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Maquina Sincrona

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Generador síncrono

Fig. 1 – Modelo equivalente de un generador síncrono

̃𝑎 = 𝐸𝑎 ⦝𝛼
𝐸 (1)
𝑉̃𝑎
𝐼̃𝑎 = = 𝐼𝑎 ⦝𝛽 (2)
𝑍̃𝑎
𝑉̃𝑎 = 𝑉𝑎 ⦝𝛾 (3)
̃𝑎 = 𝑅𝑎 ± 𝑗𝑋𝑎 = 𝑍𝑎 ⦝𝜃
𝑍 (4)

Un generador síncrono puede trabajar de 2 maneras distintas: Conectado a una carga o conectado
a un bus infinito.

Generador conectado a una carga

El comportamiento del voltaje de salida depende del tipo de carga que se encuentre conectada al
generador. Hay tres tipos de carga: Resistiva, inductiva y capacitiva. La ecuación (4) nos muestra la
forma matemática en la que se expresan las cargas, la cual llamamos impedancia. Una impedancia
es puramente resistiva cuando no contiene un término imaginario (reactancia), esto resulta por lo
tanto en un ángulo 𝜃 = 0°; una carga inductiva contiene un término imaginario positivo, teniendo
un ángulo 𝜃 = 𝑝𝑜𝑠𝑖𝑡𝑖𝑣𝑜, si se sustituye en la ecuación (2) resulta en un número complejo que nos
indica que la corriente tiene un ángulo menor al voltaje en las terminales (𝛽 < 𝛾) y se dice que la
corriente se encuentra atrasada respecto al voltaje; por último, una carga capacitiva tiene un 𝜃 =
𝑛𝑒𝑔𝑎𝑡𝑖𝑣𝑜 y 𝛽 > 𝛾 diciendo que la corriente se encuentra adelantada respecto al voltaje.

Si se realiza una prueba en el generador, modificando la carga de manera que la magnitud de la


corriente se mantenga constante. Partiendo de un factor de potencia en atraso, el voltaje de salida
es muy pequeño, el cual comienza a aumentar cuando el factor de potencia tiende hacia el adelanto.
El voltaje de potencia es menor al valor de la FEM para cargas resistivas e inductivas, pero en las
cargas capacitivas, el voltaje de salida va en aumento conforme la corriente de armadura aumenta.
Fig. 2 – Voltaje de salida en función del factor de potencia

Si se procede a variar la corriente de la carga sin efectuar otros ajustes en la corriente de excitación
se observa lo siguiente:

1. Para una carga resistiva, el voltaje en las terminales se incrementa con la disminución en la
corriente de la carga.
2. Para una carga inductiva, la corriente se atrasa y el voltaje en las terminales también se
incrementa con la disminución en la corriente de la carga. Sin embargo, el incremento es
mayor para una carga inductiva que para una resistiva.
3. Para una carga capacitiva, el voltaje en las terminales decrece con la disminución en la
corriente de carga.

Fig. 3 – Voltaje de salida en función de la magnitud de la corriente


Generador síncrono conectado a un bus infinito.

La generación, transmisión y distribución de energía eléctrica deben efectuarse en forma eficiente


y confiable a un costo razonable con el menor número de interrupciones. Por eficiente se entiende
que un alternador debe operar no sólo a su eficiencia máxima, sino que la eficiencia debe ser
máxima a plena carga o cerca de ella. Como la demanda de energía eléctrica puede fluctuar desde
una carga ligera hasta una considerable y viceversa, varias veces al día, es casi imposible operar
solamente un alternador a su eficiencia máxima todo el tiempo.

El término confiable supone que los consumidores nunca deben darse cuenta de una pérdida de
energía eléctrica. Un solo alternador no puede garantizar una operación con ese grado de
confiabilidad debido a la posibilidad de que falle o a interrupciones deliberadas para darle
mantenimiento periódico. Por tanto, un alternador único que suministra una carga variable no
puede ser muy eficiente, rentable ni confiable.

