Que Acerca de Las Fiestas Final

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Preguntas y Respuestas
sobre los Mandamientos, Estatutos,
y Tiempos Determinados
Adrian Ebens y Gary Hullquist

2 ¿Qué de las Fiestas?
¿Que de las fiestas?
Preguntas y respuestas sobre los mandamientos,
estatutos y tiempos determinados.
Adrian Ebens y Gary Hullquist, 2016
Talking Rock Sabbath Chapel

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Gary Hullquist, January 2016
Impreso y distribuido en español por

MARANATHA MEDIA
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Indice
Resumen Abstracto ............................................................................... 5
1. ¿Hoy día hay que guardar los estatutos?........................................... 7
2. ¿Qué está incluido en los estatutos? ............................................... 15
3. ¿Las fiestas contienen principios morales?...................................... 18
4. ¿Hay que guardar los estatutos para ser salvos? ............................. 19
5. ¿Por qué guardamos algunos de los estatutos pero no todos? ........ 20
6. ¿Son los holocaustos parte de las fiestas? ....................................... 21
7. ¿Es un estatuto o una fiesta a Jehová el séptimo día sábado? ......... 22
8. ¿Cuántos sábados hay? .................................................................. 23
9. ¿Cuál es la bendición del sábado? ................................................... 24
10. ¿Por qué guardamos el sábado semanal pero no los otros? .......... 27
11. ¿Hizo Dios que cesaran las fiestas? ............................................... 32
12. ¿Cuántas leyes hay?...................................................................... 34
13. ¿Se abolieron algunas leyes en la cruz? ......................................... 38
14. ¿Son las fiestas sombras o tipos que terminaron con la realidad? . 48
15. ¿Hoy día debieran los cristianos guardar las fiestas? ..................... 52
16. ¿Guardaremos las fiestas en el cielo o en la tierra nueva?............. 57
Apéndice A.......................................................................................... 59

Resumen Abstracto
Guardamos el séptimo día, sábado. Algunos lo llaman el sábado judío mas
fue bendecido y santificado en la creación para todos (Gén. 2:1-3).
¿Debiéramos guardarlo? Si Dios dice que es Su sábado y lo bendijo, yo
también quiero esa bendición y deseo estar en armonía con Dios y con Su
tiempo. Sabemos que se guardará en el cielo puesto que Isaías nos dice
que de mes en mes y de sábado en sábado vendrá todo mortal para
postrarse delante de Jehová (Isaías 66:23).
La primera fiesta dada a Israel fue en la 10ª plaga y coincide con su
liberación de Egipto. Empero el cordero pascual prefiguraba a Cristo, el
cordero de Dios, el sacrificio verdadero; por eso, los ritos y ceremonias
cesaron. Seguimos recordando el sacrificio de Cristo con el símbolo nuevo
de jugo de uva no fermentado y los panes sin levadura, ambos símbolos
de Su vida sin pecado— ¡sin cordero rostizado! Mientras la pascua sólo
ocurría una vez al año, tradicionalmente celebramos la santa cena cuatro
veces al año aunque el sistema de sacrificios tenía sacrificios en la mañana
y en la tarde, ahora se reemplazan —o más bien debiesen ser
reemplazados— con cultos matutinos y vespertinos. ¿Debiéramos guardar
esas citas de mañana y tarde como sagrados tiempos determi-nados? Si no
lo hacemos perdemos bendiciones importantes.
El movimiento adventista nació en el 2300º aniversario del día de la
Expiación cuando Artajerjes, rey de Persia, hizo un decreto el 7º año en su
reinado (eso se encuentra en Esdras 7). Determinar el día de ayuno exacto
en el 7º mes de 1844 fue un factor crítico que se encontró estudiando la
historia y la Biblia. La validez de ese cumplimiento comprueba que las
fiestas tienen por lo menos significado profético. Esa fue la base del
mensaje Pentecostés de Pedro, que la profecía se estaba cumpliendo
cuando citó Joel 2 “al llegar el día de Pentecostés”. Ahora añoramos en la
lluvia tardía un cumplimiento final de la experiencia Pentecostés. ¿Será en
el tiempo anual del Pentecostés? Quizás. Si lo fuese, no me lo quisiera
perder.
Sin embargo de todas las fiestas, Tabernáculos, aparte de Pentecostés, es
la que más atención presto. Es la que todavía no se cumple y la última en
la lista. Por supuesto, tampoco se ha cumplido el día de la Expiación. Cada
año estos días tratan con un aspecto importante que obran el Padre e Hijo
por nuestra salvación; pues sólo Ellos nos salvan porque ni “guardar” el
sábado cada semana “nos salva”.
5
Hay gente demasiada exigente que queda atrapada en los tiempos exactos
y en los detalles minuciosos. Si no nos cuidamos el sábado semanal se
puede volver una carga. Sin embargo, para mí, la bendición más grande
son los congresos campestres dos veces al año —oportunidad perfecta para
reunirnos a estudiar, compartir y animarnos el uno al otro.
El congreso campestre en la primavera se enfoca en el sacrificio del Padre,
la muerte y resurrección de Su Hijo, la santa cena con el pan sin levadura,
el jugo de uva no fermentado y la ordenanza del lavamiento de los pies;
todo símbolo de Su victoria sobre el pecado. La reunión en el otoño
enfatiza la purificación intercesora de Cristo en el Lugar Santí-simo, la
promesa de la lluvia tardía, y Su regreso en la gloria de Su Padre a cosechar
la mies de la tierra. Dos veces al año separados por seis meses es un arreglo
muy bonito.
Gracias en especial a Adrian Ebens, David Barron, y Linda de Allevato
por sus contribuciones valiosas en la actualización de esta edición.
¿Hoy día es necesario guardar las fiestas?

La respuesta depende en cómo se contestan preguntas relacionadas:
1. ¿Hoy día hay que guardar los estatutos?

2. ¿Qué está incluido en los estatutos?
3. ¿Las fiestas contienen principios morales?
4. ¿Hay que guardar los estatutos para ser salvos?
5. ¿Por qué guardamos algunos de los estatutos pero no todos?
6. ¿Son los holocaustos parte de las fiestas?
7. ¿Es un estatuto o una fiesta a Jehová el 7º día sábado?
8. ¿Cuántos sábados hay?
9. ¿Cuál es la bendición del sábado?
10. ¿Por qué guardamos el sábado semanal pero no los otros?
11. ¿Hizo Dios que cesaran las fiestas?
12. ¿Cuántas leyes hay?
13. ¿Se abolieron algunas leyes en la cruz?
14. ¿Son las fiestas sombras o símbolos que terminaron con la realidad?
15. ¿Hoy día debieran los cristianos guardar las fiestas?
16. ¿Guardaremos las fiestas en el cielo o en la tierra nueva?
Ahora, veamos las respuestas a cada una de estas preguntas.

1. ¿Hoy día hay que guardar los estatutos?
Cuando se habla del diezmo o de mayordomía vamos al mismo profeta
que escribió estas palabras que proceden de Jehová:
“Acuérdate de la ley de mi siervo Moisés, a quien encargué en

Horeb leyes y decretos para todo Israel. He aquí yo envío al
profeta Elías antes de que venga el día de Jehová, grande y
temible”. Malaquías 4:4, 5.
Acuérdate del día sábado para santificarlo. Una cosa más para recordar.
Moisés no le mandó a Israel a guardarlo, fue Jehová. Por lo tanto nos
recordamos del sábado cada 7º día como Dios le instruyó a Moisés (no
sólo en Éxodo 20:8-11, sino 16:26; 31:15; 35:2; Levítico 23:3;
Deuteronomio 5:14; y Ezequiel 46:1).
Ahora estamos viviendo ante “el día de Jehová, grande y temible”. Juan el
Bautista era el “Elías que había de venir” Mateo 11:14. Empero ese no fue
“el día de Jehová, grande y temible”. ¿Debiéramos todavía recordar la ley
de Moisés, los estatutos y derechos? Parece que sí.
Palabras de otro profeta sobre el mismo tema:
“Cristo dio a Moisés preceptos religiosos que debían gobernar la

vida cotidiana. Esos estatutos fueron dados explícitamente para
resguardar los Diez Mandamientos. No eran símbolos borrosos
que terminarían con la muerte de Cristo. Debían estar en vigencia
para los seres humanos de todos los siglos mientras durara el
tiempo”. (RH, 6-5-1875 par. 10, véase apéndice A.)
“En estos postreros días hay un llamado del Cielo invitándote a

guardar los estatutos y ordenanzas de Jehová. El mundo desprecia
la ley de Jehová; pero Dios tendrá testigos de Su justicia, en la tierra
un pueblo que proclame Su verdad”. (ST, Feb. 3, 1888)
Si aceptas el testimonio de Elena de White antes de 1898, entonces estas

citas son decisivas que los estatutos no terminan sino que siguen en vigor
mientras perdure el tiempo e incluso en estos postreros días los estatutos y
ordenanzas siguen siendo la ley de Dios. Si no, entonces que sus palabras
12 años después confirmen sus declaraciones anteriores.
7
“Jehová tu Dios te manda hoy que cumplas estos estatutos y
derechos; cuida, pues, de ponerlos por obra con todo tu corazón, y
con toda tu alma”. No es la voz de hombre; es la voz de Cristo
envuelto en la columna de nube. ...Las escrituras presentan la
obligación incesante de todos a quienes Dios ha bendecido con vida,
salud, ventajas temporales y espirituales. El mensaje no se vuelve
débil con el tiempo. Los requisitos de Dios son vigentes ahora, tan
fresco en su importancia, como son los dones de Dios continuo y
fresco”. (RH, Dec. 25, 1900)
“Las instrucciones dadas a Moisés para el antiguo Israel, con sus

trazos, cortantes y rígidos, han de ser estudiadas y obedecidas por
el pueblo de Dios de hoy día”. (Carta 259, 1903, CB, Ex. 19:3)
“El pacto que Dios hizo con su pueblo en el Sinaí ha de ser nuestro
refugio y defensa… ‘si diereis oído a Mi voz, y guardaréis Mi pacto,
vosotros seréis Mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque Mía
es toda la tierra. Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente
santa’… Este pacto tienetanta fuerza hoy día como la tuvo cuando
el Señor lo hizo con el antiguo Israel”. (SW, Mar. 1, 1904, CB, Ex.
19:3-8)
“Sería una escena agradable a Dios y a los ángeles, si los seguidores

profesos de esta generación se unieran, como el Israel de antaño, en
un pacto solemne a guardar y cumplir todos los mandatos de
Jehová nuestro Señor, y Sus decretos y Sus estatutos”. (SW, June
7, 1904)
“Este es el voto que el pueblo de Dios ha de hacer en estos últimos

días. Que Dios los acepte depende de un fiel cumplimiento de los
términos de su convenio con Él. Dios incluye en Su pacto a todos los
que le obedecen”. (RH, June 23, 1904, CB, Ex. 19:7, 8)
De estas citas vemos que los estatutos, preceptos, y ordenanzas son una
obligación incesante y son hoy día una parte importante de la ley de Jehová
y Su verdad. Eso los hace una verdad presente.
El pacto mencionado arriba generalmente se conoce como el “pacto
antiguo”. Los requerimientos no cambian en el pacto nuevo; sólo la base
es diferente—ahora se establece sobre promesas superiores por Dios
Mismo. Nuestro Padre nos da esta promesa “pondré dentro de vosotros Mi
Espíritu, y haré que andéis en Mis mandamientos, y guardéis Mis
decretos y los pongáis por obra”. Ezequiel 36:27.
La siguiente pregunta es: ¿las “fiestas del Señor,” las asambleas anuales
están incluidas en los estatutos? La siguiente declaración indica que sí:
“Si los hijos de Israel necesitaban el beneficio de aquellas santas
convocaciones en su tiempo, ¡cuánto mas lo necesitamos
nosotros en estos últimos días de peligro y conflicto! Si los
habitantes del mundo necesitaban entonces la luz que Dios le
había confiado a su iglesia, ¡cuánto más la necesitan ahora!” (6TI,
4:47.4)
Jesús contó una parábola de una fiesta, un banquete, que se le ofreció a
muchos mas fue ignorada por varias razones interesantes.
Lucas 14:13Pero cuando hagas banquete, llama a los pobres, a los

mancos, a los cojos y a los ciegos. 16Un hombre hizo un gran
banquete e invitó a muchos. 17A la hora del banquete envió a su
siervo para decir a los invitados: “Venid, porque ya está
preparado”. 18Pero todos a una comenzaron a disculparse. El
primero dijo: “He comprado un campo y necesito salir para verlo;
te ruego que me disculpes”. 19El otro dijo: “He comprado cinco
yuntas de bueyes y voy a probarlos. Te ruego que me disculpes”.
20
El otro dijo: “Acabo de casarme y por tanto no puedo ir”.
Muy ocupado con mi trabajo, estoy casado con mujer, o con iglesia cuyo
credo me lo impide. Elena de White comentando sobre esta parábola:
Testimonios tomo 2, p. 507

“Dios mandó a los israelitas que se reunieran ante Él en periodos
determinados, en el lugar que Él eligiera, y que observaran días
especiales en los que no debían hacer ningún trabajo innecesario,
sino dedicar el tiempo a considerar las bendiciones que Él les había
prodigado. En estas ocasiones especiales debían traer presentes,
ofrendas voluntarias, y ofrendas de gratitud al Señor, de acuerdo con la
bendición que Él les hubiera dado”.
... “Además de estas festividades religiosas especiales, de alegría y

regocijo, la nación judía debía conmemorar anualmente la Pascua.
El Señor pactó que, si eran fieles en la observancia de Sus
9
requerimientos, Él bendeciría todas sus ganancias y toda la obra de sus
manos. Dios no quiere menos de su pueblo en estos últimos días,
en sacrificios y ofrendas, que lo que requirió de la nación judía”.
(2TI, 71:507)
“Hay hombres ricos que permanecen en casa año tras año, absortos en
sus preocupaciones e intereses mundanos, pensando que no pueden
hacer el pequeño sacrificio de asistir a las reuniones anuales para
adorar a Dios. Él los ha bendecido con bienes materiales y los ha
rodeado de abundantes beneficios; sin embargo retienen las pequeñas
ofrendas que Él requiere”. (2TI, 71:508)
“Que todos los que puedan asistan a estas reuniones anuales. Todos
debieran sentir que Dios requiere esto de ellos”. (2TI, 71:509)
Disculparnos de la invitación de Dios a congregarnos en Sus tiempos
determinados aconteció aun en los días de Pablo.
Hebreos 10 “24Considerémonos los unos a los otros para
estimularnos al amor y a las buenas obras. 25No dejemos de
congregarnos, como algunos tienen por costumbre; más bien,
exhortémonos, y con mayor razón cuando veis que el día se
acerca”.
Treinta años después de la cruz algunos dejaron de congregarse en los
tiempos determinados. Estas reuniones eran oportunas para ¡estimular al
amor, a las buenas obras, y al sacrificio de alabanza!
Hebreos 13 “15Así que, por medio de Él, ofrezcamos siempre a

Dios sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que
confiesan Su nombre. 16No os olvidéis de hacer el bien y de
compartir lo que tenéis, porque tales sacrificios agradan a Dios”.
1 Crónicas 23 “30Ejercen su servicio cada amanecer, y asimismo

al atardecer, para dar gracias y alabar a Jehová, 31y para
ofrecer todos los holocaustos a Jehová los sábados, las lunas
nuevas y las demás festividades, continuamente delante de
Jehová, en el número necesario y de acuerdo con lo que ha sido
establecido para ellos”.
Culto en la mañana y en la tarde es el tiempo para venir ante nuestro Padre
en alabanza y gratitud por “Su misericordia y por Sus maravillas para con
los hijos del hombre” Salmos 107:8.

La Maravillosa Gracia de Dios, 9 de marzo
“Dios enseña que debemos congregarnos en su casa para cultivar los
atributos del amor perfecto. Esto preparará a los moradores de la tierra
para las mansiones que Cristo ha ido a preparar para todos los que le
aman. Allí se congregarán en el santuario de sábado en sábado, de
luna nueva en luna nueva, para unir sus voces en los más sublimes
acentos de alabanza y gratitud a Aquel que está sentado en el trono y
al Cordero para siempre jamás”. (MGD, 68:76.4)
Se le instruyó a Moisés a congregar al pueblo en tiempos determinados.
Números 10 “2Hazte dos trompetas de plata; las harás modeladas

a martillo. Y te servirán para convocar a la congregación y para
poner en marcha los campamentos. 3Cuando se toque con ambas,
se reunirá ante ti toda la congregación a la entrada del
tabernáculo de reunión. 10En el día de vuestro regocijo, es decir,
en vuestras solemnidades y en vuestros días primeros de mes,
tocareis las trompetas en relación con vuestros holocaustos y con
vuestros sacrificios de paz. Y os servirán de memorial en la
presencia de vuestro Dios. Yo, Jehová, vuestro Dios”.
La Pascua era día solemne; Pentecostés era día de regocijo.

