TRABAJO DE PRÁCTICAS PASTORALES II

Proyecto Pastoral: “Evangelización digital”

Licenciatura en Humanidades con Mención en Teología

Docente: Lic. Iván Villalobos

Alumnas:
Sor Esther Rugama Obando
Sor Jessica Molina Areas
Sor Scarlen Carias Andino
Sor Carmela Dávila Sánchez
Sor Yahoska Esquivel Duarte
Sor Alicia Zamora Sánchez

Viernes 28 de agosto 2020

 ¡Padre amadísimo! ¡Padre adorado!
Creo sinceramente en vuestro amor para conmigo.
Infinitas son las pruebas que de esto me has dado y me das cada día y en cada
instante.
Jesús Mío, os adoro desde el abismo de mi nada

Acto de confianza en Dios de Madre Albertina

 Prólogo

Espiritualidad es el dinamismo que produce el Espíritu Santo en la vida del alma:

Cómo nace, crece, se desarrolla hasta alcanzar la santidad a la que Dios nos llama
desde toda la eternidad y cómo transmitir a las otras personas, con la palabra, el
testimonio de vida y con el apostolado eficaz. Así pues, la verdadera espiritualidad
cristiana debe integrar doctrina y vida, principios y experiencia.
La espiritualidad se ha desarrollado en la vocación de la Sierva de Dios Madre
Albertina, como servidora de Cristo Rey en el corazón de su Iglesia para extender
su Reino. Pudimos ver en Nuestra Madre la profundidad de su fe, un convencimiento
de que pasara lo que pasara Dios estaba con ella; cuando llegaban los problemas
o las enfermedades decía: “El nazareno está pasando por aquí”. Logramos
descubrir la serenidad de su fe, su confianza sosegada en su claridad de que estaba
destinada a una misión especial dentro de la Iglesia su confianza en Dios no
quedaría jamás confundida; esto lo repetía con frecuencia, decía siempre: “En ti
espero y no quedaré jamás confundida”, como muestra de una espiritualidad sólida
y abnegada.
En su misión apostólica, tenía además una sensibilidad especial por los pobres y
marginados, alejados de Dios, por los moribundos, agonizantes. Siempre nos decía:
“Hermanas, no dejaremos que alguien muera sin los últimos auxilios”, es decir, sin
los sacramentos. Ella mucho oraba por los agonizantes y repetía su jaculatoria:
“Corazón agonizante de Jesús, ten misericordia de los moribundos”.
A ella se le ocurría de todo para buscar almas para el Reino. Realizaba retiros de
semana santa para todas las jóvenes y mayores. Las misiones, donde no faltaban
las visitas de hogares para pescar a toda persona que no había recibido los
sacramentos y dejar impresa la imagen de Cristo en toda persona con la que se
conversaba. Las escuelas parroquiales que debían ser centros de apostolado y
siempre, según el ejemplo de Cristo. Su espiritualidad eucarística y su insondable
amor y devoción a la Santísima Madre de Dios bajo la advocación del Sagrado
Corazón de María, era su santo y seña.
A Madre Albertina Dios le regaló el carisma fundacional, el Espíritu que le animó es
un espíritu de misionera, de servicio eclesial, una espiritualidad eucarística, mariana
vivida con decisión, con entrega fiel al Señor y a su Iglesia, para extender su Reino
en el mundo. Que con nuestro apostolado todos conozcan y amen a Dios.
¡Cristo Vence, Cristo Reina, Cristo Impera!
 Proyecto pastoral de Evangelización digital

I. Nombre del proyecto pastoral

Proyecto de evangelización digital

II. Objetivo

Objetivo General:

Realizar un proceso de evangelización y promoción vocacional a través de medios

digitales.

Objetivos Específicos:

1. Aportar en la evangelización y formación de las familias católicas a través de

la realización de una serie de catequesis en formatos audiovisuales para
redes sociales y la transmisión de actividades como la santa Misa y el Santo
Rosario.

2. Realizar un proceso de promoción vocacional para acompañar a jóvenes que

deseen discernir su vocación a través de charlas virtuales y recursos
audiovisuales para redes sociales.

