Micropigmentación y Microblading
Micropigmentación y Microblading
Micropigmentación y Microblading
Vivimos en una sociedad en que, cada vez más, se demandan soluciones para mejorar estéticamente. Unos lo
necesitan para sentirse mejor, otros, simplemente, quieren probar. No obstante, muchas personas son las que dudan
de las alternativas que existen o qué tratamientos están a disposición de cara a lucir mejor. Hoy vamos a hablar de
las dos técnicas con más auge y que más se demandan, actualmente, del mercado. Dos procesos que ofrecen
calidad siempre con diferencias. Éstos son la micropigmentación y el microblading.
¿QUÉ ES LA MICROPIGMENTACIÓN?
La micropigmentación se encarga de implantar pigmentos a nivel epidérmico o superficial para dar color y forma a
distintas partes del cuerpo, siendo las más habituales, tratándose de las mujeres, los ojos, labios, cejas y pecho. En
los últimos años, cada vez se recurre más a la micropigmentación como proceso regenerativo para camuflar
imperfecciones como cicatrices, o bien, para disminuir o mejorar enfermedades que generen la pérdida de
pigmentación en la piel, como puede suceder en el caso del vitíligo o despigmentación de la piel.
La micropigmentación se considera una técnica de maquillaje permanente. A veces asociada al tatuaje, no comparte
las mismas características. El primer paso para realizar un tratamiento de micropigmentación es llevar a cabo la
denominada prueba de la alergia, que consiste en confirmar si el paciente será apto para que se le lleve a cabo un
tratamiento de micropigmentación.
Con el objetivo de definir el diseño al máximo posible de las características físicas del paciente, es primordial
practicar una prueba de visagismo o diseño del rostro. Esto permite que el paciente posea unas expectativas reales
sobre los efectos de la micropigmentación en su caso particular.
Una vez acordado el diseño con el paciente, se procede a la realización del tratamiento de micropigmentación
realizado con una máquina eléctrica (preferiblemente digital, como la mostrada en la posterior imagen, a la venta en
nuestra tienda online: máquina micropigmentación. Durante el mismo, el paciente puede notar sensaciones incómodas,
especialmente si el trabajo es realizado en zonas sensibles, como por ejemplo, los ojos.
Por último, después de haber transcurrido unas semanas post tratamiento de micropigmentación, se debe ofrecer al
paciente a una sesión de revisión o reconocimiento, en donde se pueda evaluar si es necesario realizar un retoque
sobre el trabajo inicial (lo cuál sucede en cerca del 90% de los tratamientos), y en caso afirmativo, se realizará dicho
retoque con el mayor nivel de detalle posible.
Aparte de la existencia de tratamientos de micropigmentación en ojos, cejas y labios, una de las técnicas más
demandadas, a día de hoy, es la denominada micropigmentación capilar.