Expiación era día solemne; Tabernáculos era día de regocijo.
Tiempos específicos: al comienzo y final de vuestro día, al comienzo de

vuestros meses, al comienzo de vuestro año, al final de vuestro año—estos
eran tiempos determinados para tener culto y comunión con Dios.
“Descuídese el ejercicio de la oración, u órese irregularmente, de vez

en cuando, según parezca propio, y se perderá la fortaleza en Dios”.
(Obreros Evangélicos, 55:268.1)
No se trata de tiempos según parezca propio o conveniente, sino de tener

culto regular en la mañana y en la tarde, culto semanal, culto mensual,
culto anual; orar, agradecer y alabar así mantendremos nuestra fortaleza
en Dios.
Deuteronomio 28 “1Y sucederá que si escuchas diligentemente la

voz de Jehová tu Dios, procurando poner por obra todos Sus
11
mandamientos que yo te mando hoy, también Jehová tu Dios te
enaltecerá sobre todas las naciones de la tierra.
2
Cuando obedezcas la voz de Jehová tu Dios, vendrán sobre ti
todas estas bendiciones, y te alcanzarán:
3
Bendito serás en la ciudad, y bendito en el campo.
4
Benditos serán el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra y el
fruto de tu ganado, la cría de tus vacas y el incremento de tus
ovejas.
5
Benditas serán tu canasta y tu artesa de amasar.
11
Jehová hará que sobreabundes en bienes, en el fruto de tu
vientre, en el fruto de tus animales y en el fruto de tu campo, en
la tierra que Jehová juró a tus padres que te daría.
12
Él te abrirá su buen tesoro, los cielos, para dar lluvia a tu tierra
en su tiempo y para bendecir toda la obra de tus manos. Tú darás
prestado a muchas naciones, pero tú no pedirás prestado”.
Las tres áreas que se disculparon por no aceptar la invitación a la fiesta, la

gran cena, son lo que Dios nos bendecirá si venimos.
Zacarías 14 “16Todos los que queden de los pueblos que hayan

subido contra Jerusalén subirán de año en año para adorar al
Rey, Jehová de los Ejércitos, y para celebrar la fiesta de los
Tabernáculos. 17Acontecerá que sobre aquellas familias de la
tierra que no suban a Jerusalén para adorar al Rey Jehová de los
Ejércitos, no vendrá la lluvia. 18Y si la familia de Egipto no sube
ni acude, vendrá sobre ellos la plaga con que Jehová golpeará a
los pueblos que no suban a celebrar la fiesta de los
Tabernáculos. 19Tal será el castigo de Egipto y el castigo de todos
los pueblos que no suban a celebrar la fiesta de los
Tabernáculos”.
Mientras la fiesta de Tabernáculos es la ocasión a reunir de “año en año”

para adorar a Jehová y es la promesa de lluvia para los que lo hagan, este
pasaje de Zacarías es confuso en cuanto a cuándo exactamente acontece.
Este capítulo empieza con un ataque a Jerusalén, Cristo desciende al monte
de Olivas; la pudrición de las lenguas, ojos, la carne de los impíos sugiere
que la escena es después del milenio. Empero la descripción del
castigo a los que no acuden a la fiesta no se aplica al contexto post-milenio
donde sólo los santos reinan en armonía universal con el Cordero de Dios.
Levítico 26 “2Guardarás Mis sábados y tendrás en reverencia Mi
santuario. Yo, Jehová. 3Si andas según Mis estatutos y guardas
Mis mandamientos, poniéndolos por obra, 4les mandaré la
lluvia a su tiempo. La tierra dará sus productos, y el árbol del
campo dará su fruto”.
“14
Pero si no me escuchas y no pones por obra todos estos
mandamientos, 15y si rechazas Mis estatutos y vuestra alma
menosprecia Mis decretos, no poniendo por obra todos Mis
mandamientos e invalidando Mi pacto, 16entonces Yo también
haré con vosotros esto: Decretaré contra vosotros terror, tisis y
fiebre que consuman los ojos y dejen exhausta el alma”.
“34
Entonces la tierra disfrutará de su reposo durante todos los
días de su desolación, mientras estés en la tierra de vuestros
enemigos. ¡Entonces la tierra descansará y disfrutará de su
reposo! 35Todo el tiempo que esté asolada disfrutará del reposo
que no disfrutó mientras vosotros disfrutabas de vuestro reposo
cuando habitabas en ella”.
Mandamientos y Estatutos [leyes]
Noten la relación definida entre los estatutos [leyes] y los mandamientos.

Los mandamientos fueron hablados por Jehová desde el monte de Sinaí y
luego los estatutos fueron dados a Moisés para enseñar e instruir. Los
derechos y las ordenanzas también se mencionan con estos dos, pero a
menudo se mencionan juntos sólo los mandamientos y los estatutos.
“si prestas atención a Sus mandamientos y guardas todas Sus leyes”

Éxodo 15:26.
“anda según Mis estatutos y guarda Mis mandamientos” Levítico 26:3.
“guarda Sus leyes y Sus mandamientos” Deut. 4:40.
“guardando todos los días de tu vida todas Sus leyes y Sus
mandamientos” Deuteronomio 6:2.
“guardes los mandamientos de Jehová y Sus estatutos” Deut. 10:13.
“cumplirás Sus mandamientos y Sus leyes [estatutos]” Deut. 27:10.
“procura poner por obra todos Sus mandamiento y Sus leyes”
Deuteronomio 28:15.
“a fin de guardar los mandamientos y los estatutos” Deut. 28:45.
“guardar Sus mandamientos y Sus estatutos” Deuteronomio 30:10.
“guardando Mis leyes y Mis mandamientos” 1 Reyes 3:14.
“andar en Sus leyes y guardar Sus mandamientos” 1 Reyes 8:61.
“guarda Mis mandamientos y Mis estatutos” 1 Reyes 9:6.
“guardó Mis mandamientos y Mis estatutos” 1 Reyes 11:34.
13
“guardando Mis estatutos y Mis mandamientos” 1 Reyes 11:38.
“guardad Mis mandamientos y Mis estatutos” 2 Reyes 17:13.
“Mis estatutos y Mis mandamientos” 2 Crónicas 7:19.
“de los mandamientos de Jehová y en Sus estatutos” Esdras 7:11.
“si profanan Mis estatutos y no guardan Mis mandamientos”
Salmo 89:31.
“Tus mandamientos, los cuales he amado, y meditaré en Tus leyes”
Salmo 119:48.
Los mandamientos escritos en piedra fueron puestos en el arca del pacto.

No eran accesibles al pueblo, ni siquiera a los sacerdotes, sólo al sumo
sacerdote se le permitía entrar al Lugar Santísimo donde dentro del arca
estaban los mandamientos y el propiciatorio sobre el arca. Así los
mandamientos estaban invisibles al pueblo. Empero los estatutos y los
derechos fueron escritos en el libro de la ley y colocado a un lado del arca.
Una copia le fue entregada al sacerdote para instruir al pueblo y cada siete
años en la fiesta de los Tabernáculos se leía a oídos de todos.
Deuteronomio 31:10, 11.
Los mandamientos fueron primero invisibles; después se dieron los

estatutos y fueron una copia o imagen visible de los mandamientos.
Los estatutos explican y magnifican los mandamientos.
Esta relación entre los mandamientos y los estatutos se refleja en la

relación Fuente–Autor entre otros tipos de Padre–Hijo. “Toda buena
dádiva y todo don perfecto proviene de lo alto y desciende del Padre de
las luces” (Santiago 1:17), “invisible y único Dios sabio” (1 Tim. 1:17),
“a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver” (1 Tim. 6:16), “Su
Hijo amado… Él es la imagen del Dios invisible” (Col. 1:13, 15),
“la expresión exacta de Su naturaleza” (Hebreos 1:3).
Fuente Invisible Manifestación Visible

Dios, el Padre Jesucristo, el Hijo
Mandamientos Estatutos
lumbrera mayor (sol) (Gen. 1:14) lumbrera menor (luna)
invisible en la noche visible
Tal como “para que todos honren al Hijo como honran al Padre” (Juan
5:23), nosotros también debiéramos honrar los estatutos como honramos
los diez mandamientos.

2. ¿Qué está incluido en los estatutos?
“Esos estatutos fueron dados explícitamente para resguardar los
Diez Mandamientos... Esos mandamientos recibían su fuerza del
poder de la ley moral, y clara y definidamente explicaban esa ley”.
(RH, 6-5-1875 par. 10, véase apéndice A.)
Los estatutos resguardan los diez mandamientos, expresan los principios

de la ley del reino de Dios, reciben su fuerza del poder de la ley moral,
clara y definidamente explican esa ley y declaran sencillamente la
bendición en obedecer. Son instrucciones que Dios ha dado a Su pueblo.
Ahora la referencia completa de Elena de White 1900, sin elipsis:
“‘Jehová tu Dios te manda hoy que cumplas estos estatutos y

derechos; cuida, pues, de ponerlos por obra con todo tu corazón, y con
toda tu alma. A Jehová has proclamado hoy para que te sea por Dios, y
para andar en Sus caminos, y para guardar Sus estatutos y Sus
mandamientos y Sus derechos, y para oír Su voz’.
“No es la voz de hombre; es la voz de Cristo envuelto en la columna
de nube. Leer detenidamente todo el capítulo 26 de Deuteronomio,
también los capítulos 27 y 28; aquí se declaran claramente las
bendiciones de obedecer. Estas instrucciones, que Jehová dio a Su
pueblo, expresan los principios de la ley del reino de Dios, y son
específicas, para que no quede el pueblo en duda ni en ignorancia.
Estas escrituras presentan la obligación incesante de todos a
quienes Dios ha bendecido con vida, salud, ventajas temporales y
espirituales. El mensaje no se vuelve débil con el tiempo. Los requisitos
de Dios son vigentes ahora, tan fresco en su importancia, como son
los dones de Dios continuo y fresco”. (RH, Dec. 25, 1900)
Los estatutos, entonces, son súbditos a los diez mandamientos pero reciben
autoridad y poder de la ley moral. Los estatutos representan, explican, y
magnifican los diez preceptos. La relación entre los estatutos y la Ley de
Dios es paralela entre el Hijo de Dios y Su Padre, el Anciano de días —
“es Él, Autor de todo ser y de toda ley.” (El Conflicto de los Siglos, 29:471)
Entonces, ¿qué hay en esos tres capítulos que Elena de White recomienda
que leamos detenidamente?
Deuteronomio 26 instruye al pueblo a
15
1. Ofrecer a Jehová las primicias, adorarlo, recordar como Dios dirigió
a Jacob de la tierra de Egipto a Canaán. Regocijarnos en todo lo bueno
que Jehová nos da.
2. El diezmo del tercer año es para los sacerdotes, extranjeros,
huérfanos y las viudas.
Deuteronomio 27 los instruye a
1. Levantar piedras grandes revolcadas con cal en el monte de Ebal y
escribir en ellas todas las palabras de la ley.
2. No hacer imagen de fundición o escultura.
3. No deshonrar a tu padre o a tu madre (suena como los 10
mandamientos).
4. No reducir el término de tu prójimo.
5. No hacer errar al ciego en el camino.
6. No torcer el derecho del extranjero, el huérfano, o la viuda.
7. No acostarse con la esposa de tu padre.
8. No ayuntarse con cualquier bestia.
9. No acostarse con tu hermana, tía, o suegra.
10. No herir a tu prójimo ocultamente.
11. No recibir cohecho para quitar la vida al inocente (ningún sicario).
Deuteronomio 28 lista todas las bendiciones por guardar los estatutos y

todas las maldiciones por ignorarlas.
Mas estos no son los únicos estatutos.
Empezando con el capítulo 12 hay otra lista en Deuteronomio:
1. Destruir todo ídolo y dioses paganos de la tierra cuando entres.
2. No comer la sangre.
3. No comer el diezmo de tu cosecha en casa sino con tu familia y con
el ministro cuando él lo sirva.
Deuteronomio 13 continúa:
1. Apedrear cualquier profeta o pariente que te insta a servir a dioses
ajenos.
2. Destruir por completo cualquier ciudad que te insta a servir a dioses
ajenos.
Deuteronomio 14 tiene más estatutos:

1. No te cortarás ni te rasurarás la cabeza cuando en luto por un
muerto.

2. No comerás nada abominable como el camello, conejo, puerco,
águila, buitre, halcón, cuervo, búho, pelicano, cigüeña, ni ningún
insecto alado.
Deuteronomio 15 también:
1. Cada siete años harás remisión de siervos y deudores.
2. Se generoso con el pobre y préstale lo que necesite.
3. No te sirvas ni trasquiles del primerizo de tus vacas u ovejas.
Deuteronomio 16 sigue con más:
1. Observa el primer mes y guarda la Pascua.
2. Come pan sin levadura siete días y el séptimo es día solemne no
harás ninguna obra en él.
3. Cuenta siete semanas y da a Jehová según te hubiese bendecido.
4. Regocíjate delante de Jehová con tu familia, extranjero, ministro,
huérfano y viuda.
5. Observa la fiesta de los tabernáculos (cabañas) siete días después de
la siega de tu era y de tu lagar.
6. Tres veces cada año se presentará todo varón delante de Jehová:
a. fiesta de los panes sin levadura
b. fiesta de las semanas
c. fiesta de los tabernáculos
7. Los jueces no pueden recibir soborno.
8. No plantes árbol de huerto cerca del altar ni levantes estatuas.
Deuteronomio 17:
1. No sacrifiques animales defectuosas o con manchas.
2. Apedrearás a muerte a cualquiera que hubiere servido a dioses
ajenos: ya sea al sol, o a la luna, o a todo el ejército del cielo.
3. Acepta el veredicto del juez. Apedrearás los soberbios que rehúsan la
sentencia del juez.
4. Pon rey sobre ti de entre tus hermanos y no a un extranjero.
5. El rey ha de leer todas las palabras de esta ley y los pondrá por obra
todos los días de su vida.
Deuteronomio 18:
1. Mantén a los sacerdotes con las ofrendas y primicias.
2. No hagas pasar a tus hijos por el fuego, ni practiques adivinación, ni
agorero.
3. No permitas sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni
espiritista, ni quien consulte a los muertos en la tierra.
17
No debiéramos tener ningún problema con ninguna de estas
estipulaciones. Las dos excepciones flagrantes son apedrear y sacrificar
animales. Fíjense en el capítulo 16 los detalles extensos para reunirse
como pueblo tres veces cada año para adorar y alabar a Dios. Las fiestas
son una gran parte de los estatutos. Sin embargo, no se deben considerar
como “observando los tiempos” que está prohibido en el capítulo 18.
3. ¿Las fiestas contienen principios morales?