Para garantizar la confiabilidad y la continuidad del servicio eléctrico se hace necesario generar
energía eléctrica en una ubicación central donde estén conectados varios alternadores en paralelo
para satisfacer la demanda. Cuando ésta es reducida, algunos alternadores pueden retirarse de la
línea en tanto que los restantes quedan operando a sus eficiencias máximas. A medida que la
demanda se incrementa, puede incorporarse otro alternador a la línea sin interrupción del servicio.
No sólo todos los alternadores de una localidad están conectados en paralelo a una línea común,
conocida como conductor (bus) infinito, sino que puede haber varias estaciones generadoras de
energía alimentando al mismo conductor infinito. Por tanto, es difícil que haya un cambio en el
voltaje o en la frecuencia del conductor (bus) infinito. En consecuencia, deben satisfacerse los
requerimientos siguientes antes de conectar un alternador al conductor infinito:

1. El voltaje de línea del alternador (entrante) debe ser igual al voltaje constante del conductor
(bus) infinito.
2. La frecuencia del alternador entrante debe ser exactamente igual a la del conductor (bus)
infinito.
3. La secuencia de fases del alternador entrante debe ser idéntica a la secuencia de fases del
conductor (bus) infinito.

En la figura 4 se muestra un diagrama de conexión para la operación en paralelo de dos alternadores.


El alternador A ya está conectado al conductor infinito y está alimentando la carga. A fin de satisfacer
el aumento de la demanda de carga, se incorporará el alternador B a la línea.

Paso 1. El alternador B se impulsa a su velocidad especificada, o muy cerca de ella, y la corriente del
campo se aumenta hasta un nivel en el que su voltaje sin carga es casi igual al de la red. El voltaje
sin carga se revisa colocando un voltímetro entre dos líneas cualesquiera del alternador entrante,
como se ilustra en la figura, cuando el interruptor del circuito está en la posición de abierto.
Fig. 4 - Diagrama de conexión para la operación en paralelo de dos alternadores.

Paso 2. Para comprobar la secuencia de fase, se conectan asimétricamente tres lámparas, como se
muestra. Cuando la secuencia de fase del alternador B es la misma que la del alternador A (o la de
la red), la lámpara 𝐿1 está apagada mientras las otras dos están iluminadas. Si la secuencia de fase
no es la apropiada, las tres lámparas están iluminadas o apagadas simultáneamente.

Paso 3. Cuando la secuencia de fase es la apropiada y la frecuencia del generador entrante es


exactamente igual que la de la red, la lámpara 𝐿1 permanece apagada, mientras que las otras dos
brillan. Cualquier desigualdad en la frecuencia obliga a las tres lámparas a pasar de apagadas a
iluminadas, en orden sucesivo. Además de las lámparas para revisar la condición de sincronía,
también se conecta un aparato llamado sincronoscopio (fig. 5) a través de una de las fases. En la
figura 4 se muestra el sincronoscopio conectado a través de la fase a. Este aparato mide el ángulo
de fase entre las fases a del alternador entrante B y la red. Cuando las dos frecuencias son las mismas
y la secuencia de fase es la apropiada, la diferencia de fase entre las dos fases a debe ser cero. Esto
corresponde a la posición vertical del puntero del sincronoscopio. La rotación lenta en el sentido de'
las manecillas del reloj del puntero del aparato indica que la fase a del alternador B está moviéndose
hacia adelante de la fase a de la red. En otras palabras, la frecuencia (y por tanto la velocidad) del
alternador B es ligeramente mayor que la del conductor (bus) infinito, y viceversa para la rotación
contraria al sentido de las manecillas del reloj. La velocidad se modifica controlando la alimentación
de energía mecánica (impulsor primario) al alternador.

Paso 4. El alternador B está listo para entrar en servicio al cerrar el interruptor del circuito cuando
a) el voltaje de línea del alternador B que va a entrar es igual al de la red infinita, b) la lámpara 𝐿1
está apagada mientras las otras dos brillan y c) el puntero del sincronoscopio señala verticalmente
(posición: cero diferencia de fase).
Fig. 5 - Sincronoscopio.

Una vez que se cierra el interruptor del circuito, el alternador B está en línea. En ese momento no
está recibiendo ni alimentando energía. Esto se conoce como estado flotante del alternador.

Carga del alternador

El aumento en la alimentación de energía mecánica al alternador B tiende a incrementar su


velocidad y, con ello, su frecuencia. Como la frecuencia del alternador está fija por el conductor
(bus) infinito y no puede cambiarse, esa máquina comienza a alimentar la carga. Por tanto, algo de
la carga que alimenta el alternador A puede transferirse al B con el simple incremento de la energía
mecánica suministrada al alternador B y la disminución simultánea del suministro de energía
mecánica al alternador A.

Cuando los dos alternadores están en línea y la demanda de carga disminuye, se vuelve factible
retirar uno de ellos. Para hacerlo, la carga completa del alternador que va a retirarse de la línea debe
transferirse al otro, invirtiendo el proceso mencionado anteriormente. El interruptor del circuito se
abre cuando el alternador se sitúa en el estado flotante.

