Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Interfase Sólida

Descargar como doc, pdf o txt
Descargar como doc, pdf o txt
Está en la página 1de 15

INTERFASE SÓLIDA

Adsorción en la interfase sólido-gas. El estudio de la adsorción de gases por sólidos tiene


una gran aplicación práctica, entre otras muchas, para la preparación de máscaras antigás, la
eliminación de olores molestos de locales y de alimentos, y para la medida de las dimensiones
de las partículas de un polvo.

El grado de absorción de un gas por un sólido depende de la naturaleza química del


adsorbente (el material usado para adsorber el gas) y del adsorbato (la sustancia que se
adsorbe), del área superficial del adsorbente, de la temperatura y de la presión parcial del gas
adsorbido. En general, se consideran dos tipos de adsorción: la física o de van der Waals y la
adsorción química, o quimisorción. La adsorción física, asociada con las fuerzas de van der
Waals, es reversible, denominándose desorción al proceso contrario, o sea, de separación del
adsorbato de la superficie adsorbente. Así ocurre que un gas físicamente adsorbido

puede ser desorbido o desadsorbido de un sólido aumentando la temperatura y reduciendo la


presión. Sin embargo, la quimisorción, en la que el adsorbato se une al adsorbente por medio
de enlaces químicos primarios, es un proceso irreversible. Esta última, por presentar poca
importancia para nosotros, en este momento, no será discutida con más detalle.

Cuando se alcanza el equilibrio de adsorción, la relación existente entre la cantidad de gas


adsorbido físicamente por un sólido y la presión o la concentración de equilibrio, a temperatura
constante, conduce a una isoterma de adsorción al representar gráficamente estas dos
variables, como se indica en la figura 10. En ella, el término isoterma señala que la gráfica se
obtuvo a temperatura constante. El número de moles, gramos o mililitros de gas adsorbido, por
gramo de adsorbente, x/m, en condiciones normales de presión y temperatura, se representan
en el eje de ordenadas y la presión de equilibrio del gas, en milímetros de mercurio, sobre el de
abscisas (Fig. 10 a).

FREUNDLICH propuso la relación siguiente, denominada isoterma de Freundlich:

en la que si x es la masa de gas adsorbido por la cantidad m del adsorbente, y será la masa de
gas adsorbida por unidad de masa adsorbente y k y n son constantes que pueden calcularse a
partir de los resultados experimentales. Esta ecuación se utiliza con mayor comodidad cuando
se expone en forma logarítmica:
ya que su representación gráfica conduce a una línea recta, como se observa en la figura 10 b,
siendo la constante log k la ordenada en el origen y 1/n la pendiente de la línea.

Más tarde, LANGMUIR desarrolló una ecuación basándose en la teoría de que las moléculas o
átomos de un gas son adsorbidos sobre los puntos o centros activos del sólido, formando una
capa del espesor de una molécula (monocapa). En este caso, la fracción de centros de
adsorción ocupada por las moléculas de gas, a la presión p, se representa por θ, y la fracción
de puntos no ocupados será 1 – θ . Entonces, la velocidad v1 de adsorción o condensación
de moléculas. gaseosas sobre la superficie será proporcional a la fracción de los lugares sin
ocupar 1– y a la presión p, o sea, que:

La velocidad v2 de evaporación de las moléculas unidas a la superficie será proporcional a la


fracción de superficie ocupada θ, es decir:

Ahora, sustituyendo k1/k2 por b y - por y/ym, siendo y la masa de gas adsorbida por gramo de
adsorbente a la presión p y temperatura constante, e ym la masa del gas capaz de adsorber un
gramo del adsorbente cuando la monocapa esté completa, se alcanza la fórmula:

conocida como isoterma de Langmuir, la cual, invirtiéndola y multiplicando todos sus términos
por p, puede escribirse de la siguiente forma, ordenada para la representación gráfica:

pues al representar p/y frente a p debe obtenerse una línea recta, en la que ym y b pueden
calcularse a partir de la pendiente y de la ordenada en el origen.

