Vaiejí
Vaiejí
Vaiejí
Libro de Bereshit
7 de Tevet 5768 – 16 de Diciembre 2007
¿Cómo es posible que Iaacov haya pasado sus mejores años en el exilio de
Egipto? Después de todo fue forzado a abandonar la Tierra Santa para ir a
Egipto, el lugar más impuro, la tierra donde fueron esclavizados sus hijos.
¿Cómo puede ser que viviera los mejores años de su vida allí, habiendo tantos
otros lugares? 1
El exilio en Egipto fue el primero y por lo tanto el exilio arquetípico. Todos los
exilios subsiguientes, el babilonio, el persa, el griego, y nuestro presente exilio de
Edom-Roma, lo reflejan. Los sabios revelan que “El pueblo judío está exilado
sólo en aras de agregar [ ?????? , itvasfú , deriva de la misma raíz que “Iosef”]
conversos.” 7 Por cierto, Iaacov tuvo el privilegio de ver el final (propósito) del
exilio desde su comienzo; él vio las chispas que Iosef había acumulado en Egipto
y ver esto lo revitalizó dándoles un sentido interior de tener un propósito,
procurándole los mejores 17 años de su vida.
Todo lo que hemos discutido ofrece una nueva explicación para el fenómeno
textual tan especial que encontramos en la parashá de la semana. Cada parashá en
el Pentateuco está separada de la anterior por un espacio. En el rollo de la Torá la
separación está destacada con un espacio en blanco que separa las dos parashot.
La única excepción está en nuestra parashá Vaieji que no está separada de
Vaigash.
En su comentario, Rashi da dos razones para esta falta de separación, escribe “'Y
Iaacov vivió…' ¿Por qué esta parashá es cerrada, es decir, no hay una
interrupción entre ella y la anterior? Porque cuando Iaacov falleció los ojos del
pueblo judío y sus corazones se cerraron debido al sufrimiento de la esclavitud a
la que empezaron a ser sometidos. Otra explicación, Iaacov quiso revelar el fin
de los tiempos a sus hijos, pero esto le fue cerrado.”
Uno de los modelos más importantes del Baal Shem Tov para entender y analizar
la relación entre diferentes explicaciones es el de sumisión, separación y
dulcificación. Cuando los sabios dan diferentes respuestas a la misma pregunta,
cada una refleja un aspecto particular de este modelo.
2 Génesis 47:27
3 Ibid 45:28
4 Ibid 30:24
5 Irmiahu 15:19
6 Bereshit 37:2
7 Pesajim 87 b 8
8 Taanit 5 b 9
9 Ishaiahu 29:22-3
10 Berajot 33 a
Vaiejí
Libro de Bereshit
PARASH Á VAIEJÍ - "Y vivió"
si no ve bien las fuentes puede descargar la versión word o PDF
DE LA REPRIMENDA A LA BENDICIÓN
De un shiur del rabino Itzjak Ginsburgh, 7 de Tevet 5772
En Parashat Vaiejí, “Y vivió”, Iaacov reúne a sus hijos para hablar con ellos
antes de su muerte.Aunque la alocución de Iaacov normalmente se conoce como
las bendiciones que dio a sus hijos antes de su muerte, sus primeras palabras no
suenan para nada como una bendición. De hecho, las primeras tres tribus sufren
una severa reprimenda de Iaacov. Él le dice Rubén, "Inmanejable como el agua,
no serás privilegiado", es decir, a causa de su pecado impetuoso has perdido
todos los privilegios que tenías derecho como hijo primogénito. Iaacov se dirige
entonces a Shimón y Leví, diciendo: "Los instrumentos robados son sus
armas. Que mi alma no entre en su consejo... maldito su furor porque es
poderoso, y su enojo, porque es duro. Voy a separarlos de Iaacov, y los esparciré
por Israel".
Al escuchar cómo su padre decidió comenzar su discurso a sus hermanos
mayores, es comprensible que Iehudá, el cuarto hijo de Iaacov, no se atreva a
acercarse a Iaacov y recibir su parte; Iehudá es plenamente consciente de que hay
una buena razón para que Iaacov lo reproche a él como sus hermanos. Como
Rashi comenta: "Porque [Iaacov] reprendió a los primeros con su reprimenda,
Iehudá comenzó a retroceder hasta que Iaacov lo llamó de nuevo con palabras de
apaciguamiento; ‘Iehudá, no eres como ellos’”, lo que implica que a partir de
ahora ya no hay más reprimenda sino sólo bendición.
Sin embargo, los sabios nos enseñan que en realidad Iaacov bendijo a todos sus
doce hijos, como el verso final subraya: "Todos éstos fueron las doce tribus de
Israel, y esto fue lo que su padre les dijo, y los bendijo; a cada uno de acuerdo
con su propia bendición los bendijo.” Rashi también se detiene en este punto:
“¿Podría ser que él [Iaacov] no bendiga a Reubén, a Shimón y a Levi? El
versículo nos enseña que: "los bendijo", dando a entender a todos ellos.” ¿Cuál
era entonces la bendición con que Iaacov bendijo a Reubén, a Shimón y a Levi?
Se podría explicar que, además de la reprimenda documentada en el texto de la
Torá, Iaacov añadió una bendición indocumentada a las tres primeras tribus. Sin
embargo, esta explicación es poco plausible, y es más probable que Rashi quiera
decir que todas las bendiciones están en realidad escritas allí mismo, en la
Torá. Todo lo que tenemos que hacer es leer entre líneas, y podremos encontrar
la bendición en los propios versos.
La bendición dentro de la reprensión
La verdad es que la bendición está oculta dentro de la misma reprimenda. En
primer lugar, la motivación interna de un verdadero reproche es un "gran amor".
Este es el caso de un padre amoroso, y también es cierto para el mismo
Todopoderoso, quien nos reprende con amor, como lo encontramos en
Proverbios; "Porque al que Dios ama, lo reprende, como un padre que cuida a su
hijo.” El Malbim explica que "reprender es una señal de amor.” Los padres que
aman saben que deben reprender a sus hijos para su propio beneficio, con el fin
de educar y perfeccionar sus formas.Esto significa que la reprensión es la
expresión externa de amor, como en la traducción literal del versículo: "Mejor es
una reprensión revelada [cuando se trata] de un amor oculto."
Esta idea se alude en la palabra "reprimenda" ( ּתֹוכָחָ ה, tojajá), cuya primera sílaba
significa "dentro" ( ּתֹוְך, toj) y cuya segunda sílaba ( חָ ה, ja) tiene un valor
numérico de 13, igual que "amor" ( אַ הֲבָ ה,ahavá), lo que implica que reprender
con buenas intenciones está lleno de amor. Por el contrario, los padres que no
reprender a sus hijos para nada sólo les causan daño, como lo vemos en la
negligencia del rey David al reprender a su hijo, Adoniá: "Su padre nunca le
molestó diciendo: "¿Por qué hiciste eso?"
Desde un punto de vista más profundo, el Jasidismo enseña que hay dos niveles
de bendición. Las bendiciones normales son visibles y se habla de ellas
abiertamente en público, pero hay bendiciones especiales que deben permanecer
ocultas, incluso ocultas dentro de duras palabras de crítica. Una bendición oculta
en realidad emana de una fuente superior a la bendición revelada y abierta. Por
eso, cuando el Todopoderoso afecta a un individuo con sufrimiento lo debe
aceptar con alegría, con el entendimiento de que, de hecho, la aflicción fue
causada por la abundancia que emana de una fuente espiritual muy elevada,
desde el mundo oculto que no puede ser revelado en nuestro mundo en forma de
una bendición.
Como tal, la aflicción es la expresión más profunda de la cercanía de Dios con
nosotros, "Feliz es el hombre que Dios aflige." Esta idea no es ciertamente fácil
de digerir para la persona que sufre, pero desde un punto de vista objetivo,
podemos entender cómo el propio reproche puede ser una bendición, como un
padre que dice: "Yo amo tanto a este niño desobediente, pero tengo que regañarlo
por sus acciones." Reprender tiene el poder para endulzar los juicios severos de
donde emanan, trayendo así bendición infinita.
Una vez más, esto puede ser ilustrado con una alusión numérica. La suma de
"bendición" ( בְּ ָרכָה,brajá) y "reprender" ( ּתֹוכֵחָ ה, tojajá) es 666, que es 3 veces el
valor numérico de la raíz de 3 letras de "bendición" () ברך. En el verso final de
las bendiciones de Iaacov a sus hijos, la raíz "bendecir" aparece exactamente tres
veces: "Y los bendijo, a cada uno según su propia bendición los bendijo".
Increíblemente, la suma de los tres verbos en este versículo, "[su padre] habló... y
los bendijo... los bendijo" ( ) ִּדבֶּ ר… וַיְּ בָ ֶּרְך… בֵ ַרְךtambién es igual a 666.
Iehudá, Dan y Asher
En relación con Iaacov bendiciones de sus hijos, el Zohar relata:
Rabí Iehudá y Rabí Iosi estaban sentados un día a las puertas de Lod. El Rabí Iosi
dijo a Rabí Iehudá: Hemos visto que Iaacov bendijo a sus hijos con las palabras
"y los bendijo", pero ¿dónde está su bendición? Él [el Rabi Iehudá] respondió:
Todas estas son las bendiciones que Él los bendijo, como "Iehudá, ahora tus
hermanos te reconocerán", "Dan juzgará a su pueblo", "De Asher pan rico", y lo
mismo ocurre con todos...”
El Zohar continúa explicando la gran bendición en las palabras de Iaacov a
Rubén, Shimón y Leví, como hemos explicado que la bendición está realmente
presente en las palabras de reprensión, si sólo se sabe leer los versos
correctamente. Sin embargo, tenemos que entender por qué Rabi Iehudá eligió
las bendiciones de estas tres tribus, en particular, para ilustrar que son es con
todas las bendiciones.Podría haber mencionado cualquiera de las otras tribus que
también recibieron bendiciones excepcionales.
Podemos explicar la elección de Rabi Iehudá de una forma directa al señalar la
ubicación de estas tres tribus en el pectoral del Sumo Sacerdote. El pectoral
consistía en cuatro filas, cada una con tres piedras preciosas, que crow, Dan,
Naphtali and Gad, and the fourth row, Asher, Joseph and Benjamin.">La primera
fila de tres gemas correspondía a Reubén, Shimón y Leví, la segunda fila de
Iehudá, Isasjar y Zebulún, la tercera fila a Dan, Naftalí y Gad y la cuarta fila a
Asher, Iosef y Biniamín.La lógica detrás de este orden sigue el orden del parto de
las cuatro esposas de Iaacov: los hijos de Lea primero según el orden de
nacimiento, seguido por los hijos de las concubinas, según su orden de
nacimiento y, por último, los hijos de Raquel, que nacieron al final.
Ahora podemos ver que las tres tribus que menciona Rabí Iehudá -Iehudá, Dan y
Asher- son las primeras de las tres últimas filas del pectoral y por lo tanto, son
los representantes de todas las tribus que recibieron bendiciones explícitas de
Iaacov. Obviamente, dado que las tribus que aparecen en la primera fila no
recibieron bendiciones explícitas, Rabí Iehudá saltea la primera fila.
La bendición oculta del Mundo de la Emanación
Esta correspondencia con las piedras del pectoral revela otra forma de entender el
profundo significado de las bendiciones y los reproches. Cabalísticamente
hablando, la coraza de cuatro filas corresponden a los cuatro mundos espirituales:
emanación ( אֲצִּ ילּות, Atzilut), Creación ( בְּ ִּריאָ ה, Briá), Formación ( יְּצִּ ָירה, Ietzirá) y
Acción ( ע ֲִּשיָה, Asiá). La fila superior del pectoral, en representación de Reubén,
Shimón y Levi, corresponde al Mundo de Emanación. Entonces ahora podemos
comprender mejor por qué estas tribus no fueron bendecidas explícitamente. El
Mundo de la Emanación Divina es un mundo de bondad absoluta y por eso
mismo se encuentra completamente más allá de nuestra percepción. Esas tribus
correspondientes al Mundo de la Emanación están tan llenas de una bendición
extraordinaria en su origen superior, que cuando descienden a nuestra realidad
física, la bendición se vuelve inevitablemente intangible y, en cambio, se
experimenta como una dura reprimenda. Sólo los tres mundos inferiores,
Creación, Formación y Acción pueden puede manifestar bendición de una
manera revelada. Obviamente, el objetivo es que todas las bendiciones se
manifiesten de una manera que sea tangible para nosotros y no debería haber
ninguna necesidad de ocultarlas con una fachada de reproche. Pero este objetivo
sólo se puede completar con la redención final, y justamente ese final quiso
revelar a sus hijos cuando les dijo "Reúnanse y les diré lo que les va a pasar al
final de los días." Rashi explica lo que significan las palabras de Iaacov: "Él
desea revelar el curso de la redención final, pero la Presencia Divina lo abandonó
y comenzó a decir otras cosas." Si Iaacov hubiera revelado la redención final, no
habría habido necesidad de reprender a sus tres hijos mayores. Pero, puesto que
la Presencia Divina lo dejó y la redención final quedó oculta, volvemos a nuestra
situación actual en la que es imposible revelar la gran bendición de las almas del
Mundo de Emanación. Sin embargo, el verso final revela que, en realidad, todos
estamos bendecidos: “a cada uno según su propia bendición los bendijo", una
bendición oculta para Reubén, Shimón y Levi y una bendición tangible para
todas las otras tribus.