III. Definición del proyecto

La Congregación Siervas Misioneras de Cristo Rey es una congregación de derecho

diocesano, fundada en la Arquidiócesis de Managua. El Fin fundamental es la mayor
gloria de Dios, la salvación de las almas y la santificación de sus miembros a través
de la práctica de los consejos evangélicos y la perfección de la caridad. Como hijas
de la Iglesia arquidiocesana servimos como auxiliares del clero sobre todo en los
procesos de evangelización en comunidades y sectores alejados de la arquidiócesis
donde la presencia del sacerdote es difícil por la lejanía de los sectores.

Como auxiliares del clero, trabajamos bajo las orientaciones del Obispo y del
sacerdote encargado del área parroquial para acompañar a las comunidades o
parroquias en las que trabajamos en sus procesos de evangelización, catequesis y
pastoral vocacional. Sin embargo, debido a la situación de emergencia sanitaria
mundial que estamos atravesando a raíz de la pandemia del Covid19, como Iglesia
hemos obedecido a las orientaciones que nuestros pastores nos han dado sobre el
cese temporal de todas las labores pastorales presenciales en nuestras parroquias,
comunidades y colegios.
En nuestra labor evangelizadora, hemos impulsado un proceso de evangelización y
promoción vocacional a través de redes sociales para acompañar a las familias y
jóvenes en su crecimiento espiritual. Buscamos contribuir a la Nueva
Evangelización, a través de los medios digitales y audiovisuales de una manera
fresca, atractiva y con contenido que puedan provocar cambios positivos en la vida
de las personas en la línea de la formación católica.

Esta primera etapa se realizará entre los meses de Mayo - Septiembre del año 2020.
Cada semana estará dedicada a un tema en específico, y durante la cual se
compartirán, además de la publicación principal, otros recursos como frases,
imágenes y diseños para complementar la formación de la semana.

Este proceso de evangelización digital contará con dos componentes básicos:

a. Pastoral de evangelización y catequesis: Charlas y catequesis de

crecimiento espiritual para las familias. Estas charlas son dirigidas por
hermanas religiosas de la Congregación y, también, por sacerdotes
invitados.

b. Plan vocacional de acompañamiento: Se realizan charlas,

conversatorios y encuentros con jóvenes que se encuentren en
discernimiento vocacional para la vida religiosa.

IV. Lugar o local donde se realizará el proyecto

La principal plataforma será la FanPage oficial de Facebook de la Congregación

Siervas Misioneras de Cristo Rey:

https://www.facebook.com/SiervasMisionerasCristoRey, y serán utilizados los

siguientes formatos:

1. Facebook live: El Facebook live es la herramienta de vídeo en streaming que

ofrece la red social Facebook para usuarios de dispositivos móviles y que permite
realizar transmisiones en vivo de manera muy sencilla y rápida ya sea desde un
perfil personal o desde la página del instituto, sin límite de tiempo ni de
espectadores. A través de este servicio se transmitirán charlas vocacionales y
momentos de oración (rosario, hora santa, etc) para promover la participación de
las personas en la oración.

2. Videos cortos: El 78% del contenido que se consume en la red es formato

audiovisual. De estos, los vídeos son el contenido preferido por los usuarios. Se
realizará videos cortos para la evangelización sobre temas como la vida
sacramental, el camino de santidad o testimonios que permitan generar un impacto
positivo en quienes

3. Artículos: Se realizarán artículos cortos para catequesis sobre temas de la

vida sacramental y espiritual.
4. Audios / entrevistas: A través del servicio de Soundcloud se realizarán
postcast breves sobre temas que ayuden a la vida espiritual de las personas.
Además se realizarán grabaciones de audios.

V. Importancia pastoral dentro de mi parroquia

La misión de la Iglesia es revelar a Jesucristo y su Evangelio a los que no lo

conocen. Como Iglesia, tenemos el mandato de llevar el Evangelio para que “todos
los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad”. Es este deber de
predicar la salvación a todos, sabiendo que el mensaje evangélico no está
reservado a un pequeño grupo de iniciados, de privilegiados o elegidos, sino que
está destinado a todos, que como “Misioneras de Cristo Rey” asumimos ese
mandato sobre todo en las comunidades más alejadas. La pastoral de misión para
nuestra congregación es uno de los apostolados fundamentales para la extensión
del Reino de Cristo en todas las almas, para “formar otros Cristos y arrebatarle las
almas al demonio”.