En el caso de la adsorción de solutos procedentes de las disoluciones, también pueden


aplicarse estas mismas ecuaciones, sin más que sustituir la presión p del gas por la
concentración c del soluto. Así, entre los muchos estudios llevados a cabo en este sentido,
mencionaremos que, ya en 1848, LEBOURDAIS encontró que la quinina, la estricnina y otros
alcaloides eran extraídos de su disolución acuosa por el carbón vegetal; LLOYD, en 1912,
preparó un gel (reactivo de Lloyd) para adsorber alcaloides de sus disoluciones; BANCROFT,
en 1932, estudió la adsorción de alcaloides por el caolín. Más modernamente, EVCIM y BARR 8
han investigado la adsorción de la estricnina, atropina y quinina, a partir de sus disoluciones
acuosas, mediante seis arcillas diferentes, empleando para ello la isoterma de Langmuir en la
forma:
en donde c es la concentración de equilibrio del alcaloide base, en miligramos por 100 ml de
disolución, y la cantidad de alcaloide base adsorbida, en miligramos por gramo de arcilla, es
decir, y = x/m, y b e ym son constantes. En estudios posteriores realizados por BARR y
ARNISTA9 se investigó la adsorción por diferentes arcillas de la toxina de la difteria y de otras
diversas bacterias, llegándose a la conclusión de que la atapulgita, silicato alumínico-
magnésico hidratado, era mejor adsorbente intestinal que el caolín. En la figura 11 se muestran
los resultados de la adsorción de la estricnina por las arcillas activadas atapulgita, haloisita
(similar a la caolinita) y caolín, después de haber sido lavadas todas con jugo gástrico.

Los compuestos de amonio cuaternario son unos eficaces agentes antibacterianos al aplicarlos
sobre la piel y las mucosas, utilizándose con este fin en forma de ungüentos y de pastillas;
pero, sin embargo, estos compuestos pueden ser inactivados por otros ingredientes de la
preparación. Por esta causa, BATUYIOS y BRECHT 10 estudiaron la adsor-

ción del cloruro de cetilpiridinio y del cloruro de bezalconio por el caolín y por el talco, los cuales
se añaden como lubricantes a las pastillas comprimidas, encontrando que la adsorción del
cloruro de cetilpiridinio sobre caolín y talco podía expresarse por la ecuación de Langmuir,
mientras que la adsorción de cloruro de benzalconio no seguía la citada expresión para todas
las concentraciones. Mediante ensayos, tanto bacteriológicos como químicos, se ha
demostrado que la cantidad de cloruro de cetilpiridinio inactivada por 1 g de talco es
aproximadamente de 5 mg.
Las ecuaciones [12], [13], [18] y [19] sólo son adecuadas para dar cuenta de curvas de
adsorción del tipo de la que se muestra en la figura 10 a, conocida como isoterma de tipo I. Sin
embargo, se ha demostrado experimentalmente que existen otros cuatro tipos de isotermas,
representados en la figura 12, los cuales no se ajustan a estas ecuaciones. Como
consecuencia de esto, en los últimos años se han desarrollado otras expresiones, siendo la
más conocida la de Brunauer, Emmett y Teller (ecuación BET). Esta ecuación BET, que da
cuenta de la adsorción de gases sobre sólidos, en capas de mayores espesores que las
monomoleculares, puede escribirse en la forma:

en donde p es la presión del adsorbato, en milímetros de mercurio, a la cual se adsorbe la


masa y de vapor por gramo de adsorbente, p0 la presión de vapor del adsorbato a saturación,
ym la cantidad de vapor adsorbido por unidad de masa del adsorbente cuando la superficie está
cubierta por una capa monomolecular, y b una constante proporcional a la diferencia existente
entre el calor de adsorción del gas en la primera capa y el calor latente de condensación de las
capas sucesivas. La ecuación BET se reduce a la isoterma de Langmuir en el caso de la simple
adsorción en monocapa.

Adsorción de una disolución. Algunos medicamentos, como los colorantes, alcaloides,


ácidos grasos e incluso ácidos y bases inorgánicos, pueden ser adsorbidos de sus disoluciones
por sólidos "activados", como, por ejemplo, carbón vegetal y alúmina. Con frecuencia, la iso-
terma de adsorción del soluto de una disolución diluida se asemeja a una curva del tipo I, y
puede representarse por la ecuación de Freundlich o por la de Langmuir. Sin embargo, cuando
los medicamentos son absorbidos en forma de capas de espesor superior al de una molécula,
las curvas resultantes son de otra naturaleza.

Una aplicación de este tipo de adsorción es la cromatografía, la cual consiste en la adsorción


de los solutos de una disolución por un polvo activado, que rellena una columna. Este método
fue ideado por el botánico TSWEET, en 1906, con el fin de extraer y separar los pigmentos de
las hojas verdes. En la actualidad, el método original y varias modificaciones del mismo, como,
por ejemplo, cromatografía en papel y cromatografía de gases, se emplean con gran éxito en la
separación y análisis de pequeñas cantidades de sustancias complejas, tanto naturales como
sintéticas.