La Parashá Vayejí es única en toda la Torá porque es "cerrada" -no hay un espacio extra entre la
palabra final de la Parashá anterior y el comienzo de esta Parashá. Similarmente, el ojo de los
Hijos de Israel estaba "cerrado" a la esclavitud espiritual de los egipcios, que comenzó
imperceptiblemente con la muerte de Yaacob. Otra razón por la que la Parashá es "cerrada" es
porque Yaacob quería revelar a sus hijos el fin del exilio final del Pueblo Judío, y la llegada del
Mashíaj, pero su visión profética fue "cerrada", y no pudo revelarla. Nosotros estamos viviendo en
el tiempo de "los pasos del Mashíaj". Nuestros Sabios nos enseñan que este será un tiempo de
inmensa confusión, donde parecerá que todo se ha vuelto loco, y que Di-s no puede manejar o
simplemente no maneja el mundo.
Toda la razón para que la Guía Providencial esté escondida es probar nuestra fidelidad a Di-s; que
aun cuando ocurren trágicos hechos, ni siquiera por un segundo nos cuestionamos quien está
manejando el mundo.
Nosotros vivimos en el capitulo final de la historia del mundo. Los dioses del materialismo y
egocentrismo nunca cierran sus ojos, implacables en sus medios de bombardeo. -Nuestros ojos
nunca deben estar cerrados a la visión de que cada día el Redentor vendrá a Zion.
(Basado en Rashi)
Yaacob fue el primero en dar una bendición poniendo sus manos en la cabeza.
¿Por qué él originó esta práctica? Si el receptor era merecedor de la bendición, que necesidad
había de esta demostración física? Yaacob vio el comienzo del exilio, y se dio cuenta que el
Pueblo Judío viviría afuera de Israel, distante de la fuente de Kedushá (Santidad). El haber puesto
sus manos sobre la cabeza simbolizó una tubería espiritual - así como sus brazos lo conectaron
con Efráim y Menashé físicamente, así su bendición llegaría al Pueblo Judío, dándoles una cuerda
salvavidas hacia el manantial de santidad aún en el exilio más remoto y desierto.
(HaFlao)
“...Contigo bendecirá Israel, diciendo `Hágate Di-s como Efráim y como Menashé'” (Génesis
48:20)
La verdadera "brecha generacional" esta entre los dotes espirituales de una generación y la que le
precede. Desde el momento supremo en el Monte Sinai, la marcha de la historia ha ido
constantemente en bajada espiritual.
Los viernes en la noche (Shabat) en el mundo Judío, lo primero que un padre hace cuando regresa
de la sinagoga es bendecir a sus hijos con las palabras de este versículo, "Hágate Di-s como
Efráim y como Menashé". ¿Por qué de todos nuestros gigantes espirituales, Efráim y Menashé
son elegidos para ser los paradigmas de la bendición? ¿Por qué no decimos "Hágate Di-s como
Abraham o Moshé?" La respuesta la encontramos en lo que dijo Yaacob a Yosef, "Efráim y
Menashé serán para mí como Reubén y Shimón" (Génesis 48:5). A pesar de que Efráim y
Menashé eran los nietos de Yaacob, habían alcanzado el nivel de la generación anterior, el nivel
de sus tíos Rubén y Shimón - ellos no descendieron la escalera espiritual. Por eso, los viernes en
la noche, un padre bendice a sus hijos para que absorban todos los dotes espirituales de la
generación precedente y que escapen a la bajada espiritual - la brecha generacional.
Escena Uno: Un restaurante de Nueva York. Abe y Sol, dos ciudadanos de la tercera edad,
conversan amigablemente. Abe apoya el vaso y mira a la distancia. Al hablar, es como si 2.000
años de historia pasaran delante de sus ojos:
A Yaacob Avinu no le resultó nada fácil que lo enterraran en la Cueva de Majpelá. Había cuatro
grandes personalidades que se oponían a tales planes: Su hijo Yosef, el Faraón, los Reyes de
Canaán y su hermano Esav.
Yosef no quería que su padre fuera enterrado en la Cueva de Majpelá, debido a que era el lugar de
entierro de Lea. Rajel, la madre de Yosef, no estaba enterrada allí, sino en el camino de
Betlejem. Por eso a Yosef no le gustaba nada la idea de ver a su padre enterrado con alguien que
no era su madre. Por eso Yaacob Avinu le hizo jurar que lo enterraría en la Cueva de Majpelá.
El Faraón no quería que el cuerpo de Yaacob fuera sacado de Egipto, porque le preocupaba la
posibilidad de que hubiera otra vez hambre en la tierra.
Los Reyes de Canaán no querían dejar que Yaacob Avinu fuera enterrado en la Cueva de Majpelá,
que era parte de su reino, pues temían un cortejo real de un poder foráneo en su
"territorio". Sentían que constituía un desafío a su autoridad.
Y Esav no quería que Yaacob fuera enterrado en la Cueva de Majpelá porque pensaba que él era
el heredero por derecho de su padre Itzjak, y, como tal, a él solo le correspondía estar enterrado
allí.
Cuatro fueron los que se interpusieron a Yaacob Avinu. Cuatro adversarios formidables. ¿Por qué
Yaacob hizo todo lo posible para que lo enterraran en la Tierra de Israel y no en Egipto?
Yaacob estaba transmitiendo un mensaje a todas las generaciones por venir: "Tal vez haya tenido
que vivir en el extranjero, pero no fui enterrado en el extranjero".
Yaacob les decía a todos sus descendientes, de todas las nacionalidades y de todas las épocas:
"Tal vez se sientan muy cómodos viviendo en el exilio, tanto en Egipto como en Roma, o España, o
Argentina, o Estados Unidos... Podrán vivir en el exilio, pero ese no es su verdadero lugar. Su
lugar esta en la Tierra de Israel.
"Y Yaacob vivió en la tierra de Egipto durante diecisiete años..." (Génesis 47:28)
La historia vuelve a repetirse. Lo que pasó, vuelve a pasar. El acto más ínfimo de los avot (padres
de la nación) reverbera por los corredores de todas las épocas.
Hashem le revelo a Abraham que sus descendientes serían exiliados en Egipto. Hashem le dijo
también cuanto se extendería exactamente el exilio. La historia vuelve a repetirse: Hashem le
revelo a Yaacob la Diáspora del pueblo judío y el inevitable fin de este exilio. Así como Abraham
fue el primero, Yaacob fue el ultimo. Y por ser el último, es el símbolo del objetivo esencial de los
padres de la nación. Porque lo ultimo en llegar siempre revela el objetivo primigenio. Por eso el
pueblo judío se llama “Israel": el otro nombre de Yaacob. Israel es la expresión esencial y final de
Yaacob. De él heredamos nuestro propósito y nuestro destino como nación.
Los diecisiete años que Yaacob pasó en Egipto fueron la esencia de toda su vida. Durante
aquellos años, Yaacob vivió libre de angustia, libre del yetzer hará (mal impulso) y era como si
estuviera viviendo en el Mundo Venidero.
Los años que Yaacob transcurrió en Egipto son como la matriz, el precursor de los últimos días de
la historia del mundo.
Yaacob paso la mayor parte de sus días presa del dolor y de la angustia y, del mismo modo, la
historia del pueblo judío ha sido una serie aparentemente incesante de opresión y de tiranía.
Pero Yaacob vivió sus últimos años en paz y tranquilidad. Y el pueblo judío, tras este largo y
oscuro exilio, habrá de hallar la paz y la tranquilidad de la redención final.
Detengámonos a mirar las barracas de los soldados. ¿Alguien encontró alguna cama de lujo
ortopédica? ¿El menú es cinco estrellas? ¿La comida la sirven mozos de frac?
Los soldados son entrenados para la guerra. Para poder llevar a cabo su tarea, tienen que ser
capaces de funcionar en forma efectiva en las circunstancias más estresantes.
Por eso los soldados se ven privados de todas las comodidades que uno encuentra en la casa
propia. Se los entrena día y noche para que puedan soportar y seguir funcionando en situaciones
en que las que la gente normal sufriría un colapso. Y todo esto es para que estén preparados para
cumplir con su tarea de defender su país y las vidas de sus ciudadanos.
Inclusive cuando les faltan las comodidades más básicas, tienen la tranquilidad mental necesaria
para poder ser efectivos.
Lo mismo ocurre con el estudio de la Torá. Si uno se entrena en el nivel correcto, podrá estudiar
con serenidad, pase lo que pase en el campo de batalla de la vida.
Isajar es la tribu dedicada al estudio de la Torá. "Vio que la tranquilidad era buena". Isajar percibió
que para poder estudiar Torá, su mente necesitaba estar descansada y relajada, libre de todo tipo
de batalla. Por eso, "inclinó el hombro para soportar", vale decir, se hizo a sí mismo victima del
necesario ataque espiritual, para que ante cualquier dificultad que encontrara en el camino, pudiera
emerger de la reyerta con la paz mental necesaria para poder sumergirse en el estudio de la Torá.
Shabat Shalom
¿Quién dirías que "se pasa la gran vida"? ¿El que no se pierde ni una fiesta nocturna? ¿El que es
conducido en una limusina con chofer, mientras bebe champaña y contempla desde la ventana los
ojos envidiosos de los que trabajan turno completo?
Los que viven "en la cumbre" nos parecen envidiables desde afuera, pero no hay más que
consultar la cantidad de casos de drogadicción, crisis nerviosas y matrimonios destrozados que
tienen lugar en ese mundo encumbrado, para darnos cuenta de que "el que se pasa la gran vida"
en realidad no la pasa tan bien...
El verano pasado, en nuestro peregrinaje anual a Marks & Spencer, mi mujer y yo circulábamos
por los pasillos de la tienda, llevando en el carrito a nuestro hijo de dos años. Quedamos
estupefactos ante la cantidad de gente que se acercaba y arrullaba "¡Mira! ¡Un bebe!"
Cuando vamos por las calles de Jerusalem, nos pasamos la mayor parte del tiempo evitando
choques con todos los otros carritos y cochecitos.
Una de las facetas más sorprendentes del estilo de vida judío es cómo la vida está definida por los
instantes cruciales de la breve caminata del hombre por el planeta. El ciclo de la vida literalmente
brota y florece alrededor nuestro: un kidush, un brit milá, una redención del primogénito, una fiesta
de compromiso, un bar mitzvá, un casamiento, y toda la semana de celebración que le sigue,
escoltar a un muerto a su lugar de descanso, visitar a los que están de duelo.
El ciclo de vida diario del judío esta colmado del ciclo mismo de la vida. Desde la cuna hasta la
tumba. Compartiendo la dicha y también la pena.
Las primeras palabras de la Parashá de esta semana son "Y Yaakob vivió...". Desde el momento
en que Yaakob llego a Egipto, hubo, literalmente, una explosión poblacional en las filas del pueblo
judío. En solamente diecisiete años, Yaakob fue testigo de como su familia se incremento, desde
solamente setenta almas a varios miles de personas. Y Yaakob, en tanto que abuelo de todos esos
descendientes, debe haberse pasado el día entero de celebración en celebración: nacimientos,
brit, kidush, casamientos, etc. etc...
Una vez, un escritor muy famoso escribió: "Cuando yo tenia dieciséis años, mis padres no sabían
mucho acerca del mundo, pero cuando cumplí veinte, me sorprendió cuánto habían aprendido en
aquellos cuatro años".
El Midrash dice que la aparente redundancia de "Lo se, mi hijo, lo se" era el modo en que Yaakob
le decía a Yosef que habia muchas cosas que Yosef desconocía. Y si el deseo de Yaakob era que
Efraim recibiera la bendición principal, entonces eso era motivo suficiente.
Cuando se habla de un enemigo espiritual, la cosa cambia. A partir del orden en que esta
expresado el versículo, primero la espada y después el arco, podemos deducir que la Tora no se
refiere a ningún enemigo externo, sino más bien al eterno enemigo del ser humano: su propio
egoísmo.
