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Educacion para El Medio Ambiente 2

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UNIVERSIDAD TECNOLOGICA DE SANTIAGO (UTESA)

RECINTO PUERTO PLATA

ASIGNATURA:

Educación para el medio ambiente

TEMA:

Síntesis Documental Home y Resumen sobre zonas de vida

NOMBRE:

Adonis Michael Ventura Beard

MATRICULA:

1-19-9189

PRESENTADO A:

Lic. Tanmecil Gil Martínez

PUERTO PLATA, REPUBLICA DOMINICANA


13-10-2020
Resumen zonas de vida de República Dominicana y Puerto Plata
La zona de vida puede definirse como una unidad climática natural en que se agrupan
diferentes asociaciones correspondientes a determinados ámbitos de temperatura,
precipitación y humedad.
Según la definición de zona de vida podemos describir 9 zonas de vidas en República
Dominicana:

Monte espinoso subtropical


Las áreas más extensas de esta zona de vida se encuentran en la región suroeste del país. Un
área pequeña se observa al suroeste de Baní, cruzando Arroyo Hondo, y se extiende en
dirección oeste hasta la Bahía de Calderas.

En el sureste de Pedernales y en las inmediaciones de Cabo Rojo se observa otra área de esta
zona de vida, no bien definida por estar sobre suelos calizos, y por confundirse fácilmente
con el bosque seco.

Los terrenos correspondientes a esta zona de vida son de relieve plano a ligeramente
accidentado. La elevación varía desde el nivel del mar hasta los 300 m de altura.

Bosque seco subtropical


En esta zona de vida las condiciones climáticas se caracterizan por días claros y soleados
durante los meses en que no llueve y parcialmente nublados durante la época de las lluvias y
los meses de enero a marzo.
Los terrenos correspondientes a esta zona de vida son de relieve variable, desde plano, cerca
de la costa, hasta accidentado, en las vertientes de las cordilleras. La elevación varía desde el
nivel del mar hasta los 700 m de altura.
Las áreas ocupadas por esta zona de vida se encuentran localizadas en diferentes lugares del
país. En el suroeste se extiende una faja que empieza en Enriquillo, continuando en dirección
oeste, pasando por la vertiente sur de la Sierra de Bahoruco hasta la frontera con Haití, en las
inmediaciones de Pedernales. En la parte norte del Procurrente de Barahona se extiende otra
faja que va desde la costa del mar Caribe hasta Jimaní, entre el límite del monte espinoso y la
vertiente norte de la Sierra de Bahoruco. La línea divisora entre el bosque seco y el bosque
húmedo Subtropical se confunde en algunos lugares de la vertiente sur y este de la Sierra de
Neyba y continúa en esta región hasta las inmediaciones de Pedro Corto y Las Matas de
Farfán. El límite de esta zona de vida se extiende hacia el sureste por la vertiente sur de la
Cordillera Central, desde Juan de Herrera, Padre las Casas, Baní, hasta Hato Viejo al sur de
San Cristóbal. En el extremo sureste se extiende desde Cabo Engaño hasta San Rafael de
Yuma. En el extremo noroeste se extiende desde Santiago hasta Monte Cristi, entre las
vertientes norte de la Cordillera Central y la suroeste de la Cordillera Septentrional.
Bosque seco de transición a bosque húmedo subtropical
La separación de esta zona de transición del bosque seco mismo está basada principalmente
en sus condiciones climáticas y en su ubicación orográfica. En los lugares en que esta zona de
vida se junta con el bosque húmedo, las precipitaciones anuales se presentan en el transcurso
de 108 días
Para la identificación de esta zona de transición, la palma cana (Sabal causiarum = Sabal
umbraculifera) es una especie indicadora que ayuda a diferenciarla del bosque húmedo.

Bosque húmedo subtropical


En la región Norte, el bosque húmedo Subtropical cubre los valles cuyos ríos desembocan en
el Océano Atlántico.

En las vertientes de la Sierra de Bahoruco cubre fajas angostas entre el bosque muy húmedo
Subtropical y el bosque seco Subtropical o su zona de transición a bosque húmedo; las
elevaciones varían desde el nivel del mar (Barahona) hasta los 700 m.

En el sur de las vertientes de la Cordillera Central cubre los valles de los afluentes de la
cuenca del río Yaque del Sur y de los ríos Ocoa, Nizao y Haina.
En la región Sureste, abarca prácticamente todo el Llano Costero del Caribe, entre San
Cristóbal, las vertientes sur de la Cordillera Oriental y San Rafael del Yuma.