El proceso llamado intercambio iónico también tiene como fundamento la adsorción. En él, los
iones, en lugar de las moléculas de soluto, son adsorbidos en columnas rellenas de sólidos,
tales como zeolita (Na2O • Al2O3 • nSiO2 • xH20) o resinas de intercambio fónico, por ejemplo,
Dowex y Amberlita. Este método puede emplearse para extraer los iones calcio y magnesio del
agua dura y para el análisis cuantitativo de algunos iones, en particular de las tierras raras.
AGENTES TENSOACTIVOS

Probablemente, desde hace mucho tiempo se han utilizado los jabones, arcillas y algunas
gomas como agentes humectantes o mojadores, detergentes y estabilizadores de las
dispersiones, pero, sin embargo, los agentes tensoactivos sintéticos no se han desarrollado y
aplicado ampliamente hasta hace relativamente pocos años.

Características de los agentes tensoactivos. Los agentes tensoactivos son adsorbidos en


las interfases agua-aceite a causa de sus grupos hidrófilos ("amantes del agua") o polares, y de
sus grupos lipófilos ("amantes del aceite") o no polares. Algunos de los grupos hidrófilos, los
cuales se orientan hacia la fase polar, son: –OH, –COOH,
–SO4H, y como ejemplos de grupos lipófilos (también denominados hidrófobos), que se dirigen
a la fase no polar, pueden citarse los hidrocarburos alifáticos y cíclicos. Como consecuencia de
esta orientación en la interfase agua-aceite, las moléculas del agente superficial forman una
especie de "puente" entre las fases polar y no polar, haciendo así que la transición entre ambas
sea menos brusca. El agente tensoactivo ha de estar equilibrado en cuanto a poseer la
cantidad adecuada de grupos hidrosolubles y liposolubles para que se concentre en la
interfase, y de esta forma haga descender la tensión interfacial. Si la molécula es demasiado
hidrófila, permanecerá en el interior de la fase acuosa y no ejercerá efecto algunos sobre la
interfase, de la misma forma que si es demasiado lipófila se disolverá por completo en la fase
oleosa y aparecerá muy poca cantidad en la interfase. Por tanto, un agente superficialmente
activo ha de estar formado por una porción hidrófila y otra lipófila, equilibradas de tal modo que
cuando se disperse inicialmente en la fase oleosa o en la acuosa, emigre a la interfase y se
oriente con el grupo hidrófilo en el agua y el grupo lipófilo en la fase oleosa, del mismo modo
que se indica en la figura 5, página 585. Siguiendo la sugerencia de WINSOR 11, los
compuestos que contienen porciones hidrófilas y lipófilas reciben, frecuentemente, la
denominación de agentes antifílicos o anfífilos. Este mismo autor ha demostrado la importancia
del equilibrio hidrófilo-lipófilo de los agentes anfífilos en todo lo referente a los fenómenos de
solubilización y emulsificación.

Clasificación hidrófila-lipófila de los sistemas. GRIFFIN12 ideó una escala arbitraria de


valores que sirviese como medida del balance hidrófilo-lipófilo ("hydrophilic-lipophilic balance:
HLB") de los agentes superficialmente activos. Así, por medio de este sistema numérico de
índices HLB, indicado en la figura 13, es posible establecer un intervalo de la máxima eficacia
para cada tipo o clase de agente tensoactivo, deduciéndose de esta escala que cuanto más
alto es el HLB de un agente, mayor es su carácter hidrófilo; así, los Spans, ésteres del sorbitán,
fabricados por la Atlas Powder Company, son agentes lipófilos y, por tanto, tienen valores HLB
bajos (de 1,8 a 8,6), mientras que los Tweens, derivados polioxietilénicos de los Spans, son
hidrófilos y, en consecuencia, tienen valores HLB altos (de 9,6 a 16,7).
El HLB de algunos ésteres de ácidos grasos y alcoholes polihidroxilados, como, por ejemplo, el
monoestearato de glicerina, puede calcularse mediante la fórmula:

en donde S es el índice de saponificación del éster, y A el de acidez del ácido graso. Así,
tendremos que el valor HLB del monolaurato del sorbitán polioxietilénico (Tween 20), para el
cual S =45,5 y A = 276, es:

Para aquellas otras sustancias con las cuales no es posible obtener buenos índices de
saponificación, por ejemplo, los derivados de la cera de abejas y de la lanolina, se emplea la
fórmula siguiente:

en la que E es el tanto por ciento, en peso, de las cadenas oxletilénicas y P es el tanto por
ciento; en pesó, de los grupos alcohólicos polihidroxilados (por ejemplo, glicerina, sorbita) en la
molécula. Finalmente, cuando la porción hidrófila del agente tensoactivo está formada
solamente por grupos oxietilénicos, la ecuación [23] se transforma en:
donde, de nuevo, E es el tanto por ciento en pesó de óxido de etileno existente en la molécula.
Para obtener los valores HLB de los agentes tensoactivos iónicos de los compuestos que
contienen óxido de propileno, nitrógeno, etc., y de muchos de los complejos emulgentes
naturales; debe emplearse el método original de Griffin, que comprende la preparación y
observación de una serie de emulsiones. En la tabla 4 se dan los valores HLB de algunos
agentes anfifílicos de uso frecuente.