Por naturaleza, el hombre es egocéntrico. El bebe no piensa en otra cosa que no sea su propia
gratificación y emplea todos los medios disponibles para conseguir lo que desea. Recién después
de muchos años, la persona puede finalmente superar su natural egoísmo. En la permanente
batalla contra su egocentrismo, el ser humano abre la lucha en un combate mano a mano,
empleando la espada para dominar su natural impulso egoísta. Pero inclusive cuando uno ya hizo
retroceder al enemigo hasta que este se encuentra fuera del alcance de la espada, uno tiene que
seguir manteniéndolo con la cabeza gacha, disparándole con el arco una salva de mitzvot y
buenos actos.
¿Por qué es tan importante que uno rece con un minián (quórum de diez hombres)? ¿Acaso Di-s
no oye nuestra plegaria de cualquier modo?
La diferencia de rezar con un minian y rezar solo se puede entender del siguiente modo: Rezar con
un minian es como usar una espada en la batalla. Aunque uno no tenga buena puntería, la espada
puede resultar un arma sumamente efectiva. Lo mismo con el rezo: aunque nuestra plegaria no
sea 100% precisa, igualmente surtirá efecto. Por el contrario, el arco solo resulta útil cuando uno le
pega en el blanco. Si no, la flecha termina en el suelo.
Cuando uno reza solo, es como un arquero. Si logra dar en el blanco cada palabra y cada
pensamiento, con perfecta puntería, su plegaria habrá de surtir efecto; pero si quita su mente del
blanco aunque sea un solo instante, su plegaria caerá al suelo como una flecha errada.
(Meshej Jojma)
"... En vosotros bendecirá todo Israel, diciendo: 'Que Di-s te haga como Efraim y como
Menashe'" (Génesis 48:20)
Los viernes a la noche, a lo largo y a lo ancho del mundo judío, los padres bendicen a sus hijos con
este versículo: "Que Di-s te haga como Efraim y como Menashe".
¿Por qué, de todos nuestros gigantes espirituales, se eligió a Efraim y a Menashe para que fueran
paradigma de bendición? ¿Por qué no decimos 'Que Di-s te haga como Abraham y como Moshé'?
Si existe una brecha generacional, esa brecha es la discrepancia entre los logros espirituales de
una generación y los de su antecesora.
A partir del supremo encuentro con la Divinidad en el Sinai, la marcha de la historia, en términos
espirituales, ha ido siempre en descenso. La razón por la que bendecimos a nuestros hijos para
que sean como Efraim y como Menashe se entiende al leer lo que le dice Yaakob a Yosef unos
versículos antes: "Efraim y Menashe serán para mi como Reuven y Shimon" (48:5)
Efraim y Menashe, a pesar de ser los nietos de Yaakob, habían alcanzado el nivel de sus tíos
Reuven y Shimon: el nivel de la generación precedente. No habían descendido por la escalera
espiritual. Por eso, los viernes a la noche los padres bendicen a sus hijos para que absorban todos
los logros espirituales de la generación precedente, salvándose de esa espiral espiritual
descendente: la brecha generacional.
"Isajar es un asno de huesos fuertes; descansa entre las fronteras. Vio que la tranquilidad
era buena... pero inclino el hombro para soportar" (Génesis 49:14,15)
Entre el 9% y el 10% de los alumnos de escuela primaria en los EE.UU. sufren de depresión
clínica. Una estadística espeluznante. Y eso no incluye los que están apenas por encima de la
línea divisoria de lo que se denomina "depresión clínica". Ni tampoco toma en cuenta a aquellos
que no recurrieron a ayuda profesional. De cualquier forma en que se la mire, 9% es una cifra que
da miedo.
¿Por qué tantos niños tienen sentimientos de depresión?
La sociedad norteamericana es una sociedad que se basa en hacer la vida fácil. Compras por
Internet, almuerzos de TV, cuentas bancarias por TE. Esos beneficios a corto plazo nos transmiten
una cierta actitud: no me tengo que esforzar por nada.
¿Qué diferencia hay entre la diversión y la felicidad? El Monte Whitney, situado en California, es el
pico más alto de los EE.UU. Tiene 14.494 pies de altura. Muy probablemente, podríamos llegar
volando a la cima en alrededor de 15 minutos. Pero yendo a pie, esa misma distancia nos podría
tomar 15 días.
Tal vez volar a la cima sea más divertido que escalar la montaña, pero escalarla nos causa mucha
más felicidad, debido a que hemos logrado algo muy difícil de alcanzar. La diversión es algo
externo, y por ser externo, es efímero y pasajero. La felicidad es algo interno. Se vuelve parte de
nuestra esencia.
No existe en todo el mundo ningún placer físico que pueda compararse al éxtasis de entender un
Tosefot difícil. Tal vez no sea muy "divertido", pero es la mayor felicidad que pueda existir.
"Isajar es un asno de huesos fuertes; descansa entre las fronteras. Vio que la tranquilidad era
buena... pero inclinó el hombro para soportar y se transformo en un esclavo".
Isajar es la tribu de los que estudian Torá. La persona que estudia Torá carga con un yugo muy
duro, pero es un "asno de huesos fuertes". Di-s le da la fuerza necesaria para llevar a cabo su
tarea. Y aunque trabaje de día y de noche, "descansa entre las fronteras". Descansa entre las
fronteras del día y la noche. ¿Cómo es posible que exista algo entre el día y la noche? O bien es
de día o bien es de noche. El talmid jajam (erudito de la Torá) experimenta un reposo del alma a un
plano espiritual que está mucho más allá de las fronteras del día y de la noche. Y en ese plano
posee una satisfacción que está muy por encima de este mundo. El vio "que la tranquilidad era
buena", pero aun así "inclinó el hombro para soportar". El comprende que el logro máximo proviene
del trabajo duro y de la consagración a la Torá Sagrada de Di-s.
Shabat Shalom
Perashat Vaiji
Yosef se compromete bajo juramento a sacar a su padre Yaacob de Egipto y enterrarle en
tierra santa. Yaacob le dice (Cap 48, vers 22) "He aquí te di (la ciudad de Shejem) una parte
más que a tus hermanos (en la herencia de la tierra de Israel) que conquisté de manos de los
Emoritas con mi espada y mi arco". El Midrash saca el versículo de su contexto y explica
que la espada y el arco aluden a las mizvot y buenos actos de Yaacob que le concedieron la
victoria.
Vemos también que Onquelos (traducción aramea) comenta que la espada alude a la
oración y el arco a la súplica. Pero ¿por qué motivo, tanto el Midrash como Onquelos
desvían al texto de su contexto? El Beth Halevi explica que una guerra comienza a
distancia con el uso del arco y acaba con la espada cuando las partes implicadas se
avecinan. Pero el versículo, al invertir el orden de las armas, primero con mi espada,
segundo con mi arco nos invita a dar otra explicación que no es la literal.
El Gaón Rabi Zeev Halevi dice que de aquí se aprende la importancia de la oración, del
Chmoné Esré, las 19 bendiciones (o la Amidá) que han sido instituidas por el Gran
Sanedrín ampliado a 120 miembros llamado también Anshé Keneset Haguedolá, entre ellos
figuraban varios profetas.
Esta Gran Asamblea ha redactado un texto incomparable que encierra en él todos los
principios del Judaísmo hasta los secretos más profundos de la Kabalá. Este texto tan
profundo es y ha sido recitado por más de 1000 años desde el judío más humilde hasta los
grandes personajes como Rabi Simón Bar Yohai y Rabi Meir Baal Hanés. Esta oración tan
maravillosa, con mucha fuerza en sus palabras, se compara a una espada de doble filo que
corta sin esfuerzo. Cuando decimos la Amidá, aunque pongamos muy poca concentración,
la oración se recibe sin esfuerzo. Pero cuando hacemos una petición personal, con términos
propios, se compara a un arco. Cuanta más flexibilidad tenga y cuanta más fuerza se le
aplique, más lejos alcanzará la flecha. Pero no hay garantía que la flecha alcance su
objetivo. De aquí la importancia de la oración fijada por los Jajamim: el Shmoná Esré (la
Amidá).
Resumen de la Parashá
Resumen de la Parashá
Génesis 47:28-50:26
1
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hablar de (8)
El patriarca desea revelar el final de los días a sus hijos, pero es impedido por Di-s. Iaacov
bendice a sus hijos, asignando a cada uno su rol como tribu: Iehuda producirá líderes,
legisladores y reyes; los sacerdotes provendrán de Leví, sabios de Isajar, navegantes de
Zvulún, maestros de escuela de Shimón, soldados de Gad, jueces de Dan y cosechadores de
olivas de Asher. Reuben es advertido por haber "confundido el matrimonio de su padre";
Shimón y Leví por la masacre de Shjem y el plan contra Iosef. Naftalí es dotado con la
velocidad de un ciervo, Biniamín con la ferocidad del lobo y Iosef es bendecido con belleza y
fertilidad.
Una gran procesión funeraria consistente en los descendientes de Iaacov, ministros del
Faraón, los ciudadanos más ilustres de Egipto y la caballería Egipcia acompañan a Iaacov en
su último viaje a la Tierra Santa, donde es enterrado en la Cueva de Majpelá en Jevrón.
Iosef también fallece en Egipto, a los 110 años. Él también ordena que sus huesos sean
llevados de Egipto a la Tierra Santa, pero esto ocurriría sólo con el éxodo de los Israelitas de
Egipto, muchos años después. Antes de morir, Iosef deja a los Hijos de Israel el testamento
del cual tomarán esperanza y fe en los difíciles años venideros: "Di-s seguramente los
recordará, y te elevará fuera de esta tierra, a la tierra que prometió a Avraham, Itzjak y
Iaacov".
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hablar de (3)
Esta fuerza está relacionada con el elevado nivel espiritual de Iosef, en el cual se expresaba la
diferencia con sus hermanos y hasta con su padre, Iaacov. Los hermanos de Iosef eran
pastores de ganado, así apartándose del mundo a su alrededor, mientras que Iosef estaba en
Egipto, centro de la impureza, donde se hizo virrey, aún así conservando su unión a la Torá y
las Mitzvot.
El elevado nivel espiritual de Iosef nos ayuda a entender una frase de nuestros sabios.
Cuando Iosef interpreta el sueño del Jefe de Coperos del Faraón, le pidió ser mencionado
ante el rey. Nuestros sabios dicen que Iosef fue castigado por haber confiado en el Jefe de
Coperos, un ser humano, por lo cual Di-s lo retuvo dos años más en la cárcel. Lo que es difícil
de entender es: ¿cuál es el problema en el hecho de que Iosef pidió ayuda de un ser humano?
¡Di-s mismo fijó en la Torá que una persona debe actuar según las leyes naturales, como está
escrito: "Y Di-s te bendecirá en todo lo que hagas"! De aquí se aprende que una persona debe
actuar, y no esperar un milagro del cielo.
Así también era el comportamiento de Iaacov nuestro padre: antes de su encuentro con Eisav,
estaba preocupado "no vaya a ser que venga y me golpee, madres e hijos", sin embargo, él
rezó a Di-s y, junto con su rezo, actuó de acuerdo a la naturaleza, preparándose para la
guerra y hasta mandó un regalo a su hermano. ¿Por qué, entonces, Iosef fue castigado por
haber actuado según las normas de la naturaleza?
La explicación es que, Di-s exige de una persona de acuerdo al potencial de la persona. Todo
momento en el cual la persona no utiliza sus fuerzas al máximo, es considerado un pecador.
Es por esto que la acción de Iosef se considera un pecado, dado su elevado nivel espiritual.
Cuando se trata de seres humanos comunes, aún de hombres justos, es necesario "hacer un
recipiente" natural para la bendición Divina, por lo cual que Iaacov mandó un regalo a su
hermano y se preparó para la guerra. Sin embargo, estando en el nivel de Iosef, debería haber
sido suficiente la confianza en Di-s y no apoyarse en seres humanos.
Sobre el nivel de Iosef fue dicho el versículo "Es mejor cobijarse en Di-s que confiar en el
hombre". En este nivel, uno debe poner toda su confianza en Di-s, sin ser necesario "hacer un
recipiente" natural donde fluya la bendición de Di-s. Debido a que Iosef no se condujo según
su nivel lo requería y confió en un ser humano, fue castigado con tener que esperar dos años
más en la cárcel.
Es por este nivel elevado de Iosef que tanto el descenso a Egipto como la redención de allí
están relacionados con él específicamente. Para poder descender hasta lo más bajo "al lugar
más impuro de la tierra", es necesario el potencial más elevado, para no ser afectado por las
dificultades y las pruebas del descenso.
