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VIGILIA DE PENTECOSTÉS 2020

CHINAUTA casa “Buenos Aires” 30 de mayo de 2020
SEMINARIO INTERNO C.M. PROVINCIA DE COLOMBIA
Ven Espíritu Santo enciende el fuego de tu amor:
En nuestras familias Y COMUNIDADES
En cada uno de NOSOTROS
En NUESTRA CONGREGACIÓN DE LA MISIÓN Y PROVINCIA DE COLOMBIA

Preparación ambientación.
Bienvenida / acogida: cantos de alabanza y animación
Animador 1: Monición Ambiental

Queridos hermanos: El Señor nos ha reunido hoy para esta Vigilia de espera de la celebración del día de
Pentecostés.
Pentecostés comenzó como una celebración judía de la cosecha de trigo a finales de la primavera, cuando la
cosecha estaba lista para la recolección.
Gradualmente esta fiesta pasó a celebrarse a los 50 días de Pascua y por eso se le dio el nombre de Pentecostés
que quiere decir 50 días.

Esto ocurrió así porque los judíos calcularon que cuando sus padres salieron de Egipto llegaron cincuenta días
después al Monte Sinaí donde Dios hizo la Alianza con su pueblo y el pueblo con su Dios. Así, Pentecostés se
convirtió en la fiesta de esta Alianza.
Para nosotros ahora esta fiesta tiene un sentido nuevo: celebrada 50 días después de la nueva Pascua, la Pascua
de Cristo - paso de la muerte a la Vida, inicio de la nueva y eterna Alianza - es la fiesta del regalo del Espíritu
Santo que inaugura un tiempo nuevo, el tiempo de la nueva alianza.
En la Iglesia esta celebración es muy importante, porque en ella siempre se ha visto el inicio público de la
Iglesia que se lanza a cumplir su misión de continuadora de la misión de Jesús. Es el día de la Iglesia, de
la comunidad cristiana, porque en este día, y para siempre el Espíritu Santo la anima, la impulsa, la
dirige, la fortalece, la conduce; la defiende, la vivifica, le recuerda todo lo que Jesús hizo y dijo, la ilumina
y lo hace presente en ella.

Y es, por esto que, siguiendo una tradición muy antigua, la Iglesia ya desde la Víspera se reúne en oración para
pedir con insistencia este don del Espíritu Santo, para que se renueve en nuestro interior y en el interior de la
Iglesia y el mundo.
En esta noche de vigilia, de manera especial vamos a orar para que el Espíritu Santo encienda el fuego del amor
en nuestras familias y comunidades, en cada uno de los que participamos en esta vigilia, en nuestra
Congregación de la Misión y nuestra Provincia con sus regiones. Y de manera especial pidamos las gracias del
Espíritu Santo para nuestro mundo que vive en medio de esta pandemia que a esta generación nos ha tocado.

Nos acompaña María, quien junto con los Apóstoles esperó y recibió el don del Espíritu Santo.
Iniciamos con gozo y esperanza esta vigilia de PENTECOSTÉS.

1) EL ESPÍRITU SANTO NOS REGALA UNA NUEVA ESPERANZA.

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Cantos Mosaico:
Con este canto ingresa quien preside la Vigilia, un miembro de la vigilia trae la cruz. La Cruz se ubica en un lugar
destacado.

PRESIDENTE:

EN EL NOMBRE DEL PADRE DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO. Todos: Amén.

Queridos hermanos, iniciamos nuestra Vigilia de oración a la espera del Espíritu Santo, con un solo corazón queremos
orar, compartir y testimoniar nuestra fe, esperanza y caridad.

ACTO PENITENCIAL

PRESIDENTE:
Supliquemos a Jesucristo, que con su resurrección triunfó de la muerte y del mal, que nos conceda hoy el Don de su
Espíritu y que transforme nuestros corazones... Señor Jesucristo perdona nuestro pecado puesto que te hemos ofendido a
Ti y a nuestros hermanos, Tú sabes lo que hay en nuestro corazón, limpia Señor nuestro pecado…

Se hace una invitación al arrepentimiento, y reconociendo los pecados le pedimos a Dios que a través de este
momento de la vigilia, nos motive a cambiar, a tener un corazón nuevo… a volver a la casa del Padre.