TABLA 4

Valores HLB de algunos agentes anfifílicos*

HL
Sustancia
B

Acido oleico . . ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 1
Monoestearato de glicerina ... ... ... ... ... ... ... ... . 3,8
Monooleato de sorbitán (Span 80) ... ... ... ... .. 4,3
Monolaurato de sorbitán (Sean 20) ... ... ... ... .. 8,6
Goma arábiga ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 8,0
Gelatina (Farmagel B) ... ... ... ... ... ... ... ... .. 9,8
Métilcelulosa (Metocel, 15 cps) ... ... ... ... ... .. 10,5
Oleato de irietanolamina ... ... ... ... ... ... ... ... ... 12,0
Goma tragacanto . . . , ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 13,2
Monooleato de sorbitán poli oxietilénico (Tween 80) 15
Monoláurato de sorbitán poli oxietilénico (Tween 20).16,7
Oleato sódico ... ... ... . ... ... ... ... ... ... .... ..... ... 18,0
Lauril sulfato sódico ... ... ... ... ... ... ... .:. .. .. .. .. 40

MOORE y BELL13 han ideado una clasificación similar del equilibrio hidrófilo-lipófilo asignando a
los agentes anfifílicos, del tipo del polioxietileno, los llamados índices H/L, que vienen dados
por la expresión:

Así, por ejemplo, un alcohol hexadecílico (16 carbonos) combinado con cuatro grupos
polioxietilénicos tendría un valor H/L de

El valor H/L de un agente muy lipófilo es aproximadamente 20, y el de otro altamente hidrófilo
alrededor de 150.

GREENWALD, BROWN y FINEMAN 14 proponen un método de valoración para determinar el


carácter hidrófilo-ipófilo de los agentes tenso-activos y de los aceites, en el cual la disolución,
en dioxano-benceno, del agente anfifílico o del aceite se valora con agua hasta un punto final
de turbidez, y los resultados se expresan por el número de mililitros de agua añadidos para
producir una turbidez pronunciada. Se ha comprobado que los valores de algunos ésteres de
alcoholes polihidroxilados, obtenidos por este método, se podían equiparar con los valores HLB
de Griffin.

TABLA 5

Comparación de las distintas clasificaciones hidrófilas-lipófilas

Resultados de la
Sustancia anfifílica HLB H/L valoración con el
agua
OPE1................. 3,5 7,1 13,8
OPE2................. 7,8 21,4 16,7
Triton X-45......... 10,3 35,7 18,4
Triton X-114........ 12,3 53,7 21,4
Triton X-100........ 13,5 69,3 23,0
Triton X-102........ 14,5 87,9 23,6

En la tabla 5 se expone una comparación de los tres sistemas de clasificación estudiados para
algunos compuestos de las series Triton (alcoholes alquilarilpoliéter) y OPE (octilfenil
polioxietileno) de Rhom y Haas. El subíndice de los compuestos OPE indica el número de
moles de óxido de etileno unidos al radical alquilfenílico.

Agentes humectantes. Los agentes tensoactivos han encontrado aplicación práctica como
agentes mojadores o humectantes, dispersantes, defloculantes, detergentes, emulsificadores,
suspensores y solubilizantes. Cualquier tensoactivo presenta todas estas propiedades en algún
grado, pero, en general, domina una de ellas sobre las demás, lo cual hace que se restrinja el
empleo de cada agente a una aplicación determinada.

Un agente humectante es un tensoactivo que, cuando se disuelve en el agua, hace disminuir el


ángulo de contacto y ayuda a desplazar la fase aérea de la superficie, reemplazándola por otra
líquida. Entre los muchos ejemplos de aplicación en Farmacia y Medicina de la acción mojante
se encuentran: el desplazamiento del aire de la superficie del azufre, carbón y otros polvos con
el fin de alcanzar la dispersión de estos medicamentos en los vehículos líquidos; la separación
del aire de la matriz de los algodones y vendajes, con objeto de que las disoluciones
medicinales puedan ser adsorbidas por aquéllos para así poder aplicarlas a las diferentes
partes del cuerpo; la eliminación del polvo y suciedad de las heridas mediante el uso de
detergentes en los lavados de los mismos; y la aplicación de lociones y pulverizaciones
medicinales a la superficie de la piel y a las membranas mucosas.

