos
23@. · · La. C1·eación

también consigan la salvación que es en Cristo Jesús,


con glGria eterna. Fiel es este dicho~ Porque si mori-
mos con El, vi.viremos también con El; si sufrimos, tam-
bién reinaremos con El; si le negáremos, El también
nos negará a nosotros." (2 Tiro. 2: 10-12). Cada uno
de los miembros del cuerpo tiene que morir como sér
humano y morir una muerte de sacrificio para pode11
:vivir en el plano divino, y tiene que. sufl'ir la contradi.c-
ción de pecadores y la oposición del Diablo, asi como
Jesús la sufrió, y le es preciso el demostrar su fidelidad
bajo esas pruebas para que pueda ser. hecho parte del
g~·¡m sacerdocio real y rei111ax con Cristo.
Muchos erróneamente han cre[do que Dios ha estado
tratando de llevarse unos. cuantos al cielo para q:ue es-
capen el tormento eterno. Esto es lo que han enseñado
los predicadores. El diablo es el autor de esta enseñanza
y es con el fin de. hacer aparecer a Dios mal a los ojos
de la gente, apartando de. Dios a muchos que en sinceri-
dad ejercitan. sus mentes·. Cuando un cristiano entiende
la razón de sus sufrimient0s puede regocijarse, porque
pueue entender que es una oportunidad que se le ofrece
de probar a Dios que es leal y fiel, y esa oportunidad es
motivo de regocij.o para él, no importa en q;ué forma
vengan los sufrimientos. Cuando se apercibe de que el
mu:ado es la organización del Diablo y que la oposición
vk ne de esa fuente, moti van do su stúrimiento, se rego-
cija en sus stúrimientos.
Esto fue lo que el Apóstol Pedro quiso decir cuando
escribió : ''Amados rrúos, no extrañéis el fuego de tri-
bulaciones que está sucediendo entre vosotros, para pro-
baros, como si algtm.a cosa extraña os aconteciese; sino
antes regoc~iáos, por cuanto sois participantes de los
padecimientos de Cristo ; para que también, cuando su
gl0ria fuere revelada, os regocijéis con gozo extremado.
Si sois vituperados por el nombre de Ciisto,. bienave.ntu-
mdos sois;. porque. el espíritu de glolia y de Dios des-
cansa sobre v.osotros·. Mas no sufra ninguno de vosotros
La Nueva Creación 231

como homiciaa, como laurón~ o como malechor, o como


entrometido en rusuntos ajenos; empero si alguno sl!lfre
como crisiano, no ·se avergüence, sino antes glorifique a
Dios en el tal rrombre."-1 Ped. 4: 12-16. ·
Esta es la razón por la cual el cristiano no puede estar
de parte del rimndo y al mismo tiempo ser fiel. N o
puede tomar parte en la guerm porque el Señor le or-
dena que no lo haga. Puesto que el reino de Dios no es
de este mundo malo, asi también sus seguidores tienen _
que esperarse hasta que su reino sea establecido. N o
pueden aprobar los injustos sistemas de este mundo, sino
que tienen que esperarse hasta que Dios por medio de
Cristo establezca su justo gobierno.
El Apóstol Pablo era un hombre de importancia. Era
en gran manera celoso de la ley. Cuando llegó .a ser
cristiano comprendió los privilegios que ante él se pre-
sentababn y pudo decir que él reputaba como basura
todas las cosas con tal de ganar a Cristo. "Para que yo
le .conozca a El, y el poder de $ U resurrección, y la co-
munión de sus padecimientos, participando en la seme-
janza de su mueTt e ; si de manera alguna yo alcance a la
resuo:ección de entre los muertos." (Fil. 3: 10, 11). El
apóstol no d~io que estaba sufriendo para desarrollar
carácter, ni que estaba .sufriendo en provecho ele alguna .
otra persona, sino que participaba de los sufrimientos
de Cristo y deseaba conformarse a su murte para poder
participar .de "su resm:recci6n."

LA REStmRECCION
Al tercer dia de la muerte de J esús, Dios lo ievantó
·de entre los ·muertos. (l <Jor.15 ·: 4) . Cuando estuvo en
la tierra El dijo que 'Dios le hahía concedido el gran
privi~~gio <de la 'inmortalidad o vida ·en si mismo. ( J n.
·5 :26). Cuando fue levantado -de entre los muertos, 'fue
levantado como la expresa ima:gen de Jehová, con la
naturaleza divina, poseyendo la 'inmortalidad, y para
'nunca más morir. (Heb.l~ '3; !Apoc.l -: 18). La r esu-
232 La Creación
rección de Cristo Jesús a la naturaleza divina es una
garantia de que los miembros de su cuerpo tienen que
ser levantados a la misma naturaleza e inmortalidad.
Por eso es que al cristiano se le dice 'que busque honra,
gloria e inmortalidad. (Rom. 2 : 7) . La inmortalidad
,- es la vida en el plano más elevado de existencia. Está
escrito: "Porque como en Adán todos ellos mueren, asi
también en Cristo todos serán vivificados. Pero cada
uno en su propio orden: Cristo la primicia; luego los
que son. ele Cristo al tiempo de su venida." ( 1 Cor.
15:22, 23 ). Cristo Jesús fue el primer sér en resucitar,
y los miembros de su cuerpo son resucitados al tiempo de
su segunda venida, siendo resucitados a la inmortalidad,
para recibir una herencia incorruptible.
. El Apóstol Pablo escribió: "Porque ya moristeis, y
vuestra vida está escondida con Cristo en Dios. Cuando
Cristo, el cual es vuestra vida, sea manifestado, entonces
vosotros también seréis manifestados juntamente con El
en gloria." (Col. 3: 3, 4). El argumento aqui es el ele
que uno que ha sido engendrado a la naturaleza divina
ha muerto como sér humano y que su uerecho a la vida
.está escondido con Cristo Jesús, y que cuando Cristo
aparezca en su segunda venida se llevará a cabo su resu-
rrección. Concerniente a la misma clase también está
escrito: "Amados, ahora somos los hijos de Dios, y to-
davia no ha sido manifestado lo que hemos de ser; sabe-
mos empero que cuando El fuere manifestado, nosotros
seremos semejantes a ·El, porque le veremos asi como El
es."-1 Jn. 3: 2.
Esto es una prueba de que los miembros de la nueva
creación mientras se encuentran en la tierra no saben
qué clase de gloria será la de ellos en la resurrección,
pero saben que serán como Cristo Jesús por cuanto le
han de ver asi como El es y serán miembros de la fami-
lia real del cielo. Esto es también corrobarado por las
palabras: "¡Dichoso y santo es el que tiene parte en la
La Nueva Creación 233

resurrección primera!" sobre los tales la segunda muerte


no tiene poder, sino que serán sacerdotes de Dios y del
Cristo, y reinarán con éste mil años."-Apoc. 20: 6.
Concerniente al tiempo de la resurrección está escrito:
"Porque el Señor mismo descenderá del cielo, con man~
dato soberano, con voz de arcángel y con trompeta de
Dios, y los muertos en Cristo se levantarán primero."
( 1 Tes. 4: 16). Esto prueba que los cristianos que han
muerto durante la era cristiana no irian inmediata-
mente al cielo al morir, sino que estarían muertos hasta
el tiempo de la segunda venida del Señor, y que cuando
El tomara su poder y reino serian resucitados en la resu-
rrección primera. La expresión "mandato soberano"
quiere decir una orden con autoridad, lo cual implica
que se refiere al tiempo en que el Señor, como el gran
Sumo Sacerdote, tome autoridad y .comience su reino.-
Sal. 110: 2.
La nueva creación completa· constituirá el gran real
sacerdocio de Dios prefigurado por Melquisedec. Esta
nueva creación también será la "simiente de la promesa"
o la "simiente de Abraham" ya completada. Constituye
la más importante obra de la creación de Dios. 4 esa
creación es a la que se le concede la inmortalidad, y ser-
virá eternamente para gloria de Jehová Dios.
Han pasado más de seis mil años desde que Jehová
creó al hombre perfecto, Adán, el cual se mostró infiel.
Por más de dos mil años Dios motivó el que se ,h icieran
grandes cuadros vivientes prefigurando el de~arrollo de
la nueva creación. Por cerca de dos mil años más ha
estado seleccionando y desarrolland~ esta I).Ueva creación.
En todo este período la raza humana ha s~rido enfer-
medades, dolor . y muerte. Satanás se ha aprov~¡!chado
·en todo este tiempo para. apartar de Dios ·Ias :qientes ele
la gente. · Muchos, entre ellos un gran número de cris-
·tianos profesos, se han preguntado: ¿Por qué ha ·habido
tánto sufrimiento entre las gentes ·de la tierra?
CAPITULO IX

St'glos de Su:fr,imien.t.(}s .Humanos

L
EEMOS en !Romanos :s·: 22: ""'Porque ·sa·bemos que
la creación entera gime :c0nsigo masma, ~ ·a una está
en tdolores de ]i>arto hasta ahora." No solamente
encontramos es0 en el reg¡i.stro di:vino, sino que también
todo ·sér que 'Vive es testigo del hecho de que la ra21a
humana suf'l'e. N o hay en la tierra ni una sola criatm·a
perfecta y ninguna ha 'Vivido -sin su.friT. Desde la cuna
hasta la tumba cacla ser ha experimentado .dolor. :Mu-
cllon han preguntado la razón. Ha llegado el 'tiempo
para que entendamos esto.
La muerte es el gran enemigo. Ese enemigo ha lle-
gado hasta todo hogar. m !Diablo ,ha hecho .queJa gente
crea que Dios es el -responsable de la muerte entre la ,raza
humana. Por el conirario, la muerte resultó a causa
del -pecado, y el pecado eDtró en el mundo a .causa de la
desobediencia del hombre. El ,mismo Diablo es .el que
ha inducido a la desobediencia. El hombre v.oluntaria-
mente desobedeció .a Dios y .se hizo deLlado del enemigo.
Cuando algún sér querido muere, los que lamentan su
¡partida frecuentemente dicen: a cómo puede un Dios
;justo y amante arrebatar .a nuestros ·seres .queridos?"
Cuando la gente entienda el plan de Dios y los pasos
que tiene que dar en su desarrollo, no se hara esa pre-
gunta. La gente entonces se dará cuenta del por ,qué y
no se lamentará como los que no tienen esperanza. No
puede haber esperanza sin conocimiento,, y por lo 't anto
es necesario ,saber la wrdad éle Dios, la que muestra el
camino que conduce a la vida y a la felicidad.
¿ No podía .Dios hab& ,hecho .al homb:vc incapaz .de
234
Siglos de S·ufrimierctos Humanos 235

pecar, impidiendo así: tanto sufrimiento?' Por supuesto


que sienuo todopoderoso, Dios pocHa haber hecho a su
criatura humana de tal modo que le hubiera sido impo-
sible pecaT. P eTo el hecho de· que no lo hizo asi prueba
que hubo una buena y suficiente razón para ello. El
registro dado es que Dios hizo al hombre a su imagen y
semejanza. Eso implica que lo dotó con sabiduría., ju. -
ticia., amor y poder, e indudablemente quería Dios que
el hombre nsara esas facultades de otra: manera no se las
hubiera dado.
Dios dio· al hombTe un cuerpo, mente, voluntad y afec-
ciones, y fue su volnntad la de que el hombte usara esas
f acultades. Para conseguir esto era preciso q:ue el hom-
bre puuiera cletcTminaT si hacia o no hucía lo que se
pTesentn,ba ante él. Al hombre se dio la información ele
que el obedecer a Dios era bueno y que el clesobedecerle
era malo, era un pecado, y tendTía por consecuencias la
muerte. Puesto qtte el hombre estaba dotado ele fuerza
<fe voluntad, él tenia la facultad ele escoger entre el bien
y. el mal, tomando las consecuencias. De haberlo Cl'eaclo
DioS' incapaz de escoger el mal y sólo competente para
hacel" el bien, hubiera sido· una: maquina sin llibertacl de
acción inteligente.
Dios creó al hombre perfeci!@>, corrfO'n ne a su propia
volunta:cl (Apoc. 4: l:Jl)'. Dios no· se complace en cosas
m~tia:s~ (Sal. 5: 11)·. D:ios no· obllga a ninguna de sus
criatuTas a ha:cer lo bueno,. S:u··pEarr es· que la: felicidad
y la. vida sean el resu.FtaJo· paTa los· que hagan el bien y
que sufran la muerte' los· que hagan el mal. Si Dios
l'ru:biera cTeado· a~ hombre incapaz' de· cometer el mal,
hubiera sido equival'ente- a: obliga'l!lo ro hacer el bien. La
O'becEiencia: compul1soria no trae' verd'reaeTa felieidac'P a la
criattua nr redunda>en· el máS' alta hon0r del Cread'or.
Dios· es amor y por lo. tanto es enteramente· exento de
Ggoismo. El desea. que sus ctiaturas inteligentes le amen
y le· sil·va11 :por amor· a El'. 'Tal no hubiera podido ser
el resultado a: no ser· que-. e:Jt servicio fu:era voluntario.
236 La Creación
Para poder ser feliz el hombre tiene que ser exento de
egoismo, como Dios. ¿Pero si Dios carece de egoísmo,
por qué castigó la desobediencia? Porque El es bueno, y
toda cosa que está en oposición a El es mala, y el sér
que se niega a obedecer a Dios se hace del lado del mal,
lo cual trae la infelicidad para si mismo y no complace
al Creador. El amor vela por el bienestar de los demás,
y al negarse Dios a castigar la desobediencia hubiera re-
dundado en detrimento del hombre en vez de ser en su
provecho.
Si Dios ejerciera su poder para obligar al hombre a
que le obedeciera, sería inconsistente, y esto es imposible
puesto que Dios no puede ser inconsistente. ¿Y por
qué sería inconsistente? Porque el obligar al hombre a
que le obedeciera sería egoista de parte de Dios y Dios
no puede ser egoista. El quiere que sus criaturas sean
como El, es decir, que sean impulsadas por el amor. El
no ejerce su poder para obligar a la obediencia, sino que
lo eje1·ce para beneficio del que desobedece. La criatura
que ama a su Creador y que le ama supremamente, le
obedecerá. Por está razón El anuncia su método de
proceder por medio de Jesús su amado Hijo:
"El que tiene mis mandamientos y los guarda, ese es
el que me ama; y el que me ama, será amado de mi
Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él. . . . Si
alguno me ama, guardara mi palabra; y mi Padre le
amará y nosotros iremos a él, y haremos morada con él.
El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra
que habéis oido no es mia, sino del Padre que me envió."
Por la misma razón está escrito: "El amor es el cum-
plimiento de la ley." (Rom.13 : 10) .. Esto quiere decir
que el que impulsado por su carencia de egoísmo en su
devoción a Dios, y el que obedece por esta razón, hace
frente a todos los requisitos de la ley de Dios. Si Adán
hubiera ejercitado su amor hacia Dios hubiera sido obe-
diente a El. Su esposa era parte de Adán, y por razones
egoístas él quería no perderla, y por eso desobedeció.

1
Siglos de Sufrimientos Rumano~ 237

Jehová nunca hace, ni nunca hará, nada en contra del


amor. El dio a los israelitas la siguiente orden : "Y
amarás a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda
tu alma y con todas tus fuerzas." (Deut. 6: 5). Alguno
pudiera decir: ¿No fue esa una regla para obligar a los
israelitas a que le amaran, y no fue eso inducido por el
egoísmo de parte de Jehová? N 6. Los israelitas eran
imperfectos. Dios era su verdadero y sólo amigo. La
obediencia a Elles traía la vida. No podían obedecerle
a menos que le amaran, y por lo tanto Jehová les dio
esa orden no por razón de egoísmo de su parte sino por
el bien y provecho de ellos. Esto muestra la incambiable
regla de Jehová de que todos los que quieran gozar de la
vida y de la felicidad tendrán que amarle con todo su
corazón, con toda su mente y con toda su alma o sér.
Para ser por completo feliz el hombre necesita hacer
uso libre de su voluntad, pero que ese libre uso de su
voluntad sea impulsado. por su amor o carencia de ego-
ismo. Por experiencia se da cuenta de que si está im-
pulsado por el egoísmo y hace el mal, le toca sufrir.
También se da cuenta de que si está impulsado por el
amor hace lo bueno y es por ello bendecido. Como niño
aprende que si pone su dedo en el fuego se quema, y que
si no lo pone, nada le molesta. Por experiencia el hom-
bre también aprende, de la misma manera, la lección del
bien y del mal. Dios tenia el propósito de que la apren-
diera.
Pueden haber varias razones para que Dios no hubiera
hecho al hombre incapaz de pecar, y para que haya per-
mitido por tan largo tiempo que el mal haya predomi-
naclo, pero a lo menos hay tres buenas y suficientes
razones : ( 1) La de por medio de la experiencia dar al
hombre una completa oportunidad de apercibirse de los
malos efectos del mal y de que la vida y la felicidad se
derivan solamente del bien hacer; ( 2) la de suministrar
tiempo suficiente para la selección y desarrollo de la
• 1

238 La C1·eación
nueva creación por medio de la cual el mal ha de i!cr
eJ\.iinguido y han de venir a la raza humana las ben di-
ciones de vida y de felicidad, y ( 3) la de suministrur
tiempo suficiente para que en el mundo naciera w1a
:razonable cantidad de seres humanos para que llenaran
la tierra y se gozaran en ella, después de haber aprendido
las lecciones necesarias.
LECCIONES POR MEDIO DE L A EXPERIENCIA
Todos los actos de Jehová hacia Adán estuvieron mar-
cados por su bondad. Por medio de la manifestación de
su amante bondad se propuso mostrar al hombre las
bendiciones que le resultar5an del bien hacer. El hizo
a Adán perfecto en cuerpo y mente, y lo revistió de
autoridad como principe de toda la creación terrena.
Hizo que las bestias del campo y las aves del cielo apa-
recieran ante Adán para que recibieran nombre y reci-
bieran sus órdenes. Hizo para Adán un hogar perfecto
y suplió todas sus necesidades.
Lue"'o, como punto culminante de la exhibición de su
bondad hacia Adán, le creó una perfecta compañera, lo
más hermoso que los ojos de éste habían contemplado.
Ella fue el gozo de su- corazón y su delicia. Juntos reco-
gían flores y frutas y se sentaban a contemplarlas a las
orillas de los hermosos ríos en tanto que escuchaban el
murmullo de sus olas que apresuradas besaban las ver-
des riberas que no dejaban sus aguas rebozar. Entre-
lazados se paseaban en medio de los árboles en tanto
qne sus alados súbditos los entretenian con melodiosos
gorgeos. Con paso majestuoso, y cogidos de la mano,
ascendían a las cimas de los cerros y desde alli paseaban
su mirada por las lej anas colinas, las majestuosas mon-
t añas, los hermosos valles, los tranquilos rios y los fron-
dosos y verdes árboles mecidos por el viento.
¿Qué más podría desearse? Un hombre perfecto, una
mujer perfecta, en un hogar perfecto, con perfecto vigor
y salud? Todas estas cosas proveyó Dios para ellos,
S ·iglos de Suf1·imientos Httmanos 239

siendo manifestaciones de su bondad. Puesto que había


sido informado por Dios de sus privilegios y derechos, es
probable que Adán hablara a Eva de ellos. Probable-
mente le dijo algo más o menos como sigue:· 'Eva, todas
estas hermosas y maravillosas cosas que contemplamos
son nuestras ].Jorque Dios, nuestro Creador, nos las ha
dado. De todos los hermosos frutos de este jardín pode-
mos comer, excepción hecha del árbol del conocimiento
del bien y del mal, del cual Dios ha dicho que en el día
que de él comamos moriremos. Mientras que seamos
obedientes a nuestro Padre todas estas bellezas serán
nuestras, para nuestra dicha. l<Jl nos ha dado la orden
de que trai!"amos a la existencia hijos y que hagamos
esta tierra un lugar glorioso para que moremos en ella.'
Todo lo que Adán y Eva tenían procedía de Dios. El
era su Dador .de Vida, por lo tanto era su Padre. P ero
ahora, como príncipe y princesa de la tierra era preciso
ponerlos a prueba para que pudieran demostrar el apre-
cio que sentbn por la bondad de Dios y el deseo que
tenían de estar siempre en armonía con El. ¿Por qué
no habían de amar a Dios? El era su verdadero Amigo.
Si no sentían aprecio de la bondad manifestada en pro-
vecho de ellos 'no podrían complacer a su Hacedor. Dios
no los obligaría a que le obedecieran, pero sí les sumi-
nistraría una oportunidad de probar su amor hacia El,
lo cual podían hacer siéndole obediente. Fue muy poco
lo que Dios exigió ele ellos. El negarse a obedecer im-
plicaba la pérdida de todo lo que tenían. Dios, pre-
viendo que podrían negarse a obedecerle, impulsado por
su bondad y su sabiduría, dio los pasos consiguientes
para proveer algo en provecho de ellos mismos y ele sus
élescendientes.
Eva cedió a la seductora influencia y a las fraudu-
lentas representaciones de Lucifer, y desobedeció a Dios.
Pero Adán no fue engañado. ( 1 'l'im. 2: 14). El se amó
más a sí mismo que a Dios. El quiso darse gusto a sí
mismo siguiendo en compañía de Eva, en vez de obede-
240 La Creación
cer a 'Dios y verse privado de ella. Allí fue donde Dio's
comenzó a enseñar al hombre que el amor desinteresado
es el único móvil que conduce a la felicidad. Pero sin
la experiencia no hubiera el hombre podido ap:render la
necesaria lección. Puesto que Eva era parte de Adán,
ella participó en la sentencia de muerte impueata. al hom-
bre. (Rom. 5: 12). A causa de su desobediencia este
perfecto par se vio privado de su hermoso hog;ar y salie-
ron a aprender por medio de la experiencia las duras
lecciones del pecado y de la muerte. Por un largo pe-
riodo de tiempo pasaron ellos por estas terribles expe-
riencias y luego volvieron al polvo de donde habían sido
tomados.
Los hijos de .Adán y Eva. vinieron a la existencia
cuando ellos se encontraban atravezando por esos sufri-
mientos y penas. MM cabe pregunta.r: ¿Por qué los
hijos de Adán por todas las edades se han visto obligados
a sufrir los efectos de la mala acción de sus padres?
¿Fueron esos hijos de alguna manera responsables por
los actos de sus padres ? A la última pregunta contesta-
mos que nó, porque ellos no se encontraban g~zando de
la existencia cuando se cometió la desobediencia; pero
los efectos de esa mala acción fueron visi.tad~s sobre ellos,
y el hecho de que se hizo de ese modo muestra la sa.bi-
duría de Dios. Y al hacer proTisión por adelantado
para esta contingencia Dios no solamente mostró su sa-
biduría sino también su amor por el hombre.
La provisión hecha por Dios fue la de que si el hom-
bre desobedecía y sufría la pena de muerte El suminis-
traría su redención y al debido tiempo le daria una opor-
tunidad de ser restaurado a la vida. Esta provisión para
la redención era por medio de la muerte voluntaria y el
sacrificio del que El proveería para ello. De haber !!ido
perfecto cada uno de los hijos de Adán en vez de haber
nacido sufriendo los efectos del pecado de sus padr.es,
tendrían que haber sido sometidos a prueba de obedien-
cia a Dios. .Algunos hubieran obedecido y hubieran
Siglos de Sufrimientos Humanos 241

por lo tanto obtenido la vida, pero otros hubieran vio-


lado la ley de Dios y hubieran tenido que morir eterna-
mente a menos que se hiciera provisión para ellos por
medio de una redención. Y en caso de proveerse una
redención, hubiera sido necesario un rescate para cada
uno de ellos.
Dios en su sabiduría y su bondad incluyó a todos en
la transgresión para de este modo, por medio de un solo
sacrificio perfecto, redimirlos a todos. Las Escrituras
muestran que tal fue su an·eglo. (.Gál. 3: 22). El per-
mitir que los hijos de Adán nacieran en pecado y fueran
formados en iniquidad fue también una manifestación
de la bondad de Dios para con ellos, puesto que la reden-
ción ha de venir a todos por medio de un solo sacrificio.
Toda la raza humana procede de Adán, y todos han
nacido imperfectos a causa del pecado. (Sal. 51: 5). To-
dos han t enido ocasión de experimentar los funestos
resultados del mal. A través de las edades Dios ha es-
Útdo presentando a la atención de algunos el hecho de
que el servirle y obedecerle conduce a la vida. Estos, a
su vez, en su capacidad de testigos de Dios, han ense-
ñado la lección a otros, y al debido tiempo de Dios todos
serán traídos al conocimiento de esta gran verdad. (Hab.
2 : 14). To¡los entonces sabrán que Dios es amante y
bondadosG y que tado lo que está fuera de armonía con
El es malo, y que por lo tanto todos los que han de vivir
y han de gozar de la felicidad tendrán que estar en armo-
nía con El.
A menos de que todos hubieran sido incluidos en· esta
conden·ación de Adán resultante del pecado, el sacrificio
de .Jesús no hubiera podido ser efectivo para todos. Pero
de este modo todos fueron hechos partícipes de los bene-
ficios de ese sacrificio y tendrán una oportunidad de
obtener la vida, así como está escrito: "Luego, así como
por medio de una sola transgresión sentencia vino a to-
dos los hombres para condenación, asimismo también
por medio de un solo acto de justicia, sentencia viene
242 La Creación

a todos los l10mbres para justificación de vida. Ppes de


la manera que por medio de la desobediencia de un
hombre, los muchos fueron constituidos pecadores, así
t ambién por 'medio de la obediencia del otro, los muchos
serán co¡;lstituidos justos."-Hom. 5: 18, 19.
Por medio de la observación y sufriendo los efectos
del mal, la humanidad aprenderá la lección de los funes-
tos resultados del mal. Algunos ya han aprendido esta
lección, pero ahora ha llegado el debido tiempo para que
todos los hombres sean traídos a un exacto conocimiento
de la verdad para que sepan algo con respecto a Dios, a
su amante bondad, y que se aperciban de que hace mucho
tiempo Dios hizo provisión, por medio de la muerte ele
Cristo, para que todos tengan una oportunidad de alcan-
zar la vida.-1 Tim. 2: 3-6.

"LA SIMIENTE" •
N o solamente ha provisto Jehová, en su infinita bon-
dad, un rescate para todos, sino que también hizo pro-
visión de que aquel que fuese obediente hasta la muerte
para proveer ese rescate fuera exaltado al más elevado
pu~sto en el universo y recibiera el premio de la vida
inherente, siendo hecho su Oficial Ejecutivo y el instru-
mento para bendecir a todas las familias de la tierra.
Su amado I-Iijo obtuvo ese premio. Pero el plan de Dios
es que asociados con Cristo Jesús est€n 144,00 miembros
de su cuerpo, y que éstos, todos juntos, constituyan "la
simiente de promesa" por medio ele la cual han de venir
las bendiciones.
Mucho tiempo ha sido necesario para enseñar al hom-
bre esta parte concerniente al gran plan de Dios y para
juntar de entre ellos los que han ele formar esa "si-
miente." Dios prefiguró primeramente por medio de
algunos 'cuadros lo que iba a hacer y luego comenzó a
desarrollar esa nueva creación. Mucho tjempo se ha
necesitado -uara probar a los · que han ele ser miembros
<le la nueva' creación y que s(')rán altamente exaltados a
Siglos de Sufrimien.tos ·Humanos 2..J3

un lugar en la familia real de, Dios. Las tareas de res~


tringir el mal y efectuar la bendición de las f amilias de.
l'a tierra no podían comenzar hasta que Dios 'no hubiera.
desarrollado el instrumento que ha de usar con ese fin.
Una vez que esto se haya hecho todos tendrán una plena
y razonable oportunidad para ser probados indiv~dual­
mente por la vida y tma oportunidad de apercibirse de
que la obediencia a Dios conduce a la vida y a la feli-
cidad.

