Mapas Conceptuales
Mapas Conceptuales
Mapas Conceptuales
Joseph Novak, en la década de los 70 del siglo XX trabajando para el Departamento de Educación de la
Universidad de Cornel, Estado Unidos, preocupado por el aprendizaje de los niños, ideó una forma de
representar esquemáticamente el conocimiento. Dicha forma tomaría el nombre de Mapas Conceptuales,
que permanentemente se confunde con otras formas de representación gráfica del conocimiento como
son los mapas mentales, los cuadros sinópticos y los mapas de ideas, y en casos más delicados con
organigramas, cronogramas o árboles de decisiones, entre otros.
Un Mapa Conceptual es un valioso instrumento que permite la construcción del pensamiento a partir de
la comprensión de significados, donde la persona que los elabora hace un esfuerzo notable por articular
coherentemente sus ideas y así mostrar que ha interiorizado lo que desea aprender.
Realizar un Mapa Conceptual exige jerarquizar las ideas de acuerdo al contexto en el que se presentan y
no se limita a resumir un texto, sino que ejercita procesos mentales de orden superior como la
abstracción, el análisis y la síntesis. Un Mapa Conceptual mucho menos utiliza las definiciones para su
realización, en tanto que estas últimas sólo permiten transcribir un texto y no asimilarlo y volverlo propio,
es decir interiorizarlo.
En este sentido, un Mapa Conceptual tiene algunos elementos obligatorios en su composición que, según
su creador Novak y de la forma más básica, tienen que ser: conceptos, líneas de enlace, palabras de
enlace y proposiciones.
Los conceptos
La Real Academia Española (RAE) nos dice que Concepto es una “Representación mental asociada a un
significante lingüístico”, dicho de otra manera, es una idea que forma el entendimiento o la comprensión
de significados en el ser humano.
Novak y Gowin (1988) afirma que “Un concepto es un evento o un objeto que con regularidad se
denomina con un nombre o etiqueta”. Se deja entrever la diferencia con la Definición, que describe el
concepto.
Para explicar mejor, demos dos ejemplos básicos: los crucigramas y un sistema de notas estudiantiles.
Cuando se quiere llenar un crucigrama, el creador nos da las definiciones (descripciones) y nosotros
escribimos los conceptos. En este primer ejemplo, se puede vislumbrar que además de conocer a qué
hace referencia el autor del crucigrama, el lector necesita abstraer el texto en una sola idea, exigiendo
algo más que el simple resumir.
En el segundo ejemplo, cuando el sistema educativo valoraba a los estudiantes por Excelente,
Sobresaliente, Aceptable, Insuficiente y Deficiente, estos eran los conceptos que sólo se entendían
cuando se leía lo que el profesor escribía en los boletines, para definir lo que el estudiante había
alcanzado.
Lo anterior permite entender por qué cuando se escribe “perro” pueden darse varias interpretaciones,
dependiendo del contexto y de los presaberes de la persona que lo lee; así sucede con muchas palabras,
puesto que son conceptos, es decir ideas o representaciones mentales. He aquí algunas pruebas,
conceptos como “chino”, “equipo”, “caja”, “ordenador”, ”mula”, etc., dan muchas ideas y sólo se concretan
en un contexto determinado.
En un Mapa Conceptual los Conceptos, generalmente, están encerrados en elipses, cuadros o cualquier
otra forma geométrica que los diferencie de sus otras componentes.
Las líneas de enlace son las componentes más simples del Mapa Conceptual. Los conceptos se
jerarquizan, es decir se ordenan del más general al más particular, y no siempre tiene el mismo orden
puesto que depende del contexto donde se los explica o utiliza. Cuando se han jerarquizado los
conceptos, un Mapa Conceptual exige relacionarlos y esto se hace por medio de líneas. Las líneas de
enlace pueden ser horizontales, si dos conceptos tienen el mismo nivel jerárquico, verticales si son de
jerarquía diferente, o diagonales, que son relaciones más difíciles de establecer.