La acción más importante de un agente humectante es la de disminuir él ángulo de contacto


entre el líquido y la superficie en que se apoya, entendiendo por ángulo de contacto el ángulo
que existe entre la superficie de una gotita líquida y la superficie sobre la cual se encuentran.
Como se observa en la figura 14, el ángulo de contacto entre un líquido y un sólido puede
variar desde 0°, señal de que el líquido moja completamente al sólido, hasta aproximarse a
180°, cuan-
do la acción mojante es insignificante; pudiendo también presentar cualquier valor intermedio
entre estos límites, como se señala en esta figura. El ángulo de contacto que se forma entre
una gota de agua y una superficie grasienta es debido a que este líquido, al aplicarlo sobre la
citada superficie, la moja de forma incompleta, pero cuando se coloca la gota de agua sobre
una superficie de vidrio muy limpia, aquélla se extiende espontáneamente, no existiendo ángulo
de contacto alguno, resultado éste que puede interpretarse asignando al agua sobre el vidrio un
coeficiente de extensión elevado o estableciendo que el ángulo de contacto entre el agua y el
vidrio es cero. Si al agua se le añade un agente humectante apropiado, la disolución se
extenderá espontáneamente sobre una superficie, aunque esté engrasada. Para que un agente
humectante actúe con eficacia, es decir, para que presente un ángulo de contacto pequeño,
deberá tener un valor HLB alrededor de 6 a 9.

Aunque, con frecuencia, se desea determinar la eficacia relativa de los agentes humectantes,
éste no es asunto fácil, pues es difícil medir el ángulo de contacto, y porque tampoco pueden
utilizarse, en general, los coeficientes de extensión, ya que no se conoce ningún método
adecuado para medir directamente la tensión superficial de una superficie sólida. Como
consecuencia de todas estas dificultades, en la industria se ha recurrido a ensayos empíricos,
entre los cuales el de Draves es uno de los más conocidos. En el ensayo de Draves se mide el
tiempo que tarda en sumergirse en una disolución humectante, contenida en una probeta
graduada de 500 ml, una madeja de hilo de algodón, previamente pesada. En la actualidad
todavía no se ha ideado ningún método adecuado para determinar la aptitud que posee un
agente humectante para provocar la extensión de una loción sobre la superficie de la piel y, por
esto, las propiedades de extensión de estos productos se siguen valorando, generalmente, de
una forma subjetiva.
Agentes solubilizantes. Cuando un tensoactivo se disuelve o se dispersa en un líquido, aquél
queda adsorbido en la superficie de éste. Pero si la concentración de tensoactivo es elevada,
existirá un exceso de éste que no puede ser adsorbido en la superficie del líquido y que ha de
permanecer en él formando agregados moleculares coloidales, denominados micelas. Algunos
autores estiman que estas micelas, corrientemente formadas por 50 a 150 moléculas o iones
del agente tensoactivo, se encuentran en la disolución acuosa en forma esférica, cilíndrica (tipo
salchicha) o incluso en forma de placas laminares con las porciones hidrocrabonadas no
polares orientadas hacia el centro de la micela. Estas diferentes formas están` esquematizadas
en la figura 15.

WINSOR ha sugerido la existencia, en la disolución, de un equilibrio intermicelar entre las


micelas esféricas y las laminares.
Si el lector está interesado en conocer con detalle esta teoría y sus aplicaciones, deberá
consultar el tratado del citado autor11.

Los agentes solubilizantes son compuestos anfifílicos que permiten preparar disoluciones
acuosas, de concentración un tanto elevada, de sustancias inmiscibles o parcialmente
miscibles con el agua. El empleo de agentes solubilizantes en Farmacia no es reciente, pues ya
en 1892, dos farmacéuticos, ENGLER y DIECKHOF 15, solubilizaron un gran número de
compuestos en disoluciones jabonosas.

El cresol, que solamente es soluble en agua en una proporción de alrededor del 3 %, sin
embargo, se disuelve en una disolución jabonosa hasta un 50%, dando lugar a un producto
denominado disolución jabonosa de cresol. Probablemente, lo que ocurre es que los
hidrocarburos no polares se disuelven en el interior de las micelas del agente tensoactivo,
mientras que las moléculas de las sustancias parcialmente miscibles en agua, como es el caso
del cresol, se orientan con la parte no polar hacia el interior de la micela y la porción polar entre
la capa de las cadenas del tensoactivo que sobresalen en la fase acuosa circundante de la
micela, la cual recibe el nombre de capa empalizada.