UN VIDEO CORTO sobre el perdón (se suprime)

Canto: Dame un nuevo corazón u otro

PRESIDENTE:
OREMOS:
Oh Dios, hoy nos reunimos con fe ante ti,
te ofrecemos nuestros corazones abiertos a tu misterio;
te ofrecemos nuestras fuerzas y flaquezas,
las que hoy se renuevan en tu Santo Espíritu,
las que se acrisolan en tú Hijo
y se comprenden en tu amor.
Por Nuestro Señor Jesucristo. Todos: Amén

Canto RENUÉVAME –instrumental- (mientras se canta se reparten las velas que serán encendidas en dos momentos de la vigilia)

PRESIDENTE:

El Señor nos ha hablado con amor y nos invita a compartir nuestra fe a quienes están lejos de Él y de nuestra Iglesia. Hoy
queremos comprometernos con un corazón atento a las necesidades de nuestros hermanos. En este primer momento de la
esperanza queremos acoger en este lugar el Cirio Pascual. Es la presencia de Cristo Resucitado entre nosotros, que
fortalece nuestra esperanza, nos colma de alegría y nos envía a la misión.

Cirio Pascual
El cirio es traído por uno de los seminaristas; luego es puesto en medio nuestro y en silencio nos dejamos iluminar por la
luz que brota de él por algunos minutos. Después todos encienden sus velas, tomando fuego desde el Cirio. Una vez que
todos tengan sus velas encendidas el presidente invita a la oración.

PRESIDENTE: Señor Jesús, Dios de Dios, luz de luz; presente en medio de nosotros, ilumina nuestras vidas, ilumínanos
enviando tu Espíritu Santo.
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Ven Espíritu Santo,

Llena los corazones de tus fieles
Todos: Y enciende en ellos el fuego de tu amor.
Envía tu Espíritu Santo y todo será creado.
Todos: Y renovarás la faz de la tierra.
Cantamos El Himno del Gloria -Martín Valverde- u otro

2) CON EL ESPÍRITU SANTO A LA ESCUCHA DE LA PALABRA

Ingreso de la Biblia
Con un canto apropiado (Tu palabra me da vida- u otro conocido-) ingresa un seminarista con la Biblia en alto y la
ubica en lugar destinado.

PRESIDENTE:
Acojamos la Palabra de Dios. Dios quiere hablarnos esta noche.
Con el Espíritu Santo nos disponemos a la escucha de la Palabra que nos transmite la Vida abundante. Dios ama a todas
sus creaturas, Él nos enviará su Espíritu de verdad para que permanezcamos en estado de misión y así busquemos a
quienes no lo conocen, especialmente a las familias alejadas de la Iglesia y en ellas a los jóvenes vulnerables.

Seamos fuertes y comprometidos en el discipulado, en la misión de anunciarlo ¡resucitado!

LECTURA DE LOS HECHOS DE LOS APÓSTOLES 2, 1-11

SALMO 103 CANTADO “envía tu Espíritu Señor, y renueva la faz de la tierra”
Canto: Aleluya
Presidente: Lectura de la Palabra de Dios: Juan 20, 19-23 (texto del 31-05-2020)

Después de leída la palabra en común, se hacen los grupos en forma de “fogones”, con la compañía de un
miembro de los grupos apostólicos que guiará la Lectio y tendrá una Biblia.

Ideas para la Lectio, aunque esta puede tomar otro rumbo de reflexión al interior de los grupos –el Espíritu Santo
nos ilumina-

QUE DICE EL TEXTO

 ¿Qué día y en qué tiempo se presentó Jesús a sus discípulos?

 ¿Por qué los discípulos estaban reunidos a puerta cerrada? – en esta pandemia nosotros estamos a puerta cerrada, no
por miedo aunque no lo podemos negar del todo pero si por responsabilidad social y disposición del gobierno
provincial
 ¿Cómo les saluda Jesús? ¿Cómo reaccionan los discípulos?
 ¿De qué manera y para qué Jesús les comunica el don del Espíritu?
 ¿Qué poder les otorga Jesús a sus discípulos?

QUE ME DICE EL TEXTO

 ¿Qué experiencias tienes de la acción del Espíritu Santo en tu vida?

 También hoy vivimos encerrados y atemorizados. ¿Cuáles son las cosas que me llenan de temor y me encierran en mí
mismo?
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 En mis labores pastorales si tengo algún compromiso con la parroquia donde hago el apostolado, o en las cosas que yo
hago en mi vida ¿me dejo guiar por las motivaciones del Espíritu Santo? ¿Hasta dónde dejo que actúe en mí y en mis
planes el Espíritu Santo?
 El Espíritu Santo es el aliento de vida del Resucitado, ¿de qué manera debería notarse su presencia en nuestras vidas?

