04-El Aparejo
04-El Aparejo
04-El Aparejo
PALOS
ARBOLADURA PERCHAS
Se describirán a APAREJO FIRME
continuación cada JARCIA DE LABOR
uno de estos
elementos, comenzando por los correspondientes a la arboladura.
En esta descripción es posible que surjan algunos términos cuya explicación detallada se
hará más adelante, al tratar los temas del velamen y los herrajes.
La arboladura: palos
En los casos en que un palo está formado por una única pieza, se dice de él que es un
palo piolo. Este es el caso más común en las actuales embarcaciones deportivas (Fig.
1b).
Cada vez es más frecuente el uso de palos que apoyan en cubierta (Fig. 1c).En este caso,
la mecha del palo apoya en la carlinga y ésta se encuentra directamente sobre la cubierta
o sobre la carroza. Es evidente que este tipo de instalación es constructivamente más
sencilla, por no existir la fogonadura y además no implica la posibilidad de entrada de
agua por ella. Pero algún tipo de apoyo es necesario bajo el palo, en correspondencia con
su carlinga, para que no se deforme la cubierta o la carroza. Tal apoyo se consigue con
En este caso, el palo de mayor guinda es el central, que recibe el nombre de mayor.
Tanto el de proa, llamado trinquete, como el de popa, llamado mesana, tienen menor
guinda que el mayor. Es interesante destacar que en estos barcos se consideraba como
palo al bauprés, que se extendía por fuera de la proa en ángulo y servía para aumentar
la superficie de las velas de proa. A pesar de no estar ni aproximadamente en posición
vertical, se lo consideraba uno de los palos.
Así como los palos estaban formados por palo macho, mastelero y mastelerillo, el
bauprés se prolongaba con el botalón de foque y el botalón de petifoque. El antiguo
bauprés de los grandes veleros se ha simplificado a una única percha en las
embarcaciones deportivas que recibe simplemente el nombre de botalón.
En las embarcaciones deportivas son corrientes los aparejos de hasta dos palos. Se llama
goleta al aparejo consistente en dos palos, siendo el de popa el de mayor guinda (Fig.
2b).
Por lo tanto, una goleta está aparejada con trinquete y mayor. Cuando en un aparejo de
dos palos el de proa es el de mayor guinda, los palos se llaman mayor el de proa y
mesana el de popa. El barco, en este caso, estará aparejado a queche (Fig. 2c) o a yawl
(Fig. 2d), según, por lo general, si el mesana esté a proa o a popa del timón.
Cuando un barco está aparejado con un solo palo, no es necesario llamarlo mayor. Es,
simplemente, el palo. Un barco con un solo palo podrá estar aparejado a cat (Fig. 2g), a
sloop (Fig. 2f) o a cutter (Fig. 2e). En el primer caso, se larga una única vela. En el
segundo, larga una vela a proa del palo y otra a popa de él. En el tercer caso, larga dos
velas a proa del palo y una por su popa.
Cuando se usa acero o aluminio, los palos son siempre huecos. El acero se usó en los
grandes veleros de fines del siglo XIX y principios del XX, en forma de chapas curvadas y
remachadas o soldadas con refuerzos interiores.
Son aquellas piezas que, no encontrándose en posición vertical, tienen por fin soportar
directa o indirectamente a las velas o a la jarcia firme. Su extremos se denominan
penoles.
Por ejemplo, las crucetas son piezas ubicadas a ambos lados del palo aproximadamente
perpendiculares a la línea de crujía. Tienen por misión repartir los esfuerzos de los
obenques formando una especie de reticulado (Fig. 3).
Según criterio del proyectista, puede existir uno, dos o más pares de crucetas.
La botavara es una pieza que, pivoteando en la cara de popa de un palo y manteniendo
una posición aproximadamente horizontal. En ella se enverga (se desliza) el borde
inferior de una vela mayor (fig. 4). En los barcos aparejados a cutter, era común el uso
de una botavara larga para la vela denominada trinquetilla.
Se llama pico a otra percha donde se enverga el lado superior de un tipo de vela llamada
cangreja.
Se desliza por el palo y se mantiene a popa de él en cierto ángulo, de acuerdo con la
forma de la vela. Pivotea alrededor del palo, acompañado los movimientos de la botavara
(fig. 4).
El botalón es, como se ha visto, una percha que se proyecta por fuera de la proa del
barco, y que tiene por fin permitir largar más de una vela (fig. 6).
Otras perchas, tales como las entenas, serán tratadas en el capítulo dedicado al velamen.
La jarcia firme está integrada por el conjunto de cables que cumplen la misión de
mantener la arboladura en su posición.
Se lo fija en posición en el sentido longitudinal (de proa a popa) mediante dos cables
que, partiendo de su tope, se dirigen al caperol y al coronamiento de popa. Estos
cables reciben el nombre de estay proel y estay popel respectivamente (fig. 3).
