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Ametralladora PDF

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Ametralladora.

Las ametralladoras generalmente son pesadas, voluminosas y están


montadas sobre un afuste (soporte). El uso moderno de esta palabra se refiere a las
ametralladoras automáticas, que fueron precedidas por las ametralladoras manuales
con algunos detalles automáticos.

En la primera generación de ametralladoras (La “Mitrailleuse” (Metralleta) Montigny)


los disparos y la cadencia se realizaban gracias a la fuerza muscular del sirviente, al
accionar éste una manivela.

Sumario
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 1 Historia
 2 Evolución
o 2.1 Impacto en la guerra
o 2.2 Cambios en los modelos
o 2.3 Ametralladoras antiblindaje
o 2.4 Desgaste del cañón
 3 Véase también
 4 Fuentes

Historia

Prototipo de ametralladora construida a partir de modelo de Leonardo da Vinci, expuesta


en La Habana

Ametralladora Browning.
El deseo de todos los ejércitos de poseer armas capaces de disparar en forma
continuada, de descarga o en combinación de ambas, pero en cualquier caso con
rapidez, es tan antiguo como la misma pólvora. También lo son las ideas para llevar
estos deseos a cabo, siendo la primera, principal y más necesaria la de retrocarga.

Pero la materialización práctica de estos deseos no fue posible (y no por falta de


ideas) hasta bien entrado el Siglo XIX cuando la retrocarga, gracias al cartucho
metálico tal y como le conocemos hoy día, fue una realidad práctica.

Aunque existieron a lo largo del Siglo XIX armas capaces de disparar de forma
parecida a la ametralladora, como las armas Gatling, con media docena o más
cañones de fusil dispuestos en posición circular alrededor de un eje y alimentados por
un cargador vertical o cilíndrico, no eran verdaderas ametralladoras, ya que la energía
para el proceso se obtenía de una manivela accionada por un soldado, mientras que
en la ametralladora auténtica solo es necesario montar el cierre del arma y apretar el
gatillo para que el arma automáticamente siga disparando hasta soltar el gatillo o
agotar la munición.

En 1884 aparece la primera auténtica ametralladora, inventada por el estadounidense


nacionalizado británico Hiram Maxim y utilizaba la presión de salida de los gases de
proyección para provocar el retroceso del cañón, el montado del cierre, la expulsión
del casquillo y la alimentación con otro nuevo cartucho obtenido de una cinta en el
lateral del arma.

Maxim realizó demostraciones por toda Europa y su ametralladora fue adoptada por la
mayoría de los ejércitos del continente. En 1885 en Estados Unidos el fabricante
Browning saca un modelo de ametralladora accionado por el gas que se recoge del
cañón a través de un émbolo dentro de un tubo conectado al cañón del arma, sistema
adoptado después para los fusiles semiautomáticos y de asalto.

En 1917 Browning saca su modelo más famoso que sigue siendo empleado en la
actualidad y que funciona por el retroceso del cañón. Las Browning fueron adoptadas
por el ejército estadounidense y en muchos otros países de la OTAN posteriormente,
cambiando sus calibres con el tiempo.

Evolución
Impacto en la guerra

La Maschinegewehr 08 (MG08), ametralladora alemana de la Primera Guerra Mundial.


Al aparecer cambió decisivamente el sistema de combatir que no había sufrido
grandes evoluciones desde las épocas napoleónicas y junto a la artillería obligó al uso
de trincheras y convirtió la guerra en líneas estáticas desde las que se lanzaban
asaltos masivos de infantería contra las líneas enemigas que normalmente acababan
en masacres inútiles.

Como respuesta a la ametralladora aparecieron el carro de combate para asaltar las


líneas defendidas por ametralladoras y las primeras soluciones que permiten a la
infantería llevar armas automáticas para el asalto como el subfusil o las primeras
ametralladoras ligeras.

Cambios en los modelos

Ametralladora ligera FN Minimi.

Ametralladora CETME Ameli.

Ametralladora de propósito general MG 34.

Ametralladora MG 42.

