Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Gonzalo Sanabria Bosquejos y Sermones

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 92

GONZALO SANABRIA ANZOLA

BOSQUEJOS Y SERMONES
PARA PREDICAR
Tomo 4

Temas y predicaciones cristianas.


Visita nuestro sitio web: http://www.estudiosysermones.com/
Te invitamos a adquirir los tres tomos anteriores de ésta serie:
“PALABRAS QUE TRANSFORMAN EL CORAZÓN. Tomo 1”
“SERMONES PARA PREDICAR, Tomo 2”
“SERMONES PARA PREDICAR, TOMO 3”
Todos los derechos reservados. Ninguna porción de éste libro podrá ser
reproducida, almacenada en algún sistema de recuperación, o transmitida en
cualquier forma o por cualquier medio, mecánico, fotocopias, grabación u
otro, sin autorización expresa del autor.
Excepto para citas breves en revistas o libros con la correspondiente
mención. A menos que se indique lo contrario, las citas bíblicas han sido
tomadas de la Biblia Versión Reina-Valera de 1960, de las sociedades
Bíblicas. Todos los derechos reservados.
DEDICATORIA

Dedico este libro a mi buen Dios, por Su amor y paciencia conmigo. A


Jesucristo mi salvador y maestro y al Espíritu Santo bendito Consolador. A
mi linda esposa Andrea regalo de Dios y a mi hijo Daniel.

AGRADECIMIENTOS

A mi familia, a la iglesia que Dios me permite pastorear (por su apoyo y


oraciones), a todos los que leen nuestras publicaciones, y por supuesto a
Dios, quien me da la fuerza y la capacidad para escribir y desarrollar el
llamado que me ha hecho.
Contenido

LAS COSAS PUEDEN CAMBIAR


JESÚS NOS SORPRENDE CON SUS MILAGROS
ALIMENTACIÓN DE LOS CUATRO MIL
EL PODEROSO LLAMADO DE DIOS
DERROTANDO AL ENEMIGO
JESÚS HA VENIDO A TRAER LIBERTAD
DIOS LLAMA AL PROFETA ISAÍAS
¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE LA UNCIÓN?
EL PROFETA DANIEL Y LOS LEONES
TODO NOS AYUDA PARA BIEN
VICTORIA SOBRE EL ENGAÑO
LA BATALLA DESDE EL EDÉN
JESÚS ES RESTAURADOR DE VIDAS
DISCÍPULOS VERDADEROS
JESUCRISTO BENDITO SALVADOR
EL AMOR DE DIOS POR SU IGLESIA
LA CREACIÓN DEL UNIVERSO
VICTORIA SOBRE JEZABEEL Y BAAL
CAMINANDO HACIA LA SANIDAD DEL CORAZÓN
LA RENOVACIÓN DE LA MENTE
CUIDADO CON LOS DIBUJOS ANIMADOS
JESUCRISTO HABLA A LA IGLESIA DE ÉFESO
NO DESCUIDES TU AMOR POR DIOS
JESUCRISTO ES EL ÁRBOL DE LA VIDA
GUIADOS POR EL ESPÍRITU SANTO
UN VERDADERO ADORADOR
DIOS DEPOSITA TESOROS EN VASOS DE BARRO
CRISTO SOSTIENE A LOS SUYOS
DIOS RECOMPENSA LA FIDELIDAD
JESÚS ES QUIEN TRANFORMA TU CRISIS
INTRODUCCIÓN
Este libro está compuesto por bosquejos o sermones listos para estudiar y
enseñar la palabra de Dios a grupos e iglesias. Estudios debidamente
organizados, con alto contenido bíblico, enriquecidos con notas y
comentarios que tienen en cuenta el contexto, la cultura, historia, geografía y
significado de palabras claves (según sea el caso) sin dejar de lado las notas
prácticas y actuales para nuestro diario vivir.

Es una herramienta de apoyo y consulta para predicar y estudiar la palabra de


Dios, los sermones están bosquejados de manera sencilla y fácil de usar.
Cada mensaje contiene una introducción, varios puntos principales de
exposición bíblica (cada uno con sus respectivas notas y comentarios) y una
conclusión.

Éste libro es el resultado de muchas horas de estudio, investigación y


mejoramiento del material que Dios en su bondad me ha enseñado y
permitido impartir. Espero que puedas tenerlo, estudiarlo y que sea en tus
manos un instrumento de apoyo y bendición para tu vida y para el servicio a
Dios.

Lic. Pastor Gonzalo Sanabria.


CAPÍTULO 1

LAS COSAS PUEDEN CAMBIAR


Introducción: Era Dios quien iba delante del pueblo de Israel por el desierto,
aunque era difícil era una parte del camino (En ésta parte del camino Israel
aprendería el poder de la alabanza, desarrollaría su fe e intimidad con Dios,
conocería al Dios proveedor y todopoderoso).
Era un desafío atravesar el desierto, pero lo más importante era que Dios
mismo iba con ellos. Por tanto sería un lugar de revelación, y con muchas
oportunidades para ver la gloria de Dios, pues a mayor dificultad, mayor
nivel de gloria Dios manifestará.
1) Las actitudes correctas hacen más fácil el camino.
“E hizo Moisés que partiese Israel del Mar Rojo, y salieron al desierto de
Shur; y anduvieron tres días por el desierto sin hallar agua. Y llegaron a
Mara, y no pudieron beber las aguas de Mara, porque eran amargas...
Entonces el pueblo murmuró contra Moisés, y dijo: ¿Qué hemos de beber? Y
Moisés clamó a Jehová, y Jehová le mostró un árbol; y lo echó en las aguas, y
las aguas se endulzaron. Allí les dio estatutos y ordenanzas, y allí los probó”,
Éxodo 15:22-25.
El desierto es parte del camino y nos habla de aridez, soledad, peligro y
dificultad. Ellos llegaron al desierto de Shur, en hebreo “Shur” viene de un
término que traduce: “pared”, “muralla” (es figura de algo a superar), además
llevaban “tres días sin hallar agua”: fácilmente esto produce cuestionamientos
y dudas, y nuestras reacciones diversas afloran ante las dificultades.
El texto nos dice: “el pueblo murmuró”, y la murmuración hace más amargo
el camino. “Amargo” es el adjetivo calificativo de un sabor; ante ésta
situación ellos “murmuraron contra” (La versión DHO dice: “Hablaron mal
contra”), frase que equivale a “obstinadamente se quejaron”.
Acababan de tener una gran victoria y ver uno de los más grandes milagros
de la Escritura: Dios abrió el Mar Rojo para que ellos pasarán y ven caer el
ejército egipcio. Pero, fue la continua queja la que no permitió que Israel
superara rápidamente el desierto. Si la alabanza produce un aroma que al
cielo agrada, la murmuración genera un sabor amargo que Dios rechaza.
La adoración y la alabanza son armas poderosas para vencer la dificultad, lo
vemos por ejemplo cuando Pablo y Silas encarcelados alababan a Dios y sus
cadenas cayeron, así como la cárcel se abrió de manera sobrenatural.
2) Buscar a Dios es la mejor opción.
La sanidad viene de Dios, y ante la adversidad, debemos buscarlo. “Moisés
clamó a Jehová”, es lo que debemos hacer ante la dificultad, “no gastes tu
fuerza quejándote, invierte tus energías buscando a Dios”.
Dios le mostró a Moisés que hacer, es en Su presencia que viene la revelación
para sortear las dificultades, es en su presencia dónde viene dirección y
revelación para hacer las cosas bien. Dios tiene el poder de transformar la
crisis. El texto nos dice que: “y las aguas se endulzaron”, el Señor puede
cambiar el sabor amargo por el sabor más dulce, Dios puede cambiar los
sabores amargos de nuestra vida.
“Y allí los probó” nos dice el texto de hoy. Dios nos prueba, ¿Cómo
respondemos ante las circunstancias de la vida que permite el Señor que
lleguen a nosotros? Podemos murmurar, quejarnos, enojarnos, desanimarnos,
volver atrás (como quiso en algún momento Israel), o hacer lo correcto:
buscar a Dios, perseverar y hacer su voluntad.
Dios es quien va delante de nosotros, y nuestro corazón puede descansar en
esto, pues él es amor y por su bondad nos llevará al mejor lugar que tiene
preparado para nosotros. Aunque a veces nuestra vida pruebe sabores
amargos, esto es temporal, pues el Dios sanador cambiará las cosas y nuestra
vida seguirá avanzando hacía el destino planeado por Dios para nuestras
vidas.
3) Ante la dificultad Dios muestra su gloria y poder.
Dios es el sanador y restaurador de su pueblo y en el escenario más difícil él
muestra su gloria. Según Éxodo 15:22 Israel estaba en el desierto, habían
transcurrido tres días sin agua, y las que encuentran son aguas amargas, por
eso llamadas las aguas de Mara (aún hoy día hay allí aguas saladas y
amargas, no potables), pero Dios mostró su gloria transformado totalmente la
situación, pues nuestro Dios puede cambiar la adversidad.
“y dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, e hicieres lo recto
delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus
estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviaré a ti;
porque yo soy Jehová tu sanador. Y llegaron a Elim, donde había doce
fuentes de aguas, y setenta palmeras; y acamparon allí junto a las aguas”,
Éxodo 15:26-27.
Aparece por primera vez en la Biblia el nombre “Jehová Rapha” (que
significa: el Señor Sana), fue pues una nueva revelación de Dios a su pueblo
en las aguas amargas de Mara. ¿Por qué el Dios sanador se manifiesta ante su
pueblo endulzando unas aguas saladas y amargas?
Esta región es costera, muy próxima al mar Rojo, región cuyo suelo es muy
rico en sodio (por ejemplo el Mar Muerto se llama así porque allí no hay vida
debido a su alto nivel de salinidad), esto nos enseña que donde hay muerte,
Cristo trae vida; que en medio del desierto, Dios puede hacer florecer un
jardín; que en medio de tus dificultades, Dios puede mostrar su gloria; que en
medio de la maldición, Dios puede establecer su bendición, porque él es Dios
todopoderoso.
4) Dios da nuevas fuerzas al cansado y renueva su esperanza.
Dios renueva a su pueblo, que va camino al lugar que él les ha preparado. El
pueblo de Israel estaba fatigado, cansado, y muchos quizá desanimados, pero
Dios no sólo endulzó éstas aguas sino que los llevó a Elim, Éxodo 15:27.
Elim significa: “arboles grandes”.
Por lo general se le identifica con el Wâds Gharandel, a unos 96 kilómetros al
sudeste de Suez, que tiene una abundante vegetación de palmeras, tamarindos
y acacias, y una fuente permanente de agua que produce unos 4.770 litros por
minuto. Allí encontraron sombra para descansar, y aguas para beber, y
renovar fuerzas para continuar.
“Doce fuentes de aguas” nos dice el texto de hoy, hablamos entonces de
aguas no estancadas, eran corrientes (eran doce fuentes, algo así como una
para cada tribu: porque Dios tiene suficiencia para todos). Bajo las palmeras,
en medio del gran desierto, renovaron sus fuerzas y llenaron sus vasijas de
agua, para seguir hacía el plan de Dios: conquistar la tierra prometida.
Reflexión final: Aunque a veces el camino nos parece muy adverso y difícil,
Dios nos renueva y fortalece, con su poder y bondad prepara las cosas para
alentarnos a seguir adelante, pues no podemos quedar a mitad de camino, es
necesario avanzar hacia el destino que el Señor nos ha preparado. Dios puede
cambiar las cosas.
CAPÍTULO 2

JESÚS NOS SORPRENDE CON SUS MILAGROS


Introducción: Cuando el Señor Jesús apareció en tierras palestinas hubo
grandes cambios: espirituales, sociales, religiosos, pero ante todo espirituales,
pues el Señor Jesús vino anunciando el evangelio del reino. Esto implicaba la
caída de muchas estructuras religiosas y tradicionales. Sacerdotes, escribas y
fariseos se oponían a su ministerio, pero el Señor Jesús siempre salía
vencedor, hoy él vive en nosotros y por él podemos vencer…
“Entró Jesús en la sinagoga; y había allí un hombre que tenía seca una
mano. Y le acechaban para ver si en el día de reposo le sanaría para poder
acusarle. Entonces dijo al hombre que tenía seca la mano: Levántate y ponte
en medio…” Marcos 5:1-3.
1) Dios siempre será más grande que el problema.
El Señor Jesús es poderoso en todo lugar, en la ciudad, en la sinagoga, en el
mar, porque no es el lugar lo importante sino quien está allí, en este caso el
Todopoderoso, Jesucristo nuestro Señor. Él es Dios misericordioso y se llena
de compasión al ver a un hombre allí con una mano seca (encogida por
parálisis, deformada, contraída e inmovilizada), la tradición dice que era
albañil, otros dicen que trabajaba la piedra.
Había otros sin duda pero Jesús se fijó en éste hombre, seguro fue a la
reunión y no esperaba ese día su milagro, pero cuando tú perseveras y
procuras Su presencia la bendición te sorprenderá en el camino.
Seguramente él era el proveedor de su casa, pero su capacidad estaba
altamente lesionada, hacia lo que podía. Su corazón debía sentirse
decepcionado y vivía gran frustración, pero Dios siempre será más grande
que el problema.
2) La dureza de corazón estorba los milagros, Marcos 5:4-5a.
“Y les dijo: ¿Es lícito hacer bien en sábado, o hacer mal; salvar la vida, o
quitarla? Pero ellos callaban. Entonces mirándolos alrededor con enojo,
entristecido por la dureza de sus corazones… ”
Vemos ahora las obras de los fariseos: acechan como una fiera, su arma es la
acusación. La palabra acusación es traducida del término griego “katagoreo”
que además significa: hablar en contra. Esta actitud es demoniaca, porque la
Biblia llama al diablo “el acusador de nuestros hermanos”. Las palabras
contrarias estorban los milagros, por eso debemos cuidar bien lo que
decimos.
El corazón de los escribas y fariseos, llevados por su religión fue duro. Jesús
sintió enojo, tristeza y dolor por “la dureza del corazón de ellos” (el término
dureza viene del griego “porosis”, el cual hace referencia al cubrimiento con
una piedra, un sinónimo de esta dureza es petrificar, que significa: convertir
en piedra). Éste hombre tenía la mano seca, pero ellos tenían su corazón más
seco aún, como una piedra. La dificultad del hombre estaba en su mano, el
problema de ellos estaba en su corazón, y por eso eran responsables de su
propia dureza.
3) El poder de Jesús lo cambia todo, Marcos 5:5b.
“dijo al hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y su mano le fue
restaurada sana como la otra.”
La presencia de Jesús lo cambia todo. El versículo cinco nos dice que “su
mano le fue restaurada sana”, restaurar es una palabra traducida del griego
“apokatastasis” que indica varias cosas: sanar, restituir, devolver, restablecer
y poner en orden de nuevo.
Éste hombre había sido lesionado integralmente, en su autoestima, en su
capacidad de producción, en su servicio al Señor, y seguramente era señalado
por “estar bajo el juicio de Dios”. Pero Jesús tuvo misericordia de él y lo
transformó restaurando su vida. Aquel hombre fue a la sinagoga como era su
costumbre, y aquel día Jesús lo sorprendió con su milagro.
Reflexión final: Cuando Jesús aparece en cualquier escena, todo es
transformado con su poder, aunque el enemigo de nuestras almas y sus
mensajeros quieran oponerse a las obras de Dios, Su poder siempre triunfará.
Jesús sacia a los sedientos, restaura al necesitado y quebrantado, él da vida
eterna al perdido.
CAPÍTULO 3

ALIMENTACIÓN DE LOS CUATRO MIL


Introducción: Dios tiene cuidado de sus hijos, conoce su humana condición y
es su proveedor. Sin embargo a veces las dificultades o crisis nos hacen dudar
por momentos de ésta verdad. No importa el lugar (en el desierto o en la
tierra de la abundancia), ni el tiempo (nublado o despejado), ni tu condición
emocional (alegre o triste), Dios es el mismo y sigue teniendo el control de
todas las cosas.
“En aquellos días, como había una gran multitud, y no tenían qué comer,
Jesús llamó a sus discípulos… y mandó a la multitud que se recostase en
tierra; y tomando los siete panes… y los pececillos habiendo dado gracias, los
partió, y dio a sus discípulos para que los pusiesen delante; Y comieron, y se
saciaron. Eran los que comieron, como cuatro mil”, Marco 8:1-9.
1) El Señor Jesús conoce nuestra condición y nuestra necesidad.
En el texto de hoy observamos una gran multitud siguiendo a Jesús y no
había comida para ellos. Vemos pues, que nuestra necesidad es integral:
física, emocional y espiritual, y que Dios es nuestro proveedor en el sentido
completo de la palabra. Él conoce también nuestro esfuerzo, pues hacía tres
días le seguían, y el lugar no era el mejor, los discípulos lo llamaron
“desierto”.
Jesús sabía que estaban cansados y que se habían esforzado por llegar allí
(“algunos han venido de lejos” nos dice el texto). Para seguir a Jesús
debemos perseverar, esto implica renovar las fuerzas y eso solo se logra en la
presencia de Dios. Esfuérzate en él y sigue adelante.
2) Nada es imposible para el Señor, pues nuestro Dios es sobrenatural.
Es importante recordar los milagros del pasado para fortalecer tu fe en el
presente, y proyectarte en el futuro. Pero la incredulidad entristece y estorba
la obra sobrenatural de Dios. Por ejemplo los discípulos ya habían visto al
Señor hacer muchos milagros pero no lograban ver allí la oportunidad para
un milagro más del Señor.
Cuando el pueblo de Israel caminaba por el desierto una y otra vez se quejó,
olvidando (como a veces nos ocurre) las maravillas que hizo Dios en Egipto,
y los poderosos milagros en ese mismo desierto.
3) La fe provoca acción.
Los discípulos escucharon a Jesús e hicieron lo que él les dijo, creyeron en un
milagro y vieron la manifestación del poder de Dios. Debemos confiar en el
Señor, hacer nuestra parte y el resto lo hace él. Cuando ponemos nuestros
recursos en sus manos, Dios los usa de manera sorprendente y para beneficio
de muchos.
Por eso, deposita tu confianza en Dios, sé diligente y perseverante, aunque
sea tiempo de pequeñeces, pues no es sino cuestión de tiempo para ver la
gloria de Dios. Confía en el Señor y sus bendiciones te seguirán. Obedece su
palabra y todas las añadiduras te seguirán.
CAPÍTULO 4