“Nuevamente se le recordó al pueblo su sagrada obligación de
observar el sábado. Se designaron fiestas anuales, en las cuales todos
los hombre de la nación debían congregarse ante el Señor, y llevarle
sus ofrendas de gratitud, y las primicias de la abundancia que Él les
diera. El objeto de todos estos reglamentos fue declarado: no servirían
meramente para ejercer una soberanía arbitraria, sino para el bien
de Israel. El Señor dijo: ‘Me seréis hombres santos’, dignos de ser
reconocidos por un Dios santo”. (Historia de los Patriarcas y Profetas,
27:283.5)
El sábado es una ley moral. Las fiestas anuales fueron determinadas para
recordarnos de las obligaciones sagradas del sábado. Las fiestas anuales
son un recuerdo del principio moral del sábado. Las fiestas anuales
proveen la expresión de gratitud y agradecimiento por la bondad de Dios.
Estos son principios morales. Las fiestas anuales no son para ejercer una
soberanía arbitraria, o sea Dios no decidió que se hiciera meramente
porque así lo deseó. Estas fiestas eran para el bien de ellos. Bien es un
principio moral.
Los sábados anuales tienen un apoyo moral en el rol del sábado semanal
como las carnes limpias lo tienen en su relación con las carnes inmundas.
No comer puerco, langosta, camarón es absolutamente innegociable. No
comer pollo o pescado es opcional, aunque no lo fue para Adán.
Reunir a todo Israel para alabar creó una oportunidad mayor para
compañerismo y alabanza. De esa manera los sábados anuales amplían y
magnifican los principios de los sábados semanales. Sugerir que el sábado
anual es sólo ceremonial pone una sombra en el mismísimo sábado
semanal, y rebaja el significado del sábado. Sin embargo, para que las
fiestas anuales sean un recuerdo de la obligación sagrada del sábado tiene

que incluir una expansión de ese mismo principio moral, si no fuese así no
sería un recordatorio del sábado en espíritu y en verdad.
4. ¿Hay que guardar los estatutos para ser

salvos?
Hagamos otra pregunta.
¿Hay que guardar los diez mandamientos para ser salvos?
“Por tanto, por las obras de la ley ninguna carne será justificada
delante de Él; pues por la ley es el conocimiento del pecado”.
Romanos 3:20.
Guardar los 10 Mandamientos como medio para obtener la salvación
nunca justificará a nadie. La salvación se obtiene solamente por el
sacrificio de Cristo. Sin embargo una vez que tenemos esa salvación por
la fe en Cristo, Dios cumple Su promesa y escribe Su ley en nuestro
corazón.
“Porque éste es el pacto que haré con la casa de Israel, después

de aquellos días, dice el Señor: Pondré Mis leyes en sus mentes, y
sobre sus corazones las escribiré; y seré a ellos por Dios, y ellos
me serán a Mí por pueblo”. Hebreos 8:10.
Es lo mismo con los estatutos como con los diez mandamientos, ninguno
de los dos nos trae salvación; sin embargo, si somos salvos ambos se
revelarán en nuestras vidas porque los principios de la ley estarán escritos
en nuestro corazón. Ese principio se revela claramente en la siguiente
declaración:
“En Su gran misericordia el Señor envió un preciosísimo mensaje a Su
pueblo por medio de los pastores [E.J.] Waggoner y [A.T.] Jones. Este
mensaje tenía que presentar en forma más destacada ante el mundo al
sublime Salvador, el sacrificio por los pecados del mundo entero.
Presenta la justificación por la fe en el Garante; invitaba a la gente a
recibir la justicia de Cristo que se manifiesta en la obediencia a todos
los mandamientos de Dios”. (Eventos de los Últimos Días -El Fuerte
Clamor, 171.4)
La justificación por la fe nos lleva a obedecer todos los mandamientos de
Dios y Sus mandamientos no son gravosos.
19
1 Juan 5:3 “Porque este es el amor de Dios, que guardemos Sus
mandamientos; y Sus mandamientos no son gravosos”.
5. ¿Por qué guardamos algunos de los estatutos

pero no todos?
Los estatutos son una mezcla de algunas reglas razonables y otras
totalmente imprácticas—especialmente las que promueven matar a
pedradas. Sin embargo, si aceptamos el diezmar y diferenciamos entre
alimento limpio e inmundo, ¿qué haremos con las reglas en cuanto a reyes,
animales con manchas, y primerizos de ovejas?
Algunos alegan que no es cosa de escoger y elegir los estatutos que

observamos—dicen, o es todo o nada. Pero hay por lo menos este principio
que podemos seguir: los que tratan con holocaustos ya no se aplican. La
ofrenda vegetal y la libación, sacrificio por el pecado y sacrificio por la
culpa, ofrenda de gratitud, rito de purificación con una vaca roja sin
defecto, rito de purificación de lepra—todo lo que tenga que ver con
sacrificio de sangre o fuego— se puede descartar. Hoy día los únicos
sacrificios que hay que hacer son sacrificios vivos de nuestro cuerpo y los
sacrificios de alabanza. Romanos 12:2; Jeremías 33:11.
La epístola a los hebreos hace una alusión bíblica a los sacrificios de

alabanza asociado con los tiempos señalados diario, semanal, mensual y
anual descrito en 1 Crónicas:
“Así que, por medio de Él ofrezcamos siempre a Dios sacrificio
de alabanza, es decir, el fruto de nuestros labios dando gracias a
Su nombre”. Hebreos 13:15.
“Y para asistir cada mañana a dar gracias y alabar a Jehová, y
asimismo a la tarde; y para ofrecer todos los holocaustos a Jehová
los sábados, lunas nuevas y fiestas solemnes, por número,
conforme se les había ordenado, continuamente delante de
Jehová”. 1 Crónicas 23:30, 31.
El holocausto de animales inocentes cesó con la muerte del Cordero de

Dios. Mas seguimos ofreciendo el sacrificio de alabanza porque antes y
después de la cruz eso se ofrecía “continuamente”.

También está el problema de aplicar hoy en día algunos de los derechos.
No apedreamos a los que recogen leña el sábado, adoran a dioses ajenos,
o cometen adulterio porque tampoco vivimos bajo el gobierno directo de
Dios en una teocracia. Estamos sujetos a la ley de la tierra.
6. ¿Son los holocaustos parte de las fiestas?

El sistema de holocaustos incluía todas las provisiones detalladas en
cuánto al animal que se requería para las diferentes ofrendas. Un cordero
de un año era el sacrificio por el pecado; un becerro era el sacrificio por la
culpa de pecado, un par de tórtolas si uno era pobre, etc. Había instruc-
ciones específicas en cuanto a cómo preparar el holocausto, cómo
arreglarlo en el altar, qué hacer con la sangre, qué hacer con las cenizas,
qué se podía comer, si era ofrenda vegetal o libación, etc. Casi todo era
con holocausto—todo.
Todas las fiestas de Jehová tenían ciertos sacrificios asociados con ello.
Sábado: 2 corderos con ofrenda vegetal y libación, además
sacrificios por la mañana y por la tarde
Pascual: 2 becerros, 1 carnero, 7 corderos, 1 cabrito, y

Cordero Pascual
Panes sin levadura: 2 becerros, 1 carnero, 7 corderos, 1 cabrito,

además sacrificio por la mañana por 7 días
Pentecostés: 2 becerros, 1 carnero, 7 corderos, 1 cabrito,

además sacrificio por la mañana
Trompetas: 1 becerro, 1 carnero, 7 corderos, 1 cabrito,

además sacrificio por la mañana y cada mes
Expiación: 1 becerro, 1 carnero, 7 corderos, 1 cabrito y 2

más
Tabernáculos: 13 becerros, 2 carneros, 14 corderos, 1 cabrito,

además sacrificio por la mañana por 7 días con un
becerro menos cada día sucesivamente
Todas las fiestas tenían holocaustos, incluso el 7º día sábado semanal.
21
7. ¿Es un estatuto o una fiesta a Jehová el
séptimo día sábado?
La primera fiesta mencionada en ambos Levítico 23 y Números 28 es la
fiesta del sábado semanal:
“Habla a los hijos de Israel, y diles: Las fiestas solemnes de
Jehová, las cuales proclamaréis santas convocaciones, estas son
mis fiestas. Seis días se trabajará, y el séptimo día sábado de
reposo será, convocación santa: ninguna obra haréis; sábado es
de Jehová en dondequiera que habitéis. Estas son las fiestas
solemnes de Jehová, las convocaciones santas, a las cuales
convocaréis en sus tiempos”. Levítico 23:2-4.
“Mas el día del sábado dos corderos de un año sin defecto, y dos
décimas de flor de harina amasada con aceite, por presente
[ofrenda], con su libación: Es el holocausto del sábado en cada
sábado además del holocausto continuo y su libación”.Números
28:9, 10.
Cuatro holocaustos y dos ofrendas adicionales se hacían cada sábado. Y
aunque los holocaustos terminaron en la cruz eso no afectó el sábado
porque es ambo conmemorativo y simbólico. El sábado de la creación es
el fundamento de un sistema completo, la cascada de sábados, todos tienen
el sábado semanal como fuente o autor. Los sábados de la 7ª semana, 7º
mes, 7º año derivan y tienen su origen en el 7º día sábado semanal. Es una
fuente de bendición que traen tiempos de refrigerio espiritual.
Frequencia de Evento Series de seis, Referencia

tiempo siete y reposo
Séptima hora Sacrificio 6 horas entre el Marcos 15:25,
diario sacrificio 34; Hechos 3:1;
matutino y Salmos 141:2;
vespertino. Números 28:8
Hubo 6 horas
en las cuales
Cristo obró, y
luego reposó
Séptimo día Día de reposo o 6 días de Exodo 20:8-10
Sábado trabajo y luego
reposo

Siete días Panes sin 7 días sin Levítico 23:6
levadura levadura
Siete semanas Pentecostés Cuenta siete Levítico 23:15
más 1 día semanas para
Pentecostés,
luego reposo
Séptimo mes, Trompetas, Cuenta 6
Levítico 23:24-
cuenta 7 lunas. expiación y meses, luego 3
39; Isaías
tabernáculos (7 fiestas en el 66:23; 2 Reyes
días más 1 día) séptimo mes 4:23; Ezequiel
46:1
Séptimo año Reposo o Cuenta 6 años y Levítico 25:3
Sábado de la luego el
tierra séptimo de
reposo
Siete años por Jubileo Cuenta siete Levítico 25:8-
siete años más años por siete 10
un año años y luego
reposo
Séptimo por Milenio Cuenta seis Apocalipsis
mil años veces 1000 20:6
años y luego
reposo
8. ¿Cuántos sábados hay?

Al final de los seis días de labor es el 7º día sábado de Jehová.
El 15º día del 1er mes es el 1er sábado anual de los Panes Sin Levadura.
Después de 7 días hay un 2o sábado anual de los Panes Sin Levadura.
Al final de 7 semanas cada año es el sábado anual de Pentecostés.
El 1er día del 7º mes es el sábado anual de Trompetas.
El 10º día de ese mes es el sábado anual del día de la Expiación.
El 15º día de ese mes es el 1er sábado anual de Tabernáculos.
Después de ocho días hay un 2o sábado anual de Tabernáculos.
Al final de sembrar seis años la tierra tiene un sábado de reposo.
Después de 7 sábados anuales para la tierra, ésta guarda otro sábado.
Ese es el jubileo y ocurre en el 50º año o sea la tierra reposa dos años
consecutivos, son sábados para la tierra.
Al final de seis mil años de pecado la tierra guardará un 7º milenio,
23
mil años de sábado de reposo para el mundo entero.
¡Son muchos sábados!
Cada 7 años y cada 50º año la tierra guardaba sábado de reposo en la cual
no se sembraba, los agricultores tomaban vacaciones y la tierra
descansaba. Ese era sacrificio no de ganado, sino de trabajo mientras
confiaban en la promesa de Jehová de obrar un milagro el sexto año, tal
como lo hizo el sexto día cuando caía una doble porción de maná en el
desierto. Y el sexto año del 7º sábado de tierra una bendición triple para
sostenerlos en el año 49, y en el jubileo del año 50 también. ¿Debiéramos
dejar que la tierra descanse cada siete años y en el año de jubileo? Los
agricultores orgánicos modernos reconocen la sabiduría en dejar que
repose la tierra y que rejuvenezca el delicado ecosistema.
9. ¿Cuál es la bendición del sábado?

“Y acabó Dios en el día séptimo Su obra que hizo, y reposó el día
séptimo de toda Su obra que había hecho. Y bendijo Dios al día
séptimo, y lo santificó, porque en Él reposó de toda Su obra que
Dios había creado y hecho” Génesis 2:2, 3.
“Porque en seis días hizo Jehová el cielo y la tierra, el mar, y todas
las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto,
Jehová bendijo el día sábado y lo santificó” Éxodo 20:11.
El séptimo día sábado semanal fue bendecido y santificado por Dios. Mas
la bendición del sábado se extiende a los principios de los sábados
adicionales—la séptima semana, el séptimo mes, el séptimo año, el
séptimo-séptimo año, el jubileo.
La tierra debiera descansar cada séptimo año, “la tierra tendrá sábado de
reposo, sábado a Jehová” Levítico 25:4.
“Entonces yo os enviaré Mi bendición el sexto año, y dará fruto
por tres años” Levítico 25:21.
Como la bendición del maná el sexto día en Éxodo 16, el sexto año antes
del 49 año recibirían bendición triple, suficiente para sostener al pueblo
por tres años (el 7º año sábado de tierra, y el 8º año jubileo sábado de
tierra) hasta que nuevamente volviesen a cosechar. También había una
bendición para los que se reunían tres veces al año a las convocaciones de
los tiempos determinados.

“La solemnidad de las cabañas harás por siete días… Siete días celebrarás
fiestas solemnes a Jehová tu Dios en el lugar que Jehová escogiere;
porque te habrá bendecido Jehová tu Dios en todos tus frutos, y en toda
obra de tus manos, y estarás ciertamente alegre. Tres veces cada año se
presentará todo varón tuyo delante de Jehová tu Dios en el lugar que Él
escogiere; en la fiesta de los panes sin levadura, y en la fiesta de las
semanas, y en la fiesta de los tabernáculos. Y no te presentarás con las
manos vacías delante de Jehová. Cada uno dará lo que pueda, conforme a
la bendición de Jehová tu Dios, que Él te hubiere dado”. Deuteronomio
16:13-17.
No sólo el séptimo día y el séptimo año, sino también el séptimo mes se
distingue como un tiempo especial para reposar. En Levítico 23:24 la
versión Septuagésima presenta el séptimo mes con una expresión
interesante:
λάλησον τοῖς υἱοῖς Ισραηλ λέγων τοῦ µηνὸς τοῦ ἑβδόµου µιᾷ
Habla a-los hijos Israel diciendo en mes del séptimo primero
τοῦ µηνὸς ἔσται ὑµῖν ἀνάπαυσις µνηµόσυνον σαλπίγγων κλητὴ
del mes es-tuyo sumo-reposo memorial cornetas asamblea
ἁγία ἔσται ὑµῖν
sagrado es tuyo
El primer día del séptimo mes es la fiesta de las cornetas, la única fiesta
de luna nueva que tiene un sábado de reposo, en griego la palabra es
anapousis.
ana - prefijo indica: aumento, elevar, construir
-pausis significa: pausar, reposar. Juntos es “sumo sábado”
Diez días después es el día de la Expiación.
Noten como anapousis aparece en Levítico 16:31:
σάββατα σαββάτων ἀνάπαυσις αὕτη ἔσται ὑµῖν καὶ ταπεινώσετε

Sábado de sábados sumo-reposo es es-para tuyos y tu-afligir
τὰς ψυχὰς ὑµῶν νόµιµον αἰώνιον
el psique tuyos una-ley siempre
El día de la expiación es la única convocación sagrada anual que es un
sábado shabbat. Así como el sábado semanal es un día que no se hace
ningún trabajo por eso se le llama el Sábado de sábados. También es el
25
único lugar en las escrituras donde se da instrucción explícita en cuanto a
cuándo empezar y terminar la observancia del Sábado.
σάββατα σαββάτων ἔσται ὑµῖν καὶ ταπεινώσετε τὰς ψυχὰς ὑµῶν ἀπὸ
Sábado de sábados para-los tuyos y tu-afligir el psique tuyos en
ἐνάτης τοῦ µηνὸς ἀπὸ ἑσπέρας ἕως ἑσπέρας σαββατιεῖτε τὰ σάββατα
noveno del mes del atardecer a atardecer tu-sábado el Sábado
Para el Israel antiguo era el día más sagrado de todo el año. De puesta de
sol a puesta de sol el pueblo había de “afligir” sus almas. El no hacerlo en
ese periodo resultaba en separación permanente. Para el Israel de hoy el
“día” simbólico es un tiempo sobrio de preparación y de limpieza del alma
porque al terminar este tiempo nuestro Sumo Sacerdote dejará el Lugar
Santísimo y hará Su solemne anuncio: “El que es sucio, ensúciese
todavía… el que es santo, santifíquese todavía”. Apocalipsis 22:11.
Cinco días después empiezan los siete días de fiesta de Tabernáculos. El
primer día y el último son sábados de anapausis, sumo descanso como en
Levítico 23:39:
καὶ ἐν τῇ πεντεκαιδεκάτῃ ἡµέρᾳ τοῦ µηνὸς τοῦ ἑβδόµου τούτου
y en el quinto día del mes del séptimo cuando
ὅταν συντελέσητε τὰ γενήµατα τῆς γῆς ἑορτάσετε τῷ κυρίῳ
se reúne el fruto de-la tierra tu-guardarás maestro
ἑπτὰ ἡµέρας τῇ ἡµέρᾳ τῇ πρώτῃ ἀνάπαυσις καὶ τῇ ἡµέρᾳ τῇ
siete días el día el primero sumo-reposo y el día el
ὀγδόῃ ἀνάπαυσις
octavo sumo-reposo
Ocurre un reposo intensivo en el séptimo mes con cuatro de los siete

sábados anuales ocurriendo en ese tiempo. La S en el cuadro inferior indica
sábado, y “rest” reposo.
1er Mes 7º Mes
PRIMAVERA OTOÑO

El 8º día de Tabernáculos, llamado el Gran Día (el G azul) colocado
después de los 7 días de fiesta en otoño, refleja la Pascua (P negro)
colocado antes de los 7 días de fiesta de los panes sin levadura en la
primavera.
Las escrituras del Antiguo Testamento del Septuagésima LXX traducción
en griego sólo usa la palabra anapausis para las tres fiestas otoñales. El
último día de la fiesta de Tabernáculos, en el Gran Día, cuando Jesús se
puso de pie y dijo, “El que tenga sed, ¡venga a Mí y beba!” Él repetía la
invitación que dio en Mateo 11:28, “Venid a Mí, todos los que están
cansados y cargados, y yo os haré ἀναπαύσω”. Yo os daré anapausis. Yo
aumentaré vuestro reposo [en inglés ‘rest’].
10. ¿Por qué guardamos el sábado semanal

pero no los otros?
Se mandó guardar el sábado semanal en el Antiguo Testamento; de por sí
no se manda en el Nuevo Testamento, empero el ejemplo de Jesús y Sus
discípulos atestiguan de su continua importancia y validez.
Se mandó guardar los sábado anuales en el Antiguo Testamento; de por sí

no se manda en el Nuevo Testamento, empero el ejemplo de Jesús y Sus
discípulos atestiguan de su continua importancia y validez.
Este es el principio de la herencia. Tal como Cristo heredó la autoridad de

