Investigación Contratos Internacionales
Investigación Contratos Internacionales
Investigación Contratos Internacionales
INVESTIGACIÓN
TIPOS DE CONTRATOS INTERNACIONALES
Para establecer una base en el tema que nos ocupa, tratare de definir algunos elementos
importantes a conocer:
Contrato: Es un acuerdo jurídico de voluntades por el que se exige el cumplimiento de
una cosa determinada. Se trata de un acto privado entre dos o más partes destinado a crear
obligaciones y generar derechos.
Características legales que tiene un contrato
1. En función de si existen beneficios para ambas partes o solo para una de ellas
pueden ser onerosos o gratuitos.
2. Si genera obligaciones para uno o ambas partes pueden ser unilaterales o
bilaterales.
3. Si se encuentran regulados en la ley o no, serán típicos o atípicos.
4. Los contratos serán principales o accesorios (o de garantía) según dependan o no
de otros contratos.
5. En función de si el cumplimiento del contrato se lleva a cabo en un solo momento
determinado o bien en un período, serán instantáneos o de tracto sucesivo.
Los contratos internacionales recogen por escrito los principales términos del acuerdo,
para cubrir los aspectos más importantes de la relación. En ocasiones, en la fase de
negociación y la de redacción de este tipo de documentos, las partes contratantes contarán
con la ayuda de especialistas en Derecho Internacional, bien procedentes de su propia
plantilla, bien subcontratados a través del outsourcing (subcontratación, externalización o
tercerización) de consultorías o asesorías.
Legitimidad de las partes. Antes de celebrar un contrato con una empresa extranjera, se
debe realizar la diligencia debida para verificar que efectivamente está registrada y
autorizada para hacer negocios en su país de origen, y que esté al día con respecto a sus
obligaciones. La obtención de un organigrama de la estructura de negocio de la empresa
(por ejemplo, matriz, subsidiarias, afiliadas, etc.) descubrirá áreas potenciales de
preocupación o áreas de oportunidad para una futura colaboración. Además, es preciso
asegurarse de que la persona designada para firmar contratos internacionales en nombre
de esa compañía tiene la autoridad legal para hacerlo, y, en el momento de la firma,
cerciorarse de que el contrato reúne las formalidades pertinentes.
Ámbito geográfico. Si la capacidad de una de las partes para participar en el negocio se
limitará en virtud del contrato a un área geográfica específica (por ejemplo, franquicias o
distribuidores), dichas limitaciones geográficas deben especificarse en el contrato.
Deberes, obligaciones y responsabilidades. Los malentendidos surgen cuando una parte
de un contrato cree que la otra parte es responsable de tomar ciertas acciones o asumir
ciertos costos. En consecuencia, para evitar este tipo de situaciones, los deberes de cada
una de las partes deben describirse en el contrato con la mayor especificidad posible. Por
ejemplo, las ventas internacionales de bienes tienen aspectos únicos de manejo, envío e
impuestos. El contrato debe especificar las reglas de INCOTERMS que se aplicarán al
acuerdo comercial para establecer los derechos, riesgos y costes asociados con el envío
de mercancías de un país a otro. Dado que las licencias o aprobaciones gubernamentales
pueden ser necesarias para importar o exportar ciertos bienes o para proporcionar bienes
o servicios en ciertos países, el contrato debe designar qué parte será responsable de
obtenerlas.
La comunicación es esencial para que los contratos internacionales cumplan expectativas.
El contrato debe contener una disposición de donde se establezca la frecuencia de
comunicación, los contactos dentro de cada organización, el método de comunicación y
el idioma o los idiomas en los que se pueden mantener las comunicaciones.
Al hacer negocios con una empresa extranjera, las partes no deben asumir que el contrato
será en español o que todas las comunicaciones futuras se mantendrán en este idioma. Si
las partes acuerdan que el contrato se redactará en una lengua, entonces el contrato
también debe indicar claramente que todas las comunicaciones posteriores se realizarán
en el mismo idioma, si eso refleja las intenciones de las partes.