EL PODEROSO LLAMADO DE DIOS


Introducción: En una de las grandes batallas de la Guerra Civil en Estados
Unidos, un recluta que había perdido su compañía durante una gran
confusión, se aproximó tímidamente al general Sheridan y le preguntó que ha
dónde debía entrar. “¿Entrar?”, rugió el general con una voz de trueno tan
terrible que aterrizó al ya asustado recluta; “entra a dondequiera; se está
combatiendo en todas las líneas de batalla”.
No preguntes ¿Dios, quieres que te sirva? La respuesta es demasiado
evidente, Jesús lo dijo: “la mies es mucha y los obreros pocos”.
Nos dice la Biblia en Marcos 2:13-14 “Después volvió a salir al mar; y toda
la gente venía a él, y les enseñaba. Y al pasar, vio a Leví hijo de Alfeo,
sentado al banco de los tributos públicos, y le dijo: Sígueme. Y levantándose,
le siguió”.
1) Jesús continúa llamando obreros hoy.
Hablemos aquí de Leví quien era el mismo Mateo, cobrador de impuestos.
Leví significa: unido, asociado a él. Es un término que denota adhesión,
unión, el que une a los suyos, al nacer indica la esperanza de que el nuevo
miembro renueve la unión familiar y amor de los cónyuges.
Pero su nombre no aplicaba en su vida, pues cómo cobrador de impuestos de
Roma (él era un publicano, éstos exigían sumas superiores al valor de los
impuestos para pagarse ellos mismos, excluidos de la sociedad hebrea,
llamados gentiles y pecadores, eran considerados traicioneros del pueblo
hebreo), era aborrecido por el pueblo de Israel (entonces no propiciaba la
“unión”).
2) Es Dios quien nos transforma para su gloria.
Leví es llamado luego Mateo (seguro al venir a ser discípulo de Jesús), cuyo
significado es: “don de Dios”; “regalo de Dios”; y “recompensa”, Dios
transforma a alguien que cobraba los impuestos a los hebreos en bendición y
don para ellos mismos, pues el posterior ministerio del apóstol Mateo fue
dirigido a los judíos. Dios tiene el poder de transformar todas las cosas, y
aún tornar la maldición en bendición.
Dios no hace acepción de personas. Jesús lo llamó diciéndole: “sígueme”,
Mateo tuvo que tomar una decisión, porque ante el llamado de Jesús cada uno
toma su propia decisión. Mateo “levantándose, le siguió” nos dice la Biblia y
pasa de ser un publicano a ser un discípulo, llega a convertirse en apóstol y
escritor de uno de los evangelios.
3) La disposición supera la preparación.
Nuevamente vemos a Dios, “quien lo necio del mundo escogió, para
avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió, para avergonzar a lo
fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió, y lo que no es, para
deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia”.
Para Dios es más importante la disposición que la preparación, pues ésta
última surge y se forja en el proceso. Ellos fueron primero discípulos que se
dispusieron a seguir a Jesús, y luego fueron los apóstoles del Cordero.
Dios en su gran amor diseñó grandes planes para cada uno de nosotros, y por
eso cada uno debe responder con un corazón dispuesto a su llamado, sin
temor, pues finalmente es Dios mismo quien hará la obra a través de cada
uno.
4) Jesús no rechaza a nadie.
Aunque los publicanos eran rechazados por la sociedad judía y las
autoridades religiosas, Jesús se acercó a ellos para llevarles salvación. Los
ojos de Jesús logran ver su verdadera condición, eran ricos materialmente
hablando pero eran pobres en su corazón, pues la gracia de Dios no estaba
con ellos, pero Jesús vino a traer salvación y a llamar a los pecadores para
que nos acerquemos a Dios. Así pues, concluimos que no nos acercamos a
Dios por virtudes propias, sino por Su gracia y misericordia.
Nos dice la Biblia en Marcos 2:15-17 “Aconteció que estando Jesús a la mesa
en casa de él, muchos publicanos y pecadores estaban también a la mesa
juntamente con Jesús y sus discípulos… Y los escribas y los fariseos…
dijeron a los discípulos: ¿Qué es esto, que él come y bebe con los publicanos
y pecadores? Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de
médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores”.
Nadie es demasiado malo para que Cristo deje de llamarlo. El texto de hoy
nos enseña que Jesús va a casa de un publicano, porque él quiere estar en
todas las casas (recordemos que los publicanos eran los encargados por el
imperio romano para cobrar sus impuestos, tenían muy buenas ganancias,
eran aborrecidos y considerados traicioneros).
5) Es necesario superar los obstáculos.
Los escribas y fariseos van a la casa de Leví para criticar, no para edificar,
ellos van a promover la discordia. El espíritu religioso siempre se opondrá a
la verdadera presencia de Dios, a su obra y al llamado que el Señor hace a sus
hijos. El Señor confrontaba la religión en su tiempo y enseñaba la verdadera
vida espiritual. La oposición es uno de los obstáculos que quien sirve a Dios
debe superar.
Según Marcos 2:18-20, los discípulos de Juan y de los fariseos preguntan a
Jesús por qué sus discípulos no ayunan. Los discípulos de Juan y de los
fariseos (éstos ayunaban dos veces por semana: lunes y jueves), son
instruidos por el Señor acerca del ayuno, Cristo anhela una profunda y
sincera disposición. Habrá quienes critiquen lo que haces, lo más importante
es hacerlo de corazón sincero para el Señor.
Jesús les explica: “nadie hace ayuno en la fiesta de boda. El ayuno muestra
tristeza, y si hubiese tristeza sería después de la fiesta al retirarse el novio”, el
término esposo aquí viene del término griego “nunfios” que primeramente
significa novio. Así que les dice que por cuanto él estaba presente sus
discípulos no tenían que ayunar, pero en su ausencia lo harían.
Jesús no abolió el ayuno, él lo practicaba, también los discípulos y la iglesia
primitiva; el ayuno es una bendición, pero no debe ser “religioso”, debe nacer
en nuestro corazón, un corazón que ama al novio, a Cristo, que se prepara
para el encuentro con él.
Conclusión: Jesús ante todo, mira primero el corazón. Todos rechazaban a
los publicanos pero Jesús sabía que ellos también podían arrepentirse y
amarlo. Debemos buscar a Dios con un corazón sencillo, adorar, orar, ayunar
y demás, pero con la sencillez que Cristo mismo nos enseña, sin la pompa
religiosa del espíritu fariseo. Simplemente amemos a Dios, y cumpliremos así
con el principal y gran mandamiento.

Te invitamos a adquirir los tres tomos anteriores de ésta serie:


“PALABRAS QUE TRANSFORMAN EL CORAZÓN. Tomo 1”
“SERMONES PARA PREDICAR, Tomo 2”
“SERMONES PARA PREDICAR, TOMO 3”
CAPÍTULO 5

DERROTANDO AL ENEMIGO
Introducción: Alejandro magno, rey macedonio vivió 34 años de edad, fue
rey a los 20 años, sometió a Grecia, Persia, Asia menor, Siria, Mesopotamia
Egipto, Babilonia y llego hasta la India. Expresó su desaliento cuando no
quedaba más tierra por conquistar. Murió de paludismo en la India. Sus 14
años de reinado marcaron la historia. Nosotros somos soldados del ejército de
Dios, y por tanto nuestra perspectiva debe ser militar también, avancemos
como ejercito del Señor alcanzando grandes victorias para Cristo.
“Cuando oyó Sanbalat que nosotros edificábamos el muro, se enojó y se
enfureció en gran manera, e hizo burla de los judíos… y dijo: ¿Qué hacen
estos débiles judíos?... ¿Acabarán en un día? ¿Resucitarán de los montones
del polvo las piedras que fueron quemadas?”, Nehemías 4:1-2. La obra de
Dios experimenta oposición, eso no lo podemos esconder, es sencillamente
una realidad. Las tinieblas usan diversas estrategias. Desde el libro de
Nehemías veamos algunas:
1) La burla:
Vemos que es un arma constante del enemigo, y en buena medida eficaz ante
una baja autoestima. Es interesante que Sanbalat significa: zarza, enemigo en
secreto (describe una acción escondida, oculta, mediante palabras de burla y
menosprecio). La burla puede ser lanzada desde el anonimato y en otras
ocasiones es disfrazada “con buenas intenciones”.
El objetivo de la burla es menospreciar lo que hacemos para Dios procurando
sembrar desanimo. El hijo de Dios debe perseverar, pues su mejor respuesta
es continuar avanzando, y alcanzando aquello que en el Señor se ha
propuesto. Recuerda que en Cristo tenemos una completa victoria.
2) La conspiración:
Nos dice la Biblia “y conspiraron todos a una para venir a atacar a Jerusalén y
hacerle daño”, Nehemías 4:8. Los descontentos se reúnen para atacar la obra
del Señor (éste es un ataque desde afuera). El contexto nos dice que: “los
muros eran reparados… los portillos comenzaban a ser cerrados” (un portillo
es una abertura o entrada en una muralla).
El enemigo no está contento cuando ve que comienzas a reparar tu vida, a
levantar tus defensas y a cerrar las puertas de ingreso del enemigo. Según el
versículo siete quienes conspiraron para venir en contra fueron los
samaritanos por el norte, los árabes por el sur, los amonitas por el oriente y
los de Asdod por el occidente.
Ellos no atacaron inmediatamente, pero conspiraron, hablaban mal, crearon
rumores de ataques, procuraban sembrar miedo e incertidumbre. Ante esto lo
que hizo Nehemías es lo que debemos hacer nosotros: orar, prestar suma
atención (velar) y continuar.
3) La hostilidad:
“Y nuestros enemigos dijeron: No sepan, ni vean, hasta que entremos en
medio de ellos y los matemos, y hagamos cesar la obra” Nehemías 4:11.
Ahora vemos el ataque desde adentro. Es interesante que uno de los enemigos
se llama: Tobías, cuyo nombre significa “el Señor es Dios”, “Dios es bueno”,
así que sus padres eran creyentes, era un amonita medio judío, él conoció de
Dios, pero ahora es enemigo.
Dentro del pueblo de Dios podemos ver actitudes como: resistencia a la obra,
indiferencia, maldad oculta. Al observar el versículo seis y el versículo diez
vemos que el cansancio propio del trabajo y el ataque del enemigo
produjeron un desgaste, y concluyen los hebreos: “no podemos edificar el
muro”.
Pero Nehemías continuó animando al pueblo y finalmente lograron su
objetivo, así pues vemos también que la perseverancia es esencial para hacer
la obra de Dios, ante el cansancio ve a la presencia de Dios y recibirás nuevas
fuerzas para continuar.
Dios desea que su pueblo logre grandes victorias y conquistas, pero debemos
ser conscientes que experimentaremos oposición y dificultades, pero el Señor
mismo nos ayudará y fortalecerá para alcanzar aquello que él ha diseñado
para nuestra vida.
4) El enemigo quiere provocar la huida en el pueblo de Dios.
Aunque estemos haciendo la voluntad del Señor no estamos exentos de
enfrentar gran oposición. Ante esto, nuestras reacciones pueden ser diversas,
podemos enojarnos, huir, desanimarnos o tomar una actitud espiritual y
madura, como hijos de Dios y personas de fe.
Vemos en el estudio de hoy que Nehemías está reconstruyendo los muros de
Jerusalén, y sus enemigos levantan calumnias y mentiras, él opta por orar en
primer lugar, y esto expresa nuestra dependencia de Dios y confianza en él.
Confía en el Señor él no te fallará. Persevera él es tu fortaleza.
La Biblia nos dice que hizo Nehemías: “Oye, oh Dios nuestro, que somos
objeto de su menosprecio”, Nehemías 4:4. El pasaje nos enseña que no
debemos discutir o entablar un enfrentamiento con las personas (o enemigos)
por las burlas o calumnias que hagan, sino más bien, hablar con Dios, orar
confiados en su poder (en algunas ocasiones el arma es además el dialogo en
amor, pero debemos tener la sabiduría para hacerlo).
Lo que tú hagas al respecto sin la dirección divina, nunca será mejor que lo
que Dios puede hacer. Por eso lo primero que debemos hacer es orar, y seguir
la dirección del Señor.
5) No subestimes la oposición.
Al considerar lo que Nehemías hizo nos enseña que no debemos ignorar las
maquinaciones del enemigo, sino velar en oración y sabiduría: “Entonces
oramos a nuestro Dios, y por causa de ellos pusimos guarda contra ellos de
día y de noche” Nehemías 4:9.
Ellos oraron y actuaron, algo así como: “Señor protégenos está noche… pero
nosotros cerraremos las puertas”. Oración sin acción es pasividad religiosa.
Vemos un gran ejemplo de esto en la guerra de Israel contra
Amalec. Cuídate de ser indiferente a las advertencia de Dios.
6) Refuerza los puntos débiles:
“Entonces por las partes bajas del lugar, detrás del muro, y en los sitios
abiertos, puse al pueblo por familias, con sus espadas, con sus lanzas y con
sus arcos” Nehemías 4:13. Nehemías identificó los lugares vulnerables (“las
partes bajas y los sitios abiertos”) y los reforzó. ¿Cuáles son esos lugares
hoy? Podemos ver algunas aplicaciones devocionales desde los términos
hebreos usados:
Partes bajas, expresión traducida del término hebreo “Takjtí” que habla de lo
de más abajo; profundidades (figurativamente abismo). Es aquello que no
está a la vista, está escondido, pero actúa y/o permite la acción desde las
profundidades infernales.
Sitios abiertos, frase traducida del término hebreo “Tsekjiákj” que además
significa: expuesto, desprotegido. Es aquello por lo cual no nos preocupamos
y por tanto no cubrimos (Por ejemplo: padres tan ocupados que descuidan a
sus hijos; esposos(as) que descuidan a su cónyuge, etc).
Niégate a abandonar tu comisión divina:
Nehemías 4:21-23 nos dice: “Nosotros, pues, trabajábamos en la obra…
También dije entonces al pueblo: Cada uno con su criado se quede dentro de
Jerusalén, para que de noche nos sirvan de centinelas, y de día en la obra. Y
ni yo, ni mis hermanos, ni mis mozos, ni la gente de guardia que me seguía,
desnudamos nuestra ropa; cada uno se desnudaba solamente para lavarse”.
La oposición, las crisis, las dudas, los mensajes demoniacos de abandonar la
obra del Señor, son parte del camino del cristiano, pues finalmente lo que el
diablo quiere e intenta una y otra vez, es apartar y mantener inactivos a los
soldados del reino de Dios. Pero como Nehemías debemos tomar fuerzas en
Dios y perseverar, al final veremos la victoria en el Señor.
El enemigo buscará traer cosas para distraerte de la voluntad de Dios para tu
vida, pero el Señor te fortalece para seguir enfocado en el plan divino. Él no
desampara a su pueblo, está siempre a su favor. Lo que el Señor requiere es
fidelidad y perseverancia, cuando el hijo de Dios avanza sin temor y confiado
en las promesas del Señor, no será avergonzado. Avanza, él está contigo.
CAPÍTULO 6

JESÚS HA VENIDO A TRAER LIBERTAD


Introducción: Hay muchos engañadores y curanderos que van por diferentes
lugares presentando “soluciones fantásticas” a los problemas de las personas,
y en medio de su gran necesidad los oyentes creen éstas mentiras. Otros son
videntes y astrólogos que con poderes satánicos engañan, pero el verdadero
poder, aquel que liberta, que sana de verdad, que transforma las vidas y salva,
viene de Jesucristo el Señor por la unción del Espíritu Santo.
Nos dice la Biblia en Marcos 5:1-5 “Vino a su encuentro, de los sepulcros, un
hombre con un espíritu inmundo, que tenía su morada en los sepulcros…
había sido atado con grillos y cadenas, más las cadenas habían sido hechas
pedazos por él, y desmenuzados los grillos; y nadie le podía dominar. Y
siempre, de día y de noche, andaba dando voces en los montes y en los
sepulcros, e hiriéndose con piedras”.
1) Algunas evidencias del cautiverio espiritual.
Podemos considerar a la luz del texto de hoy la condición de una persona
cautiva. La vida del endemoniado gadareno es una expresión de su condición
interna. Los versículos nos muestran dónde y cómo vivía: su morada era en
los sepulcros de Gadara, y por allí como en los montes, andaba gritando día y
noche.
Su violencia y fuerza eran extremas, pues hacia pedazos las cadenas y grillos
conque querían dominarlo. Su estilo de vida expresaba su condición interna.
Su corazón estaba desgarrado. Las heridas de su corazón, las malas
decisiones y las experiencias traumáticas de su vida lo habían llevado a
semejantes condición.
2) La condición espiritual determina la vida natural.
Es muy significativo aquí tener en cuenta que la palabra “Gadara” significa:
lugar amurallado y, el término “gadareno” significa: rodeado o encerrado
entre paredes.
Recordemos por ejemplo que el apóstol Pedro le dijo a Simón, quien ya había
creído y se había bautizado: “Arrepiéntete… porque en hiel de amargura y en
prisión de maldad veo que estás”, Hechos 8:23. El apóstol Pedro por el
Espíritu Santo pudo ver la condición espiritual de Simón, condición que
requería su arrepentimiento. Concluimos entonces que el pecado genera
cautiverio.
Cuando Jesús liberó a la mujer encorvada dijo que ella había sido atada por
Satanás durante dieciocho años; también Apocalipsis nos dice: “vi un
ángel… con la llave del abismo y una gran cadena en la mano” Apocalipsis
20:1. Concluimos entonces que hay calabozos, cárceles, mazmorras,
prisiones, cadenas y lazos espirituales que son usados para cautivar, atar y
afligir a las personas. Pero la Biblia nos enseña que el Señor Jesús vino a
hacer a los hombres libres.
3) El cautiverio hace que la persona se lastime a sí misma.
El texto nos dice que “andaba hiriéndose con piedras”. Cuando una persona
esta cautiva espiritualmente, está bajo opresión de seres espirituales de las
tinieblas cuyo objetivo es destruir. Por eso vemos: suicidios, homicidios,
desgracias familiares, actos inhumanos y aberrantes, adicciones que
destruyen personas y familias, y palabras que son como golpes de espada
(pues un corazón herido camina hiriendo a los otros).
La persona cautiva se autocastiga, hasta llegar a desear mejor la muerte, éste
era el objetivo de las tinieblas con el gadareno. Pero Jesucristo dio libertad a
éste hombre, rompió las cadenas que lo afligían, “porque para esto apareció el
Hijo de Dios para deshacer las obras del diablo”. Jesús ha venido a traer
libertad y sanidad a la humanidad.
Conclusión: La voluntad de Dios es que los hombres sean libres de su
cautiverio, que las cadenas de aflicción sean rotas, por eso nos dio su
autoridad y su Espíritu, Dios lo dijo: “a causa de la unción el yugo se
romperá”.
CAPÍTULO 7