Su Padre, así los sábados anuales heredan la realidad del sábado semanal.
Tal como algunos niegan la herencia del Hijo de Dios; así otros niegan la
herencia de los sábados anuales. Ambos pierden una bendición grande.
Los sábados anuales también son ambos conmemorativos y simbólicos. A

pesar que había holocaustos asociados con ellos, cuando en la cruz
terminaron los sacrificios, la relevancia continúa porque ambos son
memoriales y símbolos.
Memoriales
Originalmente las fiestas conmemoraban acontecimientos en la
experiencia del antiguo Israel. Por lo tanto,
27
- La Pascua conmemora la última noche en Egipto y libramiento
del Faraón.
- Los Panes sin levadura conmemora la comida sencilla que
tuvieron al salir de Egipto.
- El Pentecostés conmemora cuando descendieron Dios y Su Hijo
al monte Sinaí.
Asociar las fiestas otoñales con eventos que acontecieron en el año del
éxodo es más difícil. ¿Se realizó el primer día de la expiación en ese otoño?
¿Sonaron las trompetas diez días antes? Primero tendrían que construir el
santuario en el desierto. ¿Se logró a tiempo? Moisés estuvo en el monte 80
días y sólo había 130 días (más o menos) entre Pentecostés y el día de la
Expiación. Ciertamente Moisés debió haber supervisado la obra.
Sencillamente no hay tiempo detallado en cuanto a cuándo pudo haber
ocurrido en ese año.
Tabernáculos conmemora vivir en el desierto en tiendas por 40 años. Eso
aconteció tan pronto salieron de Egipto o por lo menos cuando llegaron a
Elim. Después se ligó a la siega otoñal del trigo, pero eso no empezó hasta
que se establecieron en Canaán. Y para mecer el manojo primaveral
necesitaban primero la siega de cebada—algo que no aconteció mientras
moraban en el desierto. Sencillamente, los símbolos otoñales no tienen
eventos convenientes para ligar a eventos conmemorativos.
Tipos / Símbolos
Las fiestas no eran sólo conmemorativas sino también simbólicas. Además
de ser memoriales de eventos históricos del pasado, eran preludios de
cumplimientos del porvenir. Las fiestas primaverales eran presagios de la
muerte, entierro, resurrección, e inauguración del Mesías venidero como
Sumo Sacerdote en el Lugar Santísimo del santuario celestial. Las fiestas
otoñales eran en anticipación de la obra final en el Lugar Santísimo y de
Su regreso a cosechar la tierra.
Pascua
“La Pascua sería una fiesta tanto conmemorativa como simbólica. No
sólo recordaría la liberación de Israel, sino que también señalaría la más
grande liberación que Cristo habría de realizar para librar a su pueblo
de la servidumbre del pecado”. (Historia de los Patriarcas
y Profetas, 24:249.2)
Cuando el símbolo de la Pascua encontró la realidad en la muerte de Jesús,
el Cordero de Dios, ya no había necesidad de holocaustos. “A la mitad de
la semana” Él “hará cesar el sacrificio y la ofrenda”. Daniel 9:27. Seguir
con holocaustos sería menospreciar el sacrificio de Cristo.
“Continuar esos ritos sería un insulto a Jehová. Comer del cuerpo y
beber de la sangre de Cristo, no sólo en el servicio sagrado, sino
diario participar del pan de vida para satisfacer el hambre del alma, eso
es recibir Su Palabra y hacer Su Voluntad”. (RH, 6-14-1898)
Seguir sacrificando corderos sería un error patente del sacrificio de Cristo.
Los ritos de holocaustos terminarían con la muerte de Jesús. Mas la
conmemoración de Su sacrificio permanece en las ceremonias de la cena
del Señor, bautizo, y el rito de lavamiento de pies. La Santa Cena también
tiene rito y ceremonia y si se realiza con descuido a su real significado
puede volverse vacío y sin sentido. Solo “comer” de los panes sin levadura
y “beber” del jugo de uva no fermentado sin “recibir Su Palabra y hacer
Su Voluntad” también sería un insulto a Jehová.
Los Panes Sin Levadura

Los panes sin levadura seguía siendo símbolo en la santa cena. Esta parte
del servicio ceremonial de la Pascua seguía de manera conmemorativa y
simbólica. Señala atrás a la vida inmaculada que vivió Cristo y señala al
futuro a la victoria sobre el pecado que Él promete dar a todos los que
caminan en el espíritu, cuando se sentarán a comer con Él en la cena de la
boda del Cordero y Cristo cumpla Su promesa de no comer pan sin
levadura y de no beber del fruto de la vid hasta que de nuevo lo vuelva
hacer en el reino de Su Padre.
Lucas 22:16,18, 26-29.
La Pascua acontecía sólo una vez al año, tradicionalmente celebramos la
santa cena cuatro veces al año, pero el sistema de holocaustos tenía
sacrificios por lo menos de mañana y de tarde que ahora se reemplazan
con los cultos por la mañana y tarde—a menos deberían serlo.
¿Debiéramos guardar esos tiempos por la mañana y por la tarde como citas
sagradas? Si no lo hacemos, perdemos una gran bendición.
Pentecostés
También, anhelamos ver el último descenso del Espíritu en el tiempo de la
lluvia tardía cuando “al llegar” el día de Pentecostés se vuelva una
realidad.
“Estas escenas han de repetirse, y con mayor poder. El descenso del
Espíritu Santo en el día de Pentecostés fue la primera lluvia, pero la
última lluvia será más abundante. El Espíritu espera que lo pidamos y
29
lo recibamos. Cristo ha de ser nuevamente revelado en Su plenitud
por el poder del Espíritu Santo”. (Palabras de Vida del Gran Maestro,
9:92.1)
“Ninguno recibirá jamás el sello de Dios mientras nuestros caracteres
tengan una mancha. Nos toca a nosotros remediar los defectos de
nuestro carácter, limpiar el templo del alma de toda contaminación.
Entonces la lluvia tardía caerá sobre nosotros como cayó la lluvia
temprana sobre los discípulos en el día de Pentecostés”.
(5TI, 23:199.2)
Fue después del día de Pentecostés cuando Pedro dijo: “arrepentíos y
convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan
tiempos de refrigerio de la presencia del Señor, y Él envíe a Jesucristo,
que os fue antes predicado”. Hechos 3:19, 20. Esperaba en un tiempo
futuro que la presencia del Señor se manifestase enviando a Jesús como el
gran refrigerio de lluvia, la lluvia tardía.
¿Caerá la lluvia tardía en un día de Pentecostés futuro? No puedo decir
con certeza pero quizás. No me lo querría perder. Hasta ahora cinco
eventos se han cumplido exactamente en los tiempos determinados.
1. Cristo murió en la Pascua
2. Descansó en la tumba sin ver corrupción como el Pan del cielo
verdadero en el primer día de los panes sin levadura
3. El día de la gavilla mecida resucitó de la tumba (no es fiesta sino un
tiempo determinado)
4. Derramó el don de Su Espíritu en el día de Pentecostés
5. En el día de la Expiación entró en el Lugar Santísimo como nuestro
Sumo Sacerdote para empezar Su obra de Juicio
Si desciende la lluvia tardía en Pentecostés será una repetición como lo
indicó Elena de White. ¿Se repetirá la experiencia de la Pascua?
Ciertamente no la muerte de Cristo, pero sí se predice una sentencia de
muerte. ¿Ocurrirá el cierre de gracia en un tiempo determinado?
No tengo ninguna evidencia de ello. Parece que ocurrirá al final de la

mediación de Cristo en el Lugar Santísimo y quizás se relaciona con el día
de la Expiación, pero los eventos de ese “día” no serán finales hasta que
se mande el chivo expiatorio al desierto. ¿Es esa la reclusión de satanás
durante el milenio? ¿O acaso el juicio del gran trono blanco después del
milenio es lo que finaliza el día de la Expiación?
Todas son preguntas no contestadas.

Trompetas
Llegamos a las fiestas otoñales y su cumplimiento simbólico. Si se
cumplieron las fiestas primaverales “no solo en cuanto al acontecimiento
sino también en cuanto al tiempo” (CS, 23:396.4), entonces debiéramos
esperar lo mismo para las fiestas otoñales aunque estén separadas de su
equivalentes primaverales por 37 jubileos (exactos, añado). La exacta
convergencia de los intervalos de jubileo (49 años) entre la asunción de
Cristo para empezar Su ministerio en el Lugar Santo y cuando empezó
Su obra en el Lugar Santísimo exactamente 37 jubileos después (37 x 49
= 1813 + 31 a de C. = 1844) es una confirmación potente que por lo menos
el año que termina la profecía de los 2300 años de Daniel 9 es cierto y
seguro.
Pero el único evento que ocurrió en el tiempo determinado en 1844 fue el
día de la Expiación. Quizás el hiato de 1813 años causó dilatación de
intervalos correspondientes entre los símbolos finales. ¿Habría cuánto
tiempo de expansión? Estableciendo el tiempo exacto del 7º mes y el 10º
día ¿dónde encontramos el 1er día de ese mes simbólico?
Guillermo Miller recibió sus credenciales ministeriales en la fiesta de

Trompetas del año 1833 diez días proféticos antes del día de la Expiación
de 1844. Si eso fue una significante expansión de día-por-año, entonces
debiéramos esperar que continúe el modelo con el cumplimiento del
símbolo de la fiesta de Tabernáculos cinco años después de 1844 en 1849.
Pero Cristo no vino con hoz en la mano ese año para cosechar la mies de
la tierra. Y no lo ha hecho. Ahora tenemos una brecha muy grande que se
aproxima a 170 años. Si 170 años corresponde a cinco días (si asumimos
que Cristo pudiese venir en los próximos meses), entonces la fiesta
simbólica de Trompetas debió realizarse (ese mismo día de la fiesta) 340
años antes de 1844, en 1504. No encuentro ningún evento que prefigura
las trompetas en ese año. Quizás 1492 o 1517. El descubrimiento del
Nuevo Mundo hizo noticia. Las 95 Tesis de Lutero aparecieron en primera
plana. Pero esto es escudriñar historia en vez de las Escrituras.
¿Por qué no se cumplirían los símbolos de Su segunda venida en “tiempo

real” tal como se cumplieron en Su primer advenimiento? Buena
pregunta. Una buena respuesta está próxima. Algunos esperan un
cumplimiento de esa fiesta en el futuro. ¿Hace eso inválido el 22 de
octubre 1844? No si los cumplimientos pueden acontecer repetidas veces
como en el de Pentecostés. Quizás 1844 marcó el principio del día de la
Expiación celestial y un día de Expiación en el futuro marcará el fin de los
servicios en el Lugar Santísimo y el anuncio de Apocalipsis 22:11.
31
¿Pueden las Trompetas finales, el día de la Expiación, Tabernáculos, todo
acontecer dentro de quince días? Algo para pensar.
Tabernáculos
“La fiesta de las cabañas no era sólo una conmemoración, sino
también un tipo o figura. No solamente señalaba algo pasado, la
permanencia en el desierto, sino que, además, como la fiesta de la mies,
celebraba la recolección de los frutos de la tierra, y apuntaba hacia algo
futuro: el gran día de la siega final, cuando el Señor de la mies mandará
a sus segadores a recoger la cizaña en manojos destinados al fuego y a
juntar el trigo en su granero”. (PP 52:5224.1)
La fiesta de la cosecha es la última y la única que no ha encontrado figura.
Eso se cumplirá en el 2o advenimiento. Ciertamente no como si haya
fallado en la cruz. ¿Será el último tiempo determinado para marcar el
regreso de Cristo en las nubes con Su hoz? No sé empero Jesús dijo,
“Velad y estar listos”. Viendo las lunas nuevas para saber cuándo llega el
7º mes pudiera ser parte de velar. En todo caso, yo estaré atento.
11. ¿Hizo Dios que cesaran las fiestas?

Sí y no. Cuando las tribus septentrionales de Israel quedaron divididas de
Judá y Benjamín, Jeroboam cambió el tiempo de las fiestas otoñales del
séptimo al octavo mes y estableció dos centros de culto alternativas en
Betel y en Dan festoneado con dos becerros de oro.
1 Reyes 12:32
“Entonces instituyó Jeroboam fiesta solemne en el mes octavo, a
los quince del mes, conforme a la fiesta solemne que se
celebraba en Judá; y sacrificó sobre el altar. Así hizo en Betel,
ofreciendo sacrificio a los becerros que había hecho. Y estableció
en Betel a los sacerdotes de los lugares altos que él había
edificado. 33Sacrificó, pues, sobre el altar que él había hecho en
Betel, a los quince del mes octavo, el mes que él había inventado
de su propio corazón; e hizo fiesta a los hijos de Israel, y subió
al altar para quemar incienso”.
Para las tribus septentrionales de Israel “las fiestas del Señor” llegaron
ciertamente a su fin como lo profetizó Oseas.

“Y haré cesar todo su gozo, sus fiestas, sus nuevas lunas y sus
sábados, y todas sus festividades”. Oseas 2:11.
En términos muy claros, Jehová terminaría

“sus fiestas” (‫ח ָ ֖גּהּ‬
ַ hag-gath, ἑορτὰς heortas en el LXX)
anual
“sus nuevas lunas” (‫חְד ָ ֣שׁהּ‬
ָ ḥṓ-ḏə-šhāh, noumenias LXX)
mensual
“sus sábados” (‫שַׁבּ ָ ֑תּהּ‬
ַ šhab-bat-t, σάββατα sabbata LXX)
semanal
“y todas sus festividades” (‫ מוֲֹע ָ ֽדהּ‬mo’ed, πανηγύρεις
panegureis LXX)
diario y lo ya mencionado arriba
Oseas vivió en el reino del norte de Israel, e instruido por Dios promulgó
una profecía a la tribu descarriada.
“Fue, pues, y tomó a Gomer hija de Diblaim, la cual concibió y le
dio a luz un hijo. 4Y le dijo Jehová: ponle por nombre Jezreel;
porque de aquí a poco yo vengaré la sangre de Jezreel sobre la
casa de Jehú, y haré cesar el reino de la casa de Israel”. Oseas
1:3, 4.
En 722 a de C. las tribus del norte fueron llevadas cautivas por Asiria, para
nunca volver. 130 años después Babilonia llevó el reino sur de Judá
cautivo por 70 años. Empero Judá regresó bajo Esdras; y Nehemías
restauró las fiestas, especialmente la de cabañas.
“Y toda la congregación que volvió de la cautividad hicieron
Tabernáculos, y en tabernáculos habitaron; porque desde los días
de Josué hijo de Nun hasta aquel día, no habían hecho así los hijos
de Israel. Y hubo alegría muy grande”. Nehemías 8:17.
Incluso los hebreos, los judíos, los hijos de Israel no guardaron las fiestas
por muchos siglos. Y luego fueron restauradas. Como hoy día se están
restaurando las sendas antiguas.
33
12. ¿Cuántas leyes hay?
Una de las primeras indicaciones de que hay varias leyes es lo que el Señor
dijo de Abraham, hace más de 400 años antes de dar la Ley en
el monte Sinaí.
“Por cuanto oyó Abraham Mi voz, y guardó Mi precepto, Mis
mandamientos, Mis estatutos y Mis leyes”. Génesis 26:5.
Además de Sus leyes, hubo mandamientos y estatutos. Abraham guardó
los principios de los 10 mandamientos adorando al único y verdadero Dios
Creador del cielo y tierra; respetó la vida y la propiedad de otros (rescató
a Lot y todos sus bienes); fue fiel a Sara hasta que la muerte los separó
(obedeciéndola cuando le ofreció a Agar); no codició la tierra fértil de las
llanuras. ¿Pero cuáles estatutos guardó Abraham? Pagó diezmos a
Melquisedec y ofreció holocaustos al Señor. Circuncidó a todo varón de
su casa, sus hijos y a sí mismo. Lavó los pies de visitantes extraños, incluso
les sirvió comida de carne limpia y panes sin levadura.
Mandamientos, estatutos y leyes. Semejante a otra combinación que
aparece a menudo en el Pentateuco: mandamientos, estatutos y derechos.
Deut. 4:13-14 “Él les anunció Su pacto, el cual les mandó poner
por obra, los 10 mandamientos; y los escribió en dos tablas de
piedra. A mí también me mandó Jehová en aquel tiempo a
enseñarles los estatutos y derechos, para que los pongan por obra
en la tierra a la cual pasan para poseerla”.
Deut. 6:1 “Estos, pues, son los mandamientos, estatutos y

decretos que Jehová vuestro Dios mandó que os enseñase, para
que los pongan por obra en la tierra a la cual pasan vosotros para
poseerla”.
Deut. 7:11-12 “Guarda por tanto los mandamientos, estatutos y

derechos que yo te mando hoy que cumplas”.
Además de la asociación cercana de estos tres, noten que los

mandamientos, estatutos y derechos, los tres son de Dios, le pertenecen.
Deut. 6:17 “Guardarás diligentemente los mandamientos de

Jehová vuestro Dios, y Sus testimonios y Sus estatutos que [Él]
te ha mandado”.