A QUE ME COMPROMETE ESTE TEXTO

 Compromiso: Piensa en algunas acciones concretas que te pueden ayudar a revestirte del Espíritu de Jesucristo. A
nivel personal, a nivel del Seminario Interno, a nivel de la comunidad.

Oración final
Señor Jesús, así como con tus discípulos, hoy nuevamente sopla sobre cada uno de nosotros
para que vivamos un nuevo Pentecostés en nuestra vida y en nuestras comunidades.
Así como con tus discípulos, que experimentemos tu presencia viva
junto a nosotros y que nos sintamos enviados por ti.
Hoy, nuevamente, Señor, llénanos de tu Espíritu Santo y transforma nuestras vidas,
para que viviendo en plenitud tu vida, seamos testigos alegres de tu Palabra.
Haz, Señor, que hoy experimentemos plenamente la presencia transformadora de tu Espíritu
en nuestra vida, en nuestras comunidades, en toda la Iglesia.

Cantos de animación
MIENTRAS LOS CANTOS DE ANAIMACIÓN SE REPARTEN LOS DONES

3) EL ESPÍRITU SANTO NOS CONTAGIA DE ALEGRÍA

El Espíritu Santo nos regala sus siete dones: Isaías 11, 1-9
Oremos con el signo de los dones …contemplémoslo

Animador: Ahora vamos a reflexionar y orar sobre los dones del Espíritu Santo, que son entregados
gratuitamente por Dios para que quien los recibe, los ponga al servicio de los hermanos. Según se vaya
anunciando uno de los dones se pasará una de las llamas de fuego que tiene el nombre de ese don.
1) Don de sabiduría:
Juan David Cardona Espitia: Es el don que ilumina nuestra inteligencia. Nos da un corazón y unos ojos para
distinguir la verdad de la mentira y creer en ella.