DIOS LLAMA AL PROFETA ISAÍAS


Introducción: El profeta Isaías experimenta un momento difícil en su vida, ha
muerto el rey Uzías (amigo y familiar) y con él probablemente la bonanza del
reinado. El profeta enfrenta un tiempo de incertidumbre y ansiedad.
Ante esta situación decide ir al templo y allí tiene un encuentro con Dios,
donde es llamado y transformando por el poder de Dios. Hay ciertos
momentos en la vida dónde sólo una experiencia con Dios nos alienta a
seguir adelante, esto le sucedió al profeta Isaías…
“…Y voló hacia mí uno de los serafines, teniendo en su mano un carbón
encendido, tomado del altar con unas tenazas; y tocando con él sobre mi
boca, dijo: He aquí que esto tocó tus labios, y es quitada tu culpa, y limpio tu
pecado. Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá
por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí”, Isaías 6:6-8.
1) El corazón humano necesita a Dios.
Ante la presencia de Dios nuestro pecado es manifiesto. El mismo Isaías lo
expresa así: “Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo
hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios
inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos”.
El contexto nos dice que los serafines están adorando a Dios. La palabra
serafines significa ardientes, son los que están al frente del trono en su
presencia rindiendo continua adoración (Es imposible estar en Su presencia y
no adorar. Su nombre “ardientes” nos recuerda el fuego que alimenta el
corazón de un adorador).
Adoran declarando tres veces Santo, el número tres en la Biblia indica:
plenitud, perfección en testimonio. Es una adoración al Padre, al Hijo y al
Espíritu Santo. Al acercarnos a la luz de Dios podemos ver más con más
claridad nuestra condición y necesidad.
Un encuentro con la santidad de Dios es fundamental, pues le podemos
conocer como Dios proveedor, Dios salvador, Dios restaurador, pero no
como Dios Santo; la adoración nos hace conscientes de su santidad.
2) La presencia de Dios remueve todas las cosas.
El templo es afectado por la presencia del Dios Santo (nos dice la Biblia: “Y
los quiciales de las puertas se estremecieron con la voz del que clamaba, y la
casa se llenó de humo”, Isaías 6:4). Recordemos que su gloria llenó el
tabernáculo en el Antiguo Testamento, así como el templo de Salomón, y así
mismo nosotros como templo de Dios debemos ser estremecidos (es decir
sobrecogidos, conmovidos) con Su presencia.
La santidad y misericordia de Dios requieren la disposición del corazón
humano, pues vemos que Isaías reconoce su condición, y su necesidad
(Aunque ya estamos en el capítulo seis). Dios ministra a sus hijos, trayendo
para ellos sanidad, libertad y restauración.
3) El corazón del cristiano debe arder por Dios.
Dios envía un serafín con fuego del altar celestial (el altar es lugar de
sacrificio, lugar de la sangre vertida para perdón de pecados). El fuego del
cielo nos recuerda el poder que viene de Dios para a su vez poder servirle a
Él. Recordemos que el Espíritu Santo se manifestó en lenguas de fuego
cuando se derramó en pentecostés (Hechos dos).
El fuego consume (la madera, el heno y la hojarasca), purifica (quita las
impurezas del oro) y aviva el corazón apagado. Es el fuego que descendió
cuando se consagró el tabernáculo, cuando se ofreció el templo de Salomón,
es el fuego que descendió sobre el monte Carmelo cuando Elías derrotó a los
sacerdotes de Baal, es el fuego el que hace huir a la serpiente (cuando Pablo
estaba en la isla de Malta), pero la tibieza las atrae (por eso se refugian en
casas de humanos y aún en sus camas).
4) Ante la misericordia de Dios, nuestro corazón debe responder
dispuesto.
La biblia nos dice que Isaías responde: “Heme aquí, envíame a mí”, Isaías
6:8. No era tiempo de entristecerse, ni caer en depresión por la ausencia del
rey, era tiempo de ir y hacer la voluntad de Dios. La presencia del Señor y su
palabra nos saca del caos y de la crisis.
Era el tiempo de cumplir con la comisión divina, Isaías debía ir y profetizar,
ir y declarar la Palabra de Dios. De hecho Isaías significa “Jehová es
salvación”, Dios lo había llamado a servirle como profeta, y el Señor lo
ministra, lo equipa y lo envía.
Conclusión: Dios quiere enseñar a cada uno de sus hijos, él quiere revelarse,
darse a conocer como él es, él es santo y quiere ministrarnos con su fuego y
quemar aquello que no debe estar en nosotros… quiere tocarnos y usarnos.
Dispongamos nuestro corazón para que su plan se cumpla en nosotros.
CAPÍTULO 8

¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE LA UNCIÓN?


Introducción: Cuando Jesús se presenta en la sinagoga de Nazaret iniciando
su ministerio lo hace enseñando el pasaje de Isaías: “el Espíritu del Señor está
sobre mí, porque me ha ungido para…”. También dice en Hechos 10:38
“Como Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret…”,
es el Espíritu Santo quien nos capacita para llevar a cabo el plan de Dios para
nuestras vidas.
La unción es la esencia del poder del Espíritu Santo manifiesto sobre una
persona. Es un equipamiento sobrenatural para servir a Dios eficazmente, no
es para la gloria de los hombres, es ante todo para extender su reino en la
tierra, aquella iglesia ungida del primer siglo evangelizó el mundo
conocido.
“Y dijo Moisés a los hijos de Israel: Mirad, Jehová ha nombrado a Bezaleel
hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de Judá; y lo ha llenado del Espíritu de
Dios, en sabiduría, en inteligencia, en ciencia y en todo arte… Así él como
Aholiab hijo de Ahisamac, de la tribu de Dan; y los ha llenado de sabiduría
de corazón, para que hagan toda obra de arte y de invención, y de bordado en
azul, en púrpura, en carmesí, en lino fino y en telar, para que hagan toda
labor, e inventen todo diseño” Éxodo 35:30-33.
A) La unción te capacita para cumplir con el propósito de Dios.
En el texto de hoy vemos que Bezaleel fue lleno del Espíritu Santo. Es muy
importante que veamos aquí varias cosas:
1. Israel sabía del Espíritu Santo antes de venir en Pentecostés (pero no es
suficiente con saber de él, es necesario conocerlo).
2. Así como el Señor Jesús fue ungido para un ministerio sobrenatural, era
necesario que aquellos que construirían el tabernáculo fueran ungidos.
3. Bezaleel significa: protegido de Dios. Recordemos que la Escritura dice:
“no toquéis a mis ungidos”, pues el Señor tiene cuidado de sus hijos y de sus
planes.
4. Dios sabe bien a quien unge y para que lo hace, no es al azar ni por
accidente (por eso nos dice el texto: “hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de
Judá” se describe exactamente la persona, además nos dice con que fue
ungido en: “sabiduría, inteligencia, ciencia y arte para elaborar…”).
B) La unción debe glorificar a Dios.
No es para gloria de los hombres ni para beneficios propio. Es muy
importante mantener presente e imitar la relación de Jesús con el Espíritu
Santo. Consideremos por ejemplo las siguientes perspectivas del pasaje de
hoy:
1. Aholiab significa Tabernáculo del Padre. ¿Qué movió a sus padres a
ponerle ése nombre? Ellos vieron el plan profético de Dios en su hijo. Todos
somos un plan del Señor, pero como Aholiab tuvo que ser lleno del Espíritu
Santo para llevarlo a cabo también nosotros.
2. Bezaleel era de la tribu de Judá (La principal, la más grande y la que
marchaba adelante en el desierto) y Aholiab era de la tribu de Dan (la que
marchaba al final de todas, atrás, pequeña), así que Dios toma a uno de
adelante y otro de atrás, enseñándonos que en él no hay acepción de personas,
todos son valiosos para él.
3. La unción los capacitó para hacer una obra única (el tabernáculo), los otros
podían ayudar, pero ninguno podía hacer lo que Bezaleel y Aholiab podían
hacer. La unción nos hace más efectivos en el llamado.
Por ejemplo el apóstol Pedro era uno antes de Pentecostés, y luego decía: “de
lo que tengo te doy”, y “sacaban los enfermos a las calles, y los ponían en
camas y lechos, para que al pasar Pedro, a lo menos su sombra cayese sobre
alguno de ellos.
4. El resultado de un trabajo ungido, y donde todos se complementaron, pues
sirvieron a Dios desde los dones que cada uno recibió del Señor: fue un
hermoso tabernáculo, que glorificó a Dios, fue una honra para el Señor.
Reflexión final: Dios ha enviado su Espíritu Santo para hacer una obra
múltiple en el cristiano, en el día de hoy reflexionamos acerca de la unción.
Es importante para servir a Dios eficazmente, siempre recordando que ella
viene del Señor por su gracia, por tanto toda la gloria le pertenece a él. Que
privilegio es servir a Dios.
CAPÍTULO 9

EL PROFETA DANIEL Y LOS LEONES


Introducción: La victoria pública del profeta Daniel en el foso de los
leones estuvo precedida por la íntima comunión con Dios en su cuarto. La
unción implica intimidad con el Señor y te hace ir más allá del promedio. El
texto de hoy nos dice: “Daniel mismo era superior a los sátrapas, porque
había en él un espíritu superior”. Esto nos habla de la obra y evidencia del
Espíritu Santo en la vida de profeta.
“Pareció bien a Darío constituir sobre el reino ciento veinte sátrapas, que
gobernasen en todo el reino. Y sobre ellos tres gobernadores, de los cuales
Daniel era uno, a quienes estos sátrapas diesen cuenta, para que el rey no
fuese perjudicado. Pero Daniel mismo era superior a estos sátrapas y
gobernadores, porque había en él un espíritu superior; y el rey pensó en
ponerlo sobre todo el reino”, Daniel 6:1-3.
1) La presencia de Dios es evidente en una persona.
El imperio de Babilonia acaba de caer en manos del rey Darío de Media. El
texto bíblico nos dice que Daniel era superior a los otros gobernadores,
Daniel se destacó, la gracia y el favor de Dios estaban sobre él. La unción del
Espíritu Santo reposaba sobre él y por eso: “era superior”, término que desde
el hebreo significa: “llegar a ser el principal”, “distinguirse”.
El mismo Nabucodonosor y luego su hijo Belsasar, ambos reyes de Babilonia
le dijeron a Daniel: “sobre ti reposa el espíritu del Dios Santo”. La unción del
Espíritu de Dios sobre ti se hará notoria a los demás, aún ante los no
creyentes. Su presencia y poder es evidente, no se puede ocultar.
2) La intimidad con el Espíritu de Dios transforma nuestro estilo de vida.
Nos dice Daniel 6:4 “Entonces los gobernadores y sátrapas buscaban ocasión
para acusar a Daniel en lo relacionado al reino; mas no podían hallar ocasión
alguna o falta, porque él era fiel, y ningún vicio ni falta fue hallado en él”.
El testimonio que se da de Daniel aquí debemos destacarlo, pues estaba en
Babilonia, centro religioso, económico, político y cultural, reconocido por su
abundante idolatría, inmoralidad y ocultismo. De hecho en la Biblia se
presenta muchas veces como cuna de maldad y perversión.
En medio de todo esto Daniel se conducía rectamente ante los ojos del Señor.
El anhelo de Daniel no eran los títulos, sino la presencia misma de Dios. No
debemos descuidar nuestra pasión por Dios, recordemos que Jesús le dijo a la
iglesia de Éfeso: “Pero tengo contra ti que has dejado tu primer amor”.
3) Dios tiene cuidado de sus hijos.
Daniel es acusado por su devoción a Dios, él oraba tres veces al día y es
lanzado al foso de los leones, pero el corazón de Daniel estaba confiado en el
Señor. Por el poder de Dios seremos testigos de los milagros y victorias en él.
La unción es el poder de Dios en el creyente que lo conduce con fuerza ante
la adversidad, está seguro de la protección de Dios (como el pastor hebreo
que ungía a sus ovejas en los oídos y ojos para protegerla de los insectos y
sus infecciones). Debemos mantener presente lo que Dios dijo a través del
profeta Hageo: “No es con ejército ni con fuerza sino con mi Espíritu”.
4) Dios honra a los que le honran.
Las tinieblas y sus planes fracasaron, como fracasaron los enemigos de
Daniel. Durante la vida del profeta Daniel transcurrieron varios imperios:
Babilonia, Media, Persia, y varios reyes: Nabucodonosor, Belsasar, Darío y
Ciro, ellos caían, pero Daniel permanecía en sus labores de la corte real ¿por
qué? Porque el Espíritu de Dios reposaba sobre él (y esto es lo que marca la
diferencia).
Conclusión: La Escritura dice: “nunca falte ungüento sobre tu cabeza”, la
unción nos habla del aceite del Espíritu de Dios, aceite que debe ser
renovado. Dios quiere a sus hijos ungidos y transformados, por eso envió su
Espíritu Santo. Fortalezcamos nuestra comunión con Dios y veremos su
gloria a nuestro favor.
CAPÍTULO 10

TODO NOS AYUDA PARA BIEN


Introducción: La vida de José el hijo de Jacob, está llena de enseñanzas para
nosotros y nunca pierden su vigencia. La serie de experiencias que José vivió
fueron difíciles, por ejemplo: la traición de sus hermanos y el plan para
matarlo, la esclavitud bajo Potifar, el tiempo en la cárcel, pero vemos también
que Dios siempre lo protegió y lo bendijo de manera sobrenatural.
Toda esa diversidad de circunstancias lo llevaron al cumplimiento del plan
divino para su vida, porque al final Dios siempre hará que sus planes
prevalezcan. En esencia Dios es bueno y sabe lo que hace en nuestra vida.
“…cuando llegó José a sus hermanos, ellos quitaron a José la túnica de
colores que tenía sobre sí; y le tomaron y le echaron en la cisterna; pero la
cisterna estaba vacía, no había en ella agua… Y cuando pasaban los
madianitas mercaderes, sacaron ellos a José de la cisterna, y le vendieron a
los ismaelitas por veinte piezas de plata. Y llevaron a José a Egipto”, Génesis
37:23-24, 28.
1) Todo en nuestra vida tiene una razón de ser.
José pasa de la comodidad familiar a la cisterna. Según el versículo dos de
éste capítulo José tenía diecisiete años, era el consentido por su padre Jacob y
por eso le había regalado la túnica de colores.
Que tiempo tan difícil e inexplicable para José, sus hermanos querían matarlo
y al final deciden lanzarlo a una cisterna. Estaba empezando José un camino
que sólo entendería al final, camino en el que encontraría decepciones, dolor,
injusticia, esclavitud, etc. Pero todo de una u otra manera lo llevaría al plan
del Señor.
2) Dios es soberano y bueno.
Todo esto formaba parte de las circunstancias organizadas desde el cielo para
llevar a José al lugar que Dios había destinado para él. El Señor obra de
maneras diversas y muchas veces incomprensibles para nosotros, por eso
Pablo dijo: “cuan inescrutables e insondables son sus caminos”.
Cabe preguntarnos aquí: ¿Cómo reaccionamos cuando Dios permite éstos
fuertes, incomprensibles e imprevistos cambios en nuestra vida? Debemos
izar la bandera del perdón y fortalecer nuestra comunión con el Señor, pues el
Alfarero divino está trabajando.
3) En medio de la dificultad Dios nos sostiene y bendice.
Posteriormente vemos a José, pasar de la hacienda de Potifar (lugar donde
Dios manifestó su respaldo sobrenatural sobre José) a la cárcel del rey “Y
tomó su amo a José, y lo puso en la cárcel… Pero Jehová estaba con José y le
extendió su misericordia, y le dio gracia en los ojos del jefe de la cárcel. Y el
jefe de la cárcel entregó en mano de José el cuidado de todos los presos que
había en aquella prisión; todo lo que se hacía allí, él lo hacía”, Génesis 39:20-
22.
Los primeros versículos del capítulo treinta y nueve nos hablan del inmenso
respaldo de Dios sobre José. Él estaba siendo entrenado por Dios a través de
la hacienda de Potifar el general egipcio para administrar luego el imperio
egipcio, aunque José no lo sabía exactamente.
4) Dios instruye y forma a sus hijos.
Después de la casa de Potifar José es enviado a la cárcel (por una injusticia,
pues en realidad José no cedió a las deseos de la esposa de Potifar y fue
calumniado por ésta) allí llegó a dirigir los presos del rey, los que
seguramente luego recibirían ordenes de José posteriormente.
Es Dios quien transforma todas las cosas, y nos lleva a escenarios que
muchas veces no comprendemos pero todo eso es parte del entrenamiento.
Antes del Señor dar lugares de privilegio y altura requiere formar un carácter
firme y fiel, para que los fuertes vientos no derriben a sus hijos.
No esperes a ser “gobernador de Egipto” para administrar bien las
bendiciones y dones, vive y administra cada día los recursos del reino que el
Rey te hace llegar, y Dios te honrará mañana, pues “el que es fiel en lo poco,
sobre mucho será puesto”.
José estaba en tierra extranjera, solo, sin familia, sin nadie que lo alentará en
su fe, pero se guardó para su Señor, no murmuró, ni se quejó, no levantó su
boca contra el cielo, se condujo con temor de Dios y confianza en su bondad.
Conclusión: Dios sabe lo que hace, nuestra vida es un plan del cielo y todo
lo que sucede en ella obedece a la soberanía divina, como José procuremos
amar a Dios en todo tiempo y guardemos nuestro corazón del mal
permitiendo la obra del Señor en él. Esto inequívocamente nos llevará al
destino que el Señor nos ha preparado.
CAPÍTULO 11