Deut. 11:1 “Amarás, pues, a Jehová tu Dios, y guardarás Su
ordenanza y Sus estatutos y Sus derechos y Sus
mandamientos, todos los días”.
Deut. 26:16, 17 “Jehová tu Dios te manda hoy que cumplas estos

estatutos y derechos; cuida, pues, de ponerlos por obra con todo
tu corazón, y con toda tu alma. A Jehová has proclamado hoy
para que te sea por Dios, y para andar en Sus caminos, y para
guardar Sus estatutos y Sus mandamientos y Sus derechos”.
Deut. 30:16 “Porque yo te mando hoy que ames a Jehová tu Dios,

que andes en Sus caminos, y guardes Sus mandamientos y Sus
estatutos y Sus derechos, para que vivas y seas multiplicado, y
Jehová tu Dios te bendiga en la tierra a la cual entras para
poseerla”.
Lev. 18:4, 5 “Mis derechos pondrás por obra y Mis estatutos

guardarás, andando en ellos, Yo Jehová vuestro Dios. Por tanto
Mis estatutos y Mis derechos guardarás, los cuales haciendo
elhombre, vivirá en ellos: Yo Jehová”.
Los estatutos [o decretos], derechos y leyes se conocen también como la

ley de Moisés porque fueron dadas a Moisés para Israel.
Lev. 26:46 “Estos son los decretos, derechos y leyes que

estableció Jehová entre Sí y los hijos de Israel en el monte de
Sinaí por mano de Moisés”.
Moisés fue el canal, el agente a quien se le dio la ley. Los estatutos y

derechos son ejemplos detallados; engrandecen y magnifican los
principios generales expresados en los diez mandamientos. De igual
manera vino Cristo a magnificar la ley (Isaías 42:21) y Él también
subió al monte y enseñó al pueblo la ley más detenidamente.
“Esta es la ley que Moisés puso ante los hijos de Israel. Estos son
los testimonios, las leyes, y los decretos que Moisés habló a los
hijos de Israel cuando habían salido de Egipto”. Deuteronomio
4:44, 45.
La ley del Padre fue hablada del monte Sinaí por el Hijo de Dios, Él es la
Palabra de Dios. “Porque Yo no he hablado de Mí mismo; sino que el
35
Padre que me envió, Él me dio mandamiento de lo que he de decir, y de lo
que he de hablar” dijo Jesús en Juan 12:49.
Los mandamientos y estatutos están estrechamente asociados.
Deut. 4:40 “Y guarda Sus estatutos y Sus mandamientos...”
Deut. 6:2 “Para que temas a Jehová tu Dios, guardando todos Sus
estatutos y Sus mandamientos que yo te mando”.
Deut. 27:10 “Oirás pues la voz de Jehová tu Dios, y cumplirásSus

mandamientos y Sus estatutos, que yo te ordeno hoy”.
Deut. 28:15 “Y será, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para

cuidar de poner por obra todos Sus mandamientos y Sus
estatutos, que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas
maldiciones, y te alcanzarán”.
Deut. 30:9, 10 “Y Jehová tu Dios te hará abundar en toda obra de

tus manos... cuando oyeres la voz de Jehová tu Dios, para guardar
Sus mandamientos y Sus estatutos escritos en este libro de la
ley; cuando te convirtieres a Jehová tu Dios con todo tu corazón
y con toda tu alma”.
El libro de la ley tenía ambos los diez mandamientos y los estatutos.

Cuando David entregó el reino a su hijo Salomón, le aconsejó “guarda las
ordenanzas de Jehová tu Dios, andando en Sus caminos y observando Sus
estatutos y mandamientos, Sus decretos y Sus testimonios, de la manera
que está escrito en la ley de Moisés”. 1 Reyes 2:3.
Deut. 17:18, 19 “Y será, cuando se sentare sobre el trono de su

reino, que ha de escribir para sí en un libro una copia de esta
ley, la cual está delante de los sacerdotes levitas. Y la tendrá
consigo, y leerá en ella todos los días de su vida, para que aprenda
a temer a Jehová su Dios, para guardar todas las palabras de
esta ley y estos estatutos, para ponerlos por obra”.
“En un libro una copia de esta ley” tenía “esta ley y estos estatutos”.
El libro incluía la ley de los diez mandamientos para que el rey y los
sacerdotes tuvieran referencia y acceso. Dentro del arca se encontraba la
ley original. No estaba a exhibición pública. Si permanecían dentro del
arca nadie sabría lo que decían los diez mandamientos por eso se incluía
una copia en el libro de la ley.
2 Cron. 34:14, 19, 21 “Hilcías el sacerdote halló el libro de la

leyde Jehová dada por medio de Moisés”. “Y luego que el rey
[Josías] oyó las palabras de la ley, rasgó sus vestiduras;” “por
cuanto nuestros padres no guardaron la palabra de Jehová”.
En 2 Cron. 17:9 Josafat mandó a los levitas con “el libro de la ley de
Jehová” “a todas las ciudades de Judá enseñando al pueblo”.
En Nehemías 8:1, 2 El primer día del mes séptimo, Esdras trajo “el libro
de la ley de Moisés, que Jehová mandó a Israel” (fiesta de las trompetas).
Nehemías 8:8 “leían en el libro la ley de Dios”.

Neh. 8:9 “día santo es a Jehová nuestro Dios; no os entristezcáis,
ni lloréis”.
Neh. 8:18 “el libro de la ley de Dios”.
Neh. 9:3 “leyeron en el libro de la ley de Jehová su Dios”.
Ese libro era mucho más que sólo la ley de Moisés.

Incluía Éxodo 20-23 que contiene los diez mandamientos, los estatutos
y los derechos.
Señal en la Mano y en la Frente
“Por tanto, pondréis estas mis palabras en vuestro corazón y en

vuestra alma, y las ataréis por señal en vuestra mano, y serán
por frontales entre vuestros ojos”. Deuteronomio 11:18.
¿Cuáles eran estas palabras? Una señal en tu mano y en tu frente. En

Apocalipsis 13 se hará una marca en la mano derecha o en la frente. En
Apocalipsis 7 se coloca el sello de Dios en la frente; en el capítulo 14
aparece como el nombre del Padre. Hebreos 8 repite la promesa del nuevo
pacto de Jeremías 33 donde Dios promete escribir Su ley en nuestra mente.
Deut. 31:9-12 “Y escribió Moisés esta ley, y la dio a los

sacerdotes, hijos de Leví, que llevaban el arca del pacto de Jehová,
y a todos los ancianos de Israel. 10Y les mandó Moisés, diciendo:
Al fin de cada siete años, en el año de la remisión, en la fiesta
de los tabernáculos, 11cuando viniere todo Israel a presentarse
37
delante de Jehová tu Dios en el lugar que Él escogiere, leerás esta
ley delante de todo Israel a oídos de ellos”.
En los días de los apóstoles, por lo menos parte de esa ley se leía cada
semana, “porque Moisés desde los tiempos antiguos tiene en cada ciudad
quien lo predique en las sinagogas, donde es leído cada sábado”.
Hechos 15:21.
13. ¿Se abolieron algunas leyes en la cruz?

Quizás la carta de Pablo a los Efesios da esa impresión.
“Porque Él es nuestra paz, que de ambos hizo uno, derribando la

pared intermedia de separación; aboliendo en Su carne las
enemistades, la ley de los mandamientos contenidos en
ordenanzas, para hacer en Sí mismo de los dos un nuevo hombre,
haciendo así la paz”. Efesios 2:14, 15.
Parece que la ley de los mandamientos contenida en ordenanzas fue

abolida en Su carne.
NIV “poniendo a un lado en su carne la ley con sus mandatos y reglas”

New Living Translation “terminando el sistema de ley con los
mandamientos y reglas”
ESV “aboliendo la ley de mandamientos expresada en las ordenanzas”
Holman “hecha de ningún efecto la ley que consiste de mandatos y
expresado en las reglas”
Aramaic “canceló el odio por su carne y la ley de mandatos en sus
mandamientos”
God’s Word Translation “trajo a un fin los mandamientos y demandas
que se encuentran en las enseñanzas de Moisés”
Douay-Rheims “anulando la ley de mandamientos que están
en decretos”
Young’s Literal Translation “la enemistad en su carne, la ley de los
mandatos en ordenanzas”
Esta ley, fuese la que fuese, causó enemistad y separación. Cuando por
primera vez el hombre pecó en el Edén hubo una separación inmediata
entre el hombre y Dios: en temor Adán y Eva se escondieron. Mas Cristo
prometió poner enemistad entre la simiente de la mujer y la serpiente.
Génesis 3:15. Enemistad es hostilidad, animosidad, oposición,
antagonismo, mala voluntad. Este era el sentir entre los judíos y los
gentiles; también ellos estaban separados por una enemistad que existía,
había entre ellos una “pared intermedia de separación”.
Parte de la hostilidad que existía era el resultado de algunos de los

mandamientos que estaban en las ordenanzas— ¿de quién? En el griego la
palabra es dogma y significa decreto o reglamento. Los dogmas pueden
ser religiosos o civiles. Ordenados por Dios o por hombre. Jesús se refería
a las leyes judías cuando dijo, “Pero en vano me honran; enseñando como
doctrinas mandamientos de hombres” Mateo 15:9. Los judíos añadieron
muchas reglas y regulaciones a todas las leyes, estatutos y derechos de
Dios haciéndolo una carga y discriminando en contra de los gentiles
sucios, inmundos e incircuncisos. Y éstos respondieron con sentimientos
de perjuicio, hostilidad, y animosidad.
Los judíos llamaban a los gentiles perros incircuncisos. David dirigió ese
epitafio a Goliat en 1 Samuel 17:26, 43. Un varón incircunciso no podía
participar en la Pascua (Éxodo 12:48) ni entrar en el santuario (Ezequiel
44:9). Josué circuncidó al pueblo antes de entrar a Canaán porque en el
camino ninguno había sido circuncidado (Josué 5:7). Pedro hizo referencia
a esto en el concilio de Jerusalén porque “algunos [de la secta de los
fariseos] que venían de Judea enseñaban a los hermanos, diciendo: Si no
se circuncidan conforme a la costumbre de Moisés [y guardan la ley de
Moisés], no podrán ser salvos”. Lo recomendaban a los hermanos gentiles,
diciendo que Dios “ninguna diferencia hizo entre nosotros y ellos” Hechos
15:1, 5, 9— ¿ninguna diferencia entre gentiles y judíos? ¿Cuál era la
diferencia? La circuncisión.
“Ahora, pues, ¿por qué tientan a Dios, poniendo sobre la cerviz de los
discípulos un yugo que ni nuestros padres ni nosotros hemos podido
llevar?” Pedro preguntó en el versículo 10, los padres no llevaron el
yugo de la circuncisión mientras estaban en el desierto.
Luego, Santiago concluye “que no se moleste a los que de los gentiles se
convierten a Dios” (ser circuncidados) pero “que se abstengan de las
contaminaciones de los ídolos, y de fornicación, y de estrangulado y de
sangre”. Todavía era importante respetar la ley de Moisés porque la ley de
Moisés se leía cada sábado en la sinagoga (verso 21).
39
Fue no sólo esta enemistad de la circuncisión que fue abolida en la cruz
sino también la enemistad entre los hombres y Dios. “Porque la mente
carnal es enemistad contra Dios”. Romanos 8:7.
Cuando Cristo, el Cordero de Dios, murió abolió la enemistad en Su carne,
el último sumo sacrificio; puso fin al sistema de sacrificios, los servicios
del templo terrenal con todos los ritos, ceremonias y reglas relacionadas
con los holocaustos.
Clavada en la Cruz
“cancelando el manuscrito de las ordenanzas que había contra
nosotros, …clavándolo en la cruz”. Colosenses 2:14.
La mayoría de los cristianos interpretan “el manuscrito de las ordenanzas”
como la ley de Dios que fue clavada en la Cruz y [creen que] ya no hay
obligación en el Nuevo Testamento para guardar los Diez Mandamientos
ni que hay ningún “imperativo moral continuo” para guardar el séptimo
día de la semana como el Reposo de Jehová.
Por otra parte, los cristianos guardadores del sábado sostienen
tradicionalmente que sí hay diferencia entre las leyes morales y las
ceremoniales, y que fue la otra ley, la “ley de Moisés” la que fue clavada
en la cruz. Lo que terminó con la muerte de Cristo, por lo tanto, fueron los
“sábados ceremoniales” de la ley de Moisés y no el séptimo día sábado de
los diez mandamientos, porque creen que no fue la ley de Dios sino la ley
de Moisés lo que “había contra nosotros”.
Contra Nosotros
¿Exactamente qué “había contra nosotros”? Algunos mantienen que es el
“libro de la ley” (suponen que es sólo la ley de Moisés) “que había contra
nosotros” por el siguiente versículo:
Deut. 31:25, 26 “Mandó Moisés a los levitas que llevaban el arca del pacto
de Jehová, diciendo: Tomad este libro de la ley, y ponedlo al lado del
arca del pacto de Jehová vuestro Dios, y esté allí por testigo contra ti”.
Es uno de los pasajes más famosos para decir que la Ley de Moisés estaba
contra el pueblo y luego lo ligan con Colosenses 2:14. Al leerlo en
contexto encontramos que el libro de la Ley no está en contra del pueblo
sino que sencillamente “atestigua” contra ellos. Noten verso 28
“Congregad a mí a todos los ancianos de vuestras tribus, y a

vuestros oficiales, y hablaré a sus oídos estas palabras, y

llamarépor testigos contra ellos a los cielos y a la tierra”. Deut.
31:28.
El libro de la Ley no está en contra del pueblo ni más ni menos que “los
cielos y la tierra”. Si te acompaño a hacer compras y te advierto que no
hurtas, pero de todas maneras robas (¡y te veo!). ¿Significa que yo estaba
en tu contra? No, sencillamente soy testigo de que quebraste la ley y mi
testimonio se usará en contra tuya en la corte. Es la misma idea en
Deuteronomio 4:25, 26
“Cuando hubieres engendrado hijos y nietos, y hubiereis

envejecido en la tierra, y os corrompiereis, e hiciereis escultura o
imagen de cualquier cosa, e hiciereis lo malo ante los ojos de
Jehová vuestro Dios, para enojarlo: 26 Yo pongo hoy por testigos
al cielo y a la tierra, que presto pereceréis totalmente de la tierra
hacia la cual pasáis el Jordán para poseerla: no estaréis en ella
largos días sin que seáis totalmente destruidos.”
También Deuteronomio 30:19

“A los cielos y la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros,
que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la
maldición. Escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu simiente.”
El cielo no está en nuestra contra sin embargo sí ve nuestras decisiones.
El Manuscrito de las Ordenanzas