De la misma manera, para poder ascender de la impureza de Egipto, es necesaria una fuerza
que supera al mundo tal y cual es, que está por encima de las leyes de la naturaleza, porque
siempre y cuando uno esté sujeto a las leyes naturales, se aplica la regla "alguien preso no
puede liberarse a sí mismo de la cárcel". Por eso, precisamente Iosef, cuyo nivel espiritual
superaba a la naturaleza, dio al pueblo judío la fuerza para salir de Egipto.
Cada judío y judía es llamado "el rebaño de Iosef", lo que nos enseña que todo tenemos
dentro nuestro un potencial que supera a la naturaleza. La misión es revelarlo y utilizarlo para
hacer de la naturaleza, un lugar para la presencia Divina.
Inmortales
Inmortales
Por Yossy Goldman
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hablar de (7)
La vida no termina con el sepulcro. El alma nunca muere y el trabajo hecho por hombres y
mujeres en la tierra continúa viviendo mucho después de su desaparición. Más todavía, si hay
continuidad, si los hijos emulan el ejemplo de sus padres, entonces los padres y maestros
viven a través de ellos.
Cuando Iaacob estaba a punto de exhalar su último aliento, él llamó a sus hijos para estar a su
lado. Nuestra Parashá nos cuenta lo que él le dijo a cada uno de ellos. Pero la tradición oral
nos cuenta lo ocurrió detrás de escena. Al parecer, Iaacob estaba ansioso por saber si sus
descendientes guardaban la fe y él les menciono esta preocupación en aquel momento.
Contestaron, Shema Israel Hashem Elokeinu Hashem Ejad--"Oye Israel, el Señ-or es nuestro
Di-s, el Señ-or es Uno". Estaban diciendo que el Di-s de Israel su padre sería siempre su Di-s.
Iaacob se calmo y respondio, Baruj Shem Kevod Maljuto L'olam Vaed--"Bendito sea el nombre
de la gloria de su reino por siempre jamas" (o mas simple, ¡Baruj Hashem! ¡Gracias a Di-s!)
Cuando los hijos de Iaacob continuaban fieles a su tradición, eso no era sólo un tributo a la
memoria de Iaacob, sino el regalo de la vida eterna hacia el. Su espíritu vive entre nosotros, el
trabajo de su vida continúa prosperando y él está presente en este mundo mientras que su
alma vive en el otro mundo.
Al seguir su camino, los hijos de Iaacob lo inmortalizaron. Por eso la Parashá esta
correctamente llamada Vaieji, "Y él vivió. " En última instancia, nuestros hijos nos hacen
inmortales. Y así también nuestros alumnos, nuestros hijos espirituales. Que seamos todos
merecedores de criar hijos y alumnos fieles a nuestro padre Iaacob y al Di-s de Israel. Amen.
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hablar de (1)
Después de varios años de penurias, Iaakov pasó sus últimos diecisiete años en Egipto feliz y
en paz. Vio a Iosef soberano y a todos sus hijos sin excepción tzadikim que seguían el camino
por él trazado.
Sus últimos diecisiete años son calificados por la Torá como "Años de Vida" pues el ruaj
hakodesh (don profético) lo acompañó. Hashem lo compensó de esta forma por los diecisiete
años que había estado de duelo por Iosef. A Iaakov se le aplica el dicho - "Todo está bien si
termina bien".
Cuando Iaakov se debilitó y sintió que el fin se acercaba, llamó a su hijo Iosef y le pidió que no
lo enterrara en Egipto. En su lugar, le dio indicaciones para llevar su cuerpo a Eretz Israel para
su entierro. Iaakov ordenó esto a Iosef en lugar de a sus otros hijos porque sabía que no
tenían poder para cumplir con su deseo. Solo Iosef, el mandatario, podría obtener el permiso
del Faraón para dejar Egipto y llevar los restos de su padre a Eretz Israel.
¿Por qué nuestro antepasado Iaakov deseó ser enterrado en Eretz Israel?
Nuestros jajamim nos enseñan que quienes están enterrados en Eretz Israel serán los
primeros en levantarse por tejiat hameitim (resurrección de los muertos) ¿Cuál será el destino
de un judío enterrado fuera de Eretz Israel? En los tiempos de tejiat hameitim, Hashem creará
túneles subterráneos especiales. A través de ellos su cuerpo rodará hasta Eretz Israel. Luego
volverá a la vida en la Tierra Prometida.
Por lo tanto, Iaakov ordenó a Iosef: "No me entierren en Egipto. Así no sufriré al tener que
rodar a Eretz Israel en los tiempos de tejiat hameitim".
Iaakov tenía otras razones por las cuales no deseaba ser enterrado en Egipto: temía que si se
lo enterraba allí, sus descendientes considerarían a Egipto como su patria. Razonarían - Si no
fuera una tierra santa, el cuerpo de Iaakov no estaría enterrado aquí. Iaakov quería que sus
descendientes fueran concientes para siempre del hecho que su permanencia en Egipto era
solamente temporaria. Además, temió que los egipcios idolatraran sus restos y lo proclamaran
divino. Todos sabían que el hambre había terminado después de la llegada de Iaakov a
Egipto. Asimismo, Iaakov presagió que de las Diez Plagas que sobrevendrían en Egipto, una
sería la Plaga de los Piojos que infectaría a todos los cadáveres (y no quiso confiar en el
milagro de salvar su cadáver).
Pidió a Iosef - Carga mis restos a la Cueva de Majpela porque quiero descansar junto a mis
padres y resucitar en buena compañía cuando llegue el momento apropiado.
Una persona debe hacer los arreglos para ser enterrado cerca de tzadikim para estar junto a
ellos en el momento de la resurrección.
Todos sabemos que no viviremos para siempre. Reconocemos verbalmente que somos todos
mortales y un día moriremos. Pero actuamos como si la muerte no nos afectara.
Nuestros patriarcas fueron siempre conscientes del hecho que eran transeúntes en este
mundo, colocados aquí por unos setenta años. Pasaron sus vidas preparándose para el
mundo- por- venir porque vivían con la realidad de la muerte. Claramente declararon que
eventualmente morirían.
• Abraham dijo: "He aquí que a mí no me has dado descendencia y he aquí que uno, criado en
mi casa habrá de heredarme". (Bereshit 15:3).
• Itzjak dijo a Eisav: "Que te bendiga mi ser antes que yo muera" (ibid. 27:4).
• Iaakov dijo: "Descansaré con mis padres" (ibid. 47:30).
Nacido en Egipto
Nacido en Egipto
Por Yossy Goldman
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hablar de (9)
¿Qué es la Creación? No sólo un Big Bang o un Diseño Inteligente, sino una expresión de un
propósito más elevado y profundo. Los místicos enseñan que Di-s no estaba contento con
tener ángeles en el cielo cantándole alabanzas. Quería seres terrenales, hombres y mujeres
de carne y hueso con pasiones y temperamentos terrenales viviendo vidas físicas, que, sin
embargo, fueran capaces de elevarse por encima del momento para experimentar el propósito
espiritual de ello. Deseó seres humanos que estarían expuestos a todas las distracciones
asociadas con su condición física —desde vacaciones en la playa hasta liquidaciones de
diciembre —y aun seguir concentrados en lo espiritual.
Cuando dotamos a nuestras vidas materiales con valores espirituales, con un sentido de un
propósito más elevado, es decir, destino y eternidad, entonces cumplimos con el plan original
del Creador de traer el cielo a la tierra y construir un hogar para Di-s en el físico, a menudo
insensible, mundo inferior.
Y ahí se encuentra la conexión del comienzo del Libro del Génesis con su final. Ser un buen
judío en la Tierra Santa es una cosa. Permanecer santo y celestial en las gratificaciones
físicas de Egipto, es otra. Egipto representa el epítome de la decadencia en ese tiempo. Que
los Hijos de Israel fueran ahí y aun permanecieran fieles a la forma de vida Divina es traer el
cielo a la tierra. Vivir una elevada vida moral en una sociedad moralmente degenerada es
validar y justificar toda la idea de la creación y la decisión del Creador de hacer existir seres
mortales dotados de la libertad de elección de cómo deben vivir sus vidas.
Quizás este sea el motivo por el cual Jacob eligió bendecir a los hijos de José, Efraín y
Manases con las palabras "Por ustedes Israel bendecirá (a sus hijos), diciendo: Di-s los haga
como Efraín y Manases". En realidad, esta es la bendición tradicional que damos a nuestros
hijos hasta este día, que ellos crezcan como Efraín y Manases. ¿Por qué? ¿Por qué Jacob
prometió que para la posteridad los judíos bendecirían a sus hijos para que fueran como los
hijos de José? ¿Por qué no que fueran como sus propios hijos, las doce tribus de Israel?
Una respuesta es que de todos los 70 hijos y nietos de Jacob mencionados en la Torá, Efraín
y Manases fueron los únicos que nacieron en Egipto y vivieron ahí toda la vida. Jacob sabía
que en las generaciones venideras los judíos nuevamente peregrinarían a través de sus
propios Egiptos y exilios. Comprendió que la historia judía estaba destinada a llenarse de
hostilidad y desafíos. Por lo tanto, el modelo de conducta para los jóvenes judíos es necesario
que sea el de personas como Efraín y Manases, que nacieron y fueron criados en Egipto y sin
embargo permanecieron fieles a las tradiciones de Jacob; quienes formaron parte de la corte
de Faraón y sin embargo vivieron vidas judías justas.
Los niños y jóvenes modernos necesitan héroes en los que fijarse para que puedan ser
inspirados por su ejemplo. Los hijos de José pasaron por el engañoso campo de las intrigas
del palacio egipcio mientras nunca olvidaron quienes eran realmente. Cuando niños que son
"made in USA" sigan conectados espiritualmente con el camino celestial del Creador,
entonces tendremos hecha esa morada para Di-s en los reinos más bajos para lo que fue
creado el mundo en primer lugar.
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hablar de (5)
Adám fue el modelo original, "la obra maestra de Di-s". ¿Más perfección que eso? Él era tan
perfecto que no lo pudo resistir, y fue en busca de la imperfección--algo para reparar, algo
para lograr, para hacer. Es bueno que nosotros, como raza, hayamos empezamos perfectos,
aunque sea sólo para entender de dónde viene nuestro anhelo de perfección y saber que
podemos, de hecho, lograrlo.
Noaj era perfecto según las normas. Su generación completa era corrupta, pero él "caminó
con Di-s". Incluso intentó llegar a los demás y mejorar sus maneras --no porque le importara
en qué se convertirían, sino porque Di-s dijo que eso era hacer lo correcto. Le dio
instrucciones precisas sobre cómo construir el arca, qué poner dentro, cuándo entrar, y
cuándo salir. Y eso fue lo que hizo. Lo suyo fue una perfección egoísta. Había un objetivo: ser
perfecto.
La perfección de Abraham fue la perfección del amor. Para Abraham, sentarse a comer era
compartir con cada viajero hambriento; descubrir una verdad era enseñarla al mundo. Hacia
afuera y abarcadora, la perfección de Abraham tenía a su ser como centro y el mundo entero
como su esfera de acción.
Iaakov logró la perfección a través de la armonía. A través del equilibrio entre el amor y el
temor reverencial, a través de la fusión entre su asertividad y su bajo perfil. Él supo el secreto
de la síntesis: que amar indiscriminadamente es también abrazar lo malo, pero retroceder al
compromiso es abandonar lo mucho que hay de bueno en ello; supo también que afirmar el
ego propio es volver la espalda a Di-s, pero erradicarlo del todo es neutralizar el propósito
Divino. La vida de Iaakov fue una tensa cuerda de equilibrista tendida desde Hebrón pasando
por Jarán y Egipto, sin apegarse a nada ni nadie en especial, pero sin ser un extraño a ellos;
integrando lo mejor de cada uno a la totalidad de su vida.
La perfección de Iosef fue la perfección del desafío. De hecho, ¿puede algo ser perfecto sin
que se lo haya probado antes, sin haber llegado a su límite y más allá? La rectitud de Iosef no
fue la rectitud de un pastor meditando en un campo tranquilo, o un estudioso apartado en "las
tiendas de estudio". Fue la rectitud llevada a las prisiones y palacios de Egipto, inmersa en el
comercio y la política, envuelta en los cuernos de la riqueza y la depravación--y aún así,
perseveró.
Vida Plena
Vida Plena
Parashá para Chicos
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hablar de (4)
El Alter Rebe contestó: "Está escrito: ‘Y él (Iaacov) envió a Iehuda frente a él, hacia Iosef, para
explorar la tierra de Goshen’".
"Rashi cita el Midrash: Rabí Nejemia dice que Iaacov envió a Iehuda a establecer una casa de
estudios, de manera que las tribus estudien Torá en Egipto".
"La palabra explorar está escrita ‘lehorot’ en la Torá. La raíz de las palabras ‘lehorot’ y ‘Torá’
son la misma, lo que significa que cuando un judío estudia Torá, puede tener una vida plena y
feliz, aún en Egipto".