LLENAR LA TIEHRA , ,
J ehov~, hace mucho tiempo, hubiera podido .proveer la
redención, , y hubiera podido haber desarrollado la si-
miente y restaurado a los obedientes, pero de haber hecho
eso, solamer.{te los qu13 hasta entonces h;ubie~ap. nacido
habrán recibido los beneficios del .sacrificio de rescate.
Durante los seis mil años desde Adán han nacido millo-
nes de seres humanos. Si todos los seres humanos que
han vivido en la tierra fueran traídos ·a "la perfección y
la tierra fuera nuevamente traída a su condición en el
Edén, habría suficiente cantidad para que cómodamente
habitaran la tierra y para que produjera lo necesario para
todos. Dios hizo la tierra para que fuera habitada por
el hombre, y por consiguiente se propuso proveer
una suficiente cantidad de seres humanos que al debido
tiempo la habitaran. Por lo tanto es fácil percibir que
ha sido en el ejercicio de su sabiduría y bondad que
Dios ha pennitido que transcurriera el tiempo necesario
para que un número suficiente de seres humanos nacie-
ran antes de comenzar la tarea de bendición conforme a
( su promesa.
Todos deben sentirse seguros de que siendo el caso que
Dios ha prometido el restringir el mal y el bendecir a
todas las familias de la tierra con una oportunidad de
vida y de felicidad, El es lo suficientemente capaz para
llevar a cabo esa promesa y que lo hará al debido tiempo.
Pero los millones de gente que han vivido y han muerto,
244 La Creación

¿tendrán ellos una oport-unidad para ser bendecidos?


¿En dónde se encuentran ahora los que han muerto y
cuál es su condición? ¿Qué han estado haciendo todos
estos siglos en que el mal ha predominado, y de qué
modo han de recibir la prometida bendición? Estas
preguntas son pertinentes al asunto en cuesti6a y su
respuesta se desea por todos los que sinceramente buscan
la verdad.
Citamos nuevamente las palabras del Apóstol Pablo.:
"Porque sabemos que la creación entera gime consigo
misma, y a una está en dolores de parto hasta ahora.'~
( l'tom. 8 : 22). El apóstol muestra qué es lo que la
creación espera: uPorque la ardiente expectación de
la creación aguarda la manüestación de los hijos de
Dios.'' (Rom. 8: 19). Los hijos de Dios constituyen la
nueva creación, la que Jehová ha estado escogiendo por
varios siglos, y por medio de la cual, según la promesa,
han de venir las bendiciones.
CAPITULO X

¿En Dónde Están los Muertos?

M ILES de millones han muerto desde que Adán


fue arrojado del paraiso. ¿A dónde fueron al
morir, y cuál es su presente condición?
Dos respuestas se dan a esta pregunta, las cuales son
enteramente opuestas la una de la otra. Si la una es
cierta, la otra de necesidad es falsa. Concerniente a la
Palabra de Dios está escrito "Tu Palabra es la verdad."
( J n. 17 : 17). Por lo tanto, al tratar de determinar
cuál es la respuesta verdadera y cuál es la falsa, ambas
tienen que ser medidas por la Palabra de Dios. Por con-
veniencia, al considel'ar la prueba y argumento, designa-
mos una de las respuestas como lo respuesta laica, y la
otra, como la respuesta del clero.
La respuesta laica es : Todo hombre es un alma mor-
tal. Cuando muere, queda por completo muerto, fuera
de la existencia y no está consciente en parte alguna.
Tiene que continuar eternamente en tal condición a me-
nos que Dios lo despierte de la muel'te y le dé una opor-
tunidad de vida. Esta es la respuesta verdadera.
La respuesta del clero es : Todo hombre tiene un
alma inmortal, y cuando muere, solamente el cuerpo
muere, pero el alma continúa con vida. Si la persona
es buena, cuando muere va inmediatamente al cielo, y
alli está eternamente gozando de dicha. Si no es buena
y no ha satisfecho la justicia divina por pecados eoroe-
tidos y ya perdonados, le toca ir al purgatorio en donde
n ada puede hacer por si mismo pero en donde puede ser
ayudado por las oraciones de gente piadosa en la tierra.
Si es mala, al morir inmediatamente pasa al infierno,
un lugar de tormento eterno. Alli tiene que estar eter-
245
24:6 La Creación

namente sufriendo tortur~, sin la menor esperanza de


alivio. Esta respuesta es íalsa.1 , J
La verdadera respuesta a la pregunta tiene de necesi-
dad que estar de acuerdo con pios y en , armoní.a con
todas las partes de su plan trevelado. La esenc~a del
plan divino revelado es que Dios ha provisto un medio
para que el hombre alcance.la vida eterna p0r medio del
sacrificio de su aJ,llado Hijo, Cristo Jesús. ,(Jn. 3 : 16).
La enseñanza del clero concerrliente a los muertos, a
saber, .que todo s~r humano tier¡.~ .'vida inherente y que
no puecTe morir, y qu,e al tiempo de la disolución del
cuerpo el "alma buena" va al Cielo' Y, el' "alma mala" va
al infierno, es ente¡:amente . üicohsistente con el plall
di vino. 1
' •; • · •
Por cuat{o mil ~ños habífm estado ~uriendo· 'lo~
miembros de ' la raza 'humana ~uando 'cristo 'vino ' al
mund_o a da~ .su vida en rescate por la liun:-anidad: ,(Jn.
10: 10; 6: 5'1-53; n~at. 20 : 28), La respuesta del clero
a esta pregúnta conce1:nie~te· a.l estado de lÓs muertos . es
enterame~te inconsistente' con ef plan de Dios~ espedal-
1 1
mente CO)Í refeÍ·endia al s.aci·i!icio 'a'e res¿ate, porque si
esos míllones
• l
se encontra]:an• en(
'el cicló o. en el infierno
'f' • { '

de naua1 .les
¡•
aproveGharín. el rescate. Si1! la respttesta del
0
1 ' j !

clero es correcta, la muerte de Jesús no tuvo valor al-r.


~ ¡ 1 1 ,, , : , .

guno. .. , , . . • 1
¿ Q~lé es el hombre? .. ¿Es. el hombre un alma ? posee
un alma ? Las Escrituras contestan: "Y Jehová Dios
formó al hombr~ del pofVO 4e la tierra, y sopló en sus
nariees el 'aliento de vida, y el hombre vino a ser alma
viviente." ( Gén. 2: 7). Las palabras ' alma ' y sé]: son
sin6n1mas. Nadie ti ene. un alma, pero t odo sér humano
es un alma. Las Es9rituras declaran que los bueyes,
los asnos y las ovejas ·son almas. (Núm. 31: 28 ). Los
predicadores quieren que la gente crea que uno lleva un
alma con uno y que cuando muere, el cuerpo deja de ser
pero que el alma va a algún otro lugar. Esa teoría no
encuentra el menor apoyo en las Escrituras.
¿En Dónde, E stán. los Muertos? 247

INMORrrALIDAD '
En apoyo de su respuesta de que los muertos están
conscientes, en el cielo, el purgatorio o el infierno, el
clero tiene que hacer creer que el hombre tiene un alma
inmortal. Es fácil ver que nadie podría estar en un
infierno de tormentos eternos o en un purgatorio si podía
ser por completo destruido. Por lo tanto, la mente
directora e instigadora de esta doctrina d.ijo: 'Es pre-
ciso enseñar que el hombre tiene un alma inmortal.' Si
Ias Escrituras prueban que el hombre es un alma mortal,
y que está sujeto a la muerte, entonces las doctrinas del
purgatorio y del tormento eterno son falsas.
Cuando Dios hizo al hombre lo colocó en el Edén y le
dijo que en el dia que desobedeciera moriTia. ( Gén.
2: 17). La ley de Dios fue así claramente indicada.
¿ Quiso decir Dios que solamente el cueTpo moriría? La
respuesta que dan las E scrituras es : "El alma que pe-
care, ésa morirá." (Ez.18: 4, 20 ). "¿Cuál es el hombre
que vivirá y no verá la muerte? ¿quién librará su alma
del poder del sepulcTo ?"-Sal. 98 : 48.
Jehová había dicho a Adán que el comer ele cierto;
:frut o resultaría en su muerte. Como Satanás deseaba
apartar al hombre de Dios y hacer que· le rindiera a él
homenaje, ideó la manera de conseguir su propósito.
Se acercó a I~va y le dijo: '·Podéis comer de ese fruto;
si coméis de el seréis sabios como Dios. N o moriréis.
De este modo indujo a Eva a que desobedeciera a Dios.
El único apoyo que dan las Escrituras a la teoría de
la i-nm01·ta1idacl del alma son las Palabras ele Satanás.
Dios dijo: ":M:oriréis." El Diablo pijo: "De seguro
que no moTiréi .. " ¿A quién creeremos, a Dios o al
Diablo? El clero ha aceptado las palabras de Satanás
y por lo tanto han rechazado las de Dios. Satanás· fue
el padre de las mentims. Jesús dijo al clero de su
tiempo. 'Vosotros sois de vuestro padre el Diablo, y
los deseos de vuestro padre queréis cumplir. El fue
llomicida desde el <·pl'incipio, y ,no permaneció en la

\
248 La Creación

verdad, por cuanto no hay verdad en él. Cuando habla


mentira de lo suyo habla, porque es mentiroso, y padre
de mentiras."-Jn. 8:44.
Ni aun siquiera el mismo Diablo ·es inmortal. Las
Escrituras claramente muestran que al debido tiempo
ha de ser destruido. ( Heb. 2: 14; Eze. 28 : 18). Con
propiedad podemos hacer esta pregunta a los miembros
del clero: . Si el infierno es un lugar de tormentos eter-
nos por medio del fuego, y si el principal fogonero es el
Diablo, ¿quién va a atizar el fuego cuando el Diablo sea
destruido?
A los cristianos se les dice que busquen la inmorta-
lidad. (Roro. 2: 7). Nadie busca lo que ya posee. Dios
es el único que posee inmortalidad, como está escrito:
"El cual sólo tiene inmortalidad, habitando en una luz
inaccesible; a quien ninguno de los hombres há visto,
ni le puede ver; a quien sea honra y poder eterno."-!
Tim. 6:16. .
Cuando Jesús estuvo en la tierra no fue inmortal,
sino que Dios le dio inmortalidad al tiempo de su resu-
rrección. (Jn. 5: 26; Apoc. 1: 18). A los fieles vence-
dores se les ofrece la inmortalidad como lma gloriosa
recompensa, según está escrito: "Esto mortal será puesto
en inmortalidad." ( 1 Cor. 15 : 53). Sería inconsistente
de parte del Señor el haber permitido que esas palabras
se hubieran puesto en las Escrituras si el hombre fuera
inmortal. Todos estos textos muestran que el hombre
es un alma; que está sujeto a la muerte; que por lo
tanto es mortal en vez de ser inmortal. (Job 4 : 17). Y
si estas cosas son ciertas se saca en consecuencia que al
morir un sér humano no puede pasar inmediatamente al
cielo, al purgatorio o a un tormento eterno.
La te01·ia del purgat<>rio es la de que cuando un ham-
bre muere profesando ser un miembro de la iglesia
católica, pero no un muy fiel miembro, tiene que ir al
purgatorio donde nada puede hacer para ayudarse a si
mismo pero del cual pueden sacarlo los sacerdotes que
J En Dónde Están los Mue1·tos '! 249

están en la tierra si oran por él. Esto se dice en el libro


titulado "La Fe de Nuestros Padres," por Gibbons.
El purgatorio ha sido una fuente de riqueza para el
clero por mucho tiempo. ¿Seria razonable que Dios
permitiera a alguien morir y pasar a un lugar de sufri-
miento, y luego permitiera a hombres egoistas el usar
estas condiciones con fines comerciales? Esto es ente-
ramente repugnante y es por completo irrazonable y con-
trario a las Escrituras. El clero de los dias de Jesús
trató de usar su religión con fines comerciales y lo que
Dios pensó de ellos puede sacarse en consecuencia de las
palabl'as de Jesús : "Escrito está : Mi casa será 111:\mada
Casa de Oración, pero vosotros la hacéis cueva de ladro-
nes." (Mat. 21: 13). Luego Jesús arrojó del templo a
esos especuladores.
Por mucho tiempo la gente ha estado confiada en lo
enseñado por sus sacerdotes y ministros creyendo
que enseñaban la verdad. Por esta razón existe mucha
ignorancia todavia con respecto al purgatorio y otras
doctrinas por ellos enseñadas. Nadie jamás ha citado
un solo texto bíblico en apoyo de la teoria del purgatorio,
pero citan a "padres de la iglesia" que han vivido hace
mucho tiempo. N o tan solo no recibe apoyo de las Es-
crituras la doctrina del purgatorio sino que ellas mues-
tran que tal enseñanza ha sido un fraude y un engaño
y que fue inventada por el mismo Satanás, siendo usada
por sus agentes en contra de los intereses del hombre
y para difamar el santo nombre de Dios.
CIELO
A los que sufren a causa de la pérdida de alg{m sér
querido les agrada la idea de que han ido a un lugar de
descanso y paz y por eso el clero ha dicho que todos los
buenos miembros de sus iglesias, al morir, van al cielo.
N o encuentran apoyo para esto en las Escrituras. Cielo
quiere decir algo alto, elevado y exaltado. El cielo es la
habitación de Jehová. Ningún hombre jamás ha visto
250 La 01·eación

a Dios ni le puede ver. "Nadie puetle Yerme y vivir."


(Ex. 33: 20). 'l'odo aquel que va al cielo tiene que ser
cambiado del plano humano al espiritual. J esús fue
cambiado de la naturaleza humana a la divina al tiempo
de su resurrección.
Para ese tiempo más de cuatro mil años habían pasado
desde que lo. muerte entTó en el mundo. Grandes can-
tidades de gente hab ían muerto y entre ellos algunos
aproba<los por .Dios. Una lista de estos aprobados se da
en capítulo once de la epístola a los Hebreos. De nin-
guno de ellos se dice que han ido al ciclo. Concerniente
a los muertos buenos dijo Jesús cuando estuvo en la
t ierra: "Nadie ha subido al cielo."-J-n. 3: 13. J
Entre los que fueron fieles a Dios se encuentra David.
Concerniente a David está escrito que fue un hombre
conforme al corazón de Dios. ( 1 Sam. 13: 14; H ech.
13 : 22 ). David fue destinado 1)ara tipificar al Cristo.
Su nombre significa amado. Inspirado p.or J ehová cs-
cTibió muchos de los Salmos. Si algttnos deberían ir al
cielo seguramente David dcbeTía contarse entre ellos.
Sin embargo, claramente est á escrito que David no ha.
subido al ciclo. (Hech. 2: 34). Juan el •B autista fue
un buen hombre y recibió la aprobación de ·Dios, siendo
el escogido para anunciar la. venida del Salvador del
mundo. A causa de su fidelidad murió degollado poco
tiempo después de que Jesús comenzó su ministerio. Con
todo, J esús declaró que Juan el Bautista no sería de la
clase celestial.-Mat. 11 :•11.
El cielo se ofrece como una recompensa a las que son
fieles a Dios como miembTOs <le la nueva creación. Está
escrito: "Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Seiior
J esu-Cristo, el cual, conforme a su grande misericordia
nos ha reengendrado para una esperanza viva, por medio
de la resurrección de Jesu-Cristo de entre los muertos,
para la posesión ele una herencia incorruptible y sin
mancilla, e inmarcesible, guardada en los cielos para
vosotros, que por el poder de Dios sois guardados, por
¿E-n Dónde E stán los Muertos? 251

medio de la fe, para la salvación, que está preparada


para ser revelada en el tiempo postrero." (1 Ped.
1: 3-5 ). Es enteramente irrazonable e inconsistente con
el plan revelado de Dios que El llevara al cielo a todos
los buenos en general, siendo el caso que El claramente
especifica en su Palabra que el cielo es solamente para
los que son fieles hasta la muerte desde el tiempo de la
muerte de Jesús en adelante.-Apoc. 2 : 10.
Antes de examinar los textos bíblicos con respecto al
infierno, pasamos a suministrar evidencia de que los
muertos están en efecto muertos, inconscientes, sin
darse cuenta de nada absolutamente hasta que llegue
el debido tiempo de Dios para despertarlos de esa con-
dición.
INCONSCIENTES
A no ser que se encuentre uno consciente no puede
gozar en el ciclo ni sufrir en el purgatorio o infierno.
Algunos miembros del clero, limitando en parte su idea
de tormento a los inicuos, dicen que tan solo sufren un
"tormento mental" a causa de la memoria de su iniqui-
dad. Ni aun esto pudiera ser cierto si la persona se en-
contrara inconsciente e incapaz de darse cuenta de lo que
ha ocurrido. Si las E scritura s muestran que cuando
uno muere no tiene conocimiento ni sabiduría y que no
tiene memoria; que no puede pensar ni obrar, y que se
encuentra en una condición de silencio, esto desaproba-
ría por completo las pretensiones del clero de que los
muertos están sufriendo o que están gozando.
Dios es verdadero y su Palabra es también verdadera.
Cuando los hombres no hablan coniorme a la Palabra
de Dios no pueden hablar la verdad. (Rom. 3 : 4). Sobre
el asunto en discusión presentamos los siguientes
textos de la Palabra de Dios plenamente seguros de pro-
bar nuestro punto:
"Porque los vivos saben que han de morir, pero los
muertos nada saben ya. . . . Todo cuanto hallare que
252 ' · La Creación
hacer tu mano, hazlo con tus fuerzas; porque no hay
obra, ni empresa, ni ciencia, ni sabiduría en el sepulcro
a donde vas."-Ecle. 9: 5, 10.
"Porque en la muerte no hay memoria de Tí; en el
sepulcro quién te loará?"-Sal. 6 : 5.
"Como manada de ovejas son conducidos al sepulcro
[sheol] ; la muerte los pastorea."-Sal. 49 : 14.
"N o son los muertos los que alaban a Jehová, ni todos
los que bajan al silencio."-Sal. 115: 17.
El hombre fue hecho de los elementos de la tierra y
cuando muere vuelve al polvo.-Gén. 3: 19.
"Porque lo que sucede a los hijos de los hombres, lo
mismo sucede a las bestias; es decir, un mismo suceso
les acontece: como mueren éstas, así mueren aquéllos;
y un mismo aliento tienen todos ellos de modo que nin-
guna preeminencia tiene el hombre sobre la bestia, por-
que todo es vanidad. Todos van a un mismo lugar;
pues que todos son del polvo, y todos tornan otra vez
al polvo."-Ecle. 3: 19, 20.
El soplo de vida animó al hombre e hizo que sus órga-
nos funcionaran. Cuando el hombre cesa de respirar,
su organismo no funciona. "Sale su espíritu, y él se
torna en su tierra; en ese mismo día perecen sus pen-
samientos."-Sal. 146 : 4.
El clero ha tratado de aplicar todos estos textos al
cuerpo solamente y no al alma, pero están .equivocados,
puesto que el !J.lma, criatura, o sér,. es el que deja de
existir.-Eze. 18: 4.
INFIERNO
No hay razón ninguna para que Dios atormente eter-
namente a sus criaturas. Dios no es el demonio que el
clero pinta. Dios es amor. ¿Qué provecho sacaría Dios
con atormentar a sus criaturas? ¿Cómo .puede el amor
expresarse de esa manera? Además, si la pena o castigo
que la ley de Dios ofrecía como resultado de su violación
fue la muerte, ¿cómo podía consistentemente aplicar el
~En Dónde Están los lr!uertos'l 253

tormento eterno? Todo esto prueba que la respuesta


dada por el clero es irrazonable e inconsistente.
La teoría del tormento eterno fue invención del Dia-
blo con el fin de apoyar su mentira original, la mentira
de que no hay muerte. ( Gén. 3 : 4). El Diablo pudo ver
que si el hombre creía la doctrina de la inherente in-
mortalidad del alma también creería que los inicuos
están en algún lugar siendo atormentados. Y si podía
inducir al hombre a que creyera que Dios había hecho
la provisión de un tormento eterno, t endría éxito en su
tarea de apartarlo de Dios motivando el que tuviera
odio a J ehová. Las doctrinas del tormento eterno y de
la inherente inmortalidad tienen por fin el mutuo apoyo,
y como ambas son falsas, ambas tienen que caer.
La Biblia fue traducida de otros idiomas. El Antiguo
Testamento se tradujo del hebreo y el Nuevo Testamento
del griego. La palabra "infierno" se deriva de la hebrea
sheol y de las palabras griegas hades, gehenna y tartaroo.
La palabra sheol se traduce más veces sepultura y sepul-
cro que infierno. Si sheol significa tormento en un caso,
debe significar lo mismo en todos. Unos pocos teJ.:tos
sobre el particular darán mucha luz sobre el asunto:
Jacob fue uno de los aprobados de Dios. Cuando
José fue vendido y llevado a Egipto sus hijos le hicieron
creer que había muerto. Ellos vinieron a consolarlo
pero él les dijo : "Descenderé a mi hijo, lamentándome,
hasta la sepultura [sheol]." (Gén. 37: 35). Muchos
años después hubo hambre en la tierra de J acob
y él mandó a sus hijos a Egipto en donde para poder
conseguir trigo, José, sin darse a conocer a ellos, les
exigió que trajeran a su hermano Benjamín. Cuando
pidieron a J acob que lo dejara ir él respondió : "No há
con vosotros pues su hermano [José] es muerto, y él solo
me ha quedado ; y le va a suceder alguna desgracia en el
camino por donde vais ; asi haréis descender mis canas
con dolor a la sepultura. [sheol] ."-Gén. 42 : 38.
En estos dos casos la palabra sheol está traducida.
254: La Oreación
"sepuHura." Es fácil ver que J aco'h esperaba ir a la
sepultma pero no esperaba ir al infierno. Los traduc-
tores comprendieron que no podían hacer que este texto
contuviera la palabra infierno porque sería inconsistente.
Job fue un buen hombre y también recibió la aproba-
ción ele Dios. El Diablo hizo alarde de que lograría
hacer que Job maldijera a Jehová. Dios le permitió el
que lo ensayara. Se llenó de úlceras de la cabeza hasta
los pies, y se le pudrió su carne, y todos sus vecinos y
sus amigos se apartaron de él y le hacían mofa. Aún
su mismo mujer lo repudió y le dijo que maldijera a
Dios y muriera. El pobre Job se quedó sin consuelo
alguno. De acuerdo con la descripción del infierno que
dan los predicadores Jop tuvo todo el infierno que era
posible tenerse por algún otro sér en la tierra. De haber
creído que el infierno era un lugar ele tormento eterno
no hubiera clejaclo ele ser extraño qu,e hubiera orado de
la siguiente manera:
"¡Quién diera que me encubrieras en el infierno
[sheol, en este caso traducido sepultura] ; que me e~con­
lliera.s hasta que calme tu ira, que pusieras plazo para
acordarte de mi." (Job 14: 13).' Y luego añadió "Aun
cuando espere, el infierno [ sheol, traducido sepulcro]
es mi casa; en las tinieblas t engo tendido mi lecho."
(Job. 17: 13). Job e cribió estas palabras inspirado
l)Or Dios. Se citan aquí con el fin de mostrar que la
palabra sheol que se traduce infierno, quiere decir la
tumba, la condición. de silencio.
En el Salmo 16: 10 está escrito : "Porque no dejarás
mi alma en el infierno [sheol, traducido entre los muer-
tos]." Esto lo cita el Apóstol Pedro en Hechos 2: 30-
32 y lo aplica a Jesús, probando que Jesús fue al in-
fierno de la Biblia o sea la tumba. Si el infierno fuera
un lugar de tormento eterno aHí. se encontraría todavía
Pero El salió del infierno (la tumba) al tercer dí.a, resu-
citando de entre los muertos. Los predicadores quizás
digan que 'El fue allá para averiguar e informar a otros
¿En Dónde Están los Muertos? 255

qué tan caliente es por esos· lados.' Si están en lo co-


rrecto, entonces el Señor tuvo que ir allá con un cuerpo
de asbestos. Además, Jesús jamás se refirió al.infierno
como un lugar de tormento, según lo veremos más ade-
lante en este argumento.
Una de las mejores ilustraciones que se pueden dar
con respecto al infierno es en lo tocante a J onás. El fue
devorado 'por un gran pez: y estando alli, dice J onás :;
"De en medio de mi aflicción clamo a Jehová, y El me
r esponde 1 ¡ desde lo más hondo del infierno [ sheol]
pido auxilio!" ( J on. 2: 2) . El vientre del pez amenaza-
ba ser tu tumba. J onás no esperaba el ser eternamente
atormentado en el vientre del pez.
La mism~ palabra sheol frecuentemente se traduce
"abisfno.'' Describie'rMo ' a los' inicuos que mueren se
dice cbn respecto a ellos : "Descienden vivos al abismo."
(Núm. 16: 30) .' 'fambién se dice con. r especto a los
que mueren: "A los tales arre~ átelos la mue:rt~ ; des-
ciendan vivos al abü~mol porque hay maldad en sus mo-
r adas y en su corazón." ( Sal. 55: 15). ·La idea en ambos .
t extos es la de una m'uerte inmediata. s En ambos p~sa- ,
jes se usa la palal¡ra slieol y se vé claramente que están
implicando la muerte. · '
'· 1 1
.HADES
La palabra griega hades es la que se usa en el Nuevo
T est amento como equivalente de la hebrea sheol. En
H echos 2: 27 encontramos una cita que se hace del
Salmo 16: 10. Luego en Mateo 16: 18 leemos: "Las
puertas del infierno no prevalecerán contra ella," contra
la iglesia verdadera. Sin duda alguna que la idea es la
de que la condición de la muerte no prevalecerá en con-
tra ele los que sirven a Dios porque la misma muerte al ·
debido tiempo será destruida.
En armonia con esto leemos en Apocalipsis 1: 18 que
Jesús tiene las llaves del infierno, es decir, que El tiene
la facultad de abrir la condición de la muerte, por es()
256 ·L a Creaé·i ón

está escrito : try la muerte y el sepulcro entregaron los


muertos que habían en ellos." (Apoc. 20 : 13). II ades
es la palabra que aquí se usa y tiene el mismo significado
de sheol, evidentemente dando a entender la tumba o
sepultura, que al tiempo de la resurrección tendrá que
dejar salir sus muertos. De todos modos es evidente
que no significa tormento eterno porque al estar alli
eternamente algunos no podrían ser sacados. Este texto
no dice que el infierno entregará a los vivos q11e alli se
encuentran, sino a los muertos que hay en él.