ORACIÓN: Espíritu Santo, danos tu sabiduría, para que como discípulos y misioneros podamos distinguir
claramente lo que viene de ti y rechazar lo que es del enemigo malo que nos quiere confundir.
Todos cantamos: /Espíritu Santo llénanos de ti/ /oh Señor, llénanos de ti/ u otro canto
2) Don de consejo:
Juan Sebastián Ríos Guarín: Es el don que conduce a elegir bien entre las distintas alternativas que la vida
propone. Hace que en el momento de escoger, escojamos lo que más nos conviene: Inspira lo que se debe hacer
o decir y cómo se debe hacer o decir. Lo que se debe evitar y lo que se debe callar. Nos llena de inspiraciones.
ORACIÓN: Espíritu Santo concédenos buscar siempre tu sabio consejo para que nuestro corazón siempre este
inclinado hacia Ti, y podamos encontrar la libertad en la verdad.
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Todos: /Espíritu Santo llénanos de ti/ /oh Señor, llénanos de ti/ u otro canto
3) Don de temor de Dios:
Jesús Abraham Cantillo Delgado: Es el don de respeto a Dios y a los hombres. El temor de Dios es la actitud
que nos hace vivir de manera constante bajo la mirada del Señor, que es una mirada de Padre que te conoce y te
ama como no te puedes imaginar… y quiere el verdadero bien para ti. Es pues un temor que nace del amor. Y
lleva a actuar como a Dios le gusta, porque ese es el bien más grande.
ORACIÓN: Espíritu Santo, sopla sobre nuestras familias para que nos des este santo temor de Dios que nos
lleve a respetarlo obedeciendo siempre sus mandatos de amor.
Todos cantamos: /Espíritu Santo llénanos de ti/ /oh Señor, llénanos de ti/ u otro canto
4) Don de ciencia:
Mario Fernando Chaves Dejoy: Es el don que nos hace penetrar en el sentido de la vida, en el conjunto del
mundo y de la historia como lugar donde está presente Dios. A El no le vemos, pero podemos ver sus huellas y
señales en todo lo creado. Es lo que se llaman los “signos de los tiempos”… Gracias a este don podemos evitar
las ideologías que engañan, ser sensibles a las necesidades materiales y morales de las personas, trazar planes y
proyectos para transformar la realidad, descubrir la belleza y la hondura del conocimiento humano, gustar del
estudio y de la reflexión, saborear la belleza y el arte
ORACIÓN: Bendito seas Espíritu de Verdad. Concede a todas las familias y a tu Iglesia ser infatigables
buscadores de la verdad, para que todos amemos la verdad y restablezcamos entre nosotros relaciones
saludables para vivir en paz.
Todos cantamos: /Espíritu Santo llénanos de ti/ /oh Señor, llénanos de ti/ u otro canto
5) Don de entendimiento:
Ricardo Andrés Ortega Vides:
Es un don referido a la fe. La fe es una virtud por la cual nos confiamos con abandono total en las manos de
Dios que se ha manifestado en Jesús el Señor que vive en su Iglesia. Es apoyarse en las palabras del Señor que
no engaña y encontrar en ellas el apoyo para nuestra vida. Gracias a la fe, sentimos una llamada para reunirnos
en comunidad, para comunicarnos, para sostenernos mutuamente. La fe nos hace Iglesia.
ORACIÓN: Bendito seas Espíritu Santo, derrama tu fuego para que nuestra fe sea purificada y podamos
constantemente vivir como hijos renacidos en tu fuerza. Que nuestra fe nunca vacile, para que podamos dar
testimonio como familias de la bondad de nuestro Dios.
Todos cantamos: /Espíritu Santo llénanos de ti/ /oh Señor, llénanos de ti/
6) Don de piedad:
Juan David Cardona Espitia: El don de piedad puede considerarse como la orientación de todo el corazón a
Dios. Es una especie de afecto entrañable y de ternura filial hacia Dios. Es como estar enamorados de El y
desear darle gloria en todo. Es lo que nos hace sentir un cariño especial por todo lo que tenga relación con su
Reino. Es el don que nos hace ver a Dios en el rostro del hermano. Es el don de la fraternidad universal.
ORACIÓN: Bendito seas Espíritu Santo, ven y llénanos de tu alegría, para que como familias nos esforcemos
día a día para que nuestra vida corresponda a nuestra vocación de ser imagen de Dios y así, podamos nosotros
ser testimonio del amor, del perdón, del cuidado amoroso de unos con otros.
Todos cantamos: /Espíritu Santo llénanos de ti/ /oh Señor, llénanos de ti/ u otro
7) Don de fortaleza:
Juan Sebastián Ríos Guarín: El don de la fortaleza nos ayuda a ser fieles y perseverantes en la fe, sin dejarnos
llevar por el desánimo o por el qué dirán. El Espíritu me hace superar las dificultades, eludir los peligros,
afrontar las persecuciones. Me da la fuerza de Dios para vivir y anunciar el Evangelio sin miedos ni complejos,
transformándome en testigo arriesgado y audaz.
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Oración: Bendito seas Espíritu Santo, ven y renueva el rostro envejecido de la tierra. Danos fortaleza para que
nuestras familias, el seminario interno y nuestra comunidad se mantengan firmes en la construcción de la paz de
tu Reino.
Todos cantamos: /Espíritu Santo llénanos de ti/ /oh Señor, llénanos de ti/ u otro

4) EL ESPÍRITU SANTO NOS ENVÍA A LA MISIÓN

Para este último momento necesitamos tener preparada una fuente con agua, bien adornada en un lugar destacado.
También una fuente pequeña y un ramo o hisopo para asperjar a los asistentes a la Vigilia. Se tendrán preparadas velas
para cada participante.

Animador 1:
Hemos llegado al último momento de nuestra Vigilia. Es el momento del envío. Lo que aquí hemos vivido, compartido,
rezado y celebrado no lo podemos guardar para nosotros.

animador 2: En este momento renovaremos nuestra fe para salir a la misión….

Animador 1: Escuchemos nuevamente la Palabra de Dios. Palabra que hoy quiere transformarnos en auténticos
discípulos misioneros.

Canto de acogida de la Palabra de Dios

Se proclama Mateo 28, 16-20

PRESIDENTE: Invita a acoger el envío que Jesús nos hace hoy a permanecer en estado de misión.

Animador 1: Cerca del Cirio Pascual está preparada una fuente con agua para la renovación de nuestras promesas
bautismales.
En este momento se invita a todos a encender nuevamente las velas que ya tienen, desde el Cirio Pascual, van
compartiendo la luz de Cristo unos con otros en sentido de comunión y misión.