No solamente esto, sino que estudiando Torá en Egipto, símbolo de todos los exilios, aún el
exilio en el cual nos encontramos ahora, hace brillar la diáspora, para hacer del mundo un
mejor lugar y prepararlo para la rápida redención.
Likutei Sijot
Likutei Sijot
Volumen I
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hablar de (2)
Bsd.
Un concepto que se reitera en las Sijot del Rebe es el de la necesidad de que la persona se
entregue incondicional y abnegadamente a dar cumplimiento a la Voluntad de Di-s. Pero, ¿qué
sucede si en el maratónico servicio de kabalat ol, el judío se olvida que debe socorrer
espiritual o físicamente a un par? ¿Sigue siendo este estado el climax de su avodá?
En esta Sijá el Rebe nos hace reflexionar y brinda una extraordinaria enseñanza: si se trata de
ayudar a otro Iehudí, no importa si hay que renunciar a beneficios propios, aunque sean de
índole espiritual. Quien se mantiene en esta actitud, no solo que no caerá preso de un
descenso espiritual, sino que de Arriba le proveerán las fuerzas para también poder nutrir
espiritualmente a otros judíos.
1. [En la Sección de Vaiejí, la Torá nos cuenta que antes de que nuestro Patriarca Iaacov
partiera de este mundo, reunió a todos sus hijos y los bendijo]. La bendición de Iaacov a su
hijo Asher fue: "De Asher, oleoso será su alimento"1. Rashi explica que las palabras de Iaacov
aluden [al carácter graso de los alimentos de Asher, debido] a la abundancia de aceite de oliva
que [en el futuro] tendrá el territorio [asignado a la Tribu] de Asher [en la Tierra de Israel].
Rashi agrega que también la bendición de nuestro Maestro Moshé a la Tribu de Asher fue
similar [a la de Iaacov]: "y éste sumerge su pie en aceite"2.
Ya se explicó en numerosas ocasiones que todo lo que existe en el plano físico de la Creación
tiene su paralelo en la dimensión espiritual. Y [si profundizamos e investigamos un poco más
acerca de esta idea, llegaremos a la conclusión de que] lo cierto es lo opuesto: que la realidad
espiritual es la causa de la cual resultan sus equivalencias en el dominio de lo físico3.
Si esto es así respecto de las cuestiones mundanas, con mayor razón se debe aplicar idéntico
principio a los temas tratados en la Torá: Cada cuestión que trata la Torá, ciertamente, existe
[primero] en el plano espiritual. Pues cada tema que la Torá aborda no sólo tiene su
significado en la dimensión del pshat(el sentido simple, literal), sino que encapsula al mismo
tiempo en su interior [el mensaje de] el rémez (su sentido alusivo), [el de] el drush (el sentido
alegórico), y [el de] el sod (el sentido místico, esotérico)4.
También las [citadas] bendiciones se interpretan en este sentido: "De Asher, oleoso será su
alimento" y "éste sumerge su pie en aceite". Si bien es obvio que también aquí rige la norma
de que "Ningún versículo se aparta de su significado literal"5 –pues en la porción territorial
asignada a la Tribu de Asher había concretamente una gran abundancia de olivos (como lo
evidencia el episodio talmúdico6 citado por Rashi7)–, ello no disipa todas las implicaciones del
versículo. Con certeza, éste debe tener, al mismo tiempo, un sentido espiritual8.
"Aceite" es una alusión al nivel [intelectual] de jojmá (sabiduría) –el aspecto más sublime [del
alma] del hombre– en tanto que "el pie" es su parte [y poder corporal] más bajo. Así visto,
"sumerge su pie en aceite" indica que el [nivel inferior de] "pie" hace uso del [supremo nivel
de] "aceite". El pie, pese a representar en apariencia el nivel más bajo del hombre, tiene una
virtud única a la que ni siquiera la sabiduría (el "aceite") puede llegar [por sí mismo], y
precisamente por ello el "pie" utiliza el "aceite".
Hay una expresión similar empleada en referencia a la Era Mesiánica. [el Profeta declara:] "En
aquel día sus pies se pararán sobre el Monte de los Olivos"9. "Aceite", [como se dijera,]
significa "sabiduría"; los olivos, son la fuentedel aceite. Por lo tanto, "Monte de los Olivos"
representa un grado superior al de los "olivos" propiamente dichos, ya que estos crecen [en él
y] de él. Y pese a que "Monte de los Olivos" alude a un nivel [espiritual] muy excelso, se ha
dicho no obstante que "En aquel día sus pies se pararán sobre el Monte de los Olivos", lo que
implica a las claras que el nivel espiritual de "pies" será [en aquel momento] superior al [nivel
espiritual representado por el] "Monte de los Olivos".
En términos de avodá (el esforzado servicio a Di-s por parte del hombre), "aceite" (sabiduría)
alude al estudio de la Torá y la observancia de las mitzvotque es motivada por la comprensión
[de su calibre] y el placer [que de ellas se deriva]. En contraste, el aspecto de "pie" alude a
una avodá que se basa enkabalát ol (sumisión absoluta a la voluntad de Di-s, una entrega que
trasciende el entendimiento del individuo o el placer que siente por lo que hace).
El servicio a Di-s que resulta de kabalát ol es, aparentemente, de un nivel inferior [al servicio
motivado por la comprensión intelectual,] pues en su caso el individuo carece de entusiasmo y
placer; sólo sirve a Di-s con kabalát ol, [lo hace sólo porque Di-s así lo dispuso, sin tomar en
cuenta la propia elevación espiritual, su elaboración o sentimientos personales]. No obstante,
la avodá que se basa en kabalát ol goza de una virtud única que la hace superior a
la avodáque se ve motivada por la razón, como se explicará en breve.
Esta es, en realidad, la razón de que en el plano físico (que, como ya se dijo, refleja y es
consecuencia de la realidad espiritual), los pies posean una virtud sobre la cabeza: ellos
complementan y conceden perfección a [la función de] la cabeza, como se explica en Likutéi
Torá, en la sección de Nitzavím10.
El Campamento de Dan tenía la función de ser "el que recogía [todo lo que se le hubiera
extraviado] a todos los [demás] Campamentos"12: Sus integrantes eran los últimos en la
[formación durante la] marcha [por el desierto] de todos los demás Campamentos
[compuestos por las otras Tribus] y, gracias a esto, podían encontrar todo lo que extraviaran
[por el camino] los [judíos de los] Campamentos precedentes, y devolverlo a sus dueños.
En otras palabras, aunque el Campamento de Dan marchaba en último lugar –lo que [en
apariencia] señala un rango inferior al de los demás, su condición de "pie"– sin embargo, y
precisamente por esta razón, éste era capaz de devolver los artículos perdidos a los demás
Campamentos.
4. Como ya se mencionara, todos los aspectos del plano físico derivan de su equivalente en el
dominio de lo espiritual. El concepto de una "pérdida" es expresado por nuestros Sabios de la
siguiente manera13: "¿Quién es un tonto? Aquel que pierde todo el ma que le es concedido".
La doctrina jasídica14 interpreta este pasaje así: A cada Judío se le ha otorgado desde lo Alto
el [potencial de] ma15, 1617es decir, la capacidad de bitúl (auto-negación del Yo) a Di-s. Sin
embargo, por causa de [la Inclinación al Mal,] el Iétzer HaRá –llamado "rey viejo y necio", un
tonto–, el judío puede perder, Di-s libre, su ma. Es esta pérdida aquello que era encontrado y
devuelto por el Campamento de Dan "el que recogía (todo lo que pertenecía) a todos los
Campamentos".
[De acuerdo a esta interpretación propuesta por la doctrina jasídica, se infiere que] los
Campamentos que marchaban en primer lugar, [a la "cabeza",] y [por lo tanto] estaban más
cerca del Santuario –incluso la [excelsa] Tribu de Leví, y aun la familia de Kehat [que, entre los
levitas, era aquella que mayor contacto tenía con los objetos de más santidad del Santuario]–,
corrían el riesgo de perder el ma [de sus almas] y [consecuentemente estaban expuestos a
perder también] el bitúl [su abnegada entrega incondicional] hacia lo Divino. Sólo en el
Campamento de Dan –[que, siendo el último, se corresponde con] el aspecto de "pie"– sus
integrantes podían conservar su ma intacto y eran, además, incluso capaces de restaurar
el ma y bitúl de los demás judíos.
Esto coincide [exactamente] con lo explicado antes: Que los "pies" completan y perfeccionan a
la "cabeza".
5. La misma idea se halla implícita en otro versículo de la Sección de esta semana, a saber:
"Dan juzgará"18.
La Guemará dice19: "Cierto hombre solía decir 'Juzga mi caso'". Y la gente decía que "Ello
demuestra que aquel descendía de (la Tribu de) Dan, pues está escrito: 'Dan juzgará'".
Y éste era, precisamente, el modo de servicio de [los judíos que integraban] el Campamento
de Dan: kabalát ol. Por eso, si bien desde una perspectiva superficial este tipo
de avodá parece ser de un bajo nivel [de conexión con Di-s] –porque la persona carece de
comprensión y goce [en el servicio]–, en realidad, y en esencia, [el nexo con Di-s que se logra
mediante la actitud de]kabalát ol supera a [la conexión que se sustenta en] la comprensión, en
dos aspectos:
1) [Ante todo,] el intelecto humano es limitado. Por eso, no se puede captar intelectualmente lo
Divino, ya que Di-s es infinito21. Por lo tanto, cuando el servicio a Di-s se basa en la razón, Di-
s es captado de un modo restringido, sólo tan alto como el intelecto [humano] es capaz de
llegar. En contraste,kabalát ol es la entrega a Di-s tal como Di-s es: sin límites.
2) Lo que es más, kabalát ol no sólo trasciende al intelecto al alcanzar alturas espirituales más
sublimes, sino que en realidad es 222324el fundamento de todas las formas de avodá. Incluso
aquella que se sustenta en la lógica y la comprensión se basa en [la entrega incondicional
más allá de la razón,] kabalát ol. Pues, sobre el intelecto sólo no se puede construir [una
conexión adecuada con Di-s;] para que éste funcione y oriente correctamente [a la persona]
elkabalat ol es un requisito previo. Por eso dice el Tania, en nombre del Zohar: "Si esto (la
aceptación del yugo del Reinado del Cielo, kabalát ol) no se encuentra en él, la Santidad no
puede posarse sobre él".
En efecto, aquel judío que está en un estado de auto-negación del Yo en virtud de su kabalát
ol no es una entidad en sí mismo. Su ser y existencia sólo consiste de una única expresión:
Dar cumplimiento a la Voluntad Suprema. No es de su interés [preocuparse] qué será de él; lo
único que le interesa [en la vida] es que la Divina Voluntad Suprema logre concreción. Por
consiguiente, estará dispuesto a hallarse lejos del Santuario, totalmente al final, en último
lugar, con tal de satisfacer la Voluntad Divina de acercar a otro judío a Di-s.
3) Los pies son la base que sustenta a toda la estructura [humana] y sostienen a la cabeza.
Por eso, también el Campamento de Dan –que representa kabalát ol– sostiene la totalidad de
la avodá, aun la del intelecto, y es su base.
7. La enseñanza de todo esto aplicada al servicio a Di-s [de cada judío], es la siguiente:
El judío puede estudiar Torá y observar las mitzvot en el nivel más sublime, al grado de estar
sumamente cerca del Santuario y el Arca [que contiene la Torá]. Sin embargo, al mismo
tiempo podría estar pensando exclusivamente en su beneficio personal y faltarle la abnegada
entrega requerida para hacer un favor a otro judío. Este interés por sí mismo podría ser,
quizás, de una naturaleza espiritual (es decir, en procura del desarrollo espiritual y el
bienestar); pero el hecho de faltarle el principio básico de la Torá25, "Ama a tu prójimo como a
ti mismo"26, puede provocar la pérdida del ma de su alma.
Sólo quien se dedica a Ahavat Israel (amor al prójimo) con absoluto desinterés y entrega –
mesirut néfesh– puede estar seguro de sí mismo, de que perdurará intacto y también será
capaz de devolver a otros judíos sus pérdidas espirituales.
8. El centro del Campamento de Dan era ocupado por la Tribu de Asher. Por norma, quien
ocupa el centro –y no los extremos laterales– es especialmente apreciado27. Por lo tanto, se
deduce que la Tribu de Asher es pnimiut sheberéguel – el aspecto esencial de la condición de
"pie". [Es decir, dentro del Campamento de Dan, cuyos integrantes se destacaban por el
servicio dekabalát ol, representado por los "pies", era en la Tribu de Asher donde este estilo
de servicio estaba más profundamente arraigado].