GEHENNA
La palabra griega gehenna también se traduce por
infierno. Quiere decir la condición de la completa
muerte o destrucción, de la cual no hay una resurrección.
Gehenna es el nombre griego del Valle de Hinnón que
se encuentra a las ·afueras de .Jerusalem, en el lado sur.
Allí se mantenía constantemente fuego y en él se des-
truían los desperdicios de la ciudad y los cuerpos de los
animales muertos. Pero bajo le ley judaica, ningún
sér viviente podía ser arrojado alli. La costumbre era
la ae sacar los desperdicios de la ciudad por la puerta
de la muralla que daba al valle y desde el terraplén los
arrojaban al valle. Los cuerpos, o algunos girones de
carne de algunos de esos animales, se quedaban rezagados
entre las rocas y alli eran consumidos por los gusanos.
Por lo tanto, muy apropiadamente, el Y alle de Hinnón
representa la destrucción de los inicuos.
Como el Señor hablaba a los judíos, usaba figuras por
ellos entendibles. Elles dijo: "Y si tu ojo fuere ocasión
de caer, sácalo; pues te conviene entrar en el reino de
Dios con un solo ojo, mas bien que teniendo dos ojos ser
echado al infierno [gehenna] donde su gusano no muere,
y el fuego no se apaga." (Mar. 9:47, 48). El fuego
inapagable y los gusanos representan la destrucción.
Jesús estaba indicando a los judíos con estas palabras
lo que acontecería a su nación.
·¿ En Dónde Están. los :Mttertos? 257

Sus palabras a los judíos les daba a entender que El


era el señalado Rey y que al debido tiempo Dios estable-
cería su reino; que un lugar en ese reino era el mayor
privilegio que podía uno aspirar; que nadie podría en-
trar a ese reino a no ser que voluntariamente sacrificara
toda cosa que fuera contraria a la voluntad de Dios;
que si alguno de ellos tenía algo que les fuera tan que-
rido como un ojo o una mano, si les estorbaba y no les
dejaba obtener un puesto en el reino, que era mejor la
sacrificara y no que ellos mismos fueran destruidos.
Jesús también usó esa palabra gehenna en :M: ateo
10: 28: "Y no temáis a los ·que matan el cuerpo, pero
al alma no pueden matar; temed más bien a Aquel que
puede destruir así el alma como el cuerpo en el infierno.
[Gehenna]." Aquí El claramente dice que gehenna, o
el infierno, según la traducción, es un lugar de destruc-
ción. Una persona podrá matar a otra pero el muerto
al debido tiempo resucitará; mas si Dios lo destruye, le
quita el derecho a la existencia y no hay resurrección
posible.
H ades q~iere decir la condición de muerte de la cual
habrá una resurrección. Gehenna quiere decir la con-
dición de muerte de la cual no habrá resurrección.
Aun cuando el clero en los días de Jesús pretendía
representar a Dios, eran sin embargo los peores enemigos
de Jesús. Eran hipócritas, haciendo aparecer a Dios
en f alsos colores y engañando a la gente. Jesús les dij·o
claramente que eran los siervos del Diablo. (Jn. 8 :44).
Después de haber entrado al templo y haber arrojado
de él a los cambistas, habló a los fariseos y demás miem-
bros del clero de ese tiempo y les dijo: "¡ Serpientes,
generación de víboras ! ¿ cóml> evitaréis la condenación
del infierno?" (Mat. 23: 33). La palabra griega
gehenna se usa en este pasaje. Estos hombres habían
pecado en contra de la luz. Sabían que Jesús era un
enviadQ de Dios y con todo le persiguieron y buscaron
su muerte.. Porque tenían esa luz y persistían en pecar,
2i:í 8 L a Creación

El les nir.o la pregtm ta: : u¿ Cómo evitaréis lá eonuena-


ción del infierno?" es decir, ¿cómo podréis escapar la
destrucción eterna ?-Heb. 6 : 4-6.
El que calumnia o habla mal en contra de otro busca
Sll destrucción. Está escrito : usi; porque la lengua es
un fuego; un mundo de iniquidad es la lengua, puesta
en medio ele nuestros miembros; la cual contamina todo
el cuerpo, y enciende la rueda de la naturaleza, y ella
mi sma es encendida del infierno." ( San t. 3 : 6). La
palabra traducida infierno es gehenna y claramente im-
plica la destrucción.

TARTARO
La palabra griega tartaro está traducida p·rec·ipitán-
dolos al in fiemo . N o hay razón ninguna para tnl tra-
ducción, a no ser que por representar la condición ele
aprision amiento en que se encuentran los ángeles malos.
Antes del diluvio, como ya lo hemos mostrado, algunos
ele los seres espiribales se contaminaron con los ser es
human os. Como resultado se produjo en la tierra una
progenie de seres inicuos. ( Gén. 6). Cuan el o vino el
gran diluvio esa progenie fue tlest r uida pero los ángeles
no fueron destruidos. Concerniente· a ellos encontra-
mos :
''Dios no perd'onó a los ángeles cuan do peearon, sino
que precipitándolos al infiemo) los encerró en abismos
de tinieblas, siendo guardados para el juicio." ( 2 P ed.
2 : 4 ). "También a los ángeles que no guardaron su
original' estado, sino que cilejaron su propia habitación,
}os ha guardado en prisiones eternas, bajo t inieblas,
hasta el juicio· del gram dia." ( J u d. 6). Se ofrece la
idea. cie que las prisiones bajo tinieblas aquí impli cadas
son la condición de la muerte. De todos modo& es una:
eondición de restricción de los ángeles malos, los que
finalmente serán traidos a <mentas en el uia¡ del juicio.
-Job 10: 21, 22; 17: 13; Sal. 88: 11-12.
Jehová declara que El castigará a los inicuos y que
¿En Dónde Están los :Muertos? 259

su castigo será eterno. El clero trata de hacer creer


que el castigo etern y el tormente eterno es la misma
cosa. Pero eso no es cierto. La pena de muerte es el
castigo o pena capital que se impone aqui en la tierra.
Ningún castigo puede ser ill'Íayor que el ca.tigo de la
destrucción eterna. liise es el castigo que Dios aplicará
a los que sean voluntariamente inicuos. ''Destruirá a
todos los inicuos." (Shl.145: 20). El castigará a los
inicuos con la aestrucción eterna.
Él Diablo es el principal entre los ÍJ1icuos. Las Es-
crituras nos informan que Satanás será finalmente
destruido. ( Heb. 2 : 14). La destrucción ele los vol un-
tariamente inicuos no es un acto de maldad sino uno de
justicia y de amor de parte de Jehová. Si los inicuos
se permitieran vivir eternamente sería para desdoro del
nombre de Dios y una continua amenaza para las cria-
turas que aman a Jehová. Además, sería sin objeto
alguno. Por lo tanto, la. destn1eción es en armonía con
J ehová y consistente con sus atributos. Es liD castigG
pero no es tormente. · , · 1 ,
Pero en todo castigo hay grac os. Si un hombre roba
y se le castiga por ese delito, se le puede sentenciar por
un númei-o de afws. Si comete un asesinato su castigo
es la muerte. En un caso el castigo es po1· un período de
tiempo. En el otl'o es eterno. Cuando Dios destruya
a los inicuos será con destrucción eterna, de la cual no
habrá resurrección. Por lo tanto será un castigo eterno.
Las Escrituras claramente establecen el hecho ele que
los miles de millones de gente que han muerto desde
Adán hasta el tiempo presente, están mue1·tos, entera-
mente inconscientes, y que por lo tanto n ada saben.
¿Hay alguna esperanza ele que vivan de nuevo ? Sí la
hay. El propósito de Dios es de proveer la manera
de que vivan otra vez, y el obj eto de darles el conoci-
miento del plan de Dios es para que tengan esperanza.
Al debido tiempo Dios hará que esos miles de millones
vuelvan a la vida.
·c APITULO XI

El Despertar de los Muertos

P UESTO que Jehová ha hecho provisión para que


todo sér humano tenga nuevamente vida, habla de
la muerte como de un sueño. Así como un o
duerme y luego' se levanta, este lenguaje figurativo in-
dica el propósito de Dios de despertar a los muertos.
Esto es enteramente consistente con toda otra parte del
misericordioso plan de Dios.
Es bastante interesante el apercibirnos de algunos de
los textos de la Biblia que prueban· que Dios habla de
los muertos como si estuvieran durmiendo. Mois6s fue
un buen siervo de Dios, y a él dijo Dios: uHe aquí,
tú vas a dormir con tus padres." (Deut: 31: 16, Versión
Valera). Adán ·fue el padre de la raza humana y por
lo tanto uno de los padres de Moisés. Si Adán fue al
tormento eterno, entonces Moisés también fue.
Jehová dijo a David lo que le ocurriría y terminó di-
ciéndole: uy cuando tus días fueren cumplidos, y dur-
mieres con tus padres, yo estableceré tu simiente después
de ti." ( 2 Sam. 7 : 12). También está escrito concer-
niente a David: "Porque David, habiendo en su propia
generación servido a la voluntad de Dios, durmió, y fue
agregado a sus paures, y vio corrupción." (Hech. 13 :36)
'rambién, cuando David se encontró rodeado de gran
angustia, temió morir y entonces oró a Dios: u¡ Mira,
respóndeme, oh J ehová, Dios mío! ¡Alumbra mis ojos,
para que no duerma yo el sueño de la muerte !"
David fue un profeta de Dios y Dios movió su mente
por medio de su poder invisible, su santo espiritu, para
que escribiera muchas verdades, una de las cuales es la
que se acaba de mencionar. Se escribió con el fin de
260
El Despertar de los !JI1U:rtos 2Gl

afianzar la esperanza. en los col'azones de la gente. (Rom.


15: 4). David, prefigurando a la nueva creación, ex-
presó los sentimientos del corazón de los miembros de
ella, y representando a los que están det erminados a
andar por el 'camino angosto hasta el fin, y pensando
en el tiempo en que han de ser despertados del sueño
de la muerte, dijo: "Estaré satisfecho cuando desper-
tare a tu semejanza."- Sru. 17: 15.
Lázaro de Betania era hermano de Maria y de Marta
a quienes Jesús visitaba con frecuencia. Lázaro se en-
fermó y murió. Jesús sabía que Lázaro había muerto
pero los discípulos no lo sabian. Hablando con respecto
a Lázaro Jesús les dijo: "Nuestro amigo Lázaro duer-
me; mas yo voy para despertarlo del sueño." N o enten-
diendo lo que quería decir, los discípulos respondieron:
"Señor, si duerme, sanará. Más Jesús hablaba respecto
de su muerte, pero ellos pensaban que hablaba del des-
cansar del sueño. Entonces, por tanto, Jesús les dijo
claramente: ¡Lázaro ha muerto !"-Jn. 11: 11-14.
Jesús y sus discípulos entonces fueron a Betania en
donde Lázaro había muerto. Llegando allá encontraron
que sus hermanas lloraban. Para ese entonces Lázaro
había estado muerto por cuatro días y estaba ya en la
tumba. Lázaro fue un buen hombre pero no est aba en
el cielo como los predicadores quisieran hacer creer.
Tampoco se encontraba en purgatorio alguno ni en un
lugar de tormento. Estaba en la tumba, en la condición
de los muertos. Jesús fue hasta la tumba y haciendo
que removieran la piedra que le t apaba despertó a Lá-
zaro de su sueño de la muerte.- Jn . .11:44.
Fue en esa ocasión cuando J esús dijo a Marta: "Yo
soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque
muera vivirá, y todo aquel que vive y cree, no morirá
jamás. ¿Crees ésto?" (Jn.11:25, 26). Jesús en estas
palabras estaba declarando la gran verdad de que Jehová
Dios le había encomendado el poder de despertar a loa
muertos y que El los despertaría.-Jn. 5 : 28, 29.
262 La Creación '

Estos textos concluyentemente prueban que los muer-


tos están por completo inconscientes y que al debido
tiempo de Dios serán despertados por medio de Cristo.
Resurrección quiere decir el levantarse nuevamente
a la vida. El despertar de los muertos es tan solo el
principio de la. resurrección. L0s que han de formar
parte de la nueva CTeación CA'}Jerimentarán una resurrec-
ción instantánea, serán cambiados a la vida y a la in-
mortalidad. Pero los miles de millones de los que han
muerto y que se encuentran en sus tumbas, serán des-
pertados de la muerte y sometidos a prueba o juicio, y
por lo tanto su resurrección, o la obtención de la vida
en el pleno sentido, será una tarea gradual.
Sin una resurrección de los muertos la obra de rescate
h echa por Jesús seria inútil. Siendo el caso de q:ue por
cuatro mil años antes de su muerte y resur.ecci6n la
raza humana babia estado yendo a la tumba es evidente
que a lo menos de haber una resurrección el sacrificio de
rescate de nada les serviria. ,. Encontramos que el des-
pertar de todos esos seres, y el concedérseles .rma oportu-
nidad para obtener la vida, es por entero consistente
con toda otra parte del plan de Dios y es precisamente
lo que podría esperarse del amante y benigno Jehová.
Si el clero está en lo justo al pretender que el destino
de cada cual queda determinado al tiempo de la muerte,
y que los buenos van al cielo y los malos al infier~o o al
purgatorip, sería de por demás una resurrección. Todos
los textos oíblicos que hablan de la resurrección no tie-
nen significado alguno si los muertos ya se encuentran
conscientes en el cielo, el purgatorio o el infierno. Pero
las Escrituras categóricamente contradicen la teorí.a del
clero sobre este particular. Lo extraño es que el Diablo
por tan largo tiempo hay& logrado cegar a la gente a la
verdad y los haya inducido a aceptar las falsas ense-
ñanzas del clero.
Una de las más hermosas y maravillosas cosas ense-
ñadas en las Escrit uras es la resuiTección de los muer-
El De;~perlar de los :Mum·tos 263

tos. EJ...'])lica el por qué de la muerte de Cristo Jesús, el


amado Hijo de Dios, y por qué fue El resucitado de
entre los muertos. Es una manifestación de la bondad
de Dios hacia la raza humana. E sta maravillosa y her-
mosa doctrina bíblica hu sido ocult..'l.da ele la gente por
el Diablo, haciendo uso de sus agentes humanos. Por
supuesto que Dios sabia que Satanás haria esto, y por
lo tanto hizo que en su PalabTa quedara claramente ex-
presado el t estimonio sobre el particular para que todos
los que desearan pudieran al debido tiempo conocer la
verdad.
J ehová escoge sus propios medios y maneras de ense-
ñ ar a la gente. Su runado Hijo, Cristo Jesús, no sólo
es su Agente Ejecutivo sino que además es el Gran
Maestro que Dios ha señalado para la raza humana.
Cuando Jesús estuvo en la tierra hizo y dijo muchas
cosas que no fueron entonces entendidas pero que co-
menzaron a ser entendidas después de que El subió al
cielo. •rodo lo que El hizo y di;jo entonces fue en su
mayor parte con el objeto de enseñar a los que tratan cle
saber y entender.
El despertar de Lázaro no fue el comienzo de la. resu-
rrección sino que f ue hecho por Jesús con el fin de mos-
trar cómo Dios, al debido tiempo, despertaría a todos
los muertos y les daría una oportunidad para obtener
una completa resurrección a la vida. La prueba que
suministra la Biblia es la de que Jesús fue el primero
en resucitar.-1 Oor. 15: 3, 4, 20.
Puesto que las Escrituras nos dicen que Jesús fue las
primicias de los que han dormido, ¿qué encontramos
con respecto al l'ugar en donde se encontraba dur-
miendo? Las Escrituras nos dicen que estuvo durmien-
do en el infierno. Encontramos escrito concerniente a
El: "Porque no dejarás mi alma en hades [en este caso
traducido entre los muertos, pero siendo la misma pala-
bra que se traduce infierno]), ni permitirás que tu Santo
vea corrupción." • • • Empero siendo él profet a, y cono-
264 La Creación

ciendo que con juramento le había jurado Dios que del


/ fruto de sus lomos se sentaría Uno sobre su trono, él, ·
previendo esto, habló respecto de la resurrección del
Mesías, que no hubiese de ser dejado en hades ni su
cuerpo hubiese de ver corrupción."-Hech. 2: 27, 30, 31.
¡ Cuán ridículos hace aparecer la Palabra de Dios a
los predicadores! Por muchos siglos han estado ellos
diciendo a la gente que el infierno es un lugar de tor-
mento eterno.' Dios envió a su amado Hijo Jesús al
infierno y alli estuvo El por tres días durmiendo, es de-
cir, estuvo durmiendo el sueño de la mum·te hasta que
fue resucitado por Dios. "A éste, Dios le resucitó ail
tercer día, e hizo que fuese manifestado." (Hech. 10 :40;
2 Tim. 2: 8). Si el infierno fuera un lugar de fuego
y azufre hubiera sido enteramente imposible para al-
guien el salir ele allí. El hecho de que Jesús salió de
alli muestra que el infierno es lo que las Escrituras cla-
ramente dan a entender, es decir, la condición de la
muerte. Cuando la gente se aperciba que estas cosas se
enseñan en la Palabra de Dios, no han de seguir cre-
yendo la mentira de Satanás promulgada por medio de
los predicadores. .
En los días de los apóstoles, Satanás, el enemigo, se
encontraba activamente esforzándose por cegar a la
gente a la verdad con respecto a la resurrección. Por
eso Dios hizo que su testigo diera testimonio de que su
plan sería un fracaso a menos de haber un despertar de
los muertos para que tuvieran una oportunidad de obte-
ner la vida. Leemos: "Pues por esto mismo Cristo
murió y tornó a vivir, para que fuese Señor así de
muertos como de vivos. (Rom. 14: 9). El hecho de que
El es Señor sobre vivos y sobre muertos muestra que
tiene el poder de tomar acción en provecho de ambos.
Su resurrección es una garantía de que toda& los muertos
serán despertados. Las Escrituras nos dicen que tiene
que haber una resurrección tanto de los jüstos como de
los injustos. (Hech. 24: 15). · Y de esto da certeza Dioa
El Despertar de los lif1tertos 265

a todos los homb~es por medio de la resurrección de


Jesús.-Hech. 17: 31. ·
Concerniente a la oportunidad para todos, el argu-
mento de las Escrituras es enfático en lo que toca a la
r esurrección, y se da con el fin de que por medio de la
P alabra de Dios todos tengan esperanza tanto para ellos
mismos como en lo que toca a sus seres amados que han
muerto. C.risto se dio en rescate por todos, de lo cual
el testimonio habrá de darse a sus propias sazones. ( 1
Tiro. 2: 5, 6). Por lo tanto, al debido tiempo de Dios,
todos tienen que ser traídos de la condición de la muerte
para que puedan recibir el testimonio. El inspirado
argumento en apoyo de la resurrección es claro, razona-
ble y convincente para todo el que desea conocer la
verdad.
Leemos : "Jifas si se predica a Cristo como resucitado
de entre los muertos, ¿cómo dicen algunos de entre
vosotros que no hay resurrección de muertos? Pues si
no hay resurrección de muertos, ni tampoco ha sido
resucitado Cristo; y si Cristo no ha sido resucitado,
entonces nuestra predicación es vana; vuestra fe tam-
bién es vana. Más aún, nosotros somos hallados testi-
gos .falsos respecto de Dios; por haber testificado res-
pecto de Dios que resucitó al Cristo a quien no resucitó
si es así que los muertos no resucitan. Porque si los
muertos no resucitan, ni tampoco ha sido resucitado
Cristo. . . . Entonces también los dormidos en Cristo
han perecido."-1 Cor. 15: 12-18.
La sust ancia del arguniento es que a menos de haber
una resurrección de muertos el t estimonio concerniente
al plan de Dios es falso, y que el Plan de Dios es un
fracaso y que todos los que han muerto han cesado por
completo de existir. Además, el argumento concluyente-
mente niega la contención de los predicadores de que los
muerto~ están conscientes en alguna parte. Aperciba-
mos que las E scrituras dicen que si no hay resurrección
de muertos entonces los muertos "han perecido." Pere-
2G6 La Creación

cer quiere decir el dejar de existir, y resuC'ltar quiere


decir el ser traído nuevamente a la vida. Si alguien ha
perecido no puede ser traído otra vez a la vida, pero si
alguien !le encuentra muerto o inconsciente, habiendo
Dios determinado una resurrección, puede ser nueva-
mente vuelto a la vida. Esto está en exacta armonia
con lo que las Escrituras dicen que El hará por medio
de Cristo Jesús.
El argumento continúa: "Si sólo mientras dure esta
vida tenemos esperanza en Cristo, somos los más desdi.-
cllados de los hombres. Empero es el caso que Cristo 1ha
sido resucitado de entre los muertos, siendo primicias
de los que han dormido. Pues siendo así que por medio
del hombre vino la muerte, por medio del hombre tam-
bién viene la resurrección de los muertos. Porque .como,
en Adán todos ellos mueren, así también en Cristo todos
serán vivificados. Pero cada uno en su propio orden;
Cristo las primicias; luego los que son de Cristo, al
tiempo de su venida. Entonces viene el fin, cuando El
entregará el reino al Dios y Padre suyo; cuando haya
ya abolido todo dominio y toda autoridad y poder. Por-
que es menester que El reine hasta que ponga a sus
enemigos debajo de sus pies." (1 Cor.15: 19-25). En
sustancia el argumento es que Cristo Jesús fue el pri-
mero en ser levantado de entre los muertos y que por
medio de su muerte y resurrección ha de haber una resu-
rrección para todos, y que esto se llevará a cabo en orden
y al debido tiempo de Dios.
Si los miles de millones que han muerto se encuentran
durmiendo, ¿en dónde están durmiendo? Para consuelo
de los que viven que se lamentan por causa de la pérdida
de algún sér querido y para que puedan tener esperanza
Dios hizo que la respuesta a esta pregunta quedara regis-
trada en Stl Palabra: "Pero no quiero qu~ estéis en igno-
rancia, hermanos, en cuanto a los que duermen en el
Señor para que no os entristezcáis del modo que los
demás que no tienen esperanza. Porque si creemos que
El Despertar de los ~Mue1'los 267

.Jcs{ts muri6 y resucitó, así también a los que duermen


f!fi Jesús, Dios los traerá con El. . . . Consoláos pues
los unos a los otros con estas palabras."-1 rres. 4 : 13,
14:, 18.
Todos "duermen en J esús" por la razón de que su
sangre proveyó ·el precio ue rescate pm· medio del cunl
la raza humana entera ha sido comprada, y por lo tanto,
a causa del arreglo hecho por Dios, todos le pertenecen.
J ehová le ha dado la potestad sobre la muerte y le ha
dado las llaves del infierno y de la muerte. (Apoc. 1 :18).
E sta expresión sim bólica muc:;iTa que el Señor está re-
vestido con t oda a po testau y autoridad necesaria para
tlespertar a los mum-tos, sacándolos de la tumba y lleván-
dolos finalm ute a la vida.
Dios prometió a Abrah:tm que a él y a su simiente les
daría t oda la tierra que alcanzaba a ver. ( Gén. 13 : 14,
15; 17: 8). Abraham y sus descendientes murieron
muchos siglos antes ele que Jesús viniera, pero la pro-
mesa de Dios tiene que cumplirse. Esos muertos, lo
mismo que todos los demás muertos, duermen en Jesús,
"en el polvo de la tierra," de donde al debido tiempo
serán tomados.-Dan . 12: 2.
Dios dio a los judíos una profecía la cual es una plena
seguridad de que los muertos han de ser resucitados:
"Por tanto profetiza, y diles: Así dice J chová el Señor :
He aqui que voy a abrir vuestras sepulturas, y os haré
subir de vuestras sepulturas, oh rmeblo mío, y os traeré
a a tierra de Israel. Y conoceréis que yo soy J ehová,
cuando haya abierto vuestras sepulturas, y os haya saca-
do de vuestras sepulturas, oh pueblo mío. Y pondré mi
espíritu en vosotros, y viviréis, y os estableceré en vuestra
propia tierra; y conoceréis que yo J chová lo he dicho y
lo he hecho, dice J ehová"-Eze. 3"/: 12-14.
Las gentes de Sodoma y de Gomorra fueron desh·uidas
po-r medio de un gran fuego. Los predicadores de este
tiempo nos quieren hacer creer que toclavia están ar-
diendo, pero Jehová, por medio de su profeta nos dice
268 La Creación
que volverán a su estado primitivo, lo cual implica que
serán despertados de entre los muertos. No habían
tenido una oportunidad para obtener la vida al tiempo
en que murieron. Puesto que Dios prometió esa opor-
tunidad a todos ,tiene que venir también a ellos. (Eze.
16 : 55). Esto está en pleno acuerdo con las palabras
de Jesús: "En verdad, en verdad os digo, que viene la
hora, y ahora es, en que los muertos oirán la voz del
Hijo de Dios; y los que oyen vivirán."-Jn. 5 : 25.
El despertar de los muertos y su resurrección a la
vida es uno de los más gran des pasos pro~p:esivos en el
desarrollo del plan de Dios. La prueba indisputable de
la Palabra de Dios muestra que los muertos no están
sufriendo el tormento eterno, ni están en el purgatorio
ni en ningún otro lugar, y que por lo t anto la preten-
sión del clero de que pueden ayudar a los muertos, si se
les paga, es ent erament e falsa, y es nada más que el
resultado de la gran mentira de Satanás. Ha llegado
el tiempo en que la verdad de Dios barra el refugio de
las mentiras y abra las mentes de la gente para que
puedan regocijarse en la amante provisión que Dios ha
hecho para que ellos puedan obtener la vida.-Isaias
28:17.
Mirando retrospectivamente, a través de las edades,
vemos que la senda de la raza humana ha sido por entre
dolores, sufrimientos y muerte. Pero hoy en día la gente
al mirar hacia adelante a la luz del plan de Dios en
progreso, pueden ver ante ellos una senda de justicia
que conduce a la vida y a la felicidad y que está al al-
cance de todos, tanto de los que vivien como de los que
han muerto. Y al percibir esto, tienen motivos para
regocijarse. El comienzo de ese venturoso día está mar-
cado por la venida del Señor en poder y gran gloria, y
entonces, toda la gente, desde el más pequeño hasta el
más grande, tendrán la oportunidad ele conocer la senda
de la vida y de la felicidad y podrán andar en ella.
M i l l o-
nes <le li-
bros que
cont i e-
nen el tes-
t imonio ele
'7]~~!-l el plan cli-
Yino han
f --~~~.-.111~ sido pues-
tos en ma-
nos ele la
gente . . . .
El r a el i o
ha servid o
par a e·-
pa rcir las
buen as
nueYas del
r eino a
trayés ele!
El gran
S a e e r-
, dote y Rey
durante su
reino de
mi 1 años
lleYará a
todos i os
m i e m-
bros de la
raza hu-
mana que
q u i e-
ran obede-
cer a la
e o n el i-
ción de la
pe r fec-
ción de 1
sér y de
las concli-
ciones go-
zadas por
Adán en el
Edén.
Pág. 230.
C1tltiva dm·es de la 'l'ierra G. Ser;antinis
Durante el período ele la regeneración del hombre el Seño r, gradualmente, traerá la tierra a
un alto estado de cultiYo. Esto se hará dando conocimiento a los hombres ele lo que se debe
hacer y cómo se debe hacer. Página 233.
La, Ontz . Gaspa1· Dctvicl F'¡·i ed·r ·i ch
No se pierda ele vista el h echo de que lo p n lido po1· Adún
fu e la vida y qu e es la v ida lo que el hombre anhela con
lll(ts vehe mencia, y qu e la única mane ra de obtene1· la vicl a
la prefigu ró Dios por medio del s ncr if icio del corde ro pns-
cual, el que r ep resen taba a su a ma do Hijo. Pdg¿na J 60.
CAPITULO XII

