Labranza Cero
Labranza Cero
Labranza Cero
1. Insumos externos necesarios: Marco A para sacar la curva a nivel. En fincas más grandes se utilizan
comúnmente herbicidas para el control de las malezas.
• La práctica viene de sistemas mecanizadas con maquinaria especializada para la siembra directa.
Existen además formas tradicionales de labranza cero utilizando la siembra al espeque o la siembra
tapada. En la medida que se intensifica el uso de la tierra se desarrollan malezas anuales más
agresivas que dificultan este sistema. Por esta razón se utilizan frecuentemente herbicidas quemantes
para limpiar el terreno. Para los herbicidas existe la alternativa de utilizar cultivos de cobertura
(barbecho mejorado), chapearles y sembrar directamente sobre la cobertura.
• Con el aparato A se hacen curvas a nivel.
• La siembra es con maquinarias o herramientas específicas (espeque) en hileras paralelas a las curvas a
nivel.
• El mantenimiento de la labranza cero a mediano plazo depende de un buen manejo integrado del
terreno. Lo más importante es evitar el establecimiento de malezas agresivas y de plagas de suelo.
Esto se puede lograr a través del uso de cultivos de cobertura y a través de una rotación de cultivos.
5. Sistema de finca donde se integra fácilmente: Apropiado en sistemas de producción de granos básicos y
hortalizas. En fincas que tienen además café o ganado se puede enriquecer el abono con pulpa de café o
con estiércol. En fincas donde hay ganado se puede aprovechar el estiércol parar obtener el abono, en
fincas de café se prepara el abono con la pulpa del café.
Condiciones ecológicas requeridas:
1. EN LA ZONA
2.1. Textura del suelo: Se puede utilizar en todo tipo de suelo siempre cuando el suelo no esté
compactado. En suelos muy compactados es mejora hacer por un año una labranza o sembrar cultivos
de cobertura con raíces fuertes y pivotantes que mejoran la estructura del suelo. La siembra con
espeque es difícil en suelos muy arcillosos en estado seco. Al utilizar la siembra tapada, existe el riesgo
que las raíces tienen dificultades en penetrar al suelo arcilloso.
2.2. Profundidad del suelo: Se utiliza en suelos profundos y superficiales.
2.3. Capacidad de infiltración: En suelos de mala infiltración es mejor hacer una labranza y utilizar
prácticas que mejoran la infiltración antes de utilizar la labranza cero. Si no se mejora la capacidad de
infiltración, sobre todo en zonas de alta precipitación, la semilla es arrastrada por el escurrimiento
(escorrentía) del agua.
2.4. Drenaje del agua: En suelos mal drenados se puede agravar el problema por la falta de drenaje
provocando la pudrición de las semillas.
2.5. Presencia de piedras en la parcela: La labranza cero facilita el trabajo en suelos pedregosos.
2.6. Porcentaje de pendiente: La labranza cero reduce la susceptibilidad del suelo a la erosión pero el
efecto sobre el escurrimiento y la conservación de agua es mínima. En pendientes moderadas y fuertes
hay que combinarlo con otras prácticas para la conservación de agua.
2.7. Fertilidad del suelo: No depende de la fertilidad del suelo. En suelos degradados se debe combinar
con prácticas que mejoran la fertilidad. En suelos con deficiencias de N se observa a veces la
inmovilización del N en el suelo, causando una escasez de N en los primeros 15-20 días de crecimiento
del cultivo. Este efecto se observa sobre todo cuando la cobertura es de rastrojo de cereales.
2.8. Acidez del suelo: No depende del pH.
Ventajas: Restricciones:
• Reduce la erosión • Falta de oferta de maquinaria para la siembra
• Mantiene y mejora la estructura del suelo directa en suelos sin labranza dificulta la
• Técnica sencilla de aplicar masificación de esta práctica.
Costo actual de la tecnología:
N.D.
Impacto económico esperado:
La labranza cero reduce significativamente la inversión de tiempo en la preparación del terreno. Sin embargo, la
siembra bajo labranza cero es más demorada. Por esto se utiliza sobre todo donde el arado no puede entrar o
los productores no tienen la posibilidad de obtener el equipo completo ni alquilarlo.
Impacto social (beneficios para las familias campesinas):
Mayores conocimientos en prácticas de conservación de suelos.
Impacto ambiental:
Se puede utilizar en todas las pendientes, pero contribuye por si misma solamente al control de erosión en
pendientes suaves. En la medida que se combina con otras prácticas como la no quema y con cultivos de
cobertura aumenta su contribución hasta en pendientes más fuertes. El suelo en labranza cero es menos
susceptible a la erosión eólica. Mantiene y mejora la estructura del suelo.
Soporte técnico: Guía Técnica de Conservación de Suelos y Agua
Autores/Responsable/Colaboradores:
PASOLAC