Las curvas V

Supongamos que un generador síncrono se conecta a un conductor (bus) infinito y entrega energía.

La corriente de la armadura depende del voltaje sobre la impedancia síncrona (𝑍𝑠 = 𝑅𝑎 + 𝑗𝑋𝑠 ),
Dicho voltaje es la diferencia entre el voltaje de salida y la FEM. 𝑉𝑎 es constante ya que se mantiene
fijo por las características del bus infinito.

𝐸̃ ̃
𝑎 (𝐼𝑓 ) − 𝑉𝑎
𝐼̃𝑎 = (5)
̃𝑠
𝑍

Se hace evidente que la corriente de armadura depende del valor de la FEM 𝐸𝑎 , cuyo valor depende
de la corriente de campo (𝐼𝑓 ).
En ausencia de la resistencia del devanado, la potencia de salida es exactamente igual a la
desarrollada. La potencia de salida entonces se expresa como sigue:

𝑃𝑜 = 3𝑉𝑎 𝐼𝑎 𝐶𝑜𝑠𝜃

Para que la potencia sea la misma cuando 𝑉𝑎 es constante, el producto 𝐼𝑎 𝐶𝑜𝑠𝜃 también debe de
permanecer constante. En consecuencia, para mantener constante el producto 𝐼𝑎 𝐶𝑜𝑠𝜃 si la
corriente aumenta el factor de potencia debe de disminuir y viceversa.

Es obvio que en tanto el factor de potencia cambie del atraso o adelanto hacia a la unidad, la
corriente de la armadura estará disminuyendo. Tal corriente es mínima cuando el factor de potencia
es igual a la unidad. A medida que cambia el factor de potencia de la unidad al adelanto o atraso, la
corriente de la armadura comienza otra vez a aumentar. En la figura 6 Se muestra el cambio de la
corriente de la armadura como función de la corriente del campo. Debido a su forma, la curva recibe
el nombre de curva V. Es posible trazar curvas V similares para diferentes valores de potencia de
salida. A medida que aumenta la potencia de salida del generador, la corriente del campo 𝐼𝑓
correspondiente al factor de potencia unitario también se incrementa.

Fig. 6 – Curvas V para un generador síncrono


Motor síncrono

Fig. 7 – Modelo equivalente de un motor síncrono

Un motor síncrono obtiene su nombre de la sincronización que existe entre la frecuencia de la red
eléctrica y el número de polos con el que se construyó la máquina:

120𝑓
𝑁𝑠𝑖𝑛𝑐 =
𝑃

Donde f es la frecuencia de la fuente eléctrica trifásica, P el número de polos en el motor y 𝑁𝑠𝑖𝑛𝑐


es la velocidad del rotor y se conoce como velocidad síncrona.

De ahí que la velocidad depende únicamente de la frecuencia de la red independientemente del


valor de la carga.

Fig. 8 – Relación frecuencia, velocidad, número de polos


De manera similar al generador, la máquina síncrona tiende a estar alimentada a un sistema de
alimentación cuyo voltaje y frecuencia permanecen constantes. Analizando la figura 7, la corriente
de armadura se obtiene de la siguiente expresión:

𝑉̃𝑎 − 𝐸̃
𝑎 (𝐼𝑓 )
𝐼̃𝑎 = (6)
̃𝑠
𝑍

Comparando (5) y (6) notamos que ambas expresiones son similares, la única diferencia son los
signos del voltaje y de la FEM. De la misma manera, el voltaje 𝑉𝑎 permanece constante por lo que el
factor de potencia se comporta de manera similar a como lo hace en el generador. El único cambio
perceptible en el comportamiento es que se intercambian las zonas de adelanto-atraso y ahora un
aumento en la corriente del campo tiende a adelantar el factor de potencia.

Fig. 9 – Curvas V para un Motor síncrono

Queda aclarar que un cambio de carga (mecánica) en el motor produce solamente un cambio en la
corriente de armadura y por lo tanto en el factor de potencia, manteniendo la misma velocidad,
siendo únicamente necesario corregir el factor de potencia.