La Venida del Señor

L
-
AS gentes de la tierra han pasado por medio de
gran adversidad. En medio de ella han sufrido,
se han lamentado, y han orado por auxilio. El
Diablo por medio de su organización ha hecho sus car-
gas difíciles de llevar. Con malévolos intentos éi ha
formado una alianza entre los empedernidos ri cos, los
politicos sin honradez y el clero infiel, y"ha usado a esa
inicua alianza para difamar el nombre de Dios y para
oprimir a al gente. Con verdad ha sido escrito que la
raíz de muchos males es el amor al dinero. (1 Tim.
6 : 10). Satanás se ha aprovechado del deseo insaciable
de los hombres imperfectos para adelantar sus inicuas
intrigas. Anciosos de hacerse a la tierra de otros, y a sus
bienes, los ricos han fomentado guerras entre pueblos y
naciones con el pretexto de que era necesario para pro-
teger su propios derechos.
. Los políticos sin honradez, deseosos de grangearse a
los ricos para lograr también obtener algo de sus mal
obtenidas ganancias, bajo guisa de patriotismo han con-
vocado a la gente a juntarse para la guerra. El clero,
ambicioso del poder e influencia resultante de hallarse
asociados con los ricos e influyentes, en el nombre de
Dios, hipócritamente han declarado como santas esas
guerras, y han incitado a la gente a que acudan a ellas.
Y han exprimido de la gente común grandes cantidades
de dinero, por medio de impuestos, para manufacturar
cañones, rifles, municiones y gases envenenados, y para
hacer barcos de guerra, areoplanos y otros instrumentos
diabólicos de destrucción.
Los que fomentan la guerra se encargan de que al
273
274 La C1~'eación

debido tiempo sicológico marchen bandas por las calles


tocando sones bélicos, para así despertar las pasiones de
los hombres caídos. Los oradores politicos hablan a la
gente y les dicen que su deber patriótico es el de mante-
ner el honor de su país echando mano a las armas. 'l'odo
esto se hace cuando no hay peligro. El clero hipócrita
predica desde sus púlpitos mostrándo a la gente la gloria
que tendrán ·i mueren en el campo de batalla. Estos
inicuos instrum entos de Satanás se atarean en gran
manera entre las naciones en contienda, ambos lados
pretendiendo representar a Dios, pero en verdad y hecho
l'.epresentando al Diablo. I mpulsados por está inicua
influencia las naciones van a la guerra. Después de
lma gran destrucción de vida humana y de propiedad,
uno de los lados se proclama vencedor pero en realidad
ambos lados han perdido. El lado vencedor recibe glo-
, ria, pero, ¿cuál es el precio de esa gloria?
Un joven y su esposa han comenzado a llevar a cabo
sus sueños doraüos. Esta feliz pareja entretenía l.a
esperanza de un hermoso y feliz hogar adornado por
niños obedientes. Y en tanto que absortos en su dichá·
ponían los fumlamentos de su futura felicidad, las agen-
cias satánicas ponen en vigor una ley de espionaje pro-
hibiendo el que se ponga en duda el derecho de la nación
para quitar la vida humana. Al debido t iempo los fo-
mentadores de contienda hacen que se dé el grito de
guerra. El esposo tiene que presentarse para servir en
el ejército. La joven esposa con su niño en brazos
viene a darle su triste despedida; él se va a la guerra
para nunca 'más volver. La esposa muere de dolor y el
niño queda a merced de la caridad pública.
Una cariñosa madre ha enseñado y dirigido cuidado-
samente a su amado hijo, conduciéndolo desde la niñez
hasta llegar a ser un hombre. El es bueno, considerado,
honrado y sincero, y se esfuerza por el bienestar de la
comunidad. La cruel ley lo obliga a· ir a pelear y le es
preciso obedecer la orden. Es arrancado del lado d~ la
La TT eni.da del S eíío1· 275
\ '

madre, y tanto el hijo cpmo la madre sufren. Pront?


él ·e encuentra 'en el campo de batalla manchado con I~
snn1n:e de sus semejantes. La madre ora para que le sea
devuelto con vida. El hijo tambi6n ora para volver al
lado ele su madre. Al entrar en acción muere y su vicl.a
es J erramada en sacrificio para satisfacer la ambición de
hombres inicuos y egoístas.
Hombres fuertes, vigorosos e industriosos, los tipos
superiores y que son el verdadero soporte de la nación,
son llamados a la guerra a servir de carne ele cañón
para satisfacer las maquinaciones de los que se quedan
atrás a cosechar los beneficios pecun iarios de la cami-
cer! a. Después de un encuentro se ven tendidos en el
campo de batalla las rotas formas ele los que fueron
hombres vigorosos. Una vez mis la tierra ha sido bau-
tizacla con la sangre <le los inocentes, en violación al
}Jacto eterno ele Dios con los hombres. ( G6n. 9 : 3-11 ).
Y tras la guena viene el hambre, las pestes, los sufri-
mientos y la angustia que no puede el lenguaje humano
describir. Los asilos y los hospitales se llenan con algu-
nos ele los inválidos, en tanto que muchos otros quedan
sin aten ción alguna. Y una multit ud de viudas y huér-
faJ'l,OS pasan a aumentar la carga del pais.
En toda la inicua maquinación ele producir la guerra
y ele proseguir con ella, el clero ha estado muy activo
en su parte, en tanto que al mismo tiempo aparecían
como rei)l·esenümtes del Señor y predicadores üel evan-
gelio de paz. Por eso no solamente ha sido el clero cul-
pable ele conducir a la gente a la guena, sino que además,
por medio de su hipocresía, han servido de instrumentos
de Satanás para apartar a la gente de Dios, el cual es
su verdadero amigo y consolador.
En varios períodos de tiempo esas guerras han sido
f omentad.as. La gente común ha sufrido y unos cuantos
egoístas han cosechado el beneficio. Y en esa condi-
Ción la creación entera ha estado gimiendo· y continúa
sufriendo. ~in ningun~ causa justa ni excusa los. h?m-
276 La ·creación

bres han sido obligados a ir a pelear y a mo1:ir, y las


mujeres y niños han sido dejados en sufrimientos y
angustia. Repetidas veces la tierra ha sido anegada con
sangre injustamente derramada. La sangre de esos
inocentes cl::.ma a Jehová en contra de los que se visten
de largos hábitos o que usan otros medios para mostrar
su santurronería. A ellos dice Jehová: "En tus faldas
ha sido hallada la sangre de la vida de los inocentes
pobrcs."-Jer. 2: 34.
La senda del hombre ha sido un largo período de ti-
nieblas, sufrimientos y dolor. Habiendo sido apartados
de su verdadero Amigo y Benefactor, por medio de Sata-
nás y sus emisarios, la gente se encuentra sin Dios y sin
esperanza en el mundo (Efe. 2: 12), y aún continúa
gimiendo en su dolor. ¿Continuará eternamente esta
condición de iniquidad y sufrimiento? N ó; un mejor y ·
mús feliz tiempo está a la mano. A los que desean ese
día mejor de paz y de justicia, Jehová dice: "¡Sed
fuertes 1 ¡No t emáis ! ¡He aquí a vuestro Dios! ¡La
venganza viene, la retribución de Dios 1 ¡ El mismo
viene y os salvará!" (Isa. 35: 4). ¿Pero cómo vendrá
Dios a aliviar y ayudar a la gente? Por medio de su
amado Hijo, su Oficial E;jecutivo, el Príncipe de Paz,
quien traerá salvación a todos y quien establecerá paz en
la tierra y buena voluntad entre los hombres. Pero,
¿podemos sentirnos seguros de su venida?

SU VENIDA ES SEGURA
Cuando Jesús fue levantado de entre los muertos,
subió al cielo. (1 Cor.15:4; Efe.4:8, 10). Que El
ha de venir otra vez en poder y gran gloria es un hecho
porque esa es la promesa ele Dios como se encuentra
registrada en su Palabra. (Dan. 12: 1; Hech. 3: 20, ·2 1;
Tito 2: 13). Jesús mu,rió para proveer el prec~o de res-
cate. El fue levantado de entre los muertos y subió a los
cielos para presentar ese precio de rescate como ofrenda
La Venida del Señor 277
por el pecado en beneficio del hombre. Y para llevar
a cabo el programa divino, tiene que volver.
Estas cosas todas Jesús las aprendió de su Padre, pero
no pudo dar los detalles a sus discípulos por no ser en
ese entonces el debido tiempo de Dios para que fuesen
entendidas y apreciadas. Sin embargo, antes de su cru-
cifixión Jesús dijo : "En la casa de mi Padre muchas
moradas hay; si no fuera así, yo os lo hubiera dicho;
porque voy a prepararos el lugar. Y si yo fuera y os
preparara el lugar, vendré otra vez, y os recibié con-
migo; para que donde yo estoy vosotros t ambién estéis."
Después de su resurrección, y antes de ascender a su
Padre, Jesús dijo: "No he subido aún a mi Padre."
(Jn. 20 : 17). Cuarenta días más tarde El subió al
cielo. Entonces, apareciendo en un cuerpo apropiado
para la ocasión, juntó a sus discípulos en el Monte de los
Olivos. Allí El les dio algunas instrucciones: "Y
habiendo dicho estas cosas, mirándole ellos, fue levan-
tado hacia arriba, y una nube le alzó, arrebatándole de
su vista. Y estando ellos mirando fijamente al cielo,
mientras que El se alejaba, he aquí que dos hombres
con ropas blancas se habían puesto junto a ellos; los
cuales también les decían: ¡varones galileos, ¿por qué ·
os quedáis mirando así al cielo? Este mismo Jesús que
ha sido tomado de vosotros arriba en el cielo, asi vendrá ·
del. mismo modo que le habéis visto ir al cielo !"
Después de que sus discípulos fueron engendrados
y ungidos del espíritu de Dios y cuando fueron hechos
testigos del Señor, frecuentemente testificaban con res-
pecto a la vuelta del Señor. El Apóstol Pablo dijo que
al debido tiempo el Señor descendería del cielo. (1 Tes.
3: 13; 4: 16; 5: 23). Al dar algunas instrucciones a
'rimoteo, Pablo dijo: "Que guardes el mandamiento
sin mácula, irrepren;;ible, hasta el aparecimiento de
Nuestro Señor Jesu-Cristo." (1 Tim. 6: 14). Y que la
venida del Señor sería mucho tiempo después de la
muerte del Apóstol Pablo se muestra claramente por su
2'í'8 La' Creaciú1't ·
.-
testifuonio sobre el particular: "Porque ya estoy' para
ser ofrendado en sacrificio, y el tiempo de mi partida
ha llegado. . . . De ahora en adelante me está reser-
vada la corona C.. e justicia, que me dará el Señor, el justo·
Juez, en aquel dia; y no sólo a mi, sino a todos los que
amen su aparecimiento."-2 Tim. 4:: 6, 8.
Y para que los seguidores de Jesús pudieran tener
ánimo, Santiago escribió: "Tened paciencia vos<;>tros
t ambién ; afirmad vueshos corazones, porque el adYeni-
miento del Señor se acerca." (San t. 5: 7, 8). El Após-
tol Pedro testificó también de su venida. (2 Ped. 1: 16).
Casi todas las parábolas ele Jesús estaban relacionadas
con la segunda venida.
Es evident e que J esús deseaba el hacer en sus segui- .
dores una profunda impresión de la importancia de su
segunda venida. El único medio ele llevar a cabo el
programa divino y ele cumplir las promesas que Dios. ha
hecho es por medio de la segunda venida del Mesías.
La palabra Mesías quiere decir el Ungido. Por más
de 4:,000 años los j'udíos han esperado la venida del
Mesías. Los profetas repetidamente predijeron su ve-
nida. La promesa que se hizo al tiempo de la muerte
de J acob, de que Shiloh vendría y que a El se congre-
garían los pueblos, tiene que ser cumplida. ( Gén. 49 :10).
Puesto que no fue cumplida al tiempo de la primera
venida del Señor es evidente que El tiene que venir
nuevamente en poder y gran gloria.

COMO VIENE EL SEFfOR


Jesús murió como hombre pero fue levantado de entre
los muertos como un ·sér divino, poseyendo la inmortali-
dad. (1 Ped. 3 :18; Jn. 5: 26; Apoc. 1: 18). "El Señor
es ese espíritu," 'dice el Apóstol Pablo. (2 Cor. 3: 17) .'
C'omo hombre, El tiene que permanecer muerto puesto·
que fue su vida humana la que se dio en provecho del
mundo. (Jn. 6:50, 51). Un sér humano no puede ver •
a un sér espirituaL (1 'rim. 6:15, 16). Concerniel'lte a
La V enidu ,del $ e1ior 2"/9

esto dijo Jesús : ~'Lo que ha nacido de 1~ carne, carne


es, y lo que ha nacido del espíritu, espíritu es. N o te
11~aravilles de que te dij e: Os es necesario nacer de nue-
vo. El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido,
mas no sabes de dónde viene ni a dónde va; así es todo
aquel que nace del espíritu." ( J n. 3: 6-8). N aJic puede
ver el viento, pero sí puede observar que es poderoso y
que está presente.
Un sér espiritual puede encontrarse con un sér hu-
mano y no ser noticiado por éste. Antes de que Jesús
muriera dijo a sus discípulos: "Todavía un poco, y el
mundo ya no me verá más; vosotros empero me veréis;
por cuanto yo vivo vosotros también viviréis." ( Jn.
H : 19). Esta es una prueba concluyente de que sola-
mente los que en la resurrección sean cambiados del .
plano humano al espiritual podrán ver al Señor en su
cuerpo glorioso. Sin embargo, esto no quie¡_;e decir que
el mundo no ha de discernir su presencia y el ejercicio
de su justo y recto poder.
Nadie jamás ha visto al Diablo pero todos han tenido
alguna experiencia con él y han sentido la influencia de
su injusto poder. Nadie jamás ha visto a Dios, y con
todo, El es el gran Dador de toda buena cosa y El ejerce
su poder en beneficio de sus criaturas. Al debido tiempo·
de Dios todo ojo discernirá la presencia de Cristo J esús,
pero solamente los que participen de su resurrección
podrán verlo así como El es. ( 1 J n. 3 : 2). 'l'odos los
miembros de la nueva creación finalmente estarán con el
Señor y por lo tanto le verán así como El es porque
t endrán la misma naturaleza que El tiene. ( 2 Ped. 1: 4).
A sus discípulos, los eran parte de la nueva creación,
dijo el Señor: "Vendré otra vez, y os recibiré conmigo; 1
pura que donde yo estoy, vosotros también estéis."
De todos estos textos, y a la luz de la razón, se saca en.
consecuencia que la segunda venida del Señor no quiere
decir que El aparecería otra vez como hombre y andaría
entre ellos como lo hizo cuando su ministerio en la tierra
280 La OreaC'ión
como hombre. Su segunda venida o presencia tiene que
ver con los asuntos del hombre, quiere decir el tomar
cargo y control de los asuntos humanos para beneficio
de la humanidad. Asi como Satanás por varios siglos
ha sido el invisible gobernante del mundo (2 Cor. 4: 3,
4), de igual manera Cristo será el invisible gobernante
del mundo después de que Satanás haya sido puesto a
un lado, y aun cuando invisible al ojo humano, El con-
trolará los asuntos del nuevo mundo y organizará a: la
raza humana bajo un justo gobierno.
Cuando Jesús ascendió a lo alto y sus discipulos con-
templaban hacia el lugar en que El había desaparecido,
un ángel les dijo: "Este mismo Jesús que ha sido to-
mado de vosotros arriba en .el cielo, así vendrá del mismo
modo." (Hech. 1: 11). El énfasis en este texto es sobre
las palabras. "del mismo modo," o manera. Solamente
un númel'o reducido ele ·gente le vieron partir y sola-
mente es un número reducido de gente los que disciernen
su presenncia en un principio. El se fue calladamente,
sin ser observado más que por unos pocos, y el testimonio
·de estos testigos se preservó para probar que El . había
ascendido. Su retorno es también calladamente y sin
. ser observado por los ojos humanos.-1 Cor. 15: 6.
El libro del Apocalipsis es un testimonio de J esu-
Cristo mostrando a su siervo algunas cosas que ocul'ri-
rían. E stá escrito en lenguaje simbólico. El texto dice
que las cosas dichas fueron significadas, es decir, dichas
por medro ele signos o señales. (A poc. 1 : 1). En su tes-
timonio Jesús elijo: "He aquí, yo vengo como ladrón.
Bienaventurado aquel que vela y guarda. sus vestidos;
no sea que ande desnudo y vean su vergüenza." (Apoc.
16 :15). Es evidente que la palabra "ladrón" que se usa
aquí simbólicamente representa la manera de la segunda
venida del Señol'. Cuando un ladl'ón aparece no hace
mucho ruido, sino lo hace calladamente, cuando todos se
encuentran durmiendo.
Este texto indica que el comienzo de la segunda pre-
La Venida del Señor 281
sencia del Señor·seria cuando, hablando figurativamente,
todo el mundo se encontraría durmiendo, es decir, es-
tando en ignorancia de lo que estaba ocurriendo. Los
que están despiertos se aperciben de la presencia del
ladrón, y de la misma manera los que están espiritual-
mente despiertos, en expectación de la venida del Señor,
están en condiciones de apercibirse de su presencia. Por
esta razón Jesús dijo: "Velad pues no sabéis qué día
ha de venir vuestro Señor. Esto empero sabed, que si el
padre de familia supiera en cuál vigilia el ladrón había
de venir, velaría y no dejaría minar su casa."
Los apóstoles entendían esto del mismo modo. Pablo,
quien frecuentemente se refirió a la venida del Señor
como "el día del Señor," dijo: "Porque vosotros mis-
mos sabéis perfectamente que, como ladrón en la noche,
asi viene el dia del Señor. Cuando los hombres están
diciendo: ¡paz y seguridad! entonces mismo vendrá
sobre ellos repentina dest111cción, como los dolores de
de parto sobre la que está. en cinta; y no podrán esca-
parse. Vosotros empero, hermanos, no estáis en tinie-
·blas, para que aquel dia a vosotros os sorprenda como
ladrón: porq:ue todos vosotros sois hijos de la luz e hijos
del dia; nosutros no somos de la noche ni de las tinie-
blas. N o durmamos, pues, como los demás, sino vele-
mos, y seamos sobrios." ( 1 Tes. 5: 2-6). El Apóstol
Pedro, refiriéndose a la misma cosa, dijo: "Vendrá em-
pero el dia del Señor como ladrón; día en que los cielos
pasarán con grande estruendo, y los elementos serán di-
sueltos con ardiente calor; la tierra también y las obras
que hay en ella serán abrasadas."-2 Ped. 3: 10.
Con respecto a su venida Jesús hizo presente a sus
discípulos que se levantarían falsos profetas que trata-
rían de mostrar que Cristo se encontraba en el desierto
o en la cámara secreta, pero que no deberían prestar
atención a tales cosas. "Porque como el relámpago sale
del oriente, y se vé lucir hasta el occidente, asi también
será la venida del Hijo del hombre."-Mat. 24:: 27.
232 La Creación
Sus palabrns no pueden significar que los relámpagos
en forma de zig-zag siempre salen del oriente y se ven
lucir hasta el occidente, y que esto representa su venida.
Lo que sus palabras en realidad quieren decir es que los
r elámpagos aparecen en una parte del cielo y son
vistos por gente en diferentes partes, no siendo confi-
nauos a un lugar en particular. Son vistos por los que
est án en la alerta. Las palabras de Lucas sobre este
respecto apoyan esta conclusión.-Luc. 17 : 24.
Los relámpagos preceden ·de Jehová. ( J er. 10: 13).
Así mismo, toda la luz sobre el plan divino origina de
J ehová. Cuando El revela su luz, a su iglesia ungida,
lo hace por conducto de la Cabeza de su organización,
Cristo Jesús. Ningún sér humano puede producir re-
lámpagos. De la misma manera, ningún sér humano
es competente para indicar el hecho de que Cristo está
en un lugar especial. Su presencia se revela a la clase
ungida que se encuentra en espera de la manifestación de
ella. La venida a que el Señor hace alusión en este
t exto se refiere especialmente a la venida al templo de
de Dios, el cual está formado de sus fieles ungidos. .
El viene con el · fin de juzgar primero a los que
son de la casa del Señor y luego a juzgar a la profesa
caoa de Dios, la que en realidad es parte de la org::mi-
r.ación uel Diablo. La venida del Señor a su t emplo
habría ele ser seguida por un gran tiempo de angustia
sobre la tierra, culminando en el Annagedón, el cual
destruirá la organi;mción de Satanás.

TIEMPO
Ouando J esús ascendió a los cielos, Dios lo exaltó a
la más elemua posición ele autoridad. (Apoc. 3: 21 ).
l' ue entonces cuando Dios dijo a su amado Hijo: '.' Sién-
tate a mi diestra, hasta tanto que ponga a tus enemigo¡;
por tarima de tus pies." (Sal. 110: 1) . La orden no
implicaba que a Cristo no le tocaba hacer nada absoluta-
men~e, sino que le tpcaba estar por completo inactivo en

\
La Venida del S e1íor 283

lo que toca a hacerse cargo d~ mundo hasta que llegara


el debido tiempo de Dios para ello. Antes de ese tiempo
los miembros de su cuerpo tienen que ser escogidos, lo
cual se ha estado haciendo durante toda la era cristiana.
La distancia o espacio no es obstáculo alguno para el
Señor; por lo tanto podía El ocupar la posición elevada
en el ciclo y al mismo tiempo estar con sus seguidores a
través de la edad. (Mat. 28: 20). Pero el tiempo tenia
que llegar cuando seria autorizado para proceder en
contra del enemigo y establecer su gobierno. (Sal.
110: 2). Antes de ese tiempo especifico Cristo Jesús
t enia que preparar su iglesia y también las cosas relacio-
nadas con su gran acto de quitar del poder al enemigo
y establecer su propio gobiemo. Durante ese específico
tiempo sería que le tocaba juntar a los que ha1·ían el
pacto de sacrificio. (Sal. 50 : 5) . Ese periodo de tiempo
se Clcscribe en las Escritmas como "el día de la prepara-
ción," en que Cristo, como .Mensajero de Dios, prepara
el camino.- Mal. 3: l.
· Durante ese periouo ele tiempo Cristo J csús tiene que
estar prescute. Esa presencia no quiere decir que le es
preciso clcja1· el cielo para venir a la tierra, sino que
evidentemente quiere decir que dará e. pccia.l atención
a la junta de sus verdaderos seguidores, separándolos
de los que sólo lo son de nombre, y alistando las condi-
ciones en el mundo. Las Escrituras prueban que ese
periodo ele su presencia y del día de la preparación es
desde 1874 E. C. en adelante. Por lo tanto, la segunda
venida del Señor comenzó en 1874, y esa fecha, y las
fechas de 1914 y 1918 están especialmente marcadas
con relación a su venida.
El "mundo" incluye tanto el gobierno visible como
el invisible, y por lo tanto se subdivide, en lenguaje sim-
bólico, en cielos y tierra. Por siglos Satanás ha sido el
invisible controlador de las Ol'ganizaciones' gobernantes
en la tiena, y puesto que es invisible al hombre, también
ha gobernado los cielos del hombre. ' Pero el tiempo
284 La Creación

tenía que llegar en que el "mundo" de Satanás tocaria


a su fin y cuando él sería arrojado del cielo; la prueba
bíblica es que esto comenzó en 1914.
El templo de Dios quiere decir los aprobados segui-
dores de Cristo que constituyen su cuerpo. El tiempo
tiene que llegar en que Cristo viene a su templo a entrar
a cuentas con sus seguidores. La prueba bíblica apoya
la conclusión de que la venida a su templo fue en el año
de 1918. Después tenía que seguir la completa destruc-
ción de la organización de Satanás, tanto la visible como
la invisible, y el establecimi.ento de un invisible y un
visible gobierno de justicia.
Jehová hizo que sus profetas escribieran concerniente
a la venida de Cristo; sus escritos se encuentran llenos
de dichos oscuros o frases proféticas. La profecía no
puede entenderse hasta que se ha, cumplido o está en
curso de cumplimiento. Desde 1874 hasta Í914 las pro-
fecías concernientes a la segunda venida del Señor han
estado cumpliéndose y por lo tanto ha sido posible en-
tenderlas, y han· sido entendidas por los que han sido
fieles al Señor y han estado atentos al desarrollo de los
acontecimientos. Los demás no han entendido. Con
la llegada de 1914 los hechos físicos manüestados en
cumplimiento de la profecia han sido tan claros y evi-
dentes que todos los que estudian la Palabra de Dios
con el deseo de entenderla han podido entenderla, ya
sea que hayan estado consagrados al Señor o nó.
El gran tiempo de angustia conocido como Armagedón
revelará tan claramente el plan de Dios con respecto al
establecimiento de un nuevo gobierno que todo podrán
verlo. Con este fin está escrito : "He aquí que viene
con las nubes, y le verán todos los ojos, y también
aquellos que le traspasaron ; y todas las tribus de la tierra
plañirán a causa de El. Asi sea, amen." (Apoc. 1 : 7).
Las nubes sombólicamente representan angustia, y según
esto, será cuando llegue el tiempo del final y completo
La Venida del Señor 285

destronamiento de la organización satánica cuando la


gente discernirá la presencia ele Cristo.
Con el fin ele capacitar a los que estudian la Palabra
de Dios a que entiendan la prueba de la segunda presen-
cia del Señor, dividimos aquí el tiempo de su venida
en periodos separados, como sigue: ( 1) El dia de la
preparación, ( 2) el fin del mundo, ( 3) la venida a su
templo, y ( 4) Armagedón. Estos periodos de tiempo
colectivamente abarcan lo que las Escrituras llaman "el
tiempo del fin," el cual pasamos ahora a considerar.