Ametralladora alemana de la Primera Guerra Mundial, modelo Maschinengewehr 08


(MG08). Durante la Primera Guerra Mundial las ametralladoras eran armas pesadas,
montadas sobre un trípode o ruedas al estilo de un pequeño cañón. Para resistir las
ráfagas continuas sin quedar inoperativas, los cañones iban montados dentro de
cilindros que se podían rellenar con agua para refrigerar el arma.
Las ametralladoras ligeras de la primera guerra y de entreguerras son en apariencia
grandes fusiles diseñados para tiro automático como apoyo al pelotón de fusileros
tradicional. Armas como la estadounidense BAR (Browning Automatic Rifle) empleada
en las dos guerras mundiales o la inglesa ametralladora Bren, empleada en la
segunda, entran dentro de esta categoría. Normalmente se alimentan mediante
cargadores o tambores de entre 30 y 100 cartuchos y disponen de un pequeño bípode
en el extremo para disparar cómodamente tumbado.

El concepto permanece hoy en día, y la mayoría de las ametralladoras actuales de


este tipo son fusiles de asalto modificados para dar una mayor duración al cañón, con
un bípode y cargadores de más capacidad que los estándares del fusil del que
proceden, aunque también hay modelos actuales de cinta diseñados expresamente
como ametralladoras ligeras como la ametralladora FN Minimi belga (empleada por el
ejército estadounidense y muchos países de la OTAN) y la ametralladora CETME
Ameli española.

Los alemanes poco antes de la Segunda Guerra Mundial inventaron a su vez la


ametralladora polivalente o media. Este arma puede actuar como una ametralladora
de posición normal al estilo de la Primera Guerra Mundial montada en un trípode
pesado con miras para actuar hasta 1.200 metros o puede ser desmontada, acoplada
a un bípode y utilizada en el rol de ametralladora ligera, pero con una potencia muy
superior a las concebidas expresamente como tales.

En la Segunda Guerra Mundial los alemanes emplearon la ametralladora MG34 y


la ametralladora MG42, esta una versión simplificada de la anterior, con la mayor
parte de sus piezas en chapa estampada para abaratarla. La ametralladora
MG42 permanece hasta hoy en día en servicio en la OTAN con la
denominación ametralladora MG3. Otros modelos del estilo son la ametralladora
M60 estadounidense de la época de Vietnam o la ametralladora PKM rusa.

Ametralladoras antiblindaje

Ametralladora Pesada PKS.

En la Segunda Guerra Mundial apareció también un tipo de ametralladoras de gran


calibre, alcance y capacidad de penetración, las ametralladoras pesadas, empleadas
normalmente como antiaéreas o para destruir vehículos con poco blindaje, son
capaces de literalmente partir a un soldado en trozos, por lo que también se emplean
como ametralladoras de posición y suelen ser las elegidas para montarlas en carros
de combate como arma auxiliar, blindados de asalto o helicópteros. Con calibres entre
el 0.50 (12,70 mm) y 20 mm, muchas tienen casi 3.000 metros de alcance y pueden
perforar blindajes ligeros.

Un tipo de arma relacionada con las ametralladoras pero que normalmente necesita
ayuda mecánica adicional a los gases del disparo para su funcionamiento es el cañón
automático, de entre 20 y 30 mm, montado en torres en blindados de asalto o en
helicóptero y aviones de caza. En ocasiones dispone de múltiples tubos al estilo de
los antiguos Gatling para soportar el desgaste y calentamiento al que se ve sometida
el arma durante su uso.

Este tipo de cañón, que emplea normalmente proyectiles con núcleo perforante y
velocidad de más de 1.000 m/s, permite perforar blindajes de más entidad y destrozar
vehículos enemigos con gran facilidad. Por ejemplo el cañón automático multitubo
GAU-8 de 30 mm que emplea el avión cazacarros Fairchild-Republic A-10
Thunderbolt II es capaz de perforar el blindaje superior de prácticamente cualquier
carro de combate o de dañarlo gravemente provocando heridas a los ocupantes por
los fragmentos desprendidos.

Desgaste del cañón

Ametralladora M60.

Las ametralladoras son armas que sufren un fuerte desgaste debido a la gran
cantidad de impactos y roces de sus mecanismos y a la erosión y calor que se genera
en el cañón. Los cañones no suelen resistir más de unos centenares de disparos
continuos sin dilatarse de forma que se puede llegar a inutilizar temporalmente el
arma, por lo que hay que dosificar los disparos en forma de ráfagas con intervalos, y
los rayados del cañón lo desgastan de tal forma que hay que sustituir todo el cañón
cada 10.000 ó 15.000 disparos para mantener las características balísticas del arma.

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