Un tercer entendimiento de este pasaje es que “cancelando el manuscrito
de las ordenanzas” está sencillamente reiterando la frase anterior en el
verso 13 “perdonándoos todos los pecados” eso establece el contexto
importante: “vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión
de vuestra carne, os dio vida juntamente con Él; perdonándoos todos los
pecados” tus transgresiones, tus iniquidades. ¿Cómo nos perdonó Cristo?
“quitándolo de en medio y clavándolo en la cruz”. “Quien llevó Él mismo
nuestros pecados en Su cuerpo sobre el madero”. (1 Pedro 2:24) El
manuscrito de las ordenanzas, la deuda del pecado y la enemistad que
resulta de la mente carnal es lo que fue clavado en la cruz.
Aparte de la VRV “manuscrito de las ordenanzas” otras traducciones
incluyen “la carga de nuestra deuda legal” NIV; “la deuda grabada” ESV,
“el certificado de deuda” NASB, “el pago de nuestras deudas” Aramaic
41
Bible en el idioma sencillo. Todas expresan la frase griega cheirographon
tois dogmasin en Colosenses 2:14.
El contexto empieza con 2:12, donde Pablo habla de estar “sepultados
con Él en el bautismo”. El resultado de ese “bautizo de sepulcro” es
resucitar a una nueva vida y estar limpio de todo pecado. Pablo se
refiere a esa limpieza en dos frases paralelas, la segunda repite el pensar
de la primera. La primera frase es “perdonándoos todos los pecados”
(verso 13, RSV). La frase paralela que se repite es “cancelando el
manuscrito [cheirographon tois dogmasin] que había contra nosotros”
(verso 14, RSV). Ambas frases significan esencial-mente lo mismo, la
segunda repite en términos diferentes lo que significa para Pablo el
perdón de nuestros pecados. El perdón de nuestros pecados es el
resultado al cancelar el manuscrito que había contra nosotros. (William
E. Richardson, Andrews University, ¿El Sábado clavado a la cruz?
Ministry magazine, May, 1997.)
De dogmasin vienen las palabras dogma, ley, decreto, ordenanza, estatuto,
fácil entender. Ciudades tienen ordenanzas, leyes locales, que regulan
estacionarse, tirar basura, solicitar, etc. asociada a cada ordenanza hay un
castigo por cada infracción. La única vez que ocurre en el N. T.
cheirographon es en esa epístola. Se traduce literalmente “manuscrito”
como está en la VRV. Pero ¿manuscrito de qué? En otras literaturas
griegas la palabra se halla en documentos legales, en escenas de sala de
justicia donde el documento con los cargos en contra del acusado se llama
el cheirographon el cual desplega el demandante en el medio (tou mesou)
de la sala de justicia. Pablo usa el 2º término legal cuando dice que Cristo
cogió el cheirographon “quitándolo de en medio” tou mesou, quitando la
pared intermedia de separación.
El acusador de los hermanos, satanás, señala el certificado de nuestra
deuda, pero nuestro Abogado con el Padre le dice sencillamente, “¡Jehová
te reprenda!” Cristo sencillamente remueve el registro.
“Quitadle esas vestiduras viles” Zacarías 3:2, 4. Lo quita. “He hecho pasar
de ti tu pecado, y te vestiré con ropas de gala”.
Por eso el siguiente versículo dice que Cristo “despojando a los

principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre
ellos en sí mismo”. Colosenses 2:15. Cristo contra los “principados, contra
potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo, contra
malicias espirituales en las alturas” los despojó, los robó de sus
acusaciones. Él quita la evidencia del caso, y nuestro acusador queda con
las manos vacías, con nada de qué condenarnos. “Ahora, pues, ninguna
condenación hay ¡para los que están en Cristo Jesús!” Romanos 8:1.
Cancelado
Jesús canceló nuestros pecados con Su muerte en la cruz donde ganó el
derecho de “perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad” 1
Juan 1:9. Fue entonces cuando el Hijo de Dios tuvo “piedad de mí”
“conforme a la multitud de Tus piedades” y borró “mis rebeliones,” borró
“todas mis maldades” Salmos 51:1, 9. Es cuando Él deshizo “como a una
nube tus rebeliones, y como a niebla tus pecados” Isaías 44:22. Es la
primera vez que borró nuestros pecados. Pero habrá un borro final cuando
“sean borrados vuestros pecados; para que vengan tiempo de refrigerio
de la presencia del Señor, y Él envíe a Jesucristo” Hechos 3:19, 20. Ese
tiempo está por venir en el último día de la Expiación en el Lugar
Santísimo del Santuario celestial. Ese aspecto del día de la Expiación es
sombra de cosas buenas que aun han de venir.
Así, Cristo no quitó el dogmasin, el dogma, la ordenanza, la ley. Él quitó

el cheirographon, el registro de los cargos, cogiendo sobre Sí la deuda,
“al que no conoció pecado, lo hizo pecado por nosotros”. Él coge el
registro de nuestros pecados con todos los detalles—fecha, tiempo, lugar,
el testimonio de testigos—y los cancela, borra nuestra deuda, lo quita.
¿Cómo? Coge sobre Sí nuestra deuda, nuestros pecados. Ninguna ley fue
clavada en la cruz, pero Jesucristo sí lo fue. La única ley que terminó en la
cruz es la ley de sacrificios.
Pablo lo expresa en la carta a Filemón, cuando le dice “Yo Pablo lo escribí

de mi propia mano, yo lo pagaré” Filemón 18, 19. Filemón era miembro
de la iglesia de Colosas. Pablo no borraba el manuscrito de la promesa de
pagar sino que borraba la deuda pagándola.
Terminó en la Cruz
Los sacrificios y todos los ritos, reglas, y ceremonias asociadas con ellos,
como ya se mencionó, definitivamente terminaron en la cruz. Ya no hay
sacerdote terrenal, ya no hay servicios de templo, ¡no hay más templo!
Pero ¿terminaron todas las leyes de Moisés en la cruz? Reconocemos y
seguimos las leyes en Levítico de salud, diezmar, observar el sábado, etc.
Además, aceptar que fueron los estatutos, derechos, y mandamientos—
dados por Jesucristo Mismo a Moisés—lo que fue clavado en la cruz,
significa que eso es lo que “había contra nosotros” y “que nos era
43
contrario” y que el Hijo de Dios le dio a Su pueblo una maldición en vez
de bendición.
El contexto de Colosenses 2 es en cuanto a imponer reglas y reglamentos
hechos por hombre. Seis veces hace referencia a hombre u hombres en
Colosenses:
2:4 “Y esto digo para que nadie [ningún hombre] os engañe”
2:8 “Mirad que nadie [ningún hombre] os engañe por medio de
filosofías y vanas sutilezas, según las tradiciones de los hombres”
2:16 “Por tanto, nadie [ningún hombre] os juzgue”
2:18 “Nadie [ningún hombre] os prive de vuestra recompensa”
2:20-22 “¿por qué, … os sometéis a ordenanzas tales como: No toques,
no gustes, no manejes (todas las cuales habrán de perecer con el
uso), según mandamientos y doctrinas de hombres?”
Las fiestas del Señor no son mandamientos y doctrinas de hombres.
Las leyes de salud, los estatutos sobre el diezmo no son “doctrinas de
hombres”. Entonces ¿por qué Pablo enumera comida y bebida, fiestas,
lunas nuevas, y sábados como tema de condenación? Veamos la lista.
Comida y Bebida
Primero, brosis y posis son las palabras griegas para la traducción de
“comida y bebida”. Es fácil pensar que con la muerte de Cristo termina-
-ron los sacrificios de Moisés de vegetal y libación. Pero esas palabras
griegas nunca se usan en la Septuagésima o Nuevo Testamento en refe-
rencia a los sacrificios de vegetal y libación. En realidad, thusia es la
palabra técnica para sacrificio vegetal, y spendo es la palabra que signi-
fica “ofrecer libación u ofrenda de bebida”. Pablo hubiera usado esas
palabras si su intención era el sacrificio vegetal o libación.
También, en esas dos palabras la terminación es de acción, debe
traducirse “comiendo y bebiendo”. En consecuencia, no se refieren a los
ritos de Moisés, sino a las prohibiciones propugnadas por maestros
falsos de abstenerse de algunos placeres mundanos. Propugnaban “auto-
degradación” a los creyentes colosenses, diciendo, “¡No toques, no
gustes, no manejes! (versículos 18, 20, 21, 23). Privarse de comida y
agua puede aparecer piadoso, pero en realidad no tiene ningún valor
espiritual. Que nadie te condene por tu compañerismo social en las fiestas,
lunas nuevas o sábados.

Fiestas, Lunas Nuevas, Sábados
La frase “días de fiesta, lunas nuevas o sábados” (heortes, noumenias,
sabbaton) en el versículo 16 no se encuentra en ningún otro lugar
en el Nuevo Testamento, pero ocurre cinco veces en la
Septuagésima (2 Cron. 2:4; 31:3; Neh. 10:33; Esdras 45:17; Os.
2:11). Cada vez la referencia es de los sábados (semanal), lunas
nuevas (mensual), y fiestas determinadas (anual). En veces la orden
está al revés, pero en cada caso “luna nueva” está en medio, así
muestra la secuencia lógica de semanal a anual o de anual a semanal.
La implicación es que está describiendo el sábado semanal. Alegar que
estos son sábados ceremoniales (parte de las fiestas anuales) hace que
Pablo se repita sin necesidad: ‘nadie os juzgue en respecto a días de
fiesta/sábado ceremonial, o de luna nueva, o de sábado ceremonial’,
“una declaración ni lógico ni probable”. (William E. Richardson,
Ministry magazine, May, 1997)
Algunos alegan que aquí la palabra plural de “sábado” (sabbaton) indica
algo aparte del sábado semanal. Pero el plural se usa muchas veces para el
sábado semanal, y sólo en un sentido secundario significa siete días o
semana.
Por ejemplo la naturaleza de sabbaton plural se ve en Marcos 15:42 “era
la preparación, esto es, la víspera del sábado [sabbaton]” es decir el día
antes de cada sábado. Lucas 4:16 “entró el día sábado [sabbaton] en la
sinagoga, conforme a su costumbre” es decir cada sábado. Estos plurales
indican la naturaleza repetida del sábado semanal.
Pero hay un uso interesante del plural en Mateo 28:1 “Pasado el sábado
[sabbaton], al amanecer del primer día de la semana [sabbaton]” o sea,
el primer día después de cada sábado. La segunda vez demuestra la
connotación típica de “cada sábado”, pero el primer sabbaton debe
pertenecer al sábado en particular pero también es plural. ¿Por qué?
Porque hubo dos sábados ese sábado en particular que ocurrió en el mismo
día; el séptimo día sábado semanal y el primer día de los panes sin
levadura, uno de los siete sábados anuales asociados con las fiestas. En
Juan 19:31 ese sábado se le llama “gran día”.
Hechos 13:14 “Y ellos pasando de Perge, llegaron a Antioquía de Pisidía,
y entrando en la sinagoga un día de sábado [sabbaton], se sentaron. ¿Por
qué es plural? Está describiendo un sábado en particular cuando los
apóstoles visitaron la sinagoga en Antioquía y los invitaron a hablar. O fue
la primera de varios sábados que asistieron a la sinagoga o quizás este fue
otro “gran” Sábado, un sábado semanal y anual.
45
Así que, mientras es claro que el séptimo día sábado semanal está incluido
en la lista de Pablo de las cosas que no debemos dejar que ningún hombre
nos condene, también es cierto que eso no era lo que fue clavado en la cruz
o borrado o abolido o cancelado.
Que Nadie Os Juzgue

¿Quién juzgaba? ¿Judíos o gentiles?
¿Los que estaban adentro de la iglesia o afuera?
En esta carta la preocupación de Pablo son las falsas enseñanzas que no
vienen de Cristo. El tema que se repite y que domina su mensaje es la vista
empobrecida que tenían de Jesús que prevalecía en el “hereje colosenses”.
Aquí se encuentran las declaraciones más potentes en todo el Nuevo
Testamento en cuanto a la deidad de Jesucristo.
El amado Hijo de Dios (1:13) es la imagen del Dios invisible (15) por Él
fueron creadas todas las cosas (16). Él es el primogénito de toda creatura
(15) y Él es antes de todas las cosas, y todas las cosas por Él subsisten
(17). Él es la cabeza del cuerpo, que es la iglesia; Él es el principio, el
primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia
(18) por cuanto agradó al Padre que en Él habitase toda plenitud (19).
Porque en Él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad (2:9), el
cual es la cabeza de todo principado y potestad (10) y está Cristo sentado
a la diestra de Dios (3:1).
Había ciertamente judaizantes de “la circuncisión” que buscaban imponer
sus costumbres a los gentiles. Hicieron lo mismo con Jesús, lo acusaron
de quebrar las ordenanzas del sábado e ignorar los requisitos de la
ceremonia de lavarse las manos según sus costumbres. Pero hubo otros
que usaron “palabras persuasivas de humana sabiduría” 1 Cor. 2:4;
“filosofías y vanas sutilezas” para promover “las tradiciones de los
hombres” Col. 2:8. Luego Pablo da ejemplos en los versículos 21-23:
“tales como: No toques, no gustes, no manejes”, “adoración voluntaria”,
“duro trato del cuerpo” y ningún “satisfacción de la carne”.
Eso describe muy bien el ascetismo que caracterizaba el gnosticismo, la
enseñanza que exalta la sabiduría humana sobre la inherente maldad del
cuerpo humano. Pablo se opuso a esta vana filosofía señalando al Padre y
a Cristo, “en Quien están escondidos todos los tesoros de sabiduría y
conocimiento” Col. 2:3. No la mente de hombre, pues “nosotros tenemos
la mente de Cristo” 1 Cor. 2:16. Pero acaso ¿no terminaron las sombras,
los símbolos, las ceremonias en la cruz?

“Esas máximas y tradiciones llegaron a ser obstáculo para la compren-
sión y práctica de la religión verdadera. Y cuando vino la Realidad, en la
persona de Cristo, no reconocieron en Él el cumplimiento de todos sus
símbolos, la sustancia de todas sus sombras. Rechazaron a Cristo, el
ser a quien representaban sus ceremonias, y se aferraron
a sus mismos símbolos e inútiles ceremonias. El Hijo de Dios había
venido, pero ellos continuaban pidiendo una señal”. (PVGM, 2:17)
Para los judíos que rechazaron al Hijo de Dios, las sombras y ceremonias
ciertamente se volvieron tradiciones vanas. Pero para los que creen en Su
nombre y lo ven como el cumplimiento y la sustancia de todas las sombras,
lo que una vez fue glorioso ¡se vuelve aun más glorioso! Cumplir no
significa abolir, sino llenar de significado pleno. Por eso Jesús vino a
cumplir la ley (Mateo 5:19), a darle significado más pleno,
a magnificarla y hacerla honorable (Isa. 42:21).
“Cuando como una ofrenda inmaculada Cristo inclinó Su cabeza y murió,
cuando por la mano invisible del Todopoderoso el velo del templo fue
rasgado en dos, se abrió un nuevo y vivo camino. Ahora todos pueden
acercarse a Dios por los méritos de Cristo. Porque el velo está rasgado los
hombres pueden acercarse a Dios. No necesitan depender de sacerdote o
ceremonia de sacrificios”. (MS, 148, 1897, pp. 7, 8)
El sacerdocio terrenal y sacrificios ceremoniales terminaron “a la mitad de
la semana” cuando cesaron “el sacrificio y la ofrenda”. (Dan. 9:27)
“Los judíos se enorgullecían siempre de sus cultos divinamente señala-
-dos; y muchos de los que se habían convertido a la fe de Cristo, sentían
todavía que, puesto que Dios había bosquejado una vez claramente la
forma hebrea del culto, era improbable que autorizara alguna vez un
cambio en cualquiera de sus detalles. Insistían en que las leyes y cere-
monias judías debían incorporarse en los ritos de la religión cristiana. Eran
lentos en discernir que todas las ofrendas de los sacrificios no habían
sino prefigurado la muerte del Hijo de Dios, en la cual el símbolo se había
cumplido, y después de la cual los ritos y ceremonias de la dispensación
mosaico ya no estaban más en vigor”. (HAp, 154.1)
Los ritos y las ceremonias que pertenecían a todas las ofrendas de los
sacrificios ya no estaban en vigor. La muerte del Hijo de Dios trajo a su
fin el sistema de sacrificios mas no la obra de Cristo en derramar su
Espíritu Pentecostés, limpiar nuestros templos, y morar en nosotros.
“Esta fue virtualmente la última pascua que habría de celebrarse: pues
el símbolo se cumplió en la realidad del Cordero de Dios inmolado por los
pecados del mundo. En la crucifixión, el símbolo se encontró con la
Realidad, y allí cesó el sistema simbólico”. (A Fin de Conocerlo, 19)
47
Matar corderos pascuales terminó con la crucifixión de Cristo. ¿Virtual-
-mente la última pascua? Pues el Cordero de Dios aun aparece ante el
trono de Dios “como inmolado” (Apoc. 5:6) ofrece, no la sangre de
corderos o cabras, sino Su propia sangre por nosotros. El sistema
simbólico cesó. Ahora el Cordero Real, que estaba muerto pero ahora vive
para siempre es nuestra Pascua; por lo tanto, celebremos la fiesta con los
panes sin levadura de sinceridad y de verdad (1 Cor 5:7, 8).
“En la última Pascua que observó nuestro Señor Jesús con Sus discípulos,
Él instituyó la Santa Cena en vez de la Pascua, para observarlo en
memoria de Su muerte. Ya no necesitaban la Pascua, pues Él, quien
prefiguraba al gran Cordero, estaba listo a ser sacrificado por los pecados
del mundo”. (Youth’s Instructor, May 1, 1873 par. 12)
En vez del cordero pascual simbólico, ahora tenían al Cordero en realidad.
Mas el significado Pascual de ser librado de Egipto vive en la
conmemoración de la muerte de Cristo que (a la vez) nos libra del pecado
por Su muerte en la cruz como Cordero de Dios.
Hay una ley que fue abolida, que Cristo “quitó, clavándola a la cruz”.
Pero Pablo la llama “la ley de mandatos contenido en ordenanzas”. Esa
ley ceremonial, dada por Dios a través de Moisés, con sus sacrificios y
ordenanzas, estaría en vigor con los hebreos hasta que el símbolo se
cumpliese en la realidad de la muerte de Cristo como Cordero de Dios que
quita el pecado del mundo. Entonces todas las ofrendas de los sacrificios
y servicios estarían abolidas. Pablo y los otros apóstoles obraron para
mostrarlo, y resueltamente se enfrentaron a los maestros judaizantes que
declaraban que los cristianos debían observar la ley ceremonial. (Bible
Echo, April 16, 1894 par. 2)
La ley ceremonial trataba de ofrendas de sacrificios y ordenanzas (leyes)

relacionadas con ellos. No hay duda alguna que los sacrificios y
holocaustos terminaron y están abolidos.
14. ¿Son las fiestas sombras o tipos que

terminaron con la realidad?
Sombra y Cuerpo
La solución a Colosense 2:16 no es en atentar defender una interpre-tación
plural de sabbaton a fin de excluir el sábado semanal del séptimo día de la
lista de Pablo. El problema es en una conjetura equivocada del cuerpo de
Cristo. La palabra es fue suplida. Más bien en el griego dice sencillamente,
y mucho más claro, “el cuerpo de Cristo”.
Colosense 2:16 comúnmente se lee “días de fiesta, o de luna nueva, o de
sábados; que son la sombra de lo por venir; mas el cuerpo es de Cristo”.
Leyendo sólo esta porción parece que la conjunción griega “de” está
contrastando las sombras con el cuerpo. Sin embargo, el uso del griego de
mas bien sería “además” que indica expansión, aumentación,
magnificación.
Por tanto, nadie os juzgue

(¿cómo?)
en comida o en bebida, o respecto a días de fiesta,
o de luna nueva, o de sábados;
(¿qué clase?)
que son la sombra de lo por venir;
además el cuerpo de Cristo.
Examinemos estas dos clausulas dependientes.