EL TIEMPO DEL FIN


Con respecto a su segunda venida J esús dijo a
sus discípulos : "Empero respecto de aquel día, nadie
sabe." Eso fue cierto porque Jesús lo dijo, pero es igual-
mente cierto que al debido tiempo los fieles seguidores
del Señor entenderían los tiempos y sazones relacionados
con la segunda venida. Esto por supuesto no quiere de-
cir que sabrán el exacto día y la hora, sino que los suce-
sos o acontecimientos ocurriendo durante ciertos tiempos
y sazones determinados, los habilitaría a entender, según
está estcrito: "Mas respeto de los tiempos y las sazones,
hermanos, no tenéis necesidad de que os escriba nada.
Porque vosotros mismos sabéis perfectamente que, como
ladrón en la noche, así viene el día del Señor. Cuando
los hombres están diciendo: ¡Paz y seguridad! entonces
mismo vendrá sobre ellos repentina destrucción, como
dolores de parto sobre la que está en cinta; y no podrán
escaparse, Vosotros empero, hermanos, no estáis en ti-
nieblas, para que aquel día a vosotros os sorprenda como
ladrón: Porque todos vosotros sois hijos ele la luz e
hijos del día, nosotros no somos de la noche ni de las
tinieblas. N o durmamos, pues, como los demás, sino ve-
lemos y seamos sobrios. Porque los que duermen, duer-
men de noche, y los que se embriagan, se embriagan de
noche."-1 Tes. 5: 1-7.
' Es igualmente cierto que el clero no entendería estos
286 La 01·eación

tiempos y sazones porque forman parte de la organh:a-


ción del Diablo, siendo la parte eclesiástica de esa orga-
nüación. El amor que sienten a los aplausos de los
hombres y por los pomposos títulos de D. D., etc., les
impide ver .. Por medio d~ su profeta. Dios predijo que
tal sería el caso, y que se encontrarían tan abstraídos
con las cosas del mundo que no entenderían las señales
de los tiempos. (Isa. 56: 10, 11). En todo tieinpo han
sostenido que nadie podría entender las cosas relacio-
nadas con la presencia del Señor. Pretenden que la
Biblia no puede ser entendida. Dios predijo esta pre-
cisa conclición.-Isa. 29 : 10-14.
Para entender las cosas relacionadas con la segunda
presencia del Señor desde 1874 hasta 1914 es preciso
t ener una mente espiritual, y el clero de hoy en día no
da trazas ele mucha espiritualiclad.-1 Cor. 2: 10-14.
La expresión "el tiempo del fin" no significa el "fin
del tiempo" puesto que el tiempo nunca t ermina. En-
tonces, ¿qué quiere decir? I or muchos siglos Satanás
ha sido el dios o gobernante ele este mundo. (2 Cor.
4:3, 4). El ha sido el invisible gobernante del hombre.
Este tiempo tiene que llegar a su fin y ser seguido por
el justo reino de Cristo. Por eso, los últimos años del
tiempo en que Satanás ha ele controlar los asuntos el e la
t ierra muy apropiadamente Teciben el nombre de "el
tiempo del fin." Es el período de tiempo en que Dios
est.-í. arreglando de tal manera los asuntos de la tierra
que resulten en el derrumbe del arreglo ele cosas injusto
y en el establecimiento por medio de su Hijo ele un orden
ele cosas en que reine o prevalezca la justicia. Los go-
bie¡·nos de la tierra, ya sea que la gente lo haya enten-
dido así o n6, y a excepción hecha del gobierno estable-
cido por Dios en el pueblo de Israel, han sido y aun son
la visible organización satánica.
J ehová hizo que su profeta Daniel, describiera los
r:1sgos salientes de los sucesos que acontecerían durante
el tiempo a partir del imperio de Persia hasta "el tiempo
La Ven-ida .del Señor 287

del fin ." Lo que Daniel escribió fue profecia, es decir,


siendo guiado por el poder divino él registró ciertos
acontecimientos mucho tiempo antes de que ocurrieran.
Esto de por si es una evidencia de que las cosas escritas
por él no podrían ser entendidas antes de que ocurrieran.
El mismo Daniel dice que él escribió pero que no enten-
dió. Estas cosas las encontramos en los capítulos 7 al
12, inclusive, del libro de Daniel.
Dice Daniel: "Y yo oí, pero no compren di. Dije
pues : Señor mio, ¿ cuál será el resultado de estas cosas ?
Mas él respondió: Anda Daniel, que estas palabras están
cerradas y selladas hasta el tiempo del fin . Muchos
serán 1nuificados y emblanquecidos y acrisolados ; pero
los malos seguirán haciendo maldades ; y no entenderá
ninguno de los malhechores, mas los sabios entenderán."
(Dan. 12: 8-10). Los "malos" a que aquí se hace alu-
sión son los que pretenden representar a Dios pero en
verdad son una parte de la organización del Diablo.
Estos t ales no pueden entender. Los sabios son los que
humildemente ejercitan fe en las promesas de Dios y el
conoclmento que tienen lo aplican en armonía con su
voluntad. El Señor hizo que Daniel registrara ciertos
acontecimientos que ocurrirían al comienzo del tiempo
del fin. El "tiempo del fin" es un especificado tiempo
al final del dominio ele los gentiles.
"llfas al tiempo del fin, arremeterá contra él el rey
del Sur; pero el 1~ey del Norte le arrebatará como una
tempestad, con carros de guerra y gente de a caballo y
muchas galeras; y entrará en las tierras; y lo inundará
y lo arrollará todo. Entrará también en la tierra her-
mosa; y muchas tierras caerán; pero escaparán de su
mano Edom, y Moab, y la parte principal de los hijos
de Ammón." (Dan. 11: 40-41). El cumplimiento de
esta profecía fija el comienzo de "el tiempo del fin"; la
profecía lo determina de una manera definida. Las
campañas de Napoleón Bonaparte clammente cumplen
esta profecÍa, COmO Se puede demostrar al exami11ar al-
288 -: ' La Creación
gunos hechos ·históricos. El "Rey del Sur'' a que aquí
se hace alusión se refiere a Egipto; el "Rey del Norte"
se refiere a la Gran Bretaña, la que entonces formaba
una parte intengrante del Imperio Romano.
Napoleón se encontraba en Egipto luchando en contra
de los ejércitos egipcios que estaban bajo el mando de
:M:urat Baya quien él derrotó. Su victoria no solamente
atemorizó a los egipcios sino a parte de Africa y Asia
y todas las tribus vecinas se rindieron al conquistador.
En tanto que Napoleón estaba en esta empresa, las fuer-
zas británicas bajo el mando de Lord N elson atacaron
con éxito las fuerzas de Napoleón. Napoleón comenzó
esta campaña en 1798, la terminó y volvió a Francia en
Octubre de 1799. La campaña se describe breve pero
gráficamente en la profecia en los versos 40 al 44, y
siendo completada en 1799, de acuerdo con las palabras
del profeta, marca el comienzo de "el tiempo del fin."
. Desde que Seclequias fue destronado (en el año 606
A. de C.) y desde el tiempo del establecimiento del im-
perio gentil universal bajo N abucodonosor, los poderes
mundiales han sido designados en las Escrituras como o
bajo el símbolo de "bestias." El Profeta Daniel (7: 7,
8) describe una "cuarta bestia; espantosa y terrible."
Esta t errible bestia fue una forma de gobierno compuesta
de tres elementos o partes componentes, a saber: polí-
ticos profesionales, grandes financieros y guías eclesiás-
ticos. Esta organización satánica llegó a ser espantosa
y terrible desde el tiempo en que estas tres fuerzas se
juntaron. En esa inicua "trinidad" encontramos al
Papado, el elemento eclesiástico, llevando las riendas y
dirigiendo todo. La fecha de su comienzo fue el des-
tronamiento de la monarquía ostrogoda, lo que ocurrió
en el año 539 de la era cristiana.
A Daniel le fue dada una visión de los sucesos que
seguirían, los cuales él tampoco entendió : "Entonces yo
Daniel miré, y he aquí a. otros dos que estaban en pie,
el uno de esta parte a la rib~ra del río, y el otro de aque-
La Venida 'del Señor, 289.

lla parle a la ribera . del río. Y tlij 6 uno de ellos al


varón que traía las vestiduras de lino blanco, que estaba
en pie sobre las aguas del río : ¿Para cuándo será el fin
de estas maravillas? Y yo oí a aquel varón que traía
las vestiduras de lino blanco, que estaba en pie sobre las
aguas del río, cuando levantó su mano diestra y su
siniestra hacia el cielo, y juró por aquel que vive eterna-
mente que será para un tiempo, y dos tiempos, y la mitad
de otro; y que cuando se haya acabado de destruir el
poder del pueblo santo, todas estas cosas serán consu-
madas."-Dan. 12: 5-7.
En los simbolismos bíblicos un "tiempo" quiere decir
tm año de doce meses, de treinta dias cacla uno, o sea
un año de 360 días. Cada día se computa por un año,
como dice el profeta: "Un día por cada año te he seña-
lado." ( Ez. 4: 6). Aquí, entonces, encontramos men-
cionados tres tiempos y medio de 360 días proféticos
cuela uno, o sea un total de 1,260 días proféticos, los
cuales marcarían el comienzo del tiempo del fin de ese
orden bestial, o representado por las bestias. Mil dos-
cientos sestenta años desde el año 539 nos trae hasta
1799, lo cual es otra prueba de que 1799 definitivamente
marca el comienzo del "tiempo del fin." Esto también
muestra que es desde la fecha del 539 E. C. que los otros
días proféticos de Daniel tienen que ser computados.
El entender de estas profecías relacionadas con el
tiempo del fin, y la presencia del Señor, fue de adrede
ocultado por Jehová hasta el tiempo debido. Daniel
deseaba saber cuál sería el fin de estas cosas, pero Dios
le dijo: "Tú empero, Daniel, cierra estas palabras, y
sella el libro hasto el tiempo del fin." (Dan. 12: 4). Es
más que razonable el esperar que Jehová indicara alguna
cosa por medio de la cual, al llegar, se pudiera entender
el tiempo del fin, Jehová no elijo. por conducto de Da-
niel que dirigiéramos la mirada al cielo para ver en él
escrita la noticia de la llegada del tiempo del fin, sino
indicó ciertas evidencias 9.ue pudieran ser vistas y enten-
290 La Creación

didas por los que estuvieran familiarizados con las pro-


fecías y que estuvieran en' la alerta por el cumplimientv
de ellas. Que esas profecías no se entenderían en el
tiempo en que fueron escritas se indica por las palabra :
"Anda, Daniel, que estas palabras están cerradas y sella-
das hasta el tiempo del fin."-Dan. 12: 9.
¿Qué era de esperarse cuando ese tiempo llegara?
Leemos : "Uuchos correrán de aquí para allá y la ciencia
será aumentada." (Dan. 12: 4). Poco tiempo después
de 1799, la fecha del comienzo del "tiempo del fin,"
deberíamos encontrar un aumento de conocimiento, espe-
cialmente con referencia a la Biblia. Antes de ese
t iempo la gente había sido mantenida en ignorancia de
la Biblia. El Papauo había prohibido el uso de ella a
todos menos a la clase el rical. De hecho, bajo las leyes
de la iglesia de Roma era un delito el posce1' una copia
de la Biblia, imponiendo dm·os castigos a los que viola-
ban esa ley.
En el año de r/99 el poder romano, encabezado por
el sistema Papal, recibió una herida mortal. A la gente
se le había enseii.ado a creer en el derecho divino de los
reyes, y el derecho divino del clero pam dominar sobre la
conciencia de la gente. Cuando Napoleón tomó lll'isio-
nero al Papa y se lo llevó a Francia, y cuando más tarde
se negó a ser coronado por el Papa, poniéndose en cam-
bio él mismo la corona, y tratando con desprecio las
pretensiones papales, todo esto sirvió para abrir los ojos
a la gente, tanto a reyes como a vasallos, en cuanto a
que el Papado no poseía los derechos divinos que pre-
tendía.
Poco tiempo después comenzaron a organizarse las
primeras sociedades bíblicas. Bn 1803 se estableció la
Sociedad Bíblica Británica. y EA'iranjera; en 1804 la
Sociedad Bíblica de Nueva York; en 1805 la Sociedad
Bíblica de Berlín; en 1803 la Sociedad Bíblica de Fila-
delfia, y en 1817 la Sociedad Biblica Americana. La
Biblia se tradujo y se public6 en muchos y diferentes
La V enida del S efwr 2Dl

idiomas, y se vendió a precios tan reducidos que los


p obre~ podían adquil'irla. En poco tiempo millones de
Diblias se encontraban en manos de la gente. El sis-
tema papal denunció a esaJ3 asociaciones bíblicas como
"JJesli'rleras asociaciones bíblicas." Pero había llegado
el tiempo del aumento del conocimiento, y el Señor es-
t aba cumpliendo su promesa de poner la Biblia al
nlean ce de todos los que estuvieran con hambre de ver-
dad. La gente comenzó a aprender que Dios no es
respetador de personas ; que los reyes y los papas, los
sacerdotes y la gente común, todos de una manera igual.
tienen que rendir cuentas a Dios y no a los hombres.
Desde ese tiempo en adelante ha habido un aumento
de conocimiento correspondiente en todas las lineas del
saber humano. Las escuelas públicas por tanto tiempo
opuestas por el Papado, suministraron un medio de
educación más general y un aumento ele conocimiento
en las diferentes esferas de la vida. En toda la tierra
han surgido nuevos colegios y universidades. Con el au-
mento de conocimiento en varias línea s también han
venido los numerosos inventos que se tienen hoy en día,
y las maquinarias ahorradoras de trabajo, etc.
Antes de 1799 los medios ele transporte eran tales que
sólo se poclia viajar una corta distancia en un dia. Era
preciso viajar por vehículos movidos por caballos o bue-
yes, o a pie, y para cruzar el mar era preciso viajar en
un barco de velas cuya marcha era muy lenta. En 1803
se inventó el barco ele vapor; en en 1831, la primera
locomotora de vapor. Y tan maravilloso progreso se ha
hecho en esta linea que ahora uno puede viajar a cual-
quier parte de la tierra a una gran velocidad, tanto por
agua como por tierra. No es fuera de lo común el viajar
a una velocidad de setenta y cinco millas por hora, es-
pecialmente en lo que toca al areoplano, que también es
un invento moderno.
Las clases obreras siempre han estado :pisomadas y
mantenidas en sujeción por los príncipes financiero~
. 1 .
2~ 2 · La Creación

éclesiásticos y políticos: Fue en el año de 1874,


la fecha de la segunda venida del Señor, cuando se
formó la primera organización obrera del mundo. Desde
entonces en 'adelante ha habido un maravilloso aumento
de luz y los hallazgos, inventos y descubrimientos han
sido tan numerosos que no los podemos enumerar todos.
Solamente mencionaremos, como otra evidencia de la
presencia del Señor, algunos de los que han sido dados
a conocer y se han puesto en uso desde el año de 1874:
A.reoplanos, aluminio, arados de disco, automóviles, bici-
cletas, cajas registradores, carburo de silicio, celluloide,
cinematógrafo, cirugía antiséptica, dinamita, escalado-
res, ferrocarriles eléctricos, ferrocarriles subterráneos,
fonógrafos, gas para alumbrado, grafófonos, inalámbrico,
linotipos, máquinas de escribir, máquinas de segar, má-
quinas de sumar, máquinas de coser, monotipos, motores
de gasolina, motores de inducción, pólvora sin humo,
radio, rayos de Roengten, señales para ferrocarriles, se-
paradoras de crema, soldadoras eléctricas, submarinos,
teléfonos, tintas artificiales para teñir, y por último,
televisión.
La cosa más importante indicada por todas las pro-
fecías, y por la cual esperaban los apóstoles, es la se-
gunda venida del Señor. El profeta describe ese tiempo
de regocijo: "Bienaventurado aquel que espere, y alcan-
ce a mil trescientos treinta y cinco dias." (Dan. 12 : 12).
Los que se dicen aqui como esperando, sin duda alguna
son los que recibieron la orden de esperar y estar en la
alerta por su venida. Esta fecha, al entenderse, segura-
mente marca el tiempo de la segunda venida del Señor.
Aplicando la misma regla de un dia por un año, 1335
<lias, o años, después del año 539, nos traen hasta 1874,
fecha en que, de acuerdo con la cronologia biblica, tcn-
dria lugar la segunda venida del Señor.
Hay dos fechas importantes que no debemos confundir
sino diferenciar de una ma.ncra bastante clara. Esas
fechas son la del comienzo del tiempo del fin y la del
La V enida del S efior 293
comienzo de la presencia del Seííor. "El tiempo del fin"
comprende un periodo de tiempo desde 1799 · husta
cuando el imperio de Satanás haya sido por completo
derrumbado y haya sido establecido el reino mesiánico.
La venida del Señor data desde 1874 y ocurre a la parte
final del período conocido como el tiempo del fin.
Las Escrituras designan un especifico período de tiem-
po cbmo "el día de su preparación." Dentro de ·los
límites de ese período de tiempo Dios junta a su pueblo
y les da conocimiento de su plan y de sus propósitos ;
luego, al debido tiempo, Cristo Jesús repentinamente
viene a su templo, junta a todos los que han hecho un
pacto de sacrificio y los pone en la condición del templo.
Este tiempo es un tiempo de prueba severa y los fieles
que soportan la prueba y que son aprobados, reciben las
vestiduars de salvación y son traídos bajo el manto de
justicia. (Mal.1-5; Isa. 61: 10). Durante ese periodo
de t iempo Cristo está presente y el tiempo critico de su
presencia es cuanuo El viene a su templo. Las ·Escri-
turas muestran también que dentro de los limites de
ese "día de la preparación" Dios prepara a su pueblo
y sus ejércitos, y también las c.ondiciones, par?. la gran
batalla del Armagedón en la cual la organización de
Satanás será por completo destruida. Cristo, en su
capacidad de agente ejecutivo de Jehová, se encuentra
presente llevando a cabo una tarea preparatoria y ejecuta
la venganza de Dios sobre Satanás y su organización.-
Neh. 2: 3-6; Sal. 110: 2-6.
La siega es el tiempo de recoger lo que ha estado
creciendo o desarrollándose. El Señor usó la siega natu-
ral para ilustrar la tarea de la siega que se llevaría a
cabo al tiempo del fin de la edad. Conforme a las pala-
bras del Maestro, durante el período de la siega, El se
encontraría presente dirigiéndola.-Mat. 13: 24:-30.
Desde 1874, y en todas las partes de la tierra, se ha
estado llevando a cabo una tarea de junta de los verda- .
cleros cristianos sin tener en cuenta lazos denominacio-
'
294 La Creación

nálesni credos. E stos han venido tanto de la iglesia


católica como de la p1·otestate, y también algunos han
esta:do sin conexión alguna. Este grupo no ha estado
en busca de miembros pero se han juntado a estudiar la
Palabra de Dios y aman al Señor y a su causa por sobre
todo lo demás. P<nece ser que éste es el cumplimiento ele
los palabras proféticas concernientes a la siega : "Jwl-
t adme mis piadosos siervos, los que han hecho conmigo
un pacto de sacrificio." (Sal. 50 : 5) . Durante este pe-
ríodo de tiempo estos cristianos han estado proclamando
en toda la tierra el mensaje del reino de los cielos que
ha llegado, y ahora, ele una manera especi.al, anuncian
a la gente la presencia del Señor y que por haber llegado
el tiempo de su reino, millones de gente que ahora viven
no morirán jamás.
El Maestro dio una parábola mostrando cómo los que
verdaderamente son cristianos y los que tan solo lo son
de nombre se desarrollarían los unos al lado ele los otros
durante la era cristiana. El elijo: "Dejad crecer jun-
tamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la
siega diré a los segadores : Recoged primero la cizaña,
y ataclla en mamojos, para quemarla, mas al trigo reco-
gecllo en mi granero." (Mat.1 3 : 30) . Durante los últi-
mos cincuenta años especiralmente ha habido una tenclen-
.cia de parte ele los sistemas d.enominacionales de jun-
tarse en fedemciones y ligas al grado de que hoy es una
e)..1Jresión común la "Federación de I glesias," dando a
.entender la ·unión de los "Varios sistemas. denomnaciona-
lcs que enseñan toda otra cosa menos la Palabra de Dios.
En estos varios sistemas clenominacionales se encuen-
tran muchas politicos profesionales y explotodores sin
conciencia a los que las Escrituras dan el nombre ele
"principales del rebaño" y los que con su influencia
dirigen el curso que debe seguir el pastor de la congre-
gación. Estos no profesan una plena consagración a
Dios pero encuentTan que las iglesias denominacionales
La Venida del S e11o·r 29lí

son excelentes organizaciones para entretenimientos so-


ciales y fin es políticos. ·
Y en tanto que esa junta o atamiento ha estado ocu-
niendo entre la cizaña, el Señor ha estado juntando a
los verdaderamente consagrados, dándoles el nombre ele
trigo. Esta tarea de juntar a los verdaderos cristianos
es la que se designa con el nombre de siega y es el cabal
cumplimiento de lo predicho por Jesús. El propósito
de estos cristianos no es el de juntarse como Estudiantes
de la Biblia para inducir a otros a juntarse a ellos. N o
se lleva registro ninguno de miembros. El objeto de
ellos es el iluminar a la gente en lo concerniente al Plan
ele Dios y de este modo capacitarlos a entender que Dios
tiene para la humanidad algo mucho mejor que lo que
h:m estado enseñando los credos de la cristiandad. Esta
evidencia circunstancial, cumpliendo la profecía, es lo
que constltuye los hechos fisicos y es una prueba en co-
rroboración de la presencia del Señor desde 1874:, puesto
que esa tarea se ha estado llevando a cabo especialmente
desde esa fecha.

ESCARNECEDORES
Estos cristianos verdaderos que han sido juntanos de
todas las denominaciones y sectas se han regocijado en
proclamar a la gente que el reino de Dios ha llegado.
Muchos han creído, otros han dudado. El clero es el
responsable de esas dudas a causa de sus enseñanzas.
Era de esperarse que el clero se regocijaría con cualquier
señal que se presentara de la vuelta del Señor y del
establecimiento de su Reino. Pero en cambio de rego-
cijarse se burlan y escarnecen a los que enseñan la pre-
ciosa verdad de la segunda venida del Señor y han echa-
u.o mano de todo clase de. calumnia y de persecución en
contra de los humildes mensajeros del Señor que anun-
cian su 1·eino. Con su asumida sabiduría se, burlan de
los que se atreven a hablar de la. segunda · venida. de
Cristo.
1

2% La Creación

Por supuesto que Dios previó que esto ocurriría y por


eso hizo que uno de los apóstoles escribiera profética-
mente concerniente a esto : "En los postreros días ven-
drán escarnecedores, con sus escarnios, andando según
sus mismas concupiscencias [deseos], y diciendo: ¿Dón-
de está su prometido advenimiento [presencia]? · Pues
desde que durmieron los padres, t odas las cosas conti-
núan como han sido desde el principio de la creación."
(2 Ped. 3: 3, 4). Esto en sí mismo es una prueba de
la presencia del Señor. Después de expresar estas pala-
bras el apóstol añade: uPorque voluntariamente se olvi-
dan de esto," es decir, se olvidan de la presencia del Se-
ñor y del fin del mundo. Esto se encuentra corroborado
por las palabras del Señor: "Mas como eran los días de
Noé, así será la venida [presencia] del Hijo del hom-
bre."-M:at. 24:37-39.
Diariamente estamos presenciando el cumplimiento
de estas profecías. El clero y los principales de sus
rebaños cierran los ojos a la acumulada evidencia de la
segunda presencia del Señor, y así como en los días de
Noé, siguen indiferentes, no dando atención al hecho
de que el reino de los cielos ha llegado y que el Gran
Rey ha comenzado su reino.