En la figura 16 está representada esquemáticamente, en forma idealizada, una micela esférica


de un agente solubilizante no iónico, monoestearato de polioxietileno, y las posiciones relativas
de las diferentes sustancias solubilizadas en ellas. El esquema ha sido hecho de acuerdo con
la sugerencia de REICH16, según la cual una micela no iónica puede representarse como una
gotita minúscula de aceite, formada por las proporciones hidrocarbonadas de las moléculas del
agente tensoactivo, con los tentáculos ondulantes de polioxietileno sobresaliendo de la
superficie de la gotita. En esta figura, la molécula de benceno y la de tolueno, no polares, están
representadas como solubilizadas en el interior hidrocarbonado de la micela; la del ácido
salicílico, con más carácter polar, se encuentra orientada con la parte no polar de la molécula
dirigida hacia la región central de la micela y el grupo polar hacia las cadenas hidrófilas, cuyas
espirales están sumergidas en el medio acuoso; y, finalmente, la del ácido parahidroxibenzoico,
molécula predominantemente polar, se encuentra completamente dentro de la región
empalizada, es decir, entre las cadenas hidrófilas.

La solubilización ha sido empleada en Farmacia para preparar esencias 17, preparados


resinosos y de alquitrán de hulla18, fenobarbital19, sulfonamidas, vitaminas, hormonas y
colorantes. O'MALLEY y col.17 investigaron la acción solubilizante, en el agua, del Tween 20
(Atlas Powder Co.) sobre la esencia de menta piperita, `y presentaron sus resultados en forma
de diagrama triangular, como se muestra en la figura 17, comprobando que al añadir
gradualmente agua en una mezcla 50:50 de esencia de menta y Tween 20, el sistema pasaba
de ser una mezcla homogénea (región I) a un gel viscoso (región II), pero añadiendo sucesivas
cantidades de agua se formaba, de nuevo, una disolución clara (región III), que luego se
separaba en dos capas (región IV). Esta sucesión de cambios corresponde a los resultados
que se obtendrían al diluir un concentrado de esencia de menta en el proceso de mezcla y
preparación del medicamento. Por tanto, los analisis de este tipo pueden proporcionar al
investigador farmacéutico orientaciones importantes para la formulación de los sistemas de
medicamentos solubilizados.

Agentes espumantes y antiespumantes. Muchas disoluciones de agentes tensoactivos


producen espumas estables cuando se mezclan íntimamente con el aire. La espuma es una
estructura relativamente estable formada por bolsas o burbujas de aire encerradas en el interior
de películas delgadas de líquido, es decir, una dispersión de un gas en un líquido que sé
estabiliza por medio de un agente espumante. La espuma se disipa o deshace a  medida que
se va eliminando el líquido de la zona que rodea a las burbujas de aire, pues finalmente la
película líquida colapsa. Los agentes antiespumantes, como el alcohol, éter, aceite de ricino y
algunos agentes tensoactivos, pueden emplearse para destruir la espuma. Las espumas
tienen, algunas veces, aplicaciones farmacéuticas, pero, en general, son incómodas, y cuando
es posible se evitan o destruyen. El inconveniente de la formación de espuma en las
preparaciones farmacéuticas de líquidos solubilizados constituye un serio problema en la
formulación.

Detergentes. Los detergentes son agentes tensoactivos que se emplean para separar la
suciedad de cualquier tipo de superficie. La detergencia es un proceso complejo, por el cual se
separan las sustancias extrañas de las superficies, en el que están incluidas muchas de las
acciones características de los agentes tensoactivos específicos, como el mojar, inicialmente,
la suciedad y la superficie que va a ser limpiada, la defloculación y suspensión, la
emulsificación o solubilización de las partículas de suciedad y, algunas veces, la formación de
la espuma para extraer y eliminar las partículas extrañas. Teniendo en cuenta que un
detergente posee una combinación de diversas propiedades, su eficacia se comprueba mejor
mediante ensayos reales practicados sobre los materiales que se desan limpiar.

En el capítulo 21 se estudian otros estabilizadores de las dispersiones, entre los que se


incluyen los agentes defloculantes, peptizantes y emulsificantes.