PRESIDENTE:

Queridos amigos: el Señor nos ha permitido vivir un encuentro íntimo con él. Durante esta noche, nos hemos encontrado
con Él en la oración, en la adoración, en el compartir fraterno y en su palabra viva. Nos ha permitido también ver la sed y
el hambre que tenemos de El; tanto nosotros, como tantas personas alejadas e indiferentes.

Somos conscientes de que no podremos iluminar a otros si no renovamos nuestro ser de “Hijos de Dios”, nuestra
disponibilidad para ser otros Cristos en el mundo, en nuestras parroquias, en nuestras familias y vivir plenamente nuestra
vocación de discípulos y misioneros.

Por lo tanto los invito a renovar nuestro bautismo, digámosle nuevamente “Sí” al Señor, digámosle que estamos
disponibles para servir y ser sus discípulos misioneros en todo momento.

- Bendición del Agua

Señor, Padre Santo, dirige tu mirada sobre nosotros que, redimidos por tu Hijo, hemos nacido de nuevo del agua y del
Espíritu Santo en la fuente bautismal:
Concédenos te pedimos, que todos los que reciban la aspersión de esta agua + queden renovados en el cuerpo y en el alma
y te sirvan con limpieza de vida. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.
Renovación de las promesas
- Queridos hermanos ¿Quieren, por lo tanto, renovar su fe en esta noche de Pentecostés?
Sí, quiero
¿Creen en Dios Padre, todopoderoso, creador del cielo y de la tierra?
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- Sí, creo
¿Creen en Jesucristo, su único hijo, nuestro Señor que nació de Santa María Virgen, murió, fue sepultado, resucitó
de entre los muertos y está sentado a la derecha del Padre?
- Sí, creo
¿Creen en el Espíritu Santo, en la santa Iglesia católica, en la comunión de los santos, en el perdón de los pecados,
en la resurrección de los muertos y en la vida eterna?
- Sí, creo

Digamos todos:
Esta es nuestra fe,
Esta es la fe de la Iglesia,
Que nos gloriamos de profesar en Cristo Jesús.
Amén.

El Sacerdote rocía a los participantes con el agua bendita mientras el coro canta.
Preparación del signo: Finalizada la renovación de las promesas bautismales se invita a los participantes a recordar el
compromiso personal que hicieron durante el momento del compartir de la palabra o a pensar en un compromiso que se
pueda cumplir.

Se dan unos minutos para pensar.

Cuando haya sido suficiente este tiempo los animadores los invitarán a pronunciar estas últimas palabras:

Los animadores deben preocuparse que esto se haga en un tono muy alto y enérgico

Yo………………….. Impulsado y guiado por el Espíritu Santo quiero ser discípulo y misionero tuyo, ¡Para que en Jesús,
quienes me rodean, mi familia, amigos y muchos tengan vida abundante! AMÉN

Se sella este momento con un gran abrazo de paz, cantos y alabanzas.

Termina la Vigilia con:

La secuencia al Espíritu Santo… (Quienes la sepan de memoria la siguen con nosotros)

Ven Espíritu Divino, tregua en el duro trabajo,

manda tu luz desde el cielo, brisa en las horas de fuego,
Padre amoroso del pobre; gozo que enjuga las lágrimas
don en tus dones espléndido; y reconforta en los duelos.
luz que penetra las almas;
fuente del mayor consuelo. Entra hasta el fondo del alma,
divina luz y enriquécenos.
Ven, dulce huésped del alma, Mira el vacío del hombre
descanso de nuestro esfuerzo, si Tú le faltas por dentro;
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mira el poder del pecado Reparte tus Siete Dones

cuando no envías tu aliento. según la fe de tus siervos.
Por tu bondad y tu gracia
Riega la tierra en sequía, dale al esfuerzo su mérito;
sana el corazón enfermo, salva al que busca salvarse
lava las manchas, infunde y danos tu gozo eterno.
calor de vida en el hielo,
doma el espíritu indómito,
guía al que tuerce el sendero.

La bendición solemne del PRESIDENTE.

Materiales fundamentales:
- Biblia grande -fuente para bendición y aspersión del agua - Cirio Pascual - La cruz
LA PALABRA
- Velas para cada uno….- Letrero de cada uno de los dones del E.S. - Fuente de agua bien adornada con el hisopo
para asperjar - Bandera colombiana, si se quiere como un signo para pedir el E. Sto para Colombia