EL FIN DEL MUNDO


Cuando Dios colocó al hombre en el Edén puso a Lu-
cifer como su director. Cuando a causa de su traición
Lucifer se tornó en Satanás, Dios no le quitó el cargo
que tenía con relación al hombre. Por lo tanto, Lucifer
ha sido en todo ese tiempo el invisible guía y controlador
de la humanidad exceptuando a la nación de Israel,
mientras esa nación se esforzó en guardar el pacto hecho
con Jehová. Cunndo Israel fue rechazado a causa de su
llesobediencia al Pacto de la Ley, Satanás llegó a ser
el gobernante del mundq entero. (2 Cor. 4: 4). "Mundo"
quiere decir una organización, visible o invisible, que
tiene control sobre los asuntos de los hombres. Es una
La Veni.cla del Seiíor 297
organización de los hombres en formas de gobierno bajo
la supervisión de su invisible guía y por lo tanto incluye
tanto la parte invisible (los cielos) como la visible (la
tierra) de esa organización.
Después de que Dios rechazó a I srael El permitió a ln.s
naciones gentiles 1que tuvieran dominio, sin interrupción,
por un tiempo ueterminado. Al quitar Dios a I srael el
derecho o privilegio de ser su nación, dijo: "Y tú, oh
pro~ano e impío principe de Israel, cuyo día ha llegado
ya, el tiempo en que la iniquidad acarrea la destrucción;
así dice Jehová el Señor: Elévese lo bajo y abátase lo
alto. Haré que haya trastorno, trastorno, trastorno ; ni
aquélla será más hasta que venga Aquel cuyo es el dere-
cho, y a El se la daré." (Eze. 21: 25-27). Esta es una
prueba de que se señaló un tiempo definido para el domi-
nio gentil y que ese tiempo terminaríu. con la venida de
Cristo, "cuyo es el derecho"· de gobernar y sobre cuyo
hombro debe reposar el justo gobierno. Este decreto
divino acabando con la nación di! I srael íue en cumpli-
miento de los "siete tiempos" de castigo del que Dios
los había puesto en guardia.-Lev. 26 : 18.
Como ya hemos visto, un "tiempo" en las E scrituras
es un año de 360 días. Por lo tanto, siete tiempos es un
período de 2520 días. Las Escrituras usan estos "tiem-
pos" tanto en el sentido literal, como en el sentido sim-
bólico. En este .caso se ve que son simbólicos puesto que
los gentiles continuaron gobernando después del final
de los 2,520 días literales. Pero calculándolos un día
por un año (Núm. 14: 34) vemos que los "Tiempos ele
los Gentiles" es un periodo de 2,520 años desde que fue
destronado Sedequías, el último rey de Israel. Esto
ocurrió en el año 606 A. de C., y por lo tanto terminan
en 1914. Allí se marca el debido tiempo para que Aquel
"cuyo es el derecho" tome control de los asuntos del
mundo.
J csús dijo que su reino no era de este mundo, del cual
Satanás ha sido el Dios o jeíe por tanto tiem¡Jo. (Jn.
298 La O·reación
18: 36). El enseñó a sus discípulos que ese mundo
terminaría y que entonces El se encontraria presente.
Los discípulos se habían familiarizado con las profecías
prediciendo la segunda ven ida de Cristo y teniendo esto
en cuenta buscaron más informes. Le dijeron a Jesús:
"Dinos, ¿cuándo será esto? ¿y qué señal habrá de tu
venida y del fin del mundo ?" ( Mat. 24 : 3). La palabra
señal, usada en este texto, significa una indicación o dar
una prueba. Dicha de otra manera la pregunta de los
discípulos fue: ¿qué podemos esperar como scíialcs in-
dicativas de tu presencia y del fin del mundo?
Fi;jémonos en las dos cosas que se mencionan en esta
pregunta: ( 1) La señal de su venida y ( 2) el fin del
mundo. Esto indica que al tiempo del fin del mundo
habrían algunas claras manifestaciones de la presencia
ele Cristo porque eso marcaría el tiempo en que podría
tomar posesión del mundo. Los hechos que hasta ahora
hemos considerado muestran que el Señor ha estado pre-
sente desde 1874 y que ha estado llevando a cabo la tarea
especial de juntar a sus santos. (Sal. 50: 5), restaurán-
doles las grandes verdades f11ndamentales que han estado
esconuidas por la parte eclesiástica de la organización
del Diablo.-Mat. 17: 11; Luc. 11: 52.
Los hechos muestran que el año de 1914 marcó legal-
mente el final de los 'riempos de los Gentiles y por lo
tanto el fin del mundo, a cuyo tiempo, algo más que tra-
bajo preparatorio podía esverarse. Fue concerniente a
esta última parte que los discípulos inquirían, y la res-
puesta de Jesús fue dada en lenguaje profético no pu-
diendo por lo tanto ser claramente entendida sino hasta
el tiempo de su cumplimiento, 1914, y desde entonces en
adelante. El dijo a sus discípulos que antes de que
llegara el fin habrían muchas guerras, pero que no debe-
rían afanarse por ello. Luego añadió: ''Porque se
levantará nación contra nación, y r eino contra reino, y
habrá hambres y terremotos po1· donde quiera. · Todas
estas cosM principios son de dolores."-Jy.[at. 24: 7, 8.
La V en1ida del S e1íor
De todas las guerras que se registran en la historia,
la guerra mundial de 1914 fue la única en que se levant ó
nación contra nación y reino contra reino. rroda parte
de las naciones en contienda se vio obligada a prestar su
contingente. Las mujeres, el dinero, los predicadores,
todos tuvieron su parte. Hasta los mismos niños se
vieron forzados a tener sus raciones reducidas para c¡ne
los soldados tuviemn alimento suficiente y los cxplot· -
dores pudieran abusar. Y en seguida de esa t errible
guerra vino una gran hambre que junto con la peste de. -
truyó millones más que los destrnidos por la gnerra.
E stas calamidades combinadas J"esús dijo serian "prin-
cipio de dolores."
Estos hechos fí sicos comenzaron precisamente en
19111, probando tanto la presencia del Señor como el fin
del mundo. Estos son hechos que han sido vistos por
t oda la gente y que son entendidos l)Ol' todos los que
examinan las Escrituras en conexión con ellos. Antes
¿¡...:) 1914 el Señor no podía entrar en acción en contra ele
la organización de Satanás porque habia recibido de
Dios la orden ele esperarse. ( Sal. 110: 1). Desde 1874,
el comienzo de su presencia, hasta 1!)14 El se encontraba
llevando a cabo una tarea en conexión con su iglesia, y
cuando llegó 1914, comenzó a cumplir la orden de Dios :
" Enviará J" ehová desde Sión la vara de tu poder ; ¡ do-
mina Tú, en medio de tus enemigos !"-Sal. 110: 2.
Después dijo J" eS1is a sus discipulos: "Entonces os
entregarán a la tribulación, y os matarán; y seréis odia-
dos de todas las naciones por causa de mi nombre."
( Mat. 24: 9). E sto indudablemente se refiere a la clase
que se ha consagrado de todo corazón y que están siendo
fieles al Señor. Por supuesto que los apóstoles de J" esús
no se encontrarían en la tierm al tiempo del cumpli-
miento de esta profecía, cuando la Guerra Mundial.
Pero algunos miembros de esa misma clase de fieles
cristianos, creyendo y obedeciendo las órdenes de su Se-
ñor, se encontraban en la tierra y fueron odiados por
La Creación
todas las naciones que estaban implicadas en la guerra
y fueron perseguidos, y a muchos quitaron la vida.
El Señor mostró que poco mis o menos en ese tiempo
algunos de los profesos cristianos traicionarían a algu-
nos otros y que los ocliarian, y que muchos se apartarían
del camino a causa de falsas enseñanzas, pero que algu-
nos perseverarían fielmente hasta el fin. Desde 1917 en
adelante todas estas cosas se cumplieron, corroborándose
de este modo una vez más la presencia del Señor en el
tiempo del fin del mundo.
Puesto que Dios prometió a Abraham y a su simiente
la tierra de Palestina, cuanclo el fin de los "Tiempos de
los Gentiles" y cuando Aquel "cuyo es el derecho" había
de volver, deberíamos esperar algunas manifestaciones
ele la vuelta del favor de Dios a I srael y clel retorno de
los israelitas a su tierra. Uefiriéndose a este asunto, en
conexión con su presencia y el fin del mundo, dijo Jesús:
"Jerusalem será hollada de las naciones [de los genti-
les] hasta que los tiempos de las naciones [los gentiles]
sean cumplidos." (Luc. 21: 24). Como ya lo dijimos,
la presencia del Señor comenzó desde 1874. En 1878
se dejaron ver las primeras manifestaciones del retorno
del favor de Dios a Israel. Esto se marcó por el esfuerzo
hecho en provecho de los judíos por Disraeli, el entonces
primer ministro británico. Poco tiempo después comen-
zó el movimiento conocido con el nombre de Sionismo,
con el fin de volver a su tierra al pueblo de Israel.
Durante la Guerra Mundial, en Noviembre 2 de 1917,
a principios del año judaico de 1918, el Imperio Britá-
nico expresó su consentimiento para que los judíos esta-
blecieran en la Palestina un gobierno propio. Otras
naciones aprobaron también el movimiento. En la
primavera del año de 1918 los judíos comenzaron a re-
edificar a Palestina y ahora es un hecho conocido por
todos que miles de judíos han vuelto a Palestina y han
comprando tierras, han edificado casas, y de varios otros
modos han mejorado el pais en exacta armonía con lo
La Venida del Sefíor 301
predicho por el · Señor. Este es otro heclio · físico o
evidencia circunstancial de la presencia del Señor y del
fin del mundo.
Otra evidencia mencionada por J esús fue la de que
después de la Guerra !l[undial y durante su presencia en
la tierra y el fin del mundo habría "Angustia de nacio-
nes, perplejas .•. los hombres desfalleciendo de temor,
y en expectación de las cosas que han de venir." (Luc.
21: 25, 26). El indicó que la Guerra Mundial seria el
"principio de ·dolor_es," y en estas palabras mostró que
la angustia continuaría. N o necesita probarse que todas
las naciones hoy en día se encuentran perplejas y que
hay gran desconfianza entre la gente y temor de lo que
ven venir. Esta es otra fuerte prueba en corroboración
del hecho de la segunda presencia del Señor y el fin del
mundo.
L.A. VENIDA .A. SU TEMPLO
La nueva creación se compara con un edificio o tem-
plo, y se llama "el templo de Dios." (Efe. 2: 18-22;
2 Cor. 6: 16; 1 Ped. 2: 5). Es la casa de Dios de la cual
Cristo Jesús es la Cabeza. (Heb. 3: 6; 1 Cor. 3: 16, 17).
Es la clase del templo, durante la era cristiana, a la que
Dios ha encomendado sus bienes, o sean los intereses de
su reino. Jesús frecuentemente enseñó por medio de.
parábolas, y a lo menos en dos de ellas El se describe a
si mismo como haciendo un largo viaje y volviendo a
entrar a cuentas con sus siervos. (Mat. 25 : 14-30; Luc.
19 : 12-26). Estas parábolas se conocen como las pará-
bolas de los talentos y de las minas. Los aconteci-
mientos ocunienclo en cumplimiento de estas parábo-
las proféticas muestran la venida del Señor a su templo.
,Lo sucedido durante los tres años y medio d~l minis-
terio de Jesús, desde el año 29 al 33 de la era cristiana,
encuentra un paralelo . en los acontecimientos al final
de la edad, al tiempo de la segunda presencia. En el
J ordán Jesús fue ungido como Rey. 'l'res años y medio
302 La Creación

más tarde apareció en el templo. de Jerusalcm y lo lim-


pió de los impostores, aprobando a los fieles. (:M:at.
21: 1-13). Como ya lo indicamos, Jesús tomó su poder
para reinar en el año de 1!:>14, en el que, según lo dijo
El mismo, las naciones se airarían. (Apoc. 11: 17, 18) .
Tres años y medio más tarde, es decir, en el año de 1918,
le tocaba venir, y vino, a su templo. La evidencia cir-
cuntancial, o sean los hechos físicos, p1ueban lo correcto
de esta conclusión. '
Jehová envió a su amado Hijo como su Embajador o
Mensajero, para llevar a cabo una obra preparatoria.
Esa obra teilÍ.a que hacerse, y se hizo, entre 1874 y 1914.
Lu ego siguió llll periodo de cxpecta'ción durante el cual
los miembros del cuerpo de Cristo en la tierra se encon-
traban ansiosamente esperando que estableciera su reino,
y en tanto que esperaban, El vino repentinamente a su
tcm11lo. Este orden de proceder se encuentra predicho
pc1· Dios por medio de su profeta : "He aquí pues que
voy a en.viar mi mensajero, el cual preparará el camino
delante ele mi; y repentinamente vendrá a su 'femplo el
Señor a quien buscáis; es decir, el Angel [Mensajero]
del Pacto, en quien os deleitáis; he aquí que vendrá,
dice Jehová de los Ejércitos."-Mal. 3: l.
Exactamente conforme a lo predicho, ocurrieron las
co. as. Desde 1914 hasta 1918 los verdaderos seguidores
ele Jesús en la tierra estaban anunciando que el tiempo
del reino habi.a llegado y est,a ban ansiosamente esperm.1do
el cumplimiento del deseo de su corazón. Y luego, re-
pentinamente, en l.D18, vino sobre ellos un severo tiempo
de prueba. Dios, por medio de su profeta, había predi-
cho que la venida del Señor a su templo sería un tiempo
de prueba para los miembros de la nueva creación :
"¿Pero quién es capaz de soportar el día de su adveni-
micn to? ¿y quién podrá estar en pie emm do El apare-
ciere? Porque será como el fuego del acrisolador, y
como el jabón de los bataneros; pues se sentará como
acrisolador y purificador de la plata; y purificará a los
- La Venida del S e1íor 303

hijos de T-'evf, y los afina1'á como el oro y la plata, paTa


que presenten a Jehová ofrcn<la en justicia.-:M:al.
3:2, 3.
Ns evidente que la "plata" en este texto se usa pata
simbolizar la verdad. (Sal. 12 : 6) . Esta profecia indica
que los verdaderos seguidores de Cristo tenclrian una vi-
sión más clara de la verdad después de la venida del
Señor a su templo en 1918. Esto está conoborado por
Apocalipsis 11: 19. Los hechos muestran que desde ese
entonce. han tenido un mús claro entendimiento del
plan ele Dios. Los ''hijos ele Leví" que aqui se mencio-
nan representan a la nueva creación, y la purificación uc
éstos indica que la venida del Señor a su templo serí::t
un tiempo ele prueba para sus verdaderos seguidores.
Esto está en paralelo y fue prcfigmaclo po1· la purifica-
ción del templo literal en J erusalem en el n:üo 33 E. C.
El propósito ele la purificación Je la clase del templo
es para que Dios t enga una clase de · testigos fieles y
veraderos que testifiquen su nombre y lleven a cabo su
obra antes de la final demostración de su poder en el
gran tiempo ele angustia.
Otro profeta de Dios corrobora lo dicho y muestra
el propósito de la venida del Señor a su templo. "Jehová
está en su santo templo; J ehová tiene en el cielo su
trono; sus ojos ven, sus párpados prueban a los hij os de
los hombres." (Sal. 11 : 4). Si los hechos fisicos cono-
cidos están de acuerdo con la profecía éstos tienen que
ser el cumplimiento de ella, y si estas cosas han ocurrido
desde 1918, esto seria una prueba adicional de que el
Señor en ese entonces vino a su templo.
El juicio debe comenz.·u por la casa de Dios. (1 Ped.
4: 17). Pe1·o aun cuando continuando con la casa de
Dios puede también al mismo tiempo ser dirigido Cll .
contra de la casa nominal. "Oid, pueblos todos. Atienda
la tiena y cuanto hay en ella; y sea. Jehová el Seii r
testigo contra vosotros; el Seño1· desde su santo templo."
(:Miq. 1: 2). uJehová empero está en su santo t emplo ;
304 La Creación t

guarde silencio toda la tierra delante de él." (Hab.


2 : 20). Un cumplimiento de las profecías mencionadas
se está llevando a cabo ahora. El clero ha organizado
muchos grupos de gente en la tierra a los cp.ales les dan
el nombre de "la iglesia," pero es tan solo de nombre.
Estos tales toman el nombre del Señor pero no le sirven.
La prueba o examen tiene que llegar a ellos. Dios pre-
figuró esto por medio de sus profetas, y los hechos mues-
tran el cumplimiento de estas profecías.
El Profeta Isaías tuvo una visión del Señor en su
templo, sentado en su trono: "Ví al Señor sentado sobre
un trono alto y excelso, y sus faldas llenaban el templo."
(Isa. 6 : 1-11). Sin duela alguna que el trono a que se
hace referencia es el trono milenario en el cual se sentará
a juzgar a las tribus de la tierra. El Señor aplicó parte
de esta profecía a los eclesiásticos de su tiempo. ( J n.
12: 40). Esta profecía también aplica al cristianismo
profeso de toclas las denominaciones, especialmente al
clero, el cual corresponde en todo punto con el clero
judaico.
Hasta la circunstancia de la murete del Rey U zías,
que se describe en esta profecía, señala la venida del
Señor a su templo. Isaías dice que la visión fue en el
año en que murió el Rey U zías. U zías claramente tipi-
ficaba los sistemas nominales que por mucho tiempo
han pretendido representar al Señor. Por más de cin-
cuenta años U zias fue rey de Israel. Por largo tiempo
él hizo lo recto delante de Jehová. Prosperó y llegó a
ser en gran manera rico. Libró muchas batallas y fue
un gran edificador, llegando a ser un poderoso gober-
nante. Pero su presunción ocasionó su caída y murió
leproso. La lepra simboliza el pecado.
El eclesiasticismo fue organizado con bu~nos fines.
( J er. 2: 21). Por algún tiempo la gente de esos siste-
mas hablaron el mensaje de Dios. Edificaron muchas
iglesias, escuelas y hospitales y se esforzaron por el ade-
lanto moral de la gente. :M:as la presunción motivó la
La V cnida del Señor 305

caída del eclesiasticismo. El Apóstol Pablo puso en


guardia a la iglesia sobre el particular.- Rom. 11 : 25.
U zías, como rey, no tenia autoridad para actuar como
sacerdote. Mas se sintió tan impresionado con su propia
importancia que llegó a creerse por encima de las regula-
ciones del templo, y violando esas regulaciones, entró
a ofrecer incienso. El sacerdote que estaba debidamente
constituido para desempeñar ese oficio trató de impe-
dirle, pero Uzías se irritó e insistió en ofrecer incienso.
Inmediatamente fue atacado ele la lepra.
Por varios años antes de 1018 el mensaje de la verdad
presente se proclamó por toda la cristiandad. Los ecle-
siásticos mientras tanto hicieron alarde de sus riquezas
y de su poder. Cuando llegó la Guerra Mundial en 1914,
el cristianismo nominal prestó su apoyo a la guerra, y
sus predicadores azuzaron a la juventud a que fueran al
campo de batalla diciéndoles que si morían en la lucha
serían parte del sacrificio vicario de Cristo. Aun cuando
repetidas veces se les presentó la evidencia de que esa
Guerra Mundial y las circunstancias que la acompañaron
probaban la presencia del Rey, se negaron a hacer caso.
Y aun cuando un número de prominentes ministros en-
tre ellos presentaron un manifiesto de que los sucesos
que estaban acahecienclo probaban la presencia del Rey
y la proximidad del reino, no hicieron cas.o de ese mani-
fiesto y mm los mismos que lo presentaron más tarde
lo repudiaron. El cristianismo nominal dejó de aprove-
char su lección. Embriagado con el poder politico y
comercial de la tierra, desarrolló gran presunción.
Cuando los poderes político y comercial introduj eron
la Liga de N acioncs, la cual evidentemente es un pro-
ducto satánico, el eclcsiasticismo en vez de r epuuiarla
la apoyó, y la saludó como "la expresión política del
r eino de Dios en la tierra." Con esto mostraron su pre-
sunción porque con su actitud dijeron a J ehová: 'Por
~1edio de esta Liga ele Naciones estableceremos tu reino
en la tierra.' Y así, repudiando los arreglos de Dios, y
30G La Oreaoió1L
por lo tanto a Dios mismo, Dios tuvo que repudiarlos
definitivamente y por siempre. Esto tornó lugar en
Enero de 1919 y corresponde con el tiempo en que Jesús,
como representante de Dios, en su primer advenimiento
rechazó a Israel.
La parábola de los talentos muestra que cuando el
Señor viniera a su templo tomaria cuentas a·sus siervos
y que a unos los encontrnrfa ·fieles en tanto que a otros
los encontraría infieles. A los fieles les dice : "13ien
hecho, siervo bueno y fiel, sobre poco has sido fiel, sobre
mucho te pondré. Entra en el gozo de tu Señor." (:M:at.
25 : 21) . En seguida de la Guerra :M:un<lial, el hambre,
la peste, los terremotos y las persecuciones de los cristia-
nos el Señor dice que, bajo su dirección, se llevaría a
cabo una obra por sus fieles seguidores. Estos tales
indudablemente son los mencionados en la parábola de
los talentos, los cuales son invitados a hacerse cargo de
su. bienes y a entrar en el gozo de su Señor.
A los que aman la venida del Señor las pruebas ele su
venida constituyen 1uenas nuevas y son motivo de gozo.
Las buenas nuevas de su presencia y del fin del mundo
tienen que ser anunciadas a todas las naciones como tes-
timonio. Esto no quiere deciT que debe hacerse el es-
fuerzo de convertir al mundo, sino solamente que sus
fieles sef:,'1.liclorcs deben ser sus testigos. A los tales les
dice : "Y este evangelio del reino ser{t predicado en todo
el mundo, como testimonio a todas las naciones,
y entonces viene el fin ." (:M:at. 24: 14) . En cumpli-
mi ento de estas palabras citamos ciertos hechos.
Hay una pequeña compañía de gente cristiana que
est:i esparóda por todas partes del mundo, los cuales
aman al Señor y sirven a J ehová y a su amado Hijo,
Cristo Jesús, el Rey. El nombre con que se conocen no
es de importancia alguna, pero como medio de identifi-
cación llevan por nombre Asociación Internacional de
Estudiantes de la Biblia. Proceden de todas las . nacio..,.
.nalidadés y de todas las denominaciones. · Se han sepa-
La V m~,:,:da del S efi.or 307

rado de· toda alianza· mundana y su sólo propósito es. el


de obedecer y glorificar a Dios. Cuando terminó la
guerra mundial y cesó la persecución que estos cristin.nos
sufrían, los tales nuevamente emprendieron una vigo-
rosa campaña ele testimonio clel nombre del Señor.
Con e te objeto se han publicado millones ele libros
que contienen el testimonio del plan divino, y han sido
puestos en manos de la gente. Y al debido tiempo ele
Dios el radio entró en acción y éste ha siclo usado para
esparcir las buenas nuevas del reino a través del mundo
entero. Por medio de la di tribución ele tratados gratis
se dio noticia a los gobernantes y reyes ele la tierra de
que Dios ha colocarlo a su Rey sobre su trono según lo
predicho. (Sal. 2:6). En el año de 1926, en Londres,
una resolución fue aprobada por un grupo de Estudian-
tes de la Biblia, y después Cle publicarse en diferente.'!
idiomas, cincuenta millones de ellas se repartieron en
toda la ti erra. Le resolución es como sigue:

UN TESTIMONIO
A Ros Gobernates dea Mundo
Un grupo de miemuros de la Asociación In t -macioual lle
Estudiantes de la Biblia reunidos en convención general, de-
cla ran su iEmi truJa sumisión y devoción al 'l'odopoderoso
Dios, y creyendo ser su privilegio y deber, en obediencia a
los mandamientos <1e Dios, euvian el siguiente testimonio a
los poderes gobernantes del mundo:
PRIMEitO. Que es de suprema importancia el que todos
r econozcan que Jehová, el Creador de los cielos y la tierra,
e.· el verdad ero y 'J~odopoderoso Dios, aparte de quien no
hay otro; que su plan en lo que al hombre se r elaciona,
se presenta eu la Biblia, la cual es su Palal!ra de Verdad;
que Cristo Jesús es el Ejecutor del Plan de Dios; que es
evil1Cnte ahora que las naciones de la tierra están en es-
trecha angustia y perplejidad; que rula angustia aun mayor
que las. experimentadas hasta ahora, amenaza; que el es-
fuerzo de los gobernantes por establecer un gobierno deseable
308 La 'creación
ha fracasado, que solamente el Plan de Dios en su desarrollo
estabi!lzará el mundo y traerá durarera paz, prosperidad y
felicidad a la gente, y que el tiempo ha llegado para que los
que ejercen el poder sobre la gente reconozcan estas grandes
verdades.
SEGUNDO. Que la razón para la prevalente condición
de perplejidad y angustia se debe al hecho de qUe el hombre
desobedeció al verdadero Dios y se sometió a la inicua in-
fluencia de Lucifer el dios falso, quien en un principio era
el legftimo encargado del hombre pero quien a causa de
su deslealtad vino a ser Satanás, el Diablo, el instigador de
touo mal, el auversario de Dios y el más grande enemigo
del hombre; que este inicuo sér apartó al hombre del verda-
dero Dios y motivó su pecado por razón del cual el hombre
perdió su perfecto hogar y su derecho a la vida y a la
felicidad; que desde entonces los hombres han organizado
gobiernos y potencias universales en su esf uerzo por gober-
nut·s~ a sr mismos pero al hacer eso han pasado por alto
la Palabra de Dios y se han sometido al dominio de Sa-
tanás, el Diablo; que hasta ahora Dios no intervenido
con Satanás con el fin de que el hombre pudiera ser libre
pura escoger el bien o el mal y aprendiera por experiencia
los funestos efectos del mal, pero que ahora ha llegado el
tiempo para que Dios intervenga en beneficio de la gente.
TERCERO. Que Cristo Jesús, por medio de su fidelidad
hasta la muerte, llegó a ser el Redentor y Libertauor de la
humanidad; que cuanuo El estuvo en la tierra enseñó que
el tiempo de liberación para la gente comenzaría cuando el
mundo malo, bajo el dominio de Satanás, hubiera terminado,
y que El, Jesús, volverfn y establecería un reino de justicia
para que la gente pudiera conocer y seguir el buen camino;
que por esta razón enseiíó a sus seguidores que oraran:
"Venga a nos tu reino, hágase tu voluntad aquí en la tierra
como en el cielo" ; que desde su primera venida hasta ahora
varias potencias mundiales se han or"'anizado teniendo por
objeto el gobernar y dominar a la gente; que esas potencias
han sido y son de carácter militar, rudas, crueles y opresi-
vas, manifestando el espíritu de Satanás, su invisible gober-
nante o dios, y que el continuo lamentar de la oprimi cla
humanidad ha llegado al Dios del cielo, quien ha oído, y los
librará.
La V en ida del Señor 3.0!)

CUARTO. Que la profecía divina, ya cumplida '1 la que


está en curso de cumplimiento, pt·esenta el testimonio del
hecho que' lui. t ermina'do el períotlo en que a Satanás se le
había pemlitido el poder; que el mUI1do viejo ha terminado
y que el tiempo ha llegado ctiando Cristo .Jesús, el Agente
Ejecutivo de J ehová y el legal Rey de la tierra, desposeerá
a Satanás y comenzará su justo gobierno el cual establecerá
la voluntad de Dios en la tierra; que comenzando con 1914
la profecía divina, en proceso de cumplimiento, ha dado
testimonio de que el fin uel mundo malo ha comenzauo
por medio de lo siguiente : La Guerru Mundial, hambres,
pestes, terremotos, r evoluciones, la vuelta ele los judíos a
Palestina y 'f in almente, la an gus tia y perplejidad general ele
las naciones del mundo; qu e habiéndose dado el testimonio
del cumplimiento de la profecía divina a los gobe rn antes
del mundo, descansa sÓbre ellos una r esponsabilidad de la
cual no pueden eximirse. · ··
QUINTO. Que aun cuando Dios ha suministrado pruebas
concluyentes de que el mundo malo ha terminado y qn e
el . tiempo para el r eino ele su ·amado Hijo ha llegado, sin
embargo, este testimonio ha sido pasado por alto por quienes
han debido proceder ele diferente manera y contrario a la
Palab ra ele Dios los gobernantes comercial es, políticos y
eclesiásticos han tratado de dar estabilidad al mundo man-
teniendo a la gente dominada por medio de la Liga de
Naciones, la cual blasfema mente fue proclamada como la
expresión política del Reino de Dios en la tierra; que el
re:il autor y ·padre del pacto de la Liga de Naciones es
Satanás, el dios de este mundo malo, siendo presentada
por él como el supremo esfuet·zo pa ra en"aiiar a las gentes,
sepÚándolas del Dios verdadero y sujetándolas bajo su
inicuo dominio ; que ahora, despu és de siete años de laborio-
sos esfuerzos de parte <le los proponentes de ese pacto para
establecer paz y prosperidad, es generalmente concedido que
la Liga de Naciones ha sido un completo fracaso y que su
total desintegración es cosa de un breve tiempo; que ahora,
cuando los que la aclvocan se esfuerzan por juntar nueva-
mente sus fuerzas para preserva r esa desintegrante e inicua
alianza, la gente está siendo informada de la solemne pre·
vensión del profeta de Dios concerniente u la federación:
"Juntáos, oh pueblos, y seréis quebrantados; ¡ Cefiíos, y
310 La Creación
seréis qUebrantados! Tomad maduro consejo, mas será
frustrado; hablad la palabra, mas no tendr!\ e!ecto."-
Isa. 8: 9, 10.
SEXTO. Que por razón de la infiuencia cegadora de
Satanás las mentes de los gobernantes l1an sido apartadas
del verdadero Dios, y las fu erzas del mal se están .Juntando
1
en el mundo entero para la gran batalla del Dios Todo- ,
poderoso; que se cierne un tiempo de angustia cual nunca
se ha conocido antes, dm·ante el cual conflicto la poderosa
organización satánica caerá para nunca levantarse, y habrá
u na demostración tal del poder divino que t odas las naciones
se darán cuenta de que J ehová es Dios y de que Cristo J esús
es Rey de r eyes y Sefior de sefiores.
SEPTIMO. Que la gran tribul ación 1·evelará a la humani-
dad el r eino de Dios, el cual descansará sobre el hombro
ele su amado Hijo, el Príncipe de Paz ; que de la paz de
ese 1·eioo 'no habrá fin ; que ese reino traerá el deseo de
toda la gente de buena voluntad y que entonces la cegadora
y terrible influencia de Satanás y la ignorancia con que la
humanidad ha sido rrfligida por largo tíem110, será removida
etemamente; y con el conocimiento y la obediencia a Dios
vendrá la paz eterna, la prosperidad, la salud, la vida , la
libertad y felicidad, y que ese r eino será el pleno cum-
plimiento del p1·ofético coro angelical : "Paz en la tierra;
entre los hombres la buena vol uutad."
Por lo tanto, encarecidamente presentamos a vosotros el
testimonio de que J ehová es EL DIOS, que El ha puesto a
su Hijo como EL REY de la tierra, y que El os ordena el
clar pleDa obediencia al legitimo Rey de la tiena. Haced
esto, y usad vuestr a illfluencia para volver la mente de la
gente h acia el VERDADERO DIOS, para que no os sobre-
venga a lgún desastre.-Sal. 2 :2-12.