Arranque del motor síncrono

Supongamos que el rotor se encuentra inmóvil (condición de reposo) y el devanado del campo se
excita para producir polos alternos en su periferia. El campo rotatorio que crea la armadura puede
visualizarse como si dos imanes, un polo norte y uno sur, girasen a velocidad constante (síncrona)
justo por encima de los polos del rotor. Cuando el polo sur del campo rotatorio está precisamente
arriba del polo norte del rotor, la fuerza de atracción entre ellos tiende a mover el rotor en dirección
del campo rotatorio. Debido a la considerable masa del rotor, transcurre cierto tiempo antes de que
comience a moverse, pero para entonces el campo rotatorio ha invertido su polaridad. En ese
momento la fuerza de repulsión entre los dos polos de igual polaridad tiende a mover el rotor en
dirección opuesta. A medida que el rotor trata de girar en la dirección opuesta, el campo rotatorio
ha invertido su polaridad una vez más. Por tanto, cada polo en el rotor recibe la acción de una fuerza
que se invierte rápidamente, con igual magnitud en ambas direcciones. El par promedio que
desarrolla el rotor en tales condiciones es igual a cero. Por tanto, un motor síncrono no puede
arrancar por sí mismo. En consecuencia, para que un motor síncrono arranque es necesario dotarlo
de ciertos medios de modo que desarrolle un par de arranque por sí mismo, o impulsar el rotor casi
a su velocidad síncrona mediante otro impulsor primario y en seguida sincronizarlo excitando el
devanado del campo.

Se pueden utilizar tres métodos para arrancarlo de manera segura:

1. Reducir la velocidad del campo magnético del estator a un valor lo sufícientemente bajo como
para que el rotor pueda acelerar y fijarse a él durante un semiciclo de la rotación del campo
magnético. Este objetivo se puede lograr con la reducción de la frecuencia de la potencia eléctrica
aplicada.
2. Utilizar un motor primario externo para acelerar el motor síncrono hasta velocidad síncrona,
pasar por el procedimiento de entrada en sincronía y convertir la máquina al instante en un
generador. Entonces, apagar o desconectar el motor principal para convertir la máquina síncrona
en un motor.
3. Utilizar devanados de amortiguamiento. A continuación se explicará la función de los devanados
de amortiguamiento y su utilización en el arranque de un motor.

Arranque del motor por medio de la reducción de la frecuencia eléctrica

Si los campos magnéticos del estator en un motor síncrono giran a una velocidad lo suficientemente
baja, no habrá ningún problema para que el rotor se acelere y se enlace con el campo magnético
del estator. Entonces se puede incrementar la velocidad de los campos magnéticos del estator
aumentando gradualmente fe hasta su valor normal de 50 o 60 Hz.

Se pueden usar los controladores de estado sólido para motores a fin de convertir una frecuencia
de entrada constante en cualquier frecuencia de salida deseada. Con el desarrollo de estos
accionadores de estado sólido tan modernos es perfectamente posible controlar continuamente la
frecuencia eléctrica aplicada al motor desde una fracción de un hertz hasta por arriba de la
frecuencia nominal. Si esta unidad de control de frecuencia variable se incluye en el circuito de
control del motor para lograr el control de la velocidad, entonces el arranque de un motor síncrono
es muy fácil: simplemente se ajusta la frecuencia a un valor muy bajo para el arranque y luego se
eleva hasta la frecuencia de operación deseada para la operación normal.

Una reducción en la frecuencia eléctrica no solo sirve para arrancar el motor sino para controlar
su velocidad también. Cuando se opera un motor síncrono a una velocidad menor a la velocidad
nominal, su voltaje interno generador 𝐸𝑎 = 𝐾ф𝜔 será menor que lo normal. Si se reduce la
magnitud de 𝐸𝑎 entonces el voltaje en los terminales aplicado al motor se debe reducir también
para mantener la corriente en el estator en niveles seguros. El voltaje en cualquier accionador de
frecuencia variable o circuito de ataque de frecuencia variable debe variar casi linealmente con la
frecuencia aplicada.
Arranque del motor con un motor primario externo

El segundo método de arranque de un motor síncrono es adjuntarle un motor de arranque externo


y llevar la máquina síncrona hasta su velocidad plena con un motor externo. Entonces se puede
conectar la máquina síncrona en paralelo con el sistema de potencia como generador y se puede
desconectar el motor primario del eje de la máquina. Una vez que se apaga el motor de arranque,
el eje de la máquina pierde velocidad y la máquina síncrona comienza a comportarse como motor.
Una vez que se completa la conexión en paralelo, el motor síncrono se puede cargar de manera
normal.