1. La clausula adverbial. ¿No deben ser juzgados cómo? En
cuestión de días de fiesta, luna nueva, y “sábados” todos (menos
día de la Expiación) se conocían por su “comer y beber”. Esas eran
fiestas que conmemoraban eventos del pasado y celebraciones
típicas de cumplimientos venideros.
2. La clausula adjetiva. ¿Qué clase de días eran? Son una sombra

de lo por venir. En vez de que su significado haya terminado,
sigue, son un gozo anticipado de las cosas superiores que han de
venir que comprueba que la sombra no está en contraste con la
realidad.
Cuando adoramos, desde el séptimo día sábado hasta el Último Gran Día,
mostramos al mundo a Quien servimos. Cada momento que nos
enfocamos en Cristo la Roca sólida y en Sus movimientos en el Santuario
es un momento que las puertas del infierno no prevalecerán contra
nosotros.
“Por fe [Moisés] celebró la Pascua y el rociamiento de la sangre”
Hebreos 11:28. Esa noche él y todos los hijos de Israel lo hicieron todo
por fe. No pusieron la sangre en el lintel porque estaban “bajo la ley” sino
porque tuvieron fe en el Dios de Israel que milagrosamente los había
protegido de las plagas de Egipto. Fueron los egipcios los que no tuvieron
49
fe en las instrucciones de Jehová que estaban bajo la ley y pasaron por el
castigo.
Los gnósticos ascéticos condenaban a los cristianos por gozar de comidas
en compañerismo, por quebrar pan, comer, y beber juntos, y por reunirse
semanalmente, mensualmente, y anualmente porque ellos creían en
aislamiento, soledad, y depravación.
Pablo dijo,
Que nadie te condene por comer o beber.
Que nadie te condene por gozar de fiestas y sábados juntos.
Estas cosas son sombras que nos unen al cuerpo de Cristo ahora y en la
realidad futura cuando los santos se encontrarán de mes en mes en el árbol
de la vida para comer la fruta y adorar a Dios y al Cordero.
(Apocalipsis 22:2)
Pablo no dijo, casi 30 años después de la cruz, que eran una sombra, sino
que siguen, son todavía una sombra de lo venidero. La sombra no está
opuesta a la realidad sino depende de la Fuente. Todos hablan de Aquel
quien es la plenitud de todas las cosas. Cada artículo en el santuario es un
símbolo del Hijo de Dios. Todas las fiestas son recordatorios de lo que
hizo, hace, y realizará ¡muy pronto!
El Antiguo y el Nuevo Testamento

Uno de los problemas en cuanto a la ley tiene que ver con el entendí-
-miento de cómo el A.T. y el N.T. están relacionados. Muchos cristianos
contrastan el A.T. con el N.T. como si fuese la ley contra la gracia, o las
obras contra la fe. Con ese pensar, ponen a Cristo contra Moisés como si
Cristo reemplazara a Moisés. Sin embargo la Biblia claramente declara
que Cristo vino a cumplir la ley y a magnificarla. Mateo 5:18;
Isaías 42:21.
Juan 5:46, 47 “Porque si hubieseis creído a Moisés; me creeríais
a Mí; porque de Mí escribió él. Pero si no creéis a sus escritos,
¿Cómo creeréis a Mis palabras?”
Jesús está diciendo que Él es la expresión de lo que escribió Moisés. A
Moisés se le dio la raíz de la cual Cristo vendría a magnificar y dar fruto
en su plenitud. Así que Cristo no es el contraste de Moisés sino la
expresión completa de todo lo que está escrito en la ley y los profetas.
“La ley es el Evangelio sintetizado, y el Evangelio es la ley
desarrollada. La ley es la raíz, el Evangelio su fragante flor y
fruto”. (Palabras de Vida del Gran Maestro, 11:99.1)
Este cambio de entendimiento se refleja en las palabras de Jesús:
“Porque la ley por Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad
vinieron por Jesucristo” Juan 1:17.
La relación entre Moisés y Cristo se expresa por la palabra provista pero.

Eso sugiere un contraste en oposición. Sin embargo el contraste es en
realidad un aumento de lo que Moisés escribió. Pudiéramos usar la palabra
y tan sencillamente para crear un aumento en pensar:
“Porque la ley por Moisés fue dada, y la gracia y la verdad vinieron
por Jesucristo” Juan 1:17.
Muchas supuestas dificultades desvanecen con el entendimiento correcto
de cómo la ley y el Evangelio están relacionadas.
En el Santuario es Tu Camino
Una manera sencilla para saber lo que quedó y lo que cesó en la cruz es
mirar al santuario.
Apoc. 11:1-2 “Y me fue dada una caña semejante a una vara, y el
ángel se puso en pie diciendo: Levántate, y mide el templo de
Dios, y el altar, y a los que adoran en el. 2 Pero el patio que está
fuera del templo, déjalo aparte, y no lo midas, porque es dado
a los gentiles; y ellos hollarán la ciudad santa cuarenta y dos
meses”.
El pueblo de Dios había de medir el templo, el altar y a los que adoran en

él. Pero no el patio. Significa que los holocaustos, ofrendas y lavados fuera
del templo quedan excluídos; mas las cosas dentro del templo en el Lugar
Santo y en el Lugar Santísimo permanecen. ¿Dónde se guardaba la ley de
Moisés? En el Lugar Santísimo. Conociendo que el ministerio del Lugar
Santísimo tiene aplicación especialmente desde 1844 para adelante y que
la Ley de Moisés residía en el Lugar Santísimo, no sugiere eso que
¿también los estatutos y juicios estarían escritos en el corazón durante el
ministerio del Lugar Santísimo?
51
15. ¿Hoy día debieran los cristianos guardar las
fiestas?
Muchos cristianos ya lo hacen. Guardan Navidad, domingo de
Resurrección, San Valentín, la víspera y día de Todos los Santos. Algunos
observan la cuaresma, Ascensión, Asunción, domingo de Adviento.
También están los doce días de Navidad, la veneración a los magos, día de
Maria Madre de Dios, se conoce como Año Nuevo; día de la Purísima
Concepción, día de San Patricio, miércoles de ceniza, domingo de Ramos,
día de Pentecostés y de la Trinidad, Viernes Santo, y Corpus Cristi. Pero
ninguna está ni se menciona en la Biblia. Las fiestas que sí son
mencionadas en la Biblia ¿son parte de los estatutos, preceptos y requisitos
o se incluyen en las figuras de sombras? Parece que son ordenanzas
incluídas en los estatutos.
“Guardaréis la fiesta de los panes sin levadura, porque en este
mismo día habré sacado vuestros ejércitos de la tierra de Egipto.
Por tanto, guardaréis este día como estatuto perpetuo a través de
vuestras generaciones”. Éxodo 12:17.
La perpetuidad de guardar esta ordenanza para siempre “en vuestras
generaciones” se aplica a ambos el séptimo día sábado y a las fiestas
anuales de Jehová. Ambos lo exigen con el mismo idioma perpetua en-
vuestras-generaciones.
Sábados de Jehová
“Ciertamente vosotros guardaréis Mis sábados porque es señal
entre Mí y vosotros por vuestras generaciones”, 15 “Seis días se
hará obra, mas el día séptimo es sábado de reposo consagrado a
Jehová:” 16 “Guardarán, pues, el sábado los hijos de Israel:
celebrándolo por sus generaciones por pacto perpetuo”. Éxodo
31:13, 15, 16.
Los sábados de Jehová han de ser señal en la mano y en la frente.
“Y te será como una señal sobre tu mano, y como una memoria
delante de tus ojos, para que la ley de Jehová esté en tu boca; por
cuanto con mano fuerte te sacó Jehová de Egipto. 10Por tanto, tú
guardarás este rito en su tiempo de año en año”.
Éxodo 13:9, 10.

Esa ordenanza es la fiesta de los panes sin levadura. Los tres versículos
inmediatamente antes de estos dos lo confirman:
“Siete días comerás pan sin leudar, y el séptimo día será fiesta a
Jehová. 7Por los siete días se comerán los panes sin levadura; y
no se verá contigo leudado, ni levadura en todo tu término. 8Y
contarás en aquel día a tu hijo, diciendo: Se hace esto con
motivode lo que Jehová hizo conmigo cuando me sacó de Egipto”.
Éxodo 13:6-8.
Los que adoren a la bestia y a su imagen recibirán una marca en la frente

o en la mano (Apoc. 14:9); los que adoran al Padre y a Su Imagen serán
sellados con el nombre del Padre escrito en sus frentes (Apoc. 14:1); y el
nombre de Jesús, Su “nombre nuevo” escrito sobre ellos (Apoc. 3:12);
quizás en la mano, tal como Él nos tiene esculpidas en las palmas de Sus
manos (Isaías 49:16).
Fiestas de Jehová
Las fiestas con sus sábados anuales, al igual al sábado semanal, fueron
mandatos para guardar “en vuestras generaciones” y se les llaman
estatutos y ordenanzas.
Ex. 12:14 la Pascua: “habéis de celebrarlo como solemne a Jehová

durante vuestras generaciones: por estatuto perpetuo”.
Ex. 12:17 panes sin levadura: “guardaréis este día como estatuto
perpetuo a través de vuestras generaciones”.
Lev. 23:14 y “estatuto perpetuo será por vuestras generaciones en
dondequiera que habitéis”.
Lev. 23:21 el Pentecostés: “será estatuto perpetuo en dondequiera
que habitéis por vuestras generaciones”.
Lev. 23:31 día de la Expiacíon: “estatuto perpetuo por vuestras
generaciones en dondequiera que habitéis”.
A pesar de que entendemos que “para siempre” puede significar “sólo

mientras algo perdure” y así se interpreta “el humo de su tormento que
asciende para siempre” tengamos cuidado al escoger aplicarlo
selectivamente a las cosas de Dios. Las fiestas de Jehová, los sábados de
Jehová, la Pascua de Jehová se describen con el mismo idioma duradero
como Sus sábados, Sus estatutos, y Sus derechos (Lev. 23:2-5, 37, 38;
Ezequiel 20:11-13, 18-20).
53
Desde luego, hoy día se sigue usando los panes sin levadura en la
observancia de la Santa Cena. Por lo menos, hemos perpetuado el símbolo
como Cristo lo instruyó.
Jesús las guardó

“Después de estas cosas había una fiesta de los judíos, y subió Jesús a
Jerusalén”. Juan 5:1. “Pero cuando sus hermanos habían subido, entonces
Él también subió a la fiesta, no abiertamente, sino como en secreto”. Juan
7:10.
“Entre los judíos el año duodécimo era la línea de demarcación entre la
niñez y la adolescencia. Al cumplir ese año, el niño hebreo era llamado
hijo de la ley y también hijo de Dios. Se le daba oportunidades
especiales para instruirse en la religión, y se esperaba que participase
en sus fiestas y ritos sagrados. De acuerdo con esa costumbre, Jesús
hizo en su niñez una visita de Pascua a Jerusalén. Como todos los
israelitas devotos, José y María subían cada año para asistir a la Pascua;
y cuando Jesús tuvo la edad requerida, le llevaron consigo”. (DTG,
8:56.1)
Pablo las guardó

“Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura
de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de
verdad”. 1 Corintios 5:7, 8.
En Hechos 18 Pablo se quedó un año y medio en Corinto donde “persua-
día a judíos y a griegos” que Jesús era el Cristo. Los sabatistas usan este
pasaje como evidencia importante que Pablo siguió adorando en el sépti-
mo día, años después de la muerte de Cristo en la cruz y así muestran en
el Nuevo Testamento la perpetuidad de los Diez Mandamientos y la
observancia del sábado por los apóstoles.
Ese mismo capítulo se cita como evidencia que hubo ocasiones cuando
Pablo no guardó las fiestas anuales, ya que se quedó en Corinto por más
de un año y no se menciona que observó ninguna de las fiestas señaladas,
y también porque no estaba en Jerusalén donde los judíos guardaban todas
las fiestas.
Empero Pablo no siempre guardó las fiestas en Jerusalén. Despidiéndose
dijo, “Es necesario que en todo caso yo guarde la fiesta que viene, en
Jerusalén”. Pero al informarse de que los judíos le ponían acechanza
(Hechos 20:3, 6), él decidió regresarse por Macedonia, y en Filipos guardó
la Pascua y “los panes sin levadura” con los gentiles conversos. De allí se
“apresuraba para, si le fuese posible, estar en Jerusalén el día de
Pentecostés” (Hechos 20:1-16). Pablo deseaba estar en Jerusalén para la
Pascua para pasarlo con sus compatriotas judíos, y sus enemigos deseaban
que estuviera allí para quitarle la vida. Por eso cambió su rumbo e hizo
planes para estar allí el día de Pentecostés. Sin embargo aunque no estaba
en Jerusalén guardó la Pascua. Elena de White comenta sobre esto en Los
Hechos de los Apóstoles:
“En Filipos, Pablo se detuvo para observar la Pascua. Sólo Lucas
quedó con él; los otros miembros del grupo siguieron hasta Troas para
esperarlo allí. Los filipenses eran los más amantes y sinceros de entre
los conversos del apóstol, y durante los ocho días de la fiesta, él
disfrutó de una pacífica y gozosa comunión con ellos”. (HAp, 313.3)
Pablo cambió su camino por Macedonia y se detuvo en Filipos para la
Pascua. Los filipenses eran los gentiles conversos de Pablo. No tenía
ninguna razón para guardar la Pascua con conversos gentiles; no eran sus
compatriotas judíos y ya eran cristianos. Por qué observar la Pascua ¿si era
uno de los ritos que les está diciendo a los judíos que ya no tienen que
guardar? Pasó con ellos los ocho días de la fiesta. ¿Por qué no guar-
-dar unos pocos días y seguir su camino? Ciertamente parece que está
honrando a toda su extensión la fiesta proscrita incluso el último sábado
en el octavo día.
La guardaron los primeros cristianos

“Así, Juan, de acuerdo a la costumbre de la Ley, empezó la celebración
de la fiesta de la Pascua en la tarde del día catorce del mes primero,
no hizo caso si cayese en sábado o en algún otro día”. (Bede’s The
Ecclesiastical History of the English People for the Great Histories
Series by Washington Square Press, N.Y., 1968)
Polícrates: “Por lo tanto guardamos el día sin desviarnos, sin añadir ni
quitar, pues en Asia [menor] duermen gran luminarios, y resucitarán
en la venida del Señor, vendrá del cielo con gloria a buscar a todos los
santos. Tal fueron Felipe... y dos de sus hijas... [p.507] También está
Juan quien descansó en el seno del Señor... Y también está Policarpo
en Esmirna, mártir y obispo; y Traseas, obispo y mártir de Eumenaea...
[También] Sagaris... Papirius,... y Melito... todos ellos guardaron el
día catorce de la Pascua según el evangelio, nunca se desviaron,
siguieron la regla de la fe. Y yo también, Polícrates, el menos de
todos, vivo de acuerdo a las tradiciones de mis compatriotas, y algunos
sigo. Pues 7 de mi familia eran obispos, y yo soy el 8o, y mis
55
compatriotas siempre guardaron el día cuando el pueblo quitó el
leudado. Por lo tanto, hermanos, yo que he vivido 65 años en el Señor
y conversado con hermanos de cada país, y he estudiado toda las
Santas Escrituras no temo las amenazas, pues los que son mayor que
yo dijeron, “Es menester obedecer a Dios antes que a los hombres”.
(9CB ASD, 362)
Fíjense que no dice “guardaron la Pascua según la tradición” sino
“guardaron el día catorce de la Pascua según el evangelio”.
Los valdenses la guardaron