Cuando los dos estayes parten del tope del palo, se dice que se trata de un aparejo al
tope. Los proyectistas pueden optar, sin embargo, por otra disposición, que consiste en
mantener el estay popel partiendo del tope del palo, pero haciendo que el estay proel
salga más abajo de él (fig. 7a).
Se llama a esta disposición aparejo fraccionado y requiere otro soporte para la porción
superior del palo, entre los arraigos del estay popel y del estay proel. Si no existiera este
refuerzo, la tracción ejercida por el estay popel haría curvar la porción superior del palo
hacia popa, y eventualmente podría quebrarse. Esta situación está indicada por las líneas
de trazos en la figura 7a.
Se evita esta situación mediante los estayes de violín, que en conjunto con la
martingala arriostran el palo en la zona correspondiente, tal como se indica en la figura
7b.
Cuando se largan dos velas a proa, se necesitan dos estayes proeles. El de más afuera
se llama estay de foque, y el de más adentro, estay de trinquetilla. Si el barco no
tiene botalón, el estay de foque se arraiga el caperol, y el de trinquetilla más adentro. En
caso de haber botalón, el estay de foque arraiga en el penol del botalón y el estay de
trinquetilla en el caperol (fig. 8).
Se fija el palo en posición en el sentido transversal (de babor a estribor) mediante cables
ubicados en un plano transversal a crujía. Se los llama obenques (fig. 3).
Los que parten del tope, pasan por los penoles de las crucetas y bajan hacia las bandas,
son los obenques altos.
Los que parten a la altura de la cruceta y bajan hasta las bandas son los obenques
bajos u obenquillos. Según criterio del proyectista, puede haber uno o dos pares de
obenques bajos. En este último caso, un par bajará hacia las bandas algo a proa del palo
y otro algo a popa.
Por la siguiente razón: como las burdas se dirigen hacia las aletas (y no hacia el
coronamiento de popa como el estay popel), están limitando el ángulo que la botavara
puede abrirse con respecto a la línea de crujía, ya que a poco de apartarse de esta
última, estaría golpeando contra una u otra burda. Para lograr que la botavara pueda
abrirse, se fila (se afloja) la burda de la banda que interfiere con su movimiento. Esto
significa que se la está trabajando durante la navegación, y este es precisamente el
argumento de quienes sostienen que las burdas son parte de la jarcia de labor.
Se entiende por cabo un elemento filiforme formado por fibras de origen natural o
artificial mediante procedimientos de colchado o de trenzado.
Uno cualquiera de los elementos de la jarcia de labor puede estar constituido por un cabo
o por un cable o por ambos. Quiere esto decir que puede ser un elemento mixto, parte
cable y parte cabo. En este caso, la porción de cabo se denomina llamador. La razón de
esto es simple: laborear un cable con las manos no es fácil ni seguro. Entonces, la
porción que se laborea se hace con cabo, y se la empalma a la porción de cable con una
técnica que recibe el nombre de ingerido.
Las drizas son cables o cabos destinados a izar y arriar las velas. Por lo tanto, parten del
puño (ángulo) superior de una vela, suben hasta el tope del palo o hasta un punto
próximo a él y, pasando por un desvío, descienden hacia la cubierta (fig. 10).
El amantillo del tangon (fig. 11) es un cabo o cable que tiene por finalidad mantener
horizontal el tangón. Parte del penol de éste (o de una pata de gallo) y, pasando por un
desvío en el palo, desciende a cubierta.
Para evitar que el tangón se levante, se usa otro cabo o cable llamado contraamantillo,
que desciende desde el penol del tangón (o de una pata de gallo) hasta un desvío en
cubierta. Si se recuerda que el tangón pivotea en la cara de proa del palo, resulta claro
que su penol se mantiene en posición horizontal mediante el amantillo, que impide que
baje, y el contraamantillo, que le impide subir.
Otro cabo o cable más se usa para la maniobra del tangón. Esta percha está destinada,
como se ha dicho, a largar una vela llamada spinnaker o parachute. Por efecto del viento,
esta vela tiende a irse hacia proa, y a arrastrar también hacia proa el penol del tangón.
Para evitar esto, se utiliza un cabo o cable llamado braza, que partiendo del penol del
tangón se dirige hacia popa, desde donde es maniobrado (fig. 5).
Se denomina ságula a aquellos cabos o cables de diámetro reducido que tienen por
finalidad el izado de gallardetes, banderas de señales, etc. Por lo general, suben
desde cubierta hacia desvíos ubicados en las crucetas, o en el tope del palo, y desde ellos
descienden otra vez a cubierta, es decir, son de ida y vuelta (fig. 12).
En la figura 13 se reproducen los planos del sloop clase Zyklon, dibujo del Dr. Harrison
Butler. El proyectista ha previsto dos diferentes aparejos, ilustrados a izquierda y
derecha.