Acción antibacteriana de los agentes tensoactivos. Muchos de los agentes superficialmente


activos actúan en la superficie de las células y bacterias, reduciendo la tensión superficial e
interfacial como consecuencia de su adsorción y extensión. La penetración del hexilresorcinol
en la lombriz intestinal aumenta en presencia de un detergente, pero, sin embargo, si se añade
un exceso de detergente, para rebajar bruscamente la tensión superficial, la velocidad de
penetración del medicamento desciende casi hasta cero. Probablemente, a esta concentración
el medicamento se solubiliza en las micelas o se forma un complejo entre el medicamento y el
detergente, lo cual evita su ulterior penetración 20.

La actividad antibacteriana de los agentes tensoactivos, en particular la de los compuestos


cuaternarios, que es bien conocida, depende no sólo de los fenómenos interfaciales, sino
también de otros importantes factores. Estos agentes son adsorbidos sobre la superficie
celular, y es de suponer que se produzca la destrucción de las células al aumentar la
permeabilidad de la membrana celular lipoidea. Por tanto, la muerte de los microorganismos es
debida a la pérdida de sustancias esenciales para la vida celular. Tanto los microbios Gram
positivos como los Gram negativos son sensibles a la acción de los compuestos cuaternarios
catiónicos; sin embargo, las bacterias Gram positivas son atacadas con más facilidad por los
agentes aniónicos que las Gram negativas. Los tensoactivos no iónicos son los agentes
antibacterianos menos eficaces, ya que, en realidad, éstos favorecen, en lugar de inhibir, el
crecimiento de las bacterias, posiblemente por proporcionar los ácidos grasos de cadena larga
en una forma tal que son metabolizados con facilidad por el microorganismo.

BIBLIOGRAFIA

  1.     W. D. HARKINS y H. F. JORRAN: J. Am. Chem. Soc. 52, 1751, 1930; H. L. CUPPLES: J,
Phys. Chem. 51, 1341, 1947.

  2.     T. A. CAMPBELL, J. E. CHRISTIAN y J. R. EATON: J. Am. Pharm. Assoc., Sci. Ed. 44,
509, 1955.

  3.     W. 13. HARKINS : Physical Chemistry of Surface Films, Reinhold Publishing Co., Nueva
York, 1952, p. 96.

  4.     I. LANGMUIR: J. Am. Chem. Soc. 39, 1865, 1917.

  5.     N. K. ADAM: The Physics and Chemistry of Surfaces, Oxford University Press, Londres,
1941, Cap. 2.

  6.     W. D. HARKINS: The Physical Chemistry of Surface Films, Reinhold Publishing Co.,
Nueva York, 1952, p. 119.

  7.     H. SABOTKA: Monomolecular Layers, Amer. Assoc. Adv. Sci., Washington, 1954.

  8.     N. EVCIM y M. BARR: J. Am. Pharm. Assoc., Sci. Ed. 44, 570, 1955.

  9.     M. BARR y S. ARNISTA: J. Am. Pharm. Assoc., Sci. Ed. 46, 486, 490, 493, 1957.
10.        N. A. BATUYIOS y E. A. BRECHT: J. Am. Pharm. Assoc., Sci. Ed. 46, 524, 1957.

11.        P. A. WINSOR: Solvent roperties of Anaphiphilic Compounds, Butter-worth's Scientific


Publica ions, Londres, 1954; Mfg. Chemist 27, 89, 1956.

12.        W. C. GRIFFIN: J. Soc. Cosmetic Chemists 1, 311, 1949.

13.        C. D. MOORE y M. BELL: oap, Perfumery and Cosmetics 29, 893, 1956.

14.        H. L. GREENWALD, G. L. BROWN y M. N. FINEMAN: Anal. Chem. 28, 1693, 1956.

15.        C. ENGLER y E. DIECKHOFF: Arch. Pharm. 230, 561, 1892.

16.        I. REICH : J. Phys. Chem. 60, 260, 1956.

17.        A. J. MONTEBOVI: J. Am. Pharm. Assoc., Pract. Ed. 11, 107, 1950; 12. 565, 725,
1951; 15, 162, 1954; W. J. O'MALLEY, L. PENNATI y A. N. MARTIN: J. Am. Pharm. Assoc.,
Sci. Ed. 47, 334, 1958.

18.        R. J. AONOVAN, L. M. OHMART y M. J. STOKLOSA: J. Am. Pharm. ASSOc., Pract.


Ed. 15, 166, 1954; M. J. STOKLOSA y L. M. OHMART : ibíd. 1.5, 228. 1954.

19.        R. W. APPLEWHITE, A. P. BUCKLEY y L. W. NOBLES: J. An2. Pharm. Assoc, Pract.


Ed. 15, 164, 1954.