Tal como el Campamento de Dan influía sobre todos los demás judíos –como se explicó antes
(sección 3)–, la Tribu de Asher ejercía una influencia muy especial y particular. Por eso de
Asher se dijo "sea aceptado por sus hermanos"28; nuestros Sabios comentan29 que esto
significa que Asher proveía de alimentos a todos los demás durante el Año Sabático (shemitá).
NOTAS:
1 [Génesis 49:20. El versículo pretende decir que "de Asher, sustancioso será su pan"; no
obstante, lo hemos traducido como "oleoso será su alimento" siguiendo la interpretación de
Rashi citada por el Rebe a inmediata continuación (NE)].
2 Deuteronomio 33:24.
3 [Compárese con Shemot Rabá 33:4: 'Pues todo lo que está en el Cielo y en la tierra'
(Crónicas I, 29:11) – encontrarás que todo lo que Di-s ha creado en el cielo, también lo ha
creado en la tierra (por lo tanto, 'todo lo que está en el cielo lo está también en la tierra').
Compárese con lo escrito por Rabí Dovber de Mezritch en Or Torá, Vaierá, secc. 24; Likutéi
Sijot, Vol. II, pág. 363; y también Mystical Concepts in Chassidism, Cap. 1, sección 1 (y en
particular la nota 5, citando a Rabí Ieshaiá Horowitz, Shnéi Lujot HaBrit, Toldot Adam: Báit
Neemán)
4 [En el contexto del texto talmúdico de los "Cuatro que ingresaron al Pardés (la Huerta)",
Jaguigá 14b, el Zohar lee la palabra pardés como un acrónimo de pshat, rémez (o reiá), drush
y sod, los cuatro niveles de significado e interpretación de la Torá; véase Zohar Jadash,
Tikuním 107c, ibíd. 102b; también Zohar I, 26b, III, 110a y 202a. Para un ejemplo de la
aplicación de estos cuatro niveles de interpretación y su relación con el Jasidut, véase Kuntrés
Inianá shel Torat HaJasidut, caps. 9-17 (NVI)].
5 Shabat 63a.
6 Menajot 85b.
9 Zejaria 14:4. Compárese con, Sefer HaJakirá de Rabí Menajem Mendel de Lubavitch,
Hosafot, pág. 272.
10 [Pág. 44a]. Véase también Likutéi Sijot, Nitzavím, Vol. II, pág. 398.
11 [Las Tribus de Israel, cuando viajaban por el desierto tras el Exodo, se distribuían en 4
campamentos de 3 Tribus cada uno: el Campamento de Iehudá (compuesto por las Tribus de
Iehudá, Isajar y Zevulún); el de Reuvén (por las Tribus de Reuvén, Shimón y Gad); el de
Efráim (por las de Efráim, Menashé y Biniamín); y el de Dan (por las de Dan, Asher y Naftalí).
Viajaban en este orden, con la Tribu de Leví (subdividida en las 3 familias que la constituían:
Guershón, Kehat y Merarí) y las carretas en el centro del Campamento de Dan, en la
retaguardia. Véase Números, cap. 2, y 10:11 (NVI)].
12 Números 10:25. Véase Rashi allí, citando el Talmud Ierushalmí [Eruvín 5, fin de 1].
13 Jaguigá 4a.
14 Likutéi Torá, Maséi, 91c; ibíd. Reé, pág. 33a. [Véase Kéter Shem Tov, secc. 292; Or Torá
(del Maguíd), Agadot, secc. 423 (NVI)].
15 Como en la expresión venájnu ma, ['¿Qué somos nosotros?' – Exodo 16:7-8; véase Rashi
allí: '¿Cuál es nuestra importancia?' (NVI)].
16 [El equivalente numérico de la palabra adam ("hombre"), el término más sublime por medio
del cual las Escrituras se refieren al hombre (véase Zohar 3, 48a) es 45, las mismas letras que
"ma" (mem=40, hei=5). En este contexto, el concepto de ma (literalmente 'qué', como en la
expresión citada en la nota 15, o en la pregunta '¿qué es esto?', que simboliza el concepto de
la nulidad) representa la esencia misma, o espiritualidad (tzélem, la imagen Divina), del
hombre. Para que éste se encuentre en un estado de absoluta y total sumisión y auto-
anulación ante su Hacedor, debe estar manifiesto y predominar su facultad de ma. (NVI)]
19 Pesajím 4a.
20 Véase Ialkut Shimoní, Itro, 298; Ierushalmí, Peá 1:1; Devarím Rabá 6:2; y en otros lugares.
21 [Tikunéi Zohar 17a: Amo de los mundos... Tú eres excelso por sobre todos los excelsos;
oculto por sobre todos los ocultos, ningún pensamiento puede captarte, en absoluto... nadie
puede conocerte, en absoluto (NVI)].
24 Véase también Likutéi Sijot, Vol. II, pág. 421 y ss., y pág. 426 y ss.
26 Levítico 19:18.
27 Meguilá 21b.
28 Deuteronomio 33:24.
Likutei Sijot
Likutei Sijot
Volumen I
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Bsd.
Un concepto que se reitera en las Sijot del Rebe es el de la necesidad de que la persona se
entregue incondicional y abnegadamente a dar cumplimiento a la Voluntad de Di-s. Pero, ¿qué
sucede si en el maratónico servicio de kabalat ol, el judío se olvida que debe socorrer
espiritual o físicamente a un par? ¿Sigue siendo este estado el climax de su avodá?
En esta Sijá el Rebe nos hace reflexionar y brinda una extraordinaria enseñanza: si se trata de
ayudar a otro Iehudí, no importa si hay que renunciar a beneficios propios, aunque sean de
índole espiritual. Quien se mantiene en esta actitud, no solo que no caerá preso de un
descenso espiritual, sino que de Arriba le proveerán las fuerzas para también poder nutrir
espiritualmente a otros judíos.
1. [En la Sección de Vaiejí, la Torá nos cuenta que antes de que nuestro Patriarca Iaacov
partiera de este mundo, reunió a todos sus hijos y los bendijo]. La bendición de Iaacov a su
hijo Asher fue: "De Asher, oleoso será su alimento"1. Rashi explica que las palabras de Iaacov
aluden [al carácter graso de los alimentos de Asher, debido] a la abundancia de aceite de oliva
que [en el futuro] tendrá el territorio [asignado a la Tribu] de Asher [en la Tierra de Israel].
Rashi agrega que también la bendición de nuestro Maestro Moshé a la Tribu de Asher fue
similar [a la de Iaacov]: "y éste sumerge su pie en aceite"2.
Ya se explicó en numerosas ocasiones que todo lo que existe en el plano físico de la Creación
tiene su paralelo en la dimensión espiritual. Y [si profundizamos e investigamos un poco más
acerca de esta idea, llegaremos a la conclusión de que] lo cierto es lo opuesto: que la realidad
espiritual es la causa de la cual resultan sus equivalencias en el dominio de lo físico3.
Si esto es así respecto de las cuestiones mundanas, con mayor razón se debe aplicar idéntico
principio a los temas tratados en la Torá: Cada cuestión que trata la Torá, ciertamente, existe
[primero] en el plano espiritual. Pues cada tema que la Torá aborda no sólo tiene su
significado en la dimensión del pshat(el sentido simple, literal), sino que encapsula al mismo
tiempo en su interior [el mensaje de] el rémez (su sentido alusivo), [el de] el drush (el sentido
alegórico), y [el de] el sod (el sentido místico, esotérico)4.
También las [citadas] bendiciones se interpretan en este sentido: "De Asher, oleoso será su
alimento" y "éste sumerge su pie en aceite". Si bien es obvio que también aquí rige la norma
de que "Ningún versículo se aparta de su significado literal"5 –pues en la porción territorial
asignada a la Tribu de Asher había concretamente una gran abundancia de olivos (como lo
evidencia el episodio talmúdico6 citado por Rashi7)–, ello no disipa todas las implicaciones del
versículo. Con certeza, éste debe tener, al mismo tiempo, un sentido espiritual8.
"Aceite" es una alusión al nivel [intelectual] de jojmá (sabiduría) –el aspecto más sublime [del
alma] del hombre– en tanto que "el pie" es su parte [y poder corporal] más bajo. Así visto,
"sumerge su pie en aceite" indica que el [nivel inferior de] "pie" hace uso del [supremo nivel
de] "aceite". El pie, pese a representar en apariencia el nivel más bajo del hombre, tiene una
virtud única a la que ni siquiera la sabiduría (el "aceite") puede llegar [por sí mismo], y
precisamente por ello el "pie" utiliza el "aceite".
Hay una expresión similar empleada en referencia a la Era Mesiánica. [el Profeta declara:] "En
aquel día sus pies se pararán sobre el Monte de los Olivos"9. "Aceite", [como se dijera,]
significa "sabiduría"; los olivos, son la fuentedel aceite. Por lo tanto, "Monte de los Olivos"
representa un grado superior al de los "olivos" propiamente dichos, ya que estos crecen [en él
y] de él. Y pese a que "Monte de los Olivos" alude a un nivel [espiritual] muy excelso, se ha
dicho no obstante que "En aquel día sus pies se pararán sobre el Monte de los Olivos", lo que
implica a las claras que el nivel espiritual de "pies" será [en aquel momento] superior al [nivel
espiritual representado por el] "Monte de los Olivos".
En términos de avodá (el esforzado servicio a Di-s por parte del hombre), "aceite" (sabiduría)
alude al estudio de la Torá y la observancia de las mitzvotque es motivada por la comprensión
[de su calibre] y el placer [que de ellas se deriva]. En contraste, el aspecto de "pie" alude a
una avodá que se basa enkabalát ol (sumisión absoluta a la voluntad de Di-s, una entrega que
trasciende el entendimiento del individuo o el placer que siente por lo que hace).
El servicio a Di-s que resulta de kabalát ol es, aparentemente, de un nivel inferior [al servicio
motivado por la comprensión intelectual,] pues en su caso el individuo carece de entusiasmo y
placer; sólo sirve a Di-s con kabalát ol, [lo hace sólo porque Di-s así lo dispuso, sin tomar en
cuenta la propia elevación espiritual, su elaboración o sentimientos personales]. No obstante,
la avodá que se basa en kabalát ol goza de una virtud única que la hace superior a
la avodáque se ve motivada por la razón, como se explicará en breve.
Esta es, en realidad, la razón de que en el plano físico (que, como ya se dijo, refleja y es
consecuencia de la realidad espiritual), los pies posean una virtud sobre la cabeza: ellos
complementan y conceden perfección a [la función de] la cabeza, como se explica en Likutéi
Torá, en la sección de Nitzavím10.
El Campamento de Dan tenía la función de ser "el que recogía [todo lo que se le hubiera
extraviado] a todos los [demás] Campamentos"12: Sus integrantes eran los últimos en la
[formación durante la] marcha [por el desierto] de todos los demás Campamentos
[compuestos por las otras Tribus] y, gracias a esto, podían encontrar todo lo que extraviaran
[por el camino] los [judíos de los] Campamentos precedentes, y devolverlo a sus dueños.
En otras palabras, aunque el Campamento de Dan marchaba en último lugar –lo que [en
apariencia] señala un rango inferior al de los demás, su condición de "pie"– sin embargo, y
precisamente por esta razón, éste era capaz de devolver los artículos perdidos a los demás
Campamentos.
4. Como ya se mencionara, todos los aspectos del plano físico derivan de su equivalente en el
dominio de lo espiritual. El concepto de una "pérdida" es expresado por nuestros Sabios de la
siguiente manera13: "¿Quién es un tonto? Aquel que pierde todo el ma que le es concedido".
La doctrina jasídica14 interpreta este pasaje así: A cada Judío se le ha otorgado desde lo Alto
el [potencial de] ma15, 1617es decir, la capacidad de bitúl (auto-negación del Yo) a Di-s. Sin
embargo, por causa de [la Inclinación al Mal,] el Iétzer HaRá –llamado "rey viejo y necio", un
tonto–, el judío puede perder, Di-s libre, su ma. Es esta pérdida aquello que era encontrado y
devuelto por el Campamento de Dan "el que recogía (todo lo que pertenecía) a todos los
Campamentos".
[De acuerdo a esta interpretación propuesta por la doctrina jasídica, se infiere que] los
Campamentos que marchaban en primer lugar, [a la "cabeza",] y [por lo tanto] estaban más
cerca del Santuario –incluso la [excelsa] Tribu de Leví, y aun la familia de Kehat [que, entre los
levitas, era aquella que mayor contacto tenía con los objetos de más santidad del Santuario]–,
corrían el riesgo de perder el ma [de sus almas] y [consecuentemente estaban expuestos a
perder también] el bitúl [su abnegada entrega incondicional] hacia lo Divino. Sólo en el
Campamento de Dan –[que, siendo el último, se corresponde con] el aspecto de "pie"– sus
integrantes podían conservar su ma intacto y eran, además, incluso capaces de restaurar
el ma y bitúl de los demás judíos.