En esta zona de vida las condiciones ecológicas son el resultado de un sistema climático
complicado, influido principalmente por la presencia de los anticiclones subtropicales y la
dirección de los vientos alisios, que en la mayor parte del año son dominantes.
Las principales especies indicadoras que ayudan a identificar esta zona de vida son el roble
(Catalpa longissima), especialmente en los terrenos bien drenados, y la caoba (Swietenia
mahagoni), una especie muy característica de esta zona de vida.
La vegetación de los pequeños rodales secundarios está constituida principalmente por: Juan
Primero o daguilla, anón de jagua, jagua.

Mientras las especies más comunes en el Llano Costero del Caribe y las vertientes de la
Cordillera Septentrional son: guaraguao o gri grí.

Bosque muy húmedo subtropical


Las zonas de esta formación se extienden principalmente entre las vertientes de las cordilleras
Septentrional, Central y Oriental. Muchas de las áreas cultivadas del bosque húmedo se
extienden hasta esta zona, lo cual dificulta algunas veces establecer el límite entre estas dos
formaciones.
En la parte noreste ocupa el Promontorio de Cabrera, extendiéndose hasta el nivel del mar.

La temperatura de esta zona de vida varía según la ubicación de las áreas. Las que están cerca
de la costa tienen como bio
temperatura media anual 24 °C. Sin embargo, las zonas que están en las vertientes de las
cordilleras tienen biotemperaturas medias que disminuyen hasta los 18 °C.

Los terrenos de esta zona de vida, en su mayor parte, son de topografía accidentada. La
elevación varía desde el nivel del mar hasta los 850 metros de altitud.
Las principales especies que ayudan a identificar a esta zona de vida son el guaraguao
(Buchenavia tetraphylla = Buchenavia capitata), especialmente en las cordilleras
Septentrional y Oriental; y, de una manera general, el sablito o yagrumo macho (Schefflera
morototoni = Didymopanax morototoni), el peralejo, maricao o madroño (Byrsonima spicata)
y el aguacatillo (Alchornea latifolia).
La vegetación natural de esta zona de vida está constituida principalmente de las siguientes
especies: membrillo o almendrito (Prunus myrtifolia), en las áreas con bosques de Los
Haitises y vertiente norte de la Cordillera Central; mara o baría (Calophyllum
antillanum = Calophyllum brasiliense), cocuyo (Hirtella triandra) y cabirma o cabirma santa
(Guarea guidonia), en las áreas con bosque cerca de Jarabacoa, alrededor del pico Isabel de
Torres, Península de Samaná y las vertientes de la Cordillera Oriental; palo de yagua
(Casearia arborea), propio de las áreas que están cerca de Barahona y Nagua; algarrobo
(Hymenaea courbaril), común en las áreas de los alrededores de Bonao, La Vega y Miches;
balatá (Manilkara bidentata subsp.surinamensis), común en las áreas de la Península de
Samaná y vertientes de las cordilleras Septentrional y Oriental; y la palma manacla (Prestoea
montana), que aparece en los bosques con determinada clase de suelos. Otra de las especies
comunes es el pino (Pinus occidentalis), especialmente en los suelos lateríticos.

Bosque pluvial subtropical


La separación de esta zona de transición del bosque seco mismo está basada principalmente
en sus condiciones climáticas y en su ubicación orográfica. En los lugares en que esta zona de
vida se junta con el bosque húmedo, las precipitaciones anuales se presentan en el transcurso
de 108 días. El mes de mayor precipitación, en algunos lugares, es mayo, mientras que en
otros es octubre. En las zonas de transición, cuando están localizadas en áreas de mayor
elevación, la biotemperatura durante cierta época del año llega a ser hasta 2 °C más baja. Este
fenómeno atmosférico ayuda a mantener la humedad por más tiempo, aunque reciba la misma
cantidad de lluvia que corresponde al bosque seco.

Bosque húmedo montano bajo


Las condiciones climáticas que reúne esta zona de vida son las más ventajosas para la vida
humana y animal, aunque en el país estas áreas son poco pobladas. La escasa población se
debe en parte a la baja calidad de sus suelos, falta de vías de comunicación y a que el
poblador todavía no ha desarrollado técnicas apropiadas para el uso de estas tierras. Las
temperaturas son moderadas, muy parecidas a las que caracterizan a un clima templado, y las
lluvias, aunque irregulares, logran mantener cierta humedad en el terreno durante gran parte
del año.
La mayor parte de esta zona de vida se encuentra en las estribaciones de la Cordillera Central,
entre el bosque húmedo subtropical y el bosque muy húmedo montano bajo, sobre terrenos
con topografía accidentada y suelos de baja productividad. En las sierras de Neyba y de
Bahoruco los terrenos de laderas que están a más de 800 metros de altura corresponden a esta
formación.

Las condiciones climáticas que reúne esta zona de vida son las más ventajosas para la vida
humana y animal, aunque en el país estas áreas son poco pobladas. La escasa población se
debe en parte a la baja calidad de sus suelos, falta de vías de comunicación y a que el
poblador todavía no ha desarrollado técnicas apropiadas para el uso de estas tierras. Las
temperaturas son moderadas, muy parecidas a las que caracterizan a un clima templado, y las
lluvias, aunque irregulares, logran mantener cierta humedad en el terreno durante gran parte
del año.