AR~IAGEDON

Evidentemente J ehová tiene la intención de que nadie


tenga la excusa de decir que no tuvo la oportunidad de
saber algo con respecto a la presencia del Señor. Sin
embargo, nadie sabe por cuanto tiempo será preciso dar
el testimonio. Cuando ese t estimonio haya sido dado,
311

entonces vendrá el fin del fin, y esto será marcado por


la más grande angustia que el mundo ha conocido. Sus
palabras son: "Porque habrá entonces grande tribula-
ción, cual no ha habido desde el principio del mundo
hasta ahora, ni nunca más habrá. Y si no se acortaren
aquellos dias, ninguna carne podria salvarse ; mas por
causa de los escogidos, aquellos d'tas serán acortados."
(lYiat. 24 :21, 22). Este tiempo es sin duda el mismo
111 cual el Señor se refirió cuando dijo : "He aqui que
viene con las nubes, y le verán todos los ojos, y también
aquellos que le traspasaron, y todas las tribus de la tierra
plañirán a causa de El. Así sea. Amén."-Apoc. 1 : 7.
La evidencia de que el Señor está presente ha sido
progresiva y se ha presentado gradualmente a la gente.
Las Escrituras, y la evidencia circunst ancial en cumpli-
miento de ella, a lo cual damos el nombre de hechos
f ísicos, prueban que la segunda venida del Señor data
desde 18"/4 ; que desde esa fecha en adelante ha sido el
"día de la preparación" ; que en 1914 el Señor tomó su
poder y destituyó a Satanás; que en 1918 el Señor vino
a su t emplo ; que un t estimonio mundial se está dando,
declarando las buenas nuevas del Rey y de su reino en
progreso, y que cuando éste haya sido dado habrán tales
demostraciones de poder divino que todos los pueblos ele
la tien-a se darán cuenta de que Dios está actuando por
conducto de su Rey a quien El ha colocado sobre sn
trono, en cumplimiento a las profecias que se han discu-
tido. ·
CAPITULO XIII

Propósito de la Nueva Creación


EHOVA tiene un fin en todo lo que hace. Ese fin
J o propósito El lo lleva a cabo. "No sólo lo he dicho,
sino que lo sacaré a luz; he -trazado el plan y lo voy
a hacer." (Isa. 46: 11). La nueva creación, siendo la
obra maestra de Dios, evidencia que su propósito en for-
marla es maravilloso. La Cabeza de esa nueva creación
es su amado y fiel Hijo, el cual posee inmortalidad y
está revestido de poder y autoridad en los cielos y en la
tierra. Los miembros del cuerpo son parte de El, y
cuando hayan sido completados compondrán un grupo
de 144,000, todos llevando el nombre y la naturaleza de
Jehová.-Apoc. 7: 4; 14: l.
El hecho de que Jehová ha empleado tanto tiempo y
poder en seleccionar y desarrollar a esa nueva creación
es una prueba de que tiene para ella algunas importan-
tes funciones que desempeñar. No es razonable suponer
que Dios haya empleado diez y nueve siglos en escoger
y desarrollar a la nueva creación sólo con el fin de llevar
a unos cuantos al cielo a que alli, eternamente, canten
sus alabanzas. Sin duda que la nueva creación se delei-
tará en cantar por siempre las alabanzas de Jehová, pero
también es evidente que Dios tiene una tarea importante
para los miembros ele ella, tanto mientras se encuentran
en la tierra en curso de desarrollo como cuando lleguen
a su cternp hogar de gloria.
En la mayor parte ele la era cristiana, y a causa de
erróneas enseñanzas, la gente ha estado creyendo que
Dios estaba haciendo esfuerzos desesperados por llevar
unos cuantos al cielo, y que ha estado en agonía para que
éstos puedan escapar el tormento eterno y llegar al
312
P'rop6sito de la Nueva Creaci6n 313

cielo. Aun en los dias presentes, a pesar de que algunos


cristianos se han apercibido de lo falso de la teoría ·del
tormento etemo y de que su autor es el Diablo, muchos
de los consagrados han mirado la llamada celestial desde
un punto de vista en gran manera egoista. Han estado
pensando en escapar de las miserias y angustias de la
tierra y llegar al seguro puerto del cielo para allí rego-
jarse etemamente, sin pensar en llevar a cabo, mientras
están en la tierra, la tarea que Dios ha dado a los que
ha ungido con su espiritu.
Solamente cuando obtenemos un punto de vista más
claro del plan divino apreciamos el hecho de que los
miembros de la nueva creación ocupan una bendita y
gloriosa relación con Dios y que se les concede el privi-
legio de servir en su nombre como embajadores. En
realidad, los miembros de la nueva creación mientras se
encuentran en la tierra tienen una gran cantidad de
trabajo que llevar a cabo, y tendrán mucho más cuando
lleguen a la corte celestial. Solamente los que le. sirven
gozosamente mientras se encuentran en la tierra tendrán
la oportunidad de servii-le en el reino celestial. A los
que son fieles y están enteramente dedicados al Señor
es a los que se dan las grandes y preciosas promesas por
medio de las cuales serán hechos participes de la natura-
leza divina y lograrán una entrada abundante en el
reino celestial.-2 Ped. 1: 4-11.

. LA CABEZA
La nueva creación fue prefigurada por :M:elquisedec
el sacerdote. Concerniente a la Cabeza ele la nueva
creación encontramos escrito: "Jurado ha Jehová, y no
se arrepentirá: Tú eres sacerdote para siempre, con-
forme al orden ele Melquiseclec." (Sal. 110: 4; H eb.
7: 17). :M:elquisedec no fue un sacerdote para los hom-
bres, sino un sacerdote para el Altisimo. ( Gén. 14: 18).
E se sacerdote prefiguró al gran Agente Ejecutivo del
Altísimo. Su nombre significa H,ey ele Justicia y Rey ele
314 .La Creación
Paz. Concerniente a El está escrito: "Sin padre, sin
madre, sin genealogía, no t eniendo ni principio de días,
ni fin de vida, mas hecho semejante al Hijo de Dios,
permanece sacerdote para siempre." (Heb. '/: 3) . Estas
palabras no dejan de ser extrai'ías, pero al examinarlas
notamos su maravillosa belleza.
Los que llenaban el oficio del sacerdocio aarónico lle-
gaban a él por la ley de sucesión. Ese sacerdocio, tam-
bién, tuvo fin. Pero el sacerdocio de Melquisedec es
.'in principio ni fin. N o hay registro ninguno del co-
mienzo del Logos. Se indica que es el principio de la
creación de Dios pero no se dice el tiempo ele su crea-
ción. (Prov. 8: 22-30) . Y ahora, estando revestido de
inmortalidad, su vüla nunca t endrá fin . Jehová ha
dado su palabra y su juramento ele que ese sacerdocio
permanecerá para siempre. Ese sacel'docio está com-
puesto de la Cabeza, el Agente Ejecutivo ele J ehová, y
de los miembros de la nueva creación. ( 1 Ped. 2: 9).
Con el fin de que los miembros. ele la nueva creación,
mientras están en la tiena supieran el propósito de
ese sacerdocio, Dios hizo que se escribiera: "Por lo cual,
hermanos santos, participantes de una vocación celestial,
considerad al Apóstol y Sumo Sacerdote de nuestra
profesión, Jesús."-Heb. 3: l.
El amado Hijó de Dios es el Ungido. Al tiempo de
su consagración y bautismo en el Jordán El fue ungido
del espiritu de Dios. (Mat. 3: 16, 17; Hech. 10 :38).
Eso marcó el tiempo del comienzo de la nueva creación.
La unción implica que el que la recibe ha sido designado
para ocupar cierto puesto de confianza, autoridad y po-
der. Jesu-Cristo fue nombrado como el Primer Ministro
de J ehová Dios, para llevar a cabo la obra que Dios
tenía preparada para El. El dijo: "Yo he venido en el
nombre de. mi Padre." ( J n. 5: 43 ). "Porque descendí
del cielo no para hacer mi propia voluntad, sino la vo-
luntad de Aquel que me envió." ( Jn. 6: 3D). "De mi
mismo no puedo hacer nada; según oigo, juzgo; y mi
Prop6sito de la Nueva Creación 315

JlllClO es justo; porque no procuro hacer mi ·p ropia


voluntad, sino la ·voluntad del que me envió." (Jn.
5 : 30) . 'ro dos estos textos muestran que cuando Jesús
estuvo en la tierra fue el Embajador, Siervo, Ministro
y Sacerdote de Jehová.
La tarea de Cristo mientras estuvo en la tierra se
especificó en la comisión que el Padre le dio : "El
espíritu de Jehová el Señor está sobre mi, por cuanto
J ehová me ha ungido para anunciar buenas nuevas a
los mansos; me ha enviarlo para vendar a los quebxanta-
dos de corazón, para proclamar a los cautivos libertad, y
a los aprisionados abertma de la cárcel; para proclamar
el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de la
venganza de nuestro Dios ; para consolar a todos los
que lloran." (Isa. 61 : 1, 2). Cuando Jesús comenzó su
m inisterio El dio lectura a su comisión delante de una
con gregación de judíos y luego añadió: "Hoy es cum-
pli<la esta escritma en vuestros oídos." (Luc. 4: : 1G-21).
m declaró que la Palabra de Dios es la verdad. ( J n .
17: 17). El predicó las buenas nuevas a la gente, así
como fue comisionado. El elijo: "Es menester que
yo haga las obras ele Aquel que me envió." ( J n . 9 : 4) .
Bsa obra incluyó la ele · dar su vida en sacrificio para
obtener la vida para la raza humana.- Mat. 20 : 28; Jn.
10: 10.
Mientras que J esús estuvo en la tierra sirvió bajo la
dirección y supervición ele J ehová. El dedicó su tiempo
a la tarea ele dar testimonio de la verdad. El engrande-
ció el nombre de Dios y habló a la gente ele la amante
provisión que Dios ha hecho para .su salvación. E l· dio
instrucciones claras a sus discípulos y los envió a llevar
a cabo la misma tarea en su nombre y en el nombre ele
su Padre. Cuando estaba para terminar su t ar ea dijo:
"Porque la:s palabras que me diste, se las he dado a ellos;
y ellos las han recibido, y han conocido verdaderamente
que de para contigo sali yo, y h an creído que Tú me
enviaste." ( J n. 17 : '8 ). · Después de su resurrección y
316 L,a Creación
antef\ de subir al cielo El dijo a sus seguidores : ~<como
el Padre me erivió a mí, así yo os envío a vosotros.''-
Jn. 20:21.
LOS MIEMBROS
En la tiena hay millones de los tal llamados cristia-
nos. Esos tales no son parte de la nueva creación y
ninguna de las preciosas promesas son a ellos aplicables.
'!'o dos los verdaderos cristianos son 'miembros de la nueva
creación y continuán siéndolo mientras que mm·en en
Cristo. Cuando uno llega a ser un verdadero cristiano
le es impuesta la obligación de llevar a cabo ciertas
cosas. Por medio de Jesús, la Cab.eza, recibe la unción
que constituye su ordenación de predicar. N o hay nin-
guna otra ordenación que t enga valor alguno. La orde-
nación de los ministros_que se hace por grupos de hom-
bres en la tierra no tiene ninguna autorización de parte
de Dios.
La comisión que J ehová dio a Cristo aplica de igual
manera a los miembros de su cuerpo. Entre otras cosas
la comisión dice: "Jchová me ha ungido para anunciar
buenas nuevas a los mansos." Buenas nuevas fueron
tambi6n el mensaj e dado por los ángeles cuando el naci-
miento de J esús. (Luc. 2: 9-11) . La declaración se hizo
entonces de que al debido tiempo de Dios estas buenas
nuevas serían traídas a todos, y que esas buenas nuevas
consistían en el hecho de que Jehová había provisto un
Salvador para la humanidad y un camino para que todos
pudieran volver a Dios y alcanzar la vida.
Desde entonces hasta ahora ese ha si~o el evangelio.
Toda doctrina contraria a esto es por lo tanto falsa y en
desdoro del nombre de Dios. El propósito de Satanás
siempre ha sido el deshonrar el nombre de Jehová, y esto
lo ha conseguido por medio del clero, el cual ha predi-
cado la deshonrosa doctrina del tormento eterno. La
comisión que se da a la nueva creación no autoriza a
ninguno de sus mi embros a que 111ege o urja a nadie a
que se convierta al cristianismo. La comisión es la ele
Propósito de la Nueva Creación 317

predicar las buenas nuevas a los mansos. Los mansos


son los.que sinceramente desean conocer la verdad y los
que se sienten dispuestos a ser enseñados. En las Escri-
turas frecuntemente se encuentra la expresión: "El que
tenga oídos para oir, oiga."
Pablo, como apóstol de Jesús y como testigo inspirado
del Señor, dijo a los discípulos: "Por lo cual, hermanos
santos, participantes de una vocación celestial, conside-
rad al Apóstol y Sumo Sacerdote de nuestra profesión,
Jesús." (Heb. 3: 1). El sacerdocio que aquJ. se men-
ciona es el orden de Melquisedec del que toda la nueva
creación son miembros. Los miembros de la nueva crea-
ción, mientras están en la tierra, tienen por lo tanto que
prestar atención a las cosa:s que Jesús. la Cabeza de ese
sacerdocio, hizo cuando estuvo en la tierra, y deben de
hacer lo mismo. Estos son llamados a seguir en las
huellas de Jesús, lo cual implica que deben hacer lo que
El hizo.-1 Ped. 2: 21.
Las siguientes palabras son dirigidas a los miembros
de la nueva creación: "Vosotros, al contrario, sois una
raza escogida, un sacerdocio real, nación santa, pueblo
de posesión exclusiva; a fin de-que manifestéis las exce-
lencias de Aquel que os ha llamado de las tinieblas a su
luz maravillosa." ( 1 Ped. 2 : 9). Como embajadores de
Jehová tienen que representarlo fielmente y manifestar
sus excelencias o proclamar sus alabanzas desempeñando
la comisión que se les ha encomendado. Esa comisión
en ningún sentido autoriza a los miembros de la nueva
creación a proclamar las alabanzas de los hombres que
han sido o son sus maestros o guias. El hacer esto trae
desdoro a J ehová y aparta de Ellas mentes de la gente.
'l'ampoco les toca a ellos buscar los aplausos, ni aun si-
quiera la aprobación de los hombres. El verdadero
cristiano representa a Jehová y no busca su propia glo-
ria sino la gloria de Jehová. Sobre este particular dice
el inspirado t estigo: "Comenzamos acaso otra vez a
encomendarnos a nosotros mismos? ¿O necesitamos por
318 La C'reación

ventura, como algunos, epístolas de recom endaci6u rlc


vne:;tra parte? . . . N o que seamos de nosotros mismos
suficientes para reputar cosa alguna como procedente
de nosotros mismos; sino que nuestra suficiencia es de
Dios."- 2 Cor. 3 : 1, G.
También Satanás a engañado a muchos que se creen
ser cristianos induciéndolos a creer que Dios está esfor-
zándose por llevarlos al cielo y que para que pueda
lograr esto les. es precisó desarrollar lo que ellos llaman
"carácter." En verdad que esto ha sido una gmn decep-
ción, tcnd.iendo a apartar la mente de Dios y desconocer
la necesidad de dependencia en EL Ha hecho creer a
muchos c¡ue tienen que desarrollar carácter con una
apariencia santimonia, hablando dulcemente y llev:mdo
a cabo cierta rutina de formalismos con asumida p.iedad.
Los tales llegan a creer que les toca practicar ciertas
ceremonias los domingos pero · que durante la semana
pueden ha cer cuanto se les ocurre.
]!}n ninguna parte de la Palabra <le Dios se nos dice
que debemos ponernos vestiduras largas y asumir una
cara piadosa ni acento afectado para atraer la atención
ele los hombres con pretendida santi dad. Esta"'> cosas
son fruto del eclcsiasticismo, derivadas de una errónea
concepción del deber cristiano. Sin duda alguna que~ al
cristiano le toca ser bueno, bondadoso, considerado, puro
en palabra, pensamiento y conducta, misericordioso, des-
provisto de egoísmo, pero no en apariencia, sin estar
meditando en sus piadosas cualidades y por consiguiente
apartando la mente de Dios y ele la necesidad del mérito
del sacrificio de Cristo.
Al cristiano le toca mantenerse sin mancha del mundo.
(San. 1: 27 ). Es el representante de Dios y de su
organización. Le toca apartarse y separarse de la
organización del Diablo, la cual es el mundo. (2 Cor.
fi: 17, 18). Nadie puede ser un fiel representante de
Dios y al mismo tiempo simpatizar y cooperar con el
mundo. (San. 4: 4 ).. 'l'iene que fielmente representar
Propósito de la N1wva Creación 319

a Dios y 'declarar el plan de Dios, su Rey, y el reino, para


llenar debidamente la tarea que le ha sido encomendada.
Dios preordenó y predestinó a la nueva creación. (Efe.
1 :5). Los miembros de ella tienen que ser como su
Cabeza. (Rom. 8: 29). La palabra imagen que aqui se
usa quiere decir parecido. Sin embargo, no significa
un parecido físico, sino en cuanto a la devoción que Bl'
manifestó al Padre. J esús dijo : "Yo para esto na.ci
y a este intento vine al mun,do, para dar t estimonio ele
la verdad." (Jn. 18 : 37 ). J esús estuvo por completo
y absolutamente dedicado a su Padre y a su · causa, y
todos los miembros ele la nueva creación, ele la misma
manera, deben estar por entero dedicados a Dios y a
su causa. Todo cristiano sabe que no puede proceder,
hablm· ni pensar de una manera perfecta, pero sabe que
puede por completo dedicarse al Señor y negarse a so-
mcteTse en lo más minimo a Satanás. En esto con iste
su semejanza a Jesús, y esa es la semejanza que de él se
requiere.
TESTIGOS DE DIOS
La tarea de la nueva creación mientras se encuentra
en la tierra es la de cada uno de sus miembros ser un
"Testigo de J ehová." Esa es· la idea expresada en la
comisión que se le da. La comisión indica que la nueva ""
creación debe predicar las buenas nuevas como testigos
d.e Dios ; debe vendar los corazones quebrantados, anun-
ciándoles la misericordiosa provisión que Dios ha hecho
para su salvación y bendición; debe proclamar libertad
a los cautivos y prisioneros diciendo a los que se encuen-
tran en esa contlición que Dios ha provisto los medios
para su libertad ; debe proclamar el año de la buena
voluntad de Jehová diciendo a la gente qué tiempo ha
sido designado para la selección de la iglesia; debe
declarar el dia de la venganza de Dios diciendo a la
gente que Dios vindicará su nombre al debiuo tiempo;
debe consolar a los que lloran predicándoles el mensaje
320 La Creación

de consuelo que da el plan de Dios, el plan del que es


el Padre de las misericordias y el Dios de todo consuelo.
(2 Cor. 1: 3-5). Tal es la tarea de la nueva creación
mientras se encuentra en la tierra.
¿Pero pará qué necesita Dios t estigos? A través de
las edades Satanás ha engañado a la gente y ha mancha-
do el nombre de Dios y su reputación. Dios no ha
impedido esto porque era su propósito el permitir que la
raza tuviera una plena experiencia con los efectos del
mal. El está llevando a cabo su propio plan conforme
a sus sabios propósitos. N o es su plan el obligar a
nadie a que le ame, lJero si lo es, evidentemente, el que
sea conocida la verdad en cuanto a su· buen nombre y que
todos puedan ver su promesa de bendición. Por esta
razón es que en todo tiempo Dios ha tenido algunos
t estigos en la tierra. En la era cristiana El ha hecho a
la nueva creación sus testigos.
En este siglo veinte la humanidad como regla general
no conoce a Dios. El clero, aun cuando pretende repre-
sentar a Dios, en verdad y de hecho representan al
Diablo y apartan a la gente del Dios verdadero. Mas ya
ha colocado Di.os a su Rey sobre su trono y pronto
echará por tierra la organización satánica, dando fin
a su inicuo gobierno. Pero antes de hacerse esto Dios
ha declarado su propósito de que se dé a la gente un tes-
timonio especial. Con es.t e fin El dice a los miembros
ele la nueva creación: "Sois mis testigos de que yo soy
Dios." (Isa. 43: 10, 12). La nueva creación es la orga-
nización de Dios y los miembros de ella que están en la
tierra tienen la comisión de representar a Jehová. Para
serie fieles tienen que obedecer sus órdenes, y 1ma de
sus órdenes o mandamientos especialmente aplicable al
tiempo presente es el de que sean sus testigos. N o hay
ningún otro motivo para que aun se encuentren en la
tierra algunos miembros de la nueva creación.
Como medio para dar el t estimonio se publican li-
bros, tratados y magazines conteniendo el plan divino,

/
Prop6sito dé la Nueva Oreaci61~ 321'

y las buenas nuevas también se dan por medio del radio.


Que esta es la tarea de la nueva creación ahora en la
tierra se prueba por las palabras del Señor : "Y este
evangelio del reino será predicado en todo el mundo
como testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá
el fin." (Mat. 24: 14). Solamente los miembros de la
nueva creación tienen la comisión de dar el testimonio.
'fodo el que prentende ser cristiano y se niega a partici-
par o deja de participar en llevar a cabo este muda-
miento de testificar del Reino de Dios y del Rey, no
puede esperar tomar parte en la futura tarea ele la nueva
creación.
La nueva creación es el Siervo del Altísimo, y n su
Siervo, en quien Dios se deleita, El clice: "He nquí. u
mi Siervo, a quien yo sustento, mi Escogido, en qtl i n so
complace mi alma ; he puesto mi esphitu sobre Hl y
sacará justicia a las naciones." (Isa. 42 : 1). Las pala-
bras siervo, ministro o embajador implican la misma
cosa. El término "Siervo" se usa aquí en singular por-
que la nueva creación es un solo cuerpo. Todos los
miembros son contados como parte ele Cristo Jesús, la
Cabeza. (Jn. 17: 16-21; 1 Cor.10: 16, 17; 12:13, 14,
18-27 ; Efe. 1 : 22, 23; Col. 3 : 15). A su Siervo y Re-
presentante, incluso los miembros que aun se encuentran
en la tierra, Jehová dice : "Yo, Jehová, te he llamado
en justicia, y tendré firmemente asida tu mano, y te
guardaré, y te pondré por pacto del pueblo, y por luz de
las naciones; para que abras los ojos ciegos, y saques del
calabozo a los presos, y de la cárcel a los sentados en
tinieblas."-Isa. 42 : 6, 7.
Por muchos siglos la gente ha sido cegada por las
obras del enemigo, Satanás. Mas ahora los ojos de sus
entendimientos están siendo abiertos, y a Jehová le ha
placido que esto se haga por ~edio del testimonio de su
"Siervo." Mucha gente que ama al Señor, hasta cierto
grado, se encuentran ahora prisioneros de los sistemas
denominacionales y están alli sentados en tinieblas. Dios
322 La 01'eacwn
tiene el prop6sito de que el testimonio se dé a éstos antes
de que sea por completo derrumbado el imperio de Sata-
nás. Este testimonio tenia que darse comenzando desde
1918 hasta el mismo "fin," y a la nueva creación es a la
que le toca darlo. Con este fin Dios ha definido la pre-
sente tarea de la nueva creación. Sobre este particular
leemos : "¡Pasad, pasad por las puertas ! ¡preparad el
camino para el pueblo ! ¡alzad la calzada! ¡recoged las
piedras! ¡levantad bandera para los pueblos !"-Isa.
62: 10.
hl clero ha engaiíado a la gente haciéndola creer que
todos los miembros de las iglesias van al cielo, incluso
los niños. Un egofsta deseo de seguridad, despreocupa-
ción y consuelo ha inducido a muchos, engañados por los
predicadores, a hacerse miembros de alguna denomina-
ción religiosa. Con esto a si mismos se engañan cre-
yendo que son cristianos. :M:as no son cristianos. A
ninguno de ellos se les concederá un lugar en el reino
celestial excepción de los que han sido fieles en la eje-
cución ele la comisión dada por Dios. (Isa. 61: 1, 2).
Sc1·ia imposible para los niños que tan siquiera supier:m
de esa comisión y por lo tanto les es imposible ser fieles
a ella. Es también imposible para los que son de la
clase celestial el amar al mundo al mismo tiempo, siendo,
como es, la organización del Diablo. Por eso se escribió:
"No améis al mundo, ni las cosas que están en el mun-
do. Si alguno ama al mundo el amor del Padre no está
en él." ( 1 Jn. 2: 15). "¿No sabéis acaso que la amistad
con el mundo es enemistad contra Dios ?"-Sant. 4: 4.
Nadie puede ser leal y fiel a Dios a menos que no
obedezca sus mandamientos. El ser leal quiere decir
el hacer lo que la Palabra de Dios ordena; y el ser fiel
quiere decir el llevar a cabo lo que se ordena y hacerlo
con gozo. El amor es lo que induce esa lealtad y fideli-
dad. Bl amor por Dios es la absoluta devoción a El no
en espera de una recompensa, sino por el gozo y delicia
de hac\:)r su santa voluntad. Por eso está escrito :
P1·opósito de la Nue-va C·reaciún 323

"Amad a Jehová todos vosotros sus piadosos sier vos. A


los. fieles guarda J ehová." (Sal. 31 : 23 ). A psos fieles
Dios ha dado sus grandes y p•reciosas promesas, entre las
cuales se encuentra la de "sé fiel hasta la muerte y yo te
uaré la corona de la vida." ( Apoc. 2 : 10) . Los miem-
bros de la nueva creación gozarán de la vida eternamente
en el plano de existencia mú.s elevado que es la inmor-
t ahdad.
J ehová ha declarado su propósito de dar la 11 atm aleza
divina a la nueva creación. Cristo Jesús, la Cabeza de
la. nueva creación, fue resucitado a ln. natural za divina
y fue exaltado al más elevado lugar de pocl l' y glor.ia
en el cielo. Los miembros de su cuerpo tambi In pu rt; i i-
parán de la naturaleza divina. ( 1 P eel. 1 : 3, 1 ; 2 ] ' l.
1: 4). Concerniente a esto está escrito: "Amaclos mios,
ahora somos los hij os de Dios ; y todavía no ha siclo ma-
nifestado lo que hemos de ser; sabemos cmp r que
cuando El fuere manifestado, nosotros seremos semejan-
t es a El porque le veremos así como El es." ( 1 J n. 3 :2) .
Así como los miembros de la nueva creación han llevado
en la tierra la imagen de Cristo como sér humano, de
igual manera serán hechos a su semejanza en gloria.
La nueva criatura baja a la tumba en un cuerpo de
carne que es corruptible. En la resurrección esa nueva
criatUTa resucita con un cuerpo inconuptible, un cuerpo
glorioso. "Una es la gloria del sol, y otra la gloria de la
luna, y otra la gloria de las estrellas; porque una estrella
se diferencia de otra en gloria. . . . Se siembra en des-
honra, será resucitado en gloria; se siembra en debilidad,
será resucitado en poder. . . . Porque es necesario que
esto corruptible se revista de incorrupción, y esto mortal
se revista de inmortalidad. Y cuando esto corruptible
se haya revestido de incorrupción, y esto inortal se haya
revestido de inmortalidad, entonces será verificado el
dicho que está escrito : ¡ 'l'ra.g ada ha sido la muerte
victoriosamente !"- 1 Cor. 15 : 43, 53, 54.
El sincero deseo del verdadero seguidor de Cristo mien-
324: La Creación

tras se encuentra en la tierra ha sido el de morar eterna-


mente en la Casa de Jehová para allí contemplar la
hermosura de Dios. (Sal. 27: 4). Siendo el caso que J e-
hová ha prometido vi:da a la nueva creación, y téniendo
ellos la esperanza de alcanzarla, hizo que su profeta ex-
presara los sentimientos de la nueva creación al encon-
trase en gloria con las siguientes palabra{l: "Le has con-
cedido el deseo de su corazón y no le has negado la peti-
ción de sus labios. . .. Vida te pidió y se la diste, lar-
gura de días, para siempre jamás. Grande es su honra
por haberle Tú salvado; gloria y majestad pones sobre
El."-Sal. 21: 4:, 5.
Los miembros de la nueva creación constituirán la
clase celestial, cuyo número será bastante pequeño. (Luc.
12 : 32). Cuando esto sea entendido la gente se aperci-
birá una vez más de que el clero los ha engañado ense-
ñándoles que miles de millones irán al cielo a formar
la clase celestial del reino. Los pocos fieles que obten-
drán la vida en el más elevado plano de existencia no la
consiguen con el sólo objeto de recibir honor y gloria,
sino que Dios tiene· para ellos una tarea futura en con-
formidad con su gloriosa y honorable posición.
La nueva creación de Dios es el instrumento por me-
dio del cual El derramará las bendiciones prometidas a
la humanidad. Cuando Abraham se encontraba cuchillo
en mano, en el monte en que se le ordenó sacrificara a
su hijo, allí probó su fidelidad a Dios. Entonces J ehová
le dijo: "Serán bendecidas en tu simiente toaas las na-
ciones de la tierra; por cuanto has obedecido mi voz."
(Gén. 22 :18). Esa prometida simiente es el Cristo, la
nueva creación de Dios. (Gál. 3:8, 16, 27-29). Muchos
siglos se han empleado para escoger y desarrollar esa
"simiente," pero ahora la tarea está casi terminada; la
tarea de testificar en la tierra está t ambién a punto ele
terminarse y pronto comenzará la gloriosa tarea de ben-
decir.
Prop6sito de la Nueva Creación 325