Esto coincide [exactamente] con lo explicado antes: Que los "pies" completan y perfeccionan a
la "cabeza".
5. La misma idea se halla implícita en otro versículo de la Sección de esta semana, a saber:
"Dan juzgará"18.
La Guemará dice19: "Cierto hombre solía decir 'Juzga mi caso'". Y la gente decía que "Ello
demuestra que aquel descendía de (la Tribu de) Dan, pues está escrito: 'Dan juzgará'".
Y éste era, precisamente, el modo de servicio de [los judíos que integraban] el Campamento
de Dan: kabalát ol. Por eso, si bien desde una perspectiva superficial este tipo
de avodá parece ser de un bajo nivel [de conexión con Di-s] –porque la persona carece de
comprensión y goce [en el servicio]–, en realidad, y en esencia, [el nexo con Di-s que se logra
mediante la actitud de]kabalát ol supera a [la conexión que se sustenta en] la comprensión, en
dos aspectos:
1) [Ante todo,] el intelecto humano es limitado. Por eso, no se puede captar intelectualmente lo
Divino, ya que Di-s es infinito21. Por lo tanto, cuando el servicio a Di-s se basa en la razón, Di-
s es captado de un modo restringido, sólo tan alto como el intelecto [humano] es capaz de
llegar. En contraste,kabalát ol es la entrega a Di-s tal como Di-s es: sin límites.
2) Lo que es más, kabalát ol no sólo trasciende al intelecto al alcanzar alturas espirituales más
sublimes, sino que en realidad es 222324el fundamento de todas las formas de avodá. Incluso
aquella que se sustenta en la lógica y la comprensión se basa en [la entrega incondicional
más allá de la razón,] kabalát ol. Pues, sobre el intelecto sólo no se puede construir [una
conexión adecuada con Di-s;] para que éste funcione y oriente correctamente [a la persona]
elkabalat ol es un requisito previo. Por eso dice el Tania, en nombre del Zohar: "Si esto (la
aceptación del yugo del Reinado del Cielo, kabalát ol) no se encuentra en él, la Santidad no
puede posarse sobre él".
1) La avodá [en que se destacaba el servicio] de Dan era la de kabalát ol; [como se explicó
antes,] desde una perspectiva superficial, este tipo de servicio sugiere un bajo nivel [de
conexión con Di-s,] el aspecto de "pies". Como espiritualmente su nivel (al menos en
apariencia) era el último, consecuentemente, su ubicación física [en el orden de la marcha de
los judíos por el desierto,] era la última.
En efecto, aquel judío que está en un estado de auto-negación del Yo en virtud de su kabalát
ol no es una entidad en sí mismo. Su ser y existencia sólo consiste de una única expresión:
Dar cumplimiento a la Voluntad Suprema. No es de su interés [preocuparse] qué será de él; lo
único que le interesa [en la vida] es que la Divina Voluntad Suprema logre concreción. Por
consiguiente, estará dispuesto a hallarse lejos del Santuario, totalmente al final, en último
lugar, con tal de satisfacer la Voluntad Divina de acercar a otro judío a Di-s.
3) Los pies son la base que sustenta a toda la estructura [humana] y sostienen a la cabeza.
Por eso, también el Campamento de Dan –que representa kabalát ol– sostiene la totalidad de
la avodá, aun la del intelecto, y es su base.
7. La enseñanza de todo esto aplicada al servicio a Di-s [de cada judío], es la siguiente:
El judío puede estudiar Torá y observar las mitzvot en el nivel más sublime, al grado de estar
sumamente cerca del Santuario y el Arca [que contiene la Torá]. Sin embargo, al mismo
tiempo podría estar pensando exclusivamente en su beneficio personal y faltarle la abnegada
entrega requerida para hacer un favor a otro judío. Este interés por sí mismo podría ser,
quizás, de una naturaleza espiritual (es decir, en procura del desarrollo espiritual y el
bienestar); pero el hecho de faltarle el principio básico de la Torá25, "Ama a tu prójimo como a
ti mismo"26, puede provocar la pérdida del ma de su alma.
Sólo quien se dedica a Ahavat Israel (amor al prójimo) con absoluto desinterés y entrega –
mesirut néfesh– puede estar seguro de sí mismo, de que perdurará intacto y también será
capaz de devolver a otros judíos sus pérdidas espirituales.
8. El centro del Campamento de Dan era ocupado por la Tribu de Asher. Por norma, quien
ocupa el centro –y no los extremos laterales– es especialmente apreciado27. Por lo tanto, se
deduce que la Tribu de Asher es pnimiut sheberéguel – el aspecto esencial de la condición de
"pie". [Es decir, dentro del Campamento de Dan, cuyos integrantes se destacaban por el
servicio dekabalát ol, representado por los "pies", era en la Tribu de Asher donde este estilo
de servicio estaba más profundamente arraigado].
Tal como el Campamento de Dan influía sobre todos los demás judíos –como se explicó antes
(sección 3)–, la Tribu de Asher ejercía una influencia muy especial y particular. Por eso de
Asher se dijo "sea aceptado por sus hermanos"28; nuestros Sabios comentan29 que esto
significa que Asher proveía de alimentos a todos los demás durante el Año Sabático (shemitá).
Conforme lo explicado, también se entiende el significado de [las bendiciones de Iaacov y
Moshé a Asher:] "De Asher, oleoso será su alimento" y "él sumerge su pie en aceite". Pues en
Asher brillaba la facultad de kabalát ol desde su mismísima esencia, [y por lo tanto era capaz
de nutrir a todos los judíos con ella].
NOTAS:
1 [Génesis 49:20. El versículo pretende decir que "de Asher, sustancioso será su pan"; no
obstante, lo hemos traducido como "oleoso será su alimento" siguiendo la interpretación de
Rashi citada por el Rebe a inmediata continuación (NE)].
2 Deuteronomio 33:24.
3 [Compárese con Shemot Rabá 33:4: 'Pues todo lo que está en el Cielo y en la tierra'
(Crónicas I, 29:11) – encontrarás que todo lo que Di-s ha creado en el cielo, también lo ha
creado en la tierra (por lo tanto, 'todo lo que está en el cielo lo está también en la tierra').
Compárese con lo escrito por Rabí Dovber de Mezritch en Or Torá, Vaierá, secc. 24; Likutéi
Sijot, Vol. II, pág. 363; y también Mystical Concepts in Chassidism, Cap. 1, sección 1 (y en
particular la nota 5, citando a Rabí Ieshaiá Horowitz, Shnéi Lujot HaBrit, Toldot Adam: Báit
Neemán)
4 [En el contexto del texto talmúdico de los "Cuatro que ingresaron al Pardés (la Huerta)",
Jaguigá 14b, el Zohar lee la palabra pardés como un acrónimo de pshat, rémez (o reiá), drush
y sod, los cuatro niveles de significado e interpretación de la Torá; véase Zohar Jadash,
Tikuním 107c, ibíd. 102b; también Zohar I, 26b, III, 110a y 202a. Para un ejemplo de la
aplicación de estos cuatro niveles de interpretación y su relación con el Jasidut, véase Kuntrés
Inianá shel Torat HaJasidut, caps. 9-17 (NVI)].
5 Shabat 63a.
6 Menajot 85b.
9 Zejaria 14:4. Compárese con, Sefer HaJakirá de Rabí Menajem Mendel de Lubavitch,
Hosafot, pág. 272.
10 [Pág. 44a]. Véase también Likutéi Sijot, Nitzavím, Vol. II, pág. 398.
11 [Las Tribus de Israel, cuando viajaban por el desierto tras el Exodo, se distribuían en 4
campamentos de 3 Tribus cada uno: el Campamento de Iehudá (compuesto por las Tribus de
Iehudá, Isajar y Zevulún); el de Reuvén (por las Tribus de Reuvén, Shimón y Gad); el de
Efráim (por las de Efráim, Menashé y Biniamín); y el de Dan (por las de Dan, Asher y Naftalí).
Viajaban en este orden, con la Tribu de Leví (subdividida en las 3 familias que la constituían:
Guershón, Kehat y Merarí) y las carretas en el centro del Campamento de Dan, en la
retaguardia. Véase Números, cap. 2, y 10:11 (NVI)].
12 Números 10:25. Véase Rashi allí, citando el Talmud Ierushalmí [Eruvín 5, fin de 1].
13 Jaguigá 4a.
14 Likutéi Torá, Maséi, 91c; ibíd. Reé, pág. 33a. [Véase Kéter Shem Tov, secc. 292; Or Torá
(del Maguíd), Agadot, secc. 423 (NVI)].
15 Como en la expresión venájnu ma, ['¿Qué somos nosotros?' – Exodo 16:7-8; véase Rashi
allí: '¿Cuál es nuestra importancia?' (NVI)].
16 [El equivalente numérico de la palabra adam ("hombre"), el término más sublime por medio
del cual las Escrituras se refieren al hombre (véase Zohar 3, 48a) es 45, las mismas letras que
"ma" (mem=40, hei=5). En este contexto, el concepto de ma (literalmente 'qué', como en la
expresión citada en la nota 15, o en la pregunta '¿qué es esto?', que simboliza el concepto de
la nulidad) representa la esencia misma, o espiritualidad (tzélem, la imagen Divina), del
hombre. Para que éste se encuentre en un estado de absoluta y total sumisión y auto-
anulación ante su Hacedor, debe estar manifiesto y predominar su facultad de ma. (NVI)]
19 Pesajím 4a.
20 Véase Ialkut Shimoní, Itro, 298; Ierushalmí, Peá 1:1; Devarím Rabá 6:2; y en otros lugares.
21 [Tikunéi Zohar 17a: Amo de los mundos... Tú eres excelso por sobre todos los excelsos;
oculto por sobre todos los ocultos, ningún pensamiento puede captarte, en absoluto... nadie
puede conocerte, en absoluto (NVI)].
24 Véase también Likutéi Sijot, Vol. II, pág. 421 y ss., y pág. 426 y ss.
26 Levítico 19:18.
27 Meguilá 21b.
28 Deuteronomio 33:24.
"Señales de un Rey"
"Señales de un Rey"
"Un cachorro de león es Iehudá de su devorado has sacado a mi hijo" (Bereshit 49:9)
Adaptado de la Enseñanzas del Rebe de Lubavitch
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¿Cuál es la Diferencia?
Esto llama la atención: ¿no estuvieron presentes acaso con Reuvén exactamente las mismas
dos virtudes? Con respecto a Iosef, Reuvén dijo2 : "no terminemos con su vida" y mientras que
Iehudá vendió a Iosef a cambio de dinero, Reuvén pretendía liberarlo totalmente- "¡para
salvarlo de sus manos y devolverlo a su padre!" 3 .
Elevación Personal
Reuvén, en su carácter de primogénito, era íntegro. Intenta actuar para salvar a Iosef. Se
arrepiente y es un penitente total por su pecado durante largos años. En lo que se refiere a su
persona, su conducta es perfecta. Pero en lo que respecta al prójimo, en los hechos no lo
ayudó. A Iosef no lo salvó, por el contrario, causó que sea arrojado a un pozo lleno de
serpientes y escorpiones. Su arrepentimiento fue algo entre él y su Creador, sin relación
alguna con el prójimo (y por el contrario, sino hubiera estado ocupado con "su ropa de duelo y
su ayuno", puede que se hubiera impedido la venta de Iosef y se hubiera ahorrado todo el
descenso al exilio en Egipto)
A diferencia de ello, Iehudá, a pesar de que trabajo interior en el arrepentimiento no era tan
profundo, en los hechos concretos fue quien causó la salvación del prójimo: fue él quien salvó
a Iosef del pozo y a Tamar de la sentencia de ser quemada. Su actitud de firmeza y sacrificio
en aras del prójimo probó que específicamente él era apto para el reinado, que implica
preocuparse por el otro. Por eso no se transfirió la monarquía de Reuvén a Iosef.
En esto hay una lección eterna: está prohibido que el judío se concentre sólo en el
perfeccionamiento personal. El desinteresarse por el otro puede causar 'su venta' y
constituirse la raíz de todos los exilios. El judío debe dedicarse al amor al prójimo, que es
"toda la Torá" 7 . Entonces, a pesar de que él mismo no se encuentre en un nivel tan elevado,
en mérito a su ayuda al prójimo está ligado a "toda la Torá", y a su vez apura la llegada del
Mashíaj y la verdadera y completa redención.