20.        J. F. YANIELLI: Cell Physiology and Pharmacology, Elsevier Publ. Co., Inc.,
Amsterdam, 1950, p. 48.

PROBLEMAS

1.    Cuando 1 x 10-4 cm3 de ácido esteárico, disuelto en benceno, se colocan sobre la


superficie del agua de una cubeta plana, el ácido esteárico se extiende sobre la superficie, el
benceno se evapora y la capa monomolecular de ácido que se forma cubre un área de 400
cm2. Calcúlese en unidades Angstrom, la longitud de las moléculas de ácido esteárico.

Resultado: 25 Å.

2.    El ácido esteárico tiene un peso molecular de 284,3 g/mol y una densidad de 0,85 g/cm 3.
Empleando los datos del problema 1, calcúlese, en Å 2, el área de la sección transversal de la
molécula.

Resultado: 22 Å2.

3.   Calcúlese la tensión superficial de la disolución de un agente humectante de densidad


1,008 g/cm3, sabiendo que es capaz de ascender hasta 6,60 cm en un tubo capilar cuyo radio
interior es 0,02 cm.

Resultado: 65,2 dyn/cm.

4.    A 20 °C, la tensión superficial de un líquido orgánico es de 25 erg/cm 2, la del agua es 72,8


erg/cm2 y la tensión interfacial entre ambos líquidos es 30 erg/cm 2. ¿Cuál será, a esta
temperatura, el trabajo de cohesión del líquido orgánico, el trabajo de adhesión entre el líquido
y el agua y el coeficiente inicial de extensión del líquido sobre la superficie del agua?

Resultado: 50 erg/cm2; 67,8 erg/cm2; 17,8 erg,/cm2.


5.    A 20 °C, la tensión superficial del alcohol n-heptílico es 27,0 erg/cm 2, la del agua 72,8
erg/cm2 y la tensión interfacial entre dos líquidos es 8,0 erg/cm2. Calcúlese Wc’ Wa y Sinicial.

Resultado: 54 erg/cm2; 91,8 erg/cm2; 37,8 erg/cm2.

6.    A extender sobre la superficie del agua de una cubeta plana 1 x 10 4 cm3 de alcohol
miricílico disueltos en benceno, en dicha superficie se formó una capa monomolecular de
alcohol al evaporarse el benceno, cuya área era de 250 cm 2. Calcúlese la longiutd, en
Angstroms, de la molécula de alcohol miricílico y el área molecular, en Angstroms cuadrados,
de la sección recta. El alcohol miricílico tiene un peso molecular de 453 y una densidad de 070
g/cm3.

Resultado: 40 Å, 27 Å2.

7.    Debido a la analogía existente entre una película monomolecular y un gas bidimensional, el


peso molecular de una sustancia puede calcularse con la balanza superficial empleando la
ecuación pA = (w/M)RT. Así, para una goma sintética, al representar gráficamente el producto
de la presión superficial p por el área A frente a p y extrapolar a p = 0, se obtuvo un valor de
pA/w = 2,4 x 106 erg/g a 292 °K para w g de sustancia. Calcúlese el peso molecular M de la
goma. Nota: R = 8,31 x 107 erg/mol grado.

Resultado: 10100 glmol.

8.    La insulina se extendió y formó una película sobre la superficie de una disolución acuosa
de pH 2,05 y de fuerza iónica 0,01; después, mediante la balanza superficial y extrapolando a
= 0, se obtuvo para A/w un valor de 4,3 x 10 6 erg/g a 293 °K. Calcúlese el peso molecular de
la insulina empleando la ecuación dada en el problema 7.

Resultado: 5662.

9.    Las tensiones superficiales de la paratoluidina, determinadas a diferentes concentraciones


y a 25 °C (298 °K), se representaron gráficamente, llegándose a una gráfica cuya pendiente,
dy/dc, para c = 5 x 10-3 g/cm3, era de -32800 cm3/seg2. Calcúlese, empleando la ecuación de la
adsorción de Gibbs, el exceso de concentración superficial, en mol/cm 2 y en g/cm2. El peso
molecular de la p-toluidina es 107,15.

Resultado: 6,6 x 10-9 mol/cm2; 7,1 x 10-7 g/cm2.

<<volver

* Los valores para la goma arábiga , gelatina, metilcelulosa y goma tragacanto han sido
tomados de A. H. C. CHUN, R. S. JOSLIN y A. N. MARTIN : Drug and Cosmetic Industry, 82;
164, 312, 1958. Los restantes proceden de R. BECHER: Emulsions: Theory and Practice,
Reinhold, 1957, pp. 191-194. La precisión de estos valores es, probablemente, superior a ± 1
HLB, en la mayoría de los casos.

También podría gustarte