VICTORIA SOBRE EL ENGAÑO


Introducción: Con frecuencia nuestras oraciones están llenas de peticiones de
acuerdo a nuestras necesidades y anhelos, queremos que Dios nos conceda
muchas cosas surgidas de nuestro ego. No es muy frecuente que le
preguntemos a Dios, ¿Qué quieres? ¿Cuál es tu voluntad?
Por eso, con facilidad permitimos al enemigo engañar nuestro corazón y
tomamos muchas decisiones equivocadas. La Biblia nos enseña que la
serpiente antigua, el diablo, usa con astucia sus mentiras, y Dios nos advierte
“no podemos ignorar sus maquinaciones”.
“Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la
mujer: La serpiente me engañó, y comí” Génesis 3:13.
1) Cuidado con el espíritu de mentira.
La mujer es engañada por la astuta serpiente en el huerto del Edén. El arma
más poderosa y antigua del diablo es el engaño. La Biblia nos enseña que
utilizando las palabras y la mentira, el diablo logró engañar a los ángeles que
cayeron con él, logró engañar a la mujer en el Edén, ha sido espíritu de
mentira y error en medio de Israel.
Hoy día procura engañar a la Iglesia del Cordero, y en el futuro lo hará
también, por eso nos dice la Biblia (en Apocalipsis doce): “el gran dragón, la
serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo
entero”, su arma preferida y más poderosa ha sido, es y será el engaño y la
mentira (consideremos que precisamente la serpiente tiene su veneno en la
boca). Por eso debemos cuidar nuestras palabras.
2) El diablo intenta engañar la iglesia.
La Escritura nos enseña que lo mismo (engañar por parte del diablo) ocurre
hoy entre la serpiente y la Iglesia: 2 Corintios 11:2-3 “Porque os celo con
celo de Dios; porque os he desposado a un esposo, para presentaros como una
virgen pura a Cristo. Mas temo que en alguna manera, como la serpiente
engañó a Eva con su astucia, así sean corrompidas vuestras mentes, de la
simplicidad que es en Cristo”.
Pablo expresa un temor, y es que como la serpiente engañó a Eva, así la
iglesia pueda ser engañada por el diablo. Por eso es fundamental que como
hijos de Dios desarrollemos el discernimiento para hacer diferencia entre lo
bueno y lo malo. El discernimiento es una arma poderosa para derribar el
engaño satánico.
Eva estaba en un estado de inocencia en el huerto del Edén, pero la inocencia
nos es suficiente se requiere discernimiento para no ser engañados por el
enemigo. El hijo de Dios debe conocer más las estrategias del enemigo y no
permitir el engaño en su vida y familia.
3) Dios nos ha equipado con su Palabra y su Santo Espíritu, el cual nos
guía a toda verdad.
Finalmente nuestro Dios castiga a la serpiente, ésta es maldecida según
Génesis 3:14 “Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste,
maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo;
sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida”.
La serpiente pierde privilegios, por eso algunos interpretes concluyen que
andaba erguida, pues Dios le dice “sobre tu pecho andarás” y “y polvo
comerás todos los días de tu vida”, es interesante que el hombre fue formado
del polvo de la tierra (Génesis 2:7), podemos ver aquí un simbolismo y
concluir que la serpiente se alimenta del hombre (el cual es polvo de la tierra)
cuando éste camina de acuerdo a las pasiones terrenales, y Dios es glorificado
cuando éste camina en el Espíritu (es una vida que no está al alcance del
enemigo).
Por eso somos llamados a caminar según el Espíritu de Dios, el Señor puso
en nosotros su Espíritu para caminar en victoria sobre la serpiente. Pero
debemos ser conscientes de que seremos instrumentos de aquel a quien nos
sometemos. Debemos procurar a la luz de la verdad de Dios caminar, por eso
su palabra es lámpara a nuestros pies.
Conclusión: Nuestro Dios nos ha diseñado para caminar en victoria. Pero no
podemos ignorar las maquinaciones, planes o estrategias del diablo. Debemos
depender de Dios y de su dirección, él anhela que nosotros avancemos y
logremos aquello que él ha planeado para nosotros. Él quiere lo mejor para ti.
CAPÍTULO 12

LA BATALLA DESDE EL EDÉN


Introducción: No podemos ignorar o ser indiferentes a la realidad del
conflicto espiritual que vivimos. La serpiente aborrece a la simiente de la
mujer. Intentó dañar ésta simiente desde la generación antediluviana, intentó
matar a los varoncitos hebreos que nacían en Egipto, promovió la matanza de
los niños en tiempos del rey Herodes, y en Apocalipsis doce vemos al dragón
persiguiendo a la mujer que había dado a luz al hijo varón.
Pero, la misma Escritura nos enseña que Cristo es la simiente de Dios en
nosotros y por él podemos vencer, como él venció. Por eso nos ha equipado
con las armas del Espíritu y ha delegado su autoridad en la iglesia.
“Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente
suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar” Génesis 3:15.
1) Significado de la palabra enemistad.
En éste versículo podemos ver varias cosas muy importantes: El término
enemistad, del hebreo “Eibá” significa además: hostilidad, su raíz implica
odio, enemigo. La palabra denota una lucha mortal (lucha entre la serpiente y
la iglesia, lucha que nos enseña Efesios seis).
Las amigas (Eva y la serpiente cuando hablaban en el Edén) terminaron
siendo enemigas, porque la amistad que mediante el engaño te lleva al
pecado, sin duda alguna es tu enemiga, sólo es cuestión de tiempo para
conocerle en verdad.
La simiente de la mujer según nos enseña la Biblia hace referencia a Cristo y
a los hijos de Dios (la palabra simiente significa: descendientes, posteridad,
generaciones). Es entonces una batalla generacional y Dios ha equipado a sus
hijos para caminar en victoria sobre la serpiente. Es necesario adiestrarnos en
la batalla espiritual.
2) La simiente de la serpiente:
a) Sus ángeles (serán lanzados “al fuego eterno preparado para el diablo y sus
ángeles”, tienen su misma genética).
b) El anticristo (así como Cristo es la simiente del Padre, el anticristo es la
simiente de la serpiente).
c) Jesús dijo a los escribas y fariseos: “Vosotros sois de vuestro padre el
diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer… Cuando habla mentira,
de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira” Juan 8:44.
d) También nos dice la Biblia: “En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los
hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano,
no es de Dios” 1 Juan 3:10.
3) La serpiente es derrotada.
La herida en la cabeza y la herida en el talón. La herida en la cabeza es
mortal, y fue el golpe que Jesús le asestó al diablo en la cruz del calvario. La
herida en el calcañar hace referencia al dolor causado a Jesús en su
padecimiento antes de morir.
La resurrección de Jesús fue la victoria completa, y esa autoridad que Cristo
conquistó la delegó a su iglesia. Por eso el Maestro también dijo: “He aquí os
doy potestad (autoridad) para hollar (pisotear) serpientes y escorpiones”
(demonios o espíritus inmundos).
4) “El dolor de dar a luz los hijos”, Génesis 3:16.
“A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera tus dolores y tus preñeces; con
dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido, y él señoreará
sobre ti”
Recordemos aquí que María concibió por el poder del Espíritu Santo
(“Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló
que había concebido del Espíritu Santo”), y de ella nace el Hijo, Jesús de
Nazaret. Pero Adán engendró hijos e hijas, Génesis 5:1-4.
¿Cuál es la diferencia entre engendrar y concebir? engendrar viene
de in + generare, que significa "introducir el elemento generador en"; en
cierta manera: "sembrar", "implantar", y concebir viene de cum + capio, que
significa "Captar", "coger", "capturar", el hombre da, aporta, siembra; y la
mujer toma, recibe.
El hombre engendra, y la mujer concibe y da a luz. Que hermosos es ver
como Dios diseñó a cada uno para cumplir con un plan divino, por eso el
matrimonio es un complemento, no es un problema. Así, como los hijos son
una bendición de Dios.
4) El Señor Jesús vino a restaurar todas las cosas.
Cristo es el postrer adán, y Eva es figura de la iglesia, 1 Corintios 15:45-47.
El postrer Adán es Cristo, él ya vive en nosotros, ya lo recibimos, ahora
debemos dar a luz muchos hijos para Dios. El contexto de la multiplicación
que es la voluntad del Señor desde el comienzo se da en la intimidad, y en el
marco de la enemistad con la serpiente.
A Adán Dios le dijo: “Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y
sojuzgadla”, y a nosotros hoy nos dice: “y haced discípulos a todas las
naciones”, su plan no ha cambiado, él uso la matriz de Eva, hoy quiere usar
su cuerpo, es decir la Iglesia para dar a luz muchos hijos para Dios.
Eva sale de una costilla de Adán, y Cristo es también herido en su costado
(Juan 19:34). Ambos, el primer y postrer Adán, experimentan la misma
vivencia en pro de su novia: una herida en su costado, Adán en pro de Eva y
Cristo en pro de su Iglesia: la novia del Cordero. Eva viene a ser figura de la
Iglesia, así como la unión de Adán y Eva es figura de las bodas del Cordero.
Conclusión: Dios anhela nuestra disposición para lograr sus planes, él quiere
que le digamos: “heme aquí, dispuesto estoy”. Sus planes son grandes y
gloriosos, sólo busquémosle y con corazón manso y sincero hagamos su
voluntad.
CAPÍTULO 13

JESÚS ES RESTAURADOR DE VIDAS


Introducción: En una de sus giras evangelísticas el Señor Jesús sanó a dos
ciegos de Jericó, quienes a pesar de su condición clamaron con insistencia, y
su fuerza y perseverancia los llevó a superar varios obstáculos para alcanzar
su milagro, pues la multitud que seguía a Jesús era muy grande, los discípulos
intentaron callarlos y nada podían ver…
Sin embargo captaron la atención de Jesús, quien se detuvo y los atendió. No
debemos renunciar sino perseverar aunque los obstáculos aumenten, pues
Jesús nos oirá y atenderá.
“Y deteniéndose Jesús, los llamó, y les dijo: ¿Qué queréis que os haga? Ellos
le dijeron: Señor, que sean abiertos nuestros ojos. Entonces Jesús,
compadecido, les tocó los ojos, y en seguida recibieron la vista; y le
siguieron” Mateo 20:32-34.
1) Debemos conocer a Dios mucho más allá de un milagro.
En nuestra vida cristiana debemos vivir la transición de la provisión al
discipulado. Es decir debemos procurar ver más a Dios como la razón de
nuestra vida, que como el proveedor de nuestras necesidades.
La Biblia nos enseña que el Señor conoce nuestra necesidad, pero espera
nuestra expresión (oración). En éste caso vemos que el Señor establece un
dialogo con ellos: “¿Qué queréis que os haga?” y ellos responden pidiendo un
milagro: la sanidad de sus ojos. En primera instancia nos acercamos a Dios
por necesidad, pero en la medida en que le seguimos y le conocemos nuestro
corazón debe seguirlo por amor.
2) La misericordia de Jesús transforma las vidas.
El texto bíblico nos dice “Entonces Jesús, sintiendo compasión, les tocó los
ojos”. Consideremos varias cosas importantes que están aquí:
a) El Señor Jesús respondió después de las acciones de ellos (ellos clamaron,
luego clamaron más, se acercaron a él, expresaron su anhelo, etc).
b) Ellos pidieron misericordia y él tuvo compasión (cualquiera que clame con
un corazón sincero misericordia a Dios será oído).
c) Jesús tocó sus ojos y ése toque trajo luz, les devolvió la vista (y descubren
el más hermoso paisaje, la más hermosa pintura, lo más glorioso que los ojos
pueden ver: a Jesús, Dios que se hizo hombre).
Jesús lo dijo: “yo soy la luz del mundo, y el que me sigue tendrá la luz de la
vida”, él transformó sus vidas, ya no serían más mendigos (pues por su
ceguera pedían monedas “sentados junto al camino” nos dice la Escritura).
3) Jesús es el principal motivo de vida.
Éstos ciegos se convierten en seguidores de Jesús, la Biblia nos dice: “y le
siguieron”. Su vida había sido transformada, y en su corazón había gratitud,
amor por Aquel que un día apareció en el camino de Jericó a Jerusalén. Pero,
ahora que lo conocían no lo dejarían ir, “te seguiremos” fue su decisión, ellos
habían entendido que la vida sin Cristo es una vida en tinieblas, y por ende
una vida de tropiezos dolorosos, una vida vacía sin razón.
Ellos seguramente conocían la Ley de Moisés, estaban bajo pacto,
descendientes de Abraham, pero el nivel de luz era muy bajo, la religión
había cegado la vida del Espíritu, ahora luz les resplandeció, y la luz se opone
a las tinieblas y a sus obras.
Ellos deciden seguir a Aquel que había transformado sus vidas, a Aquel que
los había sacado de las tinieblas. Es exactamente lo que nos sucede cuando
conocemos a Jesús. Gracias, Señor por iluminar nuestras vidas con tu luz y
trasladarnos de la potestad de las tinieblas a tu Reino.
Conclusión: Ciertamente Dios ha hecho muchas cosas, pero quiere hacer
muchas más, permitamos que venga con su luz a todas las áreas de nuestra
vida, y toque donde aquella área de nuestro ser necesita sanidad, libertad,
restauración, y transformación.
CAPÍTULO 14

DISCÍPULOS VERDADEROS
Introducción: Ananías fue un discípulo del Señor Jesús y usado por él para
ministrar a Saulo de Tarso. Él escuchó la voz de Dios, Ananías era un
hombre sensible a la voz divina. Era un hombre fiel (el término fiel viene del
griego “pistos” que traduce además: digno de confianza), por tanto Dios le
confía sus secretos, planes y estrategias.
En el secreto es donde Dios revela su voluntad y dirección. Los discípulos del
Señor son aquellos que le siguen y hacen su voluntad, no viven para sí, sino
para Aquel que los salvó y llamó.
“Había entonces en Damasco un discípulo llamado Ananías, a quien el Señor
dijo en visión: Ananías. Y él respondió: Heme aquí, Señor. Y el Señor le
dijo: Levántate, y ve a la calle que se llama Derecha, y busca en casa de
Judas a uno llamado Saulo, de Tarso; porque he aquí, él ora, y ha visto en
visión a un varón llamado Ananías, que entra y le pone las manos encima
para que recobre la vista” Hechos 12:10-12.
1) El verdadero discipulado se fortalece en la intimidad con Dios.
Podemos ver en Ananías varias características de los discípulos del Señor hoy
día. La primera y más importante: son personas de comunión con el Espíritu
Santo. El resultado de la comunión con Dios en Ananías es que oye su voz,
conoce el plan divino y se pone en marcha para ejecutarlo. Por ende, los
discípulos de Jesús hacen las cosas como él quiere y cuando él quiere.
2) El verdadero discípulo tiene gran amor por la palabra de Dios.
Los discípulos del Señor son personas con amor por la Palabra de Dios.
Tanto Ananías como Pablo, eran hombres de la Palabra. Ananías es llamado
luego por Pablo: “varón piadoso según la ley, que tenía buen testimonio de
todos los judíos que allí moraban”, sólo que a Pablo le faltaba la revelación
(como todo judío, Pablo fue enseñado desde los cinco años en la Ley, además
fue instruido a los pies de Gamaliel, pero la revelación es dada por el Espíritu
Santo).
Nacemos y permanecemos por la Palabra de Dios, pues ella es la simiente
incorruptible y es “el pan del espíritu”. No en vano Ananías significa: Dios se
ha revelado, Dios es misericordioso. Sin tener la Biblia como hoy la tenemos
(66 libros) Ananías tuvo la revelación de Jesús como el Mesías, el Hijo de
Dios. No sólo es deseo de conocimiento, sino amor por la revelación de Dios
desde su palabra. Los discípulos del Señor aman la Palabra.
3) Un discipulado aprobado tiene como señal la obediencia a Dios.
Los discípulos del Señor mantienen una firme obediencia, incluso por encima
de su razón. Dios habla a Ananías, pero “Ananías respondió: Señor, he oído
de muchos acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en
Jerusalén… El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste”
(Hechos 9:13-17).
Los argumentos de Ananías son ciertos, pero el Señor le enseña, porque un
discípulo del Espíritu es enseñable. La capacidad de aprender no puede
perderse nunca, aún en el cielo continuaremos aprendiendo. El Señor siempre
quiere guiarnos y seguir su consejo es parte de la formación y madurez del
hijo de Dios.
4) Dios recompensará tu búsqueda de Dios.
Dios le revela a Ananías Su propósito con Saulo (Es interesante que el
perseguidor de los cristianos, ahora será perseguido por la verdad de Cristo).
“Fue entonces Ananías y entró en la casa” ¿Cuál casa?
Según Hechos 9:8-9 Saulo estaba en una casa de Damasco en ayuno y
oración (Pidiendo a Dios dirección y la respuesta a su pregunta ¿Señor, qué
quieres que yo haga? allí tiene una visión y el Señor envía a Ananías con la
respuesta que necesitaba. Nunca será en vano tu búsqueda de Dios.
El Señor Jesús ayunaba, Pablo lo hacía, la iglesia de los primeros siglos
también, por eso nosotros también debemos hacerlo porque los discípulos del
Señor también ayunan.
Conclusión: Dios continúa su formación en nosotros, él siempre nos está
enseñando. Él envió su Espíritu para revelarnos y enseñarnos cosas que ojo
no vio, ni oído oyó, para conocer las riquezas de gloria y la herencia en Cristo
Jesús. Fortalece tu comunión con el Señor y él te sorprenderá.
CAPÍTULO 15