Los que vencen al mundo por medio de su fe en la


sangre ue Cristo y a causa de su absoluta sujeción y
devoción a Dios, serán los que han de constituir los
miembros de la nueva creación y tendrán parte en la
futura tarea de bendecir a las familias de la tiena.
Concerniente a su posición de favor está escrito: "Al
que venciere, haré que sea una columna en el templo de
mi Dios, y no saldrá de allí; y escribiré sobre él el nom-
bre de mi Dios, y el nombre de la ciudad ele mi Dios, la
Nueva J erusalem, la cual está para descender del ci .l
de parte de mi Dios ; y escribiré en él mi mi mo n ml r ·
nuevo."_:_Apoc. 3: 12.
Y en lo que toca a su futuro poder y fll L sLi rn ni .
que les toca dar, leemos : "Sin embarrr , lo qu L n(•i f;
reteuecllo seguro, hasta que yo venga. Y al qu V n i r(l
y guardare mis obras hasta el fin, le d:nó aut rid ad
sobre las naciones." (Apoc. 2 : 25, 26 ). "Al que venci r ,
le concederé sentarse conmigo en mi trono, así como yo
también vencí, y me senté con mi P adre en su trono."
(A poc. 3: 21). Por mil años los miembros ele la nueva
creaéióu, en compañia de su gloriosa Cabeza, servirán en
capacidad de sacerdotes de Dios y de Cristo, para traer
a la familia humana la prometida oportunidad de alcan-
zar vida, libertad y felicidad.-Apoc. 20 : 6.
Una vez que la tarea de recobrar, enseñar y bendecir
a las familias de la tierra haya terminado, t odavía con-
tinuará la nueva creación siendo el agente ejecutivo y
Siervo de Dios para llevar a cabo sus propósitos y por
siempre será el objeto de sus favores. En una visión
que el Apóstol Pablo tuvo ele las glorias venideras que
han de ser la porción de la nueva creación, elijo: "Em-
pero Dios . . . nos levantó juntamente con El [Cristo]
y nos hizo sentar con El en las regiones celestiales en
Cristo-Jesús, para que en los siglos venideros hiciese
manifiesta la soberana riqueza de su gr::10ia en su bondad
para con nosotros en J esu-Cristo."-Efe. 2:4-7.
CAPITULO XIV

Regeneración

J
EHOV A se ha preparado para regenerar a la raza
humana. Esto lo hará al tiempo por el mismo de-
signado. Ese tiempo ha llegado. El conocimiento
ele esto es esencial para el bienestar de la gente, y el
objeto de este libro es el de ayudarla a adquirir ese
conocimiento. No contiene sabiduría humana sino la
declaración de los propósitos ele Dios como éstos se
hallan revelados en su Palabra. J ehovú ha hecho pro-
visión para que el hombre pueda establecer su fe en las
obras de su Creador. El conocimiento es indispensable,
pero el cm1oc.imiento tiene que acompañar a la fe. Sin
fe es imposible agradar a Dios ni recibir plenamente sus
beneficios.
Todo deseo legítimo del hombre se encuentra com-
prendido en el deseo de vida y de felicidad. Por su-
puesto que sin vida nada podría gozarse. Aun la corta
vida del tiempo presente es tan grata al hombre que hace
t odos los esfuerzos posibles por retenerla. Con el fin
de alargar la vida se emplean los servicios de doctores,
enfermeras, hospitales, balnerarios, veraneos y todo otro
mcllio concebible. Pero todos esos medios fallan y el
sér humano baja a la tumba. Por muchos siglos el hom-
bre ha ofrecido a sus semejantes innumerables maneras
para obtener la vida. El diablo se ha encargado de ver
que estas cosas engañosas hayan estado ante los hombres
para mantenerlos lejos ele Dios. Pero, por experiencia, el
hombre se ha dado cuenta ele que esos rhédios son en-
gañosos.
Ahora el mundo entero se encuentra en angustia y
perplejidad. El temor se ha poderado de todos; temen
326
Regeneración 327
el perder lo poquito que poseen y no se les hace muy
halagüeño el futuro . El hombre ha llegado a su punto
extremo y es la oportunidad de Dios. Sabiendo que la
senda del pecado traeria al hombre los presentes resulta-
dos, Dios arregló de t al manera el desarrollo de su plan
que al debido tiempo pudiera revelar al hombre el
camino que conduce a la vida. Poca es la gente que
hasta ahora conoce la .misericordiosa provisión ele Dios,
y esa falta de conocimiento por lo regular se debe a que
el clero, al enseñarles las falsas doctrinas de Satanás,
los ha ma•ntenido en la ignorancia de la ver dad. A
causa de esto hay hambre en la tiena, hambre 1 or la
Palabra ele Dios.- Am. 8 : 11.
Poco después ele la caída del hombre Dios om .n:t.6
a prefigurar su nueva creación. Ahom . n. nu va r a-
ción está casi completada. ¿Con qué fin pr pnml a
Dios una nueva creación si, como lo enseña el clero, 1
destino de cada cual se fija al tiempo de la muerte ?
Si Dios había determinado que unos pocos fueran al
ciclo y todo el resto tuviera que pasar la etemidad en
un tormento, entonces, ¿para qué gastó tanto t iempo y
energía para desarrollar esta nueva creación ? La gente
está comenzando a ver que el clero ha estado equivocado
y que sus enseñanzas son falsas, y ahora ya comienzan
a dirigir . su mente hacia Dios y hacia su Palabra de
V erclad. Los sistemas que han sido organizados por
el clero no son otra cosa que prisiones en las que se
encuentran los temerosos y crédulos; éstos están allí
dominados por los ambiciosos y egoístas que componen
"los principales" ele la organización. (Jer. 25 : 34-3G ).
Mas ha llegado el tiempo en que la gente tiene que ser
puesta en libertad. Tienen que recibir el conocimiento
de los caminos ele Dios y la manera en que El les dará
vida y felicidad. Dios ha provisto ahora los medios para
que la gente adquiera este conocimiento.
Por siglos, hasta ahora, la creación ha gemido y a una
se ha encontrado con dolores de parto. Ha existido un
328 La Creación
ardiente deseo por obtener aquello que ha de traer vida, ·
paz y felicidad. ¿Qué es lo que por tan largo tiempo
ha estado esperando la caída humanidad? La r~spuesta
de la Palabra de Dios es: "Porque la ardiente expecta-
ción de la creación aguarda la manifestación de los
hijos de Dios." (Hom. 8: 19). El Hijo de Dios, Cristo
Jesús, ha llegado y ha comenzado a ejercer su poder
en cuanto a las cosas pertenecientes al hombre. Este
amado Hijo de Dios se denomina en las Escrituras como
el Vástago. De El se escribió. proféticamente lo que
sigue: "Y de El hablarás diciendo: "Así dice Jehová
de los Ejércitos : ¡Mirad al hombre cuyo nombre es el
Vástago! y El de su propio tocón brotará; y edificará
el 'l'emplo ele Jehová. Si, edificará ef Templo de Jehová,
y llevará sobre si la gloria; y se sentará y reinará sobre
su trono, siendo sacerdote sobre su trono; y el consejo de
la paz estará entre los dos."-Zac. 6: 12, 13.
Esta profecía se está cumpliendo ahora. Este amado
H ijo es el Vástago porque es la directa creación de Dios.
El lleva la gloria de su Padre porque es el próximo a
Jehová. El es el Hey a quien Dios ha puesto sobre su
trono; y El es el reinante Sacerdote del Altísimo porque
es el Agente Ejecutivo ' de Jehová. Este poderoso Hijo
de Dios, el Vástago, viene ahora a juzgar.a vivos y a
muertos. ( 2 'l'im. 4: 1). Este juicio resultará en la
regeneración de todos los obedientes de entre la raza
humana. En esa bienaventurada tarea del Hijo de
Dios, los miembros de su cuerpo, la nueva creación,
estarán asociados con El, así como está escrito: "Y
J esús les elijo: En verdad os digo, que vosotros que me
habéis seguido, cuando en la regeneración el H ijo
del hombre se sentarú sobre su trono de su gloria, voso-
tros también os sentaréis sobre doce tronos, juzgando a
las doce tribus ele I srael."-Mat. 19: 28.
En el texto que se acaba de mencionar se muestra
que su reino será un tiempo de "regeneración" y que los
fieles miembros de su cuerpo se sentarán con El en su
Regeneración 329

trono y participarán con El en esa obra. El regenerar


implica el generar la raza nuevamente. Regenerar es
el acto de hacer de nuevo o de renovar. Dios ha señalado
el ella del reino de Cristo con· ese fin. (Hech. 17: 31).
P.or más de seis mil años el hombre ha estado de-
generado. Durante su reino de mil años el gran
Sacerdote y Rey traerá a todos los obedientes y bien
dispuestos de la raza a la condición de perfección de
que gozó Adán, cuando estaba en el Edén. · ¿ Qué mé-
todos empleará Dios para llevar a cabo la obra de
regeneración de la raza humana?

EL NUEVO PACTO
Jehová ha declarado que los métodos que s rftn trl -
pleados. por El en la regeneración de la gente es por por
la operación del nuevo pacto. Esto se prefiguró en l
pacto que se hizo con Moisés en provecho de la nación
de Israel. Ese primer pacto se conoció con el nombre
de el pacto de la ley 0 el pacto del Sinai. Uno de los
fines de ese pacto fue el de enseñar a la gente lo con-
cerniente a la venida del Cristo, .el Mesías, y el de
prefigurar el nuevo pacto, el cual Dios hizo con Cristo
en provecho del mundo. Es por medio de los términos
de este nuevo pacto que Dios regenerará a los obedientes
de la hum anidad.
Un pacto es un solemne acuerdo o arreglo entre dos
o más partes, por medio del cual las partes contratantes
se obligan a hacer o a no hacer las cosas especificadas
en el acuerdo. Cuando por alguna razón una de las
partes del pacto es una persona incompetente para entrar
directamente en un acuerdo, esa persona incompetente
puede ser representada por alguna otra que sea compe-
t ente y que sirva como medi ador. El mediador es uno
que interviene y actúa, en lo que toca al acuerdo, en
cambio de la persona incompetente, como su mensajero.
Ley quiere decir la regla de acción, ordenando lo que
es apropiado y condenan do lo que e·s malo. Cuando ha
La Creación

sido expresada, es el estatuto de reglas fundaménmles


con las cuales todas las otras reglas de gobierno tienen
que estar de acuerdo.
1 Estatutos son las leyes, juicios o decretos promulgados
en armonia con la ley fundamental. Son las leyes o
regL<ts de acción hechas en armonía y conforimdacl con la
ley fundamental o autoridad constitucional. La consti-
tución de los Estados U nidos es la ley fundamental del
país y los actos del Congreso, pasados y debidamente
aprobados de acuerdo con la Constitución, son los esta-
tutos del país.
La ley fundamental sobre la cual se fundó el pacto
ratificado en. el Sinai, fue fozmada por los diez manda-
mientos. (Ex. 20: 1-17). Los juicios o decretos de
J cho"á, hechos con el fin de gobernar a su pueblo, for-
maron los estatutos de Dios con respecto a ellos. La
voluntad de Dios es su ley, y esa ley se expresa en los
diez mandamientos. Los estatutos son sus órdenes, jui-
cios y decretos promulgados para el bienestar de la gente
con el fin de controlarlos y gobernarlos. Todo asunto
que el pueblo de Israel tuviera que determinar con
respecto a comida, bebida, conducta y porte en sus rela-
ciones con sus semejantes, sería determinado por los
estatutos que Dios tiio a ese pueblo.
En pocas palabras, el pacto fue el acuerdo hecho ; la
ley, los diez mandamientos o reglas fundamentales; los
estatutos, las reglas prescritas con el fin de en detalle
dirigir a la gente. El pacto de la ley prefiguró el nuevo
pacto de la ley, el cual se basará sobre la ley fundamental
de Dios y claramente indicará lo que se exigirá de la
gente para que puedan alcanzar la bendición prometida.

VIDA
El pacto de la ley fue el acuerdo entre Dios e Israel,
teniendo a Moisés como mediador. A causa de su fe
Moisés fue contado como justo y por lo tanto compe-
tente pnra representar a la nación de Israel en el pacto.
Regeneración 331
(E:x:. 19: 5-s·; Heb. 11: 23-28). La ley de ese pacto
hacía la provisión de que si Israel guardaba los términos
de él, Dios los bendeciría, junto con sus familias, sus
rebaños, sus campos, y todos sus bienes, y que serían lla-
mados del nombre de Jehová. Hacía también la pro-
visi{m de qu,e si se. negaban a hacer su parte conforme
a la ley serian' malditos y les sobrevendrían muchas
calamidades. (Deuteronomio, capítulos 27 y 28). La
provisión que Dios hizo en ese pacto fue la de qu e
si la gente lo guardaba t endrían vida. (Roro. 10: 5) .
"Por tanto guardaráis mis estatutos y mis preceptos, en
los cuales vivirá el hombre que los hiciere. Yo J chová. '
-Lev.18 : 5.
El pacto de la ley fue un fracaso debido n que si ncl
los israelitas imperfectos no podían guanlal'lo y po1·¡u
Moisés, su mediador, era un hombre impcriccto y n
podía suplir lo que a ellos faltaba. La gran 1 e ión
que enseña es que el hombre por medio de sus propios
esfuerzos no puede obtener vida y que ningún hombre
imperfecto puede ayudarle a alcanzar la vida; también,
que la vida es la dádiva de Dios por medio de J esu-
Cristo, su amado Hijo, el Mediador del nuevo pacto.
(Rom. 6: 23; 8: 2, 3 ; H eb. 8: 6, 7) . Además, prefiguró
que en un tiempo futuro Dios haría un nuevo pacto con
Cristo como Mediador, y que ese pacto seria hecho en
beneficio del pueblo de Israel y ele todas las familias de
la t ierra, como está escrito :
"Porque tachand o ele imperfección, les dice: He aquí
<].Ue vienen días, dice el Señor, en que haré con la casa
de Israel y con la casa ele J udá un pacto nuevo; no según
el pacto que hice con sus padres, en el día que los tomé
de la mano, para sacar~os de la tierra de Egipto; pues
ellos no permanecieron en mi pacto, y yo los traté con
desprecio, dice el Señor. Porque éste es el pacto que
haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice
el Señor: Pondré mis leyes en su mente, y en su corazón
las escribiré; y yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo;
332 La Creación

y no enseñarán más cada cual a su conciudadano, y cada


cual a su hermano, diciendo : ¡ Conoce al Señor! porque
todos ellos me conocerán, desde el menor de ellos hasta el
mayor de ellos ; porque yo tendré misericor4ia de sus
injusticias, y de sus pecados no , me acordaré más." '
Es bueno apercibirse de lo que es especialmente enfa-
tizado en lo que toca a ~se nuevo pacto, es decir, que la
gente no sólo tratará de obedecer sino que además Dios
pondrá su ley en la mente de ellos y les enseñará el
camino que deben seguir, grabándolo en su corazón, lo
cual quiere decir que serán impulsados a servirle por
amor y por el deseo de complacerle. Entonces todos
conocerán a Dios, desde el menór de ellos hasta el mayor
de ellos. Todo esto enfatiza las palabras ele J esús : "Y
esta es la vida eterna, que te conozcan a Ti, sólo Dios
verdadero, y a Jesu-Cristo a quien 'l'ú enviaste."
El sacrificio de rescate ele Cristo Jesús, aplicado
como ofrenda por el pecado en beneficio ele la gente, al
aceptarlo por la fe, los librará ele su condición. (Rom.
5 : 18, 19). Y puesto que la clácli va ele ;vida se ofrece
a todos, todos tienen que ser traídos al conocimiento de
la verdad antes ele que puedan aceptar la dádiva: (1 Tim.
2: 3-6). Cristo, el Sér perfecto, es el Mediador del
nuevo pacto que Dios hará en provecho de la gente pai-a
que puedan ser regeneraclos.-Heb. 8: 6; 9 : 15 ;· 12: 24.
Ese nuevo pacto especificará las reglas o estatutos
por medio ele las cuales la gente será gobernada y con-
forme a los cuales se comportarán. Esas reglas serán las
palabras de Cristo, el ·gran Oficial Ejecutivo de Jehová.
'rodas los que guarden su palabra con alegría de corazón
vivirán y no morirán, porque está escrito: "Si alguno
guardare mi palabra, no verá jamás la muerte." (Jn.
8: 51 ). uy todo aquel que vive y cree en mí, no morirá
j amás." (Jn. 11: 26). Entonces, cuando los que .hayan
hecho mal dej en su iniquidad y hagan lo que es recto y
justo, vivirán y no morirán.-Eze. 18: 27, 28.
Cristo es el gran Shiloh a quien tributarán obediencia
Regetieracion 333
las nadonés. (Gén. 49: 10). El fue el prefigurado por
Moisés. (De u t. 18 : 15, 18). El que le desobedezca
morirá, pero el que obedezca será restaurado a la 'vida.
"Para qu.e El envíe a aquel Mesías, que antes ha sido
designado para vosotros, es decir, Jesús, a quien es
necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la
restauración de todas las cosas, de la cual habló Dios
por boca de sus santos profetas, que ha habido desde la
antigüedad. • . . Y será que toda alma que no obede-
ciere a aquel Profeta será exterminada de entre el
pueblo."-Hech. 3: 20-23.
Cristo, el Mecliador del nuevo tacto, es "la simiente"
de Abr~tham por medio de lá cua han de venir las ben-
dicione:; a todas las familias de la tierra. ( Gén. 22 : 18;
Gá.l. 3: 8, 16, 27-29). Durante el tiempo en que Cristo
esté regenerando a la raza humana, Satanás no ·crá
permitido engañar a las naciones en ningún grado o
manera. (Apoc. 20: 1-3). Entonces la gente, habienclo
sido traída a un exacto conocimiento de la verdad, la
entenderán y todos los que sean obedientes a los tér-
minos del nuevo pacto vivirán.
El reino de Cristo resultará en la destrucción del grau
enemigo, la muerte: "Porque es menester que El reine,
hasta que ponga a sus enemigos debajo de sus pies. El
postrer enemigo, la muerte, ha de ser destruido." (1 Cor.
15: 25, 26). Cuando los obedientes de la raza humana
hayan sido regenerados y restaurados, la muerte no será
más, ni habrá más gemido, ni clamor, ni dolor. (Apoc.
21: 1-5). La tierra estará entonces llena de una crea-
ción perfecta, gozando de vida, libertad y felicidad, la
cual se deleitará en alabar al gran Creador.
Ahora la mayor parte de la superficie de la tierra está
inadecuada para · ser habitada por el hombre. Hay
muchos lugares en la tierra que están desiertos. Pero
la obra creativa de Dios, en lo que toca a la tierra, no se
ha completado todavía. Durante el periodo de la rege-
neración del hombre el Señor gradualmente traerá la
334 La Creacipn,
tierra a un alto estado: de cultivo. Esto se hará dando
conocimiento a . los hombres , ele lo que se debe hacer.
Será en ese período de regenj3ra.ción cuando los ojos
de los ciegos serán abiertos y C1!lando los oídos ele los
sordos serán destapados; entonces el cojo saltará como
ciervo, y cantará la lengua del muelo. Porque revientan
aguas en el desierto, y arroyos en el yermo. Y el espe-
jismo se convertirá en laguna verdad.era, y la tierra
sedienta en manaderos de aguas; en la habitación de
chacales, donde éstos duermen, habrá criadero de cañas
y de juncos.-Isa. 35 : 5-7.
La tierra desierta vendrá entonces a ser un · feliz y
apropiado lugar para ser habitada por la raza humana :
"Y la tierra que había estado desolada, • será labrada;
en vez ele lo cual había sido una desolación a los ojos
de todo aquel que pasaba. ' Y dirán las .gentes : La tierra
que estaba desolada ha veDiclo a sel' como el jardín de
Edén; y las ciudades antes m:ruinadas y ;desoladas y
destn1iclas, están ya forti:ficaclas y habitadas." (Eze.
36: 34, 35). J.1o que fue el Edén para- el hombre en su
estado ele perfección será la tierra entera prura la raza
humana. Dios hizo, la tierra para que fuera habitada;
y una. vez que la raza ,sea J:egenerada la tierra será un
apropiado hogar, y el hombre vivirá eternamente
en ella. (Isa. 45: 12, 18). 'l'od0 es lo lo hace Dios, no
por egoísmo, 'sino porque El es¡ amor.
Jehová ha hecho que su creación inanimacla exprese
con muela elocuencia su sabiduría y su amor. Entre los
lugares altamente :favorecidos ele la creación se encuen-
tra California del Sur, en los Estados U nidos. Desde
la cumbre del Monte Helix se contempla un paisaje
arrobador. En un semicírculo, de norte a . este, surge
una majestuosa cadena de montañas. · A ciertos tiempos,
las más elevadas se ven cubiertas de nieve, simbólica de
la pureza y gloria del Creador y de. su rejno. Las menos
altas están cubiertas de siemprevivas, simbolizando la
vida eterna que se desprende' de ese reino. Los riachue-
T. e[} en eración 335
Jos de cristalinns aguas se deslizan por los empinados
costados de los cerros, ·bajando a los valles de verdura
y flores en marcha tranquila al encuentro del majestuoso
océano en el oeste. Esto nos habla simbólicamente de la
bendita fuente de la vida, procediendo de los manantia-
les de la verdad y guiando a los hombres al insondable
ocóano de al sabicluria y gloria de Dios.
Es fácil el imaginarse el Edén alrro parecido a ese fa-
vorr.cido lugar. Allí la feliz y perfecta pareja humana,
dichosa, se paseaba entre Jos árbol c., a los lados ele las
tranquilas aguas, y juntaban us mclodio. as voces con
los gorgcos tle sus alados súbditos.
IIasta el día ele hoy la creació n in anim ada at . tierna
la grandeza del Creador, y junto con el profeta el ic :
La tierra es de Dios, y la plenitud el e Ua. Dios la hir.o
para el hombre; todo en ella es hermoso y glori os
menos el hombre que se ha apartado de su Cr aclor.
J ehová ha dado su palabra y su juramento ele que El
rcgcneral·á al hombre y que entonces el conocimiento
de Dios llenará toda. la tierra como las aguas cubren la
mar. Entonces todos sabrán que Jehová es Dios y que
sus obTas permanecen para siempre y son hechas en
verdad y justicia. Toda su creación le alabará y unidos
al Director del Canto entonarán :

"Jehová, hasta los cielos llega tu misericorclia,


Y tu fid elidad al canza ha sta las nubes ;
1'u justi cia es como las grandes montafia.s ;
Tus juicios son un abismo profundo !
Al hombre y al animal conservas, ¡ oh Jehová !
¡ Cuán preciosa es tu misericordia., oh Dios! .
Granélcs son las obras de Jehová,
Investigadas por todos los que hallan placer en ellas.
Su obra es noble y majestuosa,
Y su justicia permanece pam siempre.
Ha hecho memorables sus maravillas."
- Salmos 36: 5-7; 11 : 2-4:.
EL ARPA DE DIOS
La Biblia es la Palabra de Dios-su revelación a la hu·
manidad. ·su plan de liberación se comprende mejor a l
estudiar las diez doctrinas básicas de la Biblia. El Arpa de
Dios establece la armonía y coordinación ele esas doctrinas.
Contiene 384 páginas, tela verde, 35 centavos.

LIBERACION
A través ele las edades del sufrimiento humano, sobresalen
las maquinaciones de Satanás. Las señales predichas en
la Biblia marcando el f inal del Imperio Satánico se ven a
nuestro derredor: Aumento ele conocimiento, radio, areo-
planos, etc. Lib em ción señala hacia el Reino de Dios para
librar a la humanidad, t ernünando con los sufrimientos, las
enfermedades, el dolor y la muerte. Contiene 384 páginas.
Tela, 50 centavos oro americano.

RECONCILIACION LOS ULTIMOS DIAS


Muestra la manera en que E videncias ele que nos en-
el hombre h a de ser traído a con tr amos en Los UZt-imos
un a plena R econciUa ciún con Días, no del planeta en que
Dios, y al goce de su perfecto vivimos, sino de la presente
hogar, la tierra. Es en ex- e in;j usta organización social.
tremo in teresante e instruc- Habla de la inauguración
tivo. Contiene 336 páginas, del Reino de Paz y de J·usti-
cromos, pasta de tela. Vale cia para bendecir a la huma-
50 centavos oro americano. nidad. Vale 10 centavos.

GOBIERNO MILLONES NO MORIRAN


El combinado testimonio Millones de los que ahora
•le Jos estadis tas del mundo· viven en la tierra no morir:\n
es al 'efecto que t odos los 'go- jamás. ¿No quisiera usted
biernos son inadecuados y vivir para siempre en per-
corrompidos. E ste libro ex- fe ctu§l condiciones, gozando
plica la manera clel estable- de salud y prosperid ad y sin
cimiento de un justo gobiel'· ·el . triste espectáculo ele la
110 en la tierra. 336 paginas, ~gnorancia y Ju clegracl ación?
16 cromos, tela. 50 centavos Lea la ·evidencia bíblica. 64
oro americano. páginas. 10 centavos.
WA'.rCH TOWER BIBLE & 'l'RACT SOCIETY
117 Adums St., Brooklyn. N. Y., U. S, A.
En E spaña : La Torre del Vigía, Apdo. 321, Ma drid.

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