Practica Chorizo
Practica Chorizo
Practica Chorizo
OBJETIVOS
Fecha pH aw
Miércoles (22/01/2020) 5.23 0.973, T= 24.6 ◦C
Viernes (24/01/2020) 4.91 0.967, T= 24.6 ◦C
Martes (28/01/2020) 5.12 0.834, T= 24.9 ◦C
Viernes (31/01/2020) 5.04 0.783, T= 25.01 ◦C
Rendimiento 50.62%
DISCUSIONES:
El chorizo mexicano es generalmente elaborado con carne y grasa de cerdo y se
comercializa normalmente fresco, en cuanto a que no se madura intencionalmente.
(Gónzales y Col.,2013)
La masa cárnica recién embutida siempre que no se usen acidulantes, tiene un pH
alrededor de 5.8 y una 𝑎𝑤 elevada en torno a 0.96, lo que se traduce en condiciones
bastante idóneas para el crecimiento microbiano. La reducción de la 𝑎𝑤 por desecación
y el descenso del pH por fermentación son responsables de que los chorizos adquieran
su capacidad de conservación a temperatura ambiente, toda vez que las bacterias
responsables de la descomposición son incapaces de multiplicarse con bajos valores de
pH y 𝑎𝑤 . El pH en los embutidos es importante debido a que valores superiores a 6.0
pueden ocasionar el desarrollo de bacterias alterantes del producto durante su secado o
conservación y pH bajos (< 4.5) pueden ser responsables de sabores ácidos y
desagradables al consumidor. (Gonzáles y Col., 2013)
El proceso de desecación permite que el producto pierda humedad, por lo que se
incrementa el contenido en sólidos. Esto último provoca una concentración de las sales
disueltas en la fase acuosa residual, llegando a conseguir la estabilidad del producto por
reducción de la actividad de agua. Además, se producen otras modificaciones químicas,
en su mayor parte de origen microbiano, que son las que hacen que la masa inicial del
embutido se transforme en un producto apetecible (Pérez y Col., 1999).
ACIDIFICACIÓN
En la tabla 1 se muestran los valores de pH en distintas fechas, los cuales estuvieron
comprendidos entre 4.91 y 5.23, los bajos valores de pH se pueden atribuir al aporte de
vinagre, vino blanco y al menos parcialmente a los chiles utilizados en la formulación.
En la elaboración de embutidos interesan las bacterias acido lácticas, cuya temperatura
optima de crecimiento está entre 22 y 25°C, y al mismo tiempo se busca asegurar la
calidad microbiológica del embutido, por este motivo se suele controlar el pH del chorizo.
Un valor final de pH en torno a 5 garantiza el predominio de la microflora láctica sobre
posibles microorganismos patógenos y alterantes. También reduce la capacidad de
retención de agua de las proteínas miofibrilares, por proximidad a su punto isoeléctrico,
favoreciendo la deshidratación (Vidal, 1997).
DESHIDRATACIÓN
La tabla 1 muestra el efecto del secado sobre los índices físico-químicos de maduración
del chorizo. El secado disminuyo en un 49% el peso del embutido. Esta fuerte
deshidratación provoco un fuerte descenso de 𝑎𝑤 cuyo valor paso de 0.973 a 0.783.
Durante el secado se producen transformaciones físicas, químicas y bioquímicas propias
de los embutidos crudo, que básicamente comprenden fenómenos de deshidratación,
acidificación láctica asociada a gelificación de proteínas, nitrosación de la mioglobina,
hidrólisis y oxidación de grasas y proteínas, englobados en el término “maduración”
(Vidal, 1997).
CONCLUSIONES:
Se logro conocer el procesamiento y manejo de productos crudos.
Se realizó la elaboración de chorizo controlando las operaciones de proceso y
siguiendo los parámetros de cada operación.
La característica más importante de un producto para que los consumidores lo
seleccionen en base a la calidad son los atributos de apariencia: contenido de
grasa y color. La aparición de colores extraños no asociados a las
características del producto resultaría en su rechazo.
CUESTIONARIO
1. ¿Qué características tienen las fundas naturales?
Las tripas naturales proceden de los intestinos de los animales de raza ovina,
vacuna, porcina, e incluso, equina. Su uso como envase para embutidos frescos,
curados o cocidos requiere medidas específicas de manipulación y controles de
higiene muy pautados para evitar que se conviertan en vehículo de contaminación
de microbios. Según la Asociación Internacional de Tripas Naturales para
Embutidos (INSCA), la tripa natural tiene numerosas ventajas: excelente
elasticidad, resistencia, no aporta sabores indeseados, mejora y complementa los
jugos naturales y la calidad de la carne, tiene la capacidad de mantenerse tierna,
mejora el sabor y aspecto del producto final, es permeable y es comestible.
Este tipo de tripa tiene además capacidad endotérmica, es decir, mantiene el
embutido a la temperatura más apropiada de conservación, de manera que se
facilita la obtención de un producto de calidad y seguro. El intestino delgado que
se utiliza es de tejido de colágeno, con una característica muy particular:
permeabilidad variable (Ranken, 2003).
Una vez preparada la masa se procede a llenar, «embutir», las tripas con ella.
Para ello se emplean embutidoras provistas con boquillas lisas y no
excesivamente largas que impidan el calentamiento de la masa. Se debe evitar la
presencia de aire, tanto el ya existente en la masa y reducido con el empleo de
mezcladoras al vacío como el que se pudiera producir durante el llenado de las
tripas, por ejemplo, al realizarse ésta con presión insuficiente. El aire da lugar a la
formación de cavidades que pueden provocar en el producto decoloraciones o
aparición de coloraciones anormales, enmohecimiento, etc. También se debe
evitar durante el embutido que la masa entre en contacto con agua o con zonas
húmedas que favorecían también la aparición de coloraciones anormales. Las
tripas, que como se ha señalado pueden ser naturales o artificiales, se deben lavar
antes de su llenado para retirar la sal y evitar que ésta forme una costra en la
superficie del producto. La mayoría de las sustancias empleadas en el lavado son
soluciones acuosas con ácido láctico, con bajo pH, que abre los poros de la tripa
haciéndola más permeable. Esto favorece la desecación del embutido en los
productos curados y la hace más elástica para adaptarse a la superficie del
producto a medida que éste se vaya retrayendo durante la maduración y/o
ahumado (Colmenero, 1989).
3. ¿Por qué el chorizo no se muele en la cutter?
Se quiere hacer una reducción del tamaño de partículas para aumentar la
superficie de contacto para ayudar a que se seque mejor y ocurra una mejor
extracción de proteínas. El tamaño del molido dependerá del tipo de embutido a
elaborar. Cuanto más fina sea la masa de carne resulta más blanda, uniforme y
permite una mejor distribución de los ingredientes, sin embargo, se conserva peor
y se altera antes. Las cuchillas juegan un papel muy importante y tienen que estar
muy afiladas, para no machacar la carne. Las carnes y grasas deberán añadirse
troceados en tiras o tacos y cortados en dirección a las fibras musculares que
facilitarán el picado. El picado de la materia prima se efectúa en picadoras,
compuestas fundamentalmente por una tolva de carga, un tornillo sin fin que
empuja a los productos hacia las cuchillas giratorias que lo cortan y lo envían hacia
un disco perforado con orificios de diversos diámetros. El tamaño de los
fragmentos resultantes del picado va a estar regulado por los diferentes discos
perforados o por el tiempo de picado y la velocidad de las cuchillas en las
trituradoras (Prandl, 1994).