JESUCRISTO BENDITO SALVADOR


Introducción: Según Números 21 “Moisés oró por el pueblo”, esto nos
recuerda la importancia de hablar con Dios. Moisés perdonó a Israel aunque
habían hablado mal de él, él hablo bien de ellos, demostró su perdón al
interceder por ellos.
Moisés aplicó lo que Jesús luego enseñaría: “Amad a vuestros enemigos,
bendecid a los que os maldicen, orad por los que os ofenden y os persiguen”
(Mateo 5:44). No permitas que tu corazón se cargue con decepciones o
tristezas, ve a Jesús y encomienda en sus manos todas las cosas.
“Entonces el pueblo vino a Moisés y dijo: Hemos pecado por haber hablado
contra Jehová, y contra ti; ruega a Jehová que quite de nosotros estas
serpientes. Y Moisés oró por el pueblo. Y Jehová dijo a Moisés: Hazte una
serpiente ardiente, y ponla sobre un asta; y cualquiera que fuere mordido y
mirare a ella, vivirá. Y Moisés hizo una serpiente de bronce, y la puso sobre
una asta; y cuando alguna serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de
bronce, y vivía” Números 21:7-9.
1) El arrepentimiento precede la bendición.
La fe debe acercarnos a Dios y en éste proceso el arrepentimiento es
fundamental. Con humildad debemos volvernos al Señor y reconocer lo malo
que hemos hecho. En éste caso Israel había murmurado contra Dios y contra
Moisés. Recordemos que cuando hablamos mal de un hermano o de una
autoridad en la tierra, estamos cerca de hablar mal de la autoridad en el cielo.
2) Mira a Jesús.
Confía en el poder de Dios. El Señor es nuestro proveedor: él les dio agua y
maná en el desierto, y les proveyó la serpiente de bronce. Nuestro Dios es
Todopoderoso, salvador, restaurador… “Lo que es imposible para el hombre
es posible para Dios”.
Una mirada de fe los sanaba en el desierto; en el Nuevo testamento Jesús
dijo: “Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que
el Hijo del Hombre sea levantado, para que todo aquel que en él cree, no se
pierda, mas tenga vida eterna” Juan 3:14-15, entonces esto nos enseña que
está serpiente era una figura de Cristo, quien sería levantado en una cruz para
salvación de todo aquel que en él crea.
3) Jesús sufrió el castigo por nosotros.
En el tabernáculo se usaron muchos materiales, entre ellos: la madera
(representa la humanidad de Jesús), el oro (representa la divinidad), la plata
(representa la redención). El bronce (representa el juicio, por ejemplo los
cuatro cuernos del altar del holocausto eran de bronce y eran cubiertos de
sangre). La serpiente era de bronce, material que es símbolo de juicio, juicio
que llevó el Señor en la cruz por nosotros.
Además dice el texto en Juan: “para que no se pierda”, sin duda alguna la
mayor pérdida no es la del negocio, ni la inversión que se esfumó, ni el
vehículo que se perdió, la mayor tragedia para el hombre es estar eternamente
separado de Dios.
Conclusión: En todo tiempo debemos confiar en Dios, cuidar nuestras
palabras para no pecar contra Su voluntad, y no permitir al enemigo entrar en
nuestro campamento y causar daños dolorosos. Mira a Jesús en medio del
camino difícil, en medio del desierto, en medio del cansancio, levantar los
ojos al cielo es el primer paso para continuar en la voluntad de Dios.
CAPÍTULO 16

EL AMOR DE DIOS POR SU IGLESIA


Introducción: Dios envía un mensaje a las siete iglesias de Asia. Ya que el
número siete implica algo completo o pleno, vemos entonces aquí un mensaje
al Cuerpo de Cristo, es decir a toda su Iglesia.
Esto lo confirmamos cuando al finalizar el mensaje a cada una de las iglesias
dice: “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias”, y teniendo
presente que Su palabra no pasará, vemos entonces que el mensaje es para
todas las iglesias locales, y para la Iglesia de Cristo en todo tiempo. Ya que
Cristo es el Novio no deja de hablarle a su Iglesia, procurando que esté
despierta y dispuesta para su venida.
“Juan, a las siete iglesias que están en Asia: Gracia y paz a vosotros, del que
es y que era y que ha de venir, y de los siete espíritus que están delante de su
trono; y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el
soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos lavó de nuestros
pecados con su sangre” Apocalipsis 1:4-5.
1) La iglesia de Cristo es una sola.
En éstos versículos podemos ver cosas muy interesantes e importantes para
nuestra vida. Por ejemplo, consideremos el destinatario: Las siete iglesias de
Asia. Cada una de ellas con su propia identidad, con sus propios desafíos y
luchas. Al detenernos en cada una de ellas vemos las diversas situaciones,
fortalezas y enemigos.
Sin embargo, Dios las ve como una sola: La novia del Cordero, una sola
Iglesia redimida por la sangre de su Hijo, un solo cuerpo. Por eso el Señor
Jesús no viene por una denominación, él viene por su amada iglesia, es decir
por todos los redimidos por la fe en la sangre de Jesucristo el Señor.
Con el mismo amor, poder y grandeza, Dios ve cada iglesia local, la conoce
profundamente, sabe cómo late su corazón, cuantas heridas deben ser
sanadas, y cuanto pecado debe ser limpiado. Él conoce la condición de cada
uno de sus miembros y por eso se ocupa de hablarle a cada una de ellas en
detalle. Cuán grande es Su amor y cuidado por su iglesia.
2) La trinidad y la iglesia.
Consideremos ahora al autor: Vemos en éstos versículos a tres personas que
se adjudican el mensaje, vemos entonces, creo yo, al Dios trino. El Padre;
“los siete espíritus que están delante de su trono” son la plenitud manifiesta
del Espíritu Santo; “y de Jesucristo”: el Hijo.
Hablan los tres y hablan lo mismo. Que hermosa y poderosa unidad, ella sola
nos desafía con su ejemplo, que armonía, cuán grande amor. Al considerar
nuestras vidas y relaciones familiares, eclesiales y ministeriales, tenemos que
reconocer que nos falta muchísimo para parecernos a Dios.
3) El Cristo glorificado.
En éste capítulo el apóstol Juan tiene una visión de Cristo glorificado.
Recordemos que de los doce apóstoles Juan era el más cercano a Jesús, pero
ésta nueva experiencia será gloriosa pues vería al Señor Jesús en el esplendor
de su gloria, sería algo nuevo para el apóstol. Así es nuestro Dios siempre nos
está sorprendiendo y enseñando.
a) De Jesucristo se revelan tres facetas: “el testigo fiel”, la palabra testigo se
traduce del término griego “martus” que además significa: “uno que da
testimonio mediante su muerte”. Mediante su sacrificio certificó la existencia
del tormento eterno, y trajo salvación a la humanidad. Por amor dio su vida y
nos limpió de pecado con su sangre.
b) “El primogénito de los muertos”: es decir el primero que resucitó en gloria,
los que anteriormente resucitaron volvieron a morir, Cristo resucitó, vive para
siempre y es dador de vida, por eso él dijo: “Yo soy la resurrección y la vida,
el que cree en mí, aunque esté muerto vivirá”.
c) “El soberano de los reyes de la tierra”: soberano es traducido del término
griego “arcon” que también significa: gobernante, es decir el gobernante de
los reyes de la tierra. Recordemos que él vino como cordero, se humilló, pero
el Padre lo exaltó hasta lo sumo.
La Biblia nos dice en Filipenses dos: “le dio un nombre que es sobre todo
nombre, y toda rodilla se doblará, y toda lengua confesará que Jesucristo es el
Señor”, las rodillas de todos los reyes y poderosos que han existido en la
tierra y los poderes demoniacos debajo de la tierra un día se doblarán ante
nuestro Señor Jesucristo. A él sea toda la gloria.
Conclusión: La frase: “De tal manera amó” en Juan 3:16 nos hace pensar
mucho más allá de la cruz, nos hace pensar en la eternidad primera y postrera,
cuando el Padre lo envía, cuando el Hijo decide dejar su gloria, cuando lo
volvamos a ver en el reino venidero, pero aún con las señales en sus manos,
pies y costado. Definitivamente sólo podemos callar ante su gran amor, va
más allá del entendimiento humano, por eso Juan más bien dice: “De tal
manera amó Dios al mundo”.
CAPÍTULO 17

LA CREACIÓN DEL UNIVERSO


Introducción: Nuestra vida sin Cristo experimenta confusión y un continuo
vacío existencial que el ser humano quiere llenar con muchas cosas, vanas y
temporales (drogas, alcohol, diversas idolatrías, etc), cosas que provocan un
vacío mayor. En otras ocasiones siendo cristianos se experimenta la
confusión, los miedos, el desorden de vida y surgen muchas preguntas ante lo
que se vive.
La respuesta siempre la encontraremos en Dios, entrando en su presencia y
recibiendo de su Espíritu la revelación para la restauración y bendición de
nuestra vida. Tengamos presente: Sí Dios creó el universo, tiene el poder para
transformar y crear una vida nueva en nosotros. Su carácter, poder y obra es
descrito en la Biblia desde el comienzo.
“En el principio creó Dios los cielos y la tierra” Génesis 1:1.
1) Definición de principio.
Consideremos primero textualmente lo que el primer versículo de la Biblia
nos enseña. La palabra “principio” es traducida aquí del término
hebreo “reshít” el cual nos habla de un comienzo o inicio de un periodo
determinado. Entonces esta palabra nos dice que comenzó una nueva etapa en
los planes de Dios. La creación es un nuevo periodo que se encuentra dentro
de la eternidad del Señor.
Nuestro tiempo (cronos) es muy diferente a la eternidad de Dios. La creación
dio inicio a un nuevo periodo, al mirar más atrás es decir antes de Génesis
1:1, nuestra mente se pierde, pues aparece allí la eternidad de Dios, y acerca
de ésta conocemos lo que él por la Biblia nos enseña. Entonces la frase “en el
principio” nos habla del comienzo de la existencia del planeta tierra y el
universo físico que conocemos.
2) Dios Creador.
La expresión “creó” nos hace considerar ante el gigante universo el inmenso
poder creador de Dios. Crear es un atributo sólo de Dios. Consideremos aquí
varias cosas muy importantes: “Crear” en Génesis 1:1 es un término
traducido de la palabra hebrea “bara”, en el texto de las Sagradas Escrituras
éste término sólo se usa para Dios. Es una virtud exclusivamente divina.
Ningún otro ser puede crear. No somos resultado de la evolución, somos obra
de las manos del Dios Todopoderoso. Es por eso que el diablo imita y
engaña, él es repetitivo, pues solo Dios es Creador.
3) Dios creó varios cielos.
El texto de hoy nos sigue enseñando y ahora añade: “creó Dios los cielos y la
tierra”. Como podemos ver dice “los cielos”, un plural que nos enseña que él
creó varios cielos y la tierra.
Si pensamos en la tierra y en su diversidad, en su estructura física, variedad,
equilibrio natural, su composición y unidad, su belleza, sus movimientos
perfectos (traslación y rotación), y sus maravillas naturales, y además
consideramos el universo, todo esto nos permite contemplar el poder de
nuestro Dios, causándonos asombro, por eso a veces nos cuesta trabajo
asimilar las maravillas del tercer cielo.
En la segunda Carta a los Corintios (Capítulo doce), el apóstol Pablo nos
enseña que él fue arrebatado hasta el tercer cielo, específicamente al paraíso
(lugar “donde oyó palabras inefables que no le es dado al hombre expresar”).
La Biblia nos deja ver en parte la vida en el tercer cielo (el ambiente, la
diversidad de seres angelicales, los redimidos, la Jerusalén celestial, etc), pero
desde Génesis 1:1 la historia se enfoca en la tierra, desarrollando el plan de
salvación y revelación de Dios para los hombres.
Conclusión: El gran poder de Dios es evidente a través de su creación, lo
vemos también en todas sus victorias sobre las tinieblas, pero es su amor la
más grande virtud, por amor envió a su Hijo y por amor Jesús dio su vida en
una cruz por nuestros pecados. Gracias Dios por tu inmenso amor y poder
hacia tu creación.
CAPÍTULO 18

VICTORIA SOBRE JEZABEEL Y BAAL


Introducción: En el mensaje de Jesús a las siete iglesias de Asia el Señor le
dice a la iglesia de Éfeso: “Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer
amor. Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete”.
Aunque la iglesia tenía muchos méritos y el Señor los reconoce y valora, éste
es un llamado de Dios a la iglesia para evaluar sus caminos y su genuina
comunión con él, pues los ritos y la rutina religiosa fácilmente toman un
lugar de privilegio en el seno de la iglesia del Señor. Podemos hacer muchas
cosas para Dios y olvidarnos del gran mandamiento: amarlo con todo nuestro
corazón, con toda nuestra mente, alma y fuerzas.
“Y Acab hijo de Omri hizo lo malo ante los ojos de Jehová, más que todos
los que reinaron antes de él. Porque le fue ligera cosa andar en los pecados de
Jeroboam hijo de Nabat, y tomó por mujer a Jezabel, hija de Et-baal rey de
los sidonios, y fue y sirvió a Baal, y lo adoró” 1 Reyes 16:30-31.
1) Personalidad de Jezabel.
Aquí vemos un matrimonio pero era un matrimonio sin temor de Dios, Acab
rey de Israel se une a Jezabel (sidonita, cananea), fue una unión equivocada,
ella fue el primer ídolo de Acab, pues él sabía que Dios no aprobaba esa
unión, la Ley de Moisés así lo enseñaba. Sin embargo Acab se casa con ella
y entonces se genera el culto a Baal, a Asera y a todos los dioses de su esposa
Jezabel.
Su nombre Jezabel, significa: sin cohabitación, no vive junto con alguien.
Esto resalta sus características de sumo egoísmo e independencia a toda
costa.
Jezabel era una persona que sólo pensaba en sí misma, no le gustaba estar
bajo autoridad, no le gustaba rendir cuentas, quería hacer sus cosas sin tener
que informar, quería simplemente hacer su voluntad sin ningún orden, sólo el
suyo, siempre procura imponer su voluntad. Al promover el culto a Baal y a
Asera, promovía también la inmoralidad sexual.
2) El culto a Baal y a Asera.
Es muy importante considerar aquí la dinámica del culto a Baal. Éste culto
procedía de Babilonia. Baal era el dios supremo cananeo de la naturaleza y la
fertilidad, creían que él enviaba la lluvia sobre sus cosechas, éste culto
suscitaba la inmoralidad sexual. A Baal se le ofrecían sacrificios humanos,
sus adoradores ofrecían su sangre mediante heridas en su piel (1 Reyes
18:26-29).
Consideremos ahora a Asera: diosa cananea de la fertilidad, su culto incluía
prostitución ritual. Representada en objetos de madera o árboles consagrados
en lugares de culto idolátrico.
Llamada también Astoret (en plural, Astarot) era una diosa de la fertilidad y
del amor. Fue deidad principal de los cananeos. Ante ésta idolatría Dios llama
y promueve la formación de los profetas.
3) Jezabel promueve la idolatría en medio del pueblo de Dios.
Cuando el profeta Elías confronta al rey Acab le dice: “Cuando Acab vio a
Elías, le dijo: ¿Eres tú el que turbas a Israel? Y él (Elías) respondió: Yo no he
turbado a Israel, sino tú y la casa de tu padre, dejando los mandamientos de
Jehová, y siguiendo a los baales” (1 Reyes 18:17-18).
Éste pasaje nos enseña que puede haber ídolos en medio del pueblo de Dios.
¿Qué es un ídolo? Figura, imagen, o representación que es objeto de
adoración. Es todo aquello que se levanta en el corazón y ocupa o comparte
el lugar de Dios, por eso Dios le dijo a Israel: “No tendrás dioses ajenos
delante de mí” (Éxodo 20:3).
Los ídolos pueden ser: personas (“santos”) u objetos significativos del pasado
(por ejemplo la serpiente de bronce para Israel); el amor al dinero (Mamón),
la inmoralidad sexual (Asera, Afrodita o Venus), el ego (placer propio, poder,
soberbia), y toda persona u objeto que desplace a Dios del primer lugar.
4) La idolatría trae tristes resultados, pero por el poder de Dios podemos
vencer a Jezabel.
Es necesario reflexionar en las consecuencias de la idolatría. Desplazar a
Dios, es desplazar la vida. Israel experimenta un tiempo en el que la
presencia de Dios se aparta; los cielos se cierran (tres años y medio de
sequía); experimentan la vergüenza (pues su dios Baal no les contesta); las
tinieblas oscurecen su visión y discernimiento (esto se nota al ver la clase de
culto en el que participaban), y la ruina era grande, pues la Biblia dice: “Y el
hambre era grave en Samaria” (1 Reyes 18:2).
Pero Dios usa a Elías para una gran victoria en el monte Carmelo: “los
israelitas al ver el poder de Dios se postraron y dijeron: ¡Jehová es Dios,
Jehová es Dios!”. Por eso es muy importante la unción del Espíritu Santo y
sus dones en medio de la iglesia, pues estos revelan las obras del espíritu de
Jezabel para reprenderlo y echarlo fuera.
Conclusión: “Mantengamos firme, sin fluctuar, la confesión de nuestra
esperanza, porque fiel es el que prometió”. Dios es fiel, y en él debemos
permanecer firmes, aún ante la adversidad, porque al final él mostrará su
gloria.
CAPÍTULO 19