VI. Destinatarios

Familias, jóvenes y niños que nos siguen en las redes sociales. Las plataformas de
redes sociales abarcan un público que es muy difícil de establecer geográficamente.
Según las estadísticas de la Página de Facebook, la mayoría de seguidores son de
Nicaragua y países de Centroamérica, así como de otros continentes.
VII. Fundamentos de Teológicos

La actividad misionera en la Iglesia.

"Jesús se acercó a ellos y les habló así: «Me ha sido dado todo poder en el cielo y
en la tierra. 19.Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el
nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, 20.y enseñándoles a guardar todo
lo que yo os he mandado. Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta
el fin del mundo”. Mt 28, 18.

1. Concilio Vaticano II

El Concilio Vaticano II es más que explícito en el afirmar en los documentos de la

Lumen Gentium y en Ad Gentes, la misión intrínseca de la Iglesia. Su afirmación de
fondo es: “La Iglesia peregrinante por su naturaleza es misionera, en cuanto esta
encuentra sus orígenes en la misión del Hijo y en la misión del Espíritu Santo, según
el designio de Dios Padre” (AG 2. Cfr. AG 5.6.9.10; LG 8.13.17.23; CD 6).

El Concilio Vaticano II, de forma clara expresa: "incumbe a la Iglesia por mandato
divino ir por todo el mundo y anunciar el Evangelio a toda creatura " y afirma: "La
Iglesia entera es misionera, la obra de evangelización es un deber fundamental del
Pueblo de Dios", además de afirmar que la misión dentro de la Iglesia está
relacionada directamente con la misión del Dios trinitario.

La Constitución “Lumen Gentium” cita la misma relación entre Cristo y la Iglesia

cuando afirma que esta es un reflejo de la luz de Cristo y tiene la tarea de irradiar
esta misma luz sobre todos los hombres (LG1). La imagen de la luz es integrada
por aquella del sacramento: “la Iglesia es en Cristo como un sacramento, es decir,
signo e instrumento de la íntima unión con Dios y de la unidad de todo el género
humano” (LG 1).

La identidad de la Iglesia está centrada en Cristo, y como tal no solo es signo de la

comunión con Dios y de la unidad de la humanidad, sino también el instrumento
para la realización de aquella comunión y de aquella unidad. A esto sigue la
necesidad de la Iglesia en orden a la salvación, como ha sido expresada en la
historia: “Fuera de la Iglesia no hay salvación”, lo que retomado por el Vaticano II:
“Este [el Concilio] enseña, apoyándose en la sagrada escritura y en la tradición, que
esta Iglesia peregrinante es necesaria para la salvación. En efecto solo Cristo,
presente para nosotros en su cuerpo que es la Iglesia, es el mediador y el camino
de la salvación; Él, inculcando explícitamente la necesidad de la fe y del bautismo
(cf. Mc. 16,16; Jn. 3,5), ha confirmado la necesidad de la Iglesia, en la cual todos
los hombres ingresan mediante el bautismo como por una puerta. Por ello no
deberían salvarse aquellos hombres, que, sin ignorar que la Iglesia Católica ha sido
fundada por Dios por Jesucristo como necesaria, no han querido sin embargo entrar
en esta o en esta perseverar” (LG 14).
Desde el momento en que “todos los hombres, por la gracia de Dios, están llamados
a la salvación (LG 13), la Iglesia es el sacramento universal. Pero para que esta
voluntad salvífica universal se realice en su plenitud, “la Iglesia, por las exigencias
más profundas de su catolicidad y del orden de su fundador, se esfuerza por
anunciar el Evangelio a todos los hombres”, porque la vocación misionera pertenece
a su mismo ser (cf. AG 2; LG 17; GS 40, AA 2).

El Decreto sobre la actividad misionera de la Iglesia, “Ad gentes”, puede ser

considerado un complemente de la “Lumen Gentium”, en cuanto se afirma que
justamente a través del compromiso misionero, la Iglesia se esfuerza por realizar su
ideal de sacramento universal de la salvación. Este en efecto, reconociendo que
Dios puede llevar a los hombres a la fe a través de caminos no conocidos, afirma
que “es tarea imprescindible de la Iglesia y de su sacrosanto derecho el difundir el
Evangelio” (AG 7). Cuando la Iglesia anuncia el Reino de Dios y lo construye, ella
se implanta en el corazón del mundo como signo e instrumento de ese Reino que
está presente y que viene.