Las líneas de enlace deben mostrar una relación proposicional con un valor de verdad “verdadero” y no
se acepta que se unan conceptos que, aún siendo parte de un mismo ámbito de conocimiento, no se
relacionen directamente o tengan un valor de verdad “falso”. Esto se explica con los dos siguientes
componentes.
Palabras de enlace
Van encima o al lado de las líneas de enlace y normalmente son preposiciones que permiten articular dos
conceptos. Un simple ejemplo: cuando se escribe “Los perros son mamíferos”, se ve con claridad dos
conceptos: “Los Perros” y “mamíferos” unidos por la preposición “son”.
Los Perros
son
Mamíferos
En ocasiones, las palabras de enlace son conceptos irrelevantes o que no están inmersos en lo que la
persona quiere comprender; por ejemplo, la frase “Los perros para su comunicación utilizan los ladridos”,
puede representarse por dos conceptos “Los perros” y “Ladridos” unidos por las palabras de enlace “se
comunican por”.
Los Perros
Se comunican por
Ladridos
No se aceptan palabras relacionantes como “se relaciona con” o “está relacionado con” o cualquier forma
que escriba “relación”, puesto que por obvias razones, todos los conceptos están relacionados y con
estas palabras no se alcanza a apreciar la verdadera comprensión o interiorización del conocimiento
expuesto.
Lo importante en la relación conceptual es que se conforme una proposición con un valor de verdad
“verdadero”, lo cual nos permite definir la última componente básica.
Las Proposiciones
En los Mapas Conceptuales, las proposiciones se conforman por dos conceptos relacionados y deben
tener un valor de verdad “verdadero”. Una relación de conceptos no debe mostrar sólo una idea suelta,
debe indicarse como proposición.
Por ejemplo, retomemos la frase “Los perros para su comunicación utilizan los ladridos”, es incorrecto
diagramar los conceptos “Los perros” y “Comunicación” unidos por las palabras “para su” y luego
“Comunicación” y “Ladridos” unidos por “Utilizan”, porque no conforman proposiciones, de ahí que es
más correcto, como se escribió antes, expresar dos conceptos “Los perros” y “Ladridos” unidos por las
palabras de enlace “se comunican por”.
Los Perros
Se comunican por
Comunicación
Ladridos utilizan
Esto además de ser correcto en cuanto a la conformación de un mapa conceptual, permite evidenciar la
comprensión de lo se quiere decir.
Hoy en día, pese a la cantidad de textos y ejemplos que están disponibles tanto físicamente como en el
ciberespacio frente al tema, aún se sigue confundiendo, y posiblemente subutilizando este valioso
instrumento de aprendizaje, puesto que lo más común es exigirle a un estudiante que haga un Mapa
Conceptual donde resuma lo que entendió y no jerarquice, escriba los conceptos jerarquizados, los
relaciones coherentemente y fabrique las proposiciones a partir de estos enlaces; de hecho, se asume
que un estudiante sabe hacer mapas conceptuales cuando en realidad muy pocos docentes explican
cómo hacerlos.
He aquí un ejemplo de esta problemática y evalúe usted la forma incorrecta y correcta de hacer un Mapa
Conceptual de acuerdo a lo explicado:
La historia
La historia del arte
Del
Permite
Arte
Manifestaciones Se dan
humanas
También en
Lo cultural Lo científico La evolución
histórica
Lo científico
A lo largo de la
evolución histórica
Para profundizar más en este importante tema, recomiendo a Joseph Novak y Bob Gowin con su libro
“Aprendiendo a Aprender” de Ediciones Martínez Roca, S.A., Barcelona, 1988 o cualquiera de sus
escritos que alrededor de 20 años se han venido publicando.
Puede también descargar de internet el documento titulado “La teoría subyacente a los Mapas
Conceptuales y cómo construir y utilizarlos” del Instituto de Cognición Humana y de la máquina, escrito
por Joseph D. Novak y Alberto J. Cañas en el año 2006.
En fin, lo mejor para entender y aprender este valioso instrumento es leer la fuente original: Joseph
Novak.