CAMINANDO HACIA LA SANIDAD DEL CORAZÓN


Introducción: Nuestro corazón es marcado con una serie de experiencias a lo
largo de nuestra vida, y todas esas marcas afectan o alteran nuestra vida
presente y la visión del futuro. Estas situaciones llegan ser tan impactantes
que obstaculizan el plan de Dios con nosotros, pero Jesucristo es nuestro
sanador, él es restaurador por excelencia.
“No podía ya José contenerse delante de todos los que estaban al lado suyo, y
clamó: Haced salir de mi presencia a todos. Y no quedó nadie con él, al darse
a conocer José a sus hermanos. Entonces se dio a llorar a gritos; y oyeron los
egipcios, y oyó también la casa de Faraón. Y dijo José a sus hermanos: Yo
soy José; ¿vive aún mi padre? Y sus hermanos no pudieron responderle,
porque estaban turbados delante de él” Génesis 45:1-3.
1) Disponer el corazón es el primer paso.
En primer lugar: abre el corazón. La sanidad interior es fundamental y es
necesario que el hijo de Dios la acepte y asimile, pues de lo contrario el
corazón herido dañará a los que están bajo su dirección, por su inseguridad
provocará deserción en sus filas y conducirá al caos y fracaso el grupo que
dirige (sea su familia, iglesia, empresa, grupo, ministerio, etc).
En éste caso vemos como José fue libre en su expresión, abrió su corazón con
sencillez y transparencia. Por orgullo y por guardar la apariencia muchas
veces negamos la realidad del dolor en el corazón y no se reconoce la
necesidad de la sanidad.
2) Fortalécete en Dios y derrota el miedo.
En segundo lugar: avanza contra tus miedos. Nos dice la Biblia: “Entonces
dijo José a sus hermanos: Acercaos ahora a mí. Y ellos se acercaron. Y él
dijo: Yo soy José vuestro hermano, el que vendisteis para Egipto” (Génesis
45:4).
A pesar del dolor y las heridas José crea un espacio de acercamiento, un
espacio propicio, y allí se sincera ante sus hermanos. No huyó del dolor, lo
enfrentó con la ayuda de Dios. Evitar el tema que nos duele es una manera de
posponer la sanidad, el miedo logra su objetivo manteniendo el corazón
adolorido.
3) Procura ver a Dios en medio de todo.
En tercer lugar: Identifica la mano de Dios en el proceso, José reconoce que
la mano de Dios ha estado en ésta serie de acontecimientos: “no me
enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por padre de Faraón y
por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la tierra de Egipto”
(Génesis 45:8).
José tiene treinta y nueve años de edad y ha conocido que a pesar de todo, la
mano de Dios ha estado por encima de todas las circunstancias, y que el plan
del Señor es glorioso y para bendición de muchos.
Cuando una vasija del alfarero llega a ocupar un lugar de privilegio en el
palacio real ha pasado por todo un proceso de formación, por eso dice: “pero
tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de
Dios, y no de los hombres” 2 Corintios 4:7. No te enojes, no te quejes, no
consientas la auto conmiseración, mira las circunstancias y a los otros como
instrumentos de Dios que te empujan o impulsan al plan divino, y avanza
hacia la meta en Cristo Jesús.
4) El perdón es una arma poderosísima.
Perdona sinceramente (Génesis 45:14-15). José abrazó a sus hermanos y lloró
con ellos. Dice el texto que: “y después sus hermanos hablaron con él”. ¿De
qué hablaron? La palabra hablar aquí es traducida del término hebreo “dabár”
cuya raíz propiamente traduce arreglar. Así pues había mucho que hablar y
aclarar con José, pedir perdón, gozarse por todo lo que Dios había hecho con
él, etc.
Cuando arreglamos las cosas en la casa (familia) y hay perdón en nuestro
corazón, muchas cosas se desatan o se liberan, y la bendición de Dios fluye
en el hogar: “Y no os preocupéis por vuestros enseres, porque la riqueza de la
tierra de Egipto será vuestra” Génesis 45:20.
Reflexión final: Dios quiere bendecir a sus hijos, pero a veces las heridas del
corazón estorban esto. Pero en Dios siempre encontraremos perdón y nos
enseña también a perdonar, de ésta manera vendrá la sanidad y la bendición a
nuestra vida y a nuestra casa.
CAPÍTULO 20

LA RENOVACIÓN DE LA MENTE
Introducción: La Escritura nos enseña que estamos en los postreros tiempos,
y no podemos “ignorar las maquinaciones del enemigo”, es decir no podemos
desconocer sus planes y estrategias. Estamos en tiempos que apuntan a la
venida del Señor. La iglesia de Cristo debe fortalecer su discernimiento
espiritual. Somos conscientes que somos un plan del cielo, un propósito de
Dios y por eso debemos caminar con él y con el debido discernimiento.
“y renovaos en el espíritu de vuestra mente” Efesios 4:23
1) Dios nos ha equipado para vencer en la batalla mental.
La mente es un potencial estratégico, y el diablo también lo sabe. Podemos
decir también que la mente es una “zona valiosa” en la batalla espiritual. Por
eso la Biblia nos dice que la mente debe ser renovada. La palabra renovar
significa: “hacer nuevo”, “reformar”.
En este propósito Dios nos ha dado las herramientas para lograrlo: la Palabra
de Dios, la sangre de Jesús y la obra del Espíritu Santo, regulando y
aconsejando en el proceso del pensamiento. La misma naturaleza de Cristo en
nosotros, un corazón rendido a él, el poder de su palabra y la obra de su
Espíritu terminarán perfeccionando esa renovación.
2) Tu mente es un espacio muy importante.
Es interesante que la misma carta (Efesios) en el capítulo seis, en el contexto
de la batalla espiritual nos dice: “y tomad el yelmo de la salvación”, la
palabra yelmo desde el griego bíblico significa: casco, protección para la
cabeza, para la mente. Es como si se nos dijera “armaos de los pensamientos
correctos”.
La misma Escritura nos dice: “porque cuál es su pensamiento en su corazón,
tal es él”, Proverbios 23:7. Vemos entonces la gran fuerza o poder de un
pensamiento, al grado de que la persona termina siendo lo que piensa. Por
eso, decide perseverar a pesar de cuan difíciles sean los tiempos, esto te
ayudará cuando el entorno sea complicado.
3) Cuida tu mente.
“Transformaos por medio de la renovación de vuestro
entendimiento”, Romanos 12:2, es muy importante ver aquí que la
transformación del cristiano es directamente proporcional a la renovación de
nuestro entendimiento. Ésa mente renovada tiene la capacidad de comprobar,
discernir, identificar lo que es agradable y perfecto a los ojos de Dios.
El enemigo de nuestras almas va a procurar estorbar esa renovación, pues de
ésta manera evitará la transformación o crecimiento del creyente; su
estrategia es llenar la mente del cristiano con cosas que no edifican o que lo
aparten de Dios.
La mente es un espacio fundamental en la batalla espiritual, “Las armas de
nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de
fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el
conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a
Cristo” 2 Corintios 10:4-5.
Esta batalla es a nivel de la mente, habla de pensamientos soberbios que se
sublevan o se oponen al conocimiento de Dios que ya tenemos. Los cuales
derribamos en oración y con la palabra del Señor.
4) Nuestra mente es una maravilla de la creación.
Cristo obtuvo el triunfo en la cruz para que caminemos en victoria. Nuestra
mente fue dada por Dios y es una maravilla. Una de sus partes es el
subconsciente: nunca descansa, tiene una memoria completa (graba todo lo
que oye, ve, percibe, etc), capta mensajes que el consciente no recibe
(mensajes subliminales), no rechaza la información.
Recientes investigaciones comprueban la gran influencia del subconsciente
en el ser humano. Por eso, es fundamental exponer nuestra mente a la Palabra
de Dios, y a la obra de su Espíritu Santo. Al leer la palabra de Dios pide al
Espíritu Santo que te enseñe y revela su verdad.
Reflexión final: Dios quiere la restauración completa de sus hijos. La
renovación de la mente es una de las áreas fundamentales y por eso Dios
procura su renovación. Recuerda en él somos más que vencedores.
CAPÍTULO 21

CUIDADO CON LOS DIBUJOS ANIMADOS


Introducción: La Biblia misma nos enseña que la mente del hombre es un
lugar estratégico en los planes de Dios. El reino de las tinieblas también lo
sabe y es por eso que procura con diferentes estrategias engañar y cautivar las
mentes, aún su labor comienza desde la niñez del ser humano y algunas de las
herramientas que usa son los dibujos animados, el internet, las redes sociales,
t.v. entre otros.
Dios nos ha equipado con su Espíritu y su Palabra para caminar en
discernimiento espiritual guiando e instruyendo a nuestros hijos, pues ellos
son simiente de y para Dios.
“Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él”
Proverbios 22:6.
a) Consideremos en primer lugar las características propias del
aprendizaje en el niño:
1) Su curiosidad (todo es nuevo, interesante y atractivo, su cerebro cual
esponja absorbe todo).
2) La imitación (es la base de su aprendizaje, el niño ve y luego hace).
3) Incapacidad para diferenciar la fantasía de la realidad (ven a un ser
animado recibir multitud de golpes y levantarse sin un rasguño; otro se lanza
de un edificio y vuela, o se cae y luego se levanta del suelo).
4) Capacidad de atención (presta gran atención al cambio de colores,
imágenes y sonido, de allí el gran poder de la T.V. o del P.C. para enseñar).
5) Vulnerabilidad (el niño recibe toda la información, pues su mente está
abierta para aprender, y no tiene o es muy poca su conciencia reflexiva).
b) Consideremos ahora la relación del niño y la televisión (o el
computador):
Debemos considerar aquí varias cosas importantes. Por ejemplo el equilibrio
es muy importante (el televisor no es la “caja del diablo”, esto depende de su
uso). Debemos mantener presente que nuestros hijos son de Dios.
Según estadísticas en promedio un niño ve 3.5 horas diarias de T.V. para un
total de 1.300 horas en el año, mientras que estudia 1.000 en el mismo año, es
decir aprende más por la televisión o por el computador que en la escuela.
Según el Instituto de Estudios de los Medios de Comunicación y la Familia
de los EEUU, para cuando un niño llegue a los 18 años, habrá visto en
promedio 100.000 actos de violencia por televisión (que incluyen 8.000
asesinatos).
c) Veamos ahora las consecuencias de ésta influencia:
Según grupos médicos, pediatras, sicólogos, médicos de familia, etc: los
niños aumentan su conducta agresiva, antisocial y depresiva.
Se crea insensibilidad ante la violencia y quienes la sufren. Ven un mundo
violento y negativo, donde hay que ser crueles para no ser víctimas.
Deseo de ver más violencia en la T.V. y el P.C, en los juegos y en la vida
real. Verán la violencia como una manera aceptable de resolver los
conflictos.
Como buen número de sus superhéroes, manifiestan rebeldía y un
vocabulario soez.
Empieza a generarse en ellos resistencia al evangelio de Jesucristo.
Algunos programas o series en sus contenidos presentan un alto contenido de
espiritismo, mitología, brujería, panteísmo, budismo, adivinación, promueven
la nueva era, enseñan que una persona puede llegar a ser “dios” mediante un
fuerte entrenamiento físico y mental.
Otros programas o juegos promueven el dragón como deidad y quien concede
las peticiones; su contenido de violencia es muy alto. Se destacan entre los
personajes y series nombres como: Posesión Maligna, Rey Maligno de otro
mundo, Infierno Eterno, Mr. Satán, Demonio de la estaca, y otros.
Otros dibujos animados mediante juegos incitan e inducen al ocultismo, por
ejemplo: campeonato de cartas mágicas, mediante las cuales se invocan
monstruos, espíritus y poderes, tienen un alto contenido de figuras
serpentescas, monstruos, monjes, dragones y demonios.
d) Consideremos ahora las estrategias frente al televisor, computador y
otros:
1) Instrucción, Proverbios 22:6.
La palabra “instruir” aquí viene del hebreo “kjanak” que traduce también:
adiestrar, entrenar, iniciar, estrechar. Es una función activa y participativa
donde los padres enseñan acerca de la vida a la luz de las escrituras:
Deuteronomio 6:6-9, con el amor de Dios y el poder del Espíritu Santo.
2) Control de tiempo y contenidos.
Los niños necesitan orden, límites y somos responsables de lo que nuestros
niños ven. No debemos tener una conducta religiosa, sino espiritual, debemos
instruirlos para que hagan diferencia entre lo bueno y lo malo.
3) Motivación a otras actividades.
Hablamos de actividades como deportes, sus tareas, repasos, juegos,
investigar proporcional a su edad, etc. Éste equilibrio redundará en beneficio
para todos en casa.
Dios le habló a Zacarías y a Elisabet, acerca de su hijo y les dijo: “tu oración
ha sido oída (intercesión de los padres)… tendrán un hijo y lo llamarás Juan
(dirección divina)… no beberá vino ni sidra (consagrado para Dios)… el hará
que muchos se conviertan a Dios y preparará al Señor un pueblo (propósito
del Señor con el hijo)”.
Nuestros hijos son de Dios y los planes del Señor con ellos son grandes,
hagamos nuestra parte para que el Señor sea glorificado y todos seamos
bendecidos.
Conclusión: Somos un plan de Dios, contamos con su respaldo y guianza.
Con amor, intercesión, ejemplo y sabiduría conduciremos a nuestros hijos al
destino preparado por Dios para ellos.
CAPÍTULO 22

JESUCRISTO HABLA A LA IGLESIA DE ÉFESO


Introducción: El mensaje de Jesús a las siete iglesias de Asia menor no ha
perdido su vigencia, sigue siendo actual (pues Su palabra permanece para
siempre). La iglesia de hoy requiere más que nunca valorar el consejo de
Dios encerrado en éstos dos capítulos del Apocalipsis.
Es un mensaje para la iglesia de ayer, de hoy y de mañana. En éste caso
(iglesia de Éfeso) hablamos de una iglesia con muchas obras, pero cuyo
corazón hacia Dios se había enfriado.
“Escribe al ángel de la iglesia en Éfeso: El que tiene las siete estrellas en su
diestra, el que anda en medio de los siete candeleros de oro, dice esto: Yo
conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia… y has sufrido, y has
tenido paciencia, y has trabajado arduamente por amor de mi nombre, y no
has desmayado” Apocalipsis 2:1-3.
1) Jesucristo cuida de su iglesia.
Éste pasaje nos recuerda que el Cristo glorificado cuida de su iglesia y habita
en medio de ella. La expresión “el que tiene las siete estrellas en su diestra”
hace referencia al cuidado de Dios por sus siervos y sus hijos (éstos son las
estrellas), quienes están en la mano del poder y la autoridad del Señor (ésta es
su diestra).
Nos sigue diciendo la Biblia que Jesús es “El que anda en medio de los siete
candeleros”, recordemos que los siete candeleros de oro representan a las
siete iglesias (la plenitud de todas las iglesias locales) y el Señor Jesucristo
anda en medio de ellas.
2) Jesucristo da vida a su iglesia.
Jesús bendice la iglesia y le da vida con su presencia, porque él “cuida y
sustenta a su iglesia” y su deseo es gobernarla (podemos recordar aquí
también que el tabernáculo estaba ubicado en medio de las doce tribus, tres al
norte, tres al sur, tres al oriente y tres al occidente, cuando acampaban en el
desierto, entonces vemos a Dios expresando su deseo de ser el centro de su
pueblo).
3) Cristo conoce y valora el esfuerzo de sus hijos.
Empieza el Señor diciendo: “Yo conozco”, él conoce no sólo nuestras obras,
sino lo más profundo del corazón. Aquí Dios valora las acciones de la iglesia
de Éfeso, reconoce sus obras, su arduo trabajo, su perseverancia, su
resistencia a los falsos ministros, y que no había desmayado a pesar de las
dificultades y la persecución.
Jesús conoce las pruebas y luchas de cada uno de sus hijos, también su
esfuerzo para perseverar aun en medio de la oposición y persecución de aquel
tiempo. Además de los conflictos personales y emocionales de cada uno.
4) La iglesia de Éfeso rechazaba las obras de los nicolaítas.
Además el Señor les dice: “Pero tienes esto, que aborreces las obras de los
nicolaítas, las cuales yo también aborrezco” Apocalipsis 2:6. Ellos aborrecían
éstas obras nicolaítas (posible secta que unía el gnosticismo, cristianismo y
cultos paganos, y promovían la inmoralidad sexual).
Dios aborrece las mezclas, esto lo vemos desde el comienzo de su pueblo.
Lamentablemente ésta secta nació y creció dentro de la iglesia, pero por el
Espíritu Santo y por Su palabra la iglesia de Éfeso los rechazó y resistió.
Jesús después de valorar todas éstas cosas, les llama la atención pues habían
hecho tanto énfasis en sus obras que se habían olvidado de lo más importante,
el Señor de la obra. Qué bueno es servir a Dios, pero siempre tengamos
presente que el ministerio o servicio debe ser el resultado de nuestro amor y
comunión con Dios.
Reflexión final: El Señor Jesús dio su vida por la iglesia, es la más grande
expresión de amor. Nosotros como iglesia del Señor debemos responder con
amor a ese inmenso amor. Que siempre sea el amor a Dios el regulador de
todo lo que hagamos, pues es el amor la mayor fuerza del reino de Dios.
CAPÍTULO 23