Podemos entonces concluir que el Concilio Vaticano II ha puesto a la luz el origen

trinitario de la Iglesia y de su misión. La Iglesia no existe por sí y para sí misma: esta
es la extensión de la presencia de Cristo y de su misión, originados a su vez por el
amor del Padre y llevados a término por la fuerza del Espíritu. El misterio de
comunión de la Trinidad se hace así origen, modelo y fin de la misión. La Iglesia
está llamada por su naturaleza a salir de sí misma en un movimiento hacia el mundo
para ser signo, instrumento, presencia del amor y de la salvación de Dios, que se
expresa en la Palabra, se celebra en la liturgia, se hace testimonio, se actúa en el
servicio al hombre y al mundo para la manifestación y el crecimiento del Reino.

2. Nueva Evangelización

El término “nueva Evangelización” parece haber resurgido de nuevo después del

pontificado de Juan Pablo II quien lo lanzó al viento eclesial en un discurso al
CELAM, en Puerto Príncipe, en 1983. El mismo nos exigía, haciendo suyo en sentir
general de la Iglesia, la urgencia de una evangelización con nuevos métodos, nuevo
ardor y nuevas propuestas. Después de casi 30 años, su sucesor en la Sede
Apostólica, Benedicto XVI, ha convocado un sínodo de obispos que lleva como
título: “La Nueva Evangelización para la transmisión de la fe”. Con este hecho se
nos deja entrever que la Iglesia ha de plantearse seriamente la denominada
“inculturación”, sin caer en falacias o errores, pero abrazando los nuevos métodos
y propuestas que nos ofrece la sociedad contemporánea para hacer más
comprensible y asequible el Evangelio de Jesucristo.

Ya los Padres Sinodales del Sínodo que en 1974 tuvo como título «La
evangelización en el mundo actual» afirmaban que «la tarea de la evangelización
de todos los hombres constituye la misión esencial de la Iglesia». Fruto de este
sínodo, fue la Exhortación Apostólica de Pablo VI en la que recogía la urgencia de
la Iglesia en la tarea misionera y el sentir general expresado por los Padres
Sinodales: «la Iglesia» decía, «existe para evangelizar, es decir, para predicar y
enseñar, ser canal del don de la gracia, reconciliar a los pecadores con Dios,
perpetuar el sacrificio de Cristo en la Santa Misa, memorial de su Muerte y
Resurrección gloriosa». Partiendo de este principio, fundamento-base para la
Iglesia, tocaba preguntarse si ésta era más o menos apta para anunciar el Evangelio
e inserirlo en el corazón del hombre con convicción, libertad de espíritu y eficacia.
Es decir, se trataba de preservar con pureza el patrimonio de fe que la Iglesia tiene
a la vez que se presenta a las generaciones contemporáneas con los medios que
se tienen a nuestro alcance, de manera comprensible y persuasiva; en definitiva, de
crear «tiempos nuevos de evangelización».

Pero sería Juan Pablo II, quien introduciría este término. En 1990, el Romano
Pontífice en su Encíclica Redemptoris Missio subrayaría de nuevo la urgencia de la
nueva evangelización, pues para poder llevar a cabo un misión ad gentes, es
necesario que la Buena Noticia sea conocida en los lugares de donde parten los
evangelizadores –misión ad intra- : «El dinamismo misionero crea intercambio entre
las iglesias y las orienta hacia el mundo exterior, influyendo positivamente en todos
los sentidos. Las iglesias de antigua cristiandad, por ejemplo, ante la dramática
tarea de la nueva evangelización, comprenden que no pueden ser misioneras
respecto a los no cristianos en su propia casa»

3. Inter Mirifica – Sobre el uso de los medios de comunicación

Inter mirifica En los medios de comunicación social es un decreto hecho por el

Consejo en el Vaticano II y se promulgó el 4 de diciembre de 1963 por el Papa Pablo
VI . Se compone de 24 puntos, con el objetivo de abordar las preocupaciones y los
problemas de la comunicación social . Inter mirifica identifica la comunicación social
como la prensa, el cine, la televisión y otros tipos similares de interfaces de
comunicación. El título está tomado de las primeras líneas del documento y significa
"por el maravilloso".
El término comunicación social , además de su uso más general, se ha convertido
en el término preferido dentro de los documentos de la Iglesia Católica de referencia
a los medios de comunicación o medios de comunicación . Tiene la ventaja, como
término, de connotación más amplia - toda la comunicación social, pero no es toda
la comunicación es "masa". En efecto, sin embargo, los dos términos se utilizan
como sinónimos.