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Cuando Iaakov pidió de Iosef "por favor no me entierres en Egipto"1 , Iosef le prometió: "Haré
cual tú me pides"2. Pero Iaakov no se quedó tranquilo, sino que agregó y pidió3: "Júrame", a
lo que Iosef consintió, como cuenta la Parshá: "y le juró".
¿Por qué no le bastó a Iaakov la promesa de Iosef y solicitó también un juramento? ¿Acaso
dudaba que Iosef pueda romper su promesa?
Sino que la insistencia de Iaakov se debía a la fuerza especial que hay en un juramento. Un
juramento difiere de una promesa en el grado de compromiso que impone a la persona.
Al Patriarca Iaakov no le bastó una promesa y requirió de Iosef que también le jure, porque
sabía que la concreción de su pedido podía llegar a verse envuelta en dificultades y sólo con
la fuerza del juramento es que Iosef podría superarlas.
Iosef se Quedó
Vemos una clara diferencia entre Iaakov y Iosef: Iaakov no aceptó ser enterrado en la tierra de
Egipto y exigió de su hijo: "Y me llevarás de Egipto"2 . En contraposición a ello, el ataúd de
Iosef permaneció en Egipto, y él sólo juramentó a sus hermanos que cuando llegue el tiempo
de "recordar recordará Di-s"3 , habrán de subir sus huesos con ellos.
A simple vista, esta exigencia de Iaakov (de no ser enterrado en Egipto) parece ser un interés
de cubrirse él, mientras que sus hijos permanecen en el exilio. Pero siendo que no es
concebible una lectura tal de la conducta de Iaakov, debemos decir que su proceder era en
beneficio de Israel.
La Fuerza de Iaakov
Los Sabios Z"L4 dijeron una regla: "un preso no puede liberarse a sí mismo de la cárcel". Para
que los hijos de Israel pudieran salir de Egipto precisaban de una fuerza exterior, que no se
encontrara dentro de Egipto, a través de la cual pudieran liberarse de ahí. Ese era Iaakov el
Patriarca. Él estaba por encima de Egipto, por encima del exilio. Su lugar no era Egipto, sino la
Tierra de Israel, y de ahí irradiaba fuerzas a los hijos de Israel que se encontraban en Egipto.
A diferencia de ello, Iosef sí se encontraba en Egipto, en el exilio; y estando ahí brindaba las
fuerzas y fortalecía a los hijos de Israel. Por un lado, se encontraba en el lugar del exilio y por
el otro desde adentro fortalecía al pueblo. Es por ello que su ataúd permaneció en Egipto, y su
mérito protegió a los judíos durante su permanencia allí. Ese era el trasfondo interior de por
qué Iaakov exigió no ser enterrado en Egipto mientras que los restos de Iosef permanecieron
en Egipto.
Esto nos explica por qué Iaakov hizo jurar a Iosef "y me llevarás de Egipto". Iaakov sabía, que
por lo que era Iosef (el sostén del pueblo desde adentro, en Egipto) podría desear que
también su padre se quede en Egipto para que su mérito proteja a los judíos. Por eso le hizo
jurar que lo sacaría de Egipto, y por ende no tendría opción sino cumplir con el juramento, sin
dudas ni pensamientos personales.
Hay aquí una enseñanza para cada judío: a pesar de que también en el exilio la Shejiná, la
Presencia Divina, se encuentra con nosotros, sin embargo el judío debe clamar: "y me llevarás
de Egipto"- con fe firme y confianza desde lo profundo del corazón, y en mérito a ello
habremos de ser redimidos con el Mashíaj, pronto en nuestros días.
Notas al Pie
2. Allí 47:30
3. Allí 50:25
4. Berajot 5,b
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Entre las bendiciones con las que Iaakov bendijo a sus hijos, aparece la bendición de Asher1 :
"De Asher -su pan era aceitoso". Rashi explica que la palabra "aceitoso" alude a la
abundancia de aceite que producía la tierra asignada a Asher, y destaca que también Moshé
bendijo a la tribu de Asher de la misma manera, como dice2 : "y sumergía su pie en aceite".
Más allá del significado literal de la bendición, sin lugar a dudas se encuentra en ella un
sentido más elevado y profundo, un sentido espiritual. Encontramos en las palabras de
nuestros Sabios Z"L3 , que el aceite simboliza la sabiduría. Resulta entonces que tanto Iaakov
como Moshé bendijeron a Asher con una gran sabiduría.
Sin embargo, debemos prestar atención al lenguaje utilizado en la bendición: "y sumergirá su
pie en aceite". Aquí vemos que el aceite no tiene su objetivo en sí mismo sino que sirve al pie'
(una expresión similar aparece también en una profecía referida a la época de la redención4 :
"y se posarán sus pies, en aquel día, sobre el Monte de los Olivos"- los pies están por encima
de los olivos que producen aceite)
La Sabiduría no es Todo
Tal como el aceite simboliza a la sabiduría, así también el pie, el miembro más inferior,
simboliza la acción de la Mitzvá a secas, generada sólo por la aceptación del Yugo Celestial,
Kabalat Ol. El pie ejecuta órdenes. 'No posee comprensión ni sentimientos, pero sí obediencia
y la aceptación del Yugo'.
El objetivo es que el aceite 'esté al servicio del pie'. La lógica y la sabiduría, a pesar de su
extraordinaria virtud es inferior a la sencilla aceptación del 'Yugo'. La ejecución práctica de la
mitzvá, por aceptación del 'Yugo' es lo principal, mientras que la sabiduría está tan sólo para
enriquecer a la acción, como el aceite con el que se unta el pie. Ese es el sentido de "y
sumerge su pie en el aceite".
La Comprensión es Limitada
Cabe destacar dos ventajas del servicio a Di-s realizado por aceptación del Yugo', sobre el
servicio a Di-s a partir de la comprensión y el razonamiento:
a) La comprensión humana es limitada, mientras que Hashem es infinito. Por eso es imposible
captar al Creador por medio de la razón sino específicamente por medio de una aceptación
absoluta de Su Yugo y una entrega total a Él. Sólo entonces puede lograrse que la Divinidad
Infinita more sobre uno.
b) La razón es dinámica y puede también desviarse hacia direcciones equívocas. Sólo una
firme aceptación del Yugo' puede asegurar que no haya desvío alguno de la verdad.
En esto consistió la bendición que se dio a Asher: por un lado fue bendecido con abundante
aceite, amplia sabiduría, pero a la par se lo bendijo con que la sabiduría esté al servicio de la
aceptación del Yugo' y la entrega al Altísimo, lo que asegurará que la sabiduría sea verdadera,
que esté direccionada correctamente.
La tribu de Asher era parte del campamento de Dan, el campamento que marchó último en la
travesía del pueblo judío por el desierto- era el "recolector de todos los campamentos" 5 . Sus
miembros encontraban todos los objetos perdidos por los campamentos que marchaban ante
ellos, y los devolvían a sus dueños.
En el sentido espiritual, esto significa que específicamente fue la virtud de la aceptación del
'Yugo' que era la característica prevaleciente del campamento de Dan, la que confirmó la
fuerza para enmendar los errores cometidos por las demás tribus. Incluso cuando alguno de
las otras tribus perdió su rumbo, el campamento de Dan lograba hacerlo volver a la verdad, en
mérito a la absoluta entrega al Yugo de la Voluntad Divina.
"Vida Eterna"
"Vida Eterna"
"Y expiró y se reunió con su pueblo" (Bereshit 49:33)
Adaptado de la Enseñanzas del Rebe de Lubavitch
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Cuando la Torá describe el fallecimiento del
Patriarca Iaakov, utiliza el término hebreo "vaigvá",
que quiere decir expiró, pero no agrega "y murió".
Dice sobre esto el Talmud1 : "Iaakov, nuestro
Patriarca, no murió".
La Verdadera Vida
Es claro que cuando el Talmud declara "nuestro Patriarca Iaakov no murió" no tiene la
intención de negar la realidad visible al ojo. No se trata de una verdad factual sino que la
propia Torá atestigua que Iaakov fue eulogiado, embalsamado y enterrado. Y por supuesto
que la Torá nos dice sólo la verdad. Por ello es que el Talmud pregunta ¿acaso lo eulogiaron,
embalsamaron y enterraron en vano? A ello responde: "analizo la escritura". Es decir, a pesar
de que la propia Torá atestigua que Iaakov fue enterrado, hay un texto que nos enseña en qué
consiste la verdadera realidad de qué es Iaakov y cuál es su verdadera vida. Desde esa
perspectiva "Iaakov nuestro Patriarca no murió"
Verdad Eterna
Y esa es la intención de la respuesta del Talmud: "tal como su descendencia está viva,
también él está vivo". La verdadera vida de Iaakov está vinculada a "su descendencia". A
través de que su progenie continúa con su camino, Iaakov continúa con vida. De esta manera
la vida de Iaakov perdura hasta la eternidad también en este mundo material.
Lo Natural y lo Sobrenatural
Resulta entonces que la vida de Iaakov está paralelamente en dos planos. Por un lado, en el
plano natural- que también él es parte de la verdad Divina- y al respecto dice la Torá que lo
eulogiaron y lo enterraron. Pero a su vez hay una capa más elevada de la realidad, donde
"Iaakov nuestro Patriarca no murió".
Así también en vida de "su descendencia", todo el pueblo judío se desarrolla simultáneamente
en el plano de lo natural y en el de lo sobrenatural. Por un lado, los judíos viven en este
mundo, supeditados a sus limitaciones, pero conjuntamente con esto Di-s asegura que "están
ustedes apegados a Hashem, vuestro Di-s, están todos ustedes con vida hoy" 5 .
Éste es el secreto de la existencia del pueblo judío- un pueblo inserto en un mundo con sus
leyes naturales, pero simultáneamente, su misma existencia es un milagro sobrenatural. Esta
eternidad alcanzará su expresión más cabal cuando revivan los muertos, cuando los iehudim
se harán acreedores de vida eterna, lisa y llanamente.
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Sólo que esto despierta el interrogante: A simple vista, no sólo no hubiera resultado provecho
alguno de avisar cuando llegará el Mashiaj, sino que por el contrario, esta información podría
generar un gran daño. Podemos imaginar incluso, cuál hubiera sido el efecto causado a los
hijos de Israel por la noticia que la redención mesiánica recién llegará después de miles de
años (como vemos que hasta este instante el Mashiaj no ha llegado aún). Tal información
hubiera traído decaimiento y desesperación. ¿Es acaso concebible que Iaakov prefirió
transmitir un dato tan desalentador a sus hijos?
Diferentes Fechas
Para entender este planteo es menester explicar antes, que la redención mesiánica puede
venir de dos maneras: El Talmud (Sanherin 98 a) referente al versículo de Isaías 60:22 dice:
se hicieron merecedores- la apresurará; no se hicieron merecedores- en su momento. Es
decir, es verdad que la llegada del Mashiaj tiene una fecha prefijada desde un principio (en su
momento), e incluso si los judíos no están listos para ello, la redención final llegará en ese
determinado momento; pero si con sus actos se hacen merecedores se cumplirá el "la
apresurará"- el Altísimo la apresurará y la traerá mucho antes de la fecha prefijada.
No fue la intención de Iaakov la de contar a sus hijos la fecha final para la llegada del Mashiaj,
el momento cuando pase lo que pase será la redención. Su intención fue darles otra fecha,
muchísimo más cercana, cuando podía tener lugar la redención si ellos se hacían
merecedores de ello. Es muy posible que la fecha estaba distante a penas un par de años del
fallecimiento de Iaakov, y máximo decenas de años desde entonces.
"Exigir" la Redención
Esta fue la intención de Iaakov, y por ello quiso revelar a sus hijos esa fecha final. Pero el
Altísimo se lo impidió. El servicio a Di-s más perfecto es el que el hombre realiza con sus
propias fuerzas, en el seno de las limitaciones de este mundo. El dato que Iaakov iba a revelar
hubiera afectado ese servicio a Di-s perfecto, pues la motivación ya no sería propia, sino por
un factor externo y por ello se apartó de él la Presencia Divina. Y aunque Iaakov sabía que
sus palabras iban a restar la perfección del servicio Divino, sin embargo él quiso apurar todo lo
posible la salida del exilio. Pero Di-s quería que la redención final sea en el nivel más
completo, por ello apartó de Iaakov Su Presencia. Sin embargo, el deseo de un tzadik, un
piadoso, no es en vano y constituye una enseñanza eterna: el judío debe pedir y exigir a Di-s
que traiga la redención pronto en nuestros días y ese deseo en sí mismo brinde un gran
impulso y motivación en el servicio al Creador. Como vemos en la práctica, cuando se le dice
a un iehudí que "el Mashiaj está llegando" y "queremos Mashiaj ya"- eso mismo lo inspira y
moviliza a que de su parte no haya conducta alguna que detenga, jalila, la llegada de la
Redención.