Las precipitaciones son más intensas desde abril hasta noviembre. La cantidad de lluvia varía
según los lugares, desde los 900 hasta los 1,800 mm como promedio total anual.
Los terrenos de esta zona de vida tienen, mayormente, una topografía accidentada. Las áreas
con pendiente moderada son pequeñas y están dispersas formando valles angostos, carentes
de vías de comunicación. La elevación varía desde los 800 m hasta los 2,200 m de altura.
La vegetación natural primaria está constituida principalmente por árboles de pino. Otras
especies de coníferas que se encuentran especialmente en las vertientes sur de la Cordillera
Central son la sabina (Juniperus gracilior) y tachuela (Podocarpus aristulatus = Podocarpus
buchii).

Bosque muy húmedo montano bajo


Se extiende principalmente por las estribaciones de la Cordillera Central, donde tienen su
origen los afluentes de los principales ríos que existen en el país. Otras áreas se encuentran en
las partes de mayor elevación de las sierras de Neyba y de Bahoruco.
Las condiciones climáticas de esta zona de vida se caracterizan por la presencia de escarchas
temporales y por recibir una mayor precipitación que el bosque húmedo montano bajo.

Se puede estimar que las precipitaciones llegan a alcanzar cantidades mayores a los 2,000
mm totales anuales. El régimen pluviométrico es similar al de bh-MB, aunque las
precipitaciones orográficas son más intensas.
La vegetación natural está constituida principalmente por especies arbóreas. Entre las
principales especies indicadoras que ayudan a identificar esta zona se encuentran Garrya
fadyenii, Weinmannia pinnata, Oreopanax capitatus, Brunellia comocladifolia y palo de
viento (Schefflera tremula = Didymopanax tremulus).
Las especies más valiosas del bosque natural de estas áreas están constituidas por pino y
especies de hoja ancha, tales como el ébano (Diospyros revoluta) y el almendro (Prunus
occidentalis).

Bosque pluvial montano bajo


Esta zona se encuentra en la parte oriental de la Cordillera Central, entre los afluentes de los
ríos Nizao y Yaque del Norte, y en la parte occidental, entre los afluentes del río San Juan.
Esta zona de vida se caracteriza, al igual que las otras formaciones de la faja Montano Bajo,
por la presencia de escarcha en ciertas épocas del año. La precipitación puede estimarse como
superior a los 4,000 mm de lluvia total anual. La evapotranspiración potencial puede
estimarse, en promedio, en 76% menor que la precipitación media anual. En esta zona de vida
aproximadamente las 3/4 partes del agua de las lluvias no es evapotranspirada, perdiéndose
por escurrimiento en los ríos.
Su vegetación se caracteriza por el predominio de helechos arbóreos y la presencia de plantas
parásitas y epífitas que cubren los troncos de los árboles.

Desde el punto de vista ecológico, esta zona de vida no tiene ningún valor agropecuario ni
forestal. Su vegetación natural debe mantenerse inalterada.

Bosque muy húmedo montano

Está localizada principalmente en las mayores elevaciones de la Cordillera Central, donde se


encuentran los picos más altos de la isla Hispaniola y del Caribe.

En esta zona de vida, las condiciones climáticas difieren del bmh-MB por ser más frecuentes
las heladas. La cantidad de lluvia que recibe esta zona puede estimarse en 1,500 mm total
anual.

Los terrenos, en su mayor parte, tienen una topografía accidentada. La elevación para la faja
altitudinal Montano en este país empieza a los 2,100 metros sobre el nivel del mar.

La principal especie arbórea es el pino (Pinus occidentalis), el cual tiene una forma muy
irregular y poca altura en esta zona de vida.

Los terrenos que ocupan terrenos con mucha pendiente deben mantenerse con su vegetación
natural para proteger las cuencas de captación.