Propiedad intelectual. Si las partes desean transferir los derechos de propiedad intelectual
en virtud del contrato o no hacerlo expresamente, entonces el contrato debe incluir una
disposición que establezca las medidas oportunas con respecto a los derechos de
propiedad intelectual de las partes, incluida la concesión de cualquier licencia y la
propiedad de los derechos de propiedad intelectual desarrollados en relación con el
contrato.
Derechos de auditoría. Si el pago en virtud del contrato estará supeditado al logro de
ciertos avances o hitos, entonces, es necesario que los contratos internacionales incluyan
una disposición que imponga el mantenimiento de registros y los requisitos de
presentación de informes a la parte que recibe el pago y la somete a auditorías periódicas
por parte de la parte que realiza el pago. Estas disposiciones generalmente abordan qué
parte pagará el coste de la auditoría, si ésta debe ser conducida por auditores externos o si
puede ser llevada a cabo internamente, el alcance de la auditoría, la frecuencia de la
auditoría, el período de tiempo posterior al vencimiento o la rescisión del contrato para el
cumplimiento de los derechos de auditoría, etc.
Los contratos internacionales generalmente incluyen una cláusula de confidencialidad
que prohíbe o restringe la capacidad de las partes para divulgar información confidencial
a terceros. La información confidencial podría incluir el propio contrato, los documentos
y comunicaciones relacionados con el mismo u otra información confidencial designada
por las partes. El deber de confidencialidad a menudo sobrevive a la terminación o
vencimiento del contrato por un número específico de años o por tiempo indefinido, algo
que hay que especificar. Dado que puede ser difícil y costoso imponer una cláusula de
confidencialidad a una empresa extranjera, es recomendable limitar la cantidad de
información confidencial que se comparte, limitar la audiencia autorizada para recibir
dicha información y cifrar los datos electrónicos siempre que sea posible.
Vigencia del contrato. Ya sea que el contrato sea un evento único, un contrato sujeto a
renovación anual o un contrato en curso que demorará años, las partes deben indicar
expresamente el término previsto del contrato. Si no se especifica la duración del contrato
y una de las partes desea rescindir el contrato años más tarde, puede surgir una disputa
sobre la cantidad de notificación anticipada que esa parte debe dar a la otra parte para
rescindir el contrato.
Terminación. Las partes deben especificar si la causa es necesaria para terminar un
contrato o si el contrato puede ser terminado sin causa. Si se requiere causa para rescindir
un contrato, entonces el contrato debe describir claramente cada uno de los factores que
deben cumplirse para que una parte pueda rescindir el contrato. La terminación de ciertos
tipos de contratos internacionales, por ejemplo, acuerdos de distribución exclusiva, puede
ser extremadamente difícil y es posible que impliquen un importante desembolso de
dinero.
Legislación aplicable. La ley aplicable a un contrato es el cuerpo de leyes que regirá la
interpretación y ejecución del mismo. Dado que, en los contratos internacionales cada
parte es originaria de un país, cabe esperar que cada actor preferirá que las leyes de su
propia jurisdicción rijan el contrato, por lo que es una cuestión importante a negociar.
Los contratos internacionales a menudo requieren que las partes intenten inicialmente
resolver sus diferencias sin proceder de entrada a un litigio o arbitraje. Si las diferencias
no pueden resolverse dentro del plazo especificado, entonces las partes pueden recurrir a
una de estas alternativas para la resolución de conflictos en comercio internacional.
Las partes de contratos internacionales comúnmente requieren que las disputas se resuelvan
en arbitraje en lugar de litigios por motivos de confidencialidad y por simplicidad. Existe una
variedad de tribunales de arbitraje internacional con sus propias reglas, por lo que las partes
deben designar el tribunal de elección para la resolución de posibles conflictos durante la fase
de negociación del acuerdo.
Además de la ley que rige el contrato y el método de resolución de disputas, el lugar para la
resolución de disputas debe incluirse también en el contrato.
Por último, hay que tener en cuenta que los contratos internacionales son una cuestión tan
determinante para el futuro de un negocio, que podría resultar conveniente buscar el respaldo de
un profesional con conocimientos legales y experiencia en comercio exterior para ayudar a
garantizar que los contratos se redactan correctamente, incluyen toda la información necesaria
y protegen completamente a ambas partes.