NO DESCUIDES TU AMOR POR DIOS


Introducción: Aunque la iglesia de Éfeso tenía grandes obras y su esfuerzo en
el servicio a Dios es destacado por el Señor, la iglesia había descuidado su
primer amor. Pero ¿Qué es el primer amor? Desde el griego puede traducirse:
“el principal amor”, “el más distinguido”, “el más importante amor”.
Nos habla entonces del amor cuya esencia es lo más importante, no se refiere
al primero de varios, sino al verdadero…
“Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de
dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré
pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido”
Apocalipsis 2:4-5.
1) El amor de la iglesia de Éfeso por Dios.
El término “primer amor” se refiere tanto a tiempo como a lugar. Entonces no
sólo es recordar cuando nos convertimos, sino reconocer en verdad si Dios ha
ocupado ese primer lugar siempre. La N.V.I dice: “Has abandonado tu primer
amor”, la Biblia al día dice: “ya no me amas como al principio”.
La palabra Éfeso significa: deseable, amada. Era una iglesia amada por Dios,
en una gratificante respuesta a la pasión de la iglesia por él. Debemos tener
presente que la intimidad con Dios nos fortalecerá y nos dará la victoria en
los momentos más críticos de nuestra vida. Ellos amaban a Jesús por encima
de todos los obstáculos.
Éfeso era una ciudad puerto sobre el mar Egeo, con doscientos cincuenta mil
habitantes aproximadamente, tenía un teatro para cincuenta mil espectadores.
Era una ciudad principal de Asia Menor.
2) Es necesario evaluar nuestro corazón.
El Señor Jesús envía éste mensaje a la iglesia de Éfeso procurando que ella
reflexione profundamente. Observamos que la primera instrucción de Dios es
“recuerda” (desde el griego bíblico también traduce: ejercer memoria,
repasar, mencionar).
Recordar “de dónde se ha caído” nos lleva a concluir que caminar en el
primer amor nos conduce a caminar en las alturas de Dios, y abandonarlo o
descuidarlo nos produce una estrepitosa caída (no inicialmente ante los
hombres, primero es ante Dios).
El camino a seguir es el arrepentimiento (“arrepiéntete” nos dice el texto). Y
debemos “hacer las obras primeras”, aquí obras se traduce desde el término
griego “poiéo”, que significa además: comportarse, tarea, realizar, hacer que
sea. El arrepentimiento no es un sentimiento de querer hacer, es una decisión
de cambio que empezamos a evidenciar a través de nuestros actos.
3) El amor por Dios nos permite perseverar.
El Señor advierte los resultados de no volverse al primer amor: “pues si no,
vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar”. La iglesia dejaría de
resplandecer con la luz de Cristo, y perdería su más valioso tesoro: la
presencia de Dios.
La historia nos enseña que la lámpara de Éfeso se apagó tiempo después, hoy
Éfeso sólo es ruinas y no hay iglesia local cristiana en muchos kilómetros a la
redonda (en contraste es muy interesante que Esmirna continua en pie, hoy
Izmir, con una comunidad cristiana).
Reflexión final: Nuestro amor por Dios debe ser cuidado, alimentado y
sostenido cada día, y esto lo podemos lograr con la ayuda del Señor mismo,
aquí es fundamental un corazón sencillo y humilde, que reconoce su
necesidad de Dios todos los días.
CAPÍTULO 24

JESUCRISTO ES EL ÁRBOL DE LA VIDA


Introducción: Es muy interesante ver que la Biblia comienza hablándonos del
árbol de la vida y junto a él estaba también el árbol del bien y del mal.
Lamentablemente Adán y Eva tomaron una mala decisión, pero ahora el
postrer Adán, Cristo mismo, vive en nosotros y por él podemos vencer y
seguir la voluntad de Dios Padre.
El verdadero gozo lo encuentra el creyente haciendo la voluntad de Dios, y es
también gozo del Padre celestial, es cuando podemos escuchar de él: “éste es
mi hijo amado, en el cual tengo complacencia”.
“El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere
le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de
Dios” Apocalipsis 2:7.
1) El Espíritu Santo aviva el amor por Dios.
El mensaje a Éfeso nos permite ver que el Espíritu Santo es agente
fundamental y activo en la restauración del primer amor que la iglesia había
descuidado. Es precisamente el Espíritu Santo quien revela la condición
de la iglesia. A pesar de todas sus obras el amor de la iglesia de Éfeso por
Dios se había enfriado.
Uno de los símbolos del Espíritu Santo es el fuego, y con éste el cristiano
despierta y aviva su amor por Dios. Este mensaje se revela ahora como un
mensaje para todas las iglesias y en todo tiempo.
2) La comunión íntima con el Espíritu Santo es fundamental.
Es Cristo quien comienza hablando (Apocalipsis 2:1) pero ahora en el
versículo 7, se nos dice que es el Espíritu Santo quien habla, pues lo que
habla el Hijo es también lo que habla el Espíritu. Ellos hablan el mismo
idioma y con el mismo sentir (ejemplo de verdadera unidad).
Hablan en tal armonía que lo que comienza diciendo uno, lo termina diciendo
el otro. El versículo comienza diciendo: “El que tiene oído, oiga”, esto
destaca la importancia de la intimidad con Dios y la sensibilidad para
escuchar su voz. Es un llamado del Espíritu Santo a la intimidad con el
Señor.
3) Venciendo la muerte espiritual.
El Señor anima a la iglesia a vencer la apatía. El Espíritu Santo alienta a la
iglesia de Éfeso a derrotar la indiferencia, el desamor, la apatía espiritual, la
religiosidad, etc. La muerte espiritual es como un manto frío y oscuro que el
diablo procura poner sobre las creyentes y sobre las iglesias para
adormecerlas y por tanto no cumplirán el plan de Dios.
“Vencer” aquí se traduce del término griego “nikáo” que también significa:
subyugar, conquistar, prevalecer; es decir con la fuerza y autoridad de Dios,
someter y alcanzar la conquista sobre el doble ánimo, sobre la pereza, sobre
el enfriamiento espiritual, sobre los obstáculos propios de la vida espiritual
(religión, rutina, etc).
4) El árbol de la vida es Cristo mismo.
Además dice el Señor al vencedor: “le daré a comer del árbol de la vida que
está en medio del paraíso de Dios”, esto implica que allí iremos “al paraíso”
(el apóstol Pablo habló de él), y comeremos del árbol de la vida, nos
nutriremos de la revelación de Cristo, de la revelación de Dios.
Quien más es la vida sino Cristo mismo, por eso también dice en Apocalipsis
22:2 “Sus hojas eran para la sanidad de las naciones”, porque él es nuestro
sanador. Cuando el hombre decide rechazar el árbol del bien y del mal, y más
bien se acerca al árbol de la vida (Cristo mismo), recibe vida eterna y con ella
todos los beneficios del reino.
Conclusión: Es el deseo de Dios habitar en medio de su pueblo y ministrar
con su poder, vida y libertad para sus hijos. Debemos caminar en un continuo
primer amor, pues es el amor el más grande poder del reino.
CAPÍTULO 25

GUIADOS POR EL ESPÍRITU SANTO


Introducción: Nuestras oraciones y anhelos de corazón generalmente son en
su mayoría egoístas. De hecho, usamos la palabra “bendecidos” generalmente
en relación con bienes materiales. Dios nos creó ¿para qué?
La respuesta es muy amplia, sin embargo debemos preguntarnos ¿estoy
avanzando hacía su propósito o hacía el mío? ¿Cómo estoy corriendo hacia la
meta? ¿Son mis deseos los de Dios? Recordemos que para Dios es de mayor
valor la obediencia que miles de sacrificios, nuestra obediencia a él es nuestra
mejor adoración.
“Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me
fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré. Y
cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio”
Juan 16:7-8.
1) La dirección del Espíritu Santo nos lleva a grandes victorias.
Es fundamental que podemos contemplar la diferencia entre convicción y
condenación. La condenación viene de afuera y es del diablo. La convicción
viene de adentro y es del Espíritu Santo. La Biblia nos dice que el Espíritu
Santo “convencerá”, desde el griego bíblico nos dice: mostrará la falta,
pondrá en manifiesto, reprochará, reprenderá.
La obra del Espíritu Santo nos conduce al arrepentimiento y cambio de vida,
al concientizarnos de la obra de Jesús y del amor del Padre celestial. El
Consolador (el Espíritu Santo) no condena, él convence, desea instruirnos y
enseñarnos los principios de la victoria en Cristo y como avanzar con poder
en sus planes.
2) Evita el sentimiento de culpa
La convicción es aquella obra interna que realiza el Espíritu Santo en el
creyente, mediante la cual le muestra las acciones o motivos que desagradan
a Dios. Cuando es necesario aparece la disciplina divina, que se recibe como
formación necesaria para un hijo generando ésta un cambio de vida real.
El sentimiento de culpa genera miedo y ansiedad ante “los castigos” por
malas acciones, reales o imaginarias. El sentimiento de culpa aparece por no
perdonarnos a nosotros mismos, y por no creer en el poder pleno de la sangre
del Cordero de Dios. La persona ha pedido perdón a Dios, pero mantiene un
“sentir” de estar en mala relación con Dios, y está a la expectativa del juicio
celestial.
Por ejemplo el niño que relaciona afecto (amor) con disciplina excesiva (o
maltrato), cuando es adulto cree que cuando hace algo malo, debe ser
maltratado o castigado duramente. La convicción por el Espíritu Santo
conduce al arrepentimiento, pero la auto condenación lleva a la tristeza
profunda, frustración y depresión.
3) El poder de Dios restaura al caído.
Cuando el sentimiento de culpa o condenación no es resuelto creyendo en
Jesús y en su obra, viene sobre el creyente un manto de aflicción y auto
culpa, que le impide avanzar, creer y confiar en Dios, se estanca y sólo espera
fracasos. Aun como predicadores debemos tener cuidado para no levantar el
dedo acusador, sino predicar en el poder del Espíritu para redargüir como
Dios quiere, y como sólo él sabe hacerlo.
El Espíritu Santo ha venido para convencernos del gran amor de Dios, de la
gran obra de redención en Jesús, para enseñarnos y ayudarnos a hacer la
voluntad de Dios aquí en la tierra. De Su mano podemos avanzar y lograr
aquello que Dios ha trazado para nosotros.
Reflexión final: Dios ha planeado grandes cosas para cada uno de sus hijos,
pero el diablo procura dañar estos planes, pero tengamos presente que los
propósitos de Dios siempre prevalecerán, y que la mayor fuerza del reino de
Dios es el amor.
CAPÍTULO 26

UN VERDADERO ADORADOR
Introducción: En el corazón del hombre está la innata necesidad de adorar,
pues es una facultad del espíritu creado por Dios, y es él mismo quien nos
enseña cómo hacerlo y qué cosas debemos evitar.
La más grande adoración a Dios es obedecer sus mandamientos y el principal
de ellos dice: “amaras a Jehová tu Dios con todo tu corazón, con todas tus
fuerzas, y con toda tu mente” y el segundo es: “amarás a tu prójimo como a ti
mismo”. Es fundamental entonces que nuestro corazón se llene del amor de
Dios.
“Y dijo Caín a su hermano Abel: Salgamos al campo. Y aconteció que
estando ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel, y lo
mató” Génesis 4:8.
1) Adoremos a Dios como él quiere.
Los primeros hijos de Adán y Eva deciden adorar a Dios, pero Caín lo hace
con frutos de la tierra y Abel ofrece una oveja en sacrificio. Agradó al Señor
la ofrenda de Abel, y esto molestó sobremanera a Caín y su corazón se llenó
de odio hacia su hermano menor.
El nombre Caín significa: herrero, obrero, artesano, adquisición. Este
significado se relaciona con uno de sus descendientes: “Tubal-caín, herrero y
forjador de toda obra de bronce y de hierro”; vemos entonces que nuestra
descendencia es influenciada directamente por los padres. Es interesante que
el oficio de Abel “pastor de ovejas” se haya considerado como símbolo de
contemplación y devoción.
2) La adoración a Dios implica fe en él.
Caín concluyó que podía adorar a su manera. Caín trajo del fruto de la tierra,
y Abel de los primogénitos de sus ovejas (y lo mejor). Sus padres les habían
instruido acerca de la adoración a Dios, ellos sabían que era a través del
sacrificio (derramamiento de sangre), pues sus padres fueron vestidos con
pieles de animales después de su pecado.
Abel agrado a Dios por su fe: (Hebreos 11:4) “Por la fe Abel ofreció a Dios
más excelente sacrificio que Caín”, entonces se destaca la fe de Abel en el
sacrificio (que implica muerte), pero Caín lo hizo a su manera, con el fruto de
la tierra. El Señor honró a Abel porque hizo las cosas a la manera de Dios.
3) Un corazón humilde es de alta estima para Dios.
El hombre puede acercarse a Dios a través de la fe en Jesucristo. No es por
cualidades humanas, ni por obras, no es por el liderazgo o ministerio que nos
podemos acercar a Dios, es porque Jesús “nos abrió un camino nuevo y vivo
por su sangre” y podemos entrar delante de Dios.
El camino para acercarse a Dios es a través del Cordero. Lo que significa
reconocer mi condición, es despojarse del orgullo y de toda actitud altiva para
reconocer el pecado y aceptar el perdón que sólo se encuentra en Jesucristo.
La altivez es una actitud que ha perseguido a la humanidad en los diferentes
tiempos, o acaso la teoría de la evolución, el humanismo, la ilustración y la
filosofía en general no son manifestaciones del corazón humano que quiere
vivir sin conciencia de un Dios Creador y Santo.
4) La adoración verdadera se evidencia en la vida diaria.
El hombre busca incesantemente la verdad, respuestas a su origen y destino,
pero el único que es el camino, la verdad y la vida, es Jesucristo el Señor. Se
requiere un corazón humilde para aceptar los errores y someterse a Dios.
Caín se llenó de ira, y el pecado acechaba como una fiera para saltar sobre él
y allí estaba Dios para aconsejarlo, para advertirlo, pero finalmente era su
decisión y planeó el mal contra su hermano Abel y lo mató. Caín no sometió
su corazón a Dios, no se despojó de su resentimiento y éste creció hasta
hacerse tan poderoso que fue más fuerte que el amor de familia.
Dice la Escritura: “Las obras de Caín eran malas, las de su hermano justas”,
por eso la adoración va más allá del culto en el templo, la adoración se
expresa en nuestra vida diaria, en la casa, en el trabajo, en el colegio, nuestras
acciones nacidas de un corazón recto que quiere agradar a Dios.
5) El verdadero adorador camina en amor.
Pero hoy sabemos que el amor de Dios debe impulsar nuestros corazones
para todas nuestras acciones. Nos dice 1 Juan 3:12 “No como Caín, que era
del maligno, y mató a su hermano. ¿Y por qué causa le mató? Porque sus
obras eran malas, y las de su hermano justas”, entonces Caín era del maligno
y sus obras eran malas, él no amaba a su hermano, lo odiaba, le tenía envidia,
su resentimiento se convirtió en deseos de venganza hasta matarlo.
Nosotros somos hijos de Dios, 1 Juan 3:14-15 “Nosotros sabemos que hemos
pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama
a su hermano, permanece en muerte. Todo aquel que aborrece a su hermano,
es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna morando en sí”.
Tenemos por el Espíritu Santo la capacidad de amar a Dios y a sus hijos,
nuestros hermanos, y al prójimo y en esto se resume toda la ley: “amarás al
Señor tu Dios con toda tu mente, con todo tu corazón, con toda tu alma, y a tu
prójimo como a ti mismo”. Ésta es la verdadera adoración.
Reflexión final: En contraste con la adoración de Caín, Dios destaca la
adoración de Abel, pues estaba basada en la fe, en el Cordero, en su vida
justa, y en el temor y amor de Dios, el Señor nos está llamando, no a un
momento de adoración, sino a una vida de adoración que resplandece en todo
momento y en todo lugar donde estemos, donde los motivos del corazón son
impulsados por el amor de Cristo.
CAPÍTULO 27

DIOS DEPOSITA TESOROS EN VASOS DE BARRO


Introducción: La Biblia nos enseña que a Dios debemos pedirle, esto implica
que a él le gusta bendecir a sus hijos. Pedimos cosas diversas, y gracias a
Dios que él nos concede las cosas que están conforme a su voluntad.
Es necesario que valoremos lo que Dios valora, que veamos como él ve, que
pidamos lo que él quiere, que hagamos lo que él hace, esto implica una muy
buena comunión con él, y una conciencia real de sus bendiciones y
propósitos.
“Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder
sea de Dios, y no de nosotros” 2 Corintios 4:7
1) Servir a Dios es una bendición.
Después de conocer a Cristo uno de los deseos que surge con mucha fuerza
en nuestro corazón es el de servir a Dios, conocerlo más y apasionadamente
empezamos a hacer cosas para él. Deseamos ser instrumentos en sus manos y
servir produce una gran satisfacción.
Sin embargo en éste propósito nos encontramos con obstáculos que superar,
resistencia y oposición que debemos vencer, decepciones, luchas y pruebas.
A veces ante todo esto el hijo de Dios se puede preguntar ¿Voy en el camino
correcto? ¿Vale la pena hacer todo esto y perseverar? Y muchas veces se
puede podemos decir ¿Por qué?
2) El servicio a Dios es un honor.
Aquí es muy importante tener en cuenta fundamentos cómo los que nos
enseña el texto de hoy: 2 Corintios 4:7. Pablo dice: “éste tesoro”: con éstas
palabras el apóstol Pablo se refiere en contexto al ministerio, resaltando lo
valioso y precioso que es, por tanto, debe ser conservado con sumo cuidado,
recordando que es una riqueza del cielo puesta en la tierra.
“Tesoro” término traducido de la palabra griega: “tesauros” que significa
además: deposito, cofre, riqueza. Luego eres un vaso en el que Dios ha
puesto riquezas celestiales (dones, talentos, capacidades, etc). Capacidades
que debemos identificar para usar debidamente.
Por ejemplo, aquel hombre dueño de una montaña que toda la vida trabajo en
ella la agricultura y sobrevivió con su familia. Uno de sus hijos estudió y
descubrió que bajo sus pies había una mina de oro, para él descubrir ese
tesoro tuvo que investigar y profundizar. De igual manera no te conformes
con sólo lo que ves, hay mucho más para ti, Dios ha puesto hermosos y
grandes tesoros en ti.
3) Por gracia de Dios somos lo que somos.
Esto también nos recuerda la gracia de Dios, pues los dones, talentos o
ministerios que hay en nosotros son por la obra de Jesús, no por méritos
personales. La frase: “vasijas de barro” es una expresión con la que el apóstol
se refiere a las personas que llevan el ministerio o los dones, destacando su
humanidad (debilidades, errores, fragilidad, etc), y su necesidad de depender
de Aquel que los llamó, pues una vasija de barro no es fuerte en sí misma.
En éste pasaje la palabra barro desde el idioma griego revela la condición del
mismo, es barro cocido. Es aquel que ha sido procesado, moldeado por las
manos del Alfarero divino y que ha pasado por el horno. A veces podemos
pensar en el proceso que todo saldrá mal, pero el Alfarero sabe lo que hace, el
barro sólo debe disponerse en sus manos y confiar en su bondad y buen juicio
(él nunca se equivoca).
¿Por qué no es el vaso de otro material? Hierro o acero, por ejemplo. Porque
procura el Alfarero que nunca el vaso se olvide que el tesoro es de Dios, y no
de los hombres. En la expresión: “Para que la excelencia del poder sea de
Dios y no de nosotros” el apóstol Pablo destaca cuán sobrenatural son los
dones de Dios, el término excelencia aquí traduce también “grandeza
extraordinaria” que Dios deposita en sus hijos conforme a Su voluntad.
4) La gloria es de Dios.
Sin embargo, también Pablo por el Espíritu nos enseña que esa excelencia es
de Dios, para la gloria del Señor y no para los hombres. Es por eso que los
siervos de Dios debemos tener en cuenta que somos vasijas de barro, y que el
alfarero y dueño es el Señor. Que toda la gloria le pertenece a Dios. El
ministerio delegado o dones entregados a un hijo(a) de Dios son tesoros
celestiales en vasos de barro.
Es por la gracia de Dios que hoy tenemos salvación, y que tenemos el
privilegio de participar de Su obra. La excelencia de Su poder de la que
hemos hablado, se manifiesta con mayor resplandor en aquellos que con
corazón manso y humilde procuran que su Nombre sea glorificado, pues
finalmente el poder es de Dios.
Reflexión final: Dios nos ha alcanzado con Su gracia, dándonos salvación e
impartiendo en nuestra vida dones para servir en Su reino, persevera con
gozo en tu servicio al Señor Jesús, sabiendo que es por su poder que podemos
hacerlo. Aunque tu entorno sea difícil y adverso, recuerda que es temporal, y
que Jesús venció y ahora vive en ti.
Ten presente que Dios te recompensará aquí y en su reino. Pablo enfrentó
muchas dificultades, oposición, enemigos, peligros, decepciones, pero
siempre Dios lo guardó y fortaleció. Adelante, Dios está contigo.
CAPÍTULO 28