VIII. Agentes de pastoral involucrados en el proyecto

Los agentes de pastoral involucrados en el proyecto serán:

● Familias y jóvenes en discernimiento vocacional

IX. Responsables del proyecto de pastoral

Sor María Esther Rugama Obando

Sor Jessica Molina Areas
Sor Scarlen Carias Andino
Sor Carmela Dávila Sánchez
Sor Alicia Zamora Sánchez
Sor Yahoska Esquivel Duarte

X. Presupuesto

Rubro Costo Responsable

Equipos técnicos $ 600 Congregación SMCR

Movilización $100 Congregación SMCR

TOTAL C$700
XI. Metas y expectativas a alcanzar

● Ayudar en los procesos de conversión individuales y comunitarios a través

de las distintas actividades de piedad transmitidas en vivo (Eucaristía, Hora Santa,
Santo Rosario)

● Fortalecer la formación cristiana católica de las familias, niños, jóvenes y

adultos en la doctrina y el magisterio de nuestra Iglesia.

● Generar un proceso de acompañamiento a jóvenes en discernimiento

vocacional para que puedan tener un espacio de reflexión en medio de esta
situación adversa que atravesamos.

● Acompañar procesos de sanación, duelo, tristezas y angustias que viven

muchas familias a causa de la emergencia sanitaria de pandemia que vivimos en
todo el mundo.

● Fomentar la adhesión y la fidelidad a la Santa Madre Iglesia y la Autoridad

Eclesial de los fieles de la Arquidiócesis.

XII. Conclusión

● La fuerza de la presencia de Cristo y la acción Santificadora del Espíritu

Santo se hace evidente en la vida de fe de las personas que, a pesar de vivir en
este momento, alejados de los templos parroquiales y los sacramentos, luchan por
vivir a la luz de la Palabra de Cristo y tienen un corazón abierto y generoso para
asumir procesos de conversión en sus vidas.

● Las acciones de nueva evangelización de la Iglesia son fundamentales y uno

de los mayores desafíos al que nos enfrentamos. Hemos visto que cada bautizado
es responsable de cuidar del don de la fe de hermanos y hermanas que, por falta
de acompañamiento o presencia eclesial, se enfrían en la fe e incluso adoptan
ideologías contrarias a nuestro Magisterio o abandonan la religión católica.

● El Espíritu de Dios continúa suscitando vocaciones en los corazones de los

jóvenes y es necesario poder acompañarlos y que puedan un espacio para escuchar
el llamado de Dios. Para ello, también debemos de dar testimonios de nuestra fe
católica con alegría, esperanza y confianza.

● Es necesario un proceso sostenido de formación y acompañamiento a las

comunidades, sobre todo, en temas de liturgia y formación sobre el magisterio de la
Iglesia para evitar errores en la fe y malentendidos dentro de los mismos procesos
pastorales comunitarios o división de los fieles con la Autoridad Eclesiástica.
XIII. Anexos

XIV. Bibliografía

● Biblia de Jerusalén, Edición Española.

● Documentos Concilio Vaticano II
http://www.vatican.va/archive/hist_councils/ii_vatican_council/index_sp.htm
● Constitución Lumen Gentium. Concilio Vaticano II.
http://www.vatican.va/archive/hist_councils/ii_vatican_council/documents/vat-
ii_const_19641121_lumen-gentium_sp.html
● Decreto Ad Gente. Concilio Vaticano II.
http://www.vatican.va/archive/hist_councils/ii_vatican_council/documents/vat-
ii_decree_19651207_ad-gentes_sp.html
● ACI PRENSA: https://www.aciprensa.com/aparecida07/
● Exhortación Apostólica Catechesi Tradendae. San Juan Pablo II, 1979.
http://www.vatican.va/content/john-paul-ii/es/apost_exhortations/documents/hf_jp-
ii_exh_16101979_catechesi-tradendae.html#_ftn11