Todo este procedimiento no es tan absurdo como parece, debido a que muchos motores síncronos
forman parte de un conjunto de motor-generador y se puede arrancar la máquina síncrona en el
conjunto motor-generador con otra máquina que cumpla la función de motor de arranque. Además,
el motor de arranque sólo necesita superar la inercia de la máquina síncrona en vacío; no se añade
ninguna carga hasta que el motor está conectado en paralelo con el sistema de potencia. Ya que se
debe superar sólo la inercia del motor, el de arranque puede tener valores nominales mucho más
pequeños que el motor síncrono que arranca.

Debido a que la mayoría de los motores síncronos tienen sistemas de excitación sin escobillas
montadas en sus ejes, a menudo se pueden utilizar estos excitadores como motores de arranque.
Para muchos de los motores síncronos de tamaño mediano a grande, la utilización de un motor de
arranque externo o el arranque por medio del excitador pueden ser la única solución posible, ya que
los sistemas de potencia a los que están unidos probablemente no soportan las corrientes de
arranque que se requieren para utilizar el método del devanado de amortiguamiento que se
describe a continuación.

Arranque del motor con devanados de amortiguamiento

Definitivamente la técnica de arranque de un motor síncrono más popular es la utilización de


devanados de amortiguamiento. Los devanados de amortiguamiento son unas barras especiales
dispuestas en ranuras labradas en la cara del rotor de un motor síncrono y en cortocircuito en cada
extremo con un gran anillo en cortocircuito. Esto no es más que una jaula de ardilla por lo que actúa
como un motor asíncrono o de inducción (Ver siguiente tema).

Fig. 10 – Polo del campo con devanado de amortiguamiento.


En resumen, si una máquina tiene devanados de amortiguamiento, se puede encender siguiendo
el procedimiento que se describe a continuación:

1. Desconectar los devanados de campo de su fuente de potencia de cd y que estén en


cortocircuito.
2. Aplicar un voltaje trifásico al estator del motor y dejar que el rotor acelere hasta llegar casi a
velocidad síncrona. El motor no debe tener ninguna carga en su eje para que su velocidad se
pueda aproximar tanto como sea posible a 𝑁𝑠𝑖𝑛𝑐 .
3. Conectar el circuito de campo de cd a su fuente de potencia. Una vez que esto se lleva a
cabo, el motor se fija a velocidad síncrona y se le pueden añadir cargas a su eje.

Efecto de los devanados de amortiguación en la estabilidad del motor

Si se añaden devanados de amortiguamiento a una máquina síncrona para el arranque se obtiene


una ventaja extra: un incremento de la estabilidad de la máquina. El campo magnético del estator
gira a una velocidad constante 𝑁𝑠𝑖𝑛𝑐 , que varía sólo cuando varía la frecuencia del sistema. Si el
rotor gira a 𝑁𝑠𝑖𝑛𝑐 , entonces los devanados de amortiguamiento no tienen ningún voltaje inducido.
Si el rotor gira más lento que 𝑁𝑠𝑖𝑛𝑐 , entonces habrá un movimiento relativo entre el rotor y el campo
magnético del estator y habrá un voltaje inducido en los devanados. Este voltaje produce un flujo
de corriente y el flujo de corriente produce un campo magnético. La interacción entre los dos
campos magnéticos produce un par que tiende a acelerar la máquina una vez más. Por otro lado, si
el rotor gira más rápido que el campo magnético del estator, se producirá un par que intentará
disminuir la velocidad del rotor. Por ello, el par producido por los devanados de amortiguamiento
acelera las máquinas lentas y disminuye la velocidad de las máquinas rápidas.

Por lo tanto, estos devanados tienden a atenuar la carga u otros transitorios en la máquina. Por esta
razón, a los devanados de amortiguamiento también se les llama devanados de atenuación. Los
devanados de amortiguamiento también se utilizan en los generadores síncronos, donde cumplen
una función similar de estabilización cuando un generador opera en paralelo con otros generadores
en un bus infi nito. Si se presenta una variación en el par del eje en el generador, su rotor se acelerará
o perderá velocidad momentáneamente, cambios que serán contrarrestados por los devanados de
amortiguamiento. Éstos mejoran la estabilidad general de los sistemas de potencia por medio de la
reducción de la magnitud de los transitorios de potencia y de par.

Los devanados de amortiguamiento son los responsables de la mayoría de la corriente


subtransitoria en una máquina síncrona en falla. Otra forma de transitorio es un cortocircuito en los
terminales de un generador y los devanados de amortiguamiento responden con rapidez a este
fenómeno.

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