CRISTO SOSTIENE A LOS SUYOS


Introducción: En la medida que crece la Iglesia del Señor Jesucristo, también
aparecen muchas cosas nuevas en medio del pueblo de Dios, y debemos
discernir los tiempos y todas estas cosas porque son tiempos finales.
La iglesia debe ejercitarse en los sentidos espirituales para distinguir entre lo
que es de Dios y lo que no es de él. El Señor es fiel y él tiene cuidado de su
novia: la iglesia de Jesucristo, y por eso debemos prestar especial atención a
Su voz.
“Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: El primero y el postrero, el que
estuvo muerto y vivió, dice esto: Yo conozco tus obras, y tu tribulación, y tu
pobreza (pero tú eres rico), y la blasfemia de los que se dicen ser judíos, y no
lo son, sino sinagoga de Satanás” Apocalipsis 2:8-9.
1) Vivamos para Dios.
Consideremos en primer lugar la ciudad donde estaba ubicada la iglesia,
Esmirna: ciudad del Asia menor, comercial y prospera. Su nombre significa
mirra. Ya su nombre nos dice mucho, pues la mirra era usada entre otras
cosas para el embalsamiento de cadáveres.
La mirra es símbolo de grandes sufrimientos y muerte. Era uno de los
ingredientes del aceite de la santa unción. Su nombre nos indica luchas,
pruebas, dificultades que la iglesia debía enfrentar, pero que vencería con el
poder de Dios. La mirra nos recuerda la importancia de morir a nosotros
mismos y vivir para hacer la voluntad de Dios.
2) Cristo tiene poder sobre todas las cosas.
Veamos ahora la revelación de Jesús a ésta iglesia, pues en medio de su
adversa situación Cristo se revela como el Eterno y Dador de vida.
Observamos que Cristo se manifiesta específicamente a la iglesia de Esmirna,
como:
“El primero y el postrero”, es decir él es el inicio y fin, él que lo llena todo, es
eterno, por eso dice la Biblia: “Jesucristo es el mismo ayer, hoy y por los
siglos”. Aquel que independiente del tiempo de los hombres, con sus
condiciones adversas o a favor, permanece fiel para siempre, él no miente, su
palabra permanece para siempre.
“El que estuvo muerto y vivió”, nos recuerda que él venció la muerte, que el
Hades no lo pudo retener, él es “la resurrección y la vida”, que ni la muerte
puede detener sus planes. Por eso la iglesia podía depositar toda su vida y
confianza en él.
3) Dios protege a quienes perseveran en él.
Es interesante que ésta ciudad fue destruida en el 600 a.C. y 300 años
después fue reconstruida por Alejandro Magno y convertida en una ciudad
muy rica y comercial. En el año 180 d.C. un terremoto la destruyó de nuevo y
fue rápidamente reconstruida.
Hoy día es la única de las siete ciudades que existe, se llama Izmir, y hay una
comunidad cristiana allí. En el mensaje a la iglesia de Esmirna el Señor nos
recuerda que Dios tiene el poder de restaurar lo dañado y de guardar a los que
en él perseveran.
4) La fidelidad a Dios va mucho más allá de las palabras.
La Biblia nos enseña la condición de la iglesia de Esmirna. En primer lugar
nos dice que enfrenta tribulación, pobreza, persecución y blasfemias (o
calumnias). La iglesia de Esmirna y sus obras eran conocidas por Cristo, así
como sus dificultades.
Era intensa la persecución por parte del imperio romano. Además en la
ciudad había una comunidad de judíos bastante grande que hacía mucha
oposición a los cristianos (de manera especial a través de las calumnias y
creando confusión).
Nos habla el texto de la condición de pobreza de algunos miembros, y otros
que eran despedidos al profesar la fe cristiana. Policarpo, obispo (o
supervisor) de Esmirna, discípulo del apóstol Juan, ante soldados del ejército
romano se negó a maldecir a Cristo y también se negó a declarar que “Cesar
era el Señor”, respondiendo: “hace 86 años sirvo a Cristo, y ningún daño he
recibido de él ¿Cómo puedo maldecir a mi rey, que me ha salvado? Y
condenado murió en la hoguera.
Reflexión final: Dios tiene cuidado de su pueblo. Definitivamente en medio
de la adversidad es probada nuestra lealtad al Señor, siempre debemos
recordar que “fiel es el Señor, el cual no dejará que seamos tentados más allá
de lo que podemos soportar, sino que dará con la tentación juntamente la
salida para que podamos soportar”.
CAPÍTULO 29

DIOS RECOMPENSA LA FIDELIDAD


Introducción: Dios espera la fidelidad de su pueblo, pero a lo largo de la
Biblia vemos que generalmente el factor común es lo contrario. Más bien
aquellos fieles fueron personas de renombre, personas que se destacaron.
Pareciera entonces que lo que Dios más espera, es lo que menos ofrecemos.
Sin embargo, Cristo es Aquel de quien el Padre dijo: “este es mi Hijo amado
en quien tengo complacencia”, y es Jesús quien ha venido a morar en
nuestros corazones y por él podemos hacer la voluntad de Dios.
“No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos
de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación por
diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida. El que
tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no
sufrirá daño de la segunda muerte” Apocalipsis 2:10-11.
1) Dios es nuestra fortaleza en tiempos de dificultad.
La iglesia de Esmirna es advertida ante las futuras persecuciones. Al observar
el texto resaltan las palabras: “padecer, cárcel, probados, tribulación”, que
indican o dejan ver fuertes dificultades. La palabra prueba nos dice también
que Dios lo permite, en ese ámbito se desarrolla la perseverancia, se fortalece
la fe y maduramos ante la adversidad.
Vemos también que dice: “el diablo echará a algunos en la cárcel”, es decir
actuará a través de las autoridades romanas. Pero le dice el Señor a la iglesia:
“No temas”, porque Dios estará al tanto de todo, y su mano poderosa los
preservará para su reino.
2) Dios recompensa a los fieles.
También Dios le habla a la iglesia en Esmirna respecto a su recompensa,
porque Dios galardona a los fieles. La fidelidad al Señor sería manifestada
ante la adversidad, ante esto Dios los hace conscientes y les promete un
galardón, en ésta ocasión dice: “te daré la corona de la vida”, la corona nos
habla de autoridad y gobierno (autoridad y victoria sobre la muerte, y
gobierno porque reinaremos con él). Dios recompensa la fidelidad.
La frase “la corona de la vida” se destaca aquí, pues Esmirna edificada junto
al Mar Egeo, era la ciudad más bella, extensa y pintoresca del Asia menor.
Llamada hoy día “La perla del Mar Egeo”. En lo alto de la colina Pagos,
había un grupo de hermosos edificios llamados “La corona de Esmirna” (pero
Jesús contrasta ésta corona con la más hermosa, valiosa y eterna: “La corona
de la vida”).
3) El Espíritu Santo fortalece al hijo de Dios.
La verdadera fidelidad a Dios va mucho más allá de las palabras. “Creyente
es aquel que confía y cree en Dios, pero creyente fiel es aquel en quien Dios
puede confiar”. La fidelidad del cristiano será probada y al ser hallado fiel el
cristiano será galardonado por Dios.
El Espíritu Santo fortalece y anima a la Iglesia, y una vez más procura la
sensibilidad de la Iglesia: “el que tiene oído, oiga” pues es el mismo Dios
hablando a su Iglesia, no a los no creyentes, es Dios hablando a su pueblo. El
Espíritu Santo anima a la Iglesia a vencer y no sufrirá daño de la segunda
muerte (que hace referencia a la condenación eterna, Apocalipsis 20:14-15).
Reflexión final: Por ser hijos de Dios cuyo anhelo es hacer la voluntad del
Señor, enfrentaremos momentos de rechazo y burla, pero Dios siempre estará
con nosotros y al final veremos la victoria y su recompensa.
CAPÍTULO 30

JESÚS ES QUIEN TRANFORMA TU CRISIS


Introducción: Cuando en nuestro caminar aparece la adversidad, el cansancio
ha logrado su efecto devastador y la fe en Dios es atacada por los dardos del
enemigo, el corazón del creyente tiende a desfallecer.
Es allí cuando el Señor viene y nos recuerda: “No temas, porque yo estoy
contigo, no desmayes porque Yo soy tu Dios”, y vemos entonces que en
nuestra debilidad somos fuertes, porque él se engrandece cuando
reconocemos que sin Dios nada podemos hacer.
“Entonces vino un varón llamado Jairo, que era principal de la sinagoga, y
postrándose a los pies de Jesús, le rogaba que entrase en su casa; porque tenía
una hija única, como de doce años, que se estaba muriendo. Y mientras iba,
la multitud le oprimía” Lucas 8:41-42.
1) Confía en el poder de Jesús.
El contexto nos enseña que el Señor Jesús había salido de Galilea y venía de
Gadara, volvía seguramente a Capernaúm su ciudad en Galilea. Los
habitantes lo conocían y también Su poder y lo esperaban con alegría. Para
ver la acción de Dios a nuestro favor es necesario depositar nuestra confianza
en el poder del Señor.
Debemos considerar la condición de Jairo: era principal de la sinagoga
(Administrador del orden en sinagoga), tenía un corazón humilde (pues se
postró a los pies del Señor y le rogó), y su única hija estaba enferma de
muerte y desde esa condición manifiesta su fe en el poder de Dios buscando
al Señor.
2) Persevera Jesús te ayudará.
Sin embargo el principal de la sinagoga tuvo que superar algunos obstáculos.
Consideremos algunos: la incredulidad, y junto con ésta, el temor, el
desánimo y la inconstancia. Vemos que vino uno y le dijo: “tu hija ha muerto,
no molestes más al Maestro”, la incredulidad se contagia y estaba
produciendo temor y desánimo en Jairo.
El orgullo fue otro impedimento a vencer, pues a diferencia de muchos
principales Jairo se humilló delante del Señor y fue bendecido con el favor de
Dios. Seguramente fue criticado por sacerdotes y escribas.
Otro obstáculo a superar fue la multitud que rodeaba y seguía a Jesús, no era
fácil llegar al maestro. Pero a pesar de todo Jairo perseveró y confió en Dios.
La fe va de la mano con la perseverancia. Perseverar es una evidencia de la
fe.
3) La fe en Dios te permite alcanzar la victoria.
En la casa lloraban y se lamentaban por la muerte de la niña de Jairo, pero el
Señor Jesús declaró una palabra diferente, él habló de vida cuando todos
hablaban de muerte, las personas de fe hablan diferente.
La fe en Dios nos permite ver la victoria sobre la burla y el menosprecio,
porque él premia la fe de sus hijos. Recordemos que Cristo es la resurrección
y la vida, y tiene el poder para levantar a los muertos, y restaurar lo que se ha
dañado.
Él puede levantar al que ha caído, el Señor Jesús hizo el milagro y todos
quedaron asombrados, maravillados, aunque la mayoría no creía que fuera
posible. Nunca olvidemos que “lo que es imposible para los hombres, es
posible para Dios”. El Señor Jesucristo sigue sanando, salvando, liberando, él
es mismo ayer, hoy, mañana y siempre.
Reflexión final: Nuestro Dios es todopoderoso, no hay ninguna cosa difícil
para él, confía, persevera, sigue avanzando a pesar de los obstáculos, Dios no
se tarda él hará su obra.
Esperamos que este libro haya sido de tu agrado.
Te invitamos a suscribirte en nuestro sitio y recibir nuestras
publicaciones, en: http://www.estudiosysermones.com/
Muchas gracias.
Te presentamos otros libros del autor:
1) SERMONES PARA PREDICAR, TOMO 2.

Este libro está compuesto por sermones o mensajes


útiles para estudiar y enseñar la palabra de Dios a grupos e
iglesias. Estudios debidamente organizados, con alto contenido
bíblico, enriquecidos con notas y comentarios que tienen en
cuenta el contexto, la cultura, historia, geografía y significado de
palabras claves (según sea el caso) sin dejar de lado las notas
prácticas y actuales para nuestro diario vivir. Te invitamos a verlo
y adquirirlo en: “SERMONES PARA PREDICAR, Tomo 2”

2) EL LENGUAJE DEL ESPÍRITU SANTO (Descubre los


dones y el poder del Espíritu de Dios).

¿Qué tanto conocemos al Espíritu Santo? ¿Tenemos una


verdadera amistad con él? ¿Cuáles son y cómo funcionan los dones
del Espíritu Santo? ¿Qué es la unción y cómo usarla
correctamente? ¿Qué es la profecía y como examinarla
correctamente? Estas y muchas preguntas más procuramos despejar
en éste libro. La realidad del Espíritu Santo y su profundo deseo de
comunicarse con el cristiano es una verdad que debe conocer todo
hijo de Dios. Te invitamos a adquirirlo en: “EL LENGUAJE DEL
ESPÍRITU SANTO”
3) SANIDAD PARA EL ALMA HERIDA:

Una realidad es que el alma ha sido lastimada o afectada a


lo largo de la vida con una serie de experiencias traumáticas.
Ignorar o no considerar esta verdad hace que muchas
enfermedades, miedos y complejos afecten profundamente la vida
del ser humano. Este libro es una herramienta o ayuda en éste
proceso de sanidad o restauración. El Señor ha preparado para ti lo
mejor, y la sanidad del alma es una sus grandes bendiciones.
Sanidad, libertad y restauración para el corazón herido son los
objetivos de éste libro. Te invitamos a verlo y adquirirlo en:
SANIDAD PARA EL ALMA HERIDA.
4) ALIMENTO PARA EL ESPÍRITU (Reflexiones
cristianas).

El Señor Jesús nos enseñó: “No sólo de pan vivirá el hombre, sino
de toda palabra que sale de la boca de Dios”, entonces es vital
meditar y estudiar la Palabra de Dios. Cuando dejamos de hacerlo,
nuestro espíritu se hace vulnerable y débil ante las tentaciones y
obstáculos del diario vivir. Éste libro “Alimento para el espíritu”
(Tomo 1) procura ser una herramienta de reflexión y edificación
espiritual cristiana en medio de tu vida diaria. Te sugiero leer una
reflexión (o capítulo) cada día, acompañada de una oración en la
que permitas a Dios obrar en tu corazón. Te invitamos a verlo y
adquirirlo en: ALIMENTO PARA EL ESPÍRITU.
5) ¿CÓMO ENFRENTAR Y SUPERAR LAS CRISIS?

Desde la perspectiva cristiana en éste libro se expone la


realidad de las crisis, su diversidad, su impacto en nuestra
humanidad, las diversas reacciones y por supuesto los principios
cristianos para enfrentar y superar dichas circunstancias. Con
fundamento cristiano exponemos las diversas maneras y actitudes
de patriarcas, profetas, apóstoles y diversas personas ante las
situaciones más adversas y cómo su fe en Dios los llevó a grandes
victorias. Te invitamos a verlo y adquirirlo en: ¿Cómo enfrentar y
superar las crisis?

6) LOS ÁNGELES QUE SE CONVIRTIERON EN


DEMONIOS (Demonología cristiana).

Los demonios o espíritus inmundos no nacieron como


demonios, ellos se convirtieron en esa clase de seres. Surgen ante
esto muchas preguntas como: ¿Cuándo fue su origen? ¿Cómo eran
al principio? ¿Cuáles eran sus actividades? ¿Por qué se convirtieron
en demonios? ¿Cómo y por qué dañan a las personas? ¿Cómo
defenderse de éstos? ¿Qué enseña la Biblia al respecto? Te
invitamos a ver éste libro y adquirirlo en: Los ángeles que se
convirtieron en demonios (Demonología cristiana).
7) PALABRAS QUE TRANSFORMAN EL CORAZÓN:

El libro contiene una serie de mensajes de inspiración y


motivación cristianos para edificación y crecimiento personal y/o
de grupos. Están enriquecidos con notas y comentarios de reflexión
personal, históricos, culturales, etc, por eso puede tomarse como
libro devocional o de reflexión diaria. Los cincuenta y dos
mensajes (o sermones) están bosquejados de manera sencilla y fácil
de usar. Es una herramienta útil para estudiar, enseñar y predicar la
Palabra de Dios. Te invitamos a verlo y adquirirlo en: Palabras
que transforman el corazón.

8) PUEDES VER OTROS LIBROS DEL AUTOR EN:


PÁGINA DE AUTOR EN AMAZON

También podría gustarte