Zonas de vida de Puerto Plata


Las zonas de vida en la provincia Puerto Plata

La provincia Puerto Plata forma parte de la Región Norte del Cibao localizada al Norte del
país, con una extensión territorial de 1,802.03 km².
Los tipos de vegetación varían desde el bosque seco hasta el bosque de latifoliada (hojas
anchas). Según un estudio de Uso y Cobertura del Suelo del año 2003, realizado por el hoy
Ministerio de Medio Ambiente y Recurso Naturales, a través de la Dirección de Información
Ambiental y de Recursos Naturales (DIARENA), la cobertura boscosa de la provincia
ocupaba el 34% de la superficie, constituida básicamente por el bosque latifoliado con 32% y
bosque seco el 2%.
El 53% de los suelos que conforman esta provincia presentan pendientes que oscilan desde o
a 16% con relieve plano a ondulado; el 32% aproximadamente se encuentra en el rango de 16
a 32% con relieve fuertemente ondulado, mientras que el 15% presenta pendientes que
oscilan entren 32 hasta mayor de 64%, con relieves escarpados y fuertemente escarpados.
De acuerdo al Estudio de Uso y Cobertura del Suelo 2012 la cobertura boscosa ocupa
690.82 km² (5.34%) y el latifoliado 582.68 km² (31.96%). La superficie agropecuaria
compuesta por cultivos perennes o permanentes, cultivos intensivos anuales y pasto de una
extensión de 1,083.23 km². De tal manera, de las nueve zonas de vida presentes en el país,
Puerto Plata posee: al bosque muy húmedo subtropical debido a sus condiciones climáticas
teniendo entre temperatura regular promedio de 25ºC.

Síntesis Documental Home


Este documental nos habla acerca del sacrificio del planeta por el capital de los países, así
como de confort social, rompiendo con ello el equilibrio de la sustentabilidad de nuestro
planeta. En este documental nos encontramos inmersos los tres escenarios fundamentales de
la sustentabilidad (Natural, social y económico) y su rol desde la antigüedad hasta nuestros
días. En los inicios de nuestro planeta las algas y bacterias que existían en aquellos años,
capturaban el carbono y los gases de la atmosfera para atraparlos en los suelos, el 70% del
oxígeno del planeta es generado por las algas marinas, gracias a esto se pudo generar la vida
en nuestro planeta. Los animales se adaptaron a la naturaleza y la naturaleza a ellos, cada
especie tiene su lugar y función para guardar el equilibrio. Hace 10 mil años se fundaron las
primeras civilizaciones con el origen de la agricultura, en estas civilizaciones, su principal
preocupación era la su alimentación, la cual se satisfacía principalmente por la agricultura.
Estas civilizaciones se asentaban en lugares húmedos, como ríos, lagos y mares, lugares
factibles para la agricultura, la caza y la pesca. En los últimos 60 años a crecido en demasía el
desarrollo industrial y tecnológico, el cual nos ha llevado a triplicar la población del planeta.
En la sociedad actual la principal preocupación ya no es solo la alimentación, ya que hemos
conocido un confort nunca antes imaginado, pero todo esto acosta de un desequilibrio de la
sustentabilidad del planeta. El carbono, gases y petróleo capturado en los suelos, es el que se
ha encargado de darnos a conocer este confort, ya que nos han liberado del trabajo de la
tierra, sin embargo, en 50 años se ha deteriorado la tierra más que todos nuestros antecesores.
Todo se acelera, cuanto más se desarrolla el mundo, mayor es la sed de energías como el
petróleo, la explotación agrícola, así como crece el deterioro al medio ambiente y sus suelos.
La agricultura se ha convertido en una agricultura petroquímica, la cual ha permitido
alimentar a una mayor cantidad de seres humanos y animales. Existen criaderos inmensos de
bovinos para satisfacer la demanda de carne de nuestra sociedad, en estos criaderos se
necesitan cantidades inmensas de cereales, soyas, granos, etc. para alimentar a estos bovinos,
así como combustibles para su transportes. Los pesticidas y abonos, productos de la
petroquímica ayudan a la explotación de las tierras de cultivo, para satisfaces la necesidades
crecientes de alimentación, pero a un alto costo, ya que son productos nocivos para el ser
humano y al medio ambiente, causando la desaparición de especies animales y vegetales. La
excesiva demanda de energías, agricultura, transporte, industria, etc. ha causado un gran
desequilibrio sustentable en nuestro planeta, principalmente en el escenario natural, pero
también en el escenario social y económico. Este desequilibrio lo podemos ver en la india por
ejemplo, en donde un tercio de sus pozos se han secado, la selva amazónica ha perdido una
quinta parte de su diversidad, en borneo se ha sustituido su diversidad por cultivos para crear
aceite de palma, la deforestación ha causado la erosión de los suelos, existen países ricos en
recursos, así como ricos en su económia pero con altos índices de pobreza en su sociedad etc.
Estos son ejemplo del desequilibrio sustentable que en nuestra actualidad. En conclusión este
documental nos muestra un panorama del resultado de las acciones que estamos realizando
con tal de satisfaces nuestras necesidades y zonas de confort. Este documental pronostica que
solo tenemos 10 años para cambiar nuestros modos de vida, evitar de agotar los recursos
naturales e impedir una evolución catastrófica del clima de la Tierra. Cada uno de nosotros
debe participar en el esfuerzo colectivo para sensibilizar al mayor número de personas, para
realizar actividades en pro del equilibrio sustentable del planeta, ya que estamos quitando la
posibilidad a nuestras generaciones futuras de satisfacer sus necesidades.

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