Los católicos pasaron mucho tiempo fingiendo que esa gente no tenía
una historia continua sino que era una aberración en espacio y tiempo
de una mente judaizante doblada, peculiar, y herética…judíos y
católicos, ortodoxos y protestantes todos han procurado pretender que
no hubo una iglesia de sabatistas continua o siempre existente. Una
iglesia de sabatistas no-trinitaria guardadoras de las fiestas y de las
leyes alimentarias y las otras leyes no de holocaustos del A.T. y de
las enseñanzas de Cristo y del N.T. desde el tiempo de los após-toles
y de la iglesia del N.T. es una vergüenza”. (Editor’s Forward, The
Sabbatarians in Transylvania, by Samuel Kohn, 1998, p.3)
“Tras los elevados baluartes de sus montañas, refugio de los
perseguidos y oprimidos en todas las edades, hallaron los valdenses
seguro escondite. Allí se mantuvo encendida la luz de la verdad en
medio de la obscuridad de la Edad Media. Allí los testigos de la verdad
conservaron por mil años la antigua fe”. (CS, 4:63.2)

16. ¿Guardaremos las fiestas en el cielo o en la
tierra nueva?
De luna nueva a luna nueva comeremos del fruto del árbol de la vida y
vendremos a adorar delante de nuestro Creador (Isaías 66:23).
EDÉN EDÉN
Sacrificios Santa Cena
FRUTA FRUTA
CADA Guardar Luna Nueva Que nadie te CADA
MES Números 10:3,10 juzgue MES
El árbol de la vida en la tierra nueva dará “su fruto cada mes” tal como lo
daba en el Edén antes de la caída. Las lunas nuevas, tal como el sábado
semanal, siempre se han guardado y se seguirán guardando.
“Y me mostró un río puro de agua de vida, límpido como el cristal, que
provenía del trono de Dios y del Cordero. 2En el medio de la calle de
ella, y de uno y de otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que lleva
doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la
sanidad de las naciones”. Apocalipsis 22:1, 2.
“Esto preparará a los moradores de la tierra para las mansiones que Cristo
ha ido a preparar para todos los que le aman. Allí se congregarán en el
santuario de sábado en sábado, de luna nueva en luna nueva, para unir
sus voces en los más sublimes acentos de alabanza y agradecimiento a
Aquel que está sentado en el Trono y al Cordero para siempre jamás”.
(6TI, 42:368.3)
Después de describir la destrucción de los impíos que “hayan subido
contra Jerusalén” que corresponde a la reunión de Gog y Magog para
rodear la Santa Ciudad en Apocalipsis 20, Zacarías 14:16 dice,
“Todos los que queden de los pueblos que hayan subido contra Jerusalén
subirán de año en año para adorar al Rey, Jehová de los Ejércitos, y para
celebrar la fiesta de los Tabernáculos”.
Finalmente, la promesa de Jesús Mismo a Sus discípulos, “¡Con cuánto
anhelo he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca!
16
Porque os digo que no comeré más de ella, hasta que se cumpla en el
57
reino de Dios. 18Porque os digo que no beberé del fruto de la vid, hasta que
el reino de Dios venga”. Lucas 22:14-18.
Jesús dijo que la Pascua se cumplirá en el reino de Dios y cuando venga
Él de nuevo comerá y beberá del fruto de la vid. Así, por lo menos dos
fiestas, la primera y la última, de las siete santas convocaciones anuales se
describen en el contexto de la tierra nueva.

Apéndice A
Elena de White, Review & Herald, 6 de mayo, 1875
Por preceptos especiales, Dios le dio a Israel un conocimiento claro y definido
de Su voluntad y le mostró el deber del hombre a Dios y a su prójimo. El culto
que Dios merece fue claramente definido. Se estableció un sistema especial de
ritos y ceremonias para asegurar el recuerdo de Dios entre Su pueblo y
resguardar y proteger los 10 Mandamientos para no violarlos. (RH, 6-5-1875
par. 3)
“El pueblo de Dios, a quien Él llama Su tesoro peculiar, tuvo el privilegio de
tener un sistema doble de ley: la moral y la ceremonial. La una que señala hacia
atrás a la creación, para que se mantenga el recuerdo del Dios viviente que hizo
el mundo, cuyas demandas tienen vigencia sobre todos los hombres en cada
dispensación, y que existirá a través de todo el tiempo y la eternidad; la otra dada
debido a que el hombre transgredió la ley moral, y cuya obediencia consistía
en sacrificios y ofrendas que señalaban la redención futura. Cada una es clara y
diferente de la otra. La ley moral fue desde la creación una parte esencial del
plan divino de Dios, y es tan inmutable como Él Mismo. La ley ceremonial debía
responder a un propósito particular en el plan de Cristo para la salvación de la
raza humana. El sistema simbólico de sacrificios y ofrendas fue establecido
para que mediante esas ceremonias el pecador pudiera discernir la gran ofrenda:
Cristo. Pero los judíos estaban tan cegados por el orgullo y el pecado que sólo
unos pocos de ellos pudieron ver más allá de la muerte de los animales como una
expiación por el pecado; y cuando vino Cristo, a quien prefiguraban esas ofrendas,
no pudieron reconocerlo. La ley ceremonial era gloriosa; era el medio dispuesto
por Jesucristo en consejo con Su Padre para ayudar en la salvación de la raza
humana. Toda la dispensación del sistema simbólico estaba fundada en Cristo.
Adán vio a Cristo prefigurado en el animal inocente que sufría el castigo de la
transgresión que él había cometido contra la ley de Jehová”.
La ley de símbolos se extendió al futuro, a Cristo. Toda esperanza y fe se
centraba en Cristo hasta que el símbolo se encontró con la realidad de Su
muerte. Los estatutos y derechos especifican el deber del hombre a su prójimo,
llenos de instrucciones importantes, definen y simplifican los principios de la
ley moral, con el propósito de aumentar el conocimiento religioso y apartar al
pueblo escogido de Dios de las naciones idólatras.
Los estatutos en cuanto a matrimonio, herencia, y estricta justicia en el
trato del uno con el otro, eran peculiares y contrarios a las costumbres de las otras
naciones, y Dios lo diseñó para mantener a Su pueblo separado de las otras
naciones para que no se volviesen como las otras naciones que no tenían ni
amor ni temor a Dios; acontece hoy en esta edad corrupta que prevalece la
transgresión a la ley de Dios y existe la idolatría de manera temerosa. Si Israel
antiguo necesitaba esa seguridad, cuánto más nosotros para resguardarnos de
la confusión de los transgresores a la ley de Dios. Los hombres necesitan la
restricción y la disciplina para no apartarse de Dios.
El amor que Dios brindó al hombre a quien creó a Su imagen, lo llevó a dar a
Su Hijo a morir por sus transgresiones y para que el aumento del pecado no lo
59
llevase a olvidarse de Dios ni de la redención prometida, se estableció el sistema
de holocaustos como símbolo de la ofrenda perfecta del Hijo de Dios.
Cristo, fue el ángel asignado por Dios para ir con Moisés en el desierto,
dirigía a los israelitas a la tierra de Canaán. Cristo le dio a Moisés Sus
instrucciones especiales para Israel. “No quiero que ignoren, hermanos, que
nuestros padres estuvieron bajo la nube, y que todos atravesaron el mar. Todos en
Moisés fueron bautizados en la nube y en el mar; comieron la misma comida
espiritual; bebieron la misma bebida espiritual porque bebían de la Roca espiritual
que los seguía; y la Roca era Cristo”.
“En el último y gran día de la fiesta, Jesús se paró y dijo: Si alguno tiene sed,
venga a Mí y beba”. Esas palabras fueron clamadas cuando los judíos atestiguaron
del agua que fluía de la roca. La conmemoración de traer agua de la roca en el
desierto mueve el corazón del Hijo de Dios a una tierna compasión y piedad pues
con el entendimiento tenebroso no veían la luz que les traía. Cristo les dice que
Él es la roca. Yo soy la Agua Viva. Vuestros padres bebieron de la roca espiritual
que les seguía. Yo fui la roca. A pesar de su pecaminosa murmuración y rebelión,
solo por Cristo fueron favorecidos con
las bendiciones especiales que recibían continuamente”.
“Como consecuencia de la continua transgresión, la ley moral fue
repetida desde el Sinaí con aterradora grandeza. Cristo dio a Moisés pre-ceptos
religiosos que debían gobernar la vida cotidiana. Esos estatutos fueron dados
explícitamente para resguardar los 10 Mandamientos. No eran símbolos borrosos
que terminarían con la muerte de Cristo. Debían estar en vigencia para los
seres humanos de todos los siglos mientras durara el tiempo. Esos
mandamientos recibían su fuerza del poder de la ley moral, y clara y
definidamente explicaban esa ley”.
Cristo se hizo pecado por la raza caída, cargó con la culpabilidad de la
transgresión de la ley de Dios. Cristo como representante de la familia humana,
fue la cabeza y cargó sobre Sí los pecados del mundo. En semejanza a la carne
pecaminosa condenó al pecado en la carne. Reconoció las demandas de la ley
judía hasta la muerte, y la sombra encontró la figura. Cuando sanó
milagrosamente al leproso, lo mandó ir a los sacerdotes con una ofrenda, tal como
lo manda la ley de Moisés. Así, sancionó la ley que requiere ofrendas.
Cristianos que profesan ser estudiantes de la Biblia aprecian mejor que el
Israel antiguo, el significado de las ordenanzas ceremoniales que era necesario
observar. Los verdaderos cristianos reconocen lo sagrado e importante que son
los símbolos borrosos, al ver cumplir los eventos que esos símbolos representan.
La muerte de Cristo le da al cristiano el conocimiento correcto del sistema
ceremonial y explica las profecías que todavía a los judíos les son ocultas. Moisés
por sí solo no formuló ninguna ley. Cristo, el ángel asignado por Dios de andar
delante de Su elegido pueblo, le dio a Moisés estatutos y decretos necesarios para
una religión viva y para gobernar al pueblo de Dios. Los cristianos cometen un
grave error cuando llaman severa y arbitraria a la ley; y luego la contrastan
con el evangelio y misión de Cristo en Su ministerio en la tierra, como si fuese
opuesta a los preceptos justos a lo que llaman la ley de Moisés.

“La ley de Jehová, que existe desde la creación, estaba comprendida en los 2
grandes principios. ‘Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu
alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas’. Este es el principal
mandamiento. Y el 2º es semejante: ‘Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
No hay otro mandamiento mayor que éstos’. Estos 2 grandes principios abarcan
los primeros 4 mandamientos, que muestran el deber del hombre a Dios; y los
últimos 6, que muestran el deber del hombre a su prójimo. Los principios fueron
más explícitamente presentados al hombre después de la caída, y redactados para
adecuarse a la condición de inteligencias caídas. Esto fue necesario debido a que
las mentes de los hombres quedaron cegados por la transgresión”.
Dios bondadosamente habló Su ley y lo escribió con Su propio dedo en piedra,
realizando un pacto solemne con Su pueblo en el Sinaí. De todos los pueblos de
la tierra Dios los reconoció como Su tesoro peculiar. Cristo, que iba con Moisés
en el desierto, hizo los principios de la religión y la moralidad más clara con
preceptos particulares; especificó el deber del hombre con Dios y su prójimo,
con el propósito de proteger la vida y aguardar la sagrada ley de Dios, para
que no se olvidara en un mundo apóstata.
Los que profesan ser cristianos ahora claman, ¡Cristo! Cristo es nuestra
justicia, y afuera con la ley. Hablan y obran como si el único propósito de Cristo
en un mundo caído fue anular la ley del Padre. ¿Acaso no pudo haberse logrado
eso sin que el Unigénito Amado del Padre viniese a sufrir la abnegación y la
vergonzosa muerte de la cruz? Los ministros predican que la expiación le da al
hombre la libertad de quebrar la ley de Dios, y pecar, y luego alaban la gracia
gratuita y la misericordia revelada en Cristo a través del evangelio, mientras
aborrecen la ley de Dios.
Desechan la restricción de la ley, le dan rienda suelta a las pasiones corruptas
y a las inclinaciones del corazón carnal, y luego se jactan de la misericordia y
gracia del evangelio. A tales Cristo les dice: ‘No todo el que me diga, Señor,
Señor, entrará al reino de los Cielos; sino el que hace la voluntad de Mi Padre
en el Cielo’. ¿Cuál es la voluntad del Padre? Que guardemos Sus
mandamientos. Cristo, para imponer la voluntad de Su Padre, se hizo el
autor de los estatutos y preceptos dado al pueblo de Dios a través de Moisés.
Los cristianos que enaltecen a Cristo pero se oponen a la ley que gobierna a
la iglesia judía, ponen a Cristo en contra de Cristo.
“La muerte de Cristo por la redención del hombre, levanta el velo y proyecta
un torrente de luz que llega a centenares de años en el pasado sobre toda la
institución del sistema judaico de religión. Sin la muerte de Cristo todo ese
sistema no tiene significado. Los judíos rechazan a Cristo, y por lo tanto para
ellos todo su sistema de religión es indefinido, inexplicable, e incierto.
Atribuyen tanta importancia a caducas ceremonias de símbolos que se
cumplieron, como le dan a la ley de los 10 mandamientos, que no es símbolo sino
una realidad tan perdurable como el trono de Jehová. La muerte de Cristo
ensalza el sistema judío de símbolos y ceremonias mostrando que habían sido
señaladas por Dios y con el propósito de conservar vivo la fe en los corazones
de Su pueblo”.
61
¿Qué de las Fiestas?
Buena pregunta.
Este folleto contesta las siguientes preguntas:
¿Hoy día hay que guardar los estatutos?

¿Qué está incluido en los estatutos?
¿Las fiestas contienen principios morales?
¿Hay que guardar los estatutos para ser salvos?
¿Por qué guardamos algunos de los estatutos
pero no todos?
¿Son los holocaustos parte de las fiestas?
¿Es un estatuto o una fiesta a Jehová
el séptimo día sábado?
¿Cuántos sábados hay?
¿Cuál es la bendición del sábado?
¿Por qué guardamos el sábado semanal
pero no los otros sábados?
¿Hizo Dios que cesaran las fiestas?
¿Qué fue clavado en la cruz?
¿Cuántas leyes hay?
¿Se abolieron algunas leyes en la cruz?
¿Son las fiestas sombras o símbolos
que terminaron con la realidad?
¿Hoy día debieran los cristianos guardar las fiestas?
¿Guardaremos las fiestas en el cielo
o en la tierra nueva?

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¿Qué de

Adrian Ebens y Gary Hullquist

Adrian Ebens y Gary Hullquist, 2016

Talking Rock Sabbath Chapel

Impreso y distribuido en español por

4 ¿Qué de las Fiestas?

¿Hoy día es necesario guardar las fiestas?

1. ¿Hoy día hay que guardar los estatutos?

Ahora, veamos las respuestas a cada una de estas preguntas.

6 ¿Qué de las Fiestas?

“Acuérdate de la ley de mi siervo Moisés, a quien encargué en

Palabras de otro profeta sobre el mismo tema:

“Cristo dio a Moisés preceptos religiosos que debían gobernar la

“En estos postreros días hay un llamado del Cielo invitándote a

Si aceptas el testimonio de Elena de White antes de 1898, entonces estas

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Testimonios tomo 2, p. 507

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Hebreos 13 “15Así que, por medio de Él, ofrezcamos siempre a

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10 ¿Qué de las Fiestas?

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Las tres áreas que se disculparon por no aceptar la invitación a la fiesta, la

Zacarías 14 “16Todos los que queden de los pueblos que hayan

Mientras la fiesta de Tabernáculos es la ocasión a reunir de “año en año”

Mandamientos y Estatutos [leyes]

Noten la relación definida entre los estatutos [leyes] y los mandamientos.

“si prestas atención a Sus mandamientos y guardas todas Sus leyes”

Los mandamientos escritos en piedra fueron puestos en el arca del pacto.

Los mandamientos fueron primero invisibles; después se dieron los

Esta relación entre los mandamientos y los estatutos se refleja en la

Fuente Invisible Manifestación Visible

14 ¿Qué de las Fiestas?

Los estatutos resguardan los diez mandamientos, expresan los principios

Ahora la referencia completa de Elena de White 1900, sin elipsis:

“‘Jehová tu Dios te manda hoy que cumplas estos estatutos y

Deuteronomio 26 instruye al pueblo a

Deuteronomio 28 lista todas las bendiciones por guardar los estatutos y

Deuteronomio 14 tiene más estatutos:

16 ¿Qué de las Fiestas?

3. ¿Las fiestas contienen principios morales?

18 ¿Qué de las Fiestas?

4. ¿Hay que guardar los estatutos para ser

“Porque éste es el pacto que haré con la casa de Israel, después

5. ¿Por qué guardamos algunos de los estatutos

Algunos alegan que no es cosa de escoger y elegir los estatutos que

La epístola a los hebreos hace una alusión bíblica a los sacrificios de

El holocausto de animales inocentes cesó con la muerte del Cordero de

20 ¿Qué de las Fiestas?

6. ¿Son los holocaustos parte de las fiestas?